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DANZA
ANOS
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EN CRUZ
25 años Danza en Cruz Idea, Coordinación y Producción: Francisco Paco López Contenidos y Edición: Amalá Saint-Pierre Diseño gráfico y Diagramación: Octavio Cañulef Fotografías: Vladimir Cruells Pavez (foto de archivo 1993) y Danza en Cruz (foto actual 2019 (portada); Chacho Guerra (pág. 6, 20 , 28, 33, 34, 38, 39); Gabriela Fernández (pág. 8, 16, 55); Familia Pavez Pizarro (pág. 10, 11, 52, 60); Danza en Cruz (pág. 13, 23, 27, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 46, 47, 48, 49, 51); Liliana Her-
mosilla (pág. 15, 51); René Silva (pág. 18, 25); Danza Pulso (pág. 23); Kiko Fierro (pág. 24, 37); Gabriel Fernández (pág. 30-31, 40, 48, 49); Francisco Herrera (pág. 43); Olivier Boissin (pág. 45); Fernando La Voz (pág. 48); GAM (pág. 50); Patricio Melo (pág. 50); Pablo Selman (pág. 56, 62); Cristina Vargas (pág. 59).
© Derechos reservados Centro Cultural Danza en Cruz. Saint-Pierre, Amalá (contenidos y edición) y López, Francisco (coordinación y producción de contenidos). 25 años Danza en Cruz, edición propia: Santiago de Chile, 2020.
Proyecto financiado por FONDART, convocatoria 2020
CONTENIDOS
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En el cruce está el centro:
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Saludos para los 25 años
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Mirar la creación con los
25 años Danza en Cruz
pág. 6
Cronología
pág. 38
de Danza en Cruz
ojos de Héctor: Indio Pavez
pág. 52
pág. 58
ANOS
25
DANZA
EN EL CRUCE ESTA EL CENTRO
EN CRUZ
25 Años Danza en Cruz
“Nuestro trabajo como artistas trata de llevar una ética y una honestidad en el arte y eso es un camino que se vive, se hace, se construye y se educa”.
Rodrigo Fernández y Valentina Pavez en En Cruz. Ciudad de México D.F., 1994.
En 2020 la Compañía Danza en Cruz, conformada por la dupla creativa Valentina Pavez y Rodrigo Fernández, celebra 25 años de trayectoria y trabajo ininterrumpido tanto en la creación como en la formación de bailarines. Danza en Cruz ha sido testigo y motor del desarrollo de la danza en Chile, férrea defensora de la danza independiente, tejedora de un sello indiscutible que une lenguajes y técnicas modernas y contemporáneas con un espíritu creativo basado en la danza y los contextos de la cultura tradicional chilena, y que se mueve con soltura en el universo idiosincrático chileno. 25 años de una historia de amor y de danza que se ha cruzado con los más destacados artistas nacionales. En el año de la pandemia, donde esta Compañía se vio obligada a detenerse y mirar para atrás el camino recorrido, surge el testimonio de Danza en Cruz desde la voz de sus propios protagonistas. 7
25 Años Danza en Cruz
VALENTINA O LA HIJA DEL FOLCLOR Valentina Pavez Pizarro, hija de los reconocidos músicos folcloristas Héctor Pavez y Gabriela Pizarro, creció rodeada de música popular tradicional con sus cantos a lo humano y a lo divino. Para ella, la danza está íntimamente ligada al legado folclórico de sus padres, con su sello particular enraizado en la tierra. 8
25 Años Danza en Cruz
Valentina Pavez en Indio Pavez. Santiago, 2020.
Los orígenes hacia las raíces “Yo vengo de una familia ligada a las artes desde la
“No tuve un papá presente, no tengo recuerdos de
investigación e interpretación del folclor, su reco-
haberlo abrazado. Pero hay uno que siempre viene a
pilación y su difusión, especialmente de la cultura
mi memoria de él tomando sol en el patio de la me-
chilota y cultura campestre. Mis padres habían
diagua donde vivíamos como allegados. Yo estaba
formado el popular Conjunto Millaray y eran muy
adentro a oscuras, porque en esa época las ventanas
conocidos en el ámbito del folclor y del Movimiento
no tenían vidrio y se tapaban con madera. Afuera
del Canto Nuevo, amigos de Víctor Jara y de Violeta
había un sol esplendoroso y mi madre revoloteaba por
Parra. Acompañaba a mi madre a todas partes con
ahí con un balde de agua haciendo cosas, lavando,
sus giras, por lo que crecí rodeada de teatro, de
cocinando, mientras mi padre estaba detenido en el
trabajo sindical, de viajes por Chile, de investigación
tiempo mirando el sol, olvidándose por un momento
de terreno, de música de cultores, de música antigua,
de este presente”.
tradicional y campesina. Fui encontrando mi camino en la danza con toda esa experiencia de infancia ya
Ese momento marca la vida de Valentina Pavez no
en mi cuerpo”.
sólo por ese recuerdo atesorado de su padre, del que heredó su legado y su temperamento, sino porque
Los recuerdos de Valentina se mueven entre la
de ese recuerdo creó a comienzos del 2000 una
imagen de una madre muy presente y el recuerdo
obra coreográfica en homenaje a sus padres: Por
difuso de un padre al que dejó de ver a temprana
la mañana.
edad, fruto de la separación y del exilio de Héctor “El Indio” Pavez. 9
25 Años Danza en Cruz
“De ese recuerdo yo creé una coreografía que uní con dos cuecas instrumentales que mi mamá recopiló en los campos y que era parte de un proyecto que ella tenía de juntar esos ritmos del terruño con letras de su amiga Violeta Parra. Pero surgieron problemas legales y producto de esa pena mi madre cayó gravemente enferma hasta que murió. Ella no logró terminar el proyecto y sólo alcanzó a grabar algunas cuecas, otras quedaron en melodía. Ya en el hospital mi madre me dijo “termine esto” y lo terminé. Tomé el proyecto con ese disco sin concluir y lo convertí en lo que yo sabía hacer: danza. Para mi creación me tomé de dos melodías de cuecas que habían quedado sin terminar, melodías muy particulares, muy simples a la vez, e hice este homenaje a mis padres a partir de ese recuerdo de infancia de ella con sus baldes de agua mientras mi padre miraba el sol”.
Héctor Pavez en el exilio. París, 1974. Pág. siguiente - Gabriela Pizarro y sus cinco hijos: Anaís, Gabriela, Héctor, Julieta y Valentina. Santiago, 1966.
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25 Años Danza en Cruz
El legado arraigado El nombre de Valentina Pavez Pizarro está indiso-
dota que ejemplifica su carácter: durante su exilio
ciado del de sus padres. Ese legado lo lleva en la
en Francia estaba en un concierto con Inti-Illimani
sangre y lo ha plasmado en su forma de bailar, de
y Quilapayún y les dijo “ustedes no tienen por qué
crear y de ver al mundo.
imitar a la gente pobre, porque ustedes no son pobres”. Él exigía ser consecuente con lo que uno
“Mis padres tenían una fuerza y una fusión muy
tiene dentro, no tratar de interponerse en una figura
fuerte en la creación y en el entendimiento de la
que no es, porque uno puede entender lo que le
cultura popular chilena en toda su dimensión, en
pasa al otro, pero no es el otro totalmente. Él decía
el sentido de comprender la idiosincrasia. En ese
que había que ser muy riguroso al meterse en la
sentido eran muy exigentes. Mi papá no se quedaba
música del campo, porque el campo trae toda una
callado, era el que hacía las críticas. Hay una anéc-
historia de construcción de vida. Todo eso no puede 11
25 Años Danza en Cruz
ser imitado; tiene que entenderse desde el corazón.
cia de mantener vivo el legado folclórico. Pero al
Mis padres eran muy rigurosos con eso. A diferencia
momento de elegir la danza como carrera ya no
de mi padre, mi madre era más silenciosa y más
quedaban escuelas; la mayoría había cerrado o los
maestra, le enseñaba a las personas por dónde
maestros habían partido al exilio. A falta de escuelas
tenían que partir para entender esta cultura, este
formales se inició con las clases particulares de
Chile profundo”.
Verónica Urzúa y Elisa Garrido Lecca. El punto de inflexión ocurrió en 1985 a sus 22 años cuando su
Ese rigor, Valentina lo ha incorporado a su vida y ha
madre Gabriela la llevó al aeropuerto para recibir
heredado ciertamente el carácter de sus progeni-
de vuelta al país al destacado coreógrafo y maestro
tores. “Ahora entiendo por qué tengo ese grado de
en danza Patricio Bunster, al “tío Patricio” como
precisión. Nuestro trabajo como artistas se trata de
le decían con cariño, con quien Gabriela Pizarro
llevar una ética y una honestidad en el arte y eso
había sido tan cercana en amistad, lucha política y
es un camino que se vive, se hace, se construye y
colaboraciones artísticas. “Usted tiene que estar en
se educa”.
este momento histórico” le dijo su madre mientras la llevaba al aeropuerto.
Como decía mi madre, “Vamos pa’ delante, en el camino se arregla la carga”
“El “tío” Patricio se bajó del avión y recuerdo que llevaba su característica boina y un abrigo antiguo,
Valentina forjó sus primeros pasos como bailarina
largo, y sólo una maleta en la mano; me impresionó
acompañando a su madre en sus conciertos, giras
que llevara tan poco equipaje. Estaba muy alegre,
y clases y siguió luego junto a sus cuatro hermanos
emocionado, le brillaban los ojos”.
en el conjunto Creación y en el Ballet Folclórico Pucará. Corrían los finales de la década del ‘70 y
De niña a Valentina la llevaban a ver las obras de
en esa época bailar sobre la música de sus padres,
Patricio Bunster del Ballet Popular -proyecto de
de Violeta Parra, Víctor Jara e Inti Illimani era toda
danza social que dirigió en las poblaciones con
una osadía, pero para Valentina era su forma de
Joan Turner- y del Ballet Nacional Chileno. “En
expresarse en la danza, intuyendo la importan-
esas poblaciones vi obras maravillosas. La primera
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25 Años Danza en Cruz
coreografía que recuerdo de él fue en 1972, la obra Capicúa 7/4 sobre música de Dave Brubeck, que había estrenado anteriormente en el año 1965; para mí fue impactante. Luego vino el Golpe y a Patricio lo dejamos de ver, lo exiliaron. Él decía en tono de broma “me fui por la beca presidencial”. A la vuelta
Valentina Pavez tras bambalinas en una función de A Pesar de Todo con el Grupo Espiral en el Parque O´Higgins. Santiago, 1990.
