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Coral de Dios, María Cecilia Guía docente, Román y el Rey del bosque. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Rivadavia, 2012. 8 p. ; 28x20 cm. ISBN 978-987-28842-1-5 1. Guía Docente. I. Título CDD 371.1
Dirección editorial: Alexis B. Tellechea y Celeste Salerno Asesoría pedagógica y didáctica: Cecilia de Dios Realización gráfica: Guadalupe Veza Ilustración de interiores y de tapa: Gabriel San Martín Corrección de estilo: María Eugenia Orzanco Primera edición noviembre 2012 © Copyright Ángel Estrada & Cía/ Rivadavia. © Copyright Alexis Tellechea, Cecilia de Dios, Celeste Salerno ISBN 978-987-28842-1-5 Ángel Estrada y Compañía Sociedad Anónima Industrial Maipú 116, 8º piso (C1084ABD). Buenos Aires. República Argentina Tel.: (54 11) 4344 5500 Fax: (54 11) 4344 5555 www.facebook.com/universo.rivadavia www.universorivadavia.com.ar www.angelestrada.com.ar Impreso en Argentina/ Printed in Argentina Hecho el depósito que marca la ley 11.723 Producción gráfica de 50.000 ejemplares realizada por Galt S.A., tel: 011-4303-3723 - www.galtprinting.com Todos los derechos reservados. Bajo las sanciones establecidas en las leyes, ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de cubierta o sus ilustraciones, puede ser reproducida, almacenada o transmitida de ninguna manera por ningún medio reprográfico, electrónico, químico, mecánico, de grabación o fotocopia sin autorización expresa de Ángel Estrada y Compañía Sociedad Anónima Industrial.
desarrollo y realización integral del proyecto Rivadavia te cuenta (libro Román y el Rey del bosque con Guía docente), para Ángel Estrada y Compañía Sociedad Anónima Industrial: Ed. Alexis Tellechea, Ed. Celeste Salerno y Lic. Cecilia de Dios.
osotros elegimos cuidar los bosques
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La deforestación es una problemática que se ha instalado en la sociedad desde hace varias décadas. Sin embargo, en los últimos treinta años ha adquirido notoriedad a partir de diversas campañas realizadas por organizaciones ambientalistas, la preocupación de los productores de madera por el cuidado de los bosques (que, en definitiva, son su fuente de trabajo) y la creciente conciencia de los ciudadanos sobre la importancia del cuidado de los recursos naturales. No obstante, este problema tiene múltiples implicancias y es más complejo de lo que parece. ¿Qué es lo que verdaderamente se quiere preservar al evitar la deforestación? ¿Qué significa hacer un uso sostenible de los recursos naturales, como los bosques? Desde el punto de vista biológico, los bosques son una fuente de agua, alimento y refugio para innumerables especies; producen oxígeno para todos los seres vivos y consumen uno de los principales gases que contribuyen al calentamiento global: el dióxido de carbono. Por otro lado, se utilizan para obtener sustancias con las que se preparan medicamentos que han contribuido a mejorar nuestra salud y, además, de ellos se extrae una materia prima muy importante que tiene múltiples usos: la madera. Con ella se construye una gran variedad de elementos, como las mesas y las sillas donde nos reunimos a cenar; los papeles con los que están hechos los cuadernos; algunos adornos que utilizamos para decorar nuestras casas y diferentes instrumentos musicales, como las guitarras. Si pensamos en las personas que viven en estos ambientes, como algunas tribus nativas, y en los trabajadores que extraen y trabajan la madera, también veremos que para ellos los bosques son una fuente de recursos y de trabajo. Y, por último,
si recordamos lo que hacíamos en nuestra infancia, vendrán a nuestra memoria algunos momentos compartidos entre amigos y familia, como cuando trepábamos a los árboles o nos acostábamos debajo de su sombra en una tarde calurosa de verano. Si analizamos estos ejemplos, podemos decir que los beneficios de los bosques son muchos y muy diversos. En otras palabras, podremos advertir que tienen importancia ecológica, social y económica. En la actualidad, han comenzado a surgir nuevos argumentos a favor del cuidado de los bosques; es decir, que ya no son considerados y valorados únicamente como una fuente de madera, sino que se intenta también preservar su valor ecológico, social y económico, otorgándole la misma importancia a cada una de estas