CICLO 2015
SE
S A C I T Í L O XOP
arte, sexo y política
Presentación del trabajo 2015 1
“
Bajo la apariencia de una graciosa neutralidad, en la Jovencita se ofrece a nuestra mirada el más temible de los dispositivos políticos de opresión.” Tiqqun Primeros materiales para una teoría de la Jovencita.
paternal arte y política
Una plataforma artístico - política para habitar el desborde paternal arte y política Romper el cerco del género para dar espacio al desborde. Reflexionar buscando tensionar, fisurar, des-naturalizar aquello que parece dado, que resulta tan incuestionable como asfixiante cuando de experiencias sexo-genéricas hablamos. Accionar desde el desborde de nuestros cuerpos, para habitar el incómodo -pero necesario- espacio de las preguntas. En esta 6° edición del ciclo PAPO nos propusimos dar cauce a un espacio de agitación, producción y discusión en torno al cruce arte, sexo y política, atendiendo al contexto social y cultural del 2015, en el que cobró resonancia macropolítica y mediática cierto orden de problemáticas referidas a los géneros y las sexualidades. En el marco de múltiples casos de femicidios y violencia de género , que tuvieron lugar en la agenda mediática (con tratamientos que no estuvieron eximidos de perspectivas diferenciales en torno a la clase social) y que llegaron a ser sintetizadas en el reclamo masivo de #NiUnaMenos; consideramos de gran pertinencia la apertura de una plataforma artístico-política donde se abordarán discusiones en torno al cruce entre prácticas artísticas, políticas sexuales y espacio público. Gran parte del espectro de la creciente visibilización de violencias en torno a políticas vinculadas a la dimensión sexo-genérica no tie-
nen únicamente vinculación con el daño físico o psicológico de las mujeres (aquello que la biología considera como tal) sino también en torno de las minorías sexuales (LGBT), el colectivo trans, travesti, intersex, y las minorías eróticas, es decir, todo aquello que se desvíe (en mayor o menor medida, con mayores o menores privilegios) de las formas que el poder imprime en el orden de los cuerpos. En este sentido, consideramos que durante el año pasado tuvo gran relevancia la dimensión política ligada al orden sexualidad como una economía, y se pusieron en evidencia las formas en cuanto a cómo se regulan, jerarquizan, nombran y/o invisibilizan las diferentes maneras de experimentar los géneros, las corporalidades y las sexualidades en la esfera pública. Pero también se hizo evidente la potencialidad de los cuerpos para desbordar estas regulaciones sobre el sexo y los mandatos de género que vienen de la mano. Una potencia crítica que pone en jaque lo normativo, abriendo el juego a expresiones, experiencias y existencias de género libres, lúdicas y múltiples. Teniendo como contexto este escenario y estas intuiciones, desde PAPO se eligió abordar el tema Sexopolíticas durante todo un año, atendiendo a estas cuestiones: géneros/cuerpos/sexualidades, disidencias o desobediencias sexuales, sexopolítica, trazado urbano, familia/lazos sexoafectivos, sexo y trabajo, violencia de género, esfera 3
pública/esfera privada, resistencia, memoria y archivo, cartografías sexuadas o sentimentales, afectaciones colectivas, pedagogías sexo-genéricas. Para ingresar en las zonas problemáticas y de tensión de estos temas elegimos trabajar desde el reflexión-acción en espacio público como forma de intervenir políticamente desde el arte en el territorio del barrio de La Paternal. Para ello realizamos un ciclo de formación/seguimiento de proyecto/acción en el espacio público integrado por artistas seleccionados con los que trabajamos para generar estrategias de intervención que permitieran poner de relieve problemáticas en torno a la dimensión de las políticas sexuales, evidenciando las formas en que el arte puede poner en tensión, friccionar o desmontar las relaciones entre la política, la producción de discursos, el poder y la regulación sexo-genérica o las sexualidades. Además generamos mesas debate con activistas y artistas, organizamos clases con investigadores, tuvimos encuentros de análisis de obras y realizamos muestras con obras propias e invitadas. En suma, PAPO 2015 - Sexopolíticas buscó intervenir para alimentar la resonancia y el desborde. Accionar para quebrar los sentidos instituidos. Interrumpir para visibilizar otras experiencias de los cuerpos, las sexualidades y los deseos. Inventar nuevas estrategias de resistencia sexopolítica, desde el arte y en el barrio.
Flyer de la convocatoria
Equipo PAPO Arte y Política 2015 Nico Hache - Julia Cossani - Romina Cariola - Fermín Acosta - Laura Milano
Desde la praxis La Paternal Espacio Proyecto / LPEP es un espacio concebido y creado para dar lugar a múltiples proyectos con un sólo propósito: nutrir el diálogo desde la praxis. El diálogo entre artistas, disciplinas y fundamentalmente entre prácticas contemporáneas y otros campos y saberes por fuera del campo del arte. LPEP es proceso, es experimentación, es método que surge de las ganas del deseo. LPEP es plataforma para el sueño y el soñador despierto. Para aquel que atisba lo imposible y necesita una contención y una confirmación: los sueños fundan épocas. Este experimentum tiene como fundamento concebir a la cultura como un proceso de aprendizaje continuo y crítico. Es decir, desaprender el entramado de creencias que han puesto al artista por encima al resto de los oficios y profesiones, y al arte como misterio por fuera del misterio de la vida. Proponemos un aprendizaje que va desde lo individual hacia lo colectivo y desde lo colectivo hacia lo comunitario. En este intercambio de intensidades, saberes y no-saberes que ya lleva más de seis años de vida, crecieron cuatro programas diferentes; cada uno en relación a un tema, campo tópico, distinto. Surgidos desde el área de “Investigación y Producción” de LPEP (*), estos programas actúan como ventanas de oportunidad para ejercitar las propias capacidades como artistas, gestores, amigos, curiosos y como colectivo multiverso. Cada uno (PAPO - Paternal Arte y Política, SirveVerse - Arte y Tecnología, LPR - La Paternal Recicla y Conjugar Ciudad - Arte y Derechos) está cruzado por las mismas preguntas y
va ensayando sus propias respuestas, según su especificidad: ¿qué incidencia tiene nuestro hacer desde el arte en los contextos cercanos?, ¿qué conocimientos desarrollamos al dialogar con otros saberes?, ¿qué queda de este intento? PAPO - Paternal Arte y Política entiende a la política como ese diálogo de múltiples posibilidades entre el individuo y la polis. Práctica año tras año un ensayo doble. Por una parte, pone en situación de intercambio cuerpo a cuerpo a artistas de diferentes disciplinas en un territorio concreto y tangible: el barrio de La Paternal. Por otro lado, esta intervención sobre y desde el barrio está signada por un eje temático que focaliza y dispara la reflexión teórica, la indagación y la problematización de aspectos socioculturales específicos. Clínica de obra, laboratorios de procesos, incubadora de proyectos efímeros, sala de observación, despacho de tácticas, almacén de encuentros. PAPO es todo eso, ni mucho más, ni mucho menos. A lo largo de estos seis años han pasado más de cincuenta artistas y algunas/os de ellas/os se fueron sumando al equipo de coordinación del programa como una forma de profundizar modos de intervención urbana más sistémicos. Guiados por la intención de penetrar aún más en los diversos escenarios de la ciudad para promover una conciencia crítica y propositiva en donde las sensibilidades artísticas se pongan de manifiesto en la (re)construcción del presente.
(*) LPEP consta de tres áreas: “Residencia de Arte” , “Investigación y Producción” y “Exhibición”.
Franc Paredes Coordinador general de La Paternal Espacio Proyecto 5
Mesas redondas Debates para la construcciรณn de pensamientos colectivos
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Estrategias para intervenir lo Público. Experiencias en prácticas en contexto y espacio público.
Aún antes de definir el tema en torno al cual trabajaría durante 2015, PAPO – Paternal Arte y Política organizó en su sede de La Paternal la mesa “Estrategias para intervenir lo público. Experiencias en prácticas en contexto y espacio público”. La fortuita presencia simultánea en Buenos Aires de tres artistas que trabajan en el exterior, y la intención de abrir el año de trabajo con un problema transversal al programa, confluyeron para dar origen a la indagación sobre posibles estrategias de intervención de lo público en diferentes contextos y desde diversos lenguajes.
rial y sonoramente estimulados por siete performers en un espacio cerrado. Elias Boulé2, por su parte, presentó un proyecto de investigación fotográfica que busca indagar en las relaciones entre urbanismo y población. A partir de una deriva visual por distintos países asiáticos, Elias retrata y pone en serie fragmentos de múltiples modos posibles de habitar el espacio público, de relacionarse y de practicar usos del mobiliario urbano desviados de las normas. En tercera instancia, Diego Rotman3 comenzó su participación introduciendo el colectivo Sala-Manca y el espacio de arte Mamuta, de Jerusalem, para luego presentar su proyecto Eternal Sukkah. Cada año la religión judía celebra el Sucot, festividad de origen bíblico que recuerda el largo exilio en el desierto, en la que se construyen cabañas precarias para practicar el ayuno y la oración durante una semana. En Eternal Sukkah Diego compró a la comunidad beduina Jahalin, desplazada por el Estado de Israel y refugiada en el desierto, una vivienda precaria construida con chapa y madera. En ocasión del Sucot de 2014, el artista vendió al tradicional Museo de Israel una obra consistente en la instalación de una cabaña de oración, y tras la aceptación por parte de la institución reconstruyó en su interior la vivienda beduina.
A sala llena, la jornada abrió con una introducción de PAPO a cargo de los moderadores de la mesa, Renato Fumero y Nico Hache, seguida de una presentación de los artistas participantes. Malena Beer1 abrió la mesa presentando dos trabajos performáticos que, de distintas maneras, tensionan la arquitectura de los espacios y el lugar del público. En Un-Visible, Malena guía por el espacio público a un participante que, con los ojos cerrados, se entrega a la deriva. En In-Between diez participantes, también a ojos cerrados, son senso-
Luego de las exposiciones, los moderadores de la mesa propusieron algunas líneas de debate en forma de preguntas. ¿Dónde radica la dimensión estética de estos trabajos? ¿En qué punto se vuelve interesante jugar en un terreno fronterizo donde los proyectos podrían devenir o ser interpretados o ser apropiados por prácticas no artísticas? ¿Es importante que el proyecto se referencie como artístico? ¿Por qué? ¿Cuál es el objetivo de intervenir en el espacio público? ¿Qué idea de espacio público suponen estos
15.04.2015
Participantes: Diego Rotman (Israel) - Malena Beer (Argentina) Elias Boulé (Suiza)
proyectos? Los interrogantes promovieron un debate rico e intenso, y el público participó activamente haciendo preguntas a los artistas. Malena Beer planteó que sus trabajos no buscan intervenir sólo el espacio público sino también, y sobre todo, a los co-participantes y a los ocasionales transeúntes, y destacó en este sentido la reapropiabilidad de sus performances, que en ocasiones fueron continuadas por el público aún en ausencia de los performers. Elias, por su parte, propuso un diálogo de su propio trabajo con el de Malena a partir de la idea de que ambos, aunque desde lenguajes distintos, producen sentido a partir de la experiencia vivida al transitar y habitar, permanente o precariamente, un determinado espacio público. Por último Diego destacó el uso del marco institucional del arte para analogar la persecución de los judíos con la persecución de los palestinos (representado en su proyecto en la comunidad beduina) y la estrategia de auratizar -y salvaguardar- la vivienda beduina en el Museo de Israel dotándola de una dimensión religiosa.
