Siestás considerando viajar por carretera en tu moto, debes saber que resulta importantísimo prepararla y verificar detalles importantes para evitar inconvenientes y hacer que todo funcione sin problemas. Además, no hay mejor sensación que poner a punto tu moto y hacer que funcione como nueva.
Poner a punto la motocicleta es el equivalente a hacerle el servicio a un automóvil regularmente. Esto significa revisar cosas como los niveles de aceite, la calibración de los frenos, el filtro de gasolina, entre otros elementos importantes que no pueden pasarse por alto.
Pon a punto tu moto: 7 consejos indispensables La puesta a punto de una moto es una extensa sesión de mantenimiento donde se verifica si alguna pieza o líquido necesita reemplazo o no. Esto debe hacerse preferiblemente cada 6 meses y puede ser realizado por un profesional o por tí mismo en casa. Si tú mismo deseas poner a punto tu motocicleta, estás en el lugar indicado. Hemos seleccionado los consejos más útiles para que sepas todas las partes que debes revisar. Léelos a continuación.
1. Inspecciona la cadena La cadena es un elemento clave en el rendimiento de la moto, por lo que debe ser revisada mientras realizas la puesta a punto. Es importante que la inspecciones para ver si está floja. Si sientes que se ha aflojado, apriétala con la ayuda de los ajustadores de rueda. Si hay restos de óxido siempre puedes limpiar la cadena con una solución de limpieza.
Ahora bien, una vez realizada la limpieza y el ajuste, es aconsejable usar la mejor grasa para cadena de moto y así estar seguro que tendrá un rendimiento continuo y sin trabas por mucho tiempo.
2. Chequea el aceite de motor, el líquido de los frenos y demás fluidos Los fluidos de la moto deben revisarse regularmente, no solo durante las puestas a punto. Sin embargo, para poder revisarlos debes saber qué fluidos hay en tu motocicleta. Ten en cuenta que la moto consta de 4 líquidos principales que deben ser revisados.
El primero es el aceite de motor, que tiene como propósito mantener los componentes del motor bien lubricados. Si este aceite no se cambia con regularidad, puede causar daños a largo plazo. Se recomienda cambiarlo aproximadamente una vez al año.
El próximo líquido que debe ser revisado es el líquido de frenos. Este líquido optimiza el rendimiento del freno hidráulico y del embrague hidráulico. Se recomienda cambiarlo al menos una vez al año. A continuación, comprueba los niveles de refrigerante para que la temperatura del motor esté siempre controlada. Por último, chequea el aceite de horquilla. Este ayuda a reducir la vibración de una superficie irregular en el manillar y debe cambiarse cada uno o dos años.
3. Carga la batería La batería de la moto es de gran importancia, ya que si se agota en medio de la nada, tendrás dificultades para poder volver a casa o continuar tu camino. Por ello, en la puesta a punto es importante cargar la batería para asegurarte de que estará lista para el próximo viaje. También es importante buscar señales de advertencia de que la batería pudiera estar fallando. Por ejemplo, si notas que las luces están tenues, es una señal de que la batería se está agotando.
4. Enciende las bujías Las bujías son las responsables de encender la mezcla de aire y combustible dentro de los cilindros de tu moto. Esencialmente, son las que mantienen el vehículo en carretera y suelen durar entre 10.000 y 20.000 millas. Puedes verificar el estado de las bujías a través de una inspección visual. Para esto, debes quitar las bujías y chequear si hay depósitos excesivos o electrodos. Si una bujía parece estar
dañada, se recomienda reemplazarla antes de salir a la carretera.
5. Revisa los neumáticos Los reventones y las fugas son una de las formas más comunes de averías en las motos. Por lo tanto, es importante realizar una inspección visual de los neumáticos antes de salir. Cuando las llantas son nuevas, tendrán alrededor de 5 a 6 milímetros de profundidad en la banda de rodadura.
En el propio neumático hay una serie de ranuras, y dentro de ellas hay pequeñas protuberancias que sirven como indicadores de desgaste. Estos indicadores se elevan aproximadamente 1 milímetro desde la banda de rodadura. Por lo tanto, si observas estos bultos, significa que queda alrededor de 1 milímetro de banda de rodadura en los neumáticos y deben ser cambiados.