de su exilio entré a estudiar al Centro de Danza Espiral que habían fundado el “tío” Patricio y Joan. En ese tiempo la escuela quedaba en el segundo piso del Café del Cerro en Bellavista y ahí conocí a Joan. Me la presentó mi mamá porque eran amigas, así que mi permanencia fue muy fluida y ahí me quedé formándome con mis maestros”. Luego entró a la carrera de danza de la Universidad Arcis y se formó con importantes figuras de la danza como la Premio Nacional de Artes Malucha Solari, Ximena Pino y Magali Rivano. Tuvo que abandonar sus estudios para entrar a trabajar como bailarina del Ballet Folclórico Nacional BAFONA porque, recuerda Valentina, “necesitaba trabajar, en la casa faltaba plata. Bailé allí unos cuantos años, 13
25 Años Danza en Cruz
pero siempre sentía la necesidad de la formación,
La danza de Valentina Pavez tiene un sello distintivo,
de seguir estudiando y perfeccionarme. Volví al
una mezcla entre la esencia heredada del folclor con
Centro de Danza Espiral con mis maestros pero
signos de ritualidad y técnicas contemporáneas.
esta vez a hacer el Plan Integral. Ahí Patricio me incitó a seguir estudiando el folclor, pero además su
“Humildemente creo que he hecho un aporte al len-
lado teórico y analítico”. Entre las clases de Técnica
guaje de la identidad del folclor, no en el sentido de
Moderna, Clásico, Eukinética y Coréutica, Valentina
hacerlo literal sino de rescatar su esencia. Siento que
Pavez se reencontró con su antiguo compañero de
he podido ir trabajando y descubriendo ese espíritu
la Universidad Arcis, Rodrigo Fernández, con quien
folclórico en mi lenguaje. No tengo el temor de estar
años más tarde fundarían Danza en Cruz.
haciendo algo que pareciera que no es, porque lo que hago no es el paso folclórico en sí, sino que una
De 1989 a 1993 Valentina integró el cuerpo estable
reinterpretación de éste. Pero puedo atreverme a
del Grupo de Danza Espiral, bajo la dirección de
esa deconstrucción porque llevo el folclor adentro,
Patricio Bunster, donde bailó en Poema 15, El diario
en mis raíces. No intento transmitir la literalidad
de la tía Solferina, A pesar de todo, Dos Ánimos,
del campo por ejemplo, o la literalidad de un paso
El mundo es un pañuelo y Víctor Jara la ventana
chilote, sino que una atmósfera, una sensación, una
que busca la luz.
idea en su esencia corporal, a pesar de que se parta desde el paso original. Para mí es importante que
El sello de Valentina
el intérprete con quien trabaje lo entienda, lo viva y que no llegue a la caricatura del personaje o del
“Me defino como una intérprete-creadora; para mí es
paso folclórico, sino que a su profundidad”.
importante vivir la creación, es decir que, aunque esté dirigiendo una coreografía, necesito acercarme a ella desde lo interpretativo, bailarla, hacerla. Y a la inversa, cuando me toca ser intérprete estoy creando a la vez. Me autodefino como una creadora muy emocional”.
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Valentina Pavez en Triste, Amorosa y Cautiva en el Teatro Municipal de Santiago. Santiago, 2018.
25 Años Danza en Cruz
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25 Años Danza en Cruz
RODRIGO EL HIJO DE LA REBELDIA Rodrigo Fernández se deja ver. Alto y fornido, emana presencia. Guardián del método Leeder y uno de sus grandes impulsores en América Latina, Fernández es la mezcla de una sabiduría adquirida por sus estudios de eukinética con un espíritu rebelde heredado de su juventud en el Santiago underground de la década de los ’80. Para él, la danza es cuerpo, mente y alma. 16
25 Años Danza en Cruz
Rodrigo Fernández en Indio Pavez. Santiago, 2020.
De Los Prisioneros a Nuréyev A diferencia de su partner Valentina Pavez, Rodrigo
clásica, aunque ni ella ni yo la practicáramos y sólo
no proviene de una familia de artistas ni con arraigo
la viéramos por la televisión”.
folclórico, sino más bien tradicional. La suya es una historia urbana, de pasos sobre el pavimento, fiestas
De joven, Rodrigo desarrolló habilidades para las
rockeras y subterráneos con olor a humo.
humanidades, la filosofía y la antropología. Se dedicaría a eso, pero su cuerpo le demandaba moverse,
“Mi papá era hijo de inmigrante español, comer-
ejercitarse y, sobre todo, bailar rock. “A diferencia
ciante del Barrio Franklin y posteriormente instaló
de Valentina, yo no escuchaba folclor, esa no era
las primeras electrificaciones por todo Chile. En su
mi música. Yo era urbano con esa rebeldía propia
juventud viajó durante años por toda la Cordillera
de los ‘80. Viví de lleno la influencia del rock, del
de los Andes repartiendo correspondencia. Era un
heavy metal, de la cultura anglo, del rock argentino.
hombre muy particular de pocas palabras, herméti-
Yo seguía a Los Prisioneros en sus inicios cuando
co, y en casa siempre se rodeaba de libros de arte
tocaban en un café de una galería caracol en Pedro
y de literatura. Era un hombre culto y sobre todo
de Valdivia y escuchaba a Los Electrodomésti-
muy contemplativo, quizás eso lo guardó de sus
cos”. Esa energía rebelde lo ayudaba a “enfrentar
años en la montaña. Siempre tuvo esa inquietud
las situaciones políticas que vivíamos. Quizás no
intelectual; en el fondo mi padre tenía algo de artista
con una militancia política ni partidista, pero sí con
pero que no pudo desarrollar”. De su madre heredó
una conciencia de que las cosas no estaban bien
el gusto por la música y la danza. “A ella le gustaba
como sociedad”.
mucho el ballet. Ella me inculcó el amor por la danza 17
25 Años Danza en Cruz
Su punto de inflexión fue un día en el que a sus 18 años vio por la televisión junto a su madre un ballet que le impactó profundamente. “Por esa pequeña pantalla vi bailar a Nuréyev. Era un solo de danza llamado El espectro de la Rosa y quedé impresionado. Me impactó porque no sólo respondía a mi gusto por la gimnasia, sino que por primera vez vi algo diferente que no era sólo algo físico: había poesía. En ese momento supe que tenía que canalizar mi energía en la danza”. Escucha el latido, sintoniza el sonido, agudiza tus sentidos, date cuenta que estás vivo Corría el año 1986 y el único aviso de las Páginas Amarillas era del Estudio Valero. “Nunca antes había tenido formación en danza así que desentonaba bastante con mis compañeros, tomaba las clases de académico con zapatillas de básquetbol”, recuerda entre risas. “No tenía las condiciones, era demasiado grande y torpe, pero tenía una ventaja: era apasionado”. Allí aprendió de bailes de salón y de espectáculo, pero le faltaba algo más, algo que no sabía describir. “Era distinto a los demás, era muy creativo y me gustaba experimentar, venía de esa onda urbana, creaba cosas locas, hacía lo opuesto de la Academia, experimentaba con otro 18
Rodrigo Fernández en La Leona, en el Centro de Danza Espiral. Santiago, 1998.
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tipo de música como rock progesivo o Vangelis”.
y un creador. “A los 20 años quedé en mi primera
En esa búsqueda Rodrigo se empapó de todo lo
audición en la pieza Juana de Arco del grupo Mobile
que estaba a su alcance en aquel Santiago de los
con coreografía de Hernán Baldrich y junto a la
ochentas, ese que asomaba pequeños grados de
maestra Magaly Rivano. Esa primera experiencia
libertad en fiestas underground al ritmo de Los
profesional me marcó porque me reafirmó en la
Prisioneros, de casetes piratas y de punk, del teatro
danza”. De Baldrich aprendió que la danza no sólo
Ictus y del teatro más alternativo en El Trolley, hasta
puede ser movimiento sino también toda una puesta
que entró a la Universidad Arcis en 1987 y redescu-
escena, una integración de las artes para la creación
brió la danza junto a las mismas maestras que unos
coreográfica. Luego lo marcó la visita de la coreógrafa
años antes había cotejado Valentina Pavez, como
estadounidense Susan Cashion, en cuyo seminario
Malucha Solari, Ximena Pino y Carlos Delgado. “Era
pudo conocer a diversos bailarines de distintos len-
otra dimensión de la danza, no era solamente es-
guajes, en una especie de comunión con el ambiente
pectáculo sino que había una reflexión, un aprendiza-
artístico de la danza. “Su influencia en los bailarines
je artístico, otro tipo de movimiento que venía de la
de mi generación dejó una huella bien importante.
influencia norteamericana como la técnica Graham
Ahí entré de lleno en el medio profesional”.
y la europea, principalmente alemana a través de la triada Rudolf Laban, Kurt Jooss y Sigurd Leeder”.
Por recomendación fue a una función del Grupo
Desde ese momento, dice, se transformó en artista;
Espiral en el Teatro Universidad Católica. “Yo no
“era mi camino”.
había visto nunca a Patricio Bunster, no lo conocía, no tenía mucha idea de quién era, pero me habían
Rápidamente Rodrigo Fernández demostró ser
hablado de los maestros Patricio Bunster y Joan
no sólo buen bailarín, sino que un joven estudioso
Turner, así que fui a ver de qué se trataba”. Ahí tuvo 19
25 Años Danza en Cruz
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25 Años Danza en Cruz
Rodrigo Fernández en México. Ciudad de México D.F., 1995.
un nuevo golpe inspirador. Fiel a su instinto, Rodrigo
luego profundizando con Patricio Bunster y Joan
decidió dejar la Universidad Arcis “porque la situación
Turner, también discípulos directos del alemán.
política estaba muy fuerte, los militares entraban en la universidad y se puso muy complejo seguir ahí”
“La eukinética se la debo a Joan Turner quien fue mi
y se matriculó en el Centro de Danza Espiral. Intuía
maestra y, cuando volví a Chile en 1997 después de
que ahí encontraría el camino definitorio.
estar en México y Estados Unidos, me nombró como ayduante y me guió en la capacidad de enseñar este
El guardián del método Leeder
conocimiento”. Rápidamente Rodrigo tomó la posta del legado Leeder y se transformó en el guardián
La Espiral fue un cambio de vida: “No era una escuela
del método y formador en él.
formal, eran clases integrales. Me quedé ahí, dormía ahí, me enamoré ahí, los grupos se armaban y de-
“Se trata de un método y no de una técnica, esa es
sarmaban, pero yo seguía ahí. Era una mezcla de
la gran diferencia. Es decir, es un conocimiento que
estudio y práctica, un aprendizaje constante con
tiene varias aristas: desde la arista pedagógica, hasta
los maestros. Patricio Bunster se transformó en
técnica y espacial; es el estudio del movimiento en
un padre para mí y me alentaba a investigar, me
el espacio que es la coréutica, y el estudio de las
empujaba a la creación. Los cursos empezaron a
cualidades del movimiento que es la eukinética.
