analgĂŠsico inmunizante para la causa, el movimiento y el colectivo
ยกBienvenida a otra efervescencia!
Contenido del borboteo
Reacciones a la lectura de un romance con doncellas guerreras Los prejuicios naturales y biológicos desde el romance hasta hoy ¿Qué otro final queréis para el romance de la doncella guerrera? Creación de tu propia doncella amazónica La historieta de Martina y la piedra arcoiris. La Pildorita invita a... Homenaje del mes de mayo: El día de la madre tras el día del trabajador La efervescencia de lo anteriormente dicho. Despedida, pero ¡hasta pronto!
ยกApartemos el decoro y vamos a bullir!
Reacciones a la lectura de un romance con doncellas guerreras
C
uando leí por primera vez el romance de la doncella guerrera, pensé en la historia del travestismo; a la vez en cómo la vestimenta condiciona nuestros ojos a deducir el género del individuo portador. Mi pensamiento, desde ahí, comenzó a divagar en cuestiones de por qué la historia está cimentada en prejuicios directrices, capaces de distorsionar los cristales de las gafas que la jerarquía pone a la sociedad. La miopía de la humanidad aliviada por una graduación en cristales de eikasia.
Los prejuicios naturales y biológicos desde el romance hasta hoy
L
os prejuicios son una forma de juzgar desde la hegemónica visión binaria que ha dado fruto a la segregación de la sociedad; dejando a la mitad en una situación de opresión y continuo sometimiento. Trasgrediendo esa realidad alienada y recurriendo al travestismo como subversión, una mujer era capaz de vestir como un hombre. Gracias a la vestimenta adquirió y desempeñó su rol en batalla, como otro caballero más, aunque de doncella la titularan ya en el encabezamiento del romance. De acuerdo, a grandes rasgos y por muchas circustancias que rodean a la protagonista, ella decide travestirse a lo Drag King, con el fin de poder empuñar una espada (aunque solo como experiencia transitoria, hasta el fin de la partida); Vistiendo y desempeñando trapos y acciones que el otro porcetaje de la humanidad HACÍA...
POR...
DERECHO ...
¿¿Cabeza aguda y gran saber, juiciosa para hablar??
E
l protagonista del romance, desconcertado por los nuevos sentimientos para los que el mundo no le había preparado, pone en tela de juicio que el caballero Martín fuera realmente un CABALLERO, un HOMBRE,¡qué tuviera entre sus piernas lo que debería tener para serlo! Y rehusando de su homosexualidad, se dijo que si él se enamoraba o tal fervor sentía, debía ser que de una mujer se trataría. Por lo tanto, la homosexualidad también está presente en el romance de la doncella. Pero claro, es más fácil contradecir la identidad de otro que escenificar la erección propia que le endurecía don Martín como caballero. Se me ocurren muchas figuras de nuestro panorama actual que encajan en esa construcción del closet mental del Medioevo. ¿Podéis imaginar el final del romance? Los desenlaces para las doncellas guerreras ponen de manifiesto el retorno al seno patriarcal de un familia tradicional. Al final, la protagonista suele determinar su destino por esa vuelta, o por el matrimonio, o por ambos a la vez, ¡mucho mejor!
Sin embargo, ¿qué final os place?
Q
uizá que el capitán y Martín, como caballero, decieron seguir en partidas de exploración hacia rutas desconocidas.
O puede que fuera Martina quien siguiera las campañas de guerra hasta su úlitmo anochecer. O quizá que dejara de servir al rey, descansara el peso de las armas y desempeñara el arte de la botánica en su huerto con sus dos gatos.
