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El libro vaquero: Sensualidad gráfica mexicana.

El Libro Vaquero. Sensualidad gráfica mexicana

Por Sharon Alvarez

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Tan común se volvió la frase “Los mexicanos sólo leen el Libro Vaquero” al ser una lectura que por lo menos todo mexicano ha sido encontrado leyendo, ya sea en lugares tan casuales como en la calle, en talleres mecánicos o en el transporte público en donde es usual ver a hombres sumergirse en este tipo de historietas.

En cualquier puesto de revista podemos encontrar una infinita variedad de publicaciones, hay desde revistas culturales, científicas, para el público adolescente e infantil y hasta dirigidas únicamente para el deleite visual de los caballeros, pero hay una en especial que sobresale por su pequeño formato y sus vistosas portadas e ilustraciones con exuberantes damas en varios escenarios llenos de acción y con un toque erótico. Dicha publicación se le conoce como el famoso “Libro Vaquero”.

Si te preguntas por qué se le dio el nombre de “Libro Vaquero” se debe a que la mayoría de las historias se desarrollan en el viejo oeste ubicándonos en el siglo XIX, formándose así parte de nuestra cultura popular. Se trata de una historieta mexicana que por su tamaño se le clasifica de bolsillo (13 x 15.5cm) con 128 páginas y a un módico costo.

Las escenas más comunes son de peligro en el que los protagonistas masculinos fungen como los héroes de la historia tratando de salvar a la damisela en peligro lo cual conlleva que ésta le agradezca de un modo significativo.

Si por mera curiosidad alguna vez llegaste a hojear alguno, podrás darte cuenta que en sí las imágenes no son pornográficas en su totalidad como solemos creerlo. Se tiene una idea errónea con respecto a que se tratan de publicaciones escandalosas debido a que por motivos de competencia, surgieron otras editoriales que para darle mayor auge a sus respectivas ediciones subieron de tono las imágenes usadas en sus interiores. A partir de aquí su fama a sido mal catalogada, pues se mantiene viviendo bajo las sombras como si se tratase de algo vulgar.

Actualmente este tipo de historieta sólo es leído por un pequeño sector de la población que ocupa esta lectura para los momentos de ocio y por eso mismo no dejarán de existir, pero vayámonos un poco atrás, el Libro Vaquero, aunque es una publicación meramente mexicana, tiene sus orígenes Yanquis desde los años 50 que es en donde inició este tipo de historietas que eran publicadas en revistas exclusivas para hombres.

Fue hasta la década de los 70 que el director de Novedades Editores le pidió al escritor de radionovelas Mario de la Torre escribir una historia que se basará en la historia de amor entre un vaquero y una mujer y que al mismo tiempo hubiera acción, dando como resultado Racimo de Horca. Fue hasta el 23 de noviembre de 1978 que salió a la venta el primer número de el Libro vaquero ganándose su popularidad de inmediato.

A pesar de la similitud entre ambas historietas, se pueden diferenciar en cuanto a características estructurales literarias, pues mientras que el americano tiene un corte más heroico posicionándonos dentro del contexto histórico, su contenido es violento haciendo que en las historias la crueldad hacia el género femenino sea su principal característica, mientras que el mexicano tiene un estilo más romántico, dejando entrever una relación amorosa.

La historia en sí es contada a través de las imágenes, pues la lectura debe ser atractiva y a la vez concisa, de ahí la importancia de sus ilustraciones, pues sus gráficos nos hacen disfrutar de estas historias que se caracterizan por estar hechas de un modo artesanal, es decir, están hechas a mano a partir de lápiz, tinta china y caligrafía. Actualmente los interiores son coloreados de manera digital.

No obstante, la sensualidad con la que es representada la figura femenina está hecha magistralmente que cualquier hombre queda deslumbrado ante tal belleza. Todas ellas son dibujadas con patrones similares: con belleza cautivadora y de figuras voluptuosas, lo que hace de estas novelas una iconografía única en el mundo.

Se hacen notar nombres de dibujantes que han hecho posible su realización como como: “Pegaso“ Rodolfo Pérez García, Joaquín López Acosta, Manuel Salinas Gómez entre otros más, siendo destacable el trabajo de Jorge Aviña, quien se encargó de realizar por lo menos 5 mil portadas, y quien opina que:

Fue una Época de Oro para las historietas de este país. El Libro Vaquero se hizo entonces tan popular, que casi todos lo conocían. Su lectura era casi tan normal como a entrar al cine a ver una película clasificación B15: las imágenes eran eróticas, mas no pornográficas. Eran otros tiempos y los tirajes semanales de la publicación, que llegaron a ser hasta de un millón y medio de ejemplares, hablaban por sí mismos.

Hoy en día la editorial a cargo, HEVI Editores, ha implementado llevar a grandes escritores para darle mayor auge y así reivindicar a esta publicación que ha sido mal juzgada y que detrás conlleva un gran trabajo realizado por dibujantes y argumentistas que hacen lo posible por mantener vivo este referente de nuestra cultura desde hace 35 años.

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