Revista Exceso edición nº 119 mayo 1999

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Dimos y diretes UNA TRIBUNA ABIERTA

Nota de la redacción:

Caracas, 5 de abril de 1999

Dr. Rodríguez Campins:

Señor Ben Amí Fihman Revista Exceso Presente.-

Nada más comprensible que su dolor, y lejos de la línea editorial de Exceso está la intención de acrecentarlo. En el reportaje al que usted alude, el periodista reproduce versiones que circulan en la comunidad de Chacao y entre los investigadores policiales, procurando dejar bien claro que sólo se trata de eso —versiones, cuando no hipótesis, y no necesariamente la verdad— así como informaciones aparecidas en la prensa anteriormente. Le sugerimos consultar el diario El Nacional en su edición del 21 de enero de 1999 y el diario El Universal en su edición del 24 del mismo mes. Para mayor precisión, le citamos el texto publicado en El Universal: "...la policía investiga también una posible estafa, robo o pérdida de dinero, producto de un negocio que tenía Rodríguez Campins con la esposa del sospechoso". Mucho interés tendrían para la opinión pública los hechos que según usted el reportaje deja de lado, por lo que con gusto pondríamos las páginas de la revista a su disposición en caso de que quiera hacerlos del dominio común. Coincidimos con usted en que no hay motivo honorable para matar y mucho llama la atención que tan nefando crimen no tenga a estas alturas a su autor convicto y confeso. Por lo demás, para evitar confusiones, conviene aclararle que el periodista Evan Romero trabaja con exclusividad para esta publicación.

Estimado Ben Amí: Deseo expresarte mi agradecimiento por la nota que publicaras acerca de mi padre en el último número de Exceso. Es un homenaje digno y un gesto que aprecio con suma franqueza. El te trasmite igualmente su gratitud por la semblanza que le hicieron en una publicación tan prestigiosa como la tuya. Recibe mis saludos. Un abrazo, Gustavo Roosen

MAYO 1999 EXCESO

11111,11id El tema de tos derechos humanos asomaría más de una vez

entre los labios del candidato Hugo Chávez Frías en plena campaña presidencial y no sería de extrañar dada la confesada cercanía del militar con el poeta Tarek Saab, uno de los más conspicuos valedores locales de la letra asentada en la universal declaración. Pero, una vez en el poder, el chavismo no muestra una vocación demasiado definida por garantizar tales derechos. Grupos relacionados con el humanitario asunto consideran que quien fuera defensora de los dos guardias nacionales que incendiaran un calabozo de la prisión conocida como La Planta, provocando la muerte espantosa de no menos de 25 reclusos que quedarían atrapados entre las llamas y los barrotes, no es la persona llamada a ocupar la Dirección de Prisiones, en la que el nuevo gobierno designara a la penalista Gloria Pinho, abogada no sólo de los incriminados militares sino de varios policías metropolitanos incursos precisamente en acciones de lesa humanidad. Una de las organizaciones no gubernamentales que actúan en el área penitenciaria llamada Una ventana a la libertad enviaría una carta a la doctora Pinho con copia a las más altas instancias, incluida la Presidencia de la República -- y que la haría montar en cólera—, en la que le reprochan no sólo el lenguaje empleado a la hora de espetar a los defensores de los derechos humanos en declaraciones de prensa, sino la nueva política que la dirección a su cargo ha puesto en 8

EXCESO

MAYO 1999

Práctica para realizan en las cárceles. Dejan saber los responsables de la mencionada organización que a las puertas de los penales han de sortear toda clase de trabas y que el ingreso de los estudiantes del Instituto

camente se adelantó a poner tierra de por medio entre él y el incómodo argentino, mientras su compañero de gabinete Miquilena aclaraba que el hombre no portaría por los predios gubernamentales.

Universitario Nacional de Estudios Pi.ni ten, iario, el cumplimiento de sus prácticas ha sidc, restringido a grupos de sólo cinco por visita. El súbito como ade-

Pero testigos presenciales juran que sí holló los jardines de Miraflores rumbo a la mesa meridiana del Presidente. El general Raúl

lantado ingreso al tercer mi-

pese al talante discreto y ca u que lo caracteriza como hombre público, tal vez no pudo reprimirse entre allegados la recóndita queja de estar hasta la coronilla de hacer de niñero del incorregible comandante en jefe. Pero, tras el

del vespertino de la Cadena Capriles pregonado como El Mundo paradójicamente tendría su origen en una conservadora testa: el doctor Caldera habría recomendado a quien fuera su ministro de Cordiplan a la sucesión de Miguel Angel para dirigir el remozo del periódico que tanto se ha anunciado con bombos y platillos. Con el cansancio en el rictus, Oscar lenio

Salazar, titular de la nefensa,

estilo dicharachero y la falta de modales del gobernante, se

agazapa, a lo mejor, la dureza de mando que tantos esperan. Al menos, eso ha demostrado con las úl-

Sambrano Urdaneta entregó finalmente la presidencia del Conac,

timas actuaciones de la Guardia

aunque corre la noticia de que po-

cen enrumbadas a despojar los

co antes tuvo el ímpetu suficiente

puertos de viscosos manejos. Las

para cambiar la condición de la

acciones han sido ordenadas por el propio Chávez directamente a los altos grados de la guardia Nacional que, según corrillos palaciegos, no sólo le obedecen, sino tiemblan ante el ex teniente coronel. Parecido rigor aguarda en el futuro de la dinastía Caldera. Los mismos susurros provenientes de Miraflores auguran para la sucesión de don Rafael cabe entender, Andrés y los delfines de nuevo cuño— un largo calvario que comienza en Samana y puede terminar, como es de esperar, lejos de la patria.L

Casa de Bello —su hechura ama-

da— de ente subsidiado a ente tutelado. El cambio de categoría no ,()1 , 1,1 ente es meramente 1101n ; • subsidiado percibía un presupuesto de sólo 60 millones, mientras que con el nuevo estatus obtendría recursos no menores a los 600 millones. El entrante presidente del organismo, el empresario Alejandro Armas, al parecer, no se siente muy a gusto con la postrera viveza de su predecesor. Norberto Ceresole dejó la estela de su ló-

leyenda y aún anima el rumor nacional. Chávez admitiría una simpatía personal pero no la injerencia del personaje en el rol de brega

Nacional en las aduanas que pare-

—

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1■1- C13. N/A II_ A R.

Vallas boyantes Como en el juego de la candelita, Vepaco dice: "Pregúntele a Vallas Publicidad, a nosotros nos va de maravilla". Y Vallas Publicidad calca la respuesta: "Pregúntenle a Vepaco, nosotros capeamos con éxito el temporal". Sin embargo, es notoria la ausencia de publicidad en las blancas y recuadradas paredes de algunos edificios que incitan al viandante con intereses en la publicidad a caer en la tentación: "Disponible". Mientras Cavidea asegura que descendió 15 por ciento el consumo de sardinas y un centenar de industrias baja mensualmente la santamaría —luego de intentar sobrevivir apelando a un enrevesado e inútil reacomodo administrativo de fusiones y despidos—, algunas empresas de la comunicación mantienen la frente en alto. Los avisos se escurren como agua entre los dedos, pero oficialmente, nones. Una herencia de Teodoro Petkoff. Estamos mal pero vayamos bien.

Mi no adorado Ignacio Cuando Ignacio Betancourt, ex asistente de Carlos Andréz Pérez, como él mismo se identifica —o "ex secretario mío" como le dice el niño de Rubio— escribió en el suplemento 7 días de El Nacional con minuciosidad de detalles los sucesos del 27 de febrero, como si narrara un testimonio, seguramente no pensó que sería felicitado por la precisión de los datos e, incluso, por el ameno estilo de su narración. Pérez, en cambio, no se imaginó que revelaría tanta minucia, y mucho menos que entraría a enjuiciar el coraje o la timidez de los protagonistas del ya mítico episodio con tanta "ligereza". "Fue injusto con una serie de personas, creo que dijo cosas inciertas e innecesarias", se lamenta Angel Zambrano. El propio Carlos Andrés Pérez cree lo mismo. "Lo peor es que él no estuvo allí. El escribe de eso como si lo hubiera vivido, pero la verdad es que fue secretario mío después de que me hicieron preso y entonces me ayudó en La Ahumada. En Miraflores no. Debe haber contado lo que contó porque se aprendió el cassette de memoria de tanto oírme contar lo sucedido, eso es todo". Que se hayan separado puede haber salpicado de emotividad aquellos textos y estos comentarios. "No, qué celos ni qué nada. Héctor Cedillo —otro secretario—, amigo mío de muchos años, ha viajado conmigo porque es bueno arreglando esas cosas de logística; Betancourt no puede haberse molestado porque fue o no para tal o cual parte". Descartó también la posibilidad de que Cecilia Matos influyera en esta demarcación de territorios. "¿Usted no me conoce? ¿No sabe que nadie influye en mí, que a mí no me dice nadie lo que tengo que hacer?".

Teodoro, mi vecino Giordani La primera cabeza con nombre y apellido pedida por la ola robespierreana impuesta por el chavismo en boga —descontando las adecas, las copeyanas, las del poder judicial, las del poder legislativo y alguna que otra de la familia— es la de Jorge Giordani, cuestionado ministro de Cordiplan, por su supuesta falta de iniciativa en la búsqueda de una brújula que oriente la desgonzada economía patria, al decir de los enardecidos pepetistas. El hombre, en realidad, como el gabinete todo, no ha podido decir ñe, porque, quién lo duda, el Presidente no deja que los micrófonos los use nadie más; ello desde que se hizo del coroto, mucho antes de prohibir a los de su equipo de gobierno pronunciar palabra en interpelación alguna. Giordani, durante el primer mes de gobierno, fue una sola vez a su despacho de Cordiplan. También de ello tiene la responsabilidad el Presidente: las largas reuniones, devenidas jornadas maratónicas de trabajo diario, impidieron que el supuesto planificador del gobierno organizara una reunión de los ministros de la economía. Mas, antes que una defensa, trátase de un alegato elevado por el invariable recorrido del automóvil oficial que lo moviliza por los mismos derroteros de la administración anterior pero con menos frenesí. Manejado por el ministro de turno, el carro va del ramal 4 de la avenida Intercomunal de Colinas de Santa Mónica a Parque Central y Miraflores, igual que en tiempos de Caldera. Jorge Giordani, como Teodoro Petkoff, desdeña tener chofer. Y viven uno frente al otro.

El soberano vivo eio Las invasiones —ya se ha dicho— no son una exclusividad de la pesadilla cha= . más bien son un episodio recurren=vista,

te de la secular pesadilla venezolana, así como los saqueos con los que se empa(7) o rentan; también los caudillos rurales asidos al sable, sus conspiraciones y golpes de Estado. No son tampoco una distinción de esta Venezuela en la que nadie quiere invertir, sino que, por ejemplo, en el Perú son ya un tradicional método de urbanización. Los llamados pueblos jóvenes (el equivalente a los barrios vernáculos) son el resultado de invasiones no sólo organizadas sino muy combatidas: mientras un piquete enfrentaba a los cuerpos de seguridad, una brigada de albañiles (por llamarlos de alguna forma) levantaban en tiempo record un caserío. Pero existe una climática variación: sin el ímpetu guerrero ni el fabril tesón de los incas, el talante tropical de por estos predios prefiere tomar las tierras mientras pueda, hasta que llegue la Guardia Nacional. Aquí, no hay la hacendosidad de los súbditos de Fujimori. Dirán que es una repugnante apreciación pequeño burguesa, pero a ver los argumentos en contra. ¿No es verdad, acaso, que aquí las cosas no se ganan por méritos —ni siquiera por las formas de lucha fuera de la ley— sino que a todo se le entra a saco: a la propiedad, a los bienes y dineros públicos, a los cargos, a los títulos académicos, al poder? Tal viveza, como la propia prodigalidad de la semántica criolla ha bautizado tan particular ethos, no obstante, empieza a elaborarse, a tener expresiones menos salvajes, aunque no por ello menos fatales. Como muestra, valga el caso de un honorable médico que desea recuperar la vieja casa en la que naciera y que en algún momento alquilara a un sujeto que, obviamente insuflado por los vientos de social vindicación, en la circunstancia de una ley que vale menos que nunca ha impuesto la propia: después de más de 20 años ocupando la vivienda, ya va siendo tiempo de que se le tenga por su dueño. Si esa es la lógica de esta revolución, es posible que tras dos períodos sentado en la silla, el inspirador de estos desposeídos se sienta dueño de ella para siempre.

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Frére Jacques

Lucía Carolina Perpetuo González C4 La sinuosa naturalidad de sus gestos es extensión emblemática O de su sensualidad. Su cuerpo es un depósito poco convencional para una inteligencia tan despierta; en su mente se asientan las

bases de una conciencia política producto de dos años de estudio en la Escuela de Ciencias Políticas de la UCV. Es una sólida

E O O

seguidora del actual Presidente, a la vez que no titubea al declararse como una antiadeca confesa. Esta deidad de la actuación venezolana nació en Caracas el primer día de abril de 1963 con la prontitud de quien está destinado a grandes cosas. En su juven-

O tud cambió las reinas, caballos y castillos de sus dibujos infantiles por el Manifiesto Comunista y las inquietudes por el proletariado. Como izquierdista defraudada pronto apagó la radio donde captaba las ondas revolucionarias de Radio Moscú, además de cancelar su suscripción a La voz de Berlín. Su rebeldía encontró

otro cauce y en 1986 se convirtió en una Miss ajena a la estereotipia de bella mujer de celofán. No siente ningún reparo en admitir que ese fue su trampolín para acceder al mundo de

V3 Recién llegado a Venezuela apeC. nas seis meses antes del anima-

O do 89, no acusa ese temor reverencia) que, aventuran algunos,

O siente la mayoría de los importa-

-4=

dos al rememorar ese año agitado. Nacido en Etroeungt, paraje al norte de Francia de incómoda pronunciación, se formó en las cocinas del formidable principado de Luxemburgo, desempeñando su labor de cuisinier-traiteur alrededor de muchos y variados fogones dentro del diminuto país. Llegado para animar la buena cocina del valle de Caracas, respondió al llamado del Hotel Tamanaco Intercontinental sin conocer mayor cosa del país que le serviría de asiento. Jacques Decrock, el francés de bronceada tez, no duda al afirmar que aquel 27F del que tanto se habla fue para él tan turbulentamente apacible como las comodidades del hotel —asilo y lugar de labor— le permitieron. Ha transcurrido desde entonces una década y no se percibe en el chef galo aquel eco que resuena en el alma de los inmigrantes retratados en la literatura; radicado en Margarita, reparte su estancia entre la isla y el programa transmitido desde hace dos años y medio por Venezolana de Televisión —aunque iniciado en TelecaribeLa cocina de Jacques compartiendo con personalidades provenientes de otros ámbitos como Oscar Yanes o Emilio Lovera. "Aunque en la pantalla me dedico más bien a enseñar, yo soy cocinero, no showman", hace saber, tal vez para diferenciarse de otros cocineros cantantes, y avisa que no cocina en casa: "En casa de herrero, cuchillo de palo", concluye vernáculo. AU

—

la televisión. Su formación actoral, algo empírica, es el producto de un

Al principio fueron dos los apóstoles de un culto que, más temprano que

con grandes figuras de la ac-

tarde, ha encontrado decenas de acólitos entre los bolivarenses más exquisitos. Quiso Dionisos que fuera Puerto Ordaz y no otra urbe la elegida para asentar la sucursal de una cofradía cosmopolita —anclada en tierras como Chile, España, Inglaterra y Hungría—, de explícitos requisitos de afiliación, ineludibles aun en estos tiempos indiferentes a las barreras que impone el género. La Asociación de Mujeres Amantes del Vino vio luz —a través de la copa, se entiende— el año pasado, producto de la pasión con que regresaron Dayana Medina —vice presidenta fundadora, sommelier por vocación— y Leonardo D'Addazio —colaborador, bendito entre tanta fémina— del Congreso Mundial de la Mujer y el Vino, donde una inspiradora Marisabel Mijares —presidenta del congreso en cuestión y "degustadora número uno del mundo", según Medina— instó a los feligreses a difundir tan particular evangelio. La congregación venezolana, que empezó con apenas cuarenta, suma ya un centenar de señoras de todas las edades en sus mesas de degustación, cursos de cata, conversaciones con importadores, visitas a bodegas, charlas y otros ritos de iniciación, imprescindibles para hacer de las guayanesas defensoras de la cultura del vino y ménades educadas, no poseídas aún por el sacro frenesí que el regalo de Dionisos induce —origen, entre otras minucias, de la tragedia, la comedia y la mitad más sabrosa de la cultura occidental. Las bacantes del sur profetizan el inminente contagio de los gustos de la cofradía por otras urbes del país.

tuación venezolana, personalidades que con su sapiencia supieron adiestrarla para explotar el potencial de su talento natural. Destaca entre los maestros con los que hizo escuela a Amalia Pérez Díaz, Carlota Sosa, Mimí Lazo, Enrique Porte, Eliseo Pereda y las propias vivencias cotidianas. También encontró apoyo académico en lecturas apropiadas de teóricos importantes. Considera que sus principios son innegociables. La lucha por mantener esa trasparencia ética le ha traído problemas en su crecimiento profesional dentro de un medio cruel, en el cual los gerentes mercenarios acostumbran darle el trato de simple instrumento para vender productos.

El sitio de encuentro: Kaldi's y Gourmet Market. Lugar de vacaciones: Los Roques, sin discusión. El libro: De adolescente, inevitable, El lobo estepario, de Herman Hesse, y a los 36, El valor de lo femenino, de Mariam Williamson.

Su canción: Penélope,

de Joan Manuel Serrat.

La suscripción: Prefiere los libros. —JPQ

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Hablan las amantes

periplo que le permitió trabajar

—ER

El busto apenas disimulado por el

lado Edén—, corona el recinto un ar-

translúcido encaje corrobora la na-

cángel de ceño severo y pálido sem-

turaleza angélica de la ninfa ataviada

blante, guardián de la noche lúbrica

de ceñido negro. El alabastrino se-

y de la cualidad alba de la tez de los

no, sin embargo, es entrevisto ape-

celebrantes. Cual festejo en honor

nas un instante; el inocente rostro,

de Afrodita Porné —la diosa del pla-

que desdice del cuerpo voluptuoso,

cer tornada perra en celo—, el con-

se confunde entre la multitud eufóri-

sumo de euforizantes brebajes dila-

ca. Ambito de ángeles —tal vez caí-

ta las pupilas y acompaña el ritmo a

dos o con alas cubiertas de raso pe-

veces sincopado, siempre animoso,

laje negro, pero nunca los ángeles

de la música ceremonial. Los círcu-

negros que cantara el blanco poe-

los concéntricos que decoran las

ta— Da Dío, en Las Mercedes, es

paredes del templo semejan los del

también paraje de lolitas que, como

cielo, pero también los del averno vi-

aquella que enfebrecía de ganas al cínico Humbert, protagonista de la ho-

sitados por Dante del brazo de Virgilio, y suponen el ornamento perfecto a

mónima y clásica pieza de Nabokov, sugieren encendidas promesas en sus

la distribución circular del local, al tiempo que las luces, impresionante su-

miradas apasionadas. Franqueado el umbral —donde Dionisio, el dueño,

cesión de incandescencias, iluminan los rostros delirantes. Reaparece de

se aposta, como Escila al lado de Caribdis, junto a un cerbero de raza no

pronto la mujer-niña, circundada por ese halo a la vez cándido y fatal, agi-

canina, para señalar a los bienaventurados que habrán de acceder al anhe-

tado el semblante y sudorosa la piel exangüe.

La solicitud dejó perplejo al célebre chefJoél Robuchon durante

su brevísimo paso por Caracas en enero de este año —asombro silencioso sugerido por la mera y apenas pronunciada expresión facial del parco y poco locuaz mago de los fogones. Acostumbrado a que le soliciten recetas de cocina, secretos de sazón, opiniones gastronómicas y hasta autógrafos, que le pidieran impronta artística y rúbrica sobre una máscara en blanco por colorear le debe haber lucido como una de esas sorpresas que anticipan desde el Descubrimiento los viajeros europeos que se acercan al trópico americano: pescados de faz canina, humanos sin cabeza y con los rasgos en el pecho y fuentes de la eterna juventud, entre otras maravillas. Cediendo a la extravagancia, gracias a las explicaciones y buenos oficios de Johnny Phelps, el maestro hizo un alto en los preparativos de la cena de Exceso en las cocinas de La Esmeralda para internarse por vez primera en el territorio de las artes decorativas. La causa, en realidad, sonaba convincente. Como explicaría el promotor, se trataba de reunir una colección de caretas decoradas

María M. de Herrera Luque y Aníbal Latuff

1 I Elizabeth Kane, Alfredo Beracasa

—Gaspard de la Nuit, hijo

por personalidades de reputación universal para subastarlas como la serie Máscaras para una sonrisa,y, con el dinero recogido con la estratagema, hacer metálica contribución a las obras de beneficencia de la Fede- Dorothy Phelps, Marcel Granie ración Wizo de Venezuela y la funda- Ena Rotkoff y Moisés Kaswan ción Casa Cuna Blanca Baldó. Dos meses más tarde, el 16 de marzo, Alfredo Beracasa y la imponente Elizabeth Kane ofrecían un cocktail en La Barraca para proclamar la realización del evento. Recibiendo en la puerta, fervoroso y atento, el mismo Johnny Phelps vería desfilar emocio- Eduardo Marturet nado bellezas y socialites, cronistas e intelec y Tina Klioumi de Mart tuales, editores y músicos, pintores y misses que colmaron los espacios de la mítica residencia de los Beracasa. Para sólo nombrar algunos, orondo, pipa en boca, Aníbal Latuff; espléndida en su productiva viudez, María Margarita de Herrera Luque; bigotes sonreídos el siempre alerta Marcel Granier; discreto, reflexivo, felino, Edgar Sánchez; rutilante en un atuendo sólo inferior a su hermosura, del brazo del director de orquesta Eduardo Marturet, su esposa Tina Klioumi, así como por lo menos un centenar más de conspicuas figuras, quienes departieron en medio de un decorado en el que la naturaleza (en los jardines) y el arte (en los salones) competían en lucha desigual, favorable a la segunda, así la primera sea divina y la otra tan sólo humana creación.

y Lilian BeracaSa de Riesterer MAYO 1999

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AP AUDEMARS PIGUET

Le maitre de l'horlogerie.

«NUESTRO PROPOSITO ES CREAR LOS RELOJES MAS REFINADOS DEL MUNDO.» tules-Louis Audemars, Edward-Auguste Piguet, 1875. Desde hace más de 120 años, la riqueza de nuestras creaciones no ha cesado de fascinar. Pero para la clientela exigente, detrás del hechizo de nuestros relojes se esconde algo más; mucho más. La verdad es que un Audemars Piguet refleja los valores más íntimos de la persona que lo lleva puesto. Y que, en el fondo, el tiempo no es realmente lo más importante.

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Peña otídico

bkiki

Cift Desde que llegó esposado y casi que hasta 0:1> el sol de hoy, el reo Orlando Castro Llanes,

ch luego de la correspondiente semana agota-

dora en la que vislumbró alguna esperanza

122 con respecto a su caso, motorizaría negocios telefónicamente —"hay que rebuscarse el dinero"—, saturaría su agenda con un sinfín de citas y participaría en la ya ambiciosa docena de programas de radio que produce para ser transmitidos en diferentes emisoras caraqueñas y del interior del país —"la publicidad que los patrocina ya me da para sobrevivir, claro que sí". Pero además, todos los viernes por la noche, abría las puertas de la casa y los que cruzaban el umbral, archianimados, ponían el resto: desde bolsas de hielo hasta juegos de recibo. Economistas, abogados, corredores de seguros, empresarios, ex empleados del conspicuo banquero, periodistas y curiosos —valga la redundancia— meneaban el esqueleto o cuan-

Hasta ahora, en ningún capítulo de El país de las mujeres al maluco ministro Peña se lo ha visto — por dar un ejemplo— viajando a Miami en la primera clase de American Airlines, y mucho menos almorzando —sin culpas quintorrepubliquistas— en el empingorotado restaurante The Rusty Pelican con su añoso fraterno, el representante de la Unión de Bancos Suizos y presidente de Seguros Sud América Samuel Berner. Es que cualquier parecido con la realidad puede dar rating, pero la idea es que la asociación parezca, luzca, sea apenas coincidencia. "Bueno...", es la respuesta que da riendo Leonardo Padrón, el autor de la teleboa, a la pregunta de si Arsenio Peña es el alter ego de Alfredo Peña: "La gente fantasea, compara, inventa...", dice culpando a los televidentes. Que el apellido sea el mismo y el nombre una versión aperentemente malintencionada del original es apenas un guiño; que el personaje tenga el talante encabritado y el cargo se equipare al del personaje real ha ido abriéndole los ojos a más de uno. "Es el tiempo el que ha armado la jugarreta. Mi Peña es, para ser franco, anterior al de Chávez". Lo que sin lugar a dudas sí no pudo ser calculado —compromisos del protagonista con el cine nacional— fue la desaparición física de Miguelángel Landa de la escena. Porque pese a la insistencia de sus advesarios en aniquilarlo, aún en las sombras, Peña sigue siendo protagonista.

Vade retro Sambil

do menos le daban felices a la lengua en el lugar de encuentro de moda del tout Caracas, la quinta Charrúa, en la vía hacia el Uro-

lógico San Román. "He pedido una peque-

Una vez abiertas las puertas del Sambil —chivo expiatorio o rabioso competidor— éstas han hecho las veces de boca de lobo para muchos centros y zonas de comercio que ven desfilar a sus otrora fieles compradores entre sus fauces. Aunque ya el descenso en ventas venía, crisis mediante, de atrás —¿tres meses, dos años, veinte?— ahora se ha pronunciado con signos evidentes el desdén de los esquivos consumidores: la ausencia de viandantes portando bolsas en sus manos y, en contrapartida, la hemorragia de carteles varios que anuncian descuentos de un 30 a un 60 por ciento en todo en vitrinas que no terminan de seducir a los erráticos mirones. Plaza Las Américas, con sus eternos problemas legales —un cartel sobre las escaleras eléctricas responsabiliza al usuario de cualquier cosa que le ocurra en subida o bajada, los hedores en algunas esquinas internas de la devaluada construcción por donde seguramente se filtran aguas non sanctas, la sempi-

terna administración de condominio que no resuelve y monta querellas con todos los inquilinos— es ejemplo de ello: la dueña de una boutique de ropa juvenil decía que en diciembre del 97 había vendido 15 millones de bolívares y que este, cinco. Para colmo de males, un anexo descomunal, protestado por los vecinos, mantiene incómodos a los parroquianos que aún se arriesgan. Más arriba, en el otrora triunfante El Hatillo, ocurre un fenómeno similar. Menos colas, menos visitantes, menos consumo. Los saldos son el leitmotiv de cada portal típico, antes suculenta fuente de ingreso de los habitantes, zaguán adentro. Son pocos establecimientos lo que aún no han padecido las dentelladas que propicia sin compasión aquel monstruo que hace rato se postrara en Chacao. Sí, ahora la falta de liquidez, la caída de los precios del petróleo, la debacle financiera tiene un nombre: Sambil. Cosas de la moda. Ocasiones en las que el oasis crea desiertos.

ña tregua; por favor, no era posible más desenfreno", se muere de risa Castro. Otrora

Entuerto de cemento

allanada propiedad del ex dueño de una co-

Otra voluta crece sobre el ofensivamente bautizado partenón, el mismo que empacha desde hace buen tiempo una de las esquinas de la avenida Casanova. A la principal controversia —la del simple espectador que, perplejo, contempla el grotesco edificio— se suma ahora otra, de proporciones tan absurdas como el esperpéntico monstruo de concreto. El inmueble, mucho más abandonado que el clásico templo que Pericles construyera para la ciudad de Atenea Parthenos, que por lo menos ve un flujo constante de turistas, es propiedad de los Capriles López, quienes han tratado de deshacerse del engendro ofreciéndoselo en venta al Hotel Meliá, pero a un precio que a lo mejor un consorcio japonés consideraría apropiado para la Acró-

losal cadena de radios, del Banco República y Seguros Progreso, la residencia aún medio vacía bullía al inicio de cada fin de semana con la alegría tropical de los incondicionales que, según el despojado anfitrión, son más, muchos más, pero no llegaron a ir todos por razones de espacio. "Pero eso se va a solucionar pronto: me están preparando un homenaje que tendrá lugar en el estadio más próximo, al que me dejen ir por mis propios pies. Vendrán autobuses llenos de amigos mios

iodo el país a darme respaldo.

empleados, gente del medio". No, por cierto, del Banco de Venezuela: "No lo podía comprar un cubano, pero parece que unos españoles sí".

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polis ateniense completa. La cadena espaíSola, que hallaría una construcción a la que le había crecido esta excrecencia de pretensiones dóricas y que más bien parece una pesadilla producida por una indigestión de garbanzos —una especie de callo arquitectónico— no quiere ni tomar ni echar cartas en el asunto y esto, al parecer, ha logrado más ceños fruncidos todavía. Mientras tanto, no cesan las fuertes plegarias de la sociedad, en pleno, que imploran la demolición del adefesio.

Mal

J. R. R. Tolkien escribió El señor de los anillos seguramente no pensó en Walter Mercado Agatha Christie escribió Cita con la muerte seguramente no pensó en Jesús Romero Anselmi Giro Alegría escribió El mundo es ancho y ajeno seguramente no pensó en los invasores Edmundo D'Amicis escribió Corazón seguramente no pensó en Augusto Pinochet Fernando Vallejo escribió La virgen de los sicarios seguramente no pensó en Maritza Izaguirre Robert Musil escribió El hombre sin atributos seguramente no pensó en Martín Pacheco Elías Canetti escribió Auto de fe seguramente no pensó en Jorge Olavarría

Caldera .._b suRafael ultima ú lt i mareelección 'al . Donald Ramírez

E otra corbata negra

C. W. Ceram escribió Dioses, tumbas y sabios seguramente no pensó en Rafael Caldera Gaston Leroux escribió El fantasma de la ópera seguramente no pensó en Luis Britto García Isaac Chocrón escribió Cincuenta vacas gordas seguramente no pensó en el comité de damas de la Fundación del Niño Marcela Serrano escribió Antigua vida mía seguramente no pensó en Angela Zago Jorge Amado escribió Doña Flor y sus dos maridos seguramente no pensó en Flor Isava Samuel Butler escribió El camino de toda carne seguramente no pensó en Osmel Sousa Julio Verne escribió De la Tierra a la Luna seguramente no pensó en Luis Alberto Machado Carlos Fuentes escribió Cambio de piel seguramente no pensó

en Ricardo Combellas José Saramago escribió Todos los nombres seguramente no pensó en la cola de los desempleados apostados

Manuel Quijada un carné del MVR

a las puertas de Miraflores

Eduardo Fernández

una uña de gato El cura Calderón una misa de difuntos Maritza Sayalero un ramito de violetas José Antonio Pérez Díaz Luis Herrera Campins el viejo partido verde 4 de mayo Pedro León Zapata un cochitigre vivito y coleando Iris Chacón una taza de su propio chocolate Tabacaleras y destilerías humo negro y caña brava Luis Alberto Machado un ministerio para el desarrollo de la intuición César Granados (Bólido) los aplausos Irene Sáez un disfraz de papá no él Carlos Croes una edición negra de la revista Viernes Jaime Lusinchi una hipoteca de segundo grado Rafael Tudela una boina roja de la sombrerería homónima Oswaldo Alvarez Paz el hacha para hacer leña del árbol caído Antonio Casas González una monedita de oro con su efigie Hugo Chávez Frías una cita por cada refrán Vinicio Carrera un viaje a Toronto 16

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MAYO 1999

Stefan Zweig escribió Veinticuatro horas en la vida de una mujer seguramente no pensó en Carmen Ramia Adriano González León escribió País portátil seguramente no pensó en Marcos Pérez Jiménez

Eldy Alemán Aprendió a golpe de azahar que los caballeros no hablan

Humberto Briceño León Terminó de deshojar la margarita

José Ramón Lazo Ricardi Lo perdió una pistolada

Fernanda Montenegro Hollywood quedaba muy lejos de la Estación Central

Andrés Caldera Negó ser pimentón, pero igual acabó en salsa

Mari Pili Hernández Pro que Chávez engorda Iffr a las damas

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LA CENA DEL MILENIO, efectuada el día veintiséis del pasado febrero, resultó un éxito sin precedentes, algo realmente emocionante: en una subasta realizada durante el transcurso del ágape, en la que se pujaron nueve humidores firmados durante la velada por el presidente cubano Fidel Castro, se logró recaudar nada menos que setecientos cincuenta mil dólares a beneficio de organismos de salud de la isla antillana. Los humidores contenían habanos confeccionados especialmente para la ocasión; así, el Cuaba Salomón, Trinidad Robusto y Cohiba Gran Corona hicieron las delicias de los compradores. Por vez primera se ofreció un nuevo formato de Trinidad, el robusto A, para ser degustado luego del condumio. Se consumó, también, el sorteo del codiciado Humidor del milenio (ya reseñado en esta columna), propiedad desde entonces de un afortunado comerciante llegado de la remota Hong Kong. Tuvieron la oportunidad los asistentes de apreciar alelados el esplendor del salón de protocolo El Laguito, usualmente reservado para agasajos a jefes de Estado, al tiempo que escuchaban el discurso pronunciado por el líder barbado, que no dejó de arrancar lágrimas a algunos de los concurrentes. Para finalizar, los animados tonos de la música cubana alborozaron el alma de los invitados hasta altas horas de la madrugada.

ENTRE LOS oías 22 Y 25

la oportunidad de participar de conferencias dictadas por importantes personalidades del mundo del tabaco. Marvin Shanken, editor de la conocida Cigar Aficionado; Alyson Boxman, editora de la revista Smoke; José Ilario de la publicación española Epicur; Eusebio Leal, historiador oficial de la ciudad de La Habana, e importantes miembros de la directiva de Habanos S.A. hicieron del tabaco objeto principalísimo de interesantes ponencias. Temas de una importancia vital como El rol del comercio en Internet para el futuro de las ventas de Habanos, Estrategias para combatir las falsificaciones en el nuevo milenio y El viaje del habano a través de las publicaciones fueron profusa y brillantemente tratados por sesudos expertos. Se aprovechó, además, para realizar el lanzamiento de los nuevos libros: Habano es el rey, de Adriano Martínez, y Arte y mística del habano, de Orlando Quiroga. PARA DELEITE DE LA COLONIA ITALIANA y disfrute del público en general, Havana Cigar, distribuidor único de Habanos para Venezuela, ha anunciado que importará próximamente la línea de tabacos Toscano. Estos reputados puros comenzaron a fabricarse en Florencia en el año de 1818, y desde entonces han sido continuamente elaborados a mano o a máquina, según el modelo, utilizando hojas de la variedad Kentucky cultivadas en la península itálica. Su fuerte carácter y marcado aroma

DE FEBRERO asistieron al seminario los hace apreciables para Habanos en los umbrales del 2000 más de mil delegados provenientes de todo el orbe; allí tuvieron

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los fumadores experimentados.

