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BUENOS AIRES, MIERCOLES 23 de noviembre de 2011
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La clave: aprender a mirar el cielo PAG. 8 y 9
Esta clase sigue en la red social PAG. 6
Abuelas 2.0 PAG. 12
De la violencia al diálogo Los últimos casos de agresiones a docentes encendieron la alarma. Clarín Educación consultó a especialistas, educadores y padres para encontrar respuestas al problema. En el centro aparece una cuenta pendiente: restablecer el vínculo entre la escuela y la casa, para consolidar la autoridad en los dos ámbitos. Páginas 2 a 5
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>> informe para docentes y padres
Cómo resolver
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el quiebre entre escuela y padres
Una historia de desencuentros y reproches: los expertos señalan que la familia y la escuela no han desarrollado lazos de cooperación que hagan posible un mejor entendimiento mutuo.
Mientras se multiplican los casos de violencia en los colegios –muchos de ellos protagonizados por padres de alumnos–, especialistas y docentes señalan la necesidad urgente de recomponer el lazo de confianza y diálogo entre la familia y la escuela. La importancia de los límites en casa y en el aula. Todos ellos se animaron a propoustedes límites a este chico porque yo cadas. “Hay chicos de diferentes Federico Poore Las figuras de ner posibles soluciones: son las ya no sé qué hacer, mientras que la sectores, no sólo de clase media, que siguen. directora responde: Si no hay fami- además de grupos familiares no autoridad se a escena parece salida de lia que apoye, no podemos hacer organizados jerárquicamente donuna mala película de te- La cuestión de la confianza nada”, describe. de los hijos imponen sus criterios impugnan unas rror: un adolescente se Si bien el problema no arrancó “Efectivamente, se rompió la re- a los padres”, sostiene. va de su clase enojado ayer, los expertos coinciden en que lación entre escuela y familia, allí Se trata de una situación nueva, a otras: hay por una sanción. Al rato sí se agudizó mucho en los últidonde la institución imponía la re- que las especialistas María Inés regresa al colegio con su mos tiempos. “La violencia es un gla y la familia acataba”, confirma Bringiotti, Marta Krynveniuk y Sildesconfianza madre y los dos atacan y golpean al fenómeno social que se multiplica la investigadora Guillermina Tira- via Lasso –autoras de Las múltiples profesor. El caso es real. Pasó unas cuando se resquebrajan los víncucompiladora del libro Va- violencias de la ‘violencia’ en la esentre docentes y monti, semanas atrás. No ha sido el único los de reconocimiento”, define riaciones de la forma escolar: límites cuela– explican a partir de la crisis y tal vez no sea el último. ¿Cómo Perla Zelmanovich, investigadora y posibilidades de la escuela media. que sufrieron estas instituciones. familias se llegó a esta situación, que hubie- principal del área de Educación de “Hoy los padres tienen una posi- El argumento es que la familia y la Especial para Clarín
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ra sido casi impensada no muchos años atrás? ¿Por qué se repite con alarmante frecuencia en las escuelas argentinas? Clarín Educación consultó a docentes, familias y especialistas en educación para intentar desentrañar uno de los fenómenos más preocupantes del sistema escolar argentino: la violencia generada por la ruptura del vínculo que unió durante años a padres y maestros.
la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO). Para la especialista, además directora del programa de Psicoanálisis y Prácticas Socioeducativas, las figuras de autoridad acaban impugnándose las unas a las otras: hay desconfianza de los maestros hacia las familias y, a la vez, de las familias hacia los maestros. “Esto se convierte en un reenvío de impotencias. La madre dice: Póngale
ción crítica frente a la institución, a donde van y reclaman a veces violentamente. Para muchos de ellos, la escuela dejó de cumplir su promesa de incluir a sus hijos y promoverlos educativamente”, añade. Tiramonti aporta un dato central: las familias a las que la escuela atiende hoy en día no son las mismas que la propia institución viene pensando desde hace dé-
escuela “no han desarrollado lazos de cooperación para posibilitar un mejor entendimiento, una mejor calidad de vida y una buena experiencia escolar”. Esta historia de desencuentros, tensiones y reproches terminó con una fórmula insuficiente: “La familia socializa poco, la escuela enseña poco”. ¿Cómo se sale de este punto muerto? Los expertos aseguran que
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>> CONSEJOS PARA PADRES
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Diálogo, diálogo y diálogo. En la medida de lo posible, conocer a los profesores de sus hijos. Preguntar por las expectativas de la materia y las formas de calificación. Generalmente, entablar un canal de comunicación fluido ayuda a descomprimir a tiempo posibles cortocircuitos o malentendidos.
Ricardo Braginski
rbraginski@clarin.com
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sólo porque los chicos les “ganaron” por cansancio? Las reglas claras arrancan en el hogar y es importante sostenerlas.
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Estar atento a lo que se dice en la casa y evitar, como padres, desmerecer la tarea del maestro. La violencia tiene muchas formas, algunas de ellas inconscientes: los chicos escu-
Confiar en el maestro. Después de todo, compartirá con la familia la educación de sus hijos. El pacto tácito con la escuela se inaugura con un acto de confianza, no con distancia. No convertirse en esclavo de sus hijos. ¿Quién no conoce padres que terminaron cediendo ante reclamos impropios
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chan, aprenden y reproducen ese maltrato en la escuela.
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Asistir a las reuniones. Si resulta imposible por motivos laborales, enviar a algún familiar. En el caso de las reuniones grupales, si no es posible acudir, considerar la posibilidad de recuperar lo charlado con otros padres.
GERARDO DELL ORO
testimonio 1 ANA MARÍA SCARINCI DIRECTORA DE LA ESCUELA N° 12 ROBERTO ARLT - SAN ISIDRO e Los directores y los maestros
somos caras accesibles: cuando nos llaman, siempre estamos. Pero eso hace que muchas veces el reclamo de derechos termine en actos de violencia contra el maestro, que los recibe “porque era el que estaba a mano”.
ana maria
e Los alumnos no reconocen ni la
autoridad de sus padres; el profesor tiene que trabajar con esta realidad y ganarse la autoridad. Las debilidades y deficiencias en la formación docente generan injusticias o arbitrariedades que fomentan la violencia de alumnos y padres. Pero las reglas claras no generan problemas. e La relación de la escuela no
es solo con el alumno, es con la familia. Queremos llegar con más comunicación, pero la misma dinámica del colegio lo vuelve imposible. Debemos transformar la escuela en un lugar más contenedor y llegar más a las familias.
