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Este libro, ante todo, presume de estas cualidades líricas. Y gracias a eso, podemos tener, en nuestras manos, un poemario que es también una cajita mágica, donde se dejan ver y escuchar: tarántulas, moscas, pájaros y ratones que colorean imágenes de una plasticidad y una belleza admirables como terroríficas. Tris-tras el miedo, como consecuencia, nos deja entrever un emotivo enfrentamiento con el mundo, y un atreverse a conquistar ese terreno sombrío de lo desconocido que nunca se alejará de nuestros ojos. Es ahora, entonces, el momento de empuñar la valentía, afilar los sentidos y, de puntillas, entrar, página a página, en ese terreno misterioso que Ramón Iván ha recreado, con sus versos lúdicos y puntuales. La experiencia, estoy seguro, logrará su efecto esperado: provocar miedo y entusiasmo a todo aquél que lea estos poemas, que, súbitamente, se abrirán como tijeras para hacer tris-tras en el asombro. José Antonio Íñiguez
TRIS TRAS EL MIEDO
Ramón Iván Suárez Caamal, con su extraordinaria e inagotable curiosidad, nos enseña esta vez, en Tris-tras el miedo, que indagar en estos aspectos vitales nunca es fácil, si no se tiene la destreza rítmica, el abalorio verbal, y una profunda y punzante óptica infantil.
Ramón Iván Suárez Caamal
esde el principio, la inocencia, y, junto a ella, el miedo por lo desconocido. Dos aspectos que nacen y viven siempre dentro de todo ser humano. Sin ellos, sería imposible explorar los recovecos fantásticos que hay a nuestro alrededor.
Índice La alegre maldad Canción de la nana mala ............................................12 Ya viene... .....................................................................16 Cumpleaños .................................................................19 Una tribu de tordos ..................................................... 20 Naturaleza muerta con listón ..................................... 23 Tris tras ........................................................................24
La oscuridad aletea Paisaje ......................................................................... 29 Una canción para ti .................................................... 30 Niños trapecistas ........................................................ 32 Y si… ............................................................................ 34 ¿Y tu silencio? ............................................................. 36 Sueño que soy ............................................................ 39 Comer donde no hubo ................................................ 41 A trote .........................................................................42 La oscuridad aletea ...................................................44 Felices sueños ............................................................46 La puerta está cerrada ...............................................48 Ésta no es una despedida .......................................... 50 Ángel de mi guarda .................................................... 52 Móvil inmóvil .............................................................. 54
Ya viene... Hoy cumple siete y ya sabe que el cuervo del bordón viene con pasos torpes a su fiesta. Le trae el confeti de una salamandra, su lengua de espantasuegras, su cola de hilo que desprende chaquiras. Bailemos sobre tu pequeño ataúd -le pide- vuelta tras vuelta hasta que se hayan ido los invitados. Vuelta tras vuelta naranja y cuchillo, vuelta tras vuelta sacapuntas y lápiz, vuelta tras vuelta aguja y bordado. Después le exige el confeti de sus pecas, su lengua que se comió el ratón, el hilo con el que zurce su espanto. Ella se hace ovillo en la caja de costura.
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Niños trapecistas En la más densa noche hay una jaula: con muletas andamos entre barrotes. ¿Quién será el que golpee las horas alrededor del círculo con su danza de ciegos? Nos brotaron escamas y una lengua bífida que enredamos ansiosos al brazo del columpio. ¿Quién dirá que no existe la jaula ni la noche? El que se impulse ahora y mire de cabeza el cielo antes de saltar al vacío.
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Sueño que soy Sueño que soy una sardina apilada con mis demás hermanos. Sueño que le deslenguan su secreto a la lata donde dormimos. Sueño con ganchos en la panza, que nos izan para el gusto y la saliva. Sueño que abajo nos espera el infierno.
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