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Venezuela
Edición N 5 3 marzo de 1989
ENTRE LA RAZON Y EL MITO Depósito Legal pp. 89-00- 3
Portada
Ejecutivo del lesa rumbo a un aquelarre en Miraflores Foto: Juan Oropeza
DIRECTOR Ben Amí Fihman
JEFE DE REDACCION Fanor Díaz
REI)ACCION Ewald Scharfenberg litigo Prieto Valentina Marulanda Elizabeth Zamora
DIRECTOR DE FOTOGRAFIA Vasco Szinetar
FOTOGRAFIA Juan Carlos Oropeza
DIRECTORA DE ARTE Kataliñ Alava
CORRESPONSALES Matilde David, New York Rosario del Castillo (Camándula), Bogotá Alejandro Rcig, Buenos Aires Thicrry de l3cchadc y Gustavo Morales, París
SERVICIOS ESPECIALES EFE, Sygma, Kipa y VU
COLABORADORES., Juan Liscano José Ignacio Cabrujas Pablo Antillano Margarita Scannone . Rubén Monasterios Margarita Zingg de Blohm Marcelle Jaye Guillermo Pérez Schael Juan Sánchez Peláez Jaime Manrique Rafael Sylva: Juan Sará María Sol Pérez Schael José Pulido Marta Canelón de Ilenrique Mara Morillo Marcos Tarre Luis Britto García Jaime Ballestas Isaac Chocrón
ILUSTRACIONES Gisella Romero Giovana Rodríguez Marcos Pereira Mauricio Lemus
GERENTE GENERAL María Sol Pérez Schael
PUBLICI DA I) • Rafael Viloria Celso Manzanero Marta Canelón de Ilenríquez
CORRECCION DE PRUEBAS Malena Sánchez Peláez
TEXTOS Y MONTAJE ELECTRON1C0 Consorcio Soluciones C.A.
FOTOLITO E IMPRESION , Editorial Primavera DISTRIBUCION Distribuidora Continental S.A.
EDITORIAL EXCESO Residencias Piñalva, 1P-15, Avilanes a Mirador,La Candelaria, Caracas, Teléfonos:574.10.50 y 574.11.50 EXCESO no acepta publicidad redaccional
J.0.
La sociedad ha sospechado siempre, con razón, de la existencia de sectas que operan en su seno, bien sea para asaltarla y dominarla, bien sea para usarla de trampolín a la hora de aventarse a futuros cielos. El oro ha servido en ocasiones para ubicarlas: un dinero atribuido y ficticio o real y operante. Persecuciones, para ponerse en él, han inscrito sus nombres en la historia. Los míticos tesoros de la Orden de los Templarios, por ejemplo, mantuvieron ocupadas durante siglos la imaginación y las acciones de más de un francés. Los hombres enfrentados, cuando la ruleta genética los arroja a la vida, con la selva que conforma la sociedad, provistos de escaso tiempo para entender y tomar decisiones a fin de atravesarla con relativa felicidad, incapaces de elegir a la hora del abordaje entre la supersticiosa resignación del juego de azar y la maquinación conspirativa, apelan a las organizaciones de grupo, a las sectas. Las conciben y las forman, o adhieren a ellas. Las sectas, una manera de llamar a los grupos organizados que no se evidencian a plenitud, ejercen un nunca exagerado peso sobre la sociedad. Las teóricamente menos ambiciosas en el plano material, dejan sentir por fatalidad su fuerza, cuando triunfan, no tanto en el universo espiritual, cosa inverificable, como en el rampante plano del poder temporal. Se vio, en forma caricaturesca, con el reciente escándalo de los predicadores protestantes en Estados Unidos. Religiosas, laicas, místicas, las sectas han probado hasta la saciedad que saben llegar ahí donde se ejerce el poder. Ellas son en sí mismas un, y en algunos casos el poder. Los nazis, la mafia, han derramado sangre y letra de imprenta por montones, demostrándolo. Los pobres tienen las suyas, donde adoran a José Gregorio Hernández o María Lionza. Formales o no, es posible identificar por su manera de actuar, las sectas de los ricos, con toda probabilidad de mayor influencia sobre sus congéneres que las últimas, simplemente piadosas y que a lo sumo navegan en las aguas de la impostura de poca monta. ¿Quién podría imaginar que la primera campaña de Carlos Andrés Pérez la dirigiera un publicista perteneciente al misterioso grupo Gurdieff? ¿O que los destinos económicos de la nación iban a recaer en manos de la más emblemática personalidad del Iesa? ¿O que la presidencia del diario nacionalista más importante de Venezuela sería detentada alguna vez por un connotado miembro delClub de Harvard? ¿O que las relaciones con Cuba iban a verse influidas y terciadas por un hombre forjado en las filas del Opus Dei? Son cuatro hechos, en distintos tiempos, que justifican la inquietud por develar, en número restringido y selecto (se cuentan muchas más: la Academia Venezolana de Gastronomía, los seguidores de Lacan...), las que con cierta liberalidad expresiva podrían apodarse, a juzgar por su comportamiento, como las sectas (excluidos los partidos políticos) de las clases dirigentes del país. Ben Amí Fihman
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50 El club de la especulaciĂłn
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Taxista intruso
58 Senos al bisturĂ
62 Spaghetti Mata Hari
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que oscilan entre la razón y el mito. Una mirada a cuatro de los grupos donde la gente pudiente se dota de talismanes teóricos para dominar el mundo.
50 El club de la especulación
53 Terapia de payasos
Quienes crean que estas cosas sólo ocurren en Wall Street y la City deberían darse una vuelta por la Bolsa de Caracas.
53 Terapia de payasos NOTAS Excesos Han acudido a la cita los tesoros sobre ruedas de La Habana, un antiguo café porteño con sabor a literatura, una bacteria servicial, y un servicio a la mano contra virus y bacterias, como el de los expendios autómaticos de preservativos en París. Una anacrónica superstición neoyorquina, la más patética agrupación musical de Venezuela, una Amérika, barroca y lujuriosa y un pedazo de carne tan contundente como un ladrillo, completan la reunión.
17 Sexto sentido El radar de los placeres de la carne y el espíritu
20 Suma codicia Los objetos sobre los cuales se arquea la tentación de un consumidor muy especial
22 Sudor 18 kilates La fatiga costosa y elegante
26 Efímeros, Intermitentes y Eternos. Cómo ganar enemigos.Epitafios.Encefalogramas Los dardos de la redacción 28 Los 10 mejores
Oprah Winfrey y Morton Downey han arrasado con el rating en la televisión de Estados Unidos: la una hace llorar, el otro hace reir.
58 Senos al bisturí No se parecen en nada al chicle, pero distraen, como diría la Nena Jiménez
62 Spaghetti Mata Hari María Antonieta Cámpoli, entre las mujeres más extrañamente bellas de Venezuela, se hizo reina cuando era todavía una niña. Hasta ahí la sencillez de una historia personal tan enredada como el mejor plato de spaghetti. Un conmovedor relato, en la voz de su protagonista.
72 El Torquemada de Caldera Hay quienes disfrutan liberando. Hay quienes gozan censurando. Jorge Cedeño, el hombre que prohibió El último tango, pertenece a la segunda categoría.
76 Taxista intruso Una de las profesiones más sufridas de la capital, vivida desde adentro por un periodista estrella.
COLUMNAS
83 ¿Inútil la publicidad? Guillermo Pérez Schael
los dentistas muestran los dientes
84 El maleficio de Evita Rafael Sylva
ARTICULOS 10 El pan está perdonado Los avatares del primer alimento del hombre: ahora, que en verdad se necesitan litros de sudor para conseguirlo, se revela también una panacea para la dieta.
Por qué matan a los gansos Una tradición tan antigua como las pirámides de Egipto se perpetúa en Carayaca.
34 Los niños del vaporón
85 Cosas buenas de la vida Margarita Zingg de Blohm 86 Desnudas cibernéticas Rubén Monasterios
87 Esoterismo y secreto Juan Liscano 88 Hay que sanear la ciudad Freddy Horonato Vallenilla (Muñuño)
89 Nuevas ocupaciones
Vale la pena descubrir que los pegamentos no sólo sirven para armar modelos de plástico: son un pasaporte barato para los paraísos artificiales.
PORTAFOLIO
Manual de eufemilsmes
90 Todas las mujeres son tuyas
La diplomacia no conoce otro lenguaje, y al parecer en la vida cotidiana, acá en Caracas, todos somos diplomáticos.
42 Las sectas de los ricos La vida del individuo se facilita, cuando de poder se trata, al agruparse bajo consignas
María Araguaney
Fotografías de Jorge Parra
CUENTO
94 La carulada Denzil Romero
La subida que conduce al garaje donde permanece estacionado un Buick del año 1928, recuerda las zonas bajas de la urbanización Valle Arriba, con casas de dos plantas altas y espaciosas. Así es El Vedado en La Habana, Cuba. Esta joyita de la industria automotriz permanece intacta. Todas sus piezas, incluso los más insignificantes broches del techo desmontable, son originales. Y el encendido es de a toque. Para más señas, este carro de dos plazas y motor de 6 cilindros desarrolla un máximo de 80 kilómetros por hora. El dueño recuerda los días en que su abuel paseó por el malecón al volante de este convertible. Confiesa, con el sinsabor de la nostalgia, qu más de una joven hermosa
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quiso montar a su lado. Un ruego que nunca defraudó. A estas alturas, los neumáticos están podridos, completamente inservibles. Y hace poco alguien de Miami, que conoce de esta riqueza, le dijo que el carro tiene un valor de 100 mil dólares. Bueno, así lo cree. También afirma que sólo hay dos modelos corno este en el mundo. Una empresa del gobierno cubano (Cubalsa) le ha hecho una oferta: un cambio pelo a pelo por un Lada soviético (un Fiat 131). "No creo que sea un mal carro, pero yo sé que el Buick que tengo en el garaje es de colección, como una obra de Picasso", afirma sin negarse al trueque. A otros les ofrecerán algo parecido.
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Advertencia: "Se ha determinado que el turnar cigarrillos es nocivo para la salud Ley de Impuesto sobre cigarrillos.
JCC E S En una ciudad como Buenos Aires los viejos cafés de las tertulias hasta la madrugada, de discusiones insomes e interminables, con un cortadito (marrón), una ginebra Bols o un vaso de vino, en las que el propio mesonero intervenía con algún alegato pragmatista —una suerte de retorno a la tierra— han desaparecido convertidos en ominosos grills. En ese desmoronamiento parece insólito que el Tortoni, de la Avenida de Mayo, cumpla un siglo. ¿Cómo ha sobrevivido? La Cosechera, o El Parlamento, que lo sucedió, ubicados frente al palacio del Congreso cayeron bajo la picota hace tiempo. En ese sitio se congregaban los intelectuales existencialistas que en los años 50 descubrían a Jean-Paul Sartre en las páginas de la revista Sur, de Victoria Ocampo (El existencialismo es un humanismo). El London de la Avenida de Mayo, donde Julio Cortázar convocó a los protagonistas de su novela Los Premios, fue reemplazado hace tiempo por un café al paso y un auto-servicio para almuerzo de oficinistas. El Richmond de Suipacha desapareció y el Café de Los Angelitos, de Rivadavia, es ya irreconocible. Y muchos otros, donde la angustia de los porteños se acaramelaba a través de los ventanales con la seducción de las muchachas. O se arrinconaba en cuartillas impublicables de versos malevos, un canto a la ciudad endiosada, al estilo de González Tuñón. Fue uno de los tantos poetas que desfiló por el Tortoni, como el escritor Roberto Arlt, o el mismo Borges, o Bernárdez, o Macedonio Fernández, o Ramón Gómez de la Serna, el de Greguerías, o Clemente Cimorra, un periodista español, republicano, con su enorme clavel rojo en el ojal de su saco siempre negro, solterón empedernido y amante de toda andaluza dicharachera que caía por los teatros de revistas de la Avenida. Como algo adicional, las paredes del Tortoni exhiben cuadros de pintores buenos y mediocres y hacia el fondo, en las peñas, los poetas de barrio agotan los cafés y declaman en rima consonante. No se han extinguido, todavía, los versos a la rosa. ¡Ah, viejo Tortoni, hasta Gardel y Discepolín demoraban el amanecer entre tus mesas!
Foto de Octavio Scopelletti, Buenos Aires 6
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Su espectáculo preferido, cara a cara en La Guacharaca
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Con Cayito Aponte y un grupo de talento al aire.
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Pero el estrellato centenario de la Escherichia coli se redimensiona cuando,
en 1973, se logra construir una molécula de ADN con dos orígenes diferentes insertada en una E. coli, en la cual se
La Escherichia coli es una bacteria, pero no una mas. En 1985 se cumplieron cien años de haber sido descrita por el pediatra alemán 7 heodoro Escherich, y esto lo convirtió en (Tormo de la bacteria: Escherich la denomino Bacterium coli comune, señalando asi su habitat: el intestino de individuos sanos, formando parte de la llamada llora Intestinal Durante estos cien años ha sido el microorganismo mas estudiado por la Biologia Molecular. La E. coli es capaz de realizar funciones protectoras en el intestino humano no menos que, dadas las condiciones propicias, convertirse en patogeno y causar trastornos severos intestinales y extra-intestinales, entre otros, meningitis, plritonitis y septicemia. Esta enterobacteriEltambien es la segunda causa de diarrea aguda infantil. En el laboratorio de investigación sobre las enfermedades enterales de la infancia del Instituto `de Biomedicina, se investiga sobre la epidemiología y los takanismos patógenos de la Escherichia'colt en la producción de la diarrea infantil, una enfermedad que causa trastornos severos en niños menores de cinco años 0,9
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expresó toda su funcionalidad biológica. Este es el inicio de la Ingeniona Genética. Las implicaciones en el proceso cientifico que este conjunto de tocnicas posee en el presente, no tiene limites: ha hecho posible la transgresión de las barreras naturales de la genética, al ser una terno/091d que permite el intercambio de informador) genetica no solo entre organismos de una misma especie sino también inter-especie. Es asi que, en la actualidad, se pueden construir microorganismos con una variedad de codigos genéticos, lo que ha permitido alcanzar grandes progresos en el conocimiento de la biologia, la medicina, la agro-industria, y en la producción de sustancias importantes para la salud y la industria. En estos procesos la E. coli ha sido una herramienta fundamental, no sólo en la ampliación de conocimientos sobre biologia molecular, sino también en su utilización como vector para la producción de sustancias como la insulina humana, el interferón y la hormona del crecimiento humano, entre otras, de mucha utilidad en la medicina actual. 4
VER
Fotografía de la Escherichia coll a través del microscopio electrónico, tomada en el Centro Científico del Instituto de Biomedicina. Digitalización por IBM de Venezuela
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PROHIBIDO SUR AL 13 Doce son los meses del año. Doce los signos zodiacales. Doce horas tiene el día y doce la noche. Son doce las notas de la escala cromática. En cambio el trece es un número cojo, incompleto, ambiguo: a los trece años no se es niño ni adulto. El trece es una cifra inquietante. Pero en New York llegaron al límite de la superstición. Inútilmente se buscará en el tablero de los ascensores el número trece, porque no existe. En consecuencia, tampoco existe el piso trece y si existiera, nadie lo habitaría. Si esto sucede en Praga o en una ciudad del Caribe no habría por qué extrañarse. Pero cuando el horror al trece se da en la capital de la racionalidad, en el mayor monumento al Positivismo que hayan levantado los hombres, sobran razones para el asombro.
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EXC ES OS Aquí los frutos fueron de otra especie. Los presos de la Casa de Reeducación Artesanal de la Planta, en El Paraíso, resultaron más dotados para la música que para el trabajo manual. Desde hace dos años tienen su orquesta de salsa, Nueva Cadencia, dirigida por Wilmer Blanco y asesorada musicalmente por Julio Moreno, quien a su vez es cantante del grupo Natty y su Orquesta. Son 14 los músicos que integran Nuéva Cadencia y que transitoriamente han abandonado las rejas para ofrecer conciertos tanto en Caracas como en el interior. Su último sorbo de libertad fue el 5 de marzo cuando presentaron en el Museo de Artes de Petare un espectáculo "al alimón" con sus compañeras de infortunio: el Grupo de Danzas del INOF (Cárcel de Mujeres de Los Teques). A las 11 am. con entrada libre.
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E XCESO S
Quienes se precipiten este mes a las salas de cine para ver la película de Diego Risquéz, atraidos por el lujurioso romance entre el cacique caribeño y la cautiva princesa blanca, se verán seguramente defraudados. En Amérika Tierra Incógnita la anécdota es lo de menos y la lujuria está presente, sí,
AMERIKA DE RISQUEZ: LUJURIA SI, PERO DE OTRA pero en el preciosismo de las imágenes, en el gusto por el detalle, en la parsimonia de la cámara, en la pasión por el claroscuro, en esa atmósfera de sensualidad en que se ve sumido el espectador desde la primera imagen: una espesa selva de palmeras vista desde lo alto con una sugerente música que parece brotar allí mismo. No hay otras palabras para decir lo que ya se ha repetido: se trata de una película barroca de comienzo a fin, unapelícula Velasqueana (si es posible el adjetivo), más allá de las citas deliberadas que hace el relizador. Referencias también a la idea, pregonada por cierta literatura, de la América Caribe como la tierra de lo real maravilloso
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EL ARTE DE VOLAR por Jesús Soto
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Air France ha confiado a un grupo de artistas la interpretación de su nueva imagen: El Arte de Volar. Esta composición titulada: • Movimiento Lineal», jué creación del artista venezolano Jesús Soto quien está repres¿ntado en los más importantes museos del mundo. Desde 1950, su inquietud creativa se plasma en el tema del espacio y su relación con el tiempo.
No busque más la excelencia.
EL ARTE 17 DE VOLAR AIR FRANCE
EXCESOS Hay palabras feas en sí mismas, independientemente de lo que signifiquen. Una de ellas es "ladrillo", fonéticamente desagradable y de sugerencias y evocaciones pesadas. Sin embargo, en El Caney, el restaurante de carnes de Las Mercedes, decidieron llamar Ladrillo a una de las especialidades de su parrillero El Chino.
La porción de Ladrillo para cada parroquiano pesa un kilogramo, 200 gramos. Es un solomo madurado a la brasa y cocido a fuego lento, modalidad típica de la casa. Su precio es de 190 bolívares y aunque parezca mentira son muchos los carnívoros que diariamente lo solicitan y, por supuesto, lo consumen sin complejos. 16
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E XC E SOS SEXI SENTIDO
Un mito redivivo Los expendios de fast food o comida rápida, no se caracterizan precisamente por la calidad de la cocina. Pero Lung Fung constituye una de las excepciones. Atendido directamente por su dueño, Yu Man Lei, ofrece, además del restaurante in situ, platos para llevar y servicio para banquetes y recepciones con personal especializado. Comida cantonesa, szechuan, vegetariana china, sopas y espléndidos pasapalos en delicadas combinaciones e inusitados sabores y aromas, adecuados a cada ocasión, hora y circunstancia. Centro Comercial Plaza Broadway, Boulevard Sabana Grande. Tel.: 72.52.79
VIDA NOCTURNA
El polifacético y entrañable Simón Díaz
se presenta a partir de este lunes 6 de marzo en La Guacharaca (Torre Central, Altamira). Como compositor, intérprete, folklorista, humorista criollo fino, el popular autor de Caballo Viejo representa lo mejor y más genuino de eso que llamamos venezol anidad. Le Parnasse (Club Privado del CCCT) presenta los días 15 y 29 de marzo a la Billo's Caracas Boys; el 8 a Mayra Martí en concierto, y el 22, Noche de rancheras con varios grupos de Mariachis
El uniforme rojo
La Editorial Circe de España anuncia para mediados de este mes un título particularmente tentador: Edie, la primera biografía de quien fuera musa, mito, símbolo de los años 60 en New York, la actriz y modelo Edie Segwick. La autora es la periodista y escritora Jean Stein, conocida
por sus entrevistas a personajes célebres, en colaboración con George Plimpton. La vida breve, vertiginosa y apasionante de quien fuera convertida por Warhol en la superestrella de la factory; su trágico destino, reconstruido a través de los testimonios orales de aquellos que la conocieron, la quisieron y la utilizaron. Hablan el mismo Andy Warhol, Norman Mailer, Truman Capote, Allen Ginsberg, Gore Vidal, Leo Castelli. Capote la define como "esa niña perdida en la jungla, víctima total, creyéndoselo todo y destruida sin tener culpa alguna". Toda una crónica de esa fascinante década en New York.
Michele Henin es un nombre de pocas referencias, aún para los más actualizados lectores de narrativa. Circe publica la única novela de la escritora francesa muerta trágicamente en 1986: El uniforme rojo (también en las librerías caraqueñas a partir de este mes). Simone de Beauvoir había elogiado la obra que, curiosamente, fue rechazada por Gallimard. La novela describe una infancia oscura, marcada por el uniforme rojo de los tuberculosos. Una niña, confinada a un sanatorio en los años 30, en las afueras de París, sola, —pues su padre ha muerto y su madre, loca, riega las flores de su alfombra con leche fresca— sin visitas, sin objetos personales, provista unicamente de su memoria y sus sueños para consolarse del paso del tiempo. La vida de la autora Michele Henin fue breve y marcada por la paradoja que concluyó en 1986, antes de ver publicada su obra, cuando subió aun taburete para colgar una enredadera de un cable, en su casa, y cayó por la ventana de un quinto piso a la calle.
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DELICIAS DEL CACAO
Cuando Catalina de Aragón marchó a la corte de Enrique VIII, el único defecto que no le fue perdonado por la nobleza británica era aquel "insoportable vicio de tomar continuamente una nauseabunda sustancia llamada chocolate" . El tiempo pasó y los ingleses han tenido que comerse sus palabras, en el sentido literal. Venezuela produce el mejor cacao del mundo, per el verdadero arte de hacer chocolate lo han traído de Bélgica los creadores de La Praline. Antes tenían su fábrica en la avenida Nueva Granada, pero ahora se mudaron a un lugar más accesible, la segunda avenida de Los Palos Grandes, casi en el cruce con . la Francisco de Miranda, en el local 4 del edificio del Restaurant Los Campanilleros. Un kilo de bombones cuesta 210 bolívares, medio kilo 105, un cuarto 52 y el 7., estuche pequeño 35. Están rellenos de avellanas, ponche crema, café, naranja, en fin...
EN COMPACTO El paquete de medidas del nuevo gobierno paralizó las importaciones de discos compactos láser. Las novedades, por lo tanto, lo son en términos relativos: ya llevan más de un mes en las tiendas. Vale la pena señalar sin embargo, dentro del repertorio clásico, la versión de El Clave bien temperado por el pianista Glenn Gould. Esta obra de J.S. Bach, es la piedra angular, suma o clave de la literaturapara teclado en la era barroca, compuesta por 24 preludios e igual número de fugas en todo los tonos mayores y menores —auténtico Tour de force—, y destinados, naturalmente, al instrumento de la época. Pero en nuestros días, el bachiano especialistas canadienses a los puristas, que el instrumento moderno también es digno del maestro de Leipzig. Disco del sello CBS, en venta en El Archivo Musical de Sabana Grande. Otro bello disco es el de la música vocal francesa interpretada por la exquisita mezzo-soprano alemana, Frederica von Stade. El disco incluye Les nuits d' été de Berlioz y La Demoiselle Elue de Debussy, con la Sinfonía de Boston, dirigida por Seiji Osawa. Sello CBS. En el Archivo Musical
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EN LIBREAS Exito de ventas reportan en estos últimos meses tres autores nacionales: Manuel Caballero con sus dos títulos: El orgullo de leer (Academia Nacional de la Historia) y El nombre de la cosa (Pomaire); Nelson Hippolyte, La pregunta y sus víctimas (Pomaire); Igor Delgado con su anto logía de cuentos Sexo Sentido (Contexto audiovisual). La proliferación puede ser mera coincidencia, aunque lo único que tienen en común los tres escritores venezolanos es el hecho de ejercer el periodismo. (Consulta realizada en Suma de Sabana Grande) Los primeros frutos del convenio editorial Laia-Monte Avila, con títulos realmente importantes, se encuentran en las librerías: La caída en el tiempo nihilista y antiacadémico filósofo rumano aclimatado en Francia, Paul ioran, y La figura y el lugar, de uno de los más notables y este sí académico tratadista de la estética en Francia: Pierre Francastel.
VISION DEL CARIBE El grupo experimental de trabajo escénico, Contradanza, que dirige Hercilia López, estrenará el 29 de marzo en Espacio 80 del CELCIT la obra Ancho mar de los sargazos, en adaptación realizada por la misma directora, de la novela de Jean Rhyz. Esta escritora, fallecida hace 10 años, había nacido en Jamaica, pero pasó una buena parte de su vida en Inglaterra, y allí desarrolló su producción literaria. Ancho mar..., su último libro, tiene como escenario el Caribe y como asunto, la problemática social y humana de una isla sometida a la colonización británica, pero lo interesante es que, aunque escribe en inglés, la obra de esta autora, por su temática se considera literatura antillana. El montaje de Contradanza es una adaptación libre y experimental del texto, apelando a recursos escénicos que unidos a la expresión del cuerpo y la danza, enriquecen la historia
VUELTA A LOS CLASICOS Después de una larga temporada de espectáculos populares, sainetes, comedias, la Compañía Nacional de Teatro hace un viraje de 90 grados: este será el año de los clásicos, por lo menos con dos grandes retos que habrán de poner a prueba el profesionalismo de esta trouppe, su versatilidad para enfrentar los más diversos géneros de la dramaturgia. A finales de este mes se estrena una obra que constituye una novedad en el medio: La barca de la gloria, escrita a finales del siglo XV por el portugués Gil Vicente. Se presenta en su versión original en verso y con pasajes en castellano, latín y portugués. Dirigirá Hugo Márquez. Posteriormente,en el marco de la celebración del bicentenario de la Revolución Francesa, vendrá El burgués gentilhombre, de Moliére en dirección de José Ignacio Cabrujas, y a finales del año Don Juan Tenorio, de Zorrilla, bajo la dirección de un afamado hombre de teatro español.A propósito,la obra se estrena el 22 de marzo
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M1E19110 En New York lo nuevo en diseño de muebles, joyas y accesorios para decorar la casa se encuentra en una boutique situada en el East Village. Clodagh Ross & Williams la abrieron hace apenas tres meses. Bajo el mismo techo se halla lo mejor y lo último de New York y California en materia de diseños, ajustados casi todos a esta época posmoderna. La decoración interior de la tienda la realizó la misma Clodagh, su dueña irlandesa. Estilo básicamente minimalista sin perder, desde luego, el espíritu de creativa dureza propia del East Village. A Clodagh no le gusta que sus clientes vivan con teatralidad y por eso sus diseños se basan en la sencillez. De esta manera pretende crear un aura de tremendo poder visual y de calidad duradera en los materiales que emplea. Sus superficies son casi todas producto de materiales crudos, evitando así el uso de los brillantes. Esta boutique presenta la obra de más de 60 diseñadores de muebles, joyas, cerámicas y otros accesorios decorativos. 122 E 8th. Street, New York.
Tiempo de ritmo, tiempo de melodía, tiempo de placer, tiempo de jazz; eso es Jazztime. El programa está dirigido tanto a una audiencia que aprecia el jazz, como a aquella que no es necesariamente conocedora. Incluye, por lo tanto, piezas del repertorio clásico,asícomo modernas de los más diversos estilos actuales, cada una precedida de la información pertinente. La producción y musicalización del programa están a cargo de Isaac Holder, aficionado al jazz de larga data, y la locución corre por cuenta de Menahem Bellilty, quien, entre otras actividades, se desempeña como presentador de la Alpargata Cantorum. El uso casi exclusivo de sonido digital en Compact Disc y en una transmisión FM Stereo, permite una máxima nitidez sonora. Todos los domingos de 7 a 8 de la noche, a través de la Emisora KYS FM 101.5 Mhz.
CABELLERA SUELTA ZURCIDO LAICO El zurcido invisible fue siempre exclusividad de las monjas de clausura que, al disponer de tiempo y de paz interior, lograban auténticas obras maestras. Pero escasearon las monjas o bajó la demanda; lo cierto es que el arte del zurcido se volvió también cada día más escaso. Manos laicas lo practican ahora por un precio de 140 bolívares el centímetro, en la tintorería Azul y Blanco de la avenida Solano con Segunda Avenida de Las Delicias.Tel.: 72.80.30
El tránsito por los 30 años puede resultar el momento del desafío. Quizá el del chapuzón. Lo que se había visto del "portafolio" de Katiuska Borges era un reducido muestreo de inquietudes, vehiculizado a través de la prosa, las artes plásticas y la poesía. En otros formatos, Borges acumula un grueso paquete de ideas que han desfilado en avisos de prensa y especialmente en televisión (es Directora Creativa aso-
ciada de J.W. Thompson). Ahora quiere probar suerte con una muestra retrospectiva de óleos de distintos formatos en la Galería de Arte 2817 (calle Chama, Bello Monte), que estará abierta al público durante todo el mes de abril. Una serie de charlas sobre las incidencias del posmodernismo y unos cuantos saraos amenizados por el grupo musical Amereida y solistas como Miguel Noya y Vinicio Adames completan la velada.
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TAMBIÉN SE ALQUILAN
MUCHO PARA VER POCO Tiene la apariencia de un macrotelevisor, pero su nombre técnico y comercial es retro-proyector, ya que su pantalla excede las 32 pulgadas. No obstante, como se trata de un equipo de alta resolución, tiene la misma nitidez de un televisor, que exige una distancia mínima de visión de cuatro metros y máxima de 24. Por esto último, no resulta ideal para la intimidad de una alcoba como la de los nuevos apartamentos de beneficio social (de hecho, el precio tampoco se adecúa a las posibilidades de quienes los habitan). Lo cierto es que no deja de ser tentador este monstruo con sus tres entradas, para video, manejo a control remoto de todas las funciones (balance, color, tinte, volúmen), sonido estéreo y cornetas desmontables. Además, tiene capacidad para 199 canales de televisión, lo cual es de poca utilidad en Venezuela, donde no se consigue un canal de calidad entre los seis que hay. Fabricado, naturalmente, por Sony del Japón. En Electroshop Sonidos, del Unicentro El Marqués, segundo nivel, por un precio de 112.900 bolívares.
Octavio Suárez Lasalle es un joven aristócrata que aburrido de las estampillas empezó a coleccionar autos antiguos. Ahora posee algunos incunables de la industria automotriz que alquila de vez en cuando. Uno de ellos es un Rolls Royce Silver Cloud 1 del año 1958, probablemente el mejor auto que se ha construído jamás. Además de la elegancia de sus líneas -y su potente motor- tiene detalles como la Venus del emblema, hecha de plata maciza; el tablero de madera de palo de rosa,
los asientos de cuero y unas cómodas mesitas en el asiento trasero que sirven para tomar el té durante el trayecto o para firmar cheques en dólares. Otros autos de la colección son un Cadillac de 1956 (color lila), Oldsmobile de 1959, un Cadillac el Dorado de 1974 (descapotable), entre otros. Todos están a la venta. La última oferta por el Rolls Royce fue de 1.500.000 bolívares y a Octavio le pareció poco. Mientras tanto, los alquila: Tel.: 32.75.84
MUEBLES ANTIGUOS
Elegancia y buen gusto se perciben desde el primer momento en Deysi, la tienda de antigüedades de la Calle Perijá en Las Mercedes. Su dueña, Alessandra Ruggai, nacida en Italia, cordial y culta mujer, ha pasado la vida entre antigüedades, hace avalúos y es experta. Prefiere el mueble inglés por su sobriedad y funcionalidad. Opina que la buena copia resulta en ocasiones tan valiosa como una antigüedad, y que en circunstancias como las actuales, con las restricción de las importaciones, y el costo tan elevado de las piezas genuinas, las copias son una buena alternativa. He aquí dos exquisitos muebles en venta actualmente en Deysi: Escritorio Davenport de 1860, enchapado con nogal y raíz de nogal. Cuatro gavetas laterales, pulido a mano. Si para los ingleses del siglo XIX, tener un mueble enchapado representaba un lujo, para los venezolanos de finales del XX representaba mucho más que eso. Precio: 110.000 bolívares. Silla francesa de 1860, mezcla de estilos Luis XV y Luis XVI. Esterilla tejida a mano en el asiento y el respaldo. Madera de nogal en perfecto estado. Precio: 14.800 bolívares. 20 Exces0 Marzo 1 989
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s actualmente el más espectacular de los barcos de pasajeros del mundo, no sólo por sus dimensiones sino también por la singular combinación de gracia y elegancia. Fue construido en astilleros franceses pero su estilo responde a la arquitectura naval noruega. Es el único barco cuya disposición, a la manera de ciertos famosos hoteles, se articula en torno de un gran centro o espacio que ocupa varios pisos y está bordeado por una galería de escaleras, a través de las cuales se ingresa a la embarcación. Pero lo importante es que este soberano de los mares, es explotado por la compañía
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SUMA CODICIA
SOBERANO DE LOS MARES
sueca Royal Caribbean en lujuriosos cruceros por el Caribe. Música en vivo para todos los gustos; distintos bares, pistas de baile, revistas musicales, representaciones teatrales, piscinas, cubiertas para tomar el sol, pistas para trotar y caminar, casino y tiendas; en fin, todo ha sido contemplado para satisfacer los caprichos de cada uno de los excursionistas a bordo, amén de confortables camarotes, exquisitas comidas y bebidas y la mejor atención. Los proclives a la culpa que puede generar tanto placer encuentran un templo adecuado para rituales de perdón en distintos credos. Uno de estos cruceros dura siete días con partida hacia Miami y regreso desde allí mismo. Costos de 1700 a 2.000 dólares per capita. Royal Caribbean Cruise Line, Inc. 903, South America Way, Miami, Florida 33132.
