Benemérita Escuela Normal “Manuel Ávila Camacho”
Licenciatura en Educación Preescolar
Primer Concurso de Cortometrajes Educativos
“El medio (familiar, escolar y social) como factor detonante en el proceso discriminante del individuo”
Sexto Semestre
11 de febrero de 2016
INTEGRANTES DEL CORTOMETRAJE
Rafael Alejandro Zavala Carrillo Correo: rafalejandrox@live.com.mx
Julia Janeth Reyes Tostado Correo: julyailuj9@gmail.com
Martha Guadalupe Llamas Martínez Correo: malucienta24@gmail.com
Estefanía Moreno del Rio Correo: fany_mori@hotmail.com
CRÉDITOS Personajes Papá
Fernando García Flores
Mamá
Estefanía Moreno del Rio
Lorena
Estefanía Moreno del Rio
Mónica
Martha Guadalupe Llamas Martínez
Fernanda
Julia Janeth Reyes Tostado
Amiga 1
Julia Janeth Reyes Tostado
Amiga 2
Martha Guadalupe Llamas Martínez
Amigo
Rafael Alejandro Zavala Carillo
Maestro
Jorge Luis Ramírez Martínez
VCR VMR
Martha Guadalupe Llamas Martínez, Julia Janeth Reyes Tostado, Estefanía Moreno del Rio & Rafael Alejandro Zavala Carrillo DIRECCIÓN
Martha Guadalupe Llamas Martínez, Julia Janeth Reyes Tostado, Estefanía Moreno del Rio & Rafael Alejandro Zavala Carrillo GUION
Martha Guadalupe Llamas Martínez & Rafael Alejandro Zavala Carrillo EDICIÓN
Martha Guadalupe Llamas Martínez & Rafael Alejandro Zavala Carrillo MÚSICA
Martha Guadalupe Llamas Martínez & Rafael Alejandro Zavala Carrillo SONIDO
Julia Janeth Reyes Tostado, Martha Guadalupe Llamas Martínez & Rafael Alejandro Zavala Carrillo ILUMINACIÓN
Síntesis “El medio (familiar, escolar y social) como factor detonante en el proceso discriminante del individuo”
El cortometraje trata de la historia de Lorena, una niña que es aplicada en sus estudios, centrada en sus metas, con gustos poco comunes en los adolescentes de la actualidad. La situación se desarrolla cuando su familia se muda de ciudad debido a que su padre es transferido del trabajo.
Cuando llegan a la ciudad de Zacatecas ella ingresa a un nuevo colegio y debido a su forma de pensar y de ser es víctima del rechazo por parte de sus compañeros. En este mismo sentido cabe resaltar la situación que se presenta en la familia, donde se tiende a comparar con los hermanos; lo cual Lorena enfrenta a ello.
Todo comienza por la influencia que ejercen los medios de comunicación ya que la decisión de entrar a esa escuela surge por un comercial de televisión donde se anuncia un colegio donde solamente tienen acceso las personas con mayor solvencia económica.
Al ingresar, Lorena se enfrenta a burlas y rechazos por tener una forma distinta de pensar fuera de la visión banal que los medios de comunicación presentan y que influyen de manera determinante en la forma de pensar de los adolescentes.
Ella trata de simpatizar con sus compañeros por lo que acepta la invitación por parte de ellos para asistir a una fiesta donde se enfrenta a un malentendido y una vez más el rechazo, las burlas, las bromas, las redes sociales acrecientan la discriminación hacia ella.