Inserten ustedes las posibilidades que quieran para finalizar este romance aquí
Creación de tu propia doncella amazónica La tradición literaria muestra un modelo de virgo bellatrix que se presenta dicotomizado por: la doncella guerrera, que enmascara su identidad “femenina” y va a la guerra por diferentes vicisitudes, pero luego vuelve a su rol tradicional (mujer-casa-matrimonio), o la amazona guerrera que semeian bien varoniles en toda su fechura1. -Por favor, entendiéndase “femenina” y “varoil” desde el espectro simbólico donde se elabora el lastre de la identidad binaria, la segregación de los géneros, los roles tradicionales, la expresión de las acciones, etc, etc)-. La imagen que nos deja esa tradición de la doncella guerrera, sinceramente, deja mucho que desear. Aunque existen, por supuesto, protagonistas excepcionales, el final de sus historias SE ALEJA DEL EMPODERAMIENTO. EMPODERAMIENTO Muchos referentes tienen un desenlace que nos gustaría cambiar y, por suerte, existen figuras y personajes en literatura e historiografía de los que podemos valernos para dar vida a nuestra propia imagen de guerrera. ¿Te apetece crear a tu protagonista y su historia? 1. Una de las estrofas del Libro de Alexandre que alimenta el mito de la mujer amazónica.
Propuesta para construir a tu protagonista 1. Elegir a la protagonista Puedes coger el sinfín de nombres que la historiografía, la literatura y la tradición folclórica nos han dejado. (Ayuda a la resignificación de sus personajes). Os dejamos una breve lista a continuación: Tamaris Martesia Hipólita Eufemie Silence Clorinda Catalina de Euraso Florinda Calafia Juana de Arco Claudia Jerónima Éowyn Brienne de Tarth Arya Son solo algunos ejemplos, puedes también empezar con un nombre nuevo que te guste mogollón.
2.
Pensar
la
personalidad caballeresca
de
tu
amazona
Os sugerimos las cuatro características básicas que Christine de Pinzan emplea. En su obra, La ciudad de las damas, traza un patrón constructivo interesante que describe a su protagonistas a partir de...
SABIDURÍA
VALENTÍA
FORTALEZA
HERMOSURA
Puedes utilizar estos rasgos para definir a tu virgo bellatrix.
3. Contextualiza la historia ¿Dónde quieres ubicar la andadura de tu protagonista? EL nombre de tu espacio puede ser ficticio o no. Si no se te ocurre ninguno, te lanzamos un pequeña sugerencia: elige la ciudad que más te gusta y TRANSFORMA SUS LETRAS de la siguiente manera: CUENCA - (La isla de …)>>>>> CENCUA Inventa un páramo espacial que te emocione.
4. Empoderamiento, decisión y amistad Tu virgo bellatrix tiene que ser un símbolo de reconocimiento político y teórico para las mujeres y su historia, así como un guiño a la reconstrucción de las genealogías femeninas. ¡Rodea a tu guerrera de compañeras de travesía!
5. Final de la historia ¿Qué te gustaría conseguir? Posiciona tu idea como la meta y simula las partidas que tu protagonista.
¡CUESTIONA LOS FINALES DE LAS HISTORIAS QUE CONOCES! ¡EVITA CAER EN ESTEREOTIPOS Y ARQUETIPOS ABURRIDOS! ¡DA VIDA A TU NUEVA DONCELLA AMAZÓNICA!
La historieta de Martina y la piedra arcoiris En el tĂpico lugar pseudomedieval con toques modernistas, pero a la vez romĂĄnticos, con castillo y una reina entregada a la concordia se desarolla esta historia
ÂĄBienvenida a Sororiland!
Érase una vez una osada doncella, representante de la guardia secreta de la reina y cuyo nombre era Martina.
La reina encomendaba a la doncella encargos, tareas y cometidos que necesitaban de una especial diplomacia y fortaleza. Además de sus servicios como gestora de asuntos culturales y educativos, en Martina delegaba cuestiones de exterior. El viernes noche, la reina organizaría una fiesta en honor a las nuevas pobladoras que habían llegado a sus dominios. En el encuentro habría un ball de luces y posibilidades. Por lo que la reina pensó... “¡LA PIEDRA ARCOIRIS TIENE LA MEJOR ILUNINACIÓN, PARA CREAR LA ESCENA PERFECTA Y CAUSE GRAN ILUSIÓN!”
