A ESTAS ALTURAS LA CHEVROLET BLAZER
No TIENE MÁS NADA QUE PROBAR
Ni al nivel del mar, porque rodando de un lado a otro del país, por altos y bajos, la Chevrolet Blazer se ha encargado por sí misma de probarlo todo. Por eso pensamos que no es necesario volver a repetirle que posee un motor de 6 cilindros en V de 200 HP, ni que ahora trae bolsa de aire (Air Bag), ni que su suspensión es la más estable que podrá encontrar. Sólo eche un vistazo a su alrededor, y si no ve una, tal vez esté perdido en un paraje muy lejano o simplemente es hora que visite a su oftalmólogo. Para más información llame al 800-CHEVY (24389). Porque de ahora en adelante usted nunca viajará solo, Chevy Asistencia
El
-4011 El exclusivo servicio de asistencia vial de Chevrolet.
Con el respaldo de General Motora
BLAZER
GENUINO CHEVROI 1
C.,
Veuve Clicquót Ponsardin SON FONDEE EN 1 77 --
2
A
REIMS
U.ANcE
ELABORÉ PAR VEUVE CLICOUOT PONSARDIN REIMS FRANCE N ?"
co•
C HAMPAGNE VEUVE C LICQUOT REIMS - FRANCE
EXCESO Edición N'OS Julio 1900
Depósito Legal pp. 89-00-13 ISSN: 1315-5849 Miembro del Bloque de Prensa Venezolano y de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) DIRECTOR
Ben Amí Fihman COORDINADORA
Francesca Cordido REDACCION
Juan Carvallo, Humberto Jaimes, Adriana Ortiz INVESTIOACION
Jacobo Serntya DIRECTORA DE ARTE
Hosanna Espinel ASISTENTE DE DISEÑO
Marina Ferreiros FOTOORAFIA
Juan Camacho DISEÑO DE PORTADA
Rosanna Espinel ILUSTRACION ELECTRONICA
Denis Frank SERVICIOS ESPECIALES
EFE, Sygma, Gamma, The Robbins Office, Vanily Fair, Spy, The Sunday Times Magazine, El Nacional, Bloque Dearmas CORRECCION
Clara Linares ILUSTRACIONES
Jesús Torrealba. José Ignacio Herrera. Miguel Angel Villalobos COORDINACION PUBLICITARIA
Carla Patricia Ramos VENTAS PUBLICITARIAS
Promotora 35940 C.A.: David Guerra Promotora 13-29 C.A.: Livia Rojas Janet Cano ASESORIA COMERCIAL
María Sol Pérez Schael ASESORIA JURIDICA
Carlos Parada Quintero PREIMPRENTA
Preámbulo C.A. MONTAJE FINAL
Fotolito Gelear IMPRESION
Editorial Prima % era D1STRIBUCION
Distribuidora Continental S.A. (Venezuela) Distribuidoras Unidas (Colombia) World News International (Estados Unidos) EDITORIAL EXCESO
Esq. Gradillas, edificio Las Gradillas A. piso 3 Telfs. 81.7724, 81.7727, 862.7273 Fax (02) 74.4676, 861.3375 Telecontacto 693.1822, 693.1933 PCIave 17974 EXCESO NO HACE PUBLICIDAD REDACCIONAL
Todos los derechos reservados. Ninguna parte do esta publicación puede sor reproducida, archivada en sistemas
do clasificación o reproducción da datos, retransmitida en modo alguno,
electrónico, eléctrico, químico, mecánico, óptico, fotográfico o cualquier otro, sin el permiso previo por escrito de loa editores
2
EXCESO
JULIO 1996
El árbol del conocimiento El odio es un amor no correspondido, decía Cioran. La sentencia, oportunamente citada por Juan Carvallo en este número de Exceso, serviría para aclarar, a la luz de la Filosofía, el escandaloso conflicto que ha enfrentado a Ignacio Quintana, enigmático hombre de las finanzas, con el Presidente de la República y sus hijos. Episodio sintomático, el allanamiento de la casa del editorialista de El Nacional y su huida a Miami —donde quiso dar rienda suelta a sentimientos, denuncias y aspiraciones ante el micrófono de un grabador— son un ejemplo simbólico, entre muchos otros, de la enrarecida época que vive el país. La urbanización de Sabana Grande se perfilaba, hace unas décadas, como asiento vitalicio de la bohemia caraqueña. El puñado de calles y avenidas —acogedoras, aldeanas y cosmopolitas— atraían entonces a estudiantes, poetas y artistas que abrevaban conocimiento e inspiración en sus librerías y tabernas. La cercanía de la UCV, el atractivo de los cafés al aire libre y la bonanza que se aclimataba al este de la pequeña urbe en plena metamorfosis metropolitana permitirían explicar el esplendor de aquellos años. Exposiciones memorables, editoriales felices y hasta una república ficticia, pandillas y peñas literarias, hicieron la pequeña historia de ese cantón tan imaginario como real, hoy en vía de desaparición, que el escritor Carlos Noguera evoca con cierto dejo melancólico. La India ha sido visitada por Occidente en mil y una formas. Las armas y el candor fueron por tradición los torpes intérpretes con los que llegaron a abrirse paso, en la densa y extensa geografía de ese continente inexplicable, el conquistador y el viajero. En nuestro tiempo, el último ha terminado reemplazando al primero. La literatura —desde Rudyard Kipling hasta Antonio Tabucchi, pasando por Somerset Maughan y E.M. Forster— construyó sobre la tierra de los maharajás, los intocables y el Taj Mahal una galería de imágenes que siguen ejerciendo una incurable fascinación sobre el turista en falta de exotismo. Señuelo metafísico, la nación que inventó la más atractiva de las religiones —el budismo— está al alcance de cualquier agencia de viajes. Pero, primer productor cinematográfico del mundo, la India no es precisamente un país de película. Así habrá de concluir el visitante desprevenido en su primera incursión en los torrentes de miseria y de buhonería espiritual de Nueva Delhi, el Ganges y el Rajastán. En este caso, la periodista venezolana Rossana Di Turi.
r1rU E V A
SAMURAI AttLiirdkAlk UNA IMPONENTE CREACION
Venezuela tiene cosas UNICAS.. Y el. AWIAIVA, imponente tepuy que sobresale en medio de la selva, es una de ellas. Con este espíritu místico, aventurero y único, fue creada la nueva SAMURAI AUTA1VA.
Calidad 0e0
TOYOTA
Este nuevo vehículo es el enlace perfecto entre dos formas de vida completamente diferentes. Con la nueva SAMURAI AUTA1VA usted puede transportarse a un mundo de aventura, mientras que disfruta al lado de su familia de detalles de gran confort como su tapicería de tela, aire acondicionado, vidrios y seguros eléctricos, además de su poderoso motor 4.5 lts. y la durabilidad Toyota.
e
Inventarío NOTAS
Punto E Vestidos a rabiar. Matrimonio parejo. Adiós al diván High-8 Lusitanos a bodega llena
Golosario La brújula del paladar
17 La sartén por el mango Opera Café, lírica culinaria Cyberia Noticiero virtual
20 Sexto sentido El radar de los placeres de la carne y el espíritu 26 De costa a costa Lentejuelas bajo la lupa 1/4 de hora Personajes extraídos de la vida misma
30 Runrún Tutto sotto voce
5 Tierra de juego Los dardos de la redacción
AIRTICILOI—OS
32 Karma Con la mochila llena de místicas esperanzas el viajero arriba a la tierra de Brahma, Siva y Visnú. Pero el país de la promesa numinosa cede paso a la cruda realidad que, amalgama de cuerpos famélicos e impotentes dioses, cancela hasta el último candor Amores en blanco y negro Entre lamentos por un idilio que truncó la vida, Yesmín Royé llora el ausente príncipe azul. Imbatible, la periodista aspira conquistar con la misma maniobra hogar y municipio. Temeraria, confía como en los cuentos de hadas en un final feliz. Desde New York, buena sombra la cobija Un martillo por favor Escuálido y desamparado, el mercado del arte en Venezuela sufre los estragos de la crisis. Una mujer, Odalys Sánchez, reinventa la fórmula del quién da más e impone la subasta pese a denuestos y detractores. Un nuevo boom se avizora
50 Caer en desgracia Gracias a una reciente investidura como articulista de El Nacional, Ignacio Quintana disfruta de la fama que una ostensible pero imprecisa fortuna no le había otorgado. Una lamentable intriga palaciega lo colocó en la lista de los indeseables del gobierno y hoy, mientras planea el regreso a la patria en un fastuoso exilio mayamero, da rienda suelta a las palabras
56 Luces de bohemia Desvaído el lustre de otros tiempos, Sabana Grande permanece en pie. Con la cara sucia de violencia y miseria, sigue recibiendo a los fieles de siempre —escritores, periodistas, estudiantes— que, abrumados por la nostalgia, intentan rescatar pasados esplendores
Mapa del quehacer Restaurantes, cafés, locales nocturnos, plástica, teatro, cine, música...
CO LOFON
130
El negocio de este mundo
Columnas Las firmas en su tinta
Un retrato descarnado del ascenso y la caída de la familia Gambino y de la génesis de la temida Cosa Nostra, en la ambiciosa crónica de John H. Davis: La dinastía mafia
IVIE FIVE NI IENTOS
Horóscopo Sideral HUMOR
96 Los cerebros de Sergio Sergio Ruiz y su trazo a torcer
4
EXCESO JULIO 1996
CARTIER SIGNE SON CUIR NOIR EN OR 18 CARATS, L'ART D'ETRE UNIQUE.
OAILLIERS DEPUIS 1847 - .-UEL'A'' N JOYERIAS DE-ALTO PRESTIGIC5. RTIER BOUTIQUE. AV. SANTIAGO MARIÑO, PORLAMAR, ISLA DE MARGARITA. TELEFONO: (095) 61.06.19
Dimos y diretes
UNA TRIBUNA ABIERTA
Gula de guías Después de saludarlo, quiero agradecerle efusivamente los sinceros y sencillos comentarios publicados en su prestigiosa revista correspondiente a mayo, alusivos a nuestro restaurante francés Le Cirque. Las informaciones acerca de los diferentes establecimientos mencionados de manera tan profesional en la Guía de Caracas servirán para que no sólo los caraqueños sino los turistas y grandes empresarios que nos visitan puedan tener una idea de los buenos sitios donde degustar platos de cualquier parte del mundo. Sus notas profesionales de gran gastrónomo nos retan a que en el futuro tengamos que ser mucho mejores. Reciba, en nombre de los ejecutivos y trabajadores del hotel CCT-Best Western y su restaurante Le Cirque, nuestro mayor agradecimiento. Edgar Palma Sánchez Gerente General Maitre de Table Restaurateur Chaíne des Rotisseurs
, Al prmcipe , lo que es del príncipe A través de años como incansable lectora de diversos medios de comunicación, nunca había sentido la necesidad de escribir para manifestar mi inconformidad por un artículo publicado, pero hoy tomo la decisión de hacerlo por primera vez para salir en defensa del príncipe Pompilio, quien es un amigo muy estimado, así que envío ésta aprovechando las cortas vacaciones que paso en Caracas, en casa de una de mis hermanas. En mi rincón andino pocas veces podemos leer Exceso, pero mi esposo, adicto a la revista desde hace años, periódicamente la encarga en la vecina ciudad de
6
EXCESO
JULIO 1996
Valera, por ello sé y confirmo que es una de las mejores y más serias publicaciones hechas en Venezuela y que sus bien realizados artículos siempre me han parecido cuidados hasta el más mínimo detalle para ofrecer al público lector un trabajo veraz y objetivo. Por esto, con gran asombro y estupor leí en la pasada edición de mayo (N° 86) el reportaje Dios, salven al príncipe. Trabajo muy bien escrito y con un manejo del lenguaje acorde con el bien ganado prestigio de la revista, pero que lamentablemente me parece carente de objetividad. Desde hace muchísimos años conozco a la muy honorable familia Quevedo Bastidas, una de las más antiguas y distinguidas de Boconó, estado Trujillo; siendo gratamente recordados don Claudio J. Quevedo Cadenas y su adorable esposa doña Antonia María Bastidas Díaz, "gentiles señores de El Barzal" y abuelos maternos del príncipe Claudio, noble joven a quien también conozco y respeto. Por ello, con total seriedad puedo decir que Claudio, "como le gusta ser llamado", no vive en ese estado tan deplorable que recrea el reportaje, dado que su residencia en el suroeste de la capital (no en el oeste, como se menciona) si bien no es de un lujo ostentoso, tampoco presenta una modestia exagerada. Aparte de eso, como lectora y amiga no me agradó el hecho de que el periodista Carvallo minimizara al entrevistado, a quien, aparte de ser una persona excelente, de extrema sensibilidad y exquisita cultura, le adornan méritos que han sido reconocidos por varios entes como Fundavalor y la Escuela de Cine Venezuela, que le han otorgado varios diplomas: es ganador de la Tijera de Oro como diseñador revelación del año durante el Festival de la Belleza y recientemente recibió un reconocimiento Honor al Mérito.
Igualmente, considero un error no reseñar que desde este año el príncipe Pompilio ha sido nombrado representante para Venezuela y Latinoamérica de la Asociación de Italianos en el Mundo y de la Biblioteca Histórico Heráldica Genealógica de Florencia, fundada en el siglo XIX. Alto honor concedido por primera vez a un ítalosuramericano, lo que debe llenarnos de orgullo. Pero, como todo no puede ser negativo, felicito al señor Carvallo por la excelente relación cronológica de la historia familiar de los príncipes Di Pompilio, la cual conocíamos algunos íntimos amigos; también deseo felicitar a la persona que tuvo a su cargo la fotografía del trabajo. Ana Méndez de Villegas
Cotizaciones Me dirijo a ustedes muy respetuosamente a través de la presente para expresar mi desacuerdo con la reseña que hacen acerca del local Tonino's Café en la Guía de Caracas correspondiente a junio. Allí indican que los precios del café están muy por encima de los del mercado, lo cual es totalmente falso, ya que los mismos son similares a los locales del mismo estilo y hasta están por debajo de otros de inferior calidad. En vista de ello, agradezco eliminar tal comentario por considerarlo perjudicial. Mientras les exijo, por respeto a sus lectores, entre quienes me incluyo, informar con mayor veracidad para así garantizar la credibilidad de su publicación. Antonio Lossada P. NR. La nuestra ha sido una evaluación comparativa derivada de una amplia experiencia. Lamentamos el desacuerdo.
NOVALAR Mobiliario de Diseño
Calle Milán. edf Novalar. California Sur. Telfs 22.98.11-22.90.44/Av. Principal de La Yaguara, edf. Distel,PB. Telf.:471.26.69/Av. Venezuela cic Mohedano El Rosal. Teif.: 953.51.02
Al alcanzar la cima de una escarpada colina rodeada de niebla, se arriba al castillo gótico de un marqués tropical. Un par de rodwailers —los nada simpáticos perros de La profecía— de lustrosa piel y babeantes fauces corta el paso al visitante mostrando los filosos colmillos. Con un chirrido espeluznante las puertas del palacio se abren para mostrar las siluetas de un hombre y una mujer con atavíos del mismísimo infierno. Podrían ser éstas las primeras líneas de una historia que tuviera como protagonistas al irreverente diseñador de alta costura Otilio Salazar y a su esposa, pero la realidad es distinta. Artífice de una línea de vestir cuya materia prima son el cuero negro y las trabillas —Conflicto es su nombre—, emigraría del terruño en busca de horizontes más amplios para su non grata cosmogonía. Sin embargo, una suerte de maldición de la que no puede escapar lo acorralaría en un mundo plagado por gente tradicional y de mente estrecha. "Vivo en Dinamarca desde hace seis años y me mantengo con la ropa que vendo a particulares en mi tienda. Es un pequeño país muy conservador. Yo lo llamo la Nicaragua de Europa. Además, la masa bruta sigue siendo bruta en cualquier lugar del mundo". No obstante, Otilio logra escapar de los convencionalismos y se refugia en el diseño de trajes que evocan civilizaciones antiguas, tiempos idos, culturas extintas. "Vivo en mi atelier, una fantasía que es real. Es como una ilusión palpable de un momento que no existe, una especie de futuro pasado. ¿Quién dijo que los sueños no podían convertirse en realidad?". Le gusta provocar a su interlocutor —o a su público, que es lo mismo—, convenciéndolo de que es una criatura oriunda del reino de Satán y que suya es la fuerza creadora del mal. "Odio a todos y también a mí mismo. Ese sentimiento me ani- ma a crear". Al final, después de tanta alharaca sobre lo demoníaco y la apertura mental, aflora una dramática contradicción: "Somos una pareja muy conservadora. Sentimos que hoy en día todos los valores se han perdido".
—JC
•
ea
SOMETIIING SPECIAL DE LUXE SCOTCH WHISKY
.."' ..,•,.."'In . j ....,
-4,,,.10
•
\•
Ilin.,':51,'
.'''
..-
'
115.1 S
7. s.355151 d'O° €14 " I" S14/1 g k.10
Srnprani
nobtra calidad con responsabilída
tv
1 111111 1
Adivina, adivinador
JUAN CAMACHO
Trasponiendo el límite de la conciencia e invocando el misticismo, un dispar grupo de especialistas hace malabares para iluminar el camino a las transidas almas de este aturdido país. El Centro de Terapias Alternativas —como eufemísticamente bautizaron el proyecto— congrega en un mismo espacio actividades tan reñidas como la adivinación, el psicoanálisis y la astrología, bajo la orientación de un singular terceto: Miguel Posani, psicólogo jungiano; Héctor González, vidente, capaz de atisbar el destino a través la energía que despide el cuerpo humano, y Esperanza Urdaneta, astróloga de larga trayectoria. Viajando del cosmos al individuo, Posani explica que "es un caleidoscopio de distintas perspectivas que giran alrededor de un mismo pro1 0 EXCESO JULIO 1996
blema. Esto permite acortar el tiempo que se emplea en determinar las fallas y alcanzar los objetivos". Y añade: "La concepción racional de Occidente está en crisis, y esa manera de percibir el mundo debe ser reestructurada. La mente no es algo que se arregle mecánicamente. La vía son el humanismo y la integración, porque ¿acaso conocemos la totalidad de la realidad o sólo una parte de ella?". Ajeno a disquisiciones teóricas, este trío de gurús contemporáneos encuentra un sencillo punto de confluencia: el hombre y sus problemas. Y a la pira con los títulos. "Mi trabajo es completamente intuitivo. Desde niño tenía premoniciones y tuve que ir a un psicólogo para que me ayudara a canalizar ese poder", relata Héctor González, quien además asegura
que puede ver el futuro del consultante con sólo tocarlo. Por su parte Esperanza Urdaneta cree en la naturaleza divina de su trabajo: "Una astróloga me dijo que poseía una facultad innata para interpretar los signos del zodíaco y que tenía encomendada una misión". Miguel Posani, quizás todavía imbuido de cierto academicismo, analiza la situación: "Si Héctor se hubiese topado con un psiquiatra le hubiese administrado fármacos o estaría desvariando en un manicomio. La Psiquiatría no acepta casos como los que él representa". Finalmente, barre con todo. "Se acabó el diván: el cambio debe ser voluntario".
—IC
41:
•
›
.:
5
..59,. "
,....
.'
11•••,'",,,..<?<<"••••••52,1:,;.,.. «.i
:IIV:1111111111111.W.1
.
V:• ""»,<:••••• ••••,.•
...... ..,..,....:.
.<
",,,,
1110111.MBEtraign
,›: ‘,:
x4.14:,, ,,..... .,•••• •
„o...5 •
../..›/,‘"
••••,.
1:111
é411<•,,,,
Wat ..t.. ..
En estos tiempos, cuando la centuria toca fin, los roles se intercambian, las barreras se rompen y el amor se libera. España, la abuela patria, conservadora y profundamente arraigada en sus tradiciones, se suelta el moño y se convierte en escenario de una ceremonia que deja atrás cortejos y consejos de viejas generaciones. Sin mucho escándalo y con gran sobriedad se celebró en los blancos salones de la sede del Ayuntamiento de Andalucía el matrimonio entre José Elías González y Miguel Murillo, peluquero uno y cocinero el otro. Como es habitual, el acto congregó a unos cien invitados de la pareja y otros cuantos fisgones, que se asomaron a presenciar un acontecimiento que, sellado con un beso y el acostumbrado intercambio de anillos, sirvió, según uno de los contrayentes, para demostrar que "ser homosexual no es cuestión de vicio sino que hay amor". Lejos de lo que pueda pensarse, este tipo de enlaces no representa transgresión alguna —al menos en términos legales— y el concejal Manuel Rodríguez, quien fue testigo del acto nupcial, dejó en claro que éste se apegaba estrictamente a las leyes. Así, en medio de la solemnidad que caracterizó al evento, el funcionario público procedió a la lectura del decreto de creación del Registro de Parejas de Hecho, que fue promulgado a finales de 1994 y que considera la posibilidad de unión entre congéneres de un mismo sexo, basando además su discurso en el artículo 14 de la Constitución que consagra la igualdad de todos los españoles. El alcalde de la ciudad, Pedro Rodríguez, no se quedó atrás, y no sólo dio el consentimiento para que se realizara el casamiento, sino que expresó su más sincera felicitación a los novios por haber realizado "una ceremonia clásica" y por "haber decidido su unión personal como expresión de la voluntad de llevar a cabo la vida en familia que desean". Bajo la lluvia de arroz y en medio del diluvio de flashes, Miguel, uno de los ya felices cónyuges, dijo a la multitud de amigos y curiosos sentirse orgulloso de haber sido "capaces de dar la cara, por-
que ya está muy antiguo eso de no salir de los armarios".
—EFE
01\TC4RI IVE S ®
La nueva colección "Golden Wing" de Longines es infinitamente bella y mágica. Ella lleva la huella de más de 160 años de historia de la marca: el reloj de arena alado de Longines, símbolo del dominio del tiempo y del vuelo de la creación.
Longines Golden WingT". Modelos exclusivos para ella y él de acero y oro 18 quilates con pulsera integrada can triple cerrador de seguridad, acuñado con el símbolo histórico de la marca. Movimiento de cuarzo, cristal de zafiro, impermeables hasta 30 metros.
EL RELOJ SUIZO DE LOS PIONEROS DESDE 1832 De venta exclusivamente en las mejores joyerías.
Garantía y Servicios: Swiss Watch Corporation. Teléfonos: 976.45.11 976.56.57 Fax: 976.45.37 -
Armando Coll
D arse abasto a voz del locutor de la radio que el portugués mantiene siempre encendida como sucedáneo a las formas anodinas de la lounge music a duras penas se impone al barullo de la clientela del abasto. Quien se esmere en atenderle caerá en la cuenta de que improvisa ante el micrófono un meloso obituario, aderezado de todo el catálogo de lugares comunes. Es obvio que se trata de una persona pública, al menos, de mediana notoriedad o reconocibles méritos; algo hacía conspicuo al occiso (¿un concejal? ¿un individuo de número de alguna academia? ¿un boticario filantrópico?), pero no es posible saber a ciencia cierta qué. Nada de lo que irradian las ondas hertzianas sobre la indiferencia de los habituales compradores de la bodega ofrece un rasgo individualizable, diferenciable, algo que permita reconocer al difunto... La misma esquela necrológica le calzaría a cualquier otra alma; es una cartilla, un formulario para rellenar con el nombre, la profesión, el estado civil y el número de huérfanos. El suspenso aumenta a medida que las inflexiones del locutor parecieran acceder a una tesitura más aguda. Y quien ha estado escuchando la emisión radial —no se sabe por qué extraño morbo— cree entender que en cualquier momento el informante dirá el nombre del muerto. Pero, justo cuando finalmente lo suelta, hay alguien junto a la carnicería que a esta hora de la tarde no puede reprimir un.largo y sonoro bostezo que condena al definitivo anonimato al finado.
L
D
a lo mismo quién haya muerto. Nadie tiene derecho a una historia personal, a un rasgo distinguido, a un gesto memorable, en este anuncio de megalópolis que puebla al valle de Caracas donde, precisamente, entre los pocos espacios aún no ganados al caos impersonal de las
14
EXCESO JULIO
1996
masas, se cuenta éste que asoma en cualquier esquina en ciertas tradicionales parroquias y urbanizaciones, que las abuelas llamaban bodega; más tarde, cuando se ampliaron, dada la decorosa prosperidad del negocio, las llamaron casas de abasto, para quedarse simplemente como abasto en la jerga del consumidor de fin de siglo. Aunque algunos se parecen cada día más a un supermercado, se mantienen, en la mayoría de los casos, como un remanso premoderno, un resto colonial, una decantación de aquellas pulperías. En las bodegas o abastos, la tertulia y el chismorreo parroquial logran ganarle la partida al ruido de los medios de comunicación, y ni siquiera el anuncio de un muerto famoso silencia un bostezo procaz o distrae el relato de la muchacha española que lo dejó todo para hacer la América a destiempo, cuando todos los indianos estaban de vuelta, para que el venezolano que la enamoró la dejara sola de este lado del Atlántico, con dos vástagos a cuestas, sin otro consuelo que el discado directo internacional.
L
a sospecha de que en la genealogía del abasto ha-
ya un remoto parentesco con el botiquín, la botillería o las mexicanas pulquerías se constata al menos en la religiosa libación de cerveza en las propias puertas del local, con la remolona tolerancia del portugués —por antonomasia, dueño de abasto. Hay los casos en que un letrero garabateado con marcador y ostentando una ruda ortografía precervantina demarca una zona libre del consumo de licor, por lo que los parroquianos deben desplazarse unos metros y fatigar media cuadra de vuelta a la nevera del negocio para reciclar la dosis de cebada. Así y todo, el ambiente de taberna sobrevive en la periferia del abasto, cada puesta de sol, a excepción de los domingos.
or supuesto, no todo es estampa del pasado, costumbrista colorido. Los signos ominosos de la supervivencia en la urbe violenta están a la vista. Sobre todo en el centro de la ciudad y en las llamadas zonas populares, las bodegas levantan cada mañana la santamaría, pero no las rejas que procuran una prudencial distancia de cualquier intento de atraco. Así, los abastos ofrecen al paseante un aspecto de fortín, aunque su capacidad de resistencia reposa en otra disuasión: esa forma de crédito informal y sin intereses conocida como fiado. —Hasta donde yo sé, señora, nada baja... todo sube —sentencia el portugués con un mohín de socarrona satisfacción mientras registra los precios en la caja. Pero la señora, esgrimiendo el cartón de leche como un arma tribal, insiste en que lo escuchó por la radio, que la leche había bajado. El portugués, sin mirarla, repite su respuesta, y la mujer se resigna a pagar. Si algún efecto tienen las ondas hertzianas sobre las cabezas de los clientes de la bodega es meramente físico, de recalentamiento. Puede que algún titular del noticiero agarrado al vuelo, al estilo de ...y los huevos y la harina están por los cielos... propicie una momentánea sublevación ante la caja. Es el instante en que el hechizo parroquial, el sabor a viejo vecindario, se desvanece y da paso a un amenazante silencio. Pero la casi sonrisa del portugués se mantendrá impertérrita y la señora exigiendo el nuevo precio rebajado de la leche no encontrará ningún eco. Todo el mundo en la cola para pagar alguna vez habrá sacado fiado y más de uno conservará una deuda. Apenas si alguno de los bebedores recostados de la puerta propondrá la distancia del chiste, la mofa permanente del venezolano a su lento infortunio. La institución del fiado garantiza el orden y la continuidad.
p
—Si quiere rebajas vaya al supermercado —le sugiere a la dama el dueño del abasto desde su omnipotencia. e hecho, la primitiva mercadotecnia del abasto, basada en una lenta rotación de la mercancía y las compras puntuales de última hora (la cocinera que descubrió la falta de cubito y baja rápidamente a la bodega dejando el guiso a medio camino), no permite mayores maniobras con los precios; en todo caso, cierta laxitud a la hora de especular. Pero el cliente sigue fiel debido a la ubicación estratégica de la bodega y al subterfugio del fiado, esa espada de Damocles. ...La Iglesia en un documento advierte sobre la amenaza de un nuevo sacudón... Hay momentos en que el portugués es quien no puede dejar de atender al locutor de la radio, y por unos segundos el rictus de seguridad se le desdibuja en una preocupada mueca. Una pesadilla le recurre a pleno día, mientras marca los precios en su nueva registradora digital y, entonces sí, levanta los ojos y escruta por instantes los rostros de sus clientes. Alguno le habla, le sonríe, se ríe, es obvio que le dice algo gracioso, los demás ríen también, pero él no... Tampoco oye la causa de tanta hilaridad. Todo su sistema auditivo pendiente de la declaración del ministro del Interior, siempre tan ganado para desmentir augurios.L.V.
9
Aclaratoria. En la entrega de High-8 correspondiente
a la edición anterior dejé colar un imperdonable lapsus. Al apellido del maravilloso pianista dominicano Damirón, antepuse el Gómez que, hasta donde me es dado conocer, no le pertenece. Aunque la confusión, en este caso, a nadie mancilla, hago la aclaratoria por respeto al rigor documental. JULIO 1996 EXCESO
1 5
Gol
ADN
Jamón jamón
y precios asequibles fun-
Pechuga de pavo acaramelada, pernil, conejo
cionan como valor agregado. Segunda avenida, entre 3' y 4' transversales, edificio Aldoral, Los Palos Grandes. Telfs. 285.6306 y 283.5976.
relleno o al vino y roast beef al estilo húngaro con pimienta y jugo de naranja son las insignias de la Viscondesa en esta nueva etapa. Tras incorporar a la nómina —hace unos meses— a un par de charcuteros de oficio, la sombría panadería dio un vuelco de 180 grados e incluyó, como especialidades de la casa, carnes frías preparadas, pasapalos por encargo y un servicio de cafetería con mesas en el exterior cuyo menú contiene una extensa variedad de sandwichs con los mismos embutidos y carnes que preparan Angel y Rafael, los maestros recién estrenados. Buena atención
16
EXCESO
JULIO 1996
Genuina delikatessen Un nuevo y riguroso repertorio con pronunciado acento galo se sube a la mesa local. Son las opciones que Embutidos Reims presenta al público, después de cuatro años de satisfacer exclusivamente a hoteles de cinco estrellas. Ahora el pato a la pimienta con brandy, las terrines de conejo al vino blanco y de pollo con albahaca o la mousse de aves al oporto podrán adquirirse en establecimientos de delikatessen y supermecados. Lo más típico de la comida fran-
cesa con productos venezolanos dará que hablar, con sus prácticos e higiénicos empaques de plástico que conservan al vacío 200 gramos de ave, pescado o cerdo ahumados, finamente picados y cuidando el importante efecto visual. Esta charcutería de lujo se asienta en el país para seguir los pasos de toda una familia de expertos en patés y terrines y, con Patrick Lingrand al mando, continuar el legado en nuevas tierras. Además de lo accesible —un promedio de 2.500 bolívares por kilogramo—, del perfil de producto de alta calidad y de la virtud de durar hasta seis meses refrigerados, los jamones y pechugas de pollo ahumados y el más costoso y preciado, la terrine de jabalí con pimienta y brandy —4.000 bolívares el kilo—, pueden ser solicitados a domicilio por el teléfono 263.8665 si el consumo es de, mínimo, 5.000 bolívares.
Que te quiero verde Al ritmo acelerado de las convulsionadas calles del South Beach, la moda y el afán estético se suben de los carros deportivos a las aceras y locales. En la onda del buen lucir, las minutas de los restaurantes truecan las otrora populares hamburguesas por espléndidos vegetales y jugos naturales. En la nota colorida y veloz de la zona más popular de Florida, Endive Café impone como plato principal la ensalada. El nuevo concepto incluye 41 tipos de platillos y 15 distintas formas de postre. Los expertos detrás de la carta son dos peruanos y un par de venezolanos que traspusieron la idea del Café del Museo de Caracas al Norte. Made in Venezuela, el local seduce por su decoración y música ambiental. 610 Lincoln Road. Telf. (305)531.9380.
Home made Naranja y limón son los sabores de las tortas caseras que las manos de Adriana, Marisol y Dolly baten y reparten en distintos locales de Caracas. A veces bañadas con syrope de naranja, otras
con glaceado blanco, son siempre una dulce opción por sólo 850 bolívares. Telfs. 963.7021 y 631.6484.
Caleidoscopio Hurgando en el recuerdo gustativo de toda una vida, Rangel Crazut López reúne múltiples recetas bajo el título Los tres fogones. Con alma de aficionado a las hornillas, recopila secretos de mesa de tres fuentes distintas, a las que denomina Casa Primera, Segunda y Tercera. La que abre el repertorio, de tono oriental, habla de los platillos del chino Lin, amigo de su infancia, con subdivisiones al detalle de platos con pollo, cerdo, caldos y salsas; le sigue Los amigos, capítulo que compila las memorias que personas cercanas al autor han dejado indicadas en guisados, spaghetti y pescados, y finaliza con útiles consejos para trabajar garbanzos, lentejas, mayonesas y ensaladas. Con rústica presentación en madera, incursiona en el mundillo de la cocina local.
La sartén
porelmango
♦ Ir
■ Uno de los sitios memorables de Caracas, no tanto por tradición como por el estilo sobrio y comedido del lugar, con sus mesitas bien trajeadas, ubicadas a lo largo de una galería de pequeñas tiendas en las que no hay mucho que curiosear, es el recinto donde Pierre Blanchard rinde culto a la cocina francesa, con platillos que no en vano le han hecho célebre en este valle donde los chefs de su calibre son en realidad un . hallazgo. Apartado de las turbulencias de una ciudad cada vez más aquejada por la neurosis, la crisis económica y la violencia, cálido y siempre bien atendido por la maitre Ana Bertorelli, compañera de Blanchard en esta aventura llamada Opera Café que ya dura varios años, acoge de martes a sábados a una pequeña legión de habitués que desdeñan las dificultades de la autopista del Este sólo por disfrutar de este bistró que se adapta con facilidad a los requerimientos del bolsillo y con esplendidez a las exigencias del paladar. Rabo de res relleno, lechón confitado y compota de cebolla, con fit de pato con papas lyonnaisse, o cóte de boeuf roti, romero y salsa bourguignone, los clásicos que nunca defraudan. Para aquellos más atrevidos que deseen emprender toda una expedición llena de agradables sorpresas al centro de la gula, Pierre acaba de estrenar una minuta fuera de serie en la cual brillan con esplendor el lomo de dorado en gravlax, eneldo y sal de guérande, la ensalada Bistró, y la mignonette de paticas de cochino con langostinos y auyama. Sutiles, sin un detalle fuera de lugar, las combinaciones más extravagantes son posibles de la mano de un maestro. ¡Enhorabuena!
Seriedad, solidez y experiencia,
INNePrif,. , • --..
nos han caracterizado, para dar respaldo a nuestros Instrumentos Financieros y brindar tranquilidad a tódos nuestros clientes. o
Alejandro Dumas nieto
L
amo Caracas
Opera Café
Centro comercial Plaza Prado, Alto Prado. Telf. 978.1222
JULIO 1996 EXCESO
1 7
a
C y
Froilán Fernández
n Nada más apropiado
para un personaje como Lewis Carroll que la telaraña del hiperespacio. Allí podrán deleitarse los admiradores de este escritor, matemático, estudioso de la Lógica y fotógrafo de niñas que se entretenía con las paradojas de Zenón y los mundos paralelos separados por espejos. El presidente de la Sociedad Lewis Carroll de Estados Unidos, Joel Birenbaum, mantiene una formidable página en el WWW sobre este notable inglés
1,EWIS CARROLL Home Page
(http://www.students.uiuc. edu/ —j birenba/carroll/html), con múltiples enlaces hacia varios aspectos de su vida y obra. Encontraremos rompecabezas, fotos de Carroll y Alice Lidell, la inspiradora de sus libros esenciales, un vínculo con el Web victoriano de la Universidad de Brown, biografías en varios idiomas, así como información sobre otros sitios que hacen referencia a Charles Dogson (su verdadero nombre) 0 Una nueva tira cómica,
concebida por Bill Holbrook, recrea la inserción de la tecnología en un hogar de clase media donde conviven sin problemas aparentes Kevin y Kell, un conejo 18
EXCESO JULIO 1996
y una loba que han vencido sus diferencias ancestrales. Sus hijos son un lobo, Rydy, sin apego por los estudios, y una puercoespín adolescente, Lindesfarne, asidua navegante de Internet. Kevin & Kell están en más de 50 foros del servicio de información en línea Compuserve (presione el icono del semáforo y escriba comics para entrar al foro permanente sobre tiras cómicas), mientras que la serie completa puede ser vista en la página http://www. compuserve.com/kkhome . html n Para estimular la demanda de programas específicos para el hogar, Microsoft está distribuyendo software de demostración en formato CD-ROM. Un volumen de juegos para Windows 95 y otro dedicado a las aplicaciones para el ámbito doméstico son los primeros que han llegado a manos de usuarios personales. A los juegos, 20 en total, se accede a través de una plataforma espacial con efectos
de realidad virtual. Los juegos no pueden ser salvados y hay que empezar de cero otra vez, una pequeña incomodidad que impulsa al usuario a buscar la versión completa. El muestrario despliega, con una interfaz muy atractiva, más de 60 títulos educativos y de entretenimiento. El Bus Escolar, ya en español, propone un recorrido galáctico, mientras que los trabajos de Issac Asimov sobre los robots están recogidos en The Ultimate Robot. Encarta 96, las Explorapedias, títulos de apreciación musical o escenarios para el simulador de vuelo son algunas de las ofertas n Cuando el laboratorio de medios del Instituto Tecnológico de Massachussets cumplió una década, el 10 de octubre de 1995, parte de la celebración consistió en invitar a millones de personas para que contribuyeran a esbozar un retrato global de la era digital. Se les pidió considerar el impacto de esta revolución, cómo afecta la manera de trabajar, divertirse o aprender, y expresarlo con palabras, imágenes y sonidos. Las respuestas llegaron de los cinco continentes, bit a bit, y ahora el laboratorio que dirige Nicholas Negroponte está mostrando los archivos en el sitio denominado 10/10: un día en la vida del ciberespacio (http://www. 1010. org ). Se encuentran disponibles, para quien desee inscribirse, una galería de retratos, una lista creciente de anécdotas y las puertas abiertas para más contribuciones.
El consumo de alcohol en exceso puede ser nocivo para la salud.
••
•
,.
• ,.