ser muy personalizados y así es como me empapé
Todo esto se articula luego en un trabajo específico
de Leeder”. Y es que el punto decisivo en su for-
que tiene que ver con la técnica”, resume Rodrigo
mación y posterior carrera fue el descubrimiento
tras años de estudio e investigación.
del método Leeder, primero en la Arcis de la mano de su maestra y discípula directa Malucha Solari y 21
25 Años Danza en Cruz
La eukinética, como estudio de las cualidades del movimiento, es un método completo que vincula la consciencia del cuerpo con la mente y el espíritu en términos de tiempo, espacio y energía -como el flujo y la gravedad-. “No hay una receta, no hay una estructura que respetar como en el Clásico” dice Rodrigo. Más allá de la técnica, el método Leeder es la transmisión de una propuesta estética basada en una metodología que el propio intérprete va dirigiendo de acuerdo a su estructura de cuerpo como instrumento de expresión y comunicación, un cuerpo que transmite emoción. “Eso permite que el intérprete encuentre una personalidad frente a la danza sin que se encasille en una técnica”. Quizás por eso Sigurd Leeder nunca escribió realmente sobre su método pues pensaba que la fijación de éste podía rigidizar o encasillar las propuestas de movimiento. Y justamente ese fue el rol que asumió tempranamente Rodrigo Fernández, no como supervisor de una técnica, sino que como acompañante del intérprete en la búsqueda de su propio sello personal a través de ciertos patrones del movimiento. Y esa manera revolucionaria de entender la danza lo llevó junto a Valentina Pavez hasta México para difundir el legado de Leeder en los albores de la naciente Compañía Danza en Cruz, hace 25 años atrás. 22
Sigurd Leeder (1902-1981) se centró en la metodología de la eukinética y sistematizó los factores del movimiento en ocho acciones básicas a partir del sistema de notación de Laban. La posterior influencia de Leeder en Chile se debió a su estrecha colaboración con el también discípulo de Laban, su amigo Kurt Jooss (1901-1979), y se se materializó gracias a sus discípulos directos: Malucha Solari en 1951, Patricio Bunster en 1953 y la inglesa Joan Turner con su arribo a Chile en 1954. Es de entender entonces que la dupla Rodrigo Fernández y Valentina Pavez fuera tan marcada por la corriente alemana en tanto se formaron al alero de Malucha Solari, Joan Turner y Patricio Bunster, discípulos ellos mismos de este grupo de bailarines alemanes quienes llegaron a Chile por esas cosas del destino.
25 Años Danza en Cruz
La irrupción de la danza europea Ya con el método Leeder dominado, Valentina y Rodrigo siguieron explorando diversos lenguajes que los llevarían luego a forjar su sello distintivo como Compañía Danza en Cruz. Eran finales de la década del ’80 y los albores de los ’90 y Chile se volvía a abrir poco a poco al mundo; se respiraban aires de democracia, muchos exiliados e hijos de Valentina Pavez y Rodrigo Fernández junto a la maestra Joan Turner en el evento Abracemos a Joan. Santiago, 2017.
exiliados retornaban al país trayendo influencias europeas sobre todo en el campo de la música, de la moda y de las artes, y los artistas del viejo continente empezaron a poner sus ojos en este largo y angosto país que parecía sacudirse de una larga pesadilla. Es en ese contexto que los europeos trajeron experiencias que abrirían en Chile nuevos horizontes creativos que perdurarían hasta hoy. Por razones obvias, Chile carecía aún de una institucionalidad cultural y los primeros fondos concursables se crearían recién en 1992. El arte fue uno
Rodrigo Fernández tras bambalinas en una función de A Pesar de Todo con el Grupo Espiral en el Parque O´Higgins. Santiago, 1990.
de los grandes afectados por la Dictadura por casi 23
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dos décadas. En ese contexto de apagón cultural pocos fueron los organismos culturales que lograron sortear la represión y la censura: por un lado, figuraban las grandes instituciones como el Teatro Universidad Católica, el Teatro Nacional Chileno, el Teatro Universidad de Chile del Ceac o el Teatro Municipal de Santiago, y por el otro escenas alternativas como el Teatro Ictus en la Sala La Comedia, Teatro Imagen, el recordado espacio de la bohemia contracultural Teatro El Trolley (fundado en 1983) y el Centro de Danza Espiral (fundado en 1985). Pero se contaban con los dedos. A falta de una institución gubernamental que definiera políticas culturales, los institutos europeos y sus agregadurías culturales fueron cruciales en el desarrollo y el intercambio intercultural de finales de los ’80 y comienzos de los ’90. Es así como el Instituto Francés de Cultura, el Goethe Institut de Alemania o el Centro Cultural de España se transformaron en verdaderos puentes Rodrigo Fernández en Víctor Jara: La ventana que busca la luz de Grupo Espiral. Santiago, 1999.
y articuladores no sólo en la importación de influencias europeas sino también en la exportación de artistas chilenos hacia Europa. Un caso ejemplar de
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dicha importancia fue el descubrimiento en 1982 del joven actor de teatro callejero Andrés Pérez Araya por parte de la agregada cultural de Francia Claire Duhamel, quien cambiaría para siempre el curso de la historia del teatro chileno enviándolo a París a formarse con Ariane Mnouchkine del Théâtre du Soleil. Tal era la influencia de los institutos europeos en Chile. Con el advenimiento de la democracia a comienzo del ‘90 y la incipiente institucionalidad cultural chilena, los lazos entre Chile y Europa se acentuaron y forjaron duraderas alianzas hasta el día de hoy, sumando también otros organismos como el British Council o el Istituto Italiano di Cultura. Recordado es en la primera década del 2000 el célebre Festival de Dramaturgia Europea Contemporánea que duró más de diez años y que marcó un hito en el desarrollo teatral chileno y en las relaciones internacionales.
Rodrigo Fernández en ensayo de La Leona en el Centro Danza Espiral. Santiago, 1998.
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25 Años Danza en Cruz
La danza no fue la excepción en esta apertura de
Estas experiencias abrieron nuevos horizontes
Chile al alero de los centros culturales europeos y
creativos en la dupla Rodrigo Fernández y Valentina
ya hacia finales de los ’80 se asomaban coreógrafos
Pavez, cuya culminación fue la obtención por parte
franceses que vendrían a renovar las técnicas en
de Fernández de la Beca American Dance Festival
danza a través de seminarios y montajes. Esa
gracias a la que estudió en la Universidad Duke
irrupción fue importante sobre todo para la escena
en Carolina del Norte en 1994, donde se formó
independiente ya que les permitió codearse con
también en danza Contact con Steve Paxton, y
destacados artistas extranjeros que no habrían
posteriormente en la Ciudad de las Artes General
podido conocer de otra manera.
Roca de Neuquén en Argentina en 1998.
Es así como la dupla Pavez-Fernández se especializó en seminarios dictados por Dominique Petit (1989), Angelin Preljocaj (1988) y la dupla Claude Brumachon y Benjamin Lamarche en 1992 (quienes cinco años más tarde volverían a Chile a crear la emblemática obra Los Ruegos en 1997). “Ellos también buscaban un camino y en Chile se encontraron con bailarines de la escena independiente que buscaban desarrollar un trabajo interesante”, subraya Valentina Pavez.
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Valentina Pavez y Rodrigo Fernández en Ciudad de México D.F., 1995.
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EL FLUJO DE LA ENERGIA “La danza nos unió” dice Rodrigo Fernández con admiración por su compañera Valentina Pavez. Cada uno ya con su formación académica en el cuerpo se unieron creativa y sentimentalmente, como si una cosa no existiera sin la otra. Y es que la pareja vive por la danza como un proyecto colectivo y familiar. A partir de entonces siguieron el camino juntos y eso no sólo se refleja en su Compañía, sino que en la exploración conjunta de nuevos lenguajes. 28
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Rodrigo Fernández y Valentina Pavez en En Cruz. Ciudad de México D.F., 1994.
Nace una Compañía Corría el año 1991 y el núcleo creativo desarrolló una
es el flujo de la energía como esta pareja que por 25
pieza que marcaría los cimientos de su Compañía: se
años ha seguido su propia corriente, pero es también
trataba de En Cruz, obra para dúo sobre música de
la estrella que guía los caminos como lo fue la Cruz
Bach. “Era la relación con la dualidad hombre, mujer,
del Sur para los viajeros de antaño.
bien y mal, la luz y la oscuridad, tenía una cosa sexual también, animal…” recuerda Rodrigo. “Lo divino y lo
“Partimos de manera muy espontánea, sentíamos
terrenal” remata Valentina. “Esa obra marcó nuestra
que había una energía entre los dos que se podía
estadía en México, la bailamos por todos lados y
potenciar y ahí fue dándose de a poco la identidad
aquí en Chile también. Nos permitió instalarnos”,
de la Compañía. A nosotros nos clasifican entre
cuenta Rodrigo. El éxito de la obra junto a su sello
modernos y contemporáneos, pero simplemente
como pareja creativa, los inspiró para nombrar su
somos y fluimos: nos gusta crear, hacer y llevar esa
incipiente Compañía en 1995: Danza en Cruz.
creatividad al lenguaje de la danza. Y en base a eso juntamos los planos, esos mundos de nuestra identi-
Ante la pregunta de por qué la elección de la cruz
dad entre las temáticas de raíces y del rito con temas
como símbolo, la dupla ríe contando algunas anéc-
más urbanos como la relación humana en la sociedad
dotas de otros nombres frustrados, pero una cosa es
actual”. La Compañía hace dialogar el lenguaje de la
cierta: “el símbolo de la cruz en la kinetografía, en la
danza con estructuras narrativas en base a la poesía,
escritura de la danza, significa el flujo de la energía.
la dramaturgia teatral y la música, para articularse en
Y eso es además muy característico de nuestras
obras dancísticas que van más allá de lo coreográfico
personalidades” comenta Valentina Pavez. La cruz
creando un relato, una historia que contar. 29
25 Años Danza en Cruz
Esa mixtura de lenguajes y movimientos marca un sello distintivo en la Compañía otorgándole un grado de teatralidad. “Nos declaramos como una Compañía de danza con una apertura a otros lenguajes. Por lo mismo hemos trabajado con muchos coreógrafos que han visitado la Compañía instalando sus lenguajes, preparándonos y montado obras en conjunto, porque no sólo somos coreógrafos y directores de la Compañía sino también intérpretes”. Valentina y Rodrigo intentan definirse: “Yo me defino en término de las cualidades -afirma Rodrigo Fernández- que se entiende por mi proceso de investigación que he realizado con la eukinética. Eso me ha permitido entrar no sólo en cualidades del movimiento muy concretas, sino también ahondar en lo abstracto. Esos dos universos me han permitido transitar desde cosas muy contemporáneas hasta una fuerte conexión con la naturaleza y algo más espiritual”. De esa conexión con lo espiritual Rodrigo Fernández realizó el solo Proyecto Humano en año 2005 basado en la cultura Chinchorro. Rodrigo Fernández y Valentina Pavez en su matrimonio civil. Santiago, 1994.
