Revista digital de formaci贸n y debate de PURNA | N潞 2 | Mayo de 2015 | socialismoaragones@purna-aragon.org
Socialismo Aragonés Ya está aquí un nuevo número de SOCIALISMO ARAGONÉS, la revista de formación y difusión de Purna. En esta ocasión se trata de un número de gran calidad que refleja el buen trabajo realizado por la juventud independentista durante este curso. Introducimos una sección de noticias sobre las que hay que reparar necesariamente. Podrían haber sido muchas pero nos hemos decidido centrar en tres: una la celebración de nuestra V Asambleya Nacional en marzo de este año; otra la campaña realizada por la República Aragonesa para este 14 de abril; y otra la huelga de estudiantes y movilización con el bloque de Estudiants Combativas del pasado 6 de mayo que cerró el curso movilizatorio a nivel estudiantil. La revista se cierra con una entrevista al que fue cipotegato el año pasado y que por su condición de militante hemos querido preguntarle cómo se vive esa experiencia desde su perspectiva. Los artículos de análisis destacan por su gran nivel y acierto. Comenzamos con uno llamado «Abriendo camino hacia una militancia sana» de Claudia Lorente, que nos habla de las necesidades emocionales y de los
problemas psicológicos que pueden surgir en la militancia. Elemento necesario a tener en cuenta. El siguiente artículo es el de Juan Carllos Bueno i Chueca, «Keiserens nye klæder . L’aragonés ye aforro, viva l’aragonés!» en el que se trata la necesidad de un cambio de paradigma en la protección y difusión del aragonés. Ataca todos los puntos claves de la lengua y del mundo del aragonés desde una perspectiva filológica. Tenemos además el artículo de Paula Cuartero analizando sociológica e ideológicamente Aragón en «Hechemonía y anticatalanismo en Aragón: una aina de dominación colonial», donde se da cuenta de la dominación españolista de la identidad aragonesa a través del anticatalanismo. Para finalizar el apartado de formación se incluye un texto de análisis sobre el movimiento estudiantil aragonés que realiza Guillén González. En «Movimiento estudiantil: pasos adelante y retos de futuro» se hace balance del curso que termina, de los avances y de los retos que quedan. Todo ello complementado con el comunicado que expresa la posición de Purna ante las elecciones del 14 de mayo de 2015.
SUMARIO - Presentación & Sumario, p. 2. Noticias - AraInfo, el pequeño gran salto, p. 3. - V Asambleya Nacional, pp. 4-5. - Ye a hora d’a Republica aragonesa, pp. 6-7. - Vaga y bloque d’Estudiants Combativas 6 de mayo, pp. 8-9. Analís I - «Abriendo camino hacia una militancia sana» Claudia Lorente, pp. 10-12. - «Keiserens nye klæder . L’aragonés ye aforro, viva l’aragonés!», Juan Carllos Bueno i Chueca, 14-17. Comunicau politico - «Posición de Purna ante las elecciones del 24 de mayo», pp. 18-21. Analís II - «Hechemonía y anticatalanismo en Aragón: una aina de dominación colonial», Paula Cuartero, pp. 24-29. - «Movimiento estudiantil: pasos adelante y retos de futuro», Guillén González, pp. 30-37. Entrevista - «Un cipotegato militante. Entrevista a Gorka Dallo», pp- 38-39.
El pequeño gran salto «Cuando un grupo de personas trabajan con constancia y sacrificio por un proyecto, es lógico que de vez en cuando el destino sonría de soslayo y les ofrezca un impulso repentino. Un empujón que les traslade mucho más cerca de donde querían estar. Mantener con fuerza un medio de comunicación es siempre complicado, y AraInfo ha seguido creciendo. Constantemente. Esta web en la que nave- redactamos, creamos, escriAhora damos un salto hagas es el fruto de ese trabajo bimos, fotografiamos y gra- cia adelante del que suscripdiario, a veces agradecido, y bamos para que el resultado toras, lectoras y anunciantes otras ingrato. Para el lector pueda ser leído, visto y es- sois plenamente responsaes un relámpago, un cambio cuchado. Ahora con mayor bles. Un avance que no supofugaz, una imagen que se va gusto. ne un cambio de contenidos, para dar paso a otra. Para Desde su nacimiento hace tan solo de envoltorio, pues AraInfo es un gran salto en la más de cinco años, AraInfo AraInfo continuará siendo maratón de trabajo diario. se ha mostrado como un me- ese medio combativo que La carrera del corredor de dio de comunicación libre y queremos en Aragón. Un fondo, psicológica, planifica- sin miedos, que ha intentado medio que necesita de vuesda, sacrificada, de repente se mejorar el panorama me- tro apoyo y de todo el que modifica para sacar un sprint diático aragonés y al que es pueda llegar. de donde parecía no haber seguro le ha sumado pluraliGracias» 11/05/2015 fuerzas, y adelantar en unas dad. pocas zancadas los metros que el ritmo del día a día no permitía alcanzar. Nos emociona este momento, pues en el fondo es la prueba de que algo se hace bien. Trabajamos por la información, por democratizar el acceso a la misma, por mostrar aquello que otros no muestran. Organizamos,
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NOTICIAS V Asambleya nacional V ASAMBLEYA NACIONAL hito organizativo e ideológico El pasado catorce de marzo se llevó a cabo en Zaragoza la V Asambleya Nacional de Purna, una de las citas más señaladas de la organización. En ella se debatió el modelo organizativo y la línea ideológica emprendida un año antes en Uesca, así como se eligió una nueva dirección política. EL día comenzó con la presentación del informe de gestión de la Mesa Nacional saliente, que resumió el trabajo realizado durante el curso y dio cuenta del
estado general de la organización. Seguidamente nuestra ya ex coordinadora, Silvia Cebolla, leyó una carta de despedida agradeciendo a toda la militan-
cia de Purna el trabajo realizado y pronosticando un gran futuro para la organización. Sus emotivas palabras acabaron con un gran aplauso de reconocimiento para la que ha sido Coordinadora Nacional duran el último año. El día fui muy fructífero en los debates, aclarándose puntos trascendentales para la organización. Tras un debate sobre el programa formativo, de cómo había que desarrollarlo y aplicarlo según nuestras necesidades, se pasó al debate estatutario, que contenia el cambio en el modelo organizativo.
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NOTICIAS V Asambleya nacional Pese a que Purna ya comenzó el proceso de leninización hace años, ha sido en el último año cuando ha tomado conciencia real de este proceso. Así, una de las propuestas aprobadas por estatutos es la división de la dirección de la organización entre la dirección política, que sigue siendo la Mesa Nacional, y el Comité Executivo, que se encarga del trabajo orgánico a nivel nacional y de aplicar las directrices de la Mesa. Además de esto se aprobó la nueva forma de trabajar por Collas, en un modelo mucho más laxo que el puramente territorial de acuerdo a la idea de célula adaptada a cada contexto. La militancia se organizará por células para trabajar sobre su propia realidad. También se debatieron puntos como la gestión de finanzas, el trabajo de internacional, la
necesidad de la premilitancia o la necesidad de cohesión interna de la organización. Una de las principales decisiones en materia organizativa es la de alargar el tiempo requerido entre asambleas nacionales, que son de debate puramente organizativo, derivando el debate y toma
de decisión ideológico hacia los congresos temáticos que se convocarán cuando se considere necesario. Seguidamente fue elegida una nueva Mesa Nacional y un primer Comité Executivo, en el que salió elegida Portavoz Nacional (cargo que sustituye a Coordinación) Paula Cuartero, que se puso a trabajar al término de la propia asamblea. Tras ello recibimos el saludo de organizaciones amigas como Puyalón o FEL-Zaragoza, que celebraron el buen hacer de nuestra asamblea y la importancia de la juventud organizada. Finalmente se entonó la internacional comunista para terminar el acto. 5
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14 DE ABRIL DÍA DE LA REPÚBLICA ARAGONESA
En el pasado muchas fueron las que lucharon bajo el símbolo del estado republicano. Militantes antifascistas, muchas de ellas patriotas aragonesas que, si bien su proyecto no fue el de la república española, supieron estar a la que no podemos estar altura de su momento eternamente viviendo para frenar al fascismo en su derrota. apostando por la unidad popular. Se hace necesario salir del círculo vicioso Perdimos. Y los de la eterna derrota. Cal viejos símbolos de la que tratemos la memoguerra se convirtieron ria con el respeto que en símbolos de una se merece pero como derrota que, a su vez, lo que es, memoria y cristalizaron en el imarecuerdo al que honginario colectivo del rar y del que aprender. pueblo aragonés como De ese pasado, digno un elemento de memoy traumático al misria antifascista. Los vamo tiempo, hemos de lores republicanos que recoger el contenido nuestros bisabuelos y que hoy nos sirva para bisabuelas pusieron en construir proyectos poestos colores hoy nos líticos que no sean deurecuerdan su lucha y dores de viejas derrotas. martirio, pero también
NOTICIAS Ye a hora d’a
Republica Aragonesa
Es por ello que decimos ‘Viellas valors ta nuevos prochectos’: viejos valores para nuevos proyectos. La tricolor es la digna bandera de la memoria antifascista. Junto con la bandera del Consello d’Aragón, el símbolo de muchos de los valores políticos de nuestros antepasados que hoy aún nos guían.
necesidades políticas. Nuestro proyecto es la República Aragonesa por la que luchamos todos los días. Así, el 14 de abril es un día en el que honrar la lucha antifascista del pasado y los valores republicanos, pero éste -como el resto de días- ha de servir para dar un paso más en la construcción del Aragón libre y soberano en el que queremos vivir.
Viejos valores, los del republicanismo an#14abril #Republitifascista de los que so- caAragonesa mos herederas, que hoy canalizamos en nuevas
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El pasado 6 de mayo se realizó en Aragón una huelga educativa en la que profesorado del sector de educación y estudiantes de enseñanzas medias se movilizaron contra la aplicación de la LOMCE en nuestro territorio y, más en concreto, contra la celebración ese día de las primeras reválidas que la ley introduce. El profesorado, convocado por el sindicato CGT, llevó a cabo un se-
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Vaga d’estudia Bloque d’estudia guimiento desigual que, sin embargo, fue todo un éxito al impedir la realización de gran parte de estas pruebas impuestas desde la administración y el gobierno de Madrid. Algo similar a lo que ocurrió en los institutos donde el seguimiento también fue muy desigual. Convocados por el comité, al tratarse de un paro parcial y
contar con poco tiempo de preparación, muchos estudiantesn o llegaron a salir. ‘Bloque combativo’ Sin embargo, el punto fuerte de esta huelga estuvo en la gran movilización que se hizo en la ciudad de Zaragoza, donde profesorado y estu-
diantes salieron en una gran manifestación por el centro de la capital. Destaca la alta participación de profesorado y, sobre todo, la participación del bloque de Estudiants Combativas en el que participó SEIRA junto c o n
ants 6 de mayo ants combativas otros colectivos estudiantiles. Este bloque unitario trató de subir el nivel de conflictividad como método de lucha estudiantil. Los estu-
diantes mostraron su gran capacidad organizativa y su disciplina evitando limitarse a caer
normal y buscando siempre un mayor grado de conflictividad dentro de lo tolerable. La tensión sin embargo se encargó de crearla únicamente la policí que entró a intentar detener a un estudiante del bloque de Estudiants Combativas y que fue repelida por estos. De este modo las fuerzas de ocupación siguieron de cerca el bloque hasta la misma
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en las dinámicas de un cortejo
finalización de la manifestación donde se introdujeton escoltando a los estudiantes. El cordón de seguridad funcionó bien y solo pudo disolverse cuando un grupo numeroso de estudiantes y profesores impidieron a la policía identificar y detener a los miembros del bloque.