•
Pg Pg
. I/
_1Í 4 1iL..
Adriana Ortiz
Vitrina de galo acento Toda una gama de rojos y azules visten de informalidad al hombre actual. Franelas, camisas y pantalones se tiñen de colores vivos para exponer los mejores acabados y confecciones de la marca que representan. Faconnable, francesa y masculina, es la firma que
Antañón Gigantes del entretenimiento caraqueño hasta hace casi 50 años, los teatros regalaban sus dimensiones de clásica construcción a las obras del séptimo arte. Entonces las fastuosas edificaciones se vieron desplazadas por simples salas de proyección. Hoy, el cambio continúa y, desde este mes, un excelso representante de aquellos tiempos, el teatro Impe2U
EXCESO JULIO 1996
las miradas de los curiosos de buenos recursos con su rico abanico de morrales y accesorios que colman de elegancia y modernidad las vidrieras de Xona, boutique que tiene la franquicia de la afamada marca. Añade a su extensa oferta, corbatas y blazers de corte más serio y formal. CCCT, nivel C2. Telf. 939.6155.
captura
rial, se levanta en Candelaria como importante centro de convenciones. Amoldado al cosmopolitismo urbano, de antigua cuna de diversión caraqueña en blanco y negro pasa a ser una amplia sala plenaria adecuada para albergar a 300 personas y con un área de 250 metros cuadrados que hará lugar a eventos especiales, exposiciones y presentaciones culturales.
Eternidad El hierro insiste en apoderarse de la estética mobiliaria. Mesas, sillas, sofás y divanes lucen oscuros lingotes haciendo un franco llamado al pragmatismo y la modernidad. Cojines de tonalidades claras se tienden sobre los cálidos barrotes para hacerle compañía a la mesa con tope de vidrio o madera. Toda una sucesión de alternativas para la comodidad y la decoración se airea en las vitrinas de C y C. Algunos biombos, porrones, candelabros y portarretratos se dejan colar por los rincones. Centro comercial Macaracuay Plaza, nivel C1, sector Multitiendas. Telf. 258.0875.
Sin par elegancia De chaqueta y corbata se viste el lujoso Centro Lido para darle la bienvenida a la ropa Norton Wilson. Sólo para caballeros, la espaciosa boutique exhibe las mejores muestras en telas y colores en camisas, pantalones y zapatos. Los blazers de la afamada casa
Que te quiero verde Al ritmo acelerado de las convulsionadas calles del South Beach, moda y estética se suben de los carros deportivos a las aceras y locales. En la onda del bien lucir, los platillos de los restaurantes truecan las otrora populares hamburguesas por espléndidos vegetales y jugos naturales, y en la zona más popular de Florida, Endive Café impone como plato
siguen los patrones de la moda más clásica. Cortes rectos, pinzas en los pantalones, rayitas en las camisas y arabescos en la seda de las corbatas hablan de elegancia. Universales en las confecciones, los trajes atraen a un selecto público con bolsillos repletos y buen gusto. Nivel Tamanaco, El Rosal.
principal la ensalada. El nuevo concepto incluye 41 tipos de platillos y 15 distintas formas de postre. Los expertos detrás del menú son dos peruanos y un par de venezolanos que traspusieron la idea del Café del Museo de Caracas al Norte. Made in Venezuela, el local seduce por su decoración y música ambiental. 610 Lincoln Road. Telf. (305)531.9380.
Tierra de fantasía Pasar por el luminoso portal de la juguetería Alfa Centaury es como descubrir un vistoso universo de plástico. Carros, aviones, muñecas y patines encantan desde los estantes que colman el local sin abarrotarlo. Toda la gama lúdica que embelesa a los menores con el motivo del héroe en boga ha sido previamente seleccionada por sus dueños para complacer a los chiquilines; y para los papás que gustan de ver sus retoños acicaladitos, el área vecina secunda la surtida mercancía, en su mayoría importada, con prendas de vestir, calzado y accesorios para ambos sexos y en todas las tallas de la primera edad. Centro comercial Macaracuay Plaza.
JULIO 1996 EXCESO
21
• E „, 1'
•
•
• , • • • E ,• • E ,
,
, • S u • •- • • • e . • • E % • a • a", • •1 E ' ,* • . a . •• 4 * $ 0Ii■ ,, 4 Ili 4111 4,4 <l ie 4 41111 . 41. - a 1 e ,
* • •-• 41. lik, 11,.. iih
,
•
-
• • • • • • : 22
- a
4
E
.
,• • • . •
-
,
1 4S • 1• 44 4• •e..444. 4i. _ • • 44 e
EXCESO 111110 1996
'
+ Dinámico, sofisticado y potente, Neon, la última creación de Chrysler, irrumpe en el mercado con el propósito de satisfacer a la Generación X, versión local. Con amplia cabina, motor de 2,0 litros 132bhp/98kW y 16 válvulas de rápida respuesta, ofrece amplia aceleración en un chasis ágil y fácil de manejar. La distancia entre ejes de este versátil auto es de
2.642 mm, permitiendo un mejor aprovechamiento del espacio interior. La seguridad es también un calificativo: dos bolsas de aire de avanzada estructura protegen a conductor y pasajero. La atractiva apariencia, el diseño ovalado de los faros delanteros, el techo curvo y las ventanas sin marco definen su personalidad.
+ Azul, inodoro y en gel, el remedio para la implacable huella del tiempo asume el apelativo de Daily Eye Saver. Con este extracto de pepino, sábila e hialuronato de sodioa, Clinique reafirma el contorno de los ojos, refresca la zona y la hidrata. Es ideal en climas cálidos y húmedos, y para las extensas jornadas de trabajo. Libre de acei-
te, no entorpece el maquillaje y puede usarse en todo tipo de piel. Su fórmula no viscosa no se riega a los ojos, por lo que es excelente para los usuarios de lentes de contacto. Reduce la inflamación, eliminando la posibilidad de molestas bolsas, y el extracto de algas rojas disminuye las indiscretas líneas de expresión.
+ Para los fieles usuarios de los celulares de Nokia, la empresa finlandesa —segunda en el mundo en la fabricación de teléfonos móviles— impone el 2120 Plus. De alta tecnología, ofrece útiles servicios como autenticación, control de llamadas realizadas, identificación de línea, llamada en espera, restricción de números aceptados y confidencialidad. Para
como de la casa u oficina, puede programarse identificando el origen con un timbre distinto, de los cinco que posee, para cada una. Teclas para rápido acceso al buzón electrónico de mensajes, el número nueve para emergencias, pantalla grande y demás accesorios componen la nueva opción portátil de comunicación telefónica.
conexiones importantes,
+ Correo seguro y a tiempo, DHL mantiene al cliente al tanto de las mejoras y facilidades de la empresa a través de su honre page en la sección de World Wide Web
ra llegó el sobre y quién lo recibió, y en caso de estar en tránsito, la pantalla detallará su trayectoria. Estas ventajas vía Internet comple-
de Internet. Un envío puede ser rastreado desde la casa: basta con dar el número de la guía aérea y el país de origen para saber a qué ho-
y que indican cómo usar DHL, detalles útiles sobre embarques a ciertos países e información en general sobre la red. http:/www.dhl.com .
mentan
tos servicios que ya existen
4101#114 ¿a edad de Ateltor pork estile IdeteadeNttga Muda, 12 prikeipal iit~ del sector moteo del mudo. ////
041/DAD ZNIER.11.11111111° A EN POLVO sao
- - ,NAS CONTENI DO NETO1 Kg en Nueva Zelanda con 100% Lec le
Awellop
Á.,,dta Mit fr,Ág 100% Mea
de Nue✓a Muda, &z lityor beh del sautdo.
41001
4
kveyop ese ta c práctica Que trae oto sed da disuada para obteger siem re Coitgistam
ompleta y Práctica New Zealand Milk Products
de Nueva Zelanda
De película Prístino compacto de confección nacional, Mecánicas celestes es el soundtrack de la producción fílmica franco-venezolana de Fina Torres que, desde los escenarios de París, empezó su recorrido por el mundo hasta llegar a las carteleras caraqueñas. Veintiocho piezas que se pasean por la salsa, el bolero, el rock y el género clásico,
Argentino universal Del Japón al restaurante Lutéce Grill de Bello Monte, María José Mentana ha regado de melodías su camino. Tras una larga carrera, viajes y giras, su primer álbum, Honrar la vida, aparece en compañía del Tango trío, integrado por el argentino Danilo Rivero, el uruguayo Mario Menéndez y el vene-
Ti rpo Una a mujer que ha escultur rebasado on creces el medio siglo han hecho de Tina Turner una leyenda. Antes de la gira mundial prometida para este año, la veterana estrella ha reunido a los grandes músicos del momento para crear el más reciente de sus trabajos, Tina Wildest Dreams.
Vuelta y giro Zambullido en la música, primero como parte del grupo Los Chicos y después como solista, Giro se sigue perfilando como el preferido de los jóvenes centroamericanos y del Caribe. Entre timbales y pianos, la voz fresca del borincano de 24 años entona su tercer logro discográfico titulado Loco cora24
EXCESO 1U110 1996
integran un repertorio alegórico del sincretismo cultural del filme que define a la mécanique con el ritmo salsero y tropical de Alma Rosa —Lucita en la película—, la cubana de voz melodiosa que interpreta el tema central. Allá tú, Oye chico, La boda y Sin ti marcarán una impecable huella con acento criollo en el mercado internacional.
zolano Salvador Soteldo. Con miras al público de Argentina, Chile, Perú, Colombia y México, un compacto de diversidades se nutre de creaciones como Acompañada y sola, Ofertas, Como dos extraños y, llevados al tango contemporá-
neo, Tumbas de gloria y Mariposa tecnicolor de Fito Páez y el bolero Qué vale más de Simón Díaz.
Tras imponerse con What's love got to do with it —la banda sonora de la película que cuenta su historia—, entona piezas de John Waite y Massive Attack: Missing you y Unfinished sympathy, realiza un dúo con Sting y acoge los aportes de The Pet Shop Boys, Nelle Hooper, Terry Britton y Gary Hughes en la producción. Seguro un nuevo hit.
zón, última muestra que regala a los salseros de la América hispanohablante una versión bailable de Mi forma de sentir de Pedro Fernández y Si tú supieras, entre otros temas. Precedido por sus dos primeros discos, Simplemente un corazón y Amor lunático, éste se perfila como el anzuelo que conquiste al público local.
a
co
c o s t AO
* Por más de cuatro décadas,
el guión cinematográfico basado en Le hussard sur le toit, la novela romántica que cuenta la historia de amor de un soldado italiano en plena epidemia de cólera en el siglo XIX, peregrinó por toda Francia en busca de quien lo llevara a la pantalla. Ahora, por fin, el séptimo arte dará vida a los personajes de la obra escrita en 1951 por Jean Giono. De la mano de Jean-Paul Rappeneau, director de Cyrano de Martínez, un tajo Bergerac, esta versión pretende imponerse en el mercado anglosajón con la misma fuerza de Sense and Sensibility. El as bajo la manga en esta producción es el actor principal, Olivier Martínez, quien con sus actuaciones en P5 con Yves Montand y 1,2,3 Soleil con Marcello Mastroianni y su atractivo look amenaza con conquistar, a lo Banderas, las carteleras del mundo y demostrar que el acento ya dejó de ser un problema * Desde que el
carmín esconde un filoso cuchillo, transformándose con sólo girar la base del empaque en una riesgosa daga—, en Europa, un alarmante artículo —inexacto, según los interesados— denunció el uso de órganos de vaca en la elaboración de productos de belleza. La noticia produjo pánico, debido a la epidemia de locura bovina que aqueja al ganado en el territorio británico. En medio del desbarajuste, los fabricantes lanzaron una confusa campaña publicitaria en la que alegan no haber utilizado derivados vacunos. O, mejor dicho, sí, pero sólo de vacas sanas * El popular y atrevido fotógrafo Helmut Newton de nuevo hace de las suyas con la cámara, pero esta vez con el consentimiento —y la paga— de una de las empresas más conservadoras en el vestir. La firma de medias panty Waldorf cambia por completo su estilo y asume ahora la estética audaz
rubor artificial revolucionó la apariencia femenina
siglos
atrás, las posibilidades que encierra un estuche de cosméticos siempre han sido una verdadera sorpresa. Mientras en las redadas nocturnas en las calles de New York la policía local confisca multitud de peligrosas armas entre las que destaca un en apariencia inofensivo lápiz labial —que en lugar de la seductora barra de 26
EXCESO
JULIO 1996
Newton se puso las medias
de Newton, entregando la campaña publicitaria de su renovado look al polémico artista. Las eróticas imágenes de parejas femeninas de irreprochables piernas hablan por sí solas de la marca y el autor. En todo caso, el eslogan reafirma el concepto: "Waldorf conoce de medias, Newton de mujeres" * Centro de recreo de ricos y
pese a contar entre los más asiduos clientes a Calvin Klein y la popular Madonna, el hotel Delano de Miami también tiene detractores. Increíble pero cierto. No obstante formar parte de la lista de los establecimientos más Delano, ni tan bueno caros, lujosos y visitados por las celebridades, algunos clientes insatisfechos debido al mal servicio y la pésima comida se proponen acabar con su buena reputación. No hay que ser millonario para hospedarse en el que se dice el mejor hotel de South Beach, señalan los agraviados, pero sí para la terapia de rehabilitación que exige el período postvacaciones * Tras haberse estrenado en febrero en el East Village neoyorquino, la última obra de Jonathan Larson, Rent, se mudé- a Broadway. La ópera rock, cuyo éxito se vio opacado por la muerte del autor, se basa en La Bohlme de Puccini y es una revisión de la pasada década. En esta pieza —que le hizo merefamosos,
compartidos cedor del premio Pulitzer post mortem—, Larson toma como temas centrales el sida y la drogadicción, y plasma una visión optimista que refuerza con cantos a la vida más
Inés de Peña
Rent, post mortem
parecidos a los tradicionales velorios de los negros de New Orleans que a los ritos mortuorios católicos. Es por esto que amigos y críticos la vislumbran como la obra insigne del presente, augurándole un pasaje a la posteridad. Pero no todo son flores: el cantante David Bowie, después de asistir a los ensayos y al preestreho, sostiene que se trata sólo de una producción mediocre que cuenta con buenos actores y músicos. Sin embargo, asegura que el éxito es inminente, pues el público anhela otro gran éxito como el que obtuvo el musical Hair tres décadas atrás. L
Polifacética, perseverante, ilustrada. Afable y conversadora en extremo. Siempre se desempeñó en el área de mercadeo de empresas privadas, entre las que figuran Polar, Mavesa y Distribuidora Benedetti. Competitiva en el trabajo, en abril mudó su oficina a Los Cortijos de Lourdes, cuando pasó a formar parte de la nómina de Radio Caracas Televisión como asesora. Pocas semanas después, llegaría a la alta gerencia del canal al ser nombrada vicepresidenta de Programación y Mercadeo. El libro: La peste, de Albert Camus. Entre los autores latinoamericanos, prefiere a Mario Vargas Liosa. El disco: "Me atrae la buena música en sus distintos géneros". Beethoven y Tchaikovski, cuando se trata de escuchar a los clásicos. Arturo Sandoval, cuando la cosa es a ritmo de jazz. El sitio de encuentro: "Siempre estoy probando nuevos lugares. No tengo uno fijo", dice. No obstante, nombra a los restaurantes Le Petit Bistrot de Jacques y Via Appia. El lugar de vacaciones: "Me encanta conocer paisajes". El sur del Orinoco y Francia son los destinos
preferidos. La suscripción:
Time y diversas revistas sobre
decoración.
JULIO 1996 EXCESO
27
1/4 de hora
Sexo manumiso
Un modesto título que en pocas semanas devino inusitado best seller acaba de lanzar Alfadil Ediciones al mercado editorial. Se trata de la Agenda sexológica, breviario de términos y orientaciones acerca del siempre atractivo tema. En lenguaje ameno y con un estilo didáctico, la autora, Isbelia Segnini, define las virtudes y los vericuetos que ata28
EXCESO
JULIO 1996
ñen al asunto de marras. No es por azar que esta dama grácil, de llamativos ojos pardos, que dimana cierta magia en sus gestos y sonrisa, tomara el sendero del sexo: creció bajo la sombra de tabúes y estereotipos, iniciándose tardíamente en el placentero quehacer. Proviene de una familia, con raíces en Trujillo y Barquisimeto, que reeditaría en ella los
añosos prejuicios que sobreviven entre los atavismos de los caseríos cordilleranos. "Mis padres venían de una zona donde la educación sexual era muy estricta. Ellos no podían haberlo hecho diferente, porque recibieron una formación peor que la que me transmitieron". Diáfana, abierta, se desvive por el tema, con cautela y seriedad, disfrutándolo a plenitud. Sin embargo, esta psicóloga clínica con varias especializaciones advierte a los curiosos que la Agenda sexológica "no es lo que la gente piensa: no dice cómo hacerlo el lunes o el miércoles, en la mañana o en la tarde. Es todo lo que debemos conocer para tener una actividad sana y placentera. Lo primero que hay que saber acerca del sexo es que la pareja debe hacer lo que ambos deseen en ese momento". ¿Todas las travesuras y posiciones posibles? "Todas, siempre y cuando los dos estén de acuerdo". De un tiempo para acá, Isbelia se veía desbordada por la necesidad de relatar lo que había vivido y aprendido durante 20 años al frente del tratamiento de parejas. Así nació la agenda, que va por su tercera edición y que, con un poco de suerte, saltará a las manos de adolescentes liceístas —previa aprobación del Ministerio de Educación— con el afán de erradicar vicios y temores. "Hemos crecido con una serie de preceptos que en realidad lo que han hecho es castrar a hombres y mujeres. La agenda explica todo lo que las personas no se atreven a preguntar o a decir en la calle".
—HJ
Embajador de la amistad de soñadas playas y cálidas arenas, paraíso idóneo para la imaginación, los festivales de jazz y la navegación a vela, Aruba sigue siendo uno de los destinos más visitados por los venezolanos, no obstante la recesión económica que, cual ciclón tropical, azota a los habitantes de esta nación petrolera. En vista de ello, el ministro de Turismo de la isla caribeña, Roberto Croes, realizó un toque estratégico en Caracas para poner las piezas sobre el tablero: una serie de consultas con las autoridades turísticas venezolanas en aras de mejorar el flujo de temporadistas hacia la otrora colonia antillana donde, a pesar del vendaval, esperan que en este mes los caraqueños, marabinos y demás regresen a disfrutar las noches de envite y azar que la caracterizan. De tez mestiza, oriundo de Santa Cruz (Aruba), Croes no se revela, a primera vista, como el politólogo que es. Un acento sajón acompaña minuto a minuto su español. Cierta humildad y serenidad envuelven sus ademanes. Es un lector voraz, y de todos los autores que han pasado por sus manos, Marco Aurelio, el sabio emperador de la antigua Roma, sigue siendo uno de los preferidos, pues "hizo mucho énfasis en la importancia del individuo en una época en que había otros enfoques". Lo mismo piensa de Franz Fukhuyama, el autor de El fin de la Historia, obra que abrió una controvertida polémica entre los académicos del planeta. Parlamentario, ministro y consejero político de formación socialcristiana, se sabe joven —40 abriles Territorio insular
para ser exactos— y todavía no ha subido al altar a recibir la bendición nupcial. De mozo jugó al fútbol, pero siempre se sintió más atraído por la multiplicidad de lenguas y colores que visita la isla en cada temporada. "Para nosotros el turismo es una actividad vital, nos ha
enseñado a ver el mundo, a vernos a nosotros mismos. El nativo de Aruba te recibe, te invita a su casa, es un gran amigo. Ofrece calidad. Por eso la gente de todas partes siempre regresa a visitarnos".
—HJ
JULIO
1996 EXCESO
29
Compungida a causa de tantos ataques inmerecidos,
la presiden-
ta del Fondo de Garantía de Depósitos y Protección Bancaria, Esther de Margulis, la dama rosa del sistema financiero, decidió apelar a los buenos sentimientos del fallecido dueño de la cadena Capriles y pedirle, con el corazón en la mano, que cesaran los malintencionados señalamientos acerca de sus lazos con el otrora omnipotente Orlando Castro, hoy reo de la justicia estadounidense. Impecable desde el dorado cabello hasta los altos tacones, la señora se presentó ante el agonizante empresario, olvidando, al hacer la llorosa solicitud, la oficina que comparte en la Torre Latino con el apoderado del cubano, Oswaldo Padrón Amaren, a quien la une una muy estrecha amistad. El sutil aunque no imperceptible efecto dominó que se produjo como consecuencia de la estrepitosa debacle de Corimon ha tocado a más de una entidad financiera y los altos jerarcas del Banco Internacional, que por lo visto engrosa la ominosa lista, se encuentran muy atribulados debido a que una fuerte suma, equivalente a un alto porcentaje del patrimonio de la institución y otorgada en tiempos menos aciagos como crédito al consorcio químico, quedó seriamente comprometida luego del naufragio
del grupo de marras. El león no
es tan fiero como lo
Gran extrañeza
de-
mostraron la primera dama, Alicia Pietri de Caldera, y su hija Mireya al enterarse de la destitución de Jacques Vera como máximo jefe del estatiza do Banco de Venezuela. Sin demora, madre e hija se apresuraron a manifestarle al banquero el desconcierto que les causaba tan intempestiva medida, ante lo cual éste quedó sin palabras. Y a propósito de ex presidentes
del Banco de Venezuela, se ha sa ( que el sueldo del hoy prófugo José Bouza Izquierdo mientras estuvo a la cabeza del centenario ente financiero ascendía a la bicoca de 150 millones de bolívares anuales, es decir, 12 millones 500 mil al mes. ¡Una tontería! Gustavo Gómez López,
el otrora delfín de Pedro Tinoco
pintan, o al menos eso se desprende
y hombre fuerte del Banco Latino,
de lo dicho por el dueño de la com-
quien al parecer amasó una inconmensurable fortuna a expensas del
pañía Magefesa, donde Eugenio 30
Barrutiabengoa trabajaba como jefe de almacén cuando fue detenido por la Interpol debido a supuestos vínculos con el grupo vasco ETA. Mientras comía en un conocido restaurante de Candelaria, el empresario comentó a sus acompañantes que el pretendido agitador era "un empleado impecable, de conducta ejemplar", en quien podía confiar al punto de tener un sueño tranquilo sabiendo que en manos de aquél quedaba el almacén cuando, por motivos de negocios, debía ausentarse del país.
EXCESO JULIO 1996
banco de hoy —más bien de ayer—,
demostró tener un gusto exquisito al integrar el repertorio de exclusivos personajes con vastas propiedades en la isla de Moustique, las cuales le fueron expropiadas por la Junta Interventora. En una amabilísima carta
en-
viada por el director de la Academia
de la Lengua a su par en El Universal, le reclama con ornamentado estilo no carente de firmeza la exclusión de las páginas de ese matutino de la columna Candideces, a cargo del veterano periodista e individuo de número de esa institución, Luis Beltrán Guerrero, quien durante 66 años fue colaborador del rotativo. La decisión responde al viraje que pretende dársele al adusto diario, incorporando nuevas firmas en aras de un mayor dinamismo.
sobre la supuesta preferencia del entonces ministro de la Secretaría de la Presidencia, Andrés Caldera, por la compañía francesa Thomson en la licitación de unos radares habría recibido el Jefe del Estado del general Perry durante la entrevista que ambos mantuvieran poco antes que el retoño quedara fuera del gabinete. Un particular señalamiento
En el nada popular club Camurí Mar
comparten la propiedad de un apartamento José Ramón Medina y Luis Pastori, padre de la actual consorte de Teodoro Petkoff. Quizás esa sea la razón por la cual se ha visto al ministro de Cordiplan muy seguido por aquellos predios tan ajenos a la lucha por la igualdad de clases. L
, ^RUE chtzfrtn'''Tenemos espacio para que los niños jueguen, con seguridad. Tenemos un mundo de sorpresa y diversión. Tenemos libertad y mucha acción. Tenemos el lugar que los niños sueñan y los padres esperan. Tenemos ésto y mucho más. Lo tenemos todo...
SOLO FALTAS TU *1
EJ
Escritorio
Jurídico
Parada-Quintero, García Newman y Asociados Carlos Parada-Quintero Ma:ali García de Parada
"El deber y el derecho son hermanos, su madre común es la libertad, nacen el mismo día, y crecen, se desarrollan y mueren al mismo tiempo" Victor Cousin
Avenida Francisco de Miranda. Edificio Roraima, piso 3, oficina 3-E. Campo Alegre. Teléfono: 953.3615. Telefax: 953.1134. Apartado 51912. Caracas 1050-A Venezuela
..•.4,:;:.•••:, •
A ';
lin pasaje a la lidia El tantrismo, Mahatma Ghandi y el curry, las vacas sagradas, el nirvana y el resto del exangüe bazar de tópicos hindúes en el equipaje, el turista occidental llega mal preparado para entender la amarga realidad que, en medio del caos, la devoción politeísta y los abundantes dictámenes del más allá, lo inmutará con la más elevada expresión de la miseria y el difuso poder de los mercaderes de la fe
Rosanna Di Turi desde Nueva Delhi l camino al nirvana puede resultar realmente tortuoso. O por lo menos eso parecen revelar los rostros de los aventurados turistas que aterrizan por primera vez en Nueva Delhi cuando tienen que hacerle frente a la multitudinaria capital de la India, donde viven y sobreviven diez millones de personas. Las primeras impresiones desvanecen cualquier previsión. La ilusoria sensación de invulnerabilidad que el recién llegado había sustentado en la exhaustiva lectura de una amplia documentación turística sobre el país se desvanece ante las visiones iniciales: avenidas imposibles donde desvencijados autobuses compiten con agotados choferes de rickshaws y pacientes rumiantes sagrados. Espacios urbanos, aprovechados como pocos, donde la economía informal es más formal que nunca y barberos, dentistas y zapateros ejercen su oficio bajo cualquier sombra. En las calles la gente trabaja, duerme, venera a sus infinitos dioses, vive y muere como si la existencia terrenal fuera un ritual sin secretos ni pudores. Un mundo devastado por la pobreza que vive ajeno a su propio asombro. El desprevenido turista comienza a presentir que no hay testimonio escrito alguno que describa el panorama que tiene frente a sí y, mucho menos, que detalle cómo salir airoso de la prueba. Pero en
E
Nueva Delhi, como en cualquier ciudad de la India con cierto prestigio turístico, sobran los voluntarios que abordan al unísono a los extraños para salvarlos de tanta zozobra. Los más dispuestos guías, como temprano descubrirá el recién llegado, son los abundantes conductores de autorickshaws. Con ellos comenzará la ardua batalla que se convertirá en un persistente ritual durante toda la travesía: lograr que el tenaz chofer llegue al destino indicado y no al hospedaje, tienda o emporio comercial que él afanosamente sugiere. Si logra su cometido, el pasajero puede considerarse un mortal afortunado. El visitante tendrá que asumir que ha llegado demasiado tarde para no repetir rutinas y asombros. Con avidez buscará la salvación en la guía turística de su preferencia —editada por Lonely Plantet en la mayoría de los casos—, que los indios bautizan, sin ánimo de ofender, la biblia occidental y donde una breve mención es el desvelo de cualquier dueño de posada o restaurante que se precie. Los rumbos a seguir en la India son tan diversos como imposibles de abarcar a cabalidad. Pero no falta quien emprenda exhaustivas travesías que superan los seis meses de camino en el intento de desentrañar, a manera de personal odisea, los innumerables enigmas de este gigantesco destino. El esfuerzo, por lo demás,
es vano. Por más extenso que sea el recorrido, nunca será suficiente para comprender a un pueblo de tradiciones a prueba de siglos, donde la vida se rige por un hermético entramado de ritos y códigos al cual el occidental sólo puede asistir como perplejo observador. Quien sea capaz de soportar los rigores de una larga travesía tendrá como retribución conocer ciudades que sobreviven en el desierto, insólitos centros de peregrinación o las turísticas playas de Goa. A los veteranos viajeros es fácil reconocerlos. Reunidos en los restaurantes de rigor, pierden su mirada en el infinito con el semblante de quien lo ha visto todo y ahora sólo le queda contemplar. Otros sempiternos amantes de la India también se distinguen con facilidad: parecen haber quedados suspendidos en el limbo cuando iban camino al nirvana. Su semblante deja entrever que se fueron sin pasaje de regreso. Independientemente del itinerario a seguir, el turista descubrirá un legado arquitectónico que revela un pasado tan glorioso como ajeno al depauperado presente, visitará hasta la saciedad templos de abrumadora belleza dedicados a dioses de formas infinitas y tratará de comprender las creencias de la multitud de religiones que conviven en la India. A pesar de los esfuerzos, siempre le quedará la sen- ral JULIO 1996 EXCESO
33
sación de haber transitado un mundo extraño del que no entiende nada todavía. La mirada termina por aclimatarse a las costumbres de un pueblo para el que la divinidad puede asumir las formas más inusitadas. Cualquier animal, lago, río o montaña puede revestir virtudes de santidad: los dioses aguardan en cada esquina y la veneración es una tarea cotidiana. En esta existencia regida por mandatos ancestrales nadie duda que las penurias terrenales son el elemental resultado de virtudes y karmas pasados. Cada quien está condenado a asumir, sin chistar, los rigores de la casta de su familia y agradecer que reencarnó en forma humana, con potestad para encaminar su destino. El resentimiento social no consigue mayor espacio en un sistema donde las normas son impuestas desde el más allá. Los dictados del hinduismo, compartidos por 80 por ciento de la población (la minucia de 720 millones de habitantes), no son los únicos que se imponen en este territorio de dimensiones continentales. El resto de los indios se reparte entre los mandatos del islam 75 millones de fieles—, del budismo y de religiones menos multitudinarias como el zoroastrismo, el sikismo y el jainismo. Estos últimos, de extrema vocación pacifista, son capaces de vivir con los labios protegidos para no cometer la imprudencia de engullir a un inocente insecto volador que aterrice sin querer en sus bocas. Paulatinamente, el viajero descubre que sólo con gran dificultad podrá escapar a los rigores de su casta particular de turista. No le queda más que asumir los privilegios y agobios reservados a los visitantes, ajenos a tanta pobreza. Las pre—
El Taj Mahal, ofrenda de amor
34
EXCESO JULIO 1996
rrogativas no son pocas: la divisa extranjera rinde de manera imprevista frente a la apocada rupia local. No por ello resulta fácil asumir sin remordimientos la abismal diferencia. Ni el mortal más inconmovible podrá evitar interrogarse por el sin sentido de presenciar tanto desamparo con una cámara fotográfica en la mano y dólares en los bolsillos. Pero el dolor no es perenne, y la mayoría de los turistas asume pronto su rol sin complejos. Eso sí, nadie quiere hacer ostentación, y, en ocasiones, el turista agradecería la bendición de pasar inadvertido entre las multitudes. Los más intentan una apariencia de sutiles connotaciones miméticas, mezclando las más ajadas prendas occidentales con las nuevas adquisiciones indias. Mientras más desatinada sea la combinación, mejor. El esfuerzo es vano. No sólo porque así visten todos los occidentales que van a la India, sino porque además las mujeres nativas —que tan dignamente visten sus hermosos saris— nunca caerían en semejante desliz estético. A la hora de cualquier transacción comercial se evaporan los arranques humanitarios del recién llegado. Hasta los más recalcitrantes amantes de la India se olvidan de pudores y emprenden con ferocidad el religioso ritual del regateo. La batalla, por lo demás, parece inevitable. Los precios suben al antojo ante la presencia de una cartera con divisas extranjeras. Pero el verdadero karma que el turista tendrá que pagar por su condición de privilegiado es esquivar hasta el cansancio a quienes idean las más inusuales estrategias para ganar unas rupias de más. El forcejeo lo condenará a un perenne recelo —con visos de paranoia— que lo lleva a
Directo al más allá
acelerar el paso cada vez que algún espontáneo pronuncia la sospechosa frase: where you come from?, seguida de la insistente invitación al emporio de artesanías más cercano. La batalla es dura. Si de algo no pecan los indios es de falta de tenacidad y energía. Su desbordante misticismo no impide que dejen de profesarle una entregada veneración al terrenal problema monetario. "La religión nos da la paz, y el dinero la subsistencia", resumía lo obvio un iluminado hindú. Lógica conclusión que, sin embargo, desentona con los estereotipos de la India que Occidente se vende a sí mismo. Quienes no asuman esta básica premisa difícilmente podrán reprimir el desencanto cuando un venerable asceta los invite a un lago sagrado, sumerja coloridas ofrendas por sus antepasados y pase la respectiva factura con una cordial advertencia: las donaciones reducen el karma. Tan perfecta combinación de lo sagrado y lo profano confunde y acompaña al visitante durante todo el trayecto. Agra, el pueblo del mítico Taj Mahal, ofrece los primeros indicios de esta ineludible certeza. De día, es obligado el embeleso ante el emblemático monumento que el emperador Shah Jahan construyera en honor a su difunta esposa. Imponente y hermosamente simétrico, el Taj Mahal parece defender su palidez a pesar del cada día más contaminado ambiente. En la siguiente obligada estación, el invencible fuerte de Agra, los guías recrean las glorias y caídas de los marajás que allí pasearon sus vidas, mientras el turista hace un esfuerzo para imaginar cómo, sobre esas ruinas, se vivieron historias tejidas de fantasía. Por la noche, lo más
No se vende, se venera
Legado de un ayer esplendoroso
L
EI recorrido en barca Incluye la dramática visión de los cadáver') qe, ue,en sus últimos ropajes, son incinerados al sol
probable es que sea invitado al hogar de un afable lugareño que, tras un breve resumen de su vida, pase al tema central de la conversación: el ofrecimiento de un pesado fardo de alfombras que necesita quien lo transporte a Europa donde, supuestamente, un ansiado vendedor espera por ellas. Si acepta el pacto, el incauto descubrirá que lo único verdadero en la historia fue el voucher que dejó por el monto del fantasioso envío. El cuento, repetido hasta la saciedad, engaña a pocos. La mayoría sigue ilesa su camino. La zona desértica de Rayastán es punto de obligada estadía. Los portentosos legados de los marajás, venidos ahora a menos, hechizan a los visitantes que pueden resarcir el agotamiento del viaje en antiguos palacios convertidos en lujosos hospedajes. Otras fortalezas transformadas en museos, o simplemente abandonadas al desamparo, aguardan a los visitantes que escuchan, de boca de los entendidos, los relatos protagonizados por estos soberanos de poder tan inconmensurable como su riqueza y el número de sus esposas. Su señorío, desgastado durante el do-
minio británico —cuando muchos despilfarraron su fortuna por el mundo—, terminó de desplomarse en 1970, tras la abolición de sus títulos. El más popular de los anhelos en Rayastán es recorrer en camello las inmensidades del desierto desde un destino de abrumadora belleza, Jaisalmer. El interminable viaje en autobús hasta este perdido extremo del país queda recompensado ante la visión de la ciudad, de esculpidas construcciones tan ocres como el desierto. Los empresarios de Jaisalmer que ofrecen el tour han visto cómo la ocurrencia de pasear turistas sobre los jorobados animales se ha convertido en una próspera iniciativa. Los líderes del negocio aguardan masivamente a los visitantes. En una competida batalla, que puede tomar visos dramáticos, tratan de seducir al mayor número de aquéllos con sus personales ofertas y la garantía de que al día siguiente estarán sobre un rumiante, jugando a vivir en el desierto. El punto de peregrinación paradigma de hindúes y curiosos occidentales es la sacra ciudad de Varanasi, donde los fieles
emprenden una práctica rutina de limpieza espiritual: sumergirse en las irreales aguas del Ganges para disolver los karmas acumulados. Es necesario madrugar para presenciar la estampida hacia el río dios, donde los peregrinos no sólo ahogan sus faltas sino también emprenden las básicas faenas higiénicas, lavan la ropa y arrojan los restos incinerados de quienes se alejaron de los traumas terrenales. El turista sigue su propio ritual: arrendar una barca, desde donde presencia la masiva faena a prudente distancia. En las márgenes del río las multitudes revelan que, cuando de religión se trata, no hay pudores que valgan. El recorrido en barca incluye la dramática visión de los cadáveres que, en sus últimos ropajes, son incinerados al sol. Los hindúes consideran que arrojar las cenizas al río sacro es el mejor atajo para esquivar el agotador camino de las reencarnaciones y llegar, sin escalas, al más allá. Los restos de los hombres santos —que los hay y en numerosas cantidades— no sufren el rigor de las llamas, pero descansarán igualmente en las pro- tal JULIO 1996 EXCESO
35
Ruta al nirvana citada fe, amigo del Tíbet y de su jefe espiritual, el actor se sentaba sobre el suelo del desprovisto salón donde el resto de creyentes de habla inglesa oía la traducción de las palabras del Dalai Lama. El ambiente, tan impregnado de solemne santidad, impedía el desafuero de cualquier improvisada fan. Pero no faltó quien perdiera la pista al nirvana por falta de concentración. En el templo mayor, una multitud de
Dharamsala fue digna de una película el
que preparaban el ambiente para cada nueva revelación. Las faenas de siete horas
vidad todos los elementos para asombrar y conmover a cualquier incauto espectador, estrella de cine incluida. Con religiosa pun-
diarias exigían religiosa paciencia para la asimilación. Caída la noche, los fieles relajaban sus neuronas y daban lugar a los
La santidad: el negocio de este mundo
En medio de la disímil multitud, cual-
desarmó un descubrimiento: su hermano
fundidades del río. Durante los ritos crematorios está mal visto que los presentes dejen escapar las lágrimas: nadie quiere aumentar los karmas del difunto. Difícilmente las mujeres forman parte de la ceremonia. Su presencia resultó dramática en la época en que las viudas, siguiendo una calcinante tradición, se arrojaban a la hoguera para acompañar al difunto esposo hasta el último destino. Varanasi, como cualquier punto de comprobada santidad, es lugar predilecto de los sadhus, ascetas que deambulan por la India sin más pertenencias que una jarra de bronce. Estos santos ambulantes están convencidos de que los rigores de una vida sin apegos terrenales les permitirá alcanzar la ansiada liberación. Los más virtuosos persiguen el libre acceso al más allá inflingiéndose las más descabelladas penitencias. Los sacrificios no pecan por falta de originalidad. Hay quienes no dudan en mudarse sin mayores ropajes a las alturas del Himalaya para estar más cerca de su dios Shiva, quien habita, según la leyenda, en un paraje a 6.700 metros sobre el nivel del mar. En tan afanada
quiera podía toparse con el inconfundible
se preparaba para ser policía del régimen
G919 que Súlo y con un modesto
entrega no hay tiempo para procurarse el
comunista. Desde el exilio, los tibetanos
morralito al hombro, se encaminaba fiel-
fieles a sus costumbres invitan a los turistas a visitar el Tíbet. Un anhelo que a ellos les está negado todavía.
terrenal sustento. De allí que los compatriotas se encarguen de su sobrevivencia a cambio de alguna conseja espiritual. Algunos ascetas, descarriados de su vocación inicial, han descubierto filones alta-
tualidad, el Dalai Lama —rector espiritual
más inusuales encuentros. En un pequeño
del budismo tibetano— se dejó ver por los fieles para dictar sus anuales enseñanzas.
templo, un selecto grupo rendía tributo ante el niño español venerado como la
El revuelo se justificaba. El Dalai Lama es
reencarnación de un respetado maestro
para los feligreses una divinidad en persona. La ocasión prometía ser excepcional,
budista. A la misma hora, el cine del pueblo
anunciaban los entendidos en la materia. El líder explicaría en detalle un ancestral texto sagrado que, seguido al pie de la le tra, podía iluminar el acceso al nirvana a
.
