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Importancia del Sacerdote en la Biblia
Los Obispos son pue stos por e l Espíritu Santo como los ve rdade ros y únicos pastore s sace rdotale s para pastore ar la Igle sia Católica.
He 20,28: Cuide n de sí mismo y de todo e l re baño e n e l que e l Espíritu Santo los ha pue stos como obispos […] pastore e n la Igle sia de l Se ñor […].
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Los apóstole s tie ne n e l ministe rio de la palabra y podían vivir de e lla y los transmitie ron a sus suce sore s los Obispos por la imposición de sus manos.
He 6,2-4: Los Doce […]. Le s dije ron […] nosotros nos de dicare mos […] al
ministe rio de la palabra.
¿Importancias de l Sace rdote e n la Biblia?
En Lev 21,1-23, se afirma que los Sace rdote s se rán Santos para Dios, porque
e llos le s son consagrados con e l óle o de la unción, ofre ce n e l sacrificio, Él los santifica y
le dice al pue blo, al sace rdote lo te ndrás por santo para ti. Por lo demás, el Sal 110,4; habla sobre Jesús, como sacerdote, "Tú e re s para sie mpre sace rdote a la mane ra de M e lquise de c", y en Heb 5,4; se asegura que la dignidad de se r Sace rdote , e s de cir,
Pastor de la Igle sia Católica no se la pue de apropiar nadie por sí mismo, sino que de be
se r llamado por Dios como lo fue Aarón o Cristo Jesús, pero vuelve a insistir que Cristo es sacerdote a semejanza de Melquisedec y en Gén 14,18-20, Melquisedec es sacerdote de Dios altísimo, sacrifica pan y vino, Melquisedec significa rey de justicia y como es rey de Salem, era rey de la paz, porque Salem quiere decir paz, del mismo modo, Melquisedec al igual que Cristo en la última Cena sacrifico Pan y Vino, lo que se encuentra en Lc 22,1920: Este es mi cuerpo, esta es mi sangre, en este sentido, en Jn 6,51-56; Jesucristo testifica que su carne es verdadera comida y su sangre verdadera bebida, de igual forma, San Pablo en Heb 10,10.12.14, da testimonio de que la único sacrificio y ofrenda por los pecados es el cuerpo de Jesucristo, por lo demás, en Mal 1,11; asegura categóricamente que en todo el mundo se ofrece en el nombre de Dios tanto el humo del incienso como una ofrenda pura. Por todo ello, M e lquise de c pre figura e l Sace rdocio Católico de l cual Je sús e s e l Sumo
Sace rdote , lo que se ubica en Heb 4,14. Por lo demás, los pastores sacerdotales que dejo Jesús mismo son los Apóstoles y sus sucesores los Obispos y sacerdotes. Finalmente, en Rom 15,15-16, San Pablo dice que es Sacerdote.
Sal 110,4: Juró el Señor y no ha de retractarse: “Tú eres para siempre sacerdote a la
manera de Melquisedec”.
Lev 21,1-23: Yahvé dijo a Moisés: “Habla a los sace rdote s, [...]. Se rán santos para su Dios y no profanarán su Nombre porque son e llos los que ofre ce n los sacrificios [...] porque e l sace rdote e stá consagrado a Dios. Al sace rdote lo te ndrás por santo para ti porque yo soy Santo Yahvé, [...]. El sace rdote que ha sido pue sto más alto que sus
he rmanos, sobre cuya cabe za se ha de rramado e l óle o de unción, y que ha sido
consagrado [...] porque yo soy Yahvé, que a ellos los santifico. Sir (Eclo) 7,29-31: Reverencia al Señor con toda tu alma y ve ne ra (re spe cta), a sus sace rdote s. Ama a tu Creador con todas tus fuerzas y no abandone s a sus ministros. Teme al Señor y glorifica (honra), al sace rdote, […]. Mal 2,6-7: Pue s los labios de l sace rdote guardan la cie ncia, y la Ley se busca en su boca; porque é l e s e l me nsaje ro de Yahve h Se baot. Heb 5,4: Pe ro nadie se apropia e sta dignidad, sino que de be se r llamado por
Dios, como lo fue Aarón. Y tampoco Cristo se atribuyó la dignidad de sumo sace rdote ,
sino que se la otorgó aquel que dice: Tú eres mi Hijo, […]. Y en otro lugar se dijo: Tú e re s
sace rdote para sie mpre a se me janza de M e lquise de c.
Gén 14,18-20: Entonces M e lquise de c re y de Sale m, trajo pan y vino, pue s e ra sace rdote de l Dios altísimo. M e lquise de c be ndijo a Abram, […]. Lc 22,19-20: Después tomó pan y, dando gracias, lo partió y se lo dio diciendo: "Esto es mi cuerpo, que es entregado por ustedes. (Hagan esto en memoria mía)." Hizo lo mismo con la copa después de cenar, diciendo: "Esta copa e s la alianza nueva sellada con mi sangre, que es derramada por ustedes)." Jn 6,51-56: Yo soy e l pan vivo que ha bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá para siempre. El pan que yo daré es mi carne, […]. Los judíos discutían entre sí: "¿Cómo puede éste darnos a comer carne?" Jesús les dijo: "En verdad les digo que si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no tienen vida en ustedes. El que