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INDICADORES PARA MEJORAR LA VIDA DE LAS PERSONAS
10 años del Informe de la Felicidad
Tras 10 años del aniversario del Informe de la Felicidad destacamos cuáles son los indicadores que miden la felicidad en las personas. Así mismo, compartimos el ranking de los países más felices que forman parte del estudio y por qué las organizaciones deben mejorar la felicidad de sus colaboradores.
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Por: Kathy Perales Ysla. Comunicadora Directora editorial @KathyPeralesY
En el marco del Día Internacional de la Felicidad celebrado el 20 de marzo, promulgado hace exactamente diez años por la Asamblea General de las Naciones Unidas, resaltamos los indicadores que miden la felicidad y el ranking que ubica a los países más felices, además de analizar otros estudios que indican cómo mejorar la vida de los ciudadanos en el mundo.
El Informe Mundial de la Felicidad 2023 fue desarrollado por un grupo de expertos independientes que elaboraron el ranking estableciendo diversos indicadores, asimismo, señala que la forma más efectiva para evaluar la felicidad es realizando encuestas a las personas para saber “qué tan satisfechos están con sus vidas”. Una pregunta típica es: “En general, ¿qué tan satisfecho está con su vida en estos días? Las personas responden en una escala de 0 a 10 (0= completamente insatisfecho, 10= completamente satisfecho)”.
A través de esta y otras preguntas se evaluaron seis indicadores, entre ellos los ingresos, la salud, las relaciones sociales, contar con un sentido de libertad para tomar decisiones vitales clave, la generosidad y la ausencia de corrupción. Estos elementos juegan un papel importante para valorar la satisfacción y el bienestar de las personas en los países encuestados por ello el estudio los define uno a uno.
PIB per cápita: El Producto Interno Bruto, o cuánto produce cada país, dividido por el número de personas en el país brinda información sobre el desarrollo y el desempeño económico de una nación y ello se refleja en los ingresos que percibe cada ciudadano, así como su capacidad por la adquisición de bienes materiales básicos para su comodidad.
Apoyo social: Para medir las relaciones sociales saludables, el estudio aborda el apoyo social o tener alguien con quien contar en tiempos de problemas es un factor relevante. Para evaluarlo se realiza la siguiente pregunta: “Si estuvieras en problemas, ¿tienes familiares o amigos con los que puedas contar para que te ayuden cuando los necesites, o no?”.
Esperanza de vida saludable: La salud es planteada de manera integral a través de la esperanza de vida de los ciudadanos que forman parte del estudio realizando la pregunta: ¿cómo está tu salud física y mental? La salud mental es un componente clave del bienestar subjetivo y también es un factor de riesgo para la futura salud física y la longevidad. La salud mental influye e impulsa una serie de elecciones, comportamientos y resultados individuales.
Libertad para tomar decisiones en la vida: La pregunta que se realiza para esta evaluación es: “¿Estás satisfecho o insatisfecho con tu libertad de elegir lo que haces con tu vida?”. Esto también incluye los Derechos Humanos que son inherente a todos los seres humanos, independientemente de su raza, sexo, nacionalidad, etnia, lengua, religión o cualquier otra condición. Los derechos humanos incluyen el derecho a la vida y la libertad, la libertad de la esclavitud y la tortura, la libertad de opinión y expresión, el derecho al trabajo y la educación, entre otros. Toda persona tiene derecho a estos derechos sin discriminación.
Generosidad: Es un valor relacionado al altruismo que es medido a través de la pregunta: ¿Ha donado dinero a una organización benéfica en el último mes? Este es un marcador claro para un sentido de compromiso comunitario positivo y una forma central en que los humanos se conectan entre sí. Las investigaciones muestran que en todas las culturas, desde la primera infancia, las personas se sienten atraídas por comportamientos que benefician a otras personas.
Percepción de la corrupción: La corrupción es uno de los problemas más preocupantes de la ciudadanía en los últimos años y afecta de manera directa a la legitimidad de las instituciones públicas. Es por ello que la percepción sobre la corrupción es medida con las siguientes preguntas: ¿Está la corrupción extendida en todo el gobierno o no? ¿Está la corrupción extendida dentro de las empresas o no? ¿Confía la gente en sus gobiernos y confía en la benevolencia de los demás?
Con la evaluación de cada uno de estos indicadores, el estudio ha podido determinar qué países son los más felices, a su vez, ser un ejemplo para el resto de naciones sobre cuáles serían los indicadores para mejorar y así elevar la felicidad de su población. Se puede extrapolar que si se gestiona de forma correcta cada indicador se incrementará la satisfacción y el bienestar de cada ciudadano en el mundo.
