El estudio del desarrollo del niño -Judit Mecce Las neuronas se forman durante las primeras 5 meses de gestación, estas se distinguen de las otras células por no estar compactas, entre ellas ay unos huecos llamados sinapsis. Las neuronas libran una sustancia química llamada neurotransmisores. Una imagen o sonido llega a los sentidos y es transmitido a los sentidos por medio de impulso nervioso. Se dirige a una región del cerebro donde un grupo de neurona los interpreta y registran. Cuanto más frecuentemente se use el mismo grupo de neuronas por una exposición frecuente al mismo estimulo, mayores probabilidades habrá de que un sonido o imagen se guarden en la memoria a largo plazo. El desarrollo del cerebro después del nacimiento supone dos cambios: el primero, aumenta el número y la longitud de las fibras nerviosas que conectan las neuronas y las células nerviosas (dendritas y axones); el segundo cambio importante es el proceso de mielinización, en el cual las neuronas y las dendritas se recubren con una sustancia grasosa denominada mielina. Los dos hemisferios del cerebro comienzan a especializarse en sus funciones durante la pubertad y en esta época comienza a perder parte de su plasticidad. Por plasticidad entenderemos su capacidad de cambiar.
Organización y especialización del cerebro El cerebro está más especializado que el de cualquier mamífero actual. Lo divide en dos mitades una fisura profunda que crea lo que se conoce como hemisferios derecho e izquierdo. El lado izquierdo controla el lado derecho del cuerpo y el derecho procesa la información visual y espacial, lo mismo que los estímulos sociales y emotivos. Se da el nombre de laterización a la especialización de los dos hemisferios. Se piensa que se comienza a especializarse en sus funciones a los tres años de edad, y otros creen que la especialización del cerebro comienza antes del nacimiento, y otros que este proceso no termina sino en la adolescencia. La investigación reciente señala además que los hemisferios cerebrales influyen en más aspectos del funcionamiento cognoscitivo de lo que se creía antaño. Así, en la lectura el hemisferio izquierdo entiende la sintaxis y la gramática; el derecho interpreta mejor el significado y el propósito de la historia. La tecnología de exploración del cerebro ha demostrado que se transmiten impulsos eléctricos entre ambos hemisferios durante una tarea de lectura.
Desarrollo perceptual La percepción visual consiste en procesar la información sensorial por medio del cerebro. En los dos primeros años de vida se desarrollan las áreas del cerebro que interpretan la estimulación visual o auditiva. El recién nacido mira un objeto y lo sigue para no perderlo de vista. Pero su agudeza visual (nitidez de la imagen) no es igual a la del adulto. Los niños nacen legalmente ciegos, incapaces de ver más allá de 7 u 8 pulgadas de su rostro. La agudeza visual mejora muchísimo en los primeros 12 meses. La percepción de la profundidad comienza al cabo de 6 meses, cuando el niño se desplaza por su cuenta. Cuando los niños comienzan la escuela, ya pueden examinar estímulos y prestarles atención durante periodos breves. Percepción auditiva A diferencia de la visión la percepción auditiva está muy desarrollada el momento de nacer. Se cuneta con creciente evidencia de que el feto reacciona ante el sonido en el sexto o séptimo meses del desarrollo prenatal. Además de recordar sonidos familiares, el recién nacido distingue muy bien los sonidos.
Desarrollo de otros sentidos El gusto Los lactantes parecen nacer con un “gusto por lo dulce”. Prefieren los líquidos dulces a otros sabores y les disgustan los sabores ácidos y amargos. El olfato El sentido del olfato se encuentra presente en el momento del nacimiento. El recién nacido se muestra aversión por olores como el huevo podrido y el de amoniaco, sonriendo en cambio cuando se le expone al olor de los plátanos. Tacto y dolor Los recién nacidos reaccionan al contacto físico. Comenzaran a succionar si les tocamos la mejilla. Esta respuesta es un reflejo en automático y uno de varios que permiten interactuar con el ambiente. Los investigadores creen que es importante el tacto para el desarrollo del cerebro. La investigación ha mostrado que, cuando se les da masajes suaves varias veces al día, tienden a crecer más rápido que quien no recibe. El apego es el proceso por el cual el niño crea vínculos firmes y afectuosos con los cuidadores.