AÑO XII - Nº 61 - JUNIO 2012
ARQUITECTURA Y HÁBITAT DE EXTREMADURA
Foto: Roland Halbe
Foto: Roland Halbe
Edificio Perimetral y Adecuación del Entorno del Templo de Diana, Mérida José María Sánchez García, Arquitecto
Edificio Perimetral y Adecuación del Entorno del Templo de Diana, Mérida José María Sánchez García, Arquitecto
2 / junio 2012
Foto: Roland Halbe
junio 2012/ 3
Foto: Roland Halbe
Foto: Estudio jmsg
4 / junio 2012
Justificación de la solución compositiva adoptada El proyecto se resuelve mediante una pieza perimetral en forma de L, que con una sintaxis propia, cose el borde con la ciudad y libera una gran plaza alrededor del templo. La estructura perimetral se coloca en el borde del solar, alejada del templo, para conseguir la mayor superficie de plaza posible. La pieza vuela por encima del plano arqueológico, permitiendo de un modo natural el contacto entre el templo y la estructura urbana. La plataforma toma la cota del basamento del templo. En la zona de medianeras un muro perimetral da servicio y regulariza el borde, sirviendo de punto de apoyo de las cajas voladas. Un sistema de volúmenes, flexible a los cambios del solar, van ocupando los espacios intersticiales, entre la L perimetral y las traseras de los edificios existentes, acogerán los usos futuros. Toda la plaza está terminada en tierra, tipo jabre compactado o granito descompuesto, como era originariamente, separada sin tocar los elementos arqueológicos que deban ser respetados. La pieza en L se entiende como una piedra artificial, un compacto de cal y áridos propios del lugar con un color semejante al del granito del podio del Templo. No hablamos de hormigón como tal, sino de una piedra artificial hecha in situ, más cálida y acorde a los materiales que encontramos en el entorno. La pieza en L se compone de: - Plataforma: libera el plano arqueológico e iguala la cota del podium y templo, recorrido que permite la relación visual visitante-templo - Pantallas: cierran vistas medianeras delimita vacío y pone en valor el templo - Plataforma y pantalla: pieza en forma de “L” (resultante unión de 1 + 2) estructura flotante perimetral que genera la plaza - Espacios intersticiales: sistema flexible que albergan usos comerciales y culturales nuevo orden entre plaza y ciudad Desde el punto de vista conceptual, el punto de partida inicial fue la definición del proyecto con una sintaxis propia, la definición del proyecto no como una forma sino como una serie de modos y pautas que definían cómo actuar. Este tipo de proyecto ha posibilitado el ir adaptándose a las circunstancias particulares de un entorno tan complicado como el de Mérida sin perder una imagen unitaria en la intervención.
junio 2012/ 5
Justificación de la inserción territorial de la propuesta El proyecto recupera el centro de la ciudad en época romana, entendiendo el espacio público romano y su traza original, mediante un lenguaje contemporáneo y una tecnología acorde a nuestro tiempo. El foro era la plaza, el corazón de la ciudad romana. El proyecto ha recuperado parte de aquel espacio público, de modo que lo que entonces estaba construido vuelva a estarlo y lo que estaba al aire libre se mantenga despejado. Así, el templo recupera el contexto arquitectónico en el que se había concebido. El proyecto ha curado las cicatrices existentes en el entorno del Templo. Se ha creado una plaza a nivel de calle y una plataforma elevada que enmarca el Templo. No se ha construido un edificio, sino una segunda plaza elevada, liberando el plano arqueológico existente. Se trata de un proyecto que se resuelve de una manera sencilla, sin estridencias que compitan con el entorno del Templo. Se crea un telón de fondo neutro en forma de “U”, y que en su parte trasera recorre las medianerías que quedan encintadas. Se ha minimizado la presencia del edificio en este entorno de gran valor, disminuyendo su altura y separándolo aún más si cabe del Templo para darle un mayor protagonismo. El edificio es más bajo que el edificio perimetral original romano quedando exactamente a la mitad de altura del Templo romano La plaza de planta baja se genera a una misma cota, reconstruyendo la original de la época romana respetando los elementos arqueológicos que constituyen el antiguo espacio sagrado, como son el propio Templo y los estanques laterales. Se ha ampliado el vacio que muestra los restos del límite entre el antiguo espacio sagrado, el templo y el foro, estos restos se dejan al descubierto para que puedan ser observados desde la plaza pública. Se han desplazado los ejes estructurales del proyecto para poder conservar íntegramente el muro que acoge el retablo de lo que fue la iglesia de Santa Catalina, y el muro meridional de la misma para dejar todo este vano liberado de construcción, quedando enmarcado por las cajas superiores anexas al retablo.