—Juan Luis Brandt

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Montones de cosas —muchas de ellas muy malas y muy ciertas— pueden decirse del Occidente moderno y de su arraigada tendencia imperialista, pero afirmar que no le gusta comer, y preparaciones siempre nuevas y cada vez más extrañas, sería una perogrullada imperdonable. Es quizás allí, en el terreno de la mesa tendida para el condumio y en la fruición con la que se anticipa el advenimiento —en dos platos o más— del mundo, donde es justo y necesario juntar las manos —o abrirlas mirando al cielo al mejor estilo pagano— para agradecer, si no a dios, al menos a los conquistadores y colonizadores de Europa, por las delicias que permiten que el alimentarse sea, más que un acto de supervivencia, una manera de conocer, reconocer y celebrar la diferencia. En la carta del Bar Sí conviven, en afirmativa y sacrosanta paz, platos de diversos países del Oriente. En una especie de tour —que no tiene nada de de force si el comensal está dotado de un estómago ajustado a las dimensiones del imperio global—, pueden tenerse sobre la lengua los regustos de Tailandia, Vietnam y Japón. Algunas de las combinaciones de dulce y picante, como la salsa vietnamita de albaricoques, hacen recordar que no en vano el país que tantos titulares —y malas películas— produjera en este siglo fue colonia francesa. Los condumios del antiguo Siam le ponen coco al asunto. Los platos nipones, por su parte, dan fe de que la comida del Imperio del Sol Naciente es mucho más que sushi. —Alejandro Dumas Nieto

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nte Exclusivo para V'enézu, a

a Roberto Colmenares En vuelo rasante por Caracas hizo hincapié en la labor altruista que adelanta, además de vanagloriarse por haber creado el "vestido más feo del mundo", un prototipo hecho con retazos y desechos que varias clientas no vieron como tal y adquirieron por cerca de 15 mil dólares. Mas la verdadera dimensión del trabajo que realiza el venezolano Guillermo Mariotto en Gattinoni rozó niveles excelsos cuando, pa-

Adriana Lima— ha dicho: "Conmigo ellas se sienten muy bier Están desnudas y no piensan ei ello...". Entre• gada a los encargos de Vogue, The Face y Arena, co-

merciales de TV y videos musicales, presentó hace poco el libro Coupies, que hace trío con Snaps, el primero, publicado en 1994. Preparaba una presentación a montar en el Centro de Fotografía de New York cuando, clasificando fotografías suyas, notó la profusión de aquellas centradas en parejas. De allí las 193 imágenes de Coupies. Con megaciudades hechas

ra el reciente pase háute couture de la casa romana, ideó un traje de noche rematado con una falda viviente: seis personas cubiertas por metros de meryl nexten negro —fibra de polyamida desarrollada en los laboratorios de Nylstar— contorsionándose ampulosamente al paso de la maniquí. La reacción de los asistentes, acostumbrados a los vuelos de tul, crinolinas y encajes de las presentaciones de alta costura, fue el estupor... Amalgamar candor y erotismo, alegría de vivir y decaden-

cia, lo espontáneo con lo teatral, es cosa de Ellen Von Unwerth, quien abandonara en el 86 la carrera de modelo para entregarse a la fotogralla de moda. Esta alemana, reconocida por trabajar básicamente con chicas —dedicó enteramente el libro Wicked a la modelo brasileña

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de vertiginosos flashes de jeans, hamburguesas, videojuegos, música techno, estimulantes y robots, la juventud es la más fuerte referencia de la moda, la publicidad y el consumo contemporáneos. Con atmósferas de sugerencias más escénicas que emotivas, más cinematográficas que literarias, los creativos que profundizan en las motivaciones de quienes componen los mercados se encuentran, además, con la retira-

da del añoso conflicto entre los valores tradicionales y los de fresca data. Tal es el punto de despegue de los códigos de estilo de la próxima centuria, a partir de una década que fenece y donde la verticalidad de la familia, ente fundamental de gran parte de las sociedades, se desdibuja para dar paso a los jóvenes como protagonistas emergentes y privilegiados de los escenarios del neoconsumismo. Temporadas atrás, la maison Versase, asidua a matizar

los desfiles con pistas mezcladas en exclusiva por quien se llamara Prince, tuvo como discjockey a Boy George; pocos intuyeron el surgimiento de las nuevas figuras de la moda. Aunque top models y creativos de oficio disipan tensiones al ritmo de notas pinchadas por dj's en clubes como Les Bains o Queen, para el máximo reconocimiento fue necesario que nada menos que el conocidísimo Giorgio Armani acogiera en su local de París a French Touch, una jornada de música continua dirigida pJr Gregoir, Vas dei Kojac, Bob Sinclair, Crabbe y Jess, estrellas de la pléyade tecnomusical engrosada por Goldie, Laurent Garnier, Nova Nova, Philippe Zdar, Madame B, Dele Ladimeji, Frédéric Galliano, Harvey Basset, Wild, Princess Julia, Kenji, Chrisco, Kester Thompson, Scan X y Tim `love' Lee, entre otros. Ellos han pasado de la gran escena nocturna a posar, vestidos de firma, para notables revistas de moda.

Mirrana Márquez

Comprimido saber Con la incorporación de la tecnología al uso cotidiano y a la enseñanza, los libros se han visto avasallados

por los productos informáticos. Para no quedarse atrás, la empresa Encyclopxdia Britannica presentó en el mercado venezolano el Sistema Cultural Educativo Multimedia. Esta nueva herramienta acopla la información que contenía la tan conocida Enciclopedia Hispánica de 18 volúmenes, la Lexipedia en tradicional papel

y varios videos educativos en un único CD ROM, ideal no sólo para los jóvenes sino también para utilizarlo como fuente de datos en general. Telf. 800-23333

Opera prima La francesa Emma Shapplin apenas cumple este mes el cuarto de siglo y ya se vislumbra como una de las figuras más cotizadas de la música pop. Su primer trabajo titulado Carmine Meo —presentado por la disquera Emi— contiene letras en provenzal, italiano y latín, y combina formas musicales antiguas

con arreglos contemporáneos. La pasión por el canto le afloró a corta edad, cuando iba a la ópera y a los recitales con sus padres. Más tarde perteneció al coro de la escuela y pocos años después era aceptada por el Conservatorio Nacional de Música en París. A los meses ya estaba grabando este disco que sería presentado a las radios internacionales con gran éxito.

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Mi, la, re, sol Para colaborar con la disfusión de la música académica venezolana, la Fundación Bisagra presenta la reedición del disco Violin Concerto, título alusivo a la pieza compuesta por el maestro

Gonzalo Castellanos Yumar. La interpretación está a cargo de la Orquesta Sinfónica de Londres dirigida por el compositor, contando con la actuación del virtuoso violinista francovenezolano Maurice Hasson. La grabación original de la obra fue realizada en la capital británica en 1983 en formato digital, lo que permite mantener la calidad del sonido a través del tiempo. Este trabajo será distribuido en Venezuela de manera exclusiva por Producciones Apio. Telf. 284.0775.

Máximo estilo Con algún tiempo en el mercado venezolano, la exitosa marca BCBG del creador Max Azria ya tiene en sus anaqueles la última colección perteneciente a las estaciones primavera-verano. Después de varios años trabajando en su París natal, el diseñador se fue a Estados Unidos, país en el que creó la firma en 1989. El nombre, que responde a las siglas de la expresión francesa Bon chic, bon genre,

Intimidad con gusto Varios años al frente de la tienda

El Morrocoy Azul dejaron huella en Luciano Gimón, uno de sus dueños. La necesidad del público por tener una atención más personalizada

y acceder a mayor información

en lo que respecta al arte llevaron a Gimón a crear —como en muchas ciudades del mundo— un hogar-galería. En este espacio el cliente tiene la oportunidad

Pensar con emoción Las psicólogas Gina Moya y Claudia Spangher coordinan todos los meses en la Casa Rómulo Gallegos el seminario Inteligencia emocional para las mujeres que trabajan con un sólo

día de duración. En ocho horas, los sábados 22 de mayo, 26 de junio y 17 de julio, un reducido grupo de féminas profesionales se reunirá para tratar ciertos aspectos que se relacionan

de entender cómo se vería una pintura de tendencia popular o una obra de las artes del fuego en un ambiente de casa y con un inmejorable precio. Esculturas, objetos utilitarios, juguetes de madera y orfebrería, entre otras piezas realizadas por artistas incipientes y premios nacionales del área pueden ser observadas y adquiridas en el apartamento del dueño con previa cita. Telfs. 284.4139 y (014) 206.8617.

ha encontrado, en menos de una década, eco en las principales ciudades del mundo. Los más recientes vestidos, faldas, pantalones y camisas para la mujer se caracterizan por tonos cítricos y cortes sencillos que se asemejan a los usados en los cincuenta. C.C.C.T., nivel C-2, Chuao. Telfs. 959.1093/3970.

con la vida laboral y sentimental. Los objetivos principales son reconocer las emociones propias y las de los compañeros de trabajo para entenderlas y canalizarlas adecuadamente, generar motivación y entusiasmo y aprender a manejar las tensiones y disfrutar del trabajo. Inf. Instituto de estudios humanos Avicena. Telfs. 985.5133 y 271.4036.

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Suiza a sus pies La empresa suiza Bally —que cuenta con casi 150 años de ininterrumpida producción— ha estado muy atenta durante todo su tiempo de vida para no dejar a un lado las innovaciones en materia de diseño, sobre todo en lo que respecta a calzado y carteras. Con cada cierre de temporada y al iniciarse otra estación, las quinientas tiendas en todo el mundo —incluida

Pasarela para todos

la del Centro Sambil en Caracas— se dan a la tarea de proponer las mejores ofertas en zapatos para damas y caballeros, con diseños clásicos o más

A comienzos de la década del

actenta nacía cl iniperit, del

diseñador Giorgio Armani. Veinte años más tarde iniciaría la cadena de locales A/X —Armani Exchange— inspiradas en las tiendas P/X establecidas durante la Segunda Guerra Mundial y que se caracterizaban por los precios asequibles de las prendas de vestir. Los cortes de las telas,

Por amor al arte Para muchos, resulta triste

vanguardistas como los de las sandalias. También se pueden adquirir pañuelos y carteras

con distintos tonos, Nivel Feria, sector Forum Shops. Telfs. 267.1489 y 267.9327

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observar la poca presencia del arte venezolano en los propios museos del país debido, la mayoría de las veces, al bajo presupuesto para la adquisición de nuevas obras. Ante esta manifiesta falta de dinero —y de interés—

los tonos y los modelos de la ropa son identificados Loa facilidad por los amantes de los atavíos de la firma italiana. Desde hace unos meses los venezolanos pueden darse el placer de adquirir las cuatro colecciones presentadas en siete entregas anuales con el sello distintivo del creador europeo. Centro Sambil, nivel Libertador. Telf. 265.3777. de las instituciones para la compra de obras nacionales, el Museo de Bellas Artes se ha dado a la tarea de recolectar piezas artísticas venezolanas y latinoamericanas con la ayuda de donaciones de particulares o empresas. La reciente

colección, dedicada sobre todo a creadores contemporáneos, estará abierta al público hasta finales de este mes.

* La botella de la vodka sueca Absolut ya representa un símbolo en la cultura de la juventud internacional. Para continuar innovando no sólo en la publicidad impresa sino en la audiovisual, hace poco se filmó el comercial Hey Stranger!

Los amantes de las conocidísimas papas Pringles podrán ahora saciar su apetito sin tener que incurrir en la pecaminosa gula. Desde hace poco se consigue

en los anaqueles venezolanos, aparte del tradicional tamaño de 180 gramos, el más moderado de 56 gramos con los cuatro sabores de siempre —original, crema y cebolla, queso y las onduladas.

* La compañía de automóviles Chrysler lanzó a las carreteras venezolanas el nuevo modelo Grand Cherokee 99 con una forma de presentación diferente a las tradicionales. Cuatro pistas de prueba en las principales ciudades del país dieron la bienvenida a los conductores que quisieron comprobar la calidad de la camioneta. * Para proscribir las cortadas e irritaciones en las caritas de los venezolanos, Shick creó la nueva afeitadora Protector que consta de unos microalambres de seguridad que reducen al mínimo las cortaduras. El novedoso diseño fue ideado en Alemania y cuenta con un modelo para hombres y otro para mujeres.

que actualmente se proyecta en los principales cines del país. En un minuto se intenta una síntesis de la estética que encierran las películas de Hollywood. * Una vez más la fascinación por el cuidado del rostro se hace sentir en el mercado internacional. En esta oportunidad la gente de Clinique, empresa con gran aceptación en el mundo, dio a conocer All about eyes, una crema con textura de gel que no deja residuos en la piel, una excelente opción para la fatiga de la zona cercana a los ojos.

* A principios del mes pasado la empresa Rolex celebró la décimosexta edición de la competencia de veleros que tradicionalmente ha venido auspiciando. Las embarcaciones participantes realizaron una travesía de tres días por el Caribe en lo que se denominó la última regata del siglo.

CLINIQUE all about eyes —md 111~~~11111111, MAYO 1999

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c osta Alejandra Vegas

:11 Para no dejar de lado las ya ancestrales referencias literarias que han acompañado su tránsito desde que a Shakespeare le diera por dramatizar la historia, la familia real inglesa vuelve a dar que hablar. Ahora la Reina Madre —Lewis Carroll por delante— parece haberse convertido en la Reina Roja, por el color en el que aparecen las cifras del otro lado del espejo de su cuenta bancaria. Sobregirada en años Su sobregiro alcanza los cuatro millones de libras. Para quien se pregunte en qué puede haber gastado tantísimo dinero una mujer que envejece al mismo paso que el siglo —tiene ya 98 años— la respuesta es tan sencilla como descabelladamente británica: su fidelidad al restaurante del Ritz, su pasión por coleccionar objetos de plata y costosas antigüedades. Pero lo más probable es que se salve de amonestaciones por su simpatía, por su inigualada popularidad porque, seguramente, alcanzará a ver arrancar el nuevo milenio —y su propio centenario— con esos mismos ojos con los que vio a Eduardo VIII renunciar al trono, a Inglaterra salir victoriosa de su enfrentamiento con Hitler y a los hijos de su hija Isabel II transformar al sacrosanto y ejemplar linaje de los Windsor en

una familia cualquiera. * Hubo un tiempo en que las "nanas" de las celebridades —es decir, sus publicistas— temblaban ante el hecho de estar perdiendo el control de

ser desenmascarada por los periodistas en su búsqueda de satisfacer el morbo de sus lectores y lograr más ventas. Esto parece haber llegado a su fin, pues los publicistas están retomando el control. Ponen tantas condiciones para cada entrevista que, aunque suene contradictorio, los reporteros están perdiendo su libertad de prensa. No sólo eso, los famosos y sobre todo los jóvenes, se han dado cuenta de la gran demanda que existe por ellos y ahora se ponen duros ante cualquier petición de ser entrevistados. Los periodistas están dispuestos a todo para tener el privilegio de hacer un celebri-

ty profile,

pues el público nunca dejará la linda manía de meter la nariz en la vida de sus héroes. El problema es que lo único que están ganando es la pérdida del significado que — se supone— existe en el periodismo. Sin embargo, como todo cambia, quien sabe si el año que viene los que estarán de rodillas serán las

lo que lag revistas publicaban sobre celebridades y sus representantes sus niños mimados. La vida "glamorosa y perfecta" de las estrellas corría constantemente el peligro de 26 EXCESO MAYO 1999

ha hecho realidad su deseo: abrir un restaurante en New York, pero ahora le parece que uno no es suficiente. Además de Palladin en Time Hotel, quiere abrir otro lugar llamado Jean Louis, Gusanitos en la Gran Manzana en donde está Bombay Palace en la calle 52, con el respaldo de sus jefes del Rio Hotel de Las Vegas, donde dirige el Napa. * En 1997, el diseñador David Tang abrió con mucho éxito su tienda Shangai Tang en la conocida Madison Avenue, donde solía brillar Express. Pero, dos años más tarde, la una vez aclamada tienda está a punto de decir adieu, a pesar del esfuerzo de sus dirigentes por mantenerse en el tope —que es el único lugar en el que se puede estar para tener un puesto en las pocas y deseadas quince cuadras importantes (de la calle 57 a la 2). Shangai Tang no es la única que parece estar llegando a su ocaso. Las rentas, que van de 500 a 600 dólares por pie cuadrado, deciden quién se queda y quién se va. Aun así, lo importante ya no parece la sombra de la quiebra, sino poder tener, al menos por un tiempo, un espacio en la cotizada avenida de Manhattan. Para muchas tiendas, sólo evitar las cifras rojas es estar bien, razón por la cual algunas cadenas importantes tienen una tienda en Madison más por publicidad y renombre que por las ganancias. Palladin

por la oportunidad de aparecer en la portada de las revistas más leídas. * El chef francés Jean Louis

En el último apio y pico, las cosas se han puesto fuera de control. Como declarara un administrador en The Ney York Observer: "No creo que

sean buenos tiempos para nadie. No veo que estas rentas suban mucho más sin crear serios efectos sobre las ventas al por menor en Madison Avenue". Mas aún nada ha colapsado, y aunque conocidas firmas como Limited, Nine West y Waterford Wedgwood no han soportado el trote, otras como Hermés, Donna Karan y J.P. Tod's andan viento en popa. * La conejita Cindy Guyer quedó fuera del último número de la revista Playboy. Resulta ser que su coworker, durante una sesión de fotografía, se emocionó demasiado, perdió el control y se volvió como loco. El compañero de trabajo así afectado no era otro que el caballo sobre el cual la agraciada dama posaba como Lady Godiva. El noble bruto arrancó a correr y lanzó por los aires a Guyer, quien aterrizó, en pelotas, sobre hiedra venenosa. La La loca Cindy a caballo Guyer comentó que, aparte de lo adolorida que quedó, no pudo trabajar por un mes, pues ningún maquillador se atrevía a tocarla. Comprensiva, no guarda ningún rencor a Playboy —aunque sí al primo americano de Frijolito. Dice que los representantes de la revista se han portado de lo mejor pagando todas las cuentas médicas del incidente —aunque un portavoz de la revista dice que no hay cuentas que saldar pues el accidente no pasó de un susto. Los que sí estarán preocupados son los que alquilaron el caballo a la revista, ya que Cindy Guyer planea demandarlos. IA

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el mundo laboral ya no se restringe a "gliiMP"

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Froilán Fernández

Cada día son más las actividades profesionales que se liberan de las ataduras sedentarias de la ••••• oficina. La comunicación se hace cada vez más ligera y, para transmitir cualquier tipo de información a cualquier parte del mundo, ya no hará falta estar amarrado a un alambre pleando los diversos sistemas de telefonía inalámbrica vigentes. Los altos costos de un tendido de cable para llegar a los hogares con una oferta de telefonía básica están hoy fuera de toda consideración. Quienes ya realizaron la inversión de cableado —por ejemplo, los operadores de TV por cable— lógicamente comenzarán a ofrecer servicios de telefonía, entre otras alternativas. Como resultado, los usuarios verán crecer el ramillete de opciones tanto en el número de proveedores como en la diversidad de servicios posibles. con la ayuda de un cable especial y un modem— servir de ruta de acceso a Internet. Si se dispone de un computador ultra portátil, de esos que pueden manejarse en la palma de la mano, la red de redes puede acompañar a cualquiera a cualquier sitio donde el servicio celular tenga cobertura. La razón por la que aún no haya podido verse a un presentador famoso mostrando páginas web desde los médanos de Coro o desde el suave vaivén de un chinchorro en un hato llanero es que esos celulares no están concebidos para transmisión de datos. Aun si se emplea el modem casero más presuroso (56 mil bits por segundo), el sistema celular no va más allá de los 14 mil bps (o 28 mil bps, en el caso de las operadoras regionales que emplean el sistema europeo GSM). Pero no hay que perder la esperanza: una operadora celular está por lanzar el buscapersonas para Internet que, además de recibir los tradicionales mensajes, dará acceso a correspondencia electrónica, aunque con límites para recibir la totalidad de los mensajes muy largos. Con un pequeño teclado, podrá luego contestarse a los remitentes a través del éter. Este servicio de correo electrónico encierra dos variaciones respecto al Internet tradicional: no requiere de los equipos convencionales (PC, modem, teléfono) y la tecnología que Los teléfonos celulares actuales permiten

hace cuatro años con la explosión del mercado de teléfonos celulares en Venezuela. La mayoría de las estimaciones de esa época veían el 2000 como el año en que se alcanzaría la rentabilidad y contaban iniciar el milenio con 200 mil usuarios. En la actualidad, Telcel y Movilnet acumulan un millón 750 mil afiliados, y si se incluye en la cuenta a los afiliados que atraerán las tres empresas regionales —que funcionan en el ámbito rural pero ofrecerán también celulares a sus afiliados, con cobertura en las ciudades— las estimaciones se quedarán cortas por un factor de 10, pues muy probablemente se sobrepa§arán los dos millones de usuarios de telefonía móvil al inicio del 2000. Pero el auge de la telefonía sin hilos no se detiene allí. Los competidores potenciales de Cantv ya han comenzado sus proyectos de infraestructura para ofrecer telefonía básica emNi los más osados planificadores soñaban

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permite el acceso a la red es transparente para el usuario, quien se libera de configuraciones complicadas y tediosas. Esta es la clave de muchos dispositivos que aparecerán en el mercado para mantener a la gente comunicada. Nuevos tipos de teléfonos celulares aparecen para integrar L_ unaFc)FtIVIA11-11,C.A

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funciones de agenda y de libreta de direcciones y de acceso a la red. Esto significa que los teléfonos deben alojar un minúsculo computador en su interior, aunque dedicado a administrar la información personal de cada quien. los propulsores de las redes de datos han hablado primordialmente de llenar de cables las ciudades para garantizar que las oficinas y los hogares tengan acceso instantáneo a la información. Hoy se oye a diversas compañías hablar de la revolución inalámbrica y de Internet inalámbrico. Los fabricantes de teléfonos, por ejemplo, han anunciado planes para entrar en ese mundo de la red de redes sin la incomodidad de los cables. Motorola anunció recientemente que su línea completa de teléfonos estará habilitada para Internet antes del año 2000. El fabricante suizo Ericsson, por su parte, dice que ha mejorado la tecnología de sus teléfonos móviles para acceder a las redes a una velocidad 40 veces mayor a la actual. Alcatel, el fabricante francés de equipos de telecomunicaciones, está en conversaciones con 3Com, el fabricante del organizador digital PalmPilot, para desarrollar estándares técnicos que permitan enviar voz y datos por medio de redes inalámbricas. Aunque existen modems celulares en la actualidad, las compañías no han introducido dispositivos portátiles dirigidos a una audiencia masiva. Symbian, creador de un sistema operativo que puede ser Desde la Introducción del modem,

encapsulado en diversos dispositivos, como teléfonos celulares y buscapersonas, está fraguando una alianza con Sun Microsystems para crear una plataforma de operación estandar para dispositivos de computación móvil. Symbian es liderizada por el fabricante inglés de organizadores digitales Psion e incluye como accionistas nada menos que a Motorola, Nokia y Ericsson. En un estudio del Instituto para el Futuro 96

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www.iftf.org —, realizado en 1996, se consideran hogares informatizados aquellos con al menos cinco de los siguientes dispositivos: videograbador, CD, disco láser, fax, contestadora telefónica, un sistema de correo de voz, computador o teléfono celular. De repetirse este estudio, tendrían que incluirse necesariamente el disco versátil digital o DVD, y el acceso a Internet como nuevos indicadores del acceso a la información. También puede esperarse para el 2000 el surgimiento de las redes caseras para integrar diversos dispositivos entre sí y para comunicarlos con Internet. A pesar de que ya los computadores traen el software necesario para hablar entre sí, el salto de complejidad, para un usuario promedio, entre la operación individual de un PC y la conexión en red es enorme. Por eso se han propuesto esquemas de conexión fáciles de aplicar, algunos inalámbricos entre ellos. Sólo sería necesario añadir a cada computador y dispositivo a ser conectado un módulo adicional de transmisión y recepción de información en forma de ondas de radio. Hay incluso propuestas de habilitar equipos periféricos para que puedan compartir información. Al conectar, por ejemplo, una cámara digital a esa red, el resto de los dispositivos la incluiría inmediatamente en una especie de catálogo de servicios como una fuente de imágenes digitales; un reproductor de CD se vería como multi funcional, capaz de reproducir audio, como fuente de melodías para ser trasladadas a Internet o como un recurso de almacenamiento si se trata de un CD con capacidad de escritura. Aun sin establecer redes, se puede aprovechar la tecnología que ya viene incorporada en los equipos más recientes. La tecnología infrarroja es una de estas; tanto las computadoras portátiles como muchas de las impresoras actuales vienen equipadas con puertos infrarrojos, lo cual permite la impresión sin cables desde cierta distancia. Venezuela es uno de los pocos países en los que

coexisten las tres principales modalidades de telefonía celular digital: CDMA, TDMA y GSM. Lo que parece una sopa de letras un poco complicada

sirve para designar los métodos empleados por las diferentes operadoras con el fin de hacer un uso más eficiente del espectro de frecuencia asignado. 32

SUPLEMENTO ESPECIAL INFORMA-TOCA

Movilnet fue quien inició la digitalización y escogió el estándar TDMA (múltiple acceso por división de tiempo), es decir que varios usuarios hablan al únisono por un mismo canal, pero el sistema se encarga de atender a cada quien en lapsos infinitesimales distintos. Telcel discrimina las llamadas que coinciden en el mismo canal con códigos diferentes (CDMA, o división de múltiple acceso a través de códigos). El adelanto de Movilnet en el proceso de digitalización le permitió a la compañía ofrecer más servicios y contrarrestar así la abrumadora campaña de Telcel, que lo superó desde el primer momento en cobertura. Otra ventaja que también publica Movilnet a los cuatro vientos es la dificultad de clonación cuando un teléfono es digital. Los dos proveedores enfrentan ahora la competencia de Infonet, Digitel y Elca que están comenzando a brindar servicio de telefonía fija en

zonas rurales del occidente, centro y oriente del país, respectivamente. Estas operadoras, con una modalidad tecnológica común —la norma europea GSMno sólo comenzarán en breve a ofrecer telefonía celular en sus áreas de influencia, también se interconectarán entre sí, lo que introduce en la práctica un competidor para Telcel y Movilnet. realizada en Hanover, se mostraron por primera vez teléfonos celulares de banda dual —que pueden ser usados en dos sistemas distintos de telefonía celular. Siemens lanzó el teléfono C25, de diseño compacto —117 x 47 x 27 mm y 133 gramos. Dirigido a los jóvenes, el C25 puede programarse con timbres distintivos de música techno que fueron creados por famosos DJ's. En Venezuela, una adaptación del C25 permitiría acceso a la red GSM de las empresas regionales de telecomunicaciones y a una de las operadoras celulares actuales. Siemens también mostró una increíble solución de transmisión de datos empleando los cables de energía eléctrica. Ericsson integra un organizador digital a un teléfono celular compacto. Los primeros intentos de mezclar un celular con una agenda electrónica resultaron en aparatos muy grandes para el estilo de los celulares actuales. Con este modelo se ha conciliado el todo-en-uno celular con libreta de direcciones, citas, cosas por hacer, calculadora y, por si fuera poco, libreta de notas. Cuando se señala una persona en el directorio telefónico se puede marcar inmediatamente el número, pulsando sólo un botón. Siguiente estación, el 2001: el celular recibe texto y, ¿porqué no?, imágenes. En la reciente feria CeBit,

El conocido PalanPilot, de 3Com, va ya por la versión

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V. Al asistente digital personal que se negó a trabajar con Windows le han salido varios rivales con una versión del ambiente de Microsoft. El Windows CE, diseñado para computadoras de bolsillo, se integra a organizadores sin teclado, muy similares al Pilot, y con el look and feel de Windows. Los aficionados a este ambiente prefieren seguir trabajando con una réplica del ambiente del PC de escritorio y usar las mismas herramientas para la organización de la información personal. La última ofensiva de Windows CE contra el PalmPilot la lleva a cabo Compaq, con el Aero 2100 a color. Se presenta muy cercano en precio a la última versión del PalmPilot, el Palm V, con cubierta de aluminio y un diseño estilizado. Otra versión del Pilot es el Palm III, preferido por quienes creen que no necesitan tanta memoria para llevar el control de sus

citas y de sus direcciones.

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¿Lo último en seguridad? Activar el celular con un toque personal. Siemens incorporó la biométrica en este celular para que reconozca la huella dactilar de su dueño y bajar la posibilidad de fraude a valores muy cercanos a cero. L ES.1.1ECIA1_ INFORMA-1-1CA

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Mayor velocidad y capacidad de almacenamiento están cada vez más al alcance de los usuarios de las computadoras personales gracias a un avance tecnológico que a la larga se traduce en una relación de más calidad a menor costo. La puesta o

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en circulación de los ordenadores Pentium III llevaría este proceso a límites que invitan a reconsiderar seriamente las posibilidades

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El advenii de los

de la computación en casa

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Con dos décadas de evolución a cuestas, la compu-

tadora personal comienza por fin a transitar el camino de la racionalidad. Hasta hace tres años podía considerarse injusto que el precio del último computador se mantuviera en las vecindades de los tres mil dólares; modelo tras modelo, la tecnología se conformaba con llegar un poco más allá del umbral de las élites. Aun en Estados Unidos, el mercado de las computadoras personales se mostraba elusivo a los fabricantes y es apenas en los últimos meses que los PCs han logrado ir más allá del 50 por ciento de los hogares. Los hechos que después conducirían a la producción de ordenadores más baratos comenzaron a gestarse desde inicios de 1997, cuando la industria del PC se propuso poner algunos modelos en el mercado por debajo de los mil dólares. Hacia finales de ese año, los computadores sub mil, de marca, ya eran una realidad; Compaq, IBM, Dell y HP vendían sin rubor equipos bien configurados para el usuario casero al precio de 999 dólares. ¿Cómo se dio esta concesión a los usuarios? Simplemente los computadores progresaron tan rápido, se sucedieron tan rápido los diversos modelos, que el usuario final se encontró repentinamente con una sobredosis de poder de cómputo. Era perfectamente posible manejarse con la penúltima tecnología,

Se daban también las sutilezas. La máquina barata se mueve generalmente con prótesis tecnológicas y no necesariamente con el corazón o el cerebro de marca Intel. Por otro lado, las ventas directas por parte de fabricantes como Dell, Micrón o Gateway también empujaron los precios hacia abajo. que pueden emplearse para medir el rendimiento de los computadores hay dos esenciales: la velocidad y la capacidad de almacenamiento. La velocidad del procesador está determinada por lo que se conoce en la jerga de la informática como reloj, aunque curiosamente no mide el tiempo, sino que se limita a generar el tic-tac, los pulsos que le marcan el paso al procesador para que éste pueda sincronizar todas sus acciones con todos los componentes que lo rodean. La frecuencia de ese marcapasos que los computadores hogareños requieren pasó de algunos millones de ciclos por segundo en los computadores iniciales a los 500 millones de ciclos por segundo, esos 500 megaherzios que exhibe orgulloso el novísimo Pentium III. En cada una de esas infinitesimales divisiones del tiempo, el procesador efectúa una operación elemental, carga una dato de la memoria, lo cambia de lugar en su inmensa e interna complejidad o responde a una interrogante en su lenguaje Entre las múltiples variables

con el PC de antes de ayer, y cumplir con las tareas propues , simplificado de ceros y unos. tas. Aparte de los juegos caseros, más del 90 por ciento de los usuarios del hogar manejan el computador como máquina de escribir sofisticada o una calculadora de lujo para mantener conciliada la chequera. 36

S. U 11.•

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Si, frente a las tareas cotidianas de un usuario promedio, el rendimiento del Pentium III parece un derroche, hay tareas de despliegue gráfico que demandan un gran poder de cómputo que hasta ahora el ordenador de escritorio no había po-

S P E CIAR_ 11,1FC)Fth/likirlicx.

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tancia respetable de los Pentium III de 500 MHz que hoy le quitan el sueño a más de uno, pero no necesariamente muy rezagado. Hay máquinas Pentium II de 400 ó 450 mhz, configuradas como para un científico de la lare. goin Nasa, que están en el rango de los 2 mil a 3 mil dólares. Y tiene suerte: cuando esos novísimos Pentium III estén pateando la calle, las máquinas de penúltima tecnología van a bajar más aún. Las características novedosas presentes en los modelos de alto rango son tres: una unidad de DVD en vez del CD ROM, pero compatible con los discos actuales; puertos USB o seriales universales que realmente le facilitan la vida a la hora de conectar una cámara o una impresora y unidad de almacenamiento de 100 MB ó 120 MB ya incluida. Aquí hay varias opciones: las unidades Zip de 100 MB y las unidades de 120 MB que son compatibles con los diskettes de 1,44 MB. La Zip está más difundida, pero la denominada Super Disk tiene a su favor la compatibilidad y 20 por ciento más de capacidad. Fujitsu está estrenando una unidad de 170 MB, también compatible con diskettes. La compañía Apple, por su parte, se salvó de una de sus peores crisis y tiene ahora un espectro de vívidos colores para escoger: lima, mandarina, uva, fresa y turquesa. Este computador se vende en Venezuela por menos de un millón de bolívares y viene con todo lo necesario para conectarse a Internet. Lit computación móvil

no se queda atrás en el proceso que recientemente se ha venido operando en la relación entre calidad y precio. La tecnología de los computadores portátiles siempre ha puesto a éstos por encima de los precios de los computadores de escritorio, pero la baja generalizada ha tenido su efecto en la gama de la informática nómada. Así, puede hallarse una variedad de notebooks de 166 MHz o superiores, con 32 MB de memoria y discos duros de 2 o de 4 GB, con CD ROM incluido, por un poco más de un millón de bolívares. En este rubro, la novedad se paga, llámese DVD, o pantallas de 14 pulgadas, o diseños ultra delgados que hacen furor entre los ejecutivos viajeros. Las opciones con procesadores Pentium II o Pentium III, los portátiles high end, son adquiridos por empresas para ser compartidos por sus altos ejecutivos que necesitan una herramienta de poder para presentaciones multimedios.11.1.