Finalmente, verifica la fecha del fabricante original en tus llantas. La fecha es un código de cuatro dígitos donde los dos primeros números indican la semana en que se fabricó el neumático y los dos segundos indican el año. Ten en cuenta que los neumáticos de motos caducan después de seis años.
6. Inspecciona los filtros de aire Revisar los filtros de aire es un aspecto importante de la puesta a punto de una motocicleta. En caso de que notes que el filtro de aire está lleno de suciedad, límpialo y vuelve a engrasarlo. Si notas que el filtro de aire no puede limpiarse, visita un taller para ajustarlo y reemplazarlo. Considera que los filtros de aire son cruciales para el encendido y la combustión, por lo que debes asegurarte de que funcionen correctamente.
7. Revisa las pastillas de freno Mantener las pastillas de freno en buen estado garantiza tu seguridad mientras conduces. Puedes verificarlas quitando las pinzas o revisando debajo para ver si las pastillas están desgastadas. En caso de que lo estén, haz que un mecánico o distribuidor las reemplace.
Conla ola de calor que estamos sufriendo más vale protegerse y ser precavido con estas temperaturas, así que aquí van nuestros consejos para soportar el calor en moto.
No es para tomarlo a broma. Tanto el frío como el calor extremo son los mayores enemigos del motociclista, ya que complican nuestras facultades para pilotar.
En la situación actual que estamos viviendo, bajo una ola de calor como no habíamos vivido, es necesario tomar las máximas precauciones si tenemos planeado un viaje en moto o si debemos trabajar en ciudad circulando todo el día.
Y es que para pilotar en moto a temperaturas ambiente elevadas hay que vigilar tanto el equipamiento como los periodos de descanso o la hidratación.
Estos son nuestros consejos generales para soportar el calor en moto.
Para el día a día en la ciudad, fresco pero protegido
-Equipa una chaqueta motorista ventilada, sin forro, pero con protecciones.
-Las manos siempre debes protegerlas, y en verano mejor con unos guantes de caña corta y ventilados, tipo motocross.
-Prohibidas las sandalias; calzado cerrado.
-Debes llevar pantalones de lona con protecciones; nada de pantalones cortos.
-Casco integral con buenas ventilaciones.
-Equipa algún gadget para refrescarte en marcha.
-Si debes circular todo el día procura llevar una botella termo pequeña con agua fresca y bebe regularmente. Si usas un camel back es una idea genial
-Si notas una sensación de sofoco lo mejor es parar a descansar, a la sombra. Bebe agua y quítate la chaqueta
Para viajar, solo o acompañado
-La chaqueta biker debe ser ventilada y con protecciones, evita el color negro
-Los guantes deben ser cerrados y con ventilaciones
-Puedes llevar pantalones biker pero que sean ventilados y a poder ser, evita el color negro
-El casco integral o modular, con buenas ventilaciones -y todas abiertas-
-Las pantallas deriva brisas demasiado elevadas que te cubren totalmente impiden que el aire de la marcha te refresque; si montas una de media altura, mejor
-Equipa algún gadget para refrescarte en marcha
-Imprescindible realizar paradas de descanso cada hora. A ser posible, no hagas muchos quilómetros del tirón y acorta tus etapas de viaje.
-No es recomendable reemprender la marcha tras una comida copiosa y bajo el calor de la tarde
-Procura beber agua muy a menudo; llevar una botella termo en las maletas con agua fresca es buena idea
-Si notas sensación de sofoco para en un área de descanso, quítate la chaqueta, bebe mucha agua y ponte a la sombra. No te automediques.
Dela imaginación de Raymond Wu nace el GYMO-FIT, una moto eléctrica de dimensiones reducidas tipo Motocompo para los desplazamientos diarios por la ciudad y una bicicleta estática para hacer ejercicios en casa cada noche.
La mayoría de las bicicletas estáticas que se compran con la intención de convertirse en una forma cómoda y casera de hacer ejercicio, acaban estacionadas en un rincón de la casa para servir como perchero para la ropa. Pensando en esta realidad tan cotidiana, el diseñador Raymond Wu ha creado el GYMO-FIT con la intención de que la inversión económica que supone adquirir una bicicleta estática tenga sentido: una motocicleta eléctrica para los desplazamientos urbanos y un banco de ejercicios para el hogar.