La directora Ana María Scarinci sostiene que hoy los docentes deben “ganarse” la autoridad ante los alumnos.
la única manera de interrumpir el círculo vicioso es lograr decretar lo que le toca a cada uno. “Por ejemplo, los profesores pueden hacerse cargo de la oportunidad del chico aquí y ahora, instalándoles puntos de referencia distintos a los de la familia, figuras de autoridad y del saber”, reflexiona Zelmanovich en su diálogo con Clarín Educación. En ese sentido, los reportes sobre violencia escolar que prepara el Ministerio de Educación demuestran que la presencia activa de los maestros es fundamental para resolver los problemas a tiempo. El capítulo referido a los episodios protagonizados por los adultos concluye que las agresiones denunciadas “bajan marcadamente cuando la implicación de los docentes es percibida como frecuente”. A la inversa, cuando la figura del docente es más débil, se multiplican los gritos, insultos y amenazas.
Reglas claras Para Tiramonti, la presencia positiva del docente precisa de pautas explícitas que tanto alumnos como padres entiendan y acepten. “Hoy existe bastante discrecionalidad. Cuando no hay argumentos claros, aparecen los reclamos de «por qué discriminan a mi chico». La institución debería poder explicar de manera clara cuáles son los criterios por los que pone un aplazo”, sugiere. Hoy más que nunca, estos criterios necesitan ser discutidos en espacios propios de los docentes. Situaciones complejas como las que se encuentran los maestros en las aulas –tan distintas a la formación teórica que reciben– exigen un tiempo y un lugar para que compartan sus experiencias y se apoyen entre ellos. No obstante, algunos especialistas aseguran que estos momentos no tienen por qué ser las jornadas
La presencia activa de los maestros es fundamental para resolver los problemas a tiempo
docentes, sino que pueden probarse otras alternativas, como por ejemplo “ir colonizando espacios ya existentes”. En palabras de Zelmanovich, “la idea es quebrar el mito de «cada maestrito con su librito»”. Es precisamente esta falta de pautas comunes la que viene permitiendo que se desarrollen malentendidos que, en casos extremos, terminan en los brotes de violencia que leemos en los diarios o vemos casi todas las semanas en los noticieros. Los especialistas aseguran que estos casos exigen un abordaje amplio y multidisciplinario. El fallecido filósofo Guillermo Obiols, coautor de Adolescencia, posmodernidad y escuela secundaria, decía que “la falta de un marco claro, aunque elástico, dentro del cual moverse, aumenta las reacciones descontroladas y agresivas, actitud que se ha terminado
Esa otra escuela que nunca es noticia Los episodios de violencia en las escuelas ocupan rápidamente las tapas de los diarios y ganan minutos en los noticieros. Y es que si por algún motivo hemos llegado a “naturalizar” que exista violencia desmedida en el fútbol, en la calle o en algunas protestas sociales, sigue resultando incomprensible que esto ocurra en una escuela. Y mucho menos que los protagonistas sean padres y maestros. Pero aún así, conviene no perder de vista que esta persistencia en diarios, radio y televisión se produce por la lógica misma de los medios periodísticos y el concepto de noticia. Se sabe: los miles de vuelos que salen y llegan a horario no son noticia. El accidente, en cambio, sí lo es. Y en educación, esos vuelos que llegan a horario equivalen a los cientos de miles de maestros, padres y alumnos argentinos que todos los días confían en la escuela, y en los vínculos que se tejen alrededor de ella. Para esta nota de tapa de Clarín Educación salimos a preguntarles a ellos y a los especialistas las claves para reconstruir esas relaciones que, por distintos motivos, transitan un camino de crisis. Aunque suene trillado, el diálogo sigue siendo la principal herramienta. Se complementa con reglas claras y firmes expresadas a principios de año –que fijan rápidamente los límites–, y la verdadera autoridad (en la escuela y en casa) que se gana a diario con motivación y respeto hacia los chicos. Es cierto que hay casos de violencia, impensados tiempos atrás. Pero también que está muy activa esa otra escuela donde crecen sus anticuerpos. Esas defensas que maestros, padres y directivos debemos seguir alimentado. Para que no se repitan las noticias que nadie quiere leer, ver ni escuchar.
Consejo Asesor Tres especialistas contribuyen a definir los temas y el enfoque de las notas en Clarín Educación. Rebeca Anijovich
Especialista y Magister en Formación de Formadores (UBA). Docente en UBA y Univ. San Andrés. Asesora en escuelas argentinas y latinoamericanas.
Guillermo Jaim Etcheverry
Médico y doctor en Medicina (UBA) Ex rector de la UBA. Miembro de la Academia Nacional de Educación
Juan José Llach
Licenciado en Sociología (UCA) y en Economía (UBA). Ex ministro de Educación de la Nación.
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>> informe para docentes y padres estrategias para el aula 1. Evitar arbitrariedades y pautar las reglas de entrada
2. Ganarse la autoridad
3. Mostrar flexibilidad, dentro de los límites
Fijar reglas claras al inicio del curso: expectativas, objetivos y formas de calificar. En lo posible, deberán enviarse por escrito para que las firmen los padres. Lo ideal es repasarlas en clase y debatirlas con los alumnos, para no estar discutiendo su legitimidad cada vez que surja un conflicto.
La disciplina no debe imponerse ni reducirse a un mero “control de daños”. La autoridad docente arranca por una necesaria revalorización del lugar del maestro y se gana todos los días en el aula.
Los chicos valoran cuando un docente se empeña en compatibilizar situaciones nuevas con reglas preexistentes, pero también saben distinguir una arbitrariedad. Es conveniente demostrar flexibilidad ante los distintos escenarios que se vayan presentando, pero sin traicionar el espíritu de las reglas.
