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Hace un año
from Estaciones - Nigromante marzo 2021
by Nigromante. Revista de la DCSyH, Facultad de Ingeniería, UNAM.
Hace un año
Por Abraham Sánchez
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Este mes se cumple un año de haber empezado la cuarentena en México. Así es, un aislamiento que se esperaba durar sólo unos días, terminó convirtiéndose en el peor año de nuestras vidas.
Todo comenzó un viernes 13, el día de la mala suerte. No obstante, ese viernes no parecía tan malo, porque era el inicio de un puente debido al natalicio de Benito Juárez. Sabíamos que el lunes no tendríamos clase o no iríamos al trabajo, que ese día salimos con nuestros amigos y la pasamos increíble. Nos despedimos con un “nos vemos el martes”, sin saber que ese día nunca llegaría. El gobierno lanzó un comunicado solicitando la suspensión de actividades presenciales no esenciales. En el caso de los estudiantes, nuestras clases pasaron a ser virtuales, el martes 17 de marzo.
Al principio creímos que la contingencia duraría algunas semanas, luego meses, jamás nos imaginamos que iban a pasar tantos días sin ver a nuestros amigos. Algunos estábamos en nuestro último año, esperando ansiosamente la fiesta de graduación que hasta la fecha siguen posponiéndose. Otros apenas iban a comenzar su vida universitaria, conocerían gente asombrosa y explorarían cada rincón de Ciudad Universitaria. Y a cambio de eso, tuvimos que adaptarnos a nuevas formas de realizar nuestras actividades. Acostumbrarnos a ver a nuestros amigos en videollamadas, a tomar las clases en aulas virtuales, a leer libros en PDF y sentarnos en un mismo lugar día tras día, tras día.
Y no sólo ha sido nuestra vida social la que ha cambiado. La pandemia causada por el virus SARS-CoV-2 ha tenido consecuencias más severas. Cientos de miles de personas perdieron sus empleos, sus locales, sus negocios. Otros perdieron a alguien querido y, lo más triste de todo, es que muchas veces, ni siquiera pudimos despedirnos.
Pero las buenas noticias comenzaron a llegar a finales del año. Varias vacunas de diferentes farmacéuticas estaban siendo aprobadas con eficiencias mayores al noventa por ciento. Después, llegaron a nuestro país y comenzó a vacunarse el sector salud y ahora, cada día que pasa, más y más personas se vacunan. Y con ello, una luz de oportunidad para volver a nuestras antiguas vidas comienza a vislumbrarse por la ventana. Una vida que tal vez no sea como la recordamos, porque la pandemia nos ha cambiado, pero no existe nada a lo que no podamos adaptarnos.