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25 Años Danza en Cruz
En cuanto a Valentina Pavez, rescata “el valor y la vivencia que hay en mi biografía personal que es el folclor, porque lo viví familiarmente ayudando a mi madre a recopilar canciones como lo hacía también Violeta Parra. Para mí, mi lenguaje tiene que ver con ir a ese Chile profundo, a ese país que está invisibilizado y verlo con la sensibilidad de leer nuestra cultura tradicional a través de una perspectiva contemporánea. Encontrarme a mí misma dentro de ese lenguaje que es la raíz folclórica es muy importante y creo que mis temas creativos están muy arraigados en eso”. Para Valentina esa toma de posesión del folclor como un lugar de creación revisitado se transforma en una acción política que ve como “una resistencia. No estamos hablando de lo político en términos ideológicos necesariamente. Estamos hablando de elegir el folclor como el lugar de resistencia, como el lugar de creación, como el territorio, y entonces se transforma en algo político”. En Danza en Cruz se despliega una danza que reivindica una identidad nacional revisitada, marcada por un profundo conocimiento de las raíces y a la vez por la investigación del movimiento. 31
25 Años Danza en Cruz
La triada de la creación La dupla Pavez-Fernández entiende la creación como
dando una atmósfera, iba hablando sobre el trabajo,
un “todo” en el que han ido difuminando no sólo los
de lo que quería, imágenes y referentes” recuer-
límites de los lenguajes como género sino también
da Pavez. “El coreógrafo ordena los cuerpos en el
la relación coreógrafo-intérprete. En esa búsqueda
espacio y los intérpretes están bajo su comando.
la dupla no olvida las cualidades interpretativas:
Pero nosotros hacemos también dirección, que es
“Nosotros venimos del mundo de la interpretación,
otra capa en la creación”, enfatiza Fernández.
por lo tanto valoramos al intérprete y lo entendemos como un ser creativo, inteligente y versátil que puede
La Compañía se articula en torno a la triada
proponer y articularse de diferentes maneras frente
interpretación-creación-dirección. “Entendemos
a lo que uno le va exigiendo o proponiendo”.
la necesidad del intérprete en pro de la investigación del lenguaje a partir de las diferentes escrituras en
Y es que en Danza en Cruz la figura del coreógra-
sus cuerpos. Pero entendemos también el mundo de
fo como estructura monolítica está cada vez más
la coreografía, lo que significa la creación, investigar
diluida, dando paso a procesos creativos permeables
y proponer, y el de la dirección como articuladores
donde los intérpretes llamados a colaborar en sus
de lenguajes desde la puesta en escena. Siempre
obras son creadores de sus propios movimien-
hemos tratado de mantener esa triada en nuestros
tos, lo que marca metodológicamente una primera
procesos y según las obras nos posicionamos en
diferencia conceptual y generacional con su maestro
uno u otro rol o en todos a la vez”.
Patricio Bunster: “Él enseñaba la coreografía, iba 32
25 Años Danza en Cruz Rodrigo Fernández y Valentina Pavez en En Cruz. Ciudad de México D.F., 1994.
Y en efecto, para Danza en Cruz el trabajo de di-
De ese cambio de paradigma Danza en Cruz creó
rección se articula desde un punto de vista mucho
obras memorables como Santa fiesta, Raíces del
más integral en calidad de articuladores del trabajo
cuerpo y Matadero Alma, entre las 33 que cuenta
autoral del propio intérprete en quienes van “provo-
la Compañía.
cando en él su propia creatividad”, concluyen. Bajo esa premisa la Compañía está en constante
A lo largo de sus 25 años surgieron proyectos en
evolución y es la razón por la que no les gusta ser
los que los roles fueron alternando, siendo uno
encasillados de modernos o contemporáneos.
intérprete en la dirección del otro como en La Del-
“Venimos de una escuela moderna -dice Rodrigo
gadina, o como coreógrafos e intérpretes en Santa
Fernández- pero como Compañía hemos traspasado
Fiesta, o sólo intérpretes en Prisas y Atajos de Teresa
a la contemporaneidad por todos los lenguajes que
Alcaíno, o en Si mi mano derecha dijera lo que mi
hemos integrado”.
izquierda piensa de Alicia Sánchez, entre otras. En esa voluntad de abrir los procesos y generar siner33
25 Años Danza en Cruz
gias creativas, Danza en Cruz se ha puesto también desde el lugar interpretativo. “Hemos invitado gente a trabajar con nosotros, como Patricio Pimienta en Matadero Alma donde estuvimos más a la par en la relación de construir un movimiento y nos hemos puesto también al servicio de coreógrafos como Teresa Alcaíno, Paola Aste, Alejandra Ramírez, Alicia Sánchez, Sebastián Ruiz, Martín Andrade, Cristián Hewitt, Vivian Romo, Francisco Paco López y últimamente Pablo Zamorano”. El canal de comunicación es clave para encontrar no sólo los puntos de unión sino también los de discordia: “Nos vamos organizando democráticamente, no exentos de conflictos, porque es importante el conflicto en lo que uno está haciendo ya que genera preguntas. Es importante saber dónde estamos primero, no sólo en la idea sino también en el rol que va asumiendo cada uno según el proyecto y nos vamos retroalimentando de imágenes en la necesidad del otro. Y ahí la coautoría empieza a tener coherencia porque no se trata de decir esto fue 50 y 50, sino que es un conjunto, una simbiosis”, concluye la dupla.
34
Valentina Pavez y Rodrigo Fernández en La Casa de la Flor que Sangra. Ciudad de México D.F., 1994.
25 Años Danza en Cruz
El viaje iniciático: México Corría el año 1993 y Rodrigo tuvo la oportunidad
por la escena de vanguardia, y en México eso parecía
de viajar a México para bailar la obra Sótano de
estar resonando en las nuevas generaciones. Descu-
Luis Eduardo Araneda. Ahí, lo invitaron a volver al
brimos que teníamos una base sólida que podíamos
año siguiente para impartir un taller de danza en el
transmitir, una identidad en términos de movimiento
Centro Cultural Los Talleres, oportunidad en la que
y de conocimiento de la danza que era un aporte en
viajó junto a Valentina; lo que originalmente era una
México. Marcamos un sello especial en tanto éramos
temporada de talleres y seminarios se convirtió en
chilenos pero provenientes de una corriente muy
una estadía de tres años.
alemana con el método Leeder, gracias a nuestros maestros Joan Turner, Patricio Bunster y Malucha
“Danza en Cruz como Compañía propiamente tal
Solari”, recuerda Rodrigo. La escuela mexicana venía
nace en 1995 en México cuando, unidos por la vida y
en tanto muy marcada por la técnica Graham y la
el trabajo, nos vimos en la necesidad de crear y trans-
llegada de la pareja entregó una nueva dimensión
mitir nuestros conocimientos juntos”. Ya instalados
en el estudio del movimiento: “les dimos una nueva
la dupla montó un solo de Valentina Pavez llamada
metodología, les abrimos la cabeza; humildemente
La Delgadina y que les abrió las puertas para entrar
puedo decir que introdujimos el método Leeder en
de lleno en la escena de la danza independiente
México” sostiene Valentina, como lo demuestra
mexicana. “Justo ese fue un periodo de cambio
también la publicación mexicana de las investigado-
muy grande en México pues había una renovación
ras Elizabeth Cámara e Hilda Islas Pensamiento y
generacional. Fue bien curioso para nosotros porque
acción. El método Leeder (2006) en base al aporte
con la dictadura en Chile estábamos acostumbrados
de Pavez y Fernández en México.
a trabajar de manera independiente y a movernos 35
25 Años Danza en Cruz
Su experiencia les abrió las puertas del Instituto Nacional de Bellas Artes como formadores en las diversas escuelas de danza del Sistema Nacional de Danza de México DF. En esa época se inauguró también el Teatro Nacional de las Artes y accedieron a él y al Centro de Investigación José Limón donde colaboraron. “Nuestro aporte a la escena mexicana fue muy potente y a la vez nos nutrimos también de la danza mexicana y de todas las influencias europeas y norteamericanas que llegaban allá. Fueron tres años que parecieron diez”, concluye la dupla. Danza en Cruz es el cruce de dos mundos: el de Valentina Pavez y su conexión con el universo folclórico heredado de sus padres y su mirada política de la cultura, y el de Rodrigo Fernández con su espíritu rebelde, inquieto y a la vez con el baluarte del método Leeder. Una Compañía hecha de amor y creatividad, con sus historias personales y su encuentro a través de la danza, de los maestros, los viajes, sus vivencias y sus familias. Danza en Cruz es más que el encuentro de dos personas; es el punto donde se cruzan las líneas de la cruz, es la unión de dos caminos destinados a encontrarse en la creación y en la vida. 36
Rodrigo Fernández y Valentina Pavez en Poema 15 en Centro Danza Espiral. Santiago, 1993.
25 Años Danza en Cruz
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Cronología
ANOS
25
DANZA
CRONOLOGIA
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EN CRUZ
Cronología
1. En Cruz (1991) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes posteriores: Alejandro Hernández, Linda Faraón, Ximena Arroyo, Tatiana Martínez, Roxana Salinas, Isidora Guzmán, Paola Moret, Tamara Chávez, Pablo Barckhahn, Jacqueline Araya, Gema Contreras, Adrián Otárola, Giselle Pezoa, Danya Jerez y Paulina Vera. Vestuario: Gloria Fierro. Iluminadores: Kiko Fierro y Chacho Guerra. 2. La Caja del Rincón (1992) Coreografía: Rodrigo Fernández. Estreno con intérpretes del Grupo Espiral: Manuela Bunster, Valentina Pavez, Fedora Fonseca, Marcelo Sepúlveda, Jorge Olea, Ricardo Herrera y Mario Lorenzo Muñoz. Intérpretes posteriores en México: Alejandro Hernández, Ingrid Meyran, Ximena Arroyo, Lucero Cantú, Linda Faraón, Karen García, Miriam González, Soledad Rojas, Yeri Vargas y Verónica Téllez. Intérpretes posteriores en Chile: Juan Pérez, Tatiana Martínez, Tamara Chávez, Jenny Sepúlveda, Rosa Jiménez, Carola Mardones y Pablo Tapia. Vestuario: Marco Correa. Iluminadores: Kiko Fierro y Chacho Guerra.