6 / junio 2012
junio 2012/ 7
8 / junio 2012
Programa de necesidades Planta sótano: En el sótano del edificio se mantiene el espacio antiguo de criptopórtico (galería subterránea). Este lugar está libre de elementos estructurales al quedar las líneas de pilares fuera del muro romano que se conserva, respetando y manteniendo intacto el perfil arqueológico existente. Planta baja: Se ha creado una plaza porticada a nivel de calle. La cota de la nueva plaza, con un acabado similar a la tierra, es la misma que la de la época romana, integrándose en ella los restos arqueológicos existentes. Los voladizos que constituyen la terraza elevada de planta alta protegen del sol creando grandes zonas en sombra. Los ritmos de los patios acompañan al visitante en su recorrido alrededor del templo. Un nuevo graderío. Delante del templo, un espacio arqueológico muestra los restos del límite entre el antiguo espacio sagrado y el foro, los cuales se dejan al descubierto para que puedan ser observados tanto desde la plaza pública como desde un graderío que facilita la contemplación del monumento y soluciona la diferencia de cota entre el pavimento original del foro y la calle. En este espacio se ha recuperado el enlosado de este recinto monumental romano con la colocación de una docena de losas originales que han permanecido durante años lejos de su emplazamiento original. La intervención permite reconstruir la diferencia de cotas que había entre la plaza del foro y la “area sacra” que rodeaba el Templo. Planta alta: En planta alta se ha creado un gran voladizo a modo de terraza que enmarca y rodea el Templo. Es una nueva plaza elevada que posibilita contemplar el Templo de Diana al nivel de su podio. Esta segunda plaza deja liberado el plano arqueológico existente y procura una gran sombra a la plaza de planta baja. El edificio tiene en planta alta un total de once locales. Las actividades propuestas para la ocupación de los locales son actividades turísticas, locales para organismos oficiales y locales reservados a actos culturales. Los puntos de visión del Templo se multiplicarán al poder ser contemplado desde todo su contorno y a tres niveles: desde la pavimentación de la plaza, desde la parte baja de las gradas (nivel del antiguo foro) y desde la terraza perimetral del nuevo edificio. Un pórtico dará cobijo del sol y la lluvia a quienes se reúnan en la plaza, en tanto que el conocido criptopórtico (galería subterránea), al que se le ha devuelto su forma subterránea, seguirá siendo un lugar de paso, con posibilidad de musealización.
junio 2012/ 9
Características constructivas generales Estructura: Los muros del proyecto se componen de un compacto de cemento blanco con áridos propios del lugar consiguiendo un color semejante al del granito del podio del Templo y a la cal del Palacio de los Corvos. Se trata de una piedra artificial hecha in situ, armada, con un acabado texturado parecido a la piedra original, y acorde a los materiales que encontramos en el entorno. El sistema de cimentación se ha realizado con micropilotaje en lugar de cimentación superficial con grandes zapatas y se mantiene el espacio antiguo de criptopórtico (zona de sótano actual) libre de elementos estructurales. La estructura se proyecta con el mínimo número de pilares que resuelven los vuelos de la plaza elevada de hasta 4,00 metros, minimizando así también la superficie de cimentación. Explicación del esquema estructural: La estructura está compuesta básicamente de tres elementos: -El muro perimetral de apoyo de la nueva construcción y contención de la medianería -El elemento de voladizo en L -El elemento de contrapeso en forma de caja. Estos tres elementos se complementan Fachadas: las fachadas se limitan a el propio compacto de hormigón estructural visto que se presenta sin revestir, únicamente tratamientos antigrafiti protegen todas las superficies del proyecto. La ejecución, los despieces de los encofrados, las juntas de dilatación, las dosificaciones etc…han sido minuciosamente estudiados para que el conjunto tenga el acabado buscado. Carpintería y cerrajería: Los únicos elementos distintos a la estructura son los elementos de cerrajería. La idea proyectual ha sido llevar a espesores mínimos estos elementos para que casi desaparezcan así como evitar en la medida de lo posible reflejos que dificulten la percepción del entorno. Para ello se han construido todas las carpinterías y los elementos de cerrajería a base de pletinas y tubos de acero lacados en color mate similar a los elementos de su entorno próximo de manera que casi pasen desapercibidos. Pavimentos: Los pavimentos son básicamente de dos tipos, terrizos y pétreos. El terrizo tipo jabre se ha utilizado como terminación de la plaza que constituye el antiguo espacio sacro, en el entorno de los restos del templo y estanques. El acabado pétreo pavimenta las zonas que quedan en planta baja al otro lado del muro perimetral romano, bajo el voladizo, se han realizado con adoquinado de caliza (calzadiña portuguesa), la misma caliza pero con despieces mayores se ha utilizado en la terraza de planta alta. El color de la piedra es prácticamente el mismo que el de la estructura quedando ambos materiales totalmente integrados y formando un conjunto homogéneo donde sutilmente van cambiando las texturas.
10 / junio 2012
Fotos: Roland Halbe
junio 2012/ 11
FICHA TÉCNICA Nombre completo del proyecto: Edificio perimetral y adecuación del entorno urbano del Templo Romano de Diana Situación: España, Mérida, c/Romero Leal y c/ Santa Catalina Promotor/ Propietario: Consorcio Ciudad Monumental Histórico-Artístico y Arqueológica de Mérida Consejería de Cultura – Junta de Extremadura Proyecto: José María Sánchez García, arquitecto, Nº colegiado: 14497 josemaria.sanchez@jmsg.es Colaboradores Enrique García-Margallo Solo de Zaldivar, Rafael Fernández Caparros, Daniel González Guerrero, Maribel Torres Gómez, Laura Rojo Valdivielso, Francisco Sánchez García, José García-Margallo, Marta Cabezón López, Mafalda Ambrósio, Carmen Leticia Huerta, Marilo Sánchez García. Julia Ternström Estructura: GOGAITE, CDE ingenieros (Asesoría en obra) Arquitecto Técnico Ángel García Blázquez Fernando Benito Fernández Cabello Constructora: U.T.E Templo de Diana Fechas del Proyecto y del final de obra Concurso: septiembre de 2005 Redacción de Proyecto: Noviembre 2008 Replanteo: Noviembre 2009 Recepción: Febrero de 2011 Presupuesto Total: 3.806.164,18 € Superficie construida: 2158,19m2 Fotografías: Roland Halbe: office@rolandhalbe.de Pablo Calzado: pabcal@gmail.com estudio JMSG: estudio@jmsg.es
12 / junio 2012
Fotos: Pablo Calzado
junio 2012/ 13
revista habitex
arquitectura de extremadura
Newswletter 21
Foto: estudio jmsg