cuestiones. Basta con releer los ejemplos, para darnos cuenta de que encierran otros valores –aún más profundos– que, incluso, se conectan con los sentimientos. Sin embargo, en algunos países, los bosques se explotan de manera ilegal y de forma indiscriminada, contribuyendo a su desaparición. Preservar los bosques significa hacer un uso sostenible de los mismos. Hasta hace algunos años, esto implicaba pensar solamente en términos ecológicos y ambientales. Pero, en la actualidad, se pretende que, al explotar los bosques para obtener un beneficio de ellos, además de una mirada ecológica, se incluyan las otras dos: la social y la económica. Desde el punto de vista ambiental, se busca hacer un uso ecológico de los bosques; es decir, que se proteja la diversidad de hábitats, así como las especies que se explotan. Por
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ejemplo, los abedules se utilizan para extraer xilitol, una sustancia que permite proteger a los dientes de la caries; de los abetos se extraen sustancias que previenen enfermedades cardiovasculares y materia prima para hacer fibras textiles. De esta manera, se protege a todas las especies animales, vegetales, y todos los demás seres vivos que habitan en ellos. Desde el punto de vista social, se quiere crear conciencia de que los bosques son una fuente de trabajo que proporciona un medio de vida para muchas personas, y que son una fuente de bienestar y un lugar para la recreación y para vivir experiencias culturales. Es por ello, que si se talan árboles de manera indiscriminada, además de problemas ambientales, se generan problemas sociales, porque se pierden esas fuentes de trabajo y espacios para la recreación. Como se puede ver, la deforestación y la pobreza están íntimamente conectadas. Finalmente, desde el punto de vista económico se pretende garantizar que en el futuro se puedan tener las mismas oportunidades de hacer uso de los bosques de la misma manera que lo pueden hacer las generaciones actuales. Es por eso, que no solo se debe moderar la tala, sino que también se deben plantar nuevos árboles y respetar el tiempo que tardan en recuperarse los bosques. A lo largo de las últimas décadas, han existido muchos intentos de hacer un uso sostenible de los bosques. Uno de los principales objetivos era identificar aquellos productos que se hubieran fabricado a partir de bosques bien manejados. Para ello, comenzaron a utilizarse sellos o distintivos; sin embargo, la cantidad y diversidad de estos era muy grande, y cada uno de ellos hacía referencia a distintos aspectos del cuidado de los bosques, confundiendo a los consumidores.
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Es por eso que en el año 1993, en Canadá, se creó una organización llamada FSC® (son las siglas en inglés de Forest Stewardship Council, que significa Consejo de Manejo Forestal), con el objetivo de fijar criterios comunes de explotación forestal para todos los bosques del mundo y establecer un único sello que permita garantizar que los productos sean fabricados a partir de bosques bien manejados y de forma tal que los consumidores puedan identificarlos fácilmente. Entonces, cuando un producto tiene el sello FSC®, implica que proviene de un bosque bien manejado, ya que el Consejo de Manejo Forestal promueve un manejo de los bosques ambientalmente apropiado, socialmente benéfico y económicamente viable. Además, esta organización se encarga de garantizar que los productos que tienen el sello FSC® hayan cumplido con una serie de requisitos de transporte y de comercialización –desde el bosque hasta el consumidor– que beneficie no solo a los productores, sino también al medio ambiente. Si bien en las grandes ciudades ya no hay bosques, estas siguen dependiendo de los productos que provienen de ellos. En todas estas cuestiones mencionadas anteriormente, radica la importancia de consumir productos que estén identificados con el sello FSC®. Solamente siendo consumidores y ciudadanos responsables, podremos colaborar con el cuidado de los bosques. Rivadavia, una marca de Ángel Estrada, cuenta con la certificación FSC®. A través de la campaña “Rivadavia te cuenta”, se busca concientizar a los niños y niñas sobre la importancia de ser consumidores y ciudadanos responsables, y de utilizar productos que contengan esta certificación.