FUNDAMENTACIÓN
Desde hace tiempo hemos visto en los medios de comunicación, en redes sociales, y en la sociedad en general. Que las personas son tratadas de diferente manera según su capacidad de hacer las cosas, de su lugar de procedencia, del tipo de familia, la forma de vestir, entre otras más. Lo preocupante de ello es que se vaya entrando “automáticamente” en ese juego de actitudes generadas hacia las personas; podría decirse, por costumbre o porque vemos que así se “deben” tratar. Simplemente desde la casa se comienza a percibir diferencias entre los integrantes. Esto es realmente alarmante pues diferencias en las personas
por miedo o tal vez ignorancia a las
practicamos la discriminación en los diferentes
contextos de la sociedad. Tomándolo como un fenómeno invisible y naturalizado en nuestra cotidianeidad; ya sea en las escuelas, familia, etc., evitando la igualdad de derechos y obligaciones, así como el acceso a los principios de igualdad, equidad y justicia social. Así, “la discriminación es un eje transversal que acompaña a las personas y/o grupos que se encuentran en situación de vulnerabilidad... En todos los casos, la discriminación está presente cuando las personas en las que recae se ven limitadas de ejercer sus derechos y libertades fundamentales” (DGESPE, 2012). Pero no sólo es propio de los sujetos con tales características. Sino que es parte inherente de los demás
individuos dentro de una sociedad. Lo cual ha sido
originado a lo largo de la historia de éste a consecuencia de los cambios propios del medio en el que se encuentra inmerso. Produciendo diversos efectos adversos en su propia concepción como ser humano. En donde una de las causas principales que ha propiciado tal efecto es la falta de una educación
basada en el respeto en el otro. Es decir, no hay un
reconocimiento de lo propio del sujeto en sus diversos ámbitos (social, ideológico, psicológico, axiológico, emocional, físico, etc.). En el que tal aspecto comienza a formarse desde el seno familiar, y al no recibir los elementos necesarios para su consecución hace que haya una distorsión entre lo que se pretende formar desde esta esfera. Propiciando, y de acuerdo con Jurado (2003), la derogación de tales acciones a otros ámbitos. Que pueden o no lograrlo, debido a que la base de toda formación es el propio medio inmediato. Por lo tanto se debe buscar que los individuos en la sociedad enfrente las actitudes negativas con respecto a las diferencias, a la discriminación y a los prejuicios que tienen su origen en la sociedad y representan un serio obstáculo para su desarrollo. Mediante el impulso de políticas y prácticas inclusivas en la cotidianeidad de nuestras actividades. De esta manera, “Lo verdaderamente importante es que el cambio se produzca en el pensamiento y en las actitudes, y se traduzca en nuevos planteamientos de solidaridad, de tolerancia, y en nuevas prácticas educativas que traigan consigo una nueva forma de enfrentarse a la pluralidad y a la multiculturalidad” (Arnaiz, S.F.) De ahí la importancia que posee tal referente, pues rompe con esquemas y mentalidades distorsionadas; ya que para implementar una transformación tanto en sí mismo como en el otro, es ineludible que se esté en disposición en hacerlo. En el que no sólo son importantes las palabras, o bien las ideas, sino que la acción se convierte en el pilar. Sirviéndole como base para apoyar al otro, lo que favorecerá en que cada uno aporte elementos para constituir una unidad; a pesar de las diferencias que los caracterizan como seres humanos. Haciendo referencia a las políticas y prácticas necesarias para combatir la discriminación, existen varias propuestas, una de ellas desde el ámbito educativo. La cual es “la inclusión educativa”, en la que se pretende atender las barreras para el aprendizaje y la participación, lo cual se toma como eje vertebral para eliminar y/o disminuir las situaciones y condiciones que gestan actitudes de rechazo y
discriminación de los profesores, padres de familia y los propios alumnos, hacia aquellos sujetos considerados “distintos” por tener características específicas. Para lograr esto, es indispensable reconocer primero las barreras más importantes a eliminar, las cuales radican en nuestras creencias más profundas y en los valores construidos respecto a las diferencias humanas. La inclusión probablemente es un concepto novedoso en el ámbito educativo, sin embargo no es nuevo ante la exclusión que en todos los tiempos se ha dado en la vida. Primeramente en un aula los docentes tienen la responsabilidad de dar la atención a la diversidad teniendo ante todo valores indispensables como el respeto, además de la tolerancia, hacia el otro. De esta manera, se debe entender como el proceso de incluir a los individuos para que logren desarrollar y lograr un fin en común, en donde todos deben salir beneficiados. Ya que la inclusión está basada en el principio de que cada individuo tiene características, intereses, capacidades y necesidades de aprendizaje