—una sala con televisor y su respectivo video— recibía a turistas, gatos, perros y los niños de la casa para la repetida transmisión de la película sobre el Tíbet narrada —valga la coincidencia— por
los virtuosos. Todo en diez días y con traducciones simultáneas para los creyentes y curiosos que desconocieran la lengua del
Richard Gere. La historia se repetía tristemente en la pequeña pantalla: la invasión
Tíbet. El pueblo de Dharamsala -refugio de!
na, la expulsión del Dalai Lama y el duro exilio de miles de tibetanos.
Dalai Lama desde que el gobierno de la República Popular China reclamara como suyo el Tíbet- -- se vio desbordado por los
En las calles del pueblo un monje aprovechaba la algarabía para disfrazarse de turista e intentar comprender, por unas
más heterogéneos visitantes. Monjes tibe tanos envueltos en encarnadas túnicas,
horas, un mundo totalmente ajeno a su casto entorno. Entretanto, los visitantes
occidentales devotos de Buda y despr eve
occidentales hacían votos solidarios por la
nidos transeúntes se cruzaban en las pol vorientas calles del pequeño pueblo. L os
causa tibetana luego de oír la historia
-
por la armada de la República Popular Chi-
hindúes, por su parte, se paseaban Con el
contada por sus testigos. Un monje budista exiliado relataba cómo había podido vencer
rostro pintado de colores para celebrar su particular fiesta santa.
las infinitas barreras que le impedían volver a su tierra y familia. A la llegada, lo
RICIAM
,
mente todas las mañanas a escuchar la voz del maestro. Budista de bien publi-
36
monjes repetía hasta el infinito los mantras
pasado marzo. El pequeño pueblo de la India ubicado a los pies del Himalaya reunió durante diez días de inusual y febril acti
EXCESO JULIO 1996
A buscar la dote
Lavando karmas
Las relaciones entre hombres y mujeres admiten pocas libe Culluier leve acamiento está regulado por rígi mente productivos a sus faenas y ofrecen a los turistas los más esotéricos servicios. El más popular es una visión del futuro según el dictado de los astros. Otros optan por posar con su inusual look ante las cámaras de los visitantes, para extender luego imperativamente la mano. Los más relajados emprenden su acercamiento a otras dimensiones con la ayuda del humo de sus pipas. La vida en Varanasi no se apaga en las márgenes del río, y un recorrido por sus estrechas calles puede revelar las más inusuales visiones. El extraño puede verse mezclado en una ruidosa procesión que se revela luego como el tradicional rito matrimonial. El novio llegará, a caballo, en busca de la joven concienzudamente escogida por sus padres para el enlace. Los matrimonios son la elemental conclusión de un riguroso estudio emprendido por los progenitores de los implicados. Cuantos más méritos tenga el futuro marido, mayor será la dote a donar por los padres de la novia. El monto se traduce en prendas y dinero en efectivo. Un título de ingeniero puede lograr co-
tizaciones en dólares. Las relaciones entre hombres y mujeres admiten pocas libertades. Cualquier leve acercamiento está regulado por rígidas normas. Los contactos físicos en público son moderados y eso sólo cuando la mujer lleva en la frente la roja marca matrimonial. Los hombres, en cambio, se pasean tranquilamente tomados de la mano. Un gesto que en Occidente tendría dudosas connotaciones y que en la India es tan natural como bañarse en el Ganges. Nadie discute las leyes ancestralmente dictadas, pero hay quienes muestran sus remilgos. Un joven comerciante rumiaba su descontento: dentro de poco sus nochés de farra se reducirían por mandato de la desconocida que se convertiría en su esposa. Una queja menor frente al llanto de la joven que trabajaba toda la semana, fines de semana incluidos, para sustentar a un esposo que, por un error de cálculo familiar, resultó ser una mala elección. Frente a este vasto e increíble universo al visitante sólo le queda asumir con discreción su rol de espectador pasivo, aunque muchos no se resignan y optan por
un mimetismo patético. Valga el ejemplo de la blanquísima turista —de futuro incierto— que imitaba los sacros baños en una de las orillas menos favorecidas del Ganges. O el rubio y musculoso inglés que paseaba con aires de trascendencia la versión occidental y estética de una túnica de asceta. Todavía hay quienes emprenden una búsqueda animada por la idea de que a la India hay que amarla, sea como fuere. Cada quien encuentra sus razones para el desinteresado afecto. Un canadiense confesaba sin pudores que dedica las vacaciones a atravesar el océano para ver las imperfecciones del mundo. Por su parte un inglés, empeñado en revivir los desvaríos de su florida adolescencia, confesaba a viva voz thats why 1 love India, mientras inhalaba a su antojo la desbordante yerba dedicada al dios Shiva durante una relajada celebración. A quienes vean en ese país un enorme enigma terrenal sólo les queda ensayar una respuesta digna para el primer ingenuo que lo aborde con la interrogante: ¿qué sentiste en la India? JULIO 1996 EXCESO
3
con las obligaciones que impone ser madre de un adolescente de 18 años y una niña de apenas dos. Su nombre figura en la extensa lista de licenciados en Comunicación Social y, pese a conducir sendos programas de opinión, uno en radio y otro en televisión, permanece ajena a las molestias de la popularidad que otorgan estos medios a quienes día a día dejan colar —ondas electromagnéticas mediante— su imagen o su voz en todos los espacios de la vida de los televidentes y radioescuchas. Más bien mantiene un discreto bajo perfil que resguarda su intimidad, una que no obstante el recato termina siendo del dominio público. Y es que existe la posibilidad —remota, pero existe— de que en un par de años se la observe retocada, redimensionada, lidiando en el fatigoso ir y venir proselitista, ofreciendo villas y castillos a los ya desencantados electores. Periodista, ama de casa, cifra en la profesión, en el hogar y la familia sus mayores anhelos, pero no descarta lanzarse al ruedo electoral en los próximos comicios como aspirante a la Alcaldía de alguno de los cantones capitalinos. Hasta la fecha, ni siquiera ella sabe cuál sería el municipio a conquistar; de lo que sí se puede estar seguro es que no será el Libertador, donde se respira un aire denso y nada grato, muy distinto al aroma que despide esta madre sola y sin compromiso. "Ese es un municipio ingobernable", dice, pero no revela si lo que aspira es a suceder a la rubia alcaldesa de Chacao y tomar en sus manos la tacita de plata de un país descalabrado o a ocupar la silla edilicia de El Hatillo, el paraíso comercial de lo very typical.
En todo caso, no es un secreto que esta mujer de larguísimas y bien torneadas piernas —que cruza y descruza sin la menor compasión por quien la admira— abriga la esperanza de prolongar la creciente hegemonía del sexo femenino en las primeras magistraturas municipales del área metropolitana. Falta saber si tiene las agallas necesarias para regir con diligencia, diplomacia y mano de hierro una porción del atormentado valle caraqueño que parece a punto de colapsar. Además, quién será el arriesgado que 4O
EXCESO
JULIO 1996
Entre los pliegues de su falda esconde a un príncipe azul de piel oscura y rojísima sangre criolla que le roba el sueño y le corta el aliento financiará tan costosa aventura y asesorará la campaña de rigor. Al respecto, someras versiones dan por sentado que desde New York podría venir el espaldarazo. Nadie ha realizado todavía ninguna encuesta, al menos que se sepa, para sondear la posibilidad real que tendría la conductora de Descubra quiénes son de alcanzar la meta propuesta, pero esa imagen de dama correcta y compadecida con las desgracias del prójimo podría ser su carta de triunfo. Sin embargo, hay quien no está de acuerdo. Un antiguo amigo y tutor profesional, Rafael Poleo, sorprendido ante la noticia de la supuesta candidatura, medita sobre las probabilidades de su ex pupila: "Yo diría que ella es impolítica ". Sucede que Yesmín, por lo visto, no está muy clara en cuanto a la oferta. Baraja la opción de una candidatura, pero no tiene propuestas concretas. Repite, como la mayoría de los vendedores de ilusiones demagógicas, el rosario de dolencias que aquejan al pueblo: asistencia social, seguridad pública, etcétera. Sin
embargo, afirma que para hacerlo bien hay que ir un poco más allá del maquillaje. "Antes de llegar al ornamento, a la parte bonita, hay que solucionar los problemas de los desposeídos. Esa debe ser la prioridad". En fin, un discurso flácido que hace pensar si acaso todo el parloteo acerca de su incursión en este terreno, desconocido para ella, al menos en apariencia, no será meros devaneos para evitar entrar en mayores profundidades. Su vida privada, por ejemplo. esmín Royé cree en dios, en los cuentos de hadas y en los finales felices. Tanto, que en un rincón de su casa, la quinta Lilimar en Los Chorros, ha erigido una suerte de altar en honor de fantásticas princesas —muñecas Barbie ataviadas como tales, "sólo las más hermosas, que son reinas"— que alternan en esta suerte de panteón personal con otras figurillas entre las que no faltan una mulata vestida de carioca, el Niño Jesús de Praga y las vírgenes de Fátima y El Valle. Además, entre los pliegues de su falda esconde a un príncipe
y
lebre a Lucho Gatica. Bésame mucho, La barca y tantas
La familia ante todo
Descubrir a los protagonistas
azul de piel oscura y rojísima sangre criolla que le roba el sueño y le corta el aliento y que, tal vez, sólo tal vez, algún día baile con ella en un amplio salón lleno de amigos el vals de Tchaikovski La bella durmiente, coronándola, por fin, como su única dama. Un caballero andante —y tanto, se ha recorrido medio mundo para recalar, por último, en New
York, desde donde viene esporádicamente a atender el negocio que le ocupa: el destino de Acción Democrática— que cantó al pie de su ventana y la conquistó para siempre. De ahí quizá el deseo de ser alcalde, pues el hombre en cuestión, Claudio Fermín, fue el primero en ocupar, mediante el ejercicio del sagrado derecho del voto, la dirección del Municipio Libertador en 1988. Los decretos que reglamentaban el consumo de tabaco en espacios públicos y la hora de cierre de los establecimientos que expendían alcohol le hicieron ganarse no pocos enemigos. Mucho antes de enrolarse en el ingrato oficio de retratar la cotidianidad y ofrecer calienticas las noticias, cuando apenas salía de la adolescencia, la muchacha de ascendencia libanesa se sintió desbordada por la ansiedad de entrarle de frente a la vida. Quería tener un hijo. A cualquier precio. Entonces conoció, en la segunda mitad de la década de los setenta, al dueño de sus desvelos, un pavo que aún no alcanzaba el cuarto de siglo, quien se iniciaba en el arduo camino de la política y cuya mayor fama provenía de una hermosa voz con la que entonaba dulcemente los boleros que hicieron cé-
otras tonadas formaban parte del repertorio que el conquistador cantaba en las noches de serenata. Así, arrullada por las melodías musitadas al borde del lóbulo, la inocente doncella iniciaría el ansiado camino a la maternidad y, en noviembre de 1977, recibiría el título definitivo con el advenimiento del primogénito: Alejandro Fermín Royé. Pasarían 16 años antes de concebir a la segunda —y última, al menos por ahora— de la estirpe: Yessica Fermín Royé. Enjaulado en una celda dorada —si se compara el retén de El Junquito con otras cárceles del país—, el ruiseñor de otros tiempos recibiría allí la visita de su calandria. En medio de las tribulaciones, los señalamientos y las investigaciones, habría tiempo para encender, una vez más, las cenizas. acida en la parroquia Candelaria en 1956, Jazmín Flor Linda del Valle —nombre que recibió en la pila bautismal— creció nadando entre dos aguas: la fe católica y la judía. Producto de la unión de Jalim Royé, un venezolano de padres libaneses pero judío practicante, y Herminia Hernández, colombiana oriunda de Barranquilla, militante de la Iglesia romana, fue la única hembra en una carnada de seis hijos nacidos al cobijo de la tolerancia teológica. "Tuvimos una formación muy flexible. Aprendimos de todo, teniendo siempre como premisa el respeto. Existía una amplitud de criterios, más aun en materia de religión, al punto que podías estudiar y aprender lo que quisieras sobre otras doctrinas, pero nunca criticarlas". Ella prefirió regir su vida por las enseñanzas de los apóstoles, los diez mandamientos y los siete pecados capitales. No obstante, al parecer, no siente desasosiego alguno al quebrantar al menos una de las leyes
N
JULIO 1996 EXCESO
41
inscritas en las tablas de Moisés. En cuanto al mabitoso nombrecito, fue un desliz lírico del padre, quien, según cuenta, de vez en cuando se sentía inspirado. En Líbano, la fragancia del jazmín sirve de base a numerosos perfumes y es sumamente apreciada. Así, al bautizarla como la aromática y blanca florecilla, Jalim quiso rendir culto a su única hija. Detalle que por lo demás no sería apreciado como una gracia sino, más bien, todo lo contrario. De hecho, quedaría relegado al olvido —¡gracias a dios!— y para toda suerte de trámites —a excepción hecha de los legales— se transformaría en el original Yesmín, salvo, claro está, en la reveladora partida de nacimiento. Desde niña sintió inclinación por las letras. En sus ratos de ocio, los que quedaban entre los juegos y la escuela, escribía, demostrando desde entonces el romántico ascendente que signaría su vida. Suerte de Cyrano de Bergerac, era el cerebro que fraguaba los idilios escolares por medio de edulcoradas misivas alentadoras. "De pequeña redactaba muchas cartas de amor para mis compañeras. Soy muy apasionada, diría que, a veces, hasta algo cursi. Yo las escribía y ellas se las enviaban a sus noviecitos. La cuestión era ilusionarlos. ¿Que cuántos tuve yo? Unos seis o siete". Sin transición retorna el presente. "Ahora quiero escribir sobre las distintas maneras que tienen hombres y mujeres de percibir el amor. Son diferentes, así como cada edad tiene una forma distinta de asumir el enamoramiento. He recolectado mucho material, pero no lo he organizado. Quiero que sea un trabajo basado en las experiencias de varias mujeres, porque yo tengo una sola". Y reafirma: "Sólo una". La infancia parece guardar para ella los mejores recuerdos. Recurrente, vuelve una y otra vez a los tiempos cuando aún era, citando a García Márquez, "feliz e indocumentada". De aquella época dichosa, transcurrida al calor del amor familiar, emergen corno un leit motiv existencial las imágenes de héroes y damiselas de los cuentos de hadas. No falta, por supuesto, algún duende que enturbie la felicidad o una bruja malvada que con 42
EXCESO
JULIO 1996
La disposición comunicativa que mostrara desde temprana edad la llevaría a elegir el oficio de periodista frente a otras opciones sus artes de magia negra encante al príncipe y lo aparte de la cándida doncella. Es la historia de su vida. "Siempre escribí cuentos infantiles en los que las Cenicientas, Blancanieves, Bellas Durmientes y Rapunceles son las protagonistas. Estas princesas van descubriendo el mundo a su alrededor. Las piedras, los ríos, los árboles, todos los personajes tienen vida y hablan. Claro, en cada una de estas narraciones me invento un final feliz. Me gustan los finales felices". En fin, Delia Fiallo para niños. Y es que para la Yesmín que en los carnavales de su niñez se disfrazaba de Dama Antañona, de psicodélica, de bruja o de princesa —"es el traje que recuerdo con más emoción. Toda mujer desea ser tratada como una". El problema, dice, "es que a veces el príncipe azul nunca llega. Yo tuve el mío, pero se fue". De hecho, a medida que pasaron los años, las ilusiones de ser reina consorte se desvanecieron entre rabias, noches de insomnio y lágrimas. La disposición comunicativa que mostrara desde temprana edad la llevaría a elegir el oficio de periodista frente a otras
opciones. "Las carreras de moda eran Psicología, Derecho y Comunicación Social. Toda la vida he sido peleona, por lo que, a lo mejor, hubiera sido una buena abogada; pero también me llamaba la atención ser psicóloga, debido a esa manía mía de analizar a la gente y llegar al fondo de lo que son. En perspectiva, creo que no erré la profesión". Inició los estudios en la Universidad Católica Andrés Bello, culminándolos en la Houston Baptiste University. Pero, al sobrevenir el malhadado viernes negro, en febrero de 1983, hubo de retornar al terruño, debiendo abandonar la idea de realizar un postgrado en Psicología de Medios. Alejandro tenía ya cinco años, y el dueño de sus trasnochos comenzaba a figurar en el partido del pueblo.
Hoy se reparte entre los medios audiovisuales y su vocación epistolar, de la que da fe Alejandro, el hijo, quien lleva cuenta de las innumerables misivas que van y vienen desde y para Estados Unidos, a fin de calmar angustias, sofocar encendidos ánimos, intentar reconciliaciones y aminorar el peso de la distancia.
L
a casa de Yesmín se parece a ella. Exquisita, moderna y con un toque kirsch. Un vitral azul da la bienvenida. En la sala, esculturas de Carlos Prada y Francisco Narváez. La pared exhibe una serigrafía de Jesús Soto que habla de contemporaneidad. Nada de paisajes de los que se venden a precios de regalo en la Feria del Arte parece ser la consigna. En medio de tanto buen gusto, golpea como un mazazo el abigarrado rincón de las muñecas. Rezuma energía, es como un exuberante volcán a punto de erupción. Se siente perturbadora y, según versiones de corrillo, lo es. Afirman que más de uno anda por ahí con el corazón en pedazos por esta dama de ojazos verdes. Incluso, que un marchand griego quedó prendado de sus encantos en una reciente subasta en la que hizo las veces de martillo. Ella sonríe con picardía y niega: "No tengo novios ni nada por el estilo. Los hombres se
Arquitectura en la Universidad José María Vargas. Esa actitud osada y la sombra de un fantasma —de piel oscura y grandes ojos negros orlados de larguísimas pestañas— que parece gravitar sobre ella han sido, por lo visto, una rémora para iniciar nuevas relaciones y encontrar otro caballero que tome su banPatricia Poleo: una buena opinión dera. "Cuando se me acerca un banquero para entablar conversación en un cocktail, con seguridad en la menor oportunidad le pregunto si su institución está al borde de la intervención. En ocasiones algunos hombres me interrogan sobre política y se van. Aquí, entre nosotros, he llegado a creer que existe una especie de Claudio y Rossana Fermín obstáculo. La verdad es que no he tenido la suerte, o la desme acercan, pero le temen a mi carácter". Tiene fama de recia, aunque en reali- gracia, de que llegue a mi vida un hombre dad es más coraza que otra cosa. "Es una lo suficientemente importante en térmimujer muy generosa", afirma Patricia Po- nos económicos o políticos. Creo que me leo, una de sus compañeras en el progra- tienen pavor". Se la observa graciosa y dulce al hama Tres en antena, ya fuera del aire. Sin embargo, no le teme al peligro, al menos blar, radiante a sus 40 años, y es difícil no cuando está trabajando. Para muestra imaginar que alguien le tenga miedo. el episodio sucedido el 27 de noviembre Mucho menos al saber que es de aquellas de 1992, cuando en medio de una fuerte mujeres a quienes les gusta que les manbalacera en las inmediaciones del aero- den flores y bombones y no le temen a la puerto La Carlota —cerca de la sede de crítica de las feministas a ultranza. Cae la Omnivisión, donde labora— tomó el au- noche, se escuchan los grillos. Yesmín se tomóvil y a despecho de la lluvia de pro- torna melancólica. Sabe que la suya es la yectiles sacó de la barahúnda a un trío de espera de Penélope. Pero conserva la essoldados heridos para llevarlos al hospi- peranza de que un día no muy lejano tal Domingo Luciani en El Llanito. La aquel príncipe errabundo que entró por hazaña, fuera de cámara, le valdría a la una ventana de su vida y huyó sin dejar postre un reconocimiento del Ejército que más rastro que una foto donde aparece conserva con orgullo. "Yo no lo habría cargando en brazos a la bebita regrese hecho", dice el hijo con cierto tono de para fundar un hogar. LA —HJ reproche. Menos arrojado, prefiere las reglas, los planos y el diseño: estudia JULIO 1996 EXCESO
43
Humberto Mimes
El país en bancarrota, los mecenas en el exilio, el mercado del arte agoniza en el tremedal de la apatía y la sobrevaluación. Con mayor expeliendo en la teoría del átomo que en las leyes de la perspectiva, Odidys Sánchez, una galerista recién estrenada en estos menesteres, trata de insuflarle nuevos aires al devaluado oficio de marchaud e impone una práctica hasta ahora poco común: la subasta. Bajan los precios, pujan los hiteresados. ¡Por fin se vende un cuadro!
44 exceso JULIO
1996
r"1"11~1111~41V.,115:91 ,,,, ,W,,,St,,,
,,j3.1aUek701,1X4MCA11~51611~..........
Cabeza de niĂąa, de Francisco NarvĂĄez, vendida en 15 millones
uince millones a la una, quince a las dos, quince a las tres!". Un mazazo sobre el estrado y el grito: "¡Vendido!". La noticia produjo asombro y revuelo en el mundillo de las artes plásticas del país: la casa de subasta Odalys coloco en tres horas 78 obras de maestros venezolanos —entre ellos una de Francisco Narváez que alcanzó un precio de venta de 15 millones de bolívares—, recaudando en la operación unos 75 millones. Un acontecimiento, a todas luces inusual, que sería calificado por algunos diarios locales como "un miniboom en el siempre fluctuante mercado del arte". Los representantes de las casas internacionales Cristhie's y Sotheby's, invitados al evento, también se mostraron sorprendidos ante el inesperado éxito de la jornada, que dejó un record de ventas de ciento por ciento, cifra inédita en cualquier lugar del planeta. Sin embargo, también hubo dolientes: las galerías comerciales que ven en esta iniciativa, innovadora en Venezuela por lo demás, una competencia muy fuerte, capaz de devastarlas. Hija de canarios que emigraron después de la Guerra Civil Española, Odalys Sánchez se desempeñó siempre en la Física, en el área de calibración de equipos de radioterapia y afines. Pero al casarse y quedar encinta decidió aislarse del efecto de las posibles radiaciones e incursionar en el arte, primero como estudiante en el instituto Federico Brandt y luego como marchand, para finalmente, en 1993, crear la galería Odalys. "Me encontré con un obstáculo muy grande: el desequiliOdalys vende brio de los precios del mercado. La disyuntiva era seguir en el carril en el que se mueven las galerías tradicionalmente o tomar otro camino". La conclusión fue definitiva. "No podemos continuar intentando elevar los precios de algunas obras sin alguna base. Muchas galerías podrán conservar esos precios ficticios, pero se van a convertir en pequeños museos. La gente irá a ver las obras, pero no a comprar. Así no estamos ayudando a la promoción de nuestros artistas". Mucho ha cambiado el panorama en el círculo del arte venezolano desde que el genial pintor Armando Reverón deslumbrara al mundo con la luminosidad intensa de sus obras, en lo que el crítico Alfredo Boulton denominó como la "época blanca" del artista. Con seguridad el maestro de Castillete, perdido en los tormentos de un mundo interior delirante, nunca imaginó que su obra habría de cotizarse muy alto en el mercado de la plástica nacional y que, incluso, sería falsificada. Tampoco que él, el compañero de Juanita Mota, el adorador de muñecas, se convertiría en un personaje con ribetes de leyenda. 46
EXCESO
JULIO 1996
Lo cierto es que no sólo la ciudad de los techos rojos se ha transformado en una de grandes edificios, sino que la perspectiva que se tiene sobre el arte y su comercio ha variado drásticamente desde la época en que el llamado pintor de la luz ingresó en la Academia de Bellas Artes en 1908. En la Caracas de las décadas de los cuarenta y cincuenta, surgió dentro de la modesta vida citadina un escaso número de galerías como El Greco y Cuatro Muros, Claveles, de Luis López Méndez con poca repercusión en el apático acontecer cultural. "Hasta ese momento se exponía en librerías y museos. El coleccionista adquiría una obra porque alguna persona culta le aconsejaba que lo hiciera. Comprar un cuadro era visto como un favor que se le hacía al artista", señala Juan Pablo Muci, director de las galerías Muci y Li. En los setenta todo cambió: los beneficios de la bonanza petrolera comenzaron a sentirse en varios estratos sociales. El poder adquisitivo era alto y la clase media, conformada en su mayoría por profesionales, tenía la posibilidad de acceder a los llamados mercados superfluos, entre ellos el del arte. Médicos, abogados, profesores universitarios, adquirían pinturas de autores reconocidos por cifras que fluctuaban entre los mil y los cinco mil bolívares (para la época, 232 y 1.162 dólares), pagando a plazos y con otras facilidades. Sería notable la influencia de Antonio Derderián, maestro de la falsificación que, no obstante su posterior mala fama, en ese decenio de oropel logró sembrar entre los potenciales compradores la noción de la obra de arte como objeto de valor. El fatídico viernes negro, el 18 de febrero de 1983, da lugar a un fenómeno que será trascendental para lo que queda de siglo. Explica Muci: "El mercado, antes ubicado entre los profesionales, se desplaza hacia el sector financiero, de mayor poder adquisitivo, que tiene que ver con el capital especulativo y está muy pendiente del mercado internacional porque viaja con frecuencia al exterior. Comienza a manejarse el concepto del arte como inversión, que favoreció a ciertos pintores y galerías vinculados a ese ámbito. De hecho, tanto el volumen de venta como los precios subieron porque el sector financiero especulaba. Cosa que les convenía, porque ellos mismos eran quienes habían comprado".
N
o poco han sufrido las musas. Una segunda debacle económica, más grave aun que la devaluación decretada por Luis Herrera Campíns, afectaría la compra-venta de objetos de arte: la intervención del Banco Latino en enero de 1994 y la posterior crisis del sistema bancario. Según Juan
Pablo Muci, a partir de ese momento "salió 60% de los clientes. Los banqueros ya no compran, para resguardar su buena reputación. Además, dentro del patrimonio de muchas de las instituciones intervenidas había gran cantidad de obras de arte, y todavía se discute si saldrán o no a la venta. Antes del desastre, los banqueros eran vistos como benefactores de la cultura". La intervención por parte del Estado de más de una decena de bancos entre enero y agosto de 1994 generaría en el medio de la plástica respuestas insospechadas: algunos artistas que en otros tiempos mantenían un discurso revolucionario y crítico ante el sistema saldrían en defensa de sus bondadosos mecenas y, por supuesto, de los centros culturales auspiciados por aquéllos. Centros que, a decir verdad, surgieron con un mero objetivo empresarial: mejorar la imagen de la entidad de acuerdo con los postulados de la comunicación corporativa. Dentro de este contexto surge un arte complaciente, un arte fácil —como lo califican algunos críticos— que garantizaba el éxito comercial, satisfacía las exigencias de la dupla galería-banquero y, además, reportaba
LEL:
Y
Un Soto de muchos miles
dulcificando, vulgarizando, tal como se estila en la pintura
Orfeo clamando por Eurídice, de Centello Vallenilla, cuadro millonario
ganancias para el pintor. A propósito de esto, el crítico Juan Carlos Palenzuela señalaba en un artículo titulado Pintura en falsete (El Nacional, 13 de agosto de 1989), refiriéndose a la exposición de Carlos Hernández Guerra en la galería Freites: "En los setenta hubo redefiniciones que fueron fatales. Lo saudita trastocó las bases de la sociedad, y algunos pintores experimentaron los extravíos del poder. Hernández Guerra pintaba en 1981 Un día de lluvia y allí parecería estancarse su proceso creativo. Desde entonces su pintura careció de acontecimientos. Aparte, claro está, de la efímera victoria comercial. El mismo paisaje se ha ido repitiendo,
comercial. Lentamente su obra ha desaparecido como referencia en la pintura venezolana. Resta en los anales mercantiles, si es que eso puede tener algún valor artístico. El pinta para una clientela adinerada a secas". No se refería sólo a Hernández Guerra, sino a todo un grupo de pintores que seguía la misma línea. En los noventa otro tipo de inversionistas incursionaría en el ruedo: lavadores de dinero sucio dispuestos a pagar sumas astronómicas, pero en efectivo. Hoy por hoy, en Caracas se habla de un comprador que en un año ha invertido alrededor de un millón de dólares en lienzos. Del otro lado de la frontera, en Colombia, se comenta aún el alza vertiginosa y desproporcionada que experimentara la cotización de las pinturas de Fernando Botero, presuntamente gracias al empuje de los carteles de la droga. Lo cual no implica un menosprecio a su talento ni un desconocimiento a la aceptación que ha tenido en la escena internacional. Para Luis Muci, director del Centro de Arte Muci (Grupo Li), "en este momento existe una etapa de recesión, pero sólo en lo que concierne a cierto tipo de arte. Lo que es muy bueno y muy costoso no cae en recesión". Estamos, pues, hablando de un nuevo paradigma estético: "Mientras más costosa sea una obra, mejor es su calidad artística". Ya en la antigüedad los pensadores griegos habían esbozado una engañosa premisa a la postre E2
Surge un arte complaciente, un arte fácil que garantizaba el éxito comercial y satisfacía las exigencias de la dupla galería-banquero JULIO 1996 EXCESO
47
superada: "Lo bello es bueno", y viceversa. Juan Pablo Muci ha reflexionado sobre el tema y llega a una conclusión: "Imbuidos en la onda del sector financiero, hemos caído en la trampa de ver el arte como una acción de la bolsa de valores y no debe ser así. En las subastas muchos estamos pendientes de ver cuánto alcanza la cotización de un cuadro, cuánto vale un cuadro". No serían éstas las últimas consecuencias de la era de la Juan Pablo Muci... globalización. La furiosa lucha por la consagración universal, vale decir, la dolarización del prestigio, lleva a muchos artistas venezolanos, algunos de ellos ex militantes de izquierda, a irrumpir en los circuitos del Primer Mundo apelando a veces a las tretas más diversas: exponer en un apartado museo o pueblo de Alemania, que no en los más exigentes espacios de Munich o Berlín; acudir a las relaciones públicas y el lobbying en ministerios y embajadas de aquí y allá, incluso canjeando óleos; exaltar hasta la saciedad galardones recibidos en el extranjero de clubes y sociedades de damas aficionadas a la caridad y conferirles, de vuelta en Maiquetía, la categoría de premio internacional. Esta maña de adulterar los reconocimientos públicos —adelanta anónimo un conocedor en la materia— ya se había iniciado en nuestro país unos años antes, pues algunos artistas plásticos "lograron, mediante maniobras legales, transformar una bolsa de trabajo que recibieron en los años cincuenta como estímulo a su trabajo, en Premio Nacional. Ellos saben quiénes son". La deducción es aberrante: en medio de la carrera por el prestigio y —sobre todo— el dinero, las nuevas generaciones de pintores, entre las que se incluyen muchos creadores de talento, piensan en los dólares más que en la propia creación. Después de todo, un premio no garantiza un exitoso porvenir. Además, agrega un artista plástico, "siguen las tendencias de los años sesenta, las reproducen y por ello cobran miles de dólares, como si estuvieran inventando otro lenguaje". ue en este turbio escenario donde irrumpió Odalys Sánchez de Saravo, quien conduce la casa de subasta homónima —por lo demás, la primera de carácter comercial en Venezuela. El negocio, a todas luces rentable, pareciera estar dirigido no sólo a los aquilatados ejecutivos sino a un público más diverso. En una venta pública realizada el 9 de junio y en la que se
F
colocaron 78 piezas, totalizó un monto de 45 millones 665 mil bolívares ofertados y 75 millones 84 mil bolívares vendidos. La casa subastadora centra su éxito en bajar los precios de base a partir de los cuales pujan los interesados, y los precios de mercado, que teóricamente están consolidados. En ambos casos, estos precios están muy por debajo de lo que ofrecen otras galerías. He ahí el secreto. No obstante los logros, hay quien cuestiona los métodos de esta especialista en Física Nuclear transformada en galerista. Según Juan Pablo Muci, una escultura de Carlos Prada, artista exclusivo de la galería Muci, fue ofrecida en 200 mil bolívares, a precio de mercado, cuando en realidad su valor es mucho mayor, "cerca de medio millón", asegura. "Estas subastas pueden ayudar a estimular el mercado, pero insisto en que al bajar la cotización de un artista se le está haciendo un gran daño a todos". Luis Muci es más tajante: "Para un artista, disminuir el precio de sus obras es mortal. Los coleccionisy Luis Muci: no a las subastas tas serios saben que las subastas de Odalys son un circo. Quizás afecte al mercado constituido por revendedores, personas que no tienen mayor conocimiento o que están buscando gangas". La disputa entre galerías está servida. Los argumentos van y vienen. Odalys no concibe que un artista joven se cotice por encima de los maestros del Círculo de Bellas Artes o la Escuela de Caracas. Luis Muci replica: "Muchos jóvenes están cotizándose muy bien internacionalmente y eso influye en el mercado interno. El arte es una inversión: un lingote de oro te cuesta lo mismo en New York, Londres o Caracas". Para la subastadora, el problema de los precios se resume de la siguiente manera: "En la subasta todos los artistas están a la vista, los buenos y los malos. Lo que no se vende es porque no vale lo que dicen que vale o porque sencillamente no gusta. Hay momentos en que el petróleo se vende más caro o más barato. Es interesante saber cuánto cuesta un Reverón en comparación con un Michelena, un Jorge Pissani, con los muchachos nuevos. Si un artista vendió una pintura en cinco mil dólares en el exterior no quiere decir que va a venir y le va a poner ese precio a todas sus obras. Eso depende del mercado, de la oferta y la demanda". La última palabra no está dicha, pero la impresión es que, en adelante, los precios del mercado venezolano sufrirán una revisión. Ni modo. Habrá que ver quién ofrece más.
" Disminuir el precio de las obras es mortal. Los coleccionistas serios saben que las subastas de Odalys Sánchez son un circo" 48
EXCESO
JULIO 1996
o GióCaffe Trattoria Una cita con la belleza La Sobriedad y la belleza se ven y se
CAFFE •TRATTORIA
dejan
ver aquí. Desde el mismo momento en que los parqueros se hacen cargo del vehículo hasta el merecido aperitivo que señala el fin de la velada. Así que su nombre no convoque a las lógicas equivocaciones. Que el espacio sirva para el cálido encuentro y la sana tertulia, vale, pero que la sutileza de sus platos, las sugerencias de una carta de elaboración propia, hable por sí sola y halague los más rígidos paladares. Gastronomía italiana moderna, concebida con toques y retoques de Nouvelle Cuisine y servida en un sofisticado ambienteArt Deco. Entre tonos ocres y verdes, diseño de suaves líneas y luces tenues que invitan a la intimidad. Eso y más, es el GióCaffe Trattoria. Por eso, está llamado a convertirse en el sitio culto de esa élite que siempre se indina por las más encumbradas exigencias. Alimentos del día, preparación casi artesanal. Suerte de trattoria contemporánea que en sus 23 mesas combina lo mejor de cada región de Italia con el
esmero de la atención personalizada. En Gió Caffe Trattoria, la tradición se funde con la estética. Baste a modo de entrada, una degustación del delicioso carpaccio mixto de atún y salmón ahumado de Noruega, o mejor, de la ensalada de peras con vinagreta de mostaza y mango. Y qué mejor que acompañarlos con un buen vino, sea blanco o tinto, francés o italiano. Pues la vanidad hay que regocijarla. Y en el desfile que apenas comienza, es muy posible hacerlo. Entre gourmets y amigos fraternos, entre socios de negocios y enamoradas parejas. Damas de espectacular estampa, caballeros de evidente ascenso. Esa es nuestra gente. Y es que en GióCaffe Trattoria, el adulto contemporáneo tiene su espacio, allí se desenvuelve y continúa su encuentro con, quizás, unos exquisitos raviolis de cangrejo natural en salsa de ají dulce, una pechuga de pollo rellena de champignones y queso fontino o los ya reconocidos medallones de lomito al grill cubierto con cebollas caramelizadas. Y un último detalle: acuda previa reservación, así todo siempre sale mejor. Y usted no desperdicia su tiempo.
STONE (RAM KING CRABS LEGS SNOW CRABS SOFT SHELL CRABS ~GENESI CRABS
TELE: 993.5348 COMIENZO
Av.
