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artes y oficios
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EL CUERO
Este libro versa sobre las técnicas fundamentales de trabajo del cuero, concretamente del curtido al vegetal, expuestas de manera didáctica y adecuada para las personas interesadas en este arte desde una vertiente práctica. Se tratan sólo las pieles conseguidas a partir de animales domésticos que son fuente de alimentación, obviando las pieles de animales no domésticos y de los que son criados en cautividad a causa de su piel. En sus páginas
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EL CUERO Maria Teresa Lladó i Riba Eva Pascual i Miró
Las técnicas para crear objetos de cuero explicadas con rigor y claridad
se enseñan, tras un breve repaso a la historia y al curtido, las principales pieles y sus características para identificarlas, los materiales y herramientas que se emplean y los procesos de las diferentes técnicas. En el último capítulo se muestra paso a paso la confección de ocho proyectos originales con las distintas técnicas de trabajo.
ISBN 978-84-342-2887-0
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INTRODUCCIÓN, 6 El cuero Proyecto y realización de Parramón Ediciones, S.A. Dirección editorial: María Fernanda Canal Editor: Tomàs Ubach Ayudante de edición y archivo iconográfico: Mª Carmen Ramos
EL ARTE EN LA PIEL Y EL CURTIDO, 8 Los nobles oficios de la piel: el soporte material, 10 El arte de la piel en Europa, 12 El mundo latinoamericano, 17 El arte de la piel en Oriente, 18 África, 19 La piel: características y estructura, 20 El curtido de las pieles, 21
Textos: Eva Pascual i Miró, con la colaboración de Félix de la Fuente y Anna Soler en “El arte en la piel”, y de Felip Combalia y Jaume Soler en “El curtido”. Realización de los ejercicios: Maria Teresa Lladó i Riba, con la colaboración de José Luis Bazán, de Artenazarí en “Bandeja con mosaico” y “Vaciabolsillos”. Diseño de la colección: Josep Guasch Fotografías: Nos & Soto, Museu de l’Art de la Pell, de Vic (Historia), Felip Combalia (curtido) y Sergi Oriola (pág. 21). Dibujos infográficos: Jaume Farrés Maquetación: Estudi Guasch, S.L. Dirección de producción: Rafael Marfil Producción: Manel Sánchez Segunda edición: junio de 2008 © 2006 Parramón Ediciones, S.A. Derechos exclusivos de edición para todo el mundo. Ronda de Sant Pere, 5, 4ª planta 08010 Barcelona (España) Empresa del Grupo Editorial Norma de América Latina www.parramon.com Preimpresión: Pacmer, S.A. Impresión: Gráficas Estella, S.A. ISBN: 978-84-342-2887-0 Depósito legal: NA-1532-2008 Impreso en España
Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra mediante cualquier recurso o procedimiento, comprendidos la impresión, la reprografía, el microfilm, el tratamiento informático o cualquier otro sistema, sin permiso escrito de la editorial.
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MATERIALES Y HERRAMIENTAS, 26 Las pieles, 28 Materiales auxiliares, 34 Materiales para acabados, 36 Herramientas, 38 Herramientas auxiliares, 42 Máquinas, 44
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PROCESOS TÉCNICOS, 46 El corte, 48 El grabado, 52 El repujado y el labrado, 56 El moldeado, 63 Cosidos y trenzados, 70 Decoraciones y acabados, 79
PASO A PASO, 84 Cesta trenzada, 86 Bandeja con mosaico, 96 Reloj con aplicación, 104 Marco con decoración cosida, 112 Vaciabolsillos, 122 Caja repujada, 128 Álbum repujado y con aplicación, 136 Espejo con paisaje, 146 GALERÍA, 154 GLOSARIO, 158 BIBLIOGRAFÍA Y AGRADECIMIENTOS, 160
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Las pieles
Vaquetilla Es la variedad de piel curtida al vegetal más empleada (también la de mayor difusión) para el trabajo artístico en el taller. La vaquetilla, también denominada vaqueta, es un cuero bovino, habitualmente de ternera, fino y bastante flexible. Sus características, que se derivan del tipo de curtido y de la piel animal en sí, hacen de esta variedad de cuero la más versátil, interesante y adecuada para desarrollar trabajos creativos. Así pues, será el material fundamental de la presente obra, tanto en lo que atañe a los procesos técnicos como a los ejercicios paso a paso.
䉱 Vaquetilla. 䉴 1. Para efectuar un flisado a mano, se dobla la pieza de cuero, por lo general de la falda, flor con flor y en sentido transversal, y se frotan enérgicamente las dos superficies hasta conseguir una textura uniforme. A continuación, se efectúa un doblez transversal y se procede de igual manera.