distintos Si bien es cierto, que por insignificante que parezca, todos alguna vez hemos sufrido discriminación por la apariencia, la forma de hablar y hasta de pensar. Esta última suele ser muy común también dentro del seno familiar al presenciarse las comparaciones entre los propios hijos, o bien entre hijos propios e hijos de conocidos, al no respetar las preferencias que existen entre unos y otros, al querer seguir un modelo de familia que la misma sociedad ha logrado imponer. En el ámbito amistoso la discriminación suele darse con las bromas de acuerdo a la impresión de imagen que se proyecta, y lo peor en estas situaciones es que el individuo propio se presta a ser el sujeto discriminado al dar paso a los apodos, burlas y como consecuente pasar a mofarse de sí mismo. Como seres humanos debemos desarrollar nuestro pensamiento crítico ante las situaciones de discriminación. Aceptar que todos somos diferentes, sin embargo tenemos el mismo valor humano, por el cual cada uno de nosotros merecemos y
tenemos el derecho a ser respetados, valorados e incluidos en el círculo de sociedad. La antidiscriminación debe también ser personal, si no tenemos respeto por nosotros mismos
y al seguir estereotipos que la mercadotecnia nos ha ido
ofreciendo. Estamos dejando la propia personalidad e imitando a otro individuo, gracias a esto los seres humanos han pasado a sentirse bien por su apariencia y el complacer al ojo del otro. Al lograr aceptarnos tal y cual somos, estaremos logrando respetar a la demás sociedad y así pasar a una verdadera inclusión que deje a un lado completamente las diferencias. Es importante reconocer que en todos los individuos existirán siempre características particulares que nos hagan diferentes, sin embargo lo importante en ese reconocimiento es, precisamente eso, reconocer sin señalar. Para que a partir de esto se brinden las mismas oportunidades de desarrollo y de calidad de vida de acuerdo a las necesidades y características correspondientes. Cuando estamos señalando de alguna manera a una persona lo hacemos por razones de mala intención, ya que generalmente tenemos en la mente la idea de que debemos sobresalir y creemos de manera errónea que la forma de hacerlo es a costa de los demás. Por lo cual no le tomamos importancia a las malas acciones realizadas, pues el pensamiento egoísta que forma parte de todos los seres humanos sale a la luz y nos dejamos llevar sin pensar en las consecuencias que traen los malos actos hacia las demás personas. Aunque si bien es cierto en algunas otras ocasiones la discriminación se presenta de manera natural, ya que sin darnos cuenta podemos contribuir a que esas malas prácticas se den. A consecuencia de que nos vemos influenciados por distintos medios en los que nos hemos desarrollado a lo largo de nuestra vida, como por ejemplo por los medios de comunicación que hoy en día toman suma relevancia al ser los que de alguna manera transmiten malas influencias a nuestra mente y que de manera inconsciente la hacemos parte de nosotros.
Otro medio que puede influir es la sociedad, pues cada día nos está marcando cierto estilo de vida que se piensa es el que deben llevar todos los individuos, esto lo podemos identificar mediante las “modas” que siempre están cambiando y que se pretende que todos las adopten y las hagan parte de su vida. Sin embargo cuando alguna persona no desea hacerlo inmediatamente se le etiqueta de “diferente” y por lo tanto será sin duda alguna flanco de discriminación y burla. Por lo tanto se vuelve necesario generar sensibilización primero en los diferentes contextos para que la discriminación no se presente, por ejemplo en el contexto escolar, permitiendo a los individuos educarse juntos en la escuela, sea cual sea su condición, y participen del currículo y de las actividades educativas sin ningún tipo de discriminación, permitiendo con esto la igualdad de oportunidades. Para esto, es necesario “desarrollar, fomentar y difundir estudios sobre las prácticas discriminatorias en los distintos ámbitos de la vida social, y enfrentarlo desde la perspectiva teórica y práctica” (CODHEM, 2007). A esto se puede dar respuesta desde el contexto educativo, generando una educación en y para la diversidad, con la que se pretenda terminar con la discriminación, exclusión y marginación, y sobre todo que se permita satisfacer las necesidades de todos los alumnos, sean cuales fueren sus características personales, psicológicas y sociales. Para evitar así que afecte en el desarrollo de su identidad personal y su impacto en la identidad social. Acorde a ello, a escuela toma un papel de suma importancia, pues es el espacio en donde las personas acuden a educarse,
a transformar los conocimientos
informales que han adquirido de su contexto social y familiar en conocimientos formales y útiles que les servirán para toda la vida y principalmente para convivir de manera pacífica con la sociedad. Se necesita una educación basada en valores donde ese aspecto sea el primordial y que principalmente los docentes den el ejemplo a sus alumnos para que ellos puedan adoptarlo y hacerlo parte de su vida, esto beneficia de manera
