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Sumario Educando la madurez emocional Sandra Sunza
Historias con enseĂąanza Betty Sunza
Comedia Infantil
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Rosemary GutiĂŠrrez
Tu espejo Sandra Sunza
Construyendo fundamentos Cristianos Betty Sunza
Un vistazo a la literatura infantil James Sarao
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Mensaje del Editor He pensado mucho en los últimos acontecimientos de los que la Iglesia ha sido testigo, en ellos está presente la indeleble huella de nuestro Dios, quien hoy más que nunca llama a sus escogidos a esforzarse por entrar en un proceso de restauración y renovación como puntos de partida para la búsqueda de la santidad. La labor de los padres es, en este sentido, un eje del cual depende el futuro de la Iglesia, puesto que la semilla que hoy plantan debe ser tan buena que abunde en frutos en el mañana. Pienso en los niños de hoy como los jóvenes y adultos que, en algunos años más pueden enfrentarse a un furioso mar como el barco de la ilustración en la portada. La voz del Espíritu Santo ha enfatizado una y otra vez que cosas terribles vienen para el mundo, eventos y situaciones que sacudirán aun a los más valientes; sin embargo, si el ancla es firme, nada podrá amedrentarnos. Los hijos de Dios estamos esperanzados en que llegaremos juntos al puerto seguro de nuestra salvación. Querido padre que nos lees, este es un llamado más: clama por tus hijos, lucha por tus hijos y edúcalos para la santidad, sin la cual… nadie verá al Señor.
Sandra Sunza Editora
Educando para la madurez emocional La Crisis de la Infancia Parte 1: ¿Confianza o desconfianza? Erik Erikson fue un conocido estudioso de la forma en que los seres humanos se desarrollan en cada una de las fases de su vida, Después de muchos años de estudio, elaboró una teoría en la que plantea que la identidad del ser humano se forma gradualmente a través de una constante tensión que se deriva de ir atravesando diversas crisis, las cuales el identifica como periodos de cambio en los que la persona debe resolver conflictos importantes y cada vez más complejos de acuerdo con el nivel de madurez que va adquiriendo. Según este psicólogo, el ciclo vital de una persona es un ciclo de confrontación continua que abarca desde el nacimiento hasta la vejez. Si el individuo logra atravesar de manera exitosa una crisis, de ella se desprenderá una virtud o fuerza básica que le ayudará en la siguiente etapa de vida, preparándole para los retos que se avecinan. Esta teoría divide en ocho etapas la vida humana, correspondiendo a la niñez cuatro de ellas. Abordaremos todas las etapas concernientes a la infancia, sin embargo en este número únicamente nos enfocaremos en la primera. La primera etapa de Erikson abarca de los 0 a los 18 meses e inicia, según su descripción, de manera repentina y abrupta con el nacimiento. En esta etapa el niño se encuentra en un mundo totalmente desconocido y distinto al vientre materno. Sus primeras necesidades (alimento y seguridad) deben ser suplidas de forma cuidadosa para poder lograr que el bebé desarrolle una sensación de confianza básica en el medio que le rodea. En esta etapa los padres, especialmente la madre, juegan un papel central, puesto que el recién nacido debe establecer una relación significativa con ellos, a lo que otros autores llaman “vínculo” y que es una condición indispensable para que el niño atraviese esta etapa de manera exitosa.
Las necesidades de los pequeños que se encuentran en esta etapa (0 a 18 meses) deben ser atendidas de forma cuidadosa, esto significa que los padres requieren estar pendientes de las manifestaciones de hambre, sueño, afecto y bienestar del bebé, pues de otro modo, si éstas no son satisfechas, experimentará un sentido de inseguridad o desconfianza básica, con la percepción del mundo como un sitio no seguro. De acuerdo con Erikson, cuando esta etapa se atraviesa de manera exitosa, el pequeño desarrolla la virtud o fuerza básica denominada “esperanza”, la cual se incrementa en las siguientes etapas y puede ser descrita como la certeza de que cuenta con el afecto, protección y apoyo de sus padres e acuerdo con Erikson, y seres cercanos para afrontar los retos que vienen a cuando esta etapa se atraviesa futuro. De no ser así, el niño puede manifestar en las de manera exitosa, el pequeño etapas posteriores un retraimiento e inseguridad en desarrolla la virtud o fuerza sus relaciones con el mundo y las personas que le básica denominada rodean. ESPERANZA El principal reto para los padres de niños que se encuentran en esta etapa es brindar los primeros cuidados de modo responsable, estableciendo así las bases que prodiguen a su hijo las condiciones para adquirir la virtud de la “esperanza”, que puede ser considerada la base para el posterior desarrollo de la fe como cualidad cristiana.