Los tiempos inciertos de los últimos años han llevado a muchos a buscar una manera de desplazarse por la ciudad que no les obligue a utilizar el transporte urbano. De ahí la popularidad que han alcanzado los vehículos de dos ruedas eléctricos (patinetes, bicicletas, ciclomotores, motocicletas y VMP en general). Además, muchos también han buscado la manera de instalarse su propio gimnasio en casa. De hecho, las bicicletas estáticas han ganado también en popularidad en los últimos tiempos.
Los afortunados poseedores de un GYMO-FIT, que actualmente solo existe como concepto y en la realidad como un prototipo a escala 1:3, podrán darle un doble propósito y no abandonarlo en una habitación perdida de su casa. El diseño se asemeja mucho a la de una motocicleta Motocompo, uno de los vehículos más compactos que se ha diseñado y comercializado con unas líneas de diseño urbanitas. Además, en casa se convierte en una bicicleta estática resistente para mantenerse en forma.
GYMO-FIT tiene tres modos de ejercicio cuando está estacionado firmemente sobre su soporte. Es una bicicleta estática que permite fortalecer los músculos de las piernas pedaleando, tiene un modo de máquina de remo para ejercitar los músculos de la espalda y los hombros, y un ejercitador abdominal para fortalecer los músculos del tronco.
En el modo de ejercicio de remo y abdominales, los pedales se atascan para proporcionar estabilidad. La acción de remar se puede realizar tirando de las empuñaduras y de las bandas elásticas rígidas, mientras que en el modo de entrenamiento abdominal se tira del cojín del asiento con los pies hasta una posición ligeramente más baja.
El diseño de la interfaz de usuario del tablero de instrumentos de GYMO-FIT cambia según la acción realizada. Mientras se viaja en ella, se activa el modo Ride que muestra la velocidad, el mapa del entorno
con las instrucciones de navegación GPS, el nivel de la batería y las condiciones climáticas actuales. En el modo de ejercicio, el usuario ve todos los modos de entrenamiento, las calorías quemadas y las diferentes configuraciones. En ambos, y a modo de red social, el usuario puede conectarse a la comunidad en línea para mantenerse motivado y ascender en las clasificaciones.
Por ahora, el diseñador ha creado un modelo a escala 1:3 de GYMO-FIT para demostrar su viabilidad en entornos del mundo real. El proyecto podría pasar más allá de esta etapa de modelado a escala para convertirse en un prototipo real y, eventualmente, en un producto comercial, aunque ese futuro es todavía algo incierto.
algunos accesorios, como los candados, que pondrán las cosas complicadas a los ladrones.
Las motocicletas están en boca de todos. La pandemia las situó como una herramienta de movilidad ideal para evitar las aglomeraciones del transporte público, el tráfico denso de los autos y mejorar tus tiempos en los trayectos habituales. También son las unidades preferidas por los ladrones y el robo de motocicletas es uno de los delitos más comunes. Es imposible blindar tu máquina más preciada por completo, pero, si quieres complicar la vida al ladrón, estos son los mejores accesorios y trucos para evitar el robo de tu motocicleta.
1. No te confíes en paradas de corta duración. No hay que confiarse con las paradas de corta duración. Si no vas a utilizar ningún sistema antirrobo en este breve espacio de tiempo, al menos bloquea la dirección de la moto antes de quitar las llaves. No te protege totalmente del robo pero, al menos, no podrán llevarse la moto rodando.
2. Utiliza sistemas antirrobo. Aparca la moto en zonas habilitadas para ello y, si existen, ánclala a un elemento fijo desde el chasis o las ruedas. Existen diferentes sistemas antirrobo en el mercado entre los que destacan los candados en forma de U, las cadenas o los candados de disco. Además, algunos sistemas antirrobo incluyen alarmas sonoras que se activan con el movimiento de la moto.
3. Incluye sistemas de localización GPS. Es muy útil para localizar tu moto en caso de robo, ya que puedes conocer su ubicación exacta en ese mismo momento. Es importante localizar la moto lo antes posible para evitar el desguace destinado a la venta de piezas en el mercado negro.
4. No estacionar la moto en lugares con escasa visibilidad o solitarios. Los ladrones elegirán motos que se encuentren en calles o zonas poco transitadas para evitar que otras personas alerten a la policía.
5. Evita el robo de elementos que se encuentran en el interior del baúl. Es recomendable no dejar el casco en el baúl de la moto ya que su cerradura es de fácil acceso para los ladrones. Es más efectivo llevarlo contigo o anclarlo con algún sistema antirrobo.