1. Malena Beer, artista, coreógrafa y socióloga, desarrolla un trabajo creativo que interroga y actúa sobre los condicionamientos del cuerpo y la percepción de la realidad. Sus proyectos han sido presentados en el Palais de Tokyo (Paris), Wiels (Bruselas), Espace Louis Vuitton (Paris), entre muchos otros. 2. Elias Boulé es arquitecto y carpintero, y fundador de la asociación “Largescalestudios”, plataforma de intercambio y desarrollo independiente dedicada a la investigación en torno al espacio de vida del ser humano y el futuro de las ciudades, los derechos humanos y el medio ambiente. 3. Diego Rotman es artista, curador e investigador. Integra el colectivo Sala-Manca y es co-director del centro de arte Mamuta, ambos en Jerusalem, Israel. Actualmente es becario del centro de investigación “Daat Hamakom” (Universidad Hebrea de Jerusalem).
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Participantes: Nicolás Cuello - Magdalena Pagano - Maia Venturini
(Des)Bordando: experiencias en el cruce arte/sexo/política 03.10.2015
Este evento constituyó la primera instancia del ciclo PAPO Sexopolíticas en que participaron artistas y académicos invitados. La actividad central del evento fue la mesa-debate “(Des)bordando: experiencias en el cruce arte/sexo/política”, que contó con la presencia de artistas e investigadores que compartieron diferentes experiencias artísticas/activistas. Nicolás Cuello (investigador y profesor de Historia de las Artes de la Universidad Nacional de La Plata) revisó la experiencia de una serie de grupos de activismo artístico y de acciones performáticas que durante el contexto inmediato a la crisis del 2001, pusieron en tensión la dimensión sexual del cuerpo, la producción generizada de subjetividades, agitando formas de resistencia imaginativas a la precariedad capitalista. Por su parte, Maia Venturini presentó su experiencia como dibujante lesbiana a través de sus historietas “Escenas de la
vida lésbica”. Por último, Magdalena Pagano, integrante de Mujeres Públicas, compartió el trabajo de este colectivo de arte feminista en el espacio público a partir de su llegada a las instituciones del arte en Buenos Aires y Madrid. Por último, el evento incluyó la presentación de la artista chilena Elizabeth Neira, quien realizó una performance en la cual problematizó las marcas en los cuerpos cruzados por la coyuntura política en el marco de la dictadura de Augusto Pinochet en Chile.
1 Para acceder al video-registro de la performance, ingresar a: https://vimeo.com/143609958 (Edición: Eli Neira).
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Lo dicho en (Des)Bordando: experiencias en el cruce arte/sexo/política Con la finalidad de contribuir a la divulgación y circulación de saberes en torno al cruce arte/política/sexo, compartimos a continuación algunos fragmentos de las presentaciones realizadas por los invitad*s a la mesa redonda. Las presentaciones completas podrán ser revisadas y descargadas en: http://bit.ly/20E9YEP
Nicolás Cuello Mi trabajo se centra específicamente en prácticas colectivas de ocupación del espacio público, generalmente ligadas a ciertos conflictos sociales. En primer lugar, quisiera compartir la experiencia de un grupo de córdoba en el año 1997 como resultado de una serie de encuentros que organizaban Teresa Volco con Juan Carlos Romero en una Universidad de Arte de Córdoba. Un grupo de personas se reunieron en ese taller, un taller que trabajaba sobre los vínculos entre arte y política. No era un tema tan en boga como lo es actualmente. Este taller fue un taller que duró dos o tres meses y terminaba con una actividad que era seleccionada o diagramada en el conjunto de personas que habían transitado esta experiencia. Este grupo de personas, que son todas mujeres, deciden hacer esta acción en Septiembre del año 1997. Constó de un solo día, en el que empezaron muy temprano con unas bolsas negras de consorcio. Fueron una plaza conformando una suerte de procesión, de ocupación, de deriva programada por la ciudad ritualizada. Eran este conjunto de perso-
nas acompañadas por una persona que iba tocando un tamborcito marcando el ritmo del trazo. Constó de un recorrido por distintos lugares de la ciudad de Córdoba - instituciones, locales políticos, iglesias y demás- con todas estas mujeres vestidas de negro y con estas bolsas negras, chalecos, casi como ponchos, y con una red sobre la cabeza. En sus espaldas estaba dibujado y puede leerse la frase “privatizado”. Me interesaba recuperar esta acción básicamente porque en algún sentido la obra de este grupo ( que después de este encuentro pasó a llamarse “Costuras Urbanas” y trabajó del 1997 hasta el año 2000) es una experiencia pensada en una genealogía que trabaja las reflexiones del arte colectivo en contextos de crisis. De todas las veces que he visto esta experiencia retrospectiva sobre los conflictos del 2001, siento y veo que está perdida la condición sexogenérica de cuáles son esos cuerpos que están marchan-
un poquito más vibrante cuando se puede pensar que no solamente se está hablando de la privatización de la instituciones públicas. No solo se habla de la privatización de los recursos, sino que también se está poniendo en cuestión que esos modos de profundización de la precariedad neoliberal funcionan de manera diferenciada con cuerpos que en el espacio público arrastran una otra dimensión de complejidad que es la obligatoriedad por su condición de mujeres de ser privatizados. Es una posibilidad de cómo la imagen -cuando puede ser reconocida o pensada o interpretada desde otros enclaves- multiplica su sentido incómodo.
do, de esos cuerpos que están poniendo en juego y en tensión la condición de lo privado y la condición de lo público. La obra, sobre lo que discutía en su interior, sí tenía que ver con la situación, o cuál era este contexto en el que estaba pensada esta intervención, que obviamente era una debacle neoliberal que tuvo su epicentro en el 2001. Verdaderamente es importante para mí poder reconocer que incluso en la propia producción de este tipo de imágenes hay sentidos que están latentes y pueden hacer vibrar con un mayor grado de intensidad a pesar de la voz de sus propias productoras. Me parece interesante -volviendo a ese vínculo entre arte, política y sexualidad- cómo la condición o las dimensiones de análisis que pueden otorgar una reflexión crítica sobre las condiciones de producción de lo sexual y lo genérico permiten una otra mirada sobre la crisis, sobre cómo se construye la diferencia opresiva que produce la precariedad neoliberal y me parece que además la imagen cobra un sentido
En segundo lugar, quiero recuperar una acción del grupo Fugitivas del desierto/Trolas del desierto. Es un grupo de activistas lesbianas, feministas, con una fuerte producción y concentración sobre modos de intervención en el espacio público a través de dispositivos poéticos. Fue un grupo que trabajó desde el 2004 al 2008. Esta última acción se hizo en Buenos Aires, si bien el grupo era de Neuquén y todas sus formas de intervención tuvieron que ver con la lesbofobia neuquina, esta acción se realizó en la marcha del orgullo y fue también una caminata de Plaza de Mayo al congreso. Se llama “La onda lesbiana”. Básicamente es una pregunta sobre los procesos de normalización y asimilación que está atravesando el movimiento LGBT y es una proclama que se pregunta a sí misma sobre la condición de lo sociopolítico en un contexto en que avanzaba de una manera violenta la centralidad de la discusión del matrimonio igualitario. La acción constaba de sus integrantes caminando desde plaza de mayo al congreso con unas ondas con las cuales tiraban hacia arriba y sobre todo en puertas del congreso, con estos proyectiles con telgopor con inscripciones como “soy pobre y torta”, “soy una maestra
Nicolás Cuello (1989) es Profesor de Historia de las Artes, se desempeña como Becario de investigación en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), donde actualmente finaliza sus estudios de posgrado en la Maestría de Estética y Teorías de las Artes, y como docente en la Universidad Nacional de Las Artes (UNA) en Buenos Aires. Es miembro del Laboratorio de Investigación y Documentación en Prácticas Artísticas Contemporáneas y Modos de Acción Política en América Latina, donde coordina junto a Morgan Disalvo el “Grupo de Trabajo Políticas Visuales de los Afectos”, y es parte del proyecto de investigación “Micropolíticas de la desobediencia sexual en el arte argentino contemporáneo”. Además, se desempeña como secretario de la Cátedra Libre “Prácticas Artísticas y Políticas Sexuales” también en la Universidad Nacional de La Plata. Su trabajo como investigador se centra en la intersección de prácticas artísticas, políticas sexuales, representaciones críticas de los cuerpos, y perspectivas feministas/postfeministas sobre las crisis neoliberal del 2001 en Argentina.
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tortillera”, “la heterosexualidad es un régimen político” “mercado rosa es disciplinamiento”: eran ocho inscripciones, hay una serie más. También se juega con esta inscripción, la hache se ve, está en otro lugar. Según las palabras de quienes fueron entrevistadas de este grupo, aparentemente en esta época estaba de onda ser lesbiana, entonces aparecieron en los medios de comunicación formas muy normadas, muy edulcoradas de lo que es posible del lesbianismo en el imaginario social. Esta forma de intervención, la posibilidad de esta puesta del cuerpo y esta forma de intervención en el espacio público y en el interior del movimiento lgbt también es algo que yo reconozco en este conjunto de imágenes que permiten intervenir en los procesos crecientes de asimilación de las sexualidades no hegemónicas. A continuación, recupero una de las intervenciones del grupo Serigrafistas Queer (SQ) de hace tres años. SQ una plataforma de producción colectiva, una suerte de espacio que surge, primero por la propuesta de Mariela Scafati pero en realidad en referencia a una experiencia más compleja y con una gran cantidad de participantes que fue el Taller Popular de Serigrafía (TPS) del año 2003; una experiencia fundamental para entender los procesos de conflicto, explosivos, durante el año 2001. A partir del año 2007, Mariela ya desvinculada del taller replica esta idea de la puesta en marcha de aparatos de construcción de estampas serigráficas en espacios públicos a través del diseño colectivo de consignas. Lo que me interesaba de esta forma de intervención en el espacio público, verdaderamente, es una otra forma de grupalidad donde los encuentros funcionaban como discusión sobre lo político,y, en
relación a eso, cuáles son las formas en las que después las estampas van a pronunciar el propio cuerpo. Hay algo muy interesante sobre lo que implica ponerse y sacarse una remera, identificarse y desidentificarse, producir y no producir colectividad, armar y desarmar colectividad. Agrega cierto grado de condición lúdica a las formas de identificación de lo sexual y lo genérico. Los encuentros de serigrafistas queer no funcionan solamente estampando remeras sino también creando carteles, banderas y demás, tal cual el taller popular de serigrafía. Por último, comparto la intervención Proyecto Endo, impulsado por el colectivo CuerpoPuerco y Acento Frenético, ambos de La Plata. Este proyecto duró bastante tiempo en el transcurso del año 2012. En algún sentido empezaba preguntándose por la condición de cómo un cuerpo construye marcos de inteligibilidad. La producción
del afiche constó de sesiones internas de retratos, retratos que tenían este tipo de encuadre. A través de una estrategia de postproducción de las imágenes realizaron una yuxtaposición de todas las personas que habían participado e hicieron este afiche. Un afiche pequeño -60x40- que luego se multiplicó y se estampó en las ciudades de Buenos Aires, La plata, Santa fé, La pampa y Chile. Es una acción super opaca en relación a lo que propone y ese ese el vínculo, la potencia, una otra operación, una otra estrategia en la que pueden colaborar las imágenes. Hablar, explicitar, intervenir e interrumpir cuáles son los procesos de inteligibilidad de la corporalidad, qué es lo que constituye, hace legible un cuerpo como masculino o femenino. En el video que se produjo luego de la intervención se retrata el momento en el pasa que hay un transeúnte al que le preguntan qué es lo que ve y dice: “no sé si es un hombre o una mujer, para mi es un cuerpo muerto”. Entonces, es interesante ese efecto de ansiedad que le produce a esa persona, no poder leer un cuerpo que quizás tenga otra forma de la entendida, y directamentente sentenciar con la no existencia.
