BENEMÉRITA ESCUELA NORMAL MANUEL ÁVILA CAMACHO
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR
SEXTO SEMESTRE
ASIGNATURA: PRODUCCIÓN DE TEXTOS ACADÉMICOS
ENSAYO: “LOS TEXTOS ACADÉMICOS”
MAESTRA: MA. AGUEDA RAMÍREZ VALERIO
ALUMNO: RAFAEL ALEJANDRO ZAVALA CARRILLO
6 DE JULIO DEL 2016
Los textos académicos
Hoy día la divulgación de textos académicos propios de los diversos ámbitos del saber (sociales, políticos, clínicos, culturales, tecnológicos, históricos, etc.) se convierte en la base para dar a conocer al público los avances, retrocesos, retos, obstáculos y descubrimientos que se tienen. En el que el objetivo no es el informar sino demostrar lo que se expresa. Pero no sólo en tales estratos poseen relevancia sino que también tienen sentido en el ámbito escolar; ya que es en este medio en el que los estudiantes ponen en juego diversas estrategias para dar cuenta de los aprendizajes obtenidos a lo largo de la experiencia escolar, pero también son esenciales para adquirir nuevos aprendizajes. Por lo que el presente ensayo tiene origen en el curso de “Taller de producción de textos académicos” inmerso en la malla curricular de la LEPREE 2011. El cual tiene como finalidad demostrar lo aprendido durante el curso en lo referente a la producción de textos académicos. En cuando a la estructura del ensayo, éste se divide en cuatro partes. En un primer momento se expone las tipologías de las funciones que tiene la escritura, por lo que a la vez se hace referencia a los ámbitos de los cuales surgen. Enseguida se hace énfasis al formato que se debe seguir al verse involucrado en el diseño y escritura de un texto académico. En otro apartado se mencionan las características propias de tal tipo de textos, y de igual forma se expone información de algunos tipos de estos. En la última parte se expone las conclusiones que se obtuvieron al elaborar el ensayo.
Una forma que tiene el ser humano para compartir el conocimiento que posee es por medio de la escritura. En ésta se establecen interconexiones cognitivas que coadyuvan que haya
una construcción permanente del saber a causa de la
interrelación constante de saberes, necesidades, situaciones e incluso emociones. De acuerdo con Camps (2013) existen ciertas tipologías propias de la escritura que están determinadas por los propósitos por los cuales son escritos los textos. Encontrándose así el carácter expresivo, el persuasivo, el referencial y el literal. Cuya selección va a estar determinada por la situación en la que se origina, así como por el tipo público a quien son dirigidos. En torno a esto es posible encontrar las siguientes esferas, en donde su comprensión favorece en que se tenga una comprensión de la tipología mencionada. “Un primer sistema –o esfera- de actividad profesional en el que se producen textos de investigación pero también los propios del quehacer profesional, el sistema de actividad de enseñanza y aprendizaje en el que aquello que se escribe y lee está al servicio del aprendizaje, el sistema de actividad social en el que prima el mantenimiento de relaciones y el sistema de actividad académico propiamente dicho que participa de los anteriores pero en el que se producen también textos propios” (Camps, 2013; pp.25)
Sin importar el propósito por el cual se escriben los textos, es menester tener en cuenta que otro de sus fines es el propiciar el aprendizaje por quien lo lee, pen el que a la vez existe una retroalimentación por quien lo escribe a causa de que en su elaboración se ve influido una retrospección crítica de lo que se conoce del tema. Lo que le obliga a indagar, identificar, seleccionar, analizar y codificar información para exponer al otro para así atraer la atención y ésta le sea pertinente de acuerdo a lo que busca. Es por esto, que la escritura es un proceso arduo, y de acuerdo con Ferreyra (2011), que involucra una serie pasos que hacen que se produzca un determinado resultado. Así, y previo a su inicio es imprescindible considerar, y con base a tal autor, el problema retórico que tiene como finalidad la elección de la temática sobre la cual se va a escribir, la identificación de los destinatarios, así como lo que se busca favorecer con el escrito.
