Por los trabajadores

El primero de mayo de 2023 se conmemoró el Día Internacional de los Trabajadores, celebrando las jornadas de activismo y luchas que llevaron a cabo los movimientos obreros durante la segunda mitad de Siglo XIX y primera mitad del Siglo XX. En aquellos tiempos, los movimientos obreros luchaban por tres reivindicaciones básicas: la jornada de ocho horas, el salario mínimo, y días de descanso, ya fueran por vacaciones o durante fines de semana. Estas conquistas parecen hoy normalizadas y garantizadas por el propio sistema económico, por lo que los movimientos de trabajadores de todo el mundo utilizan esta fecha para rememorar que las conquistas y derechos fueron alcanzados gracias a importantes luchas pasadas. En el caso de Puerto Rico, los trabajadores fueron organizados en movimientos sindicales para finales del Siglo XIX por quien fue Comisionado Residente entre 1932 y 1937, Santiago Iglesias Pantín. Los movimientos obreros en Puerto Rico, estaban organizados principalmente alrededor de las industrias de la caña de azúcar y el tabaco. En la década de 1931 a 1940 hubo muchas huelgas, siendo la más icónica la Huelga de la Caña en 1934, que reclamaba mejores condiciones de empleo y subidas salariales. Estas manifestaciones de los trabajadores crearon gran sensibilidad en una nueva generación de políticos que entendían que el sudor de la frente del trabajo de los puertorriqueños no podía estar subordinado a las ganancias del capital ausentista al costo de una sociedad empobrecida. Por esta razón, cuando se constituye el Estado Libre Asociado como modelo para organizar los asuntos internos de los puertorriqueños, se incorporaron al texto constitucional derechos como la huelga, igual paga por igual salario, la jornada de ocho horas y la paga doble los domingos. La Constitución del Estado Libre Asociado de Puerto Rico de 1952 fue una de avanzada y protectora, tanto de derechos humanos como de derechos de los trabajadores.

A través del tiempo, se ha intentado limitar y eliminar derechos y conquistas de los trabajadores, siendo el ejemplo más reciente los cambios que se hicieron bajo la administración de Ricardo Rosselló a la Ley 80 de relaciones en el empleo. A través de esa mal llamada “reforma laboral” se le quitaron derechos de negociación a los trabajadores, en un período en el cual el gobierno buscaba empobrecer a las clases medias y trabajadoras del país a través de fuertes políticas de austeridad consensuadas entre la administración Rosselló y la Junta de Supervisión Fiscal.

A partir de 2021, una nueva Asamblea Legislativa aprobó una Reforma Laboral a favor de los trabajadores, aprobando un aumento escalonado del salario mínimo y se revivió la Junta de Salario Mínimo, pero terminó siendo impugnado en la sala de la Jueza Taylor Swain. Estas medidas presentadas y aprobadas por la presente Legislatura demuestran que todavía existen funcionarios electos que valoran la importancia del trabajo, y entienden que nadie debe vivir en pobreza. Por esta razón, a pesar del dictamen del tribunal, seguiremos legislando para garantizar que los trabajadores puedan tener la mejor calidad de vida posible.