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Estimado lector, te invitamos a reflexionar en el papel de padre que desempeña nuestro Dios, prodigándote los mejores cuidados, protección, apoyo y seguridad en que nunca estarás solo. Hoy tienes la oportunidad de imitarlo en tu relación con tus hijos.
Historias con enseñanza El objetivo de esta sección es el de proveer a los padres de historias que puedan compartir con sus hijos a fin de promover la formación de valores acordes con la vida cristiana. La oración, la comunicación con Dios, es un concepto del cual siempre se habla. Sin embargo, la oración en familia, se ha ido olvidando poco a poco. Solemos reunirnos en fiestas, eventos sociales, acontecimientos que consideramos importantes para socializar con nuestras familias, pero muy pocas veces nos reunimos a orar con nuestros seres queridos y familiares. La siguiente historia pretende hacer que el lector reflexione, en medio de un mundo que se cae a pedazos por falta de fe, en la importancia del altar familiar, del orar juntos en familia, enseñando a los niños a hacerlo y a considerar de gran importancia el conducir a nuestras familias hacia la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
El Altar Familiar Tita escuchó que en la conferencia de la Iglesia mencionaron algunas veces la importancia del altar familiar. A su corta edad ella no había escuchado mencionar mucho este concepto. Así que, se quedó con la incertidumbre. Tenía siete años, y a pesar de que era pequeña no olvidó ese día.
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De regreso a casa, escuchó a sus papás platicar acerca de las experiencias espirituales
que habían tenido a lo largo del evento. Ella seguía pensando en el “altar familiar”. Estaba segura que tenía que ver con la familia y la santidad, pues había escuchado mencionar ambas palabras en una misma frase. También sabía que la palabra “familiar” estaba relacionada con la familia, pues en algunas ocasiones había escuchado a la abuela mencionar frases como “cena familiar”, “reunión familiar”, y esto era cuando toda la familia se reunía. En la plática de sus papás en el auto rumbo a casa, no escuchó mencionar estas palabras “altar familiar”, así que, pensó que quizá no eran importantes. Ya en casa, olvidó el asunto, hasta que un día escuchó al pastor predicar un mensaje donde decía que era importante “el altar familiar”, entonces recordó lo que había escuchado y las dudas que había tenido al respecto. Cuando volvió a casa del templo junto con sus papás, ella entonces preguntó: -“Mamá, ¿qué es un altar familiar?”, y se quedó mirando a su mami fijamente con sus hermosos ojos cafés, esperando la respuesta. Su mami, titubeó un momento, pues la pregunta era un tanto inusual, pero dijo: -“Es un lugar especial donde, junto a la Santa Biblia, la Palabra de Dios las familias oran, elevando sus peticiones a nuestro Padre Celestial para implorar de Él su misericordia.” Tita, respondió: -“¡Ohhh!, ¿y por qué nosotros no tenemos uno? Yo escuché decir en la conferencia que era importante. Y el pastor lo dijo también en su mensaje. Mami, ¿por qué no tenemos el nuestro?”