6. No dejes la documentación oficial del vehículo dentro del baúl o la guantera. En caso de robo, es una información necesaria para formalizar la denuncia.
7. Asegura tu moto incluyendo la cobertura de robo. Los seguros de moto cubren la sustracción de
la moto y los daños ocasionados durante la misma, según la amplitud de garantías contratadas por el conductor.
8. Denuncia el robo lo antes posible. En cuanto detectes que tu moto ha sido robada, ponte en contacto con la policía e interpón la denuncia correspondiente.
Es importante aportar toda la información posible sobre las características de la moto y la situación del vehículo en el momento de la sustracción.
9. Cuidado con los despistes. El despiste es una de las principales causas de robo de motos en nuestro país y es que algo tan obvio como no dejar las llaves puestas ocurre con más frecuencia de lo que pensamos.
10. Guarda tu moto en un garaje. Los conductores que cuenten con un garaje deben estacionar siempre su moto dentro aunque, igualmente, deben anclarla a algún elemento fijo.
Sigue estos 10 consejos para evitar el robo de tu moto y podrás conseguir de una forma sencilla que, cuando vuelvas al lugar en el que la dejaste, la encuentres en perfectas condiciones.
pueden bastar cinco minutos cada día, o menos, para que el motor de tu moto tenga una vida mucho más corta de lo que esperabas: veamos qué no hacer nunca.
Motor frío La mañana es el peor momento del día: para ti porque suena el despertador y te saca de la cama, para tu moto porque está fría cuando la vas a arrancar. Los motores se diseñan para funcionar a ciertas temperaturas (entre 60 y 80 grados generalmente), y cuando se arrancan están mucho más fríos (en invierno a menos de 10 grados si están en la calle). Es muy importante tener un poco de paciencia en esos momentos: lo ideal es arrancarlo y dejarlo unos minutos al ralentí para que vaya cogiendo temperatura, tanto las partes metálicas como el aceite (y el refrigerante si tiene).
¿Cómo puedes romper un motor? Arrancando la moto y apenas segundos después, todavía frío, dando acelerones. Sobre todo, si son acelerones en vacío: en esas condiciones el motor puede subir de vueltas muy rápido, pero las piezas metálicas no se han dilatado a su tamaño de trabajo y habrá mucho rozamiento extra. Incluso es posible que el aceite todavía no haya llegado a las partes altas de la culata. Todo eso generará desgastes prematuros, y puede provocar algún pequeño gripaje entre piezas… o uno gordo (más raro pero no imposible). Cuando desmontas un motor y ves el estado de árboles de levas puedes “adivinar” si alguien tenía esa afición. Si quieres calentarla antes, arráncala antes, o súbela como mucho a unas 2000 rpm.
Descuidos de mantenimiento Hasta aquí hemos comentado cosas que podemos hacer (mal) que perjudican a una moto perfectamente mantenida. Pero descuidar el mantenimiento también puede dejarnos sin moto: olvídate de mirar el nivel de aceite, y más temprano que tarde tu motor un día se parará de golpe… para no arrancar más.
Sobre todo, entre los scooteres de pequeña cilindrada esto es importante, y justo son vehículos que sus usuarios más descuidan (porque no suelen ser “motociclistas”). Pero en esos 125 o hasta 300, los motores llevan muy poca cantidad de aceite, en torno a un litro o menos. Y si se usan en vías rápidas, van muy revolucionados: a poco que el motor gaste aceite, se puede quedar por debajo del nivel mínimo con facilidad y después de eso puedes despedirte de tu motor.
Lasalternativas de movilidad están evolucionando a pasos agigantados en los últimos tiempos y, teniendo en cuenta las previsiones, este progreso seguirá siendo ascendente en un futuro próximo. En este sentido, cabe señalar que las propuestas para desplazarnos por el aire de forma independiente están cada vez más cerca de convertirse en realidad.
Una de ellas es la moto voladora bautizada con el nombre de Speeder, capaz de realizar despegues y aterrizajes de forma vertical. Este particular transporte, cuyo prototipo ya completó con éxito sus pruebas de vuelo el pasado año, ha sido desarrollado por la compañía estadounidense JetPack Aviation, con sede en la ciudad de Los Ángeles.