,
91.9709
PRINCIPAL DE LAS MERCEDES CARACAS
kif
1-15111111141 N
VALET PARKING
Re aC
IGNACIO QUINTANA
Juan Carvallo desde Fisher Island' La reciente investidura de editorialista de El Nacional le ha concedido una notoriedad que la simple fortuna no le había permitido conquistar. Ungido en otro tiempo por el patriarca, se creyó en posesión de la llave maestra del círculo íntimo de la familia Caldera. Perseguido y señalado como conspirador, optó por un exilio de oropel. Hoy, desde un exclusivo refugio en el floridiano Key Biscayne, pontifica con odio y deshoja la margarita de una triunfal vuelta a la patria y no tenía por qué dejar de serlo. Asesor de organizaciones financieras y de personajes que prefieren permanecer a buen resguardo; amigo de claustros: militares, académicos y eclesiásticos; detentor de una ristra de títulos obtenidos en prestigiosas instituciones y figurante inmortal en una serie de retratos que lo congelan al lado de los grandes de la historia, nada tendría que haberlo elevado de su acostumbrado bajo perfil. Fuera de quicio, sin embargo, de un tiempo a IGNACIO QUINTANA ERA UN ABSOLUTO DESCONOCIDO
50
EXCESO JULIO 1996
â&#x20AC;¢
esta parte se ha hecho público a través de atrevidos artículos de opinión en El Nacional y avisos pagados en los principales rotativos del patio, donde expone —con grandilocuente exhibicionismo— su currículum. Como objetivo, al parecer, bajar del pedestal a un magnífico contendiente: Rafael Caldera. El enemigo, diríase. Para Quintana, sobran las razones. El viernes 1 de julio de 1994 —mientras las garantías constitucionales se hallaban suspendidas bajo pretexto de que sólo así podrían tomarse acciones contra los banqueros responsables de la crisis financiera—, su casa de la urbanización Altamira en Caracas vería turbado el sosiego habitual de los marmóreos salones a manos de los esbirros del orden. Treinta funcionarios de la Disip, furibundos y armados a más no poder, allanaron la quinta y, según relata el mismo agredido, extralimitarían las acciones: la emprendieron a empellones contra su hermano Douglas Quintana y una legión de servidores —cocinero, chofer y vigilante privado incluidos—; intentaron vejar a su octogenaria madre, sustrajeron cuatro millones de bolívares y hasta interrogaron a su hija de ocho años. Se le acusaba de fraguar una conjura para derribar el actual gobierno. Entretanto, Ignacio Quintana —advertido de la jugada— volaba al paraíso de los prófugos venezolanos: Miami. Le aguardaba un fastuoso piso en Fisher Island, en el acaudalado Key Biscayne de Florida, lugar de veraneo para estrellas del metálico. Allí permanece todavía a la espera de tiempos mejores. ABRE LAS TRANSLÚCIDAS PUERTAS de cristal del apartamento, da indicaciones en un francés chapucero a un sobrino, venezolano e hispanohablante, que guía al periodista. El escenario es fiel reflejo del diálogo que se inicia: espacios amplios que dan paso a grandes temas de conversación; decoración grandilocuente que sirve de marco a un discurso altisonante. Justo al frente, tras un amplio balcón, el ululante mar Caribe. Las mismas aguas que, a kilómetros de distancia, bañan las costas venezolanas, y que en noches cons52
EXCESO JULIO 1996
teladas deben inspirar reprimidas año- como el corolario de la degradación de ranzas del terruño. Pero no es ocasión un viejo y cálido vínculo entre el articupara nostalgias, así que opta por el ence- lista expatriado y el actual jefe del Estado rrado estudio, más idóneo a la hora de y sus vástagos. Hubo, en efecto, un mejor las citas a pie de diálogo. Una y otra vez tiempo pasado y, luego, una violenta rupacudirá a los anaqueles de la biblioteca tura. Documentos en mano, el entreen un obsesivo esfuerzo de magnicidio in- vistado explica: "Rafael Caldera y yo telectual. "Rafael Caldera encarna el fa- éramos grandes amigos. Lo ayudé ecoriseísmo moral y político. Llegó al poder nómicamente desde 1983, primero en su para distribuir riquezas, disfrutar de su campaña electoral contra Lusinchi, y posición privilegiada y ayudar a amigos y luego para iniciar la que lo llevó a Miparientes. Es un hombre que antepone la razón nepótica a la razón de Estado, y esta forma de proceder ha sido definida a lo largo de la historia como un delito de familia. El actual Presidente siempre acusa a sus adversarios de traicionar a la patria, pero quien quebranta el pensamiento de Bolívar es el verdadero traidor. A El aletazo del águila lo largo de su correspondencia, el Li- raflores en esta segunda vuelta. Fui yo bertador revela el rechazo, cargado de quien pagó las primeras encuestas sobre asco, que le produce el favoritismo con la las posibilidades que tenía de retornar al progenie cuando se trata de ocupar pues- poder". Y agrega con malicia: "También tos en la administración pública. Lo más tuve una relación amistosa con Andrés grave es que sea precisamente la persona Caldera, pero algo que hice provocó el que enarbola la bandera de la rectitud y distanciamiento. Aunque se trataba de la moral quien asuma esta postura". Vin- algo personal, juró que si su padre lledicativo, enfático, remata con ímpetu: gaba al poder se vengaría. Y así fue. Tan "Tenemos un primer mandatario inefi- pronto pudieron, desataron una persecaz; los hechos han demostrado que no cución espantosa contra mí, por razones está a la altura de las circunstancias. El que por elegancia prefiero omitir". Una Principio de Peter queda comprobado elegancia que no le impide continuar cuando se constata su nivel de incom- desinhibidamente: "Yo le daba apoyo petencia. ¿Dónde está el supuesto rector, económico, regular y sistemático a Anel estadista, el conocedor? Mentira, nada drés Caldera, que no tenía trabajo ni dide eso. Es un bluff. Caímos en una tram- nero. Fui yo quien financió su última etapa, porque Caldera ha fracasado política, pa en París. Muchas veces estuvimos social y coyunturalmente. Instituciona- juntos allá. Salíamos Gisela Betancourt y lizó la economía de la ruina. Abraham Andrés, María Elena y yo. Comíamos en Lincoln argumentaba que cuando un buenos restaurantes, bebíamos los mejopueblo está en manos de un hombre que res vinos. Eso sí, siempre pagaba yo. En no da la talla, éste debía ser derrocado; y agradecimiento, Andrés se ponía un deno se trata de una acción ilegítima, está lantal y cocinaba, por ejemplo, un roast dentro de las normas de lo legal". beef para mi esposa. Entre paréntesis, lo El odio es un amor insatisfecho, como hacía bastante bien. Yo esperaba todo de dijera Cioran. La agresión policial en ca- él, menos una actitud tan agresiva". sa de los Quintana podría interpretarse Fuelle de la conversación, otros miem-
bros de la familia Caldera alimentan la diatriba. "Juan José Caldera vendía resorts para ganarse una magra comisión. En una ocasión inclusive le facilité un pagaré del Banco Latino a tasa preferencial para que no perdiera la casa. Ahora es todo un potentado. ¿De dónde sale ese dinero?", se pregunta antes de volver sobre el hermano menor. "Andrés era empleado de mi compañía y el sueldo con dificultad le alcanzaba para ir a
"¿En qué país serio y qué hombre decente le da funciones de Estado a una persona cuyo mérito han sido la vagancia y el sablazo? Andrés Caldera es un oportunist y su padre es qui mejor lo Europa. Hoy en día viaja a Francia con muchísima frecuencia. Si se analiza fría y objetivamente el tiempo que permaneció en el cargo de ministro de la Secretaría, es fácil concluir que, en el supuesto de que hubiera ahorrado todo, habría reunido escasos 20 mil dólares, teniendo en cuenta que lo que ganaba eran 500 mil bolívares mensuales. ¿Cómo hace para ir con tanta frecuencia a París?". Y concluye: "Rafael Caldera ha llevado a sus dos hijos a enriquecerse de una manera corrupta y vergonzosa. ¿En qué país serio y qué hombre decente le da funciones de Estado a una persona cuyo mérito han sido la vagancia y el sablazo? Andrés Caldera es un oportunista y su padre es quien mejor lo sabe. La prueba más evidente de que se equivocó es que salió del Gobierno".
LA MIRADA LÁNGUIDA Y LA CAMISA DE SEDA, el rostro fronterizo y el traje oscuro hablan de dos hombres distintos. Divergentes, pero indisociables. El uno, nimbado por una reputación de extravagante, viste en la exclusiva tienda Bijan de la Quinta Avenida; prefiere, entre los bordeaux, el Cháteau Pétrus —a la hora de regar una cena íntima o de protocolo—, y se atreve a medir fuerzas, a distancia, con un todopoderoso y pa-
Las trampas del amor
triarcal Presidente de la República. Remoto e impreciso, el otro transpira en el calor sofocante de Caja Seca, un mínimo pueblo en los límites de los estados Trujillo y Zulia, donde vino al mundo hace 45 años en el seno de una modesta familia. Allá se trazó una imagen del mundo, la de un mapa sin linderos. Una licenciatura en Filosofía en la Universidad del Zulia le permitiría llegar hasta las cátedras de Raymond Aron y Jean-Pierre Thomas. No sólo se había colado —en sus propios términos— en los más selectos claustros de Francia, también se revelaría como un estudiante ejemplar. En aquellos años parisinos —corría la segunda mitad de la década de los setenta, según lo confirma una elogiosa carta del Jefe del Estado fechada el 20 de octubre de 1977 en la que se despide como su "afectísimo Rafael Caldera"—lograría una antología de títulos de especialización en distintas áreas del saber: economía, ciencias políticas y artes militares. Tan diversos, como las causas que iban a servir: "Aprobé un seminario sobre Galileo Galilei y conozco muy bien sus planteamientos. Si le preguntas a Andrés
Caldera la famosa fórmula del pensador italiano sobre el tiempo, a lo mejor dice que es el lapso que tardó él en realizar alteraciones nepóticas para lograr la corrupción". Funcionario de la embajada de Venezuela en la Unesco, para entonces encabezada por Arturo Uslar Pietri, aprovecharía el escenario de la Ciudad Luz para posar ante el lente del fotógrafo con legendarias personalidades. Simone de Beauvoir quien, habiéndole profesado una campaneada amistad, habría elogiado su conocimiento de la obra de Sartre; Jorge Luis Borges, de quien recibiera felicitaciones porque dominaba su obra mejor que el propio escritor y, como guinda, el absurdo: Eugéne Ionesco. La elusiva consagración definitiva, no obstante, lo aguardaría en el más inesperado espacio, el elevado y rutilante comedor de la Tour d'Argent, cifrada en un pato con melocotones bautizado por Claude Terrail con el nombre y el apellido del venezolano. Aunque no figura en la carta impresa del restaurante, basta citarlo como contraseña: el atento maitre no vacilará un instante. Con todo, el hijo ilustre de Caja Seca se ha labrado algo más que admiradores y turiferarios. Argenis Rodríguez, columnista de El Mundo y conocido escritor, sostiene que "Ignacio Quintana no re, presenta a Venezuela. El tiene más fotografías con gente famosa que libros, y los títulos que alguien pueda tener no valen nada si no escribe. Creo que es un articulista de tercera categoría: no dice nada, no se sumerge en los temas, no habla de historia. Lo que está haciendo es un autobombo". Un amigo que opta por el anonimato apenas le concede el beneficio de la duda. "Es una persona culta e inteligente, pero me parece exagerado el número de títulos que se adjudica. Creo que lo único que ha obtenido es un docJULIO 1996 EXCESO
53
torado en Maracaibo y otro en Francia. Además, para quien tiene dinero es muy fácil acceder a esas eminencias con las que sale retratado". En realidad, maneja una considerable fortuna. La pregunta ganadora es dónde, cómo y cuándo logró amasarla. Los rumores lo colocan en posiciones varias: vendedor de armas, testaferro de banqueros prófugos y hasta emisario celestial del Banco Ambrosiano. Un testigo de excepción señala una pista en este tablero de incertidumbres: "Le gusta establecer puentes con las diferentes fuentes del poder, porque es precisamente el poder lo que más le atrae". Mientras, el protagonista de la charada desmiente los runrunes. "Tengo los medios para vivir con dignidad, y son producto de mi trabajo y mi cabeza. Incluso en la actualidad sigo generando ingresos. Mi especialidad es el mercado monetario y una consulta mía vale dinero. En la época de mi amistad con Andrés Caldera especulé mucho con el dólar y el franco y, por supuesto, obtuve jugosas ganancias. Me puedo exponer ante el país y decir que he trabajado. ¡Qué triste es para un hombre ser el ministro nepote que se presentaba ante la nación y no había hecho nada! Yo construí desarrollos en Maracaibo que siguen en pie, y además fundé una editorial y una inversora". Pero un testigo que prefiere pasar de incógnito precisa que "su fortuna proviene del matrimonio con María Elena Cupello, que es una mujer de familia acomodada. Por otra parte, no hay que olvidar que trabajó con una máquina de hacer dinero llamada Pedro Tinoco". Escurridizo, nocturno, el discípulo de Raymond Aton ha aprendido a desmontar alcabalas, abrirse paso, allanar el camino. Rastignac tropical, aprendió a orientarse entre bastidores, guiado por una indudable ambición de poder. Favorito de la alta jerarquía católica romana —su hija que recibió las aguas bautismales de la impoluta mano de Karol Wojtyla hizo años más tarde la primera comunión en la Nunciatura Apostólica de Caracas, a la que asistieron, entre otros, Radamés Muñoz León y Eduardo Fernández—, se ufana abiertamente del 54
EXCESO JULIO 1996
privilegio: "La norma fundamental para ser reconocido por el papa Juan Pablo II es la rectitud, y yo soy un hombre muy correcto. La casa de dios no admite la ruindad moral y espiritual que caracteriza al patético gobierno de Caldera. ¿Por qué crees que la Iglesia fue tan consecuente conmigo después del allanamiento de mi hogar? La respuesta es sencilla. Me conocen y no es una relación nueva, es un vínculo que data ya de 18 años". Ignacio Quintana puede saltar —como si tal cosa— del cielo al infierno. "Una vez fui a visitar a Carlos Andrés Pérez, cuando ya le habían dictado auto de detención. Como era de esperarse, había un enjambre de periodistas un poco agresivos. Me preguntaron quién era yo y les dije: 'Soy la reencarnación de Mefistófeles'. Lo hice como un efecto teatral, pero ahora le encuentro sentido.
cho, la fuerza del bien, del hombre y del progreso para luchar por una nación distinta". Y se vanagloria del espaldarazo que le ha dado a sus planes el Tío Sam. "He sido muy bien acogido por el mundo político estadounidense, y tengo muy buenas relaciones con el más alto nivel político y económico. Conocí en persona a Bill Clinton, porque progresivamente he ido entrando en contacto con las cúpulas del poder de este país. Es más, he
Conversación del absurdo
Con Borges, palos de ciego
Lucifer no es un personaje malo. Nikos Kazantzakis hace su apología y dice que es el ángel que regresará a transmutar todo en luz. Yo tendré que emularlo para trocar la corrupción del nepotismo en luz". Y parece creer en lo que dice. Ubicado en las filas de la derecha, promete un retorno triunfal con el fin de convertir a Venezuela en un paraíso, en un país de fantasía: "Voy a crear un movimiento llamado Unidos por Venezuela, cuya meta es exaltar el estado de dere-
sido invitado a participar en muchas actividades que he rechazado de una manera voluntaria porque prefiero consagrar el tiempo que paso en Miami al estudio, la reflexión y el análisis". SI EL FUNDADOR DE UNIDOS POR VENEZUELA ha sido hostigado y perseguido, las causas permanecen en la sombra. El mutismo en torno del incidente de julio de 1994 es de rigor en la policía y en el gobierno. Una voz en off aventura razones.
"El problema se inicia cuando las buenas relaciones entre Rafael Caldera e Ignacio Quintana se deterioran. El antiguo pupilo se aparta ideológicamente del maestro y decide apoyar a Carlos Andrés Pérez. De hecho durante el gobierno de Pérez se mencionó el nombre de Quintana como posible ministro de Hacienda. Una vez que Caldera llega a Miraflores, se vincula a Quintana con un grupo de presuntos conspiradores, entre quienes se contaban
los Andrés Pérez, por otra parte, da una explicación más simple: "Ha sido perseguido por Caldera por mantener una actitud muy crítica frente a los disparates de este gobierno". No obstante, en corrillos políticos se afirma que Quintana fue anfitrión de varias reuniones bien regadas a las que asistieron miembros de la alta jerarquía castrense con quienes, se presume, conspiraba. En cierta ocasión Carlos Andrés Pérez fue huésped despre-
o matr con María Elena Cupello, que es una mujer de familia acomodada. Por otra parte, no hay que olvidar que trabaliabLmr
Con Simone de Beauvoir, hacia el existencialismo
Parsifal de Sola y Santiago Ramírez. Queda con esa mácula cuando en realidad su participación era más teórica que práctica. Creían que era él quien financiaba la componenda, debido a su acaudalada posición. Entonces, por una decisión de Escovar Salom, le allanan la casa". Car-
venido de uno de estos ágapes. El ex primer mandatario es parco: "En varias oportunidades llegué a ver militares en su casa. Es algo que tiene sentido, porque él es un hombre muy bien relacionado con el poder". En definitiva, intenta despejar la fuente anónima, "Quintana heredó de Pedro Tinoco el vínculo con los militares. La comunicación con el Ejército llegó a ser una constante durante el segundo período de Pérez. Personas ligadas ál Movimiento Bolivariano Revolucionario dicen que él le llevó el mensaje a Hugo Chávez para que iniciara la acción, pero sinceramente no lo creo. Lo cierto es que, por una u otra razón, esa conjura lo alejó de la cartera de Hacienda". Por último, el rumor ha encauzado la explicación del incidente que llevó al enigmático personaje a optar por el exilio dorado de Miami, en un plano más personal, que nada tiene que ver con razones de Estado o diferencias ideológicas. Andrés Caldera habría sufrido un rudo golpe en su amor propio cuando la tan codiciada Irene Sáez lo pusiera de lado sin explicaciones ni reconsideración. Así, la platinada alcaldesa de Chacao se transforma en epicentro de una tormenta de alcances nacionales. Quintana fija posición: "Yo he sido amigo de Irene y continúo siéndolo, pero sólo eso, amigo. Posi-
blemente Andrés pueda haberse hecho una idea inexacta sobre nuestra relación, pero sobre eso no tengo nada que decir". Acota, sin embargo, que "ahí puede estar el origen del conflicto". Mientras, un allegado revela: "Ignacio compró en París un vestido muy caro, todo el mundo sabía que le había costado unos 25 mil dólares. Lo que nadie supo nunca es a quién se lo dio". GOLPEADO EN LA CAÍDA, TRASHUMANTE —hoy el Vaticano, mañana Nairobi o París—, Ignacio Quintana dice entregarse a la lectura con frenesí —"soy un libroadicto"— al tiempo que da vuelta a la página del recuerdo. La sintaxis de su vida no admite medianías. "Un hombre se mide por el obstáculo, y yo no iba a salir de Venezuela a llorar de nostalgia. Elogio la dureza, porque si no el alma se relaja y se corrompe". Y repite incorregible y afectado: "Pensaron que podían intimidarme, pero yo soy un hombre inintimidable. Además, si entre Andrés Caldera y yo había diferencias teníamos que dirimirlas personalmente". Inspira hondo, se observa a sí mismo un instante e insiste: "Yo practico una moral de respeto al hombre que va más allá de la mojigatería. ¿Acaso la rectitud espiritual es un problema de monogamia? Entonces habría que negar a Abraham, padre del cristianismo, el islamismo y el judaísmo, que amaba a su mujer y a su esclava Agan. Eso es una necedad, una miopía histórica y una falta de visión absurda. La moral es autenticidad, coherencia, es la fuerza del bien, y Caldera es la antítesis de estos conceptos". Mejor sería olvidar, sanar las heridas y solazarse paseando sobre cuatro ruedas por los campos de golf de Fisher Island, entregándose "al buen vino y la buena mesa", haciendo tertulia en la terraza de un café en París o asoleándose en las cercanas playas de blancas arenas —placeres a los que por demás jura devoción. Bien podría hacerlo; pero, empedernido, Ignacio Quintana aspira a conquistar el mundo, a convertirse en paladín de alguna implacable cruzada, a protagonizar las crónicas del porvenir. Quiere un lugar en la Historia. A cualquier precio.L JULIO 1996 EXCESO
55
Noche o día, el boulevard siempre bulle de gente. Especímenes de las más variadas faunas pueblan las aceras, miran las vitrinas o se solazan en la tertulia entre taza y taza de tinto, con leche o marrón. Otrora refugio de la intelectualidad criolla, cambió con el advenimiento del metro, su faz amable por otra violenta y despiadada. Pero, pese a todo, no se entrega: intenta recobrar el esplendor de otros tiempos mientras los viejos miembros de la célebre República del Este toman un segundo aire
.111k banaGra
trirn6h1
1301111E11/111 Carlos Noguera
A
comienzos de 1991 una noticia recogida en las páginas rojas de los diarios iba a conmover a los oficiantes habituales de los refugios nocturnos de Sabana Grande. Para el empleado urbano típico que gastaba su vida en la ciudad diurna, sin aliento y sin tiempo para los pormenores de la muerte anónima, el suceso, un homicidio en un restaurancito de la avenida Casanova, debió parecer uno más en la extensa lista con que la incomprensible mezcla de la violencia y 56
EXCESO JULIO 1996
el azar cobraba su tributo cotidiano. No ocurrió así para los asiduos a las barras y a las mesas de la zona. La víctima, Miguel Angel Bonafina, poeta, hermano morocho de nuestra celebrada Doris Wells, era conocido y apreciado en el medio bohemio, donde había gozado de notoriedad entre los agremiados por su papel como secretario particular, escudero y biógrafo del poeta Caupolicán Ovalles, padre y presidente vitalicio de la famosa República del Este.
La muerte de Bonafina no era la única, no era la primera, no iba a ser la última de su especie. Por desgracia, formaba parte de una serie de sucesos violentos y lamentables, acaecidos en circunstancias por demás extrañas, en los que varios artistas y escritores habituales de la zona habían perdido la vida, habían sido salvajemente golpeados o recibido heridas de consideración. Para quienes habían hecho de los cafés y de las tascas de Sabana Grande su paisaje
F" n ~yl
., i
diario, las noches felices en las cuales se podía regresar de la conversación, la cena o el jolgorio caminando sin aprensiones por las aceras, solos o demorados en la amistosa cháchara de despedida, parecían tan remotas y tan ajenas que se experimentaba la inclinación a dudar si en verdad habían existido alguna vez ¿Cómo, cuándo y por qué desapareció aquella posibilidad para dejar paso a este cocktail de campo de batalla con corte de los milagros, asilo y mercado de las pulgas venido a menos que constituye su puesta en escena diaria en estos días? Las razones habría que buscarlas un poco aquí y un poco allá, dicen los afectados: la crisis económica, la inseguridad, el crecimiento voraz y loco de una metrópoli que no parece responder a planes de desarrollo urbanís-
esperado paseo, después de superar con buen pie los beneficios de la duda, coincidió en la compañía incómoda de dos fenómenos que habrían de gravitar en la vida y el destino de los habitantes de la ciudad en general, y el funcionamiento humano de la zona en particular: la puesta en marcha de la línea uno del metro y, sobre todo, la "crónica del mazazo anunciado" que se materializó en el famoso viernes negro, y en la profunda crisis económica y social que lo siguió y que se ha prolongado hasta nuestros días. Entre los espléndidos jardines elevados del boulevard, sobre sus calles y aceras y, más allá, en el resto del distrito, pronto comenzaría a campear el reino de la buhonería incontrolada, los delincuentes y pícaros de todo pelo, la miseria, la desidia, la inseguridad personal,
5
ubicarse en la construcción de El Silencio, en el centro de la ciudad, según diseño de Carlos Raúl Villanueva. En lo que a Sabana Grande atañe, los dos hitos urbanos más resaltantes de esos años acaso sean la edificación de la Ciudad Universitaria, verdadero patrimonio artístico de la humanidad y otra inspiración del genio de Villanueva, y de la primera plaza Venezuela, que exhibiría el conocido conjunto escultórico de Maragall, posteriormente sometido a un fatigoso y absurdo peregrinaje. a incorporación orgánica de Sabana Grande a la ciudad que se desplegaba hacia el Este fue acompañada por una revitalización y una modificación de los usos humanos de la zona. Surgen salas de cine, restaurantes, librerías, cafés, bares y tascas, hoteles, salas de show, galerías. Algunas de las librerías que habían hecho cuerpo e historia en el centro de la capital (y actuaban paralelamente como puntos de tertulia para los artistas, peñas y hasta editoriales) son mudadas a locales sabanagranderos:tal es el caso de la mítica Cruz del Sur, que se instala al fin en
L
ue permite rastrear esa migración es la mudanza de la sede-tertulia del Grupo Sardio Caupolicán Ovalles, presidente republican
tico, las transformaciones aparejadas a las líneas del metro. Se trata de otra ciudad, de otro país, comentan, abatidos. Incluso los cambios y las soluciones instrumentadas para el área por parte de las autoridades locales a menudo han resultado improvisadas, desarticuladas, cuando no llanamente caóticas, hasta aquellas animadas por el mejor de los propósitos. El caso del boulevard es, en este sentido, modélico. Inaugurado con retretas imaginarias el 7 de diciembre de 1980, el 58
EXCESO JULIO 1996
las hordas de indigentes, enfermos, ancianos e impedidos víctimas de nuestra seguridad social inexistente, las bandas de adolescentes huelepega que se arrastrarían con mirada estupefacta por el corazón de la sociedad que los habría expulsado antes aun de rotularlos como ciudadanos, el sálvese quien pueda. Históricamente, la deglución del área por parte de la metrópoli sobrevendría con la gran explosión urbanizadora de los años cuarenta, cuyo síntoma de partida suele
el Centro Comercial del Este. Otros locales, como el bar Iruña, famoso sitio de encuentro de políticos e intelectuales en los tiempos del perezjimenismo, que se ubicaba frente al teatro Municipal, a poca distancia del Capitolio, simplemente desaparecen. El desplazamiento de la Universidad Central de Venezuela desde su antigua sede de San Francisco a las nuevas y portentosas edificaciones de la hacienda Ibarra, que fuera una de las grandes metamorfosis
de aquellos años, ha sido señalado por muchos entre los responsables principales de la emigración masiva del centro hacia Sabana Grande, de intelectuales, artistas y escritores, buena parte de ellos ligados a la actividad universitaria. Como quiera que sea, uno de los casos más significativos que permite rastrear esa migración es la mudanza de la sede-tertulia del Grupo Sardio. Los artistas y escritores allí agrupados, entre quienes se puede contar a narradores como Adriano González León y Salvador Garmendia, a poetas como Francisco Pérez Perdomo, Caupolicán Ovalles, Ramón Palomares, Juan Calzadilla, Edmundo Aray y Luis García Morales, a ensayistas como Guillermo Sucre, Rodolfo Izaguirre y Elisa Lerner, tenían como sitio de encuentro al bar Iruña, próximo a la galería que regentaba Salvador Garmendia, en pleno corazón de la Caracas de los cincuenta. A finales de esa década, sin embargo, el punto de tertulia se desplazó a la librería Ulises, en el costado oriental del Centro Comercial del Este. Nos hallamos en el umbral de los años sesenta, la década pro-
hermandad ubicada claramente a la izquierda del abanico. La fecha de lanzamiento del primer número de Rayado sobre el Techo, la revista del grupo, es el 24 de marzo de 1961. Más radicales política, vital y artísticamente que la agrupación de la que procedían, los balleneros diversificaron y ampliaron las huestes, sobre todo hacia los territorios de la plástica, y, enarbolando la consigna de la tradición surrealista y rimbaudiana, "cambiar la vida, transformar la sociedad", estremecieron los cimientos del país artístico y literario con una entusiasta ola de gestos provocadores. Entre aquellos escándalos de los sacerdotes del magma, como les gustaba ser llamados, cabe recordar la edición del libro de poesía ¿Duerme usted, señor Presidente?, suerte de sátira del poder con una dedicatoria a tres bandas al presidente Rómulo Betancourt, que le valió un exilio colombiano a su autor, el joven Caupolicán Ovalles. En el terreno de la plástica debemos recordar la magnífica exposición Homenaje a la necrofilia, debida al médico, poeta y pintor Carlos Contramaestre, que se mon-
nández Doris y Arnaldo Acosta Bello, periodistas y ensayistas como Jesús Sanoja Hernández, Héctor Silva Michelena y Manuel Caballero, y artistas plásticos como Ligia Olivieri. Los caballeros de la Tabla Redonda preferían citarse en las mesas del restaurante La Caleta (avenida Las Acacias, a pocos metros del antiguo cine Acacias: existe todavía y sus dueños prefieren ser recordados por la celebrada paella) y en el bar Olímpico, un poco más al sur (sobre la antigua avenida Olimpo, hoy Alejandro Oropeza Castillo). "Dos musas protegían al grupo en aquellos años", confiesa Rafael Cadenas, "Ligia Olivieri y Juanita Brunlik" (Ligia es artista plástica; Juanita, ya fallecida, profesional de las ciencias sociales y cuñada de Alfredo Maneiro, ideólogo y fundador de La Causa R). alleneros y tablófilos fueron, a qué dudar, los pioneros de la campaña; pero hay que decir que no agotaban el universo de la Sabana. Otros grupos, con posturas o intereses artísticos diferentes, francotiradores solitarios, pro-
B
111111~11,
Dos musas protegían al grupo en aquellos años: Ligia Olivieri y Juanita Brunlik La Quintana, nueva sede de gobierno
41111~Iik
sfoéetwo irm.A50: k1. TIOSitilt~ PTIO101010 xtts#0.1' ESCM•00.10 EN a tiliSYStillit ~Atan* ii•fiACIO. • 111,Mkti niAISME176100sits I t Oh Mi. ISM • OflO0.1101.0507 ~111A 144114$111 • ("LIKK, (ANALIA111.011~, /11~1*
digiosa, y el país todo atraviesa por un momento de elevada sensibilidad a los planteamientos políticos. Las opiniones y las acciones se radicalizan: Sardio, que en su origen albergara individualidades de diversa profesión de fe política, desaparece, para dar paso a El Techo de la Ballena,
tó en un garaje de la calle Villaflor, N° 12. Menos dados al escándalo y al espectáculo que los balleneros, junto a quienes las historias de la literatura al uso suelen ubicarlos, los escritores agrupados en la revista Tabla Redonda ejercían una militancia de izquierda más en la ortodoxia del Partido Comunista y una vocación creadora en el mismo pulso de sus compañeros de trinchera. Allí convergieron poetas como Rafael Cadenas, Darío Lancini, Jesús Enrique Guédez (también cineasta), Fer-
fetas disidentes y novatos de las generaciones emergentes, con mayor o menor dedicación a un oficio tan absorbente como el nocturno, tomaron también posiciones en el paisaje bohemio. La década de los sesenta representó, para escribirlo con una frase original, la espléndida primavera de Sabana Grande. Cada sitio construyó, en un noche a noche que asumía rasgos característicos en cada caso, no siempre previsibles, su propia leyenda. Eran los años en que podíamos ver JULIO 1996 EXCESO
59
a Orlando Araujo debatiendo con Ben Amí Fihman y Francisco Massiani alrededor de una mesa del Chicken Bar (avenida Lincoln, entre El Colegio y Pascual Navarro, donde hoy se erige la torre del banco Provincial) las probables bondades de los pasteles del pequeño local en el cual velaba, inconmovible en su mirador detrás de la registradora, la cajera ungida: Santa Teresita del Niño Jesús. El restaurante El Viñedo fue, con mucho y por mucho tiempo, el templo más frecuentado y plural de la comarca. Se alzaba en la calle El Colegio, entre Lincoln y Casanova, a pocos metros de dos conspicuos centros del libro y la conversación: las librerías Ulises y Cruz del Sur. Ostentaba como platillo emblema el conejo al salmorejo con papas arrugadas, pero la gran carnada era la abigarrada sección de bar, con su profusión de maderas y su previsible charcutería colgante, y su pequeña
Jiménez Emán o un chisme de Mary Ferrero. El Gato Pescador, con el espléndido emplazamiento de su terraza flanqueada por jardineras desde la cual se dominaba el final de la Gran Avenida y el comienzo de la avenida Lincoln, ocupaba el escalón inferior de la pendiente que allí inflexiona para trepar, lenta y extensa, hasta el pie del Avila (dejó paso a la construcción de la Torre La Previsora). Rivalizaba con El Viñedo y con el Chicken Bar y era uno de los escapes favoritos de los integrantes del grupo En HAA y la Pandilla Lautréamont: José Balza, Jorge Nunes, Valera Mora, Carlos Noguera, Angel Eduardo Acevedo, Mario Abreu, José Moreno Colmenares, José Barroeta, Argenis Daza, Luis Camilo Guevara, Teodoro Pérez Peralta, o de pintores como Alberto Brandt, Mateo Manaure o Rafael Francheschi. Los artistas plásticos, sin embargo, aunque mezclados al gran melting pot de escritores, teatreros y políticos, habían levantado su propia tienda gremial en los altos de la quinta Geisa (Casanova con la
i la bohemia de los sesenta había sido la creación onírica y nocturna de los disidentes y revolucionarios de la década, despojados, sin cobres en los bolsillos, siempre a contracorriente del país oficial, los años setenta marcarían un significativo cambio de pulso para el país en general y para el significativo cantón de Sabana Grande en particular, incluido su cargamento de poetas, trovadores, artistas y alucinados. Fue la era de la cuadruplicación de los precios del petróleo, del país saudita, de la Gran Venezuela. El periodista y poeta Jesús Sanoja, quien codirigió con Adriano González León la revista En letra roja, órgano confederado de los grupos intelectuales de la izquierda en los sesenta, habla, mitad sonrisa mitad queja, de la "incibización del movimiento" (en referencia al Inciba, instituto para la cultura, germen del actual Conac), suerte de viaje hacia la oficialización de muchos de los artistas que antes lo habían acompañado: "Fueron domados", dice. Los aludidos replicaban recordando la pacificación, la amnistía y la legalización políticas para solventar la etapa de la vio-
S
Breton los poetas Palomares y Sánchez Peláez
Francisco Massiani
terraza entoldada que se abría inocente sobre la avenida y sobre la noche. Era, como el París de Hemingway, una fiesta sin límite que a veces presenciaba una discusión sobre Breton entre los poetas Ramón Palomares y Juan Sánchez Peláez; un corrido panchovillista del Chino Valera Mora; un discurso de José Barroeta o de Mario Abreu, un chiste de Gabriel 6U
EXCESO
JULIO 1996
transversal), una casa ya venida a menos —y reconstruida y exorcizada por las mañas de los participantes—: el memorable Círculo El Pez Dorado. Cerca de La Giralda tenían su cueva totémica los integrantes del grupo Subterráneo (Fernando Rodríguez y Miguel Ron Pedrique, entre otros), que se cruzaban en las aceras con los universitarios del grupo LAM (Tarik Souki, Jaime López Sanz, Mary Lu Sananes).
lencia y reintegrar a los alzados a la vida institucional. La guerra y la clandestinidad habían terminado. Se tendría que continuar luchando vital, política y artísticamente desde el corazón de la sociedad civil. "Incluso desde las propias instituciones del Estado", decían, que no debe confundirse con gobierno. Dentro del microcosmos de Sabana
Grande, la Gran Venezuela de las vacas gordas tuvo su expresión nocturna y hedonista en el auge del llamado Triángulo de las Bermudas (quien entraba en su ojo desaparecía para siempre) y en la fundación de la muy famosa República del Este. El triángulo comprendía tres restaurantes asentados todos sobre la avenida Francisco Solano López: Camilo's, Franco's y Al Vecchio Molino, que constituyeron territorio, cuartel, proveeduría y campo de batalla de la República del Este. El padre de la patria y presidente vitalicio de este territorio autónomo no fue otro que el poeta Caupolicán Ovalles. Los presidentes nominales, que hubo muchos, eran designados directamente por Ovalles, a dedo, o elegidos en las urnas (aportadas por el conocido empresario Elías Vallés —Funeraria Vallés, C.A.). Duraban días, a veces horas en su cargo, debido a la circunstancia de que cada defenestración y cada nuevo encumbramiento eran celebrados con saturnales de varios días con sus noches, al final de los cuales sólo Dionisios (único semidiós con buche e hígado sobrenaturales), de existir, podía
pueden debatirse. Las causas, quizás, porque el fenómeno mereció dilatadas crónicas en los medios que dan fe de su existencia y de sus alcances. Basta un vistazo a la lista de electores y ciudadanos, o a la nómina de los cargos asignados y los títulos conferidos por los sucesivos gobiernos del Este, para hacerse una idea aproximada de los alcances de este fabuloso y prolongado delirio colectivo. La agenda, extensa y bifurcada, abarca nombres como Miguel Otero Silva, Luis Beltrán Prieto Figueroa, Jóvito Villalba, Elías Vallés, Manuel Alfredo Rodríguez, Orlando Araujo, Reinaldo Cervini, Simón Díaz, Junio Pérez Blasini, Rubén Osorio Canales, Manuel Quintana Castillo, Mario Abreu, Aníbal Dao, Vicente Gerbasi, Moisés Gamero, Salvador Garmendia, Cuto Lamache, Héctor Malavé Mata, Gonzalo Ramírez Cubillán, Aldemaro Romero, Samuel Robinson, Manuel Matute,
Calle Real, hoy boulevard
Mario Abreu
dar cuenta de lo acontecido. Según Ovalles, la República del Este fue el asalto de la bohemia a los hilos (indirectos) del poder, una afirmación que sus enemigos no vacilan en catalogar de bufa ilusión. Como quiera que haya sido, es imposible desconocer la atracción mesmeriana que el Estado bohemio ejerció en su época dorada sobre conspicuas figuras de la política, la cultura, las finanzas, el comercio, la industria, la farándula. Un fenómeno asaz llamativo cuyas causas aún
Eduardo Machado, Héctor Mayerston, Mary Ferrero, Marcelino Madriz, El Búfalo (Leopoldo Díaz Bruzual, en sus días de presidente del BCV), Manuel Quijada, Jesús Sevillano, Alfredo Tarre Murzi, Lucila Velásquez y Miyó Vestrini. ¡Un sarao, a no dudar, versátil! La República del Este contó también con una espléndida revista, homónima, debida a un consejo de redacción integrado por Mary Ferrero, David Alfonzo y Luis García Morales, y donde actuaba
como director-editor Elías Vallés. Los republicanos del Este no eran, por supuesto, los únicos. En otros refugios de la zona, y en los mismos años setenta y comienzos de los ochenta, continuaban las reuniones de grupos opositores, disidentes o simplemente distintos de los republicanos. Los centros de reunión más frecuentados (y trepidantes) fueron las tascas El Molinero (calle Unión, entre Lincoln y Casanova) y O Gran Sol (Villaflor, también entre Lincoln y Casanova), privilegiadas por profesores y estudiantes universitarios, y por escritores ligados a la revista Falso Cuaderno (José Balza, Jorge Nunes, Sael Ibáñez, Alfredo Silva Estrada, Silda Cordoliani, Humberto Mata, Santos López, Mariela Sánchez, Eleazar León, Elí Galindo, William Osuna, Yolanda Segnini). El restaurante-bar La Bajada (Solano, entre Los Jabillos y Unión) estuvo por varios años entre los favoritos de los artistas
acaso por su extraordinaria barra, el ambiente que se creaba y la circunstancia de permanecer abierto hasta la alta madrugada. Hoy en día ha cambiado de dueño, de nombre y de estilo: se llama El Lagar, y es una puerta que recomendamos evitar metódicamente. Eran famosas allí las discusiones entre Denzil Romero y Manuel Bermúdez, los sombreros de Earle Herrera, los poemas de Elenita Vera y los contrapunteos de Dumbo Márquez Brandt y Pancho Massiani. JULIO 1996
EXCESO
6
En fin, mención aparte merecen dos desfiladeros olvidados donde Omar Khayam, a no dudar, hubiera reencontrado el placer de la noche húmeda. El de los llamados restaurantes de la calle Bolivia (la vía que trepa desde la Torre La Previsora): el Da Graciela, que fuera sala de exposiciones, boite de shows y mantel de pastas; el Tic Tac, donde la legendaria Susy, la belga, recreaba para los clientes su lejano pasado de cancán y de música, y el Paprika. Los tres desaparecieron por virtud de las demoliciones que abrieron paso a la línea uno del metro. Y, así mismo, el vituperado Callejón de la Puñalada, en la toponimia de los habituales (callejón Asunción, entre Lincoln y Casanova), con sus barcitos de gays y delgadas prostitutas, que rivalizaban con el trepidante Gibus o el Tolo, otrora desplegados con sus mesas sobre el
a ciudad contemporánea, se ha dicho, divide al hombre. Al separar las dos caras de su humanidad única —placer y trabajo— termina por deshumanizarlo. La urbe moderna parece un descomunal laberinto cruzado por hordas de seres apresurados, víctimas de un engranaje productivo cuyos resortes íntimos y cuya razón ignoran, enfrascados en la búsqueda de una meta precaria y desconocida que de continuo los evade. Desgajados como han sido en él Eros y Poiesis, disfrute y producción, escribe Eugenio Trías, el ser cívico se abate: alma y ciudad son entonces vividas como principios separados en la ahora imposible unidad esencial que debiera soportarlos. Podemos preguntarnos si la opción bohemia no es, entonces, otra cosa que un recurso, quizás desesperado, del ojo artista, estupefacto, outsider o sensible, por restablecer la unidad perdida de placer y creación, de alma y ciudad, en un rincón nocturno del propio corazón de la urbe ajena que lo desplaza y lo desintegra. Definida por los linderos tangibles, pero imaginarios, de la plaza Venezuela, al
quizá debí emplear el pretérito indefinido. Como dijimos al comienzo, quienes conocimos los años de esplendor del distrito fuimos sorprendidos, a partir de los primeros ochenta, por el avance implacable del
deterioro, la inseguridad, la desidia, el pillaje, la corrupción: una descomposición que, acaso vástago de la crisis general, nos iba arrebatando, lenta, fatalmente, un entrañable trozo del valle y de los días vividos. El lado oscuro del progreso —y de sus fallas, sus injusticias, sus aberrantes deformaciones— terminó por marcarlo.