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Cronología
3. La Delgadina (1994) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérprete estreno: Valentina Pavez. Iluminador: Chacho Guerra. 4. Santa Fiesta (1994) Dirección Coreográfica: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Miguel Cañas, Rodrigo Fernández, Natalia García Huidobro, Martha Castillo, Valentina Pavez, Pepa Castillo. Intérpretes posteriores: Paula Opazo, Alejandro Cáceres, Adriana del Castillo, Alfredo Becerra, Rosa Jiménez, Paz Barrientos, Jacqueline Araya, Constanza Díaz, Vicenta Pavez, Cristian Hewitt, Martín Andrade, Álvaro González, Catalina Rojo, Gema Contreras, Giselle Pezoa, Pablo Bello, Adrián Otárola, Andrés Millalonco, Daniela Guajardo, Daniela Pérez y Danya Jerez. Músicos que han participado en la obra: Antonio Restucci, Jorge Gómez, Sasson Levy, Claudio Morales, Daniel Villegas, Camilo Candia, Sebastián Mezzano e Ignacio Isla. Vestuario: Eugenio Delgado, Matilde Videla y Elisa de Córdova. Máscaras: Alma Martinoya y Pablo Barckhahn. Escenografía: Pablo Llao. Iluminadores: Luis Reinoso, Pedro Sandoval, Gonzalo Díaz y José Pablo Parra. Vídeo: Lissette Orozco. Sonido: Pablo Otárola.
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Cronología
5. Flores de Concreto (1995) Coreografía: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Yeri Vargas, Miriam González, Karen García, Lucero Cantú. Vestuario: Paula Sánchez. Escenografía: Miguel A. Sánchez. Iluminador: Chacho Guerra. 6. Reflejo (1995) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérprete estreno: Alejandro Hernández y Rodrigo Fernández. Vestuario: Paula Sánchez. Iluminador: Chacho Guerra. 7. Entre Lazos (1996) Coreografía: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Bailarines de la Academia de la Danza Mexicana. Vestuario: Paula Sánchez. Iluminador: Chacho Guerra. 8. Déjate Caer (1997) Coreografía: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández Intérpretes estreno: Bailarines de la Academia de la Danza Mexicana. Vestuario: Paula Sánchez. Iluminador: Chacho Guerra.
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Cronología
9. Trilogía de Romances: La Delgadina, La Lechera y La Leona (1998) Coreografía: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Estreno con intérpretes del Grupo Espiral: Yasna Vergara, Tamara Leiva, Maribel Pinto, María Paz Aguilar, Elda Sepúlveda, Rodrigo Fernández, Exequiel Gómez y Mario Lorenzo Muñoz. Intérpretes posteriores: Hugo Peña, Víctor Soto, Valentina Pavez, Tatiana Martínez, Jenny Sepúlveda, Rosa Jiménez, Pablo Tapia, David Legue, Jaime Arias, Carola Mardones, Tamara Chávez, Pierina Rivas, Renata Ramos, Raquel Núñez, Daniela Cea, Maritza Basso. Vestuario: Renée Silva. Iluminador: Kiko Fierro. 10. Enjambre (2000) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Raquel Núñez, Renata Ramos, Daniela Cea, Pierina Rivas, Maritza Basso. Iluminador: Kiko Fierro. Escenografía: Gabriel Fernández.
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Cronología
11. Por la Mañana (2001) Coreografía: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Jenny Sepúlveda y Patricio Cabrera. Intérpretes posteriores: Hugo Peña, Adrián Otárola, Vicenta Pavez, Juan Pérez, Rosa Jiménez, Jaime Arias, David Legue, Martín Andrade, Karen Mejías, Jorge Carrasco y Paulina Vera. Iluminador: Kiko Fierro. 12. Tensores (2003) Coreografía: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes posteriores: Pablo Tapia, Carola Mardones, Esteban Inzua, Marilu Renata, Martín Andrade, Tatiana Martínez, Constanza Díaz, Andrés Millalonco y Daniela Guajardo. Iluminadores: Kiko Fierro y José Pablo Parra.
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Cronología
13. Raíces Del Cuerpo (2004) Coreografía: Valentina Pavez. Estreno con intérpretes del Ballet Nacional Chileno: Tatiana Martínez, Jorge Carreño, Vivian Romo, Cristian Contreras, Carolina Saéz, Luis Baeza, Juan Pérez, Alfredo Bravo, Verónica Santibáñez, Kana Nakao, Tamara Chávez, Carola Alvear, Joselyn Morrison, Natalia Schonffeldt, Paulina Garrido, Paola Moret, Juan Carlos Ahumada, Mauricio Cáceres y Gonzalo Venegas. Intérpretes posteriores: Martín Andrade, Jacqueline Araya, Paz Barrientos, Jaime Arias, Pablo Barckhahn, Constanza Díaz, Álvaro González, Cristian Hewitt, Rosa Jiménez, Tatiana Martínez, Vicenta Pavez, Adrián Otárola, Gabriela Fernández, Gema Contreras, Giselle Pezoa, Danya Jerez, Daniela Guajardo, Paulina Vera, Andrés Millalonco, Nicolás González, Flavio González, Sebastián Brown, Cesar Cisternas, Pablo Bello, Sebastian Mieres, Jorge, Rodrigo Oyarzún, Luis Aparicio, Carrasco, Belén Álvarez, Camilo Toro, Catalina Rojo, Melissa Briones, Crystal Schuttler, y Andrea Escobar. Vestuario: Renée Silva. Iluminadores: Kiko Fierro, José Pablo Parra, Gonzalo Díaz, Luis Reinoso, Felipe Conejeros, Felipe Beltrán y Pedro Sandoval.
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Cronología
14. Proyecto Humano (2005) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Rodrigo Fernández y Ariel Fernández. Vestuario: Carolina Labra. Escenografía: Gabriel Fernández. Iluminación: Kiko Fierro. 15. 119 (2005) Coreografía: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Valentina Pavez, Rodrigo Fernández, Jaime Arias, Francisco Paco López, Estefanía Pereira, Rebeca Garrido, Valentín Keller, Valentina Chávez, Rodrigo Chaverini, Rosa Jiménez, Natalia Sánchez, Constanza Buschmann, Paz Varas, Josefina Camus, Gabriela Tapia, Natalie Gutiérrez, Natacha Godoy, Gabriela Neira, Tamara Chávez y Paz Barrientos. Vestuario: Katia Espejo. Música: Carolina Holzapfel. 16. En el Camino (2006) Coreografía: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Paz Barrientos y Jaime Arias. Intérpretes posteriores: Álvaro González, Pamela Romero, Andrés Millalonco y Danya Jerez. Iluminador: Kiko Fierro.
45
Cronología
17. Santiago Hora Cero (2006) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Tatiana Martínez, Jenny Sepúlveda, Rosa Jiménez, Jaime Arias, Bernardo Orellana, Valentina Pavez. Intérpretes posteriores: Carola Sáez, David Legue, Josefina Greene. Iluminador: Kiko Fierro. 18. Fuera del Cuerpo (2006) Coreografía: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Jaime Arias, David Legue, Martín Andrade, Paz Barrientos, Jacqueline Araya y Rosa Jiménez. Iluminadores: Kiko Fierro y José Pablo Parra. 19. Si mi Mano Derecha Dijera lo que la Izquierda Piensa (2006) Coreografía: Alicia Sánchez. Intérpretes estreno: Paz Barrientos, Jaime Arias, Rodrigo Fernández, Rosita Jiménez, Tatiana Martínez y Valentina Pavez. Intérpretes posteriores: Josefina Greene y Jacqueline Araya. Vestuario: Antonio Sepúlveda. Iluminador: Kiko Fierro.
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Cronología
20. Prisas y Atajo (2007) Coreografía: Teresa Alcaíno Intérpretes estreno: Jaime Arias, Paz Barrientos, Rodrigo Fernández, Rosa Jiménez, David Legue, Tatiana Martínez, Valentina Pavez. Intérpretes posteriores: Josefina Greene. Vestuario: Maitia Cibulka. Música: Jaime Vásquez. Escenografía e Iluminación: Sergio Valenzuela. Visuales: Renée Silva y Sergio Valenzuela. 21. Matadero Alma (2007) Dramaturgia, Dir. Teatral e Idea Original: Patricio Pimienta. Dirección Coreográfica: Valentina Pavez y Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Martín Andrade, Jacqueline Araya, Jaime Arias, Paz Barrientos, Rodrigo Fernández, Josefina Greene, Rosa Jiménez, David legue, Tatiana Martínez, Valentina Pavez. Intérpretes posteriores: Mara Belén Hormazábal, Álvaro González, Pablo Barckhahn, Andrés Millalonco, Nicolás González, Vicenta Pavez, Giselle Pezoa, Daniela Guajardo, Cristian Hewitt, Isadora Altamirano, Paulina Vera, Crystal Schuttler, Danya Jerez, Constanza Díaz, Adrián Otárola, Andrea Escobar y Jorge Carrasco. Vestuario: Carolina Galaz. Música: Christián Pino. Iluminadores: Luis Reinoso, Felipe Conejero, Kiko Fierro, Claudia Cortés y Felipe Beltrán. Escenografía: Matías González.
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Cronología
22. TKM (2009) Dirección Coreográfica: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Rosa Jiménez, Valentina Morales, Paz Barrientos, Pamela Romero, Constanza Díaz, Jacqueline Araya, Vicenta Pavez, Martín Andrade Rodrigo Fernández, Álvaro González, Pablo Barckhahn, Jaime Arias y Mara Belén Hormazábal. Vestuario: Carolina Galaz. Iluminador: Felipe Conejeros. 23. Siente el Alma un Segundo (2009) Coreografía: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Paz Barrientos, Rosa Jiménez, Jacqueline Araya, Tatiana Martínez, Julieta Pavez, Mara Belén Hormazábal, Josefina Greene y Jaime Arias. Intérpretes posteriores: Danya Jerez, Andrea Escobar, Giselle Pezoa, Daniela Guajardo, Belén Álvarez, Isadora Altamirano, Paulina Vera, Vicenta Pavez, Constanza Díaz, Valentina Morales y Crystal Schuttler. Iluminadores: Kiko Fierro y Felipe Beltrán. 24. Gente Austral (2009) Coreografía: Martín Andrade. Intérpretes estreno: Paz Barrientos, Jacqueline Araya, Crystal Schüttler, Constanza Díaz, Martín Andrade, Álvaro González, Pablo Barckhahn y Jaime Arias. Iluminador: Kiko Fierro.