JUAN JOSÉ TRAVERSO
testimonio 2 VÍCTOR MARTÍNEZ MAESTRO DE MATEMÁTICA DE 7° GRADO EN LA ESCUELA N° 5 NICOLÁS RODRÍGUEZ PEÑA – CAPITAL federal e Algunos padres transfieren al
colegio la responsabilidad que no tienen con sus hijos. Como docentes, creemos que la enseñanza de los límites comienza en la familia y que los padres no deben ponerse automáticamente, antes de escuchar los motivos, del lado de los chicos. Para nosotros el boletín es un papel con dibujitos: tanto el colegio como los padres tienen que entender que lo importante es si esos dibujitos representan lo que los chicos incorporaron.
victor
e Muchas veces los padres son
capaces de asumir su cuota de responsabilidad, pero no tienen tiempo de resolver el problema en medio de su vorágine. Sería bárbaro que vinieran a las reuniones que organiza el colegio, pero hay padres que no vienen nunca. e No es lo mismo escolarizar
que educar, y en los últimos años se intentó hacer de la escuela un depósito de chicos. Hay que fomentar las charlas y dialogar, discutir socialmente qué es lo que se pretende de la escuela. Víctor Martínez apunta que, ante un conflicto, los padres no deberían ponerse automáticamente del lado de sus hijos, sin escuchar también al maestro.
por interpretar como un pedido de límites por parte de quien la actúa”. Por más que nunca lo admitan, los chicos siempre van buscando una demarcación, tanto en la escuela cuanto en la casa. En una de sus visitas a la Argentina, el pedagogo francés Philippe Meirieu sostuvo que la cuestión de los límites es un fenómeno global: “Los adultos cada tanto son muy autoritarios al afirmar que hay reglas que no deben ser trasgredidas y luego, como no lo logran, se ponen muy laxos y dicen «Es tu problema, no es el mío, hacé lo que quieras». Obser-
vamos esta oscilación entre padres que dicen «Hacé lo que yo quiero» y cuando no funciona, le dicen al chico «Hacé lo que vos quieras».” La situación es parecida a la que describe Amalia Favale, madre de uno de los chicos de la Escuela Media N° 7 de Vicente López: “En muchos hogares, primero es no, después es no sé, y a la media hora es bueno. Los límites tienen que comenzar necesariamente en la casa. Es un trabajo de todos los días, de no aflojar, del día en que estás cansada no decir que sí por el hecho de que no querés que te moleste más”, ejemplifica. Y conclu-
Los límites tienen que comenzar necesariamente en la casa. Es un trabajo de todos los días, de no aflojar
ye: “Si cedés sólo porque te ganó el cansancio, la próxima apuesta del chico va a ser más fuerte”. Diálogo y compromiso La postulada “receta mágica del diálogo” requiere un compromiso real por parte de las familias. “Algunos padres no se acercan a la escuela porque les da vergüenza. No entienden que un chico o un adolescente no es un adulto y necesita el acompañamiento de la familia”, asegura Ana María Scarinci, directora de la Escuela N° 12 de San Isidro, que recibe a varios alumnos del barrio La Cava.
“Todo viene a la escuela y la escuela no es omnipotente, por eso queremos hacer espacios abiertos a los padres. Los encuentros con ellos son muy lindos, pero nos falta tiempo para organizarlos”, agrega Ana María. Directivos y docentes aseguran que las reuniones son útiles, aunque resulta difícil sostenerlas en un día a día donde lo urgente no deja tiempo para lo importante. Cuando finalmente se establecen, aparecen otros problemas. Víctor Martínez, docente de la Escuela N° 5 “Nicolás Rodríguez Peña”, de la Capital, dice que los
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4. No ponerse a la altura del alumno problemático
5. Respeto
6. Charlar e intercambiar con otros docentes
Aun si provienen de hogares donde las cosas “andan bien”, los chicos han obtenido un protagonismo demasiado fuerte en el aula. Esto no implica dejar de escucharlos, pero sí entender que el niño o el adolescente no es un adulto. Si un chico le grita a un maestro, la respuesta no puede ser equivalente.
El docente debe respetar al alumno. Esto no implica amistad ni concesiones infinitas: sí cordialidad y ganas de dirimir los conflictos de manera racional.
María Inés Bringiotti recomienda crear contextos de reflexión, “espacios institucionales para los docentes con el objeto de plantear y analizar sus dificultades con la tarea de enseñar, en el vínculo con los alumnos”. La idea, asegura, es “registrar cotidianamente el propio malestar”.
MARTÍN BONETTO
testimonio 3 AMALIA FAVALE MADRE DE FRANCO, ALUMNO DE LA ESCUELA MEDIA N° 7 FEDERICO LELOIR VICENTE LÓPEZ e Cuando mi hijo viene con una
mala nota, miro el boletín y la carpeta. Muchas veces le termino diciendo: “Yo te hubiese puesto una nota peor”. De hecho, han ido padres al colegio a preguntar: “¿Cómo puede ser que aplace a mi hijo?”. Puede ser, sencillamente, porque no estudió. e El profesor, a priori, tiene
razón, y si creo que está equivocado, le digo a mi hijo que hable con él. Sólo en el caso de que vea que no puede tener un diálogo, averiguo en la escuela por qué la falta de conexión. Siempre asumo que el maestro es el dueño de la clase en el momento en el que está frente al aula.
amalia
e Los padres no confían en los
directivos y los directivos dicen que los padres no saben controlar a sus hijos. El colegio tiene que hacer que los chicos se sientan arraigados y los padres deben tener un mayor compromiso. Si al menos una de las dos partes funciona bien, puede reclamarle a la otra el papel que le corresponde. Como madre, Amalia Favale aplica un principio a rajatabla: “El profesor, a priori, tiene razón”. También subraya el valor del diálogo con los docentes.
