De buena madera

Con un gran salón donde exhibe mercadería premium, busca integrarse con sus clientes en un cambio de paradigma generando entre otros espacios el de coworking

La necesidad de sus clientes de poder abastecerse de la mayor cantidad y diversidad de productos y apoyados en el buen servicio que los caracterizó por 50 años, motorizó un doble movimiento: Por un lado, cambiaron su nombre de Aserradero Soldini a Soldini Stock y por otro lado inauguraron un Showroom de los más completos de la región, para cubrir esa demanda.

“Nuestra historia como proveedores de maderas se caracterizó por un buen servicio siempre atentos a las necesidades de nuestros clientes, pero hace un tiempo que los profesionales, empresas constructoras y clientes consumidores finales nos pedían ampliar nuestra oferta, replicar nuestro servicio original en nuevos productos, fundamentalmente en las terminaciones de obras, como ser revestimientos cerámicos y porcelanatos, artefactos de baño y cocina, griferías, pisos melánicos, de ingeniería, de PVC entre otros”, explica Luciano Raffaeli

“Generamos este espacio no sólo para mostrar los productos, sino que buscamos integrarnos con nuestros clientes, por eso también generamos un ámbito de coworking, donde pueden venir y trabajar desde acá, que los profesionales puedan acompañar a sus propios clientes a elegir materiales y generar nuevas ideas para su vivienda. Es un sitio abierto, muy pensado para que las diferentes opciones de tendencia, con todos sus tonos y marcas de vanguardia estén exhibidos en el recorrido”, cuenta Vanina Raffaeli.

“Nosotros ofrecemos las mejores marcas del mercado, con muchos materiales importados y con una amplia gama y stock permanente, lo cual es muy importante en los tiempos que corren. Los clientes que elijan materiales en nuestro Showroom lo tienen disponible para poder comprarlos de forma inmediata”, indica Pablo Raffaeli.

Esa empresa que fundó Aldo Raffaeli en la década de 1970 hoy creció y sumó a una nueva generación con el aporte de sus hijos. Vanina, Luciano y Pablo Raffaeli, quienes lideran ésta nueva etapa, que ellos llaman “evolución natural”. Por su parte, Aldo esta convencido que esta nueva generación “aportará energía y una mirada de futuro para el negocio de la construcción”.

“Hoy, que el SHOWROOM SOLDINI STOCK es una realidad, sólo tenemos palabras de emocionado agradecimiento: Para el Estudio BAarqs (Arq. Guillermo Banchini y Marcos Dana), por su profesionalismo, creatividad y acompañamiento permanente y para quienes construyeron las estructuras y dispositivos necesarios para esta gran obra. Para los proveedores que sumaron su aporte estratégico. Para nuestros clientes, movilizadores y destinatarios de esta obra icónica. Una mención especial al respaldo permanente de nuestros empleados. Y por supuesto, el reconocimiento infinito a toda la familia y a todos los amigos que desde el vamos alientan nuestras ideas”, afirman los titulares de Soldini Stock.

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