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Maia Venturini Cuando empecé con la historieta hacía dos meses que estaba dibujando. Los primeros dibujos eran muy rudimentarios. Los dibujaba a lápiz o con una birome arriba, los escaneaba y los mandaba a facebook. En realidad, al principio, los había hecho para divertirme con las otras tortas. Tenía intenciones de ilustrar situaciones que vivimos las tortas. Primero eran chistes internos, situaciones jocosas. Lo fui subiendo a Facebook, las amigas los empezaron a compartir y fueron tomando vuelo propio. Después me fui metiendo con situaciones que narran cómo las tortas o cierto tipo de tortas están en la misma cena con la novia, la ex de la novia, la amante de la novia y está todo bien. Por supuesto que en todos los grupos de lesbianas no es que sea así. Una chica se enojó porque dijo: “eh, pero las lesbianas no somos así. Después por gente como vos que hacés esta historieta dicen
que las lesbianas somos promiscuas”. Yo le contesté: “bueno mirá, yo sí soy así. Si a vos no te gusta podés hacer tu propia historieta de cómo son las lesbianas con las que interactúas vos. Yo con las que interactúo son así. Estas son mis lesbianas, qué se yo”. Para contestarle a esa chica hice un dibujo que dice eso. No es que habla de todas las lesbianas en general. Yo no creo que sea posible hablar del universo de las lesbianas, sino que cada una habla desde su perspectiva particular, que no es la experiencia general. Es mi experiencia, además yo tampoco quiero hablar de todas las lesbianas. Porque las tortas con las que interactúo yo, son tortas feministas, son tortas militantes lgtb. No son todas las tortas del mundo. Seguro que está la torta que en un boliche te dice “eh, le miraste las tetas a mi novia” y te quiere cagar a trompadas. Yo con esa torta no tengo mucho que ver. Mi cómic, mi historieta, no habla de ellas. Habla de mí entorno lésbico.
A raíz de esta interacción con el mundo hetero se me ocurrió hacer una sección dentro de la historieta que se llama “heterobestialidades”, que son frases o preguntas que nos hacen los heteros, a veces sin intención maligna y a veces con. Las hacen con total impunidad, así como si nada, y creen que nosotras se las tenemos que contestar. También hubo gente que se enojó y se preguntó por qué hablar de heterobestialidades. Yo dije: “Bueno, bancatelá, de repente estás vos del otro lado del chiste”. A raíz del suceso que tuvimos hace un año, cuando echaron de la pizzería Kentucky a una pareja de tortas amigas, decidimos armar una actividad.
Después me fui metiendo en hablar del mundo hetero, que es básicamente donde vivimos las tortas. Los problemas derivados en el mundo heterosexual. Qué pasa cuando las tortas salimos del clóset con nuestras madres y padres, con nuestros amigos, y cosas así. Fui haciendo dibujos de una chica que es una nenita, se llama Martina. Nadie sabe si Martina va a ser una torta o no. Martina es una hija de dos lesbianas y seguro no tiene una educación heteronormativa en su casa. Después va a la escuela y se encuentra con un mundo heteronormativo, entonces tiene problemas. Porque si bien en su casa no la criaron así, se encuentra con el mundo exterior que sí es así. 17
Dijimos: “a ustedes las echaron por besarse, vamos todas a besarnos al local de ellos”. Entonces hice una historieta donde contaba cómo se armó la actividad, qué pasó y también cómo hubo cierto cuidado en el armado de la actividad para que no fuera un desbande. De repente se empezó a sumar gente, yo no sé cuánta gente había pero era mucha, se podía desbandar. Dijimos:”No nos metamos todos en el local, vayamos a la vereda y hagamos una fiesta”. Finalmente lo que pasó fue que la empresa terminó pidiendo disculpas.
En febrero desarrollé la historia de La Pepa Gaitán, que fue una torta que vivía en un barrio popular de Córdoba y que fue asesinada por el padrastro de su novia en 2010. Quería contar más o menos quién era La Pepa y su historia. No sólo la historia del asesinato sino también la serie de violencias previas -de menor intensidad quizás- y cotidianas que vivió. Este trabajo fue bastante intenso, tenía un mes para hacerlo. Fueron muchas horas de trabajo por día para llegar al 7 de marzo. Las imprimí y las llevé a la plaza donde se hacían las actividades por la visibilidad lésbica y también se proyectaron en Córdoba.
* Maia Venturini Szarykalo, dibujante lesbiana. Publica su comic “escenas de la vida lésbica” desde mayo de 2014. Sus tiras fueron publicadas en La Izquierda Diario entre octubre y diciembre de 2014. Participó en el calendario para la difusión de los derechos de las trabajadoras del hogar de la Red Nosotras en el Mundo en octubre de 2014. Su historieta “Justicia es que no vuelva a pasar, sobre la vida y el asesinato de la Pepa Gaitán” fue expuesta en las actividades correspondientes al día de la visibilidad lésbica en Buenos Aires y Córdoba (7 de marzo de 2015), y en las jornada contra la homolesbotransfobia en la Universidad de La Plata (mayo de 2015). Actualmente es alumna de la escuela de historieta de Charlie Casares.
Web: http://maiaventurini.blogspot.com.ar/
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Magdalena Pagano Soy parte de un grupo de activismo artístico-político que se llama Mujeres Públicas; concretamente, hacemos activismo visual. Lo que hacemos son prácticas artístico-políticas en el espacio público. Tengo dos compañeras con las que trabajamos juntas desde el año 2003, ya llevamos doce años de trabajo sin parar. Ante esta invitación del equipo PAPO, me aparecieron preguntas, entonces las traigo y las pongo en discusión. Me pregunto acerca de la necesidad de salir a la calle o la elección de salir a la calle. No sé si puedo entender la elección de salir a la calle. No conozco eso. Nosotras salimos a la calle por una necesidad absoluta. El gesto interventivo callejero tiene que ver con una coyuntura política, con una impotencia, con una cosa que te lleva a salir. Elegir si voy a estar en la galería o en la calle, esa disyuntiva me parece un poco extraña. La gente de mi edad que venimos trabajando en el espacio público empezamos en el año ´98, en pleno neoliberalismo y donde había una crisis muy profunda en la representación política. Salíamos a la calle para discutir con un Estado que odiábamos, con un Estado que no nos daba ninguna respuesta, que no estábamos de acuerdo. De ese contexto salimos. Me pregunto hoy qué pasa, ese Estado ya no es tan así. Hay juventudes militando sin parar. De repente tenés una movilización como la del #Niunamenos. Nosotras habíamos pensado hacer una acción ahí
y no la hicimos. Yo creo que la acción en el espacio público tiene que ver con salir a decir algo que hay que decir, pero si lo está diciendo un montón de gente, ¿qué vas a salir a decir si ya está?. Entonces la pregunta que me estoy haciendo es: ¿Cómo y para qué salimos hoy a la calle? ¿tenemos que volver a salir? ¿a decir qué? ¿qué es lo que no se está diciendo hoy? En ese sentido, creo que hay dos cosas que me parecen son interesantes para pensar desde el activismo-artístico. Por un lado, la cuestión del pseudofeminismo. Tenemos una presidenta mujer, tenemos #Niunamenos, pero no tenemos el aborto legalizado al tiempo que sí tenemos al Papa Francisco allá arriba. Me parece que ahí hay un nodo que me parece se puede seguir trabajando: la del aborto. Otra cosa que me está preocupando bastante últimamente son los procesos de normalización que venimos sufriendo - desde la disidencia sexual- a partir de la ley de matrimonio igualitario; y que tiene como paradigma este modo de ser gay y lesbiana tan limpio, correcto y armadito. En esta cuestión de cómo yo pienso la calle, como una necesidad, pienso que estas serían necesidades para salir nuevamente. Seguir peleando por esas cosas. Hablar de un modo de la disidencia sexual, de la sexualidad en general que no sea ese que ha dejado tantas formas de existencia afuera.
Nosotras hemos trabajado, básicamente, el afiche, la gráfica en la calle. No desde un lugar performático: la salida a pegar no es una salida convocada ni es una salida invitada ni facebookeada. Es una salida que se sale, se hace eso y se vuelve uno a la casa. Y pasan cosas que una no sabe que pasan. El primer afiche y salimos a pegar fue en la marcha del 08 de marzo de 2003 por el Día de la Mujer. Nosotras ubicamos las bases visuales de lo que íbamos a hacer después: una gráfica muy sencilla, muy contundente en lo que estába-
mos diciendo, sin mucho diseño, de una impresión muy barata. Este afiche habla de la clandestinidad del aborto, de la muerte por aborto clandestino. Y también maneja cierto nivel de opacidad; de algo que se dice pero no se termina de decir. Eso puede generar cierta ansiedad. Básicamente esta es la modalidad: salir a pegar donde se pueda, del modo que se pueda. Y también darlo. Las gráficas y pegadas no las hacemos sólo por una vez. En ese sentido, creo que nosotras no somos un grupo de intervención. Porque si lo fuéramos, haríamos investigaciones sobre dónde intervenimos. Nosotras salimos a pegar donde queda cómodo: cerca de la casa, donde hay canillas para pegar, etc. Hay algo muy del dejar ser del objeto, la cosa está en la calle y la gente la ve y no sabe quién la hizo porque no tiene firma alguna. Sin demasiado control. A veces se encuentra algún lugar donde se puede jugar con lo que dice el afiche y lo que pasa atrás, eso puede producir unos sentidos. Nosotras hemos trabajado mucho el tema del aborto en relación al Estado, a las muertes de mujeres, a la iglesia. Lo hemos tratado de
* Mujeres públicas es un colectivo de artistas feministas argentinas. Comenzaron su trabajo en 2003, con una primera intervención artística en el espacio público realizada en la manifestación del 08 de marzo -Día Internacional de la Mujer Trabajadora- realizada en la ciudad de Buenos Aires. Desde ese momento, han intervenido las calles -desde múltiples lenguajes como el afiche, el mapeo, la creación de objetos corrientes como estampitas y cajas de fósforos- para criticar la penalización del aborto, la heteronormatividad y el poder de la Iglesia católica. Han realizado intervenciones artísticas en los Encuentro Nacional de Mujeres y algunas Marchas del Orgullo LGTTBI, realizadas en Argentina. Expusieron parte de sus trabajos de intervención en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid, 2014), Fundación PROA (Buenos Aires, 2014), Centro Cultural Borges (Buenos Aires, 2013), Casa Nacional del Bicentenario (Buenos Aires, 2010), Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti (Buenos Aires, 2010), Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini,(Buenos Aires, 2009), Foro Social Europeo ( Malmö, Suecia 2008), entre otros espacios e instituciones.