encuentros que organiza el colegio tienen muy poca presencia. El motivo –explica– responde a un cambio en la estructura laboral: ahora es común que ambos padres trabajen y no es fácil “escaparse” a una reunión un día de semana a la tarde; algo comprobadamente corriente. “Sin duda existe una lectura de la división del trabajo que supone que la escuela se ocupa de todo lo cognitivo y los padres de otra cosa, entonces la familia no considera relevante ir a la escuela”, argumenta Tiramonti. Bringiotti encuentra otra causa: que sólo se llama a los
padres cuando hay problemas con sus hijos. “De allí que la familia se siente juzgada e intimidada ante ese rol normativo”. En otras palabras, ¿quién quiere ir para que lo reten? Frente a esto, una de las claves consistiría en tratar con las familias desde otro enfoque. Cuenta Zelmanovich sobre la vez que a cierta escuela conflictiva del conurbano llegó un nuevo director, a quien le explicaron que no había forma de convocar al padre de uno de los chicos, una especie de “monstruo insoportable”. De casualidad, el directivo charló con la
Todo viene a la escuela, pero la escuela no es omnipotente. La clave: apostar por una mejor comunicación
profesora de Música, que le contó que el chico era dueño de una voz angelical. Entonces, decidió llamar al papá. La primera respuesta, por supuesto, fue que no podía asistir. Cuando le aclaró que la reunión era para contarle “algo maravilloso sobre su hijo”, el padre terminó yendo: a partir de allí se instaló una vía de comunicación por la que transcurrieron los otros temas. Esta apuesta por una comunicación amplia, que no consista sólo en “retar” a los padres, es una manera más de renovar el vínculo entre padres y docentes, tan necesario para una buena enseñanza.
su opinión ¿Cómo recuperar el diálogo entre docentes y padres, cómo reconstruir puentes entre la escuela y la familia? ¿Hasta qué punto la violencia en las aulas responde a esa falta de diálogo? ¿Hay una “violencia escolar”, o se trata en realidad de una de las formas de la violencia social? Invitamos a los lectores a compartir sus experiencias y enviar sus opiniones a nuestra dirección de correo electrónico: educacion@clarin.com
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> capacitación
Esta clase sigue en la red social Edmodo, una plataforma gratuita y online, permite a profesores y alumnos interactuar en cualquier momento y desde cualquier lugar. El entorno es seguro y fácil de usar. Claves para sacarle el provecho. Ana Laura Rossaro Especial para Clarín
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oy la clase puede trascender las paredes del aula. Distintas plataformas lo hacen posible y entre las más completas está Edmodo (www. edmodo.com). Con una apariencia similar a una red social y con elementos típicos de una plataforma educativa, brinda un entorno seguro y sencillo para generar un aula virtual en la que profesores y alumnos pueden compartir actividades, debates y contenidos. Una vez que el profesor se registra puede crear uno o varios grupos. Cada grupo funciona como una clase o curso. Al crearlo, la plataforma asigna una clave de ingreso que los alumnos utilizarán cuando se registren. Para registrarse no es necesario brindar datos personales, ni correo electrónico y el entorno puede ser completamente cerrado. Además los padres tendrán un código para ingresar y ver las actividades, fechas y calificaciones de sus hijos. El profesor puede realizar las siguientes actividades: e Enviar mensajes grupales. e Recibir notificaciones por mail o celular de todo lo que suceda en la plataforma. e Manejar el calendario de clase. e Subir contenidos en diversos formatos: texto, páginas web, videos, imágenes entre otros. e Hacer encuestas o votaciones. e Crear cuestionarios (quiz) de multiple choice, verdadero o falso, o respuestas a desarrollar. e Proponer tareas con calificación para entregar (asignaciones) de cualquier tema, contenido o formato. e Calificar las tareas con nota numérica y comentarios. e Ver y comentar los contenidos que comparten los alumnos. e Subir contenidos a una “biblioteca” que funciona como reservorio de materiales digitales para utilizar durante el curso. Por su parte, los alumnos que estén inscriptos a los grupos armados por los profesores pueden: e Enviar mensajes grupales. e Visitar el calendario del curso. e Ver y comentar los contenidos que comparte tanto el profesor como los compañeros. e Compartir contenidos en cualquier formato. e Responder cuestionarios y votaciones. e Entregar tareas para ser evaluadas respondiendo en la plataforma o subiendo un archivo desde la computadora.
paso a paso Cómo abrir una clase en la plataforma educativa Edmodo e invitar a los alumnos a participar: cómo crear y compartir contenidos con el grupo abierto, enviar actividades, ponerles fechas y puntajes.
Ingresar en www.edmodo.com y hacer clic en Profesor. Completar los datos y hacer clic en Registrarse. Los alumnos deberán hacer lo mismo desde el botón Alumno e ingresar el código de acceso al aula.
Para crear un grupo hacer clic en Crear, completar los datos del grupo y hacer clic nuevamente en Crear. La plataforma informará el código de acceso con el cual los alumnos podrán inscribirse en el grupo.
Seleccionar Mensaje para escribir al grupo. Archivo para subir contenidos propios, Hipervínculo para mostrar una página web, o Biblioteca para compartir elementos ya subidos. Luego, hacer clic en Enviar.
Para mandar actividad, hacer clic en Asignación y escribir la consigna (puede llevar archivos o enlaces). Poner fecha de entrega y clic en Enviar. Para calificar, clic en Entregadas, poner puntaje y clic en Calificar.
Subir contenidos a una “mochila” que funciona como reservorio de materiales digitales para utilizar durante el curso. e
Bien poderoso Edmodo ofrece un espacio colaborativo, intuitivo y dinámico acorde al perfil digital de los alumnos, permite trascender los espacios y horarios escolares, establecer relaciones más horizontales con los alumnos, fomentar el uso de diversas formas de expresión tales como texto, imagen y video entre otros, y finalmente ofrece herramientas para el seguimiento del trabajo de los alumnos.
Además, por su versatilidad y multiplicidad de formatos, puede ser usada con cualquier contenido curricular o proyecto educativo. Edmodo podría utilizarse durante el ciclo lectivo para una asignatura, pero también como apoyo de las clases presenciales, compartiendo con los alumnos contenidos curriculares, proponiendo actividades y debates. También puede aprovecharse como un espacio de trabajo por proyectos transversales al currículum. Además Edmodo puede ser un entorno colaborativo entre diversos cursos o instituciones educativas sin importar las distancias.
Parecido pero diferente a Facebook Tanto Edmodo como Facebook pueden ser considerados espacios sociales y colaborativos. Los dos permiten el contacto con otros pares, debates, subida de contenidos y administración de grupos. Sin embargo, Edmodo presenta algunas características que no tiene Facebook y que lo convierten en un entorno específicamente educativo: • Es un espacio cerrado, priva-
do, seguro y no requiere datos personales para ingresar. • Ofrece un reservorio de contenidos (llamados biblioteca o mochila) que permite organizar los materiales didácticos en forma adecuada. • Brinda recursos netamente educativos como cuestionarios, tareas y actividades. • Ofrece herramientas para la gestión de un curso como calendario y calificaciones.