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-“No lo sé, hijita”, respondió su mami, “No lo sé. En casa con mis padres, cuando yo era niña así como tú, solíamos tener un lugar especial. Mi mami, tu abuelita, tenía una mesita muy linda donde tenía la Biblia, y ahí, ella, mi papá, mis hermanos y yo, nos
arrodillábamos cada noche a orar, pidiéndole a Dios que nos cuidara y ayudara a ser fieles”. Los ojos de la mamá de Tita se llenaron de lágrimas al recordar a su padre, que ya había fallecido y lo fiel que era a Dios y cuánto él se preocupaba porque su familia fuera de la misma manera. Ella sintió que estaba fallando en esa parte, pues su responsabilidad era precisamente guiar a su hija a una vida de santidad desde pequeña, tal como ella había sido instruida. -“Mami”, dijo Tita, tomándole su mano, al ver sus ojos llenos de lágrimas, “hagamos nuestro altar familiar, suena bonito eso que dices de orar juntos con la familia, además dijo el pastor que era importante hacerlo y enseñar a los niños, así que debes enseñarme como lo hizo el abuelo Panchito contigo.” -“Cuando venga tu papá le diremos lo que haremos y que nos ayude a
preparar un lugar especial aquí en nuestra casita para que juntos clamemos a Dios, y oraremos por nuestra familia, por los primos, los tíos, por todos, y por los demás hermanos y por el resto del mundo, para que Dios nos siga ayudando a todos”, le dijo su mami. En la voz de Tania (así se llamaba la mamá de Tita) se escuchaba una gran emoción, pues recordaba esos momentos cuando junto a sus padres ella hacía lo mismo años atrás, y cómo Dios los había bendecido a sus hermanos, a ella y a sus padres también. Unas lágrimas cayeron sobre su rostro, al pensar en cuánta fe tenían ella y sus hermanos cuando eran niños, que cada dificultad o enfermedad la ponían siempre en oración, y en cuán poco practicaba ahora la oración.
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Tita, corrió a la cocina por una servilleta y limpió las lágrimas del rostro de su mami, y la abrazó. Por la noche, cuando el papá de Tita llegó del trabajo, ella emocionada corrió a sus
brazos y le contó lo que había pasado ese día. Había sido tan rápido el relato que el papá no había entendido muy bien el asunto del “altar familiar”, entonces Tita, tomándole la mano derecha, lo condujo a una silla y le dijo que se sentara que su mami le iba a explicar. Desde esa noche, en casa de Tita, hay un altar familiar, donde se reúnen tres almas a orar y a platicar con Dios. Amén.
Después de leerle o contarle la historia a sus pequeñitos, lean juntos el Salmo 34 Hágales las siguientes preguntas:
¿Dónde escuchó Tita mencionar por primera vez el concepto “altar familiar”? ¿Quién predicó un mensaje y dijo que era importante el “altar familiar”? ¿Cómo se llamaba la mamá de Tita? ¿Cómo se llamaba el papá de la mamá de Tita? ¿Qué le pidió Tita a su mamá? ¿A quién le pidió la mamá de Tita que le ayudara a preparar el altar familiar?
Betty Sunza Diaconisa de la Iglesia. Colaboradora del Ministerio Internacional de Educación.
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Especialista en Bibliotecología.
Comedia Infantil Érase una vez una niña pequeña que recientemente había aprendido a leer. Ella se encontraba leyendo por primera vez los Evangelios. Al llegar al libro de San Marcos, cuando mandan a decapitar a Juan el Bautista, le pregunta a su papá: “papi, ¿no que a Juan le cortaron la cabeza en San Mateo?, ¿qué hacer aquí otra vez con cabeza? Nilvia Verdecia El profesor de la Escuela Sabática había explicado a sus alumnos pequeños que era un simple mito el hecho de que Adán y Eva hayan comido una manzana en el Edén, puesto que la Biblia no especifica de qué clase de fruto se trataba. A la semana siguiente, el profesor puso un examen, uno de los reactivos decía: “La manzana que Adán y Eva que comieron en el huerto era verde” ¿Verdadero o falso? Obviamente todos contestaron que esa afirmación era falsa. A la hora de preguntarles a los niños, por qué consideraban que era falsa, Stuart se puso resueltamente de pie y dijo en voz fuerte y clara : "¡Es Falsa!.... Porque la manzana era roja". Horacio Carvajal Un pastor veía a un niño orar muy concentrado en el templo, se acerca para oír parte de la oración y no puede evitar la risa al escuchar que el niño exclamaba: “¡Señor, ayuda a papá que está en la miseria!” Oliver Cubilla
Compiladora:
Rosemary Gutiérrez Encargada del ministerio Infantil Internacional
Tu espejo La disciplina paterna que agrada a Dios: de la inercia al autocontrol Nos hemos convertido en colegas de nuestros hijos, pero yo no soy colega, soy padre. Si yo fuera colega de mis hijos estaría convirtiéndolos en huérfanos». Emilio Calatayud Juez de menores Introducción. Francisco tiene dos hijos de 12 y 5 años de edad. Todos los días tienen trabajos escolares que realizar, los cuales deberían estar listos antes de las 8 para poder acostarse temprano a descansar. Este es un proceso un poco difícil debido a que los niños prefieren hacer otras cosas antes que dedicarse a las tareas. Una tarde, a punto de dar a las 8, faltándoles aun para concluir, Francisco explota: ¡Ya no los soporto! Van a terminar en este mismo momento y se van a su cuarto. Ustedes me traen puros problemas, son flojos y no tienen nada de disciplina. Es imposible tratar con ustedes. Termina dando dos manotazos a cada uno y los deja llorando. Él se va con una terrible sensación de frustración e ira que le deja muy incómodo, esa noche no puede arrodillarse a orar en paz por la culpa que siente. Dos días después la situación se repite, Francisco se encuentra cansado pues acaba de regresar del trabajo. Poco antes de las 8 se da cuenta que los niños están muy lejos de finalizar la tarea, pero se los pasa porque no quiere pelear ni castigarlos, para no sentirse mal, así que simplemente los deja ir a costarse sin terminar el trabajo escolar “solo por hoy”. Lo cual se traduce en muchas veces, siempre en una lucha constante, para evitar las peleas, según Francisco. ¿En cuál de los dos casos se aplicó una buena disciplina? ¿Por qué? ¿Alguna vez se han encontrado en alguno de los dos casos?