Hay que tener en cuenta que está calificada como moto voladora por la posición del conductor, que recuerda a la de este tipo de vehículos. Sin embargo, no es capaz de rodar por el firme con una motocicleta convencional. Y es que este artilugio está concebido únicamente para volar y, al menos en un primer momento, no está pensado para un uso recreativo.
Podrá volar hasta con vientos de 80 km/h y a una altura sobre el nivel del mar de más de 6.000 metros En una primera fase, la Speeder se está enfocando a un uso de vehículo utilitario aéreo para participar en misiones de rescate o de emergencias e incluso en ejercicios militares. Su tamaño es algo mayor que el de una motocicleta tradicional con el objetivo de alojar algo de carga. La velocidad será una de sus grandes bazas, ya que se espera que pueda moverse a casi 800 km/h.
hacerlo sin peligro y que sea todo un éxito, sigue estos diez consejos para rodar con total seguridad:
1. Buen equipamiento. Guantes, casco homologado, un calzado adecuado cerrado y una chaqueta con refuerzo en hombros y rodillas son imprescindibles.
2. Conocer el nuevo vehículo. Tanto si eres usuario habitual de motos como si no. “Es imprescindible un periodo de adaptación progresivo a tu nueva moto o scooter”.
3. Prácticas para conductores noveles. Si es tu primera moto y no dispones de un permiso específico para motos, es la importancia de tomar unas clases de formación previas a la retirada del vehículo del concesionario.
4. Mejor solo. Hay que aprender a manejar la
motocicleta y acostumbrarse a ella y a su peso antes de añadir un elemento más a esta ecuación.
5. Rodaje progresivo en carretera. En cuanto a los primeros pasos con tu nueva motocicleta, es aconsejable hacer los primeros kilómetros en zonas urbanas y en carreteras con poca circulación.
6. Precaución en asfalto mojado. Esta circunstancia requiere un control adicional del vehículo por lo que, sobre todo si acabas de adquirirlo, es conveniente dedicar unos kilómetros a observar y familiarizarte con el comportamiento de la montura sobre una superficie resbaladiza.
7. Frenadas de emergencia. Son muy comunes en la ciudad, por eso es fundamental “estar alerta” a lo que pasa alrededor. Recuerda que en caso de realizar una frenada de emergencia sobre suelo seco, la motocicleta debe estar totalmente vertical al actuar sobre los dos frenos con diferente intensidad
8. Mantén la distancia de seguridad con el resto de los vehículos. En conducción urbana es aconsejable respetar la distancia de seguridad y mantener los dedos índice y corazón de cada mano apoyados levemente sobre los frenos para reducir al máximo el tiempo de frenada en caso de tener que actuar con rapidez.
9. Conocimientos básicos. “Lee el manual y cumple las recomendaciones de uso de tu motocicleta que marca el fabricante”. Presión de las ruedas, niveles de líquidos...
10. No conduzcas tu motocicleta cuando estés estresado. “La ansiedad puede alterar tu comportamiento en la circulación, tu capacidad de reaccionar, igual que las preocupaciones, que pueden hacer que te distraigas pensando en otras cosas... Al manillar, es fundamental que estés presente, por tu seguridad y la de los demás”.
Sihacemos caso a la sabiduría popular, para el buen motociclista, después de su casa, la moto es la compra más importante que vas a realizar en tu vida. Al menos, la más ilusionante. La moto para muchos bikers es objeto de ocio, aventura y diversión además de un medio de transporte práctico. Por eso, el corazón puede imponer sus criterios de elección sobre los de la razón a la hora de comprar una moto… y no siempre aciertes en la decisión.
ATRACCIÓN FATAL Si nos regimos por el impulso emocional, habitualmente optaremos por el diseño que más nos gusta. No es una mala decisión comprarte la moto que más te guste, de hecho, es un buen consejo, pero céntrate primero en el tipo de moto que necesitas. En el caso de que tu radio de acción sea exclusivamente la ciudad, déjate enamorar por un scooter que los hay también enormemente atractivos.
Los grandes scooters son igualmente excelentes motos de turismo, con los que se puede viajar durante largos trayectos de forma segura y cómoda. En cambio, si tus miradas están en la carretera, concreta qué tipo de moto necesitas en función a tus desplazamientos, trazados o necesidades y opta por algo más específico como una Turismo, una Trail o una Custom.