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Cronología
25. Derrumbe (2011) Coreografía: Paola Aste. Intérpretes estreno: Paz Barrientos, Rosa Jiménez, Vicenta Pavez, Crystal Schuttler, Jacqueline Araya, Álvaro González, Pablo Barckhahn y Martín Andrade. Iluminador: Kiko Fierro. 26. Festín de Abraxas (2014) Coreografía: Sebastián Ruiz. Intérpretes estreno: Pablo Avilés, Belén Álvarez, Rodolfo Novari Bustos, Constanza Díaz, Rodrigo Fernández, Danya Jerez, Nicolás González, Daniela Guajardo, Adrián Otárola, Valentina Pavez, Vicenta Pavez, Daniela Pérez, Giselle Pezoa, Deinar Ramírez. Música: Novaris Bustos. Iluminación: Andrés Millalonco. 27. Extraña (2015) Coreografía: Alejandra Ramírez. Intérpretes estreno: Gema Contreras, Adrián Otárola, Constanza Díaz, Danya Jerez, Daniela Guajardo, Vicenta Pavez, Valentina Pavez, Giselle Pezoa, Catalina Rojo, Rodrigo Fernández, David Legue y Daniela Pérez. 28. Resilio (2015) Coreografía: Valentina Pavez. Intérpretes estreno: Adrián Otárola y Cristian Hewitt. Iluminador: Kiko Fierro.
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Cronología
29. Fragmentos de un Gavilán (2015) Coreografía: Martín Andrade Intérpretes estreno: Daniela Guajardo, Giselle Pezoa, Paulina Vera, Danya Jerez, Vivian Romo, Rodrigo Fernández, Nicolás González, Adrián Otárola, Andrés Millalonco. Intérpretes posteriores: Paulina Vera, Andrea Escobar, Isadora Altamirano, Pablo Avilés, Cristián Hewitt y Jorge Carrasco. Vestuario: Constanza Díaz. Música y arreglos: Novaris Bustos. Iluminadores: José Pablo Parra y Felipe Beltrán. Visuales: Joan Lavandeira. 30. El Salón (2016) Coreografía: Rodrigo Fernández. Intérpretes estreno: Danya Jerez, Isadora Altamirano, Daniela Guajardo, Paulina Vera, Andrea Escobar, Nicolás González, Jorge Carrasco, Cristian Hewitt, Adrián Otárola y Andrés Millalonco. Intérprete Posterior: Sebastian Brown. Música Banda Osorezan: Ariel Fernández (guitarra), Matías Gray (batería), Francisco Reyes (guitarra), Belén Farias (bajo), Cristóbal Talamilla (teclados), Diego Soto (violín), Catalina Moraga (voz), Javier Carrizo (asistente sonido), Victoria Cordero (sonidista). Vestuario: Jorge Carrasco. Iluminadores: Felipe Beltrán y Francisco Jara.
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Cronología
31. El Rostro (2017) Coreografía: Alejandra Ramírez. Intérpretes estreno: Valentina Pavez, Danya Jerez, Daniela Guajardo, Paulina Vera, Andrea Escobar y Melissa Briones. Vestuario: Juan Zaldívar. Música: Andrés Solís. Iluminadores: Alejandra Ramírez y Felipe Beltrán. 32. Triste, Amorosa y Cautiva (2018) Dirección y puesta en escena: Francisco Paco López. Coreografía e intérprete: Valentina Pavez Pizarro. Música original e intérprete: Ariel Fernández. Asistente de dirección: Gabriela Neira. Vestuario e Iluminación: Nicoletta Fuentealba. 33. Indio Pavez (2020) Dramaturgia y Dirección: Pablo Zamorano Azócar. Intérpretes estreno: Valentina Pavez, Rodrigo Fernández, Gabriela Neira y Gonzalo Beltrán. Intérpretes música: Héctor Gitano Pavez y Ariel Fernández. Escenografía y Vestuario: Nicoletta Fuentealba. Iluminador: Gonzalo Múñoz. Sonido: Gabriel Pavez. Producción: Francisco Paco López. Obra financiada por Fondart, convocatoria 2020.
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Saludos
ANOS
25
DANZA
SALUDOS
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EN CRUZ
Saludos
“Cuarto de siglo danzando
“Gracias Valentina y Rodrigo por darme la oportunidad de aprender desde
“Veinticinco años de danza, cargada de
con la fuerza encruciana
su maestría y sabiduría a expresar a través del movimiento del cuerpo,
perseverancia y amor por lo que creen,
Una pareja se afana
arte y política. Ustedes lograron conectar ambas, dándole un sesgo de
eso es el reflejo de Compañía Danza en
en la danzavida creando
resistencia a un movimiento artístico, fue ahí cuando la danza tuvo más
Cruz durante todos estos años. Son parte
Vale y Rodrigo van dando
sentido, ya no sólo era una expresión de emociones y movimiento, sino
de la historia de la danza en Chile, de esa
espacio pa` hacer oficio
también era portadora de un mensaje que cobraba mayor relevancia en
danza independiente, que se sostiene
y me uno al ejercicio
los tiempos que compartimos en la compañía, ya que toda una generación
a pulso, con disciplina, constancia y
por diez años y días
de jóvenes carentes de identidad política, buscaban una forma de expre-
convicción. ¡Feliz aniversario!” - Isadora
con gratitud y alegrías
sarse. Agradezco profundamente haber compartido con ustedes parte del
Altamirano, bailarina, trabajadora de
viví momentos propicios
camino de mi vida y haber bailado y entregado el mensaje siendo parte
la danza y compañera de los 25 años
Muchas danzas y personas
de su compañía, lo aprendido no sólo fue puesto en escena, también me
de Danza en Cruz.
en el tiempo transcurrieron
sirvió fuera del escenario. Infinitas gracias Valentina y Rodrigo y gracias
con energía ya se unieron
también a todos mis compañeros con los que reímos hasta llorar, serán
“Agradecida de mis compañeras y
danzarines que emocionan
siempre una parte importante de mi vida.” - Pablo Barckhahn, bailarín,
compañeros, de nutrirnos, de crecer,
Experiencias que apasionan
trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
de aprender, de acompañarnos, de dan-
de este arte siempre obrera En la escena se pariera sutilezas, mil historias ensayos en mi memoria como flor de primavera.” - Rosita Jiménez bailarina, trabajadora de la danza y
“Felicidad y larga vida a la compañía que tanto quiero y recuerdo, sin duda fueron años intensos, hermosos, de danzas-vuelos, de aprendizajes invaluables... de los años más bellos de mi vida. Gracias por tanto Vale, Rodrigo, compañer@s por tanta danza con sentido y razón. Hicimos tanto.... y lo agradezco profundamente.” - Constanza Díaz, bailarina y
zarnos. Que Danza en Cruz prevalezca en su historia y su memoria.”- Daniela Guajardo, bailarina, trabajadora de la danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
trabajadora de la danza, compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
compañera de los 25 años de
“Felices veinticinco, agradeci-
“Agradezco siempre la danza, los momentos, las alegrías, las peleas
da por las danzas, las energías
que nos hicieron más grandes y maduros. El crecer en conjunto y que
y las personas que hasta el
“Gracias por permitirme entrar en su danza
muchos encruzianos hoy, sean mi familia. Más allá del romanticismo
día de hoy me acompañan.”
y compartir en ella el placer del mover con
estoy seguro que nos volveremos a bailar, hasta hoy resuena y me ha
- Paulina Vera, bailarina,
sentimiento y sentido de lucha.” - Sebastián
servido como ley de vida tus palabras Valentina: cuanto más oscuro
trabajadora de la danza y
Mieres, bailarín, trabajador de la danza y
se pone todo, más aférrate a la danza.”- Andrés Millalonco, bailarín,
compañera de los 25 años de
compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
Danza en Cruz.
Danza en Cruz.
53
de la energía, rigurosidad y sobre todo la certeza de sostener y seguir
país con todo en contra y sin espa-
adelante en cada proceso y cada viaje que tuvimos, porque la convicción
cios permanentes para la danza
que teníamos bailando juntos era lo más importante. Gracias Vale y
independiente, siendo ejemplo de
Rodrigo, encruzianos queridos, por compartir tanto amor y compro-
entereza y convencimiento. Han
miso con la danza.” - Danya Jerez, bailarina, trabajadora de la danza
sabido contener al ser semillero
y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
profesional de quienes han conformado la compañía, y también han sido consecuentes actualizando el lenguaje de sus creaciones, incluso abriendo puertas a otros interesantes modos de observar el entorno. Siempre con la poesía encarnada, hecha movimiento, hecha danza.” - Natalia Sabat, bailarina, trabajadora de la danza y Coordinadora de la Escuela de Danza UDLA.
“Este es uno de los espacios en el que todo bailarín sueña estar. Así fue para mí, aunque desde la perspectiva del tiempo, ha sido eso y mucho más. Es un desafío poder expresar la profundidad de las experiencias vividas por más de 8 años, con un gran número de artistas, compañeros y amigos trabajando por la danza y la cultura de nuestras raíces como de nuestras pasiones, en una itinerancia constante y sin descanso. El contacto profesional y humano, junto a Valentina y Rodrigo, como el resto de mis compañeros, ha marcado por siempre la identidad de mi persona. A pesar de ser mi sueño hace tantos años atrás, poseerá siempre una belleza y un valor en mí que nunca pude imaginar.”- Adrián Otárola, bailarín, trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
de la danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
ha construido su experiencia en un
gracias por tanto!" - Vicenta Pavez, bailarina, trabajadora
del movimiento, conectar con mi historia, con la identidad. Aprender
la oportunidad de vivir y compartir la danza juntos. Muchas
terísticas con la que esta compañía
que me ha entregado tan bellos momentos, donde he tenido
“Este espacio me permitió habitar y conectar con espacios tan sensibles
me siento muy feliz de ser parte de esta tremenda compañía
“Resistencia y aplomo son carac-
"Queridos Rodrigo, Valentina y Compañía Danza en Cruz,
Saludos
“Valentina y Rodrigo son Compañía Danza en Cruz, son resistencia, convicción y representan la más bella utopía de vivir del arte de la danza siendo independientes. Este espacio y cada une de sus integrantes me entregó
"Recuerdo la primera vez que vi el trabajo de la compañía, “Santa
“Mi homenaje cariñoso para la
la noción más completa y profunda
Fiesta”, en Galpón Domínica, primer año de Universidad, y desde ese
Compañía Danza en Cruz en sus
de lo que significa ser compañía lo
día desear ser parte de ese cuerpo…y así fue, por 10 años viví y crecí
25 años de expresión corporal,
que me unirá a cada une de elles
junto a Valentina y Rodrigo, cómplices entrañables de la danza, ejemplo
mostrando la identidad de las y los
por siempre y por lo que me siento
de convicción y pasión de este camino, gracias siempre por permitirme
trabajadores, mingas y cosechas
infinitamente agradecida. Larga
ser parte de ustedes, de la familia. Gracias por este reencuentro, hoy
donde su quehacer es una danza.”
vida a Danza en Cruz.” - Belen
desde otro escenario." - Tatiana Martínez, Directora de la carrera de
- Héctor Gitano Pavez, cantautor,
Álvarez, bailarina, trabajadora de
Danza de la Escuela Moderna de Música y Danza. Bailarina, trabajadora
folclorista y compañero de los 25
la danza y compañera de los 25
de la danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
años de Danza en Cruz.
años de Danza en Cruz.