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DESARROLLO Según la Real Academia de la Lengua Española, inercia es: “Propiedad de los cuerpos de no modificar su estado de reposo o movimiento si no es por la acción de una fuerza”. En el autoritarismo la inercia reside en dejarse llevar por el impulso de las emociones negativas: la ira, la frustración, la impaciencia, la intolerancia, que son como un tren desbordado que no puede detenerse. En el segundo de los casos la inercia radica en un profundo estado de reposo, en el que la permisividad halla lugar porque el padre no puede romper con el patrón previamente aprendido de los hijos. En ambos casos, es posible que los padres lleguen a ser conscientes de la situación, pero tienen la sensación de no poder hacer más: “se les sale”. Ahora bien, ¿Hay alguna forma alternativa de actuar al respecto? Hay otras respuestas posibles, que exigen, en el fondo, mucha más reflexión y planificación que la reacción que solemos tener fruto del agotamiento, la falta de paciencia o la inercia. Estas respuestas se pueden englobar en lo que en esta charla llamaremos “disciplina agradable a Dios”. Observemos el siguiente esquema:
ESTILOS DE DISCIPLINA DISCIPLINA LIBERAL (INERCIA)
Hijos rebeldes Agresividad
DISCIPLINA AGRADABLE
Hijos con autoAsertividad
control
DISCIPLINA AUTORITARIA
Hijos sumisos Pasividad
En la figura se ilustra de manera clara la forma en que se puede concebir la disciplina agradable a Dios, justo en un equilibrio entre “dejar hacer” y el autoritarismo. Asimismo, pueden visualizarse las consecuencias posibles de cada uno de estos estilos de disciplina.
Al respecto, un punto que no podemos dejar de abordar es el de “vara” tal como se nos presenta en diversas partes de la Biblia, en la cual se pueden identificar claramente, por lo menos cuatro acepciones distintas:
Matteh, "vara", "báculo" (vara de Aarón) Shêbet*, "vara", "cetro" (vara como arma) Maqqêl, "vara", "rama", "cayado" (vara de los pastores) Kálamos, “caña”, "vara de medir" La palabra usada en proverbios cuando se hace alusión a la disciplina paterna es Shêbet, es decir una vara empleada como arma para disciplinar, por lo cual puede afirmarse que no puede negarse su uso con los hijos. El versículo de Proverbios 13:24, nos enseña que el uso de la vara en la educación de los hijos no es opcional, sino que debe considerarse un deber paterno aplicar la disciplina. Más bien, no usar la vara es una omisión que conlleva a graves resultados. “Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos” (Hebreos 12:8). Sin embargo, tampoco debe dejarse de lado que el padre debe adoptar el uso de las otras acepciones de la vara en su labor paterna: “Matteh” simbolizando a la autoridad genuina que el padre debe representar para el hijo. “Maqqêl”, como la guía que debe proveer el padre al hijo en todo momento para la toma de decisiones. “Kálamos”, pues el padre debe ser para el hijo la medida perfecta del tipo de persona en que podrá convertirse. Estos conceptos deben ir unidos al uso de la “Shêbet” como forma de disciplinar. Si uno de los conceptos está ausente, el uso de la vara será no solo poco efectivo sino hasta dañino. Es por esto que es indispensable afirmar que el amor espiritual y el autocontrol: dos condiciones básicas en el uso de la disciplina que agrada a Dios. Un padre debe tener suficiente amor espiritual para entender que el hijo requiere ser disciplinado, más allá del dolor que pueda experimentar al aplicar consecuencias ante una mala acción. Por otro lado, un padre que se sienta fuera de control ante una situación, debe esperar a que sus emociones se calmen antes de aplicar un castigo demasiado duro basado únicamente en la ira. Dios quiere una educación con disciplina basada en el amor. Este es el binomio perfecto. No a los padres con mucho amor y sin disciplina, no a los padres con mucha disciplina y escaso amor. No a los padres-colegas, no a los padres-dictadores. ¡Sí a los padres que siguen el ejemplo perfecto de Dios, nuestro Padre de Amor!