ILUMINACION HALOGENA Lo más novedoso en iluminación comercial y doméstica son las lámparas halógenas, pues permiten el diseño de atmósferas nunca antes soñadas con iluminación convencional. Por su temperatura (3.100 grados Kelvin) dan una representación absolutamente fiel de los colores. Además la luz que emiten es tan fría que una cosa y otra las hacen ideales para iluminar obras de arte. Consumen mucho menos energía y proporcionan más intensidad de luz y por más tiempo que una lámpara normal. Un bombillo halógeno puede durar de tres a cuatro años. La inversión inicial es alta: un sólo foco cuesta 420 bolívares. Tanto el servicio como la información se pueden obtener en Helios, sótano del edificio Anauco de Parque Central, frente al restaurante El Parque.
HIDIZAULIC O S S UEN O S Los desaforados años 60 no inventaron la concupiscencia pero la propiciaron. Inventaron sí, las camas de agua, que ciertos grupos permisivos convirtieron en nicho ideal para los disfrutes del cuerpo. No habrá faltado psicoanalista que no asociara el placer de ellas derivado, con un regreso a la vida prenatal. Hoy, en las postrimerías de los 80, la dictadura del Sida impone restricciones, pero las camas de agua se siguen fabricando para acoger los dulces sueños de la pareja monogámica. Y, no obstante la restricción de las importaciones, siguen llegando a Venezuela. En Plaza Capuchinos de San Martín, Edif. Garita, local 7, las venden por un precio de 14.000 bolívares, la Queen Size de 1,60 por 2 metros, y 16.000 bolívares la King Size de 2,05 por 2,05 metros. Tel.: 432.60.95
en TRAGO DEbuenos Oft0 licores se envasan contiene apenas nac los Perfumes' Co' Char eantaise tavette que Oe Al igual octavo de litro La --elpríncipe equiv alente un trago— de g de botellas pequeilas. de los de licores, por la nobleza
un La botellita es de cristal hecho a mano y está justamente llamado el a, fo5ada en su interior de saténrojo. al comprador su elaboración. una cajanegr dota de que ilustra letras dispuesta en acerca de la historia y las excelenun texto de la tapa, étiee tiene entre las manos. Es posible que tanta En consumidor) (y ev ente decisión de violas el beta Oto en la que de cias del trago dificulte la Ganadora de la Medalla un siglo, afernalia hace exactamente par conumirlo. , dede1819 tapón y los Bredon viene produciendo, Universal Fine ChamExposición la Grande la destilería f amiliar día se hace el mismo esmero, en de Cognac, que cada 1712, con desde
Pague o Primer ejemplar como este sólo se consigue
Un y cuesta, en cifras internacionales, 100 más escao. país de origen su dólares.
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AVANZADA FEMENINA Una niña de 12 años, Judith Polgar (Pulgarcita), ha ganado en cada seis meses, de acuerdo a los resultados de los grandes estos días el clásico y prestigioso Torneo de Hastings, en su torneos) de 1.900 puntos, pasó a 2.495 en siete años, convirtiéncategoría de desafiantes. El noviembre pasado en el Campeongto dose a los 18 de edad en la ajedrecista con mayor puntuación Mundial Femenino por equipos de la FIDE, en Salónica , constituyó ELO, por encima de la campeona mundial, la soviética Maya Chiburdanidze. Pues a Campomanes se le ocurrió conceder 100 el equipo húngaro con sus hermanas,Susana de 19 años y Sofía de 14 , que sorpresivamente conquistaron el Campeonato Mundial puntos de gracia a las grandes maestras internacionales, para por Equipos, derrotando por primera vez al conjunto de la URSS que Maya, con esta lotería, subiera de 2.430 a 2.530, es decir 35 en una competencia de este tipo. Al lograr el título de Gran puntos por encima de Susana. Manes de Campomanes, que Maestra a los 12 años, supera a Bobby Fischer y Garri Kasparov, luego demostró sus mañas contra Kasparov en el famoso matchinterrupto en Moscú 1985, para salvar los niños prodigios que llegaron a ser a la burocracia ajedrecística soviética. campeones mundiales. El trío Polgar 8 \ • Pero la Perestroika, en un final de es reminiscente de otras hunas, las suspenso, le permitió a Garri arrebatar Gabor, que arrasaron en Hollywood 7 el Campeonato Mundial. Si Judith con curvas y acentos. No todos los logra la histórica hazaña de conquistar prodigios llegan a culminar una 6 \ promesa. Shirley Temple no logró ser el Campeonato Pansexual de Ajedrez, 5 una gran actriz como mujer. ¿Lo superará la misión imposible de Bobby N logrará Judith en ajedrez? También 4 Fischer, cuando en 1972, como un hay que tomar en cuenta la política llanero solitario, a lo Gary Cooper, 3 ajedrecística de la FIDE bajo Florencio despedazó el Imperio Soviético del Campomanes. Precisamente en Ajedrez, en el sol de medianoche de relación con la hermana de Judith, 2 Rejkyavick. Un ejemplo del estilo de Susana Polgar, quien a la edad de 11 juego de las hermanitas Polgar, se ilustra años en 1980 tenía una clasificación \*\ en esta partida, que le valió a Sofía el a ELO (Arpad Elo, profesor de la b c d premio de brillantez en el Torneo Abierto e f g h Universidad de Wisconsin, fue quien de NewY ork en 1987. Sofía, de 12 años, Posición después de 121...Kei Blancas: Kgi-uv-ill-TelAn3-Cf6-32-n2-g2-h2 (12 piezas) Negras: Re7-Db7-Tf11creó la actual escala clasificatoria, tenía a su lado su juguete favorito, un Ta8-Ad7-Cc6-117-a6-d6-b5-f5-h7 (12 piezas) aceptada por la FIDE que la revista osito de peluche. \ \
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kh
Leopoldo Flores
Blancas: Sofía Polgar
1.e4 c5 2.Cf3 d6 3.d4 cxd4 4.Cxd4 Cf6 5.Cc3 a6 6.Ac4 e6 7.Ab3 b5 8.0-0 Ae7 9.Df3 Db6
10.Ae3 Db7
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Negras: Elliott Winslow
11.Dg3 Ad7 12.Cf5! exf5 13.Dg7 Tf8 ¡14.Ag5! Cxe4 El negro estaría sometido a un ataque continuo después de 14,..Ch5,15.Dxh7 Axg5,16.Dxh5 Af6, 17 .exf5. 15.Axe7 Rxe7 16.Cd5+ Re8 17.Tael Cc6 Si 17...Ae6 18.Cf6
Re7 19.Axe6,20.Cxe4 y 21.Dxf8 18.Cxf6 Re7 19.Dg5! Esta bonita jugada sofoca al negro. 19...Ae6?! Era mejor 19...Rd8 20.Ce4+ Rc7 21.Cf6 pero con fatal estructura de peones. 20.Cxe4+ f6 21.Cxf6, el negro abandona.
)CC E S LA SEDUCCION DEL MUSCULO SI
cLusivIrs
Para los iniciados es una especie de Tennis bajo techo. No piensan lo mismo los jugadores de squash quienes tienen mil razones para preferir el suyo al tradicional deporte blanco. Parece que tan sólo 15 minutos de squash hacen por la salud, la forma y el buen estado físico de quien lo practica lo que una hora de Tennis. Ello representa una ventaja para la apretada agenda de los jóvenes ejecutivos. Otra razón que aducen quienes lo defienden es el hecho de poderlo ejercer al abrigo de las inclemencias del tiempo. Curiosamente, comenzó siendo un deporte de presos, inventado en las cárceles australianas, aunque luego se aclimató en los países anglosajones. No se tienen noticias de este deporte en Cuba ni en la Unión Soviética. Especialmente acojido por el sexo masculino, lo practican profesionales liberales, yuppies. En Venezuela, mientras no existan estadios adecuados de uso público, será una exclusiva forma de sudar: hay que ser —o llegar a ser— socios de clubes como el Izcaragua, el Caracas Theater Club, el Monte Claro, el Caracas Sport Club o ser amigo personal de quienes tienen la cancha en su propia casa. Van dos nombres: el arquitecto Luis Angarita y el Presidente del consorcio Financiero Cordillera, Víctor Vargas. Otro dato importante es que la sola acción en el Caracas Sport Club sobrepasa el millón de bolívares. Según la agenda de Ricardo Anzuola, reconocido campeón y joven instructor, en este mes tendrá lugar el Campeonato Interclubes en las tres categorías. Exces0 Marzo 1989 23
PARA BUCEADORES Para practicar el submarinismo, o buceo, no basta sentirse atraído por las maravillas que esconde el fondo del mar. Lo primero es recibir la instrucción necesaria y lo segundo
adquirir el sofisticado y costoso equipo requerido para este deporte. En Caracas existe una acreditada escuela de submarinismo, la Sesto Continente (por aquello de la primera película de submarinismo que se hizo), miembro de la PADI, (Asociación Profesional de lnstrutores de Buceo) con sede en California. Está regentada por los hermanos Vittorio y Gian Marco Assandria, herederos de una tradición de buceadores italianos. Allí ofrecen un curso básico y un curso avanzado. Ambos comprenden clases teóricas, y prácticas en piscinas y en el mar. Su duración oscila entre 30 y 40 horas y tienen un costo de 5.000 a 6.000 bolívares. Av. Los Jardines, Res. Los Girasoles, La Florida. Tel.: 74.38.73
VOCACION TARDIA En el polo los handicaps se contabilizan en una escala inversa a la del golf, o sea que un handicap de 10 es la meta a la que todos aspirarían, pero muy dificilmente se logra. En Venezuela, ninguno de los 45 jugadores que lo practican han podido superar los cuatro. Circulan por ese andarivel Víctor Vargas, Carlos Egaña, Ernesto Vogeler, Manuel Rizo, mientras que Eugenio Mendoza sólo tiene tres. Ello obedece a que aquí la vocación por el polo surgió tardíamente. Y resulta que en el arte de perseguir la bocha a caballo, lo mismo que en el de tocar el violín, hay que empezar a temprana edad, como lo hacen los argentinos y los ingleses. He aquí el secreto.
POLO D/VA N ,),-,,o es i'iolento .y un deporte
embargo, se agresivo. Sin lpn)bar (al ha podido cornmenos entre ]° S Polis_ venezolanos) hallara la que la colisión de los jinetes cobra especial violencia los sábados. Como si la tensión que acumu lan • lo largo de la semana los gerentes de bancos y etnpre.sario.s' una descarga en las `,emes canchas. 'Terapia posibilidaci de desde Illeg0 más higiénica del diván. El domingo en y Jugada más oxigenada que la cambio, se suaviza la
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Para los que buscan la perfección...
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Ple\de\d`a\ sólo sepoduce cada Coco
0 .\11\50ado, P°1 El Whisky Omeca vez d esde hace se ha vuelto 4el leca m\tente. Se ha adaptado a \a, en \tuac;v5, naC\onbzándos vels\ones ensambtadas en e\ entelamente ploduC\das s o pa■ toca\mente •
Adrián Guacarán. t_a como 619aPa\ \\-Id\O ■ exkleMaunc;\ón bed\c; una premVa. que de su callela affist\ca, \os 23.\()s de comen e ■ gdol mes de enelo, \TA6 el` Sábado Sev`sadona\ pubertad qu e o°o\u`ió \a callAti\O su voz..
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ional. Por \oa'u ck\cEl Nac se de a oocas ° „a. en \a ffivelss 0 e Pe`\9' • lado , noca moca n■ er \elIA° e n e■ 0° u Caduca' e _, 1 a. e pkewo,-m -, wegn- 901 So de //ela, 1 a\ rioNcs\eln \-11\ S He ;2,1n \euna \'\\c'sopee .d' 9,ues3.23-enVe . , rk\da\o uoo\'` 1 c\a e\ calu •■e \I c\cn ha . 1\e en 2 c\aa...e \,.\,\ aPk, e CoPe\ ' S -La. (le rk,...cal\-lel COn \--
EL ENEMIGO
COMO GANAR ENEMIGOS • Y CONSERVARLOS UNA INTRANSIGENTE: SOFIA IMBER El vendaval de los soviets que rugía al otro lado de la frontera aventó desde la ribera rumana del Mar Negro a la Yiddishe mame del periodismo venezolano. Con materno furor, desde que empezó a borronear cuartillas por la década de los 40, se consagró a sembrar cabezas de playa de la civilización occidental entre desprevenidos nativos. Blandiendo su verbo acerado como la'rnismísima espada de Santiago, ha defendido los bastiones del Museo de Arte Contemporáneo, de las páginas culturales de” El Universal" y del programa (bostezos) Buenos Días. Sus dos compañeros, Guillermo Meneses y Carlos Rangel, supieron del por qué de sus motes de guerra: la viperina (por su columna primigenia en "Ultimas Noticias") y la intransigente (por un volumen de entrevistas de gran éxito editorial en los 70). Asediados por la izquierda, por ósmosis compartió con Rangel muchas de las enemistades que se han granjeado desde su atalaya audiovisual.
1 E ~MI"
José Stalin
odo.
,
Rafael Báez Zavaleta
puñalada trapera.
LOS DETALLES
UNA FRASE TIPICA
La ominosa sombra del dictador georgiano domina la Europa del Este cuando los Imber abandonan Besarabia y la aparente seguridad de un oasis latino (Rumania) dominado por un régimen de derechas. Desde entonces, todo lo escrito en cirílico le dará tirria a Sofía, y Fidel Castro, Ho Chi Minh, Mao, Daniel Ortega y hasta García Márquez pasarán a ser eternos villanos de sus programas.
"La URSS es un país muerto" . S.I.
Enero 86: amigos de lo ajeno penetran en la Quinta de Imber, en La Florida, y cargan con 300 mil bolívares en joyas. Una semana más tarde, la PTJ apresa en relación al caso a Báez Zavaleta, exmayordomo de la residencia y recupera parte del botín.
"Qué difícil es conseguir servicio ahora". Sentencia popular.
Eduardo Robles Piquer et afila
divinen por quién voté.
Oct. 88: Un jurado de 5 miembros (entre quienes ella figura) otorga a lmber el Premio Nacional de Artes Plásticas. A pesar de Duchamp, RAS en su columna impugna la decisión, protesta a la que se pliega la AVAP, asociación que además rechaza la donación del premio en metálico que ofreciera Imber.
'Deberán ser artistas plásticos quienes reciban este premio" . Res. 23 del CONAC.
Henri Charriere
. 1 a tu.
"Papillon" escapa ala Isla del Diablo para recluirse en el estudio de "Buenos Días". Allí Sofía se muestra escéptica ante la regeneración del francés, a lo que éste responde "me regeneré así como lo pudo hacer una p... como usted".
Vamos a master" Una voz en el set
Reinaldito Herrera La desbancada.
1974: Misteriosamente, Herrera, el tercer conductor (junto a Imber y Rangel) de "Buenos Días", queda fuera del staff. Imber despacha el episodio con un somero comentario.
"Peter BottOrne, para salir de mí, dijo está bien y nos vendieron el espacio" .S.I.
Rhona Ottolina
Dic. 88: Imber acosa a la "primera diputada uninominal" agitando fantasmas de su pasado durante una entrevista. La Ottolina riposta con un chisme que interrumpe la emisión de ese día.
"Eso sólo pasa entre mujeres". Anónimo.
Como el grueso de los masistas, Petkoff establece una relación de amorodio con quien le eche en cara su pasado comunista. Como ya lo han hecho muchas veces en el mismo espacio Maninat y Carlos Raúl Hernández, Sofía invita al líder naranja a denunciar el régimen castrista y dejar definitivamente en claro que él se dejó de éso.
"El siempre se pone bravo, pero siempre regresa" .S.I.
A mí no me hables así. .
/ Teodoro Petkoff
Inconvenientes de la conversión.
.,.--
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L ESOS
El mapa de Africa Mantiene en ascuas a la ciencia de la carlogralla. Países que surgen, páisitos que desaparec en, repúblicas que se anexan naciones que cambian de nombre. El sudario de Cristo. l)n isótopo pudo más oda \a Seldvma. que kprueba del Car4 reveló que un bono:\ probable eterno, la ver\erada rel.iqkiia. de no era más que sur una muestra de bubonena de \a bala edad media.
—11111,-
La promesa de dejar el cigarrillo. Ya nadie pone en duda que el cigarrillo es nocivo para la salud.
EPITAFIOS
Pero de ahí a dejarlo.. Promesa siempre efímera y por ende
xorpoLFo 5osE c.ARDE.N.gs Prefirió, para llegar al mar, las trochas a las autopistas.
vana... Se
mantiene en pie unas horas, días e incluso meses...
MO !SIS WA fM No aprendió la lección del judío Suss. DIEGO RISQUEZ
Los españoles. Llegaron después del descubrimiento. Hubo una guerra a muerte contra ellos, pero siguen aquí, para siempre.
EL PRONOSTICO • La perestroika le parece otra maniobradeiKrembn. Nun Cambiará da Opinión,
Risqué desde chiquito, llegó a la pantalla grande, a partir del formato Superocho. 30,S ANTONIO ABREU
Fue un Cap(o) de la música. SALMANRUSHD CE
Inrique Tejera
Hijo de la medianoche, descubrió involuntariamente a Satán en el Ayatola Jomeini, pero se disculpó a tiempo.
tterno embajador de Venezuela en Washington la época de Betancourt, se eclipsó durante años para aparecer de pronto como Canciller en el gabinete del segundo mandato de Carlos Andrés Pérez. 1--
El ladrón siempre regresa al lugar del crimen.
ETERNOS INTERMITENTES EFIMEROS
di 1s.
PEDRO ALMODÓVAR
Probó que para triunfar como español ya no hacía falta ser macho, majo, trágico...ni nada de eso. ARMANDO SCANNONE
Si la cocina venezolana no existiera, él la habría inventado.
Volverán a ser felices. La proAVAP propuso instituir un premio que gratifique a quienes se dediquen a la investigación, promoción, restauración, etc, de las artes plásticas.
Nadie encamará la novelad Charriere en la bblioteca de Sofía. •
sE9sloRft Se parecía a Blanca Ibañez, pero no era. EVA LISA WZING
El diseño escandinavo, meteorito caído en tierra larense, atribuló el juicio de quienes la coronaron. ntes rías y a farsas'
Nada que restañar, lo de Reimida°. Ahora está en N.Y. ate muchos • lo soy el más esto
Parafraseando a sus aliados del O.R.A.: más fácilentra un camello por el ojo de una aguja que Rhona al estudio de "Buenos Olas". Así será. Mientras el na-ranja, que ayer fue rojo, destiñe a blanco, tendrán que congeniar más.
"Ojalá que cada vez que nos ataquen, los muertos no sean de nuestro lado" (Ambas el 15-11-88, en el Palacio de Miraflores)
ENCEFALOGRAMAS HUMBERTO CAMEJO ARIAS
"Yo no voy a botar mi
casi imposible fueran sobrevivientes "Si se mrcensidesra resré mi ponsabl — soles, uniforme, s y me todasTniSin a de las pondré autoPlittli
(Arias y Pinilla), porque el fuego cerrado en el sitio al momento del
suceso hace muy difícil que ellos estuvieran allí" (15-11-88)
carrera, que está a estas alturas ya al final" (13-1 1 -88)
(Am 12-88, comentando los sucesos del Caño La Colorada)
Nelson Castro
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1.TERESA TOLEDO
2.ARMANDO OREADI
Venezolana, del estado Guárico, nacida hace 37 años. Soltera, realizó estudios en la Universidad Central de Venezuela, especializándose luego en Boston, en Periodoncia. Siempre le gustaron las carreras médicas, pero la odontología le parecía una profesión más cómoda y con la cual podía hacer dinero sin tanto sacrificio como la de médico. Vive en La Florida. Durante muchos años rehusó manejar y no tuvo carro, pero hace dos compró un Fiat 1 y aprendió a conducir. Dice que intenta todo lo posible para no hacer sufrir a sus pacientes. Cuando un paciénte grita ella sabe si es justificado o no. En el primer caso se preocupa y busca remediarlo. En el segundo no, porque se da cuenta que hace teatro, como una forma de manipularla. Trabaja sólo medio tiempo; en el restante practica danza y gimnasia, y aprende idiomas. Su consultorio está situado en el Grupo Odontológico de Especialistas, Av. Libertador, cruce con las Palmas. Tel.: 781.87.61.
Venezolano, nacido en Puerto La Cruz. Tiene 39 años. Casado con cinco hijos. Realizó estudios en la Universidad Central de Venezuela y posgrado en Periodoncia en Boston. Por influencia familiar escogió la carrera de Odontología: su padre es médico y odontólogo. Vive en la urbanización Santa Paula y tiene tres vehículos: un Toyota y dos Ford. No le gusta hacer sufrir a los otros: "uno tiene su fibra humana y también padece". En cuanto a sus ingresos, prefiere decirlo en lenguaje bancario: cinco medias. Su consultorio está situado en la Clínica Odontológica del CCCT. Tel.: 959.19.48.
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3.ROBERTO GAMA GALINDO Nacido en Maracaibo, de familia caraqueña, 36 años. Estudió en la UCV, con especialización en Michigan (odontología restauradora y prótesis). Casado con tres hijos. Médico cirujano su padre, se intere-só inicialmente por esta profesión, pero luego se sintió más atraído por las posibilidades de la biomecánica, decidiéndose en-
tonces por la odontología. 'En esta profesión los resultados del trabajo se visualizan, mientras que en la cirugía se sepultan". Vive en Alto Hatillo y para trasladarse hasta su consultorio puede escoger entre sus cuatro carros: una Samurai, un Caribe, un Corolla y un Malibú. No le gusta que nadie sufra y hace lo posible por suprimir el dolor. Cuando un paciente llora o grita se reprime e interrumpe el trabajo, hasta que pueda remediarlo. "Gano lo suficiente", dice y calla. Su consultorio está ubicado en la Clinica Dental de la Torre Lara en La Castellana. Tel. 261.71.22.
4.GERMAN SALAZAR Venezolano por nacionalización, nació en Colombia hace 65 años. Llegó al país contratado como profesor por la Universidad Central, hace 39 años. Hizo su pregrado en la Universidad de Antioquia, en Medellín, y varios posgrados en Estados Unidos y Europa. Ejerce la odontología general. Una peculiar habilidad manual, unida a la influencia de un pariente odontólogo lo decidieron por esta profesión. Vive en la urbanización Santa
Marta y tiene un Mercedes Benz 68, que no conduce. Sufre tanto o más que sus pacientes, por una parte para evitar el dolor y por otra para que el trabajo restaurativo o estético sea lo más logrado posible. Sus pacientes muy difícilmente lloran o gritan. "Ya las épocas de la odontología del terror pasaron", sentencia. Las nuevas prácticas permiten trabajar sin dolor. Le resulta muy difícil decir cuánto gana. Es más sentimental que comerciante y los honorarios que cobra se ajustan al nivel de su heterogénea clientela que va desde ministrosy diplomáticos hasta inmigrantes y cachifas. Su consultorio está situado en la Av. Francisco de Miranda, Edif. Canaima, Chacaíto. Tel.: 951.33.92.
5.PEDRO RIPOLL Nacido en Caracas hace 40 años, estudió en la Universidad Central y se especializó en prótesis en Boston. Su padre tenía un laboratorio dental muy grande. Toda su vida se movió en este ambiente y el trabajo manual fino, de detalle, siempre le llamó la atención. De allí que se hubiera decidido por
E XC ESOS LOS 10 MEJORES Clinica Oreadi del CCCT. Tel.: 959.19.48.
&JACO.° DII AGUERREVERE Caraqueño de 40 años, Pregrado en la UCV y estudios de especialización en Odontopediatría en Boston. Tiene la paciencia deJob, algo bueno para un dentista, y por ello escogió la profesión. Obviamente no le gusta que sus pacientes sufran y una de las estrategias que utiliza con los niños consiste en ofrecerles premios : carritos, estroHitas, pulseras; jamás caramelos, por aquello de las caries. Confiesa que los niños son los mejores pacientes. Vive en Los Palos Grandes, tiene un Toyota y una Wagoneer. También gana lo suficiente (curiosamente, los dentistas son inmunes a las peripecias del costo de vida). Trabaja en el Centro Odontológico Santa Paula, piso 9. Tel.: 986.10.98 y 986.84.90.
9.VIRGILIO LEMOINE
Miranda B, Chacao, piso 11. Tel.: 32.79.40.
6.SALOMON IBLUMENKRANZ
,cio. Está casado y tiene hijos. Vive en Santa Eduvigis y maneja un Sierra 300 y una Cherokee. No le gusta en absoluto que sus pacientes sufran, aunque reconoce que es un sufrimiento necesario en aras de un buen resultado. Cuando lloran o gritan les explica la razón del dolor; qué es lo que está pasando, y esto los relaja un poco. Es muy difícil determinar cuál es el monto de sus ingresos mensuales. Atiende en el Multicentro Empresarial del Este, Torre JOS
Venezolano, nacido en Israel. Tiene 45 años. Estudió en la Universidad Central y realizó un posgrado en Endodoncia en Boston. Siempre orientó su formación hacia el campo de la salud. Divorciado con dos hijos. Declara que sus pacientes no sufren jamás y allí radica una parte de su prestigio. Los trata con cariño y paciencia. Vive en Santa Rosa de Lima; tiene dos carros: un Jaguar y un Rivolta. Gana lo suficiente para vivir cómodamente. Su consultorio está ubicado en la Torre Maracaibo de la Avenida Libertador. Tel.: 72.49.01.
7.FERMIN GAIALDON Nacido en Caracas, 29 años. Estu-
dió en la Universidad Central con posgrado en Prostodoncia allí mismo. A diferencia de muchos de sus colegas no hay odontólogos en su familia. Escogió la profesión por inclinación natural y "tal vez", añade con humor, 'para cobrar todas las que me hicieron". En realidad, no le gusta que los pacientes sufran y para evitarlo y reducir el dolor les hace bromas o chistes que los hagan reir. Casado, sin hijos, vive en Alto Prado y maneja un L.T.D. Prefiere no confesar sus ingresos, aunque admite que, como todos los odontólogos, 'estoy definitivamente bien pagado". Tiene su consultorio particular en el Boulevard Raúl Leoni de El Cafetal, Edif. SaintTropez, primer piso, además de la consulta que atiende en
Casado, con dos hijos, nació en Caracas hace 36 años. Hizo el pregrado en la UCV, especializándose en Ortodoncia y Cirugía bucal en Nantes, Francia. Dice que siempre le gustó la Odontología; "es como una tara familiar: en los Lemoine hay muchos odontólogos". Le produce stress hacer sufrir a los otros. Es la misma sensación de estar caminando sobre un techo quebradizo, cuando le trabaja a un paciente, y trata de hacerlo lo más dulcemente posible. Sus pacientes no gritan; a lo mejor sueltan una lágrima. Vive en El Marqués, se moviliza en un Renault Fuego y dice, sin mencionar cifras, que gana lo suficiente para vivir bien. Su consultorio está situado en la Quinta Armoní, calle San Rafael, La Florida. Tel.: 74.04.21.
10.ERNESTO MULLER Caraqueño de 51 años, casado, con tres hijos. Hizo sus estudios en la UCV y posgrados en Boston y Pennsylvania. Se dedica a las especialidades de Periodoncia y Tratamiento de Disfunción Temporo-Mandibular. Se orientó hacia la Odontología, en parte por inclinación y en parte por sugerencia de los padres. Sus pacientes no lloran ni gritan. Son tan silenciosos como Muller, quien prefirió no hablar sobre el lugar donde vive,ni del carro que tiene, ni de sus ingresos. Despacha en el Centro de Especialidades Odontológicas de Chuao. Tel.: 91.90.66.
Exces0 Marzo 1989 29
EL PAN ESTA PERDONADO Dietistas de la nueva ola aconsejan comer hasta 12 rebanadas al día para adelgazar, inclusive con mermelada y mantequilla. En esta parte del orbe donde la belleza es simetría y equilibrio de invariables risitas que como estela dejan a su paso. Por 10 años el proporciones, aquella chica que rompa el molde de la armonía se hunde dietista encontró candidatos ansiosos para endurecer sus teorías. Pero en el desprecio. Nunca formará parte de un comité de recepción; menos su método pronto se popularizó entre las mujeres. Más urgidas y perparticipará en un concurso de belleza. A sistentes en eso del look corporal. no ser que caiga en las manos del experiAunque parezca contradictorio, los mentado director de cine, más bien cosestudios de Mickelsen han demostrado metólogo, John Derek, cuyas mujeres que mientras más pan se coma, más kilos (primero fue Linda Evans y ahora es su se pierden. Todo obedece a la idea de saactual esposa, la mujer más perfecta, Bo tisfacer el hambre a base de carbohidraDerek) se han convertido en las estrellas tos. Y esto resulta fácil y rápido con el de Hollywood. pan. Pero a decir verdad, la mujer Durante las ocho semanas, los obesos norteamericana tiene un prototipo más estudiantes de Michigan comieron ocho parecido a Barbara, la esposa del prerebanadas al día. El resultado fue que sidente George Bush, a la que no se le perdieron siete kilos 300 gramos. Hay puede incluir en un catálogo de bellezas, una ventaja adicional, porque otras dietas ni entre las mejor vestidas, por el simple tienen un efecto negativo sobre el ritmo hecho de que en la báscula marca inevide la digestión; la mayoría provoca tablemente un desmesurado sobrepeso. estreñimiento, pero el pan contiene sufiEn Europa, Patricia Highsmith ciente fibra como para combatirlo. En la —otra norteamericana que no es preClínica Mayo, uno de los centros de cisamente una diva— se ha permitido adelgazamiento más prestigiosos del una gran licencia en El amigo amerimundo, siguen una dieta muy parecida a cano, al escribir: "no es tan fea para ser la del dietista sueco. "Es efectiva y sana", alemana". Y todos saben que en aquel ha dicho Peter Jordan , catedrático de esa país, ellas se parecen más ala corpulenta institución. y hombruna nadadora Kornelia Ender Pero los gordos no tienen liciencia que a Marlene Dietrich, que por cierto para comer el pan que les apetezca. Hay era lesbiana. que llevar un control y Mickelsen ha suEn Estados Unidos, donde se pregerido la distribución más adecuada: tres tende popularizar la belleza, un equipo rebanadas con el desayuno; una a media JO Lo malo es que falta en la panaderías de dietistas encabezado por el sueco Olaf mañana; tres con la comida; una a media Mickelsen, ha descubierto que comiendo más pan se pierden unos tarde; tres en la cena y una antes de acostarse. Las personas que están kilos de sobra. acostumbradas a comer el pan con mantequilla o mermelada pueden La evaluación metódica y estadística, sin las que su opinión no seguir haciéndolo, pero lo que sí tienen que cuidar es de ponerle menos contaría para nada, demuestra que en tan sólo ocho semanas se puede cantidad. adelgazar hasta siete kilos y medio. Mickelsen realizó sus "pruebas de Lo bueno es que mediante esta dieta se mantiene el peso deseado, campo" entre un grupo de jóvenes estudiantes de la Universidad de pero si vuelve la gordura, pues a comer más pan. Como siempre, hay Michigan, acomplejados por el persistente volumen de sus cuerpos. En que seguir una dieta equilibrada en la que se incluyan carnes, fru el norte, la obesidad de los hombres resulta intolerable. La imposibilitas y verduras. Aquellos que padezcan diabetes, diverticulosis o dad de que los incluyan en el equipo de béisbol de la escuela y aún en deficiencias cardíacas deben consultar con el médico antes de el coro de la iglesia, los defrauda hasta la saciedad. Eso sin contar las seguir la dieta del pan. 30 Exces0 Marzo 1989
EL ARTE DEL ESCOGES El proceso de elaboración del whisky, es todo un arte en el cual, cada detalle, cada momento, es importante para producir el verdadero escocés. Este arte se inicia con el filtrado del agua a través de capas de turba, antes de remojar en ella la cebada, que luego se extiende sobre un piso de hormigón para que germine gracias al calor y la humedad. Durante este "malteado", la cebada se disuelve debido a una enzima que ésta segrega, quedando lista para convertirse en azúcar.
Luego de detener esta germinación en un momento determinado, se procede al secado y tostado del producto, en unos hornos especiales alimentados con turba, elemento fundamental para que el whisky adquiera ese especial aroma. Este producto vuelve a humedecerse, convirtiéndose en una pasta que es amasada en grandes cubas, donde el almidón soluble se vuelve un líquido azucarado ("wort"). A éste se le agrega levadura en unos grandes recipientes para estimular la fermentación, llamada finalmente "wash",
una primera fermentación de la malta que resulta un vino de bajo contenido alcohólico. En ese momento se realiza, entonces, la primera destilación en alambiques "discontinuos" de cobre (Pot Stills). Luego, se procede a la segunda destilación y, finalmente, al añejamiento en barriles de roble, de una duración aproximada entre los 4 y 15 años. Hemos obtenido, entonces, el whisky denominado "single" o de malta pura, de un valor algo más elevado que el llamado "Blended" o de mezcla. Pero, ambos, ; son el resultante del arte del escocés.