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Una ya se puede ir a dormir la siesta, si logra que algo que produjo en un momento se convierta en una herramienta para un movimiento.
trabajar desde todas las posibilidades que hemos encontrado hasta ahora. Otra de las piezas que realizamos es una pequeña estampita con la virgen María. Detrás tiene una oración por el derecho al aborto que emula las oraciones comunes. Lo que fue interesante de esta pieza es que nosotras primero las salimos a repartir a la calle, íbamos a las puertas de los colegios o a esquinas céntricas como Florida y Córdoba. Eso fue muy difícil. Fue la única vez que tuvimos una dificultad para interactuar con la calle. Algunas personas agarraron la estampita, hacía una cuadra y te volvía a cagar a palos. Otras no las agarraron porque no tenían ganas. Entonces empezamos a dejarla en lugares aleatorios: en los colectivos, en el cine. Andar con montones de estampitas y dejarlas en lugares. En algunas ocasiones lo que hicimos fue dejarlas en iglesias. Ahí dejábamos pilas de estampitas y cuando la gente iba a rezar se las encontraba. Desde 2004 la oración se lee o se canta en los Encuentros Nacionales de Mujeres cuando van a hacer el escrache. Creo que esa pieza fue súper reapropiada. Me regocijo en pensar que es parte del movimiento de mujeres y del feminismo. Mucha gente no tienen la más puta idea de que yo escribí ese texto y tampoco importa demasiado. Hay algo de lo intervencionista que es interesante: que tu obra se pierda. Como ha pasado con el dibujo de “juicio y castigo” del GAC.
Otro objeto básico que realizamos es una cajita de fósforo con dos stickers: de un lado está el dibujito de una iglesia en llamas, y del otro una frase muy conocida del anarquismo que es “la única iglesia que ilumina es la que arde”. Lo único que nosotras le agregamos fue el “contribuya”. Esto lo hemos repartido en muchísimo lugares. También está en la página, entonces cualquiera se imprime las planchas, lo recorta y lo puede repartir y usar. Todo lo que nosotras hacemos está vinculado con la producción de bajos recursos. Por dos motivos: en principio porque nosotras no tenemos los recursos, pero en segundo lugar para que se pueda retomar. Creo que también eso es importante a la hora de repensar la intervención artístico-política.
Vos podés producir algo que otro con un poco de manualidad lo puede hacer suyo. Por último, quería hablar de un afiche que hicimos en 2009. Es un objeto que fue conflictivo para nosotras también. La idea es jugar con la relación y complicidad del Estado en la no legalización del aborto; y en su responsabilidad por las muertes de las mujeres. Uno de los slogans de la reelección de Cristina Fernández de Kirchner era “vamos por más”, así que tomamos eso y jugamos esa frase. Luego hicimos esta intervención otra dos veces: una en la apertura del Encuentro Nacional de Mujeres (2005) en Mendoza y otra en la Marcha del Orgullo LGTTTBI del mismo año. La intervención consistía en una bandera de 5 o 6 metros que decía “las lesbianas ya no jugamos a
las escondidas, ahora jugamos a la mancha”. Y tirábamos tres pelotas naranjas como de gimnasio que decían “la mancha lesbiana te toca”. La propuesta era jugar con esta idea de la lesbiandad como una peste y la posibilidad de contagio. Era muy divertido porque los nenes jugaban, le preguntaban a la mamá qué era ser lesbiana y las madres no sabían qué hacer. Esta intervención fue una de las pocas veces que nosotras trabajamos un dispositivo que preveía una participación del otro, porque nuestro trabajo siempre tuvo como característica el hecho de ser una cuestión absolutamente distanciada, sin lo participativo. Por último, me voy a referir a un proyecto que yo quiero mucho. Lo hemos hecho en distintos formatos a lo largo de los años. Eran preguntas que lo único que hacían era cambiar el lugar de heterosexual por homosexual. Preguntaban ¿es usted heterosexual? ¿lo saben en su trabajo?, “? “¿teme que lo despidan?”, “¿qué opina de que los heterosexuales adopten?”, “¿qué haría si su hija le dijera que es heterosexual?” Varias personas - con buena onda- que nos vieron pegar esos afiches nos decían “se equivocaron”. Pero con buena onda. Estas mismas preguntas se convirtieron en bandas, hacíamos una línea larguísima, las hemos exhibido de diversas maneras, en plan muestra. La hicimos también en formato encuesta y le pusimos “Comunidad Heterosexual Argentina”. Los domingos por la tarde íbamos por el Lola Mora, que está toda la familia con el picnic y les dábamos la encuesta. La gente la llenaba, no la llenaba, se reía. Yo vi gente que la empezaba a llenar y de repente se daba cuenta de que no tenía sentido.
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Formación / Investigación Diálogos y acercamientos teóricos sobre el cruce arte/sexo/política
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Natalia Pineau Licenciada en Artes por la Universidad de Buenos Aires, en donde en la actualidad se desempeña como docente y se halla finalizando su tesis doctoral “Género y sexualidad en el campo artístico de Buenos Aires durante los años 90”. 1
Integra el equipo de investigación sobre Cuerpos, géneros e identidades. De la máquina al cyborg: imaginarios del cuerpo y posmodernidad (UBACyT). Asimismo, en la Universidad Nacional de Tres de Febrero, participa en el equipo de investigación Entre la academia y la crítica: la construcción discursiva y disciplinar de la historia del arte. Argentina-siglo XX. Entre otros proyectos en los que se ha desempeñado en calidad de investigadora se cuenta Documents of 20th-Century Latin American and Latino Art. A Digital Archive and Publications Project (International Center for The Arts of the Americas. ICAA-Museum of Fine Arts, Houston). Los avances y resultados de sus investigaciones han sido presentados en reuniones científicas nacionales e internacionales y publicados en libros y revistas de la especialidad.
Como parte de las actividades de formación que desarrolla PAPO, cada año invitamos a investigadores del campo de las artes y las ciencias sociales para que puedan brindar una clase magistral dirigida a las/los artistas seleccionadas/os en el ciclo de acciones en el espacio público. Este espacio busca acercar a las/los artistas a las discusiones teóricas y a las investigaciones que vienen realizando en torno al tema elegido para el año. En esta ocasión y bajo la temática anual de “Sexopolíticas”, se invitó a Natalia Pineau1, licenciada en Artes por la Universidad de Buenos Aires quien se especializa en las prácticas artísticas de los 90` y en las obras de los llamados “artistas del Rojas”. Su propuesta fue abordar el carácter político de las obras de estos artistas refiriéndose especialmente a los trabajos de Feliciano Centurión, Gumier Maier y Omar Schiliro quienes expusieron en la galería del Centro Cultural Ricardo Rojas de la Ciudad de Buenos Aires a comienzo de los 90`. Este grupo de artistas (que no funcionaban de forma orgánica sino que confluyeron en la Galería gracias a la articulación del artista y gestor Gumier Maier) obtuvieron allí la visibilidad suficiente para ingresar a las dinámicas del campo de arte contemporáneo y disputar los sentidos instalados en torno a la figura del artista y a los procedimientos reconocidos por el canon. Como marco teórico que sirviera para analizar estas obras, la investigadora se refirió a la propuesta de Jacques Rancière sobre lo político en el arte, específicamente en su trabajo El espectador emancipado (2010) en donde identifica dos modalidades instituidas sobre arte politico. La primera remite a la lógica de la representación, donde la imagen funciona como ícono que tiene un referente identificable en el mundo. Este tipo de arte se basa en la eficacia, en un continuum
entre lo que el artista desea comunicar y lo que el espectador recibe. La relación con el espectador se desarrolla inserta en lo que denomina pedagogía representativa, en donde se considera al espectador como pasivo al interior de un determinado régimen de división de lo sensible. Para ejemplar este punto Pineau se refirió a las series de afiches serigrafiados del grupo Ca.Pa.Ta.Co. (Colectivo de Arte Participativo-Tarifa Común), producidos en los 80` y 90` mediante un dispositivo que buscaba una eficacia directa, frente a al contexto político en que se insertaba. La segunda modalidad en la lectura que Rancière hace sobre lo político en el arte remite a la lógica de la inmediatez en donde el arte se introduce en lo social sin ningun tipo de mediación, borrando la representación. Se crean otros dispositivos, pero que al no acentuar en lo político de los recursos, continúan reproduciendo un continuum; “relación de causa y efecto entre una intención de un artista, un modo de recepción por un público y una cierta configuración de la vida colectiva”2. Esta modalidad se denomina pedagogía de la inmediatez ética. Ante estas dos modalidades, Rancière propone una tercer lectura inserta en su crítica de la crítica, en donde se suspende el continuum, atendiendo a que lo político está en el dispositivo, y no en el efecto que se pretende explícitamente generar a través del “mensaje”. A este posicionamiento él lo denomina eficacia estética. Volviendo sobre los “artistas del Rojas”, Pineau explicó que desde la crítica del momento se los había catalogado como artistas conformistas al régimen neoliberal de los 90`. Otra de las críticas que circularon por aquellos años fue la de considerar estas prácticas artísticas con el mote de “arte light” y -en superposición- como “arte rosa”. Esta categoría de lo rosa tenía una connotación relacionada a lo gay y
plástico: en general utensilios de limpieza (palanganas, coladores) o de bishu fantasía. Una “belleza artificial” ligada a la sensación que nos queda de esa década.
RANCIERE, Jacques. “Las paradojas del arte político”, en El espectador emancipado. Ed. Manantial, Buenos Aires, 2010, p.59.
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esto se vinculaba fuertemente con la enfermedad del SIDA. Frente a estas críticas que enfatizaban “lo no político” de estas producciones, Pineau rescató la politicidad de las obras de los artistas del Rojas. Su modo de inserción en el campo artístico fue política ya que lograron discutir el canon a través de la introducción de estas prácticas que utilizaban procedimientos artesanales, manuales y populares consideradas menores en el circuito y nombrarlas como obras de arte. En el caso de los bordados de Feliciano Centurión, se reivindica un procedimiento ligado a las tradiciones de su país (Paraguay), en donde las mujeres se dedican al bordado como práctica cultural popular. Además, con el uso de soportes extra artísticos como frazadas hace referencia al abrigo, el afecto, en un escenario en donde determinados tipos de afectividades estaban peyorativamente relacionadas con el HIV. Por otra parte, las obras de Gumier Maier citan el arte concreto de nuestro país desde su aporte del marco recortado, pero contrastando los colores saturados del concretismo con la utilización de colores pasteles generalmente relacionados con el universo femenino; convirtiendo el emblemático marco de los ´40 en formas de arabescos decorativos en los ´90. Por último, las obras de Omar Schiliro demuestran un especial interés sobre la utilización de objetos y materiales de consumo masivo típicos de esta década como el
Ibíd., p.57.
