Estimadas autoridades, Querido equipo FEUC 2008, Compañeros, amigas y amigos,
Si despedirse de un año de Federación ya es difícil, mucho más es hacerlo de toda una vida en la Universidad. No porque nos hayamos quedado pegados muchos años, sino porque para muchos de nosotros el paso por la FEUC fue el cierre de algo mucho más grande que "el comienzo de nuestros mejores años"… Este 2008 significó cerramos una etapa que cambió radicalmente nuestras vidas. Hace un año dimos el “vamos” a un proyecto de Federación que soñaba con darle un sello distinto a la dirigencia estudiantil. Una FEUC con convicciones claras, que buscaba impregnar un sello de trabajo enfocado 100% en nuestros compañeros. Una FEUC presente en todo momento, tanto en las personas como en la UC y en nuestra sociedad. Con este objetivo comenzamos este gran año de trabajo. Hemos querido dejar un recuerdo de lo que fue el 2008 en cada uno de sus asientos, y que también pudieron verlo en el increíble video que acabamos de ver. “Más que hacer, hacer y hacer, tenemos que hacer y dejar hacer”, es algo que dijimos reiteradamente durante nuestra campaña y que nos esforzamos por cumplir este año. No sólo a través de la asignación de $10 millones en fondos concursables, que fueron en directo beneficio de cerca de 100 proyectos emprendidos por nuestros compañeros. También se reflejó en un continuo esfuerzo por poner más y mejores oportunidades al alcance de nuestros compañeros. Lo vimos en la música, con el festival de bandas de alumnos más grande que la UC haya visto. Más de 60 grupos de compañeros dieron forma a una nueva tradición: el Rock&PUC. Además, los 5 finalistas se llevaron una gran anécdota: tocaron en el mismo escenario que Los Tres. También lo vimos en el deporte, con un precio preferencial para que más de 500 compañeros pudieran subir a la nieve, muchos por primera vez, en el llamado Día Blanco. Se ganaron más de un moretón, pero sobre todo una experiencia inolvidable.
Las comunicaciones no se quedaron atrás. Nos preocupamos de que cada semana nuestros compañeros encontraran en sus correos el boletín semanal "FEUC en 1 minuto". Lo habíamos dicho: ¡Nadie se quedará sin postular a una beca por no enterarse! El record en la cantidad de postulantes a las becas FEUC nos permite decir felices: ¡cumplimos! Es importante destacar las dos becas nuevas de este año: de materiales y de Preuniversitario UC. Estas nuevas becas son un pequeño ejemplo de que una gestión enfocada en nuestros compañeros, logró obtener más y mejores beneficios. También lo vivimos junto a la comunidad UC, con la celebración de la Navidad y del Día del Niño junto a las familias de nuestros funcionarios y auxiliares. Porque profesores, funcionarios, administrativos y alumnos, estamos llamados a compartir como una gran familia. Pero además de todas estas iniciativas, teníamos algo muy importante que cambiar a nivel país: no podía ser que la única manera en la que los jóvenes se manifiestan, fuera a través de discursos sin fondo y violentas manifestaciones. Lo que Chile necesita es una UC que se atreva a trabajar seriamente por aportar y proponer al país. Una juventud que se atreva a asumir la responsabilidad de promover los cambios que se necesitan, y que luche por hacer de esta Universidad la mejor Universidad Católica que Chile puede tener. Pero no se contribuye a estos cambios simplemente declarándolo. ¡Cuántas veces hemos visto pasar a federaciones que apelan a que la Universidad o nuestro país no están jugando el rol que deben cumplir, pero que sólo se quedan en manifestar su descontento! Qué fácil y mezquino es esto. Hace mucho tiempo se necesitaba dar un vuelco a este pobre estilo de dirigencia, que tanto nos desprestigia como jóvenes y como universitarios. Por eso creamos el Centro de Estudios de la Federación, Ce FEUC. Nos interesaba sacar la voz de los alumnos UC, pero mediante análisis y propuestas serias. Esto es lo que se espera cuando se dice que los universitarios, desde nuestro rol, tenemos mucho que decir y mucho que aportar. Por eso fuimos los primeros universitarios en exponer ante el Senado sobre la LGE. Y también denunciamos, con una gran acogida por parte de la Comisión de Educación del Senado, los graves problemas que genera el sistema de Aranceles de Referencia. El desafío que tiene la próxima Federación en estos temas es no volver a tropezar con los antiguos fantasmas que penan a su sector, sino que tomar este legado para contribuir seria y propositivamente a la Universidad y al país.