Carnada de patos de un día de nacidos son enviados de Francia y trasladados a Carayaca
Tan pronto se inicia el ascenso desde el litoral hacia la montaña por la escarpada carretera, empiezan las desmesuras. Primero Tacoa, con el recuerdo todavía vivo en las piernas y en los brazos de una niña de 10 años que se dirige a su casa con dos garrafas de agua, y en la mente de todos los que sobrevivieron al atroz incendio de la planta termoeléctrica. Y allí mismo, como un desafío a la catástrofe, se yergue frente al mar un enorme y enigmático castillo con sus 26 cuartos deshabitados, que según los vecinos fue construido por un portugués dueño de un bar céntrico de Caracas, esperando la llegada de algún barco. Siguiendo la ruta se ingresa en predios de Carayaca, a una altitud de 900 a 1000 metros, antigua tierra de encomenderos, morada vacacional de ilustres familias caraqueñas y en la actualidad refugio temporal o permanente de excéntricos artistas, músicos y restauradoras de arte.
Dos jóvenes venezolanos trabajan con la familia Pasquier en la faena de los gansos. Con ayuda de un embudo introducen el maíz de ceba en el gaznate del ave
Valentina Marulanda
nos cinco minutos antes del pueblo, separados de la vía principal por una destruida y estrecha carretera de penetración, se encuentran los fabricantes defoie gras. En una granja de sólo una hectárea se produce la preciosa víscera de ganso y de pato que se consume en los restaurantes de lujo de Caracas. La faena empieza en el Aeropuerto de Maiquetía. Cada cierto tiempo, en el vuelo de Air
France que llega al amanecer, son despachados desde Francia les petits (gansos o patos), como dice Jean Pasquier, de apenas un día de nacidos (con más tiempo de vida la aventura se torna imposible porque no sobreviven a la travesía del Atlántico), en cajas de cartón en las que apenas se deja un orificio para que respiren. Una vez realizados los trámites de aduana, son trasladados a la granja en donde se los hidrata con agua azucarada. Luego vienen cuatro semanas de cría con un alimento concentrado (Patarina), que por cierto también ha sido objeto de acaparamiento, se queja Pasquier, complementado con vitaminas y manganeso. Enseguida son recluidos en la
Galpón de cebado con central de temperatura. Gansos al borde del patíbulo
Patos en proceso de cría apenas inician la carrera mortal
■ Fotos: Juan Oropeza
Tras un último vuelo desde Francia, el destino fatal es en una escondida granja de sala de cebado y allí disfrutan de una semana de gracia para aclimatarse a la nueva temperatura, bastante más baja que la exterior: 10 grados. Entonces se inicia el cruel proceso de cebado con maíz sancochado para provocar un crecimiento anormal del hígado, suplicio exactamente contrario, pero tan inhumano Pierre Pasquier con sus "pequeños", recién llegados, en proceso de aclimatación
Q:IJE TAN AN S OS ?
El predio de los Pasquier. Al fondo la casa
Carayaca donde se procesa el foie gras para los restaurantes de lujo. como el de Júpiter. Este proceso puede durar de 4 a 8 meses, lapso que varía según la frecuencia diaria del cebado y de acuerdo con la capacidad de cada animal para resistir la forzada ingestión. Habitualmente la ceba se realiza tres veces al día. El momento del sacrificio no se puede prePierre Pasquier con varios foie gras listos para su distribución a los restaurantes de lujo
decir con exactitud, porque cuando el animal presenta los síntomas de saturación de grasa (mareo, malestar, no puede tenerse en pie), hay que proceder lo más pronto posible. Algunas veces son decapitados. Otras, se les corta la yugular. Lo más importante, en todo caso, es retirar la sangre. De lo contrario la codiciada víscera perdería su valor. Una vez retirado, el foie gras se reserva para los clientes habituales a los que se vende por un precio de 1.500 bolívares el kilo: el Hilton, el Tamanaco, El Aventino, La Belle Epoque, The Polo Pub. El peso de un foie gras medio es de 500 gramos. El más grande obtenido en Carayaca tenía un kilogramo, 275 gramos. En el salón de la pequeña y blanca casa preLos gansos muertos a temperaturas bajas están colocados en estantes como libros ID fi,
Una vez sacrificada se extrae la sangre del ave. De lo contrario la preciosa vfcera pierde su valor
fabricada, de un curioso estilo que evoca cierta arquitectura mediterránea, y que sirve de vivienda a la familia Pasquier —matrimonio y dos hijos—, una edición de bolsillo de los Diálogos de Platón está abierta sobre la mesa. No se sabe si los gansos habitaban el topos urano platónico. En un estante, libros de biografías, filosofía del iluminismo, crónica napoleónica e historia de Egipto. Pasquier explica que su hijo Pierre alterna el cebado de los animales con la lectura del filósofo griego y la egiptología. El, por su parte, prefiere a Diderot y a Rousseau. o se trata pues de ninguna familia de campesinos, herederos de una tradición de criadores de gansos, como podría pensarse, sino de franceses citadinos, profesionales que llegaron a Venezuela hace 10 años cuando Pasquier, un ingeniero pied noir, nacido en Argelia y residente cerca de París, fue contratado por una empresa de telecomunicaciones, ala que luego renunció. Entonces uno de los hijos, sin que mediara antecedente alguno, tuvo la idea del foie gras y para ello empezó a documentarse. Hicieron los primeros ensayos en Caracas, con animales criollos, pero el experimento duró poco tiempo. Fue entonces cuando vieron la necesidad de buscar un lugar en el campo e importar los ejemplares para cría y ceba. Y así, como por azar, surge Gansoven, una pequeña gran industria de foie gras frente al mar (MED. Caribe.
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Foie gras de un kilogramo de peso
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LOS NIÑOS DEL VAPORON Fanor Diaz
■ FotosVasco Szinetar
LA ESPANTOSA SEDUCCION DE LAS PEGAS Y SOLVENTES PARECE MAS INSOLITA QUE LA DE LAS BARAJITAS GARBAGE. Y SON LAS MUCHACHAS DE LICEOS LAS ADICTAS FERVOROSAS AL RITO DE LA INHALACION SOLITARIA 34 Exces0 Marzo 1989
La feroz cacería de las barajitas Garbage Pail Kids que se desató hace un par de meses parecía interminable. Llegó un momento en que la andanada de artículos de prensa golpeó a los jueces, habitualmente imperturbables, y ellos enarbolaron la causa de la infancia amenazada por los pequeños cartones procaces (niños comiendo gusanos y hasta sus propias heces, y en medio del aquelarre, como un símbolo grotesco, la poceta). Los niños con los bolsillos repletos de las Garbage emprendían, tal vez, una revuelta contra las normas establecidas por el conjuro social y no sólo el insepulto Manual de Urbanismo. de Carreño, quedaba enterrado sin atenuantes.
abatió sobre los quioscos y tarantines donde las vendían, casi clandestinamente, los ferreteros de Caracas —gente de pocas palabras, sin vueltas de tuerca— cumplían con una ceremonia que realizan cada mañana al abrir sus negocios: esconden las pegas Hércules
Los ferreteros de Caracas esconden las pegas Hércules que antes exhibían a la entrada de sus negocios.
de iniciación repartidas alegremente en todas las casas y hasta en la maleta del carro de papá. Así, el espantoso encanto de las pegas y solventes parece más insólito que el de las barajitas que los niños intercambian para completar la colección. En cambio, la pasión por los inhalantes lleva de pronto a un juego solitario, con la cabeza metida en una bolsa plástica para aprovechar hasta el último vaho. "Los niños se inician en el consumo de drogas a los ocho y nueve años utilizando solventes y pegamentos", sentencia el psiquiatra Rafael Ernesto López, a quien el ex presidente Jaime Lusinchi puso al frente de la Fundación José Félix Ribas, dependiente del
Ernesto López siquiatra, ha organizado las comunidades terapéuticas con internados y ambulatorios
ra una revuelta escatalógica, es cierto, pero el fenómeno en sí con todo lo que suponía como desafío, pasaba desapercibido en el ajetreo de interpretaciones inverosímiles. Una de ellas: las Garbage estaban impregnadas de ácido lisérgico (LSD) con el sólo propósito de encadenar al consumidor infantil. Sin embargo, a veces las ramas no dejan ver el bosque. En el marco del escándalo de las barajitas atroces y de la persecución que se
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que antes solían estar expuestas lo mismo que las Pepsi en los supermercados. ¿Por qué? Niños y niñas entran alborotadamente a los comercios y con el pretexto de comprar clavos y tornillos se abalanzan sobre las Hércules. Si el desespero es apremiante, allí mismo destapan los envases e inhalan. Snif, snif...jalea de estrellas. Pegas, solventes (acetona, removedor de pintura de uñas, thiner, gasolina y decenas de combinaciones), el nitrito de ami lo o de butilo, son psicoactivos, drogas baratas
ministerio de la Familia. López fue profesor asociado de la Universidad McGill de Canada y ha publicado varios libros: Inteligencia, Afecto y Nivel social y Símbolo y Mutación, editados por Monte Avila; La Tercera Revolución Psiquiátrica (Ateneo de Caracas) y Dios es una mujer (Seix Barral). El capo lavoro de la fundación fue, el año pasado, una encuesta nacional sobre consumo de drogas por parte de estudiantes de educación básica y media, diversificada y proExces0 Marzo 1989 35
fesional. El universo, que abarcó institutos públicos y privados, es significativo: 21.842 encuestados (9.456 varones y 12.386 mujeres). Las 200 páginas del informe recorren el área metropolitana y 21 ciudades, y sus conclusiones, que son recientes, no han tenido eco en la prensa.
u
n primer dato: el 25 por ciento de los encuestados (5.450 estudiantes) son adictos a las pegas y solventes, sobre todo entre los 11 y 17 años de edad. Desde los 18 a los 20, la edad tope de la encuesta, los consumidores de estos inhalantes los adicionan con marihuana, estimulantes, tranquilizantes, bazuco y cocaína. A partir dé los 17 comienza la preferencia por los cocteles o por las drogas duras a solas. Eso sí, a medida que el consumo se va haciendp más sofisticado y el costo de la droga mayor, los adictos a los fármacos y a la cocaína se concentran en los institutos privados, mientras que en los liceos públicos la combinación popular parece ser la de inhalantes y marihuana. Una comparación entre la encuesta de la fundación y la que realizó entre 1984 y 1985 el ministerio de la Juventud muestra que la drogomanía no ha decrecido en Venezuela en los últimos años; al contrario, ha venido en aumento, pese a las campañas para combatirla. Aquí todo comenzó con una migración juvenil hacia la zona andina a principios de los 70, cuando se descubrieron unos hongos alucinógenos en Mérida, pero tal vez ese episodio no pasa de ser anecdótico como el mismo supuesto de que el apogeo de las drogas en Estados Unidos y Europa fue consecuencia, en los años 60, de los movimientos reformistas de los jóvenes maoístas, el mayo francés, la guerra de Vietnam y la misma literatura de Marcuse. Hay una coincidencia con las revueltas juveniles de entonces, pero en tanto son más tempranas las edades de iniciación el argumento parece menos consistente, o insuficiente. La encuesta discrimina por regiones: central, oriental, nor y sur occidental. Y donde el consumo de pegamentos y solventes se lleva las palmas es en Oriente: un 25 por ciento sobre 5.292 encuestados. Los muchachos, en tanto se acercan a los 17 años —a partir de los 11— abandonan esa extraña lubricación respiratoria, o bien entran en combinaciones, pero las muchachas, aún hasta los 18 ó 20 años, persisten. Sobre 1.300 sujetos el, número de mujeres (884) supera de lejos al de los varones 36
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Para desconcierto de los sicólogos la mayoría de los adictos pertenecen a hogares normalmente contituídos. (416). Las pegamentosas provienen, en su mayoría, de liceos públicos, aunque no es tan significativa la diferencia: 26,10 por ciento versus 21,40 por ciento de los privados. De pronto se registran variantes en cuanto a los lugares donde se realiza la ceremonia. Por ejemplo, nadie se vaporiza en los liceos; sí en los paseos a la playa, o en la casa. Pero las muchachas asumen una conducta más solitaria: inhalan en sus habitaciones mientras la familia ve televisión y difícilmente cuando están en grupos. Cierta coquetería parece prevalecer: no es seductor un jamoneo con olor a pega de zapatero o a gasolina. n Caracas, Valencia y Maracay, la región central, sobre 5.236 consultados hay un 16 por ciento de adictos, pero es mayor a menor edad (un 10,90 por ciento son consumidores entre 11 y 13 años). Las muchachas van a la par de los varones, aunque hacia la adolescencia combinan o cambian directamente por estimulantes y tranquilizantes. Son las señoritas del stress, provenientes sobre todo de los liceos privados. Pero siempre hay una tendencia a aislarse.
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Unos 3.000 estudiantes inhalan una vez al día en las tardes o en las noches. Pero por lo menos un centenar de ellos son más consecuentes: 10 veces al día. Si se les arrima candela es posible que se incendien como bonzos. Sobre el total de la muestra (21.842) un 65 por ciento de los varones dijo que tenía noticias de las notas con pegas y solventes, pero las muchachas estaban más al corriente: 73,80 por ciento de mujeres informadas. En tanto, un 15 por ciento de la muestra dijo que no tenía ningún interés en recibir folletos con información sobre los efectos nocivos de las drogas. Y para desconcierto de los sicólogos el 79,10 de los adictos a las pegas y e178,90 por ciento de los amigos de los solventes pertenecen a hogares normalmente constituidos. Los terapeutas argumentan que la adicción a las drogas en la adolescencia suele ser más frecuente en hogares de padres separados, o de abandono del padreo de la madre. Y algunos establecen una relación de causa a consecuencia. También el grupo femenino arrasa en el renglón de pegamentos y solventes en las regiones nor y sur occidental. En la primera son 954 consumidores sobre 5.739 encuestados (17,20 por ciento de mujeres contra 15,40 por ciento de varones). Al sur-occidente, que tiene los porcentajes más bajos (810 sobre 6.000 encuestados: 13,5 por ciento) la adicción domina en el campo femenino.
En la comunidad terapéutica de El Junquito los internos de ambos sexos discuten abiertamente sobre sus adicciones pero les están prohibidas las relaciones de pareja
abitualmente en las fotos de prensa y en películas documentales sobre ex drogadictos, los personajes se confiesan y .se los muestra de espaldas o con franja negra sobre los ojos, a manera de antifaz, para no dar ningún indicio sobre su identidad. Inclusive cuando se trata de rehabilitados tampoco se mencionan nombres; a lo sumo se los señala con iniciales o con un seudónimo. No es el caso de Apolonio Orellana, de 28 años, orientador actualmente en la comunidad terapéutica de Maracay (una de las seis en todo el país, dependiente de la Fundación José Félix Ribas). Esta es su historia al desnudo, sin ninguna concesión. "Cuando tenía cuatro años mis padres me abandonaron. Ellos se separaron; mi madre se fue de la casa y yo no la conocí. Jamás la ví. Mi abuela paterna se hizo cargo de mí. Yo siempre la quise, pero tuve conciencia de que me faltaba el aprecio de un hogar. Por consejo de mi tía estuve internado desde los seis o siete años hasta mi adolescencia, primero en el Liceo José V. Rangel, después en el Liceo Militar Monseñor Arias, en Fila de Manches y luego en el Liceo Juan El Papa, en Los Samanes. Cuando volví a mi casa me iba a jugar bowling con mis amigos y eran frecuentes mis fugas nocturnas. Le robaba el carro a mi tía o a su esposo y me iba a bonchar. "Un día mi padrino, el marido de mi tía, descubrió que le había robado el Dodge Coronet con el cual había estado danzando toda la noche. En la mañana el carro estaba todavía caliente y sin gasolina. Para que no me descubrieran y creyeran que dormía ponía almohadas debajo de las cobijas, en mi cama. Mi tía que era abogada y tenía vinculaciones profesionales en la PTJ armó un escándalo, me regañó y me dio dinero para que me fuera a Maracaibo a casa de mi padre. A la abuela no le dijeron nada para no amargarla. Anduve vagando por Caracas todo el día y parte de la noche, hasta que me descubrió una patrulla de la PTJ, enviada por consejo de mi tía, a buscarme. Así, me obligaron a irme a Maracaibo: mi padre se había casado nuevamente y su esposa no me quería ("en medio de ese calor horrible me ponía a limpiar la casa, a regar las matas y me hacía dormir y comer aparte de la familia"). Busqué trabajo y un lugar adónde vivir solo, porque mi abuela me ayudaba a pagar la mensualidad. "Fue entonces, en Maracaibo, donde conocí a un señor de cierta edad, italiano y a su compañera que eran adictos a la marihuana. Me trataron muy bien, con afecto. Y así me introduje en la droga; tenía un buen trabajo en el puerto y compraba
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A los 28 años Apolonio Orellana tiene una historia que contar, sin ningún tipo de concesiones.
A CARA DESCUBIERTA las panelas completicas. La marihuana no me gustaba mucho, pero la cocaína sí. En cambio mi amigo, que había botado ala mujer, se dedicaba sólo a la marihuana. Un día montó un negocio de pizzería y me asoció. Ganábamos bastante dinero, pero yo me lo gastaba en drogas: además, mandrax, valium, todo aderezado con alcohol. "A los 24 años me sentía muy mal. Quería salir de la droga y varias veces lo intenté. En Margarita pasé por tres semanas de abstención y caí. Mi abuela y mi tía creían que me iba muy bien con mi trabajo; no sabían nada de mis afiociones y estaban contentas y orgullosas de mí". "Un día le dije a mi amigo que me quería salir de la pizzería. Con 200.000 bolívares me vine a Caracas y me instalé unos 15 días en el Hotel S heraton. Luego estuve unos pocos días en el Tamanaco. Eso formaba parte de mis fantasías. Compré un carro Fiat Premio y. en una noche de bonche, en la que consumí drogas y alcohol, me estrellé con el carro. No me pasó nada, milagrosamente. Pero fui a ver a una
amiga de mi tía, psiquiatra, para que me aconsejara. Ella le contó todo a mi tía que gestionó mi internación en la comunidad terapéutica de El Junquito. Estuve allí 14 meses. Mi proceso de rehabilitación fue de maravilla y era la estrella, el buen ejemplo de la comunidad. Al salir, ellos me dijeron que tuviera cuidado con el alcohol, al que yo de pronto veía como sustituto. Tres meses después me fui de bonche y amanecí en el Guaire, en coma, con el cráneo fracturado (alguien me había dado un golpe). Después de estar dos meses hospitalizado volví al Junquito. Yo, que había sido la estrella, volvía en silla de ruedas y me sentía una cucaracha. ¿Dónde estaban los errores? Fueron 14 meses más de tratamiento. Tengo ocho meses de rehabilitación y me siento muy bien, inclusive con mi trabajo. Creo que puedo ser una ayuda para los demás. Lo que más me duele es que <mi viejita> murió cuando estaba hospitalizado y no la pude ver. A mi tía la quiero mucho. Ella me ha ido a visitar a Maracay". CIED ,
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- Creyรณ que lo estaban embarcando...
La revista mensual 96 pรกginas de distracciรณn
Secretaria A su jefe le orgrinizan la agenda y le hacen ganar tiempo. Tanto que llegan a ser insustituibles. Por eso de vez en cuando lo complacen con una caricia, con un besito de amante. • Z.
Manu/Ide Eufemismos
Gerenté de
mercadeo Las estrategia,y le han llegado de W' agencja de pti• blicidad. Le en canta la campafia • -1111 que diseñó el crea•-* tivo, losineses de promocion y el ta• • lb maño del.empaque. Se .. • • diría que lo tiene todo pqra llegar a la meta, al fiel cumplinuentode la pgairlfiarciÓn gel' rencial. Alas cifras brutas y netas de. las ganazias. Ahomh; tiene que salir a la calle y hacer ,yu parte.. vender y vender. ¿Qué otra cosavuede hacer un vendedor?
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Le coszó Dios y ,su ayuda estudiar abogacía en la Univer.sidad. Sus nota,s. no soh buenas, pero hay que considerar que en sus austera,s. condiciones de pobrezw, hizo un papé/ nzerilono. En el bát7io admiran y le brindan Presunto tragos. antici;oando indiciado Los sacan de los Muro de grandezas. Pero él sigue alfrente de calabozos de la Sil máquina del sellado P77 convictos y con-::%‘` del y 6, pasando datos fesos, después de asesinar a un anótiim c. y haciendo de consejero, omo un buen doctor. 'YO se ciudadano. Y para gut graduó, pero cuando tarse a los periodistas e hace lustrarlo r los zapatos en el encima han dicho: "soy u•47y, tara ntín de la plaza, obrero del hampa" pero cu¿tt,' se entPee//liga c• ada vez así gozan del mismo status: ue el limpiabota lo llama presunto indiciado. Dr,
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Periodista.
Con frecuencia los ve en televisi y a muchos ¡ sS siguen en acuciosas lecturas por lo • periódicos; pero .son más que loc tores y relatores. N f. leen, ni escriben, hacen periodismo. 4
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Profesor
Algo tiene que saber para moverse como se mueve entre las mesas del restaurante. Y por supuesto'tiene lo que hay que tener cuando sugiere la especialidad-del chef y anota el pedido. Lo suyo es un servicio a la medida; lo sabe hacer. Por eso lo llaman "el profesor"
Mi sobrino Almuerzan en el restaurante más discreto de la zona. Uno lleva el éxito en un traje de dos piezas, pues la vida comienza a los cuarenta. Otro encaja en una franelilla y un raído blue jean su difícil adolescencia. Comen y hablan en voz baja, construyendo una atmósfera de familiaridad, que más tarde se concreta en el picap. orte de la puerta del hotel, donde cuelga el carjelito "no moleste -.
Ama de casa
A las horas del crepúsculo, ella bebe un jerez para apaciguar las tensiones que provoca una partida de bridge. Y lo hace con la regularidad de un bebedor; el barman la espera con su copa, puntual. Ese círculo ha suavizado su carácter, más reservado. Encantadora con sus amigas. Ella, es lesbiana, pero todos la estiman; la respetan como una proverbial y conservadora ama de casa. Ya se sabe su profesión.. Hay más de una.
Asesor Iniciaron su carrera con un proyecto propio, audaz y novedoso. Pero por distintas razones, la idea no quedó más que en eso: un proyecto. En el colapso de su iniciativa embarcaron a más de un incauto que nunca cobró por su valioso aporte. Ahora, desde la barrera, asesoran a otros, que sí agarran el toro por los cachos.
Las niñas Uno las imagina en braga escolar. Cometiendo travesuras. Graciosas con lo poco que saben del lenguaje y de irreprimisibles deseos por un chocolate. Pero a veces, la realidad supera a la fantasía; entonces .se las encuentra en un tour del Miss Venezuela. Igualmente graciosas y traviesas. Dispuestas a todo por una buena figuración. Tú eres su precio y quieres que paguen al contado, hasta el último céntimo. Qué buenas niñas.
que ista 1VIasaj Una amiga íntimaColom-
en el oficio cuantas aprendió unas mo Zen y seító ia le ens del budis ue reposicione de las previas caricias qx. Se quiere la ruta del rela de avisos sección piofrece en las clasificados con alguna en una promesa de sa Lo suyo es una cardía, total. entrega. Otro brillo isfación sofisticada de la prostitución.
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Maestro Poco antes de comenzar la búsqueda de una dirección exacta, aparece en la calle ese hombre, entrado en años, jubilado y ocioso que asolea su vejez en las calles de una urbanización que conoce al dedillo. A él lo señalan desde el carro ("ese viejo sabe") y entonces con la solemnidad del caso se oye desde la ventanilla: "¿Maestro, me puede decir dónde queda la calle tal?"
Doñita Dirigirle la palabra ha sido siempre un aprieto, una auténtica incomodidad que a veces hace sudar frío. A simple vista se ve que hace un esfuerzo titánico por disminuir la carga de sus senos caídos. Sus profundas cirugías exaltan los vestigios de lo que fue un bello rostro. Para no herirla y honrar tanta delicadeza la llamas Doñita, cuando en realidad quieres decir <viejita>.
Poeta Su vida ha sido en realidad una eterna búsqueda. Ha cambiado de oficio o de profesión con la misma facilidad con que se cambia el traje. Es un experto en arte, aunque se considera un neófito en la materia. Así es de humilde en sus apreciaciones. Todas las tardes se acoda en una barra de Sabana Grande ( La Busso.la, Camilo, Ritz...). A eso dedica hasta el último minuto de su tiempo libre. El, es el poeta.
Alto ejecutivo
Más de una vez han recibido una llamada telefónica para definir la comisión de un colega. Cobran y brindan sin que se les arrugue el cuello blanco. Potencial turístico Si no hubiera sido por la mano magnánima de Jaime Lusinchi, esos pueblos de Dios seguirían rumiando el esplendor de los años del coloniaje, del brillo que dejaron los zapatos de Francisco Fajardo y el tropel de conquistadores sobre esos territorios baldíos, totalmente desguarnecidos ante los zancudos y la basura, como la inhóspita isla de Coche y las desoladas playas de Sucre, donde ahora resulta que hay tremendo potencial turístico.
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LAS SECTAS DE LOS RICOS Religiosos, rfr someten al cilicio' Harvard, bebe
lag economíase secohfiesan en el Club de plan taría de Gurdieff y pies en el IESA.
TEREZA FASOLINO
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Harvard tiene tal aureola de grandeza que quienes pasaron por sus claustros la conciben como pasaporte a la fama, al poder y al éxito
Pese a que esta década eclipsa como los años del conformismo, mucha gente preserva el brinco trascendental que apacigua sus espíritus o refuerza sus bolsillos. Bendito el momento en que sin proponérselo hicieron el hallazgo que transformó para siempre sus vidas. A unos les llegó la luz del más allá, la inequívoca señal de qué Dios había tocado sus corazones y se entregaron con fervor a la noble causa que en los difíciles años 20 defendió Monseñor Josemaría Escrivá de Balaguer y Alba (para más señas el Opus Dei); otros por no tropezar con el Aleph en una acera de la avenida Baralt, se enrolaron en las místicas y honrosas plegarias de Gurdieff; eso, para no mencionar a los eternos y rigurosos hombres 42 Exces0 Marzo 1989
de escuela que encontraron una salida en el alma mater de Cambridge y San Bernardino. De alguna forma, ya sea por distintas calles, unos y otros han conseguido escapar al tedio bochornoso de una vida mediocre. Nada tiene que ver con esa entelequia de poco anclaje que llaman realidad colectiva. Lo suyo es una lucha diaria por la emancipación del alma o de los billetes. Son las élites de la élite y su propia naturaleza los ubica por encima de los mortales anónimos, que asisten ignorantes y sin rubor alguno al ascenso de estos personajes enlistados en las sectas de los ricos. Allí están, pregonando esquivas virtudes, reforzando a cuentagotas unos métodos casi inalcanzables. Incomprendidos muchas veces,
asumen su tarea con fervor y apostolado. Así, comparten el sino de los elegidos. Entonces, clara está la diferencia que los separa del vacío y el lugar común. Hay una frase que resume toda la cruzada de Escrivá de Balaguer, sus partidarios suelen evocarla a menudo: "los miembros del Opus Dei (obra de Dios) se esfuerzan en poner a Cristo en la cumbre de todas las actividades humanas", y lo hacen a diario, siguiendo una especie de manual que escribiera Andrew Byrne.. El título es más que elocuente: "La santificación del trabajo ordinario". Tanto como los mandamientos que debe seguir un triunfador .
ara un miembro del Opus Dei, la rutina no es más que un episodio agotador. Requeridos por la voluntad divina, se entregan sin demora a los moldes del profesionalismo. Allí, dondequiera que se encuentren. Digamos que ellos descubren la excelencia gerencial muy temprano, a eso de las seis de la mañana, cuando abren los ojos. Es pues, una ventaja que ha colocado a muchos de sus miembros en la cúspide de las finanzas, la política y las empresas. Pero no siempre la inserción en el mercado de trabajo roza en la incertidumbre que supone un comienzo desprovisto de todo apoyo. La escalada de los más jóvenes tiene puntos claves de conexión con el trayecto de las fichas más prominentes del Opus Dei. Y aquí hay un apego riguroso a las enseñanzas bíblicas: "ayúdate, que yo te ayudaré", reza la ley divina. ¿Un sutil ejercicio de palanqueo? Tal vez. En su lento, pero prometedor avance, el Opus Dei reúne en el territorio patrio a unos 2.500 seguidores. Su radio conecta en la industria petrolera en la persona de Frank Alcock, presidente de Corpoven; en industrias de primera línea como la Organización Polar (Sergio Magiolo) y en la Universidad metropolitana, con Jesús Sanabria, antes en Bariven. Dos de sus acólitos más allegados militan en las filas de la democracia cristiana. Uno se eclipsó en noviembre del 87 al naufragar la candidatura de Rafael Caldera, y por el perfil de sus declaraciones en la prensa, diríase que no ha salido de la reserva. Se trata de Hilarión Cardozo. Otro se apuntó al bando ganador de Eduardo Fernández y acaba de obtener con el apoyo irrestricto de El Tigre, la presidencia de la Cámara de Diputados; se trata del inconfundible José Rodríguez Iturbe. Hay dos representantes que administran justicia en la Corte Suprema: Gonzalo Rodríguez Corro y Germán Yepes Boscán. La vida de un Opuso (tales el apelativo que los identifica en los medios católicos), no es nada fácil. Está signada por constantes privaciones y por una coherencia cristiana antisísm ica. El desdeñoso apelativo no impide el fortalecimiento de las dos secciones (masculina y femenina) que por igual agrupa a los laicos en tres categorías: numerarios, supernumerarios y agregados. En una verticalidad que avanza por separado pero en armonía, bajo la dirección del joven prelado Italo Altimani Gasperi, miembro de una
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prominente familia de Maracaibo. Para algunos arrepentidos el bautismo de fuego marca el inicio de una vida de constantes privaciones y de absoluta coherencia cristiana. En la prelatura lo niegan, pero ellos lo confirman: numerarios y agregados hacen votos de castidad, pobreza y obediencia. Eso para no mencionar las cuentas de la prohibición: cigarrillos, alcohol, la confidencia del fuero íntimo y el riguroso apego al libro índice de lecturas, además de una restringida presencia en los cines, el teatro y aún frente al televisor. Para las mujeres hay agregados: les está prohibido el uso de pantalones y de blusas manga corta. A un lado de las obras corporativas de los hombres (la residencia Universitaria Monteavila, en Chuao y el Centro de Formación de Araya, en el Bosque), la sección femenina del Opus ha dispuesto los centros de capacitación de trabajadoras del hogar, cuyas integrantes, además de recibir clases durante ocho horas, aprenden oficios de ca.chifas en
aquellos edificios. Los hombres encuentran la muda impecable sobre la cama muy bien tendida. También tienen a su cargo el colegio de Los Campitos; el liceo Los Arcos; la residencia universitaria Alvariza, en Maracaibo. Y obras corporativas en Altamira (Etame, Casa Vieja y Galiana); en Prados del Este (Aroa y El Rincón); en Chuao (Rosalena); en Las Palmas (la Quinta Miyayi) y un complejo por terminar en la urbanización La Florida. Pero el amor que unos y otros profesan al fundador del Opus Dei tiene otras manifestaciones. No importa la importancia o el tamaño de la ofrenda; el punto es que se haga una vez por día y consiste en una privación, desde la renuncia a un caramelo de chocolate, a un suplemento de 10 minutos con el cilicio u otra forma de tormento, porque tal como lo prescribió Escrivá de Balaguer, al cuerpo hay que disciplinarlo, y muchos recuerdan que él mismo utilizó clavos y hojillas para tal fin.
El Opus tiene varias residencias y reglas de austeridad y devoción que se aplican a resolver los problemas cotidianos. Monseñor Escrivá' como Mao, dejó normas para todo
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MARQUESADO DIVINO
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En las filas de Cristo, a mediados los años 50, llegaron a Caracas los primeros expedicionarios del Opus Dei. Esa avanzada correspondía por orden jerárquico a un selecto grupo de exploradores españoles, que eligieron Altamira como enclave de conquista. Poco antes, en 1950,la iglesia católica oficializó al Opus Dei, como el primero 4 de sus institutos seculares. En medio de la guerra fría y del naufragio de Mao en Korea, esta controversial decisión de Pío XII pasó desapercibida. Muchos recordaron la anuencia del Papa con la Europa de Mussolini y de Hitler. Pero fue suficiente: hubo fiesta en todos los rincones del mundo cristiano. Este resultó ser el primer acierto en la larga lucha de Monseñor Josemaría Escrivá de Balaguer y de su discípulo, formado a su imagen y semejanza, Alvaro del Portillo, ahora a cargo de la prelatura personal conferida al Opus Dei por el Papa Juan Pablo II. Tal privilegio le permite desarrollar actividades de proselitismo en todo el planeta. Si los bastiones ultraconservadores, atrincherados en torno a la inefable figura de Monseñor Lefevbre, tuvieran la misma influencia sobre las decisiones que toma el polaco Karol Wojtyla, los ritos sacros del imperio de Carlomagno prosperarían en toda Francia y Suiza. Mas no es así. En las horas tempraneras de su vocación, Escrivá fue un sacerdote diocesano. Esto es, desafecto a toda congregación establecida, pero el desconcierto no desanimó su apostolado y se dice que en las empobrecidas parroquias de España, los feligreses llegaron a tutearle, ("¡Ea, Josemaría!" ). Su ascenso en los sólidos circuitos del catolicismo hispano endureció el trato. Cada uno de sus apellidos fue agregado sin falta en las venias y reverencias. Y así
t•IMn¿ en Ja no menos resoplada nobleza española, con el pomposo título de Marqués de Peralta. XI l'ab() (It' 11 ► S Sig101 Han:int ha ganado en informalidad
u prestigio ilumina en medio de la crisis. Y tanto brillo irumpe como única solución. Enemigos de la magia, los gerentes han demostrado que saben agrandar el tamaño de sus compañías en medio de la inflación y la incertidumbre. No es poco. Su aval son las ganancias record obtenidas por las empresas en los dos últimos años. Los números hablan por sí solos. Un reducido grupo de estos gerentes provienen del Club Harvard, capítulo venezolano. Formados en los cuidados jardines de Cambridge, disfrutan de un elevado prestigio que funciona como antídoto contra la crisis.