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> ecos
AGENDA
Premio al periodismo educativo
Becan a formadores de formadores Abrió la convocatoria de Fundación Lúminis para becas de posgrado en Educación. Pueden postularse los profesionales vinculados con la formación de maestros y profesores, es decir, “formadores de formadores”. Algunos requisitos: tener menos de 45 años al momento de la presentación de la solicitud, ser egresado de licenciatura o profesorado de 4 años de duración y tener experiencia. Hay tiempo hasta el 29 de febrero de 2012. Más info: www.fundacionluminis.org.ar. Tel.: 4312-5023
Dos periodistas de Clarín Educación obtuvieron el reconocimiento de la UBA por una nota sobre la indisciplina.
E
l miércoles 4 de mayor de este año, la edición de diario Clarín salió con un nuevo suplemento semanal de Educación, totalmente renovado, en cuanto al enfoque de los contenidos y al diseño. “Así enfrento la indisciplina” fue el título de la nota de tapa, escrita por Ricardo Braginski y Verónica Maguitman. Tres maestros –que trabajan en lugares bien distintos– y reconocidos especialistas contaron allí sus claves para enfrentar los problemas de conducta. Como luego se haría habitual en el suplemento, la nota incluyó consejos para padres y soluciones para maestros ante distintas situaciones. Por este informe, los periodistas de Clarín Educación obtuvieron la primera mención del rubro Divulgación Educativa en la categoría Producciones Gráficas del Premio UBA al periodismo educativo y cultural. El diseño de la nota fue de Tea Alberti y Claudio Reino su editor fotográfico. El primer premio de la categoría se lo llevó Mariana Otero, del diario La Voz del Interior por su nota “Menos del 40% paga la cooperadora escolar”. Los miembros del jurado convocado por la Universidad de Buenos Aires tuvieron en cuenta aspectos como el tratamiento de la temática, la calidad narrativa y los nuevos aportes a la problemática. Y no sólo reconocieron la labor de los periodistas sino también al medio que publicó el trabajo. El jurado estuvo integrado por el secretario de Cultura de la Nación Jorge Coscia, la conductora Ernestina Pais, el historiador Felipe Pigna, y los docentes de la UBA Glenn Postolski, de Ciencias de la Comunicación, y Carlos Trilnick, de Diseño de Imagen y Sonido. Evaluaron 163 trabajos presentados por 96 periodistas, que compitieron en las diferentes categorías, desde la prensa gráfica hasta la televisión, la radio e Internet. Los maestros que dieron su testimonio para la nota premiada fueron María de los Angeles González, de primer grado del Instituto Evangélico Americano de Capital; Pablo Sehtman, de cuarto grado
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en la escuela Primera Junta, del barrio de Caballito; y Francisco Vallejo, de quinto, sexto y séptimo en la escuela N ° 3 de Paternal. Entre los consejos para los padres, se destacaron: 1. No discutir las normas y respetar los límites que ponen las escuelas. Conviene ir siempre en la misma dirección. 2. No quedarse con la visión del hijo ideal que se quiere tener. Aceptar que en otros ámbitos, como la escuela, se pueden portar de manera diferente. 3. Se habla mucho de los derechos de los niños pero poco de las obligaciones. Insistir que los derechos siempre traen obligaciones. 4. Implementar algún tipo de consecuencia o castigo cuando hubo mal comportamiento o notas bajas. Por ejemplo, restringir las horas de Internet. 5. No caer en la tentación de ridiculizar a los docentes, por más que lo amerite. A los padres se les vuelve en contra, porque ambos ocupan el rol de adultos. 6. Armar una “red vincular” con los otros padres. Así se puede tener otras miradas y armar estrategias conjuntas. 7. No encasillar. Un hijo también actúa de acuerdo a lo que esperan de él. Evitar decir “desde bebé se porta mal”. Toda conducta puede cambiar: se aprende de las experiencias. El 6 de diciembre se realizará la entrega de premios en una ceremonia que será presidida por el rector de la UBA, Ruben Hallu.
UBA: amplían los plazos del Censo Aquellos estudiantes de la UBA que no hayan realizado la rematriculación y el Censo 2011 dentro del plazo previsto, ahora tienen tiempo hasta el 30 de noviembre. Podrán solicitar su reincorporación mediante la presentación de una nota personal que explique las causales, en la mesa de entradas de cada una de las facultades y el Ciclo Básico Común. Más info: www.uba.ar
Charla informativa sobre Medicina
Arriba, la tapa del primer número de Clarín Educación, que inauguraba un nuevo estilo. Abajo, las primeras dos páginas del informe premiado, escrito por los periodistas Ricardo Braginski y Verónica Maguitman.
El martes 29 de noviembre habrá una charla informativa sobre la carrera de Medicina en la Fundación Barceló. La actividad será abierta y gratuita y tendrá lugar a las 18 hs en el Aula Magna de su sede de Larrea 764. El encargado de la charla será el Dr. Adrián Barceló, director del Museo de Anatomía. Informes al 4800-0200 o en admision@barcelo.edu.ar.
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> enfoques MARIO QUINTEROS
La clave: aprender a mirar al cielo
Galperín recibió el primer premio Clarín-Zurich en la Fundación Proa, en La Boca. “No hace falta ir a El Bolsón para hacer observaciones, en Buenos Aires también se puede”, asegura.
Diego Galperín, líder del proyecto de Astronomía ganador del Premio ClarínZurich a la Educación, propone descubrir el Universo a simple vista.
Mónica García
Especial para Clarín
E
s profesor de Física, tiene 41 años, una esposa y dos hijos. Diego Galperín era porteño, hasta que hace 15 años su pasión por la Astronomía lo llevó a El Bolsón para enseñar los secretos del Universo de la manera que más le gusta: mirando al cielo. Y lo hace tan bien que su proyecto Miradas al cielo –que lleva adelante junto a Liliana Prieto y Luciano Señorans– ganó la tercera edición del Premio Clarín-Zurich a la Educación: nada menos que 120 mil pesos para invertir en la enseñanza de esta ciencia natural. “No lo esperaba, casi no viajo por la ceniza”, confesó Diego a Clarín Educación, en una charla cargada de emoción y sueños a punto de hacerse realidad, tras la ceremonia de entrega de los premios. –¿No te tenías fe?, como dicen los chicos antes de un examen. –Estamos orgullosos de lo que hacemos pero la competencia era muy dura y ser seleccionados entre los 10 mejores proyectos en enseñanza de las Ciencias Naturales en el Secundario ya era un premio en sí mismo. Pero salir primeros ... –Y cuando lo puedan creer ¿a qué van a destinar el premio? –Queremos replicar nuestro trabajo en otras escuelas de Río Negro y, por qué no, de todo el país.
