En el DF mexicano, la bici pelea con el smog.
Cifras 30 kilómetros
24 horas
de caminos para bicis hay en la ciudad de Buenos Aires: 5,2 km de bicisendas y 24,8 de ciclovías.
dura el préstamo gratuito de bicicletas del programa Bus+bici, de Sevilla, España.
100 kilómetros
42 millones de viajes
entre bicisendas y ciclovías es el objetivo para fines del año 2011.
se hicieron en las bicis públicas de Velib en París durante 2009.
medio de transporte se instale con las ciclovías protegidas, espacios que mediante un cordón de cemento separan al ciclista de los autos.
dial: “Usar la bici en serio. Que sea el símbolo del transporte sustentable y con onda, ¡que se ponga de moda!”. Desde Canadá, Alain Ayotte –ya un experto en eso de amigar a ciudades y bicis– apunta a otra acción de sentido común; las personas emulan a otras que ven: “Obvio que las bicisendas ayudan a crear ese sentimiento de seguridad para los ciclistas, y es importante tenerlas... De todas maneras, es la historia del huevo y la gallina. Si hay un sistema público de bicicletas eficiente, se empieza a crear esa masa crítica y de repente la gente empieza a sentirse más segura de andar en bici porque hay muchas más bicicletas en la calle. Es un fenómeno que vemos en todo el mundo. Si hay un buen sistema de bike sharing, se crea ese movimiento de cicilistas y la gente se une”.
Súbete a mi bici, muchacha
“Los ciclistas no son guerreros o activistas ecológicos –destaca Aaron Halász, de Cycle Chic Budapest–. Son sólo personas que quieren llegar de A hasta B de una manera fácil.” Cycle Chic nació en la bici-amigable ciudad de Copenhague, pero su mensajesereplicaenBudapest, Barcelona o Curitiba. Así, todos los entusiastas de la bici concluyen en la misma estrategia de difusión: imponer a la bici como una tendencia glamorosa. “Acá te califican de rata –dispara Félix Busso–, pero en ciudades como París si usás la bici sos un tipo cool.” Por eso adhiere al movimiento mun46 VIVA