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CONCLUSIONES Hay un libro escrito por el juez Emilio Calatayud, Reflexiones de un juez de menores (Editorial Dauro), que indica en 10 puntos las cosas que debe hacer un papá o una mamá SI QUIERE QUE SU HIJO SEA UN DELINCUENTE. Los puntos son los siguientes: Comience desde la infancia dando a su hijo todo lo que le pida. Así crecerá convencido de que el mundo entero le pertenece. No se preocupe por su educación ética o espiritual. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente. Cuando diga palabrotas, ríaselas. Esto lo animará a hacer cosas más graciosas. No lo regañe ni le diga que esta mal algo de lo que hace. Podría crearle complejos de culpabilidad. Recoja todo lo que él deja tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes. Así se acostumbrará a que los demás carguen con su responsabilidad. Déjele leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no de que su mente se llene de basura. Discuta a menudo con su conyugue en presencia del niño, así a él no le dolerá demasiado el día en que su familia, quizá por su propia conducta, quede destrozada para siempre. Dele todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que para disponer del mismo es necesario trabajar. Satisfaga todos sus deseos, apetitos, comodidades y placeres. El sacrifico y la austeridad podrían producirle frustraciones. Póngase de su parte en cualquier conflicto que tenga con sus profesores o vecinos. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo y que de verdad quieren fastidiarlo. Nota final: En las problemáticas que actualmente se suscitan en las relaciones padres-hijos, muchos culpan a los padres, otros culpan a los niños, alegando que las cosas ya no son como en otros tiempos. Asimismo, se dice que para que la Iglesia crezca hay que invertir principalmente en los niños, yo digo que del mismo modo se tiene que invertir en los padres. Hoy estamos sembrando formación para los padres. Los niños solo son un reflejo de la salud espiritual y emocional de los padres, si los padres están bien, mantendremos la esperanza de que los hijos estén bien, y a su vez, podremos confiar en que la Iglesia estará bien.
Sandra Sunza
Miembro de la Iglesia. Investigadora en el área de fortalecimiento familiar, sentido de vida y riesgo en adolescentes. Responsable del Departamento de Hogar Infantil del Ministerio Infantil Internacional.
