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EL CULTO EUCARÍSTICO EN GUTEMALA
from Piedad - Junio
by nelson95
EL CASO DE LOS NIÑOS DEL SANTÍSIMO, DEL SAGRARIO O DEL CORPUS
el Lic. José Campollo Mejicanos
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Dentro de la piedad barroca post tridentina que se dio en el mundo cristiano católico y durante el período de dominación hispánica en el antiguo Reino de Guatemala para ser específicos, tuvo especial e inmensa relevancia el culto a la Presencia Real de Cristo en la Santísima Eucaristía o como más bien se decía en aquellos tiempos en el Santísimo Sacramento del Altar. Se fundaron Cofradías en todas las cabeceras de curatos, sedes conventuales y pueblos de doctrina, según el informe del arzobispo don Pedro Cortés y Larraz al rey Carlos III de España, del año 1,774, en todos los pueblos de doctrina, ciudades, conventos y parroquias que componían el arzobispado de Santiago de Guatemala hubo cofradías o archicofradías del Santísimo Sacramento. Así mismo se obtuvo desde aquella época el Jubileo Circular, en el cual todas las iglesias de la Capital del Reino tienen de forma turnada la exposición del Santísimo Sacramento y por ende en Guatemala no hay hora en que no se halle el Santísimo expuesto para su adoración desde hace tres siglos, devota costumbre vigente hoy en día en la capital de la República de Guatemala.
Como se apuntó, estas cofradías o en su caso, con las debidas aprobaciones archicofradías, se establecieron en casi todas las iglesias y gozaban de las indulgencias propias a las fraternidades de su rango, así como con las aprobaciones de las autoridades civiles y del arzobispado pasaban también a la categoría de Archicofradías, las cuales tenían más facultades canónicas y de funciones, como absorber y administrar otras cofradías, sobretodo tener preeminencia sobre las demás. En ese orden de ideas, cada poblado aportó lo que su gastronomía, cosmovisión, bailes tradicionales, elementos de su clima y cultura les fueron permitidos sin interferir en la rica liturgia católica de Trento y la costumbre hispánica que marcó otros lazos de similitudes entre las mismas, tal es el caso del uso de las Imágenes del Dulce Nombre de Jesús, que es el Niño Jesús de pocos años de edad mostrando atributos de la Pasión o los triunfantes de la Resurrección, cuya celebración era entre el 01 y el 15 de enero. Su función según los libros de Cofradías y registros de actas municipales, así como inventarios de iglesias consultados para la consolidación documental del presente artículo iba entre la demanda de limosnas en cera y dinero para la celebración del Corpus y su Octava, visitando las casas adyacentes a los templos a los que pertenecían, así como presidir las procesiones solemnes del Corpus y su Octava, cargados los Divinos Infantes por el pueblo, los miembros de la congregación y en todo caso permitiendo la participación activa de laicos o seglares dentro de las funciones y solemnidades del Corpus Domini, pues antes del Concilio Vaticano II, no se les permitía a los fieles laicos portar la Custodia con las Sagradas Formas Consagradas.
Esta tradición dio inicio en el Sagrario de Sevilla con el encargo de la imagen del Niño Jesús, que Martínez Montañés talló para la Hermandad Sacramental de la Parroquia del Sagrario en 1606, llegó a ser el modelo iconográfico más representativo de la devoción al Dulce Nombre de Jesús.
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Uno de los primeros ejemplos venidos a América y posiblemente del mismo autor del Sevillano o su discípulo Juan de Mesa, fue el traído por los padres de la Real y Militar Orden de la Merced al curato antiguo de Santiago Tejutla, en el antiguo Corregimiento de Quesaltenango, hoy en el municipio de Tejutla, departamento de San Marcos, de belleza incomparable y tallado en la madera europea.
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Tradiciones y Costumbres
Siguiendo esta línea del tiempo, está la del Niño del Dulce Nombre o la Resurrecciónde la parroquia de San Marcos, llamado al igual del de Tejutla Niño del Corpus. Aunque ya ninguno de los dos goce de culto público o se use en las funciones del Corpus en sus parroquias.
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Para la redacción del presente artículo se evitó el uso de referencias bibliográficas para promover la amenidad del devoto lector. Así mismo las fotos son propiedad del autor y de la sede “San Francisco de Paula” en San Marcos, de la Casa Cultural de la Novena.
Últimamente el caso del Niño del Santísimo de Quetzaltenango que aún goza de culto público y procesiona el 01 de enero para la fiesta del Corpus y su Octava, reminiscencia del culto hispánico y sus tradiciones. Además de tener otra imagen, de posible procedencia española como la del de Tejutla, se tiene esta singular escultura barroca guatemalteca, forrada de ropajes de plata y plata sobredorada.
En todos los casos las novenas que se utilizaban para venerar al Niño del Sagrario o del Corpus es indistintamente la del Dulce Nombre de Jesús o del Santísimo Sacramento.
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