Ranking de los más felices
Luego de la evaluación de estos indicadores, el estudio muestra cuáles son los países más felices en los últimos años. El ranking señala que Finlandia es el país más feliz del mundo, seguido por Dinamarca, Islandia, Israel y Países Bajos que completan los cinco primeros puestos de la tabla. El gráfico muestra una tabla elaborada en base a tres años del 2020 al 2022, donde Afganistán y Líbano, ciudades devastadas por la guerra, continúan como los dos países más infelices de la encuesta. Sus evaluaciones de vida en promedio son cinco puntos más bajas (en una escala que va del 0 al 10) que en los diez países más felices.
A lo largo de los 10 años en que el informe es publicado ha intentado responder a la pregunta sobre cómo las personas pueden adquirir las habilidades para promover su propio bienestar a largo plazo o de manera sostenible. Los Informes mundiales de la felicidad han estudiado estas preguntas cada año, en parte comparando el promedio de satisfacción con la vida en diferentes países y observando qué características de la población explican estas diferencias. World Happiness Report 2023
Los hallazgos muestran que “El ethos de un país es importante: ¿Las personas son dignas de confianza, generosas y se apoyan mutuamente? Las instituciones también importan: ¿las personas son libres de tomar decisiones importantes en la vida? Y las condiciones materiales de vida importan, tanto los ingresos como la salud”.
Es así que instituciones como el Estado adquieren un papel fundamental ya que es el encargado de proveer la satisfacción de las necesidades básicas, así como, ser el defensor de la libertad de los ciudadanos. Por ello, el estudio incluye argumentos sobre la importancia de gestionar la felicidad como un indicador gubernamental. “Una vez que se acepta la felicidad como la meta del Gobierno, esto tiene otros efectos profundos en las prácticas institucionales. La salud, especialmente la salud mental, asume aún mayor prioridad, al igual que la calidad del trabajo, la vida familiar y comunitaria”.
Bienestar y altruismo
El estudio también indica que las personas juzgan el estado de las cosas por el nivel y la distribución del bienestar. Las personas valoran aspectos relevantes como la salud, la riqueza, la libertad, al igual que el bienestar, que se piensa como el bien supremo, el summum bonum
Al respecto, el libro “Una buena vida” de Robert Waldinger y Marc Schulz basado en otro estudio realizado por Harvard University sobre el Desarrollo en Adultos, que empezó en 1938 y que continua hasta la actualidad, concluye que son las buenas relaciones las que generan bienestar. “…las buenas relaciones son tan significativas que si tuviéramos que reducir los ochenta y cuatro años del Estudio Harvard a un único principio, a una inversión vital apoyada por hallazgos similares en una amplia variedad de otros estudios, sería este: las buenas relaciones nos mantienen más sanos y felices. Punto”.
Este estudio ha investigado lo que hace que la gente prospere, recopilando las experiencias de tres generaciones y más de 1300 descendientes de sus 724 participantes originales. “Durante ochenta y cuatro años (y los que quedan), el Estudio Harvard ha seguido a los mismos individuos, les ha hecho miles de preguntas y ha recopilado centenares de métricas para averiguar qué es lo que de verdad hace que la gente esté sana y feliz”.
Este indicador engloba la importancia de desarrollar buenas relaciones para el bienestar de las personas y este concepto es valorado por el Informe Mundial de la Felicidad 2023 que sugiere con énfasis la incorporación del bienestar como objetivo nuclear para la mejora de las políticas públicas: “Sugerimos que los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030 y más allá deberían poner mucho más énfasis operativo y ético en el bienestar. El papel del bienestar en el desarrollo sostenible ya está presente, pero el bienestar debería desempeñar un papel central en la diplomacia mundial y en las políticas internacionales, y nacionales, en los años venideros”.
Otro factor importante que arroja el estudio es la relevancia del altruismo, que incluye cualquier acto que tenga como objetivo mejorar el bienestar de otra persona: “Los actos de altruismo generalmente pueden identificarse como tales cuando son costosos para el actor y no le reportan ningún beneficio extrínseco previsible”.
Este concepto va de la mano con otro estudio, donde los investigadores recopilaron los datos registrados por Gallup entre 2006 y 2017 de aprox. 1,4 millones de personas en 161 países. Los participantes informaron si se habían involucrado en tres formas de altruismo en el último mes: donar dinero, ser voluntario o ayudar a extraños. Nuevamente, los resultados mostraron que la satisfacción con la vida y el afecto diario positivo se correlacionaron positivamente con la participación en estos comportamientos altruistas.
Es decir, una persona obtiene bienestar satisfaciendo sus necesidades básicas, teniendo buenas relaciones e implicándose en acciones altruistas. Estas labores le proporcionarán satisfacción, mejoran su estado de ánimo y trascenderá hacia su felicidad.