Pineau afirmó que estas obras fueron unas de las primeras que - en nuestro país- cuestionaron el orden heteronormativo al interior del campo del arte a través de la elección de los procedimientos artísticos utilizados. Y permitieron abrir una fuerte discusión disciplinar en torno a qué sujetos, materiales y procedimientos se incorporan y son legitimados por el campo artístico, y cuáles no. Tal como afirma Rancière , “el problema no concierne entonces a la validez moral o política del mensaje transmitido por el dispositivo representativo, concierne a ese dispositivo mismo” . A la par, estas obras visibilizaron -por primera vez en el arte contemporáneo argentino- una subjetividad “marica” en el arte, que recupera la idea de la loca siguiendo una línea trazada por Néstor Perlongher, y defiende las ideas de identidad en movimiento como respuesta a la heteronorma y a la normalización. En nuestro encuentro surgieron intercambios sobre la relación de estos pensamientos con algunas de las experiencias que estaban desarrollándose en el ciclo PAPO 2015. De cómo los procedimientos en sí -sin la necesidad de fijar a priori una intención de generar determinada reacción o pensamiento para operar sobre la realidad de manera inmediata y única- pueden producir obras con carácter político utilizando procedimientos que nos proponen el propio territorio en el que trabajamos (pasacalles, prensa barrial, horarios de concentración en la plaza del barrio).
Natalia Pineau
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Ciclo PAPO 2015 Acciones en el espacio pĂşblico
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Desde 2010, cada año PAPO lanza una convocatoria para proyectos de intervención en el espacio público en el barrio de La Paternal. La convocatoria da inicio al ciclo PAPO, que consiste en una clínica/ seguimiento de obra de duración trimestral con las/os artistas seleccionadas/os, la realización y el registro de las acciones en el espacio público y, en última instancia, una muestra colectiva en el marco de La Noche de los Museos.
Punto de partida, el territorio. A lo largo de 10 encuentros se promueven distintas actividades intentando dar un marco teórico y formativo sobre el tema-eje. Aparte las/os artistas son acompañados en el proceso creativo hasta llegar a la acción en la vía pública. Se utiliza la dinámica Pecha Kucha para ir definiendo los proyectos y también se proponen mapeos sensoriales a partir de las percepciones que deja la caminata de reconocimiento del barrio. Cuando las obras están definidas se activan en los distintos espacios del barrio. Estos espacios terminan de dar sentido a la obra, no tendrían razón de ser en otro lugar. Luego se vuelve a pensar la obra pero esta vez para que tenga sentido en un formato de sala y ser exhibida en una gran muestra final en el marco de “La Noche de los Museos” donde el Espacio es sede. Para esto se destina un encuentro más. Una vez concretados los nuevos formatos de obra, los artistas y el equipo de coordinación trabajan en el montaje de dicha muestra. La curaduría de ésta contempla la invitación de artistas externos al ciclo, que puedan entrar en diálogo con la temática/eje anual.
Nuestro punto de partida y llegada es el territorio. Entendemos que la búsqueda de anclaje territorial que el programa PAPO propone como desafío a los proyectos seleccionados hace necesario el conocimiento del barrio por parte de las/os artistas. Por este motivo, como cada año, el primer encuentro del ciclo consistió en una breve presentación de PAPO y de La Paternal Espacio Proyecto seguida de una recorrida colectiva por el barrio. La caminata tuvo como objetivo facilitar un primer acercamiento de las/os artistas al territorio de La Paternal que sirviera además para que comenzaran a localizar geográfica y políticamente el desarrollo de sus propuestas de intervención.
En 2015 fueron seleccionados 12 proyectos participantes:
- Carolina Barrabia - Colectivo S/T - Alejandra Fauquié y Cecilia Leiva - Nicolas Goldín - Gastón Severina - Ana Cristina Araujo - Claudia Araya López - Celina Capello - Malditas Culebras - Josefina Nicolini y Julieta Barreira - Martín Badell - Isabella Maidanik
Proyectos seleccionados. A partir de un tema-eje anual, el equipo de coordinación de PAPO selecciona proyectos que sean capaces de identificar, problematizar e intervenir sobre las distintas perspectivas con las que se puede abordar el vínculo entre el arte y la política y que, al mismo tiempo, fortalezcan los lazos vecinales, promuevan la identidad barrial y/o señalen problemáticas en el barrio de La Paternal. 31
ACCIONES EN EL ESPACIO PÚBLICO. Ana Araújo Arbitrariedades genéricas Lenguaje / Género / Hábitos En un trabajo de exploración visual, pero también de exploración sobre el lenguaje, el proyecto buscó desde la videopoesía investigar cómo el género puede ser plástico al cambiar de idioma. A través de los heterogenéricos, la pieza aborda distintos espacios de producción simbólica.
“Cuando filmamos la escena de la parrilla, se acercó una niña a la misma. Simplemente acompañaba. El hombre junto a las brasas no dió ningún gesto de querer enseñarle nada. En estas situaciones cotidianas se reproduce la norma”.
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Carolina Barrabia Proyecto Pekko/ 1era etapa: “Las regaladas de Warnes” Anclajes / Masculino-Femenino Plantas que interrumpen un espacio urbano marcado por la masculinidad. Macetas de colores y plantas llenas de flores sorprenden a primera hora de la mañana a los comerciantes y reparadores de autos de la Av. Warnes. ¿Qué sucede cuando objetos tan asociados a lo femenino como las flores y objetos tan asociados a lo masculino como las autopartes se encuentran en un mismo espacio/tiempo?
“Muchos varones abrían las persianas de sus locales y comenzaban la jornada de trabajo en la casa de repuestos mientras en la vereda seguía intocable que habíamos dejado frente a su vidriera. Algunos se sacaban fotos con las flores. Varones haciéndose selfies con las flores”.
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Colectivo ST Cariñositxs Afecto / Prejuicios Partiendo de su experiencia de mujeres en una relación sentimental, Cariñositxs trabajó en torno a las demostraciones de cariño en la vía pública y lo que genera en un tercero cuando este cariño es no normativo. Un paseo afectivo por La Paternal para repensar la idea de aceptación ante la diversidad en un marco de políticas inclusivas.
“¿Son los demás quienes nos ponen limitan o somos nosotras/os mismas/os? Este interrogante se nos mostró evidente cuando vimos que nadie estaba tan pendiente de nuestros besos en la calle”.
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Malditas Culebras Atentado Pancho Cuatro mujeres vestidas con burkas negras “atentan” mediante un ritual en la estación del ferrocarril San Martín “La Paternal”, cocinando y entregando panchos – bombas. El mensaje inscripto buscó evidenciar la cuestión de género como condición femenina de sacrificio y entrega; clase social como posicionamiento forzoso dentro de parámetros económicos, demográficos, culturales y políticos.
“Nosotras quisimos mostrar la figura de la mujer dadora de alimento, pero a través del distanciamiento que podía causar la vestimenta burka. Pero las personas que se acercaron a nuestra acción realmente tenían hambre. Así que lo performativo, devino en real entrega de alimentos”.
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Martín Badell TBeso Incomodidad / Masculinidades / Homoerotismo Tbeso es una pintura mural que exhibe una cálida demostración de afecto entre dos hombres. Se pintó en la Av. Warnes, en medio de la zona de talleres mecánicos y de venta de autopartes. La propuesta fue llevar una imagen homoerótica al corazón de un espacio comúnmente asociado a un discurso machista de prácticas fuertemente heterosexistas y ver la reacción de los talleristas.
“Hablando con los muchachos de los talleres mecánicos de Av. Warnes, les expliqué que iba a pintar a dos hombres besándose. El dueño de la pared dijo: ´Cada cual lo que quiera pibe, ¡adelante! La incomodidad que sentí en la calle parte de un prejuicio real. Antes las cosas que hacíamos estaban prohibidas. Y aunque ahora algunas cosas cambiaron, ese temor sigue estando presente”.
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Celina Cappello Hacer la plancha Santuario / Ocio / Lucha Hacer la plancha es un santuario de ocio-productivo-en-lucha, jugando con el doble significado de la plancha como objeto de sumisión de la mujer y como expresión de ocio. Esta instalación se montó en el parque junto al predio ex- Warnes, y abrió la invitación a posar en el mismo para todx aquel que por allí pase.
Nora pasó con su hijo y ambos accedieron a posar con la plancha. “Gracias por fotografiar a mi mamá” comentó el hijo de Nora en la FanPage de este proyecto. Todo lo que pasaba en torno a la plancha generó conversación y juego. Y de ese modo el ocio fue santificado”.
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Jose Nicolini y Julieta Barreira Vello Público Deseo / Fotografía / Público-Privado ¿Qué desea la gente de Paternal? ¿Qué los erotiza? ¿Cómo se vinculan afectivamente? Jose y Julieta salieron por las calles del barrio a preguntar a los transeúntes acerca de sus fantasías. La gente escribía en una papel y luego guardaban sus escritos en una urna. Este proyecto buscó conocer esos imaginarios eróticos de lxs vecinxs del barrio, a través de breves encuestas donde la pregunta era sólo la excusa para re-activar el deseo.
“A una señora le dio vergüenza hablar de sexo y se puso a hablar de su primer novio. “Yo ya no estoy en juego” contestó. A lo que respondimos que para las fantasías no existen las edades.”
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Gastón Severina Diversidad Cuerpos/ Construcción / Identidad Un juego para armar y desarmar corporalidades, un posible ejercicio de visibilización acerca de las diversidades. Gastón Severina realizó varias partes de cuerpos en cerámica y las dejó a disposición de los vecinos en la plaza Gleyzer. Los transeúntes podían acercarse a combinar las partes de los cuerpos realizadas en cerámica y jugar a armar el cuerpo que quisieran; de las distintas combinaciones nacían nuevas corporalidades. Más tarde, Gastón seleccionó algunas de las combinaciones y las pegó en el muro de la casa de una vecina del barrio.
“Graciela, la dueña de la casa no tuvo problema en que pegara las figuras en su pared, pero nunca salió a verlas. ¿Cuál habrá sido su reacción al salir a la vereda y ver los diversos cuerpitos de cerámica que flotaban en su muro?”
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Claudia Araya López Pertenencias del Lugar Común: Resquebrajar Cartografía / Público-Privado / Mapeo afectivo A partir de objetos encontrados en la plaza Gleyzer la artista desarrolló una clasificación y posterior sondeo cartográfico a partir de los sentidos y la propia subjetividad. El orden y la acción doméstica propia del ámbito de lo privado llevado al campo de lo público. Cada objeto fue acomodado en un pequeño círculo de papel blanco lo cual resaltaba aún más el objeto. Al finalizar la acción podíamos percibir el trazado de un mapa objetual. La artista realizó esta acción junto a Felipe Vergara.
“Luego de que los obreros botaran las cáscaras de naranja, yo les pedí que me dieran así la clasificaba. Terminamos comiendo naranja todos juntos”.
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Cecilia Leiva y María Alejandra Fauquié El pasacalles Público-Privado / Machismo / Ficción El pasacalles es un ritual barrial que hace público lo privado, tiene un carácter performativo que valida el discurso que contiene. La acción pretendió invertir ese mecanismo: el punto de partida no es lo privado sino lo público. ¿Qué imaginarios sobre “la mujer” despierta una frase machista? La acción consistió en colgar un pasacalles con la frase “Mary, aunque estes con otro recordá que sólo yo te hice mujer” A partir de esta intervención en el espacio del barrio pudimos registrar a varios vecinos que comentaban y se generaron algunos interrogantes acerca de quién es realmente Mary. ¿Qué pasó entre ellos para que alguien haya escrito públicamente algo asi? De a poco se iban atando cabos y suposiciones acerca de la verdadera identidad de Mary. Esto concluyó en una nota final en el periódico barrial haciendo alusión al enigmático pasacalles y su destinataria.