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Tomarse el tiempo para contarles historias bíblicas a los pequeños debería ser un hábito en cada adulto. Siempre hay una enseñanza que aprender de cada historia. Cada una de ellas tiene algo interesante que nos ayuda en nuestra fe y andar cristiano. He aquí dos porciones bíblicas con las cuales usted realizará algunas actividades con sus niños. La intención es que ellos no solamente conozcan la palabra de Dios y reflexionen acerca de ella, sino que vean qué divertido puede ser estudiarla. La creación. Génesis 1-2:3 La importancia de conocer los hechos de la creación es grande porque afirma nuestra fe en el Creador sabiendo que por Él fueron criadas y hechas todas las cosas. Los 10 mandamientos. Éxodo 20:1-17 Conocer la ley de Jehová Dios nos ayuda a ser guardadores fieles de sus mandamientos, entendiendo que así es como le agradamos pues estas palabras fueron dadas directamente por Dios a su pueblo escogido. Instrucciones Paso 1 Lea en oración, varias veces y con responsabilidad, cada una de las porciones bíblicas, de tal manera que al momento de estudiarla con los niños, usted domine el tema y pueda responder las preguntas que ellos les hicieran y hacer así más entretenida la enseñanza. Paso 2 Si sus pequeños saben leer pídales que lean la primera porción bíblica al menos dos o tres veces. Si no saben hacerlo, sáltese este paso. Paso 3 Escoja un día específico de la semana para reunirse con ellos. Si no saben leer ni escribir, estudie con ellos, leyéndoles la Biblia y contándoles la historia con sus propias palabras. Si saben leer y escribir, y han leído la Escritura tal como usted se los pidió, pídales que llenen este formatito:
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Cita bíblica leída:
Tema del que trata la porción leída:
Personajes que intervienen:
Revise que lo hayan hecho bien y por cada acierto deles un incentivo. Paso 4 Elija otro día para realizar las actividades de la sopa de letras. Haga que sea divertido y entretenido. Aproveche para reflexionar con sus pequeños al momento de responder cada pregunta. Si sus pequeños no saben leer, ayúdales a responder verbalmente cada pregunta y haga usted la sopa de letras, permitiéndoles a ellos subrayar de colores cada palabra encontrada, luego explíqueles lo que juntos han hecho. Actividades de apoyo para el paso 4 Indicaciones:
Responda las preguntas, escríbalas en las líneas correspondientes posteriormente encuentre cada palabra en los cuadros (sopa de letras).
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La Creación Génesis 1-2:3 C I E L O S D F S C X A W N Y S
H U I J O L J H F E W D S O H E
A E D F R U O L I J N M V C B P
A E S C X W R F G Y U J M H V T
U I O L P T I E R R A J M E G I
O L I K J U Y H G H Y T R W E M
G M E N O R E R D F C V G B S O
M K I L O J N H Y U F G T Y E V
D D F C V B T Q H Y U J H G X C
I S G A G H Y U U J I M L O T N
A D F V E R T I Y H U A U I O L
S E D E T G H N Y U J Y I K L O
S D F S E R S T V B N O T Y H J
U J I L O Y D O T Y U R I K L H
E R M A R E S O L C U A R T O B
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En el principio Dios crió los cielos y la _________________. Cuando Dios hizo la luz, a esa luz le llamó _______________, y a las tinieblas le llamo ___________________. ¿Cómo le llamó Dios a la expansión? _____________________. Dios llamó de esta manera a la reunión de la aguas. ____________________. Dios creó dos grandes lumbreras y las puso en la expansión de los cielos. En el día señoreaba la lumbrera ______________ y en la noche la lumbrera _________________. Las lumbreras fueron creadas en el día __________________. Y dijo Dios: Produzcan las aguas réptil de ánima viviente y ______________ que vuelen sobre la tierra. Las grandes ballenas fueron creadas por Dios en el día _________________. El hombre fue criado por Dios en el día __________________. Y bendijo Dios al día ______________________ y lo santificó porque en él reposó de toda su obra que había criado.
Los Diez Mandamientos Éxodo 20:1-17
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A F B S E P T I M O Y C U I L O
S G N Q C Q S D F V H I F I O L
E C H E V O L J N M T N D F N M
S V J R D Q R Y N B M C S D F A
E E U U I R G H U I K O A F J N
F H K I O T Y J N B W E T Y U D
S J O O S T Q S E G I P T O A A
E K L P G Y E D C K I O M L O M
I L U Ñ H I W F V L E R A Y U I
S X F L I O R Y P U Q W D T Y E
U C U A V Y T U A I O L R O P N
I F I A C U U I D L R T E U I T
L G O F B I I O R O T Y V B N O
R E P O S O L L E A O C H O R S
E C O D I C I A R A S D C V G N
¿Quién habló todas las palabras que componen los 10 mandamientos de la ley? ______________ ¿De qué tierra había sacado Jehová Dios a su pueblo? __________________ Dios hace misericordia en millares a quienes le aman y guardan sus ______________________. Dios le dijo a su pueblo que debían acordarse del día de _____________________ para santificarlo. Según la ley de los Diez Mandamientos, ¿cuántos días se deben de trabajar? ___________________ Pero el día _________________ era para Jehová y no se debía hacer ninguna obra. El quinto mandamiento habla de honrar al __________________ y a la __________________. Después del quinto mandamiento, ¿cuántos otros mandamientos quedan, en el capítulo 20 de Éxodo? _____________________ No hurtarás, es el mandamiento número ________________________. El último mandamiento de la ley es el que nos prohíbe _____________________.