No hace falta estar en El Bolsón para estudiar astronomía mirando al cielo. Aunque a sus habitantes les parezca imposible, en Buenos Aires también se puede. El proyecto Miradas al Cielo, del Instituto de Formación Docente Continua (IFDC) y el Centro de Educación Técnica (CET) N° 23, ambos de El Bolsón, tiene dos ejes. Uno está centrado en revalorizar la enseñanza de la Astronomía en el Nivel Medio, a través de prácticas didácticas innovadoras como las observaciones a cielo abierto con y sin telescopio. El otro, propone consolidar la participación de los alumnos de la escuela CET N° 23 dentro de un equipo de trabajo que ya se encuentra en funcionamiento: el Grupo Astronómico Osiris, que está formado por estudiantes de escuelas secundarias y docentes de ese mismo nivel. Pasión por las estrellas El Grupo Astronómico Osiris nació en 2005 y hoy es un referente importante para escuelas y la comunidad de El Bolsón. Y Galperín es su coordinador general. –¿Cuál es el propósito del Grupo Osiris? –Nos reunimos para aprender Astronomía y, al mismo tiempo, organizar actividades dirigidas a alumnos de otras escuelas de la zona y a la comunidad en general. Sólo en el último año participaron más de 2.000 alumnos y docen-
Galperín y el equipo de Osiris en el Observatorio Astronómico de La Plata.
tes en nuestras actividades. Es una experiencia increíble ver cómo los alumnos que forman parte de Osiris ponen en juego sus potencialidades e intereses para generar un crecimiento personal. Ellos mismos descubren todas las cosas que son capaces de realizar. Y son cada vez más. Diego no miente cuando dice que estos jóvenes astrónomos no paran de hacer cosas. En estos años de trabajo, instalaron un observatorio astronómico, que funciona en el Instituto de Formación Docente Continua de El Bolsón, donde Galperín da clases. También hacen funciones gratuitas de planetario móvil en escuelas primarias y secundarias. Y graban microprogramas de radio educativos. Además, en Octubre una comitiva viajó a La Plata para participar del 2° Encuentro de Jóvenes Astrónomos. Allí estuvieron muy inquietos y no se limitaron a asistir a charlas de expertos en Astronomía, sino que organizaron talleres para chicos de primaria sobre el cielo diurno y nocturno. Pero de las múltiples actividades de Osiris, las observaciones a cielo abierto diurnas y nocturnas son las prácticas educativas que más emocionan a estos estudiantes. “Al mirar al cielo se ponen en práctica todos los conocimientos de Astronomía que se enseñan en el aula. Es la mejor forma de aprender”, asegura Diego Galperín.
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Fuerte apuesta a las ciencias naturales El Premio Clarín-Zurich distinguió proyectos para escuelas públicas.
Los chicos del Grupo Osiris a punto de lanzar un cohete de agua.
Una vuelta de tuerca a la Astronomía “Ni la Astronomía es elitista ni la ciencia es exclusiva de los mejores alumnos”, sostiene Diego Galperín y explica que los chicos que participan en Osiris no son genios ni mucho menos: “Algunos incluso se llevan Física”, asegura. Tampoco son masoquistas: “En el grupo se divierten y trabajan los conocimientos científicos desde lo cotidiano. De eso se tratan las observaciones del cielo a simple vista: aprovechar un espacio que es de todos y
para todos”, explica Diego y agrega que los juegos también ayudan a despertar el interés de los alumnos por aprender. Por ejemplo, una buena idea para estudiar Astronaútica es lanzar un cohete de agua. Los chicos de Osiris lo experimentaron con el profesor Pablo González. Los detalles de este experimento están en www. astroeduc.com.ar. Mientras que las actividades de Osiris se pueden conocer en www. astronomiabolson.com.ar
L
a tercera edición del Premio Clarín-Zurich distinguió proyectos pedagógicos destinados a mejorar la enseñanza de las Ciencias Naturales en la escuela secundaria. Además del premio mayor de $120.000 obtenido por Miradas al cielo, de El Bolsón, hubo dos menciones de honor, de $25.000. La primera la obtuvo el proyecto de capacitación docente y formación de alumnos ayudantes y microlaboratorios del Colegio Nacional Arturo Illia, de Mar del Plata, a cargo de Silvina Santoiani. La segunda mención quedó en manos del científico del Conicet Alejandro Farji-Brener, e involucra a la escuela C.E.M. N°123, de Bariloche. Su propuesta incluye a docentes y alumnos en proyectos cortos de investigación científica. Otros siete proyectos llegaron a la instancia final. Los de Ra-
món Amarilla, Escuela Madre Teresa de Calcuta (San Roque, Corrientes); Carlo Noseda, ESB N°2 (Exaltación del Cruz) y otras; Marina Mateu y otros, ESB N°2 (Buenos Aires); Omar Ramos y otro, Escuela de Agricultura (Tres Arroyos); Norma Sbarbati, Colegio Julio Argentino Roca (Buenos Aires); Salvador Gil, Escuela de Educación Técnica N°3 (San Martín) y otras; y Horacio Bosch, ESB N°1 (Tigre). El jurado estuvo compuesto por Guillermo Jaim Etcheverry, investigador del Conicet y ex rector de la UBA; Pablo Jacovkis, ex decano de la Facultad de Ciencias Exactas (UBA) y ex presidente del Conicet; Diego Golombek, profesor de la Universidad de Quilmes e investigador del Conicet, y Melina Furman, coordinadora científica de los programas Ciencia y Tecnología con Creatividad y Escuelas del Bicentenario.
