Marco jurídico de regulación para los medios de comunicación en México Lic. Héctor Villarreal Ordóñez. Antes que nada quiero agradecer a la Secretaría de Gobernación, a la Subsecretaría Jurídica, la oportunidad para participar en esta interesante mesa sobre la cultura de la legalidad y los medios de comunicación. El tema tiene una importancia especial, más aún en momentos en los que la agenda política y en general el debate público han puesto a los medios de comunicación como un asunto central, destacando la trascendencia de su función en la democracia y, con ello, la necesidad de modernizar las normas jurídicas que rigen sus relaciones con los poderes políticos, económicos y con la sociedad en general. No hay duda, hay pruebas de ello en lo que hemos escuchado, que el marco jurídico para regular la comunicación en México es insuficiente y caduco; lo es ante el avance tecnológico y también lo es ante la creciente demanda de espacios de participación. Pero lo es también a la vista de que el dinero y otros intereses particulares han puesto obstáculos a través del espectro radioeléctrico a la adecuada consolidación de la democracia. Por eso, las recientes reformas constitucionales surgidas en el Senado y aprobadas ya por la mayoría de los congresos locales para limitar la capacidad de influencia no regulada de los consorcios mediáticos en los procesos electorales parecen apuntar en la dirección correcta. Si esos cambios logran llevarse a buen término, también a nivel de los ordenamientos secundarios, ayudarán para acotar a los poderes que, encarnados en las pantallas y micrófonos de la radio y la televisión, han desbordado ambiciones, expectativas y ganancias económicas. A estas nuevas reglas se sumará, esperemos que para bien, el resultado que arrojen los esfuerzos que el Congreso Federal ha emprendido para revisar y modernizar específicamente las leyes en materia de radio, televisión y telecomunicaciones. A fin de cuentas, todas esas reformas podrán redundar en la existencia de normas jurídicas más modernas, más congruentes con la realidad política, económica y social del país que propicien un mayor apego de los medios electrónicos de comunicación en su operación cotidiana precisamente a la legalidad. El concepto de legalidad ha sido definido desde diferentes enfoques, escuelas, posturas, pero más allá de la definición que se adopte, está claro que hablar de legalidad evoca al principio rector de un sistema social en el cual la ley es el punto de partida para regular las conductas que merecen ser tuteladas de manera formal por el derecho.