E
n los días que corren, la ciudad —más bien sus gestores y trazadores— ha vuelto, al parecer, a hacernos promesas sobre ella misma. Planes de Alcaldía que a ratos parecen faraónicos prometen "una metamorfosis, un rescate total de la zona" para el disfrute de lugareños y visitantes. Se habla de aseo, de reforestación y jardinería, de vigilancia y de apoyo, de normas para el tráfago, de servicios: "La gran isla del Este", proclaman, "el gran polo urbano de referencia turística".
De allí saldrí Bonafina aque madrugada de 1991 para encontrarse consigo mismo al otro lado e la mu
sendero de palmeras, desbordados por las risas despreocupadas de los poetas, los artistas, los noctámbulos y las ninfas. •De allí saldría el poeta Miguel Angel Bonafina aquella fría madrugada de comienzos de 1991 para encontrarse consigo mismo al otro lado de la muerte. 62
EXCESO JULIO 1996
oeste, y de la plaza Brion, al oriente, Sabana Grande, con sus 150 hectáreas de extensión, dista mucho de ser una provincia homogénea. Su rostro diurno propende a la boutique, al centro de comercio, al mercado incluso; al tiempo que su rostro nocturno disfruta —o padece— la seducción lunar del ocio y de esas horas libres y demoradas que se extienden desde la caída del sol hasta el filo impreciso de la madrugada. Escribí en presente el párrafo anterior,
Ludovico Silva
Mientras contemplan las primeras estructuras de las pérgolas gigantes que ya comienzan a erigirse sobre la terraza del Gran Café (Lincoln con Pascual Navarro), los habituales, los fieles a la Sabana Grande de todas las épocas, los de la resistencia desarmada, comentan: "No prejuzgamos, habrá que esperar". En la terraza de La Tinaja (Lincoln,
entre Los Jabillos y Pascual Navarro), los peñeros de la peña de Oswaldo Trejo, un reducto de la resistencia cantonal, bromean sobre las consecuencias de una de las medidas recientes del alcalde Ledezma: la eliminación de los toldos que servían de techo a las terrazas de los cafés. "Ahora podemos broncearnos sin necesidad de bajar a la playa, ¿qué te parece?", dice Arlette Machado. La peña, con varios años en el boulevard, cuenta entre sus fieles, además de Oswaldo y Arlette, con una alineación de postín: Manuel Caballero, José Abinadé, Arturo Ginesta, Merceditas y Alexis Márquez ("ese sujeto de cuyo nombre no me acuerdo que acompaña a la bella Merceditas", bromea Oswaldo), Juancho Madriz, Pedro Liendo, Gilberto Madrid, Humberto Hinestrosa, Emilio Nohuel, Antonio Pineda (el curandero del grupo), Héctor Malavé Mata y
en otro bolsón de sobrevivientes, jóvenes universitarias y escritores de las nuevas promociones discuten con Chucho Salazar y los militantes del grupo La Espada Rota el último libro del poeta Jesús Enrique Guédez, dedicado precisamente a la celebración del sitio en que se encuentran: el restaurante O Gran Sol. Hacia el norte, en una transversal ciega que corta a la avenida Solano, los profesantes de El Maní es Así se preparan para otra noche de rumba con la música caribeña y ácida de los conjuntos de casa. Y en la misma avenida Solano, al lado del tradicional Rincón Gallego, entre conciliábulos; rondas frenéticas y gritos de revancha, 20 años después los caudillos de la desaparecida República del Este proclaman el renacimiento del Triángulo de las Bermudas (ahora constituido por la
."4/14
'41
ilagro y epifanía. Cubierto de cicatrices como ha sido, el cantón se resiste a morir. Aunque mal_ trecha, Sabana Grande persiste, sobrenadando con paciencia el infortunio de que ha sido víctima. Yo mismo la frecuento, quizás a un pulso no tan desaprensivo como el de entonces, quizás a otras horas y en otros rincones de su paisaje. A mi modo, continúo susurrándole mi lealtad. En reciprocidad, ella vuelve a entregarnos, a través de ciertas fisuras súbitas, a través de ciertos instantes casi mágicos, la dicha y el misterio de vida con que nos recibiera 30 años atrás, cuando acudiéramos perplejos a su primer encuentro. La atravieso a pie, me demoro en una vitrina, contemplo el fluir de su río humano (rostros sorprendentes de un mestizaje que deslumbraría a Whitman) o, como esta tarde en la que escribo, me abandono en una terraza del boulevard a despojarme del tiempo. El sol se tumba sobre las torres del oeste y una luz dorada y naranja y magenta inunda en un resplandor unánime plazas y árboles y
'A? 9,-
:ffileilleallallim.„_w
El Callejón de la Puñalada
Alcides Villalba, quien recibió permiso de la peña para viajar a México, a trabajar en la Embajada venezolana. Al otro lado de la calle peatonal, Raúl Bethencourt, propietario de la tradicional librería Suma, se ríe por lo bajo de los sombreros de ala ancha de la nueva policía de la Alcaldía. Más allá, en la mítica calle Villaflor,
tasca Rías Gallegas, la taberna La Quintana y el 'restaurante El Caserío) y la reimplantación de la propia República en La Quintaña, a corta distancia de su antigua sede. Los próceres, a contracorriente de todo transcurso y duración, son los mismos de la década de oro, con Caupolicán Ovalles, David Alizo y Mary Ferrero en la primera línea de combate.
Adriano González León
calles y rincones minúsculos. Vuelvo entonces a experimentar el goce doble y magnífico de ser uno con ella y de vivir en un instante de revelación súbita lo que la piadosa memoria me cuenta que viví. L JULIO 1996
EXCESO
63
Receta a receta, sin moverse de casa, los inéditos platillos creados, con sublimes ingredientes de temporada, por el chef francés Daniel Boulud. Los tesoros que el venezolano Daniel Oliveros guarda en la bodega de la exclusiva Royal Wine Merchants de Manhattan. Y milenarios, al otro lado del Atlántico, los misterios del aceituno y del sagrado aceite de oliva. ¿Dónde? En Cocina y Vino N° 7
En un kiosco cerca de usted
tierra de juego un o lodeven o atodoeimes
Separados al nacer De la A a la Tierra no heredable
Epitafios Se busca HĂŠctor Meneses
11. 1,
SE BUSCA LUJO 1996 EXCESO
65
tierra de juega
Historias de la locura corriente TERAPIA ANIMAL_
Nombre: Héctor Meneses Lares. Historia con fin: economista graduado en la UCV. Llegaría a ocupar altos cargos antes de resbalar en el Ministerio de Fomento durante el gobierno de Jaime Lusinchi. A hierro muere: el 13 de abril de 1989 intentó suicidarse disparándose con un revólver calibre 38 en el temporal derecho, cerca del ojo. El 30 de noviembre del mismo año le sería dictado auto de detención —junto a otros tres ministros— por el otorgamiento de ocho mil millones de dólares preferenciales a través de Recadi. Testamento de un vivo: en una carta, previa a la fallida tentativa de acabar con su vida, aseguraba que iba a ser blanco de ataques infundados y que nadie iba a salir en su defensa. Yo no fui: "La posibilidad de mi renuncia es estrictamente personal y no está relacionada con ningún hecho extraño ni doloso. Necesito desvincularme del Ministerio de Fomento para dedicarme a la actividad profesional privada. En eso sí quiero ser sincero". El ojo ajeno: "Me dispongo a utilizar todos los medios con los cuales cuenta el Ejecutivo nacional para combatir los brotes especulativos: quienes cometan la infracción serán perseguidos y señalados públicamente". Las bolas: "Estas pelotas sirven para escuchar y no para jugar, porque se parten si son arrojadas contra una pared". (Referido a una presunta violación en la importación de juguetes). Ultima vista: alguien comenta haberlo distinguido entre un nutrido grupo de balseros del aire rumbo a Miami, años ha.
66
EXCESO /11L10 1996
Motivo de burla en tiempos pretéritos, las te- alemán —dicen los especialistas— reviste una rapias que utilizan animales como método significativa disminución del ritmo cardíaco y curativo han ido conquistando el escéptico la presión sanguínea en la persona convaleciente. Especial atención raciocinio de los galenos. merece el caballo: de todas El método, calificado de las bestias, parece ser el milagroso en estos tiempos más cotizado en el ranking en que la superstición ha de las mascotas curativas, pasado de moda, es, al papues, por lo visto, posee varecer, capaz de aliviar las lores emocionales que ayumás tormentosas dolendan a combatir la apatía y cias, y sus propiedades cuel desánimo, sobre todo en rativas comienzan a ser los caprichosos infantes. objeto de alabanzas. Por Las terapias con animaahora los resultados han sido exitosos, aunque, justo es decirlo, man- les pasaron con más pena que gloria hasta tienen perplejos a expertos y neófitos. bien entrada la década de los ochenta, en pleEl nuevo credo, que no tiene nada que ver no siglo XX, cuando varios institutos y unicon la multiplicación de los peces, recomienda versidades decidieron darles crédito, mientras a las personas aquejadas por males psíquicos los estudiosos de la Criminología comenzay achaques somáticos acariciar a las masco- ron a llevarlas a las penumbras del infierno tas religiosamente para enfrentar la depre- carcelario, como una suerte de panacea para sión, la timidez aguda, el autismo o el síndro- todo tipo de afecciones. me de Down. Nada más pasar con cariño las —Quo/HJ manos sobre el peludo lomo de un pastor
Juan José Caldera Apoyar al partido con la razón o sin ella
Eduardo Roche Lander Cobrar hasta el último centavo
Ernesto Samper Por un pelín
Asdrúbal Aguiar Contagiado de terror
Eliseo Sarmiento Adíos al mercado libre
Perla López ¡Y el cadáver seguía muriendo!
tierra dejueg°
ea (Sugerencias para completar al libre albedrío)
separados
ikin.11 INIIPIE II PICOS Amazonas, el negocio de este mundo, visiones de un cineasta
sivo rastreador de minerales Ni el rastro de Greenpeace
vernáculo Brasil, madre y promisoria tierra Calha Norte, sustento oficial del desastre Desde el nacimiento del Orinoco hasta más alla del Roraima, desmanes que se pierden de vista Ecocidio y genocidio, paralelismo fatal Funai, débil oposición Garimpo, minas de distendida y extendida ilegalidad Hijos malditos de la nunca lograda reforma agraria del noreste brasileño Ilegales en busca de Eldorado J
N
K La represa del Guri, una luz que
se apaga en azogue Mercurio, contaminante y corro-
Omama, dios indígena sin ningún poder y mucho saber, que pregona la destrucción del planeta de ser arrancados los productos del subsuelo Porvenir: ¡erosionado! Quimera del oro, versión selva tropical Ríos, las corrientes del deseo Sucios, malos y feos: epítetos brasileños para los garimpeiros Tala y después pregunta U Venezuela, nación cómplice y soñolienta
w
Meteoro, as de las carreras
Gabriel Fernández, galán a toda carrera
Luis Castro Leyva, la historia como oficio
Francisco Prada, oficio que hace historia
Raquel Lares, cortina de humo
humo de cartelera
X
Yanomamis, etnia en peligro de extinción
ninnhet dril Ismail 1.1 111111bUll 1,1151 111011 El paquete de Caldera al de Pérez Anunciado con bombos y platillos, el tristemente célebre Gran Viraje que pretendiera darle a la economía doméstica el ex presidente Carlos Andrés Pérez durante su segundo mandato fue anunciado en febrero de 1989, provocando una cruenta reacción que dejó como saldo unos 300 muertos —según cifras oficiales. La receta, desestimada sin compasión por la opinión pública, se basaba en medidas de corte neoliberal que incluían aumentos en las tarifas de los servicios públicos, liberación del mercado cambiario y de las tasas de interés
(activas y pasivas); incremento en el precio de la gasolina y en la recaudación de impuestos, además de nuevas tasas impositivas, y liberación de precios, entre otras. En 1996, Rafael Caldera, también en su segundo turno en Miraflores y luego de haber sido uno de los más acérrimos críticos del paquete económico de Pérez, reeditó casi al calco la fórmula en cuestión, poniendo en práctica las sugerencias del Fondo Monetario Internacional, ante el cual había jurado no arrodillarse. —HJ
Perón Ermini, crítica de la creatividad ajena
Marian Cegarra,
Elí Bravo, creatividad a prueba de crítica
a nacer JULIO 1996
EXCESO
67
Gil A DE CARACAS Un servicio original de Exceso para sus lectores. Prohibida la reproducción
YANTAR RESTAURANja AKELARRE. Repertorio vasco de un barroco subido. Más o menos pantagruélico. Tiene la buena pro de bohemios, brujas (por supuesto) y ejecutivos. Alcabala a Puente Anauco, edificio San Thomas, Candelaria. Telfs. 571.5921 y 577.9619. ej ARA. En las alturas y bajo un mismo techo, el arte coquinario japonés y la no tan nueva world cuisine californiana conviven en armonía. Paredes en tonos pastel y sillas curvilíneas firmadas por Philippe Starck completan el cuadro. El chef Edgar Leal logra felices combinaciones sobre la sólida base de la culinaria francesa, y las caleidoscópicas sazones adquiridas en la Gran Manzana y en España. Centro comercial Lido, piso 8. Telf. 953.3270. O AVEIMNO ■ Durante 30 años, la familia Riocci ha cimentado el prestigio de esta casa con un servicio de gran escuela, una bodega
O
Establecimiento consolidado cu-
yo conjunto de virtudes universales ha mantenido un alto promedio a lo largo de los años hasta convertirlo en una institución.
O
Establecimiento cuyas virtudes
específicas más sobresalientes lo han elevado a través del tiempo a un lugar de particular consideración.
9
Establecimiento reciente, o más
o menos reciente, cuyas virtudes universales o específicas, individualmente o en conjunto, sedujeron desde el primer momento.
68
EXCESO
JULIO 1996
de respetables dimensiones y la fidelidad a la tradición culinaria gala. La presencia esporádica de chefs invitados ha contribuido en los últimos tiempos a reforzar una imagen conseguida a fuerza de seriedad y constancia. Av. San Felipe con calle José Angel Lamas, La Castellana. Telfs. 263.4236/5422. O AVILA TEI. Siempre a la cabeza pese a la enorme competencia, este pionero de las vituallas del archipiélago japonés en Caracas mantiene una corte de asiduos que no le abandona. Calle Guaicaipuro, entre Pichincha y Casanova, El Rosal. Telf. 952.0030. O BAR BASQUE. La veterana Blanca Royo demuestra que, naciendo en el País Vasco y ejerciendo en un minúsculo fogón, se puede alcanzar la cima. Pescados ejemplares. Alcabala a Peligro, Candelaria. Telf. 576.5955. 47► BOCU. Creaciones culinarias de acento criollo algunas y francesas otras han sabido atraer a la créete de la sociedad caraqueña. Los sábados abre sólo en la noche. Av. San Felipe, Centro Coinasa, nivel mezzanina, La Castellana. Telfs. 266.2627 y 266.1594. BRAVAMAR. Los ejecutivos que tienen sus oficinas en Altamira lo invaden a la hora del almuerzo. Los fines de semana van con la familia. Se dice que es el restaurante que más factura en Venezuela. Av. Principal de La Castellana. Telfs. 266.5941 y 263.8942. CAFE DALI. Un ambiente frío y formal desdice del apelativo de café y minimiza el cálido poder de la surrealista decoración que recrea la inventiva plástica de Salvador Dalí. Sorprende el con-
traste con el menú que combina viandas de origen galo e italiano, pero nada de Cataluña. Bien reputadas Margaritas. El Hatillo. Telf. 963.7419. CASACCIA. Un público de repleta billetera prefiere los risotti de salmón, langostinos o vieiras. Ambiente colonial y música de violines sirven de marco a una refinada minuta italiana. Calle Santa Rosalía, N° 1, El Hatillo. CAYOCLAUDIO. Las paredes del salón interior resumen años de farándula captados a través del gran angular de Jaime Ballestas, conocido en los bajos fondos como Otrova Gomas. Cabellos, verrugas y lentes en relieve distinguen las fotos de Joselo, Simón Díaz y Carlos Sicilia, en una sana invitación a la burla y al buen humor. Los creadores de este singular local de amplias dimensiones e híbrida decoración, Claudio Nazoa y Cayito Aponte, han confeccionado una carta que alude a personalidades de la ciudad a través de pollos en salsa, pastas y cangrejos con nombres y apellidos: Tania Sarabia, Leda Santodomingo y Lazo Ricardi, entre otros. Los domingos hasta las 5:00 pm. Santa Fe Norte, edificio del Colegio de Médicos del DF. Telfs. 975.3730 y 975.4781. COSTA VASCA. Las recetas vienen de Izaguirre padre, quien durante años atrajo a los venezolanos con las huevas de pescado, croquetas de jamón y el lenguado y la langosta al champagne. Su hijo agrandó el negocio —ahora sucursal del recién abierto de la Castellana—, y le añadió folklore en la decoración y los atuendos del
personal. Av. Beethoven, Torre Financiera, Colinas de Bello Monte. Telf. 752.4615. CRABS. Oda al cangrejo al mejor estilo mayamero. Av. Principal, Las Mercedes. CHEZ NOUS. Minúsculo comedor propicio a la iniciación en el ABC de la cocina gala. Calle Matadero, frente a la plaza Sucre, El Hatillo. Telf. 962.1235. O CHEZ WONG. Yuman Ley, el amabilísimo dueño de este bistró, cambió la faz de la comida china en Caracas. Se lo reconoce una clientela fanática que no lo abandona un solo día del año. Av. Francisco Solano, Edif. Isabelita, Sabana Grande. Telf. 761.4194. DA FEDERICO. Una auténtica trattoria. Es pequeña, como corresponde, pero pulcra, confortable y reluciente. Abarrotada a toda hora, precios sensatos. Final Av. Casanova, Edif. Quasimodo, local 9. Telf. 71.8428. DA GUIDO. Italiano longevo e inalterable. Válido pesto. Av. Francisco Solano, Qta. Iza, N° 8, Sabana Grande. Telf. 71.0937. DAMASCO. Una familia siria hace honor a la reputación de Las mil y una noches, sobre todo cuando se le permite prepararse encargando la comida de antemano. Av. Guaicaipuro, Centro Metropolitano, local 39, Chacao. Telf. 266.6695. EL CAMPANERO. Veintinueve florecientes años al pie de la res. Av. Principal, Las Mercedes. Telfs. 91.5120 y 993.2606. EL CARRIZO. La mejor carne de Caracas se alojó por décadas en esta cabaña de humo, pero terminó emigrando. ¡Lástima! Av. Blandín,
La Castellana. Telf. 263.9069. O El. CHUPE. Cecilia Penalillo, la estelar cocinera peruana que iniciara la dicotomía del local incluyendo, amén de lo suyo, platillos mexicanos, mudó sus calderos a otro establecimiento. Pero dejó herencia y seguidores bien entrenados. Av. Mucuchíes con calle Trinidad, Las Mercedes. Telf. 92.6600. EL HATILLO GRILL. En un año se ha hecho con una numerosa clientela circunvecina que aprecia el gran espacio interior y una carta consagrada a las carnes a la parrilla. Calle La Paz, N° 26, El Hatillo. Telfs. 961.1356/1452. O EL LAR DEL JABUGO. Aunque el ayuno es de rigor antes de dejarse tentar por la cocina de Angel Lozano, a la hora de comer a mandíbula batiente éste es el lugar. El arroz negro con alioli, las empanaditas y la salsa romesco tienen poco que envidiarle a los originales de Cataluña. Av. Principal de El Bosque, detrás de Fedecámaras. Telf. 731.0332. EL PALACIO DEL MAR. Cuenta en Aldemaro Romero con yn devoto comensal y un prosélito entusiasta. Av. San Juan Bosco, Qta. Frailejón, Altamira. Telfs. 261.6460 V 261.4412. EL PORTON. Muy visitado por turistas que desean llevarse alguna idea de la cocina criolla. Av. Pichincha, quinta Rest. El Portón, El Rosal. Telfs. 952.0027/0302. 9 EL TAJIN. Nunca pasaron por este valle tan sabrosos platillos mexicanos. La carta se mantiene, ahora con el toque de Tania Sequera. De su excelencia habla la asidua concurrencia. El comal de la terraza, el lenguaje de las quesadillas. Calle California con Perijá, Las Mercedes. Telfs. 993.7501 y 993.0442. EL TIZON. Pequeño pero rendidor, tiene en su currículum haber acuñado una fórmula sincrética haciendo convivir bajo un mismo techo las tradiciones culinarias de México y Perú. Av. Principal de Bello Campo, centro comer-
cial Bello Campo, sótano. Telfs. 264.1638 y 267.6715. EMERITUS. Antes de llegar a El Hatillo, rodeado de pinos y con un ambiente de montaña, se encuentra este comedor dirigido por un francés. Centro Médico Docente La Trinidad, segundo edificio, nivel sótano. Telfs. 93.8879/3122 Ext. 6315 y (014)29.0436. GALERIA. Lanzado bajo la peregrina insignia de cocina creativa este establecimiento de decorado posmo y menú híbrido y contemporáneo ha experimentado un repunte notable en las pastas gracias al acertado asesoramiento de Domingo Delfino —la mano incógnita que relevó a Helena Iba-
11V1
113 Q „
rra en la supervisión de los fogo nes. Como ejemplo, los linguini al curry con puré de aceitunas y huevas de salmón. Jueves de espectáculos que comienzan no muy puntuales. Centro comercial Mohedano, calle Los Chaguaramos, La Castellana. Telfs. 261.0329 y 266.4316. GAZEBO. Una crema de pimentón de antología. Ambiente de envite y azar. Av. Río de Janeiro, Las Mercedes. Telf. 91.9258. Cm. ¿Trattoria, café o restaurante? Ni lo uno ni lo otro sino todo lo contrario. Un híbrido italiano bien adaptado al paladar caraqueño. Av. Principal, Las Mercedes. Telfs. 93.0119 y 993.3663.
Consagrado a las líneas rectas, diagonales o paralelas,
y a una pasión incontenible por el sabor de las exóticas vituallas del recetario nipón, Germán Olavarría compagina con riguroso perfeccionismo
1 sus inclinaciones como arquitecto y
., .
101
chef aficionado. Jalapeños, plátanos
y ñoquis en un mismo platillo, además de versátiles salsas —varían
egún el día— que acompañan su plato consentido, calamares rellenos de risotto y zanahorias, resumen la tendencia culinaria a la que se acoge -
este joven cocinero, en cuyos dominios los más diversos ingredientes
se confabulan para ser degustados por paladares abiertos a los atrevidos sabores de la new world cuisine. La barra sushi se apega a lo más tradicional, acompañando los pedidos, sin excepción, con sopa miso y ensalada o arroz. Aves, pescados y carnes macerados en soya y aceite de ajonjolí parecen ser los portavoces de una híbrida carta que se nutre de yuca, mandarina, maní y picantes. Una copa de vino Loré es el consorte inseparable de las peras al vino tinto con queso tipo gorgonzola, que 9
constituyen el postre por excelencia del acogedor espacio que desciende desde la calle Guaicaipuro de El Rosal paro sumirse en los espacios íntimos de un pequeño restaurante de grandes pretensiones. Torre Seguros Alianza, local comercial, semisótano Telfs. 952.0585 y (016)23.5759
a
GIRASOL. El nivel superior dica a las exuberancias de cina ibérica. Abajo, pana cafetería, charcutería y b integran el centro gastronórni Calle Progreso con calle Bolív El Hatillo. Telfs. 961.1434/14 1939. O HATO GRILL. Los hervi queso de mano y el lomito encebollado atraen a las masas que aplauden, además, unos precios de absoluta cordura. Av. La Salle, Los Caobos. Telf. 782.8132. 9 HATSUHANA. Ambiente relajante, con jardines de piedra y salones tatami, sirven de complemento a una de las mejores cocinas niponas del valle. Av. San Juan Bosco con 5' transversal, Altamira. Telfs. 264.1819/1214. HERDFORD GRILL. La parrillada argentina llegó a este valle en los años cincuenta y se reprodujo en numerosos clones que jalonan la ciudad. Hallaquitas, arepas, queso de mano, nata y caraotas refritas nacionalizaron el producto importado. En este caso específico, quizás no haya más que agregar. Calle Madrid, entre Caroní y New York, Las Mercedes. Telfs. 92.9664 y 993.9610. HERMAIM. Un tanto informal y muy visitado a mediodía por ejecutivos presurosos. Amplio como sus homólogos neoyorquinos. Cocina ecléctica. Música de noche y los domingos a partir de la 1:00 pm. Av. Francisco de Miranda, Centro Lido, nivel Parque, Chacaíto. Telf. 953.4560. IL CIELO. Marmórea, florida y luctuosa, la desangelada entrada no da fe de su cálido interior. Originales antipasti, aceite de oliva extravirgen y jugosa ternera asada viven en feliz unión bajo la mirada vigilante de Renato Fragata. Av. Río de Janeiro con calle Trinidad, Las Mercedes. Telfs. 993.5996 y 91.8754. JAIME VIVAS. Cocina popular venezolana. El argentino homónimo no previó tal posteridad para el plátano horneado o la ensalada de berros cuando se instaló hace 01
JULIO 1996 EXCESO
69
décadas frente a la clínica Razetti. Calle Pascual Navarro, edificio Manaure, Sabana Grande. Tclf. - 1.4761. KUNG HEY. Lo que le falta de refinami en to lo suple la autenticidad. Mantiene dos cartas, en español y chino —cantonesa una, szcchuan la otra— y ha incorporado el servicio de tim sam mediodía, tarde y noche. Av. Prolongación Sur, Las Acacias, Sabana Grande. Telfs. 782.5610 y 793.1449. O KURO OBI. Cocina japonesa de una autenticidad ajena a sincretismos que ha seducido al público adulto contemporáneo con precios fuera de lo común en el universo de los restaurantes nipones. Av. E, Edif. Montecassino, local 3, Campo Claro. Telf. 234.8016. O LA BELLE EPOQUE. Hace 38 años estaba en el mismo lugar, ofreciendo a los nostálgicos de Francia un cálido consuelo. Y sigue siendo así, con su invalorable mural del París eterno, música de saxo en vivo y los platillos del chef Domingo Meneses, entrenado por su antecesor Michelle Pelienard. Calle Leonardo Da Vinci, Edif. Century (detrás de Maxy's), Colinas de Bello Monte. Telf. 752.2202. LA CASBAH. Africa en este caso no pasa de una curiosidad de enseña; más bien, el origen de todos los platos, signados por la frescura de los ingredientes —del mar, del corral o de la huerta—, es salerosamente hispano. Alcabala a Puente Anauco N" 214, Candelaria. Telf. 572.6387. LA CITA. Ahí en la esquina de Alcabala, en pleno centro de Candelaria, inició el viejo Urrutia su aventura culinaria venezolana. Luego se iría a la avenida Solano y sus hijos ya han llegado hasta Las Mercedes. Telf. 572.9913. 7U
EXCESO
JULIO 1996
LA CONFITURE. Predilecto de señoras que gustan de un acogedor
ambiente hogareño, brinda una carta de resonancias francesas a la manera de Caracas, supervisada, como desde hace diez años, por el ojo cariñoso de Pilar Leonardi. Calle Madrid, entre Mucuchíes y Monterrey, Las Mercedes. Telf. 993.9658. LAI KING. Chino con tradición. Tim
sam sobresalientes acompañados
de muy buen servicio. Tercera avenida con 3a transversal, Los Palos Grandes. Telf. 283.9742.
En medio de una de las zonas menos agradables de la ciudad, en un local miserable, mantiene, no obstante, una de las cartas cantonesas más sabrosas y auténticas en estas latitudes. Pilita a Bucare, edificio Jucadi, local A, Santa Teresa. Telf. 481.0741. LA NUEVA CASA DE LOS CHINOS.
O LA ROTISSERIE. Los altos ejecu-
tivos del centro pueden respirar tranquilos porque el monumental y bien atendido salón del Hilton
propone una alta cocina de calidad. Perfecto para el mediodía y estratégicamente situado para los aficionados a las artes escénicas que frecuentan los espectáculos del Teresa Carreño. Av. México, hotel Caracas Hilton. Telfs. 503.4107 y 503.4108. LASSERRE. Ostras Rockefeller, po-
llo a la Kiev y otras piezas de museo; servicio formal y elegancia convencional en la decoración siguen atrayendo a banqueros y profesionales prósperos. Tercera avenida, entre 2a y 3a transversales, Los Palos Grandes. Telfs. 283.3079 y 283.6335. 49
LA STREGA. La sola presencia
de Claudio Bicciato en la sala y su esposa en los fogones es garantía suficiente para los aficionados que reconocen en la pareja a los precursores de la italianidad culinaria septentrional en la cuna de Bolívar. Av. Los Chaguaramos (frente al banco Barinas), La Castellana. Telfs. 266.7756 y 261.4363/5387. LE CIRQUE. Francés sin mayores aspavientos, aunque Roberto Col-
menares hace esfuerzos por salir del anonimato con una carta gala convencional. Propicio para citas incógnitas amenizadas por la grata voz de Patricia Kaas. Hotel del CCCT, Chuao. Telfs. 959.0611 y 959.1044. LE COQ D'OR. Un modesto tesoro
de continuidad que perpetúan los
nostálgicos de la Sabana Grande de antaño. Para habitués. Av. Los Mangos, Sabana Grande. Telf. 71.0891. O LE GOURMET. La clara ambición de colocarse en el pináculo gastronómico de la capital es prácticamente un hecho. Laurent Kehr
es harto convincente cuando aborda el hojaldre de foie-gras, la ensalada de endibias con tempura de vegetales y soya o los medallones de ternera al jugo de especias. Melodías al piano por la noche, óleos de género de los siglos XIX y XX en las paredes, y la atención equilibrada y formal complementan una experiencia que vale su precio. Hotel Tamanaco. Telfs. 208.7242/7236/7399. O LE PETIT BISTROT DE JACQUES. Su dueño, el inmodificable Jacques Bouvait, se propuso procrear un local parisino intemporal plus vrai que nature, con el repertorio que corresponde. Y la fórmula que convenció desde el principio ha perdurado diez años. Av. Principal, Qta. Tere, Las Mercedes. Telfs. 993.4093 y 91.0975. LE RENDEZ-VOUS. Una puñalada por la espalda a la cuisine bourgeoise francesa. Calle Monterrey con calle París, Las Mercedes. Telf. 993.5190. 9 L'OPERETTA. Antes funcionó allí el exclusivo Member's. Conserva el hermoso bar inglés y unos espléndidos jardines. La gente bella lo adoptó junto al Bunello di Montalcino. Calle El Bosque, Esq. Av. Principal, La Castellana. Telf. 265.3293. LOS SANABRIA. La fidelidad a la buena cocina casera venezolana del centro es el mejor argumento de venta de esta familia que merece, sin lugar a dudas, todas las condecoraciones y aplausos. San Antonio de los Altos, Urb. La Morita, frente al centro comercial La Morita. Telf. (032)71.4340. 19 Los VASCOS. Los ejecutivos de Pdvsa y otras empresas de la zona toman por asalto la sazón de Euskadi todos los mediodías. Pimientos de piquillo rellenos de bacalao sobre salsa de calamares, mero al horno sobre papas panaderas
u hojaldre con gambas son algunas de las cosas sabrosas que trajo desde las Vascongadas el chef Raúl Miranda. Hotel Cumberland, 2' avenida, Las Delicias, Sabana Grande. Telf. 761.5630. LUTECE GRILL. Un pequeño establecimiento que arraigó en esta ciudad los giros de la comida casera del comisario Maigret. Apuntalados con Grillades, ensaladas y uno que otro coqueteo con la moda del carpaccio. Los jueves son de espectáculo. Calle Beethoven, edificio Paraima, Colinas de Bello Monte (estacionar en la Torre Financiera). Telf. 752.7226. MARCO POLO. Un trompe l'oeil veneciano sirve de escenario a una comida italiana de cierto postín que supervisa Amadeo Mazzucato, un veterano de la restauración y cronista gastronómico a sus horas. Conserva un estilo años sesenta que le da cierto encanto. Música suave. Av. Francisco de Miranda, Torre La Primera, Campo Alegre. Telf. 953.4284/0396. MAURIZIO'S. El menú se bandea del carpaccio al goulash sin conflictos de identidad. Valorado por los amantes de lo recóndito e informal. Este bistró resalta como un símil de terraza playera. C. C. Los Aleros, El Hatillo. Telf. 963.6427. MORTIMER'S. Menos neoyorquino o francés que tropical. Abierto como una flor. Calle Madrid, Las Mercedes. Telf. 993.7090. MR. LEE CHOW. El nombre evoca la cadena homónima que diera la hora en Londres, New York y Los Angeles hace 15 años. Pero hasta ahí llega la cosa. Se esfuerza por mantener la cabeza en alto con la fórmula harto conocida del pato pequinés. Av. Río de Janeiro, Las Mercedes. Telf. 752.4957. MUÑEIRAS. El fuerte, aparte de la simpatía y atenciones de la casa, son los mariscos y pescados de ultramar. Cuarta avenida, entre 3' y 4' transversales, Altamira. Telf. 261.3093. NERONE. Pastas importadas. Av.