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Sus ingresos son astronómicos y no pocos ocupan puestos en las principales juntas directivas de las compañías más sólidas del país. Carlos Bernárdez Lossada en el Banco de Venezuela, Peter Bottome en ese emporio de las comunicaciones que es el Grupo 1BC y Pedro Vallenilla en el pináculo de las empresas Mendoza, son la creme bostoniana de la gerencia. Ahora que viene un recorte de personal ¿quién puede imaginarlos sin trabajo? Muy pocos han incursionado en política; incluso han evadido una participación colateral en la toma de decisiones gubernamentales. Han declinado el debate. Y esto sorprende, porque en Harvard se alienta todo tipo de confrontación. Su lema (Harvard veritas), mereció hace siglos una inscripción lapidaria. Carlos Andrés Pérez se ha paseado más de una vez por sus aulas. A excepción de Bernárdez, en el listín del Grupo Roraima no hay mayores referencias. Cierto que dos de sus representantes, egresados en estudios políticos, no han podido evadir el reto que eligieron. Aunque si a ver vamos, no han tenido igual suerte. Después de un profuso despliegue como analista internacional, Beatrice Rangel se desprendió de su cómoda asesoría para ocuparse de las relaciones áulicas desde la secretaría de la Presidencia. Mientras José Ignacio Moreno León continúa perdido en una de las comisiones más grises del Congreso. (1»...
José Carta es un harvardiano. Genio y figura
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EL JUEGO DE LOS INMORTALES Las enseñanzas de Gurdieff implican un regreso al más remoto pasado, pues nos sorprendería sobremanera saber que cualquiera de nosotros está imposibilitado de imitar las hazañas y proezas de los hombres antiguos. Y los cálculos no se detienen en los 2000 años de la era cristiana. Van más atrás: por lo menos 10.000 ó 15.000 años. Por los momentos, la gran mayoría de los hombres permanecen dormidos, porque no son capaces de superar el sueño y cuando despiertan permanecen en un estado de vigilia de "conciencia relativa", que no es otra cosa que una etapa más del sueño. Gurdieff quiere que despierten de una vez y comprendan que se puede dejar de ser una máquina y aprovechar los dos pisos superiores de la conciencia, la de sí y la objetiva. Lo primero que hay que entender es que cualquier evolución requiere de un esfuerzo sostenido y que sin un tipo de ayuda es completamente imposible. Todo depende entonces de la voluntad, que a la sazón viene a ser la misma cosa que la conciencia. La idea es que después de vencer infinitas dificultades e interiorizar que hay formidables y engañosos obstáculos, el hombre pueda controlar todos los estados de conciencia, que ya no podrá perder por sí mismo. De modo que es inmortal en los límites del sistema solar. ¿Qué ocurre entonces con aquellos que carecen de voluntad; es decir, de toda conciencia? ¿O de aquellos que no encuentran ayuda suficiente? Se ven perdidos en la búsqueda del aura. Este puede llegar a ser un juego peligroso.
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icen que Gurdieff era un hombre muy solitario, que durante una gran parte de su vida viajó de pueblo en pueblo, únicamente con una mochila al hombro. Era, para decirlo con las palabras de un polizonte de Nueva Orleans, un underground. Algunos recuerdan, con sólo oírlo mencionar, aquella sentencia de Leny Buster: "cualquiera que tenga en su closet más de dos trajes es un farsante". En el ocaso de su vida se estableció con un grupo de sus seguidores (más bien deberíamos llamarlos discípulos), en las afueras de París, en un pequeño pueblo olvidado, donde no hizo otra cosa que impartir otro poco de sus enseñanzas. Ouspensky fue uno de sus más preclaros seguidores. Cuando supo que era el momento, dictó una serie de conferencias, recopiladas en un libro que lleva por título Psicología de la Posible EvolucióndelHombre. Es poco menos que el abre bocas para cualquier neófito que se inicie en el círculo Gurdieff. En Venezuela, el fundador de esta secta fue Regis Etiévann, un veterano publicista que por mucho tiempo fue número dos de Corpa, una de las agencias de publicidad más importantes del país, cuando era presidente Luis Beltrán González. Etievann cayó fulminado por un ataque cardíaco y su esposa, Natalie, lo secundó en su empeño. Hoy es la presidenta honoraria de la fundación que lleva, en reconocimiento, el nombre del famoso publicista. Una de las primeras tareas fue erigir, en Carrizales, el colegio Los Hipocampitos. Etievann estaba realmente preocupado por la nula o poca aplicación práctica de la formación que se imparte en Venezuela. También funciona allí un centro de adultos, involucrados en las prédicas de Gurdieff. Poco a poco, y a través de las enseñanzas de Carlos Blachman y del inglés Jim Knot, los alumnos perciben la energía de sus propios cuerpos. "Es como si pelaras la envoltura de un cable y sintieras esa energía", dijo una de sus fanáticas. Para muchas personas estas enseñanzas nunca terminan. No hay una meta única. La idea es avanzar en conocimientos, hasta descubrir que se puede ascender a planos superiores del espíritu, vinculado al cosmos, muy lejos de lo terrenal. Hay una gran dosis de lectura de las doctrinas cristianas, del judaísmo y del Islam.
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Porque Gurdieff es sólo un método, no es una religión. Mucho de esto se consigue a través de los movimientos. Es decir, una danza que al principio resulta muy sencilla, pero que incorpora grados de creciente complejidad, hasta conseguir el movimiento de la secta turca de los Derviches; es entonces cuando el cuerpo gira sobre sí mismo. n Gurdieff se ventilan todas las etapas de la vida personal, desde los disensos matrimoniales hasta las emociones más precarias, como el miedo y la violencia. ri veces se comienza el día escribiendo en un papel todo lo que se va a realizar en la jornada; la idea es circunscribirse al cumplimiento de
Gurdieff hizo adeptos pero su filosofla del ser inspirada en el orientalismo es casi inaccesible
Olivier Laignel, médico aplica las enseñanzas de Gurdieff
las anotaciones; como ejercicios de carácter y de fortaleza personal. Las danzas se hacen siempre acompañadas de un piano y participan grupos heterogéneos, porque se parte del principio de que la ayuda es recíproca, todos la necesitan. Lo único que se exige son zapatillas de ballet y ropa holgada. Los movimientos llevan una nomenclatura que varía conforme lo requiere el instructor, que no es otro que una persona avanzada en estas lides. Hoy preside la fundación Vicente Valen tini, pero Gurdieff no tiene más de 160 seguidores en toda Venezuela y el peso del trabajo recae sobre las seis instructoras del grupo Kiupa, encargadas de las tareas de artesanía y muy involucradas en el desarrollo de la fundación.
LUZ PROPIA
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El pianista Alain Kremsky es un adepto a Gurdieff a tiempo completo
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Pese a que miles de orquestas de jazz animaron en Estados Unidos y en casi toda Europa el fin de la segunda guerra, ese baile fue flor de un día. ¿Quién podía eludir la triste realidad? ¿El futuro sombrío? Nadie, a enos que desembarcara en un muelle de Manhattan; o que permaneciera allí, como un místico deliberadamente desincorporado de las tibias promesas del Plan Marshall. Gurdieff fue uno de ellos y eligió como refugio la tranquilidad de Fontainebleau, un pueblo a pocos kilómetros de París, donde escribió hasta su muerte, acaecida en 1949. Su peregrinaje por Europa mereció la atención de Louis Pauwels yJacques Bergier autores de El retorno de los brujos. Allí Gurdieff aparece como el malo de la película. Favorito en las demolidas cortes europeas. Rodeado de reyes, príncipes y cortesanos. Se dice que su ascendencia sobre Hitler sirvió para que los panzer alemanes se lanzaran sobre el territorio soviético. Más tarde, encallaron en la abundante nieve, a un so de Leningrado. ¿Error de cálculo? En bsoluto. Olivier Laignel, cuyos padres — atalie Etievann y su segundo esposo Philippe Laignel— conocieron muy de cerca a Gurdieff, contrataca: "son libros apócrifos, de escaso valor documental". Poco o ningún interés tiene la política, entendida como una formade manipulación, pues resulta imposible asociada con la búsqueda de la verdad. Fin "Itimo que propone Gurdieff. La sospecha que pudiera despertar la ndistinción que hace Ouspensky, uno de sus más allegados, entre conciencia y voluntad, representa para Laignel un mero ejercicio de semántica. "Ahora la gente sabe mucho más que en cualquier época, pero no hay un desarrollo concomitante del ser". Esa es la disyuntiva. Por eso, aquel que incurre en el método, descubre que poco sabe de sí mismo. "A veces no sabe nada", puntualiza Laignel. Y on el mismo escepticismo rechaza mágicas soluciones, quiméricas salidas. "¿Cuánto cuesta entender el budismo zen, el sufism o? No es nada fácil". Arribar a estadios superiores de conciencia no hace a las personas más inteligentes, pero les permite un mayor autocontrol, agrega paz interior y aumenta la capacidad de vivir el momento, deslastrados de pesadas herencias y de los infinitos peligros de la imaginación. "El cuerpo humano es una
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y en Venezuela es el ayatola de la secta
máquina y uno puede llegar a saber cómo funciona", alerta Laignel y en plan didáctico menciona que además de contestar a las preguntas, él puede llevar una cuenta hasta 100 de tres en tres y estar consciente de todos sus movimientos, "pero eso no me hace superior, me hace distinto". Son 160 los movimientos de autocontrol que además liberan energía. Laignel, que es médico internista, sabe que si los instructores que los imparten son incompetentes, pueden desencadenar más de una reacción de histeria en la danza. Igual se remueven desajustes emocionales y más de una patología. "Evidentemente esas personas tienen que pasar antes por el diván del psiquiatra", recomienda. A mayor complejidad, mayor dominio de la conciencia. ¿A través de la danza se pueden medir los avances? Laignel, que ha practicado los movimientos no se reconoce en un estadio superior en particular. Y va más allá: "Yo no he llegado a nada, sigo buscando". En la búsqueda de la conciencia de sí y la objetiva, muchos de los seguidores de Gurdieff han dejado una estela de riqueza intelectual y artística. Catherine Mansfield, una talentosa escritora inglesa, se refugió en un granero para expiar una tuberculosis que finalmente la derrumbó. Tras su muerte, muchos vieron la mano del místico pero Laignel lo niega. "Cuando ella ingresó al Instituto de Desarrollo Armónico del Hombre (en Fontainebleau), su enfermedad estaba muy avanzada". Y aclara que este es un testimonio de su abuelo, Philippe Laignel, contemporáneo y seguidorde Gurdieff. René Daumal, escritor galo que dejó entre otros manuscritos una fábula infantil que entre líneas no es tan inocente, también estaba infestado por el mal. "Era una enfermedad muy corriente y hay que recordar que no existían los antibióticos". Más recientemente, Sam Shepard, el dramaturgo y exitoso actor norteamericano que escribiera Cuentos de Motel (sobre el que se hizo el guión de la excelente película, París-Texas), se ha declarado uno de los seguidores de Gurdieff. Otra película (Encuentro con hombres notables) marcó el clímax de la secta en Venezuela, que en labores de promoción trajo a Caracas con estadía y gastos pagos al pianista francés, Alain Kremsky, un cultor de la música del Tibet y de la India. Sus presentaciones en el Municipal no atrajeron a mucho público Exces0 Marzo 1989 47
e un plumazo, el IESA (Instituto de Estudios Superiores de Administración) se convirtió en el aula de los yuppies. Una referencia importante que es poco menos que el salmón ahumado en el reclutamiento de personal para firmas especializadas. Su director académico, Ramón Piñango, ubica el despegue de la gerencia en los escenarios de incertidumbre y fuertes desequilibrios, provocados por el estallido de la crisis financiera internacional. "Un gerente tiene que tener dos buenas antenas para percibir los imprescindibles cambios de la realidad: capacidad de análisis y de liderazgo". Pero no es todo, porque en un mundo cambiante, hay que registrar las oportunidades y los posibles obstáculos para adelantar soluciones. A tiempo hay que dar el picazo. Una inmediata comunicación. Pero un gerente tiene que saber la ubicación de su cargo, porque sólo así podrá hacer que las cosas pasen. Es decir, asertividad. No hay nada más importante. Eso para no mencionar el impulso de los sesgos sociales que se traducen en una borrosa miopía, a la que no escapa nadie. Un master en el IESA es hoy una pieza de caza mayor. Detrás del trofeo hay tantos cand . Jatos que finalmente participan uno de cada cuatro. En un intento en el que pujan egresados de ingeniería y de ciencias exactas. Jóvenes que le imprimen un vuelco total a sus carreras y que encuentran en las finanzas y la administración, el oasis terrenal. "Ya en enero las empresas envían a sus scóuters a recaudar personal y en un plazo de tres meses la promoción (90 alumnos) encuentra colocación en el mercado. "A muchos les gusta deshojar la margarita con dos y tres ofertas", dice el profesor. El promedio aquí es de 27 años. Hay otro curso de gerencia avanzada, diseñado para los profesionales en ejercicio. Lo que se contrasta aquí son problemas específicos y soluciones a la medida, en una especie de todos contra todos. Por eso, la experiencia es indispensable. Los que han pedaleado en esta pista saben que es ciclismo de montaña, La media, 38 años.
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Ramón Piñango da la bienvenida an el lesa a los analíticos y lúcidos. En este gobierno de fragua de cráneos
del Iesa se pondrá a prueba
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Pero el IESA mantiene un perfil alto en el manejo de problemas sociales específicos yen la investigación y desarrollo de métodos para empresas no lucrativas. CEE)
Cocina de autor
CLUB PRIVADO
THE Polo PUB
LA BOLSA DE CARACAS
Para muchos es un casino sin música, pero más alborotado una sala de juegos, resulta el cenáculo de un grupo de comisionistas y agentes que mueven los hilos de grandes fortunas Hugo Prieto
■ Fotos: Vasco Szinetar
Un corredor de Bolsa atrae como imán a los grandes capitales y ocupa entre los hombres de negocios, el puesto de los tipos que piensan. Huele la estampida que provoca una revelación traumática o un rumor de pasillo, y de un plumazo cambia de opinión si la formación de los precios de cada acción se desboca fuera de los marcos económicos que la determinan. Eso sin contar con que tiene las tripas suficientes como para arriesgarlo todo, en una apuesta que por igual lo lleva a las puertas de una inmensa fortuna o ala quiebra instantánea, materializada a veces en un suicidio. Tal vez lo que haga falta en la rueda capitalina sea que uno de sus más connotados portavoces se 50 Exces0 Marzo 1989
lance desde el piso 19 del Banco Central de Venezuela, para que se le compare con el agitado cruce de New York o Tokio, pero aún así tiene sus turbulencias. A no ser por blandas denuncias, a las qué invariablemente ha seguido una centrífuga institucional, faltan en Venezuela los temerarios aficionados que arriesguen la suerte del Chase Manhattan, tal como sucedió en Nueva York en los pródigos años de David Rockefeller. Eso, para no mencionar a un tránsfuga como Iván Boesky, pillado en la compra-venta de títulos y acciones de compañías envueltas en fusiones o en negociaciones de venta. De lo que se habla aquí es de un descuento en el
cobro de comisiones y de insignificantes transferencias a veces tramposas. Porque salvo para unos 10 corredores y sus partenaires de turno, el golpe en la rueda es la bolsa o la vida. En realidad son unos 10 la créme del mercado. En los talones de taquilla su número coteja operaciones hasta por 4.000 millones de bolívares, a veces con 3.500 clientes en cartera. Es el pináculo que ocupa Rafael Alcántara, al mando del ranking 14 veces en 21 años. Una base de 150 inversionistas que ponen en juego un millón o más lo mantienen despierto entre 14 y 15 horas diarias. Y eso es trabajo duro. Con más de 12.000 accionistas, La Electri l cidaeCrsfu,plaeniód
SI HUBO UNA ACCION ESTRELLA fue la de La Electricidad de Caracas, que vio la luz con ganancias de 100 por ciento
En el coro de los dedos alzados para la compra y venta, siete empresas manejan el mercado.
hace dos años, el título estrella en 1988. Sus tenedores ganaron desde el momento de la reinscripción en pizarra, más del 100 por ciento. En maniobras, lo que se hizo fue una clásica especulación al alza, que dejó en cartera ganancias absolutas. No hay otro mercado que responda a la intuición, o a las arriesgadas apuestas de una corazonada. Torvenca, una compañía literalmente en quiebra, pudo negociar el grueso de sus pasivos (mayormente concentrados en el Banco Industrial), y revertir su denominación jurídica a Saica, para enganchar con un precio hacia arriba que sorprendió por el empuje del ascenso. Eran los días de la euforia, de un elevadísimo índice bursátil, apuntalado por la necesidad de enjugar los desequilibrios cambiarios y ganar en medio de tasas de interés negativas o preservar
fuentes de inversión eficientes. Los bonos de la deuda pública, aún bajo rendimientos estables, dejaban por descuento ganancias por encima del 25 ó 30 por ciento, muy convenientes en medio de estrictas regulaciones. Ahora, van en picada una vez que se anuncia un marcado reajuste en el valor del dinero. Pero eso no evitó que los especuladores lanzaran al mar toda la carnada. Cervecera Nacional regresó a la pizarra con una cotización que se disparó hasta 150 bolívares por título (no se sabía que la empresa estaba imposibilitada de repartir dividendos), así que del mismo modo cayó. Y más de uno bajó por el tobogán de este clásico ejemplo a la baja, con milagrosas utilidades, realizadas en tiempo récord . En medio de las estructuras de un mercado insuficiente, La Previsora ocupó el ejemplo de una
quirido en una sola transacción un lote de acciones calculado en 108 millones de bolívares. Armando Dearmas se desentendió del asunto con un lacónico "no sé". El director general del Unión, Ignacio Salvatierra, confirmó la incursión del editor en la Bolsa. Uno que apostó fuerte fue David Brillembourg. La verdad es que le tenía ganas al Banco Hipotecario de Crédito Urbano, el decano en el esquema del financiamiento a largo plazo. A través de Confinanzas (su grupo) mantenía un lote de acciones minoritarias. Por fin, el Venezuela se desprendió de sus títulos y más tarde lo hizo el más fervoroso de sus competidores, La Seguridad, pero exigió antes conservar su puesto en la junta. La operación, en la que efectivamente no aparecieron muchos compradores, fue cerrada tras un golpe más del martillero. Señal inequívoca de un acuerdo previo. Y ahora que las tasas de interés escalan a 40 por ciento, se sabrá si Brillembourg hizo un buen negocio. Pocos lo creen. La suerte de los créditos inmobiliarios depende de un subsidio estaDesde su yate de 42 pies Rafael Alcántara arroja clásica empresa en la que invierten sus propios accionistas. Décima en el ranking de las aseguradoras, tiene reservas que la colocan en el puesto cuatro. Esto es, elevada liquidez. Un precio alto que ya se verá. En la Bolsa hay siete empresas que mueven el 85 por ciento de las transacciones, por eso Alcántara habla de una "paquita", pero ocurrió algo curioso con una de ellas (Banco Unión). Según informes de prensa, el Zar del Grupo Dearmas, Don Armando, había ad-
el anzuelo en aguas tranquilas. Las de las Bolsa son de mar picado.
tal.
MIENTRAS EL PRECIO CAIA RÁPIDAMENTE CERVECERA dejó sobre el mostrador un rendimiento pura espuma Exces0 Marzo 1989 51
QUIEN APOSTO FUERTE FUE DAVID BRILLEMBOURG para quedarse con un banco hipotecario y redondear su circuito financiero
intentes recuperar lo perdido. Con el alza de los productos siderúrgicos, Sivensa es de los títulos mercadeables, el único condenado a subir. Lo mismo vale para La Electricidad. Si ya gana, hágalo, porque como pontifica Alcántara, "nadie pierde si realiza una utilidad". No es poco para quien ofrecía entonces cinco pagarés hasta por 500 mil dólares, con vencimiento al 4 de noviembre de 1990 y utilidad fija de 25 por ciento. Poco si se tratara de un papel en moneda nacional, pero nada mal si George Washington avala el rendimiento.
Alcántara no sólo enarbola en la rueda un estilo agresivo que no gusta entre los demás corredores, sino que ha tenido éxito como operador cambiario, a través de una firma (Cambios Caracas) que adquirió a finales de 1985. También ha incurrido en la venta de metales, como uno de los principales comisionados del BCV, aunque la ganancia es de medio o uno por ciento del total. "Y sobran los riesgos, porque la onza de oro puede cotizarse en 120 dólares el viernes y abrir a 105 el lunes", no mucho para Alcántara, que sabe muy bien que la tarde de la última
,luan Domingo Cordero es un caballero: lo engañaron, perdió un millón de dólares, pagó hasta el último centavo y siempre en la brecha
El gran horizonte es el dinero caliente y el puente tendido a las transacciones en divisas con los acreedores
Nada es más sensible a los rumores que la rueda bursátil. Por un momento se mencionó que el Banco Caracas estaba a las puertas de una fusión con el Venezuela, segundo en el ranking bancario. Al tiempo, un lote de 1.200 títulos se colocaba en pizarra. Y comenzó entonces una rápida especulación al alza, que subió el precio a 310 bolívares en un pique de Víctor Flores y Alcántara. Aquí también prospera algún caso de fraude, como ocurrió en 1988 cuando en medio de la estampida del dólar, el Banco Central resolvió suspender a los 52
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operadores cambiarios. Uno de ellos, Mario Mugia, de Cambio La Guaira, montó la olla con cheques que colocaba con 10 y hasta 15 céntimos de descuento. La idea fue adquirirlos para colocarlos como transferencias. Así se hizo más de una vez. Incluso cuando Mugia dejó el pelero, corredores tan avisados como Juan Domingo Cordero, cayeron en la trampa. De la que pudo salir después de cancelar deudas por un millón de dólares. "Puntuales y a tiempo, tal como fueron contratados", dijo el agraviado sin inmutarse. Un mandamiento que se sigue con fervor, reza: nunca
El lema de Víctor Flores es casi una copia del de Penzini Fleury, salvo que él dice: "Especular es vivir"
jornada y los días feriados se pasan más cómodos en su lancha de 14 pies, donde resultó bicampeón de pesca el año pasado. A lo que van todos es a la formación de Casas de Bolsa con ventaja en el manejo de dinero caliente, la colocación de bonos de la deuda pública en moneda extranjera y un papel de primer orden en la oferta de cambiar deuda por inversión. Cordero ya exploró las rutas de Europa y Nueva York, Alcántara lo hizo en la ciudad manzana. ¿En qué otro lugar se puede ganar?
CATARSIS TELEVISIVA EN U.S.A.
La Terapia de los payasos
La Mujer del Año, Oprah Winfrey, confiesa a los invitados a su programa, y entre un torrente de palabras y un mar de llantos sacraliza las desdichas. Pero su rival, Morton Downey, convoca a los suyos a un torneo rabioso de insultos, para descargar otras angustias. Y hace reír. MATILDE DAVIU DESDE NEW YORK prah Winfrey, la Mujer del Año y fenómeno sentimental de la televisión americana, nació pobre en un país donde lo único importante es el dinero. Nació negra en un país donde los blancos detentan el dinero y el poder. Nació hembra en un país donde los hombres deciden todo lo que hay que hacer. La violaron cuando era niña en un país donde la patología criminal encuentra muchas veces sus raíces en casos como ese, y si a esta lista de adversidades le agregamos el nombre que lleva (mal deletreado por cierto) del personaje bíblico Orpah y el hecho de haberse dejado engordar excesivamente en un país donde el culto a la belleza del cuerpo pasa por norma de buena conducta y la gordura se considera "tabú", entonces es como para decir que "nadie daría un centavo por una persona así". En la actualidad, esta persona produce 31 millones de dólares anuales. Pero lo de ella es empatía, sensibilidad, humor, curiosidad y una disposición natural para escuchar las confesiones e historias íntimas de aquellos que han sido víctimas del abuso de los demás. Los paquetes de Kleenex parecen ser insuficientes para secarles las lágrimas y limpiarles los mocos a los 13 millones de lloronas y llorones que diariamente encienden las pantallas de sus televisores para recibir su dosis de
terapia pública con la anfitriona número uno de la televisión americana. Oprah sabe muy bien cómo contener ese río de lágrimas que amenaza con inundarle el estudio y rebasar las fronteras del buen gusto. Ella les dirá: "Lo sé; es muy duro hablar de esto" y les colocará suavemente su morena mano sobre el hombro o los abrazará para ayudarlos a recuperar la dignidad y que el show pueda continuar. ¿Por qué llora tanto la gente en "The Oprah Winfrey Show"?. Lloran porque allí se habla de crisis dolorosas, de heridas profundas en la vida de los que asisten al programa ya sea como invitados al panel o simplemente como público. Y allí está ella, Oprah Winfrey, la reina de los talk-show de la pantalla chica, la que le quitó en buena lid el primer puesto de audiencia nacional a un hombre blanco e inteligente como lo es Phil Donahue, quien tuvo que abandonar Chicago para venirse a New York después que el rating que mantenía sufriera un considerable declive; la que se ha ganado el corazón del público porque ella les habla con el corazón en la boca y se atreve a tocar temas tan candentes como la violación sexual que sufrieron hijas de padres degenerados cuando eran niñas o adolescentes, los celos entre madres e hijas, los niños que han sido golpeados brutalmente por sus niñeras, los gay que no quieren decir que tienen Sida,
La pasión de la Winfrey por el climax dramático la llevó a confesar ante las cámaras que fue violada a los siete años por un familiar
Hijo de un tenor irlandés, Morton Downey arma
tremendo zaperoco ante las cámaras con su público de iracundos
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o casos de mujeres que decidieron abandonar una relación heterosexual para convertirse en lesbianas. Son estos temas confesionales, sensacionalistas y abiertos los que hacen que la gente llore frente a las cámaras de televisión y Oprah suelte de vez en cuando algunas furtivas lágrimas desde sus ojos amarillos. El programa invariablemente se ve sacudido por esa fuerte carga emocional, orientado como está hacia la confesión pública y una cierta toma de conciencia.
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los 34 años de edad Oprah Winfrey gana un dineral: 12 millones de dólares tan sólo con el show , que gasta, en parte, viviendo en un lujoso apartamento de tres habitaciones en la Golden Coast de Chicago con vista panorámica al Lago Michigan; en comprando indiscriminadamente vestidos, pieles y joyas; desrizándose el pelo y mandándose a hacer complicados peinados; haciéndoles costosos regalos a sus empleados y amigos; becando a 10 estudiantes a la universidad, manteniendo algunos programas educativos, y movilizando el set del estudio para grabar eyen tos de boxeo como el Tyson-Spinks. Oprah habla hasta por los Codos. Las palabras son su vocación. Ella es el tipo de mujer a quien no se le escuchará jamás pronunciar la frase: No comment. Su vida privada no ha disfrutado de la prudencia del silencio. Se la involucró con una estrella del foot-ball: Stedman Graham, y antes de que el romance se consolidara •en matrimonio, ya ella había comunicado públicamente que después de haber hecho todo el dinero del mundo y de haber estado en el top de la fama, ahora quería tener un hombre en su vida. Las malas lenguas dicen que este tipo de comentarios lo asustaron. En la actualidad, Graham vive solo en North Caroline y ve a Oprah una vez al mes. Stedman, al parecer, no se quiere casar por ahora. Todo lo que pueda decirse sobre Oprah ya ella misma lo ha dicho. Sus programas son sensacionalistas y su vida también. Oprah le pertenece al público. El clímax de su pasión por las palabras lo elevó al extremo y a su propio show , cuando reveló el incidente que sufrió en la niñez. Un hombre de su propia familia la violó cuando tenía apenas siete años de edad. Pero eso no fue todo; a los nueve años la volvieron a violar. Esta vez fue un amigo de su madre. 54 Exces0 Marzo 1989
¿A qué se debe, entonces, el éxito desmesurado de esta mujer? A su espontaneidad, a su sentido del humor, a su optimismo y determinación, a su simpatía, a que no tiene pelos en la lengua aunque una vez, en medio del programa, llegó a interrumpir a uno de los invitados para decir, mientras se llevaba una de sus larguísimas uñas rojas a la boca: "Disculpen, pero es que tengo un pelo en la lengua" y, desde luego, al hecho de servirle al público de paño de lágrimas. Un fanático del show, refiriéndose a la calidad psicológica del programa llegó a decir que "los americanos deberían agradecerle a Oprah lo que ha hecho por mejorar la salud mental de mucha gente en el país". Y lo hicieron. El programa ya ha ganado tres Emmy Awards como el show que presta mejor servicio al público. Es así como Oprah ha pasado a ser el objeto de adoración de los norteamericanos que ven en ella una especie de reencarnación bíblica o a un gurú y en última instancia a la versión femenina de Martin Luther King.
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ero también hay quienes
la critican. Cuando aceptó salir con un atractivo reportero de la televisión fue objeto de un chiste grotesco por parte de un conocido locutor de radio y toda la ciudad se enteró: "Omar Shariff está saliendo ahora con Aunt Jemmina" (para ese entonces Oprah pesaba 190 libras). En otra ocasión, trató de usar lentes de contacto verdes, y una mujer blanca la atacó en la calle acusándola de querer pare, cerse a los blancos. Otra vez, cuando decidió cambiar de peinado dejándose los "chicharrones" al natural, recibió cientos de cartas en las cuales la acusaban de estar volviéndose "militante" y de orientar el programa hacia asuntos claramente raciales. "OK, renuncio", dijo Oprah. "Mi gran prejuicio es detestar a la gente que no sabe conjugar bien los verbos. Si una quiere continuar adelante, tiene que hablar bien el inglés". Se refería, desde luego, .a la gente de su propia raza. Cuando la llaman Oreo se enfurece (las galletas Oreo son negras y redondas). Oprah insiste en decir que no ha cambiado con el dinero y la fama, que sigue teniendo los pies firmes sobre la tierra y que lo único que ha variado es que ahora usa zapatos más caros. Nació el 29 de enero de 1954 en Kosciusko, Mississippi. Hija de Vemita Lee y de Vernon Winfrey, Oprah conoció desde muy
Oprah rechaza los libretos de la misma manera que se niega a usar ropa interior
temprana edad la separación y abandono de sus padres para pasar a ser una especie de huérfana criada por la abuela. Cuando todavía era una niña tuvo que regresar a vivir con su madre en Wisconsin donde conoció el miserable, problemático y doloroso mundo que la rodeaba. Fue durante esa temporada que abusaron de ella. Decidida a convertirse en una "malandra", se escapó de la casa a los 13 años y cuando la detuvieron, esposada, para meterla de cabeza en un reformatorio, no pudieron admitirla porque no había suficientes camas para recibir a los nuevos "descarriados" y así fue a parar a la casa de su padre en Nashville. La rígida vigilancia paterna le prohibía salir a ninguna parte. El padre la 'obligaba a leer un libro todos los días y a escribir largos informes sobre cada uno. Oprah se convirtió en una adicta a la lectura, adicción que mantiene hoy en día y por eso gasta grandes sumas de dinero en comprarse docenas de libros a la semana. Después que los lee, compra ejemplares de los que más le gustaron para regalárselos a sus empleados y amigos. Aunque ser reportera de noticias no fue nunca su fuerte, en el trabajo, sin embargo, notaron su sensiblería. Mientras entrevistaba a una mujer que había perdido a sus hijos y su casa en un incendio, Oprah se puso a llorar delante de las cámaras. En Baltimore, trabajó como reportera del noticiero de las 6 de la tarde en la WJZ-TV. Su actuación fue corta. Lucía horrible. Sus jefes quisieron cambiarle la imagen, el maquillaje, la ropa, el peinado, y la mandaron a que se hiciera una permanente que le tumbó todo el pelo. Oprah estuvo calva por un tiempo. La sacaron del noticiero y le dieron una última oportunidad como moderadora del programa matutino "People Are Talking". Allí encontró su verdadero nicho y descubrió su talento hasta que le ofrecieron el programa "AM Chicago". Mientras esperaba su traslado, Oprah se dedicó a comer y a comer. Tenía la enfermedad de los depresivos y de los desesperados. "Si fracaso en Chicago—decíaserá porque estoy gorda". Cuando llegó al programa lo estaba en exceso. "AM Chicago" andaba por el suelo en el rating. Phil Donahue era para ese entonces el niño mimado de la televisión. En menos de un año, Oprah convirtió a "AM Chicago" en el programa más candente de la televisión y para 1985 se le cambió el nombre por el de "The Oprah Winfrey Show". LI~
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Antes que los Estados Unidos cayeran de rodillas ante esta voluminosa mujer de color, ya ella había capturado la atención nacional ganando el Oscar como la mejor actriz de reparto por su papel de Sofía en la película de Steven Spielberg The color purple. Su pasión por las artes escénicas y la de ofrecerle al público programas de calidad, la llevan a crear su propia compañía Harpo Production Inc. (Harpo, o sea Oprah al revés) y es así como se convierte en la única mujer en la televisión americana al mismo tiempo dueña y productora de su propio programa.