Pirineos de Chaca. SEIRA Chacetania, junto con la Asamblea Estudiantil de la Chacetania, convocó una concentración a la que acudieron numerosos estudiantes y profesores para expresar su rechazo a la LOMCE y las políticas de recortes.
Acto en Chaca Ese mismo día se realizó un acto de protesta conjunto entre profesores y estudiantes en la puerta del IES 9
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ABRIENDO CAMINO HACIA UNA MILITANCIA SANA Claudia Lorente
Vas a acabar quemada por la militancia. Me estoy quemando de sentir que las horas que dedico a todo esto no dan resultados. Estoy quemada de la política. Dejadme en paz, no quiero volver a pensar. Lo único que puedo hacer ahora es dejar la mente vacía y llenarla de cosas que no me hagan sentir inútil. Lo que quiero hacer es alienarme y olvidar todas las discusiones en vano, los debates estériles y los malos rollos. Bien, ¿a qué te vas a dedicar? Puedes jugar a que el mundo real no existe y a que un día más es un día menos. Puedes cerrar los ojos, tapar tus oídos y dejar de sentir. Intentarlo. Pero hay un pequeño “problema”: tienes principios. Y esos princi10
pios no te permiten mantenerte ajena a las injusticias que el pueblo sufre constantemente. Así que vuelves a interesarte por lo que ocurre tan cerca y a la vez tan lejos de ti, vuelves a querer gritar al mundo que están pasando cosas malas que podríamos evitar. Pero ahora vas por libre y no piensas volver a quemarte. Harás las cosas en su momento, con tus propias condiciones. Porque eres una persona, no un carné. Ahora viene el gran “problema”: organizarse es necesario para que ese aullido de rabia que tienes dentro se una al de otras personas y se escuche más fuerte y más lejos. Pero eres reticente a entrar de nuevo en ese círculo vicioso de asambleas, de desembarcos, de rencores y de magnifica-
ciones. Porque has entendido que en lo que tú estabas inmersa era en politiqueo, y que lo que a ti te preocupa es la política. ¿Cuánta gente no se habrá perdido por el camino por culpa de personas que buscan alimentar su propio ego en lugar de escuchar al resto y luchar por los demás? Hay muchas causas para quemarse, esto es un artículo de opinión y no puedo extenderme excesivamente. El problema real de todo lo descrito antes son las consecuencias que esto conlleva para las personas que han decidido militar, de forma consciente, en su lucha por un mundo mejor, y que están viendo que los resultados no llegan, que sus mentes no pueden soportar más. La militancia puede desembocar en problemas psicológicos, en problemas psiquiátricos y, directamente, en catástrofes. Es urgente que desde las organizaciones se abra el debate sobre la salud mental y su relación directa con el sistema en el que vivimos. Es algo inaplazable, porque cualquiera puede ser la próxima en verse envuelta en una espiral de autodestrucción desatada por las incompatibilidades y contradicciones que la vida nos depara. En este tema hay que
abrir camino, y lo único que pretendo es ponerlo sobre la mesa. Es perentorio que se pongan en marcha en Aragón mecanismos de apoyo a las personas cuya militancia provoca problemas de salud mental. Y han de ser mecanismos que estén basados en la observancia del sistema como causante fundamental de la creación de estos conflictos internos. Porque contamos entre nuestras filas con personas válidas para esta tarea ineludible, y necesitamos eliminar tabúes y comprender a los compañeros con quienes compartimos militancia. Es por ello que la iniciativa ha de surgir desde las organizaciones, pues la sanidad pública (a todos los niveles) está sobresaturada y además no apunta radicalmente al capitalismo como fuente principal de los problemas. Hay que crear una red de apoyo destinada a la salud mental, y ponerla también al servicio de quienes la necesitan a causa de este mismo sistema que encarcela nuestras mentes.
identidades diferenciadas, pero igualmente válidas. La concepción de que una persona deba cambiar su identidad para encajar dentro de la dinámica organizativa está muy extendida. Estamos hablando de que, en vez de aprovechar el potencial en determinado ámbito de cada individuo, en lugar de entender que una persona puede tener circunstancias personales que le permiten dedicar x tiempo y no más, imponemos la uniformidad dentro de la organiza-
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ción y exigimos una constancia lineal en ascendencia que es psicológicamente imposible de mantener. Eso es quemarse. Ver que estás haciendo cosas que no llevan a ningún sitio, ni a ti ni a tu organización ni a la sociedad, porque no es aquello para lo que estás capacitada y la exigencia no puede ser igual para todas. Es hora de que las dinámicas organizativas cambien, para no perder a gente válida que
Las organizaciones políticas tienen que asumir que están compuestas por un conglomerado de individuos con 11
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querría luchar pero se ve incapaz de responder a las pretensiones de sus compañeros. También es normal quemarse cuando no se respeta el hecho de que puedes tener vida más allá de la militancia, y que esa vida puede verse sacudida por multitud de acontecimientos que te hagan perder horas de trabajo político en beneficio personal. Y es normal, y natural, y está intrínsecamente ligado al hecho de que vivimos en un sistema que nos obliga a sobrevivir en él al mismo tiempo que luchamos por derribarlo. Los problemas relacionados con la salud mental repuntan cuando, como ahora, el capitalismo sufre una crisis sistémica donde se ven sacudidos sus cimientos. Se produce un cambio en la estructura, se resquebraja la economía, el sustento; pero este cambio no se refleja en la cultura, sino que al contrario se trata de perpetuar la imagen del sistema benévolo. Esto crea contradicciones mentales a cualquiera, pues quienes militan en una organización no viven ajenos al desarrollo social natural. Es entonces, cuando las condiciones objetivas no se corresponden con las subjetivas, que las organizaciones deben explotar todas
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las herramientas a su alcance para quitar las vendas con que el sistema ciega a la gente. Y esas herramientas no son solo agit-prop, sino que se van a articular una serie de acciones contraculturales e ideologizadas con las que reventar los principales cimientos del capital. Esto puede desembocar finalmente en un enfrentamiento directo con la justicia del régimen, que va a hacer todo lo posible por encausar y eliminar la disidencia, mientras la prensa afín señala y criminaliza a los movimientos sociales. Para el militante, su implicación personal puede llevarle incluso a prisión, y hay que realizar un trabajo de concienciación de lo que supone la militancia, las consecuencias que ésta puede acarrear. Pero, al mismo tiempo, se debe dar apoyo psicológico a quienes estén pasando por este trance, entendiendo que somos humanos y tenemos derecho a sufrir. El objetivo es que se pueda hablar sin tapujos de nuestros sentimientos, que la mujer y el hombre nuevos no estén atados al tabú que suponen las contradicciones. Las organizaciones juegan un papel fundamental en todo esto, pues es a través de ellas que se pueden articular las redes de apoyo,
sean ya de carácter económico vía cajas de resistencia, ya de carácter político vía agit-prop, ya de carácter psicológico vía terapias grupales o individualizadas, por poner varios ejemplos. Queremos evitar el abandono de la política por culpa de la quemazón, pero hay que ir a la raíz del problema y abrir el debate, porque las consecuencias de una mala salud mental pueden ser catastróficas. No podemos permitir que el capitalismo asesine a más compañeros y compañeras, porque el arma está en sus manos pero es el sistema quien aprieta el gatillo. Reitero, no soy una profesional, sino una posible usuaria. Al igual que muchas de las personas que estarán leyendo estas líneas. Y opino que ya es hora de que el pueblo, guiado por una vanguardia organizada, conscientemente autogestione su salud mental, sin tabúes y desde la comprensión. Porque esa es la fuerza de la organización: desmontarle al régimen los espacios que había privilegiado mediante el Estado para manejar a su antojo al pueblo y darle la vuelta a la tortilla.
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Lo rei ye aforro, e l’aragonés porta lo mismo camino que la muda d’o monarca: la desaparicion, isto no ye nuevo, con raçon u sin ella, la gent se piensa que la lengua d’os suyos antipasaus ye una de las raçons d’a suya sumision, e les privará d’a oportunidat d’una promocion social per la incapacidat d’exprisar-se bien en la lengua dominante. No deberia asombrar-mos alavez las opinions d’a própia poblacion pa con la suya lengua; actituz de negacionismo, de negativismo, que condenan a la unica lengua privativa d’Aragon a la suya desaparicion, e parlando de desaparicion, una lengua tiene tres formas de desapareixer: La extincion; se puede decir que una lengua ye extinta quan ya no tiene parladors nativos, personas que l’aprenden dende lo suyo nacimiento, en lo suyo médio familiar e social, cosa que les confiere una competéncia nativa. La substitucion; que ye intimament ligada a l’anterior e que se da quan dispués d’un periodo de cohabitacion, se finaliça con l’absorción d’estructuras, sintaxis e lexico per parte d’una d’as lenguas en contacto. L’atro ye la trans14
Keiserens n
L’aragonés ye aforr Juan Carllos Bueno i Chueca
formacion, e se trata d’un proceso en o que podemos decir que la lengua ye tan modificada que pasa a estar-ne una atra. L’aragonés, que sufre de falta de quasi tot, en iste tema, en tiene d’as tres. En primeras la extincion que viene dada per l’abandono d’a transmision intergeneracional; deixamos de tener personas con competéncia nativa. Dito abandono propícia la substitucion, e la tercera, e no menos important, la transformacion; En vista de no poder parar la perda de transmision nativa, una gent que somos en un tanto per cien prou alto aloctono d’a zona actual d’uso de l’aragonés, hemos mirato de transformar la lengua pa fer-la viable, manimenos no funciona, dau
que no hemos cambiato brenca la suya dinamica. Pero, qué le cal a l’aragonés pa pasar ista zaguer generacion nativa, que será critica, traumatica2 e dolorosa, e sobrevivir? A l’aragonés, igual como a tota lengua o que le cal, encara que pareixca una santantonada, ye que se parle, manimenos, igual como a tota lengua, e isto ye uno d’os problemas que tenemos, ye que cal fer-lo con correccion: la lengua ye una marca. La situacion de l’aragonés presenta dos grupos bien diferenciatos de parladors: Nativos e neoparladors. Cadagun presenta unas caracteristicas própias especificas que, per lo bien d’a lengua caldria fer con-
nye klæder
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ro, viva l’aragonés!