Al momento de contar con tales referentes da inicio el proceso de planificación, el cual consiste en la concepción, generación, organización y representación de la información. Dichos elementos propician la base para que se dé comienzo a la escritura texto, cuya construcción va a estar influida por el fin que establezca el autor. Es imprescindible que esté presente la coherencia, que hace referencia a la organización de la información que se debe tener para que exista entendimiento. Otra propiedad elemental es la cohesión, que hace énfasis a la forma en la cual se vincula lo que se expone. El último paso a seguir es la revisión del texto, que es elemental para reconocer si lo elaborado concuerda con el objetivo planteado. En caso contrario sirve para que se dé inicio a la reestructuración de lo elaborado con el fin de que se produzca el escrito final. Aunado a esto, y de acuerdo con Fernández (2009), el texto que se escribe debe poseer ciertas características para que sea considerado como texto académico. Una de ellas es que debe convencer e informar, ya que la persona a quien va dirigido el texto se caracteriza por ser conocedor de lo que se expone; por lo que es menester que estén permeados los enfoques de tipo expositivo y argumentativo dentro del texto para que sea significativo y de impacto para éste. Además, debe de poseer objetividad para que se produzca un convencimiento de lo que se expone. En el que el punto clave es el demostrar en lugar de mostrar información. De igual forma, otra de las características propias es la intertextualidad, es decir la vinculación con otros escritos que permita la interpretación y comprensión de lo que se escribe. Conforme a lo expuesto previamente, dentro de los textos académicos se encuentran diversos tipos que se caracterizan por tener una función y estructura propia, pero sin embargo tienen en común ciertas características. Para entender mejor tal aspecto a continuación se hace mención de tal clasificación de textos.
El abstract tiene como fin reducir el contenido de un texto a un total de doscientas y seiscientas palabras, en donde sus ideas se caracterizan por ser claras y precisas. Además, puede ser de tipo representativo o presentativo. El primero se diferencia a causa de que el primero sintetiza los textos mientras que el segundo se emplea para darlo a conocer en una determinada presentación, además de su función base. En lo que respecta al artículo de investigación, su principal fin es la presentación de resultados de un tema en específico. El cual se basa en la realización previa de una investigación que puede ser relacionada a las ciencias humanas o a la ciencia experimental. Su extensión se caracteriza por ser no máxima a cinco palabras. Ambos tipos tienen estructura en común como la introducción, el desarrollo y la conclusión.
Además
se
puede
encontrar
el
abstract,
palabras
clave,
agradecimiento y bibliografía. En el que componente que los va a diferenciar es el relacionado al método y discusión, propio en la investigación experimental. En cambio el ensayo es un texto académico que tienen como fin presentar un tema de interés a partir de una postura personal. El cual se basa en una trama expositiva y argumentativa cuya estructura la compone una introducción (planteamiento del problema), un desarrollo (explicación del tema) y un cierre (solución del problema). Mientras que el estado del arte o informe es un texto académico que se realiza a partir de un referente o antecedente previo relacionado al tema que se pretende escribir. En donde el objetivo de éste es exponer información con base a la exposición de ideas sustraídas de investigaciones realizadas que apoyan al tema seleccionado. Asimismo se habla de informe al momento en el que es revisado por una persona ajena al propio escritor para reescribir sobre ello. De igual forma, la monografía es un tipo de texto académico que tiene como base la investigación de un tema que es caracterizado por su originalidad. Parte de un estado de arte, ya que existe un análisis crítico de las opiniones que han realizado otros autores de lo que se selecciona.