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prah Winfrey se levanta todos los días a las 7 de la mañana haga frío o calor, viento o lluvia, caiga nieve o granice. Chicago es una ciudad descampada con un inmenso lago que Oprah saluda al despertar. El portero le trae su Jaguar azul Cabriolé hasta la entrada. Lo compró de contado y ella misma lo maneja porque detesta tener chófer. Llega ala estación a las 8 de la mañana y sólo dispone de una hora para que la peinen y maquillen y pueda tomar un ligero desayuno antes de salir al aire. El programa se trasmite de 9 a 10 ; de 10 a 11 firma autógrafos y hace algunas grabaciones, después viaja hasta Milwaukee para ayudarle a levantar el ánimo a alguna víctima. A las 7:30 regresa a Chicago para hablar en foros a fin de recolectar fondos para los niños abandonados, luego se va a cenar con algunos amigos a su restaurante italiano favorito. Come con la vista únicamente. Su cena es un limón que despacha con cáscara y todo. Después se retira a su casa a leer y a las 11 de la noche ya está metida en la cama.
Los norteamericanos la adoran: es una reencarnación bíblica, un gurú y hasta una versión de Martin Luther King Oprah es bastante conocida por su generosidad. Ha comprado carros, al menos, para tres personas más. Cree que ha gastado más dinero en otros que en sí misma. Para la celebración del quinto año de bodas de su amiga Gayle King, la envió junto con el esposo a pasear por París, Roma y Venecia en Concorde. Cuando 56
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la fue a visitar a Connecticut, la misma Gayle dijo que Oprah se había presentado con un abrigo de pieles valorado en 25.000 dólares, unos tennis adornados con piedritas de colores y una franela roja donde se leía: "Los maridos son por un tiempo, pero los amigos son para siempre". Quebrantadora de todo lo que se imponga como normas rígidas, Oprah rechaza los libretos para realizar sus programas, de la misma manera que se niega a usar ropa interior. "Yo fui criada para ser una sirvienta y para no pensar por mí misma", dice. "Un día mi asistente me hizo esta observación: Oprah, ¡no te has puesto las pantaletas! Parecía mi madrastra chequeándome al salir para ver si había escogido el par de medias adecuado. Cuando pesaba 70 libras tenía que ponerme una faja cada día. Debería de estar prohibido que la gente mirara a través de las faldas. ¿Qué es lo que pueden ver? Nada, la forma de tus piernas, eso es todo. No uso pantaletas ahora y nunca las voy a usar mientras sea una negra", Oprah se rió. Su risa era gutural, se le escapó de la garganta como un ronquido. Oprah es capaz de demostrar una gran paciencia. Firma autógrafos y posa para los fotógrafos hasta que la última persona salga del estudio. Pero hay ciertas cosas que la sacan de quicio: los sicólogos que vienen al programa con las bocas llenas de clichés, las prima-donnas, las preguntas idiotas, el abuso de comerciales y todo lo que se relacione con la brujería. Mujer de una sola pieza, cuya misión es sostenerle la moral al prójimo mientras le ayuda a quitarse de encima la patética imagen de víctima irremediable, una y otra vez la escuchamos decir que "uno es el responsable de su propia vida".
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ero ahora, Oprah tiene
un rival, una especie de toro apocalíptico, un desenfrenado folklórico que está acaparando la atención de millones de televidentes todas las noches, porque las frases que allí se dicen no son como para que las escuchen los niños. El anti-sentimental rival de Oprah Winfrey se llama Mor-
ton Downey
Jr., hombre de varias carreras
en su haber: cantante de rock, político, filántropo, actor, autor, deportista, hombre de negocios y destacada personalidad en radio y televisión. C:11E)
El show de lasgroserú
El programa de Morti a una pelea callejera. Con personaj suburbios de Queens, Brooklyn o Ale
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IS
9n Downey se parece es grotescos de los w Jersey
Morton le toma el pelo a Oprah con su tema Battered women. Para su show utiliza "Hombres golpeados" (Battered men)
ijo de un renombrado tenor irlandés en los tiempos de oro de la radio, y de la actriz Barbara Bennett, Morton Downey Jr. siempre ha estado acompañado de la popularidad. Amigo de infancia de John y Robert Kennedy, se vio metido en la política hasta llegar a ser candidato a la nominación presidencial por el Partido Demócrata. Morton Downey es el único anfitrión de televisión a quien se le permite fumar cigarrillos frente a las cámaras y decir todas las groserías que se le ocurran en el aire. "Fuck you", "ass", "son of a bitch", "dammit", "shit" y otras florecitas más, son frecuentes usos en su lenguaje. "No tengo ningún estilo", insiste. "Yo discuto en los estudios de televisión como lo hago en mi propio cuarto ". En el show de Morton Downey la gente no va a llorar sino a gritar, a insultar, a despotricar con las palabras, a golpear con las frases, a descargar. Otra manera más de hacer terapia. Morton escoge personajes de tipo nervioso y los hace reaccionar manipulándolos con los temas que más los alteren. En la mayoría de los casos, el show parece una pelea callejera y por eso la gente se queda pegada a la pantalla del televisor. Lo grotesco parece ser lo esencial del programa. Los personajes son grotescos, goyescos, casi todos vienen de lOs suburbios de Queens, Brooklyn o New Jersey. uchos se hanpreguntado de dónde sale esa gente. ¿Serán de esa parte no resuelta de Norteamérica, de algunas cavernas no descubiertas aún sino por el mismo Morton, de los camiones estacionados en las bombas de gasolina de algún pueblo entre Atlanta y Rochester? Hombres enormes, panzudos, con tatuajes en los brazos, pelo rubio o negro esmirriado, zapatos de punta, popeyes, brutus, rudos, hombres que están siempre en tensión y al mínimo descuido te dan una patada. Muchos de estos personajes han visitado hospitales siquiátricos por mala conducta, por decir que estaban confundidos o porque nunca han podido comprender las convulsiones sociales. Participando de la audiencia están los adictos a las hamburguesas o a los heros, esos sandwiches enormes que la mayoría de los trabajadores de la construcción engullen de un solo bocado y se los empujan con un litro de cerveza a pico de botella. Estos son los "machos", los tipo Big Mac. Pero no todos son así; como invitados especiales al panel encontramos PhDs, médicos, abogados, filósofos, políticos, sacerdotes, personalidades cuyas ilustradas frases muchas veces se pierden entre el griterío de los otros, de los que quieren decir lo que les gusta o lo que no les gusta. La administración pública o los representantes de la burocracia encuentran en muchas ocasiones a sus grandes detractores entre los asistentes al show. La risa que se desata entre los millones de
televidentes es contagiosa y dolorosa a la vez. Hay que hacer concesiones a su vulgaridad. Pero esta vulgaridad tiene también su parte de frescura y de espontaneidad, que la hacen encantadora en exceso y por eso la gente manifiesta interés por el show, no- por lo que en él se diga sino por las reacciones que desencadena, por lo que de circense tenga el programa. En un comienzo, Morton acostumbraba a llegar vestido de palió y corbata, pero ya en las últimas presentaciones lo hemos visto en mangas de camisa y en otras ocasiones, vistiendo simplemente una franela. En cierta oportunidad, cuando una dama invitada al panel trató de dirigir la discusión, Morton la mandó a callar con un "S hut-up. S i no te portas bien, te voy a mandar a calentar el culo en el Show de Oprah Winfrey como castigo". Los temas que Morton selecciona son impredecibles; casi siempre tienen que ver con problemas actuales pero llevados a extremos tales que van de la hilaridad a lo grotesco, sin perder su jerarquía. Los norteamericanos, dependientes absolutos de la televisión, se debaten entre el llanto y la risa. Lloran en las mañanas con Oprah Winfrey y se retuercen de risa por las noches con el Morton Downey Jr. Show. Si en el programa de Oprah vemos caras donde las lágrimas están siempre a punto de brotar, en el de Morton esas caras se vuelven rojas, la mirada iracunda, la vena del cuello saltona, los gestos estrafalarios, la palabra suelta. Si Oprah escoge como tema "Battered women"(Mujeres golpeadas), Morton decide su programa con "Battered men" (Hombres golpeados), aunque después que uno ha visto la clase de personajes que asisten a su programa, cabe la pregunta: ¿cómo puede una mujer golpear a unos hombres de ese calibre? Pero aquí hay para todo y la vida tiene sorpresas.
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o que hace distinto al show de Morton Downey según él, es que "dice la verdad"; que no le tiene miedo a nada y por eso ataca aunque tenga a alguien muy importante sentado frente a él. Todo el mundo sabe que es un experto en llevar las discusiones hasta el extremo, al detalle. Ir directo al asunto y probar que lo que ha dicho es cierto, ése es su objetivo. De allí que sus mejores invitados al show sean personas que están nerviosas por algo, gente que tiene algo que ocultar. En 1969 Morton arriesgó su vida en • Nigeria durante la guerra de Biafra. Cuando terminó la guerra, regresó y ayudó a recolectar fondos para la construcción de 15 hospitales. Por estos humanitarios esfuerzos, el Papa Pablo VI lo nombró Caballero de la Orden. Hoy en día es moderador del desorden. CEE) Exces0 Marzo 1989 57
La Amazona de fines de siglo tiene sus curvas. Pero para conseguirlas, mientras en el Norte se rellenan las formas, en Venezuela, a contramano, el st por ciento de las mujeres que acuden a un cirujano claman por la reducción de sus pechos
En los quirófanos muchas reproducen la "dolce vita" de Anita Ekbert
Jayne Mansfield: la "Reina del sweater" de los 50 redivida por la moda
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uizás como un presagioso déja-vu del desdén pectoral que ganaría terreno en décadas ulteriores, Alan Parker incluye en su laureada Birdy (distribuida en Venezuela bajo el título de Alas de Libertad) el fílmico testimonio de un ligue frustrado en los años 50: su protagonista, Matthew Modine, mientras palpa la descubierta turgencia de los senos de una adolecente WASP que muy a su pesar y casi sin trámite ha remolcado en una feria condal, exclama con un dejo de decepción: "¡Pero si no son más que unas glándulas mamarias! ¡ Unas enormes glándulas mamarias!". Occidente tomaría muy a pecho esa nada erogenizante definición unos años más tarde. Twiggy, la escuálida modelo británica, borró del estereotipo femenino toda prominencia para compaginar con el devaluado atractivo —por no decir franca repulsión— que inspiraron los grandes senos desde mediados de los épicos 60, una tendencia a la que apenas se enfrentaría el pomo-autor Russ
SENOS
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La Barbie continúa, en su trigésimo aniversario, siendo un curvilíneo patrón para todas las niñas de occidente
Meyer en solitaria rebelión. Las líneas del torso se han hecho exangües, intentarían teorizar algunos sociólogos en épocas de reivindicaciones feministas: bastaría cotejar las más o menos coincidentes preferencias de los años 60 y 70, cuando estrellas pomo como Jane Birkin o Silvia Kristel enseñaban muy moderadas sinuosidades: con las de los 20, un decenio en el que un status idénticamente beligerante de la mujer en la sociedad impuso también un exiguo perfil en su cuerpo. La proximidad del fin de siglo pronuncia de nuevo los escotes. La Amazona de los ochenta, dictaminan las revistas femeninas del Primer Mundo, tienen más múscu-
los, y curvas, que mostrar. Menos que eso no se podía esperar de la mujer de esta década de sudorosos anglicismos: fitness, jogging, body shaping, workout. Pero este retomo de los bultos en el pecho tiene sus matices, pues no se procuran réplicas de aquellas ostentosas Jayne Mansfield o Anita Ekbert de treinta años atrás. De lo que se trata, con mayor precisión, es de moldear un cuerpo que, por una parte, refute los vestigios de androginia que puedan restar desde el decenio anterior y los albores del presente, malhadado imperio del unisex; pero que, a la vez, no vibre alocadamente con interminables ondulaciones adiposas en cada movimiento. Esto no sólo exige
AL BISTURI
1f
e procura un volumen, sí, pero no como Jayne Mansfield; más bien, como la Barbie"
ciento de la muestra. Una proporción que no tiene que variar más al sur, en latitudes caribeñas (y venezolanas). Tanto aquí como allá, ¿qué recurso quedaba para redimir tantos torsos deshauciados de por vida? En los quirófanos resplandecía la esperanza. Durante el último lustro se ha registrado un boom (que aún no muestra señales de retracción) de la mamoplastia o restauración quirúrgica de los senos. Las es-
tentrionales la corrección más usual es la del aumento, en Venezuela se ha desatado la moda de la reducción del busto. Según guarismos oficiosos manejados por el gremio correspondiente, el 80 por ciento de las pacientes (¿o clientes?) venezolanas que acuden a un consultorio médico especializado para explorar la posibilidad de alterar sus pechos, claman por un achicamiento.
CEC IL BE ATON
Habrá hasta quien haya protagonizado oníricas poluciones nocturnas con la pechugona mujer de Roger Rabbit; pero el paradigma de los 80 fumea por los lados de Madonna Ciccone: unos senos sólidos y armoniosos, sin desmesuras ni gelatinosas revelaSe atenúa la voluptuosidad tropical para tener especímenes como Ruddy Rodríguz ciones que la pudieran delatar en saltarines pasos de un buen funky. En Venezuela, a nadie se le hubiera ocurrido bautizar Niña Bonita a la chata Gigi Zancheta ni a Lila Morillo, blandiendo como Afrodita (la consorte robótica de Mazinger Z) dos misiles a punto de despegar del pecho. No; la Niña Bonita habría de ser la proz 8 pia Ruddy Rodríguez, lozana contrafigura de James Bond con unas curvas macizas y algo más El paseo de Brigitte Nielsen por playas venezolanas habría desatado la fiebre modeladora de senos parcas que las del arquetipo tropical. En resumen: menos Celia tadísticas norteamericanas son Cruz y más Florence Griffith Las turgencias de Marilyn Monroe dominaron la última era de furor pectoral: los '50 representativas al revelar que en Joyner. unos músculos templados sino 1986, por ejemplo, se efectuaron La actual veneración del tg además, en aras de la proporcioara la mujer de los 80 en los Estados Unidos 159.300 cuerpo atlético se enfunda en nalidad, unos senos "firmes, reperfilar sus senos a la intervenciones de reconstitución ceñidas mallas de lycra y franelidondos, perfectos", como una medida es un símbolo de mamaria, contra menos de 67.000 llas de algodón, prendas, ambas, revista neoyorquina quiso resumir. que, en promedio, se practicaron que poco favorecen ciertos rebotes status" Un volumen, sí, pero no como anualmente (y durante la década adiposos que desde las recónditas Jane Russell o ni siquiera como la encuesta entre sus lectoras para de los 70) de cirugía plástica famiasmas de la venezolanidad surMonroe; más bien, como Barbie, encontrar que, al menos dentro de cial. gen para regocijo de los especiala novia eterna del Kent. ese bien delimitado universo, Lo notable es que la unanimilistas: "aquí la raza negra es domicerca de un 25 por ciento de las dad vertical se agota allí, en este nante", teoriza un exitoso noLas nuevas exigencias to- interrogadas se mostraban incon- caso, para dar paso a la más tradiminado entre los top ten de la pográficas fuerzan, sin embargo, formes con el tamaño y/o la forma cional contraposición norte-sur. cirugía plástica, sumergiéndose en nuevas compulsiones. La natude su busto ; en 1986 la publica- Por razones raciales, culturales o aguas de la antropología empírica raleza, en ese renglón mamario, ción repitió la encuesta, corrobo- qué diablos, en el mundo indusdesde una poltrona en su centro de no suele ser muy equitativa: en rando por esa vía que el segmento trializado y en la periferia austral operaciones de Caurimare. "De 1973 la revista estadounidense de mujeres insatisfechas con sus se manifiestan tendencias enconallí que el problema más común Psychology Today condujo una pechos escalaba hasta el 32 por tradas. Y si en las metrópolis sepsea la hipertrofia".
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"Una chica puede
exigir, por ejemplo, atenuar unos agresivos 36C hasta unos más modestos 32A" 1 molde es el mismo de los patrones mundiales; pero por culpa de Cumboto lo que en el exterior se conoce como el Retorno de los Grandes Senos viene a ser en estas riberas la Noche de los Cuchillos Largos. La huella perenne es tan profunda que se citan casos de teenagers que buscan alivio definitivo a sus complejos en la mesa de operaciones. Y es un hito en la barra de cirujanos el descomunal deslastre experimentado por la niña de 13 años a la que se le extrajeron en una clínica del Este nueve kilos de grasa; una intervención que descendería al renglón de lo meramente anecdótico si se considerara el riesgo que entraña el ciclo normal de crecimiento de las mamas, que se prolonga hasta los 21 años de edad.
fiebre que cunde: para la mujer de los ochenta (esa que las cuñas de toallas sanitarias y productos dietéticos llaman de acción) representa un símbolo de status, evidencia irrefutable de autonomía, el perfilar sus senos a la medida. Por ejemplo, atenuar unos agresivos 36C hasta unos más modestos 32A, un código métrico que, por cierto, los cirujanos han
tenor de cientos de operaciones conoce al dedillo la exacta relación entre las dimensiones del busto, tórax y tronco, "lo han pensado durante dos o tres años. Generalmente ya traen una decisión". Ni siquiera las tarifas despiertan tardías renuencias: entre los 8.000 y 50.000 bolívares por intervención, cantidades que la mayoría de las pacientes, niñasbien, jóvenes profesionales o amas de casa (muchas veces con un hijo) hundidas en la letal rutina de los hogares de clase media, aceptan costear sin que se les agüe el ojo. Ninguna, prácticamente, deja pasar el carrousel del bisturí.
Sólo cuando era una teenagerMadonna mostró sin tapujos el busto paradigma de los 80
En la fotografía de la posguerra se reproduce el parco perfil de la mujer recién incorporada a la producción
"Las líneas dei torso han
operaciones realizadas. "Somos como artistas", valoriza su mano de obra el cirujano.
sido exiguas en épocas de reivindicaciones femeninas; pero ahora se pronuncian de nuevo los escotes" as incisiones reductoras apuntan a la zona del pezón, dejando a veces una cicatriz que puede cubrir unos dos centímetros de ancho, sólo equiparables a los surcos arados en la psique de las pacientes por las embestidas del bisturí. Cerca del 30 al 40 por ciento han de retornar al quirófano para el retoque. Pero a veces, cada puntada es un argumento más para que la operada idealice su relación con el médico; y la consulta psiquiátrica es una de las alternativas prescritas con mayor frecuencia. Estas dificultades en corta medida han cohibido la 60 Exces0 Marzo 1989
afluencia de candidatas a las clínicas del ramo sustenta la creación de una verdadera casta médica que, como luminarias de las páginas sociales, tiene acceso a las fiestas de la high. Sus honorarios, pingües pero variables, se rigen por un estricto escalafón que preconiza el ascenso de categoría (y, paralelamente, de tarifas) cada 30
En el contorno de la pechugona Jessica Rabbit, Spielberg dibuja la obsesión femenina
Twiggy aplanó el arquetipo femenino hace veinte años
asimilado de entre los encajes de la ropa íntima. El dictamen de la época se inflexibiliza en Venezuela: su rigidez execra de los lugares comunes el arrepentimiento entre las nacionales. "Quienes vienen aquí", sigue el testimonio del médico, virtual artesano que al
Contraste flagrante con los surveys escandinavos que indican que un tercio de las suecas deciden no proceder tras enterarse, en el consultorio, de las probables complicaciones postoperatorias que pudieran presentarse. La carnicería ha tenido sus recompensas. En los Estados Unidos, las reparaciones mamarias se traducen en una industria de 300 millones de dólares anuales. Y en Venezuela, aunque por reglamentaciones gremiales está limitada su promoción, la
a visita de Brigitte Nielsen, elucubran algunos, catalizó con su ejemplo la explosión local de la demanda quirúrgica modeladora de los senos. Una demanda que podría ser canalizada como en la ciudad norteamericana de Nashville, Tennessee, donde la estación de radio WYHY-FM premiaba a las participantes de un programa de concursos con una mamoplastia; quizás una nueva versión de La Estrella de la Fortuna, pero eso sí, con Nury Flores como animadora, pudiera ser una convincente respuesta venezolana. CM>
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La belleza, petróleo humano de las últimas décadas, ha orientado con insistencia la brújula social de la Venezuela moderna. María AntonietaCámpoli, como nad ie antes en el período democrático, e inaugurando así una senda inédita en la maraña de la sociedad criolla, encarna la súbita consagración de una desconocida. El tenaz y voluntarioso esfuerzo por no perder más tarde los dones del milagro, signará la historia de una mujer que se hizo grande siendo todavía una niña. Bruscamente lanzada a la luz pública a los 16 años, guiada por su padre, supo mantenerse en un plano de notoriedad hasta que entró en la adultez y decidió seguir enganchada, a cualquier precio, al tren del poder y de la fama. María Antonieta Cámpoli , voz grave, sedosa y nocturna, cuerpo marcado por una intemporal sinuosidad, abrió los ojos en una pequeña isla de la provincia de Frosinone, al sur de Roma: Isola del Liri. Bajo la luz del trópico, sin embargo, espigó el portento que le reconocieron los miembros del concurso Miss Venezuela en 1972. Su triunfo, y por ende, la entrada en los acolchados jardines de la gloria local, se vieron envueltos de inmediato en las fumarolas del escándalo. Su edad y verdadera patria fueron puestas en cuestión. Un debut predestinado, en cierta forma, pues la sui generis carrera de la reina de belleza se ha visto, desde entonces, periódicamente expuesta al descrédito. Falsos o ciertos, los rumores le han atribuido un rol de personaje fronterizo que desdibujaría una luciferina luz de zarzuela vernácula. Gran anfitriona de hombres de fortuna, políticos y la jet-set society criolla cuando estuvo casada con Michael Bierlein, representante de firmas extranjeras en Venezuela, pasó antes por las pantallas de televisión -en el programa "Cuéntame ese chiste" y en alguna telenovela donde encarnó su propio personaje-, el cine nativo -en El vividor- y los escenarios de la comedia ligera -bajo la dirección de Jorge Palacios-. Gran figurante a lo largo de más de dos décadas, se la ha visto siempre,desde que la lotería de un concurso -combinada con la madre naturaleza- la impuso al ojo y la simpatía de los venezolanos, ocupar un puesto notorio ante las candilejas que iluminan la danza de los poderosos. Esa vecindad, apoyada en algunos infelices sucesos-como el reciente asalto al apartamento donde vivía con su novio Alejandro, una maleta de joyas valoradas en 0 11 millones de bolívares y un pequeño arsenal
que incluía una ametralladora Uzi— han terminado por configurar la semblanza de una mujer que se hizo pública a los 16 años. Hoy por hoy, cuando calza la irruborizable edad de Cristo, sigue respirando una sensualidad de bestia encerrada y, además de ayudar a un padre jubilado y a su novio en los negocios de representación, después de haber mantenido durante tres años una columna en el diario El Universal, puede ufanarse de ser dueña del Majesty, que muchos consideran el mejor restaurante de Caracas.
— Tengo la impresión de que naciste dos veces. — ¿Por qué lo dices? — Porque me parece que tu reinado fue una especie de nacimiento. — Tienes razón. Entrar en la vida pública es como comenzar una vida. — Eso fue a muy temprana edad. — Tenía 16 años y en realidad creo que no es una edad para entrar en la vida pública. Más que todo saliendo de una familia italiana conservadora como la mía, donde la primera en divorciarse, en toda la historia de la familia, tanto por el lado de mi madre como de mi padre, soy yo. Lo que no es nada raro ni malo. Pero, bueno, soy la primera. —Tu reinado fue un acontecimiento nacional. Se le hizo mucha bulla. — Bueno, eso lo hizo en realidad la gente, el público. No fui yo, sino el mismo público que vio en mí una mujer diferente, una niña con cuerpo de mujer. Eso pasó también en Estados Unidos con Marilyn Monroe. No es que me quiera comparar, pero al parecer a la gente le gusta esa combinación de infantilismo y exuberancia en un cuerpo de mujer. Para mí, tuvo que ser eso lo que impactó. No estaba preparado ni nada por el estilo, porque tenía 16 años y más boba que yo, no estúpida, más inocente que yo no había otra. También la época, hace 16 años Venezuela no era la misma que ahora. Para salir, a una tenían que venir a bucarla a la casa y volver antes de las 10:30 de la noche. Las discotecas no existían... Aquello para mí fue muy fuerte porque me sacaron del colegio en medias tobilleras, me pusieron tacones, peluquines, pestañas postizas, vestidos costosos. Tenía que actuar de cierta manera que me imponían, Q!
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"Decía mi papá que todas las grandes actrices habían tenido que pasar por eso (el desnudo), hasta Sophía Loren" que no era yo. Sonreír aunque no quisiera o estuviera triste. ¿ Quién te descubrió para el concurso de Miss Venezuela? — Pues mira, yo me escapaba de mi casa todas las tardes aprovechando que mi mamá daba clases particulares de italiano. Vivíamos en Colinas de Bello Monte, donde siguen viviendo mis padres, más arriba de Maxy's, la antigua Sears, y desde allí me iba caminando hasta Chacaíto, el centro comercial que estaba de moda en aquel momento. Ahí estaba el Drugstore y las minitiendas y en una de ellas, Mini-Punky, donde yo compraba ropa, trabajaba una amiga de mi mamá, Ana Folli. La tienda era de Antonieta Scannone y Alfredo Beracasa. Una tarde -recuerdo que mi mamá había regresado de Italia y me había traído unas botas altas, que estaban de moda y una falda y una camisa de camuflaje, de estilo militar-, Ana les dijo a Osmel Sousa que estaba decorando la vitrina, y a Antonieta: "Miren, esta es la muchacha que les quería presentar para el concurso". Ellos me vieron y ahí mismo dijeron: "Sí, está bien, vamos a meterla ya". Me mandaron al Hilton donde Margot Domínguez, que era la relacionista pública del hotel, pero también estaba vinculada con el Miss Venezuela. Me le presenté a Margot Domínguez y me dijo: "Perfecto, me parece increíble". Pero yo le respondí: "Mire, me parece que no va a poder ser, porque mis padres no van a aceptar". Yo estaba en verdad muy asustada. "Vete tranquila para tu casa, que nosotros los llamamos". Y en la noche cuando llamaron por teléfono, mi padre me dijo: "¿Qué hacías tú en Chacaíto?" y no sé qué más. Bueno, se descubrió todo. Entonces' estuvieron pensándolo dos semanas yen realidad me dieron a escoger entre dos opciones: entrar al concurso o bien — y tenían una cantidad limitada de plata para eso: unos 60.000 bolívares en el banco— man—
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darme a Suiza. Pero mi mamá dijo: "Yo prefiero meterla en el concurso". Entonces yo —para mí era algo de Alicia en el País de las Maravillas— dije: "Bueno, métanme en el concurso". — ¿Qué le atraía en el concurso? Una Miss discutida, pero sólo en los papeles, que se modificaron alegremente — No sé, tal vez como todos los años se veía el concurso en la televisión y a mi mamá le fascinaba... Mi mamá fue una mujer muy bella y en Roma, cuando era joven, la llamaron para ser actriz o modelo, sinónimos de mala vida en aquella época, por lo que no la dejaron. Así que a través de mí, ella quiso tal vez realizar el sueño de tener una hija reina del país. Mi En 1972, Marfa Antonieta con su abuelo Julio Prisco. papá al principio estuvo El padre, Luis Cámpoli, en Salerno, 1952. en contra, pero después, cuando gané, fue la persona que v iajó conmigo, que estuvo siempre ami lado. Gran parte de la popularidad que he tenido se la debo a mi papá que fue mi relacionista público. El me decía lo que debía hacer. ¿ Te sentías explotada por tus padres? — No, jamás me han usado. Hoy en día, a los 33 años, me hubiera gustado que me hubieran usado. En realidad no es la palabra, Nací en un pequeño pueblo entre Roma usar: me hubiera gustado sacarle un mayor y Nápoles, en la provincia de Frosinone provecho a esa popularidad que tuve y que no en el Lazio. Es una ciudad muy antigua, una pequeña isla de unos 300.000 habitanaproveché para nada. tes: I sola del Liri. Mi familia ha estado allí — ¿Cómo te hubiera gustado que te usaran? por generaciones. El gentilicio en italiano — Con mayor viveza. Se me presentaron es ciociara porque allí fabrican unas sanoportunidades que hubieran sido importantes dalias, equivalentes a las alpargatas de desde el punto de vista monetario. acá. A la región se la conoce como — Como por ejemplo... Ciociara. Me considero venezolana. No siento nostalgia por mi país natal. Nací el — Tú sabes, cuando una es atractiva, 9 de octubre de 1955, a las 8 de la noche, tiene la posibilidad de estar cerca de persoen un pequeño edificio donde vivía mi nalidades a todo nivel. Puedes pedir lo abuelo, cerca de la plaza principal del que quieras. Pero yo jamás pedí, porque —
HIJA DEL LAZIO
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en mi familia se consideraba feo pedir. — ¿ Ya ti tampoco te pedían nada esos personajes importantes? — No directamente, pero se mostraban interesados...una mujer pública, una miss...tiene como un tatuaje de mujer fácil. Equivocadamente, porque, como a cualquier otro nivel, una se entrega o no, si lo desea, y punto. —Dame los nombres de esas personas que te pasaron por el frente sin que les pudieras sacar ningún provecho. Presidentes... —
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1982, en la playa. María Antonieta se adora, pero todavía estaba casada.
"Mi mamá era una belleza", dice María Antonieta. La foto de Maria Luisa Cámpoli es de 1958, en hola de Liri, Italia.
pueblo, bajo los auspicios de la farándula. Esa noche había una fiesta de la U nitá con artistas del Festival de San Remo. El médico, también de apellido Campoli, predijo que cuando fuera grande seguramente sería una artista. Era un edificio de cuatro pisos y escalera de caracol, como en las películas de misterio. Abajo quedaban unos locales que mi abuelo alquilaba. Un estanco de tabaco, entre otros. Yo bajaba a buscarle cigarrillos a mi papá y me quedaba parada esperando hasta que la vendedora me regalara un caramelo o un chocolate. Lafamilia de mi mamá se vino a Venezuela. Nos embarcamos tiempo después en el Marco Polo. Me la pasaba en cubierta bailando Hulahup. Fui la sensación del barco. Hasta el capitán reparó en mí" .
Haz memoria...
— Es que son tantos...Mira, por ejemplo en el plano de las cuñas de televisión...las grandes compañías quisieron tenerme a mí. Una marca de modess me ofreció un contrato muy bueno. Llegué ami casa y les dije a mis padres que me estaban ofreciendo salir durante un año haciendo la propaganda de Stay Free y que me pagaban muy bien. A lo que ellos me contestaron que no, que cómo iba a salir haciendo una propaganda de modess, que eso era imposible. Y cosas así... La gente de Playboy me ofreció por la portada, en bikini y sin aparecer desnuda adentro, 25.000 dólares y no los acepté porque mis padres dijeron que no podía salir en la portada de Playboy. Cuando estuve en Roma entrevistándome con el hijo de...cómo se llama ese gran productor...ahora no me viene el nombre...me acompañaba mi papá, cuando me dijo desnúdese para ver su cuerpo, porque usted va a salir desnuda en una escena de amor, yo le respondí que no, que en realidad no había venido para eso. Porque me veían como una Lolita, en lugar de verme como una actriz capaz de jugar cualquier papel: de vieja, de una mujer de la vida, de barrendera o hasta de loca. Sólo les interesaba el sexo. Por eso no acepté tampoco. ¿No aceptaste por propia decisión o fue nuevamente tu papá? - El que se acuerda de todos los detalles es mi papá. A mi lado estaba sentada Carla Gravina. Y mi papá me decía: tú sabes lo que es estar en Roma en esta agencia, Johnson & Johnson, adonde iban los mejores actores. Y yo había dicho que no. — En ese caso tu papá sí quería que entraras en la carrera cinematográfica, aún a expensas del desnudo. — Aún a expensas del desnudo, porque decía mi papá que todas las grandes actrices habían tenido que pasar por lo mismo. Hasta —
Sofía Loren que durante toda su vida se ha portado como una mujer seria, se tuvo que someter a algún desnudo cinematográfico. Pero el señor me dijo, además, que yo tendría que cambiar mi nacionalidad. Y yo había tenido ese problema aquí, en el concurso. Habían dicho que yo era italiana. — El asunto de la nacionalidad quedó claro. Pero tú no tenías la edad requerida para el concurso. A mí Delgado Chapellín me falsificó el pasaporte para ir a Puerto Rico. Me puso 18 años. —
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Delgado Chapellín...
— Era el director de la DIEX en aquel momento, de identificación... ¿ Y quién era presidente? — El presidente era Caldera. —
"A mí Delgado Chapellín me falsificó el pasaporte para ir a Puerto Rico. Me puso 18 años" — Delgado Chapellín, el mismo que está ahora en el... — Consejo Supremo Electoral. — ¿Delgado Chapellín te falsificó el pasaporte para ir a Puerto Rico? — Sí...Junto al Canciller, que en ese momento era, si no me equivoco, el hermano del Cardenal Lebrún. — El tuyo fue, entonces, un reinado de contrabando. —Se puede llamar así...En realidad siempre me he sentido venezolana, porque vine aquí cuando tenía dos años y para mí Italia nunca existió. —No, pero yo me refiero a lo de la edad. No tenías la edad reglamentaria. —Bueno, eso sí. Habrían tenido que esperar dos años más y hubiera sido mucho mejor. — ¿Y hoy en día tus padres siguen creyendo que era lo correcto? — Sí. ¿No están arrepentidos? — No. De verdad, creo que ellos aparte de admiración, es orgullo, es algo muy especial lo plim.» —
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que sienten conmigo. No sé si por ser la primera hija y porque les he dado muchas satisfacciones, así como muchas mortificaciones.