El año próximo: Matemáticas Segundos después de entregar el último premio Clarín-Zurich a la Educación 2011, el equipo organizador anunció la cuarta edición. Martín Etchevers, gerente de relaciones externas del Grupo Clarín, adelantó que el próximo año el premio Clarín-Zurich distinguirá proyectos relacionados con las Matemáticas. “Cuando empezamos con el concurso, nos parecía un poco utópico. Pero apuntó al corazón de la educación: la calidad. Y una de las obsesiones es la replicabilidad, porque buscamos que los proyectos pedagógicos que ganan inspiren a otras comunidades”, asegura Etchevers. Por eso una de las condiciones de este premio es que la propuesta ganadora se aplique en una escuela pública de gestión estatal. Muy pronto se abrirá la inscripción a la edición 2012. Consultas: premioalaeduca ción@clarin.com
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> global
El arte invade las aulas Especialistas escoceses estuvieron en Buenos Aires para presentar un enfoque pedagógico que se consolida en su país: la “educación creativa”. En qué consiste. ¿Cómo nacen, por qué brillan y cuándo mueren las estrellas? Juan J. Clariá. Comunicarte. $97
Luciana Aghazarian Especial para Clarín
E
l arte es una herramienta para la enseñanza. Así lo entiende un equipo de profesionales de Escocia que vinieron a Buenos Aires para dar a conocer su experiencia en materia de arte, creatividad y educación. Con el apoyo del Centro Cultural San Martín y el Ministerio de Educación de la Ciudad, y la organización de la Universidad de San Andrés y la Fundación Vale la Pena, brindaron talleres gratuitos con el objetivo de que la propuesta se replique en la Argentina. Creative Scotland –entidad nacional que lidera las industrias culturales y cinematográficas–, la Universidad de Aberdeen y el gobierno local de la ciudad de Aberdeen conforman ATLAC (Arte Aplicado a la Enseñanza a través de la Currícula Escolar, según sus siglas en inglés), un ambicioso proyecto que pretende aportar un enfoque innovador a la enseñanza a través del trabajo conjunto del docente y el artista en el aula. La idea, que surgió en 2002 y paulatinamente se fue aplicando a todos los niveles de la educación escolar, ya arroja sus primeros resultados: “Los jóvenes están más comprometidos y motivados. Se acuerdan más de los contenidos porque desarrollan su propia línea de aprendizaje a través de la creatividad. Es más divertido y se consigue una comprensión más profunda del conocimiento de cada materia”, aseguró a Clarín Educación Joan Parr, directora de Arte y Juventud de Creative Scotland. Lo curioso de la “currícula de excelencia” a la que los escoceses aspiran es que se basa en el trabajo diario, en equipo, de docentes y artistas de diversas disciplinas. “Se trata de un vínculo de pares: ambos trabajan juntos en Matemática o Literatura, por ejemplo, haciendo énfasis en una enseñanza creativa”, explicó Jacky Hardacre, coordinadora de Educación en Artes del gobierno de Aberdeen. La formación docente y la revisión del plan de estudios del magisterio fueron claves. Peter Stollery, director de la Escuela de Educación de la Universidad de Aberdeen, fue contundente: “Esta nueva modalidad ayuda a los chicos a pensar de manera distinta, los ayuda a ver su lugar en el mundo como ciudadanos globales”. Pero, ¿de qué se trata en la práctica esta creatividad? Hardacre ejemplificó: “Hay un ejercicio para el primer día de clase de Matemática con una bailarina. Ella les pi-
Astronomía para todo público. Con lenguaje sencillo y didáctico, el texto describe las diferentes fases del ciclo vital de las estrellas. Qué es una enana blanca, la etapa de gigante roja, qué son las galaxias. Ilustrado con fotografías satelitales. El autor es astrónomo estelar.
Los asistentes al seminario, durante un ejercicio de técnicas dramáticas no convencionales para el aula.
Lo central es el trabajo en equipo entre los docentes y los artistas de a los alumnos que inventen un movimiento para las vocales y otro para las consonantes, y que así deletreen su nombre al compañero. Este último tiene que deducir qué porcentaje de este nombre está compuesto por vocales y qué porcentaje por consonantes”. Otras experiencias: en clase de Biología, un músico ejemplifica el
funcionamiento de un ecosistema con una orquesta en la que cada artista, tal como cada eslabón en la cadena alimenticia, es indispensable para lograr la interpretación de una obra musical. O, a través de un poema, un escritor, junto al docente de grado, habla de biodiversidad. “Al principio al maestro le costó asumir la presencia de un poeta, pero luego entendió la riqueza de la actividad y sus resultados productivos. Los chicos se entusiasmaron, se divirtieron y aprendieron”, comentó Hardacre. “Como no podemos tener siempre artistas para todas las materias –continuó–, tratamos de generar en los docentes mayor confianza en sus propias habilidades para poder incluir y desarrollar la creati-
vidad de esta manera”. Y es en este punto donde la formación se vuelve imprescindible: en una semana intensiva los alumnos de tercer año del magisterio participan de talleres presididos por artistas, en los que logran comprender la dinámica de la “educación creativa”. En cuarto año ya pueden realizar su práctica en el marco de ATLAC, donde empiezan a implementar y desarrollar sus propios enfoques. De esta forma, según contaron los profesionales, los primeros egresados van intentando contagiar a los otros docentes con mayor antigüedad, y así comienza a girar la rueda del arte, la creatividad y la educación en la escuela, que nunca termina de sorprender y entusiasmar a docentes y alumnos.
Las claves de la enseñanza creativa Con una experiencia de casi diez años de poner el foco en el arte-educación para la transformación sociocultural de niños y jóvenes, Escocia ofrece, a través de sus especialistas pioneros en la materia, algunas claves sobre cómo replicar esta experiencia que gana en motivación, confianza, iniciativa y creatividad en la escuela: • Aumentar al máximo la creatividad en la planificación y el dictado de clases combinando las asignaturas obligatorias con distintas expresiones artísticas. Por ejemplo, en Aberdeen, los alumnos de los primeros años
de primaria asisten a un festival de música en el que participan distintas colectividades de todo el mundo. A partir de lo que los chicos vivencian, aprenden junto al profesor de Música y de Historia las distintas culturas, ritmos y tradición de cada país. • Lograr el vínculo de los contenidos que atraviesan la currícula a través de fuertes alianzas con docentes, estudiantes, artistas y tutores. El diálogo fluido y las reuniones de gabinete semanales son fundamentales. • Formar a los docentes para que se convenzan de los beneficios de esta nueva modalidad
de enseñanza, y así se animen a hacer su aporte creativo. En Escocia, en los últimos años se incorporaron al programa de magisterio materias y talleres específicos sobre cómo enseñar a través del arte. • El resultado es más beneficioso si este tipo de educación se implementa desde los 3 hasta los 18 años, poniendo el acento en que se trata de “un aprendizaje para toda la vida”, que a los chicos les servirá no sólo por los conocimientos adquiridos, sino para desenvolverse y resolver dificultades creativamente, en cualquier ámbito.