fluir, pero, dentro d’ista confluéncia, los neoparladors debemos fer més fayena, mos cal, més que eterniçar una luita inveterada per lo poder grafico, economico u de creyer-se referent d’un movimiento de culicaiga, una sensitividat per la própia lengua en sentiu amplo; ye decir, per las suyas estructuras e formas, e més que més per fer-la presentable, vistera, pulcra: Autentica. Quan parlamos, ixos problemas graficos (que lo própio movimiento de dignificacion de l’aragonés s’ha creato) que son insalvables desapareixen, pero los malos usos se hi quedan. Se ye capaz de no aceptar un texto per estar escrito en una grafia que no concuerde con la vision del tuyo grupo, pero
no suposa guaire problema fer servir calcos d’o castellano u simplament formas inventadas. Si mostrásenos la mitat de beligeráncia per fer posible un aragonés en traça e como cal que perder lo tiempo con disputas graficas, una parte bien important d’a recuperacion de l’aragonés, d’o suyo puesto entre las lenguas romanicas, e d’a suya parte aliqüota de cultura universal como lengua viva, l’habrianos ya ganau. Pero cal reconoixer que no tot ye bufar e fer porrons, a l’aragonés amés de parlar-lo, le cal reconoiximiento e respeto per las suyas variedaz constitutivas, pos sin ellas agora mismo no tendrianos cosa, (bueno, sí, cal reconoixer que tendríanos una lengua sectária que ye capaz d’inventar-se
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un vocabulário e d’aceptar, u de fer aceptar, dentro de la suya secta, una morfologia criolla), e ye d’istas variedaz vivas d’an que debe dimanar la lengua que toz e totas faigamos servir. Difuera d’as poquetas comunidaz humanas que emplegan, encara, l’aragonés no podemos treballar con la idea de fer posible una atra comunidat de personas que sigan dispuestas a fer lo herculeo esfuerço a aprender totas las variedaz d’a lengua pa poder funcionar como correya de transmision entre gent que no viva en las, per cada dia, menos zonas aragonesofonas pero que se hi embreca, e s’ha embrecato, en la suya pervivéncia. Pero si ye posible, e viable, visualiçar, e treballar, perque cada persona que s’acerque a l’aragonés trigue una variedat como referéncia e, de vez que se perfecciona en la suya competéncia e emplego, poténcie lo conoiximiento de dita variedat entre las personas d’o suyo entorno. Si en iste texto no hese seguito, punto per agulla, las formas centrals, en o tocant a la morfologia, fendo servir per eixemplo, lo pasato perifrastico oriental, iste texto carcanearia u, pior encara pa una lengua viva, sonaria artificial. Deberianos enrabiar d’ista artificialidat, e mesmo tamién fuyir-ne. D’atro costato, si en cuenta de leyer-tos iste texto, 15
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m’ascuitasez leyer-lo a yo, igual daria que l’hese escrito en mxedruli u en silabário ibero, lo mensage seria lo mismo, e bien que seria perecedero, ye posible que arribase a interesar-tos més que no per escrito. E ya que parlamos d’interés, més debería d’interesar-nos de preguntar quan no se sabe, de leyer quan no se conoixe e de respetar pa mirar de nantar en tot momento, pos encara que la grafia seiga un tema controvertito, embolicato e complicato, no ye primordial pa la subsisténcia de la lengua e perpetua una division que, amés de dividir treballo e esfuerço, mos fa perder un tiempo vital. A menuto mos olbidamos que la comunidat lingüistica aragonesa ye, amés de minoritária en zonas que fa cinquanta años yeran quasi monolingües, un tanto per cien bien cacano en tot Aragon, los datos que tiene la poblacion aragonesa de parla castellana sobre l’aragonés, bien que cal reconoixer una amilloracion en istes zaguers anyos, son escasos, e que una pedagogia general podria fer més per l’aragonés (e lo catalan) que no cursos de trenta horas en que se mira, e se piensa que ye posible, d’aprender una lengua en la suya totalidat, como si
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aprender aragonés no tenese la misma dificultat que qualsiquier atra lengua d’o mundo. Ista vision e ista predisposicion, en realidat no ye que una atra marca de la baixa condicion que se l’acumula a l’aragonés per causa d’o suyo desconoiximiento. A l’aragonés ya le meten a saber d’entrepuces e barrages que no podemos veyer lo camino esclatero como pa que nusotros mismos faigamos perdurar ixa vision de lengua menor, e actuemos igual que ixa gent
“ye més interesant lo conoiximiento, per parte de tota la poblacion aragonesa, d’a realidat d’a situacion d’a lengua que ufrir-le uns cursos pa los que no tenemos los médios e que no arriban a uns resultatos minimos” que le fa de menos. La nuestra situacion no ye guaire agradable; tenemos una lengua (de prestígio) bien armada que mos permite l’abandono de l’aragonés (e lo catalán) e que mos asegura una capacidat d’intercomprension e d’exprision total dentro d’a dominacion, lo intruso mos aporta uns valors culturals que, china-chana, ganan
espácios, e que mos deixan una hibridacion generalizada. No ye fácil no baixar los braços, reblar e rendir-se, e deixar-se de posibles midas d’urgéncia, pero m’estimo parlar-ne de dos: Primero, ye necesário un modelo de base generativa més que no grafico, la diferenciacion de l’aragonés, que le permita a l’aragonés lo suyo reconoiximiento, cal fer-la remarcable per las suyas especificidaz como lengua, que una gran parte d’a gent veiga a lo rei aforro no quiere decir que tiengan valor pa decir-lo, perque ye lo rei, la suya posicion le confiere ixe poder. Igual se tiene que vestito le metamos a l’aragonés, o que de verdat importa ye que siga un aragonés irreprochable, e pa isto ye primordial leyer, e treballar, los escritors patrimonials que encara en quedan i conoixer, e fer respetar, los que mos deixoron la suya obra. Ye necesário espurgar a l’aragonés de formas e usos que no le son própios. Segundo, ye més interesant lo conoiximiento, per parte de tota la poblacion aragonesa, d’a realidat d’a situacion d’a lengua que ufrir-le uns cursos pa los que no tenemos los médios e que no arriban a uns resultatos minimos, e con isto en garra momento digo que
calga deixar de fer cursos, sino per ellos no me leyeriaz agora mismo, quiero decir que igual seria millor un buen acercamiento a la sociolingüistica, e tener una base dende an treballar, pa pasar dispués a temas gramaticals propiament ditos pa mirar de meter los alacez d’una verdadera reaccion positiva d’una mayoria, agora sí concienciada, que permita e implemente politicas de restauracion d’a lengua aragonesa. Ista fayena fa cara d’estar difícil, no se puede negar, ye cierto, pero en iste camino se troba la própia capacidat d’as personas que quieran fer de l’aragonés una lengua viva, lo nuestro esfuerço intelectual, personal e social d’aportar a la lengua la suya dignidat perdita, amés de transformar la nuestra sociedat. Lo dia que muera lo rei no caldrá fer-se-ne per lo suyo vestito, denguno no s’acordará d’el, manimenos si que podrianos acordar-nos que yera un rei excelent, bondadoso, afable, generoso... pero alavez ya será tarde, no será que
un recuerdo, e no tos equivoquez, lo rei no be d’estar que la base d’a reconstruccion lingüistica, d’ixo ya s’encargará lo pueblo, pero pa isto cal que lo pueblo siga formato e conoixedor d’a suya lengua en conjunto3 , pos conoixer l’aragonés en iste momento, e bien, ye un deber. No tenemos guaire tiempo, e cal replegar toz ixes recuerdos pa que la esperança, e lo nuestro treballo, siempre en quede. Veyeremos morir l’aragonés, ye cierto e triste, pero tamién ye en las nuestras mans la capacidat de deixar una lengua integra, e una sociedat que la prenga como suya. Pos, si hemos visto a lo rei aforro, encara que pareixca imposible, no feremos posible la resureccion d’a nuestra lengua?
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1 Lo rei ye aforro. 2 Una lengua no ye intercambiable, ye la marca d’una vision, d’un pensamiento, e d’a comunicación d’un pueblo tota la suya história. Si no respetamos la lengua, le faltamos a lo respeto a ixe treballo anonimo e descomunal de generacions que han feito posible, a tamas d’a represion, dolor e ataques que a dia d’hoi me permiten, mos permiten escribir iste articlo en la nuestra lengua. 3 “La ensinyança d’os indios en la suya lengua vernacla no ye que siga inutil, ye contraproducent pa la causa d’a suya educacion e civilización”: Yamamoto, Akira. Y. En «Linguists and endangered languages communities: issues and approaches», Matsumura, Kazuto(ed.), Actas del Simpósio Internacional sobre Lenguas Amenazadas, Tokio, 18-20 de noviembre de 1995, Hituzi Syobo, Tókio, 1998.
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POSICIÓN DE PURNA ANTE LAS ELECCIONES DEL 24 DE MAYO
Vivimos un momento político de gran importancia, marcado por la rapidez en los cambios sociales y políticos que empujan y arrastran el trabajo que las organizaciones revolucionarias hemos de llevar a cabo. Sin embargo se hace necesario que no nos dejemos llevar por este incesante tiempo y nos paremos a analizar qué contexto vivimos y cuáles son las mejores decisiones que hemos de tomar de acuerdo a nuestra estrategia revolucionaria. Con esta idea presente hemos de abordar la cuestión de las elecciones, tratando de comprender qué es lo que está en juego y cuál es nuestra responsabilidad en el tiempo que vivimos.