Casanova, entre calles Coromoto y primera de Bello Monte. Telf. 762.7916. OKER'S. Este comedor vasco respaldado por excelente materia prima puede incorporarse a la esfera de los buenos. Preparaciones nada ingrávidas. Un corto pero calificado repertorio de vinos navarros opera como buen aliado a la hora de digerir. Calle 2 de Mayo, esquina con calle Bolívar, El Hatillo. Telfs. 963.2249 y (016)21.1832. O OPERA CAFE. Pierre Blanchard ha protagonizado una verdadera epopeya solitaria en esta metrópoli que suele entender muy poco de alta cocina. Este francés forma parte de lo mejor del paisaje culinario galo de Caracas de todos los tiempos, ahora en una versión de bistró refinado. En ocasiones sublime. Av. Principal de Prados del Este, centro comercial Plaza Prado, local 1. Telf. 978.1222. PALIO CAFFE. Este single bar con un menú de nuova cuccina made in New York atrajo al público joven de Caracas. Pero desde que cambió de manos ha perdido adeptos. Av. Principal de Las Mercedes con calle Guaicaipuro, Qta. Otawa, El Rosal. Telfs. 951.0915/ 5195/3884. 9 PANOLI. Caras lindas como arroz. Avenida Libertador. Telf. 265.7741. RITZ. Jack Traverso atiende con igual gentileza a políticos, artistas, escritores, hombres y mujeres de negocios. Abre a mediodía, y jueves y viernes son para los noctámbulos. Av. Las Palmas con Libertador. Telf. 781.1357. ROCOCO. Platillos de terror. Abierto a la calle, por dentro se diría concebido por alguno de los locos Adams. Cuarta transversal, entre 4' avenida y Av. San Felipe, Altamira Norte. Telfs. 261.1417 y 266.7842. SAKE HOUSE. Anfitriona consorte, Maite Delgado se deja ver con frecuencia y es uno de los atractivos del lugar, donde cocineros expertos en el arte del teppanyaki
hacen las delicias de la chiquillería, padres incluidos. Calle Sucre, casa N° 6-B, El Hatillo. Telf. 961.1342. SAKURA. La excesiva popularidad ha afectado el servicio y ha disparado los precios a alturas estratosféricas. Si es comida para llevar, hay que armarse de paciencia y disponer de 30 minutos como mínimo. Primera avenida, entre 1' y 2' transversales, Edif. Pinali, local 3, Los Palos Grandes. Telf. (016)21.7316. SALOMA. Un toque de sofisticación realza los sabores criollos que se materializan sobre una vajilla de vidrio esmaltado, a tono con las obras de arte que expone este local en su doble función de galería y restaurante. Calle Madrid con Caroní, Las Mercedes. Telf. 993.7736. SAMUI. Especialidades tailandesas. Un público y una atención peculiares. Av. Andrés Bello con 1' transversal, Los Palos Grandes. Telfs. 285.4600/6106. SCOPRILO. Las paletas de pintor que hacen de respaldar de las sillas anuncian que aquí la carta, además de comida, incluye obras de arte, italiana la primera y venezolanas las otras. El afán de salir de la rutina, la calidad de los ingredientes y los ajustados precios son los más contundentes argumentos. Centro Banaven, Av. La Estancia, Chuao. Telfs. 993.7157 y 92.4010. SHIBUMI. Fue el primero en combinar el encanto folklórico de El Hatillo con el toque snob de los sushi bar de New York, sumando a la delicadeza de los platos del archipiélago la abundancia, tan valorada en este lado del mundo. Calle Bella Vista con Santa Rosalía, quinta Usme, local 3, El Hatillo. Telf. 963.4501. 9 SUKOTHAI. Buscando ser un fiel exponente de la cocina tailandesa, recrea las salsas fuertes, el uso de muchos vegetales y el té tai a la retaguardia. Para satisfacer paladares venezolanos, se ha mitigado el distintivo picante. Esq. ca-
lles Escalona y Miranda, Q lla Rosa. Telf. 963.5698. TAIKO. El único samurai de na. Un espacio cálido que f cebido lleno de magia e inti y así se ha mantenido hasta Calle Trinidad, Edif. Ca Las Mercedes. Telf. 91.670 O TAMBO. La doble altura cal de este restaurante de los hermanos Sucre lo emparenta con la pauta neoyorquina de los ochenta, sin duda su fuente de inspiración. Bifróntico en lo culinario, de un lado japonés y del otro peruano, como su chef, gusta a las mujeres de portada, a los altos ejecutivos, a las señoras casadas y hasta a los políticos. Tiene duende, tiene dueño. Av. Francisco de Miranda, Torre Europa, planta baja. Telfs. 952.5626 y 952.7190. TERRAZA IBIZA. Un largo recorrido de sillas plásticas de tono casi playero hacen de invitación informal al local. La minuta ofrece terrines, quesos, patés y demás bocadillos de la familia de las carnes frías para las tardes; los almuerzos y las cenas se anuncian en otro menú que incluye ensaladas, sopas y una variedad de carnes, aves y pescados para satisfacer todos los apetitos. Los desayunos, desde las 6:00 am, se lucen con omelettes, huevos Benedictine y demás viandas para calmar el hambre matutina. Un pequeño salón elegante y bien decorado acoge businessmen desde temprano, con servicio de fax y teléfono. Los fines de semana son de jazz en carne y hueso, y de violines en las mañanas. Calle Perijá con California, Las Mercedes. Telfs. 993.2894 y 993.2907. O URRUTIA. Entre los florones del modus culinario vasco, con más de 30 años en la plaza. Un relevo generacional reciente hizo ganar puntos a este clásico del Este. Av. Francisco Solano, Esq. Los Manguitos, Sabana Grande. Telf. 71.0448. O VIA APPIA. La familia Fallone, siempre hospitalaria, vela por sus bocconcini de salmón, carpaccio )ULIO 1996
EXCESO
71
eitunas negras y gnocchi en de calamares como si fueran ijos. Av. San Felipe, Centro sa, La Castellana. Telfs. 823/3198/2966. . Vuelve hablando portuAmenaza con apoderarse de ches de sábado a ritmo de a, caipirinha en mano. Mediodías sabatinos de feijoada, y brunch brasileño los domingos. Parque Central, sótano 1, plaza Maccsi. Telfs. 573.4601/4629. 9 VISTARROYO. Coplas y joropo amenizan las noches. Pintorescamente decorado, complementan la comida venezolana curiosas y elegantes exhibiciones de caballos de paso y subastas de casta. Ambiente y público de buen tono. Sin grandes aspavientos promocionales, su personal lidia con una inmensa afluencia todos los días, sobre todo los domingos. Av. Luis de Camoes, vía El Cafetal-Macaracuay. Telf. (014)21.2384. VULCANO. Italiano muy concurrido. Goza del favor de un público in. Av. San Juan Bosco con 3' transversal, Edif. La Placette, Altamira. Telf. 265.9546.
Un espacio íntimo y cosmopolita abre camino a un variado menú de sandwichs, tortas y cafés. El criollo con queso de mano y ensalada destaca. Además, un clásico desfile de confites. Calle La Guairita, centro comercial Vizcaya, Santa Paula. Telf. 985.3730. O AROMA COFFEE COMPANY. La calidad del café tostado y seleccionado bajo estricto control, el compromiso; café Espresso, Latte, Espresso Macchiala, Capuccino y Mocha, la variedad; innovador y de confortable quietud, el ambiente. Av. Andrés Bello, entre avenida Francisco de Miranda y la transversal, Multicentro Los Palos Grandes. Telfs. 285.3469 y 286.3636. 9 BARAKA. Las cremas son la clave. De cebolla, champiñones, ajoANTIQUE CAFE.
72
EXCESO JULIO 1996
porro, base también de las sopas. Globos de pan con cuatro quesos, tocineta o cebolla y miel son los favoritos del repertorio. El informal espacio interior se abre a la terraza de acogedor ambiente para un buen café y mejores postres. Entre calles París y New York, Las Mercedes. Telf. 92.6674. 9 BOSTON BAKERY. Con cara de cafetín, juega a ser panadería lujosa. La especialidad son los panes de cambur, maíz, cebolla y el ya característico cinamon roll. Av. Luis Roche con 2a transversal, Altamira. Telf. 263.2457. CACHAPAS SANTA MONICA. Tras una fachada de pizzería que despista se impone, cual verdadera epifanía, el maíz. Los jugos de fruta, en particular los de durazno y fresa, aportan color y aroma a los inmensos platos. Av. Arturo Michelena con calle Teresa Carreño, Santa Mónica. Telf. 661.7591. O CAFE DEL MUSEO. Una larga lista de ensaladas hermosa y sabiamente servidas y condimentadas, bajas en calorías y altas en precio, son el blasón de la casa. Para cerrar con broche de oro, deliciosos postres asoman con pecaminosa voluptuosidad. Jardín de Esculturas, Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber, Parque Central. Telfs. 577.5710/ 9221/8132. O CAFE DEL SACRO. Emparedados de casi ininteligibles mezclas, ensaladas frescas, postres caseros y deliciosas sopas, además de las sugerencias que la casa presenta según el día. Nombres de numinosa procedencia habitan el profano enunciado de la carta. Precios celestiales. Museo Sacro de Caracas, Torre a Gradillas. Telf. (016) 25.8913. CAFE MACCHIATO. Para rendir culto al ritual del cafecito, granos seleccionados, tostados, mezclados y colados in situ, servidos según la tradición europea. Esmerada atención. Centro Plaza, Villa Mediterránea, local 3, Los Palos Grandes. Telfs. 206.0581 y 976.4850.
medio camino entre la fuente de soda típica y el café de herencia europea, desde hace años es el lugar predilecto para la cita discreta. Av. Francisco de Miranda, Centro Plaza, nivel 3, Los Palos Grandes. Telfs. 286.1952 y 284.6590. 4D CAFE OLE. En el segundo nivel, el techo bajo auspicia la calma e invita a la charla en la intimidad, mientras se toma un cafecito. Degustación de tortas, postres y demás vituallas dulces y ligeras, que no bajas en calorías, complementadas por una buena atención. Ahora la acera plagada de sillas deleita a la créme caraqueña en versión juvenil. Todo un éxito. Calle California con Jalisco, quinta Carylo, Las Mercedes. Telf. 993.9059. 9 CAFE ROSO. Agradable centro de regodeo social, se asoma a la intemperie para anotarle a los dominios de Irene Sáez un punto más en favor del cotilleo. Con una carta clásica de deli, ofrece una larga lista de sandwichs para la comida, y jugos y café para la merienda o el postre. Av. San Felipe, entre calle José Angel Lamas y 2a transversal, Centro Coinasa, La Castellana. Telfs. 266.2576/ 8773. O CARSO BAR. Desde el mediodía y hasta la noche reúne a las mejores copas del mundo publicitario. Suculentos sandwichs cubanos. Y en las tardes, servicio de café y pastas secas al estilo de las mejores confiterías porteñas. Av. Francisco de Miranda, Edif. Galipán, Chacao. Telf. 951.2797. 41/ CHIPI'S. Salchichas de distintos tamaños y origen son el corazón de los perros calientes más jugosos y bien vestidos de la zona. Con ensaladas, papitas y un envoltorio que evita pringosas condecoraciones de salsas, son una excelente opción. También, una buena variedad de emparedados, quiches y sopas para quienes prefieren algo más sustancioso. Av. Principal de La Castellana, plaza La Castellana. O CAFE MARGANA. A
9 COLLINS AVENUE. Café, bar y cibernética. Abierto desde el mediodía, colma apetitos ligeros y a curiosos de la tecnología. Este cyber-café de ambiente agradable atrae, con cuatro monitores conectados a Internet, a la gente joven en las noches tempranas. Calle Los Chaguaramos con Av. Mohedano, Centro Gerencial Mohedano, La Castellana. Telf. 261.7855. 9 4 D. La cadena de heladerías que abriera sus primeros puntos de venta en Margarita y Puerto la Cruz llega a la capital con este local de paredes mostaza y sillas de aluminio. Mesas y opciones de sobra. Abarrotado a toda hora. Av. Londres con New York, Las Mercedes. Telf. 92.7702. DANUBIO. Tradición y dulce se unen en esta casa roja cuyos pie de limón y pasteles de queso todo el mundo conoce. Av. Guaicaipuro, Qta. Nelly, Chacao. Telf. 263.7563. O DAS PASTEWIAUS. Lleno como el primer día. Esquina característica del chocolate con churros en el nivel inferior, y en el superior la pizza, previa espera y larga cola. Calle La Paz, N° 32, El Hatillo. Telfs. 963.5486 y 963.7655. D'ROCCA CAFE. Enfilado en el estilo de la gastronomía informal, estrenó en la jurisdicción capitalina el arte de cocinar a la piedra. Usted es su propio chef. Alimentos frescos, cocina sana, técnica nada engorrosa. Calle California con Mucuchíes, Edif. Los Angeles, PB, locales 5 y 6, Las Mercedes. Telf. 993.6270. EDDY'S. Abierto al público hasta las diez de la noche, encarna la superdifundida y bien consagrada fórmula de los locales donde la comida es servida sin demoras. Variedad de sandwichs estilo americano y ensaladas frescas de la casa. Av. Francisco de Miranda con calle Parque Cristal, mezzanina, local 2, Los Palos Grandes. Telf. 285.6980. EL GRANJERO DEL ESTE. Atención al público las 24 horas, es el lugar
para comer o beber sin mayores sofisticaciones. La tostada caraqueña reina si el apetito ha de saciarse de pie; en la mesa, batidos de frutas, cerveza fría o los condumios de la criollísima cocina típica. Av. Río de Janeiro, Las Mercedes. Telf. 91.6619. EL TIZONCITO. Antojitos mexicanos nada carismáticos. Para quienes, por lo demás, no sientan repugnancia por las chiripas que también lo frecuentan. Centro comercial Paseo Las Mercedes. Telf. 92.1020. FRITZ Y FRANZ. Toda una tradición teutona para los caraqueños, renace con una franquicia jugosas salchichas, repollo, ensalada de papas y mostaza. Avalado por una concurrencia deutsch über alíes. Tercera transversal con Av. San Juan Bosco, Edif. La Placette, Altamira. Telf. 265.5724. GRAN CAFE. Con permiso para expendio de licores, se sirven aperitivos varios y otras modalidades etílicas. Del yantar merecen mención las pizzas. La carta contempla, además de café en casi todas sus variantes, helados y pasteles sin pena ni gloria. Calle Real de Sabana Grande. Telf.
con mesitas de fuente de soda y toldos individuales. Calle Madrid, Las Mercedes. Telfs. 92.6295 y 92.9481.
El horno de leña se izó en la estima de los caraqueños en esta pizzería. Frecuentado por toda Caracas, en especial los domingos en la noche. Piscina del hotel Tamanaco. Telfs. 208.7111 LA CABAÑA.
y 91.4555.
Prolongación mejorada y ampliada de la primogénita de Las Mercedes. Una exhibición de productos importados y nacionales da acceso a la cafetería que se explaya buscando el aire libre con multitud de confortables mesitas ubicadas bajo un fresco toldo. Calle La Guairita, centro comercial Vizcaya, PB, local 6, Santa Paula. Telfs. LA CASA BRIOCHE.
985.5811/4522/4681.
Las exquisiteces del bodegón aledaño se suben a la mesa del pequeño e informal restaurante que el señor Luciano vigila personalmente. Calle MonteLA FATTORIA.
y ensaladas tradicionales de la gastronomía itálica. Frente a la plaza Sucre, El Hatillo. LA SIFRINA. Batidos de frutas frescas; café guayoyo, negrito, tetero o marrón; ricas cachapas de maíz tierno; arepas rellenas y hervidos criollos para amilanar la curda de madrugada. Paradero inevitable de la ruta de trasnocho. Av. Blandín, La Castellana. Telfs. 266.6569 y 266.2615. LA TERRAZA. ¿Trattoria, bistró? La
bruschetta es de pan elaborado en casa y la pasta está avalada por el propietario. El paté y los terrines corren por cuenta del conocido Gérard Chérance. Calle Sucre, N° 3, Qta. La Majada, El Hatillo. Telf. 963.5551. LE BON VIVANT. Gracias a la doble naturaleza de restaurante-almacén, y en el marco de un agradable ambiente informal de estilo francés, permite la degustación de nutridos emparedados henchidos con ingredientes de primer orden. Calle Veracruz con calle
71.9502. IL CHOCOLACCIO. Gelateria bien surtida. Del
clásico mantecado al exótico oreo. Calle La Guairita, centro comercial Vizcaya, Santa Paula. IMBISS. La especialidad son las salchichas alemanas, aunque el hash brown se luce en este minúsculo espacio del nuevo centro comercial de El Hatillo. Calle Bolívar, Galerías El Hatillo. Telf. 961.1736. LA BRIOCHE. Surtida variedad de brioches dulces y saladas, capuccino alla panna, café espresso, granita de café y café freddo en auténtico estilo italiano. Agradable ambiente a campo abierto
rrey, entre Av. Río de Janeiro y calle Madrid, Qta. Udaberri, Las Mercedes. Telf. 993.6333. LA GROTTA. Atendido por sus dueños en la calidez de un ambiente familiar, ofrece auténtica comida italiana en versión original: pastas fatte in casa, generosas pizzas
Vicente, Las Mercedes. Telf. 993.2042.
En proceso de cambio, este acogedor santuario de las crépes añade a su abanico de opciones gnochi maison, mero Cóted'Azur y otros consistentes condumios de Jean-Luc Lemonnier. 9 LES AMIS.
Bajo techo y al aire libre, a abajo, la alternativa de u ciente menú galo. Av. Or Qta. Chey Les Amis, Las des. Telf. 993.7675. LUNA CAPRESE CAFE. Co tensión del restaurante aledaño funciona a partir de las sei tarde en espacio abierto. bina comida liviana gringa, especialidades italianas, sandwichs con muchas ínfulas y pobre atención. Calle Madrid, entre Mucuchíes y Monterrey, Las Mercedes. Abre de 10:00 am a 12:00 pm. Telf. 993.7057. MAMMA MIA. Enfiladas bajo un angosto techo, las mesas de esta pizzería dan la agradable sensación de estar al aire libre. Ni muy cerca de la calle ni tan lejos. Una feliz combinación de ladrillos y madera hace más agradable el rato. Centro Ariedam, Av. Principal, Las Mercedes. Telfs. 993.6974 y 993.7230. MANGO CAFE. El blue monster, trago de la casa, campea en las noches
de parranda. Prestas a la intimidad, pequeñas mesas aisladas seducen con sus colores y, en particular, el rincón de cojines, trono de privilegiados. Desayunos, almuerzos y cenas nutren el menú de inclinación italiana. Calle Londres, entre New York y Caroní, Las Mercedes. Telf. 993.9108. MARIMBA CAFE. Hasta las seis de la tarde, cuando la nocturnidad toma el local, pasteles y distintos preparados de la infusión venida de Arabia se adueñan de los espacios de Tabaco Bar bajo este nombre de melodiosa resonancia. Calle Comercio N° 15 (al lado de la plaza Sucre), El Hatillo. Telfs. 963.4377 y 961.1515.
Con sabor italiano y estilo estadounidense. Pizzas, pastas, ensaladas y calzones al 01
O MAllIO'S.
JULIO 1996 EXCESO
73
con ingredientes de minuselección. Lunes a viernes, el mediodía hasta las tres tarde y nuevamente desde 00 pm. En las noches, de go a jueves hasta las 11:00 viernes y sábados hasta noche. Av. Principal con José Félix Ribas, La Castellana. Telfs. 267.0211 y (014) 23.9090. 9 MEDITERRANEO. Verdadero oasis de europeo encanto. Paredes en estuco veneciano sostienen viejas fotos, las mesas hablan de sokos marroquíes y las sillas de lona aluden a una nostalgia playera que no desmienten la langosta fresca de Los Roques, los ligeros antipasti, los linguini o tortelloni del día, y menos la inamovible panna cotta. A pesar de un merecido éxito, no abre sábados ni domingos. Primera Av., entre 1' y 2a transversales, Los Palos Grandes. Telf. 263.7415. 9 mono. Vitrina mundana. Reducto ideal para el encuentro vespertino o la velada sin excesos. Menú y decoración en síntonía con el american way of life. Calle California, cruce con Mucuchíes, Edif. Los Angeles, Las Mercedes. Telf. 751.4894. PAPASITO'S CANTINA. Condumios peruanos y mexicanos en el centro comercial El Solar de mi Abuela, esquina calle Sucre con calle Comercio, El Hatillo. Telf. 963.7974. PLUS CAFE. Porte de café de postín, pastelería y charcutería con jazz en vivo los fines de semana. Cerrado los lunes. Calle Bolívar, El Hatillo. Telf. 961.1165. O REY DAVID. Expendio de productos importados, tienta al buen gusto con asalto al presupuesto. Menú de exquisiteses para paladear sentado: sandwichs, café, postres y delikatessen. Cuarta transversal con avenidas Andrés Bello y Alfredo Jahn, Altamira. Telf. 284.1790. S/ SATELLITE. El aire libre también tiene cara de gula desde la rampa de acceso con tres niveles 74
EXCESO JULIO 1996
del Cubo Negro. Pisos de mármol con vista al Avila dan crédito de la más representativa cocina del south-west estadounidense. Opción especial de desayunos al gusto. Sótano comercial del Cubo Negro, local 11. Telfs. 959.4606 y 959.8305. 41 SAFARI CAFE. Como estandarte, lleva una distinguida variedad de sandwichs con nombres que evocan al Africa ardiente. Una amplia gama de combinaciones de la prieta infusión completa la propuesta. Fondo de jazz a veces en vivo. Por si fuera poco, se desdobla en bodegón. Abierto desde las 7:30 am hasta las 11:00 pm. Av. Luis Roche, entre 1' y 2a transversales, Altamira. Telfs. 285.7172 y 286.1788. 9 TONINO'S. En una coqueta terraza repleta de árboles y rusticidad, cafés y batidos acompañan a los sandwichs en pan árabe con papitas fritas y ensalada de habichuelas. Aunque discretos en tamaño, reclaman un jugoso monto en billetes. Centro comercial La Chiringuella, 4a transversal, Los Palos Grandes. Telfs. 286.0877 y 286.4542. Z0E CAFFE. Barra subjetiva y ambiente ecológico. Imperan los tonos ocres en confabulación con los aromas de especias de la oferta básicamente vegetariana, si de suerte hay en existencia. Av. Río de Janeiro, entre calles Veracruz y Caroní, centro comercial Quinso, Las Mercedes. Telf. 92.8828.
TRAS NOCHAR DISCOTECAS, BARES, PUBS, BAILADEROS,
SALOWESBE JUEGQ ACERO. En la onda de tolerancia, su público horno y heterosexual se entrega a la rumba superando el low pro file tradicional de los lugares de este tipo. Con 2.500
bolívares, cualquiera tiene acceso. Calle París con calle Trinidad, Las Mercedes. Telf. 993.0316. AMERICAN POOL. Mesas de juego y pista de baile, todos los jueves y viernes. Incomprensiblemente, lleno siempre. Calle California, Qta. Santa Teresa, planta alta, Las Mercedes. Telfs. 993.2534/3621. BOOMKER. Dos amplísimos pisos alojan a camadas de adolescentes de encendida emotividad, entre quienes se ha impuesto con su monumental arquitectura semicircular y precios de consumo estándar. Avenida Principal (frente al Tropi Burger), Las Mercedes. Telfs. 993.5918 y 993.5627. BOURBON STREET. Ambiente cálido, propicio para los amantes del jazz. Soñado para el adulto contempóraneo. Barra en forma de barco y música en vivo de martes a viernes. Hotel CCCT, nivel lobby, Centro Ciudad Comercial Tamanaco, Chuao. Telf. 959.0611. BROOKLYN. Se trata de un holgado espacio que acoge a clientes adultos en onda casual. Consagrada combinación del momento: baile, pool, barra y comida liviana. Av. Tamanaco, El Rosal. Telfs. 952.1944 y 952.2511. O CAFE L'ATTICO. Introdujo en Caracas una corriente que habría de hacer explosión una década después: el facsímil de bar-restaurante-hamburguesería informal del Upper-East-Side neoyorquino de los años sesenta, con brunch y todo. Lleno desde el primer día. Av. Luis Roche con 2a transversal, Altamira. Telfs. 261.2819 y 261.4739. CARAMBA. En tono gris y luces de neón, sobresale como el lugar donde puede apostarse —taco en‘mano— una buena partida, calmar el hambre con una minuta ligera y/o consentir una sana distracción etílica en amena conversación. Calle París, Las Mercedes. Telfs. 92.6242 y 92.0609. CASSIS. Acoge con preferencia a estudiantes universitarios de cachet y entona el ambiente con los temas top. Dos pisos, uno para el
baile y otro para el juego. Lunes de pool, miércoles bailables y jueves
de radio. Av. Principal, La Castellana. Telfs. 263.0453 y 261.2411. O DOOM La música de fondo se pasea por los preludios del blues, los Rolling Stones y los temas más recientes de la distorsionada cartelera anglosajona. La barra cervecera y una nueva y expresiva fachada hacen agolparse a la muchachada caraqueña en la entrada. Calle Madrid, entre New York y Trinidad, Las Mercedes. Telf. 91.2022. 9 DOWN TOWN. Entrar es toda una odisea; pero si logra llegar hasta la puerta, la tarjeta plástica en mano, preferiblemente gold, asegurará el ingreso. Sin tropiezos ni empujones, ambientes varios prometen charla, baile y diversión. Excelente selección musical. Av. Principal, Las Mercedes. Telf. 993.9881. EL ANFORA DE ORO. Jueves, viernes y sábados, los pobladores de los estratos más hondos del subsuelo se dan cita en las fiestas o toques de ocasión de este vecino de la morgue. Calle Alma Mater, Edif. Canabria (a cuadra y media de la Cantv, subiendo por la Disip), Los Chaguaramos. O EL LEON. Pizzería hiperconocida, impuso el gusto por la charla al aire libre. Las mesas proliferan en el exterior, para noches cerveceras. Torre Merinvest, La Castellana. Telfs. 263.6014/6843. O El. MANI ES ASI. Bailar y beber son las faenas predilectas de sus feligreses. A ritmo de salsa, a pulso vivo o con el archivo de la Fania Brava, esta cueva tiene ya un lugar en la historia rumbera capitalina. Calle El Cristo, Av. Francisco Solano, Las Delicias, Sabana Grande. Telfs. 71.0523/6671. EL SARAO. Para los caballeros —ejecutivos de estrato medio— que celebran en esta sala de fiesta de elegancia tropical los desbordamientos del fin de semana, vestir chaqueta es requisito indispensable. El sonido es de salsa, merengue y otros sones del tum-
desfallecerá por falta de ta-
pas. La Campiña, de
Pdvsa. Telf. 74.3091 LA TALANQUERA.
Carne en
ra y música venezolana
En Cayoclaudio, Aponte y Nazoa apuestan seriamente a la cocina. (Ver restaurantes)
bao de acá. Centro comercial Bello Campo, nivel sótano, Bello Campo. Telf. 267.4581. EL TYROL. De martes a sábado, a partir de las 7:30, el trío La Garrapatea y César Bencid ofrecen un café concert que incluye performance, jazz y lectura del tarot para los valientes que se atrevan a escudriñar los designios de la fortuna. Calle Pedroza, La Florida. Telf. 74.3646. FLANAGAN'S POP. Colorido e iluminado, parece un museo en honor del decadente rey del pop, el quinto Jackson. Banderas, barriles de cerveza y afiches rodean al barman que sirve bebidas en el aire. Jóvenes clones de Tommy Hillfiger rinden culto a los sandwichs de 40 centímetros. Centro comercial Paseó Las Mercedes, nivel Trasnocho. Telfs. 91.2990 y 993.2341. GALENO'S. Algunas maquinitas, mesas para la carambola, horno de leña, pizzas, tacos, sandwichs y cerveza, todo en un mismo lugar, amplio y para toda hora. Abierto desde la mañana. Público familiar, juvenil y adulto. Centro comercial La Trinidad.
GITANERIAS. Abierto de lunes a lunes, el mas jondo de los cantos en vivo irrumpe cualquier día desde las cinco de la tarde con palmas, castañuelas y flamenco. Av. Francisco de Miranda, Centro Lido, nivel Galería, El Rosal. Telfs. 953.0354 y 953.5860. O GREENWICH PUB. Las dimensiones del local justifican su ambiente de intimidad. Una barra y varias mesitas de madera completan la apariencia de libre decoración. Abierto de cinco de la tarde a tres de la mañana, presenta de martes a sábado grupos de cuerpo presente. Primera avenida, Edif. Marvin, Altamira Sur. Telf. 267.1760. HOOLIHANS. Pantallas de TV, música de fondo —los jueves en El Hatillo se presentan bandas de jazz en vivo—; viernes y sábados, comida tex-mex en ambas direcciones. Calle El Progreso, centro La Paz, El Hatillo. Telf. 963.7945. CCCT, entre niveles Cl y C2 de la primera etapa, Chuao. Telfs. 959.36.08/0945. O JUAN SEBASTIAN BAR. Atmósfera de elegancia ejecutiva a media luz y las mejores bandas de jazz a
partir de las cinco de la tarde. Av. Venezuela N° 34, El Rosal. Telfs. 951.5575 y 951.0595. KONG KEY. Arrinconado en el mero epicentro de las bajas pasiones urbanas, uno de los más auténticos exponentes de la cocina china local se deja seducir por los misterios de la luna. Noches de kareoke sino-venezolano. Av. Prolongación Sur, Las Acacias, Sabana Grande. Telfs. 782.5610 y 793.1446. LA CANTINA. Es definitivamente el botiquín que faltaba. Un lugar donde la salsa brava, el vallenato y la cumbia son reyes, y en el que bailar es un placer cuando la multitud lo permite. Aguardiente colombiano y cerveza, otros dos aciertos. Promete- imponerse entre los jóvenes y también entre los que no lo son tanto. Calle Madrid, entre Veracruz y Caroní, Las Mercedes. Telfs. 993.3520 y 91.3527. O LA FRASCA DE TOLEDO. Tablao flamenco atendido por españoles de pura cepa pero frecuentado por nativos de todo orden. En este centro nocturno con acento gitano el cante jondo seduce con su brío, que no
vivo todos los días. Av. colás Copérnico (al lado Mr. Ribs), Las Mercede Telf. 91.6679. O LE CLUB. Discoteca donde se dan cita desde los años sesenta los miembros de la high society caraqueña. Club privado de estilo inglés. Sótano del centro comercial Chacaíto, local N° 4. Telfs. 952.0807 y 952.0861. MR. RIBS. Bajo la premisa sugerida por el nombre —Señor Costillas, in english, please!—, este local ha cedido su postura de restaurante carnívoro a la combinación de bar, pool y menú made in USA. Se presta para veladas informales en una ciudad tan olorosa a pólvora como el Lejano Oeste. Sonido en vivo. Av. Valle Arriba, Qta. Linda, Las Mercedes. Telf. 993.3125. MIMOS. A pesar de los cuatro ambientes, la comida internacional, las bebidas, Green Day, Pink Floyd, Bob Marley y la música en vivo, la indiferencia del público profetiza una inminente decadencia. Calle New York, entre París y Madrid, Las Mercedes. Telf. 91.4436. MLXXX. Fachada y columnas de inspiración griega —absoluta oda al kischt— maquillan la poco atractiva cara del antiguo Soho. Se mantiene lleno de bote en bote. El portero, amo y señor del acceso, elige a los dignos visitantes. Av. Francisco de Miranda, centro Lido, nivel Feria, El Rosal. Telfs. 953.6614/6731. PATATIN ORNE. Carrusel musical de tres generaciones. Cocina texmex. Centro comercial Los Chaguaramos. Telfs. 662.5085 y 293.2004. PEPPINO'S. Carambola con olor a pizza. Calle Madrid con calle New York, Las Mercedes. Telf. 993.0493.
JULIO 1996
EXCESO
75
`,1
IZZ JAll. Acertada combinación 1de saxo con tomate y mozzar4l1a. Para noctámbulos que defi den el derecho al descanso. Ca 1 I El Progreso, Minicentro, I tillo. Telf. 963.4753. REPUBLICA DE ROCKATANGA. Pasinclinación cosmopolita en a ciudad de los pool & bar. A libre albedrío, una muchachada de edades diversas se deja sacudir por la música que oscila entre buena y superior. Para oídos acostumbrados al estruendo de guitarras eléctricas y baterías. Av. Venezuela, El Rosal. Telf. 951.4264. ROUGE. Los que circundan los 30 abriles lo prefieren para el trago y la charla a buen volumen. Barra clásica en el segundo nivel. Calle Monterrey, entre California y Orinoco, Las Mercedes. Telf. 993.7472. SEASONS CLUB. Servicio especial para agasajos particulares. En las veladas de rutina, el pálpito latino de Son Collage y el trío Los Naipes. Adultos con ganas de pachanga. Club privado. Av. Venezuela, Torre Cremerca, nivel planta baja, El Rosal. Telfs. 951.1623 y 951.1465. 9 SHOUTERS. Una decoración cuidadosamente descuidada define a este informal recinto. Con todo a media luz, los perseguidores de buena música se dan cita por un trago. Rockeros, changosos y demás estereotipos tienen cabida en la 1' avenida, Altamira Sur con Av. Libertador, Qta. Valentina N° 4-3. Telf. 261.5114. TABACO BAR. Los niños bien de las zonas adyacentes lo han hecho su preferido. Holgado patio, con sus corredores propone una amplia gama de usos, entre los cuales destaca la tónica copa de medianoche. Eventualmente amenizan la velada bandas de blues y jazz. Calle Comercio N° 15 (al lado de la plaza Sucre), El Hatillo. Telfs. 963.4377 y 961.1515. O TAMBO. Dos pisos, dos barras, pintoresco menú nipo-peruano y un amplio perímetro para zarandear el cuerpo hasta entra-
76
EXCESO
JULIO 1996
das horas de la madrugada. La pauta en el ritmo provee un muy ecléctico popurrí de tendencias que van desde merengue hasta tecnotribal, pasando por viejos temas funk y los clásicos del disco music. Muy concurrido los jueves de show travesti. Av. Francisco de Miranda, Torre Europa, local 3, Chacao. Telfs. 952.5626/7026/ 7190/4243/6995. TEQUILA SUNRISE. Mesas de pool, pantallas de TV con animación musical —de no muy buena selección— y barra central. Muy mexicano en el flanco de los espirituosos. Av. La Trinidad, Las Mercedes. Telf. 91.9998. 4 TOONES. Adhiriendo a un sistema inusual en Caracas, abre sus puertas de martes a domingo para los que gozan de 21 primaveras. Las paredes plagadas de cartoons prometen amaneceres de comiquita. Av. Principal, entre calles Monterrey y Mucuchíes, Las Mercedes. Telfs. 993.8233 y 993.5544. WEEKENDS.
Sports and games bar
acota en neones el letrero que anuncia el paradero. Lo prueban mesas de pool, dardos, backgammon, ajedrez, futbolito y monopolio. El menú combina charros y gringos, y la cocina permanece activa desde el mediodía hasta la medianoche. Los fines de semana, abierto hasta las dos de la mañana. Av. San Juan Bosco con 2' transversal, Altamira. Telfs. 261.4863/3839. LuMNORIA'S FAMILY. Abierto desde las diez de la mañana, ofrece una alternativa a los menores de edad aficionados a las carambolas. Una barra de chucherías y refrescos para calmar el apetito y la sed. Los fines de semana son familiares y tres horas salen por el costo de dos. Calle La Trinidad, centro comercial Vizcaya, nivel 3, local 49-A, Salita Paula. Telf. 985.4850. ZEPPELIN. Alcohol free para una muchachada sin edad legal que lo abarrota. Un gran pasillo guía hacia el área de las mesas de pool al ritmo de buena música. Punto
flaco: la ubicación. Av. Rómulo Gallegos, entre avenidas El Carmen y Montecristo, Los Dos Caminos.
VER, OIR, APRENDER (Programación sujeta a cambios)
Mtitel ARS FORUM.
hierro soldado, oxidado y pintado de Lihie Talmor en La creatividad del mar. Sala 16. Hasta finales de mes. Esculturas 19681994 de Marisol Escobar en las salas 5 a 8. Hasta principios de septiembre. Esculturas 19841995 de Richard Deacon en la sala 1. Hasta comienzos del mes. El problema ecológico desde la perspectiva artística en Un marco por la tierra. Sala 9. Hasta finales de agosto. MAVAO. El paisaje en la colec-
ción, todo el mes. A caballo. Colectiva
de pinturas y dibujos sobre papel de Emilia de Azcárate, Ricardo Benaím, Aurora Lario y Carlos
MUSEO DE BELLAS ARTES. Naturaleza muerta: modos de vivir de la pintura. Hasta agosto.
MUSEO SACRO. Individual de Edwin Villasmil, desde el 12, en la CENTRO CULTURAL CONSOLIDADO. sala de conferencias. Exposición Nueva pintura de Estados Uni- fotográfica Jerusalén, corazón de dos. Identidad de actualidad. En la tierra de Israel, de J.J. Castro. el hall, desde el 25. Hasta el 28. COLECCIONARTE. Pinturas de CarSALA CADAFE. Europa y Venezuelos Jimeno. Hasta el 11. la: vínculo cerámico, hasta sepD'MUSEO. Mitos, talismanes y tiembre. deurgos. Todo el mes. SALA IPOSTEL. Exposición itineGALERIA LA FLORIDA. Plástica ar- rante Confluencias con obras de gentina. Intercambio con Buenos Von Dangel, Bárbaro Rivas, PanAires, hasta el 21. cho Quillici, Gloria Flallo, Mario GALERIA LEO BLASINI. Colectiva 96, Abreu, Jesús Soto y Cruz Diez. con María Elisa Castro, Ana Ma- Hasta agosto. El metro protagoría Mazzei, Luis Villamizar y Luis niza Corazones sagrados, de SerPoleo, entre otros. Desde el 7 de gio Rangel. Hasta septiembre. julio hasta el 8 de septiembre. SALA MENDOZA. Ramplug. ProdiGAN. Juan Pedro López. Maestro seño, en las salas 1 y 2. Y la expintor, escultor y dorador (1724- posición Taller infantil en la sala 1787). Salas 1 a la 6. Todo el 3 desde el 7 de julio. mes. Confrontaciones y analo- SASSON. Pinturas de Alejandro gías: Tierra incógnita, de Ferdi- Bello; Gerardo García con pinnand Bellerman y Claudio Perna. turas y ensamblajes, y Tulio Díaz Sala 7. Hasta el 14. El dibujo del con pinturas y esculturas. Hasta siglo XX. Una selección en la sala el 14. 7. Colección Armando Reverón en las salas 8 y 9. Tovar, Rojas y MUSICA Michelena. Maestros del siglo ALBERTO NARANJO. Y su cuarteto, en XIX, en las salas 10 y 11. Arte y el marco del Ciclo de jazz por los movimientos extranjeros del si50 años del Centro Venezolanoglo XIX. Todo el mes. La mues- Americano. Las Mercedes. En la tra permanente Petroglifos del biblioteca, a las 7:00 pm, el 25. Guri en el jardín interno. ANDRES BRICEÑO Y SU GRUPO. En el GRUPO LI. Colectiva de artistas marco del Ciclo de jazz por los contemporáneos, hasta septiem- 50 años del Centro Venezolanobre. Americano. Las Mercedes. En la MACCSI. Doce obras de mediano biblioteca, a las 7:00 pm, el 11. y gran formato en fotograbado, FESTIVAL CARIBE. Concierto el 7 a
Sosa. Hasta el 21.
las 4:00 pm, en el Museo Sacro. KEITH KARABELL. Y su cuarteto de saxofones en el marco del Ciclo de jazz por los 50 años del Centro Venezolano-Americano. Las Mercedes. En la biblioteca, a las 7:00 pm, el 18. ORQUESTA DE CAMARA. En el Festival Caribe, el 13 a las 4:00 pm. Museo Sacro. QUIBURE. Concierto el 14 a las 11:00 am, en el Museo Sacro.
finales de mes. Contradanza. Telf. 577.5993. CURSOS DE ARTE. Dictados por la profesora María de los Angeles Taberna, los miércoles de 10:00 am a 12:00 m. Galería Leo Blasini. Telfs. 731.0443 y 731.0532. DISCOGRAFIA BASICA. En el marco del Ciclo de conferencias de jazz
Castillete. Fundación Museo Armarido Reverón. LIBROS ARTESANALES. Conocimientos básicos en la producción del papel. Tres sábados. Costo: 3.000 bolívares. Fundación Museo Armando Reverón.