Chacaito:eterno retorna La niña María Antonieta, se acuerda la Cámpoli en plena profiláctica mudanza (luego del asalto del año pasado), se convirtió en reina y se hizo bachiller, antes de volar a Puerto Rico, en pos de un finalmente frustado
— Con Michael Bierlein, un alemán, el esposo de Minouche. ¿Te acuerdas de la famosa Minouche de Chacaíto, que tenía la tienda cerca de El Papagayo y su mamá la peluquería del hotel Tamanaco? — ¿Cómo se conocieron ustedes? — Una noche llamó Minouche a mi casa y le dijo a mi mamá: "Señora Cámpoli, quiero invitar a su hija a salir con un gran amigo de mi esposo, dueño de un canal de televisión en Alemania". "Sí, cómo no, le contestó mi mamá, pero Antonieta tiene un cocktail en el Palacio de las Industrias, ahí cerca de la Plaza Vene-
momento yo tenía 17 años. No noté que el esposo de Minouche estaba como muy pendiente de mí, con todo tipo de galanterías delante de su esposa. A esa edad una no sabe en realidad cómo interpretarlas. Bueno, y pasó. Como al año, llegó a nuestra casa una mujer motorizada con una cajita que le entrega a mi mamá. Yo estaba en el teatro. Cuando regresé de la obra mi mamá me cuenta que había venido una motorizada y me da la cajita, la abrí y era una de esas pulseras de oro de tomillos de. Cartier que se estaban usando, pero no decía quién la había enviado. Yo le dije: qué raro...Yo
El tren del poder y la fama tentó más de una vez a María Antonieta, aunque en ocasiones hubo descarrilamientos. Pero mantiene su imagen de pasajera en clase especial.
cetro de Miss Universo. La universidad, en Ciencias Políticas, le concedió un año de paciencia. Los noviazgos, el primer amante: Luis Felipe Herrera, que la desfloró en una casa de Los Campitos, la televisión, el cine y el teatro fueron el preludio del segundo largo, rutilante y penoso acto de su existencia. Igual que el primero, con una obstinación de sino, el drama se inicia en Chacaíto. — Sí. Después cuando regresé, a los 18 años, entré a la UCV y luego me casé. — ¿Con quién te casaste? 66
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zuela". "Bueno, está bien, nosotros la vamos a buscar allá". Fui a aquel acto con mi papá y cuando venía saliendo con mis ramos de flores, estaban frente a la puerta Minouche, el esposo y otro señor. Nos presentamos, despedí a mi papá y nos fuimos a un sitio en La Castellana que se llamaba el Kissing Her. En aquel momento yo no hablaba inglés y el señor en cuestión sólo hablaba inglés. Era un tipo muy atractivo, de verdad que me impactó. El esposo de Minouche, que después fue mi marido, también era un tipo atractivísimo. En aquel
había terminado con Luis Felipe Herrera que había sido mi novio durante dos años y no estaba saliendo con nadie. Me extrañó, pero me la puse porque me fascinaba y no la hubiera podido comprar porque era muy cara. Al día siguiente me llama Michael Bierlein y me pregunta: "¿Te gustó la pulsera?" Le digo: "Ah señor...¿cómo está? Qué raro que usted siendo un hombre casado, me haya enviado este regalo". Entonces me dice: "No, es que me voy a divorciar por ti". Le dije: "Bueno, ese no es mi problema. No quiero conflictos
con su esposa porque yo la conozco. Gracias y hasta luego". Cuando se lo conté ami mamá, agarró la pulsera y se fue a entregársela a Minuoche a Chacaíto. En el camino se tropieza con Laura, la dueña de Ponte Vecchio, la cuñada de Minouche, que le dice: "Sra. Cámpoli, no haga eso. Usted va a armar un escándalo. Ellos están casados y se adoran. El es un hombre de muy buena familia. Minouche siempre dice que no sabe cómo encontró a un hombre tan fino, tan bueno y tan guapo". "Eso a mí no me interesa", le respondió mi mamá, "a mi hija no le van a hacer eso de enviarle un hombre casado una pulsera". Mi mamá se fue hasta donde trabajaba Michael y se encontró con el socio que la botó de la oficina. Total: andaba con esa pulsera para arriba y para abajo. Yo le dije: bueno qué se va a hacer, ya la mandó. Pasó cierto tiempo. Michael se separó, la hermana llegó de Alemania, se mudó a vivir con él a El Cafetal y fue en casa de Muni Guevara, en una fiesta, en la que él se presentó con su hermana. Cuando yo iba para el baño, la hermana se me acercó y me dijo: "Mira, tú le gustas mucho a Michael. Por favor, me gustaría que saliéramos juntos". "Bueno, no me interesa". Pero fue tal el hostigamiento de ese hombre que un día salimos juntos. Por cierto en el carro venía conmigo mi hermana Gladys. Estábamos en el Tolón tomándonos algo (Gladys tenía 13 años y yo 18 para 19). El me dijo: "Antonieta, me gustas, me quiero casar contigo..." "Pero por qué no te quedas con tu vieja", le respondí, "y me dejas en paz". No sé si fueron los maltratos. Me perseguía, me hacía obsequios y lentamente se me fue metiendo dentro hasta que me enamoró y caí en sus redes.
Unidos, le quitamos las firmas, pusimos las nuestras y nos fuimos de viaje a Estados Unidos. Hicimos un viaje a New York. Nos mudamos juntos. Pasó año y medio hasta que le salió el divorcio y nos casamos por el civil y más adelante por la iglesia en El Hatillo. — ¿Dónde vivían?
— Primero en Chulavista, en las residencias Palmarita. Después en una casa de La Lagunita, cuando me casé por la iglesia. Estuvimos casados 10 años que terminaron una noche de octubre, en una fiesta, en el Member' s. El 9 de octubre del 85. — ¿Eso incluyendo los dos años de falso matrimonio?
— Claro. — Ocho años de matrimonio oficial y dos falsos...
— Bueno, 10 años son dos presidencias. Pasan muchas cosas. La de Carlos Andrés,
siguiera gastando tanto. La planta no se pudo concretar. Se perdió todo, después se pudo más o menos mantener con la ayuda de mis padres... — ¿La fábrica o el matrimonio?
— No, nuestra casa, la fábrica, nuestras vidas, con la ayuda de mi mamá y de su papá, y con la ayuda de Ladislao Blatnik, que murió. Vivíamos en una total inseguridad, que si la Corporación puede venir a embargarnos, que nos van a quitar la casa. Y yo con mis tres o cuatro joyas que me había regalado Michael, empeñándolas aquí y allá. Yo me decía a mí misma: quiero salir de esto, quiero tranquilidad. Encima él no podía tener hijos, se había operado antes de conocerme. — ¿Por fin qué pasó?
— Fue tanta la presión y la angustia que pasé, junto con mi familia, por mantener esa posición, que se desmoronó el amor. Cuando me divorcié le dije que si hubiera tenido aunque fuera un poco de éxito..., porque no soy ambiciosa (para eso me habría casado con un hombre de dinero sin importarme el amor). Me importa más querer a la persona que su plata. Si hubiera podido tener una mayor estabilidad y por lo menos un hijo con él, no creo que me hubiera divorciado. Pero esa zozobra, esos años de correcorre, buscando dinero, echaron a perder todo...
"Me voy a divorciar por ti", le dijo Michael Bierlein y cumplió: abandonó a Minouche y se casó con María Antonieta, pero mediante un acta de matrimonio falsa
— Terminó gustándote.
— Me gustó de todas las formas. Estuve muy enamorada de Michael. — Habías empezado a trabajar en una telenovela donde hacías...
— El rol de mi vida... — Te ganabas la vida, pero seguías viviendo donde tus padres.
— Para salir de mi casa y estar con él inventamos eso del acta matrimonial. El tenía que esperar que se cumpliera la separación legal para divorciarse. De lo contrario hubiera sido bígamo. Tomó el acta de matrimonio de su socio, que se había casado en los Estados
— ¿Eras tú quien buscaba el dinero?
casi terminando, después vino Luis Herrera y dos años de Jaime Lusinchi. O sea, fueron tres presidencias. — ¿Por qué fracasó tu matrimonio?
— Te voy a decir, él hubiera sido el hombre perfecto para mí porque era un hombre de cierta categoría, de clase, de mundo, trabajador. — ¿En qué trabajaba?
— Vino a Venezuela a través de una empresa de maquinaria gráfica y tuvo mucho éxito. Después se separó, pidió un préstamo a la Corporación Venezolana de Fomento por 18.000.000 de bolívares y montó una planta de prefabricados que para su momento era la más moderna del país. Se gastó todo en montar la planta trayéndose técnicos suizos y alemanes. Le gustaba vivir bien, a la fábrica había que ir en helicóptero, se trajo un Mercedes, nos mudamos a La Lagunita. Yo era joven y no pensaba en el ahorro ni en decirle que no
— No, en realidad jamás busqué el dinero. La única vez fue cuando se lo pedí a mis padres. — ¿Dónde empeñaste las joyas?
— En la Caja Popular, detrás de las Torres. — ¿Ibas en el Mercedes Benz? — Sí, me llevaba el chofer. — ¿Qué joyas llevabas? — Bueno, brillantes, esmeraldas, pulseras que me había comprado Michael donde Luisa Guardia, en el Paseo Las Mercedes. No podíamos hipotecar la casa porque no se había pagado todavía. Yo empeñé mis joyas para pagar a los obreros de la fábrica. — ¿Qué pasó con las joyas? — Tres veces las empeñé y tres veces las recuperé. Después una parte se la di a Ladislao Blatnik en prenda por el millón que le había prestado a Michael. Cuando murió, Blanca me las mandó de vuelta y cuando las tenía I:~
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todas otra vez, me las robaron. ¿Estaban aseguradas? No, las tenía en unas maleticas plateadas de combinación. ¿Con qué las iba a asegurar? —
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17.r-dé-
Una mujer de arma mar Una soltería codiciada, la divorcée María Antonieta Cámpoli se señala por la frecuentación abierta de los hombres más destacados en el gobierno del presidente Jaime Lusinchi. La ciudad extrovertida y noctámbula da testimonio de las cenas con el ministro José Angel Ciliberto, de las descomedidas invitaciones del gobernador Miguel Angel Contreras Laguado y hasta de alguna parranda nocturna, en algún célebre night club donde el titular de Hacienda hace caso omiso del espectáculo en escena, disfrutando al favor de la oscuridad, de la contemplación de los atributos de la ex reina que se ríe con su perfecta y ebúrnea dentadura de los chistes de un cómico de la televisión y del cosquilleo de las miradas del jerarca entusiasmado. Las fiestas, sin embargo, escriben su post facio en la letra minúscula de la resaca. Un asalto, justo cuando el doble despecho de un divorcio y un nuevo abandono han recibido consuelo en la consolidación del Majesty, luego de un período de incertidumbre, y en un nuevo amor con el medio hermano de Michael, seis años menor que ella, un robo vil, de un siniestro empujón a la hora de la última campanada, la convierte, de la noche a la mañana, en una mujer sometida a juicio. ¿Cómo fue el robo? — Creo que eso fue preparado. Me mandaron a robar las joyas para que yo me quedara sin nada, porque ese era mi único capital. El armamento...en realidad aquí todo el mundo tiene armas. Yo he estado viendo pistolas desde que me casé con Michael . Nunca pensé que fuera a repercutir creándome tantos problemas. La idea fue quitarme lo que tenía y meterme en un lío. —¿Quién tendría interés en causarte tanto daño? — Ojalá lo supiera. Cuando lea esta entrevista dirá: tiene razón. No sé, a veces el peor enemigo es tu mejor amigo. — ¿Qué hacía, me pregunto de todas maneras, una mujer como tú con una ametralladora en su casa? —Cuando nos divorciamos, como Michael -
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Ella se asombra: ¿Por qué me quitaron mi pequeña arma Calibre 22 ?
vende esas cosas, representa compañías internacionales y suministra a los militares, igual que mucha otra gente, me la dejó. No me parece nada malo. Igual que mi excuñado, Michael trabajaba en eso. — ¿Quién era tu excuñado? — Ladislao Blatnik. Cuando se fue Ladislao dejó con nosotros esas armas. Ni siquiera están usadas. Ahora, la chiquitica , la 22, ¿por qué no la puedo usar? Una 22 de mujer. Yo tenía mi carnet. — ¿De porte de armas? — La metralleta, está bien, pero nunca la he usado. Se les fue la mano, sabiendo quién soy. No soy una mujer que se esconde, ni soy guerrillera. Me dolió la interpretación de los
EL ZAPATERO PRODIGIOSO
antes representaba Ladislao. Viendo el boom de Ladislao, vendiendo toda clase de equipos a los militares, él también se quiso meter en el negocio. — ¿O sea que en cierta forma se convirtió en competidor de Ladislao Blatnik? — Ladislao quería asociarlo, pero Michael le respondió que prefería estar solo. A mí me pareció una estupidez. Me hubiera gustado que permaneciera junto a Ladislao. — Pero Ladislao era el representante de la Steyr Deimler Puch. — Sí, pero acuérdate que Ladislao tuvo que irse del país y la representación se quedó en el aire y Michael la tomó. Michael se fue a Austria y se la quitó. Ladislao le había abierto
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Ladislao Blatnik, venezolano de origen yugoslavo, propietario de la firma William Shoes, acaparó los titulares de la prensa en por lo menos dos ocasiones. En 1965 su romance, de intenciones matrimoniales por fin abortadas, con la deleitable y trágica actriz de Hollywood Natalie Wood, le valió el asedio constante de los periódicos más importantes del país. Pasados 21 años, su nombre volvió a aparecer mencionado con insistencia en los diarios. Esta vez, en las páginas de sucesos y a propósito del auto de detención dictado a dos ex ministros, los generales Tomás Abreu Rescaniere y Luis jueces. Porque María Antonieta Cámpoli es conocida. Me pareció absurdo que llevaran las cosas hasta el extremo de dictarme sometimiento a juicio. No creo que me lo merezca. — ¿Cuál era la acusación? — Porte ilícito de armas. — ¿ Y en qué ha parado el asunto? — Tengo sometimiento a juicio por dos años. Cada dos meses tengo que presentarme donde la juez y cada dos meses, ahí en La Candelaria, donde van los malandros, me preguntan: "¿Cómo te sientes? ¿Cómo estás viviendo?" Hacerme llegar a eso, por un arma que nunca usé. — Pero por lo que me acabas de decir, tu esposo, además de los prefabricados, se ocupaba de la venta de armas... — El representaba y representa a la Styer Deimler Puch de Austria, una compañía grandísima. Una empresa muy conocida que
pobreza y en la bonanza. Cuando se fueron, Ladislao había hecho fortuna y ella lo siguió. Lamentablemente se nos fue. Si Ladislao hubiera estado vivo todavía... — ¿Fuiste amiga de Ladislao Blatnik? — Era un hombre que se hacía querer. Todavía en el ámbito militar, donde hizo los contactos para sus negocios, no hay nadie, de arriba abajo en la jerarquía, que no diga que Ladislao fue una buena persona. Todos lo recuerdan. — ¿Te hubiera gustado estar casada con Ladislao? — Me hubiera gustado que mi ex tuviera la misma habilidad que Ladislao para los negocios. Eso sí. Porque Ladislao era c harmant.
Narváez Churión, así como Roberto M umnu y el *propio Blatnik. Se trataba de un delito contra la administración militar en la compra de lanchas y aviones. Ladislao Blatnik se encontraba, para aquel entonces, en su casa de Gstaad. No sobrevivió mucho tiempo a su último escándalo. "Ladislao vivió siempre muy modestamente, en un apartamento frente a Venevisión, donde pagaba 2.000 bolívares mensuales. Su sueño fue tener suficiente dinero para hacerse la casa más importante de Gstaad y lo logró. La casa la vendió luego la viuda en 30 millones de dólares. Aquí, en su apartamento, recibía .sólo a militares. El les suministraba calzado a los soldados. Los conocía desde que eran mayores, tenientes, teniente-coroneles y comandantes. Aparte de eso, tenía a su favor su personalidad, su carácter y su forma de entrarle a la gente" .
todas las puertas en Austria y cuando consiguió la representación no quiso saber nada de Ladi. — ¿Tú seguías casada con él , te pareció una maniobra honesta? — Los negocios, como tú sabes, son a menudo deshonestos. Hubiera sido preferible, de cualquier modo, que Michael trabajara con Ladislao. Habría sacado mayores beneficios. Ladislao tuvo cinco años dorados. Los cinco años de Luis Herrera. Pero te voy a decir una cosa: Ladislao vendió lo que vendió al precio que correspondía. Fue un gran negociante. No creo que en ningún momento haya estafado al gobierno venezolano. Vendió siempre el mejor producto. — ¿Ladislao estaba casado con la hermana...? — De mi ex marido. Ella es una muchacha muy bonita. Acompañó a Ladislao en la
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Como dicen en los negocios, amarraba bien el burro. En cambio Michael sabía entrar, pero no amarraba. Eso es lo que creo. Por eso en los negocios existen los socios. Unos representan y otros rematan. Michael quiso hacerlo todo solo. — ¿Cómo habían sido las relaciones de ustedes, como pareja, con Ladislao Blatnik? — Muy buenas. Cenábamos siempre juntos, salíamos. Me acuerdo que una vez Ladislao en su apogeo —y era justamente cuando gracias a él le iban a dar a Michael un préstamo del BTV por 39 ó 40 millones de bolívares— nos fuimos a Europa. Y Ladi iba con una comitiva de militares venezolanos. Michael tuvo que volver a Venezuela para firmar lo del banco. Y yo con Ladislao y su esposa atendimos tan bien a esa gente —a mí me gustaron siempre las relaciones públicas— que le pedí que me devolviera las joyas. Me había ocu- 011111 ■ Exces0 Marzo 1989 69
La niña, diecisiete años después
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Ladislao Blatnik, vendedor de armas, estaba casado con la hermana de Michael y cuando ella lo engañó con Atilio Brillembourg, dicen que se suicidó
e octu•re e E pado de atender a su gente, no me parecía nada chael, el marido de María malo que me las devolviera. Pero me contestó Antonieta, le ofrece una delante de Michael: "No te las voy a devolver pequeña fiesta de cumpleaños mientras tu esposo no venda el Mercedes y me en el Member's. La alteza dé la plata, no te las voy a devolver". — ¿Esa fue la única vez que le prestaste ese descalza, no obstante el obsequio, decide ceAl lebrar esa noche algo más que un cumpleaños. Había unos treinta amigos y testigos íntimos. "Después de la cena, con música y tragos y todo eso, el Catire Fonseca me dice: «Antonieta, agarra el mi- Marfa Antonl y su exmarido Michael Bierlein en altri tempi (1981, Paint crófono y canta, tú Beach, Miam que cantas tan tipo de servicios a Ladislao? bonito ». Yo agarré el miSí, la única vez. crófono y canté dos canciones — Y a Michael? y después de las dos canciones — Muchas veces. Me invitaban ministros, continué: «Quiero decirles qué gobernadores, generales, a cenar con Michael. hoy era mi cumpleaños ». Todc Yo aceptaba para ayudarlo en los negocios. A ha estado muy bonito. Pera mi casa venía gente muy importante. Lusinchi también quiero anunciarles antes de ser candidato, Matos Azócar, Alfonso que me quiero divorciar. ToRiverol, Margarita Zingg, Gilberto Correa, dos se rieron. Unos lo tomaMiguel Angel Contreras Laguado. ron a broma, otros pensaron ¿ Y ustedes no hacían buenos negocios? que era en serio. Hasta para — Nunca. Más de lo que hice no podía Michael fue una sorpresa. En hacer. realidad fue en serio. Para di— ¿Las relaciones de Ladislao y su esposa fueron buenas hasta el final? ciembre , ya estaba viviendo en —Fueron buenas hasta dos años antes de su mi apartamento de soltera'
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muerte. — ¿Qué pasó? — Pienso, porque no he vivido esa vida, que cuando se tiene mucho dinero y se toma a
una muchacha 27 años menor que uno y se la coloca en un medio afortunado donde cada cual anda pendiente de la esposa del otro, se corre el riesgo de que se enamore, como ocurrió. Ladislao pasó a un segundo plano. Y no lo soportó porque había tenido un fracaso en su primer matrimonio. No lo soportó y la gente dice que se quitó la vida. Ladi, con el dinero que tenía, hubiera conseguido 500.000 mujeres más. No debió matarse porque Blanca, una mujer tan joven, lo dejara por otro. — ¿Por quién? — Por Atilio Brillembourg. Ladislao era una bella persona, pero en el fondo maltrató muchas veces a Blanca. La maltrató tanto que más de una vez hubo que llamar a la policía. Ella se cansó, no veo por qué tenga que cargar con la culpa de la muerte de Ladislao. El lo hizo por propia voluntad. — Cuando te divorciaste, ¿qué hiciste? — Yo me divorcié por Miguel Angel Contreras Laguado. Fue un gran amor. Por desgracia no era suficientemente correspondido. El podía haberse divorciado, como yo, y no lo hizo. Me mudé a Chulavista. Me mudé en diciembre y el 13 de marzo se terminó la relación. Fue duro para mí. Después de eso, estuve seis meses recogida. Me encerré en mi casa y escribía porque no podía dormir. Mi hermana Claudia vivía conmigo. Una noche en que ella iba a salir con Andrés Benacerraf, me propuso que saliera con Alejandro que estaba viviendo cerca. Fue en noviembre del 87 y desde ese día he seguido con él. ¿Quién es Alejandro? — Es el hijo del tercer esposo de la mamá de Michael. Eso está más complicado que Dinastía. — Bueno, me gustaría ser Joan Collins. —
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EL TORQUEMADA de Caldera Dieciseis años después del veto a El último tango en París, el censor Jorge Cedeño dice que fue un castigo al distribuidor de la película que protagonizó un episodio picaresco durante la función privada en La Casona. Si hubo un censor de antología en Venezuela fue Jorge Cedeño, politólogo, médico foniatra y amante de la ópera, conocido como el Torquemada del ex presidente Rafael Caldera. En marzo de 1973, cuando era director de Espectáculos Públicos, prohibió la exhibición de la película del cineasta italiano Bernardo Bertolucci, El último
cantes de la mantequilla"con el movimiento existencial sartreano, por lo que me han contado". Y hasta un crítico de cine como Lorenzo Batallán estampaba en El Nacional su convicción de que "es preferible no ver como periodista lo que no se puede ver como ciudadano". Una perla: si los ciudadanos tuvieran acceso a la información, los periodistas estango en París. tarían de más. En suma, En ese entonces la como decía el gerente geprensa armó un escándalo neral de la distribuidora mayúsculo porque el veto United Artists, David Lamse fundaba en supuestos: ni ping, "hay una sola copia y Cedeño, ni el gobernador "Apreté el puño, pero sólo para hacer cumplir las leyes", se justifica Cedeño, recomendado a está en mi poder; en Caracas Caldera como El Incorruptible. del Distrito Federal, Guino la vio nadie, ni las autorillermo Alvarez Bajares, el ejecutor áulico, dades, ni los críticos, ni el público". habían visto la película. "Yo nunca he visto la Simultáneamente Cedeño vetó la exhibimarihuana y sin embargo la combato", argución de Fiebre, una mediocre película argenmentaba el gobernador. Esa condena en ausentina con Isabel Sarli y se sorprendió porque la cia del cuerpo del delito tenía cierto tufillo cuprensa no dio ninguna importancia a esa rialesco a juzgar por la confesión de Eduardo prohibición. "Es que el Ultimo Tango es Noguera, un concejal de aquellos tiempos, europea y la otra argentina y existe la creencia quien dijo que la había visto en Francia "y en de que todo lo latinoamericano es producto del Caracas, en privado, con Alvarez Bajares". cretinismo", sostenía en declaraciones a El Tanta era la confusión que el encargado de Nacional del 30 de marzo. la Gobernación de Miranda, Juan Carlos Ahora, a casi 16 años de aquel memorable Brandt, llegó a relacionar las escenas protado de pecho de la censura, Cedeño va a "revegonizadas por Marlon Brando y María Schneilar la verdad". Hay un toque de suspenso der, que se hacían el amor de pie y en cuclillas mientras introduce en el deck de su consulto-la película descubría las excelencias lubririo el Motto Perpetuo de Nicola Paganini, vin-
Cedeño fue también el pionero del uno por uno que defiende la producción musical vernácula
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dicado con todo el honor y la gloria que se merece por el eximio trompetista mexicano Rafael Méndez. Luego, en pleno andante, con una voz casi impostada, sentencia: "El último tango en París fue prohibida como castigo ejemplar a un personaje que ofendió al presidente Caldera y a las máximas autoridades del país". El ofensor no era otro que Lamping. En el resumen de ese episodio, Caldera aparecía inquieto y hasta presa de curiosidad
El pánico se apoderó de los exhibidores que recurrían a los cortes 4I•
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para abogar en favor de la película. Pero el personal de custodia de la Presidencia suele ser alérgico a ese tipo de bromas; le torcieron el brazo y lo echaron a la calle. Lamping, en tanto, reclamaba su derecho a ir detrás de la película. "Esa es la pura verdad", ríe Cedeño. Pero no debe ser tan simple, porque el censor solía apretar la voz para hacer coro a las leyes. Pacientes labores de inteligencia policial
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Marlon Brando y Marfa Schneider: nunca se amolaron tanto las tijeras
por ver la película de Bertolucci. De allí que se dispusiera todo para una exhibición privada en los acogedores jardines de La Casona. Se contaba entre los invitados con Lorenzo Fernández, entonces ministro de Relaciones Interiores y con el gobernador Alvarez Bajares, que por fin dejaría de ser invidente. Circulaba entre los espectadores jugo de naranja mientras los técnicos de United Artists desplegaban la pantalla portátil y enfocaban a tiro el lente del proyector. Fue en esas circunstancias que uno de ellos se deshizo de su braga y quedó ante el espejo trajeado con la suficiente formalidad como para no pasar desapercibido ante tan distinguida concurrencia. Con su disfraz Lamping quería estar presente
El censor fue un perseguidor implacable porque "no estamos en Suecia"
y difíciles comisiones tribunalicias le ayudaron a desmantelar a más de una empresa "pirata" involucrada en el laxo e ilícito negocio de la pornografía fílmica. "Los perseguí cuanto más pude" dice, enfático. Si esas imágenes se proyectan en la calle 42 de New York o en los suburbios más aromáticos de Estocolmo, no es cosa que le inquiete o sonroje. "No estamos en Suecia", advierte, en el mismo tono que empleó Manuel Peflalver para congelar las reformas con su famoso "no somos suizos". Y fue en los cines de Caracas donde el cepo de Torquemada quebró más huesos. Cedeño, brazo armado de la censura, ejecutó con diligencia y rigor aquellas disposiciones que resolvió la junta clasificadora de películas, ala WIRD" Exces0 Marzo 1989 73
No quedó títere con cabeza y hasta la Cinemateca fue clausurada que paradojicamente nunca perteneció. En las grandezas del absurdo, un venezolano de 18 años podía ser condenado a 30 años por un crimen, pero le estaba negado apoltronarse en la confortable sala del Teatro del Este para ver La naranja mecánica,magistral film de Stanley
Kubrick. En ese laberinto de imposiciones, surgía como un oasis permisible la Cinemateca Nacional. Las golpizas que se sucedían en las colas, la presión que soportaron los barrotes de metal que la protegen y el lleno completo de su sala, son meros recuerdos saludables. Cedeño la mandó clausurar y, a la distancia, ensaya una justificación: no se pagaban los impuestos municipales. "Cualquiera otra apreciación de los hechos es un mero ejercicio malicioso", insiste, para que no haya dudas. De alguna manera había que escapar del ojo censor. A propio riesgo los ex hibidores recurrieron a las tijeras para mutilar las películas, como la mejor ruta para llegar, al fin y al cabo, al grueso y entusiasta público joven, pero Cedeño no endosó la aventura. "Conmigo se equivocaron, yo soy un amante de la libertad", se enserió. Su empeño fue implantar un mecanismo que regulara el acceso a la información en una sociedad heterogénea, marcada por una multitud de niños y adolescentes. "Nuestro deber es protegerlos; un niño no puede ver a un perro fornicando con una mujer en la cama. En esa vigilancia puedo pecar de extremista", puntualiza. Lo demás corre por 74
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cuenta de cada uno: "los adultos que hagan con sus vidas lo que les venga en gana", admite. Claro, es relativo, porque la censura trata a los adultos como niños. Si algo le molesta a Cedeño es que se le recuerde como Torquemada ("ya no importa tanto; estoy más allá del bien y el mal", se disculpa) y no como el pionero del decreto del uno por uno, ese bastión legal que asegura a los artistas venezolanos la mitad de las emisiones musicales en las radios, frente a la contraparte de la música foránea. El capitaneó, junto a Mario Suárez, la huelga de hambre de los
artistas en 1966, como parte de las escaramuzas del boicot criollo a las compañías mexicanas que monopolizaban el espectáculo. En ese mercado, la presentación de cualquier estrella extranjera del show business tenía como aderezo la contrafigura nacional. "Pero antes hubo que presionar al Gobierno para que defendiera nuestros intereses. En aquella lucha contamos con el apoyo de los colegas de Perú, Argentina y Colombia, con la solidaridad de los estibadores de New York que se negaron a descargar los buques de bandera mexicana, y hasta se mencionó la movilización de tropas rumbo a Miraflores (ese año el inquilino era Raúl Leoni)", evoca Cedeño. Con lo cual se prueba que el misterioso tele-tanque del año pasado no fue nada tan especial. Por esos años, el censor, que había estudiado en Roma como adelantado del plan de becas de la Fundación Gran Mariscal de Ayacucho, no militaba en ninguna corriente política. Sólo se había dedicado a extremar su vocación paralela de cantante, inclusive en espectáculos picarescos en México (Esperanza Iris, Degollada y Bellas Artes) y en las tablas de Puerto Rico y República Dominicana. Su nombre llega a trepar hasta los
titulares de Excelsior. Y ocupó el cargo de embajador itinerante cuando el presidente mexicano Luis Echeverría lo enlistaba en su ranking de invitados especiales. La incursión de Cedeño en política se debió al auspicio de Arístides Calvani que lo presentó ante Caldera como "un hombre incorruptible". Pero pasó el tiempo, se sucedieron otros gobiernos, y el censor se enclaustró a escuchar música. No intervino en la última campaña electoral de Copei y la política ha dejado de interesarle. Para él es un canto de sirena. <az)
Hugo Prieto
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Fotos: Vasco Szinetar
jurídicos que encaran el problema de la censura. El más célebre, quizás por primerizo, fue promulgado por el ex gobernador de lid Caracas, Alberto Guinand Baldó' III (Gaceta Municipal del 29 de noviembre de 1971). Una de sus resoluciones convertía ala Inspec - 4 General de Espectáculos en una especie de oficina fiscalizadora de todo material fílmico. Su contenido es suficientemente coercitivo como para disuadir a ualquier exhibidor o cineasta. En no de sus apartes señala: Cuando el material decomisado resulte ser pornográfico y de películas no registradas y prohibidas, el responsable será sancionado con arresto hasta de cinco días sin perjuicio de las acciones judiciales de mérito". Bajo las hojas de esta tijera cayó El último tango en París. En mayo de 1980 se publicó la Resolución Número 500 que complementa el Decreto 620, lo que hizo posible que se prohibieran las películas de los cineastas Alfredo Anzolani Manuel, con el celibato religioso como tema) y luego Ledezma, el paso Mamera, de Luis Correa, r la cual fue llevado a juicio, acusado de apología del delito. Estuvo • r so 59 días
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Un periodista se asume como ruletero en un viejo Caprice de placas amarillas para reconocer los ardides de los choferes de plaza que tienen su jerga propia, sus cĂłdigos y cotos nocturnos.