El fantasma del cambio
Las próximas elecciones del 24 de mayo no son unas elecciones más. Para bien o para mal el Régimen del 78 está cada vez más desgastado y las viejas estructuras que lo legitiman (que no que lo sustentan) políticamente se degradan progresivamente. Tras un periodo de protestas y movilizaciones continuadas, frente a la austeridad neoliberal impuesta por los gobiernos europeos, español y aragonés, se hace evidente que el sistema no puede permanecer impasible si quiere sobrevivir. En el seno del Estado se han producido movimientos que buscan frenar la deslegitimación del sistema y reordenar las fuerzas de dominación de clase de manera beneficiosa para la oligarquía. De un periodo de movilización marcado 18
por la protesta irregular, la desideologización y la falta de estrategia frente al proceso neoliberal, ha surgido una socialdemocracia de nuevo tipo que pretende canalizar todo el descontento de la crisis social. Su objetivo es el que ha tenido siempre la socialdemocracia: prometer el cambio únicamente a través de la vía de las instituciones y la legalidad burguesa. De hecho, esta nueva socialdemocracia ha parasitado los movimientos sociales, impidiendo su articulación para construir un movimiento popular. Este fenómeno tiene su origen a nivel estatal y ha colonizado rápidamente el marco político y social aragonés. Sería ingenuo pensar que esta nueva socialdemocracia llamada ‘Podemos’ ha sido la culpable del fin de las protestas, aunque innegablemente haya contribuido a ello. El periodo de movilización mostraba ya previamente signos de profundo agotamiento, siendo imposible mantener la movilización popular durante un tiempo tan prolongado y sin el menor atisbo de posibilidad de articular un movimiento popular estable. El pueblo aragonés, movilizado y resistente, ha carecido de dirección y solo ha sufrido el fraccionamiento y la derrota ideológica a manos de los poderes neoliberales. De esta derrota nace la socialdemocracia, que solo aspira –dice– a paliar las precarias condiciones materiales más urgentes de las clases populares. En cualquier caso, la irrupción de una nueva socialdemocracia capaz de arrebatar, en el propio campo de juego de la oligarquía, el gobierno a las fuerzas del régimen, ha contribuido a una aceleración en la degradación de la legitimidad de éste y la reordenación de sus estructuras. La oligarquía pronto ha encontrado un cortafuegos muy eficiente frente a la nueva socialdemocracia, una solución llamada ‘Ciudadanos’ que cercena por completo las posibilidades de victoria electoral socialdemócrata. Sin embargo, el viraje social ya se ha producido y toda la esperanza que el pueblo ponía en la movilización y la protesta parece ponerla ahora en la participación electoral. Tanto el electoralismo como el fetichismo de la calle son en sí mismos insuficientes, y no sirven de
nada si no se llevan a cabo adecuadamente. En Purna siempre hemos tenido claro que la sola protesta, sin generar otro tipo de condiciones que permitan construir mayorías sociales, no puede aspirar a una transformación revolucionaria de la sociedad. Del mismo modo ninguna apuesta electoral que olvide la calle y al pueblo en su necesaria autoorganización puede pensar en aspirar a cambiar algo. La protesta ha de traducirse en construcción de movimiento popular, organizado y estable; con una dirección y una estrategia en su conjunto. Un movimiento que sí se puede servir de lo electoral para fortalecerse y disputar herramientas de lucha a la oligarquía. No hay una dicotomía en la lucha entre la calle y el parlamento, esa es la visión del izquierdismo y del electoralismo, infantil y reformista respectivamente. Lo que se necesita es usar todas las herramientas a nuestra disposición para construir un movimiento popular que dispute, éste sí, como sujeto político de cambio el poder a la oligarquía. Ese sujeto político ha de ser el movimiento popular aragonés, luchando por su soberanía y emancipación del Estado español. Por tanto nuestra acción revolucionaria ha de ir encaminada a la construcción y fortalecimiento siempre de ese movimiento.
La participación en las elecciones burguesas
La participación o no en las elecciones burguesas que se producen en el Estado y sus estructuras coloniales (como la autonomía) no es una cuestión de absolutos. Ha de analizarse siempre en función del momento que se vive y del interés concreto que tiene para la estrategia de construcción del movimiento popular aragonés. En este sentido es un hecho innegable que la profunda degradación del status quo, unida a la acción oportunista de la nueva socialdemocracia, ha configurado un escenario donde pueden darse mayorías sociales al margen de las fuerzas de régimen. El principal problema es que la expresión de esta mayoría se produce a nivel electoral y la socialdemocracia no bus-
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cará nunca hacer nada por canalizarla hacia la construcción del movimiento popular. Lo cual no cambia el hecho de que el panorama político, ideológico y social sea bastante diferente hoy que hace cuatro años donde la adscripción de las masas a las fuerzas del régimen era mucho más pronunciada. Venimos de un periodo de acumulación de fuerzas en el que la Izquierda independentista tomó la decisión de concurrir a las elecciones únicamente como herramienta para sumar, esto es, transmitir su mensaje, visualizarse, llegar al pueblo y crecer (tal y como se hizo en las últimas europeas). Con el nuevo escenario esa visión táctica de las elecciones se ha roto y el cambio en los ritmos sociales ha obligado a construir, a prisa y corriendo, proyectos de confluencia y de unidad popular de fuerzas no afines al régimen para conquistar mayorías electorales. La posibilidad de esas mayorías está ahí pero, como decimos, de momento se expresan solo electoralmente. El reto revolucionario es conseguir que se transformen en pueblo, en movimiento popular y sujeto de cambio más allá de cualquier electoralismo. Por ello la situación que se nos presenta es de una gran complejidad y la hegemonía de la socialdemocracia no ayuda a solventar el problema. Sabemos que allí donde esté la Izquierda independentista tratará de usar todas las herramientas a su alcance para construir movimiento popular. Por ello el panorama político y electoral es bien diferente en cada comarca, pueblo o ciudad de Aragón, dependiendo de los actores que están presentes y la correlación de fuerzas que se da. Entendemos que tal y como servía, en el pasado, la participación electoral de la Izquierda independentista para la acumulación de fuerzas y el crecimiento de nuestro movimiento político, a día de hoy la intervención electoral sigue sirviendo para la intervención directa en las masas. Así pues, se ha de analizar muy bien qué papel se cumple en cada contexto. En el último año hemos visto como Puyalón, organización política de la Izquierda independentista, ha participado en numerosos procesos de confluencia y de unidad popular.
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Su objetivo ha sido siempre el de intervención en la sociedad y construcción de movimiento popular, esto es, usarlos como frentes de masas y poner las instituciones al servicio del proyecto del pueblo. El programa de emergencia social que la socialdemocracia ha puesto sobre la mesa no es la única estrategia que contempla el partido de la Izquierda independentista y en este sentido podemos estar seguras de que su trabajo va encaminado a construir movimiento popular y a que éste tenga un marco ideológico soberanista. Esto lo podemos ver en que en algunos casos Puyalón ha decidido no trabajar en lo electoral, considerando más prioritario su trabajo en movimientos sociales y en la calle. Así ha ocurrido por ejemplo en Tarazona donde se valoró que el trabajo electoral no servía en ese caso concreto para construir movimiento popular. Consideramos este tipo de actuaciones prueba suficiente de la sinceridad y de lo correcto de la estrategia de Puyalón en cuanto a su participación en procesos electorales. A sabiendas de que el reforzamiento del partido supondrá siempre el reforzamiento del movimiento popular aragonés. Cierto es que este proceso se vive únicamente a nivel municipal, donde el contacto con las masas puede ser más fluido. A nivel nacional no fructificó un frente de unidad de la izquierda en el que la posibilidad de llegar a las masas era francamente reducida y el único interés que hubiera tenido hubiera sido el de reforzar la organización independentista. La herramienta de intervención que a nivel municipal se ha podido construir en muchas ciudades, a nivel nacional se perfiló desde el principio como un imposible. Caso específico es el de Zaragoza en Común que tiene posibilidades reales de conquistar la alcaldía en la capital del país. Sin lugar a dudas ZeC es una unidad con muchas deficiencias construida de manera transversal e interclasista, donde se dan cita fuerzas revolucionarias y reformistas, proletarias y pequeñoburguesas (sin que ambas tengan por qué corresponderse). Con todo, hay que asumir que en la capital vive más de la mitad de la población del país
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y que el Ayuntamiento es la institución pública con más poder después del gobierno autonómico. La posibilidad real de controlarla no es baladí y probablemente sea la que más potencialidad tenga, si se lleva inteligentemente, para la construcción del movimiento popular; para poner la institución pública al servicio de la causa revolucionaria. En ganar la hegemonía dentro de ese frente de masas/herramienta que es ZeC puede estar una de las grandes herramientas de la Izquierda Independentista para poder construir pueblo. Por todo ello hemos de valorar la participación electoral en estas próximas elecciones únicamente desde un criterio pragmatista. Más allá de eslóganes fáciles y moralinas pseudorrevolucionarias hay que evaluar dónde está la Izquierda independentista y si estar ahí sirve a los objetivos estratégicos de nuestro movimiento. Solo desde esa perspectiva tiene sentido un análisis serio.
¿Qué hacer el 24M?
Las elecciones no son el objetivo ni de la Izquierda independentista ni de Purna ni de Puyalón. Solo son una herramienta que sirve, repetimos, para ayudar a la construcción de un movimiento popular de carácter soberanista, que sirva como sujeto de transformación revolucionaria de la sociedad. Si la posición de la Izquierda independentista se refuerza en lo electoral no cabe duda de que estaremos dando pasos de gigantes hacia ese objetivo y la lucha de clases se agudizará profundamente en nuestro país. Purna no ha participado como tal en ningún proceso electoral, sin embargo muchos de sus militantes se han involucrado para incrementar la presencia e influencia de la Izquierda independentista. Así ha ocurrido en lugares como Uesca o Artieda, donde incluso tenemos candidatos; o en Zaragoza, donde algunos militantes han trabajado en la preparación y la campaña de la unidad popular. La presencia juvenil ha sido reducida pero no inexistente, por no tratarse de nuestro objetivo político principal. En un panorama tan complejo ha de anali-
zarse cada contexto según su propia circunstancia. Así, podemos afirmar que apoyar las candidaturas de la Izquierda independentista o aquellas en las que ésta tiene presencia activa beneficia objetivamente a nuestros objetivos estratégicos como movimiento. A sabiendas de que ninguna candidatura electoral supone en sí misma una herramienta de transformación revolucionaria pero sí puede contribuir a construir y reforzar el sujeto encargado de esta tarea. Estas opciones las encontramos, sin embargo, únicamente a nivel municipal que es donde la unidad popular puede conseguirse en el actual contexto político y social. A nivel autonómico el escenario de fragmentación y de hegemonía socialdemócrata impide la posibilidad de que la participación electoral sirva realmente al interés revolucionario de construcción de movimiento popular. Aunque se ha valorado, estimamos que en el actual contexto político ni el voto nulo ni la abstención –ni muchísimo menos el voto en blanco– aporta nada a la causa revolucionaria. Experiencias históricas y el análisis de nuestra realidad nos demuestran que el uso de esta herramienta solo tiene sentido en momentos muy concretos con una adecuada correlación de fuerzas entre los diferentes aparatos de clase. El voto nulo o la abstención tienen sentido si existe un movimiento popular articulado con fuerza suficiente para deslegitimar el proceso electoral. Pero no tiene sentido si se hace desde la marginalidad y en un momento en el que la gente ha depositado parte de sus esperanzas en un quimérico cambio institucional. La Izquierda Abertzale por ejemplo es capaz de movilizar a las masas con una influencia efectiva que deslegitima el proceso electoral, pero esto a día de hoy en Aragón resulta un absurdo dado el nulo desarrollo del movimiento popular. Consideramos un grave error de análisis asumir como un triunfo revolucionario la gran abstención existente en el seno de la clase trabajadora. Muy lejos de esto, la abstención en las clases populares constituye un gran triunfo ideológico del régimen y un mecanismo
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fundamental para su control de la democracia formal. Una abstención sistémica que está lejos de ser revolucionaria y que más cercana está de suponer un caldo de cultivo del neofascismo que de la transformación social. Esto se debe a que no se asienta sobre un odio efectivo de clase sino sobre la aculturación política y la dominación cultural que aliena al proletariado. Lo cual no significa, por otra parte, que la opción abstencionista o de nulidad del voto reproduzca el marco ideológico que señalamos. En momentos concretos y desde una perspectiva individual tanto el voto nulo como la abstención son perfectamente legítimos si no existe ninguna opción electoral que sirva a la causa revolucionaria. Así lo vemos en los próximos comicios a Cortes de Aragón donde no existe ninguna opción que realmente refuerce la construcción del movimiento popular aragonés. Por todo esto llamamos a la juventud aragonesa a usar de manera responsable el derecho a voto que le da esta democracia formal y burguesa. Ningún voto transforma profundamente la sociedad pero puede ayudar en el camino para conseguirlo. Solo el voto a las apuestas electorales en los que la Izquierda independentista puede salir reforzada suponen una verdadera contribución a la causa revolucionaria en nuestro país.