Hijos perturbadores, negativistas y desafiantes. Los riesgos... Fernando Osorio. Noveduc. $69 El libro busca acompañar a padres y educadores en la crianza de un adolescente. El autor retoma los interrogantes de su anterior obra “¿Qué función cumplen los padres de un niño?”. Aborda temas como la autoridad parental, la medicalización, los ciberacosadores, los conflictos con la ley y la desorientación vocacional.
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23 de noviembre de 2011
> experiencias SILVANA BOEMO
De izq. a der.: Beatriz Flores, Rosa De Caro, Catalina Muntaner, Julia Demasi y Dora y Luisa Varela, en el taller en la Casa de la Vida.
Abuelas 2.0 Ellas tienen entre 70 y 95 años, y se animaron a aprender computación para superar el miedo y la desconfianza que les generaba la tecnología. Participan de un taller en Parque Patricios.
unca es tarde para aprender algo nuevo, invitaba el cartel en la puerta de la Casa de la Vida, un hogar de madres menores en Parque Patricios. La propuesta: un taller de informática destinado a adultos y jóvenes, dictado con el apoyo de la Fundación Educando, presidida por Bettina Bulgheroni. Además de las chicas que vivían en el hogar, se anotaron algunas vecinas del barrio. El boca en boca hizo su efecto, y ahora en la Casa se dictan ocho cursos cada cuatrimestre, con una particularidad: muchas de las alumnas tienen más de 70 años. “El objetivo es que las personas le pierdan el temor a la tecnología”, explica Marcelo Bertolón, el coordinador del taller desde 2007. En estos años pasaron alrededor de 400 alumnos por sus clases. “Ahora el adulto mayor está en movimiento, quiere seguir aprendiendo, estar
en contacto con sus nietos. Cambió el modelo de la tercera edad. Por primera vez, una generación le está enseñando a una generación anterior”, reflexiona. El taller hizo que la Casa de la Vida se convirtiese en un lugar de encuentro para algunas vecinas del barrio. Allí funcionan también el Foro de la Memoria de Parque Patricios y otros talleres. La mayoría de quienes asisten al curso de informática son mujeres, y la consigna para entrar es clara: se empieza desde cero. Algunas llegan y no saben prender la computadora, o se encuentran con el desafío de aprender a agarrar el mouse. Fue el caso de Catalina Muntaner, una de las alumnas más aplicadas, que está por cumplir 93 años. “Nunca había tocado una computadora. Me pasé la vida criando hijos, y ahora me quiero dar el gusto de hacer otras cosas. Veo cómo mis bisnietos de 8 años la manejan, y pensé: ¿por qué yo no?”, confiesa. Además de contactarse con su familia en Mallorca, Catalina está ansiosa por dominar
el próximo
El miércoles que viene, en Clarín Educación, un informe completo sobre los exámenes. Llega fin de año y con estas fechas se acercan las evaluaciones finales; cierran las notas y reaparece la angustia de rendir las materias. ¿Cómo encarar esta situación sin estrés? Claves para docentes y padres.
Alfredo Dillon
adillon@clarin.com
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Ya está abierta la inscripción Estar más cerca de los nietos, comunicarse con un familiar que vive en el exterior o, sencillamente, aprender a “leer” la pantalla del cajero automático. Esas son algunas de las motivaciones por las que se acercan los alumnos –en su mayoría jubilados– a los talleres de informática en la Casa de la Vida. Todos los cursos que dicta allí la Fundación Educando son gratuitos. Quienes quieran inscribirse para el año que viene, pueden acercarse a la Fundación Nuestra Familia (Av. Caseros 2945, en Parque Patricios) o llamar al (011) 4942-0165. Los próximos cursos empiezan en marzo pero la inscripción ya está abierta.
la computadora para poder comunicarse con sus 6 hijos, 16 nietos, 41 bisnietos y 12 tataranietos. Para Julia Demasi (74), la tecnología cambió su vida. “Creía que era inalcanzable, pensaba que la computadora era un doberman. Siempre tejí, bordé, hice manualidades. Ahora me compré una netbook, ya no le tengo miedo”, cuenta. Esta nueva habilidad alteró su rutina: ahora, todas las mañanas publica algo en su muro de Facebook y espera ansiosa las respuestas de sus contactos. Gracias a esta red social se reencontró con una amiga a la que no había visto en décadas. Y cuando surge algún obstáculo, tiene servicio técnico garantizado: llama a su nieto. Luisa (87) y Dora (79) Varela se anotaron juntas en el taller. Las dos elogian la paciencia de Marcelo, el profesor. “Le tenía rabia a la computadora, me parecía que era un aparato que generaba desconexión entre los seres humanos”, reconoce Dora. “Es que al principio cuesta mucho entrar, entender cómo funciona todo”, la apoya su
hermana mayor. “Pero el otro día vi en Animal Planet que un chimpancé manejaba una computadora. Y si el chimpancé puede, entonces yo también”, remata Dora. Aunque había trabajado en IBM, para Rosa De Caro (70) las clases en la Casa de la Vida “fueron un encuentro con un mundo nuevo, porque la tecnología cambió muchísimo en los últimos años”. Envalentonada como Dora, Rosa tiene un propósito firme: “Quiero que la computadora me respete. No me dejo vencer por ella”. Con sus más de 70, Beatriz Flores también está entusiasmada: “Esperé dos años porque no conseguía vacante. Me anoté para estar en contacto con mis amigas de otros países. Pero sobre todo, porque la computadora me ayuda a acercarme a mis nietos”. Un puente entre generaciones: eso es lo que encuentran estas aprendices entusiastas en las pantallas y teclados que antes las aterraban. Ya sin miedo, no quieren perderse ni una clase: la mayoría tiene asistencia perfecta.