inmediata a los alumnos y su comportamiento, y se traspasa al mismo tiempo a la sociedad, al ser partícipes del cambio que tanto hace falta para mejorar. Respecto al ámbito social las encuestas nacionales de discriminación y el Consejo Nacional para la Prevención de la Discriminación, revelan que las prioridades más importantes a atender en materia de discriminación sean las personas con discapacidad, los grupos de personas provenientes de culturas indígenas y las problemáticas asociadas al género, no por ello podemos descartar la realidad en los diferentes contextos en donde más personas son discriminadas; y que ni siquiera nos damos cuenta. Es clara la situación de desventaja que ellos enfrentan, puesto que no tienen las mismas oportunidades en educación, en el campo laboral y en las relaciones sociales ya que el hablar una lengua distinta impide la interrelación con las demás personas. Y eso los excluye de las “libertades, derechos y oportunidades para realizar sus vidas” (CONAPRED, S.F.). De igual manera, las personas con discapacidad o mejor dicho las personas con capacidades o necesidades distintas, ya que la capacidad no tiene que ver solo con aspectos físicos sino con aspectos intrínsecos de la persona. Evidentemente viven una desatención que se puede observar desde la infraestructura de la ciudad, en el ámbito educativo, laboral y social ya que en cada uno de ellos afrontan limitantes que no les permiten desenvolverse al igual que los demás. Haciéndose una vez más la discriminación presente en cuestiones asociadas al género. Puesto que se precisan situaciones en la vida laboral que por el hecho de ser mujer impide la oportunidad de recibir un mismo sueldo que los hombres. Solo por mencionar algunos casos. Sin embargo, existen amplias y variadas formas en que la discriminación se hace presente en nuestras vidas. Por ejemplo, al no traer la última versión del celular que acaba de salir al mercado; por no vestir “a la moda”; por traer un modelo de carro ya pasado; por el aspecto físico. Todos ellos conforman estereotipos que, sin
duda alguna, marcan los medios de comunicación y por supuesto desfasados de lo que hace ser a una persona y no se diga del concepto de felicidad que éstos pretenden mostrar y que todas las personas buscan. Indudablemente, la discriminación surge de los modelos o estereotipos que la sociedad ha construido muchas veces influenciado por los medios de comunicación donde una persona que no vive de acuerdo a ello, es rechazada y limitada en sus derechos y oportunidades. Lamentablemente, en México, la igualdad parece ser sólo una utopía y una quimera inalcanzable. Ya que cada vez las diferencias son más palpables, y por lo tanto la desigualdad, la discriminación, en las oportunidades y la falta de un real acceso al ejercicio de los derechos, parece un campo fértil para que prolifere cada vez más, la discriminación. En algún momento, se comenzó a considerar que las diferencias individuales o grupales respecto a sus semejantes los hacían precisamente des-semejantes, y lo peor de todo, se creyó que los “distintos” eran por eso inferiores, y temibles, y atacables. De esta manera, las opiniones y acciones están marcadas por “profundo prejuicios discriminatorios, mismos que provocan división social, maltrato y falta de igualdad”. (Ortiz, S.F.)
Bibliografía:
Artículos: Arnaiz, P. (S.F.) Sobre la atención a la diversidad. En: http://www.carm.es/web/integra.servlets.BlobNoContenido?IDCONTENIDO=3114&T ABLA=PUBLICACIONES_TEXTO&IDTIPO=246&RASTRO=c943$m4331,4330&CA MPOCLAVE=IDTEXTO&VALORCLAVE=474&CAMPOIMAGEN=TEXTO&ARCHIVO =Texto+Completo+1+Atenci%F3n+a+la+diversidad%3A+materiales+para+la+forma ci%F 3n+del+profesorado.pdf Jurado, J. (2003). Problemáticas Socioeducativas de la Infancia y la Adolescencia Contemporánea. Revista Iberoamericana de Educación. Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación la Ciencia y la Cultura (OEI). Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/pdf/800/80003108.pdf
Fuentes electrónicas: DGESPE (2012). Atención a la diversidad. México. Recuperado de http://www.dgespe.sep.gob.mx/public/rc/programas/lepree/atencion_a_la_diversida d_lepree.pd
Rodríguez Z., J. (2005). Definición y concepto de la no discriminación. El cotidiano, noviembre-diciembre, año/vol. 21, número 134. Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco, Distrito Federal, México. Pp. 23-29. CONAPRED (S.F.). Discriminación en general. SEGOB Sitio Web: http://www.conapred.org.mx/index.php?contenido=pagina&id=46&id_opcion=38&o p=38 CODHEM (2007). Un acercamiento a la discriminación. De la teoría a la realidad en el estado de México. Recuperado de http://www.iedf.org.mx/sites/DDHH/publicaciones/12.pdf Ortiz, L (S.F.). Discriminación. Comisión de Derechos Humanos del Estado de México. Recuperado de: http://www.codhem.org.mx/LocalUser/codhem.org/consejoc/pdf/confluis.pdf