osotros elegimos FSC®
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La narrativa es una puerta de entrada que nos permite captar la atención de los alumnos y alumnas sobre un tema en particular. En este caso, el cuento Román y el Rey del bosque es una oportunidad para comenzar a hablar en el aula sobre el cuidado de los bosques. No obstante, muchas veces, esta temática puede terminar diluyéndose, pues los alumnos suelen identificarse con aquello que les resulta más próximo (su ciudad, su pueblo, su barrio) y no con lugares remotos (como la selva amazónica o las yungas). Es por eso que el cuento es una excusa muy atractiva para introducir el tema a los alumnos, para luego poder trabajar sobre otros aspectos vinculados al cuidado de los bosques y del ambiente. Además, el cuento se conecta directamente con temáticas más próximas, como el ejercicio de la ciudadanía o ser consumidores responsables. El cuento Román y el Rey del bosque relata la historia de un niño, Román, y su perro, Duke. Una noche, Román hacía la tarea para la escuela y, mientras recorría enciclopedias y páginas de Internet, comenzó a encontrar fotos de árboles talados y videos de bosques deforestados. Sumido en la preocupación que le causaron esas imágenes, Román se quedó dormido. Pero al despertar, ya no estaba en su habitación, sino en un bosque maravilloso. Así, en su sueño, Román recorrerá el bosque acompañado de Duke, y conocerá a Kerkis, el Rey del bosque, quien lo llevará a conocer ese hermoso lugar. En su recorrido, conocerán a Abethus, el árbol más viejo del bosque. Kerkis y Abethus le contarán a Román la historia de cómo, hace mucho tiempo, la antigua reina del bosque, Cassia Siamea, –cegada por la codicia– taló y taló bosques sin pensar en que de esa manera perjudicaba no solo al prójimo, sino también a sí misma. En el cuento hay
referencias explícitas a temas como la importancia de la reforestación; el valor ecológico, social y económico de los bosques; la tala indiscriminada y sus consecuencias; el manejo responsable de los bosques; y la producción y el consumo de productos provenientes de bosques bien manejados. Así, el cuento es una forma atractiva e, incluso, una excusa para comenzar a hablar sobre estos temas. Los nombres de los personajes principales del cuento no son casuales: “Kerkis” proviene de “árbol” en griego; “Abethus” es un juego de palabras que hace referencia al abeto, que es una especie de gran importancia forestal; y “Cassia Siamea” es el nombre científico de una planta venenosa, y por eso tiene un valor simbólico relacionado con un uso inadecuado de los bosques. En las próximas páginas encontrarán actividades para trabajar con el cuento, para tomar y crear conciencia sobre estos temas, involucrando a todos los integrantes de la comunidad. Estas actividades tienen instancias tanto de trabajo individual como de trabajo grupal, favoreciendo así la comprensión del tema. Además, la diversidad en el enfoque de las actividades le permitirá al docente crear interés en la clase. En un principio, el cuento está pensado como una herramienta que se puede utilizar en la primera clase de la unidad didáctica en la que el docente incluya el tema del cuidado de los bosques; pero su uso se puede adaptar a las necesidades tanto del docente como de los alumnos. Dada la transversalidad del tema del cuidado del medio ambiente, el cuento Román y el Rey del bosque y la Guía docente pueden ser utilizados en el marco de cualquiera de las áreas curriculares.