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“Aragón es el pasillo de seguridad para España” - Luisa Fernanda Rudi, Presidenta de Aragón Tomemos como punto de partida o concepto d’hechemonia cultural desembolicau por o filosofo y teorico marxista italiano Antonio Gramsci, seguntes o qual, ista ye o poder adicional d’o que disfruta o grupo dominante pa fer coincidir os suyos intreses con o intrés cheneral. Iste concepto explica cómo una sociedat aparentement libre y culturalment diversa ye en realidat dominada por una d’as suyas clases socials. Asinas, as percepcions, valors y creyencias d’a clase dominante esdevienen en a norma, transformando-se-ne en os estandars de referencia en dita sociedat. Si tornamos a la nuestra chicota realidat, no bi ha semana en que o diario aragonés de mayor tirada no faiga en a suya portalada digital noticias tan poco inocents como l’etiquetau en catalán d’os paquetes d’embutido en un conoixido supermercau de Samianigo, a manca d’o cartel qu’ha de sinyalar a muga entre Aragón y Catalunya o qualque mapa aon as comarcas d’a Franja apareixcan en bell mapa d’a 24
Hechemonía y mo en Aragón dominació
Paula Cuartero
Generalitat. Mas que mas en timpos d’esleccions autonomicas, o catalán, patrimonio cultural y historico d’Aragón, esdeviene un problema y un campo de batalla politica. Pareix una chanza, pero ye casualidat? No pas, hechemonía. En Aragón, a hechemonía dominant huei ha estau historicament exercida por una burguesía aragonesa asimilada en o prochecto Espanya, heredera de posicions de privilechio conseguidas mientres os sucesius rechimens espanyols. Una burguesía financiera y agraria caciquil incapable de defender os suyos intreses de clase en clau aragonesa, arroclada arredol d’o Partiu Conservador en a Restauración Borbonica,
primoriverista y cedista en as primeras decadas d’o sieglo XX y que tras 1939 unió os suyos intreses con os d’o faixismo: primero con o falanchismo y dimpués con a tecnocracia franquista, ocupando os puestos centrals de poder economico, social y mediatico. O franquismo supo recompensar a fidelidat y as complicidatz d’a clase dominant aragonesa mediant a represión d’a clase treballadora aragonesa y por otro costau, mediant tot tipo de facilidatz en a organización d’os suyos negocios y en a consecución de cupos, licencias, creditos y subvencions publicas. A mans d’ista burguesía argüellosament rechional mimetizada con un rechimen faixista quedó la politica cultural oficial “aragonesa”,
anticatalanisn: una aina de ón colonial controlada a traviés d’organismos institucionals como as Diputacions y as Corporacions Provincials. Una politica cultural oficial imposada y monolítica basada en a desaparición d’as manifestacions culturals constitutivas d’as identidatz aragonesas: a interpretación en clau castellana d’a historia d’Aragón, a usurpación d’as figuras emblematicas y os simbolos pa representar rancios conceptos d’hispanidat, imperio, raza y d’a Espanya indivisible, a prohibición d’as expresións d’a cultura popular aragonesa como os carnavals, as fiestas tradicionals, as letras orichinals d’as ixotas y cantes y mesmo d’as dos luengas propias d’Aragón: l’aragonés y o catalán, proscritas d’a
vida publica y d’a cutianidat. As expresions d’a cultura popular tolerada oficialment se enantaron dende Zaragoza, chenerando una dictomía entre a ciudat y o medio rural, que encara huei pesa a l’hora de vertebrar economica, lochistica y culturalment o País. Como l’antropologo aragonés Gaspar Mairal Buil argumenta: “A identidat aragonesa qu’ha veniu emanando primordialment dende Zaragoza ye a identidat espanyola d’Aragón. O suyo centro d’espardidura no ye atro que el Pilar y l’Ebro, a suya estetica a ixota, a suya narración historica una serie d’esvenimients simbolico-alegoricos que van desde la Guerra d’a Independencia hasta la Fiesta d’a Raza. (…) Ista identidat ha estau
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en el discurrir d’o tiempo, alacet solido d’o patriotismo espanyol y d’un atemperado rechionalismo que fa d’Aragón espacio privilechiau d’o espanyolismo(…)A definición d’Aragón que enzarra ista identitat, ye a d’una rechión espanyola que muestra quelques peculiaridatz, como el carácter d’as suyas chents y o folklore expresau en o baturrismo”.(…)Ista ye una identidat arraigada y como tal, sustento d’o espanyolismo aragonés y d’a integración d’Aragón en Espanya”1. Aragón habió de chugar un papel en a constelación ideolochica, cultural y nacional d’o faixismo espanyol que nunca no heba reclamau pa si mismo y no estió hasta la decada d’os 70 -con o naiximiento d’a revista Andalán, a canción aragonesa, a celebración d’as Semanas Culturals u o surchimiento de editorials, entre atras- que naixió una verdadera cultura aragonesa de caracter popular capaz, por un costau, de concarar-se a la hechemonia dominant oficial espanyolista y por l’atro, d’esdevenir en l’alacet d’un movimiento politico aragonesista. Un movimiento popular heterocheneo con carácter de clase, que supo fundir 25
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a cultura aragonesa en a suya maxima expresión con l’antifranquismo, l’autonomismo y as demandas democraticas d’a sociedat aragonesa y que antimás fació suyas as luitas contra o colonialismo interior, a defensa d’a tierra y a reclamación d’una mayor autonomía y reconoiximiento d’Aragón dentro d’o marco territorial d’o Estau Espanyol. Huei a crisi d’o capitalismo, o fracaso d’o rechimen d’o 78 y d’o Estau d’as Autonomías y mesmo l’agotamiento d’a vía autonomista como prochecto politico, dibuixan unatra realidat cultural, identitaria y politica en Aragón -no pas economica, pues o expolio a las clases populars derivau d’a rapinya colonial capitalista ye mes agudizau encara. As viellas elites y familias d’o caciquismo y o franquismo en Aragón, no tardoron en arroclar-se en nuevos espacios politicos disfrutando d’a impunidat y d’o continuismo que o Rechimen d’o 78 ufre y continan controlando os puestos de poder financiero. Son as elites financieras as que tienen o total control d’os medios de comunicación aragoneses, cheneradors d’opinión y contenido. En atras parolas, o exerci-
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cio d’a hechemonía. Como iste video2 contrimuestra, Ibercaja (ligada a la explotación economica d’Aragón y a proyectos de destrucción d’o territorio como Aramón) y a familia Yarza en todas as suyas vertients y sociedatz empresarials (ligada a l’especulación inmobiliaria), son totz dos principals accionistas (o en o caso d’o Heraldo d’Aragón, os unicos) de quasi a totalidat d’a producción informativa que se fa en Aragón: Heraldo d’Aragón, Diario del Alto Aragón, ZTV, HTV Radio Huesca o parte d’os contenius externalizaus d’a cadena publica Aragón TV. O papel vocero d’os medios aragoneses ye fundamental pa entender a influencia d’a cultura oficial en a sociedat aragonesa.
Quan recientement o gubierno PP-PAR anunciaba que en os proximos anyos, tendrían puesto una serie d’homenaches a relacionaus con a historia y o patrimonio cultural d’a Corona d’Aragón arredol d’a figura de Fernando II intención no yera guaire inocent. Muito a o contrario, quan os partius españolistas en Aragón y o partiu espanyolista d’Aragón por antonomasia apelan a o pasau historico aragonés, lo fan con tres objetivos muito claros: construyir un relato historico d’Aragón antagonico respecto a la resta de territorios pertenecients a la antiga Corona; segundo, como ya fació lo franquismo, apropiar-se d’os simbols culturals y la historia aragonesas pa fer d’ells piedra angular d’a unidat de España, precisament
quan os soberanismos arredol d’o Estau se configuran como alternativas transversalment rupturistas a o modelo economico, nacional y de chenero imposau y sustentau por l’estau español. Y en zaguerías y dende l’anvista d’a luita de clases, asistimos a una lectura d’a historia imposada en a que la identidat aragonesa se construye arredol d’o patrimonio religioso y o esplendor de figuras reyals, frent a o patrimonio y a historia d’as clases populars aragonesas, que se quedan en as investigacions d’o ambito academico universitario y os suyos circuitos culturals y de difusión propios.
nismo inoculau chuga un papel alacetal como aina de colonización y espanyolismo en o nuestro País. O proceso soberanista empentau por o pueblo catalán en o Principau de Catalunya ha chenerau un fuerte movimiento reaccionario no només contra tot o catalán y os procesos soberanistas, pues Aragón se troba cheograficament entre Euskal Herria y Catalunya, sino tamién contra as propias identidatz aragonesas, por ixo, desmontar l’anticatalanismo en Aragón requiere fer un exercicio de la nuestra propia percepción como pueblo aragonés y dende la nuestra relación como aragonesas con o pueblo cataEn un Aragón expoliau lán. identitaria y historiograficament, ye precisament en A percepción identitaiste punto a on l’anticatala- ria d’o pueblo aragonés ye
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conflictiva consigo mesma. Argüelloso d’a suya historia, d’o suyo medio natural y d’as suyas institucions, a percepción d’Aragón como comunidat humana y como entidat politica ha aconseguiu sobrevivir mientres sieglos. As suyas manifestacions identitarias y culturals han aconseguiu sobrevivir dica huei de manera subalterna y marchinal en entornos politico-economico hostils y sin embargo, o pueblo aragonés no remata de renunciar a la suya identitat imposada y a suya expresión mas dantesca: l’anticatalanismo.