䉲 2. Para finalizar el proceso se efectúa un doblez en diagonal y se frotan las dos superficies de la flor.
Flisado manual Como se ha explicado con anterioridad, una de las muchas posibilidades que ofrece el cuero curtido al vegetal es la consecución de un acabado flisado. El flisado, denominado también corcheado por los rodillos de corcho que se emplean en el proceso industrial, es un proceso que consiste, en esencia, en producir una textura en el lado de la flor del cuero, dotándolo, a la vez, de mayor flexibilidad. Se realiza doblando el cuero flor con flor, generalmente de la falda, y frotando las superficies entre sí; de este modo se consigue una textura determinada por el tipo de flor del cuero, es lo que se denomina “levantar el grano”. Si el doblez se efectúa en una sola dirección se obtiene una textura simple y más o menos lineal. Si se practica un doblez transversal al anterior el resultado es una textura con un patrón cruzado. Finalmente, si se realiza un tercer doblez en diagonal a los anteriores se logra una textura mayor y de forma reticulada. En cada uno de estos procesos el cuero se torna más flexible y dúctil. 䉲 3. La pieza de cuero flisado a mano presenta una textura reticulada con una superficie rugosa. Obsérvese la diferencia con un fragmento de cuero idéntico sin flisar.
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Materiales y herramientas
Tipos de pieles Pergamino El pergamino es una piel sin curtir, es decir, una piel cruda. La denominación actual procede del latín pergami num, que a su vez viene del griego, literalmente “de Pérgamo”, aludiendo a la ciudad en que se preparaban pieles para escribir. Así pues, la denominación actual de esta variedad de piel remite tanto a su origen como a su uso en la historia como soporte de la escritura. El pergamino se elabora con pieles delgadas de oveja, ternero o cabra, aunque también se puede emplear piel de asno. La piel se somete a un lavado con agua tibia, se trata con cal para eliminar el pelo, se desengrasa y se seca, siendo raspadas con piedra tosca mientras se las alisa durante todo el proceso. El resultado es una piel con un aspecto muy característico, de tonalidad blanco amari-
llenta con la superficie lisa y muy fina, algo rígida y opaca o ligeramente traslúcida, dependiendo de la especie animal de la que procede. Los pergaminos pueden presentar distintas tonalidades, desde el blanco al blanco amarillo o tostado. Badana Es una piel de oveja o carnero curtida al vegetal, frecuentemente con zumaque. La denominación actual procede del árabe de la península Ibérica bat. ána, y éste, a su vez, del árabe clásico bit. a- nah, que significa “forro”. El zumaque es un arbusto de la familia de las Anacardiáceas; presenta frutos y semillas rojizos que le han dado su nombre (del arameo summa- q, rojo, que luego pasó al árabe), y que se emplean en el curtido de pieles por su alto contenido en taninos. La badana es una piel delgada, muy flexible, lisa y de gran suavidad, y un tacto fino y agradable.
Gamuza Es una piel ovina curtida al aceite. Aunque originariamente se empleaba piel de rebeco (de donde procede su denominación, pues este animal también recibe el nombre de gamuza), en la actualidad se utilizan pieles de oveja o de cabra. Es una piel cuya flor ha sido separada mediante raspado y después curtida a partir de un curtido combinado o un curtido puro al aceite. El combinado comprende un primer curtido al cromo y un segundo proceso al aceite. El curtido al aceite, ya sea combinado o solo, es el que confiere la calidad final a la piel. Se emplean aceites de pescado o animales marinos, que curten la piel mediante un proceso en el que interviene la oxidación y otros cambios químicos de los aceites, dando como resultado una combinación química de los derivados del aceite con la piel. La gamuza es una piel de calidad, muy fina, de color amarillo cremoso a blanquecino, de aspecto y tacto afelpado por los dos lados, en extremo suave y flexible, con un aspecto general que recuerda las cualidades de los tejidos, y es lavable.
䉳 El pergamino es una piel de color blancuzco que ofrece una superficie lisa de aspecto opaco.
䉳 Observado a contraluz, el pergamino adquiere una traslucidez característica. En esta imagen se observan las marcas dejadas por las venas del animal y la zona del lomo donde la piel presenta mayor grosor.
䉲 Gamuza.
䉳 Badana.
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El repujado y el labrado as técnicas del repujado y el labrado se basan en el mismo principio, la creación de motivos en relieve en el cuero. Aunque sus procesos técnicos difieren, de hecho son técnicas casi antagónicas, y las soluciones formales son radicalmente distintas, no pocas veces se confunden. Así, mientras que el repujado consiste en dotar de relieve al cuero trabajándolo desde ambos lados, el labrado se basa en el corte superficial y el hendido de zonas del cuero por el lado flor.