SUPLEMENTO ESPECIAL INFORMA-VIGA

sin ó no o a na que, ccon r azR ía noo smu e l ct aa cbeo nla en r menord a deudla periodista llaneza absoluta ella" Ordóñez, mientras entaconadísima muestra con orgullo corporativo las sorprendentes instalaciones del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas, "al final, Fernández Morán ganó la batalla de la opinión pública". La asesora comunicacional del Ivic conserva intacto su talante extrovertido, pese al chasco que se llevó en 1985 cuando, en vivo, en aquel programa matutino de RCTV que compartía con Napoleón Bravo, espetó a bocajarro que para nadie era secreto que Blanca Ibáñez era, ay, la amante de Lusinchi. "Tenía muchos méritos como científico, como investigador, como inventor, eso no tiene discusión, ojo, pero para muchos fue no sólo un dios sino un mártir, y es esa difundida matriz de opinión la que creo que se fundamenta en tesis al menos discutibles, porque, que yo sepa, nunca fue un exiliado: mantuvo siempre un pasaporte diplomático, pese a su vinculación con la dictadura perezjimenista... Como tampoco considero justo que se tenga por cierto que aquí no se produjo nunca nada más que valiera la pena desde que entregó la dirección del instituto... Esto era la mitad de lo que ves ahora...". Ubicado en un atalaya profusamente verde de Los Altos de Pipe, sobre una colina virgen de clima fresquísimo y paisaje bucólico de inmediatos efectos sedantes —seguramente el más propicio para la búsqueda profesional de respuestas a los problemas de la vida—, el bunker del conocimiento que Humberto Fernández Morán comenzara a levantar en 1954, bajo su personal y al parecer compulsiva supervisión —entonces se l

ernándrz Moran a cue llamaba Instituto Venezolano de Investigaciones Neurocerebrales, Ivnic—, siempre ha sumado lo mismo: aproximadamente mil hectáreas. Su fundador, con su ya legendaria vista, hizo la selección de los terrenos donde tendría asiento su gran obra desde las alturas de un helicóptero en el que sobrevoló en repetidas ocasiones los extramuros de Caracas, cada vez acompañado por el presidente de turno largo, el general Marcos Pérez Jiménez. Quería, dicen, un sitio precisamente así: calmo, retirado, una ostra que propiciara la creación y que, por aderezo, pudiera retrotraerlo al inspirador paisaje alemán que contextualizara sus estudios de Medicina, antes de que la Segunda Guerra Mundial volviera todo un estropicio. Tan satisfecho quedó con la escogencia que, junto a lo que sería el claustro de sus delirios, compraría unos terrenos para él. Enseñoreado en éstos y aquéllos, cual hacendado en sus predios, se movilizaría a caballo impartiendo instrucciones, inspeccionando su cumplimiento. Hacienda, o más bien torre de mar40

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fil, el área midió siempre mil hectáreas, pues; pero lo que Egidio Romano, el actual director de esta silenciosa Meca, quiere consignar con ufanía por lo que le toca es que desde 1958 hasta 1999 —desde la refundación del Ivic hasta hoy— la ciudadela creció 70 por ciento, en lo que respecta al espacio físico construido. Que, aunque reconoce que desde los ochenta los consecutivos recortes presupuestarios maniataron en buena medida las iniciativas de la institución, la mayoría de las instalaciones son producto de la vapuleada democracia. Tras la muerte del singular venezolano, acaecida en Estocolmo el 17 de marzo pasado, la platea vernácula, cada vez más maniquea —en esta hora postpuntofijista, que llaman, no hay quien, desde una u otra trinchera, no esté armado como los alacranes, empezando por el propio Presidente—, en mayoritario clamor, ha redimido la imagen postrera de este sabio febril y de carácter complejo, lavándole en efecto toda hipotética mácula y minimizando sus simpatías políticas predemo-

El sabio venezolano ascendió hace poco hasta la última instancia de la justicia. Del veredicto deliberado en el más allá no llegarán noticias, mientras en este mundo se le juzga con no poca controversia. Hay los que no sólo lo aprecian, sino lo veneran como el cerebro más ilustre de la ciencia venezolana, con méritos sobrados para el Nobel, pero tampoco faltan los que recelan y no guardan un recuerdo amable del personaje; más bien lo perciben como un hombre con una estima desmedida por sí mismo, con actitudes excluyentes cuando no autoritarias. En todo caso, nadie niega el talento de este zuliano aventajado que tuvo a bien afinar el microscopio electrónico e ingeniar el bistur de diamante, muy útil probablemente a la hora de hacer el corte justo en su biografía y separar , laeyndor laeg :1~111•1 ■MI

Faitha Nahtnens

cráticas, vistas sin mayores prejuicios a estas alturas de la Quinta República; como corolario, el desengañado palco lo ha enmarcado con una aura de víctima que no pocos consideran desproporcionada. "Admito que ningún presidente, desde 1958, le encomendó desarrollar en el país ninguno de sus proyectos, aunque presentó varios, entre ellos, el remedo del Instituto Tecnológico de Massachusetts que quería montar en el Hotel Humboldt; nunca fue barajado como candidato para encargarse del Ivic, y en las reuniones de la asamblea nunca sumó suficientes votos para ello, pero no por eso podemos tildarlo de pobrecito", pondera ecuánime Romano, quien, pese a que consiguió considerable oposición, influyó para que se aprobara bautizar con el nombre de Humberto Fernández Morán el auditorio del Ivic. "Puede ser que muriera con cierta añoranza por la tierra, es posible, pero, por ejemplo, no se puede culpar a nadie en Venezuela de que no se haya ganado el Nobel. Tampoco lo ha ganado Enrique Medina, otro científico nuestro que es el hombre que más sabe de manglares en el mundo". Que un coro de admiradores de este top mirad venezolano esté interesado en hacerle honores póstumos y se haya acordado gestionar la traída de sus restos, que un puñado de periodistas al elaborar sus reportajes sobre el mito caigan en el pecadillo de la exageración al asegurar que Fernández Morán "estuvo" en la misión de la Nasa del Apolo 15 cuando fue a la Luna, o que los marabinos, acongojados con la irreparable pérdida del hijo ilustre, hayan convenido en cambiarle el nombre a la añosa avenida Universidad por el de doctor Humberto Avelino Fernández-Morán Villalobos no sorprende a nadie. Tampoco la veneración massmediática profesada a este hombre que parecía del Renacimiento por la variedad de materias que cautivaban su atención: podía hablar largo y tendido sobre Heráclito de Efeso, escribir de un tirón un ensayo sobre José Antonio Ramos Sucre, o silbar completa y de memoria una sinfonía de Mozart. Lo que produce consternación, Pipe arriba, es "la campañita" en contra de la institución que, como en una relación binaria, corre pareja con la contrición reivindicadora de su progenitor. El Ivic estaría en la picota como otra de las tantas cofradías, organizaciones, empresas de nuestra cuarentona y despelucada María Antonieta, perdón, democracia. Leslie Páez, parlamentaria en veremos —constituyente mediante— del MVR, lanzó la primera piedra, y dolió. "Lo único que hay en el Ivic es un reactor nuclear abandonado, que funcionó sólo cuando Fernández Morán le dio ingenioso uso". "No, no, no, eso no es así, por dios", se lamenta Romano, eminencia vernácula en tejido sanguíneo, que se descompone con el toma y daca político. "En el Ivic se calibran las bombonas de quimioterapia de los hospitales públicos de todo el país, se adelantan importantes estudios en las áreas de virología, se realiza el examen que, por comparaciones de las cadenas de ADN, revela la consanguinidad directa...". Rosana Ordóñez quizás esté pensando en que hay que atacar el cierto problema de difusión y de imagen que detenta el Ivic. Marcel Roche en su libro Memorias y olvidos escribe que Humberto Fernández Morán mismo reconoció una vez saber 42

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Derroche de memoria

Vernández Moran mismo reconoció Ona vez saber hacer Liso de as relaciones públicas, y agregad hacer uso de las relaciones públicas, y agregaría, dirigiéndose a Roche: "Y tú no". ¿Deficiencias comunicacionales en tiempos de libertad de expresión? Lo cierto es que pareciera insalvable la distancia que separa a los que juzgan la gestión del Ivic, como también luce abismal la brecha abierta entre observadores de la trayectoria de Fernández Morán, fanatizados como si de una vedette se tratara. De un lado se colocan los detractores que se habría granjeado quien a los 34 fuera el último ministro de Educación de la más reciente dictadura, y quien, en los escasos nueve días de ejercicio, se viera forzado a cerrar el liceo Andrés Bello por los bochinches estudiantiles que precedieron al 23 de enero de 1958. Son principalmente trabajadores del Ivic quienes guardan a buen recaudo la leyenda negra del enigmático personaje y lo desmerecen con apelativos poco benignos: déspota, tirano, reaccionario. Que habría sido un hombre emocionalmente inmaduro, variable, con gran facilidad para salirse de quicio. Un jefe insufrible y pretencioso. En los pasillos de la ciudadela pueden aún escucharse los ecos lapidarios. Que si cerraba el portón de acceso a las cinco de la tarde para que nadie se fuera, que si enviaba al infierno a quien intentara ausentarse del sitio de trabajo aunque apelara a una cita con el dentista, que si nadie podía desayunar después de las siete y cuarenta y cinco en punto, que si las mujeres no debían usar tacones —pobre Rosana. No científicos sino soldados poblarían el Ivic. Del otro lado se ubican los adoradores que cortejan a la lumbrera que a los 38 arrancó vivas a los círculos científicos más elitescos cuando, tras sumergir las lentes del microscopio electrónico en helio líquido, a determinada temperatura, como por encanto, consiguió erradicar la distorsión visual de la mirilla. Son los que sostienen que el desdeñosamente llamado Brujo de Pipe —la autoría del epíteto se le endilga a Mariano Picón Salas, aunque algunos creen que quien primero lo usó fue Federico Pacheco Soublette, periodista "no marabino", ataja presto Roberto Jiménez Maggiolo, devoto biógrafo, y los menos, que fue invento de Roche, su sucesor— ha sido blanco de los celos de sus pares que vieron con resentimiento el calibre

de las conquistas internacionales; su brillante curriculum lo habría emparejado con los cerebros más luminosos del planeta dejando a sus colegas patrios rezagados en los primeros peldaños de la escalera al cenit. No en balde, como antes Marie Curie y Thomas Alva Edison, conquistó en 1967, cuando era profesor de Biofísica en la Universidad de Chicago, la medalla John Scott. Habría faltado nobleza en su patria para reconocerle sus méritos. Desde las alturas de su celebridad, el psiquiatra Fernando Rísquez sonríe. "Sí, probablemente lo envidiaban. Muchos habrían querido ser los fundadores del Ivic". Una comisión que se da a la tarea de honrar la memoria de Fernández Morán —la integran historiadores, periodistas, intelectuales, políticos de nuevo cuño y militares, pero sospechosamente no científicos— incluye entre sus voceros más conspicuos a Francisco Arias Cárdenas y Hernan Grüber Odreman, gobernador de Caracas y attaché del sabio en su última visita a Venezuela en 1986. "Siempre llegaba a la Viñeta cuando visitaba el país", dice Grüber encantado porque en una de esas le autografió el reloj de pulsera que llevaba puesto con un bisturí de diamante. "Hemos sido poco generosos con él", se conmueve el hombrazo queie impusiera, post mortem, la Orden Diego de Losada en su primera clase. "Nunca se adelantaron las gestiones que pudieron haberlo acercado a la postulación del Nobel; por otro lado, la Cancillería no renovaba sus credenciales diplomáticas con prontitud... Sufrimos de ceguera, de mezquindad, no hemos sido capaces de medir la verdadera talla del compatriota. Era un prodigio. Causaba embeleso su elocuencia, su densidad y, sobre todo, la humildad con que se presentaba siendo la figura que era. Tenía con qué ser arrogante como dicen que era. No yo, por cierto". Cuando sobre las bases del Ivnic se fundó el Ivic, y pasó de ser un laboratorio especializado en desovillar las interrogantes del cerebro a uno que aglutinara a todas las ciencias, "el problema estribó en la ene suprimida", ironizan quienes toman a Fernández Morán como una causa. "Era la ene de neuronas. Ya no quedan". Contradicciones mediante, pareciera que un cuchillo de diamante, el afilado adminículo de 20 átomos de grosor capaz de rebanar un glóbulo rojo en 2.000 secciones, utilísimo apero de la ciencia que tuvo la genialidad de inventar el controversial personaje a los escasos 21 años, hubiera partido en dos la visión que se tiene de él. O es un santo, objeto de culto, o un hombre de "dudosa conducta moral", "un fantasioso", "un bluff", como registra un informe de la comisión que auditó el Ivnic tras la caída del perezjimenismo. Lo que sí es cierto es que, por ahora, Fernández Morán encarna la metáfora del pasado desdeñado al cual, como si se tratara de un capítulo mal cerrado, se quiere regresar dadas sus redescubiertas ventajas. "Tenía un carácter muy difícil, eso no se puede negar, y su esposa, Ana Browallius, fue una santa que lo toleró durante todos estos años, desde que se casaran el 30 de diciembre de 1953. Ella estaba persuadida de que era un sabio y hacia acopio de su voluntad blindada para entender sus períodos de ostracismo, en los que apenas comía", revela Tito Fernández Mo-

rán, el único hermano de Humberto Avelino. "Pero de que era excepcional lo era, tengo miles de pruebas de algo que por lo demás no es ninguna novedad. Pero sí, admito que tenía su carácter. Temple. Por eso se llevaba bien con los militares. Y por eso sobrevivió en Alemania. Se juntaron el hambre con las ganas de comer, la disciplina teutona y su alma prusiana". Igual fue su relación con Pérez Jiménez. La hiperkinética cabeza del científico, ocupada en sus profundas oquedades tanto por las más complejas y larguísimas ecuaciones memorizadas de pe a pa como por los más variados sueños, enganchó con un período de la historia patria signado por los deseos de proyección, expansión, desarrollo y prestigio internacional que encarnara el ensoberbecido titular de Miraflores. Pérez Jiménez acariciaba la idea de ver a Venezuela convertida en potencia y por ello alucinaría con la evolución de la petroquímica y la siderúrgica. Megalomanía o no, la verdad es que con su visión —no con la represión— inflamó al máximo la autoestima patria y, vale decir, conquistó a Fernández Morán; o quizás sería al revés. "Era un seductor", confía el hermano Tito. "Bien parecido, inteligentísimo, conversador, tenía tantas niñas rendidas a sus pies que mi mamá tenía que tomar cartas en el asunto". Elena Villalobos y Luis Felipe Fernández Morán habrían sido padres de excepción, según el hijo menor. "Liberales para su tiempo; nos dejaban hacer, aunque también fueran exigentes, mamá de manera más pragmática y papá con retórica". Apenas cinco años después de haber nacido en el Hospital Chiquinquirá de Maracaibo —el 18 de febrero de 1924—, Humberto, que para entonces ya ponía en práctica las ocurrencias que le venían a la sesera —jugaba con cables pelados y cucarachas para matarlas y revivirlas una y otra vez—, protagonizaría su primera mudanza: su padre habría sido blanco de la inquina gomecista. Ex prefecto de Cabimas y Maracaibo, sería su progenitor, por cierto, una figura clave en su formación. Le daría las herremientas para sortear las ventoleras, las que moldearían su talante. Humberto sería el consentido. A su vez, habría correlato en esa predilección, a tal punto que Humberto comenzaría a firmar como él, Fernández Morán, y el Villalobos de tercero. A la muerte de su papacito, como le decía aun de adulto, nunca más usaría corbatas que no fueran negras. Aprendió inglés rapidísimo; sería la primera de las lenguas

Romano se hizo el sueco

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que adquiriría —era proverbial su capacidad para los idiomas. Manuel Matos Romero —otro biógrafo seducido por su protagonista— asegura que además de castellano e inglés hablaba perfectamente alemán y alemán medieval, francés, sueco —"lo aprendió en seis semanas", se apresura a referir admirada la sobrina, María Elena Fernández-Morán—, noruego y danés. Entendía húngaro, italiano, holandés, latín y griego. Por si fuera poco, parloteaba mandarín y sánscrito. "EA la hora de escribir? Si tiene que ver con las emociones, castellano; si en cambio se trata de textos científicos, alemán; si son sobre mecánica o ingeniería, sueco; y si rozan lo político, inglés", diría el propio Fernández Morán en una entrevista. Roberto Jiménez Maggiolo recoge en su libro Vida y pasión de un sabio venezolano la siguiente anécdota: cuando en el bautizo de su ahijada Gabriela Morán de Huerta el sacerdote le pidió que rezara el Padrenuestro, Fernández Morán le contestó: "Tendrá que ser en sueco, porque en castellano no lo recuerdo ahora". Tito añade: "Pero solía saltar de un idioma a otro con absoluta holgura". De Estados Unidos, la familia regresaría a Maracaibo al caer Gómez. Humberto y Tito lamentarían, sobre todo, haber dejado a medias la serie de Roy Rogers. Los esperaba readaptarse, esta vez en el Colegio Alemán. Humberto lo conseguiría y se graduaría de bachiller a los 15, con calificaciones sobresalientes. "Estudiaba con gusto. Mamá le apagaba la luz del cuarto para que se durmiera, pero él se las arreglaba escodiendo las enciclopedias debajo de las sábanas y alumbrándose con una linterna", evoca Tito. "Era un genio y a la vez era muy normal. Salía, tenía amigos y, medio gallito, se caía a trompadas cuando las cosas se ponían color de hormiga. Mamá se preocupaba porque siempre quería meterse en las riñas callejeras. Lo vi hacerlo de niño en Estados Unidos y de joven en Maracaibo. En Alemania practicó boxeo. Me imagino que como defensa... como defensa de tanta soledad. El se fue a Munich a estudiar Medicina y allá lo sorprendió el auge del nazismo y la Segunda Guerra Mundial". La neutralidad de Venezuela le habría permitido mantenerse a flote, y su carácter a soportar aquella desolación. La rutina, en condiciones tan azarosas, estaba signada por las obli-

gaciones académicas y, como práctica humanitaria, la asistencia a los heridos en combate, hasta que por fin, en víspera del cese del fuego, cuando apenas frisaba los 20, se embutiría en su toga, y, en medio de los destrozos, asistiría al tristísimo acto académico de su graduación de médico; al rector, en el desportillado paraninfo de la Universidad de Munich —troneras en el techo y temor a un último estallido fulminante sobre sus cabezas—, tras supuestamente reconocer la brillantez del alumno venezolano que se hacía del título con las más altas notas, se le quebraría la voz a mitad del discurso por el recuerdo de los tantos parientes perdidos en el desvarío nazi. Logrado el objetivo, y a salvo del trance, aunque —no cabe la menor duda— marcado por aquella horripilante circunstancia, rompería entonces los varios años de absoluto silencio y, con aquella letra suya tan angulosa, tan afilada, escribiría una carta a su padre para avisarle de su inminente regreso a la patria. Ejerció en Maracaibo su especialidad, lo que más le inquietaba: la neurocirugía. El, que soñaba con la posibilidad de que la mente de un hombre pudiera eventualmente conectarse a una computadora, fascinado por el órgano vital del pensamiento, se empeñó en estudiar los fatales tumores cerebrales. Pionero, realizó las primeras 25 lobotomías que se practicaron en el Hospital Psiquiátrico de la ciudad. La intervención, que consiste en la separación de las fibras frontotalámicas del lóbulo frontocerebral, se practicaba en enfermos mentales hiperactivos y agresivos. "Una barbaridad, esa operación dejó de hacerse", frunce el ceño un colega del Ivic. Como fuera, entonces representaba una esperanza y Fernández Morán las tenía todas consigo. Jovencísimo, imposibilitado de ejercer en el país —aún no tenía mayoría de edad—, aguardó un año para poder realizar la reválida del título y de paso convertirse en una eminencia en medicina tropical. Por supuesto que su examen de validación fue poco menos que un hito en la historia de la Universidad Central de Venezuela: el mejor de todos los tiempos. El acontecimiento sería apenas uno en la carrera de sucesos y conmociones producidas por su talento. Hace hallazgos connotados —"no trascendentes", susurran con intransigencia destacados protagonistas del devenir cientí-

os la muerte! conquista 111111111111 con una ironía: un accidente cerebrovascular que él tenia matemáticamente precisado 11,

Pico de plata, bisturí de diamante

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The National Aeronautics and Space Administration fico local, "habría ganado el Nobel si lo hubiera merecido"—, conquista posiciones de cimera je-

rarquía y conoce inteligencias descollantes. Hans Selye le dedicaría un libro: "Yo no reparo en el detalle sino en el todo orgánico; él, en cambio, tras las pistas de grandes verdades a la vista sólo con un microscopio, está empeñado en restringir su campo visual dos millones de veces". También partió el pan con Albert Einstein. El bombillo que alerta a Estados Unidos de que los enemigos cocinan una bomba atómica y que él puede facilitarles la fórmula —para negociar, no para lanzarla— le recomienda, conociendo sus inclinaciones, Suecia; se graduará summa cum laude como licenciado en biofísica y biología celular en la Universidad de Estocolmo, donde también, y con exacto éxito, obtendrá el Ph.D. en 1952. Un año después, cede ante el amor entrañable, "de novela", como lo califica María Elena Fernández Morán, "por lo intenso y lo idílico que era, saltaba a la vista". "Mi trabajo ocupaba la totalidad de mi tiempo. No soy bebedor y apenas me dejaba llevar por mariposeos amorosos. Pero sabía que debía dejar de perder tiempo y conseguir mujeres inteligentes y maduras para disfrutar de su compañía. Por fin encontré a la que hoy es mi esposa", revelaría a la prensa venezolana en una tierna ocasión. Con Ana tendría dos hijas: Brígida Elena, que le daría una nieta, Rosana, y Verónica, la que emularía a la tía Irya Browallius, notable escritora sueca. Miembro de la Sociedad de Microscopía Electrónica de Alemania y otras cofradías selectas, caballero de la Estrella Polar —orden conferida por el rey de Suecia— entre otras medallas, autor de más de 180 monografías, este hombre de rostro ovalado, labios firmes, buen ver y poco dormir —obvio— vivió 25 años en Estados Unidos y en Suecia todo el tiempo siguiente, hasta que a los 75 años la muerte lo conquista con una ironía: un accidente cerebrovascular que él tenía matemáticamente precisado —hubiera podido operarlo de ser otro el paciente. Lúcido, sin embargo, el hombre que fuera tipificado entre sus colegas como esquizotímico —así habrían sido Goethe y Humboldt; corresponde la tipología al dueño de una voluntad definida y una disposición objetiva de producir, al poco sensible al cansancio corporal, al que pasa por distraído y se distingue por su nobleza, sublimidad de pensamiento, tenacidad en el infortunio y tendencia al heroísmo—, en su lecho de enfermo, luego de pedir explícitamente ser cremado —así se hizo—, recordaría, en el vértigo del conteo vital a contrarreloj, emociones, vivencias, acontecimientos, palabras, cifras, rostros y paisajes que contornearían su individual tránsito por este mundo. Recordaría tal vez cuando en Suecia le dijera a Fernando Rísquez que apresurara el paso, que allí no se estilaba detenerse a ver a las prostitutas en las vitrinas, y quizás reiría solo re-

Upon the tenth anniversary of the return of lunar samples to earth —extends special recognition to:

H. Fernandez- Moran For servirig as a principal investigator in N ASA's Lunar Program. The skitls and performances of chis international group of scientists has significantly increased man's knowledge and understanding of the nature of the Moon and its environment.

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Staned and sealed at Washington. D.C . Chis l9th day March Nineteen hundred and seyent) -nine Robert A. Frosch, ministra/0C

Títulos lunares

cordando la respuesta del psiquiatra: "Seguirás de largo tú, lo que soy yo me quedo viendo esta maravilla". Tal vez disfrutaría rememorando la presentación que hiciera de sí mismo una vez frente a la prensa —no era necesario inflar la información con una misión espacial— cuando de sopetón dijo: "¿Saben que el hombre llegó a la Luna, no? ¿Y saben también que trajo unas muestras rocosas, verdad? Pues lo que les falta saber es que quien las está estudiando, con el bisturí de diamante que inventé, soy yo, que estoy contratado por la Nasa". Esas rocas, por cierto, llegaron a Venezuela pocos días antes de su fallecimiento; las donó a la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales. Es posible que recordara los vítores que acaparó por la iniciativa de armar un reactor nuclear, lujo que ubicaría al país de un jalón en el Primer Mundo, y las rechiflas de quienes cuestionaron su tendencia a desbocarse, o los apuros que pasó el primer gobierno democrático cuando tuvo que pagar 4 mil dólares por el stand que había separado para exponer su reactor en una conferencia ginebrina sobre uso pacífico de la energía atómica. Quién sabe si se arrepentiría de haber dicho que agradecía el nombramiento como ministro de Educación con que lo honrara "el gran estadista" Pérez Jiménez o si recordaría conforme que fue el único que se quedó en su despacho, sin huir, durante los sucesos del 23 de enero, por lo que le tocó entregar el coroto. Dejaría ir las imágenes virulentas de cada impasse con sus subalternos, como cuando le solicitó a J. M. Sprenger —uno de los tantos talentos importados que ofendieron el amor propio de la intelligentsia patria— que desalojara su residencia del Ivnic porque la había ofrecido a otro y que no se le ocurriera ofenderse o renunciar porque le confiscaría su pasaporte, o cuando a G. H. Bergold le prohibió el uso del microscopio, aunque se sentiría satisfecho por haber integrado el equipo que detectó tres virus nuevos de insectos. ¿Sabría que ellos describirían estos episodios, con pelos y señales—microscópicas—, a Marcel Roche apenas éste se hizo cargo del Ivic? Seguramente antes de cerrar los ojos, antes de suspirar por última vez por Venezuela, antes de asumirse Quijote de batallas perdidas y causas ganadas, se tomaría como tal y descansaría en paz: mal genio tengo, genio soy. LA MAYO 1999

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DallilCoppe

deja. "No respire cuando me saluda", aconseja mientras le acercan una caja de pañuelos de papel. Ochenta y seis millones de dólares en su cuenta corriente —según reveló la revista Forbes, que sabe bastante de esas nimiedades—, y que lo ubican entre los diez artistas más ricos del mundo, demuestran una vez más que la plata no lo resuelve todo. El show debe seguir y David Seth Kotkin, 43 años, lo sabe muy bien. Si su trabajo es aparentar —que vuela, que desaparece y hasta que seduce a cuanta rubia cruza por la platea—, lo logra a cabalidad. Durante la hora cuarenta y cinco que dura la función el gran simulador no mostró signos de cansancio. "El flash hacia la izquierda", ordena Jolie para arrancar con la sesión de fotos, en un salón del teatro de Illinois donde presenta You!, que estuvo en Caracas hasta el dos de mayo. Ajeno a esta decisión, David da la contraorden: "No, el flash bien potente, plano y frontal". Obsesionado por su look, no descuida ni siquiera el detalle de que por la ventana entra una peligrosísima luz natural. Y como la lección de divo hollywoodense se la aprendió muy bien, no se arriesga a exponer sus leves arrugas ni su problemática cabellera. Y, a juzgar por la pollinita que naturalmente cae sobre su frente, se podría afirmar que Claudia Schiffer —su novia hace seis años— no lo asesora en las cuestiones de imagen. Su preocupación por el aspecto llega a los extremos que el medio ha hecho naturales. "Antes viajaba con un personal trainer. Pero después me cansé del entrenamiento. Con el traChicago bajo físico durante el show me basta. Sí trato de cuidarme con la comida: carne vacuna, pollo y mucho almidón". Juego al sex syinhol porque puedo. Me hace sentir muy bien, especialmente si hay muchachas lindas en la sala. Es divertido. Si fuera cantante también lo haría. Las mujeres son lo mejor del mundo, también fuera del escenario... Me hacen sentir seguro". Quizás y sobre todo luego que las revistas Pa-

El negocio de las apariencias Vivian Urfeig desde

a cara de pánico de los asistentes anuncian lo peor: "David Copperfield está engripado", dice Jolie, una morena a un walkie talkie pegada; "tiene fiebre, no sabe si va a suspender la función". Todo mal. Si fuera del teatro Rosemont, en Chicago, el clima está complicado (se desató una tormenta de nieve por la que se suspendieron 25 vuelos), adentro el panorama no es mear, l ill1SiOniSta más famoso del mundo se resirió y parece que no tiene trucos para resolver el terrenal percance. De jeans, botas negras y el mismo pullover negro que usa para volar sobre el escenario, David recibe como su gripe lo 46

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ris Match y Bunte publicaran que su relación de pareja con Claudia era producto de un contrato, y que el interés era más económico y de imagen que otra cosa. "Esas demandas las gané. Ahora tienen que pagar y retractarse. Esa información fue patética, sin sentido. Lo inventaron para vender. Nuestra re-

!ación es muy buena y no cambió después de este episodio. Nos vemos seguido y hablamos por teléfono. Toda pareja famosa tiene que aguantar este tipo de cosas. Claudia y yo decidimos que nuestros abogados tomaran cartas en el asunto y que el dinero del juicio fuera destinado a causas benéficas, como niños afectados por el sida, por ejemplo", completa el análisis sobre su atípico noviazgo. De hecho, durante el espectáculo, la relación de David con las mujeres es de un juego constante. Dos chicas muestran el color de su ropa interior, otra hace dibujitos y una tercera juega al Kamasutra. "Más cerca, más cerca", pide cómplice, mira al público y remata: "Es parte de mi trabajo". Con algunas variaciones, en Caracas se vieron los mismos doce trucos con los que Copperfield derritió en Chicago a más de dos mil personas por función. You! es bastante similar a Sueños y pesadillas, con el que estuvo de gira en 1997. Están los números íntimos con cartas, también los de gran despliegue escénico, que ponen a Copperfield a la altura de Michael Jackson. El ilusionista sería a la magia lo que el cantante al pop: efectos, luces, coreografías y un cuidado puntilloso en función del producto final. Y sobre todo, la gran vedette: diez años de investigación, 800 mil dólares invertidos y el secreto mejor guardado para que noche a noche el niño que a los 12 años se convirtió en el miembro más joven de la Sociedad Americana de Magia se diera el gusto de volar y volar. Y, en el caso de un

Reemplazó el clásico conejo por la Estatua de la Libertad, menuda faena. La galera de los shows de los casinos de Las Vegas por un look de neoyorquina seducción. David Copperfield les dio a sus shows un vuelo sólo comparable con la celebridad que disfrutó el gran Houdini. Como él, descubrió que para conquistar el mundo lo mejor del repertorio mágico eran las grandes ilusiones. Los magos suelen decir que un cincuenta por ciento de su arte pasa por manejar la psicología del espectador. Producir un efecto sorprendente, que queda cristalizado en la memoria como una expresión de lo increíble.

Houdini era conocido por su magnetismo sobre el escenario y más allá del mismo, como cuando pidió las esposas de Scotland Yard para poner a prueba su maestría en el escapismo. Copperfield multiplica esta capacidad de atraer las miradas a través de toda una vida producida para el show, sin olvidar su noviazgo con la bella Claudia Schiffer. Pero, sobre el mismo esquema, algo ha cambiado a lo largo del siglo. En 1926, en su afán de sorprender, Houdini aceptó una vez más el desafío de recibir sin inmutarse un golpe al estómago. No tensó los músculos a tiempo y murió con el apéndice perforado. Un riesgo del contacto directo que no corre el mago mediático. Es que Houdini ponía el cuerpo. Cooperfield, fenómeno de fin de siglo, su cuidada imagen.

—Juan Garff

negocio como el suyo, el secreto es parte primordial del asunto, sobre todo, con un equipo de tantas personas. "Establecimos un pacto de silencio. Pero de todas maneras no todos conocen la totalidad del mecanismo. Además, si alguien llega a abrir la boca, ¡lo matamos! Lo encerramos en las habitaciones del hotel y lo atamos con medias de mujer", coquetea sospechosamente con el sadomasoquismo fetichista. Pero cabe preguntarse hasta qué punto un mago tan tecnologizado puede seguir creyendo en la magia, cuánto puede aún sorprenderlo si es él mismo el que lo maneja todo. "Cada vez me sorprendo menos y es una lástima". Pero, además del trabajo, tiene un nuevo —y caro— hobby: "Colecciono y restauro juegos y máquinas de antiguos salones de fin de siglo. Máquinas que adivinan el futuro, máquinas de electroshock... Es terapéutico". A pesar de su apariencia perfección, confiesa: "Tuve mis malos momentos también, pero aprendí de los errores. La experiencia me enseñó a no ser egoísta. Con el afán de lograr objetivos a veces me olvido de agradecerle a mucha gente. Trato de ser honesto". Sin embargo, como ilusionista, vive más del parecer que del ser: "Lo que importa son las apariencias. En el show hay muchos números que se parecen más a una sesión unplugged. Pero la magia sobrevive por la forma. Todos necesitamos una fantasía, una vía de escape". Clarín, 1999

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1 Presidente suele animar, cual si de ...na claque de zarzuela se tratara, con us tan recurrentes como retóricas pelaciones al cambio y el imperativo Oe borrar, si no pulverizar, 40 años de d. Ilesaguisados, luciría como la perfecta epresentante de la repudiada ligarquía: nórdica estampa, blonda abellera y mirada marina, esbelta orno una valquiria, hija de abogado rominente, educada en el Emil riedman y habitante de La Lagunita. Pero el precoz conocimiento :lel infierno penitenciario —sería la primera de una seguidilla de buen amozas abogadas destinadas a la ingrata Dirección de Prisiones— y la pérdida, también temprana, de la inocencia entre los laberintos del poder judicial, la harían especialmente hipersensible a excrementales hedores. La fétida prisión de Vare trocaría su destino de magistrada del régimen en defensora de los insurgentes. Los militares ahora gobernantes deben buena parte de la auspiciosa situación que disfrutan a esta doctora sagaz. El premio: uno a la altura de sus buenos modales y 11111« fintla ) embajdornlOEA

ubiera sido perfecta, una escena digna de pasar íntegra al nuevo expediente de la historia patria, de no haber imperado aquel olor a mierda que trancaba la respiración y poblaba el aire de moscas zumbonas, criaturas golosas que se metían en la boca de quien despegara los labios para pronunciar frases destinadas a la gloria y al bronce. Una verdadera lástima. El rapsoda que cante este lance a las generaciones del futuro tendrá por fuerza que aludir a la nauseabunda brisa excremencial que acompañó la entrada de la bella dama al barracón donde se encontraban detenidos los quince soldados, todos jóvenes y arrojados, que entonces lucían hoscos y desaliñados por la barba de varios días que oscurecía su rostro y el penetrante olor a sobaco en que parecían suspendidos como los santos en sus nubes de incienso. Todo un bouquet para impregnar una gran página de la gesta nacional. Han pasado siete años desde aquel día en que Virginia Contreras venció la resistencia del comisario Pastor Parra Rivas, director de la cárcel de Yare —adonde los detenidos habían ido a parar tras su detención en el cuartel San Carlos—, y lk gó hasta el pequeño edificio donde estaban recluidos los rebeldes de febrero del 92. Sabía que contaba con pocos minutos para trasponer el control ejercido por la autoridad del penal e ingresar en la construcción que albergaba a los insurgentes con el objeto de comprobar, con mirada de jueza, las pésimas condiciones en que vivían los alzados. Estaba allí para ejecutar el recurso de amparo dictado por otro juez a favor de los reclusos y su visita se producía en medio del sigilo y la sorpresa. Era preciso aprovechar la perplejidad de Parra Rivas e irrumpir en la gran jaula donde estaban los presos, instalar un tribunal y comenzar a escuchar los testimonios. El asunto traía un ritmo hollywoodense: argumento trepidante, acción, preciosa protagonista con la pinta de Julie Christie y un puñado de presos que cuentan, desde el comienzo de la historia, con la simpatía del público. Vamos, todo un clásico de Oliver Stone... hasta que la catira de la película llega al recinto donde están los muchachos y se queda paralizada por aquel tufo a ñoña donde planeaban, glotonas, las moscas gordas como cerezas. Eran los primeros días de abril, cuando en Venezuela las horas comienzan a deslizarse con mayor espesor y las piñas fermentan nada más desprendidas de las plantas. Mal momento para meter quince hombres en unos cuartuchos minúsculos, sin agua y con mala ventilación. Estaban en el anexo construido para que los presos de Yare recibieran la visita conyugal (lo que, de paso, les había acarreado la mala voluntad de los reos sin lustre político); ahí metieron a Hugo Chávez Frías, a Francisco Arias Cárdenas y a otros cabecillas del alzamiento contra Carlos Andrés Pérez. Les habían prohibido el uso de sus uniformes, incluso de cualquier tipo de zapatos, por lo que

andaban en chancletas, Yntill05 de cualquier mAnvrA y sin 14varse por muchos días. Por las paredes del anexo chorreaban las aguas negras y en el denso caldo que colmaba las pocetas flotaba el excremento. Esa es la visión que conserva Contreras de aquella visita. 5O

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Virginia Margarita Contreras Navarrete había acudido a Yare como jueza, no como abogada defensora —que todavía no lo era— de los presos más famosos del país. En su tribunal se habían presentado Javier Elechiguerra, hoy procurador general de la República, y los familiares de algunos de los oficiales detenidos, entre ellos Argenis Chávez, hermano del líder. Ellos la informan de que los rebeldes habían ganado un recurso de amparo dictado por un juez del Distrito Federal pero, como la Cárcel de Yare está en el estado Miranda, no habían encontrado a ningún juez de esa entidad regional que se atreviera a ejecutarlo. Y mientras, los hombres estaban aislados, impedidos de recibir visitas de sus familiares y sus abogados. Ya habían recorrido casi todos los tribunales mirandinos y nadie quería meterle el pecho al asunto. ¿Querría usted, doctora? Contreras leyó la decisión. Estudió todo muy detalladaGolpistas: unos son de la Marina, otros son de la Aviación

Angelical directora de Prisiones

mente y llegó a la conclusión de que lo más ajustado a la ley era ejecutar la decisión del juez. No es que ella actuara como un mal personaje de una mala novela soviética y se lanzara a defender a los oficiales porque ese era el deber de un buen cuadro del partido. No. Con su cara de gringa que toma el sol distraídamente al borde de la piscina de un campo petrolero, Virginia Contreras es una persona cerebral, que no cede a impulsos, que va a lo suyo y que no da puntada sin hilo. No hay que confundirse con sus ojos de muñeca y sus labios resecos como por el salitre de unas eternas vacaciones en el mar. Debajo de toda esa ferretería de los encantos estivales se tensa una voluntad de hierro y palpita un instinto canino para moverse entre circunstancias que para otros no se presentan claras. "Dije que sí", evoca con una coquetería diluida en seguridad en sí misma como si estuviera contándole a alguien que había accedido a los requiebros de un espía, "porque encontré muy atinada la decisión del juez, quien exigía sencillamente que se tratara a las personas como personas y que se cumplieran todos los pactos internacionales, empezando por la Convención de Ginebra". A las diez de la mañana del día siguiente, Contreras estaba delante del teniente coronel (Ej) Pastor Parra Rivas, a quien cabe figurarse metiendo la panza para atender a aquella encantadora señorita que había caído por sus predios. El pobre no podía imaginarse, cuando le echó el primer vistazo, que Virginia era una jueza llegada para inspeccionar el local y que cada vez que moviera el morrito no sería para decirle cuchi-cuchi sino para advertirle que estaba obligado a permitirle el paso a la representante del poder judicial y que si no lo hacía podía ir preso (la Ley Orgánica de Amparo establece que aquella persona o autoridad que incumpla un mandamiento de amparo puede ser castigada incluso con quince meses de reclusión). Los diablos de Yare

"Tú verás...", casi se escucha todavía resonar el eco en el fantasmal conticinio yarense. El hombre le abrió la puerta de la cárcel. Craso error. Contreras dio las gracias y pasó rampante, pentatlónica, delante del comisario; se dirigía a un encuentro con el aliento de los albañales y con su propio destino que comenzaría a cambiar con la primera bocanada.

odeada por un animado corro de asesinos, atracadores de ancianas y sobadores de muchachitos, Virginia Contreras sostuvo con una mano un plato mientras con la otra se obligaba a meterse en la boca una cucharada del engrudo que sus contertulios apuraban sin detenerse a calcular la fecha de la que dataría aquella especie de vómito de gato y aquel pan con el que podía practicarse un homicidio si se asestaba con vigor y algún conocimiento de anatomía. Son los riesgos que corre una blanquita, egresada del Colegio Emil Friedman, cuando se mete a redentora de malandros. . Virginia Contreras, quien, desde luego, no aparenta su edad —como no aparenta su carácter, ni sus agallas, ni sus dos hijos preadolescentes— nació el 23 de marzo de 1958, penúltima de seis hermanos habidos en el hogar de la pareja de andinos avecindados en la capital que encabezaba el abogado Florencio Contreras Quintero, especialista en Derecho Tributario. A los veintidós años no sólo estaba ya egresada de la Facultad de Derecho de la UCV con calificaciones de cum laude sino que había sido nombrada titular de la Dirección de Pri-

1 VIRGINIA CONTRERAS HABÍA ACUDIDO A YARE COMO JUEZA, NO 1: COMO DEFENSORA DE LOS PRESOS MÁS FAMOSOS DEL PAÍS. EN SU TRIBUNAL SE HABÍAN PRESENTADO LOS FAMILIARES DE ALGUNOS DE LOS OFICIALES DETENIDOS. LOS REBELDES HABÍAN GANADO RECURSO DIJIWARO siones por el ministro de Justicia (del año 1981), Reinaldo Chalbaud. Como corresponde a una recién graduada entre los primeros del curso (que además cuadra con el aspecto de Marisol —la actriz española que desde hace unos años sólo responde al nombre de Pepa Flores— en el rol de Marianita Pineda), Contreras no se avino a permanecer en el despacho a la vera de un teléfono sino que optó por ser directora de Prisiones desde las prisiones. Venga entonces a entrar con paso elástico a las catedrales del horror; venga a pasear su empaque teutón entre la mulatada que pone, entre nosotros, la carne de prisión; venga a posar la mirada azul sobre aquella sabana de cicatrices y marcas de chuzo: la escritura de la violencia sobre una página de piel. Fueron sus primeras lecciones de realidad. Aquellos antros la iniciaron en este asunto de tener los pies en la tierra. Y ella, sin proponérselo, sin tener ninguna culpa, iniMAYO 1999 EXCESO

ció esa curiosa tradición venezolana de poner niñas lindas al frente de la Dirección de Prisiones —gesto de una mala leche equivalente a encargar a un monstruo de circo la organización del Miss Venezuela. El caso es que Virginia Contreras comenzó el desfile de figurines que ha distribuido caras bonitas entre la reja y el rejo. "Lo triste", reconoce la propia Contreras, "es que ninguno de nosotros ha tenido la formación necesaria para entrarle en serio al problema de las cárceles en Venezuela. Hemos tenido buena voluntad pero poquísima, casi ninguna preparación en cuanto al tratamiento penitenciario, la reeducación del preso, o en materia judicial para entender por qué hay dilación procesal". Esa buena voluntad (otra manera de nombrar la ingenuidad y cierta visión romántica de sí misma como una joven heroína que por las tardes mancha sus jeans con el óleo asqueroso que exudan los hombres presos y por las noches chupa una merengada mientras le comenta a un novio lo te-

Es CONSCIENTE DE QUE LA DELINCUENCIA FORMA PARTE DE UN APRETADO ENTRAMADO DE INJUSTICIA SOCIAL, PERO NO VA DE PERDONADORA PORQUE LOS ATRACADORES TIENEN QUE LLEVARLE EL PAN A SUS HIJOS. DE HECHO, EN SU ETAPA DE JUEZA SÓLO ABSUELVE A DOS PROCESADOS. DE MÁS DECIR QUE CONTRERAS NO SUMA ADMIRADORES PRECISAMENTE likagmká, -

rrible que son las cárceles: "Si lo vieras"...) la puso un mediodía ante el compromiso de tragarse aquella porquería que comen los presos porque ella quería comprobar por sí misma cómo era el rancho que le daba a sus muchachos. En medio de las arcadas supo que aquello no era para ella, y no porque le hiciera ascos a aquella papilla incomestible —que también, faltaba más—, sino porque se vio ante una realidad que rebasaba los buenos propósitos, que no se trataba de jugar a ser Juana de Arco sino de arrimar el propio palmito a la parrilla. Y ella, en aquel momento, no estaba para meterse en la hogue§in9 para bailar en tgrn9 a la§ llama§ Qorno una 1-19ViQiA d e los rituales de la vida, que no otra cosa era Virginia para el año 1982, cuando abandona la administración pública y se marcha al desempeño privado y al encuentro de su destino.