Desde su habitación, llamó a Martina y le contó su idea, preocupada y sin confianza porque la piedra arcoiris estaba perdida desde hacía generaciones y nadie conocía su paradero. Sin embargo, la doncella había leído unas cartas de navegación antiguas. En aquellos viejos papeles, alguien nombraba la existencia de prismas multicolores. Los diamantes policromados estaban repartidos por todos los rincones del mundo donde habían desaparecido las jerarquizaciones heteropatriarcales. ¡Entonces, Martina se dió cuenta de que una de ellas debía estar encondida en el reino!
Leo acompañó su aventura, que comenzó con el amanecer del día siguiente. Necesitaban ser rápidos y ágiles en su recorrido, pues el viernes era la fecha límite para la puesta en escena de la reina. Martina había pensado en qué lugar concreto podría haber crecido el prisma multicolor. Así, emprendieron el camino guiados por su intuición y un mapa antiguo que no olvidó guardar en su armadura.
Con tiempo suficiente, la primera tarde desviaron sus pasos para descansar en la ciudadela de los condes de Plata. Entre cultivos de vides, el bastión destacaba por sus contrucciones; cabañas de madera que sus techumbres habían pintado de especial manera para que el sol reflectara sobre ellas. Gracias a esta curiosa ornamentación, los condes habían ganado la popularidad de su apodo. En la ciudadela vivía el grupo de productoras de vino más importante en Sororiland. Los condes se encargaban de la exportación y representación de la uva más famosa del reino.
Los condes Brayton y Walden eran amigos de la reina e invitados a la fiesta del viernes, por lo que acogieron a Martina y Leo con gran entusiasmo. En sus aposentos, invitaron a la doncella a vino y le contaron cómo serían los galones que llevarían al encuentro. Martina, que moría de curiosidad, les pidió que se vistieran y mostraran las preciosas ropas. Reponiendo sus fuerzas, pasaron la noche charlando y comentando cuan divertida sería la noche del próximo viernes. La doncella tuvo especial cuidado de guardar el secreto de su viaje, pues la reina le había pedido que no contase su cometido. Pretendía impresionar a todos, con colores que jamás habían visto.
Al día siguiente, continuaron su trayecto en dirección a la región de los Jardines, donde Martina confiaba poder encontrar la piedra de colores. En los mapas había visto un atajo que atravesaba la Pradera Rancia. Era un lugar que, desde la conversión de Sororiland en un reino cordial, nadie había frecuentado más que los que decieron exiliarse por su intransigencia con la nueva constitución. No sabían qué podían encontrar en aquel desapacible lugar. Cuando llegaron, un olor nauseabundo paralizó sus cuerpos y vieron, entre la bruma, aparecer a los últimos monstruos del patriarcado. Sombríos y acechantes guardaban feroces su movimiento.
Las bestias eran duras y no retrocedieron. Martina y Leo dieron sus mayores esfuerzos para no perecer en la contienda. Aunque abatidos por el cansancio, pelearon su victoria hasta escuchar la clemencia de los monstruos rancios. Solo uno logró sobrevivir, a quien Martina concedió indulgencia, desterrando su presencia más allá de los límites de Sororiland. El león y la doncella vieron desaparecer la bruma y el olor hediondo acompañó los pasos del monstruo hasta su destierro. La Pradera respiraba aire fresco por primera vez y nuevas semillas brotaron bajo el sol. Al fin sus rayos podían tocar los prados, con la partida de la niebla.
Decidieron continuar. Sin embargo, algo extraño estaba pasando con la capacidad de sus sentidos y emociones. Sus ojos percibían colores que antes no habían visto. La llegada a la región de los Jardines aumentó aún más su curiosidad, Martina sentía energía y notaba la fortaleza de Leo a su lado. Caminando entre la flora que dominaba aquel páramo, encontraron un pequeño claro, donde la luz brillaba especial, creando combinaciones infitas a toda posibilidad.
¡Habían encontrado la piedra arcoiris!