“Cuando les preguntamos a los vecinos acerca de qué te hace mujer, nosotras también nos hacíamos la misma pregunta. El interrogante nos interpelaba por fuera de la ficción de Mary”.
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Nico Goldín Por ese palpitar Cuerpo / Intimidad / Escucha En el corazón de La Paternal, hay una milonga que lo hace palpitar. Las parejas que bailan al son de su compás, sienten fluir el ritmo silencioso, que late sin parar. ¿Pero realmente se sienten? Para esto el artista Nicolás Goldin invitó a los alumnos de una clase de tango de una milonga barrial, a profundizar en la escucha mediante algunas propuestas de sensibilización. El proyecto buscó generar una instancia de escucha corazón a corazón, en plena pista milonguera.
“En la pista de milonga todos están pendientes de quién se equivoca y ya ni se sienten. Hacerles escuchar los latidos del corazón fue una manera de recuperar el aspecto amoroso del baile”.
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Isabella Maidanik Sin Título Violencia / Cuerpo / Fragilidad Abrazar a un palo borracho, ablandarlo, darle amor a pesar de sus espinas es un intento por penetrar algo tan duro y hostil como nosotros mismos. La artista Isabella Maidanik permaneció abrazada a un Palo Borracho 45 minutos. Qué sentimiento despierta , qué provoca en la gente una mujer abrazada a un árbol? En el fondo se alcanzaba a distinguir una frase que decía “Por qué tenemos que lastimarnos tanto? y del otro lado otra “Por qué no podemos deshacer este dolor?” realizada en una pegatina en colaboración con otros participantes del ciclo.
“Porque estamos llenos de dolor, ¿seguiremos brindando nuestros quejidos, nuestra furia? ¿De esto nos queremos seguir alimentando?”
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El Barro de Tierra de terreno territorial y torrentoso la hizo resbalar y se la vio heavy, porque se le vio “todo”, no podrá pasar más por esa esquina del taller, ya fue mal apodada. Mejor empoderarse y apropiarse del terrenito. Ocupar al menos por 15 minutos con la tierra que nos provee el artificio del arte y desalojar al patriarcado y las heteronormas, justo en la Paternal: en la plaza Raimundo Gleyzer, porque la estudiamos y puede funcionar, en tal horario en donde salen los chicos de la escuela y se juntan a comer los del call center. Accionar en el territorio.
Haciendo un pozo, reaparecieron las napas. por Julia Cossani ¿Cuál es el relieve de un territorio específico? Aprenderse casi por inercia donde están las baldosas rotas que arruinarán nuestro vestido de fiesta. Escuchar negociaciones sobre la rebaja del alquiler porque a una cuadra está “la villa” la Carbonilla: “La pelota en Cucha Cucha o en la carbonilla (el terraplén del ferrocarril) que destrozaba nuestros pantalones, nuestras rodillas, las zapatillas.” Sí, porque el terreno/territorio también nos destroza, troza nuestros cuerpos, figura la ropa que los viste, impone su forma de transitar, al igual que la rigidez del vaivén de nuestras caderas, la altura de nuestras miradas, la distancia de quien nos acompaña. El territorio entendido como suma de cantidad de elementos: piso, trazado, edificaciones, historias de sus usos, contenedor de dispositivos urbanos de control, acumulación de imágenes mediáticas, y de-
más que inciden en nuestros cuerpos y sus formas de comportarse. Al igual que Iconoclasistas tomamos la pista que nos dejó Milton Santos para redefinir este concepto: “El territorio es el espacio socialmente construido”. Y en este campo tan amplio al que denominamos social, en PAPO 2015 nos detuvimos a poner amarillo fluo en las relaciones arte, sexo y política. Allí pudimos recoger, “mapear” como forma de apropiarnos de estos territorios, al menos por un pequeño lapso, para luego actuar en ellos, a veces tomando su propio residuo y resignificándolo. Como especie de anti-geógrafos de nuestro espacio urbano contemporáneo, con la intención de desordenar nuestro territorio, asumimos el experimento de ir encontrando formas específicas a una problemática general, en donde la violencia sigue siendo pilar normalizado y la disidencia supuesta provocadora. Indagando por debajo de estos pastizales asfaltados para encontrar la aguja y salir a pinchar. Como el pasacalle de Mary explorando las miradas que superan la línea de horizonte o el cuerpo de una chica abrazando un palo borracho cubierto de espinas, que absorbe fugaces y misóginos comportamientos, en un sitio en donde los autos pasan a 50 km/h. Como el descubrir que los domingos en una milonga algunos otros cuerpos pueden rozarse y hasta oírse los latidos en el club Ciencia y Labor. Entonces… territorio, cuerpo… ¿Cuerpos como territorio? o ¿campo de batalla como nos proponía Barbara Kruger? Al margen de los extensos debates feministas acá estamos, en un espacio que se denomina público y que en general lo experimentamos como una mer-
cancía más, o zona de peligro, el rescate de la fiesta sería parte de nuestra motivación. La acción en este espacio así denominado: “público”, en general podemos relacionarla con problemáticas también generales, cuasi “globalizadas” en donde los artistas intervenimos. ¿Pero qué pasa cuando ese espacio público forma parte de un territorio específico y esas problemáticas tienen cuerpos que las soportan, con rostros y gestos reconocibles?, ¿Ahí podremos ser nosotros intervenidos, desordenados también por estas particularidades? ¿Es posible o conveniente no pretender, al menos en un principio, incidir con un material ajeno? sino extraerlo del propio lugar, asimilarlo, deglutirlo cual proceso antropofágico invertido, detenernos en atender sus complejidades e inventar nuevos dispositivos para aportar al desorden. Debates que surgen enredados en nuestras prácticas, en medio de la vorágine de la acción, y en momentos en donde a veces la gravedad coyuntural nos invade y debemos accionar sin poder contener lo antes mencionado.
tes posiblemente borroneados por cantidad de temporales: cierres de bodegas y cines teatros, crecimiento poblacional al costado de la vía como base de economías precarias de miles de cartoneros, etc. Límites debatidos y disputados, pero ciertos para cantidad de cuerpos, y presentes en una dialéctica constante en donde su espesor es sorprendido por Intervenciones que planificamos pero a veces nos desbordan, o intentamos resquebrajar posibilitando Re-diseños de mundos posibles .
http://www.barriada.com.ar/Paternal/ visitantes_paternal_1.aspx#13/08/2009_ Oscar_(Cacho)_Rodríguez_La_barra_de_la_ esquina_de_La_Farmacia_San_Luis
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Estos procesos en ocasiones alimentados por fotografías, grabaciones de entrevistas, encuestas, archivos, etc. a veces se convierten en registro de este territorio, para luego mediante la organización de un discurso de materiales documentales, y gracias al montaje y la experimentación, decidimos ficcionalizar. Usando también como materia prima enfoques sensoriales, caminatas, charlas informales, encuentros fortuitos, materia de la que nos provee ese terreno particular, como la arcilla a la orilla del río, o en la montaña después del alud. En un espacio con lími-
Risler Julia, Ares Pablo, Iconoclasistas. Manual de mapeo colectivo: recursos cartográficos críticos para procesos territoriales de creación colaborativa. Buenos Aires, Ed. Tinta Limón. 2013.
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Reuniones de seguimiento de proyectos
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Muestra colectiva
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PAPO SexopolĂticas en La Noche de los Museos.
Desde hace varios años, La Noche de los Museos en La Paternal Espacio Proyecto se constituye como una plataforma de exhibición, reflexión, y puesta en circulación de las experiencias de las/os artistas del ciclo PAPO. Funciona no sólo como cierre y culminación del mismo, sino también, por un lado, como espacio de intercambio y reflexión para lxs artistas del ciclo y, por otro, como una instancia de puesta en circulación de las hipótesis que gravitan en torno a la propuesta del año. En este caso, las formas en que las acciones en el espacio público pueden intervenir en las trayectorias normadas que funcionan en la producción y regulación del género y las sexualidades. Las/os artistas que transitan el ciclo tienen la tarea de idear un dispositivo u obra de sala que de cuenta de la experiencia de intervención en el espacio público y que se enmarque en el trazado de un discurso común en torno de las experiencias colectivas exhibidas en la sala. El trabajo curatorial de las/os coordinadoras/os del ciclo estriba en conformar un relato común de esas experiencias. La serie de experiencias artísticas que se presentaron en la muestra 2015 fueron trazados, bosquejos, experimentos cuya plataforma de origen fue la serie de acciones pensadas para el espacio público, en el territorio especifico del barrio de La Paternal y en el marco del ciclo Sexopolíticas. Lejos de ser neutralizadas o auratizadas en la dimensión de la sala, consideramos que las propuestas exhibidas funcionaron como artefactos que ramificaron y traficaron informaciones, experiencias y saberes que continuarán agitando reverberancias en múltiples entornos. Cada proyecto puso en evidencia el trabajo de intercambio crítico, reflexivo, de vinculación e invención en el barrio que permitió generar grietas, desvíos, suturas, interrupciones o señalamientos en torno del orden sexo-genérico.
La muestra, curada y llevada adelante por el equipo de coordinación, tuvo dos zonas problemáticas sobre las que reflexionaron y accionaron los doce proyectos seleccionados: una dedicada a los, por nosotros llamados Señalamientos y a las formas de intervenir en el espacio público poniendo en foco las matrices de visualidad en torno a lo “normal”; y una segunda zona atenta a lo que consideramos, son Re-diseños de mundos posibles, es decir, ejercicios de invención y artificio de otras geografías, de artefactos lúdicos, de interfaces desestabilizadoras, acaso para volver más vivible la existencia y desde las diferentes formas en que es posible experimentar la resistencia. Además de estas experiencias, las obras de las/os artistas invitadas/ os se unieron a la trama que, intuímos, se teje entre estas dos zonas; pero lejos de reiterar o subrayar algunas de las inquietudes o indagaciones ya puestas a circular por las obras del ciclo, consideramos que las/os invitadas/os funcionaron como formas de amplificación y complejización de los problemas que abarcaron la muestra. En paralelo a las obras exhibidas en la sala, la muestra además se vio acompañada de diferentes actividades que sucedieron en el espacio a cielo abierto y que han contribuido a amplificar algunos de los problemas poético/políticos allí planteados: performances de las/os artistas del ciclo, serigrafía de remeras a cargo del colectivo Estampida y música a cargo del grupo de tango Fifí: canciones amaneradas.
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ARTISTAS DEL CICLO PAPO 2015
Ana Araújo
Malditas Culebras
Arbitrariedades genéricas Videopoema
Atentado Pancho Performance
El proyecto buscó agudizar la mirada y captar cómo se reproduce la heteronorma en las costumbres y hábitos de los vecinos de La Paternal. La pieza audiovisual apunta a las arbitrariedades del uso de los géneros en el lenguaje. Las palabras heterogenéricas tienen un género u otro según el idioma (español/portugués). El videopoema contrapone privado/público, maternal/paternal, origen/destino, además de trabajar en el distanciamiento respecto a las costumbres que el dispositivo fílmico permite.
Cuatro mujeres vestidas con burkas negras “atentan” mediante un ritual, cocinando y entregando panchos–bombas. El mensaje inscripto pretende evidenciar la cuestión de género como condición femenina de sacrificio y entrega; clase social como posicionamiento forzoso dentro de parámetros económicos, demográficos, culturales y políticos.