MIMETÍZATE CON EL ENTORNO Es importante que te dejes asesorar por los profesionales del sector para acertar en el tipo de moto que necesitas si no tienes experiencia.
TU TALLA CORRECTA Compra una moto que sientas que la controlas, que no te domine. Es vital que sentado llegues con los pies al suelo. Que en parado te sientas capaz de aguantar su peso. Y en marcha, que no te sobrepase la respuesta del motor. Por tu seguridad y comodidad, siéntete hábil en tu moto, nunca torpe o inseguro. En definitiva, utiliza la razón para elegir cilindrada y tamaño.
ESTRENO O REESTRENO No hemos hablado de dinero, de la inversión que exige la compra de una moto, porque cada uno debe saber sus posibilidades económicas, pero ten en cuenta que los gastos de uso de una moto (consumo, mantenimiento, seguro, etc.) van en paralelo a su precio de adquisición. Por tanto, valora si merece la pena hacer un esfuerzo económico. Aquí entra en juego otra variable. ¿Moto nueva o moto usada? Dos opciones válidas, con pros y contras en cada caso, que cada uno debe valorar.
Si es tu primera moto, quieres rodarte y familiarizarte con el mundo de las dos ruedas, con vistas a un cambio de moto prematuro, la opción “segunda mano” en buen estado tiene más sentido. Por otro lado, en una moto nueva te aseguras de que todo está en perfectas condiciones, el regusto de estrenar es mayor y tiene un costo.
Alahora de viajar con seguridad es esencial saber cuáles son las partes más importantes para examinar.
Antes de irte de viaje, es primordial comprobar que todo esté en perfectas condiciones para evitar cualquier problema mecánico. Algunas tareas las puedes realizar tú mismo.
Estado de los neumáticos Los neumáticos es algo que debes revisar con frecuencia porque es lo que te mantiene unido con la carretera. A la hora de examinarlos, debes fijarte en su estado general, la profundidad del dibujo y la presión que variará según la carga.
Por otro lado, la presión de los neumáticos es un factor que influye directamente en el comportamiento de la moto, además de la calidad y rapidez del frenado. Para ajustar la presión, debes seguir las instrucciones que indica el fabricante en el manual de la moto. La presión siempre debe comprobarse en frío, ya que al calentarse aumentará la presión y podríamos dejarlas más bajas, lo que es un riesgo: ante la duda, siempre es mejor pasarse por exceso que por defecto.
Las luces En la moto es tan importante ver como ser visto. Comprobar si se encienden y alumbran correctamente las luces de posición, cruce, largas, intermitentes, posición trasera, freno trasero. Revisa que cada una de las luces de la moto para evitar que deslumbren a otros vehículos. Un hecho en cuenta es que, si la motocicleta está cargada, la parte trasera se hundirá y levantará las luces y provocará deslumbramiento. Para ello, regula la altura de la luz o ajusta la suspensión.
Al revisar el motor, debes fijarte en el arranque, aceite, líquido refrigerante, los filtros de aire y, sobre todo, que no haya ninguna fuga de líquido ni ruidos anormales. En estos últimos casos, debes acudir al mecánico cuanto antes.
Los frenos Antes de ponerte en marcha, hay que revisar el estado de desgaste de las pastillas delanteras y traseras, el tacto de los frenos, las canalizaciones, los discos y el tambor si tienes. Habría que prestarle especial atención al nivel de líquido de frenos y sustituirlo cuando lo indique el fabricante de tu motocicleta, como máximo cada dos años.
La transmisión La cadena es el elemento que mayor mantenimiento requiere de toda la moto. Hay que revisar que se encuentra en el estado de tensión recomendado por el fabricante y que su lubricación es la correcta, no olvides lubricarla cada mil kilómetros al menos, o incluso antes si has circulado con lluvia o por terrenos secos con arena o polvo. A su vez, hay que examinar el piñón y la corona por si hiciera falta una sustitución al kit completo.
Si la moto tiene transmisión por cardán, habría que revisar el nivel de líquido y que no haya ninguna fuga. Por otro lado, si es transmisión por correa se comprobaría que tiene la tensión indicada por el fabricante y que ésta no presente cortes ni que esté agrietada.
La batería En el caso de que lleves tiempo sin usar la moto y veas que a la batería le cuesta mover el motor de arranque y, por ende, poner la moto en marcha, es probable que se solucione dando una vuelta con ella para recuperar su carga. En cambio, si montas a diario, y a la batería le falta fuerza para arrancar la moto, es que ha llegado el momento de cambiarla.