Dende que o Procés soberanista plenara las carreras y o gubierno catalán mantenese o pulso soberanista a o gubierno de Espanya, muita tinta ha corriu en os principals voceros mediaticos aragoneses prebando de qüestionar a lechitimidat d’o pueblo catalán sobre o suyo futuro, pero tamién as carreras fan parti en o desembolique d’identidatz aragonesas negativas en as que se mezcla un odio irracional a la posible independencia de Catalunya. As retes socials y os foros son l’abono perfecto pa l’esparidimiento d’o argumentario historicista d’a Corona d’Aragón que no cercan un intrés real en 27
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a historia d’Aragón, ni buscan denunciar a manipulación historica d’o sistema educativo aragonés, sino apropiar-se de buena parte d’a historia compartida con Catalunya y mezclar a historia medieval con as reivindicacions d’o present. D’atro costau asistiemos en os zaguers anyos a o naiximiento d’un aragonesismo social irracional incapaz d’uferir una identidat aragonesa en positivo, constuido como reacción y comparación con o vecín, un aragonesismo irracional d’autoodio, capaz de torpedear qualsiquier esfuerzo de dignificación d’o patrimonio lingüistico, un aragonesismo a la deriva ante una crisis de manca de referents propios, ante los quals se veigan refleixaus pa racionalizar ixe sentimiento de pertenencia. Una crisis que s’ha feito mas fuerte debant d’a consolidación d’o neoliberalismo, estricallando identidatz y igualando relatos. L’aragonesismo politico, institucional y hereu d’o autonomismo ha siu incapaz de concarar l’anticatalanismo d’a dreita espanyola y d’o caciquismo aragonés y no nomas ixo, ha perdiu tot tipo de referencialidat politico-social. CHA podía ha-
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ber chugau un papel “conciliador” con Catalunya ante la sociedat aragonesa, fer un mensache positiu d’o proceso soberanista y fer una lectura d’os acontecimientos en clau aragonesa, pero ya siga por miedo a perder votos u simplement por ignorancia u debilidad ideolochica, ha rematau por regalar su discurso a la dreita, cuya aproximación sociolochica y electoral prencipia a estar mas que evident.
«L’aragonesismo politico, institucional y hereu d’o autonomismo ha siu incapaz de concarar l’anticatalanismo d’a dreita espanyola y d’o caciquismo aragonés y no nomas ixo, ha perdiu tot tipo de referencialidat politico-social» Sin referents identitarios constructivos, inclusivos y marcadament internacionalistas en a vida politica aragonesa, l’anticatalanismo y a catalanofobia irracional son o caldo de cultivo pa o desembolique d’a extrema dreita en Aragón. Collas como la Plataforma No Hablamos Catalán u la FACAO (Federació d’Asociacións Culturáls de l’Aragó Oriental), arroclan a o rechionalismo d’o PAR con
l’ultra espanyolismo y son a larva d’un movimiento d’ultradreita arredol d’a luenga catalana, con vinclos probaus con organizacions d’a extrema dreta violenta como Democracia Nacional y d’o blaverismo valenciano. Aragón y Catalunya comparten una serie de nexos historicos y relacions que van dillá d’os simbols, as colors, as calendatas historicas comuns u os parentescos reyals. As relacions d’o pueblo aragonés y o pueblo catalán no las determinan o pleito d’os biens eclesiaticos d’a Franja u l’anecdotario d’Heraldo sobre os mapetas d’os libros de texto catalans. Las determinan a luenga común y as relacions culturals y de movilidat en as comarcas d’a Franja, os sieglos de capital humano aragonés treballando en as fabricas de Barcelona u en as casas d’a burguesía catalana. Seguntes as estadisticas, un 60% del total d’a emigración aragonesa se dirige a Barcelona y un 9% a la resta de Catalunya3 , a on muitos d’ells y ellas han estableciu la suya vida, fendo tamién parte d’o teixiu asociativo y d’os movimientos socials d’a ciudat, estando mais y pais d’as fillas d’o soberanismo. Las determinan as aragonesas que dende Barcelona pensoron un nuevo Aragón
a prencipios d’o siglo XX. Y tamién las determina a luita de conchunta por o medio físico común, contra o Trasvase d’Ebro, eixemplo d’a movilización social y a solidaridat con os movimientos de defensa de la tierra catalanes, capaces totz dos de posar en jaque os intreses economicos y especulativos d’o gubierno estatal y ganar.
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Por ixo, cal entender l’anticatalanismo como un fenomeno contemporaneo de clase que busca en as radices d’a historia y o patrimonio d’Aragón divergencias entre dos pueblos chirmans que comparten simbols y un pasau común. Cal entender-lo como un fenomeno cultural que impide o sano reconoiximiento d’as nuestras luengas. Cal entender-lo como un fenomeno economico que preba de perpetuar a dominación colonial d’as elites financieras, quan Luisa Fernanda Rudi diz que Aragón ye “un destino de inversión fiable”. Pero sobre tot cal entender-lo como un fenomeno politico que nos impide creixer como pueblo, veyer la soberanía total como algo tangible y posible y teixer una cosmogonía solidaria con o nuestro entorno. 1 Mairal Buil, Gaspar: La identidad de los aragoneses. Egido editorial, p. 48. 2 Gonzalo González: Los medios de comunicación en Aragón: http://vimeo.com/104490874 3 Gallego Ranedo, Carmen: Los procesos migratorios en Aragón.
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Durante el actual curso la situación del movimiento estudiantil aragonés ha dado un vuelco más que interesante. En medio de una vorágine desmovilizadora y electoralista, en el que los movimientos sociales están mucho más débiles que hace solo cosa de un par de años, el estudiantado aragonés ha sabido mantener el nivel movilizatorio y, lo que es más importante, ha mejorado sustancialmente su capacidad organizativa y de coordinación para la respuesta y el avance colectivo. Éste no ha sido un año más para los y las estudiantes aragonesas. Muchas somos las que creemos que se han dado pasos de gigante para la consolidación de un movimiento estudiantil estructurado y con proyección. Pasos, casi siempre silenciosos, que no han hecho sino poner los cimientos de lo que debemos construir en el futuro pero que sin un trabajo inteligente y continuado en el futuro no habrán servido para nada. Ese es nuestro reto como estudiantes concienciados, saber transformar lo que este curso hemos construido para que verdaderamente sirva como modelo útil en el negro futuro que nos espera. 30
Movimiento est adelante y ret Guillén González
I. El contexto general
Aunque no nos guste reconocerlo, Aragón no se encuentra en un momento histórico en el que el movimiento popular esté muy desarrollado. Esto afecta inevitablemente a la juventud y al estudiantado, que no es más que una parte del todo que debe ser el movimiento popular. Entendemos este movimiento como el conjunto del tejido social en el que el pueblo aragonés se expresa y se organiza: todas las asociaciones, organizaciones, luchas… un todo de mil caras que conforman en su conjunto el entramado de un pueblo hilado a sí mismo, en el orden social, cultural y también político. Lo que hace pueblo al pueblo, con la totalidad de aspiraciones colectivas, con
sus mil caras y sus múltiples parcialidades conectadas unas con otras. Este pueblo entramado se opone al de la suma de individuos que es el que pretende producir el neoliberalismo. Vemos, pues, que en Aragón siempre ha habido movimiento popular pero no siempre ha sido igual de fuerte ni siempre ha tenido las mismas aspiraciones ni el mismo marco ideológico. El movimiento estudiantil, por las propias circunstancias históricas que hemos vivido, siempre ha sido una parte significativa de este movimiento popular. Por ejemplo, en Aragón no existe un movimiento juvenil constituido al margen de las organizaciones políticas existentes que tratan de organizar a la juventud: no hay asambleas de jóvenes
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tudiantil: pasos tos de futuro en los barrios ni en los pueblos, que se autoorganicen para sus propios intereses; ni tampoco la juventud se moviliza por la problemática específicamente juvenil. Esto se debe a la falta de una cultura política (en la que las organizaciones tienen gran responsabilidad) que, sin embargo, no se corresponde con la situación del movimiento estudiantil. El estudiantado aragonés, dependiendo de la época y el ciclo político-económico, sí que se organiza en su centro de estudios o en su comarca o pueblo para afrontar las necesidades educativas y políticas de cada momento histórico. Digamos que sí tiene esa cultura organizativa y de conformación de un movimiento que tiende siempre a articularse. Desde los años
sesenta es habitual que en momento de auge movilizatorio surjan asambleas de institutos y de facultad, llegando a mantenerse incluso en momentos de descenso de conflictividad. Una cultura que, pese a ser débil y no llegar a articular un proyecto estratégico a largo plazo y en común, se transmite generacionalmente y fruto de la experiencia colectiva acumulada. Esto, unido a la existencia de colectivos y sindicatos estudiantiles, ha hecho que siempre, de una u otra forma, el estudiantado aragonés tuviera unos tiempos y unas reivindicaciones específicas que no podían subsumirse a los acontecimientos a nivel estatal o europeo, sino que constituían un proceso que podrá ser más o menos afortunado pero innegable-
mente propio y específico. Así, en los últimos años hemos vivido un auge movilizatorio coincidiendo con la crisis económica y social que azota a Aragón y al Estado español. Esto pudo observarse con la eclosión del Movimiento 15M en 2011 que, con el paso de los meses, acabó proyectándose y disolviéndose en numerosas luchas y estructuras que impulsaron (y transformaron sustancialmente) el movimiento popular. A este proceso no fue ajeno, de ningún modo, el movimiento estudiantil aragonés que se vio profundamente reforzado siendo el principal agente que continuara la estela movilizatoria del 15M en la lucha por la defensa de la educación pública. Los años que siguieron fueron los de las grandes movilizaciones de estudiantes y profesores, en un contexto de protestas generalizado donde el movimiento obrero también tuvo su papel a través de algunas huelgas generales. Los colectivos estudiantiles se fortalecieron, pero más lo hicieron las asambleas de instituto y de facultad. Pero el tiempo va pasando y pese al auge movilizatorio y organizativo nunca se llega a articular nada co31
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mún. La lucha se ha centrado los últimos años en decir que no y resistir a una serie de reformas neoliberales impuestas desde Madrid y seguidas ciegamente por el caciquil gobierno aragonés. Pero no hemos preparado al movimiento estudiantil para la carrera de fondo que iba a significar este proceso histórico, sin generar las estructuras adecuadas para coordinarnos, unificar luchas y golpear conjuntamente, canalizando nuestras fuerzas a lo largo del tiempo. Una movilización que solo es protesta y no se estructura ni es capaz de articular las diferencias prácticas e ideologías, no puede mantenerse mucho tiempo en la cresta. Por eso el ciclo movilizatorio parece haber terminado. Pese a que lo conseguido en las calles no deja de ser, en términos generales, grandes victorias dentro del momento que vivimos y de la época de la que venimos, lo cierto es que no acumulamos más que derrotas y no hemos sido capaces de frenar ni una sola reforma austericida y neoliberal. Esto ha conllevado un cansancio generalizado y el agotamiento de un periodo movilizatorio y de protestas que, se puede decir, tuvo su punto culminante 32
en las Marchas de la Dignidad el 22 de marzo de 2014. Lo que vino después fue un progresivo descenso en el nivel movilizatorio y la canalización generalizada de la lucha en las calles a la carrera electoral. Sin entrar a valorar este proceso, es evidente que ha afectado y mucho al movimiento estudiantil aragonés. En un contexto de menor movilización siempre salen menos estudiantes a la calle y las convocatorias –antes sencillas y masivas– resultan menos exitosas y más trabajosas. Del mismo modo hemos visto cómo las asambleas de facultad y de instituto o bien se vaciaban reduciéndose a su mínima expresión, o bien desaparecían quedando muy pocas excepciones. Pero, curiosamente, al mismo tiem-
po hemos visto cómo los colectivos estudiantiles no hacían sino, a nivel general, crecer e incrementar cuantitativamente su militancia. No deja de ser un proceso lógico y habitual que es lo que nos permite entender la situación en la que nos encontramos y la base material y humana con la que contamos para trabajar.