Martín Badell
Carolina Barrabia
TBeso Técnica mixta
Proyecto Pekko / 2da. etapa: “Soy tuya” Instalación y performance
Impresiones, sensaciones y pensamientos luego del mural pintado en la Av. Warnes.
Posesión sexual de un hábitat. El hábito de anclar una actividad a un género. Territorios que se vuelven prohibidos. Discursos ciegamente acaparados o repetidos. Lo aparentemente inofensivo. SOY TUYA es una invitación a desmenuzar, intercambiar, valorar, jugar, animarse a ser.
Colectivo ST Cariñositxs Instalación y Fanzine La obra refleja las reflexiones que emergieron a lo largo del ciclo: ¿qué demostraciones de cariño se ven en la vía pública? ¿Qué sucede con la mirada del otro? Una invitación a conocer la experiencia del colectivo y a experimentar la propia.
Celina Cappello Hacer la plancha Instalación Este santuario santifica el ocio, propone un descanso que permita desandar los estereotipos de género. Las estampitas aquí expuestas muestran a aquellxs vecinxs que habitan el parque junto al predio ex-Warnes y que se animaron a Hacer La Plancha. A ellxs les dejamos estas estampitas como recuerdo y recordatorio diario de que el ocio es divino.
Jose Nicolini y Julieta Barreira
Cecilia Leiva y María Alejandra Fauquié
Vello Público Instalación
El pasacalles Instalación ficcional
Los deseos reunidos durante la intervención se pusieron en diálogo con los concurrentes a la muestra utilizando un fotomatón en el cual podían representar esos deseos que sacaban de la urna y fijarlos en una imagen fotográfica. El fotomatón es un dispositivo que nos invita a desestructurarnos para encarnar y ser protagonistas de nuestros deseos. Es un espacio para experimentar con deseos propios y ajenos poniéndolos en diálogo y jugando con los elementos del entorno.
Como el escritorio de un detective que va encontrando pistas, las artistas montaron un recorrido a través de las distintas huellas que fue dejando la acción. Comentarios de los vecinos, dibujos de algunos compañeros y fotos sirvieron intentar la reconstrucción de Mary. Parece que ella sólo existe en el discurso, en la palabra de un otro que la define, siempre un otro que la define. Cuanto más se la busca, más se desvanece… ¿o no?.
Gastón Severina Diversidad Instalación
Nico Goldín Por ese palpitar Instalación y performance.
Dibujar es una acción que nos permite construir mensajes, los cuales pueden ser interpretados de variadas maneras. La propuesta de este tablero es invitar al público a pensar, por medio del dibujo, en las múltiples construcciones identitarias que nos hacen diversos.
¿Cuántas veces escuchamos nuestros latidos del corazón? ¿Cuándo fue la última vez que escuchamos los latidos de otro corazón? ¿Qué nos produce esa sensación? ¿Qué significa intimidad? ¿Cuánta intimidad existe con el otro? En la respuesta a estas preguntas reside la acción de esta performance.
Claudia Araya López
Isabella Maidanik
Pertenencias del Lugar Común: Resquebrajar Instalación Con objetos en desuso del propio lugar en donde habita, la artista repite la acción resignificante del espacio público del día 22-10-2015, al interior de la sala. Los objetos empleados de soporte y acción son los mismos, cambia el significante y lugar de exposición.
Sin Título Instalación Una canasta llena de algodones del palo borracho invitaba al público a tomarlos.Cada cual decide, si se queda con lo bueno, si se queda con lo malo, o si nunca cambia nada. He aquí el fruto de lo que cosechamos. Cada quien decide tomarlo, obsequiarlo, o no hacer nada. 69
Entendiendo la muestra como un espacio de puesta en circulación de procesos, experiencias, saberes o como plataforma de intercambio de investigaciones en torno a una serie de inquietudes (ya sea el cuerpo, el género, las sexualidades o los activismos artísticos que trabajan en la interrupción de la inteligibilidad de estas matrices), se invitó a participar a un grupo de artistas que, consideramos, permitían abrir líneas de fuga y expandir el campo de resonancia de lo que puso en exhibición.
Tejiendo muestra con otras/os Si el universo de los problemas que compartían las/os artistas seleccionados estaba en íntima vinculación, pues se encontraba bajo el paraguas de lo que entendemos por “sexopolíticas”, las/os artistas elegidos abordaban inquietudes cercanas a éstas pero a través de técnicas que se alejaban, por ejemplo, de estrategias como la performance o las intervenciones tradicionales en el espacio público. Haciendo uso de tecnologías y técnicas como el collage, la serigrafía, la intervención digital, la fotografía retocada, la historieta, el bordado, el calado, el diseño de cartografías o la pintura, estas/os artistas ayudaron a la constitución de un relato curatorial acaso más opaco y poroso en los trazados que fueron planteados para pensar el cruce entre formas de abordaje artístico a las políticas sexuales. Consideramos que la presencia de las obras invitadas contribuyó a constituir un mapa más complejo de herramientas poéticas y políticas de desviación de las formas normadas en que se constituyen los géneros y las sexualidades.
Yeguas Descamisadas - Yegua&Groncha (2014)
Lesbians in Love Bed - Effy Chorubczyk y Laura Gam (2011)
Artistas invitadxs: Lupo Rojo, Ivan Enquín, Adriana Minoliti, Mujeres Públicas, Yegua y Groncha, Juan Grande, Estampida, Laura Gam & Effy Beth.
Obras invitadas :
Pornocalados - Iván Enquin (2015) Distribuidas en ambas salas y en diálogo con las obras de lxs artistas seleccionadxs, se propusieron como formas de reverberación de lo que se estaba exhibiendo y como forma de amplificación de los problemas trazados a lo largo del ciclo. Pensar en ese vínculo supuso diseñar la muestra y situarla en un relato de producciones que ya vienen interrogándose sobre los temas señalados por el relato curatorial y la diagramación del ciclo.
Sin titulo - Lupo Rojo De la Serie Play_G -Adriana Minoliti (2014) Ensayo para una cartografía feminista -Mujeres Públicas (2012) Patria o Buitres - Yegua&Groncha (2012) Yeguas descamisadas - Yegua&Groncha (2014) Chicatrans (2015) A la hora del nesquik - Juan Grande (2014)
Sin título - Lupo Rojo.
El mismo amor - Juan Grande (2015) Lesbians in Love Bed - Effy Chorubczyk y Laura Gam (2011)
The power of mis tetas_Chicatrans (2015) De la Serie Play_G Adriana Minoliti (2014)
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Esta rueda funcionó como un dispositivo visual y animado a partir del cual el/la visitante a la muestra podía conocer - a través de una aproximación anclada en una anécdota, una imagen y un testimonio del artista- todos los proyectos artísticos que fueron parte del ciclo de intervención en el espacio público de PAPO Sexopolíticas. La rueda, que fue proyectada y que iba girando permanentemente, fue un punto de partida a partir del cual ingresar a cada una de las experiencias que habían sucedido en cada salida a la calle, en cada intervención, en cada proceso de trabajo artístico. A su vez, fue enclave territorial en el medio de la zona diferenciada de la sala de exhibición donde las lógicas de la obra son diferentes a las de la calle. Buscando tensionar la división entre la calle y la sala, la rueda actuó como dispositivo de movimiento, de desplazamiento, de posibilidad y conexión entre dos espacios diferentes pero complementarios.
La calle y la sala Por Nico Hache Se ha formado -hay fundamentos para ello, experiencias que así lo muestran- cierto consenso respecto de la pérdida de potencia crítica de las acciones callejeras artístico-políticas en su pasaje a formatos expositivos. La idea supone que, en contraste con el territorio público, los espacios cerrados serían incapaces de restituir las condiciones de producción, recepción, interacción, colaboración o reapropiación de una intervención artística de calle. Más allá de que este planteo pueda ser puesto en duda, entendemos que es posible ir aún un paso más lejos en los modos de pensar la tensión entre espacio público y espacio privado en relación a una obra o una intervención artística. Aparece aquí el problema del registro, dimensión fundamental, constitutiva, del activismo artístico de calle, que admite múltiples respuestas. Más allá de la especificidad de cada acción y su registro, pareciera que en todo caso éste último estaría condenado a preservar sólo una parte de la intervención a costa de perder la presencia de los cuerpos, las potenciales contingencias, la interacción. Habría así en el espacio público, en la obra en acto, cierta verdad que el registro residual no llegaría a capturar. En el estatuto del registro como superficie empobrecida e insuficiente se explica en parte la percepción respecto de la pérdida de potencia en el pasaje de una obra “de la calle a la sala”, pensada ésta última como mero receptáculo de fotografías, videos, sonidos, eventualmente restos materiales de una
acción pasada, ya consumada. Contra esta idea se formula una respuesta posible: la traducción de una acción de calle a un espacio expositivo no necesariamente implica una pérdida de su potencia. Hay variables que sostienen la propuesta. En primer lugar, no es posible pensar a “la sala” como unidad homogénea; la Bienal de Venecia no es igual a un festival artístico en una escuela de Lugano, y el MoMA no es una galería autogestionada en Almagro. Cada sala impone unas determinadas condiciones de recepción, aglutina a un público específico, se inserta desigualmente en el circuito del arte. Por otra parte, el propio dispositivo expositivo tanto de una obra como de un registro comporta consecuencias insoslayables en sus efectos de sentido. Una foto fija de pared, una instalación interactiva, una mesa de serigrafía o la ejecución de una performance interpelan al público de modos diferenciados, le exigen distintas operaciones de lectura, imponen determinadas disposiciones de los cuerpos. Cada año trabajamos en torno a estas cuestiones en PAPO - Paternal Arte y Política. El formato del ciclo -con una convocatoria a desarrollar acciones en el espacio público seguida de una muestra colectiva en el marco de La Noche de los Museos- nos pone ante el desafío de tensionar colectivamente la relación entre ambas instancias. Desde el primer encuentro -e insistimos en ello a lo largo de los dos meses del ciclo- proponemos a los artistas seleccionados descartar de antemano todo procedimiento de pasaje o traducción de 73
las intervenciones callejeras al formato expositivo y pensar, en cambio, en la formulación de un proyecto compuesto por dos instancias diferenciadas, complementarias y jerárquicamente equivalentes. La apuesta persigue un doble objetivo. Al tiempo que se busca evitar la producción de registro en tanto representación muerta o mera huella de las acciones, pretendemos que la creación de un proyecto de dos obras -una de intervención en el espacio público, otra de tipo expositivo- permita atender a las condiciones de producción y recepción específicas de cada espacio. Si, tal como advirtió Nicolás Cuello en la mesa (Des)Bordando, no parece pertinente auratizar la calle en tanto espacio puro de lo político, tampoco cabría despreciar la potencia política de la instancia expositiva. Lejos de restituir la potencialidad crítica de una obra en su pasaje de la calle a la sala por la vía de politizar la traducción -mediante, por ejemplo, un dispositivo de exposición interactivo y colaborativo- en PAPO proponemos desde el origen mismo de los proyectos pensar los elementos del binomio de forma simultánea y complementaria. No se trata entonces de diseñar un modo satisfactorio de meter el espacio público dentro del expositivo sino más bien de poner ambos territorios en diálogo. Así, la obra ya no va de la calle a la sala -no realiza pasaje alguno- sino que está concebida desde su creación como constituida por dos instancias, la calle y la sala.