Haypocos apartados de la vida cotidiana que no estén afectados por la intervención de algún tipo de electrónica. Más allá de los móviles, cuando conducimos un vehículo cada vez hay más sistemas dedicados a hacernos la vida más segura y fácil. Es cierto que algunos sistemas han tardado más en llegar a las dos ruedas, porque antes lo hicieron en las cuatro y es que hubo que inventarlo directamente para ellas.
IMU: La unidad de medición inercial Las siglas “IMU” vienen del inglés Inertial Measurement Unit (Unidad de Medición Inercial) y este componente electrónico es el que ha causado una auténtica revolución en la electrónica de las motos. Es un sensor que detecta posición y velocidad en diferentes ejes y su velocidad es superior a la del pensamiento del piloto. “Sabe” antes que el conductor de la moto si ésta va a derrapar, la rueda delantera perder adherencia… y hace posible que diferentes sistemas actuales sean capaces de funcionar.
Solamente las motos de alta gama o deportivas (esta unidad se estrenó en su uso en competición, en MotoGP) disponen de IMU, con lo que las llamamos de “electrónica avanzada”, pero progresivamente ha ido llegando a modelos de gama media y algún día será algo común. Con la IMU suele ir de la mano el acelerador electrónico: el piloto ya no tiene control directo de un carburador o la mariposa de gases de la inyección, sino que “pide” determinado gas, y la centralita es la que decide en función de sus parámetros y puesta a punto cuánta potencia debe dar el motor.
Frenos antibloqueo ABS y “ABS en curva” Fue el primer sistema en revolucionar la seguridad sobre dos ruedas, llegó hace más de 30 años y sigue siendo el más importante. En moto, bloquear una rueda, sobre todo si es la rueda delantera, durante una frenada suele ser sinónimo de caída. Los sistemas actuales han mejorado mucho a los originales, primero lo hicieron en velocidad de reacción y desbloqueo, y recientemente gracias a la electrónica más avanzada (la IMU) han dado un salto.
Control de tracción En moto hay dos tipos de “derrapadas”: por bloqueo de frenos, cosa que evita el ABS, y por exceso de potencia en la rueda trasera. Eso es lo que previene este sistema, el control de tracción, que cada marca llama según sus propias siglas pero que en general se suele identificar con “TCS” (Traction Control System).
Los primeros sistemas de TCS eran algo primitivos por cómo cortaban la potencia del motor en cuanto detectaban una diferencia de velocidad entre la rueda delantera y la trasera. Los sistemas de control de tracción más avanzados saben cómo se está moviendo la moto, y del mismo modo que un piloto experto puede modular el gas para controlar una derrapada, el TCS gestiona la potencia que entrega el motor para evitar una pérdida de estabilidad.
Cambio rápido y “anti-caballito” El cambio de marchas rápido (QS o QuickShifter en inglés) permite cambios de marcha en modo semiautomático, es decir, sin tocar el embrague.
Los cambios secuenciales de las motos facilitan esto, pero los sistemas actuales detectan nuestra
intención de cambiar (la palanca se mueve) y alteran el par motor unos instantes para que la marcha entre suavemente.
Hay un sistema electrónico que ayuda a evitar el “anti-caballito”, y sí, la IMU es vital para que este sistema funcione y lo haga de forma eficaz y segura. De hecho, algunos sistemas son tan precisos, que en el menú se puede elegir qué nivel de intervención queremos y en función de eso al acelerar fuerte entre curvas (y posiblemente en circuito) la rueda delantera se levantará nada, o muy poco, o un poco más (pero nunca demasiado, salvo que se desactive voluntariamente como el TCS).
Radares: Control de crucero adaptable y más Otro nuevo sistema que está llegando a las motos y que en este caso procede de las cuatro ruedas: el radar delantero, que detecta la presencia de un vehículo. Así, cuando establecemos una velocidad de crucero, esta se mantendrá hasta que haya un vehículo delante (a la distancia de seguridad que podemos elegir en el menú). En ese momento la moto mantendrá distancias adaptándose a la velocidad del vehículo precedente (gracias al acelerador electrónico).