II. Contra el “reflujo”, movilización
Esta reciente situación que hemos descrito es lo que se viene a denominar “reflujo movilizatorio”. Tomado tal cual en consideración no supone un error de análisis, simplemente es reconocer que la gente ya no se moviliza como antes, que se han normalizado cosas que antes no lo estaban, que
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hay cansancio y que las esperanzas están depositadas en otros espacios de lucha. El problema es diagnosticar mal el alcance real de este reflujo y, sobre todo, aplicar remedios que van en dirección absolutamente contraria a la necesaria para revertir la situación. No hemos de pensar que podemos mantener un nivel alto de movilización de manera permanente. Pero tampoco que hayamos de adaptarnos dócilmente a los ritmos y campos de lucha que nos plantea el poder. Si somos capaces, mediante organización y trabajo, de mantener un cierto nivel de movilización y de fuerza del movimiento estudiantil, hemos de explotar esa veta y tratar de ir a contracorriente en un momento de desgaste generalizado.
Algo así es lo que hemos tratado de hacer el movimiento estudiantil durante este último curso. Frente a los análisis más pesimistas, que nunca veían al estudiantado con la fuerza suficiente para movilizarse con éxito, conseguimos aupar la idea de que hay, latente, una base objetiva en el estudiantado aragonés para continuar la lucha más allá de los ritmos movilizatorios generales. Inevitablemente esto conlleva la necesaria transformación de la forma en la que hemos hecho las cosas hasta ahora y a esta mejora cualitativa nos hemos puesto a trabajar. El curso comenzó con el planteamiento de una huelga convocada a nivel estatal por el sindicato amarillo oficial, el Sindicato de Estudiantes. Sus habituales con-
vocatorias, de varios días y sin implantación real entre el estudiantado, no suelen responder ni a los tiempos ni a las necesidades de los y las estudiantes aragonesas. A diferencia de otros territorios, aquí el SE no es hegemónico, lo cual posibilita una mayor capacidad para construir movimiento estudiantil. Así, la primera convocatoria no fue seguida en Aragón salvo en pequeñas excepciones y fuera del núcleo principal que es la capital. A cambio, los colectivos estudiantiles más combativos y conscientes de la necesidad de generar tiempos propios para la lucha estudiantil en Aragón convocamos una huelga estudiantil solo en nuestro territorio para el 20N y sin ninguna referencia a nivel estatal. Probablemente éste fuera el hito más importante del curso, en el que se consiguieron desplazar las tesis de que el reflujo imposibilitaba una movilización satisfactoria. Sin apenas conflictividad, en ese momento, en la defensa de la educación pública, el estudiantado aragonés se movilizó, dejó las aulas y salió a las calles para enfrentarse a la LOMCE (ante la que habíamos parecido resignarnos), a los recortes y a las tasas. 33
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Esta convocatoria marcó algunos cambios sustanciales cuyas consecuencias aún se dejan sentir. En primer término cambió la correlación de fuerzas en el seno del movimiento estudiantil, siendo arrebatada la hegemonía a las posiciones más moderadas y reformistas, que dejaron paso a las más combativas que no se resignan a la mitología del reflujo movilizatorio. Además se obró, para esta huelga, una unidad y organización que no se había dado hasta la fecha: la creación de un órgano de coordinación permanente en el que están representados todos los colectivos y asambleas estudiantiles aunque, eso sí y solo por imposibilidad material, solo de Zaragoza. Este comité permanente, que comenzó para prepara la huelga pero ha acabado instituyéndose como vía habitual de toma de decisiones, evidencia la unidad estudiantil que hasta entonces no se había logrado nunca a lo largo del tiempo. Y, por si fuera poco, la huelga del 20N supuso la profundización en los tiempos propios del estudiantado aragonés, que aunque históricamente se ha regido con sus propios ritmos de lucha, el último periodo movilizador parece haber actuado como elemento 34
homogeneizador respecto al estado. Como ya se ha demostrado, tras esa primera convocatoria ha sido difícil no seguir nuestro propio ritmo como movimiento en el seno del pueblo aragonés. Cuando se trata de impulsar algo a nivel estatal, generalmente movilizaciones y huelgas, nunca se tiene en cuenta al estudiantado aragonés sino que siempre viene hecho desde Madrid. De algún modo este curso hemos vuelto a rebelarnos contra esto y hemos desgajado nuestro propio proceso. Lo cual no significa que no podamos luchar conjuntamente con el resto de estudiantes de otros pueblos sino que los acuerdos han de alcanzarse entre iguales y no según una decisión centralista. La tensión no decayó pues el gobierno español nos tenía preparada otra nueva ofensiva. Aprobó el
decreto de implantación del 3+2 que atacaba a la enseñanza universitaria, reduciendo aún más los grados y profundizando el proceso neoliberal de Bolonia. La reacción no se hizo esperar y surgió, desde los pueblos, la iniciativa de una nueva huelga, la del 29 de febrero, a la que el movimiento estudiantil aragonés decidió sumarse. De nuevo se repitieron las movilizaciones que habíamos visto en noviembre, comprobando que estábamos lejos de perder la capacidad de convocatoria. Esta huelga asentó la función de coordinación y de unidad estudiantil que es el comité, como órgano natural de comunicación y decisión. Más tarde se trató de tener una mayor coordinación con los trabajadores y trabajadoras del sector educativo. Ante una nueva convocatoria planteada por el SE y otras federaciones re-
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III. Avanzar es articular
formistas, junto con trabajadores de la universidad, el comité permanente decidió no convocar una huelga que en Aragón no tenía ningún sentido y que solo hubiera servido para desgastarnos. Solo las organizaciones dependientes de Madrid apoyaron secundarla pero finalmente hasta los propios sindicatos de trabajadores acordaron no convocarla porque no se adaptaba a los tiempos aragoneses. En su lugar se hizo una manifestación en Zaragoza de unidad entre trabajadoras y estudiantes. En la misma línea, el comité decidió apoyar la huelga que el sindicalismo combativo de educación, representado por CGT, decidió convocar para el pasado 6 de mayo solo en Aragón y contra las reválidas de la LOMCE. En esta ocasión el hito que ha supuesto ha sido la de convocatoria de huelga únicamente de en-
señanzas medias aunque ciertamente con menor incidencia que las anteriores. En las circunstancias de esta convocatoria el movimiento estudiantil aragonés ha dado otro gran paso, organizándose para tratar de subir el nivel de conflictividad y ponerlo al nivel de otros movimientos estudiantiles de pueblos del Estado. Después de conseguir tiempos propios, asentar el comité permanente avanzando en la integración en base a objetivos mínimos y avanzar en la unidad obrero-estudiantil; el último de los logros ha sido el de llevar la lucha estudiantil a campos y niveles que resulten molestos para un sistema demasiado acostumbrado a las manifestaciones de paseíto y procesión. Considero esto como un hito organizativo, estratégico y cualitativo del estudiantado aragonés, que ha de mantenerse en el tiempo.