Los SEFARDITAS Y SU APORTE. Con-
ferencia, el 10 a las 4:00 pm, en
vida a un detective negro qu se ve involucrado en enredos de i men y mafia. Una misteriosa ujer, Daphne Monet, lo condu por vericuetos de los que sale :ileso. Un argumento profundame e social lleno de violencia y acci que se ubica al finalizar la Se Guerra Mundial. Estreno FLIPPER. El delfín más famoso de la televisión salta a la pantalla grande para divertir al público infantil. Desde el 17. LA TETA Y LA LUNA.
Obra de Lan ford Wilson. Sala Ho racio Peterson del Ate neo de Caracas, a las 7:00 pm, del 3 al 28. BURLA TICS.
FRANKIE JOHNNY EN EL CLAIRE DE LUNE. Pieza de Terrence Macnally. Sa la de conciertos del Cen tro Cultural Consoli dado, a las 7:30, todos los días hasta el 14. LA ESTRELLA Y SUS INVITADOS. Estrena Golpes y estrellas, de Javier Vi
dal, con el grupo Theja. Todo julio. Teatro Alberto de Paz y Mateos.
Los
paisajes de Cataluña sirven de marco a la historia de la teta de Estrellita, contada por el niño Tete. Intentos de suicidio, flamenco e impotencia sexual colman de divertidos sucesos esta cinta dirigida por Bigas Lunas. El 22, en el cine La Previsora. MARTES PARA CINEFILOS.
El lado oscuro del corazón, de Eliseo Subiela; Refugio para el ;Las
esculturas
CONNRENCIAS, EVENTO TALLERES Y SEMINARIOS ACERCAMIENTO AL JAll. En el marco de Ciclo de conferencias de jazz por los 50 años del Centro Venezolano-Americano, a cargo de Alberto Naranjo, con la proyección del video Jazz on a summer day. En el auditorio del Centro Cultural Consolidado, el 9, a las 6:00 pm. ARTE LATINOAMERICANO. Curso para 25 personas los martes de 5:30 a 7:30. Costo: 9.500 bolívares. Hasta el 16. Galería Muci. ARTESANIA DE LA TAPARA. Taller para mayores de 14 años. Miércoles, jueves y viernes de 2:00 a 5:00 pm. Costo: 2.500 bolívares. Culmina el 4. Fundación Museo Armando Reverón. CONTACTO CORPORAL. Taller para adultos. Martes y jueves hasta
de Marisol Escobar en el Maccsi
por los SO años del Centro Venezolano-Americano. A cargo de Ciro García y con la proyección del video El saxofón en el jazz. Auditorio del Centro Cultural Consolidado, el 2, a las 6:00 pm. EXPRESION ARTISTICA. Cuatro sesiones dirigidas al desarrollo de las habilidades y destrezas manuales de niños y jóvenes entre 10 y 16 años. Los sábados, de 8:00 am a 5:00 pm. Costo: 3.000 bolívares. Fundación Museo Armando Reverón. EXPRESION CORPORAL. Para personas que trabajan con niños. Cuatro niveles. Todos los martes, de 5:00 a 7:00 pm. Contradanza. Telf. 577.5993. LAS MASCARAS EN EL ARTE POPULAR.
Charla de Manuel Antonio Ortiz, el 25 a las 6:00 pm, en el salón audiovisual, edificio anexo al
el Museo Sacro. Dirigido a adolescentes entre 12 y 14 años. Martes y jueves. Teatro Nacional Juvenil. Telf. 577.5993. TALLERES INFANTILES MIXTOS. Trabajo y expresión del cuerpo. Para niños de todas las edades. Lunes y miércoles hasta el 25. Contradanza. Telf. 577.5993. TALLER DE TEATRO.
CICLO DE PELICULAS INFANTILES. En
inglés. Aladdin el 6 y Casper el 13. Auditorio del Centró Cultural Consolidado, a las 11:00 am. DRACULA. Amor y muerte actualizan la vieja leyenda romántica del vampiro, con Leslie Nielsen, bajo la dirección de Mel Brooks. Estreno el 3. EL DEMONIO VESTIDO DE AZUL. El atractivo Denzel Washington le da
amor, de Bernardo Bertolucci; Hasta el fin del mundo, de Wim Wenders; El expreso de la muerte, de Andrei Konchalovsky, y Nosferatu, el vampiro, de Werner Herzog. Desde el martes 2 y hasta el 30. Cine La Previsora. MAS ALLA DE LAS NUBES. Cuatro relatos conforman este filme de Michelangelo Antonioni: Historia
de un amor que nunca existió, La muchacha, el crimen, Este cuerpo de fango y No me busques. Un poco más de hora y media para celebrar, con prólogo, intermedio y epílogo, el retorno de Antonioni después de una década de
ausencia. El 24, en La Previsora. Un arrasador tornado visita Oklahoma. Dos científicos siguen la pista de las catástrofes que éste deja a su paso. Promete mucha acción. En cartelera desde el 24.
TWISTER.
JULIO 1996 EXCESO
77
PUNTOS DE AMBIENTE El público gay adinerado ha hecho suyo éste, uno de los mejores locales de la ciudad. Parejas muy homogéneas se acoplan a los esplendores de la música de los noventa. Sillas y mesas hablan de actualidad, y la barra se luce con fornidas musculaturas que atienden en franelilla los deseos de una concurrencia sin edad. La clientela estable corrobora su fidelidad con membresía de carnet y el resto de los cazadores de la noche festiva desembolsa 2.500 bolívares a la entrada. Discoteca que dejó entrever la movida de una gran metrópolis. Calle París con calle Trinidad, Las Mercedes. Telf. 993.0316. A MI MANERA. Temporalmente cerrado por remodelación, suele concentrar un público de ambos sexos con inclinaciones bien definidas y bolsillo lleno. Menos chic que clandestino. Gente de alto coturno también lo frecuenta. Calle New York, Las Mercedes. El teléfono es confidencial. EL MANI ES ASI. Santuario de la bohemia bailadora, atrae a hombres y mujeres solos en busca de acompañante, a menudo del mismo bando. Todo a ritmo de salsa y regado con cerveza. Mientras más tarde, menos selecto. Calle El Cristo, Av. Francisco Solano, Las Delicias, Sabana Grande. Telfs. 71.0523 y 71.6671. LA TORTILLA. A pesar del nombre, esta tasca típica vive abarrotada de hombres, aunque no de machos propiamente. Clase media y alta la honran sumiéndose en las exuberancias del alcohol y la música popular. Calle El Colegio, Sabana Grande. El teléfono es confidencial. NOVENTA GRADOS. Atento a la demanda de la juventud caprichosa, opera en el mismo local de 1900 My Way, bajo otro nombre. Aunque no es un lugar de inequívoca vocación gay, la tolerancia es de ACERO.
7ó
EXCESO JULIO 1996
rigor con quienes así identificados merodean en su interior los fines de semana. CCCT, nivel C2, Chuao. Telf. 959.0937. TAMBO. Los jueves son de espectáculos travestis que atraen, amén de habitués, a una selecta clientela homosexual dispuesta a divertirse sin inhibiciones. Av. Francisco de Miranda, Torre Europa, planta baja. Telfs. 952.5626 y 952.7190 THE OTHER SIDE. Féminas de todo tipo rodean el espléndido show de la Lupe que, con voz jadeante y excesivo maquillaje, da fe del cosmopolitismo de la ciudad que no duerme. Sin la más mínima sonrisa, la jarana parece pasmada en la sórdida escena de alguna vieja película underground. Un dejo de impenetrable soledad se percibe entre los bombillos del decadente escenario, por lo demás atractivo. Av. Humboldt, Bello Monte. El teléfono es confidencial. THE PUNCH. Un público afectado, partidario del amor entre personas del mismo sexo, se codea aquí con personajes pintorescos del submundo homosexual. Pelucas, uñas postizas y tacones desfilan en un anacrónico viaje a la moda de los setenta. Cómplices penumbras. Av. Casanova, centro comercial Cedíaz, nivel estacionamiento, Sabana Grande. Telfs. 761.8185/3862. TYFANNYS. Formidable ambiente de juerga para entregarse a plenitud y sin distingos al contoneo bajo las intermitencias lumínicas y al ritmo contagioso de la música. Unas amplias escaleras permiten descender al encuentro con la quintaesencia de la nocturnidad. Gente bella que no mide sexo o color para dar rienda suelta a la diversión espontánea, tan ajena en los sitios de moda straight. Edif. Teatro Altamira, local 2A, prolongación Altamira Sur. Telf. 266.6371. be ZAG. Arrabal abajo, este local aviva los encantos del conticinio. Por lo demás, de noche y en domingos, es la única opción exclusivamente masculina. Edif. La Línea, Av. Libertador. El teléfono es confidenciaLIA JULIO 1996 EXCESO
79
El mundo desechable Gabriel Jiménez Emán
lega un momento en la vida de cada quien en que éste desea preservar las cosas materiales que le rodean. Ignoro la razón precisa de esto, pero pudiera ser porque le vamos imprimiendo a esas cosas una carga afectiva, y porque los objetos de antes casi siempre están mejor hechos o son más duraderos. Los flamantes objetos de hoy pasan de una vez a ser modernos —pertenecen a esa modernidad que se autodevora en nombre de la moda— pero están hechos de materiales endebles. Su manufactura seriada no les permite mayor durabilidad, y esto cuenta tanto para un mueble como para un automóvil. Ningún aparato, máquina o utensilio está hecho para durar, tiene un tiempo de vida muy limitado, y en ello radica el sentido de su consumo: que en un lapso muy corto expire para ser reparado o sustituido, lo cual va a asegurarle a cada empresa la compra de repuestos y nuevos accesorios. La publicidad está dirigida esencialmente a este consumo, a crear la ilusión de novedad y a la excitación de poseerla. El prestigio de las marcas se ha construido sobre la base de inversiones publicitarias; más que objetos, compramos marcas, y así creemos prestigiar nuestra vida
L
80
EXCESO JULIO 1996
material, aunque a veces no encontremos una forma sencilla de reparar los artefactos, y cuando hemos hallado al técnico ideal, éste dice que el aparato ya no tiene arreglo, que más vale comprar uno nuevo. Desde hace algún tiempo sufro de un nuevo síndrome: el del reciclaje, el de arreglar, reparar o cuidar los escasos objetos que me rodean. Y no tanto por la imposibilidad de adquirir unos nuevos, sino porque los viejos me parecen mejores. Obtengo un secreto placer al ver reparado mi nuevo objeto viejo, con lo cual me siento algo así como un artesano, y en un caso extremo, que formo parte de algún movimiento ecológico mundial. Esto probablemente quiera decir que me estoy haciendo viejo, pues veo que los jóvenes son maestros del consumo rápido, seres para
quienes el mundo cambia a una velocidad vertiginosa. Cuando un adolescente devora, estoy casi convencido de que carece de gusto pues sólo distingue el salado del dulce y el ácido del quemado, pero no puede apreciar las mezclas de los sabores, hechas para los paladares curtidos. Por suerte, el gusto de
algunos adultos ha podido adaptarse a las exigencias del paladar contemporáneo, uno de los escasos refugios reciclables que nos hacen sentir que aún estamos vivos. En cuanto a algunos objetos, admito que suspiro por los automóviles de los años cincuenta; mas no tanto para conducirlos, sino por verlos y acariciarlos como a fetiches. No me atrae para nada meterme en una cola caraqueña en uno de ellos, soportar insultos e ir frenando a cada momento, resistiendo la tranca de ésta o aquella avenida. Preferiría conducir uno de estos viejos autos (ah, un Packard) por un boulevard cerca del mar. Y como no tengo la oportunidad de hacerlo, tendré que conformarme con crear mi propio personaje de novela. Los venezolanos fuimos, hace pocos años, consumidores compulsivos de marcas nuevas, cambiábamos de auto como de camisa. Y ahora ni de camisa podemos hacerlo con tanta frecuencia. La catástrofe económica se nos ha venido encima, y hemos tenido que cambiar necesariamente de hábitos consumistas. No me involucro en los hábitos personales de nadie (mucho menos en los de la clase media llamada alta, ya en franca extinción), pero me temo que los venezolanos hemos llegado a un punto en que ya no podemos darnos esos lujos de adquisición compulsiva creados por la publicidad —los cuales generan a menudo necesidades ficticias— y entonces probablemente optemos por reciclar algunas de las cosas que nos han sido fieles a través de los años. Habrá, incluso, quienes reciclen a sus esposas o esposos a través de dietas, ejercicios o actitudes positivas, ante lo costoso que resulta hoy mantener, solvente y feliz, a un(a) amante. L.2
De la academia Frank Baíz Quevedo
E
ntre las creaciones paradójicas de nuestra civilización ocupan un lugar destacado aquellas que tienen como finalidad conservar algunos de los frutos más preciados de la vida, destruyéndolos. Hay una suerte de plusvalía irrecuperable en la espontaneidad, de valor agregado en la vida misma, que se disipa a medida que cada día nos morimos poco a poco y que nunca permanece en las fotografías de cumpleaños, en los versos que escribimos o en los lienzos que legamos a las generaciones venideras. Los museos, los hospitales, las bibliotecas, conservan el retrato de una energía paralela que los excede, son a la vez el testimonio vital de la existencia humana y también el indicio de un rebasamiento inalcanzable. La vida no se dice, se vive y, sobre todo, jamás se almacena. Y eso que pasa con la vida en general, acaece más que nada —como lo decía no sin un dejo de amargura el novelista inglés Edward Morgan Forster— en las universidades: suerte de inmensos inevitables congeladores del conocimiento, cuya función, entre otras, es su aniquilamiento. No hay nada como la universidad para denunciar el vacío que en una sociedad representa la ignorancia absoluta. No hay nada como la universidad, por otra parte, para constituirse en peso muerto, en resistencia organizada, en andamiaje obstructor de lo vivo en el conocimiento. Thomas Kuhn ya lo dijo en 1970 en su Estructura de las revoluciones científicas: cada empellón científico desemboca en su sacralización, en la constitución apremiante de una estructura in-
móvil y prácticamente reaccionaria, que no quiere seguir cambiando las cosas (hasta que un desadaptado como Albert Einstein logra dar el impulso siguiente y, en consecuencia, conduce a la próxima sacralización). Y esa labor fuertemente sacralizadora y activamente reaccionaria tiene lugar, en considerable medida, en el seno de las universidades. Hay una figura particular de funcionamiento a través de la cual las instituciones educativas ejecutan su labor conservadora (en el sentido doblemente resguardador y frigorífico): el llamado hacer académico, mecanismo en gran medida burocrático que media entre el saber que circula institucionalmente y su supuesto valor de cambio. El quehacer académico es el reino de los pseudo-scholars, cuya existencia, según descripción del mismo Forster, a quien se debe lo desconsiderado del término, "constituye
condición de que ese conocimiento se regule y se controle prontamente y, sobre todo, se asimile y se coloque en el justo medio del quehacer académico. De allí hasta los mecanismos más finos de conservación y desmenuzamiento de lo vivo y lo subversivo que hay en todo conocimiento; de allí hasta la repetición y la sacralización en los papers y hasta la obviedad garantizada en los trabajos de ascenso; de allí hasta el territorio seguro de la verdad entendida como refugio en los nombres de los consagrados; de allí hasta la máxima seguridad que otorga la mediocridad constituyente de lo académico. Por fortuna, para que se den estas paradojas, existen los locos y los genios; los hombres que se empinan en los bufetes o en los garajes o en las universidades y que desde la duda —única garante de ese chispazo de sagrada desconfianza que constituye el verdadero conocimiento— logran
un homenaje que la ignorancia rinde al conocimiento". Los profesores, los académicos, los pseudo-scholars (que todos podemos ser, de lo más orgullosos) son seres que viven para y por el conocimiento, como quien vive por una mercancía: la resguardan, la almacenan, la intercambian y nunca la cuestionan. Así, entonces, en las universidades, se propicia y se cultiva el conocimiento a
sacudir la modorra de los que dormitan en el saber universitario. A ellos, irónicamente, se consagran las universidades: a los irreverentes como Freud, como Lacan, como Einstein, como Bateson, como tantos otros cuyo trámite con el conocimiento constituiría, bien mirado, un ejercicio demasiado libre y demasiado arriesgado como para ser comprendido de entrada por los académicos. JULIO 1996 EXCESO
81
Antonio Lauro (o la totalidad de un ser humano que afortunadamente fue músico) Mariela Pérez Loreto
E
sperábamos este libro con sosegada paciencia, no porque existieran dudas sobre su publicación: el problema era el quién o quiénes, el cómo y, sobre todo, el cuándo se plasmaría en el papel impreso la atendida obra. Tenemos al fin en nuestras manos un ejemplar de Antonio Lauro, un músico total, la primera biografía del gran guitarrista y compositor. Ambiciosa en contenido y extensión, esta biografía, cuyo núcleo está conformado por diversas entrevistas al propio Lauro —el testimonio veraz y a la vez subjetivo del hombre que se retrata—, se nos presenta fuertemente apoyada por una rica iconografía (casi podríamos hablar de una biografíaiconografía) y por los testimonios de otros contemporáneos del maestro. Así mismo, el autor nos regala el marco histórico-cultural que su formación y documentación le permiten. Y es en la mezcla de estos elementos en donde se nos manifiesta la atractiva alquimia de este trabajo: et objeto de la obra, el hombre y el creador, con todo su candor y magia, y el autor, Alejandro Bruzual, con su consistente metodología y versátil formación profesional. Bruzual es poeta y guitarrista, y cuenta dentro de sus estudios académicos la licenciatura en Letras y estudios de Economía. Esta diversidad de su quehacer intelectual añade sustancia a la obra para hacer de ella un trabajo de magnas proporciones. El amplio espectro de información que puede manejar, y maneja, un autor del alcance de Bruzual es inmenso 82
EXCESO JULIO 1996
y de profunda consistencia. Descubrimos, a través del narrador omnisciente —de acuerdo con la terminología de Norman Friedman y con la metodológica selección dada por Bruzual—, a un Lauro claro en sú perspectiva, que fue allanando dificultades basándose en el sentido común, el talento y el trabajo. Las obligaciones familiares que se le impusieron desde muy joven, por ser el único varón de una familia cuyo padre murió tempranamente —Lauro contaba apenas cuatro años entonces—, lo llevaron a elaborar una visión práctica de su profesión: el sincero amor por la música tenía que ser productivo para poder cumplir con el aporte económico que debía dar a su madre. Lauro se nos presenta, en sus propios comentarios, como un luchador por su desti-
La formación de Lauro tiene tres aspectos que pueden dar una clave de la universalidad de su música. Durante su infancia, la presencia del padre, quien poseía una hermosa voz, nos brinda la imagen de una casa en donde frecuentemente se escuchaban arias de ópera, zarzuelas y en general todo lo relacionado con el canto lírico. El padre de Lauro era de origen italiano, y éste es el bagaje cultural que conforma su primera influencia musical. Luego hay que tomar en consideración la influencia del entorno. La banda de Ciudad Bolívar era parte importante de la vida de la pequeña ciudad. Con su repertorio de valses y pasodobles, así como las melodías populares y el ritmo del folklore guayanés que surgirían de las reuniones dominicales, impregnan a Lauro del sonido de su región natal. Después será Caracas, y el deseo de hacer música por sí mismo —cantar, tocar, componer—, lo que finalmente lo llevará a entrar en contacto con José Lorenzo Llamozas, Raúl Borges y Vicente Emilio Sojo. Buscando al hombre entre sus comentarios, encontramos que su exitosa vida siempre estuvo rodeada como por un halo mágico que lo conduce a tener fe en el propio talento creador. Por ejemplo, la forma como llega al instrumento dentro de cuyo ámbito se hará maestro, la guitarra. Fue con la venida de Mangoré. Un día, así como por casualidad, escuchó una audición radial del gran guitarrista, lo cual hizo que buscara una guitarra guardada y olvidada que había pertenecido a su padre y se inscribiera en la cátedra del maestro Raúl Borges. Lauro parece unirse a nosotros en el asombro de la revelación de su propia vida, en la sorpresa de la flor que se abre lentamente, sin prisa y sin conflictos y con la inefable presencia de la magia y el candor. Antonio Lauro, un músico total
no; un hombre que, a pesar de todas las vicisitudes, nunca dejó de tener fe en lo que una voz interior le revelaba era su sino: la música. Y a ella se dedicaría en forma absoluta.
es una publicación de Sidor. Un gran libro empastado y de fino papel —que lamentablemente no podremos colocar en la mesa de noche debido a su gran tamaño. En verdad, vale la pena manosearlo largamente y no perderse las fotografías. IA
1 Insólita Mineralogía Rafael Sylva Moreno
L
awrence Shields, un jovencito de diez años, tenía el hábito de recoger del piso todo lo que le llamaba la atención. Cierto día, a mediados de 1995 y mientras paseaba por los alrededores de una mina de carbón abandonada en Carolina del Norte, vio una piedra bastante sucia pero de forma curiosa, y como le pareció interesante se la echó al bolsillo. Una vez limpia y evaluada por un experto, resultó ser un zafiro en bruto de 1.061 kilates, cuyo precio estimado supera los 250 mil dólares. Por su parte, Anna Grayson, locutora radial oriunda de Inglaterra, si bien no era coleccionista de rocas, sintió curiosidad por la que vio en uno de los muchos mercados para turistas que existen en Tanger. Ella había viajado a Marruecos para disfrutar de unas vacaciones rodeada de paisajes y costumbres exóticas, sin imaginar que se toparía con un enigma que hasta el presente no ha podido ser descifrado. La piedra en cuestión era de color azuloso opaco y había sido burdamente tallada en forma de pirámide. Pensando que podía serle útil como pisapapeles, la llevó consigo a Londres y con el tiempo se olvidó de su existencia. A comienzos de abril de 1996, regresaba a su apartamento bastante tarde en la noche y, sin molestarse en encender las luces, se dirigía a su habitación cuando algo le llamó la atención. Era un resplandor fosforescente de color violeta que provenía de la gaveta semiabierta de un mueble de la biblioteca. Intrigada, comprobó que aquella luminosidad la generaba el pedazo de roca adquirido en Marruecos. Lo curioso del
asunto era que, a pesar de haberla adquirido en 1981, nunca antes había notado que fuese luminoactiva, por lo que decidió comentar el asunto con un geólogo amigo, al tiempo que le hacía la observación de que siempre había pensado que se trataba de lapislázuli. El especialista, tras examinar la roca, le manifestó que parecía ser más bien un raro mineral a base de cobre con incrustaciones de cuarzo. Una semana después, se comunicaría con ella para informarle que su primera estimación estaba errada y que consideraba necesario someter aquella piedra a otros exámenes de laboratorio para identificar su composición. Tras un año de análisis y experimentos, todo un equipo de ex pertos británicos aún no había logrado identificar el mineral y tampoco ocultaba su perplejidad ante las curiosas propiedades ópticas de sus cristales. Estos poseen una estructura fibrosa parecida a la del asbesto (variante del amianto) pero, observados a través de un microscopio con luz polarizada, dichos cristales generan un efecto caleidoscópico cuya policromía va del azul al rojo y al blanco. Algo que, según ellos, hasta ahora no ha sido observado en ningún mineral conocido. Igualmente extraño es el hecho de que su luminoactividad no es regular y constante sino más bien esporádica, sin que se haya podido establecer qué tipo de estímulo es el que provoca el fenómeno. La desconcertante roca —que, por cierto, no es radiactiva— provocó tal revuelo y curiosidad que, aparte de dar origen a toda suerte de comentarios acerca de un posible origen meteórico, comenzó a ser exhibida a partir de marzo de 1996 en el Museo de Historia Natural de Londres. Allí fue bautizada por los expertos con el apodo de kriptonita, en referencia, medio jocosa y medio en serio, a las ficticias rocas provenientes de Kripton, el planeta de Superman. Otro aspecto extraño del asunto es que el individuo que, a mediados de abril de 1981, vendió la rarísima piedra a la señora Grayson en Marruecos no pudo ser localizado y nadie supo dar razones de su identidad. No menos curioso es que todos los esfuerzos por hallar otros pedazos del mismo mineral en bazares de Tanger, Casablanca, Rabat o Marrakesh resultaron infructuosos. 12
No llore más ríase de la vida en
EXCESO una mirada distinta
Independencia libertad JULIO 19 , 6
EXCESO
83
Suscríbase a
EXCESO y disfrute
mes a mes de los más variados temas tratados siempre con la misma originalidad
Entre lo divino y lo profano (II) Vicente Folch
Tarifa anual Para suscriptores
Area metropolitana Bs. 4.800,00 Interior del país Bs. 5.400,00 Exterior: a definir de acuerdo al destino Seleccione su forma de pago
Efectivo
Cheque
NUMERO DE CHEQUE
Visa
Master
BANCO
NUMERO DE TARJETA
FECHA DE VENCIMIENTO
NOMBRE
DIRECCION
C.I.
TELEFONO
FIRMA
Editorial Exceso Gradillas a San Jacinto, Edif. Las Gradillas A Piso 3, Ofic. 33. Caracas, 1010. Venezuela Telfs. 81.7727/81.7724/862.7273 Fax (02) 74.4676/861.3375
L 84
.J EXCESO
JULIO 1996
a moda de Plutón entre los astrólogos llamados experimentales ha cedido un poco ante una nueva moda: la Quiromancia, que sugiere mitos y fantasías más alucinantes que las que se llegaron a lucubrar sobre Plutón. Quirón, en efecto, plantearía un nuevo problema: el de la naturaleza astrológica, y por tanto su domificación —que significa pertenencia a un signo del Zodiaco por afinidad. En ese signo las ondas del planeta y del fondo sideral se unen en franca empatía para producir un efecto mágico o de maestría. A partir de ese punto comenzaríamos a medir el principio de los ciclos y la revolución del planeta en el ciclo zodiacal y, por tanto, su influencia por sincronicidad con los hechos del mundo cotidiano, que fue llamado por los clásicos sublunar, es decir, el mundo de la Tierra y sus habitantes. Pero la presencia de Quirón desquiciaría un sistema de domificación o ubicación de los planetas en el cielo, que no sólo es astronómicamente perfecto sino que representa
una fuente de sabiduría extraordinaria que se perdería sin remedio si tratáramos de darle un trono o domicilio a cualquier pedazo de roca que flotara en el espacio alrededor del Sol. En tanto que ciencia acabada y perfecta, la Astrología no es experimental. Y los siete planetas tradicionales, que son además los únicos que se ven al ojo desnudo, están armonizados con el principio universal del número siete que revela la forma en que percibimos el Universo (siete colores, siete notas musicales, etcétera). En Astrosofía, el número siete indica tres planetas positivos que reflejan la trinidad masculina y tres planetas pasivos que reflejan la trinidad femenina, más un séptimo astro que es Mercurio, el cual es hermafrodita y es el principio de la inteligencia, la cual es tanto femenina como masculina. Se le han atribuido, de manera arbitraria, cualidades y esencias a estos planetas que ya existían en forma tradicional. No hay nada nuevo bajo el Sol. Hay que distinguir auténticos planetas de las rocas que flotan en el espacio, tan difícilmente perceptibles que apenas hoy los estamos detectando. Qué profunda incertidumbre la de los astrólogos experimentales que piensen en otros descubrimientos que puedan ocurrir mañana. El auténtico Universo experimental de la Astrología está, como en las profundidades del juego de ajedrez, en sus infinitas variables todavía no descubiertas, pero dentro de unas reglas de juego definidas y perfectamente claras. Hace falta, sin embargo, valor para enfrentar la verdad y amor al conocimiento, cualidades difíciles en el mundo moderno. La Astrología es divina. Los humanos, profanos. IL2
Julio Aries sideral (15 abril-15 mayo)
Leo sideral (17 agosto-17 Sept.)
Sagitario sideral (17 Dic.-15 enero)
El impulso brutal debe dejar paso a la se-
Tenga paciencia y dele un descanso a las
Este verano le traerá grandes cambios y
renidad. La brújula de las aspiraciones se
emociones. Pronto vivirá una nueva pa-
tendrá la oportunidad de aprovecharlos
mueve y la mente se ilumina con nuevos objetivos
sión que le hará vibrar de nuevo al son de su in-
siempre que cumpla con la propia ley a cabalidad.
por los cuales luchar. Medite bien antes de la em-
tensidad habitual.
Los viajes iluminarán su vida.
bestida. Virgo sideral (18 Sept.-17 octubre)
Capricornio sideral (16 enero-13 Feb.)
Tauro sideral (16 mayo-15 junio)
Su asombrosa capacidad de previsión le
Aproveche las oportunidades, porque
Momentos de lucidez perdurable en su
hace esperar ahora los apetecidos re-
éstas no se repiten, en el campo de las
testaruda cabeza le harán elegir el buen
sultados. Tendrá que dedicarle tiempo a la salud a
relaciones públicas y humanas. Su estrella brilla
camino para las inversiones. Le costará •omper con
través de nuevos esparcimientos. Tiempo de lu-
socialmente, cosa rara en su mundo de secretas
un ciclo improductivo que requiere de grandes es-
char por las aspiraciones familiares.
ambiciones que pasan por una fase pública.
fuerzos materiales, pero lo logrará con inteligencia. Libra sideral (18 octubre-17 Nov.) 14011"wair
Acuario sideral (14 Feb.-14 marzo)
Los éxitos profesionales dependen ahora
Dosifique la energía para no desfasarse
Le toca vivir con intensidad por un tiempo
de la familia genética y espiritual, pero se
en este cálido verano, que pudiera ser
corto pero muy productivo si sabe subir-
encuentra en excelente forma. Concrete las cosas
incluso ardiente en todos los sentidos. Saldrá a
antes que todo el mundo salga de vacaciones.
flote felizmente.
Géminis sideral (16 junio-16 julio)
se al tren más rápido. Sin embargo, la oportunidad viene más despacio para la velocidad de su mente. Cálmese. Cáncer sideral (17 julio-16 agosto)
Escorpio sideral (18 Nov.-16 Dic.)
Piscis sideral (15 marzo-14 abril)
Su poder personal está en auge, pero
Su romanticismo le hará caer en apa-
depende de que sea constante con las
sionados sueños de seducción que irán
Observará el fin de algunos ciclos de su
creencias espirituales. Despréndase de todo fac-
más alla de la imaginación. Un gran amor ronda su
vida, pero todo renacerá de una manera
tor del pasado que pueda interferir negativamente,
vida, pero tendrá que liberarse de todo.
asombrosa. Es tiempo de tomar energía para rea-
sobre todo a nivel psicológico.
lizar grandes logros.
Enfrente su futuro • • .bién Estudios astrológicos personalizados
Telfs. 265.1648 - 263.6439
asesorado. 1 ,11 1,,.•41 ►
\ •-•
11
4
1111 ► 1
•■
86
EXCESO
JULIO 1996
Nacida a la vera de la indolencia de los gobiernos de la madre Italia, la Honorable Sociedad penetró todos los estratos de la vida siciliana y se apoderó, con mano de hierro y guante de seda, de las instancias de poder. Pero pronto la isla habría de quedarle pequeña y junto con miles de paupérrimos inmigrantes que buscaban una mejor vida, los miembros de la hermandad secreta decidieron mudarse al Nuevo Mundo para hacer su América. Trepadora, inescrupulosa y violenta, la organización más poderosa en la historia del crimen hasta la aparición de los carteles de la droga se amamantó en los dominios del Tío Sam con el licor prohibido durante los locos años veinte, creciendo con inusitada fuerza. En un ambicioso viaje al centro del delito, La dinastía mafia, distribuida por Javier Vergara Editor S.A., relata el génesis y la caída de la familia Gambino, una de las más relevantes dentro del sangriento linaje
Se i ha zo Cogen' a
Cosa Nostra l folla H. Davis
JOSE IGNACIO HERRERA
1111.10 1996 EXCESO
87
l vasto cono violeta del Monte Vesubio domina la ciudad bres, que trabajaban el oscuro suelo volcánico como jornalede Nápoles, su resplandeciente bahía y una amplia exros, necesitaron casi un año para emerger. Entretanto, los viñedos estaban destruidos, los cultivos arruinados, los animales tensión de algunas de las tierras de cultivo más hermosas y fértiles de Italia, las llanuras de lo que los romanos dede las granjas asfixiados y muertos de hambre. La catástrofe nominaban la Campania Felix. no podía haber sobrevenido en un momento más inoportuno, Bajo la ladera occidental de esta masa majestuosa, que da al pues la región de la Campania estaba en el umbral de una gramar, se encontraban las ruinas de las antiguas ciudades de ve crisis económica provocada en parte por los gobiernos itaPompeya y Herculano, ambas sepultadas bajo una avalancha lianos, que infligían al Sur un descuido casi total. Después que de 20 metros de lava y ceniza volcánica en la erupción del año San Giuseppe Vesuviano emergió de su lluvia de ceniza volcá79 d.C. Al pie de la ladera oriental hay una serie de pequeñas nica, la situación económica del Mezzogiorno empeoró. El comunidades agrícolas: Somma Vesuviana, Ottaviano, San Giuseppe Offirappo era el representante local de la Camorra, Vesuviano, Sarno. Es un paisaje de el gobierno real y efectivo. intensa belleza natural, que se yuxtaRedactaba e imponía contratos a los campesinos pone a escenas de sordidez humana. Aquí y allá, salpicando esta belleza y comerciantes, prestaba dinero, aplicaba impuestos, luminosa y amplia, se levantan las protegía tiendas y granjas, arreglaba matrimonios, toscas chozas de los campesinos rodeadas por niños delgados y descalayudaba a tomar venganza sobre los violadores zos. Los cerdos y los perros hamy los que abandonaban a sus esposas. brientos, con sus costillas salientes y En general, vigilaba a la comunidad a la cual las patas ahusadas, escarban inútilmente entre las piedras. había sido asignado El Vesubio y las llanuras y pueblos cultivo principal de la región, las uvas con las cuales se circundantes han presenciado mucha historia. Sobre las laderas al norte del volcán, Espartaco, el rebelde esclavo tracio, fabricaba el famoso vino vesubiano Lachryma Christi, había sido destruido. No había trabajo ni perspectivas de trabajo. El derrotó a los romanos en el 71 a.C. En lo que hoy se denomina único modo de escapar de esa miseria era la emigración. La Ottaviano, en la parte occidental, en el año 27 a.C. nació el originada en Nápoles y la región de la Campania culminó emperador César Augusto. Dominando a Ottaviano, se eleva durante los años de 1890 a 1920, cuando millares y millares de un castillo que perteneció a la gran familia florentina de los italianos del sur huyeron a Italia septentrional, Suiza, Africa Médicis, cuando los grandes duques de Médicis eran patronos del norte, Suramérica y Estados Unidos, en uno de los mayores de Bronzino y Galileo. No lejos de Ottaviano y de su antigua posesión, San éxodos de un pueblo en la historia europea. Pero la pobreza en el sur de Italia no era imputable sólo a Giuseppe Vesuviano, está Sant'Agata de'Goti, una aldea cuyo las reducidas perspectivas económicas. Se manifestaba también nombre nos recuerda que los invasores teutónicos de Roma, la indiferencia casi total del naciente Estado frente a las calos godos, que ocuparon el imperio en el siglo V, se establerencias populares. La unificación de Italia en 1870 no había cieron en elevado número en esta zona después de su derrota contribuido mucho a mejorar la situación del crónico desgodefinitiva por los bizantinos, en el 555 de nuestra era. Eran bierno. A lo largo de diez siglos, Italia meridional y Sicilia haconocidos por el nombre de Goti. En los pueblos y las aldeas bían sido sometidas por potencias extranjeras despóticas. La que se levantan sobre las laderas del Vesubio, los apellidos fórmula de los Borbones para gobernar a las clases bajas de la Goti y Gotti son bastante usuales, y se conjetura que las fasociedad italiana meridional resumía la política social de todos milias que ostentan estos nombres en la actualidad pueden ser los conquistadores de la región. Era festa, farina e forca, litedescendientes lejanos de aquellos antiguos godos. ralmente fiesta, pan y patíbulo. Sea cual fuere el caso, en una de estas comunidades —San En la piazza principal de Nápoles, las inmensas estatuas de Giuseppe Vesuviano— nació y se crió el padre de John Gotti, conquistadores y opresores miran desde los nichos arqueados jefe de la Mafia de Gambino. Se llamaba John Joseph Gotti, y que se suceden a lo largo de la fachada roja pompeyana del tuvo la mala suerte de haber crecido y llegado a la virilidad en Palazzo Reale. Las antiguas cortes de los virreyes españoles y uno de los períodos más sombríos de esa región del mundo, los reyes Borbones, Roger II el Normando, Federico II de denominada Il Mezzogiorno, es decir, el Mediodía. En 1906, Hohenstaufen, Carlos de Anjou, Alfonso de Aragón, Carlos V cuando Gotti era un niño, el Vesubio despertó de un sueño de de España, José Bonaparte, Joaquín Murat y Víctor Manuel de 24 años y protagonizó una titánica erupción que casi sepultó a Saboya eran símbolos de diez siglos de indiferencia despótica San Giuseppe Vesuviano y las tierras de cultivo circundantes frente a las necesidades de la gente común. bajo una gruesa capa de ceniza volcánica. Para satisfacerlas, a principios del siglo XIX surgió en NáLos ciudadanos de esta población, la mayoría contadini po-
E
Colofón
88
EXCESO JULIO 1996
poles y sus alrededores una hermandad criminal secreta que se opuso directamente al Estado. Se la denominó la Camorra, por una palabra española que significa combate. Por la época en que John Joseph Gotti llegó a 14 edad adulta, entre 1915 y 1920, la Camorra se había convertido en un sottogoverno, un subgobierno en su propia región, más sensible a los problemas de los ciudadanos medios que la Iglesia o el Estado. No se sabe si John Joseph tuvo que ver con la Camorra; en todo caso, no pudo evitar cierto contacto con miembros de la hermandad, la cual ya había comenzado a infiltrarse en casi todos los sectores
La famosa serie Los Intocables revivió las andanzas de la mafia
de la vida comercial y política de la.comunidad. En la segunda década de este siglo, cierto personaje había llegado a aparecer en todas las piazzas de Nápoles y los pueblos circundantes de la Campania: el camorrista, conocido popularmente por el nombre de il guappo, forma dialectal napolitana por il capo. El era el representante local de la Camorra, el gobierno real y efectivo en una comunidad dada. Era quien redactaba e imponía el cumplimiento de los contratos a los campesinos y los comerciantes, prestaba dinero a la gente rechazada por los bancos, protegía tiendas y granjas, aplicaba impuestos a las loterías y a las subastas de ganado en las ferias, arreglaba los matrimonios de las madres solteras, ayudaba a tomar venganza sobre los violadores y los que abandonaban a las esposas, y en general vigilaba a la comunidad a la cual
había sido asignado. Figura conocida y a menudo ostentosa, il guappo casi siempre vestía un traje cruzado de tela oscura, de solapas anchas, con un pañuelo de vivos colores que asomaba por el bolsillo del pecho. Le agradaban las camisas de cuellos altos y almidonados y los puños llámativos. Llevaba los zapatos siempre muy lustrados y a menudo usaba un sombrero negro de fieltro de ala ancha. Se paseaba por la piazza con una actitud de fanfarronería y autoridad más acentuada que la de otros personajes del pueblo; más que el alcalde, que el jefe de policía, que el principal terrateniente, es decir, il barone. Las consecuencias sociales y económicas que eran el resultado de diez siglos de dominio extranjero también originaron una actitud general en el pueblo, una forma mentis, como les agrada decir a los italianos meridionales: la actitud de arraigada suspicacia frente al orden establecido, trátese del Estado, la Iglesia, la policía, el banco, los tribunales o los propietarios. Sono tutti una massa di ladri! ( ¡son todos una pandilla de ladrones!) era la afirmación constante de la gente. La autoridad constituida legalmente era un enemigo para el popolino, como solía denominarse a los estratos inferiores. Engañar y vencer al enemigo se convirtió en la reacción profunda y arraigada de la psiquis italiana meridional frente a todas las fuerzas existentes. No pasaría mucho tiempo antes que los camorristas imbuidos de esta mentalidad comenzaran a aparecer en los barrios de inmigrantes italianos de New York: Harlem Este, Brooklyn, la Pequeña Italia de Manhattan. // guappo estaba realizando su debut estadounidense. Para finales de la segunda década del siglo XX, New York se convertiría en la meca de millares y millares de italianos meridionales cuyos antepasados se habían visto excluidos del sistema durante siglos. Los nombres de Nuova York y Brukalin se tornarían símbolos de esperanza y fe y promesa no sólo para los campesinos oprimidos y los obreros afectados por la desocupación crónica sino para los camorristas, que veían la posibilidad de enriquecerse en Estados Unidos más de lo que jamás podrían conseguir paseándose por las piazzas del Mezzogiorno. En 1920 la situación económica y política italiana había degenerado en una anarquía virtual. La dura lucha de Italia contra Austria en la Primera Guerra Mundial había dejado muy empobrecido al tesoro de la nueva nación, y había costado a las familias italianas alrededor de 300 mil de sus hijos. Había disturbios por doquier. Las súbitas huelgas obreras paralizaban la industria. Los grupos de obreros y campesinos descontentos saqueaban las fábricas y las explotaciones rurales. En medio de ese desorden, Benito Mussolini, un joven veterano de guerra, formó el movimiento fascista y comenzó su lucha de dos años por el poder. Para John Joseph Gotti, quien entretanto se había casado con Fannie, la vida en San Giuseppe Vesuviano por la época en que Mussolini estaba reclutando a sus Camisas Negras era una empresa desesperada. No había trabajo, y el futuro previsible 1:2 JULIO 1996 EXCESO
89
no permitía suponer que las cosas podían llegar a mejorar. Los disocupati como él se reunían para quejarse, criticar al go-
defensa, incluso si se veía obligado a quitar la vida a otro hombre para alcanzar sus fines o defender su honor. Precisamente porque en Sicilia occidental prevaleció este código de comportamiento y el modo de vida que él representaba, las organizaciones criminales del siglo XIX pudieron arraigar con tanta rapidez y extensión. En definitiva, Sicilia occidental suministró a la Mafia un suelo social más fértil de lo que Nápoles y el Mezzogiorno ofrecieron a la Camorra. Carlo Gambino había crecido en un sector de Palermo a tal extremo dominado por la Mafia que se entendía que allí no
bierno y hablar de la posibilidad de emigrar a Estados Unidos. En New York necesitaban obreros. Allá construían ferrocarriles, túneles, puentes y altos edificios de apartamentos y oficinas. Allá un hombre podía ganar más dinero en un día de lo que obtenía durante un mes en San Giuseppe Vesuviano. En el verano de 1920, John Joseph y Fannie Gotti compraron pasajes con sus escasos ahorros, metieron todas sus posesiones en dos baúles, gritaron addio, arrivederci a una turba de llorosos parientes, fueron a Carlo Gambino había crecido en un sector Nápoles en un carro tirado por caballos, y abordaron un atestado dominado por la Mafia. En su infancia vapor con rumbo a New York.