Este sistema permite realizar viajes de forma más relajada, porque además si detecta que el vehículo de delante frena, reducirá la velocidad e incluso llegará a accionar los frenos para evitar el golpe por alcance. Los radares de proximidad también llegan a la parte trasera de las motos, para avisar de la presencia de algún vehículo en un punto ciego.
Lamoto es el medio de transporte motorizado más práctico por la movilidad que nos permite para desplazarnos rápidamente por la ciudad y estacionarla fácilmente donde vayamos. Pero también es cierto, que son vehículos más propensos al robo y a las inclemencias del tiempo cuando las estacionamos en la calle, tanto por un rato, como por varios días o durante la noche.
Lo ideal sería disponer de una plaza de garaje cubierto para guardar nuestra moto de todas las amenazas e inclemencias de la calle, aunque no exime de proteger tu moto con medidas antirrobo, pero si en tu caso estás obligado a que tu moto se mantenga afuera durante la noche en la calle deberás tomar nuestros consejos.
Dónde y cómo estacionar tu moto estacionar la moto en un lugar concurrido, visible y cubierto… dentro de la legalidad. Cada ayuntamiento legisla en este sentido por lo deberás saber con antelación si estacionar tu moto en la acera al abrigo de una cornisa o árbol y atada a un elemento del mobiliario urbano (semáforo, valla, señal, banco,
etc.) podría estar prohibido o permitido respetando unos requisitos.
Si en tu caso es posible, partes con ventaja. Asegúrate entonces de encadenar la moto a un sitio fijo y aprovecha el espacio que te puede ofrecer un árbol, una cornisa o una fachada ante las inclemencias del invierno en forma de lluvia, viento o del radiante sol del verano en las horas diurnas. En ambientes extremos, protege la moto de la intemperie, además, con una funda impermeable, disponibles tanto para motos de cualquier tamaño y scooter, con la que cuidas no solo su aspecto físico, también su estado mecánico.
Elige un lugar discreto, pero visible Evita, por tanto, en la medida de lo posible, lugares poco luminosos y escondidos. Quizás pienses que la moto oculta a la vista más protegida de las malas intenciones de un ladrón o un gamberro, pero si la descubre, se sentirá más cómodo para robar la moto o alguna pieza. En cualquier caso, acciona siempre el bloqueo de la dirección de la moto y utiliza algún tipo de antirrobo. La oferta de estos
sistemas es muy extensa, adecuándose a cada tipo de moto o facilidad de uso o transporte, desde el más sencillo antirrobo de disco de freno, a una cadena o de tipo de arco con los que podrás atar la moto algo fijo. Las alarmas son otra buena medida antirrobo. Como los geolocalizadores que informan del lugar en el que se encuentra la moto.
Aunque no tengas garaje... Aprovecha la comodidad y cercanía de tu domicilio si tienes “plaza fija” en las zonas reservadas para motos que destinan algunos ayuntamientos o en cualquier punto de la vía pública, para estacionarla sin miedo ahí. Tan solo asegúrate de instalar el antirrobo y alarma pertinente, y bloquear la dirección. En todo caso, ir alternando diferentes lugares de aparcamiento por la noche también te ayudará a esconderla de las mismas miradas maliciosas. Por último, cuida también el aspecto visual de la moto, que no presente una imagen que pudiera parecer que no la estás utilizando habitualmente y pase por una moto abandonada.
Site ven mejor, rodarás más seguro: el casco Vata7 X1 con sus luces LED te ayudará en esta tarea, es de carbono e incluye sistema de audio.
a sabrás que ayudar a ser vistos en la carretera es algo crucial para rodar más seguro y evitar accidentes. Ya sea con colores claros o flúor, cualquier elemento que ayuda a que seamos vistos es algo positivo para nuestra seguridad.
El casco de carbono Vata7 X1 LED llega para aportarte mayor seguridad en dos sentidos: en
primer lugar, con sus luces LED te ayuda a ser visto en la carretera, y, en segundo lugar, también te protege en caso de caída con una robusta calota de carbono.
Este casco es capaz de sincronizarse con tu moto para aportar mayor visibilidad a tus movimientos. Así, de forma inalámbrica, parpadeará de acuerdo a los indicadores activos de tu moto: posición, frenada y giros. Además, las luces tienen una duración de hasta doce horas.
Este sistema es bastante interesante de cara a implementar tu visibilidad mientras montas en moto, especialmente en circunstancias de poca luz o nocturnas.