La felicidad en las organizaciones
Este enfoque de buscar el bienestar y la felicidad en todas las personas también ha sido trasladado al sector corporativo. Con diferentes iniciativas se plantean incentivar que las empresas vayan más allá de sus objetivos económicos y se preocupen por su gente, sus colaboradores.
El año 2021, tras la pandemia, se llevaron a cabo los Premios “Empresas Heroínas” en México que reconoce a las organizaciones que trabajan para garantizar las mejores condiciones no solo de trabajo sino de bienestar global para el desarrollo personal y colectivo de los empleados.
En la segunda edición que se realizó en julio de 2022, participaron más de 150 empresas y organizaciones interesadas de diferentes industrias en la región latinoamericana, de las cuales las ganadoras fueron las empresas: Payvalida de Colombia en el sector de comercio electrónico, Financiera Trinitas de México en el sector de finanzas, seguros y bienes; Axioma de México en el sector de servicios y Cryoinfra de México, perteneciente al sector de la industria química.
A su vez, en declaraciones para la revista Imagen y Comunicación, el experto en felicidad Javier Benites nos indica que se han incrementado las empresas interesadas en evaluar los beneficios que trae la felicidad para sus colaboradores: “La gente es cada día más consciente de la felicidad, más incluso que las empresas. Yo asesoré a muchos gerentes generales y muchos dueños de empresas que me dicen con cierta razón: yo no tengo ninguna responsabilidad de hacerlo feliz, que la gente venga feliz de su casa, tome su contrato laboral, yo le pago y tiene que cumplir. Estoy totalmente de acuerdo, no es tu responsabilidad hacerlo feliz, eso es cierto, pero, cuando tú tienes personas que están más felices, su energía cambia, por lo tanto la Atención al Cliente cambia y su motivación también, sus resultados cambian, su relación con los compañeros cambian y el clima laboral cambia, así como, la carga laboral disminuye, las enfermedades disminuyen y más”.
El experto también destaca el papel que el Estado debe cumplir para proporcionar felicidad a sus ciudadanos: “El Estado tiene que esforzarse en dar esas facilidades, esas necesidades básicas. Que las personas puedan comer, eso es lo primero, que puedan dormir, que puedan tener un derecho a la educación, a la sanidad, a la salud, si tienes un hijo que está pasando un desafío o lo que sea, que puedas llevarlo al hospital. Entonces no podemos hablar de propósito si no tenemos cubierto eso, pero ahora bien, eso es un poco lo que yo creo que tiene que conseguir el Estado, tiene que cubrir las necesidades básicas y ya podemos empezar a fluir”.
De la misma forma, Benites señala que los ejecutivos y empresarios están más cercanos a las personas para mejorar a la sociedad y más interesados en desarrollar estrategias para motivar a sus colaboradores. “Claro, es un interés genuino, ¿Por qué tendrías que hacerlo? ¿Por qué no tendrías qué hacerlo? Pero cada vez me llaman más, para una charla o un coaching; me dicen: Quiero que la gente esté motivada, le quiero dar un regalo. Por ejemplo, tengo un amigo en Perú que es empresario de mediana minería, es una persona muy fría pero con la edad le cambió la conciencia y ahora él regala libros, quiere coaching, es más, mucha gente lo cuestiona ¿Esto cómo lo vas a pagar? Y me dice lo voy a pagar yo, porque quiero hacer esto por la sociedad, quiero que reciban coaching. O sea él mismo quiere tener conciencia y son empresarios que se están planteando nuevas cosas que antes se las planteaban menos”.
Estos conceptos, poco a poco, están siendo incorporados en el desarrollo de estrategias para mejorar las relaciones colaborativas e incrementar la productividad en las organizaciones. Los premios e iniciativas que motivan a las empresas a enfocarse en lograr el bienestar de los colaboradores muestran el impacto positivo de esta gestión.
En suma, en estos 10 años de estudio es importante tener en cuenta cuáles son los indicadores que ayudan a medir la felicidad con el objetivo de mejorar la vida de las personas. Además de considerar los dos factores que proporcionan mayor satisfacción y por ende nos hacen más felices. Uno de ellos es el bienestar, por un lado, partiendo de cubrir las necesidades básicas, y por el otro manteniendo buenas relaciones sociales pues nos proporciona una salud optima, según enfatizan Robert Waldinger y Marc Schulz.
El segundo factor, luego de alcanzar el bienestar personal: el altruismo, que es la capacidad de brindar bienestar a otras personas compartiendo salud, educación u otras acciones como el voluntariado. A través de este conjunto de indicadores y factores se puede medir y evaluar la felicidad de las personas en los países, así como en las organizaciones, enfoque que puede ser considerado una meta y objetivo a alcanzar a través de una buena gestión empresarial, institucional o gubernamental.