Cristo, centro de la Catequesis
2. JESUCRISTO, CENTRO DE LA REVELACIÓN CRISTIANA “Muchas veces, y de muchas maneras, habló Dios a nuestros antepasados por boca de los profetas; en estos tiempos, que son los últimos, nos ha hablado por medio de su Hijo…” (Ver Heb 1, 1 – 2)
Dios ha querido manifestarse. Dios nos ha dado a conocer parte de los misterios de su amor. Dios, en pocas palabras, se ha “revelado”, y el centro de esta revelación se encuentra en su Hijo. En este tema veremos cómo Jesucristo, nuestro Señor, es el centro de la Historia de la Salvación y de la vida cristiana. CRISTO, CENTRO DE LA HISTORIA DE SALVACIÓN “Cuando llegó la plenitud de los tiempos, Dios envió a su propio Hijo…” (Ver Gal 4, 4) Por puro amor, Dios se ha revelado y entregado a la humanidad comunicándoles poco a poco su propio misterio con hechos y palabras. Hagamos un recuento de la historia de la salvación: La Creación Su primera manifestación amorosa fue la obra de la creación. Con nuestros primeros padres se revela como un amigo y aún después de su caída hizo con ellos una alianza y los alienta con la esperanza de la salvación. Los Patriarcas Con Noé, Dios selló una alianza con todos los seres vivos (El arcoíris: Ver Gn 9, 16) que durará para siempre. Luego, Dios elige a Abraham y renueva su Alianza con él y su descendencia de la cual se formó un pueblo al que le reveló su ley por medio de Moisés. Los Profetas
Oscar Esaú Villafuerte López