Caracas poco se parece a Nueva York, y esto no es sólo lamentación aforística de un venezolano. Robert de Niro, como el taxista Travis, podía pasear por las calles del Bronx la intimidante ristra de pelos de su corte iroqués y aún así levantar con su Checker Cab el flete mínimo para justificar la jornada y el insomnio que invertiría en la redacción de un diario personal. Extravagancias de ese tenor, aquí y en cojo a una joven señora que lleva a cuestas una rubicunda bebita. Me ha preguntado, anticicambio, le agenciarían al ruletero una espando una respuesta negativa, si la podía llecasísima clientela para ni siquiera llenar las primeras páginas de un cuaderno de planas, var hasta los Almacenes Cortés de Chacao. Acepto y poco después, ya ejerciendo desde el mixto y a doble raya. En Caracas, entonces, preferible diluirse en la sencilla normalidad: asiento de atrás su rol de pasajera, me explica con pronunciación gutural (me contaría más franelas chinas como guardacamisas y cuellos tarde que era brasileña con 12 años de residenduros pasados de moda. Por lo demás, no estaba interesado en añadir cia en el país) su sorpresa: deshonra a un gremio (hasta hace poco de —Había parado varios taxis y todos se negaron. ¿Sabe?, es que todavía estamos en compacta conformación emigrada y añoranzas perezjimenistas) que ya comenta con alarma época de compras y como Chacao es zona la aparición de César Marrero, el sempiterno economista subempleado, al volante de un libre Maverick color púrpura; o que preocupado reseña la novedad de una espontánea línea de arquitectos, ingenieros, abogados, Los Profesionales, que desde los alrededores del Boulevard de El Cafetal se han dedicado a hacer carreras, saltando la verja que divide el mundo bipolar del taxista caraqueño: La calles de la ciudad parecen otras desde el volante de un "libre" el de las placas blancas versus las placas amacomercial creen que hay mucha cola. rillas. Entablamos un diálogo, acortado por la imAsí pues, paso a ser Carlos, proletarizado probable fluidez que nos arrastra en el tránsito estudiante de sociología de la UCV, que amorpor la Avenida Francisco de Miranda, y tigua el golpe de las nuevas realidades económiaderezado por los chillidos de la niñita que se cas cazando pasajeros en sesiones vespertinas empeña en desollar el forro del apoyabrazos y nocturnas a bordo del Chevrolet Caprice 76 de la puerta derecha; la brasileña trata de extinazul marino, matrícula Venezuela-007-896, guir infructuosamente la rebelión infantil hasta propiedad de César Granados, el célebre Bólido que por fin lo logra invocando la tradicional de Radio Rochela, quien aunque no emule (feadvertencia: "si sigues, el señor se va a poner lizmente) al maracucho Beto Parra, también bravo", mientras me señala. Le cuento mi rodando redondea su presupuesto. guión: los estudios de sociología, el matatiLa mascarilla de mi disfraz se corre ante las grismo taxista, etc. Su réplica es desconcerprimeras luces de la tarde citadina. En la tante. Es cuñada de un connotado sociólogo, Cuarta transversal de Los Palos Grandes reOtto Maduro ("¿lo conoces?", "sí, cómo no")
Casi todos con el pretexto de un aguinaldo o el "tenga parque se tome un cafecito" dejan propina de quien me cuenta, como para compensar mis estrecheces universitarias, sus recientes éxitos profesionales: está ganando un realero, y en dólares, en los Estados Unidos, contratado por la orden Maryknoll. Su parentesco me aterra como un quiz. ¿Me hablará de Theotonio dos Santos? ¿Qué comentaría un estudiante de sociología sobre Darcy Ribeiro? Me adivino prematuramente delatado. Sin embargo, la circunstancia mejor provoca un efecto conmiserativo en la brasileña: al llegar a nuestro destino compartido, me paga más del doble de lo indicado por mi Taxitronic coreano, se desborda en bendiciones y me desea "oshalá termines tu curso". El mimetismo tras el volante se resiste a profundizarse. Lo inhiben los restos de solidaridad peatonal que mancillan mi conciencia, a pesar de que intento adquirir los modos del taxista, sus inocuos timos: el extravío por los J.O. recovecos de la trama callejera mientras el taxímetro avanza inclemente. Mi bautismo de fuego arde en el transcurso de una carrera desde San Bernardino hasta La Urbina. "A la calle 9, usted sabe, cerca de Materiales Mendoza", erradamente confía la mujer, una morena cuarentona con aires de profesora de la Normal, que sin duda viene del interior. Yo no sé dónde queda eso. Buena oportunidad para, sin accesorios remordimientos, dar vueltas inciertas y hacer engorde de la tarifa. Cubro la Avenida Boyacá y doy una vuelta superflua en El Marqués para tomar la Rómulo Gallegos; al final, doblo en contrasentido en La Urbina, conecto con la calle 7 buscando
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caer perpendicularmente a la 9. Un camión interrumpe el paso por unos 10 minutos: su chofer, con torpes maniobras, intenta cuadrarlo adyacente a un depósito de colchones para trasbordar su carga. Cuando damos con la dirección, por fin, sufro una decepción pecuniaria. Chequeo el taxímetro: 34,15 por un tour a lo Caracas Sightseeing. —Tome. Déjelo así, con aire triunfal me entrega la mujer un fuerte, un arrugado billete de diez y otro, nuevo, de veinte, superando mi involuntaria ganga.
nada risueña. A esa razón, con 40 horas semanales de asfalto, se ganan 7 mil 600 bolívares al mes. Prefiero entonces podar dudas. Desde esa tarde, siempre de noche, y de día cuando el viaje se adentre por las zonas crepusculares de la bajada de bandera, digamos Colinas de Bello Monte o Los Naranjos, prescindo del taxímetro. Como mis colegas, a mano alzada defino una tarifa (aunque siempre perdura la sensación de que cobro más de lo alevosamente debido).
apostado a las puertas de un night club de Altamira, me confiesa que hace un promedio de 1.000 bolívares diarios, manejando desde las 8 de la noche hasta las 4 de la madrugada. El mismo me ha recomendado: "pero consíguete un ocho cilindros. A la hora de cualquier vaina de noche puedes escaparte". Me guarezco entonces en los tres mil y tantos centímetros cúbicos de mi Caprice. Carente de la intuición que refina la experien : cia,onfíelABCdrutonc, decálogo que se imparte de boca a oreja en las
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La historia de este dumping taxístico la relatan las calcomanías adosadas al parabrisas del Caprice. Y es que desde 1987 el taxímetro no ha sido reprogramado, por lo que sus chips suman tarifas condescendientes. Así, nadie chista sino que, con el pretexto de un aguinaldo retardado o el tenga-pa-que-se-tomeun-cafecito (léase también refresquito), se retratan con propina que redondea los guarismos. No sé si interpretarlo como expresión solidaria de una sensibilidad ciudadana en torno al perentorio reajuste tarifario; o si se trata de una dádiva que corona la bagatela electrónica que marca el taxímetro. Este, a pesar de su indulgencia, me deja recaudar en mi primera jornada de trabajo (un miércoles de 2:30 hasta 6:30 pm) unos 190 bolívares. Apelo a la aritmética: la "x" de la regla de tres se despeja 78 Exceso Marzo 1989
1 miedo es el blasón de la noche. Un taxista, chivo de la Metropolitana, es abaleado en Lomas de Urdaneta hacia la medianoche. La cuota ha sido cumplida y en todos los paraderos de la ciudad los suspiros dan gracias a Dios por no haber sido el caído. Pero aún esos refugios diseñados únicamente por la aglomeración taxista no garantizan la inmunidad: pocos olvidan a los dos compañeros abatidos en el cumplimiento del deber por la ofuscada pólvora de un oficial de la Armada, en la Plaza Venezuela. Bastiones de la empresa privada, los taxistas nocturnos perseveran deletreando a pies juntillas una regla de oro del capitalismo: a mayor riesgo, mayor beneficio. Un gallego taxista, ninfa en los ratos libres, perennemente
calles: circular con los seguros pasados; llevar entreabierto el vidrio para que por la rendija se cuele un diálogo pero no un arma; nunca comprar nada a un vendedor furtivo, así se trate de una caja de mondadientes, para no revelar donde se portan los billetes; nunca levantar a una pareja en la que sea la mujer quien haga las señales para detenerte; nunca atender a alguien que cargue un bulto mayor que una bolsa de automercado; nunca tardar más de unos segundos detenido ante un semáforo en rojo. La retahíla de nunca jamás (redundancia inevitable) suplirá, sin embargo, la protección del gregarismo. Cerca de las dos de la mañana de un domingo me detengo en el paradero de
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hablado antes busca tranquilizarme. Se conduele y atenúa mi peaje de novato: —No le hagas caso. La policía pasa, sí, pero nos cobra una supuesta protección y se va. De todos modos, si te paras ahí lejitos se dan cuenta de que no estás jugando y no se meten contigo. Puedes esperar tu carrera tranquilo. Por supuesto, aunque fingiendo obstinación por tanta espera, huyo. Otra noche, cerca de las once, recalo en el paradero que los taxistas aprovechan en la callejuela que separa al CCCT del Cubo Negro de Chuao. Allí me entero de que no existe una solidaridad totalizadora del gremio, sino que el espiritu es más bien tribal, delimitado por un desprecio de transitividad pasmosa: en la cumbre del zigurat están los choferes de emplazamiento fijo, las inefables líneas de taxi, que rivalizan con los integrantes de las empresas de contratación por teléfono, tipo Tele Taxi, que 'recalcan su cuasi gentilicio usando la indescifrable jerga de Banda Ciudadana; éstos por su parte, no pueden lidiar con los de placa amarilla independientes; y todos juntos denigran de los piratas, civiles que parapetean un 14111 casco o que pintan en un La parada de taxis de la Plaza Venezuela, donde el riesgo sí paga: la historia del crimen cometido por un desaforado marino todavía se cuenta precario cartón la palabra taxi para rebuscarse en fechas pico. — Entonces no se molestará si le doy un Maripérez, junto a la estación de servicio de la Avenida Andrés Bello, donde se reúnen taxisconsejo. La legalidad de mi patente gualda obtiene la tas de todas las marcas. A esa hora, la asam— ¡Cómo me voy a molestar! Yo soy un venia del grupo para que sin complejos relate blea congrega una docena de choferes. Mi novato en estas cosas, y precisamente vengo a mi rutina del estudiante de sociología. llegada interrumpe por un instante el bullicio reunirme con los veteranos para ver cómo se — Yo conozco a un arquitecto que trabaja del grupo, como una re-edición del silencio bate el cobre—, trato de incorporarme en la línea del Hilton—, repone uno de los que recibe al pistolero cuando irrumpe en un agachando la cabeza y vendiendo al grupo la oyentes, como para darle ribetes de fenómeno idea de la novatería. saloon del salvaje oeste. social a la permuta creciente de profesionales A despecho de mi presencia, al cabo de —Pues mire, ahí donde está—siguió su aduniversitarios por taxistas. un rato se restituye cierta confianza. Se vertencia el gordo— usted está pagando tanto Las recomendaciones abruman al novato (o juega a los dados, y los billetes de 500 como nosotros. Aquí viene cada tanto la sea, a mí): las zonas que se deben eludir para bolívares mudan de manos con prontitud. policía y nosotros terminamos presos en El evitar a la vez la matraca de los fiscales que a Uno que se retira del azar, me pregunta Recreo. Eso no importa, porque nosotros discreción supervisan el funcionamiento del cúál es mi carro y se lo señalo. "No te preocu- estamos maleados; pero usted que se ve que no taxímetro; los establecimientos en los que el pes. Aquí siempre viene alguien buscando está en nada, que no está jugando, va a termiencargado tolera una estación sin consumo, sólo para visitar los sanitarios. Se habla de una carrera", parece avalar la escala del nar preso como un pendejo. El susto trasluce mi barba. El que me ha recién llegado. En la improvisada mesa algunos colegas (siempre indeterminados) queja».
Nunca debes levantar a una pareja en la que sea la mujer quien te haga las señas para detenerte
de juego, sobre la escalinata junto a la reja roja de una cauchera, se acelera la centrífuga del envite. Un italiano de Taxi Tour está arrasando. De pronto, un moreno gordiflón enrolado entre los perdedores de la noche se voltea hacia mí y me interroga: — Oiga, compadre, usted está descansando aquí, ¿no es verdad? No sé cuál respuesta será la más conveniente. El desconcierto sólo me permite asentir en silencio.
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colocan llantas de menor tamaño para completar más revoluciones en el recorrido y engañar al taxímetro. Y con inocultable envidia nombran a taxistas que superan las incertidumbres de la oferta y la demanda anclando en cotos de (casi) exclusivo usufructo. Verbigracia, los que pactan con la fauna travesti de la Avenida Libertador para hacerle la movilización. O los que sirven a ciertas boiles. Entre ellos, algunos privilegiados que cobran en dólares: aquellos que consiguen dosis de pasión a los turistas en el Doral (Av. Francisco Solano), Canagua (Bello Campo), Morrison (La Castellana) y el Saya, sus puntos preconcertados (a cambio de algunas atenciones de la casa) de cabotaje. Mi única experiencia turística, en contras.te,resulta frustrante. Por asalto me toman tres muchachos que entre sí hablan un trabalenguas de ásperas resonancias semíticas, frente al Cine Las Acacias. Los llevo al Hotel CCT. El taxímetro (que he encendido en aras del prestigio patrio) dictamina 24,75. El mediterráneo de barbas (¿el líder del trío?) me paga con un billete de 100 bolívares y me exige en un inglés trastabillante: "give me eighty back". Pretende regatear por lo bajo. onversando conmigo entre las fluorescencias de Misia Jacinta, una arepera favorita de los taxistas en Chacaíto, uno de ellos filosofa al filo de la medianoche: "mira, este oficio de la noche es como pescar: lanzas la red a ver qué sale. Un día puedes no pescar nada, pero otro sale llena la red". Mi atarraya atrapa ejemplares de diversas especies, claro, pero de un mismo género: el bonche nocturnal es lugar común. Reverso del día, cuando es en las apesadumbradas adyacencias de las clínicas donde se localiza la más gruesa y urgida clientela. El pasaje de la noche es el de la disipación. Un barman de El Mesón del Botijo, a quien llevo hasta la Calle Negrín de Sabana Grande, se ufana de ganar un promedio mensual de 20.000 bolívares al amparo de un elaborado sistema de puntuaciones y de alguna generosidad a la hora de servir los whiskies; coherentemente, me deja una propina de siete bolívares. Poco antes, yo había dejado en el Palacio del Mar a una pareja. El tipo, un patotero que frisa las estribaciones de la treintena, me atajó en la calle auxiliar que, paralela a la Autopista de Prados del Este, alimenta 80 Exces0 Marzo 1989
Los transformistas de la Libertador también llegan a pactos nocturnos con los ruleteros
Valle Arriba y Santa Fe: — Primo, usted me cae del cielo. Después de desviarme hasta un edificio donde le esperaba la jeva, me orienta con un ambiguo "vamos a Altamira, a uno de esos restoranes". Es uno de esos parroquianos que buscan toda clase de información en él taxista: la hora, de qué año es "esta lancha" (refiriéndose al Caprice), si en tal o cual restaurante dejan entrar sin chaqueta. Esa omnisciencia debería incluir la crónica roja de la ciudad: — Primo, ¿usted se enteró de un tipo que mataron en Chacao el viernes pasado? — No. ¿Por qué habría de enterarme? Traté de amedrentar la plática. — Es que...bueno, fue un peo, primo. El
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tipo parece que estaba robando y le sonaron tremendo balazo en toda la cara. Yo lo ví —e intentó un chiste macabro—. Le pregunté si estaba llorando, ja, ja, ja... El ejercicio es re-aprehender la ciudad. Mientras recorro las calles, de golpe me doy cuenta de que mis maneras de particular me han hecho pasar por alto el apego a la acera que debe mantener todo taxista sin clientes. Me detengo en La Castellana a echar gasolina. Pero la edad hace caprichosa la caja automática del Venezuela-007896: la palanca no encaja en el parking y, en ridícula secuencia, es imposible apagar el motor. Intento adelantar y atrasar el taxi hasta que los muñones calcen. Tamborileando sobre la chapa del baúl, el empleado del surtidor protesta: — Pero, bueno, ruletero, ¡si te vas a ir, avisa! Retomo la calle. A la una de la mañana, un muchacho me detiene en la esquina de la Francisco Solano con Los Jabillos. Quiere llegar hasta el Hotel-Residencias Libertador, contiguo al Multicen-
Cae la noche y una buena parte de los diez mil taxistas de Caracas salen a cazar sus presas en el tránsito
tro Empresarial del Este. Ante mis credenciales sociológicas se destapa. Resulta ser también estudiante pero de Derecho, y en Buenos Aires. Está en Caracas por un programa de intercambio académico. — Ahí donde me encontraste —se queja el pibe—, vive mi novia. Tenía como media hora esperando taxi. Esa debe ser una zona de mucho movimiento para ustedes, porque pasaron muchos taxis. Pero no sé, parece que creen que todos son mancos porque me decían cosas al verme ahí parado...en Barrio Norte no es tan difícil conseguir taxi. e noche generar una conversación tropieza con menos trabas, algunas heredadas del recelo tradicional que, desde la dictadura, estigmatiza al taxista como un soplón ambulante de los cuerpos de seguridad. Disueltas esas desconfianzas, los resortes del asiento delantero de un Caprice 76 pueden mullirse hasta remedar al diván del analista. Algunos silencios son ingenuamente exagerados, como el de la niña de unos 15 años que me confía con una admonición ("cuídala, mira que es una niña") una pareja de la Avenida Venezuela de El Rosal, y que calla aterrorizada durante el trayecto hasta La Urbina. Pero otras locuacidades aturden. En la cuesta final de la Avenida Casanova, discurriendo hacia el delta de Chacaíto, un cuarentón más bien obeso, semicalvo y con un área de pelos en ristre, tapizado en negro como Raphael (aunque con el pantalón a medio caer, como nunca lo tendría el Niño de Linares) me hace señas. — ¿Por cuánto me llevas hasta el Centro Plaza? — Por 50 bolos amigo. — Nada que ver. Por 30-, puja. — Por 40— propongo de nuevo. — Entonces, chao— se aleja un poco de la ventanilla, dando por concluido nuestro Sotheby's callejero, y otea en pos de un sustituto. Doy mi brazo, diría mi omoplato, a torcer y lo levanto. El forcejeo tarifario lo empuja a una disculpa: — Oye, no es que esté en contra tuya, pero tengo un tiempo peleando allí, discutiendo, y ya no dejo que se aprovechen de mí. — Discutiendo con taxistas... — N000...con un barman ahí en el Baco. alie ■ Exces0 Marzo 1989 81
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El Saya es un ghetto de turistas en busca de aventuras guiados por taxistas
Lo conozco desde hace tiempo, pero hoy quería cobrarme por anticipado unos tragos. No juegue, en ese lugar de mala muerte donde el show es pura tiradera...pero yo lo voy a agarrar en la bajadita. — La gente es así...— ensayo una vaguedad. — No así. Bueno, la verdad es que yo estaba bebiendo. Salí de la obra y me eché unos palos. Pero yo no tomo para ponerme agresivo, ni nada así, sino para olvidar mi forma de hacer el amor. Para o. aturdirme como dice la canción. La euforia hace mella en el pasajero a la altura de la Plaza La Castellana. — En esta vida todo lo que me he propuesto lo he conseguido. Lo único que me falta es un amor. En ese instante sueno el claxon nerviosamente. — No es para que te pongas así — recoge el barrilete—. No es nada romántico. — No...tu problema no me es ajeno... —encarno a un hombre (taxista) de mundo— ...sabes, yo soy estudiante universitario y he 82 Exces0 Marzo 1989
Estampas del rebusque: un sociólogo impostor ruletea a bordo de un ocho cilindros propiedad, muy alegóricamente, de "Bólido"
"Eres demasiado noble para este oficio tan peligroso. La noche es diabólica"
leído algunas cosas de Manuel Puig. — Yo no lo he leído pero sí vi la película. Es que yo hago teatro. — ¿Eres actor? — Era actor, pero...el teatro es una pasión, una forma de vivir. Es un gran compromiso. Por ahora estoy haciendo peluquería y maquillaje. Ahorita tengo una obra en el Teatro Los Ruices. De allí había salido ("sólo Myerston y Carlota Sosa son actores de verdad, mijito, los demás ¡uuuff!") para empatar con esta noche de vapores. Cuando arribamos al Centro Plaza, me previene: — Eres demasiado noble para estar en este oficio tan peligroso. La noche es diabólica. No es para alguien como tú. — Bueno...pero tengo que volver al trabajo— apago sus discursos. Al dejarlo veo su figura por el retrovisor. Camuflándose en la oscuridad, mientras bajo a la Francisco de Miranda, todavía alcanza a gritarme: — Voy a seguir bebiendo, ¿oíste?...voy a COL> seguir bebiendo.
¿INUTIL, LA PUBLICIDAD? GUILLERMO PEREZ SCHAEL
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obra gente en este mundo que ostenta la pretensión de distinguir entre la cosa útil y la causa superflua. Un sistema de valores estático y universal sostiene la refutable posición de que la publicidad y un sinnúmero de productos son inútiles. Lo que equivale, a mi modo de ver, a olvidar la individualidad del hombre. La cultura occidental carece de un sistema, compartido por todos, de valores estáticos. Heterogénea por excelencia la civilización de occidente repugna, fuera del ámbito teológico, a la estandarización de valores. n producto, cualquiera que sea, es un instrumento de satisfacción personal, familiar o social. El computador lo adquiere y lo utiliza, per las más variadas razones, no exentas de emoción. La motivación emocional supera, en múltiples casos, el sentido pragmático del individuo ala hora de adquirir y consumir. Las mujeres, por ejemplo, se
inclinan por uno u otro artículo de belleza, menos por la comprensión química de su estructura, que por la descontada satisfacción del halago cuando lo use. Un fabricante de cosméticos afirmó en una oportunidad: "No vendemos lápiz de labios, vendemos belleza y, en el peor de los casos, esperanza". La mayoría de los hombres que compra un automóvil se abstiene de echar un vistazo al motor para calibrar sus cualidades mecánicas. Una imperdonable falta tratándose de un vehículo de transporte motorizado. La decisión de compra depende de un amplio margen de variables de vinculación emocional, que el consumidor ambiciona. La vigencia social del producto, es decir que la marca en cuestión esté de moda, brinde status, se coloque en punto de referencia o dispense inéditas emociones, se convierte en la clave del asunto. Cada comprador elegirá en base a expectativas individuales.
consumidor específico. El proceso diferenciador de la publicidad funciona en el sentido de la información, bosquejando novedad en materia de riqueza, salud y bienestar. La publicidad apunta hacia el mejoramiento de los niveles de vida del individuo. El hombre puede, hasta cierto punto, decidir sobre escolaridad, ubicación geográfica y filiación política. La publicidad lo ayuda a elegir a la hora de gastar su dinero.
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o falta quien argumente que la publicidad obliga a la estandarización. El conformismo, sin embargo, debe buscarse en el tejido social, donde las desviaciones de la norma son costosamente penalizadas. Expuestos a los mismos estímulos todo el tiempo, el hecho se acepta sin oposición. La publicidad participa como un elemento más dentro del universo comunicacional omnipresente. Un parejo estilo de vida se promueve en programas de televisión, en los periódicos y el cine. La iglesia, la universidad y hasta el urbanismo reiterativo se hacen cómplices de la tarea. La publicidad, me parece, rehuye la homogeneidad y, por definición, se mueve en el registro de las diferencias. Cada comercial de televisión se propone diferenciar una marca y, por consiguiente, a un
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EL MALEFICIO DE EVITA 111111111111111111111~111 RAFAEL SYLVA
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ementerio de Chacarita, Buenos Aires. Mayo de 1987. Un campanario proclama las dos de la mañana, mientras profanadores de tumbas se mueven furtivos por entre mausoleos. Frente a cierta cripta, violan la cerradura de acceso. Una vez adentro, se dirigen a un catafalco protegido por 12 candados especiales, de triple combinación. Con asombrosa rapidez, logran violentarlo para abrir la urna y cortar las manos al cadáver que contiene. Terminada su macabra tarea, abandonan el lugar, llevándose consigo el sable ceremonial y las manos mutiladas de Juan Domingo Perón, ex gobernante de Argentina, considerado por muchos un dictador. Cuando la violación del mausoleo y mutilación del cadáver fueron descubiertas en 1987, décimo tercer aniversario de la muerte de Perón, un grupo que se identificó como "Hermes-I-A-I y los 13" reivindicó la macabra acción. Al hacerlo reclamaban la suma de 8 millones de dólares por devolver las manos y el sable. De no cumplirse tal exigencia aquellas manos de Perón serían pul84 Exces0 Marzo 1989
verizadas. El asunto, sensacionalista y macabro como fue, no logró el escándalo político que era de esperar. Salvo por los peronistas y sus aliados en la Confederación General del Trabajo, quienes celebraron misas de desagravio, ni la prensa local ni la internacional concedió mayor importancia al asunto. Perón gobernó a los argentinos durante 3.657 días, distribuidos en tres presidencias a las que llegó por elecciones a partir de 1945 y se caracterizaron por delirante populismo y demagogia. La profanación de su tumba en 1987 daría nueva y perversa vigencia a un sinfín de hipótesis supersticiosas, no sólo acerca de quiénes fueron los autores sino al mito de Perón y Evita. Para muchos, el nombre del grupo que reivindicó la acción sugería connotaciones esotéricas y cabalísticas. Los teósofos y ocultistas a quienes el ex dictador concedió suficiente importancia como para incluirlos entre sus asesores, portaron su cuota de suspenso oscurantista a la investigación sobre el robo de las manos del ex presidente. De alguna forma esos esotéricos intentaron relacionar la mutilación del cadáver con lo que algunos llaman "El Maleficio de Evita" y que tiene que ver con el vestuario de quien fuera la segunda esposa de Perón, viudo cuando se unió a ella en 1944. Eva Perón fue inmortalizada por el inglés Andrew Lloyd Webber en su ópera rock Evita. Según parece, aquel vestuario de la mujer a quien se llamó "guía espiritual de los argentinos", aunque destruido en buena parte por los militares después del derrocamiento de Perón en 1955, fue parcialmente salvado y preservado por fieles peronistas que, a lo mejor para evitar que las piezas fuesen vendidas, subastadas o exhibidas, inventaron lo de un efluvio maléfico. De acuerdo con tal consejo, la "Maldición de Evita" se descarga de manera fulminante sobre quienes utilicen o exhiban sus pertenen-
cias. Algo que, coincidencia o no, parecería estar avalado por lo ocurrido en marzo de 1987, cuando se realizaba la exhibición de una parte del vestuario de Evita en el Teatro Olimpo de la ciudad argentina de Rosario. De forma súbita e inexplicable, estalló un incendio en el local, destruyéndolo por completo y también a los vestidos. Pero lo anterior palidece ante lo ocurrido a sus restos mortales. comienzos de 1956 y en la casa de habitación en Buenos Aires del Mayor Arandia, subjefe del Servicio de Informaciones del Ejército Argentino, un ruido en la planta baja lo despertó. Sigiloso, pistola en mano, se asomó hacia las escaleras y al divisar la silueta de lo que imaginó era un intruso, hizo fuego varias veces. Fue al encender las luces, cuando se dio cuenta de que había matado a su propia esposa. Esta regresaba de visitar a un familiar enfermo y cometió el error de entrar sigilosamente a la vivienda para no despertarlo. Jamás imaginó la infeliz mujer que el Mayor Arandia se encontraba en un continuo sobresalto debido a "algo" muy importante que escondía en la casa sin ella saberlo: el cadáver de Eva Perón.
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inco años antes, a las 8:25 pm. del 26 de julio de 1952, Eva María Duarte de Perón —guía espiritual de la nación argentina— moría víctima de cáncer. Poco después el Dr. Ara, un anatomista español, se ocupó de embalsamar el cadáver, para ser expuesto ante la multitud. Realizó un excelente trabajo, pues devolvió a aquel organismo el aspecto saludable que tenía antes de ser minado por el terrible mal. A partir de la muerte de Evita , la situación política de Argentina se fue deteriorando y en septiembre de 1955 estalló la Revolución Libertadora que obligó a Perón refugiarse en la cañonera "Paraguay". De allí comenzaría un exilio que lo llevó
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a Venezuela, República Dominicana y, eventualmente, a España. Atrás quedaba, en la sede de la central obrera, el mausoleo con el cadáver embalsamado de Evita. El gobierno provisional del General Lonardi, tras comprobar que aquellos restos sí eran los de la esposa de Perón, se encontró con la disyuntiva de "qué" hacer con el cadáver de quien, aúh después de muerta, podía seguir siendo un potente elemento perturbador. Lonardi no duró y fue reemplazado por el General Aramburu, quien dispuso que los restos embalsamados fuesen sepultados en el cementerio de Monte Grande, en el gran Buenos Aires. La misión fue encargada al Teniente Coronel Moori Koenig, jefe del Servicio de Informaciones del Ejército. Pero éste, a fin de evitar que los partidarios y enemigos del peronismo (sabiendo donde estaba enterrada Evita) transformaran al lugar en foco de disturbios y fermento político, optó por crear incertidumbre. Fue así como formó 20 grupos del ejército y de la armada, que (desconociendo la existencia de los otros) debían enterrar en diferentes lugares de Argentina un ataúd donde, supuestamente, estaría el cadáver de Evita. De esa forma, cada grupo pensaría haber enterrado los restos legítimos. Gracias a ese plan, nadie sabría a ciencia cierta dónde estaba, realmente, el cuerpo embalsamado. La idea tuvo éxito y muy pronto comenzaron a circular rumores confusos por toda Argentina, según los cuales aquella momia de Evita parecía estar enterrada en todas partes. Pero el Teniente Coronel Koenig había ido aún más allá de su plan original y si en realidad no sepultó al cadáver en el Cementerio de Monte Grande, tampoco lo hizo en ninguno de los otros veinte lugares seleccionados por los comandos de las Fuerzas Armadas. El auténtico paradero de los restos de Evita, era la casa del asistente de Koenig: el Mayor Arandia, hecho que le costaría la
vida a la esposa del Mayor. El 22 de diciembre de 1955, cuando el Mayor Arandia hizo sacar el cadáver de Evita de la Confederación General del Trabajo y lo condujo en un furgón a los sótanos del Regimiento I de la Infantería de Marina, el ataúd estaba oculto en una caja que, supuestamente, contenía aparatos de radio destinado a una emisora en Córdoba. Pero como el asunto estuvo a punto de ser descubierto, el Mayor Arandia hizo llevar aquella caja a una carpintería donde introdujeron a los restos momificados de Evita en un arcón que, a su vez, fue depositado en los sótanos del arsenal Esteban de Lucca. Posteriormente, y nadie sabe por qué, el Coronel Koenig le pidió al Mayor Arandia que por un tiempo ocultara el ataúd en su casa. Era lógico que con aquella momia en su hogar, el Mayor Arandia viviese en un constante sobresalto, no sólo por el aspecto macabro del asunto, sino debido al temor de que bandas de fanáticos peronistas o antiperonistas lo descubrieran.
espués de la tragedia, el Coronel Koenig ordenó trasladar el arcón de la momia de Evita a su propio despacho, ubicado en el quinto piso del Edificio de los Servicios de Informaciones del Ejército. Fue un irónico destino para los restos mortales de aquella mujer que había sido idolatrada por multitudes y especialmente sus "descamisados", ya que pasaría a convertirse en mero objeto de macabras burlas. Cada vez que el Coronel Koenig bebía demasiado, terminaba llevando a grupos de personas a su tétrico despacho, a que "adivinaran" qué se ocultaba en el arcón. Como nadie lo imaginaba Koenig procedía a levantar la tapa. Es de suponer el shock de la gente al encontrarse con el cuerpo desnudo y embalsamado de Evita Perón, "la bienamada presidenta del presidente", y ante quien habían desfilado, llorosos,
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más de dos millones de argentinos. El escarnio de los restos duró hasta que una de las señoras asistentes a los morbosos shows del Coronel Koenig reveló al Teniente de Navío Francisco Manrique, jefe de la Casa Militar durante el gobierno de Aramburu, lo que había visto. Al pricipio, a Manrique le costó trabajo creer aquello, pues suponía que el cadáver de Evita había sido enterrado en el cementerio de Monte Grande. Pero al comprobar lo del macabro entretenimiento del Teniente Coronel, lo comunicó al Presidente Aramburu quien de inmediato ordenó destituir a Koenig.
sí, el cadáver de Evita hizo mutis hacia un destino desconocido hasta que años despúes el presidente militar, General Lanusse, se comprometía a devolverlo al pueblo. Se hallaba enterrado en un pequeño cementerio de provincias, en Italia, destino que sólo conocían unos pocos hombres del servicio de inteligencia militar. La misión del Ejército que viajó a recuperar los restos se detuvo en Madrid y depositó el ataúd en la residencia de Puerta de Hierro donde vivía el exiliado Perón con su tercera esposa, Isabel Martínez, luego presidenta de Argentina. Fue un gesto más de humor macabro, aunque Perón, sobresaltado, exigió el pronto retorno a su país de aquellos despojos. Más tarde el cadáver de Evita y el de Perón fueron inhumanos, uno junto a otro, en una lujosa cripta construida en los jardines de la quinta presidencial de Olivos, en el cinturón de Buenos Aires. Los restos de la pareja eran, sin duda, un incómodo e ingrato presente para los futuros inquilinos de la quinta, por lo cual terminaron reposando en el cementerio popular de La Chacarita. CIIID
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COSAS BUENAS DE LA VIDA ".:1111111.11.1 .1111.»111111011M MARGARITA ZINGG DE BLOHM
omenzar un año que señala el fin de una década, induce a reflexión sobre las influencias que nos han marcado en su transcurso. Habría que empezar, al hablar de moda, a partir de los roaring twenties. Las divas de Hollywood —misteriosas mujeres de cintura enfática, pantalones masculinos y suaves chaquetas— dictaron pauta en la década del 40. Los colores fluorescentes se mostraban en la oscuridad de las discotecas cuando el ritmo ácido se mantenía hasta la madrugada, y groovie, happy y libertad eran consignas clave, en los irreverentes años 60. Paz y amor fueron consagradas como nuestras primeras necesidades. El poder de las flores, luego, pasada la frontera de 1970, y el estilo Annie Hall hicieron lucir a las mujeres, rebeldes estudiantes universitarias. Pero, esta última decena de años, transcurridos bajo el arco de una cifra compuesta de cero y una semejanza de infinito, esta década a punto de concluir: ¿qué ha hecho de nosotras?
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a mujer contemporánea se ha visto imponer, en nombre de la ética posmodernista, la locura del fitness. Debe verse, por obligación, gloriosa y fresca a toda hora. ¿Cómo conseguirlo? ¿Cómo mantenerlo? Los valores de la estética que llegaron hasta el umbral de la década en hombros de la tradición, fueron desvirtuados. Una conversión por licantropía colectiva transformó a las mujeres en conejitos que viven, de ensalada en ensalada, contando calorías. Workaholic, pero en aeróbicos, la mujer de hoy levanta pesas, escala cerros, sube y baja escaleras
y si sale de noche sólo toma vino midiendo cuidadosamente el grado de alcohol. Las cremas nocturnas le borran las líneas de la cara mientras duerme, día a día, sin interrupción, y cuando aparecen un par de arruguitas de más, alerta al cirujano para hacerse de inmediato un lift. La ilusión consiste en apropiarse de la eterna juventud, a través de este martirologio, pero con calculada indiferencia y lo más natural posible. El todo resulta en la pérdida de la individualidad, el glamour y la expresión en aras de una lamentable imagen de muñequita de torta. Katherine Hepburn, quien a los 80 años se ve de película e irradia una belleza que debiera, como la del Partenón, ganar prosélitos entre quienes se propongan salir de los cartabones de la actualidad forzada. Hace años se declaró libre de ponerse lo que le diera la gana y sigue hasta el día de hoy comiendo kilos de trufas de chocolate, además ha sido incapaz de incurrir en la debilidad de una cirugía plástica. Se ve, por eso, de verdad verdad. Obsesionados por el culto a la juventud, los occidentales se desgastan con rapidez de pólvora. Los orientales, adoradores de la vejez, se conservan mejor. Un pase de sabiduría, ahora que la moda se vuelve al clasicismo, nos hará tal vez más reales, permitiéndonos disfrutar, según dice la canción, de las cosas buenas que tiene la vida.