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La doctora Contreras feliz de la vida

I gran momento es cuando se tiene al procesado delante, sudando como un puerco del susto y de la impresión de estar fuera del penal (después de tres años esperando sentencia). El miserable se mira en los dulces ojos de la doctora, le lanza miradas furtivas a sus brazos, firmes y rosados como un trocito de jamón de Navidad. Y entonces, cuando él la está mirando al fondo de esos globos celestes como dos pocitos de alter shave, ella le dice: "Mucho gusto, yo soy la jueza Virginia Contreras y quiero comunicarle que usted está condenado a veintiocho años de prisión por homicidio calificado". Le dice eso a un tipo que ha matado a dos hombres a cuchilladas: a uno le clavó veinte y al otro lo despachó con doce. Le dice eso con la mandíbula cuadrada y aquel par de orejas pegadas al cráneo. Al tipo lo tienen que agarrar entre varios porque le está gritando que cuando salga la va a matar a ella de muchas puñaladas. El cree que con eso la va a asustar, pobrecito. Alguien ha debido decirle: "Mira, matón, la jueza que te va a dictar sentencia es una mujer que al mes de haber parido a su primer hijo, obviamente contraviniendo todas las prescripciones del médico, se echó a la calle a trotar y no ha dejado de hacerlo ni un sólo día de su vida aunque llueva, aunque la noche anterior la hayan llamado anónimamente para amenazarla". Y si eso no bastara para disuadir al criminal, entonces convendría decirle que la jueza que está estudiando su caso vive en La Lagunita —que es como decir en el Guárico si se trabaja en el corazón de Caracas— y que ella va y viene de su casa al trabajo con prescindencia de la colaboración de una empleada doméstica. Como lo oyes, asesinín, esa mujer lava, plancha, barre los pisos, pasa coleto, cocina, lleva a los niños al colegio y a las clases diarias de natación porque

uno de ellos, el mayor, se está preparando para integrar la de- medium —"porque tengo los brazos muy largos". Su planta legación venezolana que irá a las Olimpiadas de Sidney en el altanera hollará los vericuetos más tremendos de los barrios del sureste caraqueño calzando las botas que suele usar en to2000. Déjate de eso, mijo, porque nadie amedrenta a una mudo terreno. Estas expediciones terminan de soliviantarle el jer cuyo hijo, entonces de dos años, fue secuestrado hace una ánimo: la doctora sabe que su país no es feliz, que no duerme década por la pareja de peruanos que tenía contratada para las labores de la casa. El hombre se llevó al pequeño y la mu- bien, que come poco y mal. "Era como una clase de sociolojer se quedó un rato para despistar y luego marcharse tam- gía jurídica permanente". Cada vez se sensibiliza más frente a bién, cosa que no llegó a hacer porque la jueza Contreras, en lo que ve afuera y se hace más intransigente frente a las triquitotal dominio de sus nervios y sin llorar ni levantar la voz, la ñuelas de adentro. Es consciente de que la delincuencia forma miró a los ojos —como hace ella cuando va a soltar un guan- parte de un apretado entramado de injusticia social, pero no tazo— y le dijo: "Si mi hijo no aparece, usted no sale viva de va de perdonadora porque los atracadores tienen que llevarle esta casa". El hombre entregó al muchachito y ella los dejó ir el pan a sus hijos. De hecho, en su etapa de jueza sólo absuelve a dos procesados. De más decir que Contreras no suma adcon ese aire de superioridad que adopta cuando le perdona la miradores precisamente. vida a alguien. Así que de miedo, tu jueza, nada. Y, sin embargo, nadie hubiera dicho entonces que la suya En 1982 deja el Ministerio de Justicia y va a ejercer privadamente el oficio. Es en esa época cuando conoce a su esposo, sería una de las trayectorias más cortas en la historia tribunael abogado Guillermo García Machado, su contraparte en un licia venezolana, ni mucho menos que en un mundo tan conjuicio de la caja de ahorros de Corpomercadeo, donde ella es- trovertido y sobre el cual corren tantas historias de lenidad y corrupción justamente ella sería expulsada con cajas destemtaba a favor de los deudores del organismo, representado por él. Ella ganó y, durante los catorce años que tienen casados, él pladas y un sermón acerca de la ética y del respeto a la demono ha dejado de decir que la dejó imponerse en el juicio como cracia. Pero eso es adelantarse; por lo pronto, su entrada a la una táctica de seducción. En 1989, Contreras entra a la Cor- brega judicial la conduciría a un encuentro con su destino. te Primera de lo Contencioso AdCon esos ojitos claros ha visto de todo ministrativo como jueza relatora (es un grupo de abogados que le redactan las sentencias a los magistrados de la Corte) y permanece allí por dos años hasta que la llaman del Consejo de la Judicatura y le asignan un tribunal. Corre el año 1991 cuando Contreras ingresa a la carrera judicial. Ya se sabe que su temperamento la inhabilita para empollar en una silla mientras los escribientes toman las decisiones por su cuenta, y ni hablar de firmarle a la policía una libreta de órdenes de allanamiento en blanco. Lejos de eso, les para las patas a los escribientes quienes ven con fastidio el cese de su industria de la matraca e informa a las policías de Miranda que en lo sucesivo la orden de allanamiento es ella: ya no habrá órdenes firmadas sino la presencia de la jueza propiamente dicha en el Comando Unificado de Policía cuando se vaya a practicar un allanamiento. Vuelta otra vez a la senda del vicio: Contreras desfilará por las galerías de Petare sus camisas talla S, sus franelas XS y sus chaquetas MAYO 1999

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imbrazos a medianoche. La madrugada del 4 de febrero de 1992 provocó muchos más timbrazos de teléfono que estallidos de plomo. Uno de esos repiques resonó en la casa de Contreras y ella contestó en el auxiliar que está en el descanso de la escalera, muy cerca del cuarto donde ha instalado su gimnasio particular dotado de trotadora, bicicleta estática y remadora. Si alguien se hubiera asomado en ese momento hubiera visto a una muchacha de 34 años, vestida con mono de trotar y franela ancha, apretando un auricular con sus fuertes manos de uñas despintadas y acercándoselo a un lóbulo desprovisto de zarcillos (sólo dos joyas: su alianza y la de su padre). Llamaba el comisario de la PTJ Rodríguez Franco, titular de la Comisaría del Llanito. "Se dio el golpe, se dio el golpe", dice la voz. "Y yo no entendía de qué me estaba hablando". En la confusión, Contreras llama al celular del comisario de la Disip, Elmer Rojas, y este se encuentra, cerca de La Casona, sumido en la refriega: como un Juan Charrasqueado de la modernidad sujeta el celular con la izquierda mientras echa plomo con la derecha. "El comisario Rojas me pide que acuda y constituya un tribunal accidental cerca de La Casona, de manera que ellos tengan alguna facultad de meter presa a esa gente y de juzgarla en juicios sumarios. Es cuando yo dudo y me quedo pensando. Le dije que lo llamaba en un momento. Colgué el teléfono... yo estaba solita... mi esposo estaba durmiendo, mis hijos también... En ese momento me surge la duda: quiénes son los malos y quiénes son los buenos. En qué

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bando estoy yo". Toma una decisión. Entonces va a la habitación a despertar al esposo y le dice que hay un golpe de Estado. Un rato después repite la llamada al comisario Rojas pero ya ella es otra. Ya sabe de qué lado de la barricada está. Le dice que no puede salir de su casa a esas horas y en ese predicamento. Le ofrece ayudarlo en lo que pueda desde su casa, oferta que Rojas se apresura a aceptar: los rebeldes han tomado de rehenes a dos jóvenes policías que estaban en los alrededores de La Casona... si ella los pudiera llamar y convencerlos de que suelten a los muchachos... A esa hora y con el gobierno legítimo pendiendo de un hilo, Virginia Contreras marca un teléfono de La Casona y le responde un joven (rebelde) que en tono corporativo le espeta: "Somos venezolanos que estamos luchando por la Patria y estamos dispuestos a morir; dígame qué desea". Ella le dice, en idéntico registro: "Buenas noches, soy la doctora Virginia Contreras, juez décimo penal del Municipio Sucre; usted tiene detenidos a dos jóvenes que tienen la misma Patria y yo quisiera que usted los dejara en libertad porque ellos están cumpliendo con su deber". El rebelde le sugiere que llame más tarde y cuelga el teléfono. Esa mañana se enterará de que habían soltado a los dos muchachos. "Cuando yo veo al comandante Chávez por televisión", recuerda Contreras, "se me queda grabada su promesa: por ahora. Yo conocía muy bien cuáles eran las condiciones de injusticia, de deterioro, de descomposición social, de complicidades y perversiones que habían propiciado su alzamiento. En el primer momento me pareció buenísimo que estuviera pasando todo aquello porque, como los sucesos de febrero me habían alarmado y asustado, estaba segura de que a mis compañeros en el poder judicial, en el Consejo de la Judicatura, los iba a asustar muchísimo también. Pensé: todo el mundo se va a portar bien de ahora en adelante, porque con el susto que nos acaba de dar este hombre se acabaron las cómicas". "No veía la hora de llegar al tribunal para ser testigo del cambio en las conductas. Y resulta que la reacción fue algo así como 'corran, agarren aunque sea fallo'. Eso me llenó de asombro y me enardeció. Me parecía el colmo; el país estaba sacudido por un movimiento que no hacía sino comenzar y que daba muestras de profundizarse y esta gente, en vez de reflexionar, de cambiar las prácticas que nos habían conducido a aquella tremenda crisis, lo que estaba era raspando la olla. Era demasiado. Internamente se inició para mí una cuenta regresiva. Si antes yo era rebelde, ahora sabía que no podía seguir soportando a la gente que tenía a mi alrededor. Yo no era amiga de nadie pero entonces me aislé totalmente y empecé a preguntarme muy seriamente cómo hacía para ser útil al cambio que se avizoraba y con el que ya estaba resteada". El desamor, como suele suceder, era mutuo. Contreras tampoco era santo de la devoción del personal del Consejo de la Judicatura, institución que por aquellos días llama a concurso obligatorio a los jueces. Contreras se entera por la prensa y se presenta a concurso con ese aire de sobrada —que debe enfermar a sus enemigos— y sin pasar por la peluquería, un

lugar al que concurre muy rara vez. Rinde un examen que en la opinión de dos testigos consultados resultó brillante "y muy injustamente calificado". Y regresó a su tribunal. Ni se le ocurría que podía perder, aunque le habían advertido que ya su sucesor estaba nombrado. En abril vienen los familiares de los detenidos en Yare. Contreras visita el anexo donde se encuentran encerrados apestando a mono y denostando de todo lo que oliera a poder constituido, recelo que ella tuvo la oportunidad de comprobar ante la frialdad con que fue recibida, "como representante de un poder corrompido, corruptor y poblado de incapaces". Ese primer encuentro con los rebeldes comienza el viernes a las

Ochoa Antich le conoce los pasos

diez de la mañana y termina el sábado a la dos de la madrugada. "A lo largo de todas esas horas, el director de la cárcel hacía todo lo posible por sacarme de ahí. Llamó no menos de veinticinco veces al ministro de la Defensa, Fernando Ochoa Antich, quien por radio le gritaba que si era idiota, que cómo me había dejado entrar. A los dos días recibí una notica del comandante Chávez diciéndome que después de mi visita habían tomado represalias. Les habían suprimido el rato que diariamente se pasaban caminando al sol en un pequeño patio aledaño al lugar de reclusión; les quitaron el aparato de radio y los terminaron de incomunicar". A la semana siguiente Contreras le manda un oficio a Fernando Ochoa Antich, entonces ministro de la Defensa, dándole un plazo de 48 horas para que corrija la situación de los insurgentes. Llega el 24 de abril de 1992: "Aparece el doctor Rafael Enrique Segovia Bastardo, la persona que había ganado el concurso convocado un mes antes por el Consejo de la Judicatura, y me dice que sólo me asistía el derecho a tomar mis cosas personales e irme de allí inmediatamente. Cogí mi cartera y me fui". Contreras se había quedado sin empleo. Pero no por mucho tiempo. Los muchachos de Yare le mandaron una carta invitándola a visitarlos tras su destitución y en esa ocasión ellos le propusieron que los defendiera. Por aquellos días Virginia Contreras se ponía su biquini y

RUMORES LA VINCULABAN AFECTIVAMENTE CON EL COMANDANTE CHÁVEZ. "PERO NO HUBO TAL ROMANCE", DESCARTA ELLA SIN DEJAR DE SORBER SU TÉ DE DIETA. "SI EXISTIERA NO TE LO DIRÍA, PERO NO EXISTE NI EXISTIÓ. Lo QUE SÍ HAY ES UN AFECTO QUE ESURO QUE SEA MUTUO" mitrimmilim se echaba en su silla de extensión a tomar el sol y a revisar carpetas llenas de documentos. Una vez impuesta de toda la información no le quedó ninguna duda: esos hombres estarían libres en menos de lo que ellos mismos pensaban. Tanto fervor despertó rumores que la vinculaban afectivamente con el comandante Chávez. "Pero no hubo tal romance", descarta ella sin dejar de sorber su té de dieta. "Si existiera no te lo diría, pero no existe ni existió. Lo que sí hay es un afecto que espero que sea mutuo". Contreras, descrita por su marido como "una perfeccionista total", puede lucir como un bello objeto decorativo pero ella nunca estará de adorno... ni adornará las sienes de quien la ha acompañado en estas citas con el destino. "Eso es un rumor que puso a andar el gobierno de Caldera. Ese gobierno era tan terco que se negaba a creer que en los órganos de seguridad del Estado hubiera gente afecta al MBR 200, pero entre la oficialidad que trabajaba en la Dirección de Inteligencia Militar, del Ejército y de la Disip había simpatizantes del movimiento que daban información acerca de los asuntos que se investigaban adentro, de la guerra sucia que se aplicaba y la que estaba en ciernes. De manera que aún antes de que ese rumor comenzara a circular yo estaba consciente de que eso se iba a divulgar. No tiene ningún asidero". Fuentes allegadas a ambos, tanto al presidente Chávez como a su designada embajadora ante la Organización de Estados Americanos, aseguran que las relaciones entre ambos, lejos de ser acarameladas, tienden a los constantes enfrentamientos. "Siempre están discutiendo, nunca están de acuerdo en nada", dice alguien que ni se molesta en negar la supuesta vinculación amorosa. Lo que no admite dudas es que el Presidente ha puesto en Contreras toda su confianza y la ha destinado para representar a Venezuela en el foro continental en el que espera ver reincorporada la Cuba de Castro. Va a necesitar un injerto de Mata Hari con Maquiavelo. Así deben verla desde Miraflores, puesto que el 23 de marzo de este año llegaron a casa de Virginia Contreras dos docenas de rosas color salmón acompañadas de una tarjeta que refrendaba la amistad y el respeto. Venía firmada escuetamente por Hugo. L MAYO 1999

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emillero de varias generaciones de venezolanas prominentes cuya impronta en la vida pública ha sido tangible y, paradójicamente, libre de toda limitación de género que pudiera haberle inculcado en sus cortos cincuenta años, el colegio San José de Tarbes de La Florida parece cobrar especial vigencia entre los que fundara la congregación francesa en esta comarca de caudillos. Las creadoras de la orden tarbesiana no habrían imaginado tal incidencia en el devenir de un país remoto del Caribe, aun si el propio San José se los hubiera anunciado. Tampoco habrían creído la rapidez con que se expandió, aunque el obispo de la diócesis de Tarbes, que las protegía — y de donde tomó el nombre en 1843—, se los hubiera asegurado, pero igual hicieron sus siempre humildes maletas para atender al llamado —en el transcurso de apenas siglo y medio— de países como la India, Inglaterra, Kenya, Ecuador, Perú, Colombia y Venezuela.

—entre los cuales destacaba el San José de Tarbes— sacaron a la calle para protestar la medida que atentaba contra la libertad de enseñanza, siendo la primera vez que la Iglesia retaba abiertamente al gobierno, arriesgándose a una expulsión del país que recalcitrantes como Humberto García Arocha, ministro de Educación de turno, ya le tenían jurada. "Nuestras alumnas del externado tuvieron una figuración muy especial en esas manifestaciones y lograron, junto a las escuelas privadas, que ese decreto fuera derogado", cuenta la hermana Antonieta Rotundo, ex alumna y actual directora de la sede tarbesiana de La Florida, que entonces no existía. "Teníamos un instituto en Maiquetía y cuando pasó la autopista por allá expropiaron los terrenos; entonces se aprovechó la coincidencia del cierre del de La Guaira con la necesidad de un colegio en el Este de Caracas, porque ya la población caraqueña había crecido notablemente, y poquito a po-

No por démodé la figura deja de reflejar a una nación que todavía sueña con un hombre de mano dura que la salve: la joven de tobilleras, faldita plisada e inconfundible perfil se dirige a las aulas donde un grupo de monjas se esfuerza por hacer que el último aliento del segundo milenio se lleve hábitos inveterados. Con más de un siglo en el país y justamente medio en la sede que se asoma —niña en ventana al fin— a Las Palmas y La Florida, de sus salones han salido algunas de las cabecillas del ejército de amazonas que embistiera prejuicios para ocupar su santo lugar entre los rostros más vistos de Venezuela en las últimas décadas. Pero, desde hace tres años, los vientos han dejado caer a caballeritos de uniforme en territorios hasta hace poco reservados a virginales pasos. Tal vez en cincuenta años más se permita que las muchachas asistan a clases de pantalones y que los muchachos luzcan su arete en la oreja izquierda Por estos lares, en tiempos de la quinta república, parecen sentirse cómodas, a pesar de que el gobierno de Hugo Chávez es celebrado por algunos por su semejanza con el de Marcos Pérez Jiménez, aquel que con ademán paternalista marcara la retirada de las hermanas tarbesianas de las obras hospitalarias que venían desempeñando desde que Juan Pablo Rojas Paúl las convidara a arraigar en esta tierra en 1889. Siempre serán mejores tiempos, en todo caso, que los del trienio 1945-1948, en el que el ministro de Educación de un estamento agnóstico podía promulgar un decreto como el 321 para darle preminencia a la educación pública y laica sobre la de los colegios privados o religiosos, supervisando por encima del hombro los pensa de estudio y exámenes de admisión de los últimos. En esa época, la congregación, que había llegado a Venezuela para atender los hospitales militares, el leprocomio y el manicomio, ya había cedido al afrancesado capricho de la oligarquía local de educar a sus retoños a la usanza gala —fundando colegios en Valencia, Los Teques, Barquisimeto y, en Caracas, en las zonas de San Juan, El Paraíso, Antímano, Los Caobos y Carmelitas— y dejado de ser una invitada para hacerse de la casa y abrir la boca; con recato pero con contundencia. Copei apoyó las manifestaciones que los colegios católicos

quito se fue construyendo el de La Florida. Eso duró 16 años", cuenta Rotundo. "La capilla y el bachillerato los construyó el doctor Carlos Guinand Baldó, y la primaria, un maestro de obras de apellido Manzini; el 2 de mayo de 1949 comenzó a funcionar con cinco niñas, entre las que estaba, por cierto, Cecilia Sosa". Sí, la misma que preside la Corte Suprema de Justicia encabeza una variopinta lista de ex alumnas que, por respeto a cierta tradición de abolengo, resultaría más apropiado comparar con una bodega de vinos finos que con un hall de la fama local; inevitable resulta hablar de las promociones como cosechas, tentador compararlas entre sí y pensar que todo momento pasado fue mejor o, para no perder la esperanza, que aun al mejor vino hay que darle tiempo.

engo la sensación de que en las primeras promociones del colegio hubo de verdad una pila de mujeres destacadísimas que han llegado a posiciones importantes en todos lados. Siento que eso se dio hasta el año setenta; de ahí en adelante no hubo gente demasiado sobresaliente. Sería interesante saber qué pasó", comenta Beatriz de Majo —internacionalista, MAYO

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integrante del consejo editorial de El Nacional, presidenta de la empresa petroquímica Royalco de Venezuela y egresada del Tarbes en 1965— sin excesivas apologías: "Yo me volví una gran detractora de la educación católica porque me parece que orientaba mal a las alumnas a través de una serie de sentimientos, fobias y actitudes que no son útiles en la vida; pero debo reconocer que las hermanas les dieron la oportunidad a estas mujeres de mostrar la garra que tenían desde una edad muy temprana. Claro, todas estas personas venían con unas condiciones de líderes absolutamente innatas, no creo que el colegio les diera eso". Ocarina Castillo, antropóloga, investigadora, profesora y secretaria general de la Universidad Central de Venezuela, arroja otras luces sobre el bajo perfil del colegio en los últimos años: "Estoy segura de que las tarbesianas siguen siendo profesionales de primera, lo que sucede es que a nuestra promoción —la del 69 en el colegio, la del 76 en la universidad, más o menos— le ha tocado asumir responsabilidades más rápidamente que a otras generaciones que vinieron después. Nos tocó vivir el boom de Fundayacucho, irnos a estudiar en el exterior, regresar con buenos niveles de formación y vivir el fin de la Ve nezuela que crecía sin límite y el comienzo de la crisis", sostic ne quien iniciara sus estudios en el externado de la esquina de Carmelitas, una de las sedes más antiguas de la congregación. Liana Pérez, fundadora de la empresa de comunicación cor

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El Tarbes se da golpes de pecho por el decreto 321 Las hermanas del colegio encapilladas

Beatriz de Majo, la maja con tobilleras, a la derecha Ruth Capriles, Ocarina Castillo y Elsa Cardoso, de la academia a la Academia; Floria Márquez les celebra los cincuenta

porativa Estima, secunda a de Majo: "Ese era el mejor colegio que había, a pesar de la competencia que existía con otros La Guadalupe y La Consolación— que pretendían hacer lo mismo. A mí no me gustaban las monjas y yo no les gustaba a ellas, pero les debo reconocer su apertura hacia todo lo que fue la nueva doctrina social de la Iglesia y el que me permitieran ser quien yo era en ese momento", es decir, modelo de televisión y nada menos que la chica Pepsi en una época en que la gente bien no hacía comerciales. "A Liana Pérez Alea la recibí yo cuando llegó de Cuba. Me la entregaron para que la acompañara al salón donde iba a empezar clases recuerda la cantante noria Márquez sin dar con la fecha exacta. "Me fui a Cuba en el 52 y regresé en el 60", apunta la propia Liana, "porque Pérez Jiménez tenía una ley en contra de los chinos y los negros, y en mi casa las mujeres de

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servicio eran jamaiquinas; nosotros nos habíamos traído a las niñeras de Cuba y eran importantes para nosotros, pero renovar las visas de los negros era tan difícil que decidimos irnos".

loria, reconocida en quinto año como la chica más popu-

lar de todo el plantel —las encuestas de las religiosas no mentirían— e integrante de la primera promoción de ciencias que de allí saliera en 1963, llevó su sugerente espectáculo, La cosa es amar, al salón de actos del colegio el pasado 15 de abril, inaugurando la celebración del medio cupón del Tarbes de La Florida y dejando sentado que los tiempos de la farándula satanizada que Liana Pérez recuerda han pasado. "Una vez subí al escenario y bailé un Barlovento moviendo un poquitico la cadera. La hermana superiora me llamó y me dijo 'Márquez, tenga

la amabilidad de dejar las contorsiones'. Ahora les hice un show en donde canté Soy lo prohibido. La apertura es absoluta". De eso da cuenta también Cecilia Todd: "Recuerdo que una vez querían hacer un acto especial con Mirtha Pérez para recoger fondos. Yo la veía en el Show de Renny Ottolina y la admiraba muchísimo; pero al final las monjas no la llevaron porque era divorciada 'y una mujer divorciada no puede entrar al colegio'. Más bien, no podía. "A pesar de ser una mujer de principios religiosos yo sí me divorcié, me volví a casar, enviu-

Dos Cecilias, una Todd, otra Sosa, y Marianella Salazar

Ruán, que bajo la toga de graduación llevaba el traje de novia para unirse a su joven ex profesor de Cívica, o el de Thaís Manzanilla, la actual directora del colegio Santiago de León, quien también fue a parar a los brazos de un docente, convertido después en un famoso criminólogo: "Juan Manuel Mayorca terminó casándose con Thaís, no sé si en primeras o segundas nupcias, pero por ahí fue la cosa", subraya Beatriz de Majo. "El tipo era buenmozo que daba gusto y todas, sin excepción, se enamoraron de él". "Sí, todas estábamos fascinadas porque aquello era un cuento de hadas", canta Floria, refiriéndose a otro sonado romance. "A Antonio Ortega yo lo llamaba padrino; era un profesor de biología al que quisimos mucho y que se casó con nuestra compañera Gisela Matos; ella se graduó casada y en estado. En aquel momento eso fue algo revolucionario". Y preocupante. Casi al mismo tiempo, los pasillos de la sede de El Paraíso eran recorridos sotto voce por un escándalo similar, que Marianella Salazar tiene fresco: "Cuando estábamos en primer año de bachillerato, Cecilia Alarcón se casó con Ray-

"Una vez querían hacer un acto especial con Mirtha Pérez para recoger fondos. Yo la veía en el Show de Renny Ottolina y la admiraba muchísimo; pero al final las monjas no la llevaron porque era divorciada 'y una mujer divorciada no puede entrar al colegio", recuerda Cecilia Todd dé, me volví a casar, eso no importa; como persona creo que estoy bien formada, con honestidad, moral y decencia", riposta Márquez, haciendo alusión a la mítica virtud tarbesiana, cuya defensa ha despertado pasiones.

finales de los ochenta, una nota de prensa firmada por el periodista Fausto Massó y aparentemente inofensiva salpicó la hasta entonces intocada imagen de la congregación, desencadenando reacciones que habrían ido desde religiosas furibundas en las oficinas del periódico y abogados amenazando con demandas multimillonarias hasta desmedidas cuartillas de desagravio. "Massó conocía la vida nocturna de Sabana Grande y se le ocurrió escribir una nota de color para rellenar un vacío de última hora en El Diario de Caracas sobre unas lesbianitas quinceañeras que andaban por ahí, que se creían unas malvadas pero que en el fondo tenían una gran inocencia", confiesa un testigo de excepción del episodio, "y para describirlas usó un símil que decía 'con la gracia de una muchacha del San José de Tarbes'. Fue simplemente una frase, como de pronto puedes decir 'esas prostitutas que tienen la gracia de la Quinta Avenida' o de una joya de Tiffany o de una virgen; si mencionó al Tarbes fue porque esa es la gente más inocente del país y porque las lesbianitas no eran personajes deleznables en la nota, no había intención maligna en todo eso". Lo que hubo fue una notoria imprecisión, sugieren quienes jamás habrían escuchado historias de sáficas connotaciones mas sí de enlaces de alto contraste, como el de Conchita

mond Aguiar, ¿sabes?, el abogado penalista, el del caso Carmona, el que era socio de Yesmín Rodríguez en el mismo bufete, el que mataron saliendo de su oficina en Las Mercedes, el que...".

arianella, quien venía de estudiar toda su vida en el externado de El Paraíso, se graduó en La Florida en 1967, posando para el anuario y recibiendo el sello de una institución cuyas alumnas intuían, aunque pocas lo admitan, superior a las otras que integran el rosario de planteles de la congregación. "Yo no pertenezco a ninguna familia de abolengo ni de fortuna, pero acuérdate que la godarria era básicamente de El Paraíso; ahí estudiaban las Marturet, las Machado Zuloaga, todas ellas estaban allá", disiente Salazar. "El Paraíso tuvo su esplendor, pero, cuando dejó de ser la urbanización que era, las niñas bien se desplazaron a La Florida. Margarita Scannone —la fotógrafa— siempre vivió en El Paraíso, pero estudiaba en La Florida", le espeta otra ex alumna. "Imelda Cisneros era de El Paraíso y una de las promotoras de esa tremenda rivalidad que existía entre los distintos San José de Tarbes", añade Beatriz de Majo. "Hay que ser sinceros: este es un colegio de clase media alta", admite Antonieta Rotundo abriendo los ojos como quien comete una infidencia. "Es algo que hay entre las niñas, pero no entre las hermanas o los profesores", agrega la religiosa, aunque quienes fueron testigos de no muy sutiles formas de discriminación escuchen con recelo su afirmación. "Había una distinción de clases muy brava. Se recogía di- = MAYO 1999 EXCESO

nero en los salones para que las monjas tarbesianas fueran a hacer catequesis en el Alto Amazonas y ganaba la fila del salón que más dinero recogiera. Para las monjas eso tenía un fin benéfico y noble, pero era muy jodido para las alumnas a quienes les estaban restregando en la cara que eran pobres: 'Si no puedes dar dinero, nunca te vas a ganar el premio", jura una joven desde el secreto del confesionario, desestimando que se tratara de una forma de preparar al alumnado para el mundo exterior —en el que el clasismo impera—, aunque en ello se esmeren las hermanas tarbesianas. " E

1 perfil académico es igual en todos los colegios por cuanto es una exigencia del Ministerio de Educación; pero nosotras tratamos de dar una formación integral y de enfatizar mucho el sentido social de manera que las muchachas se sensibilicen ante lo que viven", afirma la hermana Beatriz Caravallo con un canon de voces al fondo que parecen respaldarla. "Una sentía que estaba naciendo una nueva forma de ver el sentido religioso y la pertinencia social de la Iglesia", dice Ocarina Castillo. "En la discusión sobre los documentos del Concilio Vaticano Segundo y las primeras encíclicas, ya claramente sociales, sentimos que había otro discurso que, en mi caso, fue determinante. Yo asimilé todas esas cosas y descubrí que mi incorporación a las tendencias de izquierda y concepciones políticas más o menos revolucionarias en la UCV era parte de un mismo proceso que tenía que ver con mi pasado tarbesiano y su apertura religiosa". Ruth Capriles, escritora, investigadora y profesora de la Ucab egresada del Tarbes en 1968, confirma que la de los sesenta fue una década movida: "Yo me di cuenta de la apertura religiosa por la rebeldía mostrada por algunas de las monjas jóvenes del colegio que participaron, por ejemplo, en la to-

El Paraíso opacado por la luz

Antonio Ortega querido por estudiantes

"A Antonio Ortega yo lo llamaba padrino; era un profesor de biología al que quisimos mucho y que se casó con nuestra compañera Gisela Matos; ella se graduó casada y en estado. En aquel momento eso fue algo revolucionario", cuenta la cantante Floria Márquez ma de la iglesia de Santa Teresa. Esa toma fue el resultado de unos movimientos que se habían iniciado en todos los colegios católicos, a través de los centros de estudiantes y de otro movimiento que se llamó Palestra —grupo de discusión intercolegial al que asistían también los muchachos de La Salle y el San Ignacio de Loyola, teñido por los argumentos de la Teología de la Liberación y la izquierda cristiana—, como formas de rebeldía frente a la institución y para exigir mayor justicia social, entre otras cosas", describe así el acontecimiento que, según sus cuentas, hizo que los colegios católicos y privados cerraran durante veinte años los centros de estudiantes que otrora los distinguieron. "El San José de Tarbes fue uno de los líderes en el desarrollo de las asambleas de Cefel (Centros de Estudiantes Federa6o EXCESO MAYO 1999

dos de Educación Libre), una de las primeras iniciativas de gremialismo estudiantil privado", rememora Beatriz de Majo. "Cada colegio designaba dentro de su centro de estudiantes una persona que los representara y a esas asambleas fue gente super prestigiosa como Juan José Caldera, Armando Gabaldón, Juan Luis Hernández y Gabriel Ruán" (sic). Ruth Capriles retorna el hilo: "La curia se asustó con la toma de Santa Teresa —en realidad lo que se hizo fue hablarles a los feligreses desde el púlpito sobre las diferencias e injusticias sociales— porque, inicialmente, y ahora es que me doy cuenta, el movimiento estudiantil de los colegios católicos fue permitido —y quizás hasta propiciado— por las autoridades de la Iglesia Católica como contraparte al movimiento guerrillero de principios de los sesenta, a la izquierdización de la ju-

El portón que protege a las niñas de la vida real Arriba, Enoé Texier, siempre brillante; Caresse Lansberg en pleno suplicio y Marta Canelón, patito feo Juan Manuel Mayorca, buen partido; Thaís Manzanilla, buena alumna; María Guinand, Tarbesiana del setenta con todo y huelga, abajo y a la izquierda

ventud", recuerda Capriles, quien coordina un grupo de veedores del proceso constituyente en donde ha coincidido mucha gente de los días del grupo Palestra. "Mauricio Iranzo anda por ahí", avisa, refiriéndose al joven que, junto a Susana Calcaño, atípica niña del Country Club, protagonizara un romance de proporciones para entonces escandalosas. "No era nada escandaloso, lo que hubo fue un flirteo", corrige Capriles. "Lo que sucedía es que había una norma tácita de que no se involucrarían los varones con las hembras en cuestiones amorosas porque esta era una lucha por el cambio de las estructuras sociales".

de brazos caídos en solidaridad con otros colegios de la ciudad. Como yo estaba entre las líderes a nivel de cuarto y quinto año, me botaron por un día y, por supuesto, esa fue una gran tragedia en mi familia. Pero yo no fui la única: Ocarina Castillo también andaba por ahí". Shock para unas madres que las habían visto ganar el reconocimiento de Tarbesiana del Año, tenido como el premio de las santurronas y otorgado en sólo cuatro ocasiones —Gladys Michelena y María Josefina Bustamante también ganarían los suyos— para no estimular la envidia entre las niñas. "Nunca me gané esa medalla porque eso era para las buenecitas; yo no era sino la mejor alumna, desde kinder hasta quinto año de bachillerato", espeta Enoé Texier, de la promoción del 70, actual coordinadora de la cátedra Unesco de Cultura de Paz de Venezuela y, no casualmente, colaboradora de la científica norteamericana Elaine de Beauport en el programa de inteligencias múltiples que promueve el desarrollo del 90 por ciento del cerebro que no se usa. "Yo misma fui compañera de todas ellas, nunca fui tarbesiana del año y mírame: ¡soy monja!", bromea la directora del plantel.