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para trabajar con el cuento
1. ¿Cuáles creen que son los productos que los seres humanos obtienen de los bosques? 2. ¿Creen que los bosques son importantes?, ¿por qué? 3. Relean el cuento Román y el Rey del bosque.
a. Identifiquen en el cuento los productos que nombran los personajes y que podemos obtener de los bosques. b. Busquen en el cuento las frases que hagan referencia a la importancia de los bosques. c. Armen pequeños grupos. Entre ustedes, comparen los productos que identificaron: ¿todos marcaron los mismos?, ¿cuáles son los que todos incluyeron? d. A partir del intercambio entre ustedes, completen la lista de productos que provienen del bosque. e. Comparen las frases que cada uno identificó en el cuento sobre la importancia de los bosques. ¿Todos encontraron las mismas? ¿Cuáles son las frases que todos incluyeron? f. ¿Hay alguna frase que haya identificado un grupo y los otros, no?, ¿cuáles? g. Conversen entre ustedes. Cada grupo explicará por qué seleccionó sus frases, y contará si agregó otras luego de conversar.
4. Finalizada la actividad en grupo resuelvan, individualmente, las siguientes actividades: a. Relean las respuestas que escribieron de las actividades 1 y 2. ¿Las cambiarían?, ¿por qué? b. Completen las siguientes oraciones: “Al debatir con mis compañeros sobre los productos que se obtienen del bosque, me di cuenta de que ........................................................................................................................................” “Al debatir sobre la importancia de los bosques, me di cuenta de que ................................ .................................................................................................................................................................”” “Luego de hacer esta actividad, me pregunto si............................................................................”
Nota para el docente (actividades 1, 2, 3 y 4): El cuento se puede leer en voz alta para toda la clase; ese momento se puede usar como una “puerta de entrada narrativa” que seguramente colaborará en predisponer a los chicos a trabajar. Tanto la actividad 1 como la 2 son instancias de trabajo individual en las que se podrán recoger las ideas previas de los alumnos acerca de la importancia de los bosques, los productos que se obtienen de ellos y el valor que le otorgan. Las actividades 3 y 4 tienen instancias de trabajo individual y grupal, y al finalizarlas, pueden hacer una puesta en común en la que se recojan las ideas de cada uno de los grupos y las anoten en el pizarrón. Así podrán identificar entre todos aspectos sociales, económicos y ecológicos vinculados a los bosques. Si los grupos no hubieran considerado alguno de estos aspectos, esta será una oportunidad para que el docente guíe a los alumnos para que amplíen su mirada. El marco teórico que se aporta es un fuerte apoyo que puede utilizar el docente para diseñar y realizar preguntas para esta instancia de intercambio grupal.
5. En un pasaje del cuento, Abethus le comenta a Román que todos los productos que se fabrican con la madera de los bosques bien cuidados, como en el que vive, se identifican con un sello. a. Luego de haber reflexionado con las actividades anteriores, ¿qué creen que significa que un bosque esté bien cuidado?
Nota para el docente (actividad 5. a.): Esta es una instancia en la que se pueden retomar, reforzar y ampliar las conclusiones a las que arribó cada uno de los alumnos con el grupo, luego de realizar las actividades 1, 2, 3 y 4, haciendo hincapié en los tres ejes del manejo sustentable: el económico, el social y el ecológico. Además, es la oportunidad para introducir terminología más específica, como manejo sustentable de bosques (en vez de bosques bien cuidados). El docente también podrá utilizar como material de apoyo el marco teórico.
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b. ¿Cómo se imaginan que se pueden identificar los productos que provienen de bosques manejados de manera sustentable? Propongan, al menos, dos ideas. Nota para el docente (actividad 5. b.): En este ítem, el docente tendrá la oportunidad de mostrar productos con el sello FSC®, como los repuestos Rivadavia; también puede mostrar el sello que aparece en el marco teórico de esta guía. Luego, explicará a los alumnos qué significa que un producto tenga ese sello. Para esto, podrá apoyarse en el marco teórico. En esta instancia, el docente podrá motivar a los alumnos para que comiencen a hacer conexiones entre el cuidado de los bosques y la importancia de consumir productos con sello FSC®.