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vez, en cuanto sus espectáculos son, casi por regla general, muy vacíos de contenido y excesivamente modulares en sus aspectos formales. El show de los grandes cabarets, cuyo paradigma podría ser el "Molino Rojo" de París, se reitera a lo largo de su historia: los mismos números de ilusionistas, stripteasers y cómicos; idénticas las composiciones coreográficas y las plumas del vestuario; ¡hasta las bellísimas coristas estandarizadas parecen ser las mismas vistas a distancia!
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DESNUDAS CIBERNETICAS loympalumwnplIII RUBEN MONASTERIOS
a "primera vez" en cualquier capital histórica impone al viajero —aún a quienes preferimos distanciamos de los circuitos turísticos convencionales— la visita a determinados lugares; pero volver la "segunda vez" a muchos de esos sitios tiene algo de vicioso, de pueril o de falta de imaginación. Pienso que la mayoría de los cabarets renombrados del mundo corresponden a la categoría de sitios que sólo vale la pena visitar una
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no de los cabarets de París que debe ser visitado por simples razones de cultura, así no sea uno inclinado a la clase de espectáculo que ahí se presenta, es el lengendario "Crazy Horse", yero templo mundial del nudismo, fundado en 1951 por Alain Bemardin. Yo cumplí con el ritual en uno de mis primeros tránsitos por la Ciudad Luz; pese a la excelencia del espectáculo decidí entonces que era uno de esos sitios dignos de verse una sola vez. Sin embargo, no fui muy consistente en tal determinación, que al fin y al cabo no era nada radical, y en fecha reciente volví apremiado por un amigo fanático de esas cosas. La nueva experiencia confirmó mi supuesto referido ala reiteración de los shows de los grandes cabarets; al cabo de unos ocho años todo parecía igual, exceptuando el minivestuano de las artistas y el nombre atribuido al espectáculo, que continúa siendo tan formalmente perfecto como en el pasado. El ritual de acceso al local es asimismo idéntico: los porteros -no todo lo amables que sería de desear- hacen que el público
se forme en fila; a una hora exacta ingresan a la gente en grupos y la ubican en las mesas sin que nadie tenga derecho a cambiar de sitio. Viene luego la "fase dos", consistente en el apresurado servicio del primero de los dos tragos que corresponden a cada quien por el precio de la entrada. De más está decir que en esa concurrencia no hay ni un solo francés; la conformamos aborregados turistas de todas partes del mundo, principalmente del Japón. ¡Dios mío, el mundo está lleno de japoneses!
lain Bemardin creó para su establecimiento un estilo conocido en el ambiente del show-business como "formato Crazy", cuyos aspectos esenciales pueden resumirse del siguiente modo: estandarización de las artistas y regularidad cartesiana en el espectáculo. Una muchacha que aspire a ingresar al coro del "Crazy", amén de un adecuado entrenamiento como bailarina, debe tener medidas anatómicas específicas: 1:70 m. de estatura, 52 kg. de peso; 88, 57, 90, cms. de busto, cintura y cadera respectivamente; el pompi debe ser airoso; muslos y pantorillas deben guardar entre sí determinada proporción. Hasta el triangulo púbico debe corresponder a lo que llaman maxi-mouchi-mouchi, o sea al patrón de un triángulo equilátero de 12 cms. de lado, y el Monte de Venus inevitablemente debe ser negro. Rubias y pelirrojas no tienen ningún chance de demostrar que su color de pelo es auténtico, en cuanto el contrato obliga a sus artistas a pintarse el vello púbico con un lápiz de maquillaje Coty N° 7.
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Las chicas se arreglan bajo potentes focos de luz; expertas asistentas las maquillan en todo el cuerpo para disimular hasta la más mínima mácula de su anatomía (de aquí la apariencia de muñecas porcelanizadas que exhiben en escena), dado que —según apreciación del propio Bemardin— sólo una mujer entre 10.000 tiene un cuerpo lo suficientemente perfecto para mostrarse desnuda con total realismo. El negocio del "Crazy Horse" no es algo que competa a la realidad, sino a la poesía y a la fantasía erótica, pero, paradójicamente, para lograr esa ilusión el personal artístico trabaja sometido a una disciplina de corte castrense, en la cual se fundamenta la perfección del show; una regularidad cibernética donde las hermosísimas coristas más que seres humanos parecen androides.
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n público pequeño burgués frío y mecanizado en sus respuestas, aunado ala aludida planificación cartesiana del espectáculo, y a un conjunto de mujeres porcelanizadas, tan inmaculadas y asépticas que parecen entes originados por la imaginación tecnológica, restan a la propuesta sexual de este y otros establecimientos similares gran parte de su poder de estimulación erótica. El erotismo alcanza su plenitud como experiencia cuando discurre con desorden, animado por la espontaneidad creadora —que es una noción opuesta a la de normatización sistemática—, mejor si contaminada por alguna imperfección naturalmente humana y hasta por alguna suciedad. El erotismo así como huye de la
luz y busca ávidamente las sombras porque prefiere florecer en lo umbrío y misterioso, también evita el orden, la pulcritud y la higiene; en su forma más conspicua es promiscuo y contaminado.
ESOTERISMO Y SECRETO 11111.1111.14 1:«1111.1:;1014 5111..11m1MIM
JUAN USCANO
n sexo, o una prenda íntima de mujer olorosos a esas esencias químicas que pretenden aromatizar las sustancias asépticas destinadas a preservar la higiene, repelen al erotófilo de calidad; en cambio se rendirá, como el unicornio ante la doncella, a la cosa que exhale un honesto olor a hembra humana, aunque sin despreciar la posibilidad de que en dicho olor aparezca entremezclada, lejana, la nota de una fragancia fina de heliotropo, malva, ámbar o canela. El divino Monte lo preferirá silvestre, espontáneamente alborotado e irregular, húmedo, tibio y un tanto huraño, en vez de diseñado con frialad matemática, porque se trata de una selva en la que queremos hundirnos hasta ser enervados por la fiebre de sus miasmas, y no de un jardín inglés por el que paseamos apacibles y displicentes mientras tomamos el té. Y tratándose de la fisura que divide el cuerpo a partir del mismo, será deleite supremo para el erotófilo encontrar en ella los residuos de las secreciones orgánicas dejadas en concavidades y pliegues naturales como efecto del cándido desaseo propio de la temprana adolecencia. COI>
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Cuando se habla de esoterismo no se debe pensar en una secta determinada, en una organización precisa, en una religión heterodoxa, sino en una de las vertientes principales del alma humana, en una manifestación de la naturaleza del hombre. El esoterismo es un modo de conocimiento y divulgación tan antiguo como la cultura y descansa sobre el lenguaje de los símbolos y mitos, y el secreto iniciático. Pero el fenómeno fundamental que lo sostiene es un estado individual de supra-conciencia situado más allá del lenguaje, algo vital y vitalicio casi incomunicable, una especie de razón intuitiva, de fe razonada, de sensibilidad afectiva e inteligente que mediante el símbolo siente y piensa alcanzar un orden intemporal, un conocimiento totalizador del mundo. Por supuesto esa supra-conciencia se alimenta de ritos y de potencialización interior, no propiamente de la psiquis sino del espiritu. La magia desarrolla el psiquismo con poderes mántricos, telepáticos, telestésicos, pero no desarrolla la espiritualidad. De allí se desprende la gran confusión occidental entre la iniciación tradicional pregonada por René Guénon y la contra-iniciación ocultista denunciada por él. El conocimiento esotérico, como todo conocimiento tradicional filósofico, religioso o místico, distingue la intuición sensible del cuerpo, la imaginación del alma y el intelecto puro o intuición trascendente del espiritu. Lo esotérico tiende fundamentalmente a afinar el intelecto, es decir, el espiritu. Esta división tripartita es tan antigua como la cultura protohistórica y
la de la antigüedad histórica. Cuando se habla hoy de intelectualidad e intelecto se parodia y rebaja la noción tradicional antes mencionada. a idea de iniciación reposa sobre la creencia del secreto. En el Sepher HaZohar, versión esotérica de las escrituras hebraicas ortodoxas, se lee: "El mundo no subsiste sino por el secreto". El racionalismo, el igualitarismo democrático, la informática y los medios no conciben semejante noción. Sin embargo en la sociedad abierta de la comunicación, el secreto subsiste bajo muchas formas encubiertas, desde las razones de Estado y los intereses empresariales de la tecnología, hasta esa inmensa capacidad de los políticos y de los gobernantes para decir lo que les conviene y no la verdad. Tales manifestaciones aceptadas constituyen versiones degeneradas del secreto iniciático guardado voluntariamente por el adepto. La palabra esoterismo procede del griego esóterikos , interior, o eisótheo, hago en trar, lo cual puede significar, de un modo general: lo que es interior, por lo tanto escondido, velado a los que no entran. La palabra exotérico tiene un sig-
nificado contrario. Las religiones son exotéricas aunque puedan tener su enseñanza esotérica. Los llamados misterios de la antigüedad helénica tipifican una modalidad esotérica. Los misterios corrían paralelamente a los ritos de la religión oficial. La cultura derivada del esoterismo satura el mundo y explica su persistencia en una época como la nuestra, devorada por la temporalidad del ateismo, la tecnología, la tecnociencia y la verborrea libérrima. CIIE)
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de una importante capa de los sectores pudientes y hasta podría perder el apoyo de las fuerzas vivas del país, que no pueden permitir que la chusma los rodee produciéndoles una terrible sensación de inseguridad.
HAY QUE SANEAR LA CIUDAD FREDDY HONORATO VALLENILLA (Mou no)
ace dos días, una vez más, hemos visto hatajos de pobres merodeando por las zonas céntricas de la capital. Si las autoridades policiales no los regresan a sus cochineras, este gobierno corre el peligro de despertar las iras
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Este lamentable hecho no es casual. Ya la semana pasada vimos a un mendigo pidiendo mendrugos dentro de la iglesia de Nuestra Santísima Virgen de la Amapola, y si no es porque el cura enardecido interrumpió el santo sacrificio y lo sacó' a patadas de la casa de Dios, el indeseable nos habría arruinado la misa. Lo dramático del caso es que ese hombre pudo haber traído otros para que sumaran sus manos estiradas, pidiéndole a uno lo que es de uno, aprovechándose de las debilidades en que la gente suele caer en el delicado acto de la contrición. Definitivamente hay que ser francos y decir que este gobierno no está cumpliendo su obligación de proteger el orden y asegurar la paz y la tranquilidad de la ciudadanía. No sólo no eliminan a los indigentes, sino que por ganar votos los dejan que anden por ahí, y en una descarada política populista se los sueltan a los ricos en sus sitios de disfrute. Ante esto uno se pregunta: ¿Es que alguna vez un rico ha ido a los barrios populares a pedir que le den algo? Las autoridades deben tomar en cuenta estas irregularidades y comprender de una vez por todas que a la gente de bien no le gusta ser importunada. Alcahuetear la flojera y la indigencia en todas sus formas, como lo fue la promulgación de la Ley del Paro Forzoso, lleva a que cada día más gente quiera ser pobre para así obtener ayudas y sub-
sidios sin trabajar, beneficiándose de los que de una u otra manera han amasado su fortuna. Basta que alguien salga en avioneta para dar una vuelta y olvidarse un poco de estos incómodos tropezones con la miseria, para que desde el aire vea el lamentable panorama de los ranchos que crecen sin límite alrededor de la ciudad. oy de los que creen que ante semejante drama se requiere tomar una posición enérgica. Ya que el gobierno no quiere acabar con ese deprimente espectáculo, al menos debería autorizarnos para bombardearlos o echarles anticonceptivos en el agua para ver si dejan de reproducirse. Este no es un odio gratuito ni unilateral; hay que ver las caras de rabia que ponen los llamados "desamparados" cuando uno pasa con su carro último modelo por los alrededores de las zonas marginales. Allí sólo se nos dan rostros de amargura y de envidia, y ya es frecuente ver cómo algunos levantan el puño en gesto amenazador, si no es que lanzan piedras o Jatas vacías de cerveza. Lo mismo nos ocurrió a un grupo de amigos que el otro día fuimos a pescar a Bahía de Pozuelos. Al anclar el yate en la tranquilidad de este bello rincón de Oriente, repentinamente aparecieron nadando treinta pobres de distinta facha y grados de indigencia que empezaron a flotar alrededor de la embarcación estirando las maños para que les tiráramos algo. Luego de ver que no les prestábamos atención, en un acto de clara violencia comunista, empezaron a zambullirse para robarnos la carnada de los anzuelos y los pedacitos de pan que
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le habíamos lanzado a los pececillos. 1 asunto es irritante y debe ser ampliamente investigado. El país no puede caer en manos de pobres agresivos y malolientes. Es necesario que los organismos del Aseo Urbano y del Minis-, terio del Ambiente apliquen la ley y los manden a colonias para pobres situadas bien adentro en el interior del país, y si se hace indispensable, expulsarlos para siempre allende nuestras fronteras sin distinción de origen ni nacionalidad. La denuncia está formulada. Ojalá no terminemos todos inundados en aguas negras y malos olores y contagiados por la desidia y la imprevisión. CIL>
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El autor es colaborado ocasional de revistas especializadas. Ejerce su pro fesión de arquitecto en el Grupo Plastimón, depat tamento de rediseño de e talaquitas y estalagmitas Su tesis de grado sobre I decoración y mejoramiento de ranchos y barracas con** la adición de fachadas de castillos, le mereció els primer premio de la Fundación Cloé, por lo audaz y atrevido de la propuesta. Fue secretario de finanza del Grupo Patria, Tradició y Familia, y últimament ha incursionado en el en sayo sociológico co ideas de avanzada. Pa ralelamente a su activida profesional, es un gran aficionado a los crucij gramas en cuti y a la pesc de altura. .
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LH HOTISSE1File El Restaurante de los Ejecutivos y las Cenas elegantes. Cerca de los Centros de Negocios
oCurACwRIES MARIA ARAGUANEY 1 estreno de un viejo presidente ha marcado de entrada los ánimos y el tenor de las noticias. Bodas sorpresivas, desencantos nuevos, amigos contaminados por el engreimiento y la irascibilidad han tomado por asalto nuestro East-Side. El interés por los bajos fondos de algunos contrasta con la avidez de lenguas de golondrinas que pasean otros por los cocteles regados con whisky nacional. No falta quien se proponga ahogar la nostalgia del papel higiénico perdido, en clubes nocturnos a la moda y en bares donde antes no hubieran puesto nunca los pies. Los más sensatos se contentan embriagándose de velocidad al volante de sus automóviles. La edad de la jubilación, por fin, anda sembrando neurosis y suicidios a diestra y siniestra. El número de mujeres solieras tiende a aumentar. La soledad, antes sentida como fracaso, se redime en estos tiempos en el trabajo, a pesar del injusto acecho del machismo militante del trópico. Jóvenes y menopáusicas eluden así las solicitudes de la neurastenia. Insisto, por eso, sobre todo con las mujeres de la burguesía (y perdóneseme el ex abrupto marxista), que se prevengan, en la medida de lo posible, contra las ganas de no hacer nada cuando abunda el dinero y pareciera que la cabeza no da para nada más honroso. No conviene abusar del ocio, padre perverso de todos los vicios. Lesbos y sus mutiladas cohortes lo usan como arma estratégica. Dedíquese a la poesía, querida
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amiga, o al estudio de los insectos. Aprenda a leer. No juegue tanto golf, deporte que debilita la mente y pone más viejos y aburridos a los ancianos fastidiosos. Preserve su tiempo si se siente joven. Cambie de oficio, si lo tiene, y de deporte, aunque no lo tenga. No llegue a su casa colocándose una bata vieja y unas zapatillas victorianas. Renuncie este ano a la fatuidad. Empiece a interesarse por la ópera. Deje los aburridos tragos de mediodía, las mediocres copas vespertinas y las deprimentes visitas al costurero en boga. Insista en cultivarse y hacerse rica. Cuando las circunstancias le brinden un rato de ocio, recuérdelo, más le vale disfrutarlo con la frescura de un bon vivant que con la inteligencia de un obrero. Cía> Exces0 Marzo 1989 89
TODAS LAS MUJERES SON TUYAS
JORGE
PARRA
Que el azogue y el nitrato de plata hayan ayudado a Jorge Parra a expresar la espiral de los cuerpos que encantan los sentidos de los hombres parece normal en un joven químico. La fotografía, espejo que inmoviliza, se llena del espíritu de los espejos deformantes de los parques de atracciones cuando Jorge Parra, nacido en Caracas en 1957, se propone escuchar el misterio del desnudo como los niños escuchan el mar en un caracol. La fotografía, igual que la química fueron sus estudios en la Universidad Simón Bolívar. Ha publicado fotos en revistas (Bisturí Parlante, Pandora,Bazaar, Vaudeville) y salones de arte ( Michelena, MAC ). Se dedica en la actualidad, cuando no está desfigurando en el lente el cuerpo de la mujer con el alucinante ritmo de las cópulas apasionadas, a la foto publicitaria de moda femenina. caz)
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CUENTO
Carujada Corresponde a un capítulo de la novela inédita del autor que publicarán en el curso de este año las editoriales Alfadil de Venezuela y Laia, de Barcelona, España. La Carujada está referida al histórico atentado setembrino en Bogotá. DENZIL ROMERO
P edro Carujo entró a la
"El bobo de Triana conocía al dedillo el nombre de cada uno de los conjurados. Sr, si. actuarían esa misma noche"
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casa de Vargas Tejada corriendo, la cabeza aturdida por la gravedad de la noticia que acababa de recibir, mordisqueándose los labios y con la inminencia de una catástrofe reflejándosele en los ojos, jadeante, casi sin resuello, tras la empinada subida de la carrera séptima con la calle quinta, en el tradicional barrio de Santa Bárbara. De nuevo habían fracasado sus planes tiranicidas, no podía creerlo. El capitán Benito Triana, oficial del ejército, comprometido a respaldar la nueva conjura prevista para el próximo 25 de octubre, día de San Simón y onomástico del Tirano, se fue de la lengua con el teniente Francisco Salazar, libando copas en la botellería "La Rosa Blanca" de Francisco Stevanel. Creyendo que los ganaría para la causa , en el colmo de la imprudencia alcohólica, confió todo al propio Salazar y a Stevanel y a otros presentes en la noche de farra. Al día siguiente, esa misma mañana, Salazar dio cuenta al gobierno y Triana fue arrestado en consecuencia. Carujo recuerda que fue él quien inició a Triana en la conspiración y se maldice, responsabilizándose por tan infeliz ocurrencia. Por momentos se sintió estúpido. Pensó, "Lo soy". Lo era, demostró serlo. Debió presumir que Triana no era hombre de fiar. Endeble, flaco y lampiño, ¿se puede dar fe a quien no tiene ni un pelo de bigote que dar en garantía de su palabra empeñada?, aguardentoso, de ojos amarillentos y nariz rubicunda, fácil era precaver que vendiera a su madre por un trago de la niña María chiquita. El tenía la obligación moral y política de desconfiar, de sospechar que un militarcito rascoso, capaz de emborracharse cada noche en la primera botellería que encontrara al paso, no podía ser hombre de conspiraciones. Tendría que remediar el entuerto y convencer a sus camaradas para actuar
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sobre la marcha. Si no procedían de inmediato, todos terminarían en la cárcel. Los matarían. Les seguirían juicios sumarísimos. El bobo de Triana conocía al dedillo el nombre de cada uno de los conjurados. Sí, sí, actuarían esa misma noche. Era una idea loca, precipitada, audaz, pero la única posible que podía arrojar una salvación. Igual era factible que fracasaran. Sí, también podían fracasar, pero al menos en lo que al él tocaba, moriría actuando como un valiente, y no cogido en la trampa como ratoncito, con la lastimosa sensación de ser un estúpido. Allí en la casa de Vargas Tejada, ansiosos por la incertidumbre y el malestar de la malanueva, estaban la mayoría de los comprometidos: el propio Vargas Tejada, Ezequiel Rojas, José Ignacio López (Lopote), Rudesindo Silva, Agustín Horment, Juan Hinestroza, Rafael Mendoza, Teodoro Galindo, Emigdio Briceño, Mariano Ospina, Wenceslao Zulaíbar, Florentino González, Pedro Celestino Azuero, Juan Miguel Acevedo. Carujo trae consigo las últimas informaciones sobre el percance. A Benito Triana todavía no le han tomado la declaración informativa. Es posible que no la rinda hasta el día siguiente. El tiempo es corto y se vuelve forzoso precipitar los acontecimientos. Los conjurados cavilan. Sienten que están perdidos. Ciertamente, la mitad de lo sabido por Triana es suficiente para que todos sean llevados al paredón. Canijo insiste con su tesis de que el atentado debería cumplirse esa misma noche. Las circunstancias adversas estimulan al verdadero revolucionario, murmuró convencido antes de terminar su perorata con un "¡Actuemos de inmediato, compañeros, sin vacilar. Vacilar es perdernos!" Puños en alto y blandiendo sus pistolas, juran los presentes por "la túnica ensangrentada de César", por Marco Bruto y por Cayo
CUENTO Casio Longino, por Plutarco y por el inefable don Francisco de Quevedo y Villegas. Rudesindo Silva tiene a su orden una brigada de artillería. La luna llena facilitará la movilización. El golpe se dará a la medianoche. Colombia espera por nosotros , se repiten convencidos. Esta noche, finalmente, nos desharemos del Tirano, un tirano sanguinario y homicida; elevado en sangre y en sangre establecido; que buscó todos los medios para llegar a lo que tiene, y mató a los que fueron medio para ayudarle. No podíamos haber tomado mejor decisión. Tiempo hay para celebrar por adelantado el triunfo presumible. Jubilosos, levantan y entrechocan sus copas de espumita. Así llamaban entonces la cerveza en Bogotá.
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seguidas, procedieron a dividirse el trabajo. Vargas Tejada y Ezequiel Rojas se encargarán de sorprender y matar al coronel Diego Whitle, veterano de la Legión Británica y comandante del batallón Vargas, seguramente pernoctante en su casa de la esquina de Lesmes. Rafael Mendoza, Juan Hinestroza y Rudesindo Silva con el grueso de su brigada, tomarían por asalto el cuartel Vargas. Emigdio Briceño y Teodoro Galindo habrían de libertar al general Padilla. Juan Miguel Acevedo participaría a Santander la decisión tomada por la mayoría para que, en conocimiento de causa, tomara sus providencias. Pero, quede claro que se trata sólo de una participación. Nada de darle beligerancia ni de pedirle pareceres. Carujo, por su parte, con los restantes comprometidos y diecisiete soldados que, al efecto, le supliría Rudesindo Silva, emprendería el asalto a palacio. Le resultaba insoportable creer que esta vez pudiesen fracasar de nuevo; que siempre ese haz de causas entreveradas (llamado destino, providencia, casualismo, azar o necesidad) favoreciera al Tirano en contra de los designios y el sentir patriótico de una mayoría de justos. Meditabundos, tratando de rechazar la idea de un nuevo descalabro , se acarició en el cinto sus dos hermosas pistolas de repetición. Llegada la hora del golpe, desde el cuartel de Silva, al frente del pelotón de diecisiete soldados, indios mansos de la sabana que no sabían para que se les usaba ni adónde los llevaban ahora, Canijo emprende su marcha hacia el San Carlos. Toma la vía que da al sur del observatorio astronómico hasta la carrera séptima, cruza por el costado occidental del colegio de San Bartolomé y no se detiene hasta llegar a la plazuela del Cuervo, donde ya les esperaban los otros conjurados dispuestos para la operación. El frío bogotano se cuela hasta los tuétanos y, a diferencia de otras noches, no cae la consabida llovizna calabobos. El viento no hace ruido. Nada suena. En la soledad, sólo se oye el murmullo de voces y el chás-chás de los pasos de los que con él van. La ciudad está a oscuras, pues a las once, por ordenanza municipal, se apagan los faroles de las esquinas, y las lámparas de las casas principales se han apagado también desde hace rato. Convencido de que todas las probabilidades han sido previstas y de que el triunfo, efectivamente, les favorecerá esta vez, Canijo se pone al frente del grupo para tras montar la cuadra que queda para llegar al palacio. No cabe en su gozo. Piensa: en unos minutos más, todo se habrá con-
sumado; una presión en el gatillo y listo; una bala descerrajada en el corazón, y el Tirano, cadáver. Probablemente, ahora, en la alcoba principal del palacio, él estará refocilándose con la puta de Manuela. Desnudos los dos, uno encima del otro, retozones y desprevenidos, chupándose los jugos de sus respectivos sexos.
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n placer ominoso comienza a rebullirle a Carujo por todo el cuerpo, como si una corriente túrgida, especie de goce sensual, se le levantara desde los ijares hacia la cabeza hasta saturar a su resquebrajada conciencia. Antes de darle muerte al Tirano, tal como lo había presoñado tantas veces, mucho le gustaría poder infligirle las más feroces torturas, en presencia de Manuela, por supuesto que en presencia de Manuela, para que el escarnio le resultara mayor. Le gustaría caerle a puñetazos, patadas y mojicones; azotarlo con ortigas y gatos de nueve colas, con bastones y pértigas de hierro, con varas secas e inmensas vergas de toro; arrancarle los vellos del pubis y las axilas, los cabellos, las orejas, los dientes, las uñas, el pellejo todo; hundirle los ojos a fuerza de pinchazos y rellenarle las cuencas vacías con lacre fundido. Le gustaría clavarle alfileres en las nalgas como en un acerico; coserle el orificio anal con hilo de zapatero; echarle chorretones de esperma caliente, a falta de lava volcánica, por las bolas, las espaldas y el pecho desnudos. Gozaría un mundo amarrándolo a la rueda del potro o haciéndolo caminar por una senda cubierta por pedazos de vidrios, filosos fragmentos de metal, tachuelas puestas de punta y clavos encendidos. Feliz se sentiría si pudiera, con un martillo, aplastarle los pies, y, con un cuchillo herrumbroso, amputárselos; si pudiera rebanarle, en telas tan finas como lonjas de tocineta, los labios y las mejillas y el lomo; o perforarle la lengua y atizarle el culo con hierros puestos al rojo vivo, o cortarle los genitales en menudillo para echárselos, luego, a los gatos y perros hambrientos y a los burros y chivos voraces de las orillas de los ríos de San Francisco y San Agustín, a los de los potreros de la Estanzuela, a los de los basurales de Puente Nuevo y el hospital de San Diego. Pero, no. Con la urgencia del caso y la experiencia tenida en los intentos pasados, sabía que no estaban para riesgos inútiles. A fuer de realista, tendría que conformarse con gozar la sorpresa y el estupor del Tirano ante su presencia compulsiva y la de los restantes hombres armados, y con el estremecimiento que le sacudirá los hombros y le descompondrá el rostro y le revirochará los ojos y le ensanchará las aletas de la nariz en un nervioso husmeo de bestia acechada; un estremecimiento que le producirá un hipo seco, desgarrador, que nunca terminará de convertirse en náusea, y le originará, así mismo, otros tantos violentos choques orgánicos: contracciones musculares que le paralizarán el vientre, brívidos que le azotarán las espaldas, sudoración copiosa, una hiperhidrosis de lluvia desmadrada, hervores de la sangre, arritmia cardiovascular, un terrible gastroespasmo, el no menos terrible angor pectoris
"Probablemente ahora, en la alcoba principal del palacío, él eslora retocilándos•COn la puta de Manuela -.
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CUENTO y toda clase de dolores neurálgicos, la fiebre ondulante, el engarfiamiento de los dedos de las manos,
"A las doce en
todos los relojes; a las doce en sombra de la noche estaban, exactos, Pedro Carujo y sus hombres, en la puerta del palacio que encontraron entreabierta".
un frío inaguantable en la planta de los pies, y hasta la sobreveniencia no descartable de una apoplejía cerebral, la apoplejía de las apoplejías, o de una cardiomalacia cuasi fulminante, mejor una cardiomalacia, que le reblandeciera el corazón a punto de infarto con la blandura del mazapán de un cojín de plumas, tan tembloroso como una jalea o una capiruleta, cuando lloroso recuerde, justo, todos sus crímenes indescriptibles, sus despiadas juderías, sus innúmeros delitos contra la cosa pública y el derecho de gentes y las buenas costumbres, sus faltas leves, las menos graves, las graves, las más graves y las gravísimas, sus fechorías, sus contravenciones y sus quebrantamientos, sus pesadeces y malasangruras; todo el mal que le ha hecho a Colombia y a la humanidad entera; la historia de su vida, por tanto, de comienzo a fin; un estremecimiento, por último, que terminara causando el que el muy pérfido mal partido, con íntimo rubor y sincero descontento de sí mismo; sintiéndose una alimaña infesta, una rata pelagrosa, un escarabajo pelotero, una fótula asqueante, un gusano, un vermes solitario, una ameba, un bacilo de Koch, o de Eberth, o de Nicolayer, o cualquier otro microbio insignificante, quizás, termine cagándose o meándose en sus propios calzones, sus elegantes calzones de Cerinza comprados en la tienda del pomposo don Antoñito Castro; antes, sólo segundos antes, de que él, el comandante Pedro Canijo, el más grande "tiranicida" de la historia, el "tiranicida" por antonomasia, le descargara (seguro que se lo descargará), imperturbable, animoso, certero, con su hermosa pistola de repetición; una pistola con fulminante de cápsula; Deringer legítima, de Filadelfia 1826; obra de Deringer, el famoso fabricante de fusiles rayados para el gobierno de los Estados Unidds; Deringer y no de Beringer, ni Pseudoderinger, ni tan siquiera Scottey, ni J. E. Evans, ni Tryan R. Constable, ni J. Jacobs, ni Gillespie de Nueva York, ni Dimick de Si Louis, ni Hoffman de Vicksburg, ni Klepzig de San Francisco; una Deringer, longitud 22,5; calibre 0,51 pulgadas; forma compacta; "avancarga" de varios disparos y cañón muy corto,
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patinado en pardos ántirrefiejos, y culata de plata; que, con su par, sólo semanas antes le había regalado el general Córdoba; descargárale, decía, el único, ingrimo, infalible tiro de gracia final.
Arrebujados en sus capotes de calamaco con colores subidos y sus sombreros jipijapas de Bucaramanga o Zapatoca, excepción hecha de los soldaditos de Rudesindo Silva, que apenas iban cubiertos, como todos los soldaditos del Ejército de la República, con roídas ruanas de bayeta, calzones de lienzo ordinario a media pierna, gorrol orejeras de cuero de venado y sandalias de soache; cantando el himno "Bebamos cantando/ hijos de Colón,/ pues se rompió el cetro! del fiero Simón; a las doce de la noche; a las doce en punto de la noche; ¡ay que terribles doce de la noche! ; a las doce en todos los relojes; a las doce en sombra de la noche; estaban, exactos, Pedro Canijo y sus hombres, en la puerta del palacio que encontraron entreabierta. Agustín Horment fue el primero que entró e hirió con su espada al centinela que le dio el alto. Subió la escalera y se colocó en el rellano para impedir que nadie bajara por allí. Carujo situó varios hombres en las puertas para bloquear la salida. Azuero, de una puñalada, hirió gravemente a un cabo de la guardia, quien en su turno, le devolvió la agresión con un sablazo en la cabeza. Para guiarse a través en la oscuridad de los pasillos hasta la alcoba donde dormía el Libertador, Juan Miguel Acevedo, que ya había regresado de cumplir su misión frente a Santander (quien, dicho sea de paso, había decidido irse a dormir a casa de su hermana casada con el coronel José María Briceño, sita ella al frente de la placita de los capuchinos y en la que también vivía el general Pedro Briceño Méndez, hermano del anterior y persona muy cercana a Bolívar, para evitar con ello cualquier suspicacia en su contra), encendió un farol e iba adelante alumbrando la ruta de sus compañeros.
E l alférez Ibarra, al oír ruidos en la parte baja del palacio, salió desnudo de su habitación donde fornicaba con una de las esclavas de Manuela, la negra Nathán, de empinados senos, esbelto talle y anchas sentaderas. En las primeras de cambio, nomás saliendo del cuarto, se tropezó con Mariano Ospina, quien, confundiéndolo con el Libertador, le propinó una herida de sable en el brazo. Sangrante, casi desfallecido, cayó Ibarrita al piso. Así nana la escena un cronista de la época: "Tirado al suelo, el alférez Andrés Ibarra, manando sangre por el brazo izquierdo, parecía un héroe griego inmolado en el sitio de Troya, tal su perfil iracundo, sus broncos pectorales, su vientre glabro, su miembro aún endurecido y la fuerza de sus muslos de gimnasta, domador de toros o lanzador de discos. Venía de fornicar con la esclava Nathán que, a gatas, desnuda también, trataba de alcanzar sus aposentos..." Un detalle descuidaron los conspiradores: custodiar los balcones de la alcoba principal donde el Libertador dormía con la Manuela. Por uno de esos balcones, se fugó el perseguido. Cuentan que fue Manuela la que lo indujo a ello. CIND
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