Betty Sunza Diaconisa de la Iglesia. Colaboradora del Ministerio Internacional de Educación. Secretaria Internacional del Ministerio Infantil.
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A continuación presentaremos una breve fábula en verso, que fue escrita por el maestro Don Ezequiel Solana evocando las máximas morales de Miguel de Cervantes. La fuente de la que extraigo esta fábula, es un compendio de fábulas en verso que fueron escritas con el fin de que los niños puedan leerlas en sus escuelas para desarrollar habilidades de apreciación artística. Otra segunda intención es la función moral del arte, en este sentido “La influencia de la fábula es grande y bienhechora, sobre todo en aquella tierna edad de la vida en que el niño se deja llevar por el ejemplo animado más que por el precepto o la árida amonestación, y en que lo maravilloso produce en las almas infantiles singular encanto” (5). MANOLITO Y SU MAMÁ No hay falta que, al fin no se descubra. Manolito, un día, solo en casa viéndose, registró un armario y cogió un merengue. * —Nadie ha de saberlo, dijo, relamiéndose; yo jamás he visto que mamá los cuente. Mas al poco rato, la conciencia al nene * con dolor agudo debió remorderle, pues, pensó, mamaíta dice que en la frente las acciones malas escritas se leen.
1 Ver: Solana, Ezequiel. Fábulas educativas. Libro primero. Alicante: Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, 2009: 10-11.
Empezó a lavársela con jabón, tan fuerte, que al instante roja hubo de ponérsele. Llega mamá entonces y prorrumpe al verle: —¡Tú has hecho algo malo; léolo en tu frente!— Quedó mudo el niño, descubierto al verse, y pensó: «las faltas se descubren siempre.» Para en adelante quiero resolverme; niño he de ser bueno, cueste lo que cueste. La lectura anterior, como se advierte, hace uso alegórico de la conciencia del niño. Se puede también advertir que se habla de un niño pequeño, sin embargo también puede servirnos, a grandes y chicos, para cuestionarnos cuál es nuestro comportamiento ante las furtividades que hacemos para esconder nuestras faltas. Más allá de un castigo resultante, hay que plantear premeditadamente nuestro comportamiento y sus repercusiones en nuestro entorno. Todo esto en un margen de normatividad social, pero también en uno de fraternidad social. Ejemplos de ello hay diversos en la misma Biblia, lo es: Caín, Saúl, Jonás, Pablo, etc., y el mayor de estos ejemplos es el del mismo pueblo de Israel. ¿Conoces a más personajes de la Biblia que hayan querido ignorar la omnipresencia de Dios para llevar a cabo sus fines ocultos? ¿Cuáles fueron sus repercusiones? ¿Cómo pudieron reestablecer sus relaciones con Dios y los hombres?
James Sarao Estudiante de Literatura Latinoamericana.
Escuela Para Padres Cristianos Es una publicación independiente del Departamento de Hogar Infantil, perteneciente a la Iglesia Evangélica Internacional Soldados de la Cruz de Cristo, editada en Mocochá, Yucatán, México, en el año 2015. Los textos aquí publicados son en su totalidad responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan el punto de vista de los editores. Prohibida la reproducción total o parcial si se omite citar la fuente.
Estimado lector: La Revista Electrónica ESCUELA PARA PADRES CRISTIANOS “Forjando generaciones con sólidos valores” Te hace una cordial invitación a participar en este proyecto
¿Cómo podrás hacerlo? Envíanos historias reales para nuestras secciones “Niños que alumbran al mundo” y “Comedia Infantil”. O si te gusta escribir relatos, mándanos algún cuento inédito para la enseñanza de valores cristianos que se pueda publicar en “Historias con enseñanza”. También nos interesa conocer tu opinión y sugerencias para esta publicación, escríbenos y cuéntanos qué temáticas te interesa que abordemos en el siguiente número, no olvides poner tu nombre completo y el lugar de donde nos escribes. Estaremos publicando las cartas de nuestros lectores. Puedes contactarnos, desde nuestras redes sociales y correo electrónico, donde estaremos contestando tus dudas, comentarios y sugerencias sobre el contenido de las revistas. Tus aportaciones serán de mucha bendición para el progreso de esta publicación.
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