Pero si pudimos sacar adelante tantas cosas fue porque Dios puso frente a nosotros personas realmente increíbles. Y si dar las gracias era importante al comenzar un año, es imposible no hacerlo hoy, cuando sabemos que todo lo logrado durante el 2008 ha sido posible gracias todas estas personas que se la jugaron con todo por la FEUC, al más puro estilo gremialista. ¡Gracias a todos! -
A los jefes y directores de área, por su compromiso sin igual.
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A los encargados de cada uno de proyectos, que se entregaron al 100%.
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A los Consejeros Territoriales que se presentaron junto a nosotros, por ser un ejemplo fiel de ese sello gremialista que nos honra y nos distingue.
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Al equipo administrativo de la FEUC. A las secretarias: la Gioco, Gloria, Ana Luisa, Lorena, Susana, Myriam, Karina, Paula. Muchas gracias por el cariño, la disposición y ¡por apañarnos siempre! Estoy seguro de que no fue fácil. Sobre todo porque cada cierto tiempo aparecía una nueva pega como el Día Blanco o los miles de cuadernos que había que repartir. Gracias a Don Sergio, que ya lleva 40 años en la FEUC. Sin duda un ejemplo vivo de que el paso por la FEUC no es algo de un año, sino que el comienzo de una vida de servicio. Para nosotros, ustedes marcaron esa diferencia que nos hará recordarlos siempre.
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A cada uno de los administradores de campus y a Carlos González. Quizás quienes más dolores de cabeza sufren con el paso de una Federación
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A las autoridades de nuestra Universidad, con quienes tuvimos discusiones y grandes acuerdos. Gracias por tener siempre una gran disposición.
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A nuestros amigos y pololas: sin duda un año difícil de llevar. Muchas gracias por estar siempre ahí, justo cuando lo necesitábamos.
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A nuestras familias, no solo a la mía, sino a la de cada integrante de esta directiva. Sé que no fue sólo un año y que cuando al fin parecía que todo iba a terminar siempre aparecía "un nuevo desafío que enfrentar". ¡Qué paciencia! Pero créanme: cada minuto fuera de nuestras casas bien valió la pena. No sólo por lo mucho que crecimos, sino por el gran aporte que - gracias a su paciencia - cada uno ellos pudo aportar a la Universidad.
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A cada una de las personas que - de una u otra forma - fueron parte del equipo FEUC. Desde quien llegó un día a repartir temprano el Mosaico hasta quienes estuvieron día a día dispuestos a hacer absolutamente cualquier trabajo necesario. Gracias a quienes trasnocharon cada vez que teníamos que hacer un video, como el que mostramos hoy.
Gracias a tantos incondicionales que, en silencio, siempre estuvieron dispuestos a jugársela con todo por la FEUC. -
Al gran equipo con el cual me tocó tanto compartir. Quedarán increíbles recuerdos de lo que pudimos vivir en un año de servicio a nuestra Universidad:
Diego: Un gigante. No sólo por la estatura, sino por cómo sacabas adelante cada cosa que te proponías: siempre con la mayor dedicación. Grande de corazón, grande en las ideas y grande con las personas. Estoy seguro de que aún tienes mucho que entregar a nuestra sociedad.
Rosario: La vida universitaria era lo tuyo y vaya que te hiciste cargo, pero trabajaste por algo mucho más importante: le diste vida a esta FEUC. No había visto a alguien con tal capacidad para hacer sentir parte a cada persona que pasaba por la Federación. La alegría que le dabas a este equipo fue lo que lo hizo más humano. Gracias porque sin ti no habríamos podido contagiar a tantas personas.
Carito: Nos ordenabas cuando había que ordenarnos. Y es que el trabajo en la Federación debía tener siempre una base: la excelencia. Gracias por darle ese toque de rigurosidad a cada espacio. Nos mostraste a todos que la mayor muestra de un trabajo con cariño hacia el otro era el hacerlo excelentemente. Gracias por ser el ejemplo diario de esa dedicación por las personas y, en especial, por cada uno de nosotros.