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Repujado El repujado es una técnica decorativa que consiste en dotar de relieve al cuero, configurando uno o varios motivos resaltados y en tres dimensiones. A diferencia del grabado y del labrado, en el repujado se trabaja la piel principalmente por el lado carne, presionándola para levantar el cuero y conseguir una
forma con relieve. Sin embargo, también se trabaja desde el lado de la flor. Es un proceso que combina el trabajo desde ambos lados: desde el lado carne para proporcionar volumen y desde el lado flor para perfilar y marcar planos. El repujado se realiza sobre cuero curtido al vegetal. El más indicado es la vaquetilla, en especial de un grosor entre 1,2 y 1,5 mm, aunque algunos artistas prefieren gruesos superiores a 2 mm. Se humedece el cuero un poco y se transfiere el diseño sobre la cara de la flor, luego se perfila el motivo con los buriles adecuados. Acto seguido, se trabaja por el lado carne para darle volumen. Se continúa el proceso trabajando alternativamente uno y otro lado, empleando diferentes buriles hasta conseguir los volúmenes deseados. Para realizar este proceso con éxito el cuero debe ser algo flexible, por lo que quizás haya que humedecerlo varias veces durante el trabajo.
䉲 1. Se realiza el diseño sobre un papel; en este caso, un motivo marino, una caracola, repujado. 䉱 Maria Teresa Lladó, Espejo, 1998. Vaquetilla repujada con incisiones, grabada y teñida, trenzado decorativo, soporte de madera, 127 ⫻ 77 ⫻ 4,3 cm. 䉳 2. Se emplea vaquetilla de entre 1,2 y 1,5 mm de grosor. Se humedece de forma homogénea la superficie del cuero (lado flor) con un vaporizador provisto de agua fría.
䉱 3. Se sitúa el diseño sobre la vaquetilla y se sujeta firmemente con unas pinzas para tender la ropa, a fin de evitar posibles desplazamientos. Se repasan las líneas con el trazador efectuando presión para marcar el cuero.
䉳 4. El resultado es el diseño marcado sobre el lado flor de la vaquetilla.
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Procesos técnicos
䉱 5. Se repasa el contorno exterior del diseño con el buril curvo acabado en punta. A continuación, con el buril de punta de bola pequeña se repasan las líneas interiores de la caracola. 䉴 6. Se sujeta el cuero con una mano y se trabaja el motivo desde el lado carne. Se presiona fuertemente con el buril de bola sobre el cuero, a la vez que se desplaza siguiendo las formas del motivo. Se emplean diferentes tamaños de bolas, dependiendo de las zonas que haya que trabajar y del grado de relieve deseado.
䉱 8. Una vez conseguido el volumen deseado, se aplica una capa de cola blanca sobre el reverso del diseño (lado carne) para otorgar rigidez al cuero, contribuyendo así a mantener la forma. Se deja secar durante unas 12 horas. La cola, una vez seca, se convierte en una película resistente y flexible que ayuda a mantener la forma, permitiendo los trabajos posteriores.
䉱 7. El resultado es el motivo en relieve. Contrasta con el resto de la pieza de cuero, pero aún no presenta los relieves propios de una caracola.
䉱 9. Se marcan las uniones de las vueltas de la valva mediante un buril con forma de cuchara. Se presiona suavemente por el lado flor, resiguiendo la parte interior de cada vuelta, justo sobre la línea que marca la zona de unión de las formas espirales de la valva, y se va perfilando la forma. Para ello, se emplea un buril con punta de cuchara muy estrecho y con una suave curvatura.
䉳 Buril con punta de cuchara muy estrecho.
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Decoraciones y acabados
ALGUNAS POSIBILIDADES DE POLICROMADO Goteado
Entre las múltiples posibilidades que ofrecen los tintes destaca el goteado. En esencia, consiste en policromar la piel mediante el goteado directo, lo cual permite conseguir una gran variedad de tonalidades al penetrar de manera diferente cada gota y deslizarse el tinte por la piel. En este ejemplo se realiza un goteado con reservas de goma arábiga. Primero se confeccionan las zonas de reserva dejando gotear la goma arábiga desde el recipiente. Se deja secar por completo.
Los tintes se aplican con ayuda de un cuentagotas. Primero se aplican gotas de color rojo. Se deja secar.
Seguidamente, se realiza el goteo con un tinte de color verde pálido, y una vez seco se efectúa un tercer goteado con un tinte de color pardo.