54
Saludos
“He compartido la vida de la danza con Valentina Pavez y Rodrigo Fernández desde
“Como presidenta del Sindicato Nacional de la Danza y
fines de los años ochenta, primero en el Centro de Danza Espiral y luego en la vida
amiga de Valentina y Rodrigo de tantos años que nos han
profesional, les he visto crecer, enamorarse y hacerse sólidos representantes de
unido en este infinito camino de la creación, la enseñanza
nuestro arte, he apreciado y admirado la pasión y entrega de su quehacer en Danza
y el aprendizaje, les dedico desde mi corazón un tremendo
en Cruz. Este referente de la danza chilena, cumple ahora veinticinco años, por
reconocimiento y admiración por toda la belleza que nos
Danza en Cruz han pasado muchos de los exitosos intérpretes y maestros de la
han entregado en estos 25 años de un profundo trabajo
actualidad, que pudieron gracias a la generosidad de Rodrigo y Valentina, afinar y
en que la memoria ,los valores y derechos humanos han
perfeccionar sus capacidades escénicas. Un abrazo a estos queridos compañeros
sido fuente de inspiración en sus imborrables y poéticas
y bravo por su poética de tradición, belleza, contemporaneidad y verdad.” - Jorge
obras.Con todo mi cariño de siempre.”- Paola Aste,
Olea, bailarín, coreógrafo y trabajador de la danza.
bailarina, coreógrafa y presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores Artistas de la Danza.
“Entré a Danza en Cruz el 2010, terrible pollo. 7 años de ensayos, viajes, funciones, reuniones, discusiones y celebraciones me enseñaron la
"El campo de la danza ha sido siempre un espacio de difícil desarrollo
importancia de une misme en un colectivo y cómo somos compañía.
en nuestro país, sin embargo, los profesionales de esta disciplina se
Esta llave la llevo siempre conmigo ahora y está enraizada en mi danza
han caracterizado por no detenerse nunca, por seguir creando a pesar
profundamente. Agradecido siempre de Valentina y Rodrigo por todo.
de las dificultades. Cumplir 25 años es más que una hazaña, es una
Fuerza, amor, locura y resistencia siempre.” - Cristian Hewitt, bailarín,
epopeya de convicción, de perseverancia y amor por la disciplina.
trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
Compañía Danza en Cruz cumple un cuarto de siglo celebrando nuestra identidad, folklore y memoria por eso decimos, ¡larga vida a la Danza
“Queridxs Danza en Cruz, en momentos que hace
en Cruz! que sean muchos años más!" - Felipe Mella, Director del
falta conectarse a través de la sensibilidad, la
Centro Cultural Gabriela Mistral - GAM.
empatía y todo el “movimiento” que sea posible, los felicito muy cariñosamente por 25 años de
“Amigos de siempre, compañeros de viaje y de ruta, abrieron caminos para muchos
danza, que por cierto son de resistencia. Espero
bailarines y coreógrafos, invitándolos a crear, descubrir, interpretar y valorar su propio
que sean muchos años más de trabajo y sigan
lenguaje. Resistencia, constancia y convicción por el arte de la danza. Raíces de la memoria
aportando a nuestra identidad cultural con toda
y los derechos humanos de nuestro pueblo, a través de vuestras obras. Gracias Rodrigo
vuestra creatividad y entrega. Abrazos!” - Graciela
y Valentina por su amistad y entrega incondicional de tantos años. Gracias por sus hijos
Cornejo, trabajadora de la danza y de la Secretaría
Ariel y Gabriela.” - Teresa Alcaíno, bailarina, trabajadora de la danza, en representación
Ejecutiva de Artes Escénicas, MINCAP.
de los amigos y colegas de la Compañía Movimiento (1997-2020).
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"Gracias Valentina y Rodrigo por su entrega, energía, convicción y lucha
“Los 25 años de la Compañía
por la danza en Chile, haber sido parte de Danza en Cruz es una de las
Danza en Cruz los veo como un
experiencias que más atesoro, aprendí con ustedes a dar lo mejor de mí
espiral histórico de creatividad y
como intérprete ya sea en un teatro de renombre, como frente a un público
resistencia de la danza. Generar
en una población pequeña de alguna ciudad de nuestro país. Felicidades
arte en nuestro país nunca ha sido
por estos 25 años y que su danza siga abriendo caminos, creando concien-
fácil. Sin embargo la perseverancia,
cia y reuniéndonos por muchos años más." - Paz Barrientos, bailarina,
su compromiso social y la convicción
trabajadora de la Danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
de este grupo ha hecho que Danza en Cruz se mantenga vigente con pro-
trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
un patrimonio que merece y necesita estar vigente, porque son historia, raíz y pueblo.” - Pablo Avilés, bailarín,
el lujo de compartir escena con Valentina Pavez Pizarro y Rodrigo Fernández es impagable. Sus obras son sin duda
compañía, pude comprender y valorar los procesos que sostienen la creación. Aprendí de colaboración y respeto;
“Danza En Cruz, es por lejos la experiencia más enriquecedora en vida en relación a la danza. Siendo parte de la
Saludos
“FELIZ Cuarto de Siglo, cuando cumplan 30 años ojalá bailemos algo junto
puestas artísticas frescas y contem-
otra vez, danzarines adultos adultos jajaja. Mil cariños, tengo mil grati-
poráneas.” - Hernán Pavez, artista
tudes de mi paso por En Cruz, muy buenos recuerdos, trabajo, reflexiones,
audiovisual y compañero de los 25
discusiones, tensiones, esperanzas, amores, sueños y por sobre todo la
años de Danza en Cruz.
posibilidad de ser intérprete de una compañía resiliente e independiente de danza contemporánea. Aguante la historia de En Cruz y sus insistencias. Abrazos de un cuarto de siglo!" - Rosita Jiménez, bailarina, trabajadora de la danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
por años un espacio de reflexión,
“Las raíces se cruzan bajo la tierra, las pasiones se encuentran, los talentos
resistir y sostener. Nos ha invitado
se ramifican hacia la locura del cielo. En 2004 Valentina, asistida por Rodrigo
a habitar cada espacio y rehabitar
creó, para el BANCH, “Raíces del Cuerpo”. Me imagino como se “ramificó”
el cuerpo. “Sentir” es la primera
DANZA EN CRUZ desde entonces. Para sus 25 años FELICIDADES de
palabra que aparece al pensar en
todo corazón.” - Gigi Caciuleanu, coreógrafo, trabajador de la danza y ex
esta bella compañia. Gracias por el
Director del Ballet Nacional Chileno (BANCH).
legado, por aportar a la historia de la
“Querida y querido Valentina y Rodrigo. Desde ese taller en 1992 donde nos encontramos, no hemos parado de obrar por esta pasión que tenemos en común: la danza. Arte de la libertad. Arte del tiempo en movimiento. En todos estos años entre Francia y Chile vimos la imagen de su luz, de su constancia y fidelidad chilena. Abrazos gigantes!”- Claude Brumachon y Benjamin Lamarche, trabajadores de la danza, directores de la compañía Sous La Peau, Francia.
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"Danza en Cruz nos ha entregado
danza y por haberme hecho parte de ella, por ser ustedes. Gracias compañía, gracias Valentina y Rodrigo." - Nicolás González, bailarín, trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
Saludos
“Sólo se puede agradecer el coraje, la valentía, la danza compartida, el
“Ser un trabajador de las Artes Escénicas en nuestro país no es fácil,
amor hacia tantos mundos, danza que nos conecta con el ser persona, con
tener una compañía de danza ya se vuelve titánico, pero sostener, difundir
estar ahí de cuerpo entero, con el saberse parte de un todo, con el rigor,
y preservar una compañía de danza contemporánea independiente por
sentir, sintonizar las miradas, sólo se puede agradecer profundamente por
25 años, es para aplaudir de pie la tremenda lucha que significa esta
el camino y el tiempo recorrido, por conectar con la tierra, con la raíz, por
trayectoria. Para mí es un honor poder trabajar con ustedes y haber
la búsqueda constante, por estos 25 años de Danza en Cruz, les admiro y
sido parte de tres de las tantas hermosas e importantes creaciones de
les agradezco siempre.”- Vivian Romo, bailarina, trabajadora de la danza
Danza en Cruz: 119, Triste Amorosa y Cautiva e Indio Pavez. Gracias
y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
Rodrigo y Valentina y a todos los que han estado y siguen estando en
"Danza en Cruz ha sido estandarte latinoamericano de la danza como actividad sentida, pensada y asumida éticamente. Hasta Ciudad de México
estos 25 años.” - Francisco Paco López, actor, productor y trabajador de la danza y compañero de los 25 años de Danza en Cruz.
ha llegado esta ola de arte, cuerpo y política suscitando nuevas maneras
“Sin duda, Danza en Cruz fue muy importante para mi danza, la pasión
de ser bailarines, coreógrafos y agentes de cambio. Se le desean muchos
y la entrega con la que bailábamos y nos acompañábamos no la volví
años de vida intensa a esta compañía que ha marcado cuerpos, ánimos y
a encontrar en otros lugares. Tantos escenarios, alegrías y amigxs que
sentido de vida a muchos en toda la región Nuestroamericana. Mil abrazos
quedan para siempre. Agradecida de ser parte de este hermoso proyecto
a mis adorados maestros Valentina y Rodrigo." - Hilda Islas, bailarina,
que hoy cumple 25 años.” - Giselle Pezoa, bailarina, trabajadora de la
trabajadora de la danza e investigadora del Centro Nacional de Investigación
danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
y Documentación e Información de la Danza José Limón, México. “Enhora buena querida Compañía. Tuve el honor de
“Me sumo a este homenaje, desde la profunda
crear junto a ustedes y volvernos locos en un Festín.
convicción de ser testigo del trabajo que durante
No sólo me acogieron como colega, sino que me
estos 25 años imparables ha realizado la Compañía
cobijaron también con vuestra amistad. El último y
Danza en Cruz. Trabajo que simboliza principios
más difícil año para mí en Chile antes de irme, hicieron
fundamentales e intransables: consecuencia,
real nombre de lo que es una compañía de danza, y
abnegación, compromiso, lealtad y sobre todo
así me acompañaron hasta la última, llenándome de
gran calidad y belleza estética en cada puesta en
amor y risa. Los admiro y adoro siempre.” - Sebastián
escena.” - Sabina Luna, coreógrafa y directora de
Ruiz, bailarín, trabajador de la danza y compañero
la Compañía Cuarta Danza (IV Región).
de los 25 años de Danza en Cruz.
