Salud El estrés y sus padecimientos

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En algún momento de nuestra vida nos enfrentamos a actividades a las que creemos no estamos listos para continuar, tan solo al recordar nuestras responsabilidades, preocupaciones, deudas y hasta la perdida inesperada de un ser querido. Lo importante viene cuando sufrimos los efectos secundarios; el estrés.

Lo peor empieza cuando el estrés llega a formar parte de nuestras vidas, tanto que nos acostumbramos a los síntomas de esta enfermedad, y a veces los ignoramos tanto que si no lo tratamos se convierte en un padecimiento crónico afectando nuestra salud y a su vez, a otros sistemas. De acuerdo con la American Psychological Association, el estrés es una reacción de tensión que se activa ante un desafío o demanda, aunque esta reacción no siempre es mala debido a las reacciones que nos ayudan a continuar ante situaciones que nos exponen. Pero, ¿Cuántos tipos de estrés existen?

Principales tipos de estrés: 1. Estrés agudo:

Cuando aparece por un corto plazo y no afecta tu calidad de vida, por ejemplo: cuando tienes que hablar en público y no te gusta o, cuando presentas alguna entrevista de trabajo.

Este estrés es uno de los más frecuentes, debido al corto tiempo que dura, sin embargo, es un poco más fácil de manejar al trabajar en todas esas cosas que nos detienen.

2. Estrés crónico

Este tipo de estrés permanece en nuestro cuerpo durante semanas, meses e incluso años y quedamos tan acostumbrados a los síntomas que, olvidamos que este problema de salud ya no para, afectando nuestra salud a corto y largo plazo. Cuando padecemos este tipo de estrés nuestras defensas se debilitan y aumenta la producción de sustancias como la adrenalina, dopamina, noradrenalina y el cortisol. Aunque la adrenalina y la noradrenalina preparan al cuerpo ante cualquier situación de riesgo, el exceso de estas sustancias en nuestro cuerpo afecta drásticamente, por otro lado, el cortisol aumenta la glucemia y transforma la grasa en energía.

Cuando estas sustancias aumentan, llegan a presentarse problemas cardiacos y se pueden desarrollar padecimientos como la depresión y diabetes.

Síntomas:

1. Dolor muscular frecuente: ya sea en una sola parte del cuerpo – mayormente en los hombros – o algún hormigueo y tensión muscular. 2. Cansancio extremo: tras sufrir frecuentes episodios de insomnio. 3. Perdida del cabello: es normal encontrar cabellos en la almohada o en la regadera, pero debemos tener cuidado con la perdida de cabello excesiva. 4. Diarrea: aunque usualmente la confundimos con dolores estomacales, es importante mantenernos siempre hidratados. 5. Estreñimiento: aunque evitamos ir al baño, olvidamos comer a ciertas horas y forcemos nuestro cuerpo, este ya no reacciona cuando debería. 6. Mala memoria: olvidamos las cosas que estamos por hacer o cosas que creemos insignificantes 7. Psoriasis: escamas y manchas rojas que causan comezón y dolor. 8. Mayor irritabilidad: no es el mal humor, si no es la preocupación por desviarnos en lo que estamos preocupados 9. Uñas picadas o con puntitos: no siempre es falta de calcio o de alguna vitamina 10. Dermatitis nerviosas: manchas escamosas, enrojecimiento de la piel y caspa persistente.