Para definir su felicidad tendría que conocer cuántas plantas viven en la región de los Jardines. Un sinfín de especies habitaban aquella tierra, por lo que podéis imaginar la medida de su euforia. Entre reconsideraciones de su viaje, Martina volvía a repetir cómo hallaron la piedra, oculta entre los petálos de una flor que brillaba en efecto multicolor. Al sacarla de su escondite contemplaron su verdadera magia. Leo recordó a la doncella que el tiempo apremiaba; era jueves y su paso debía ser más ligero para llegar a los preparativos en buen momento. Antes de llegar al castillo, compraron dulces para la fiesta en el horno de Tahona, ¡el mejor lugar para picar algo aliñado en todo el reino!
En el gran salón, la reina aguardaba su llegada. Estaba tranquila y sosegada, bebiendo té en pijama. Había dormido una larga siesta para estar descansada en el acontecimiento de mañana. Leo llebava la piedra en su bolsito que Martina abrió para mostrar la magia. Su majestad quedó perpleja ante un halo de luz que extendía su acción sobrepasando la arquitectura del castillo. “¡Increíble! No conozco ese color, ¿con cuál vestía antes mi camisón?” “Su aleteza, hasta que comprendí que antes solo veíamos en rosa y azul, no entendí lo que la piedra significaba. ¡Rescatar su arcoiris ha devuelto todos los colores al reino!”
Encendiendo los colores, la piedra arcoiris brillรณ toda la noche y durante el resto de generaciones en Sororiland.
Sororiland había conseguido establecer la paz y la concordia durante años, basando sus estructuras en el poder del diálogo, la asamblea, el respeto y el reconocmiento. Mas faltaba algo que aquella fiesta se concluyó, la armonía de un mundo híbrido en colores infinitos. Aunque el reino se construyó en fortaleza y sororidad, aún permanecían vivos algunos resquicios del antiguo régimen rancio que gobernaba y sometía a sus habitantes. Con la piedra arcoiris en el Castillo Real, consiguieron la finalidad armónica que todos los rincones merecían, dejando a la vista las realidades de todas las tonalidades.
Y así, en aquella fortaleza pseudomedieval, la reina dirigió un reino feliz sin aromas rancios.
La Pildorita invita a... En construcciรณn...
Disponible 15/06/2020
Homenaje del mes de mayo: El día de la madre tras el día del trabajador
El primer domingo de mayo... como cada día, está presente el agradecimiento a mi madre y a mi abuela, por su condición de madre y empezar esta cadena. Referentes más inmediatos de los que he podido centrar aspectos y desechar otros cuantos. Las cuestiones y reflexiones de cómo y cuánto vivir la maternidad son cantares políticos de cada una. Por eso, he querido sentirme y hacer partícipe a ellas de este día. He llamado a mi madre al comienzo de la mañana. También a mi abuela. Lo hubiera hecho ayer o mañana para saber si están pasando un buen día.
La efervescencia de lo anteriormente dicho
L
a figura de la dama en apuros, el caballero victorioso y el rey condescendiente son figuras que se siguen empleando en los cuentos para niños y deberían observarse desde un prisma multidireccional. Quizas sea necesario pensar en damas andantes y caballeros pacientes, en doncellas valientes y donceles púdicos, poniendo en entredicho una vestimenta para cada género.
E
l presente nos envuelve en un sinfín de identidades, diferentes protagonistas y un mundo que no se basa en el amor romántico de un galán a lomos de un caballo blanco. El futuro es de muchos colores, ¿por qué recurrir siempre al azul y al rosa si el arcoíris hace posible millones de complementarios?
Despedida
Cuando creas que la gama se ha agotado, sigue mezclando. Que el tedio y la costumbre no limiten la imaginaciรณn de divergencias. Con cada pildorita, intentamos proponer una forma de curar la ceguera y anestesiar los reductos de las jerarquizaciones contra los que luchรณ aquella doncella.
ยกhasta pronto!
pildoritafanzine