No fue menos intenso el influjo del espíritu tarbesiano so-

aría Guinand dirigirá a la Orquesta Simón Bolívar el 5 de mayo en el marco de los cincuenta años del colegio donde fundó su primer coro y aprendió a conjugar todos los tiempos verbales en francés y castellano a punta de castigos, de los que no se salvó a pesar de la estrecha relación de su abuela con la más severa de las religiosas —"la hermana Redentor se lavaba las manos con alcohol porque para ella todo estaba sucio"— y de su abuelo con la capilla, diseñada por él e inaugurada en 1962 con la bendición del cardenal Quintero. "Aquel santuario me recuerda los años en que fui sacristana; era la época de las misas en latín y eso marcó en mí un amor inmenso por toda la liturgia de la Iglesia y la música sacra", afirma Guinand, que tampoco se salvó de la expulsión que, un año antes de graduarse, se ganara por seguir los acordes de su espíritu rebelde. "La cosa estaba muy prendida, la UCV estaba en plena reforma, muchos colegios estaban en huelgas propiciadas un poco por el Mayo Francés y nosotras hicimos una

bre aquellas que entraron tarde a las filas del colegio, aunque, desde luego, siempre hay excepciones, como las hay, inclusive, entre quienes pasaron su vida en esas aulas. Cristina Raffalli, promoción del 84, es prolífica en anécdotas tormentosas: "Estudié desde kinder hasta quinto año en el Tarbes y mi conclusión es que, generalmente, las monjas son unas muchachas de una formación intelectual no muy sólida que, por su vocación indudable, se entregan a la educación aunque no estén formadas profesionalmente para eso", dispara la ex jefa de redacción de la revista Imagen y codueña de la tienda La Escondida, quien, junto a Joyce Noujaim, reconocida modelo del terruño, fuera etiquetada alguna vez como una joven con problemas de conducta. "Entonces, yo y muchas otras personas nos hemos tropezado con ese rollo de una formación moral que ellas mismas no tienen muy clara y una formación académica deficiente. A mí en quinto año me dio Filosofía una monMAYO 1999 EXCESO

ja; cualquiera puede suponer lo incoherente que puede ser una monja dando Filosofía". "Yo salí del Instituto Politécnico Educacional porque se estaba fusionando con otro colegio y cortaron cuarto y quinto año", explica Caresse Lansberg, la atractiva editora de la revista Estilo, "y en el único que conseguí cupo fue en el San José de Tarbes de La Florida porque tenía unos contactos ahí... Yo bloqueé mis días en el San José de Tarbes —entre 1965 y 1967. Eso fue para mí un mal necesario; no me voy a poner a tirarle piedras a las monjas, pero es que me costó mucho adaptarme. Era una cultura en la que había que saber el nombre de todas las hermanas y estar de buenas con ellas; yo me enteré de que si tocabas la campana para misa ganabas puntos con las monjas. Mi día más triste fue cuando entré al San José de Tarbes y el más feliz cuando salí", admite Lansberg a quema-

Silvia Paúl baila con pollos; Valentina sin bitácora

"Mi día más triste fue cuando entré al San José de Tarbes y el más feliz cuando salí", admite Lansberg antes de hablar de los uniformes: "Eran atroces, todas nos veíamos gordas. Yo me veía en el espejo y parecía una gafa"

Pérez Schael, Ordóñez y Torres tal cual fueron

rropa antes de hablar de los uniformes: "Eran atroces, todas nos veíamos gordas. Era un uniforme azul con una camisita amarilla clara. Yo me veía en el espejo y parecía una gafa". Pero que no se resienta Lansberg: entonces no había otra manera de verse. Hasta la despampanante Marta Canelón de Henríquez, que llegó a inspirar a Andy Warhol, es recordada por una que otra compañera de curso como un patito feo y desaliñado. Hoy día, en cambio, las únicas que llevan la falda a la reglamentaria altura de las rodillas son las monjas. En los sesenta los pantalones eran asunto tan exclusivo del género masculino que sólo ocasiones en extremo especiales admitían el relajamiento de normas en materia de indumentaria. "Yo estaba en cuarto año y organizamos una fogata a las 6 de la tarde para despedir a las de quinto, que querían ir en pantalón. Ellas me pidieron que solicitara el permiso, pero yo era tan tarada que me puse de parte de las monjas. De todas maneras ganaron los pantalones", recuerda Irene Pérez 501£13 pr9111111i011 cel 671 premio ConiQiI Al mejor IrAbAjo científico de 1998 —ya había ganado uno en 1980— por sus investigaciones para el desarrollo de la vacuna contra el Rotavirus —el que causa la gastroenteritis— que hoy se comercializa en los Estados Unidos y fue reseñada por la revista de salud 62

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más prestigiosa del mundo, The New England f ournal of Medicine, además de The New York Times y The Washington Post. Silvia Paúl de Oteyza, del 69, prefiere no hablar de las fachas de reglamento. "Yo venía del Instituto Politécnico igual que Caresse Lansberg, pero para mí el cambio fue excelente", asegura la directora nacional de Fe y Alegría desde hace nueve años. "Esos años marcaron en mí la responsabilidad social que tenemos las personas que hemos sido privilegiadas; tengo amigas del Tarbes que están en posiciones muy importantes y a quienes les ha gustado trabajar por el país, como Ocarina Castillo, Rossana Ordóñez, Neujim Pastori, la esposa de Petkoff". "Yo fui a ese colegio desde cuarto grado hasta que me salí en tercer año porque no me sentí a gusto; venía del Santa Teresa que quedaba al lado de la Quinta Anauco y a tres minutos de mi casa y, de repente, me pasaron a ese edificio monstruoso donde éramos 45 por cada sección, tres secciones por cada grado y me sentía como cucaracha en baile de gallina", evoca Cecilia Todd, quien, de haber continuado en el plantel, se habría graduado con Fina Torres, más afín en esos días a las competencias deportivas —"Fina corría como una loca", jura Ocarina Castillo— que a las mecánicas de la cultura o el cine. "Lo que me gustaba era cantar", insiste Cecilia, "tenía un trío con Haydée Chaverola y Mery Zabala, y estuvimos en todos los actos culturales del colegio". Menos en la Carrera del Sol, acto musical auspiciado por las monjas pero que estaba aún por crearse y que, probablemente, habría retenido a la cantante un poco más en las listas de alumnas. "Era una competencia intercolegial en la que se recaudaban

fondos para una obra metal que mantenía el mismo colegio en el barrio Los Manolos. Esa fue una pelea muy grande porque todos los muchachos de Caracas querían entrar al teatro de El Paraíso y no podían", narra la hermana Rotundo con interrupción de la hermana Caravallo: "Intentamos hacerla en el

Pateando bolas a pesar de los faldones Arriba, un par de Mercedes de las mismas aulas: Pulido ministra, Penzini administra A la izquierda, Napoleón Bravo sin boina y en plena Carrera del Sol

C olegiala, hoy somos promesa", rezaba la segunda es-

Teatro Municipal, pero el público se portó tan terriblemente que se decidió suspenderla".

"Nosotras fuimos quienes iniciamos la Carrera del Sol",

testifica la conocida periodista Valentina Quintero, quien empezó sus estudios en la sede de Los Teques, que fuera traspasada hace cuatro años a una dirección de seglares por la falta de personal docente y la carencia de monjas. "Decidimos que no íbamos a hacer anillos de graduación ni a gastar toda esa plata sino que íbamos a hacer un festival de música y que lo que se recogiera allí sería para las obras sociales del colegio, y entonces recuerdo —yo tenía 17 años— que el día del festival a mí me tocó ser animadora y estar junto a Napoleón Bravo que era, para la época, locutor de Radio Capital y estaba precioso, buenísimo, y tenía un traje azul marino y todo el mundo lo que quería era hablar y besar a Napoleón y cuando terminó el acto me dio un beso y yo levitaba, prácticamente, porque no había hablado sino conmigo". La anécdota data de 1972, cuando, bajo el amenazante régimen de inscripción condicionada, cursó su último año: "Yo fui buena estudiante pero no muy buena en disciplina".

trofa —concebida en primera persona por un sacerdote de pelo en pecho— del cincuentenario himno del San José de Tarbes, que recientemente ha cedido el paso a una versión unisex más acorde con las nuevas políticas de admisión de estudiantes —al menos en La Florida. "Donde decía `tarbesianas' ahora dice `tarbesianos', donde decía 'para el alma de nuestra mujer' hoy dice 'para el alma de nuestro ser'", aclara la directora de la institución que progresivamente ha ido admitiendo varones en sus filas. "Ya es un colegio mixto hasta tercer grado. Esto ha ido lentamente porque no queremos que sea visto por las muchachas como una invasión, aunque ya algunas ex alumnas nuestras han manifestado su descontento; dicen que ellas eran más libres cuando solamente había niñas". Verdad o no, puede que las colegialas en cuestión no estén tan desganadas para la integración de los sexos como los niños —quienes se aprestan a exhibir en el pecho la insignia de un colegio conocido tradicionalmente como de señoritas—, aún cuando, con paciencia de anfitrionas, hayan visto ocupado su territorio por canchas deportivas construidas exclusivamente —"ahora sentirán que una parte del colegio es de ellos solos"— para que el machismo en ascenso despliegue su rudeza. "Creo que esa es la educación auténtica, estamos en un mundo mixto", desliza la hermana Beatriz Caravallo con un rictus ambiguo, a medio camino entre el disimulo de algo hace mucho sabido y la resignación ante los tiempos cambiantes, no tan distantes los días en que la visita de los mancebos de La Salle o el San Ignacio implicaba el precavido encierro de las jóvenes ninfas. "Hacíamos cualquier cosa, nos salíamos por la parte de atrás y nos escondíamos para verlos", recuerda María Eugenia Castro de Montero, promoción del 68, presidenta de la Comisión de Educación y Cultura del municipio Baruta y madre de cinco que han preferido enlistarse en Los Arcos y Los Arrayanes. Con la convivencia heterosexual como novísima meta, muchas costumbres habrán de cambiar. Probablemente las chicas no puedan quejarse a viva voz de sus dolores de vientre como hasta ahora lo han hecho y deban afilar su ya emblemático intelecto para defender, vaya paradoja, su derecho a patear balones en la cancha de futbolito. Como cualquier hombre. U. MAYO 1999 EXCESO

S obre el engramado de Cachamay

retumba el son metálico que anuncia la entrada al campo del equipo Mineros de Guayana. Convencidos, los once pupilos salen del túnel guiados por su mítico entrenador Mario Kempes. Pero las circunstancias no son las mismas para este tótem del fútbol austral: el calor sofocante agobia su piel ahora curtida por el sol. El clima es menos amable que las primaveras futbolísticas de su Argentina natal. Y no sólo la temperatura, también el recibimiento hostil es novedad: de esas gradas recalentadas, pobladas por esa turba tropical que poco sabe del balompié, provienen voces que lo maldicen. Vaya herejía. El hombre otrora aplaudido por sus goles ahora es abucheado en un rincón perdido de la canícula amazónica por unos hinchas defraudados ante el deslucido papel del club que ha tenido a bien dirigir. Luego empieza el nerviosismo que se consume en el humo de un cigarrillo tras otro. El hombre sufre y padece, ¿qué lo mantie ne en pie? ¿Qué razones lo retienen en este lugar olvidado por la gracia de dios? ¿Por qué después de tantos hono res soporta esta humillación? La herrumbre cosmética que recubre a la ciudad del hierro y el aluminio ofrece a los ojos del incauto visitante una falsa impresión de ruina, sólo rebatida por su ya tradicional esplendor económico. El respirable óxido que exudan las paredes de sus industrias es el síntoma inequívoco de la vitalidad fabril de Puerto Ordaz y de su reafirmación como centro axial de la única práctica económica que se atreve a competir por su productividad con la renta petrolera. La asiduidad con que la prosperidad prodiga sus bondades sobre este estandarte de la riqueza siderúrgica guayanesa ha contribuido a que se haya hecho costumbre la planificación de proyectos que por majestuosos son la estampa de los sueños quiméricos del subdesarrollo. Puerto Ordaz o Ciudad Guayana,

101110 fue rebautizada, es el producto de la premeditación urbanística; una ciudad piloto en la que se calculó la distribución geométrica de los edificios para que no impidieran el paso de las tremo64

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linas brisas por las zonas residenciales agobiadas por el vehemente calor guayanés. Así la heterogeneidad monumental de sus edificaciones comulga con la efusión de sus bellezas naturales para convertirse en un aparador de vociferante exhibicionismo. Y así como el Centro Comercial San Tomé, el Centro Altavista o primoroso Macrohaño —así llamado por la picaresca popular—, las torres Loreto —remedo menudo del edificio central del Teresa Carreño— y la presencia de quijotescos molinos de

viento enriquecen la jactanciosa presunción del imaginario de la ciudad, el ahora eclipsado equipo de fútbol Mineros de Guayana también ha hecho lo suyo; otrora distintivo orgullo de la ciu-

dad, ahora sueña con reeditar los laureles del pasado echando mano de las más hidalgas fantasías. Las ínfulas de ostentación y triunfo han dado forma a los intentos más desesperados por reconciliarse con el éxito. Con la contratación como entrenador de quien fuera leyenda del fútbol argentino, Mario Alberto Kempes, piensan dar forma cabal a su sueño. El máximo artillero del mundial del 78 ahora está en Venezuela. Se trata de un personaje enigmático del que la fama dice poco, ya que pronto declinó ante la sustantiva figuración y descomunales hazañas de el Pelusa Maradona. Su presencia en el complejo deportivo de Cachamay como director técnico del equipo local es un hecho

En la resolana guayanesa, el mítico goleador argentino, la estrella del Mundial 78, cuenta los minutos del segundo tiempo de su destino futbolístico, pero desde el banquillo y como entrenador. Precisamente a Puerto Ordaz, en esa región donde los conquistadores husmearan el Dorado y más tarde la república minera residenciara la utopía, ha venido a parar este Mario alguna vez apodado el Matador, para compartir con la polis amazónica el tedio de las glorias vencidas, aunque estoico, convencido de la seriedad de su nuevo oficio, firme en la determinación de no quedar mal en la cancha del incipiente fútbol venezolano, seguro de que la escuadra que dirige no correrá parecida suerte a la de sus patrocinantes, las empresas de la CVG

Juan Pablo Quintero desde Puerto Ordaz

que incita a la perplejidad y que ha hecho que los ojos se posen nuevamente sobre esta olvidada estrella de los años setenta, despertando el interés inusitado de la prensa internacional por el escuálido panorama del fútbol venezolano. El vitoreado Marito, por su implacable asedio a las mallas, no en balde sería apodado el Matador, denominación que nace de la extraña promesa de un renombrado narrador deportivo de entonces llamado José María Muñoz, quien lanzó un desafío público al delantero, advirtiendo su escasa producción de goles fuera de casa esa temporada, y prometió que si hacía un gol como visitante y él estaba trasmitiendo, le pondría un apodo de inmediato; así Kempes, en el siguiente partido, alcanzó la diana y este alias pasó a acrecentar la leyenda de sus hazañas como atacante. Ahora resu cita del temporal anonimato —al menos en la tierra de Bolívar— que siguiera a su última participación en una copa mundial. Esta reaparición dentro del mundo del fútbol luego de su retiro definitivo como jugador activo en 1993 está lejos de generar una verdadera admiración en los ojos de los especialistas y de sus antiguos fanáticos. Muchos pien san que las circunstancias no son las ideales y que ser entrenador de un equi po de precaria notoriedad en un país mezquino en cuanto a tradición futbolística se refiere en realidad desmerece al astro y lo condena a rebajarse. Las derrotas y desempeños discretos del club desde que está a su cargo lo hacen lidiar con la befa de aficionados frustrados, lo que marca sin duda su franco proceso de decadencia dentro del ámbito de este deporte si se compara con su pasado dentro del campo donde lo hizo todo. Kempes intenta justificar noblemente sus actos, describiendo la experiencia como un período de aprendizaje dentro de un proceso en el que busca hacerse de un nombre internacional como entrenador: "Sólo estoy aprovechando

no hay quien dude de que la situación es demasiado incómoda para una estrella de su jerarquía. Desde que asumió la Dirección Técnica del equipo guayanés en octubre de 1998, ha adoptado ante el acoso de la prensa y la expectación pública una actitud positiva, conformista y por demás paciente de cara a los problemas de una escuadra en plena crisis financiera, ejecutiva y de rendimiento deportivo en general. El equipo que quedaría penúltimo en el Torneo Apertura, en abril de 1999, se encontraba de quinto en la tabla del Torneo Clausura especulando con los resultados de varios empates consecutivos. El pasado partido frente al Caracas fue un desastre: perdieron 5-2 y Kempes fue suspendido y expulsado del terreno. La situa-

C uando vino al mundo el 15 de julio

de 1954, Argentina aún no era una potencia del fútbol, pero serían sus pies y esos seis goles en la ronda final del Mundial del 78 los que darían a su país la primera copa del mundo. Como todo latinoamericano del Cono Sur, nació con un balón de fútbol en los pies; las calles de su patria chica, Córdoba, dieron vida a sus sueños de gloria como ju-

El tanto de su vida

ción del equipo en el campeonato y el balance general sugieren en las mentes suspicaces de muchos que Kempes no ha satisfecho las utopías del club, que delegó en su figura la responsabilidad de convertirse en el redentor de una camiseta venida a menos por los infortunios de la CVG y algunas empresas privadas de Guayana. Las preguntas surgen inevitablemente: ¿Qué lo mantiene aquí? ¿Por qué cuenta con el apoyo de las autoridades si aún no ha alcanzado los éxitos augurados por su prestigio y peso futbolístico? Todavía las condiciones de su permanencia siguen despertando desconcierto, su aparente fracaso y el

gador de oficio. En Argentina ha existido desde siempre una pasión por este deporte y se practica con la laboriosidad de la antigua raza gaucha. El culto colectivo a este deporte, la existencia de diversidad de equipos, el natural talento y la persistencia lograron que ascendiera vertiginosamente en su carrera como profesional. Pasó por distintos equipos antes de alcanzar la fama internacional: Talleres/Biblioteca Bell (1968-1971), Instituto de Córdoba (1972-1973) y Rosario Central (1974-1976), franquicia que le debe la factura de casi cien goles. Su agilidad en el contraataque y su sentido de oportunidad como goleador provocaron su traspaso al fútbol español en las filas del Valencia FC, después de su actuación en el Mundial de 1974. El repentino cambio de suerte del equipo español gracias al recién llegado, quien lo

la oportunidad que se me ha dado en perceptible desagrado de una fanaticada

hizo campeón en tres oportunidades, le

Venezuela para empezar a saborear lo que es el fútbol desde el banquillo, para subir poco a poco. Es un país fenomenal". Pese a la buena fe de sus palabras

dio fama instantánea. Allí logró el título de máximo artillero de la liga española en las temporadas del 76-77 y 77-78. En Argentina 78, Kempes con sus goles

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Orinoquia futbolística

defraudada hacen pensar que Kempes se ha convertido en otro emblema representativo de los anhelos frustrados de desarrollo de la nación venezolana.

demostró toda su capacidad para sentenciar los juegos en momentos decisivos y así condujo a la albiceleste al campeonato; en ese mundial quedó como máximo goleador, fue reconocido como mejor jugador del torneo y de ese año. En 1981 fue prestado al River Plate, que gracias a él se convirtió en campeón del Torneo Nacional ese año, hecho que alimentó la creencia legendaria

horizonte de expectativas convertirse en entrenador. A mediados de ese mismo año inicia el curso de director técnico en la Madre Patria. Ya licenciado, experimenta con un equipo de tercera división española y colabora con algunos preparadores con más años de ejercicio en el área. En 1995 regresa a tierras australes y acepta volver a las canchas como un favor a un amigo, mili-

No hay quien dude de que la situación es demasiado incómoda para una estrella de su jerarquía. Desde que asumió la Dirección Técnica del equipo guayanés ha adoptado ante el acoso una actitud positiva, conformista y por demás paciente de cara a los problemas de una escuadra en plena crisis

de que este gigante del fútbol tenía la capacidad de transformar de inmediato 5 la suerte del equipo que gozara de sus r: servicios hasta hacerlo un campeón natural. Tal vez esta facultad de Midas sóo la tenga como jugador 11 y no como entrenador. 'k Luego regresó al Valencia para obtener los títulos en la Copa del Rey y en la Copa Uefa. Tras su deslucida actuación y la infructuosa defensa del título de la selección argentina, continúa en el plantel valenciano hasta 1984, cuando es vendido al equipo Hércules de Alicante, donde estuvo hasta el 86. Desplazado por la figuración de nuevos jugadores, no jugó en el Mundial de México. Balompié en pañales Todo era el preludio dramático de su tando en el Fernández Vial de Chile pafuturo retiro de las canchas. Sin embarra revivir fugazmente el protagonismo go esto no se consumó hasta 1993, desdel pasado. La mala idea tuvo una vida pués de un itinerante recorrido por vaefímera, pero al año siguiente empieza rios equipos austríacos (Saint Polten, a manifestar su atracción por el fútbol Wienner y Krems). Luego de varios hodevaluado de países tropicales y acepta menajes en España, entra dentro de su un cargo paralelo como jugador y en-

trenador de un equipo de la lejana y perdida Indonesia, llamado Pelita Jaya. Pronto desaparecería el interés por el exotismo de este fútbol de desdeñable calidad y decidió regresar a su país después de una discrepancia con el dueño del equipo javanés que sostenía que jugadores de metro y medio debían sujetarse al esquema británico de centros al área y cabezazos. En definitiva, en 28 años de vida activa como profesional (1968-1996), participó en cerca de 430 partidos, marcando un aproximado de 360 goles. También tuvo una incursión en la dirección de clubes albaneses. Cuando aceptó la proposición de venir a Venezuela, se encontraba ocupado en su programa televisivo Locos por el fútbol en compañía de el Pato Fillol, su antiguo compañero del legendario equipo de Argentina 78. La gestión fue hecha por su empresario personal, Horacio Fernández; el trámite fue más sencillo de lo que pueda parecer a ojos de terceros. Kempes declara con su distin-

tivo orgullo que él va a donde exista fútbol y trabajo, sin importar los posibles prejuicios y reacciones que puedan suscitar sus decisiones. Confiesa ufano que la verdadera cláusula de su contrato es que si lo hace bien se queda y si lo está haciendo mal se va. Según su parecer, no deben ser tales sus presuntos desaciertos como técnico, si no ya lo hubiesen despedido ¿o no?

o puede negarse la dignidad con que afronta su trabajo diario y el respeto por el menospreciado fútbol de esta tierra —sin gracia a la hora de patear la bola— implícito en su convencimiento de permanecer en el cargo. Debe ser genuina su preocupación por el futuro de MAYO 1999

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este deporte en Venezuela porque en variadas ocasiones ha hecho manifiesto su interés por el talento potencial de la juventud venezolana; todo esto deslumbraría hasta al más ciego de los representantes de la Federación Venezolana de Fútbol. Pero la sospecha y la duda metódica hacen despertar la curiosidad sobre la vida que lleva Mario bajo el sol inclemente de Guayana. El técnico de Mineros, lejos de lo que pueda pensarse, no es amigo de los excesos del lujo y la pompa del confort, por eso le ha sido fácil adaptarse a la vida sencilla de la provincia venezolana. Su rutina cotidiana se circunscribe a la disciplina que le impone el trabajo, las actividades son asignadas por el rigor del deber y de su sueldo nace el sustento con que cubre las necesidades más elementales. Kempes gusta pasar la mayor parte del tiempo libre dentro del modesto apartamento donde reside y cuya renta subsidia la gerencia del equipo. En la comedida sobriedad de su morada consigue la paz necesaria para seguir desde la televisión el acontecer del fútbol internacional. Celoso de su vida privada, su casa es el resguardo ante el acoso de la opinión pública. La calma y limitada ambición que lo caracterizan han sido factor condicionante del tímido ascenso de su carrera como entrenador. Si bien es cierto que llegó a este país como un personaje manirroto en su vida sentimental, después de la soledad que siguió a la ruptura de un matrimonio de 17 años, el vínculo con una muchacha del país le ha ayudado a establecerse y combatir el abatimiento de saberse lejos de sus tres hijos españoles (Arianne, Magaly y Mario José). Kempes reitera constantemente su filosofía de vida, que lo alienta a vivir en el presente sin pensar en lo que pueda pasar mañana. No fantasea con las posibilidades que le brindaría estar en otro lugar. Su concentración no es perturbada por ningún otro compromiso; hace años que no tiene relación ninguna Ign !a A§glialién A•gotinq Fútbol. En la víspera de los partidos procura concentrar a la plantilla y entrar en comunión con sus pupilos para despejarlos de toda preocupación y an68

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siedad. El día del encuentro cumple con una rutina casi religiosa: la comida es precedida de una marcha liviana, el trecho hacia el estadio es un viaje en bus que sirve para revisarse a sí mismo, la conversación final se lleva a cabo por lo regular en los vestuarios, en el terreno de juego se realiza la preparación físico-

"Si bien los resultados en el torneo no son los esperados, la llegada de Kempes no deja de ser provechosa; ha abierto las fronteras del fútbol venezolano al exterior y ya hemos logrado irrumpir en el comercio internacional de jugadores" muscular, el partido se inicia de acuerdo a las estrategias definidas por el trainer. Pese a los problemas y unas restricciones no acordes con el linaje como goleador en mundiales, juzga su incursión en el fútbol rentado del país como positiva, ya que para él en la vida competitiva del profesional de este deporte las dificultades sólo robustecen la personalidad. La intimidación de este ambiente hostil en que es injuriado por la afición implacable no parece hacer mella en la voluntad de salir airoso de esta aventura que emprendió hace cinco meses. Mineros es un equipo integrado mayormente por el talento juvenil de la tierra guayanesa. El respeto inapelable que genera en los noveles jugadores lo que representa internacionalmente la figura de Kempes y el orgullo natural de trabajar bajo la tutela de un ídolo de su trayectoria suelen hacerse elocuentes en LAWPi05 11QQ1AVAQiAnCs, Stalin Rivas, jugador guayanés que ha militado en la liga belga, manifiesta su aprecio: "Bajo el mando de su estrategia todos nos sentimos convencidos de que esta-

mos haciendo lo correcto". Sólo existe un episodio gris entre Kempes y uno de sus jugadores y es el caso de la estrella brasileña Lalo Da Silva, a quien expulsara por problemas de disciplina. Muchos aún le reprochan el fallo que ha perjudicado sensiblemente al club. Pero el presidente de Mineros, Andoni Quintana, no pierde las esperanzas en su in-

En España anotó el gol nupcial

versión: "Si bien los resultados en el torneo no son los esperados, la llegada de Kempes no deja de ser provechosa; ha abierto las fronteras del fútbol venezolano al exterior y ya hemos logrado irrumpir en el comercio internacional de jugadores", lo que ha permitido la supervivencia económica del cuadro. Según las palabras de Quintana, recibir las enseñanzas de esta antigua gloria del fútbol ha llenado el vacío que arrastraba el equipo desde hacía dos años en el campo de la filosofía y psicología deportiva. Kempes ha sabido orientar todo el potencial de Mineros hacia la entrega total y absoluta a una sola causa: la competencia. Pero el panorama de la nómina de sus jugadores y la existencia misma del equipo se ven seriamente amenazadas por la estrechez económica. Las empresas siderúrgicas, los entes privados y todos los subsidios estatales han dejado de suministrar sustento al equipo: han retirado su inversión ante la demostrada improductividad como negocio y la reciente apatía de los hinchas. La situaoón se agrava Qcfn el tiempo; se puede percibir en la carencia de sponsors y de un patrocinante oficial; signo de la devaluación de la camiseta y de su orfandad, llevan como insignia el recuadro

•

blanco en el pecho que parece pedir a gritos el patrocinio de algún anunciante. El problema menoscaba la motivación de la plantilla, ya que no cobran ni un centavo desde hace dos meses. Se teme que para la siguiente temporada el equipo desaparezca, de la misma manera que ocurriera con el coterráneo Minerven. Extrañamente, Kempes, ante esta crisis, no parece objetar nada y se aferra a su firmeza, como si nada se interpusiese en su destino.

ñal evidente del deseo de que lo dejen Guerra expresa agriamente: "En realirealizar en paz su trabajo. Siempre redad la historia ha demostrado que los servado, bajo el signo del más extremo alcances de semejantes contrataciones individualismo y el marcado control de sólo tienen repercusión en la estampa su vida personal, ha logrado superarse pública del equipo, sólo es apreciable una mejora en el manejo de la imagen". Además, agrega que si personalidades de este tipo aceptan venir es La juventud de Mineros porque están ociosos, sólo atraídos ---- es la esperanza de Kempes por una posible figuración que los -'4 "11~0 firfr 11111.catapulte internacionalmente y los rescate del olvido. Deja caer senten=Ir" : cia: "Su paso por nuestro fútbol es transitorio, y está subordinado al desembolso de grandes cantidades de •••• •• 71dólares". Para él estos casos se han

nal se atreven a cuestionar la verdadera trascendencia que tiene para el fútbol

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repetido innumerables veces sin que se perciba un beneficio que impulse un progreso verdadero. Que el trabajo de Kempes esté sesgado estrictamente de acuerdo a este patrón es difícil saberlo, pero es innegable que los resultados no son los óptimos. En ocasiones da la impresión de que Kempes gustara de pasar inadvertido, sus pasos parecieran buscar alejarse de la fama y del renombre de su historial. Parece estar insatisfecho con el asedio de los medios, inconforme con la idealización de la que ha sido objeto y que hace que siempre se espere de él algo más de lo que humanamente puede llevar acabo. Sus actos, sin duda, son se-

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Los pupilos del Matador

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venezolano la contratación de astros de la envergadura de un Kempes. El conocido periodista Cristóbal Guerra no duda de la gran significación de la incursión de Kempes dentro de la liga y el prestigio que eso aporta a las precarias condiciones del fútbol criollo, pero advierte que no hay que dejarse engañar: "Nuestras deficiencias tienen razones de fondo y este tipo de experiencias, por más deslumbrantes que parezcan, no mejoran en nada nuestra natural minusvalía futbolística". Alega que prueba de esto es que Mineros sigue jugando el mismo fútbol y padece de las mismas limitaciones anteriores a la tutela de este emblema del balompié argentino.

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y distinguirse del resto, pese a que pueda relacionarse su situación actual con la de un denigrante bajo perfil. Como persona y atleta, las decisiones responden al impulso de la emotividad; tal vez por eso esté condenado a la frecuente incomprensión. Tan impredecibles como los goles en los mundiales han sido para Kempes los controvertidos proyectos como entrenador: ha llegado a aceptar las proposiciones más insólitas. Los planes de Mineros contemplan una extensión de su contrato por dos años, pero la directiva no tiene intenciones de coartar su carrera o retenerlo si surge otra oferta. Debe cuidarse de no convertirse en otro ornamento suntuario de esta república petrolera. Cuesta imaginar hasta cuándo tendrá la capacidad de tolerar estoicamente las vejaciones de las que es víctima, cada partido, por parte de un público vociferante e impaciente por ver al equipo victorioso. Es una escena que no hace justicia al nombre de Mario Kempes, un hombre que fue vitoreado por millones de almas, enardecidas por sus hazañas. La moneda se mantiene suspendida en el aire. A su parecer el dilema sólo admite dos opciones: "Si el equipo está bien, el técnico se queda, pero si anda mal se tiene que ir", declara sin quejas. Impasible, parece solamente aguardar. L MAYO 1999 EXCESO

09.

DOPBACOI Vargas

Táriba es un pueblo extraño. Un raro híbrido de prístina ruralidad y taras urbanas.

Allí, la leyenda y la nota roja se imbrican en un solo género. Allí vivió un caníbal, cuya depravación se diluía en los pintorescos giros de la tradición oral. Absuelto una vez por una acusación de homicidio, pudo rehacer su vida entre los paisanos que se limitaban a mantener prudencial distancia atendiendo a la conseja de su antropofagia. •

A.r

Un siniestro código de ética lo impulsaba a hacer presa sólo a desahuciados sociales, esas víctimas olvidadas por la cobertura

del caso mientras la televisión amarillista de Miami convertía al victimario en personaje de vodevil. Siguiendo los pasos del último sacrificado es posible reconstruir una historia vieja y no exenta de irresolutos misterios

Carlos Caridad Montero desde el Táchira

L os últimos que lo vieron con vida

Convicto y expuesto

Nadie tuvo noticias suyas hasta el sábado siguiente, cuando apareció en los diarios la fotografía de los pies cercenados de un desconocido, encontrados bajo el puente Libertador, frente al pueblo. Quienes lo conocieron en vida estuvieron de acuerdo en

que eran loa pies de Machirí 72

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descifraron el significado de aquella maleta, después que los diarios regionales publicaron la noticia de su muerte: Machirí se había pasado todo el día desandando lo que le restaba de vida. Despidiéndose del mundo de los vivos. Ese miércoles, 10 de febrero, Francisco Antonio López, Machirí —apodo con el que se le conocía en el pueblo de Táriba y nombre de una quebrada aledaña al barrio en el que vivía— cargaba una vieja maleta marrón que contenía un revoltijo de ropas regaladas, una bolsa de caramelos y una botella de miche andino. Usando la maleta como coartada, durante el día le pidió dinero a todos sus conocidos para viajar urgente a Caracas, ya que uno de sus hermanos estaba enfermo. Nadie le creyó el cuento. Todos sabían que se trataba de una de sus tantas excusas para comprarse más aguardiente. López, de 38 años, era uno de los personajes típicos del pueblo. La gente lo describe como un hombre pacífico y trabajador, cuyo único defecto era su afición al miche. Colaborador y servicial, se había ganado el aprecio de los vecinos por su buen humor y su actitud siempre respetuosa. Carlos Alberto Hernández, el dueño del carrito de chucherías que todos los días se estaciona frente a la cancha de softball del parque 12 de Febrero, recuerda haberlo visto por última vez como a las siete y media de la noche, en la plazuela del pueblo. Machirí bailaba una melodía que sólo él escuchaba, lo que hizo suponer a Hernández que estaba ebrio. Una hora despUés, visitó la bodega Los Tres Palos, en la calle 4 de Táriba. Luis Zambrano, quien en ese momento atendía el negocio de su hermano, le regaló 50 bolívares para su pasaje a Caracas. A diferencia de Hernández, a Zambrano le pareció que no iba borracho. Al cabo de un rato, López salió y se Sentó en la esquina. Alrededor de las ocho y cuarenta minutos, saludó a las señoras de la cuadra que acudían a los rezos en memoria de un vecino fallecido recientemente. Luego, bajó a la autopis-

ta, camino a su casa ubicada en el barrio El Lago, unos dos kilómetros distante del pueblo. Nadie tuvo noticias suyas hasta el sábado siguiente, cuando apareció en los diarios la fotografía de los pies cercenados de un desconocido, encontrados bajo el puente Libertador, frente al pueblo. Quienes lo conocieron en vida estuvieron de acuerdo en que eran los pies de Machirí.