Claudio: Si hay algo que todos aprendimos este año es que siempre hay una vuelta más que darle. Y es que tomarle el peso a cada una de nuestras acciones y decisiones - por pequeñas que a veces pudieran parecer - era algo clave para hacer una gran labor. Sin duda nos enseñaste a todos una preocupación por los gestos y detalles sin igual. Ambos sabemos que sólo hay algo más complicado que una persona testaruda, y son dos testarudos juntos. Pero creo que esos dos testarudos aprendieron a “no-coincidir” y a trabajar juntos por un gran ideal.
Mono: La responsabilidad en persona. No había pega ni labor encomendada que no sacaras adelante perfectamente. Quizás te tocó una de las labores menos apasionantes del año: los auspicios, pero eso no hace más que confirmarme el gran servidor que eres. Tienes tan clara la importancia del servicio gremialista en la Universidad que espero te quede mucho por entregar. Gracias por el apañar absolutamente en todo, en especial durante todo este año, y por siempre tomarse con gracia y alegría el trabajo encomendado. Vaya que hacen falta más ejemplos como tú: de alegría y responsabilidad. Fue un año notable junto a uno de mis grandes amigos.
Gonzalo: La humildad y la sencillez en todo momento. Te convertiste en el brazo derecho y confidente de todos, y eso es lo que te hace tan grande. Si esta FEUC pudo ser una Federación más cercana y presente fue gracias a esa entrega sin horario ni límite que siempre diste. Realmente un ejemplo de entrega impresionante. Este año no hizo más que confirmarme el gran amigo que me he ganado. Sólo me queda agradecerte especialmente por haber apañado en este gran desafío, como siempre…
De verdad doy gracias por este tremendo equipo. Por estas 6 tremendas personas que tuve la suerte de conocer. Soy testigo de la entrega absoluta que dieron durante todo este año. Gracias amigos. -
Finalmente, muchas gracias a Dios por la oportunidad que nos ha dado. Sabemos que muchas veces nos caímos y equivocamos, pero sinceramente esperamos haber sido fieles instrumentos suyos durante todo este año. Por lo menos nos vamos tranquilos, sabiendo que - más allá de los errores - lo dejamos todo en la cancha, por nuestros compañeros y por nuestra Universidad.
A la directiva entrante, los felicito por atreverse a asumir la FEUC. Desde ya les adelanto, eso sí, dos grandes desafíos que deberán enfrentar, y frente a los cuales sinceramente espero que estén a la altura: El primero tiene que ver con los aranceles. Este año logramos resolver el problema de la ya conocida cláusula en la matrícula de los novatos, volviendo a la antigua política donde sólo son ajustados los aranceles de entrada. Ahora les queda a ustedes una gran responsabilidad. Para lograr resultados con los aranceles es necesario que la Federación no se quede callada y que esté más presente que nunca, pero con propuestas y soluciones concretas a este problema, tal como lo prometieron. Espero que ya hayan comenzado los
estudios respecto a los
aranceles, anunciados durante la campaña, para poder sugerir alternativas viables. En un año más nuestros compañeros los juzgarán por esta y otras tareas. Su segundo gran desafío será saber dirigir una Federación durante elecciones presidenciales, donde nunca se debe olvidar que la FEUC está al servicio de los estudiantes y no de intereses ajenos. No quiero entrar a juzgar quién es o no responsable, pero las señales que hemos visto hasta ahora resultan muy preocupantes: que personeros de algunos partidos políticos aparezcan celebrando por el triunfo de una u otra lista a la FEUC es inaceptable, impresentable. Si los alumnos de esta Universidad apoyaron a una lista ganadora, jamás fue por algún mérito partidista. Muy por el contrario, los alumnos de la UC ya eligieron jugársela por una dirigencia que, si bien puede ser encabezada por un movimiento u otro, sea siempre libre de influencias externas.