Su extensión, y a partir de la intención que se tenga, va de diez a cuarenta páginas. Posee una estructura que la diferencia de los demás tipos de texto que puede ser tanto argumentativa como expositiva (recorte bibliográfico); en donde puede contener o no hipótesis. Otra característica de éste tipo de texto es que se da a conocer el punto de vista del autor y no el propio. Al contrario de éste, el proyecto es un texto académico en el que se denotan objetivos, fundamentos y acciones. La información tiene como fin ser expuesta ante un público por lo que tiene que tener claridad, ser factible y válida para que así haya una comprensión. La estructura que posee es la siguiente, problema de investigación, estado de arte,
justificación, marco teórico,
objetivos,
metodología, cronograma,
presupuesto y referencia bibliográfica. Por otro lado, el resumen es un tipo de texto académico en el que se presenta una sinopsis de un texto, además se caracteriza por no perder la estructura del texto original. Aunado a esto, respeta los vocablos del autor. La trama textual es de tipo descriptiva y expositiva, y en ocasiones se presenta la argumentativa. Su extensión va a depender del objetivo que se tenga y de la extensión del texto original. A diferencia de este tipo de texto académico, en la reseña es menester poseer un conocimiento previo del texto, ya que su objetivo principal es comunicar información coherente, precisa y clara sobre una obra. Este texto es tanto de tipo crítico como descriptivo, cuya estructura posee tres partes esencial: inicial, en el que se da a conocer referencias bibliográficas; núcleo, hace énfasis a datos del autor; y fase terminal crítica, en la que se da una opinión tanto positiva como negativa del texto. Por último la síntesis temática es un tipo de texto académico que contiene las ideas principales y opiniones de uno o más textos, en el que se incluye un análisis
del propio autor. El objetivo es el análisis de un tema de estudio, el cual puede tener tramas tanto de tipo expositivo como argumentativo. Mientras que lo que el portafolio “persigue es, ante todo, la reflexión, la autoevaluación y el aprendizaje desarrollado” (Bozu, 2012). Permitiendo así múltiples beneficios como organización en la planificación de lo que se desea emprender,
autoanálisis y crítica propia que sirve como medio para seguir
mejorando, así como también denota alcances y áreas de oportunidad. De acuerdo a lo expuesto, los textos académicos toman relevancia en la formación académica de los sujetos. Debido a que exige a estos la puesta en marcha de diversos recursos (cognitivos, mentales, culturales, etc.) en su construcción, en el que es menester la vinculación constante de la experiencias adquiridas tanto dentro como fuera del ámbito del cual tiene origen el escrito. El deseo, la iniciativa pero sobre todo la actitud toman esencia en su construcción a causa de que implica tiempo y esfuerzo para que el texto cumpla con los requisitos y características que se establecen en estos con el fin de que logren convencer y no sólo informar al público a los cuales se expone. Así, la elección del tipo de texto académico va a ser originada a partir de los propósitos que se persigan. El aspecto más relevante de su elaboración es la divulgación hacía el público. Esto es así ya que permite que el conocimiento no se quede estancado en un solo ámbito sino que “salga” afuera de los muros en el que fue elaborado. Lo que permite que haya un crecimiento bipartito entre quien elabora el escrito con quien lo lee. De esta manera, favorece que haya más indagaciones sobre lo que se escribe en un determinado momento.
Bibliografía
Camps Mundó, A. y Castelló Badía, M. (2013). La escritura académica en la universidad. En Revista de Docencia Universitaria, Vol. 11(1), Enero-Abril 2013, 17-36, ISSN: 1887-4592. [En línea]. Disponible en: http://redu.net/redu/index.php/REDU/article/view/579 Bozu, Z. (2012). Cómo elaborar un portafolio para mejorar la docencia universitaria una experiencia de formación del profesorado novel. Barcelona: ICE y Ediciones Octaedro. [En línea]. Disponible en: http://www.ub.edu/ice/sites/default/files/docs/qdu/23cuaderno.pdf
Fernández, L. y Bressia, R. (2009). Definiciones y características de los distintos tipos de textos. Facultad de Psicología y educación. Departamento de educación. Universidad Católica Argentina. [En línea]. Disponible en: http://www.uca.edu.ar/uca/common/grupo18/files/Definicion_generos_discursivos_abril_2009.pdf Ferreyra, P., Billi, M., Vivas, M. y Martínez, Y (2011). La escritura académica en el nivel superior. En Investigación sobre alfabetización académica. Departamento de Investigaciones del Instituto Superior 127 de Formación Docente. San Nicolás - Prov. de Buenos Aires. [En línea]. Disponible en: http://www.investigaciones127.com.ar/docs/LA_ESCRITURA_ACADEMICA_EN_EL_NIVEL_SUPERIOR. pdf