A finales de la mañana del viernes 12 de febrero, Sierra Uno recibió una llamada por radio en la que se le informaba sobre el macabro hallazgo bajo el puente Libertador de la autopista San Cristóbal-Táriba. Sierra Uno es el nombre clave en las ondas hertzianas del periodista tachirense Armando Hernández. Con 27 años cubriendo la fuente policial, Hernández es del tipo de reportero que pega un brinco cuando escucha una sirena. Casi un obseso del suceso, su vasta red de informantes dentro de los cuerpos policiales —a los que prefiere llamar muy buenos amigos— le ha permitido convertirse en una estrella del túbazo noticioso. Muchas veces llega antes que las autoridades al lugar de los hechos. Esa mañana, rumbo a Táriba, debió experimentar un déjá vú porque llamó a su contacto en el Cuerpo Técnico de Policía Judicial y le advirtió: "Miren, pongan cuidado, no vaya a ser el loco de la otra vez". Una vez en el lugar, ya no le cupo la menor duda. "Era una película repetida", comentaría después, refiriéndose al crimen idéntico que cubrió cuatro años antes, el 7 de febrero de 1995. Entonces, igualmente todo comenzó con una llamada a finales de la mañana. Esa ocasión, bajo el distribuidor de Cordero, a la salida de Táriba, dos playeros, Damián Silva y Jorge Orlando, habían encontrado los restos de un desconocido, diseminados en un radio de 150 metros, semicntervado5 y envueltas en bolsas plásticas. Por playeros se conoce en la región a los 180 obreros que trabajan de 7 de la mañana a 6 de la tarde, extrayendo are-

na y piedra para la industria de la construcción en las márgenes del río Torbes. Al día siguiente, miércoles 8 de febrero, Hernández publicó la noticia del crimen con un título equivocado: Localizan el cadáver descuartizado de una mujer. "Es que las manos tenían las uñas enrojecidas", se excusa hoy. "Supuse que las tenía pintadas". Pero las investigaciones determinaron que la víctima era de sexo masculino: un playero llamado Cruz Baltazar Moreno. Su desaparición había sido reportada por sus familiares el 1 de febrero anterior, cuando ya cumplía un mes extraviado. Tenía 43 años y, según el informe forense, había fallecido entre 22 y 30 días antes, debido al shock traumático irreversible derivado de una fractura craneal. El miércoles 9 de febrero, cuando se efectuaba la captura del presunto homicida de Moreno, el reportero llegó antes que los detectives. "En sucesos hay que matar a la competencia con fotos. No importa lo que se escriba si no está apoyado con la gráfica". Las fotos de entonces son elocuentes: una sucesión de imágenes en la que dos agentes uniformados luchan tratando de inmovilizar al indigente rebelde. "Atacó con su lanza a los policías", rememora Hernández. Era la tercera detención de Dorancel Vargas —y no Dorángel como algún negligente periodista lo rebautizara—, nacido en Caño Zancudo, estado Mérida, el 14 de mayo de 1957. La dos anteriores habían sido en El Vigía, tres años antes, por dos delitos menores: robo de gallinas y de ganado. Hernández, por su parte, fue el primero en dar a conocer la existencia de un supuesto antropófago andino. "Esa vez también encontramos evidencias sobre sus actividades". Pero el asunto no trascendió las fronteras regionales y el caso cayó pronto en el olvido.

ero sólo hasta el pasado viernes 12 de febrero, cuando otros tres playeros, Alexis, Franklin Moreno y Johnny Neira se toparon con un par de pies cortados bajo el puente Libertador. La cuarta

y última captura de Dorancel Vargas, esta vez como posible autor de dos nuevos homicidios, no fue menos problemática. Se lanzó por un barranco en cuanto vio a los detectives judiciales. Un sargento de la Policía Montada hizo un rodeo y le dio alcance. Según Carlos Hernández, el vendedor de chucherías y testigo de la operación, Dorancel Vargas se detuvo al ver al uniformado. "¡Sargento Patiño! ¡Menos mal! ¡Estos tipos quieren darme un tiro!". El sargento lo calmó. "Tranquilo, que mientras venga conmigo no le va a pasar nada". Armando Hernández aprovechó el momento para interrogarlo sobre sus supuestos actos de antropofagia: "¡No sea pingo! ¡ Si yo lo que como es pescado!", fue la respuesta del detenido. "Dentro de la patrulla, le quitaron un cuchillo de doble filo que llevaba escondido en la cintura", comenta el reportero. "El sargento tuvo que acompañarlo hasta la sede de la Judicial porque Vargas no quería nada con lorpetejotas" La película se había repetido y Sierra Uno iba a dar otro tubazo. Cuando al día siguiente Marcos Buitriago vio las fotografías en la prensa, supo enseguida que esos eran los pies de Toñito —como le decían en el barrio El Lago a Francisco Antonio López. Cuatro días antes, el martes 9 de febrero, ocasión en la que ambos sostuvieron una última y breve conversación, Francisco López iba descalzo y Buitriago se había fijado en la uña amoratada de uno de sus dedos del pie. "En las fotos se veía clarito. Era la misma uña del mismo dedo". López se había acercado a su casa alrededor de las 10 de la mañana para preguntarle si asistiría al entierro de Anastasio Correa, un vecino fallecido a la edad de 97 años. Buitriago recuerda haberle dicho que haría todo lo posible por ir, pero estaba muy ocupado elaborando la cruz fúnebre para los rezos de Correa. "No lo vi más hasta el sábado, cuando encontré su cabeza entre los matorrales, detrás de la casa del psicópata". Buitriago, de 46 años, gárrulo e inquieto, es el motor cultural y deportivo del barrio El Lago. Hace pesebres navideños mecánicos, pinta murales patrió-

ticos, dirige y actúa obras teatrales escatológicas cada Semana Santa, es escultor, pero su fuerte son las tumbas: esculturas fúnebres que adornan las casas de los finados durante los velorios y novenarios. También le gusta investigar. "Hace cuatro años, yo encontré la carne del finado Cruz cortada en filetes en la cueva del psicópata, en el distribuidor de Cordero. Lo saqué a patadas y llamé a la Policía Montada. Al ratico, antes que la petejota, llegaron los periodistas. El psicópata estaba peleando con los agentes cuando le tomaron las fotos". Es probable que Dorancel Vargas nunca haya sabido exactamente por qué se le detuvo en esa ocasión. En el expediente del juicio que se le siguió por la muerte de Cruz Moreno, afirma, confundido, que su detención se debió a que "estábamos peleando allá arriba un poco de gente y nos fuimos para abajo". Cuando se le interroga acerca de la carne encontrada en su cueva, responde, evasivo: "Yo no vivía en ninguna cueva. Yo estaba ahí analizando cómo estaba construido el puente".

l barrio El Lago le debe su nombre a un centro recreativo desaparecido hace 8 años cuya principal atracción consistía en un lago artificial del tamaño aproximado de una cancha de fútbol. A mitad de camino entre barriada marginal y aldea rural, El Lago comenzó su formación hace tres décadas, cuando se instaló en el lugar el primero de sus pobladores, Pedro Arenales. Seguro y pacífico, de calles alborotadas por el bullicio de los niños, sus mil doscientos y tantos habitantes son, en su mayoría, playeros. Después de ver las macabras fotos de los restos de la víctima en la prensa, Buitriago reunió a un grupo de vecinos y, armados con picos y palas, se dirigieron al rancho de Dorancel Vargas, sin avisarle a los familiares de López. "No quería preocuparlos en vano", se excusa. Demolieron piedra por piedra el rancho y, al no encontar nada —salvo machetes escondidos en las grietas y un ejemplar de 1995 del Diario de los Andes con la noticia de la detención de Vargas—, se pusieron a excavar en los= MAYO 1999 EXCESO

Un puente al más allá

Con una lámina de anatomía como guía, Buitriago se pasó la semana siguiente recolectando huesos en los alrededores del puente Libertador, pero tuvo que suspender su investigación abruptamente por orden de la Policía Técnica Judicial. Eso bastó para que se quedara trammilo„ aunque henchido de suspicacia. "Allí hay restos de mucha gente. Yo no sé qué será lo que se quiere esconder" 74

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ero la actuación de la policía no sólo ha despertado las sospechas de Marcos Buitriago. En esos días, prácticamente los cerca de 20 mil habitantes de Táriba no hacían otra cosa que elaborar retorcidas hipótesis sobre el caso. A muchos les cuesta aceptar que un antropófago haya actuado impunemente durante dos años en uno de los parques más

sientan a ver el crepúsculo entre besos. El parque 12 de Febrero es custodiado día y noche por la Policía Montada del estado Táchira, cuya sede queda a menos de doscientos metros del lugar donde Dorancel Vargas había edificado su rancho de piedras. Cada tarde, los agentes debían pasar debajo del puente, frente al rancho, para llevar los caballos a sus potreros. ¿Cómo no se dieron cuenta? es la pregunta obligada. Además, todos en Táriba afirman que Dorancel Vargas no es un loco agresivo, a pesar de su lanza y sus machetes. Para algunos, como Luis Mora, Francisco Antonio López, Machirí, vio algo que no debió ver la noche en que lo mataron. Para otros, el caso es una cortina de humo de los cuerpos policiales o de mafias traficantes de órganos, de drogas, de lo que sea. No importa. Y es que este pueblo situado a 4 kilómetros de San Cristóbal, sembrado hace cuatro siglos sobre un asentamiento de indígenas Táribas, aún sangra por la herida que le abriera uno de los más célebres cangrejos de la historia policial del país: el caso del Catire Henry. Acaso haya sido aquel crimen y su nunca satisfactoria resolución lo que despertó en los habitantes del Táriba la pasión por la especulación. A pesar de que ambos sucesos apenas tienen en común el factor geográfico (el cuerpo del joven Henry Alfredo Escalante, desfigurado con ácido y castrado, fue localizado a unos 30 metros del lugar donde, una década después, viviría Dorancel Vargas), cuando alguien en Táriba comienza hablar del supuesto antropófago, pronto se desvía hasta doce años atrás y, como si se tratase del mismo cuento, termina hablando del Catire. "Aquí todo el mundo sabe quién lo mató. Y ya usted ve, el tipo anda suelto y nunca fue detenido. Ni siquiera fue investigado. Lo mismo va a pasar con el caníbal, porque todo es parte de un montaje", comentaba Freddy Pedraza,

visitados de la región y a la vista de todo

presidente de la liga de fútbol de salón

el mundo, un parque cuyas canchas deportivas se la pasan llenas todo el día, al que los padres llevan a jugar a sus hijos y en el que las parejas de enamorados se

del municipio Cárdenas ante una cerveza, el sábado 27 de febrero pasado, con la mole de cinco pisos de altura del Súper Tobogán Táriba a sus espaldas: "Al

alrededores. "Mandaba a excavar donde yo veía la tierra fresca, húmeda y esos mosquitos azules", precisa el líder. Así fue como desenterraron los restos de Francisco López y de un desconocido que, por medio del procedimiento forense de restitución de pulpejos dactilares, sería identificado como Luis Eduardo Vivas Ramírez, de 36 años. Su cédula también había sido encontrada en el lugar. Para Buitriago, aquellos fueron sus quince minutos de fama. Apareció en casi todos los diarios y noticieros regionales y nacionales enseñando, tembloroso y pálido, varios fémures y tibias en sus manos. Fue entrevistado por el programa Primer Impacto. La competencia, Ocurrió así, le ofreció el papel de Dorancel Vargas en la dramatización de los hechos. "Yo les dije cómo caminaba el psicópata y me pidieron que lo hiciera para las cámaras. Preparé mi peluca, conseguí una barba postiza y las ropas, pero en el barrio me dijeron que podían confundirme con el verdadero psicópata y lincharme, así que no lo hice", se acobarda. Con una lámina de anatomía como guía, Buitriago se pasó la semana siguiente recolectando huesos en los alrededores del puente Libertador, pero tuvo que suspender su investigación abruptamente por orden de la Policía Técnica Judicial. "Me amenazaron con meterme preso si seguía buscando huesos". Eso bastó para que se quedara tranquilo, aunque henchido de suspicacia. "Allí hay restos de mucha gente. Yo no sé qué será lo que se quiere esconder".

loco le hacen preguntas que ya vienen con su respuesta: '¿Usted come carne?'. `Sí, yo como carne'. ¿Cómo puede saber uno si está comiendo carne de vaca o de toro, de conejo o de coneja? No hay manera, ¿verdad? Entonces, ¿cómo es que ese pobre tipo dice que no le gusta la carne de mujer, si, al fin y al cabo, se trata de carne humana?". "La policía no acordonó el sitio", enumera Luis Mora los detalles sumamente sospechosos del asunto, "le prohibieron a la gente que buscara huesos...". "Bueno, también es que ese pingo, el que hace las tumbas en el barrio, se estaba pasando", interviene Gonzalo Pernía, un recogelatas. "Un día me llegó con una bolsa de huesos de pollo y, cuando le dije que esos eran muy chiquitos para ser de humanos, me dijo que a lo mejor eran de un niño de seis meses". "La policía nunca ha dicho cuántos desparecidos hay. No removieron el terreno. Ahí se encontraron cédulas, tarjetas de crédito, carnets estudiantiles... ¿A quiénes pertenecían?". "Como ese playero, Félix, el que sacaba oro de las cloacas. Los anillos que se le caen a la gente cuando se lava las manos y eso", agrega Pernía. "Desapareció hace tiempo y en la casa del carnívalo hallaron sus ropas. ¿Y qué pasó? Pues nada". "Dorancel pasaba todos los días por aquí. Compraba cigarrillos en los kioscos. Ni siquiera bebía. Se paseaba con su lanza por el pueblo tranquilamente. No se metía con nadie. ¿Por qué, si es tan psicópata, no atacó a todo el mundo?", terminaba preguntándose Freddy Pedraza. "¿No será más bien que esos muertos pertenecen a otros? ¿Cómo podemos estar seguros de que no se los llevaron para que se los comiera?", finaliza, por su parte, Luis Mora.

ero si les cuesta admitir la existencia del supuesto antropófago, más increíble les parece la muerte de Francisco Antonio López, de tan anunciada que fue. "Toñito decía que prefería dormirse en la plazuela de Táriba para que los policías lo metieran preso que atravesar tarde en la noche el puente", co-

mentaba Juán Alberto López, hermano de Francisco Antonio, frente a su casa de paredes húmedas y grises. "Yo no sé qué pasó esa noche. No me explico cómo lo pudo agarrar". "Machirí nos lo decía a todos nosotros", explicaba Luis Zambrano la mañana del domingo 28 de febrero y señalaba a los vecinos reunidos en la bodega. "El había sido muy amigo de Cruz Moreno. Se la pasaban juntos. Bebían juntos. Y por eso le tenía miedo al loco, porque se había comido a Cruz. Machirí siempre se iba a su casa temprano y nunca pasaba debajo del puente. Cuando desapareció, pensamos en lo peor: que lo había cazado el caníbal". Pero una vecina del barrio también fue testigo de escenas en las que Francisco López provocaba a Vargas. "Toñito le gritaba: `¡Mire pingo, usted no me va a comer a mí como se comió a Cruz!'. Y una vez me dijo que si lo llegaba a agarrar lo despedazaba, para vengar la muerte su amigo. Dorancel mató a Cruz porque una noche se le metió borracho a su cueva a molestarlo". De modo que, para muchos, Francisco López sabía que le acechaba una condena a muerte. Gonzalo Pernía lo explicaba de esta manera, en el parque 12 de Febrero: "Una vez oí cuando el carnívalo le dijo a Toñito: 'Cuando lo agarre le voy a cortar la cabeza mejor que a Cruz'. Y ya ve usted lo que son las cosas. Lo hizo".

uando reventó la noticia, José Luis Guerrero, reportero de sucesos de La Nación, estaba en un banco y tenía la radio apagada. De manera que sólo se enteraría de la captura de Dorancel Vargas al llegar al periódico, casi las a 4 de la tarde. Con apenas un mes en la fuente, el joven reportero graduado en la Universidad de los Andes se dedicó entonces a la tarea de develar el pasado de Vargas. Para su sorpresa, encontró la primera pista dentro de su propia familia. "Uno de mis familiares lejanos había estado relacionado, de alguna manera, con una hermana de Dorancel". Luego, Guerrero ubicó la casa de rejas blancas en la que Vargas vivió parte de su juven-

tud, en el Barrio Las Vegas de Táriba, entre 1974 y 1983. Su primer descubrimiento fue el verdadero nombre del supuesto antropófago: Dorancel y no Dorángel como se le conocía hasta entonces. Vargas pertenecía a una familia solidaria y trabajadora de nueve hermanos: seis varones y tres muchachas. Su padrastro, Pedro Petro, es primo del cantante colombiano Noel Petro, autor de memorables porros y vallenatos (Cabeza de hacha —popularizada por Rubén Blades—, El burro, Pásame la papaya, La araña —su opus magna—), y quien alguna vez trató de suicidarse, despechado, colgándose de sus tobillos toda una semana en un parque público. Guerrero también descubrió que Vargas, a sus 22 años, había sido adepto de la Iglesia de Todos los Santos de los Ultimos Días, a la que acudía sólo para complacer a su madre, Guadalupe Vargas. Los testimonios recogidos por el reportero señalan que los síntomas de su desequilibrio eran evidentes a principios de los ochenta. Posteriormente, a raíz de su tercera detención, en 1995, se le diagnosticaría una esquizofrenia recidivante en fase residual. En 1992 había estado recluido en una institución psiquiátrica por el mismo trastorno. Un testigo de la época le relató al reportero que "se quejaba de continuos dolores de cabeza, escuchaba voces que le gritaban, no dormía", claros síntomas de la fase activa de la esquizofrenia. "A Dorancel le gustaba mucho un bonche, un baile. Prefería el vallenato. Tenía chispa, buen carácter; era bueno contando chistes. Nunca fue grosero ni falta de respeto", cuenta otro testigo, "inquieto, intranquilo, siempre en movimiento, siempre desarrollando alguna actividad".

uando Guerrero publicó su reportaje especial sobre el pasado del presunto antropófago, el domingo 28 de febrero, el caso comenzaba a perder centimetraje en los diarios y tiempo de emisión en los noticieros. Por quince días, Dorancel Vargas había sido el niño mimado de los medios nacionales y 1= MAYO 1999

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Los predios de la muerte

Su apariencia desvalida y su timbre inocente de voz despertaron más de un sentimiento encontrado. "Mucha gente le tiene lástima, aunque a otros les provoca lincharlo. Hay algunos a los que les parece hasta tierno, sensible.

La un loco que no despierta repudio" 76

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también de los internacionales. La cobertura nacional comenzó el lunes 15 de febrero cuando las reporteras Yamile Jiménez y Eleonora Delgado, corresponsales respectivamente de RCTV y El Nacional en el estado Táchira, decidieron averiguar qué tanto había de verdad en un suceso que a ellas, francamente, les parecía una típica olla periodística, una historia especulativa. Después del agotador fin de semana en el que debieron cubrir las transmisiones de mando de los Teatros de Operaciones 1 y 2 del Ejército, actos presididos por ese otro golden boy mediático, el presidente Hugo Chávez Frías, el lunes se metieron de lleno con el affaire Dorancel Vargas. "Antes investigamos lo suficiente para no caer en especulaciones sensacionalistas. Si al final todavía teníamos dudas al respecto, no publicábamos nada. Cuando confirmamos los hechos, tratamos la información con la mayor objetividad y seriedad posibles". El caso les dejó con el estómago hecho pedazos toda la semana. Recuerda Eleonora que ese lunes se llevó un susto tremendo en el rancho de Dorancel Vargas. "Es que confundí una bolsa de caramelos derretidos que vi allí con otra cosa, con algo asqueroso". La bolsa de caramelos estaba al lado de una vieja maleta marrón y de un revoltijo de ropas. Esa noche, gracias al reportaje audiovisual de Jiménez, el país conocería a Vargas y sus atroces respuestas, ilógicamente lógicas en su demencia, respuestas que de tan cándidas llegaban a ser cínicas o que, de tan cínicas, parecían cándidas. Su lenguaje disgregado y a ratos vago, en el que se mezcla la pobreza de contenido con palabras rebuscadas o inusuales en alguien de su nivel cultural (síntoma típico de su desorden esquizofrénico), sembró el desconcierto en televidentes y reporteros. Su apariencia desvalida y su timbre inocente de voz despertaron más de un sentimiento encontrado. "Mucha gente le tiene lástima, aunque a otros les provoca linchado, hay algunos a los que les parece hasta tierno, sensible. Es un loco que no despierta repudio", refiere Armando Hernández. "Al otro día, el martes 16, fue la lo-

cura", coinciden ambas reporteras. "Llamadas de Alemania, de Miami, Ocurrió así, Primer Impacto, Sevcec. Teníamos en nuestra manos una noticia de transcendencia mundial". A Armando Hernández siempre le sorprenderá la apertura con la que el CTPJ ventiló el caso. "Conseguir declaraciones de un detenido es usualmente difícil. Yo creo que la petejota permitió el acceso a Dorancel por una cuestión de publicidad. Fue la gran ganadora en todo este asunto". Dorancel Vargas, por su parte, disfrutaba de su status de superstar. Dorancel, mass media murderer.

"El se arreglaba la barba, se peinaba y posaba para las fotos", comenta Yamile Jiménez. "Colegas de Caracas y del exterior se tomaron fotos abrazados con él", afirma Armando Hernández. "Lee todo lo que se publica sobre el caso", dice a su vez una bonita agente uniformada que mantuvo contacto con Vargas mientras estuvo detenido allá, en la Dirección de Seguridad y Orden Público de la Policía del estado Táchira. "Si en los diarios aparecía que estaban investigando sobre sus estudios de medicina, él después le decía a los periodistas que sólo le habían faltado cuatro años para graduarse de médico. Cada día aumentaba el número de personas que decía haberse comido". ientras los diarios regionales agotaban sus tirajes y Dorancel Vargas y el CTPJ se convertían en los grandes ganadores del caso, los familiares de Francisco Antonio López parecían los únicos perdedores: "Estuvimos cinco días yendo de aquí para allá para que nos entregaran los restos de mi hermano, que nos dieran algo, al menos, que enterrar. Mi malta estaba desconsolada" comentaba Juán López, hermano del difunto, en la humilde vivienda de la familia. "Sólo queríamos descansar". La casa, de bloques desnudos y techo de zinc, fue construida hace doce años con

el dinero de unas prestaciones de Mariela López, hermana de Francisco Antonio. De las paredes de la sala cuelgan retratos de hijos y nietos. En un rincón, sobre una repisa, un televisor compra-

do a crédito en un almacén de la Quinta Avenida de San Cristóbal y más de veinte trofeos ganados en campeonatos de fútbol. "En esta familia hasta las niñas juegan", aclaraba ese día Mariela, una atractiva morena de ojos cansados. Finalmente, el jueves 18 de febrero, les entregaron los restos y pudieron velarlo en paz. "Era lo único que queríamos, descansar". Setenta sillas alquiladas en una funeraria, más quince prestadas por los vecinos, no fueron suficientes para la multitud que asistió al velorio. "Era muy popular. Hasta vino gente de Rubio", recuerda Mariela. "Ese día yo le desarmé el cuarto para que el ánima no anduviera por allí, penando". Buitriago hizo una tumba de vivos colores en memoria del difunto y durante el funeral se sirvió café, chocolate y un calentaíto —compuesto de miche, clavo y canela. Al día siguiente, a las cuatro de la tarde, el cofre blanco infan til fue sepultado en el cementerio municipal de Táriba, en una tumba sin lápida ni cruz, a veinte metros de la sepultura de la linda joven que, según solía decir Francisco López, no merecía morir.

ocasión, junio de 1997, no llegó al psiquiátrico. "Cuando yo le pregunté cómo se había escapado de la cárcel, contestó que no era que se había escapado, sino que le habían dado vacaciones", explicaba José Luis Guerrero, el viernes 26 de febrero, en la redacción de La Nación. " Creo que su caso puso en tela de juicio nuestro sistema penal. Es el caso de una persona que había sido detenida en tres oportunidades, a la que se le había diagnosticado un grave trastorno mental y nadie, absolutamente nadie se preocupó de su suerte. Allí seguía, libre. Medio mundo ha tratado de sacarle provecho a este caso. Ya quisieran muchos políticos haber tenido la cobertura que se le dio a Dorancel. Como ese muchacho, Marcos Bui-

no se acordonó el escenario del crimen, ni se continuó con las excavaciones".

l martes 9 de febrero, después de lavar su ropa y visitar a Marcos Buitriago, Francisco Antonio López se afeitó y se vistió para asistir al entierro de Anastasio Correa. Después del sepelio, acompañado de su hermana Mariela —a quien él, cariñosamente, llamaba Muelona y de su madre, Alicia Guerrero, visitó varias sepulturas. "Nos obligó a visitar como a diez difuntos y a cada uno le rezábamos su padrenuestro. La tumba de Caleño, un amigo de Toñito, la de su madrina, la de la mamá de los Castro, la de la señora María, la mamá de Adela", enumera Mariela, hasta que finalmente se pararon frente a la tumba preferida de su —

ara Mariela, la muerte de su hermano pudo evitarse. "La policía ni siquiera sabía que el psicópata andaba suelto. ¿Por qué lo soltaron?". Es una pregunta dirigida al juez Séptimo de Primera Instancia en lo Penal, José Guillermo Espitia, a quien le tocó decidir la sentencia de Dorancel Vargas por la muerte de Cruz Baltazar Moreno. El juez dictó el sobreseimiento de la causa que señalaba a Vargas como sospechoso en el homicidio, fundamentando su decisión en la falta de indicios probatorios. Debido a la enajenación mental del procesado, determinó que debía ser recluido en el Instituto de Rehabilitación Mental Dr. Raúl Castillo, un complejo de cinco barracas y paredes azul celeste, situado en medio de verdes potreros, a cuatro minutos del pueblo turístico de Peribeca. Vargas, quien ya había pasado allí una temporada, en 1992, después de ser detenido por hurto de ganado, en esta

Los playeros propiciatorios

triago. Apareció en todos los noticieros hasta que la petejota tuvo que pegarle un susto". Según Hernández, Buitriago fue forzado a interrumpir su búsqueda de huesos ya que estaba poniendo en ridículo a los detectives locales. "Nos estaba volviendo locos con las bolsas de huesos. Los de Caracas nos mamaban gallo: `Hey, ya identificamos al caballo asesinado'", confirmó un detective. Para Hernández el caso también hizo evidente la falta de recursos y de personal que aqueja a la división regional del CTPJ. "Esa es la única razón por la que

hermano, "la de una muchacha muy bonita y jovencita que habían enterrado el mismo día del sepelio de Caleño". Los tres le rezaron su padrenuestro a la joven difunta. "Toñito, siempre que iba al cementerio, la visitaba. El se preguntaba que por qué, si era tan joven y bonita, se tenía que morir". A la salida, compraron una malta y se la tomaron entre los tres. Cinco minutos después, Francisco Antonio López, Machirí en Táriba y Toñito en el barrio El Lago, se despidió de su madre y de su hermana. Fue la última vez que lo vieron con vida. Entonces, no podían saber que había comenzado a desandar. ig MAYO 1999 EXCESO

En Venezuela existía un vacío, pero, dios mediante, no faltó quien se decidiera a llenarlo. Los habitantes de la Tierra de Gracia, al parecer, no se entienden muy bien todavía con el mundo virtual y su inagotable promesa. Algo faltaba en el local mercado cibernético, algo tan vital para cualquier país que se tenga por moderno y occidental como es una buena provisión de profesionales de la cama. Pero finalmente, los venezolanos ahora con sólo hacer doble click podrán acceder a la mujer de sus sueños, dispuesta, por si fuera poco, a complacer cualquier fantasía a cambio de globalizadas y nada solidarias tarifas

María Gabriela Méndez 111

etrás de advertencias un tanto inútiles —"El contenido de esta página no es apto para menores de 18 años o personas sensibles a temas sexuales. Si no desea entrar a la página, presione aquí, en caso contrario, usted acepta entrar bajo su exclusiva responsabilidad"— y de promesas lujuriosas que asaltan desde todos lados de la pantalla —"Somos damas en público y fieras en la cama"— existe no un pornógrafo irredento que ofrece fotografías y afiliaciones a la página o las tiendas eróticas sino una empresa que fríamente ha evaluado las posibilidades de la prostitución en la era Internet. Se impuso esta empresa la loable misión de proveer a Venezuela de la primera página web dedicada al mercado del sexo bajo la sugerente dirección electrónica Sexycaracas.com . "Fuimos un boom, porque en Venezuela no existía nada parecido", cuenta uno de los creadores de la página, Richard Lathulerie, "entre otras cosas porque el venezolano no tiene cultura de Internet". Mientras en el resto del mundo abundan las páginas web a través de las cuales se pueden contactar prostitutas del más variado jaez, en Venezuela este tipo de publicidad es relativamente nuevo. Sexycaracas funciona desde el primero de septiembre de 1998; le siguen Venezuelaerótica.com y sexycaribbean.com , que hicieron su début en febrero de este año. En general, cualquier cibernauta sabe que aquí estamos en pañales —y de tela— en cuanto al uso de Internet. Por esa razón "contactar a las personas para que publiquen es muy difícil, en esta área y en cualquiera", asegura Richard, quien antes de ver potenciales clientes en las "trabajadoras sexuales" probó con tiendas para realizar un centro comercial virtual, su idea primigenia del mercadeo en la red. En seis meses de actividad, el negocio ha crecido y es, en sus palabras, "una de las páginas más visitadas de Caracas": casi 150 mil visitantes desde su inicio, un promedio de 800 personas por día. No queda la menor duda: el sexo puede ser un buen comienzo para que el mercado nacional le conceda crédito a esta herramienta informática como un medio apropiado para anunciarse. Sin embargo, el letargo informático en Venezuela tiene su causa en la ausencia de una disposición legal para que puedan realizarse negociaciones con tarjeta de crédito a través de Internet, lo que se traduce en la resistencia de los comerciantes a sumergirse en las aguas del ponto cibernético. Los autores de Sexycaracas.com estuvieron más de tres meses llamando insistentemente a mujeres que anunciaban sus servicios en la prensa nacional. "Me llamaba casi todos los días" cuenta una de ellas, "era insistente, pero nosotras no queríamos ir porque en este oficio hay que desconfiar de todo el mundo. De hecho, no trabajamos a domicilio, sino exclusivamente en hoteles. Pensábamos que se trataba de un lo-

quito". Recuerda que tras aceptar la propuesta de aquel desconocido que le pintaba Internet como el nuevo Dorado, los frutos no se hicieron esperar: "Me llaman muchísimo. Hasta se han enamorado de mí con sólo ver mi foto", asegura. El riesgo —si acaso lo era involucrarse con computadoras en profesión tan difícil— valía la pena. La resistencia a probar hacer publicidad a través de algo llamado Internet —pocas sabían en qué consistía el asunto— hizo que las ofertas se hicieran cada vez más tentadoras: el primer mes gratis —como período de prueba— tres fotos y un texto mayor de veinte palabras. Los ruegos finalmente lograron su cometido: las chicas y las agencias probaron y comprobaron que les hacía bien eso de mostrar la mercancía: "Nuestras damas son modelos con cuerpos perfectos que harán de usted la envidia de los que lo rodean. Si usted quiere una Miss Universo, contáctenos", se lee en la presentación de una de las cuatro agencias que operan en la mencionada página. Haberse visto envueltos injustamente en un escándalo en febrero pasado, al ser acusados de utilizar el medio para raptar menores, paradójicamente, les ha servido para captar nuevos clientes y para que las agencias incorporen más trabajadoras. Una que otra interesada solicita la entrada a la página: "Quiero estar en Internet porque cuando me llaman me preguntan `¿estás en Internet?', y como les digo que no ya no me contratan. Supongo que las mujeres de Internet están muy buenas", alega una. Pero no todo lo referente al sexo se vende por Internet; al menos no en Venezuela. Otras secciones incluidas en las páginas —hoteles, tiendas eróticas— permanecen vacías, dado que los empresarios de estos rubros consideran innecesario este tipo de publicidad. En consecuencia, los espacios diseñados sin anunciantes le dejan un aspecto inconcluso a lo que comienza diciendo "el directorio más completo de Masajistas, Damas de Compañía, Hoteles, American Bars y Tiendas Exóticas para la ciudad de Caracas". Otra rama que no terminó de calar fue la de prostitutos: en octubre se realizó un diseño para una agencia que nunca pagó los servicios informáticos. Ellos mismos advierten en su página que anunciarse allí no reemplazará su publicidad en los diarios todavía, "pero definitivamente ayudará a atraer el tipo de clientela que usted busca: ejecutivos, gente de negocios y con dinero". Y a manera de consejo deslizan esta perla: "Dentro de poco tiempo será imprescindible anunciarse por Internet y para ese momento será más difícil ingresar a este medio debido a la saturación del mismo. Le estamos ofreciendo ingresar a la web ahora. Le estamos dando la oportunidad de presentar sus servicios en Internet de una forma excitante e imaginativa que llamará la atención y traerá el tipo de clientela que usted estaba buscando". Los productores de Sexycaracas.com aseguran que su idea nació para llenar un vacío: "La intención es que estas muchachas puedan llegarle a un público de mayor categoría, porque tener Internet es de mayor categoría. No es información sexual ni para satisfacer el morbo de la gente". Richard dice en su descargo que las fotos de la página son muy naif, y que los MAYO 1999

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pocos desnudos que hay son muy sutiles y discretos —le han comentado, incluso, que los catálogos de trajes de baño lucen más audaces y por eso está pensando en remozar el site con unas fotos algo menos pudibundas. Una de las chicas relata que no cualquiera puede pagar sus servicios —"somos caras", dice— y asegura que la contratan hombres con "tremendos carros" y la llevan a los mejores hoteles. Lo cierto es que, de mayor categoría o no, los clientes reconocen que existe menor riesgo de que no te guste la chica: en los clasificados del periódico las descripciones deben reducirse a 20 palabras para ajustarse a la tarifa más económica —"Soy toda una barbie, cuerpo bellísimo, rostro espectacular..."— y hay que confiar en estas autodescripciones —como todas, demasiado bondadosas. En Internet es menos arriesgado: "Sabes con quién te vas a encontrar. Si la contactas por el periódico existe el riesgo de que no te guste. Con Internet sabes hasta cuál es la tarifa y sientes como que la conoces. Aunque sea has visto el cuerpo", comenta un habitué de estos servicios. Las promesas—"usted quedará gratamente sorprendido cuando nos vea" ya no quedarán en meras palabras. Para cuidar su identidad, en las fotografías no aparece el rostro. En el caso de Sexycaracas.com se utilizan cámaras digitales y el material es trabajado por ellos mismos, lo que le garantiza total confidencialidad a sus anunciantes. Para algunas —las realmente espectaculares— la fotografía es su mejor carta de presentación. Para otras, es mejor esconder la identidad detrás de la sintaxis telegráfica de los anuncios clasificados de la prensa. Pero también está el caso de una de las chicas que, teniendo un rostro muy bello —a juicio de sus compañeras—, no fue tan favorecida por la madre natura en lo que a atributos se refiere; se queja de que lo de Internet no le ha funcionado mucho. Q44§119YrIg fli«4«fiM Nti5tr151 bárbara, se muestran tal como son —hay gente para todo, dice el refrán—, sin trucos en las fotos que puedan hacerla ver más esbelta: "Tengo 41 años, mido 1,60m, peso 75 kg, suficiente para poder dominarte". La foto responde a una realidad que no podría deta—

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liarse en el periódico. No en vano, con su rostro encapuchado y luego de ofrecer sus servicios sadomaso, lanza una advertencia final: "No quedarás decepcionado". En este caso, el cliente sabe que una hora con la madame cuesta 130 dólares, 12 horas 600, 24 horas mil y un fin de semana mil 500. No hay ninguna sorpresa —al menos en términos tarifarios. "Es más difícil que te devuelvan", cuenta una muchacha de 21 años con tres meses en el oficio, quien luego se toma el tiempo de recordar que una vez un viejo la devolvió "porque tenía una cicatriz en la pierna por una caída reciente. Dijo que quería algo perfecto. Yo me molesté. Le dije que antes de criticar debía verse él mismo, porque hasta mal olía". Una ventaja que reconoce Lathulerie es que "lo que está redactado allí se refiere a la condición de la muchacha, lo que le gusta y lo que no. A través de eso el hombre que las busca ya sabe si se ajusta a sus necesidades. Somos serios en lo que hacemos, lo que sale escrito allí es lo que la muchacha me dice".