Montaje muestra colectiva La Paternal Espacio Proyecto Octubre 2015.
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Palabras, experiencia y aprendizaje de artistas PAPO SexopolĂticas
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En principio era el verbo por Celina Cappello Participar de PAPO. No. Suena a un dispositivo en el que alguien engrana o queda afuera. Mientras que fueron dos meses de conversación plástica, que estiraba tiempos de un lado, faltaban del otro. Pero sostenía el ritmo de quien amasa plastilina para jugar con ella. Estar en PAPO. Tampoco. Meramente estar puede ser desimplicado, y quienes “estuvimos” ahí, nos dimos el gusto de repensar la construcción de intervenciones, de obras, tanto aquellas que habíamos propuesto en la convocatoria como aquellas que allí encontramos. De dejarnos atravesar por la diferencia. Vivir PAPO. Da autoayuda, y tal vez algo de eso tuvo. Es muy finita la diferencia entre el vitalismo y la autoayuda. PAPO es energía que mueve, pero sin las recetas de un tutorial de la alegría. Pasa lo mismo con ser PAPO. Aunque un poco se es, porque el arte y la política se presentan a diario, y en PAPO se condensa en tiempo y espacio. Habitar PAPO. Tibio, un poco más caliente. Habitar es ese estar siendo con otros en algún lugar, pero le falta un poco de esa sensación de naufragio, de vértigo y ansiedad. De ese qué va a pasar con esto después de todo lo que charlamos. Tal vez PAPO debería ser parte, cual trend-topic, del hacerse a sí mismo verbo. Así como se puede me-gustear o googlear, nosotros papoeamos. Y papoear es intenso, te corre mientras te abraza. Te
prende deseos mientras te exige. Te hace hablar mientras te propone escuchar. Logra que te apropies de un instante público, para que también el barrio se apropie de esa energía cristalizada en paredes, árboles, plazas, pasacalles, charlas, besos y abrazos. Papoear se hace dos meses, pero te persigue de ahí en adelante. Porque papoear se extraña y no se logra simplemente con una sumatoria de papxs presentes.
Sexopolíticas: Metáforas subversivas de la experiencia Por Claudia Araya López Investigación – LAC – UNA ¿Desde donde poder hablar de la diferencia, queriendo traducir al lenguaje poético signos yestigmas culturales silenciados? Nuestros cuerpos pertenecen a un código y el código genético nos señala en cifras. Estallar los límites de una sexualidad codificada se hace urgente al momento de no sentirnos cómodas ni cómodos con nuestro cuerpo o con lo que sencillamente se nos impone al “deber ser”. Ciertamente se ha escrito en abundancia sobre el tema y existen muchos autores, filósofas/os y teóricas/os que lo cuestionan, no pudiendo acceder a los sectores populares, justamente por indescifrable que resulta ser en muchos casos, más indescifrable para el cuerpo mismo en un entorno opresivo. La inmediatez y la urgencia condiciona en muchos casos, indeclinablemente.
sas y complicadas si eres mujer, si no lo eres, si tienes hijos, si no los quieres tener o si viajas por tus propios medios. No tener un proyecto de vida tradicional me hizo salir (huir) entre otras cosas. El mapa afectivo de lo que considero esencial en estos momentos podríamos decir que materialmente es ínfimo, siendo eso lo que me llevó a este proyecto. La otredad y diferencia que siempre espero poder tener y acoger.
Desde la expresividad, Sexopolíticas se planteó como un proyecto ambicioso y quimérico en cuanto a nosotrxs lxs participantes, debíamos acceder a poder intervenir el espacio público sabiendo que es un espacio libre dentro de nuestra cognición, adherir al desafío y pasar ese fino umbral dependía sólo de nosotrxs. La otredad se hizo visible rápidamente, apabullándonos de goce y sorpresa. Desde el experimento migratorio que efectué hace cinco años atrás, me di cuenta que éramos y seguiremos siendo muchxs los que salimos de nuestro país de origen. Las condiciones son adver79
Equipo PAPO 2015
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Romina Cariola Escenógrafa y vestuarista egresada de la Escuela Nacional de Bellas Artes Ernesto de la Cárcova. Completó sus estudios en la Universidad Nacional de Artes (UNA), obteniendo el título de grado. Trabaja en cine, teatro, danza y tv, realizando escenografía, dirección de arte y vestuario. Desde 1999 interpreta performances y trabajos como artista visual, algunos de los cuales fueron expuestos en el CCEBA (Centro Cultural de España en Buenos Aires), en el Centro Cultural Recoleta, en el Fondo Nacional de las Artes, en la galería de arte Ruth Benzacar, en el Festival de Videodanza y en el Festival de Danza Contemporánea de la Ciudad de Buenos Aires. Recientemente participó del laboratorio de arte y tecnología “Interactivos” en Fundación Telefónica ganando el incentivo a la producción. Su obra “Efímero Cine” obtuvo una mención en el Festival FAUNA de la Universidad Nacional de las Artes.
Ha participado en ciclos de arte en la ciudad de Buenos Aires, a través de la gestión y la realización artística. Como gestora, participa de la coordinación del programa PAPO Arte y Política de la Paternal Espacio Proyecto. Integró el staff organizador de la Muestra de Arte Pospornográfico de Argentina (2012-2014). Como artista, participó de la residencia internacional queer “Dispositivo Afrodisíaco” realizada en la ciudad de Valparaíso (Chile). Previamente, en 2014 y 2012 fue seleccionada para la realización de proyectos de intervención en la vía pública en el ciclo PAPO Arte y Política de La Paternal Espacio. En 2011 integró el staff de performers del espectáculo “Boda Negra” organizado por LABoral Centro de Arte y Creación Industrial en Gijón (España). Actualmente explora en las potencialidades del sonido y la poesía para generar instancias eróticas en el espacio público. http://www.lauramilano.com.ar/ https://uba.academia.edu/LauraMilano
http://rominacariola.wix.com/rominacariola
Fermín Acosta Laura Milano Comunicadora e investigadora. Doctoranda en Ciencias Sociales y Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Buenos Aires. Escribe e investiga sobre cuestiones vinculadas al cruce comunicación, género y sexualidades. Ha publicado el libro “USINA POSPORNO: disidencia sexual, arte y autogestión en la pospornografía” (Editorial Títulos, 2014) que ha sido presentado en ciudades de Argentina, México, Brasil y Chile. Colabora en medios de comunicación gráficos y digitales. Ha realizado workshops, seminarios y disertaciones sobre pospornografía en festivales artísticos, jornadas activistas y actividades académicas.
Realizador audiovisual, guionista, investigador y docente egresado de la carrera de cine de la Universidad de Buenos Aires. Desde 2012 realiza trabajo de investigación y archivo en el equipo dirigido por Fernando Davis “Micropolíticas de la desobediencia sexual en el arte”. Ha publicado y presentado artículos en congresos nacionales e internacionales vinculados al cruce entre imágenes, feminismos y disidencias sexuales. Además ha mantenido una carrera como docente en programas de formación tanto de grado como de posgrado en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad de La Plata. Como guionista y realizador, sus trabajos se presentaron en países como Chile, Uruguay, Colombia, Brasil, Cuba, Francia, Croacia y
Bulgaria. Su ópera prima documental Implantación, se estrenó en el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente de 2016. Es maestrando en Estudios Literarios Latinoamericanos por UNTREF.
Julia Cossani Artista visual y docente. Desde chica se formó en educación por el arte, egresó de la escuela de Bellas Artes en Buenos Aires y actualmente es tesista de la Licenciatura en Artes Visuales de la U.N.A. Se dedica a la docencia en distintas instituciones educativas de Educación por el arte y dicta talleres en la Universidad Nacional de las Artes. En 2009 quedó seleccionada en el Salón Prilidiano Pueyrredón y en el 2010 recibió la beca para la Producción Disciplinar Artística o Científica Individual. IUNA. Visuales. Participó en múltiples espacios con muestras individuales y colectivas, algunos de ellos fueron: 3º Bienal de Arte Erótico en Santa Fe, Galería Pasaje 17, Galería Apetitt, C. C. Recoleta, I.M.E.P.A y Centro Cultural de la Cooperación. Formó parte de acciones en el espacio público como integrante de diferentes colectivos: “Cartografía Barrial”, mapeo colectivo, social y cultural de La Paternal/ “¿Querés Tierra? Tomá” y “Plantá trigo en tu balcón” del Grupo Bardo. En la actualidad interviene espacios con acciones gráficas-performáticas junto a un grupo de artistas mujeres. Desde el 2015 coordina el Encuentro de Experiencias Serigráficas en la U.N.A. y forma parte del equipo de coordinación de P.A.P.O. en L.P.E.P.
Nico Hache Comunicador y docente, inscribe su trabajo en los múltiples cruces entre el arte, la política, la tecnología y la comunicación. Ha editado dos revistas y colaborado en diversos medios gráficos argentinos y españoles. Paralelamente ha experimentado distintos lenguajes visuales -fotografía, collage, video, diseño digital y dibujo-. En la ciudad de Barcelona, donde vivió durante siete años, formó parte del colectivo Enmedio y del Taller de Acción Fotográfica! coordinado por Oriana Eliçabe, desde donde exploró el uso de la fotografía y otros medios en el espacio público. Además participó en diferentes colectivos artísticos y políticos y trabajó en torno a la emergencia del 15M. Desde 2013 integra el equipo de coordinación de PAPO - Paternal Arte y Política en La Paternal Espacio Proyecto y se desempeña como docente en escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires. Actualmente trabaja en el área de Medios Interactivos de la Televisión Pública Argentina y realiza una investigación sobre la producción social de significaciones en torno a la ideología neoliberal como tesina final de la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Buenos Aires.
http://juliacossani.tumblr.com/
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indice Presentación del trabajo 2015 1.1 Una plataforma artístico-política para habitar el desborde.
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1.2 Desde la praxis.
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2. Mesas redondas. Debates para la construcción de pensamientos colectivos
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2.1 Estrategias para intervenir lo Público. Experiencias en prácticas en contexto y espacio público.
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2.2 (Des)Bordando: experiencias en el cruce arte/sexo/política.
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3. Formación / Investigación. Diálogos y acercamientos teóricos sobre el cruce arte/política/sexo
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4. Ciclo PAPO 2015. Acciones en el espacio público.
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4.1 Punto de partida, el territorio.
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4.2 Proyectos seleccionados.
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4.3 Haciendo un pozo reaparecieron las napas (por Julia Cossani)
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5. Muestra colectiva.
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5.1 PAPO Sexopolíticas en la Noche de los Museos.
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5.2 Tejiendo muestra con otrxs.
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5.3 La calle y la sala (por Nico Hache)
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6. Palabras, experiencia y aprendizaje de artistas PAPO
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6.1 En principio era el verbo (por Celina Capello).
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6.2 Sexopolíticas: Metáforas subversivas de la experiencia (Claudia Araya López).
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7. Equipo PAPO 2015
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Redacción: Nico Hache, Julia Cossani, Laura Milano, Romina Cariola, Fermín Acosta. Edición: Laura Milano. Diseño: Pablo Varela. Registro fotográfico: Martín Nieva. 85
S A C I T Í L SEXOPO
arte, sexo y política
CON EL APOYO DE:
www.lapaternal.org