Colofón
veía a los Hombres de Respeto con sus trajes caros recibiendo el homenaje de la gente. Un día, él sería un gran jefe, como don Vito Cascio Ferro, el legendario capo dei tutti capi, el jefe de todos los jefes, en su tiempo considerado el hombre más poderoso de Sicilia
M
ientras los Gotti de San Giuseppe Vesuviano viajaban a New York, un siciliano de 20 años llamado Carlo Gambino estaba trazando sus propios planes de fuga a Estados Unidos. La familia Gambino de Palermo y su principal aliado, el numeroso clan Castellano, de ningún modo eran tan pobres ni sufrían tanta opresión como los Gotti. Aunque no eran ricos, eran bastante prósperos y entre sus miembros había varios bien relacionados de la Honorable Sociedad. La Honorable Sociedad —o Mafia, como se la denominaba con menos frecuencia— era una gran hermandad criminal que se había formado en Palermo y Sicilia occidental al margen de la Camorra de Nápoles. Igual que aquélla, había surgido como reacción a siglos de desgobierno extranjero, incluso más despótico e insensible que todo lo que se había conocido en Nápoles e Italia meridional durante mil años. En 1920, la Mafia había llegado a dominar por completo la vida social, política y económica de la región. Lo que distinguió a la Mafia de la Camorra fue la rapidez de su avance y el grado en que penetró en la sociedad siciliana. Mientras la Camorra se desarrolló con relativa lentitud, y en el mejor de los casos había alcanzado una limitada influencia en Italia meridional —quizá porque ésta era mucho más extensa—, la Honorable Sociedad aprovechó el vacío político que siguió a la liberación de Sicilia, promovida por el líder guerrillero Garibaldi, quien desplazó a los Borbones en 1860. Así, se adueñó tan rápidamente del poder que para 1900 de hecho controlaba todo el tercio occidental de la isla. La primera vez que la palabra mafia comenzó a aparecer en el italiano escrito, a fines del siglo XVIII, fue con el carácter de un término descriptivo, quizá de origen árabe, que significa belleza o excelencia, con matices alusivos a la apostura y el coraje viriles. Durante siglos, el tipo del mafioso había existido en Sicilia como un individuo que merecía honor y respeto afirmando siempre sus derechos y no rehuyendo jamás a su 9U
EXCESO
de Palermo
JULIO 1996
podían entrar la policía ni las fuerzas armadas. En su infancia se acostumbró a ver a los Hombres de Respeto con sus trajes caros caminando por las calles del vecindario y recibiendo el homenaje de la gente. Los hombres se descubrían ante ellos y les besaban las manos. Las mujeres los saludaban con una reverencia al pasar. Carlo veneró á un héroe de la Honorable Sociedad, y se prometió que lo emularía al crecer. Era el legendario capo dei tutti capi, el jefe de todos los jefes, don Vito Cascio Ferro, en su tiempo considerado el hombre más poderoso de Sicilia. Desde la niñez Carlo había escuchado relatos de las hazañas del intrépido don Vito: cómo había ido a Estados Unidos alrededor de 1900 y amasado una fortuna de la nada, y más tarde regresado a Sicilia, después de matar a un hombre, para asumir el control de la Honorable Sociedad; cómo los poderosos banqueros, los políticos y los magistrados requerían su favor; cómo lo invitaban a las villas de la aristocracia palermitana, los principi, los duchi y los baroni que poseían grandes extensiones de tierra en el interior; cómo atravesaba las calles de los distritos más pobres distribuyendo golosinas a los niños, y cómo él solo había asesinado a Joseph Petrosino, el detective de la policía de New York que había llegado a Palermo para coordinar con las autoridades sicilianas un ataque contra la Honorable Sociedad. Un día él, Carlo Gambino, sería un gran jefe como don Vito Cascio Ferro. La madre de Carlo era una Castellano. Por intermediación de sus parientes, Carlo fue mencionado a algunos Hombres de Respeto cuando era adolescente, y ellos rápidamente advirtieron que se trataba de un buen candidato. Era inteligente, enérgico y laborioso, y le agradaba complacer a sus mayores.
Aunque de estatura un poco reducida —medía sólo 1,68—, tenía una actitud dominante y un rostro sorprendente: grandes cejas oscuras, abundantes cabellos negros y una nariz aguileña combinada con una sonrisa perpetua que con el tiempo llegaría a ser su rasgo distintivo. El sueño más importante de Carlo al fin se hizo realidad cuando, faltándole poco para cumplir 20 años, los Hombres de Respeto lo iniciaron en la Honorable Sociedad. En silencio ocupó un asiento en la habitación iluminada únicamente por velas, frente a una larga mesa ante la cual se habían sentado diez hombres vestidos de negro. Le acercaron el dedo derecho pinchado con una aguja a la efigie de papel de un santo, y después se quemó el papel. Recogiendo el papel ardiente y sosteniéndolo en sus manos, el joven Carlo canturreó, incitado por su padrino: "Así arderé si traiciono a la hermandad". En 1920 Palermo era, lo mismo que hoy, una ciudad en que tres mil años de historia desfilan constantemente ante los ojos del observador. Allí estaban los restos de la magna Grecia: las urnas, las estatuas y los fragmentos de los templos dejados por los antiguos griegos. También los pedazos de la antigua Roma: mosaicos y grandes estatuas de mármol de dioses y emperadores. Para recordar que la ciudad había sido dominada por los árabes del norte de Africa durante casi 300 años, estaban las mezquitas y las iglesias con perfil de mezquita, como la de San Giovanni Degli Eremiti. Proclamando el dominio normando de la Edad Media estaba la gran catedral de Monreale, con su incomparable mosaico bizantino y la mezcla exquisita de los estilos románico, normando y árabe, y la Capilla Palatina Real de Roger II, el más grande de esos reyes. Del dominio de los Hohenstaufen hablaba la tumba de Federico II, el Sacro Emperador Romano Hohenstaufen, monumento conocido por sus contemporáneos como Il Stupor Muridi la Maravilla del Mundo. Había iglesias góticas francesas que conmemoraban el dominio angenivo y palacios de estilo catalán que evidenciaban la presencia aragonesa. Y también los palacios y las fuentes barrocas de los Habsburgo y los Borbones de España, que habían dominado Sicilia durante 350 años. Vivir en un entorno con tanta historia palpable provocaba un efecto doble eñ la psiquis de los palermitanos. Por una parte originaba sentimientos de superioridad y cinismo, y por lo tanto inducía a la inacción. Los sicilianos lo habían visto todo. Habían realizado la experiencia directa de todas las grandes civilizaciones mediterráneas y europeas. Comparados con los sicilianos, los otros pueblos europeos carecían de civilización, apenas habían salido de su infancia bárbara. Los sicilianos miraban con desdén los idealismos de los pueblos norteños, su creencia en la democracia popular y el imperio de la ley. Sin embargo, la historia del dominio por tantos pueblos también originaba sentimientos de opresión y desesperanza. Tanta historia, tanto despotismo, ¿no sería muy grato apartarse de eso e ir a un país nuevo que no estuviese a tal extremo inmerso en la sombría grandeza del pasado, que no hubiese tenido que soportar la carga de tanta opresión? Para los jóvenes de la generación de Carlo Gambino, Palermo era una ,
enorme tumba. El lugar adonde había que ir era Estados Unidos, una nación con poca historia, una nación que no era prisionera de su pasado y que clavaba los ojos en el futuro. A diferencia de los Gotti de San Giuseppe Vesuviano, Carlo Gambino ya estaba bien relacionado en New York. Varios de sus parientes Castellano se habían establecido en Brooklyn. La hermana de su madre vivía allí. Se había casado con un hombre llamado Masotto, relacionado con la hermandad, y tenía un hijo, Thomas, que era miembro formal de la Honorable Sociedad de Brooklyn. Y dos hijos de uno de los hermanos de su madre, Peter y Paul Castellano, vivían y trabajaban en Brooklyn, donde habían comenzado a ganar mucho dinero. Los Hombres de Respeto de Palermo se habían mantenido en estrecho contacto con sus paesani de New York. Llamaban la atención de sus hermanos de Brooklyn sobre algunos de los reclutas más promisorios, con la esperanza de realizar buenas ventas. Si se pagaba lo que correspondía, se concertaba un acuerdo con el capitán de un carguero, el recluta entraba clandestinamente en Estados Unidos y después se unía a la familia del Hombre de Respeto que lo había pagado. Para 1920 se había organizado en Brooklyn un negocio completo que se ocupaba de la exportación a New York de jóvenes criminales sicilianos. Y así, un día de fines de noviembre de 1921, Carlo Gambino, con 21 años, embarcó ilegalmente en el Vincenzo Florio, en Palermo. Era noche cerrada, y el buque zarpó hacia Virginia y más tarde a New York. Uno de sus parientes Castellano estaría esperándolo en el muelle de Norfolk.
E
1 Vincenzo Florio amarró en Norfolk el 23 de diciembre de 1921, con una carga de limones, aceite de oliva, anchoas y vino de Marsala, y un pasajero: Carlo Gambino. La leyenda afirma que Gambino vistió 'sus mejores prendas para entrar en Estados Unidos: un traje gris oscuro hecho a la medida, un sombrero negro de ala ancha y un par de estrechos zapatos negros relucientes. Llevaba el chaleco adornado con la gruesa cadena de oro del reloj que su padre le había regalado antes de la partida, y un pañuelo de seda blanco sobresalía del bolsillo más pequeño de la chaqueta. Paul Weskil, ex periodista del Daily News de New York que entrevistó a miembros de la familia Gambino durante los años sesenta, describió la entrada ilegal del joven Carlo Gambino en Estados Unidos en su libro Don Carlo. Boss of Bosses. Como correspondía en el caso de una figura con relaciones poderosas, Carlo fue acompañado personalmente hasta la plancha de desembarco por el capitán, a quien habían pagado muy bien para transportar a su pasajero. No hubo dificultades con los funcionarios de inmigración y aduanas; también se habían ocupado de ellos las relaciones de Carlo. Uno de sus más íntimos amigos de la infancia en Palermo, Tommy Lucchese, que un día sería reconocido por el nombre de Tres Dedos Brown, lo iniciaría en el dinámico y nuevo mundo del tráfico ilícito de licores. Los alambiques subterráneos, los depósitos secretos, los contrabandistas y los salones habían nacido casi de la noche a la mañana con la aprobación 01 JULIO 1996 EXCESO
91
de la Ley Volstead, dos años antes de la llegada de Carlo (era la ley que prohibía la fabricación, venta y transporte de licor y cerveza en Estados Unidos). Así, tras su entrada ilegal, le consiguieron un lugar en la banda neoyorquina más poderosa que se ocupaba del tráfico ilícito de licores: el grupo dirigido por Giuseppe Masseria, el jefe Joe, un Hombre de Respeto robusto, de corta estatura, que había huido de Sicilia en 1903 para escapar de una acusación por asesinato. Al poco tiempo, Carlo estaría ganando más dinero de lo que jamás había soñado en las estrechas callejuelas de Palermo.
John Joseph, como su padre— fue quien en diciembre de 1985 se convirtió, para decirlo con las palabras de un gángster, en "un regalo de dios para los bajos fondos".
L
a New York de 1920 fue descrita algunos años después por el jefe mafioso Joseph Bonanno como el volcán. Bonanno utilizó esa expresión para describir el universo explosivo de los inmigrantes italianos; pero bien podría ser una eficaz descripción de toda la sociedad neoyorquina en la era de la prohibición.
Mientras millares de poveracci se esforzaban ucho menos propicias fueron las circunstancias que en trabajos agotadores y sin horizontes, encontraron John Joseph y los hábiles sicilianos como Carlo Gambino, Fannie Gotti a su llegada a Estados Unidos, más o menos un año Joe Bonnano, Lucky Luciano y Tommy Lucchese antes que Carlo Gambino descense zambullían en el negocio del licor ilegal. diera por la plancha de desembarco Esta carrera por la riqueza rápida, de Norfolk. La joven pareja de la localidad protagonizada por la población inmigrante, rural de San Giuseppe Vesuviano no volvería a repetirse aterrizó en una comunidad densa y concentrada de inmigrantes italianos hasta los violentos años de la cocaína del Bronx Sur. Desprovistos de familiares en el Nuevo Mundo, los Gotti habían quedado a Durante la década de los veinte, Estados Unidos había merced de un reclutador de obreros de la construcción, una salido de lá Primera Guerra Mundial como una gran pofigura habitual en esa época, que asechaba en la entrada del tencia, una nación acreedora y un gigante industrial, con edificio de Inmigración y Naturalización de Ellis Island, para todo lo que eso implicaba desde el punto de vista del aumento capturar a los inmigrantes italianos del sur, individuos pobres de las responsabilidades, las oportunidades y la presión. y analfabetos, encontrarles un lugar para vivir y ponerlos a New York estaba reemplazando a Londres como capital trabajar en tareas de construcción, con el salario de 1,25 financiera del mundo. Wall Street se permitía lo que de hedólares por día. Los Gotti se hallaron viviendo en un cho era una orgía especulativa. Los antiguos valores, las apartamento de una sola habitación, sin agua caliente, en un viejas costumbres y los temores del siglo XIX estaban edificio del Bronx Sur; y John Joseph tenía que trabajar diez desintegrándose. Ahora, los neoyorquinos querían divertirse, horas diarias cavando zanjas y como peón de albañil. Solos y llegar lejos. Deseaban liberarse de la represión puritana. aislados en un país extraño que los menospreciaba, sin duda También querían ganar mucho dinero. Igual que la enorme echaron de menos la cálida vida comunitaria de San Giuseppe masa de los inmigrantes. La ciudad era un enorme "todos Vesuviano, donde conocían a todos y todos los conocían a contra todos". ellos. Un factor que contribuía a alimendr la erupción del volcán Los pobres inmigrantes italianos sureños, que provenían de era la insaciable sed pública del licor prohibido y los frenéticos comunidades agrícolas, se veían despreciados en casi toda la esfuerzos de los bajos fondos para apagarla. Por una extraña ciudad. Sin el lustre de los inmigrantes de la gran ciudad —los ironía, las buenas intenciones de los cruzados de la templanza inmaculados Hombres de Respeto de Nápoles y Palermo—, habían dado como resultado la más gigantesca expansión de la eran el hazmerreír. En definitiva, los Gotti del Bronx Sur teactividad delictiva en Estados Unidos hasta ese momento, nían un solo consuelo: John Joseph tenía trabajo, lo que le además del acentuado aumento del consumo de alcohol y del permitía llevar a su casa de seis a diez dólares semanales si traalcoholismo. bajaba diez horas diarias, seis días a la semana. En San GiuPara los camorristas y los mafiosos de New York, la proseppe Vesuviano no había trabajo. hibición fue una bendición, un medio de obtener ganancias Pobres, aislados y despreciados, lo único que podían hacer rápidas e ilícitas en una magnitud que jamás se había alcanlos Gotti del Bronx Sur era crear su propia comunidad, fundar zado en Estados Unidos o en Sicilia. una familia que por lo menos representase una compañía Mientras los Gotti del Bronx y millares de poveracci como mientras luchaban por sobrevivir. Fannie Gotti tuvo 13 hijos ellos se esforzaban penosamente en trabajos agotadores y sin en el curso de los años —siete varones y seis niñas—; dos de horizontes, los hábiles empresarios sicilianos como Carlo ellos morirían en la infancia. El quinto —un varón llamado Gambino, Joe Bonnano, Lucky Luciano y Tommy Lucchese
Colofón
.
92
EXCESO JULIO 1996
se zambullían en el dinámico negocio del licor ilegal, montaban alambiques, organizaban instalaciones de distribución y compañías de transporte, reclutaban batallones de contrabandistas y abrían centenares de locales en toda la ciudad. Esta carrera por la riqueza rápida, protagonizada por la población inmigrante, no volvería a repetirse hasta los violentos años de la cocaína, durante la década de los ochenta. Los Gotti del Bronx meridional y más tarde del Harlem Este permanecieron al margen de esta frenética competencia. Pero los Gambino y los Castellano estuvieron en el meollo. ientras Carlo Gambino, sus primos Castellano y Tommy Lucchese explotaban el negocio del licor para el jefe Joe Masseria en Brooklyn, otra banda, con base en el Lower East Side de Manhattan, acumulaba poder y era cada día más temible. Al frente de este grupo estaba un rudo y joven inmigrante de la pequeña aldea siciliana de Lercara Friddi: Salvatore Lucania, más tarde conocido como Lucky Luciano. Lucania había abandonado la escuela y la miserable vivienda de su familia en el Lower East Side cuando se encontraba en mitad de la adolescencia, y se había unido a un par de astutos muchachos judíos, también originarios del Lower East Side: el polaco Maier Suchowlijanski, más tarde conocido por el nombre de Meyer Lansky, y Benjamín Piojoso Siegel, hijo de inmigrantes rusos. Después se les unirían dos jóvenes matones del área de Nápoles, Francesco Castiglia, a quien Lucania rebautizó con el nombre de Frank Costello, y el brutal Vito Genovese. Estos cinco pistoleros jóvenes formaron una combinación invencible. Lansky y Siegel aportaban el cerebro, Lucania la dirección, Costello el arte de la diplomacia y Genovese —cuando estaba disponible, pues a menudo actuaba por cuenta propia— el músculo. No estaba lejano el día en que esta unión de cualidades llegaría a dominar el delito organizado en Estados Unidos, y modificaría para siempre su carácter. Con Lansky, el naciente genio financiero, manejando el dinero; Siegel y Lucania planeando y ejecutando los robos, los asaltos, el transporte y la venta de alcohol ilegal, y Costello comprando la protección de la ley, la banda del Lower East Side prosperó mucho. La demanda de alcohol en toda el área metropolitana neoyorquina siempre sobrepasaba la oferta. Lucania pronto comprendió que si suministraba alcohol en cantidades suficientes a los funcionarios públicos podía obtener protección en todos los niveles, desde el agente que recorría la calle al capitán de distrito y al encargado de la cárcel, hasta llegar al propio jefe de policía, a quien se pagaba diez mil dólares semanales para que desviase la mirada. Hacia mediados de los años veinte la banda de Lucania controlaba las destilerías, las flotas de camiones que traían alcohol de Canadá, los equipos que asaltaban los camiones de los pandilleros rivales, los depósitos, las docenas de locales y hasta un centenar de camioneros, agentes, destiladores, distribuidores y hombres armados. En la autobiografía, no siempre veraz, es-
M
crita por Martin A. Gosch y Richard Hammer, el jefe de la banda calculó que en 1925 ganó 12 millones de dólares sólo con el alcohol. Su nómina de pagos de cien hombres absorbía un millón de dólares anuales. La protección —la grasa, como la llamaba Lucania— costaba cien mil dólares semanales. Lo cual dejaba alrededor de cuatro millones para dividirlos entre Lucania, Costello, Lansky y Siegel. Por esta época, los dos jefes importantes y tradicionales de la vieja escuela —Joe Masseria y Salvatore Maranzano— percibieron el ascenso sorprendente de la joven banda de Lucania. Y como le temían, comenzaron a cortejarle con el ofrecimiento de unirse a sus organizaciones. oe Masseria advirtió rápidamente las cualidades superiores del nuevo recluta Carlo Gambino, asignado a la operación de contrabando de licor. Así como a un joven ejecutivo de una gran empresa moderna se le traslada de un departamento a otro para familiarizarlo con todas las
ill
facetas del negocio, también el jefe loe puso al novel soldado a trabajar un tiempo en cada rama del complicado negocio de los licores. Carlo ensayó la fabricación de whisky en los alambiques de los sótanos de Brooklyn; aprendió a pasar de contrabando ron caribeño en lanchas rápidas que estaban a unos cinco kilómetros frente a la costa de Long Island; probó atacando camiones con los embarques de licor de una banda rival, y también se dedicó a persuadir a los dueños de los locales con el fin de que comprasen exclusivamente a Masseria. Hacia mediados de los años veinte, el jefe Joe se había convertido en el protagonista principal del naciente tráfico ilegal de licores en New York, y en este proceso estaba amasando una fortuna enorme. Trabajaban para Masseria, en compañía de Carlo Gambino, otros dos muchachos, que un día desem-
peñarían papeles importantes en los bajos fondos de la ciudad: Joe Adonis y Albert Anastasia. El jefe Joe era un palermitano de corta estatura, cuerpo
rechoncho y cara regordeta, apodado el chino por sus rivales porque las mejillas hinchadas le entrecerraban los ojos. Tenía reputación de glotón, podía engullir media fuente de spaghetti en el tiempo que un hombre normal necesita para ingerir un bocado. También se le conocía por su desaliño y modales toscos; babeaba al comer, y en la conversación era grosero y prepotente. Pero su principal reputación provenía del hecho de ser un luchador obstinado, que no vacilaba un segundo en matar a quien se le cruzaba en el camino. No pasó mucho tiempo antes que apareciese un rival poderoso en la escena, un hombre decidido a cuestionar el dominio del jefe Joe en New York. Era Salvatore Maranzano, y provenía del pueblo costero de Castellammare del Golfo, al oeste de Palermo. Había centenares de inmigrantes de Castellammare en New York, y sobre todo en Brooklyn, y centenares dispersos por todo el territorio de Estados Unidos. Era un grupo muy cerrado, que se enorgullecía especialmente de la ciudad en que habían nacido. No apreciaban mucho a sus compatriotas de Palermo. Maranzano, de 43 años, se convirtió en el lí- 101 IULIO 1996 EXCESO
93
der. Había sido enviado a New York por el jefe de todos los hombres de Masseria comenzaron a recorrer las calles de los jefes de Sicilia, el héroe de Carlo Gambino, es decir, don Vito vecindarios de Brooklyn habitados por gente de CasteCascio Ferro, con la orden de organizar a la Mafia estadoullammare, y disparaban contra los camiones y contra los homnidense y en definitiva someterla al control de don Vito. bres de Maranzano que encontraban en los bares, restaurantes Maranzano tenía una personalidad dominante. Era un jefe y clubes sociales. Estaba en marcha lo que llegó a denominarse de presencia imperiosa, poseía una voz muy persuasiva y verla Guerra de Castellammare. dadera autoridad, y cultivaba intereses y entusiasmos que no Maranzano percibió tardíamente que estaba librándose una lucha a muerte, y a su vez respondió a los golpes e infligió eran usuales en los Hombres de Respeto. Sentía una profunda graves pérdidas a las fuerzas de Masseria. Se cree que durante admiración por Julio César, y sabía mucho de él y de sus camel primer año de esa guerra éste perdió 50 hombres. parias militares. En una habitación de su casa de Brooklyn había formado una especie de sanMaranzano cultivaba intereses y entusiasmos tuario en memoria del gran general romano. Allí, en estantes que cuinusuales en los Hombres de Respeto. brían las cuatro paredes, conservaba Sentía profunda admiración por Julio César. una nutrida colección de obras acerca de César, así como varios antiEra un lingüista; dominaba seis idiomas, y las obras guos bustos de mármol del héroe. literarias de César las repasaba en latín. Maranzano era un lingüista y domiOtro de sus héroes era Maquiavelo; solía declamar naba seis idiomas. Cuando se trataba de repasar las obras literarias de ante sus soldados fragmentos de El Príncipe. César las leía en latín. Quizás fue el único jefe mafioso de América Otro de los héroes de Maranzano que poseía educación universitaria era Maquiavelo. Solía declamar ante sus soldados algunos fragmentos de El Príncipe. Trataba de seguir el consejo de Maquiavelo en el Por esa época, Lucania, Lansky, Siegel, Costello y Genovese manejo de sus asuntos. Una de las máximas de Maquiavelo se finalmente unieron fuerzas con el jefe Joe y comenzaron a convirtió en una norma fundamental de su sistema: "Las operar junto a Albert Anastasia y Carlo Gambino. Los homactitudes de severidad deben manifestarse todas de una vez, bres de Castellammare a las órdenes de Maranzano sumaban porque de ese modo súbito pueden ofender menos; los beunos 400, entre ellos el astro ascendente Joseph Bonanno, el neficios deben ser distribuidos gota a gota, de modo que futuro jefe Joe Profaci y el poderoso clan Magaddino de satisfagan más". Buffalo y Niagara Falls. Hombre formal y puntilloso, con modales y actitudes del Estas alianzas no eran estables ni mucho menos. Numerosos Viejo Mundo, Maranzano cierta vez había estudiado para el hombres de Masseria esperaban a ver de qué lado se inclinaba sacerdocio. Quizás fue el único jefe mafioso de América que la suerte antes de comprometerse definitivamente. Al poco poseía educación universitaria. Uno de sus lugartenientes, el tiempo, la banda de Masseria empezó a sufrir pérdidas cada futuro jefe criminal Joseph Bonanno, dijo de él que era "un vez más graves y comenzaron las deserciones. Una de ellas fue intelectual ascético" y "un guerrero nato". No mucho después la de Carlo Gambino, el inteligente y joven soldado del jefe de su llegada a New York, en los bajos fondos se le conoció Joe. Se cree que Maranzano, al enterarse de las cualidades supor el apodo de Pequeño César. periores de Gambino, lo invitó a una reunión secreta en la cual Cuando reagrupó bajo su bandera a la mayoría de los nalo persuadió de que se uniese a sus fuerzas; y éste, al intuir la tivos de Castellammare que residían en Brooklyn, comenzó a derrota inevitable de Masseria, decidió aceptar. atacar las operaciones de contrabando del jefe Joe, asaltando Mientras la guerra se desarrollaba —y comenzaba a parecer los camiones de licor de éste y presionando a los locales para que Maranzano se impondría al glotón Masseria —, dos de los que comprasen el producto de Maranzano. Como podía suhombres del jefe Joe, Salvatore Lucania y Vito Genovese, deponerse que sucedería, el jefe Joe pronto tomó represalias. En cidieron tomar una medida drástica: aceptarían destruir a 1928 exigió tributo a los nativos de Castellammare que resiMasseria si Maranzano les concedía protección y respeto dían en Brooklyn, y cuando se negaron a pagar ordenó asedespués de eliminarlo. Hacía un tiempo que Maranzano había sinar a un miembro del clan. intentado persuadir a Lucania de que matase a Masseria, y éste Siguieron más asesinatos de hombres de Castellammare en siempre se había negado. En una de estas actitudes de rechazo otras ciudades. Maranzano reaccionó acentuando su presión Maranzano había atraído a Lucania a una trampa, y allí sobre las operaciones de Masseria. El jefe Joe estaba perdiendo recibió una paliza que le desfiguró para siempre la cara. Tuvo la paciencia, y un tiempo después tomó una decisión trassuerte de escapar con vida. Meyer Lansky le aplicó el mote de cendente: dictó una sentencia de muerte en perjuicio de todo el Lucky (afortunado), y en adelante se le conoció bajo ese clan de Castellammare. Pronto, los vehículos cargados con nombre: Lucky Luciano.
Colofón
94
EXCESO
JULIO 1996
En abril de 1931, Luciano aceptó destruir a Masseria en benefieic, de Maranzano, y atrajo a su jefe a un almuerzo en un restaurante de Coney Island, el Nuova Villa Tammaro, donde se había preparado una emboscada. Hacia el fin de la comida, cuando el jefe Joe estaba medio sedado por los linguini, los escalopines de ternera y el vino tinto, Luciano se disculpó un minuto y fue al cuarto de baño. Cuando regresó a la mesa encontró el cuerpo de Masseria teñido de sangre, en el suelo, rodeado por los camareros y los clientes aterrorizados. Lo habían matado a tiros cuatro pistoleros —Vito Genovese, Albert
La matanza de San Valentín: baño de sangre
Anastasia, el Piojoso Siegel y Joe Adonis. Siguió otra serie de muertes por ambas partes, pero la guerra de Castellammare había concluido. Durante un breve período reinó el caos en los bajos fondos de New York, mientras la banda de Masseria empezaba a desintegrarse y el victorioso Salvatore Maranzano recogía los fragmentos. Se reconoció ahora a Maranzano como el jefe más poderoso del país. Para ratificar esa jerarquía y proclamar un nuevo orden en la Honorable Sociedad, se convocó a una reunión de todas las familias, en mayo de 1931. El encuentro tuvo lugar en una inmensa sala de banquetes en el Grand Concourse del Bronx. Acudieron alrededor de 400 hombres de todo el país. Maranzano ocupó solo una plataforma elevada a cierta altura sobre el resto del público. Directamente debajo, en un nivel inferior, estaba su príncipe coronado, Lucky Luciano, y los jefes de las familias alineados a lo largo de una mesa. Los que estaban bajo la plataforma permanecieron de pie. Fue la hora más brillante de Salvatore Maranzano. Ahora podía venerar a su héroe reencarnándolo; ahora él era Julio César. —Lo sucedido en el pasado ha terminado —canturreó con una voz que impresionó a los oyentes—. No habrá más odio entre nosotros. Los que perdieron a alguien en la guerra deben perdonar y olvidar. Incluso si mataron a nuestro hermano, no tratemos de averiguar quién lo hizo ni de vengarnos. Los que lo hagan pagarán con la vida.
Después de este preámbulo, Maranzano se proclamó el "jefe de todos los jefes". Hablando en italiano y en siciliano, intercalando ocasionales fragmentos en latín, definió el nuevo orden de los bajos fondos que acababa de nacer llamándolo La Cosa Nostra —literalmente nuestro asunto. Luego explicó que La Cosa Nostra se organizaría de acuerdo con el sistema de las legiones romanas de Julio César. La Cosa Nostra se dividiría en familias bien definidas, cada una con jurisdicción sobre determinado territorio o asunto. Cada familia sería gobernada por un jefe que ejercería autoridad absoluta. Directamente bajo el jefe habría un subjefe, y después los caporegime o capitanes, que estarían a cargo de los grupos individuales de soldados. Salvatore Maranzano sería el capo dei tutti capi, el jefe supremo de todos los jefes en Estados Unidos, y como tal recibiría tributo de todas las familias. Habría una rigurosa cadena de mando para garantizar la disciplina y evitar que el jefe participase en la comisión de los delitos. Un soldado no podría proponer directamente a la atención de su jefe determinado asunto. Debía presentarlo a su caporegime, quien entonces acudiría al subjefe, y si éste consideraba que el asunto tenía importancia suficiente lo presentaba al jefe. Dicho esto, Maranzano pasó a ratificar las conocidas leyes de la Honorable Sociedad, que continuarían teniendo vigencia en La Cola Nostra. Esta debía ocupar el primer lugar en la vida de cada miembro. Estaba antes que la familia, los amigos, la Iglesia y la patria. La pena por revelar la existencia de La Cosa Nostra a los que no eran miembros de la misma era la muerte sin juicio. Eso incluía hablar de La Cosa Nostra incluso con la esposa. Y la orden transmitida por un jefe a un subjefe o por un subjefe a un caporegime o por un caporegime a un soldado debía ser obedecida, so pena de muerte. También destacó que un miembro de la familia de La Cosa Nostra siempre debía pedir autorización para adoptar determinada iniciativa, fuese ésta legal o ilegal, y que el jefe o el subjefe debía otorgar el permiso si la iniciativa en cuestión era provechosa para el conjunto de la familia. La incorporación a una familia de La Cosa Nostra estaría limitada exclusivamente a las personas de sangre italiana. Por último, Maranzano se reunió con los restos de la familia Masseria, los líderes de otras familias y su propia gente de Castellammare, para dictar una nueva orden aplicable a los bajos fondos neoyorquinos. Dijo a los hombres que en adelante habría cinco familias en New York. La familia Maranzano, con base en Brooklyn, sería una; su jefe sería Joe Bonanno. Otra, la de Brooklyn, estaría encabezada por Joe Profaci, íntimo amigo de Maranzano, y Joe Colombo sería el subjefe. Había otra familia en Brooklyn, encabezada por Vincent Mangano, organizador de los muelles de Brooklyn; incluiría a Albert Anastasia y a Carlo Gambino. Se formaría una cuarta familia con los restos de la antigua banda de Masseria; su líder sería Lucky Luciano e incluiría a Frank Costello y Vito Genovese. Habría una quinta familia sobre la base del antiguo grupo de Reina; estaría dirigida por Frank Scalise y Tommy Lucchese. Es una organización que ha perdurado hasta hoy. L IULIO 1996
EXCESO
95
•
•
'Xr!S,Ip ;.VY,
& — cl■
i
„... •
.11rali -
aolik
dris
-
; 7-"`•%:' - - -1.., --:_:,-7,
1111:•- ■ : ■ '''' 41. . _. -,rivi. , 4#-■ -o" •
- "
•••¿'Porque
..".",,_: -•
'----- --- - -1111
alojarse en un hotel común y corriente en Aruba...?
¡Cuando puede tener a su disposición
1111
complejo
En Aruba Sonesta Resorts usted lo tiene todo. 24 horas de actividad de casino, entretenimiento en vivo, mas de 120 tiendas, baile, cines, restaurantes, bares, marina, siete playas privadas, deportes acuáticos y excursiones excitantes. Todo esto y mas en Seaport Village, el complejo turístico de entretenimiento y compras mas completo en Aruba.
turístico completo! Arldbl
Sonesta Resorts en Seaport Village
ViMakiffnaIrM' Llame a su agente de viajes preferido
•
ALC. 40%/ VOL. (RO PROOF) CITRUS FLAVORED VODKA, PRODUCED AND BOTTLED IN SWEDEN. 1 0 LITER
IMPORTED •
UNTRY OF SWED A PRODUCT OF SWEDE íN & SPRIT AB IMPORTADO MARKS OWNED BY V&S VIN1& DISFRUTE NUESTRACALIDAD CON RESPONSABILIDAD
SO! [00 111)1111 IA AGRAM DI VI NI