LE os anuncios que comenzaron costando 80 mil bolívares mensuales han reducido su precio porque "la página ha crecido". Estos asertivos mercaderes ofrecen un descuento de 50 por ciento al entrar que incluye el nombre, la foto pequeña (de sus ojos), y la descripción por 60 mil bolívares mensuales. Las agencias pagan por el nombre y luego por cada muchacha. Entre los servicios que prestan están los reportes de los e-mail, pues la mayoría de estas profesionales no tiene Internet, no saben del todo en qué consiste y tampoco se han visto en la pantalla. Pero el cambio más radical al anunciar en páginas web es, sin duda, el acceso de los extranjeros. Han escrito desde muchos lugares para hacer sus reservaciones con tiempo. Esto se debe a que este site se encuentra a través de buscadores como Yahoo!, Altavista y buscadores sexuales, entre otros, a los que cualquiera que tenga una página web ingresa cancelando una cuota o haciendo intercambio de links. Los clientes, en su mayoría con edades entre los 25 y 35 años, prefieren contratar a las muchachas que no son de agencia, porque así no les toman el tiempo y llegan incluso a ser más económicas: no tienen que darle comisión a la "agencia". Luego de revisar con detenimiento las características —color de ojos, de piel, de cabello, estatura, peso, medidas de busto, cintura y caderas, así como sus especialidades —masaje francés, ruso, griego, hindú, japonés o una globalizante mezcla de todos, meros eufemismos de las múltiples pero no infinitas variantes de la cópula y sucedáneos orales—, los interesados pueden establecer el contacto de dos maneras: vía telefónica o haciendo una reservación por correo electrónico, luego de proporcionar algunos datos personales como nombre, teléfono, dama que desea, cuándo y por cuánto tiempo la quiere y

detallar alguna petición especial con respecto al servicio. Le sigue una advertencia clara: "Los correos que no tengan estos datos no serán aceptados". Las reservaciones locales se procesan en un lapso de 24 horas y 48 horas cuando se realizan desde el interior del país o el exterior.

uego de verse envueltos en una acusación que los calificaba como secuestradores de menores y otros "delitos electrónicos", como los llamaría la prensa, los productores de Sexycaracas.com, Lathulerie y su socio Alfonso Díaz, se vieron obligados a hacer un remitido público que más tarde se convirtió en parte de la página donde se aclaran "las reglas del juego". En síntesis, las cláusulas se reducen —juramento mediante— a informar que en su página no publican menores de 18 años; que "si usted es menor de 18 años, sin excepción, debe salir de Sexycaracas.com haciendo click aquí"; que son tan sólo una guía publicitaria y las publicaciones que allí aparecen están autorizadas por sus clientes y no interfieren en las actividades que ellos realizan; que no solicitan por ese medio a personas para que trabajen para sus anunciantes y que su página puede ser censurada a través de programas de protección con posibilidad de adquirirse desde la misma página con recargo a la tarjeta de crédito —aunque el venezolano no se ha mostrado muy interesado por este tipo de programas—: "Sugerimos a los padres orientar la conducta de sus hijos menores de edad controlando el acceso a estas páginas mediante programas de protección como SurfWatch, NetNanny o CyberPatrol, así como educándolos adecuadamente para que respeten la naturaleza de estas páginas". Remata: "Si un niño entra es porque el padre quiere, les damos las herramientas para que no lo hagan".

Si bien es cierto que en Internet nada es "ilegal" porque no hay leyes, existen temas censurados y considerados delito por una especie de Interpol de Internet, que persigue a quienes intentan vender drogas —como ejemplo figuran los casos de Perú y Bolivia— y de promover o prestar servicios a pedófilos —como sucedió en Holanda el año pasado— o realizar tráfico de menores. Esta tarea se dificulta en proporción al crecimiento de Internet y a su auge, que en Latinoamérica se proyecta por encima de cualquier continente. En el caso de la profesión más antigua de la historia y la pornografía, la censura no tiene razón de ser. "La prostitución existe desde siempre; nosotros no reventamos esa olla. Estamos haciendo publicidad, como lo hace cualquier periódico. Internet es un medio", dice en su defensa el progenitor de Sexycaracas. El sabe que ese oficio hay quienes lo hacen para ganarse la vida y quienes lo hacen porque les gusta. "Yo pude haber puesto a las chicas totalmente desnudas y en posiciones eróticas, pero no queremos crear alboroto. Prefiero que estemos de bajo perfil y que la gente sepa que existimos, a tener alto perfil y que se estén metiendo con nosotros; no le hemos hecho nada malo a nadie". Los servidores pueden poner algunas trabas para este tipo de páginas. Sin embargo, los expertos reconocen que no existe un control estricto en esta materia, si bien la tecnología les permite conocer el contenido de las páginas de sus clientes. "Yo pudiera estar en un servidor venezolano, pero cuando saben de qué va a ser la página te ponen los mil y un peros. Aunque no exista legislación, sí existe el miedo. No estamos compitiendo Ftw.~.w

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Venezuelaerótica y Sexycaribbean suelen ser más sucintas al respecto: "Usted entiende y acepta la responsabilidad por sus propias acciones y conductas, así como las de sus hijos menores, transgresores por su no diligencia y cuido de las normas aquí señaladas, liberando por consecuencia a los creadores y propietarios de ésta página web, Studio Virtual, así como a nuestro proveedor de servicio de toda la obligación y responsabilidad legal". Al respecto, Richard Lathulerie aclara que no trabajan con menores de edad y siempre exigen la cédula "y si vemos una muchacha que aparenta 18 años pero no los tiene no la metemos en la página, cuidamos eso. En Internet está la identidad de nosotros, a diferencia de cuando pones un anuncio clasificado en el periódico. Internet abre las puertas a algo más serio, yo creo que esto tiene seriedad. Okay, no es el negocio más lindo del mundo pero no existía y me parece que crear la cultura de algo serio con esto es importante".

con las páginas en Venezuela sino con las del exterior", sentencia Lathulerie mientras informa que Sexycaracas está afiliado a un servidor en Estados Unidos. Mientras todo tipo de páginas con contenido pornográfico, de chat erótico y de páginas de avisos clasificados subiditos de tono, al mejor estilo de Afrodita Porné, de donde viene el término pornográfico —"Soy mujer y quiero sexo"—, van a la deriva por el océano virtual, la prostitución desde Caracas también hace de las suyas, como algunas otras conocidas páginas web de Latinoamérica. Sus creadores están conscientes de que su duración en la red puede ser tan efímera como prolongada. Hasta que el cuerpo —en este caso, no por virtual virtuoso— aguante. L MAYO 1999

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'ESTAURANTES Menú barroco, vasco y más o menos pantagruélico. Alcabala a Puente Anauco, Edif. San Thomas, Candelaria. Telfs. 571.5921/9619. ALBERTO LA TRATTORIA. Sin aspavientos, pero generoso y con una sazón de maternales resonancias, Alberto Scagliati evoca los efluvios del Véneto en cada uno de sus platos. Avenida Casanova, Edificio Quasimodo, local 9. Telfs. 763.5632 y 761.2370. O ARA. En las alturas y al aire libre, el arte coquinario nipón y la no tan nueva world cuisine conviven en armonía. El chef Edgar Leal logra ecuménicas pero felices combinaciones sobre las bases de la cocina francesa clásica, entendida sin dogmatismos, reafirmándose como el primero de AKELARRE.

O Establecimiento consolidado cuyo conjunto de virtudes universales ha mantenido un alto promedio a lo largo de los años hasta convertirlo en una institución

O Establecimiento cuyas virtudes específicas más sobresalientes lo han elevado a través del tiempo a un lugar de particular consideración

9 Establecimiento reciente, o más o mAnos rAcibilte, cuyas virtudes universales o específicas, individualmente o en conjunto, sedujeron desde el primer momento

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su generación. Av. Francisco de Miranda, Centro Lido, piso 8, Campo Alegre. Teléfono. 953.3270. 9 ARIZONA GRILL. Considerado como uno de los locales idóneos a la hora de satisfacer el deseo de la carne a la brasa con los mejores y más variados cortes importados de Black Angus. La decoración hace de los lentes oscuros un must. Av. Tamanaco, El Rosal. Telfs. 952.1944/2511. ASHTON GRILL. Cortes de excelente carne importada Black Angus, se sirven con contornos y abrebocas nacionales, como arepitas, tajadas y queso de mano. La decoración, accidentalmente postmoderna, puede decepcionar al iniciado. Avenida La Estancia, Cubo Negro, P.B., Chuao. Telf. 993.7157. O AVENTINO. Durante 33 años, este restaurante, hoy en manos de Gianni Riocci, ha cimentado su prestigio sobre una respetable bodega, que guarda auténticos tesoros, imposibles de degustar en otros restaurantes de la capital. El servicio, de gran escuela, no tiene parangón en Caracas. Fiel a cierta tradición culinaria gala, ahora tiene un business menú en el almuerzo, que permite al comensal escoger entre tres entradas, tres platos fuertes y tres postres y media botella de vino blanco o tinto (Chablis o Chateauneuf-du-Pape) por 29 mil bolívares. Av. San Felipe con calle José Angel Lamas, La Castellana. Telf. 267.5422.

AVILA TEI. Siempre a la cabeza pese a la enorme competencia, este pionero japonés mantiene una corte de asiduos, que se espera se trasladen al nuevo local con el mismo apetito. Avenida Francisco de Miranda, Torre Miranda, PB., Chacao. BASILICO. Aunque la combinatoria de su cocina no da referencias obvias al lugar de origen, los dueños de este establecimiento la definen como provenzal y toscana. Recientemente con la amplia experiencia del chef norteamericano Fernando Ferreira se incorporaron ciertos matices loables a las preparaciones y al menú. Av. San Felipe, Torre Coinasa, Mezzanina, La Castellana. Telfs. 265.6834 y 266.1494. O BASQUE. La veterana Blanca Royo demuestra que, habiendo nacido en el País Vasco y ejerciendo en un minúsculo fogón, se puede alcanzar la cima. En la noche su hijo, Carlos Navas, hace los honores de la casa. Alcabala a Peligro, Candelaria. Telf. 576.5955. CAPRI. Atendida por su propia dueña, esta pequeña trattoria es una verdadera sorpresa. La honesta pasta e fagioli, un rico pasticho de berenjena y el tiramisú son los puntales sobre los que se asienta el prestigio de la casa. Calle La Paz con 2 de Mayo, Edificio 2 de Mayo, local 4, El Hatillo. Telf. 963.4653. O CATHAY. Una exótica aunque lujosa decoración, en la que se combinan agua, luz y naturaleza tropical, le sirven a

Sumito Estévez a la hora de abordar las cocinas del Oriente con híbridas técnicas y sentido de verdadera actualidad. La pasantía con Jean-Georges Vongerichten parece haberle sentado bien a su sazón. Toda una revelación. 2' avenida con 4a transversal, CC Las Cúpulas, Los Palos Grandes. Telf. 286.9715. O CHEZ WONG & GRILL. El amabilísimo anfitrión de este local cambió la faz de la comida china en Caracas. Se lo reconoce una clientela fanática y asidua, este recinto que no cede ni un grano de arroz a las convenciones decorativas de la restauración china con sus pisos azules y flores de Georgia O' Keefe reproducidas en las paredes. Sus dim sum han alcanzado justa fama. Av. Principal, La Castellana, frente a la plaza, Edif. Iasa, PB. Telf. 266.5015. CITRON CAFÉ. El know how y demostrado tino comercial del grupo Ara marca las directrices de este establecimiento con aires de informalidad. En la cocina, Aitor Garbizu, con la asesoría del chef Laurent Cantineaux, combina los sabores del mediterráneo con algunos ingredientes asiáticos. CC Sambil, nivel Feria, Forum Shops. Telfs. 264.0378 y 267.3287. O CLUB LÍBANO-VENEZOLANO. La autenticidad de los platos tradicionales del Levante inscritos en la minuta le ha merecido el título de número uno entre sus pares. Abierto al público general y sin carnet.

Calle Río de Oro, Prados del Este. Telf. 978.2368. O COSTA VASCA. Asentado sobre las recetas del veterano Izaguirre, ya jubilado, su hijo, gracias a los leales servicios del chef José Garrido, sigue apostando al salpicón de mariscos, las croquetas de jamón y el lenguado al champagne en su tercera ubicación. Calle Los Chaguaramos, La Castellana. Telf. 266.4276. DA GUIDO. Italiano, longevo e inalterable. Válido pesto y una polenta con hongos, sencilla, casera, pero muy sabrosa. Av. Francisco Solano, Qta. Iza, N° 8, Sabana Grande. Telf. 763.0937. DA RICCI. En una zona donde no abundan los restaurantes italianos, la excelente atención sirve de aderezo a una tavola calda de sencilla factura. 2a avenida, entre 1a transversal y Av. Francisco de Miranda, Los Palos Grandes. Telf. 283.6379. O DAMA ANTAÑONA. En el centro de la ciudad se descubre y redescubre este oasis, que desde hace casi dos décadas se empeña en preparar platos de auténtica sazón venezolana: asado negro, lau lau del Orinoco, tarkarí de chivo y bollos pelones —que hay que encargar con anticipación— traen a la memoria tiempos idos. Entre Jesuitas y Maturín, N° 14. Telf. 563.5639. DAMASCO. En un austero local, la familia Akkary, de origen sirio, hace honor al terruño con deliciosa sencillez. Avenida Guaicaipuro, Centro Me-

Cálido alemán Al saludar esboza una tímida sonrisa acompañada por su nombre de claras raíces germánicas: Halston Strubinger. Cuenta escasos 23 años y casi seis entre sartenes. Sexta generación de alemanes que inmigraran a la Colonia Tovar durante el siglo pasado, a los 16 ya incursionaba en el mundo de los sabores del hotel y restaurante Bergland. Después de año y medio trabajando para ellos, los dueños observaron su pasión por los fogones y lo incentivaron a estudiar cocina en Alemania. Corría el año 94 cuando decidió hacer maletas y emprender un viaje que duraría cuatro años. El pueblo de Endingen, al sur del país europeo, lo estaría esperando para enseñarle todo sobre las artes culinarias con ayuda de la principal escuela de hotelería y cocina de Baden. El aprendizaje práctico lo extendería en varios restaurantes y viñedos, entre los que se encontraba el Schwarzer Adler de Franz Keller. Las preparaciones que prefiere son las clásicas, tradicionales, en las que cada ingrediente exalta sus verdaderas propiedades: "Una zanahoria es una zanahoria y debe saber a eso y no convertirse en otra cosa", asegura con respeto. Esta ideología es la que impuso por un año en las montañas aragüeñas de su pueblo natal y desde enero intenta divulgar en el restaurante Gran Vía. Hotel Gran Meliá Caracas. Av. Casanova. Telf. 762.8111, ext. 4041 tropolitano, local 39, Chacao. Telf. 266.6695. EL CAMPANERO. Tiene algo más de una treintena floreciente al pie de la res. Avenida Princi-

pal de Las Mercedes. Telfs. 991.5120 y 993.2606. O EL CHUPE. Perú es su primera patria, pero ha dado asilo al antojito mexicano.

Honra también a los chi fas limeños. Av. Mucuchíes con calle La Trinidad, Las Mercedes. Telf. 992.66.00. EL HATILLO GRILL. Su clientela MAYO 1999

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aprecia el gran espacio interior y una carta consagrada a las carnes a la parrilla. Calle La Paz, N° 26, El Hatillo. Telfs. 961.1356/1452. O EL HATO GRILL. Hervidos, quesito de mano y lomito encebollado atraen a verdaderas masas que aplauden, además, convencidas por unos precios sin competencia. Avenida La Salle, Los Caobos. Teléfonos. 793.0263/0620 49 EL MESON DE ANDRÉS. Con precios más económicos que los de La Candelaria y con la comodidad del Este de Caracas, el cocinero Alonso Mendoza y el dueño Andrés Rodríguez unen su experiencia

para ofrecer los sabores de Asturias, Galicia y las Vascongadas con una atención verdaderamente de primera. Av. Francisco de Miranda, Edificio Hollywood, Chacao. Telfs. 263.0092/0431. EL PORTÓN. Muy visitado por turistas que desean llevarse alguna idea, aunque sea vaga, de la cocina criolla. Avenida Pichincha, quinta Restaurante El Portón, El Rosal. Telfs. 952.0027/0302. Y en la sucursal de Maiquetía desde las 6 de la mañana de lunes a domingo. O EL TAJÍN. Nunca pasaron por este valle tan sabrosos platillos mexicanos como los de Tania Sequera, pupila criolla de la mexicana Alicia Gironella. Ahora sirven un menú com-

Mercedes. Telfs. 993.0442 y 992.8260. O EL TIZÓN. Puede vanagloriarse de haber logrado la feliz unión de México y Perú en la misma y permanente carta. Inalterable, se mantiene vigente desde el primer día. Avenida principal, Centro Comercial Bello Campo, sótano. Telfs. 264.1638 y 267.6715. O EMERITUS. Jean Franlois Bodin lo ha colocado entre los ideales para saborear una minuta netamente gala y de gala. También ha creado tres repertorios de degustación con una selección de sus más sobresalientes platillos. Avenida Intercomunal La Trinidad-El Hatillo. Centro Médico Docente La Trinidad, Edif. 2 Manuel Pulido, nivel sótano. Telfs. 945.9686 y (014) 9290436.

Por todo lo alto Adelantándose a la llegada del siglo XXI, el grupo Freixenet, número uno entre los productores de vinos espumosos, paseó su enorme globo por los cielos de varias ciudades del continente americano. Caracas fue una de las que tuvo el burbujeante gusto de ver pasar la etérea nao. De la mano de la distribuidora internacional United Distillers & Vintners, este cava español elaborado con el método tradicional descubierto por Dom Perignon busca afianzarse como la mejor alternativa en este segmento de bebidas para darle la bienvenida al nuevo milenio, y de paso despedir a este.

pleto por un precio bastante razonable. Ahora también ofrecen servicio de catering. Calle California con Perijá, Las 84

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9 FISH MARKET RAW BAR. Tiene una especialidad: frutos del mar frescos o exóticos. De indudable éxito a pesar de su servicio impersonal. Las buenas intenciones no alcanzan a

I VISA cubrir la falta de rigor con la misma suerte que las fuertes salsas ocultan el sabor del pescado. CC El Mirador, Av. Panorama, Lomas del Mirador, San Román. Telf. 992.2667. FORNO I S. El horno de leña asalta la vista e invade los sentidos con sus apetitosas emanaciones. Su cocina típica española no tiene grandes pretensiones. Av. Las Palmas, 4a transversal, Boleíta Sur. Telfs. 235.3304 y 237.5457. HATSUHANA. Su nacimiento marcó pauta en la decoración y servicio en los locales de comida japonesa de la capital, convirtiéndolo en referencia invicta y obligada. Avenida San Juan Bosco con 5a transversal, Altamira. Teléfonos 264.1819 y 264.1214. O HERMANN. Amplio como sus homólogos neoyorquinos. Cocina ecléctica a precios muy sensatos. Música de noche (barroca los viernes) y los domingos a partir de la 1:00 pm. Av. Francisco de Miranda, Centro Lido, nivel Parque, Campo Alegre. Telf. 953.4560. II CIELO. En su cálido interior, el aceite de oliva extravirgen, procedente del olivar de los dueños, los antipasti y las carnes y pescados a la grilla conviven con tranquilidad. Avenida Río de Janeiro con calle Trinidad, Las Mercedes. Telfs. 993.5996/8053. SI JAIA. Una tímida avanzada de comida vasca en Caracas. Los típicos y conocidísimos platos son servidos en la parte interna o en la agrada-

El Buen ourmet tiene

1: ncontro, la

creme de la creme,

sin cremas

ble terraza, regados con buenos vinos. Av. San Juan Bosco, entre 3° y 5° transversal, Altamira. Telf. 261.6949. JAIME VIVAS. Cocina popular venezolana. Rústicos, el plátano horneado y el bistec encebollado con ensalada de berros han hecho de este lugar su santuario. Calle Pascual Navarro, Edif. Manaure, Sabana Grande. Telf. 763.4761. KALDI'S. Una fresca cocina mediterránea elaborada con ingredientes del día atrae a

las jóvenes señoras, que pueden pasarla bien sin necesidad de arriesgar su futuro pecuniario ni soportar incómodas invitaciones del sexo opuesto. Calle Monterrey entre Madrid y París, Qta. Josmar, Las Mercedes. Telf. 991.4960. KONG HEY. Lo que le falta de refinamiento lo suple la autenticidad. Aunque, claro, todo tiene un límite. Ofrece dos cartas, szechuan una, cantonesa la otra, y mantiene servi-

cio de tim sam mediodía, tarde y noche. Av. Prolongación Sur, Las Acacias, Sabana Grande. Teléfonos 782.5610 y 793.1449. LA BELLE EPOQUE. Hace larguísimos 42 años estaba en el mismo lugar —y con el mismo mural—, ofreciendo algún tipo de consuelo a los nostálgicos de Francia. Los condumios, legado de Michel Pellenard, hacen echarlo de menos. Calle Leonardo Da Vinci, edificio Century, Colinas de Bello

Monte. Telf. 753.2202. Sin muchas pretensiones pero con una excelente atención se dejan saborear sencillos platos de cordero, pato o conejo a la luz de las velas y las antorchas que en las noches decoran los balcones y la terraza. Calle Comercio frente a la Plaza Sucre, El Hatillo. Telf. 961.5155. LA CASBAH. Que nadie se confunda con el nombre: el origen de los platos, signados por la frescura de los ingreLA BULLA.

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dientes, es salerosamente hispano. Tortilla sin competencia y pimientos de Padrón de la huerta familiar. Alcabala a Puente Anauco, N° 214, Candelaria. Telf. 572.6387. LA CITA. Los lugares comunes del fogón español conviven en este ruidoso comedor del animado centro capitalino. Las porciones son de verdad muy convincentes. Esq. Alcabala, Candelaria. Telf. 572.9913. LA CONFITURE. Este dilecto reducto de las señoras a dieta que gustan de un acogedor ambiente hogareño brinda una carta de resonancias francesas a la manera de Caracas, supervisada por el cariñoso ojo de Pilar Leonardi. Calle Madrid, entre Mucuchíes y

que sabe que un verdadero ragú es el producto de una larga cocción y no de cremosos disfraces. Además, de las bien ejecutadas pastas, pueden paladearse el cordero y la ternera regados con meritorios caldos. Av. Principal, Qta. Tati-Tere, Las Mercedes. Telfs. 991.1921/4177. LAI KING. Supo liberarse de la más temible y común de las tríadas: lumpia, costillitas y arroz frito, pero no de todos los vicios (ingredientes exóticos enlatados, entre otros). Muy buen servicio. Tercera Av. con 3' transversal, Los Palos Grandes. Telf. 283.9742. 9 L'ALBUFERA. Aunque su comida no se diferencia de los sitios españoles que los vene-

más sirven tradicionales tapas. Av. Casanova, Gran Meliá Caracas, nivel Galería. Telf. 762.8111, ext. 5103. LA NUEVA CASA DE LOS CHINOS. En medio de una de las zonas menos agradables de la ciudad ha sabido mantener, no obstante, una de las cartas cantonesas más sabrosas y auténticas de estas latitudes. Pilita a Bucare, Edif. Jucadi, local A, Santa Teresa. Telf. 481.0741. O LASSERRE. Ostras Rockefeller, pollo a la Kiev y otras piezas de museo; servicio formal y elegancia convencional en la decoración atraen a banqueros y profesionales prósperos. Tercera Avenida, entre 2a y 3 a transversales,

vale una mesa. CC El Mirador, Av. Panorama, Lomas del Mirador, San Román. Telf. 993.2269. LAZIO. Ingredientes de varias regiones del mundo se combinan en una misma carta de acento marcadamente italiano. Resaltan las pastas elaboradas en casa, el pasticho de salmón fresco y los bien ponderados risotti. Av. Venezuela, Torre Cremerca, P.B., El Rosal. Telf. 952.2910. LE COQ D'OR. Un humilde tesoro de continuidad francófila en el que se reconocen los nostálgicos de la Sabana Grande de antes. Av. Los Mangos, Sabana Grande. Telf. 763.0891. LEE HAMILTON STEAK HOUSE. La hora del almuerzo necesita

En la mayoría de las ciudades del mundo se les conoce con el nombre de sandwiches, mientras en España son llamados bocadillos. La cadena de comida rápida Bocatta con sede principal en la Barcelona de Gaudí presentó en su tienda del Centro Sambil —la primera de Latinoamérica— el nuevo pan integral de la casa. Fabricado en la Península Ibérica con los mejores ingredientes, este producto viene a satisfacer a aquellas personas que se preocupan por estar saludables y tener una buena figura. pero que, por falta de tiempo, tienen que comer fuera de su casa y recurrir al rápido invento de John Montagu, cuarto conde de Sandwich.

Monterrey, Las Mercedes. Telf. 993.9658. LA FINE DEL MONDO. La cocina italiana (de la Toscana para arriba) es ejecutada con perfección por la familia Capelli, 86

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zolanos conocen, en poco tiempo ya cuenta con suficientes adeptos a sus preparaciones y a la amplitud del local. Muchos aconsejan los arroces por su textura; ade-

Los Palos Grandes. Telf. 283.3079. 9 LA TERRAZA OLD FASNION. Bajo la supervisión del legendario Mimmo Tombión, se impone un repertorio de inspiración italo caraqueña. La panorámica de la ciudad bien

siempre de reservación. La agradable barra es perfecta para tomar un aperitivo antes de saborear la carne. Uno de los pocos restaurantes que abre los domingos por la noche en esta ciudad de asfixiantes fines de semana. Av.

Gourmet tiene San Felipe, Esquina El Bosque, La Castellana. Telfs. 261.0511 y 263.8429. L'ENTRECÜTE. De las calles parisinas llega la franquicia de este bistrot clásico pero adaptado al gusto criollo. Pocas mesas y los metros justos se antojan propicios a los ejecutivos de la zona aficionados al legendario Entrecate avec pommes frites o la tradicional sopa de cebolla, despachados, en este caso, con rapidez y buenos precios. Calle Mucuchíes entre Principal y París, Las Mercedes. Teléfonos. 991.8415 y 992.2628. O LE GOURMET. La clara ambición de colocarse en el pináculo gastronómico de la capital es un hecho. Laurent Kehr es harto convincente cuando aborda el hojaldre de foie gras, la ensalada de endibias con tempura de vegetales y soya o los medallones de ternera al jugo de especias. Suaves melodías al piano por la noche, óleos de género de los siglos XIX Y XX en las paredes, y la atención equilibrada y formal completan una experiencia que bien vale su precio. Hotel Tamanaco. Telf. 909.7111. OLE PETIT BISTROT DE JACQUES.

La minuta variada de clásicos condumios franceses con un toque regional o de fantasía, ejecutados por Marc Provost, son la baza del siempre amigo Jacques Bouvet, al que alude la enseña. Av. San Felipe, La Castellana. Telfs. 263.8695 y 266.0321. O L'INCONTRO. La llegada de

Italia del chef Vincenzo Guglielmi, quien ha enviado al exilio a las pesadas cremas a las que algunos están mal acostumbrados, ha integrado a este pequeño paraíso del infernal centro capitalino autenticidad y sabor. Las chuletas de cordero al cilantro, entre otros platos, son una prueba. Avenida México, hotel Cara-

Altos, Urb. La Morita, frente al Centro Comercial. Telf. 371.4340 O Los VASCOS. El chef Raúl Miranda defiende los colores de las vascongadas lo mismo con unos pimientos de piquillo rellenos de bacalao en salsa de calamares que haciendo inteligente uso de un

O MARCO POLO. Un trompe l'oeil veneciano sirve de telón de fondo a una comida italiana de postín que supervisa

QuÉ, Y

DONDE Carne de avestruz

Aunque todavía no ha encontrado verdaderos seguidores en el mundo gastronómico venezolano, los paladares más expertos la consideran apreciable manjar. La principal finca productora de la región caribeña se encuentra en Curaçao y está considerada como una de las más grandes fuera de Africa. En Caracas ciertos restaurantes todavía se muestran escépticos a la propuesta, mientras algunos la incluyen entre las sugerencias del día en platos como el carpaccio, medallones y ahumado, entre otros. Sitios. La Confiture, Lasserre, La Terraza Old Fashion, Lazio, Le Petit Bistrot de Jacques, Marco Polo, Mezzanotte y Mimosa

cas Hilton. Telf. 503.4259. L'OPERETTA. Antes funcionó

allí el muy exclusivo Member's. Aunque de cocina italiana, su bar inglés recuerda al de clubs en los que la caza del zorro es un tema de conversación. Calle El Bosque con Av. Principal, La Castellana. Telfs. 265.3293/2971. O Los SANABRIA. La fidelidad a la buena cocina casera venezolana del centro es el más elocuente argumento de esta familia que merece un espaldarazo. San Antonio de los

asador al sarmiento. Hotel Cumberland, 2a avenida, Las Delicias, Sabana Grande. Telf. 761.5630. O LUTECE GRILL. Una sucursal de la Ciudad Luz que se defiende con los platos más prosaicos y sabrosos del repertorio bourgeois sin renegar por ello de otros más ambiciosos. Jueves de tango y chanson franlaise. Calle Beethoven, Edif. Paraima, Colinas de Bello Monte. (Estacionar en la Torre Financiera). Telf. 753.7226.

Amadeo Mazzucato, veterano restaurateur y cronista gastronómico a sus horas. Av. Francisco de Miranda, Torre La Primera, Campo Alegre. Telfs. 953.2582/0396. 9 MEDITERRÁNEO. Refugio de europeo encanto. En la carta destacan ligeros antipasti, guine, tortelloni y la inamovible panna cotta. A pesar de la indomeñable evolución que ha logrado, la informalidad de sus horarios obliga a llamar por teléfono con antelación. Primera avenida, entre MAYO 1999

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'1 Buen

Gourmet tiene r y 2a transversales, Los Palos Grandes. Telf. 283.3680. MESÓN DE BOLEÍTA. A pesar de la ubicación poco auspiciosa, este pequeño local propone un repertorio culinario del mar que evoca el espíritu de las inmediaciones de la Candelaria. Sobresalen la crema de cangrejo y el bacalao al pil-pil. Av. Las Palmas, entre 3a y 4a transversales, Boleíta Sur. Telf. 235.2969. MEZZANOTTE. En este local el techo puede deslizarse en las noches para disfrutar del cielo estrellado, que seduce al comensal aún más que los lugares comunes de la carta, de inclinación italiana. Los fines de semana, reservar con dos días de anticipación. Av. Panorama, Lomas de San Román, Centro Comercial Mirador, P.H. Telfs. 993.6761 y 993.8228. MIMOSA. El cordon bleu Marc Navailles se ha instalado en Venezuela para dar a conocer la intercultural minuta panasian. La carta entraña un repertorio muy poco convencional y algunas travesuras del fantasma de Carmen Miranda, como la ensalada de foie gras fresco con filetes de pato, mangos y vinagreta de parchita. Av. Río de Janeiro con calle Caroní, Las Mercedes. Telfs. 993.1837/8989. NOMAD. Cerrando el triángulo del Samui y Café Arábica, este local de Jean Paul Coupal asume la propuesta culinaria marroquí. Ni pena ni gloria. Av. Andrés Bello, entre Av. Francisco de Miranda y la 8ó

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transversal, Los Palos Gran- duos de su pequeño comedor nos que el cónsul honorario que sólo abre a la hora del al- de Tailandia en Venezuela. des. Telf. 286.1849. muerzo. Una que otra noche Primero en adoptar los condi) NOUVEAU GRILL. Con la garantía del grupo Ara se sirven se reúnen audaces chefs de dumios del país asiático, se excelentes cortes de carne co- domingo para satisfacer a sus ha mantenido en la palestra. cinados con el sabor de la le- invitados, Avenida Las Palña y el carbón y presentados mas con Avenida Libertador. Av. Andrés Bello con 1 a transcon suculentas papas fritas, Telf. 781.1357. versal, Los Palos Grandes. risotto de hongos, entre otros Rococó. Decorado dieciochesTelf. 285.4600. contornos al gusto del coco rayano en el kitsch, vista SASHIMI. La bien imaginada mensal. En la mesa, diversas al Avila, atento servicio y una decoración, en la que madera, salsas esperan la elección de carta italiana bastante con- agua y vidrio están en complecada quien. La altura del piso vencional, apoyada en ingre- to equilibrio, ayuda a degusdonde está ubicado el restau- dientes de calidad, dignas tar mejor la demandada cocirante va a la par de los pre- presentaciones y una poco na japonesa. El sushi bar con cios. Av. Francisco de Miran- profesional ejecución, suman el canal de agua, el acuario da, Hotel Lido, piso 15. Telf. un todo bastante insólito. marino con peces del Pacífico 957.7640 Cuarta transversal, entre 4' y hasta tiburones con todo y OKER'S. Este comedor vasco avenida y Av. San Felipe, Alta- dientes, y las peceras en cada respaldado por excelente ma- mira Norte. Telfs. 261.1417. mesa junto a la suave música teria prima puede figurar en- SAKÉ NOUSE. Anfitriona con- con acentos new age conviertre los buenos. Preparaciones sorte, Maite Delgado es uno ten a este local en parada senada ingrávidas. Un corto pe- de los atractivos del lugar, gura de los amantes de una arro calificado repertorio de vi- donde cocineros expertos en moniosa comida. Av. Princinos navarros opera como el arte del teppanyaki hacen pal, Multicentro Las Mercebuen aliado a la hora de dige- las delicias de la chiquillería, des. Telfs. 991.9597/7542. rir. Calle 2 de Mayo, Esq. con padres incluidos. Calle Sucre, SCÓPRILO. Las paletas de pincalle Bolívar, El Hatillo. N" 6-B, El Hatillo. Telf. tor que hacen de respaldar de Telfs. 963.2249. 961.1342. Y también en su las sillas anuncian que aquí la O RACÓ. El inconfundible segunda ubicación: CCCT, comida, italiana, está rodeada Angel Lozano no se duerme nivel PB. Telf. 959.5404. por obras de artistas venezolaen los laureles —o las demás SAKURA. La excesiva populari- nos. Centro Banaven, Av. La hierbas que utiliza. A su me- dad ha afectado el servicio y Estancia, Chuao. Teléfonos. nú, que recorre todos los disparado los precios a alturas 993.7157. meandros históricos del acer- singularmente niponas. Pri- SHIBUMI. Pionero en integrar vo culinario catalán, agrega, mera Avenida, entre 1' y 2a al encanto folklórico de El para placer de sus comensa- transversales, Edif. Pinali, lo- Hatillo el de los sushi bar de les, platos como el arroz con cal 3, Los Palos Grandes. Telf. New York, suma a la delicapollo, conejo y judiones o el (016)621.7316/283.7688. deza de los platos nipones la tronco de mero con aceite de SALÓN CANTÓN. Un seguro bas- abundancia, tan valorada en oliva y vinagre balsámico. Un tión de la cocina cantonesa este lado del mundo. Calle fenómeno. Avenida Venezue- defendida con decoro y bue- Bella Vista con Santa Rosalía, la, Centro Cremerca, PB, El na atención. Torre Tamanaco; quinta Usme, El Hatillo, Telf, Rosal. Telfs. 953.3856/2433. piso E-2, San Román. Telfs. 963.4501. RITZ. Jackie Traverso, siem993.2191/2566. SPIZZICO. En estos momentos, pre en la puerta, recibe por O SAMUI. Si de garantías se sólo está abierta la parte supeigual a cada uno de los asi- trata, aquí manda nada me- rior, en la que la conocida sa-

Posttes

dem de mención.