6. Observen la tapa y la contratapa del cuento Román y el Rey del bosque.
a. Describan lo que observaron. b. ¿Qué diferencias encontraron entre la tapa y la contratapa? c. Luego de compararlas, ¿cuál creen que es el mensaje que se quiere transmitir?
7. Anímense a ser escritores: ¿cómo creen que continúa la historia de Román? Para que les resulte más simple, pueden responder a las siguientes preguntas. a. ¿Qué pensó Román mientras caminaba hacia la escuela? b. ¿Qué le contó Román a la maestra?, ¿y a sus compañeros? c. ¿Qué decisión tomó Román en relación a los útiles (cuadernos, hojas, lápices, etcétera) que usa en la escuela?
Nota para el docente (actividades 6 y 7): Esta actividad permite a los alumnos trabajar el tema del uso sustentable de los bosques y el consumo de productos con certificación FSC® desde una perspectiva más creativa y estética.
para tomar conciencia 8. Busquen en sus casas y en sus mochilas productos con sello FSC®.
a. ¿Encontraron alguno?, ¿cuáles? b. ¿Qué otros productos de los que usan habitualmente, creen que pueden reemplazar por productos con la certificación FSC®?
9. Busquen en Internet diferentes productos que tengan la certificación FSC®. Hagan una lista con algunos de los que encontraron. 10. Luego de realizar las actividades anteriores, respondan a las siguientes preguntas: a. ¿Pensaban que había tantos productos con este sello?, ¿había alguno que no habían tenido en cuenta? b. Luego de haber investigado en las páginas de Internet, ¿se les ocurrieron nuevos productos con certificación FSC® para reemplazar los que estaban utilizando? c. Debatan con el resto de sus compañeros qué pueden hacer para comenzar a cuidar los bosques y hacer la diferencia.
Nota para el docente (actividades 8, 9 y 10): Al recoger los testimonios de los alumnos, el docente podrá abrir una instancia de trabajo grupal para hacer conexiones con la importancia de ser consumidores responsables y con el ejercicio responsable de la ciudadanía.
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para crear conciencia 11. Visiten la librería de la esquina de su escuela o la más cercana a sus casas. Pregúntenle a la persona que los atiende si tiene productos de librería con sello FSC®. Si no sabe de qué se trata esta certificación, pídanle cualquier repuesto Rivadavia, por ejemplo un repuesto de hojas. Muéstrenle cómo es el sello FSC®, mientras le explican lo que aprendieron en la escuela sobre este tema (como si fueran Kerkis). Además, pueden sugerirle que él también participe de esta campaña de concientización y que los ayude a difundir su mensaje. Pueden ofrecerle, por ejemplo, realizar un cartel o una lámina para colgar en su negocio, dirigida a todos los integrantes de la comunidad, en la cual expliquen sobre la importancia del manejo sustentable de los bosques y el consumo de productos con la certificación FSC®. 12. Organicen una campaña en la escuela para promover el consumo de productos con certificación FSC®, como los productos Rivadavia. Pueden preparar afiches y colgarlos en el patio del colegio, para que todos se enteren. Les damos algunas ideas para los títulos de sus afiches. -¿Por qué los bosques son tan importantes? -¿Qué productos provienen de los bosques? -¿Qué es el sello FSC®? -¿Por qué es importante consumir productos con el sello FSC®? -¿Qué productos que usamos en la escuela podemos elegir con sello FSC®?
13. Cuéntenle a los integrantes de sus familias qué significa que un bosque esté bien cuidado y sobre la importancia de consumir productos que tengan la certificación FSC®. Si tienen hermanos, primos o amigos pequeños pueden leerles el cuento. Nota para el docente: Las actividades 11, 12 y 13 se refieren al consumo responsable y al ejercicio responsable de la ciudadanía, e involucran a los alumnos de una manera más activa.
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