Efecto con papel
Para conseguir efectos en la superficie de una obra o en el fondo de una composición o motivo es posible emplear una gran variedad de materiales, entre los que destaca el papel. Éste proporciona un efecto moteado desigual de innegable valor estético. Se dispone el tinte de color verde en un recipiente amplio, se confecciona una muñequilla con papel de embalar arrugado y se moja en el tinte. Se descarga el exceso de tinte sobre una superficie absorbente y se aplica sobre el cuero dando pequeños toques, golpeando suavemente. Se deja secar.
Se repite el proceso con el tinte de color rojo, efectuando las aplicaciones de la manera más homogénea posible, y se deja secar. En este caso, una vez acabado el fondo de la composición, se coloreó el motivo floral con rotulador y se perfiló el contorno con rotulador negro.
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Efecto con cordel
Otros materiales que ofrecen múltiples posibilidades para crear efectos son las cuerdas y los cordeles. Se emplean de la misma manera que el papel, y el resultado es un efecto basado en la forma y textura de los mismos. En este caso, se empleó un cordel muy fino que dio como resultado un tenue moteado a rayas.
Estampado
Otro recurso interesante para el acabado y la decoración del cuero es el estampado. Consiste en marcar un motivo sobre la superficie mediante de una plantilla o un sello cargado de color o tinte. Éstos se pueden adquirir en comercios especializados o confeccionarse en el taller según las necesidades de cada trabajo. Existe una gran variedad de materiales adecuados para estampar. Aquí, se emplea un elemento natural como sello para estampar con color una badana.
Veladuras con cera
También es posible conseguir efectos de veladuras sobre la piel (en este caso badana) aplicando tintes con ligeros toques de pincel; con ello se obtienen colores difuminados. En este caso, se aplicó sobre una badana un tinte de tono rojo pálido mediante pequeños toques de pincel redondo y se dejó secar. Luego se aplicó, de igual manera, un tono verde pálido. Una vez seco, se dio cera de carnauba también mediante pequeños toques de pincel. El resultado son unas veladuras muy suaves que se combinan con zonas brillantes por efecto de la cera.
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Procesos técnicos
Pátina La pátina es el color y aspecto que adquiere la superficie de cierto material de manera natural por efecto del paso del tiempo. Uno de los acabados más usuales en los trabajos de cuero es la pátina de envejecimiento, para dotar a la superficie de la piel de un aspecto antiguo o envejecido. En esencia, consiste en modificar el tono existente mediante la aplicación de determinados productos para proporcionar los valores cromáticos propios del paso de los años. Se puede emplear para envejecer policromados, ya sean coloreados o al tinte, e incluso sobre dorados. También se emplea para enfatizar o resaltar los valores formales y volumétricos de algunos trabajos de grabado con punzones, creando contraste entre las zonas con pátina y las que permanecen sin recubrimiento. Esta pátina se consigue tiñendo la superficie del cuero con betún de Judea previamente disuelto en aguarrás. La proporción de la disolución variará en función de la concentración original del betún, diferente según la marca, el tiempo transcurrido desde que se abrió el envase, pues tiende a tornarse más concentrado a medida que se evaporan los solventes que contiene, y el resultado final deseado, dependiendo del tono que se desee conseguir. Por ello, es imprescindible efectuar varias muestras con diferentes concentraciones sobre pieles que no han de ser utilizadas antes de aplicar la pátina sobre la obra.
䉳 1. Una vez perfilado el motivo y dado el fondo, con una paletina mediana de pelo medio se aplica una capa de betún de Judea disuelto en aguarrás de manera homogénea sobre la piel.
䉲 2. Se retira el exceso de pátina frotando la superficie con un trapo de algodón con aguarrás
䉲 3. El tono general de la piel aparece más oscuro y profundo. La pátina resalta el contorno del motivo repujado.
䉳 4. Antes de que se seque por completo, se dispone una pequeña cantidad de polvo de talco sobre la piel y se frota con un trapo de algodón limpio.
䉴 5. Aspecto del motivo repujado con un acabado de pátina que simula envejecido.
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Este libro versa sobre las técnicas fundamentales de trabajo del cuero, concretamente del curtido al vegetal, expuestas de manera didáctica y adecuada para las personas interesadas en este arte desde una vertiente práctica. Se tratan sólo las pieles conseguidas a partir de animales domésticos que son fuente de alimentación, obviando las pieles de animales no domésticos y de los que son criados en cautividad a causa de su piel. En sus páginas
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Las técnicas para crear objetos de cuero explicadas con rigor y claridad
se enseñan, tras un breve repaso a la historia y al curtido, las principales pieles y sus características para identificarlas, los materiales y herramientas que se emplean y los procesos de las diferentes técnicas. En el último capítulo se muestra paso a paso la confección de ocho proyectos originales con las distintas técnicas de trabajo.
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