Pero no todo se ha hecho bien, hemos cometido muchos errores que debemos subsanar en el futuro. El principal es el olvido en el que ha quedado, a nivel general, el trabajo en asambleas de instituto y facultad, que al fin y al cabo son las que dotan de músculo cuantitativo al movimiento estudiantil. Aquí es donde el proceso desmovilizador ha golpeado más fuerte haciendo al movimiento estudiantil aragonés extremadamente dependiente del trabajo de sindicatos estudiantiles. Por falta de capacidad de trabajo y por falta de estrategia las organizaciones combativas nos hemos centrado en dirigir el movimiento según nuestras posiciones pero hemos puesto menos énfasis en el trabajo de base. Probablemente no hubiéramos podido hacer ambas cosas a la vez pero eso no significa que no sea un elemento a tener en cuenta en el futuro. En un año electoral como el actual es todo un logro que hayamos podido mantener nivel movilizatorio, sin embargo se ve más claramente un distanciamiento entre la gente movilizada no 35
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organizada y el cuerpo militante que impulsa el trabajo estudiantil. Probablemente sea éste el mayor reto que debemos enfrentar el próximo curso: cómo conseguir volver a involucrar al estudiantado en el trabajo diario que es necesario hacerse en cada centro y que hemos de asumir con una estrategia concreta. El primer elemento a tener en cuenta es que si se ha de trabajar en lo concreto de cada centro esto ha de hacerse con sinceridad revolucionaria, esto es, llegando al conjunto con perspectiva amplia. Esto lo digo porque el modelo que se ha seguido hasta ahora en el auge movilizatorio ha sido el del reformismo, que impulsa asambleas de centro para poder parasitarlas y canalizarlas según sus intereses. Generar ese tipo de estructuras es producir una falsa imagen de crecimiento y fortalecimiento estudiantil. Así no se construye movimiento, más bien se lo debilita. De ahí la necesidad de que seamos, de una vez por todas, las organizaciones combativas las encargadas de dirigir la estrategia de crecimiento por la base del movimiento en su conjunto. Esto se hila con la necesidad existente de construir movimiento estudiantil a 36
nivel territorial. Es un hecho comprobado el absoluto zaragozacentrismo de nuestras dinámicas, algo que hay que revertir si queremos tener un movimiento fuerte que responda y construya con contundencia y solidez. A mi juicio es un paso fundamental para el movimiento estudiantil aragonés el que se lleve a buen puerto un órgano de coordinación a nivel nacional que aglutine a todas las fuerzas estudiantiles. Con sus dinámicas particulares adaptadas a las necesidades y posibilidades, claro está, pero al fin y al cabo un comité análogo al que existe en Zaragoza pero para coordinar a nivel nacional. Avanzar en esa estructuración es necesario y los y las revolucionarias tenemos que ser conscientes de que los principales interesados en que esto no se haga serán las organizaciones reformistas. Ellas existen porque necesitan parasitar al movimiento para sus intereses. Que éste se desarrolle y desborde sus cauces no entra en sus planes. En consecuencia, estos son los grandes retos que debemos afrontar para el curso que viene: - Por un lado, retomar el pulso a las asambleas de centro, con un trabajo sincero y no parasitario. Es ne-
cesario volver a impulsar el trabajo de base siempre en correlación directa con la movilización y los objetivos generales de todo el movimiento. No es solo un trabajo de potenciar la autoorganización del estudiantado, es también necesario que ese potencial se coordine y articule a nivel colectivo para avanzar en la lucha. - Por otro lado, componer el movimiento estudiantil aragonés a nivel territorial, extendiendo el modelo de unidad para que llegue a todos los rincones de Aragón. Sin esta dimensión nacional, el movimiento será siempre débil y quedará cojo, falto de legitimidad ante las instituciones del Estado, centrales y coloniales-autonómicas. Esto conllevará necesariamente un crecimiento del movimiento estudiantil que llegará allí donde hasta ahora no está presente o solo de manera testimonial, a partir de los núcleos donde ya existe organización como en Teruel, Uesca, Chaca, Samianigo, Andorra o Borcha. De la articulación general del estudiantado se obtendrá su expansión y crecimiento. - Y sin olvidar la necesidad de consolidar el camino realizado hasta ahora, con las mismas pautas y logros, avanzando en las propuestas que se han demostrado
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adecuadas. Profundizar en esa dirección para que no se retroceda especialmente en la acechante hegemonía del reformismo y los análisis pesimistas que pretenden paralizar la actividad del estudiantado bajo la promesa de una acumulación de fuerzas que en la práctica nunca se lleva a cabo. Todo ello, a nivel general, significa articular todas las partes que componen el movimiento estudiantil aragonés. Hacia un modelo de integración y de coordinación más sólido que es el único que nos puede garantizar la victoria en el medio-largo plazo. Las divisiones y el fraccionamiento existentes hasta ahora solo han producido desgaste y derrotas prácticas y simbólicas. Si a día de hoy no estamos preparadas para hacer frente a los grandes ataques del neoliberalismo global, es necesario que empecemos a poner las primeras piedras de maduración colectiva que nos lleven a alcanzar victorias en el futuro. Otros pueblos han realizado ya esta tarea, que no es fácil ni sencilla. Solo hay que mirar al estudiantado chileno, sus logros y su enorme peso en aquel país. Tenemos una responsabilidad histórica a la luz de ese y otros muchos ejemplos. Todo lo que no haga-
mos hoy serán tareas pendientes que habrán de hacer los y las estudiantes que nos sucedan en la lucha estudiantil. Por ello hemos de abordarlas con urgencia, sin precipitarnos pero sin perder de vista la totalidad histórica en que estamos inmersos.
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Un cipotegato militante
Entrevista a Gorka Dallo Gorka Dallo es un militante estudiantil zaragozano, organizado en el colectivo libertario FEL y que trabaja activamente en el día a día del movimiento estudiantil y en todas las movilizaciones que se llevan a cabo. Hasta ahí todo normal. Sin embargo a nadie se le escapa dentro del movimiento -no sin cierto humor- que Gorka es, aunque sea de manera efímera, la figura más ilustre de su pueblo, Tarazona. Gorka ha sido cipotegato en 2014, algo que lleva con gran orgullo y no pierde oportunidad de recordar en cualquier situación. Más allá de eso nos ha interesado cómo se vive más profundamente una tradición como esa. Nos interesa saber cómo vive la experiencia de ser cipotegato un militante anarquista en Zaragoza, si cabe sacar algún análisis de algo como eso: qué es lo que se aprende, qué vinculaciones se generan... Gorka ha aceptado gustoso conceder esta entrevista así que a ver qué puede decirnos. ¿Cómo te sentiste cuando supiste que ibas a ser cipotegato y cómo lo viviste? Cuando en el sorteo del Cipotegato salió la papeleta con mi número mi primera reacción fue quedarme en blanco y no creérmelo, era la primera vez que me presentaba y viendo la gente que había las posibilidades de que me tocara eran pocas. Cuando ya lo asimilas es cuando te das cuenta de que se va a cumplir un sueño y es cuando te empiezas a poner nervioso. Pero sobre todo creo que 38
los sentimientos que mejor definen lo que significa esto para alguien de Tarazona es emoción y orgullo. Y no sólo yo como Cipotegato sino también para la familia y los amigos. Esta tradición no solo es una marca incuestionable de Tarazona, también es una seña de identidad de todo Aragón, de cómo se viven aquí las fiestas y tradiciones populares ¿De dónde viene el cipotegato? Hay varias leyendas sobre la tradición (tiene más de 300
años) pero en realidad se trata de un personaje que salía en procesiones religiosas disfrazado de arlequín, el cual encorría a niños con una vejiga de animal atada a un palo, de ahí el nombre “cipotegato”. Éstos le tiraban tomates a modo de diversión. La fiesta cambió considerablemente cuando hace aproximadamente unos 30 años el pueblo empezó a participar en la fiesta tanto pretendiendo ser el famoso personaje como participando activamente lanzando tomates. Poco a poco la religiosidad
de la tradición se fue perdiendo a medida que aumentaba la implicación de la gente y especialmente de los jóvenes en la fiesta, hasta tal punto que hoy por hoy el Cipotegato no tiene ninguna connotación religiosa. Pero tú además eres un activista ¿Crees que ha habido muchos cipotegatos militantes? ¿Se vive diferente por tener una conciencia social y política, y estando organizado? De los cipotegatos que conozco creo que ninguno es activista
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o participa en movimientos sociales pero también es cierto que no conozco a todos. De todas maneras me parece que es algo anecdótico porque cuando te pones el traje dejas de ser “fulanito”o “menganito”, eres el Cipotegato y representas a todos los turiasonenses. Sí que es cierto que los amigos que saben de mi activismo político bromeaban conmigo diciendo que sería un buen momento para hacer alguna reivindicación o sacar a relucir alguna bandera pero no pasaban de ser bromas.
forma de vender que Aragón es diversidad cuando en realidad todas las políticas que se hacen van en detrimento de los pueblos y sus tradiciones y cultura. Nos han dicho que eres medionavarro, por no decir navarro entero ¿Ser cipotegato te ha hecho sentirte más vinculado con esta tierra? ¿Te sientes ahora más aragonés o has tomado mayor conciencia de lo que es la identidad y la cultura aragonesa? Dejémoslo en medio navarro. La verdad es que se hace raro para mucha gente asumir que se pueda ser navarro y turiasonense a la vez pero yo no he elegido con qué lugares me siento más vinculado, es algo con lo que he crecido desde niño. Aún con todo tengo claro que mi tierra y con la que más me identifico es Tarazona y el Moncayo y aunque tenga cariño a Aragón por ser el país donde está enmarcada ésta, no es mi referente emocional.
Como militante y cipotegato ¿Crees que en Aragón se hace suficiente por cuidar este tipo de patrimonio cultural? Sinceramente no. Me alegro de que esta tradición se conserve en Tarazona pero en la comarca y alrededores había muchos pueblos con este personaje pero se ha ido perdiendo quedando ahora unos pocos, aunque el más conocido es el de Tarazona. Creo que es evidente que se intenta potenciar ciertas tradiciones pero sólo de cara Y conociendo la a la vitrina, como una realidad política y
cultural vasco-navarra ¿No crees que esas identidades marcádamente localistas -como la que te lleva a sentirte únicamente moncaino- son las que están a la base de la debilidad política del pueblo aragonés? ¿No crees que es un logro del españolismo que nos sintamos únicamente de nuestro pueblo o comarca y nos olvidemos del colectivo histórico del que venimos? No creo que las identidades localistas sean un elemento de debilidad política en sí mismas sino más bien la despolitización que desde el poder se le da a estas identidades, identificándolas exclusivamente con ciertas tradiciones, festejos u otros elementos donde casualmente tanto la iglesia como el poder tienen prácticamente el monopolio. Creo que el camino es identificar estos localismo como fuente de autogestión política y cultural donde la libre participación del pueblo y la unión con otros forme construcciones políticas más fuertes.
Pero tú militas en Zaragoza. Desde esa perspectiva ¿Cómo ves los movimientos sociales y la actividad política en Tarazona? Dado que vivo en Zaragoza no participo en movimientos sociales en Tarazona pero desde la lejanía es cierto que hoy por hoy hay poco movimiento en la zona. Sí que es cierto que han aparecido nuevos partidos políticos como Podemos o Ciudadanos pero estas elecciones veremos si tienen acogida en un pueblo que yo tildaría de tradicional. Ahora tu “reinado” acaba ¿Qué consejo le darías al nuevo Cipotegato? Que trabaje tanto el cuerpo como la mente pero sobre todo que disfrute estos meses, porque son meses de nervios pero sin duda unos meses inolvidables.
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«¿Qué es un pueblo sin su fiesta y sin su tradición? Ese fino hilo que nos liga con nuestro pasado es lo que nos hace ser quien somos. Cuando todas las conciencias se componen en una, por la repetición de ese momento siempre esperado. Entonces es cuando somos pueblo. Porque anudamos nuestro presente a los hilos que nos vienen del pasado; porque con ello permitimos que otros lo puedan hacer mañana. Somos tiempo, recuerdo, cristalizado y hecho presente constantemente. Lanzados hacia un futuro que desconocemos, intentando recoger lo que queda de nuestra difuminada estela. Al fin y al cabo qué es la tradición sino un recuerdo colectivo. Al fin y al cabo ¿Qué es un pueblo sin su tradición? Y de eso, en Aragón, tenemos mucho»
Entalto Aragón libre, socialista y feminista, 27 de agosto de 2014
SOCIALISMO ARAGONÉS Nº 2 | Mayo de 2015 www.purna-aragon.org
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