“Saludos a la Compañía en Cruz por sus 25 años de trayectoria y creación ininterrumpida, llevando la danza a todo público con un lenguaje lleno de vida entre lo tradicional y lo contemporáneo. Una gran labor artística, consecuente y necesaria de sus directores Valentina Pavez y Rodrigo Fernández.” - Julieta Pavez, bailarina, trabajadora de la danza y compañera de los 25 años de Danza en Cruz.
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Indio Pavez
LA CREACION
MIRAR
CON LOS OJOS
INDIO PAVEZ
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DE HECTOR
Indio Pavez
Héctor Pavez Casanova (Santiago 1932- París 1975), apodado el Indio, fue cantautor, folclorista, investigador de la música popular y actor, defensor incansable de la cultura tradicional chilena. Su figura se asocia con el género folclórico y la Nueva Canción Chilena, ocupando un lugar importante en la historia de la música chilena. Pavez es uno de los principales responsables de la salvaguardia de la música tradicional chilota recopilando y popularizando canciones como la cueca La huillincana y El lobo chilote, y creaciones propias como Para bailar sirilla o Corazón de escarcha. Su entendimiento del Chile profundo, popular y social lo llevaron a componer los himnos Cueca de la CUT y Cueca de Luis Emilio Recabarren. “La canción social es la más válida. El pueblo la siente como suya”, dijo en 1973. Héctor Pavez era un artista completo: estudió danza flamenca y ballet e ingresó a la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile. Su encuentro con Violeta Parra y Margot Loyola lo llevaría por la senda de la investigación de la música folclórica. Entre 1958 y 1965 formó el conjunto Millaray junto a la folclorista Gabriela Pizarro recopilando música desde la Pampa salitrera hasta el Valle Central, pasando por Chiloé. Desde 1965 prosiguió su carrera como solista y en 1967 se internacionalizó. Presidió el Comité de Artistas Populares en apoyo a Salvador Allende durante su campaña y fundó el conjunto Héctor Pavez, cantos y danzas. Se exilió en París en 1974 donde murió un año después.
Indio Pavez es un montaje de danza y música que cruza la teatralidad con el archivo biográfico y autobiográfico, en una variedad de miradas y sensibilidades corporales y musicales en torno a la figura del folclorista Héctor “Indio” Pavez. El proyecto, liderado por su hija Valentina Pavez y su Compañía Danza en Cruz en ocasión de los 25 años de la agrupación, está a cargo de la dirección escénica del coreógrafo y director Pablo Zamorano. 59
Indio Pavez
Cocinado a fuego lento, con amor familiar Indio Pavez tensiona lo que se entiende por biografía, deconstruyendo la conocida figura del folclorista Héctor “Indio” Pavez y reconstruyéndola desde una nueva mirada a través del gesto y la música. “La obra recoge, precisamente, esa esencia del folclor que es danza, texto, música, teatro... aquí los límites formales de la danza se desdibujan para entenderla como movimiento y eso es mover a través de la voz, el cuerpo, relatos y recuerdos”. (Pablo Zamorano, director Indio Pavez) Entre la investigación documental y biográfica y el cruce con elementos personales de los propios intérpretes, el director Pablo Zamorano prefiere hablar de danzagrafía. La obra es el resultado de un proceso creativo cocinado “a fuego lento”, con amor familiar, íntimo y afectivo que devela los sabores de este multifacético Indio Pavez. La obra tiene la particularidad de ser interpretada por dos hijos de Héctor Pavez -la bailarina Valentina Pavez y el músico Héctor “Gitano” Pavez-, un yerno, dos nietos, un sobrino y los colaboradores de la Compañía Danza en Cruz, 60
Héctor Pavez en una peña en Chillán, 1960. Pág. siguiente - Elenco Indio Pavez, de arriba a abajo y de izquierda a derecha: Gonzalo Beltrán, Gabriela Neira, Rodrigo Fernández, Valentina Pavez, Gitano Pavez y Ariel Fernández.
Indio Pavez
“por lo que son muchos elementos desde donde
“Afectivamente tengo una gran admiración por la
construir, reconstruir y desarmar la figura del Indio
obra y talento de mi padre. Como músico, busco
Pavez”, concluye el director.
refrescar el folclor tradicional manteniendo su estética e identidad. Siento la responsabili-
“Emocionalmente es muy profundo entrar en la
dad de mantener vigente su obra y desde ella
temática de los padres, entrar en su memoria, en
estimular mi creación y la de las y los músicos
su pasado, en su construcción. Es muy potente.
más jóvenes. Por eso, formar parte de este
Mis papás pertenecen a la construcción de
trabajo, fuera de la linda experiencia, lo más
mucha gente. Muchas personas tienen el legado
importante es dejar un testimonio histórico
de mi papá y de mi mamá en su quehacer: el
mostrando la vida y obra de Héctor Pavez con el
rigor, el compañerismo, la solidaridad, la conse-
fin de visualizarlo en la sociedad cultural y en la
cuencia, porque ellos trabajaron desde un lugar
juventud actual para que forme parte del alma
muy colectivo realmente.” (Valentina Pavez, hija
del pueblo de Chile.” (Héctor “Gitano” Pavez,
y bailarina, Danza en Cruz)
hijo y músico) 61
Indio Pavez
“Esta obra es el encuentro con la figura de Héctor Pavez como abuelo y como artista y asimismo un encuentro con mi lenguaje musical que se ha enriquecido en este proceso de creación. Ha sido lindo descubrir que las formas y maneras en que yo he entendido la labor artística y viven en mí de manera natural, devienen del valioso legado de mi abuela y de mi abuelo.” (Ariel Fernández Pavez, nieto y músico) “Forma parte de nuestro quehacer trabajar con los conceptos de legado, folclor y de memoria. Es un
Pablo Zamorano dirigiendo Indio Pavez.
rescate hacia la identidad y la historia de nuestro país que se cruza con biografías personales de los
donde cada integrante es investigador, intérprete
intérpretes. Hay un cruce generacional también,
y creador de diferentes capas narrativas según
ya que está su nieto, su hijo, su hija, sus amigos.
el vínculo de cada uno con el universo creativo,
A través de ello vamos tejiendo un encuentro con
biográfico e histórico del Indio Pavez. La obra va
Héctor y con el público que se sentirá identificado
tejiéndose como un entramado de vivencias y
con la historia de Chile, pero también con su propio
propuestas, configurando una obra híbrida y muy
imaginario.” (Rodrigo Fernández, yerno y bailarín)
personal donde las sonoridades del Indio Pavez se entrecruzan con la guitarra folclórica de su hijo
Indio Pavez ha seguido dos líneas de dirección:
Gitano Pavez o la guitarra eléctrica de su nieto Ariel
la construcción de un relato desde la investi-
Fernández Pavez, y donde el baile tradicional dialoga
gación biográfica del folclorista con elementos
con el flujo de la danza contemporánea de Danza
autobiográficos, y un trabajo autoral colaborativo
en Cruz.
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Indio Pavez
Indio Pavez la memoria íntima descontruida Crear sobre el Indio Pavez es tan sorprendente como
Millaray, al ser los dos folcloristas y recopiladores,
su propia vida de “obrero del arte”: actor, músico,
tenían una comprensión de la creación que para
cantante, cuequero, rescatista de tradiciones chilo-
ellos comenzaba con un trabajo de investigación de
tas, investigador de campo y del campo, defensor
campo. Sabemos por ejemplo que fueron a Chiloé
de la cultura tradicional chilena, militante político,
y se permearon con su cultura. Desde ahí hacen
exiliado... ¿Cómo se reconstruye escénicamente
un primer levantamiento de información y desde
una historia como esa?
ahí interpretan canciones, las reviven, las reeducan con todo ese respeto. Entonces es muy bonita esa
“Es un viaje de rescate a aquello que aparente-
figura que está dentro de los cultores de las distintas
mente ha quedado encapsulado en una leyenda,
culturas tradicionales, que es distinta a la figura del
perdido en la valentía de una época, silenciado
músico per se”, dice el director Pablo Zamorano.
al pie de nuestra Cordillera, desterrado al otro lado del océano. Pero es también el desafío a
Una vez que entendieron que para el folclorista la
adentrarnos en una memoria íntima, no sólo
creación estaba indisociada de la investigación, el
construida de nostalgia sino también de un
equipo de Indio Pavez adoptó su misma metodología
presente coraje, salvaje e impertinente. Indio
partiendo con una investigación de varios meses, tal
Pavez son los estadios del tiempo y sus ciclos,
como lo hubiera hecho Héctor Pavez para construir
de aquello que nace, brota, perdura, resiste,
una obra.
culmina, muere y renace.” (Gabriela Neira, bailarina, Danza en Cruz)
“Hubo que indagar en el cuerpo chilote, en el arte prehispánico, en los cuerpos en estado ritual, en
Para el grupo ha sido crucial preguntarse cómo
las maneras de pensar en la dictadura militar, en
Héctor Pavez comprendía él mismo la creación.
las formas de mirar el arte escénico en el Chile
“Ha sido un descubrimiento precioso porque el
de la década del ‘50, en la influencia europea
Indio Pavez junto a Gabriela Pizarro y su conjunto
en la cultura y en la particular manera “india” 63
Indio Pavez
de mirar la vida. Esa inagotable multiplicidad
de archivo de Héctor y música contemporánea de
de aristas nos llevó a entender la profundidad
su nieto Ariel, encontrando así nuevas sinapsis y
que encierra un canto, un baile, el entrelace de
relaciones con el universo del folclorista. De esa
ritmo, voz, sonido, movimiento y poesía en su
disgregación de materiales, el grupo creativo re-
obra.” (Gonzalo Beltrán, bailarín, Danza en Cruz)
construye y reconfigura un sentido cargado de nuevos significantes. “Esta obra alza el nombre de
Indio Pavez no es el relato lineal del Indio Pavez; es la
un obrero del arte para reafirmar lo singular que
huella del Indio Pavez, “un entrelazado de elementos
es nuestro folclor, nuestra gente, territorio, cultura
que se destacan y enmarcan de distintas maneras
y tradición”, concluye Beltrán.
según la escena” subraya el bailarín Gonzalo Beltrán; es mirar la creación con los ojos de él, seguir sus
El resultado de esta creación es un híbrido de
pasos metodológicos, impregnarse de su legado
cuerpos, sonoridades, textos y vivencias donde lo
artístico, político y social, y contar un pedazo de
cotidiano cobra fuerza en la simpleza del gesto, en
historia del sur del mundo.
el hablarse, bailarse y cantarse, en compartir un momento en escena; como ciertamente lo fueron
Para la creación de Indio Pavez el grupo fue sepa-
los propios procesos creativos del Indio Pavez:
rando las distintas capas del artista: el discurso de
un festejo.
lo musical, la letra de los acordes, música sonando sin cuerpos y cuerpos bailando sin música, música
Escena de Indio Pavez.
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Proyecto financiado por FONDART, convocatoria 2020
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