El Bue

ourmet ti ene

41.1111111111.11t

zón de Laura Miranda impregna todos los platillos que iniciaron su periplo en el Norte de Italia. Avenida Principal de La Castellana (frente al banco Mercantil). Teléfonos. 267.8820/9077/9916. O TAIKO. Es el japonés preferido por los japoneses. Cálido espacio, lleno de magia e intimidad, y así mantenido. Además abre los domingos hasta las 11 de la noche. Calle Trinidad, Edificio Canaima, Las Mercedes. Teléfonos 991.6705 y 993.5647. O TAMBO. Los hermanos Sucre continúan el éxito que los

clásico en la guía de los amantes del Avila o de los turistas que vienen a Caracas, amén de esos caraqueños que desean bucólica tranquilidad. Final de la Avenida San Juan Bosco, Altamira. Teléfonos. 261.8419/0628. O TASCA DEL CARIBE. La sazón de este local portugués, a car-

go de María Fernanda Rodrigues, es tan auténtica que puede despertar saudade en el alma menos melancólica. Favoritos como la feijoada con-

se divide entre la preparación de los platos y la atención del establecimiento, para quien esté a la altura de sus precios. Original carta de vinos. Av. Luis Roche, Casa Rómulo Gallegos, Altamira. Telfs. 285.5675 y 286.6721. O VLASSIS LE MED. La sencillez del ambiente no da fe de la excelencia de cada uno de los platos. Eduardo Moreno decidió recopilar recetas de Marruecos, Túnez y Grecia

o aceitunas. Av. Río de Janeiro. Telf. 993.1059. Y CC Las Cúpulas, 2a avenida con 4' transversal, Los Palos Grandes. Telf. 286.6748. O ARÁBICA COFFEE COMPANY.

Innovador ambiente de confortable quietud y precios sauditas. Av. Andrés Bello con l a transversal, Multicentro Los Palos Grandes. Telfs.

285.3469. 9 AROMA CAFÉ. Una cocina

mediterránea

con toques

viven con platos historiados como el bacalao Gomes de Zaa, improvisación de un

Ya son nueve años que lleva Bexy Romero Tosta dedicados a producir el queso de cabra para untar Suripá. Con el paso del tiempo, la curiosidad de sus allegados y amigos por conocer nuevas recetas en las que se pudiera utilizar el delicioso lácteo la llevaron a est_'.ribir algunas preparaciones. Con la caída del sol y pluma en mano descifraba ingredientes y ejecución de algunos platillos —como ensalarlil sopas, carnes y hasta postres— que años después incluiría ,¡ el recetario Cocinando con queso de cabra, editado con ayuda de Promesa. Este libro se puede adquirir desde el mes de marzo en las principales librerías y algunos supermercados de la capital. 4i~

ha asistido durante los últimos años. Bifronte en lo culinario —japonés y peruano, como su chef— gusta a las mujeres de portada, a los altos ejecutivos, a las señoras de postín y hasta a los políticos. Tiene duende. Av. Francisco de Miranda, Torre Europa, PB, Campo Alegre. Teléfonos. 952.5626/7190. TARZILANDIA. Este local de cocina internacional es ya un

gastrónomo lusitano. Precios realmente accesibles. Av. Libertador, entre Los Jabillos y Los Samanes, La Florida. Telfs. 731.1279 y 74.0576. O URRUTIA. Entre los florones del modus culinario vasco, con varias décadas en la plaza. Av. Francisco Solano, Esq. Los Manguitos, Sabana Grande. Telf. 763.0448. O VIZI°. La familia Crisante

para afianzarlas entre un pú-

blico exigente. Tercera transversal entre Andrés Bello y la 2' avenida, Los Palos Grandes. Telf. 285.2671. CAFES, PIZZERIAS, AREPERAS, COCINA MENUDA 9 AMERICAN HOT DOGS & MILKSHAKES. Salchichas de varios

tamaños con novedosos toppings: champiñones, tocineta

orientales y cuidada ejecución caracteriza este espacio. Calle Madrid entre Monterrey y Mucuchíes, Las Mercedes. Telf. 991.2681. 9 ART CAFÉ. En una coquetona terraza repleta de árboles, aire no muy puro y rusticidad, diversos cafés y batidos acompañan a los sandwiches en pan árabe con papitas y ensalada. CC La GhiringueMAYO 1999 EXCESO

María Fernanda Di Giacobbe, sazón ateneísta

Ila, 4' transversal, Los Palos a la semana se presentan canGrandes. Telfs. 286.0877 y tantes, pintores o distintos artistas que le dan un toque muy 286.4542. BEEF & ART. Dalí, Miró, Klee, particular al local. Tercera Picasso y otros maestros del avenida, entre 3° y 4° transarte moderno otorgan sus versales, Los Palos Grandes. nombres a los deliciosos sand- Telf. 2s85.3103. wiches. Centro Letonia, To- 9 BOSTON BAKERY. Con cara rre Ing Bank, nivel Galería, de cafetín, juega a ser panalocal E-2, Av. Principal de La dería lujosa. Las especialiCastellana. Telf. 267.8978. dades: los panes de cambur, maíz, cebolla y el cinnamon BONSAI. El sabor de Italia llega a las mesas de este café roll. Avenida Luis Roche con con aires mediterráneos. Pas- 2' transversal, Altamira. Telf. tas y salsas hechas en casa se 263.2457. combinan con recetas de pro- 49 BREAD FACTORY. Sandwiches pia inspiración, ensaladas y preparados con cualquiera de sandwiches, todo con cierto los tipos de pan que ocupan efluvio cultural. Algunos días este espacio, dulces o salado ,,. 9

0 EXCESO "v0 1999

CC Shopping Mall, Avenida Principal, Las Mercedes. Telts. 993.7414/8615. Centro San Ignacio, nivel Galería. Telfs. 263.9441 y 264.3289. 9 CAFÉ DE LA ESTANCIA. La belleza del colonial jardín que alberga a este centro de arte que ha puesto a Altamira en el mapa de los museumgoers otorga su aura verde a los sencillos desayunos y a los panes abiertos especialidad del lugar. Av. Francisco de Miranda, Centro de Arte La Estancia, La Floresta. Telf. (016) 639.6812. CAFÉ DEL ATENEO. En completa libertad y con una nueva faz

se saborean algunos platos de la cocina casera venezolana a precios interesantes. En las noches presentan uno que otro numerito. Ateneo de Caracas (al lado de la librería). Telf. 573.4622. O CAFÉ DEL MUSEO. Ensaladas bien servidas, bajas en caloría s y altas en precio, han sido siempre el blason de la casa. El sera icio peca por exceso e impide el flujo natural de la conversación. Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber, Parque Central. TeL► — 5710. O CAFÉ DEL SACRO. Emparedados ininteligibles, ensaladas frescas, sopas y postres caseros a precios de auto sacramental apenas se compaginan con la belleza del ambiente, oasis inesperado en el inhóspito centro de la ciudad. Museo Sacro, Torre a Gradillas. Telf. (016) 625.8913 y 861.6380. 4? CAFÉ LATINO. Los títulos más memorables del viejo boom literario latinoamericano bautizan los sandwiches, ensaladas, jugos y postres. La minuta se ha abierto para incorporar especialidades de distintos puntos de la América Hispana. Los fines de semana, espectáculos en vivo. P.B. del Celarg, Av. Luis Roche, Altamira. Telf. 286.9036. O CAFÉ MARGANA. A caballo entre la fuente de soda y el café de herencia europea, desde hace años es el lugar para la cita discreta. Av. Francisco de Miranda, Centro Plaza, nivel 3, Los Palos Grandes. Telfs. 286.1952 y 284.6590. 9 CAFÉ OLÉ. El ambiente íntimo invita a la charla y la gula despierta al conjuro de las apetitosas filigranas de la repostería. Los fines de semana recibe a los hijos del tout Caracas. La atención es distraída. Calle California con Jalisco, Qta. Carylo, Las Merce-

des. Telf. 993.9059. Centro Sambil, nivel Acuario. Telfs. 263.5334/8252. CAFFE IL BOTTICELLO. Espacio sencillo, mínimo y amable ideal para ponderar pizze, pastas y demás caprichos de la mesa italiana. 2a transversal con Av. San Juan Bosco, Altamira. Telf. 266.1618. CAPPUCCINO. Buena alternativa de lunes a viernes para aquellos que vivan o trabajen por la zona. La oferta se divide entre sabrosos panini, carpaccios, ensaladas o crostini. Bebidas refrescantes o cualquiera de las ocho variedades de café completan el banquete. Torre Humboldt, P.B., Prados del Este. Teléfonos 975.4142/4777. O CANSO BAR. Sigue siendo un centro de reunión y diálogo de los codos de más amplia fama del mundo publicitario. Los sandwiches, llamados cubanos, son suculentos —aunque tengan muy poco o nada que ver con la Cuba de hoy. En las tardes, el café y las pastas secas traen memorias y buenos aires de Madrid. Av. Francisco de Miranda, Centro Seguros Sud-America. Telf. 951.2797. O CASA ROUX. Reúne con éxito la repostería americana, los platillos por encargo y el menú para el consumo in situ. Ecléctica oferta gustativa. CC Los Samanes, Nivel mezzanina, Los Samanes. Telfs. 945.7075 y 945.2985. SI CHIPI'S GRILL & BAR. Hijo prodigioso de las primeras sucursales de Texas y México. Inaugurado hace pocos meses, ha logrado vender más que sus 700 hermanos en el mundo. El público amante de la comida tex mex descubrirá aquí preciado sitio de reunión, aunque quizás los precios no se lo permitan con frecuencia. Centro Sambil, nivel Libertador. Telf. 263.9420.

Salchichas de distintos tamaños y origen son el corazón de los perros calientes mejor vestidos de la zona. Los emparedados y hamburguesas son recomendados por el público fanático de las carnes al carbón. Av. Principal, frente a la plaza, La Castellana. Telfs. 265.5672 y 267.0410. Avenida Principal de Las Mercedes, CC Automercado Cada. Telfs. 991.9421/5350. 9 COLLINS AVENUE. Desde el mediodía, este café cibernético colma apetitos ligeros y curiosidad tecnológica. El ambiente, propicio a la tertulia, atrae a la gente sin ánimo de trasnochar. Calle Los Chaguaramos con Av. Mohedano, Centro Gerencial Mohedano, La Castellana. Telf. 267.1721 CREPES & WAFFLES. Como su nombre lo indica, aquí se pueden saborear innumerables opciones saladas y dulces de estos sencillos platillos, en cuyos precios si no tiene nada que ver el sencillo. CC Sambil, nivel Autopista. Teléfonos 263.0614 y 266.0871. 9 4 D. La heladísima cadena se ha consolidado como solución contra los calores de la capital. 4a Av., entre 3' y 4a transversales, Altamira. Telf. 266.8013. Av. Londres con calle New York, Las Mercedes. Telf. 992.7702. CUCURUCHO. Una terraza con un menú tradicional en el que sobresalen los helados de fabricación manual. La pastelería hecha en casa se acopla de maravilla a sandwiches, carpaccios y platos de queso. Calle Madrid, entre Veracruz y Caroní, Las Mercedes. Telfs. 992.0939/9967. CYBER CAFÉ MADRID. Un sitio sencillo, pero con una propuesta atractiva. Además de bocadillos tipo sandwich, sodas italianas y postres, se sirven quince computadoras con 9 CHIPI'S.

la más avanzada tecnología. Todas están conectadas a Internet y tienen cámara para conferencias como las de los Supersónicos. Centro Sambil, nivel Acuario, Plaza El Arte. Email: cybercmadrid@telcel.net. ve. Telfs. 267.1866/8326. DA GABI Y TONI. Platos italianos 100 por ciento caseros y a precios de antaño. Lamentablemente, sólo se sirven almuerzos. Calle Las Mercedes, Chacao. Teléfono. 266.8290. O DANUBIO. Tradición y dulces se unen en esta casa cuyos pies y pasteles de queso todo el mundo conoce. Ahora tienen una sucursal. Además de los productos de siempre, tendrán pizze redondas en porciones o enteras y almuerzos livianos. Centro Sambil, nivel Autopista, Plaza El Arte. Telfs. 267.9674/9979. Av. Guaicaipuro, Quinta Nelly, Chacao. Telf. 261.4446. O DAS PASTELLHAUS. En el nivel inferior buenos postres y un sabroso chocolate caliente y en el superior la pizza, previa espera y larga cola. Calle La Paz, N° 32, El Hatillo. Telfs. 963.5486/7655. DÉLIKA CATERING. Además de organizar desayunos y almuerzos, ofrecen en su local una terraza y dos salones privados en los que los clientes pueden paladear una pasta o un sandwich. Calle New York entre Avenida principal y calle Londres, Las Mercedes. Teléfono 991.9154 y 993.9264. O EL GRANJERO DEL ESTE. Are-

pera de fama internacional, con atención las 24 horas, es el lugar para comer o beber sin sofisticaciones. Av. Río de Janeiro, Las Mercedes. Telf. 991.6619. EL JARDÍN DE LA CUADRA. Muy íntimo y reservado, ofrece una carta italiana con apego a las pastas y ensaladas realizadas con los más frescos vegetales traídos de su propio

huerto. 4°. avenida, entre 6° y 7° transversales, Los Palos Grandes. Telfs. 285.7019 y 284.3768. ESPRESSO GOURMET. Intenta implantar un nuevo concepto uniendo la world cuisine —de alta elaboración— con el servicio de comida rápida. La minuta, muy saludable, varía cada dos semanas. Centro Letonia, Torre Ing Bank, nivel Galería, Av. Principal, La Castellana. Telfs. 263.3276/0981 FRITZ Y FRANZ. Tradición teutona para los habitantes del valle de los indios Caracas, renace con jugosas salchichas, repollo agrio y ensalada de papas. Tercera transversal con Av. San Juan Bosco, edificio La Placette, Altamira. Telf. 265.5724. 9 GELATERIA PARMALAT. Casi 20 tipos de helados artesanales elaborados en el día se pueden saborear en este local. Av. Principal, entre calle Mucuchíes y Monterrey, Las Mercedes. Telf. 993.4322. GIORGIO. Reúne al público de las zonas aledañas para degustar platos italianos al mediodía, y por las tardes, sandwiches y algunos traguitos. Av. San Felipe, entre calle José Angel Lamas y 2a transversal, Centro Coinasa, La Castellana. Telf. 266.3466. 9 GOURMET MARKET. Los platillos se engalanan con la sencilla decoración de este breve comedor, enmarcado por las especialidades culinarias del bodegón con el que hace pareja. Los vinos se ofrecen casi al costo. Av. Principal de Las Mercedes con calle Guaicaipuro, Qta. Ottawa, El Rosal. Telfs. 951.3884/5195. 9 IMAGEN DAZS CAFÉ. Ideal para disfrutar de los postres y algo más de esta heladería que está en todos los sitios que se precien de estar en el mapa. El local tiene una amplia terraza para disfrutar del MAYO 1999

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calor mientras se come el frío. Calle Madrid, Qta. Lola, Las Mercedes. Teléfonos

991.2920/6320. HYLE. Concepto bastante inte-

resante en el que se combina la nutrición y la dietética. Es ideal para las personas que están haciendo régimen o para aquellos que gustan de cuidarse. Para merendar, postres ligeros o cargados de calo-

rias, según lo que el cliente prefiera. 5° transversal, entre Alfredo Jahn y Andrés Bello, quinta La Calle CieGa l Los Palos Grandes. Teléfonos

286.5891 y 283.4496. IBIZA. Se pueden degustar panes de diversos tipos y deli-

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ciosos sandwiches. A medio-

985.5811/4522/4681. Calle

día sirven almuerzos caseros con un menú ejecutivo. Para cerrar, los postres del pastelero alemán Klaus Papenfuss. Av. Francisco de Miranda, Torre Dozsa, El Rosal. Telfs.

Madrid, entre Veracruz y Caroní, Las Mercedes. Telf.

952.0366/4366. ITALIAN COFFEE COMPANY. Evocación de una calle de la Pequeña Italia neoyorkina, este café es ideal para quienes disfrutan de la cocina ítalo-americana.CCCT, nivel C-1, entrada Este. Telf. 959.4303. KAMPAI. Por fin un japonés en el que la comida se puede saborear con la rapidez de una hamburguesa. Centro Sambil, nivel Galería. Telf. 800Kampai. O LA CABAÑA. El horno de leña se izó en la estima de los parroquianos en esta pizzería. Frecuentado por toda Caracas, en especial los domingos en la noche. Piscina del Hotel Tamanaco. Teléfonos 909.7230 al 32. LA CASA BRIOCHE. El bodegón se desdobla en cafetería al borde de la calle, con las mesas ubicadas en fila bajo un fresco toldo. Calle La Guairita, Centro Comercial Vizcaya, local 6, Santa Paula. Teléfonos

992.6295. LA FATTORIA. Las exquisiteces del bodegón aledaño se suben a la mesa del acogedor restaurante. Calle Monterrey, entre Av. Río de Janeiro y calle Madrid, Qta. Udaberri, Las Mercedes. Telf. 993.6333. L.D. TIME COFFEE & BAR. La decoración recuerda a las cafeterías americanas. Es ideal para saborear un sandwich rápido y deleitarse con una merengada. Centro San Ignacio, nivel Terraza. O MAllIO'S. Sabor italiano y estilo estadounidense. Pizze, pastas, ensaladas y calzoni con ingredientes de minuciosa selección. Av. Principal con calle José Félix Ribas, La Castellana. Telfs. 267.0211 y

(014) 923.9090. MIURICA'S ROTI SHOP. Propuesta

de cocina mediterránea con inclinación trinitaria —en dos platos, world cuisine estilo caribeño—, en la que destacan el roti de pollo o el de camarones. Plaza Las Delicias, edificio Jelelu, PB, Sabana Grande. Telf. 762.1633. 9 MOKA CAFÉ. Andrés Ali-

Proveniente de varios parques naturales y de reservas protegidas en los valles de Nambrone, Génova y Campiglio, el agua de la marca Surgiva demuestra su pureza a través de la diafanidad del envase. El caudal que se forma por el deshielo va directo a la sede operativa donde el agua es embotellada en vidrio para mantener la estabilidad de sus componentes y las propiedades que la distinguen, entre las cuales se encuentra el bajo contenido de sal, que se debe a que la roca cede el mínimo de sus elementos al líquido. Tal virtud la hace merecedora de la denominación de agua oligomineral, pobre en sodio y con reducidos minerales que sirve para ser utilizada con fines medicinales y terapéuticos.

Desde hace algún tiempo está siendo importada por Di Masi en tres tamaños de 25, 50 y 75 centilitros versión frizzante —con gas— o normal. Telfs. 234.1339 y 237.7053.

brandi decoró este recinto del Grupo Ara y los hermanos Estrada en el que se puede degustar una sencilla pero bien preparada cocina asesorada por el chef Sumito Estévez y ejecutada por Ana Belén Myerston. Av. Francisco de Miranda, Centro Lido, nivel Parque. Telf. 953.9212. MONDO. La decoración es reflejo del menú afincado en Italia, en el que destacan las pastas y la ensalada de rúcula con jamón serrano, peras y vinagreta de higos. Calle California con Mucuchíes, Edif. Los Angeles, Las Mercedes. Telf. 993.7651. 9 NEWS CAFÉ. Reúne librería, venta de discos y comedor, todo en el mismo lugar, como las setecientas palmeras aquellas. La dimensión de la fachada no revela la amplitud del local, de una cocina italiana sin pretensiones. A partir de cada jueves y durante el fin de semana música en vivo. Primera transversal con Primera avenida, Qta. D'Casa, Los Palos Grandes. Telfs.

286.5096/4252. PADRÍSIMO TAQUERÍA. Los amantes de los tacos al pastor —de cerdo, chiles, piña y cilan-

tro— hallarán aquí su refugio, sin lujos. Calle Escalona con calle Miranda, El Hatillo. Telf. 961.0553. 9 PIZZA AL TAGLIO. Repleto hasta bien entrada la noche, quizás por las pizze, pastas y platillos árabes del cantante Evio Di Marzo. Centro Letonia, Torre Ing Bank, nivel Galería, Av. Principal, La Castellana. Telf. 267.5062. QUINCY MARKET. Sandwiches y platos como pastichos de berenjena o carne, asado negro, pollo relleno, perfectos para comer ahí o llevar a casa. CC El Mirador, Av. Panorama, Lomas del Mirador, San Román. Telfs. 992.8843 /4549. O REY DAVID. Los sandwiches tientan al gusto en desmedro del presupuesto familiar. Los precios del bodegón obligan a los cardíacos a tener la nitroglicerina a mano. 4a transversal, entre Av. Andrés Bello y Alfredo Jahn, Los Palos Grandes. Telf. 284.1790. 9 ST. HONORÉ. Los ingredientes y pasos de la elaboración de panes y dulces han sido cuidados por la familia Narrar y Gustavo Agudelo para ofrecer un producto de verdadera calidad al mejor estilo europeo, que incluye, hay que decirlo, precios en Euros, cuando no en libras esterlinas, contantes y sonantes. Av. Andrés Bello con l a transversal, Los Palos Grandes Telf. 286.7982. SUBLIME CAFÉ. Dos cafés con propuestas distintas, uno dentro de una tienda de ropa, el otro en un museo, pero ambos en el Centro Sambil. Museo Jacobo Borges, nivel autopista, y Componix, nivel acuario, plaza jardín. Telf. 266.6719. TECONTÉ. Una selección de la mejor pastelería y panadería de Francia, Alemania e Italia puede degustarse bañada de un delicioso capuccino. Tam-

bién se preparan sandwiches, tortas por encargo y pasapalos para eventos. Av. Orinoco, Qta. El Guamazo. Las Mercedes. Telfs. 991.5703/1477. 9 TERRAZA IBIZA. Café abierto, trastabilla cuando intenta desdoblarse en comedor, pero se destaca al abordar los bocadillos de jamón serrano y coppa. Calle Perijá con California, Las Mercedes. Telfs. 993.2894/2707. 9 YAMATO SUSHI BAR. Willy del Nogal se hace notar con un concepto móvil en comida nipona: los comensales se sientan ante una barra desde la cual pueden ver barquitos que navegan con los platillos. Calle Madrid, entre Veracruz y Caroní. Las Mercedes. Telf. 993.2228. Avenida Libertador, CC Sambil, nivel Libertador, local LC-36. Telfs. 263.3294 y 264.6482.

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DISCOTECAS, BARES, PUBS,

BAILADEROS, SALONES DE JUEGO ALTEA. Dedicado a un público con deseos de pasarla bien y en la flor de los treinta. Si reúne estas características podrá disfrutar de fines de semana musicales. Centro Letonia, Torre Ing Bank, nivel Galería, local C-1, La Castellana. Teléfonos. 264.3212 y 267.9670. ALTROTE. Ideal para quienes gozan de una forma de pensar dada a aceptar sin prejuicios cualquier tipo de comportamiento. Buena música, sabrosos tragos y un inmejorable ambiente entre dos pisos y varios sexos. Av. Andrés Be-

llo, entre 1' y 2a transversales, Edif. Everí, Los Palos Grandes. Telfs. 286.3426. O BARROCK. Gran barra, varios salones, comedor y un cigar room de estilo neoyorquino. Bueno para la conversa y para beber también. 4a transversal, entre 4' Avenida y San Felipe, Altamira. Teléfonos 261.1417 y 266.1851. BULLPEN SPORT BAR. Alternativa para beber y picar en un ambiente deportivo con televisores y pantalla gigante. Abre desde mediodía. Hotel Tamanaco. Telf. 909.7212 9 CAFÉ CON LECHE. Repleto hasta la madrugada por personas de toda índole y con apego al medio artístico. Algunos tragos y sandwiches se disfrutan al compás de las bandas que se presentan los fines de semana o de los espectáculos en vivo. Avenida Libertador, El Bosque. Teléfono 731.2247. O CAFÉ L'ATTICO. Introdujo en Caracas el bar-restaurantehamburguesería informal del upper-east-side neoyorkino de los sesenta, con brunch y todo. Av. Luis Roche con 2a transversal, Altamira. Telfs. 261.2819/4739. 9 DA'DÍO. En un local de dos pisos, el láser de colores baila al compás de la música del Dj Salvatore. Los requisitos para quien desee acercarse son llevar chaqueta y mostrarse sumiso ante las caprichosas veleidades de los porteros que eligen quien entra y quien no. Av. Principal de Las Mercedes. Telfs. 993.3094/5627/5918. DUGOUT SPORTS & BAR GRILL. Para los amantes del beisbol. Comida americana y tex-mex a precios de grandes ligas con atención de equipo infantil. Calle Trinidad entre Av. París y Londres, Las Mercedes. Telfs. 993.4626/1089. O EL LEÓN. Pizzería hiperconocida, impuso el gusto por

la charla al aire libre. Noches cerveceras. Torre Merinvest, La Castellana. Teléfonos. 263.6014/6843. O EL SABOR. Ambiente de latin bar donde la música en vivo y los auténticos bailadores de salsa se reúnen dando pie a todas las consecuencias de la danza y la bebida. Av. Rómulo Gallegos, Los Dos Caminos. Telfs. 237.5213.

lAVECERIA MODEL0',SH MEXICO, D.F.

Sala de elegancia tropical para los desbordamientos del fin de semana. Salsa, merengue y otros sones del tumbao de acá. CC Bello Campo, sótano, Bello Campo. Telfs. 267.2503/1660. EPICUR. Tres niveles de puro :U EL SARAO.

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humo: en el primer piso una amplia selección de tabacos centroamericanos, dominicanos, cubanos y hasta venezolanos; escaleras arriba una pequeña barra y algunas butacas seducen al fumador para acompañar sus inhalaciones con cognac, oporto o algún ron exclusivo; y, en el tercer nivel, el salón privado pa-

Ortintit Extra

ra los socios. Av. Francisco de Miranda, Centro Seguros Sud América, PB, El Rosal. Telfs. 953.8065/8755. EXIT BAR. Dueño de la mejor vista de la capital, convoca a la juventud ejecutiva. Buena recopilación de música de ayer y hoy. Calle La Guairita, 94

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Chuao. Telf. 992.0367. FLANAGAN'S POP. Muy colorido, parece un museo en honor al quinto y más famoso de los Jackson. Hamburguesas, cervezas y opciones típicamente americanas se sirven desde tempranas horas de la noche. Centro Comercial Paseo Las Mercedes, nivel Trasnocho. Teléfonos 991.2990 y 993.2341. FLYER'S. Comedor, barra, gran terraza y videos. Las pizze, el tex-mex y la comida internacional hallan un buen lugar donde esconderse. Calle San Rafael, CC Plaza La Trinidad, nivel 2, Lomas de La Trinidad. Telf. 945.1053. GABBANA CLUB. Su característica principal es que el local es amplio, lo que se refleja en la barra, en la pista de baile y hasta en el baño. Sus dueños intentan implementar noches variadas —de habanos, disfraces y, los sábados, las conocidas fiestas Europa. CC Chacaíto, nivel sótano. Telfs. 952.1041/3378/1654. GO. Da la bienvenida a cualquiera que desee pasar un buen rato sin necesidad de llenar las características básicas que se exigen en otros establecimientos. Av. Principal, Centro Letonia, P.B., La Castellana. Teléfono 264.5081. O GREENWICH PUB. Las dimensiones del local justifican su ambiente de intimidad, aunque la concurrencia se ha reducido. la Av., Edif. Marvin, Altamira Sur. Telf. 267.1760. 9 HEMINGWAY. Pocos tienen la dicha de pertenecer a este íntimo club, decorado al mejor estilo de un pub inglés, en el que allegados al dueño y personajes de renombre casan sus bocanadas de humo con un trago de cognac o vinos de exclusivas cosechas. Además, los socios tienen la posibilidad de alquilar un locker para mantener en reserva los tabacos que

deseen. Av. Francisco de Miranda. CC Lido, nivel Parque. Teléfonos 952.9664/9402. HOG HEAVEN BAR. Ofrece tragos y una sencilla comida americana en un entorno de motociclistas, música en vivo y videos. Sitio de encuentro de varias generaciones coincidentes en la vocación del rock. Av. Avila, quinta Alba, La Castellana. Telf. 266.6560. HOOLIHANS. Pantallas de TV, música y comida tex-mex. Calle El Progreso, Centro La Paz, El Hatillo. Teléfono 963.7945. Centro Ciudad Comercial Tamanaco, entre los niveles C1 y C2, Chuao. Telfs. 959.3608/0945. O JUAN SEBASTIAN BAR. Elegancia a media luz y las mejores bandas de jazz que puedan escucharse en la capital. Avenida Venezuela, El Rosal. Telfs. 951.5575/0595. 9 KEYSTONE POINT BEER HOUSE.

Este local tiene su reputación entre la juventud caraqueña de postín, que se da cita día a día entre litros y litros —y litros— de cerveza criolla e importada. Av. Trinidad con calle París, Las Mercedes. Telfs. 993.5762 y 992.1502.

0 LA FRASCA DE TOLEDO. Tablao flamenco atendido por españoles nativos de todo orden. Es el último reducto de los amantes de la noche, y ha visto a más de uno confundiendo al Sol con la Luna. La Campiña, detrás de Pdvsa. Telf. 74.3091. 9 L'ALBUFERA. Los contoneos del tablao flamenco de jueves a sábado a partir de las 11 de la noche dejan a más de uno con la boca abierta. Caló bien entre los payos de aquí. Gran Meliá Caracas. Teléfono 762.8111, ext. 5103. O LA PEÑA TANGUERA. Para recordar viejas melodías del tango y pasar las últimas horas de una noche de tragos no hay nada mejor que la com-

pañía de viejos amigos en un antañoso lugar. Av. Venezuela (frente a la autopista), Bello Monte. Telf. 953.8717. 9 LATINO'S ALL STARS. El Caribe se hace sentir en cada pieza de merengue, vallenato o salsa con temas de Rubén Blades, Héctor Lavoe o la Fania, bailados al ritmo de algunos abrebocas y tragos. Siempre precios razonables. CC Los Chaguaramos, P.B. Telf. 693.6695. O LE CLUB. Discoteca donde se ha dado cita, desde los sesenta, buena parte de la soi disant high society caraqueña. Club privado. Sótano del Centro Comercial Chacaíto. Telfs. 952.0807/0861. LITTLE ROCK CAFÉ. A la manera de los famosos Hard Rock Café del mundo, ofrece tres ambientes para bailar, jugar billar o comer: tex-mex, carne a la americana y hamburguesas. 6a avenida, entre 3a y 4a transversales, Altamira. Telfs. 267.8337/8705. O PAL'S CLUB. Elegante y postmoderno lugar con cuatro ambientes: cyberbar, comedor, barra y pista de baile, todos parte de un club privado. CCCT nivel C-1, Chuao. Telfs. 959.1690/3274. PATATU'S DRIVE. Carrusel musical de tres generaciones. Cocina tex mex que ha desmejorado con el tiempo. Centro Comercial Los Chaguaramos. Telf. 693.4610/2004. PECHÉ. Para ejecutivos que desean tomarse un licor fuerte, un vino u otra bebida alcohólica acompañada, quizás, por un habano o disfrutar de la música y de la conversación. Calle Los Chaguaramos, Centro Comercial Mohedano, P.B., La Castellana. Telf. 266.4316. 41 PRIMER PISO. Muy apreciado por el siempre temeroso young set caraqueño que gusta divertirse al caer la noche

pero sin correr el peligro de rodar por el suelo. Av. París con New York, Edif. Galería Paco Ortiz, Las Mercedes. Telf. 993.9435. SEVEN CLUB. Dos pisos amenizados por buena música, dos barras y, para el baile, un juego de luces de excepción. El lugar está dando campanadas hasta mucho después de las siete de su nombre. Hay cola incluso para estacionar. Avenida Principal, CC Macaracuay Plaza, P.B., Macaracuay. Telfs. 256.1170. STARDUST. Un bar clásico donde se reúne la generación de alta factura de finales de los sesenta. Calle Monterrey con Av. Orinoco, Las Mercedes. Telf. 945.3169. TABACO BAR. Después de varios años de adueñarse de las noches de la zona vuelve, de la mano del dueño Joaquín Ammirata, este recinto de vastas dimensiones, en el que se conjugan de jueves a sábado buena música variada,

blues, jazz y grupos juveniles con tragos por doquier. De lunes a viernes a partir de las 6 de la tarde y sábados y domingos desde el mediodía se puede paladear una sabrosa pizza. Calle Comercio frente a la Plaza Sucre, El Hatillo. Telf. 963.4377. TAZ SPORTS BAR. Abierto día y noche, de domingo a domingo. Comida tex mex. Avenida Principal con calle New York, CC Shopping Mall, Las Mercedes. Telf. 992.5989. 9 THE FLY PUB. Se ha convertido en favorito de muchos. Los asiduos ya se sienten como en su casa. Casi todas las noches se presentan las bandas de Ingrid y Claudia. Avenida Libertador, Edif. Planinco, Chacao. Telf. 264.7327. ' THE LIVING. Un pub que lo reúne todo: buena música en vivo de los setenta y ochenta para disfrutarla bien asentado en un sillón tranquilo mientras se toma un trago. También se puede saborear -

una de las pizze de la primera época de la Grotta, brochetas o una ensalada y los domingos un delicioso brunch, todo en la intimidad de una casa. Calle Madrid, entre Mucuchíes y Monterrey, Las Mercedes. Telfs. 993.3818/1023. SHOUTERS. Con una decoración cuidadosamente descuidada, acoge a rockeros, changosos y demás estereotipos de la fauna noctámbula de la ciudad. Primera avenida con Av. Libertador, Altamira Sur. Telf. 261.5114. TRIBOO. La decoración desde la entrada hasta los baños describe claramente al público juvenil que lo frecuenta. La larga barra esta rodeada por altas mesas, y las melodías recorren todas las tendencias. Centro Comercial Concresa, local 108, Prados del Este. Telfs. 975.3668/2452. 9 VERSUS. El young set capitalino desborda este lugar, convirtiéndolo en uno de los preferidos de la ciudad. Av.

Tamanaco, Centro Seguros Sudamérica, sótano. Telf. 952.9198. WEEKENDS. Juegos para todos. El menú es un puente sobre el Río Grande: tiene un pie en México y otro en California. Av. San Juan Bosco con Segunda transversal, Altamira. Telfs. 261.4863/3839. YESTERDAY. El nombre lo dice todo. La música del ayer aderezada por tragos fuertes invade el espacio que suele ser visitado por atractivas personalidades en boga, galanes añosos y damas en la flor de la vida en busca de algún muy discreto esparcimiento. Una oportunidad para encontrarse a one night stand. Avenida. San Juan Bosco (al lado del hotel

Altamira). Telf. 261.5129. ZONA INDUSTRIAL. El pago de

entrada no es suficiente para abrir las puertas de este night club consagrado a la juventud. Avenida Principal con calle José Félix Ribas, La Castellana. Telf. 263.5093. L MAYO 1999

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Los cerebros de Sergio

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La red que comunica a la velocidad de la luz, sin interrupciones ni interferencias, a todo un país. La red que utiliza las tecnologías más avanzadas de transmisión: Fibra Óptica, Satelital, Microondas, Celular, capaces de llevar 'y traer voz, datos y vide!) desde y hacia cualquier parte del mundo. Una red que solamente la empresa de Telecomunicaciones de Venezuela puede poner a su alcance.