Por lo mismo, a quienes estando afuera esperan que la FEUC sea un medio para sus fines propios, déjenme decirles: ¡los partidos políticos nada tienen que hacer en la UC! Nadie ha votado por ellos y nadie les debe cuenta alguna del trabajo realizado. Espero confiado que eso lo compartamos buena parte de los presentes y que nunca más los partidos políticos se involucren ni presencial ni financieramente en las campañas FEUC. Por último, me gustaría decirles que ojalá aprovechen el inmenso potencial que hay en la UC. Aquí muchos jóvenes ya se la juegan por aportar a nuestra sociedad, no les den la espalda buscando incorporar proyectos externos. Eso sería desconocer la gran capacidad que la UC tiene para cambiar el país. Lo importante es que los jóvenes - en especial los de la UC - nos la juguemos y trabajemos juntos por aportar con todas nuestras herramientas a esta sociedad que tanto nos necesita. Esperamos ver una Federación que, más allá de su pensamiento, destine sus esfuerzos en lo que los estudiantes de la UC estamos llamados a defender y promover: la estabilidad y apoyo a las familias, la libertad de elegir la educación que queremos y la promoción de una sociedad más justa y solidaria. Son muchos los desafíos que tienen por delante, y sin duda las personas que los apoyaron esperan mucho de ustedes. Y sin duda quienes no lo hicieron se los exigirán también, por una sencilla razón: todos buscamos el bien de nuestra Universidad. Sinceramente espero que tengan éxito en ayudar a nuestros compañeros y a la UC.
Amigos: hoy la FEUC 2008 se acaba, pero no así nuestra misión como jóvenes universitarios. Los gremialistas de la UC seguiremos trabajando arduamente por nuestra Universidad, tal como lo hemos hecho desde hace más de 40 años. Federaciones hemos ganado muchas, y también son muchas las que hemos perdido. Sin embargo, hay algo que nos distingue por sobre todos los otros movimientos que han surgido en la UC: nuestro trabajo va mucho más allá de eso, y no consiste únicamente en ganar la Federación. Para finalizar, quiero dedicar unas palabras a quienes se la jugaron por continuar el legado de este año: Nani, Pato, Tomás, Kike, Mario y Pelao. Gracias por haberse atrevido a encabezar el proyecto gremialista para la FEUC 2009. Las más de 5.500 personas que confiaron en ustedes no lo hicieron en vano y deben estar orgullosos de la campaña impecable que hicieron. No siempre ganar es el resultado que Dios nos tiene preparados. Sólo los más grandes están debidamente preparados para perder, y por ser grandes no les dejaron la pega más fácil – ser Federación – sino que tendrán una labor más difícil, pero a la vez un increíble desafío: transmitir a más personas la invitación de servicio que los gremialistas de la UC llevamos haciendo por más de 40 años. Nos vamos más que esperanzados. El ver hoy a tantos gremialistas, encabezados por 12 consejeros territoriales, y por supuesto por nuestra Consejero Superior, me demuestra que los gremialistas de la UC seguimos más vivos y fuertes que nunca. Xime, el próximo año no estarás sola. Ya cuentas con tus 12 consejeros y también cuentas con todos nosotros. Estoy convencido de que lo tienes todo para poder liderar a este gran grupo humano. No sólo con una gran experiencia trabajando a lo largo de tu vida universitaria, sino que también una calidad humana sencillamente admirable. Estoy seguro de que la UC tendrá a la mejor Consejera Superior que haya tenido.
“Los tiempos los hacen los hombres. Si los tiempos son malos, sé tú bueno, y los tiempos serán mejores”. Podemos decir felices que este 2008, gracias a que ustedes se atrevieron, pudimos hacer de nuestros tiempos, tiempos mejores. El llamado es a no dejarlo aquí. Nada ha acabado, muy por el contrario, ¡queda mucho, mucho por hacer! Algunos ya egresamos, pero son ustedes, este inmenso equipo de gremialistas, quienes tienen este increíble – e incluso envidiable - desafío por delante. De ustedes depende hacerlo realidad. El presente es de nosotros, y sólo de nosotros. Y de su entrega por esta causa depende el futuro de nuestra Universidad. Sean los gremialistas que están llamados a ser: Chile y la UC los necesitan. ¡Atrévanse!, de ustedes depende. ¡Muchas gracias!