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L
ETRA corrid
© JULIO, 2021
UNA REVISTA DE: ROSALY BENITES (Instagram: @rosalybenites) Y KATHERINE CASTAÑÓN (Instagram: @kathcasriv)
DISEÑO Y MAQUETACIÓN: KATHERINE CASTAÑÓN RIVAS (Twitter: @k4t4)
COLABORAN:
ANDREA TORRES (PERÚ) Egresada de Artes Escénicas con especialidad en Música de la PUCP. Integrante fundante del Núcleo de Investigación, encargada de la postproducción musical del Conjunto Costeño en el grupo Cemduc. Escritora, productora y cantautora de música independiente. Puedes encontrar su perfil en instagram como @andrea_escarabajo DORIS CAQUI CALIXTO (PERÚ) “Madre, maestra y esposa de Teófilo Rimac Capcha. Este fue detenido desaparecido en junio de 1986 en la base Militar Carmen Chico-Pasco, Perú. Hace 35 años busco justicia y sanción a los responsables. Fundé tres organizaciones de víctimas y afectados por el Conflicto Armado Interno. Actualmente presido la Coordinadora Nacional de Familiares de Víctimas de Desaparición Forzada del Perú.” MIGUEL G. VICTORIA (MADRID, ESPAÑA) Doctorando en Comunicación Audiovisual por la Universidad Complutense de Madrid y director cinematográfico a tiempo parcial. Su obra audiovisual se centra casi en exclusiva en la búsqueda de imágenes reales que no existen. Actualmente investigador en el terreno de los métodos de realización cinematográfica sin guión. Puedes encontrarlo en instagram como @mgvictoria23 NATALIA MOLINA LINAREZ (LIMA, PERÚ) Estudiante de Literatura Hispánica en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Interés por los estudios interculturales y la literatura escrita por mujeres. Devota de José María Arguedas. Amante del teatro, el cine y la danza. Constantemente soñando despierta.
OSCAR SANDOVAL (LIMA, PERÚ) Abogado por la PUCP, escritor y egresado del Curso Integral de Edición de Publicaciones de la Escuela de Edición de Lima. Ha publicado cuentos en las antologías de Kanon Editorial (2000), así como microrrelatos y artículos de difusión literaria publicados por la Escuela de Edición de Lima (2017-2019). Encuéntralo en Facebook como /mg.oscar.sandoval
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EDITORIAL 200 AÑOS ¿DE INCERTIDUMBRE? 200 años tiene nuestra memoria que recoge heridas que aún permanecen latentes, pero que son capaces de abrirse para dar paso a la luz. Entonces, el presente será siempre de esperanza. De buscar en nuestra inexorable diversidad el encuentro para fortalecer esta ciudadanía. En este mes, celebramos en la revista esa herida, pero también la luz como el paso hacia la conciliación entre nuestras diferencias.
¡Felices fiestas y que tengan una buena lectura!
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ÍNDICE
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UN LIBRO AL MES
EL RUIDO DE CARMÉN OLLÉ
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LACRÓNICA
EN UNA REALIDAD ALTERNATIVA, LIMA ES TODAVÍA LA CAPITAL DEL MUNDO
CREACIÓN LITERARIA POESÍA NARRATIVA
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EN PANTALLA -¡YA SALIÓ!-
*LA CANCIÓN SIN NOMBRE *PELONA, NO HEMOS CAMBIADO NADA
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ETRA corrid
WWW.REVISTALETRACORRIDA.WORDPRESS.COM
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EL RUIDO
DE CARMEN OLLÉ ESCRIBE: NATALIA MOLINA LINAREZ Contar mi experiencia leyendo Por qué
favorita, Seinfeld. Su creador la describe
hacen tanto ruido es sólo comparable a
como “una serie sobre nada”, y uso
la que tuve con algunas de las mejores
constantemente las mismas palabras
obras en el mundo de la literatura: El
para referirme a esta obra. No importa
retrato de Dorian Gray de Óscar Wilde
cuántas veces uno la analice o disfrute:
y El ruido y la furia de William Faulkner.
es un libro sobre nada, y a la vez
¿Qué tiene este libro de Carmen Ollé
sobre todo. Así que esta reseña será
para compartir lugar en mi imaginario
mi intento por explicar de qué trata
con tales obras maestras?
Por qué hacen tanto ruido y por qué lo considero un libro tan maravilloso.
Estoy escribiendo esto tratando de
N u e s t r a
encontrar la respuesta. Y es que leer
protagonista
Por qué hacen tanto ruido representa
es Sarah, una
de muchas maneras un desafío, pero
profesora
a su vez un placer inmenso. Tiene una
universitaria
situación parecida a la de mi serie
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UN LIBRO AL MES
de
literatura,
un
Sin embargo, a medida que se va
mayor
leyendo, aparece un tema imposible
decadencia. Su esposo, Ignacio, es
de ignorar: la autoficción. Y es que
un exitoso poeta. Ella ansía lo mismo:
para conocedores del círculo literario
poder escribir y vivir de la poesía,
peruano, Sarah es Carmen Ollé, la
pues sólo así se sentirá lograda como
autora del libro. Asimismo, Ignacio es
artista. ¿Cuál es el tema principal?
Enrique Verástegui, poeta que fue su
Hay muchas respuestas posibles: la
esposo. Desde ese punto de vista, el
escritura, la literatura, la ciudad, la
libro resulta una biografía de la autora
familia, el trabajo, el dinero, la salud,
en una etapa muy difícil de su vida,
la mente, el cuerpo, el espíritu… Una
además de un intento por compartir el
lista interminable, pero que siempre
ruido que causaba dentro de ella. Si no
gira alrededor de Sarah. Por ende, me
es así, pues tiene demasiado parecido
atrevo a decir que la trama principal
con la realidad como para ser mera
es la búsqueda que tiene Sarah por
coincidencia.
matrimonio
atrapada
cada
vez
en
en
escribir. Ella piensa que solo puede serlo al lado de su esposo, siendo “la
Además, si bien los múltiples temas que
mujer del poeta”. Bajo ese pensar
se desarrollan logran atrapar al lector,
se desarrolla la historia: con una
nada destaca tanto como el estilo de
profundidad en Ignacio, en la relación
escritura. En un taller de lectura en el
tan pasional y complicada que tiene
que participé sobre la obra, aunque
con Sarah, y con miradas que exponen
nadie pudo responder de qué trata,
el prejuicio de una sociedad limeña
todos lo catalogaron como “esa clase de
que no parece haber cambiado con el
libros en las que se desea resaltar cada
tiempo.
frase que se va leyendo”. La historia es fascinante per sé, pero la manera en
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UN LIBRO AL MES la que está contada es innovadora,
la acompañamos como lectores. La
sobre todo dentro de la producción
nueva Sarah ya puede escribir, como
literaria peruana. Esta narrativa tiene
siempre quiso, y logró la vida de artista
un gran tono lírico, incluso mucho
soñada que deseaba desde el inicio de
más que algunos intentos de poesía
la obra. No hay mejor empoderamiento
contemporánea
posible, sobre todo para el público
(suponiendo
que
Sarah es un alias de Carmen Ollé, no
femenino.
sorprende esta particularidad por la increíble poeta que es). Bajo esa
Espero que el impedimento de reseñar
perspectiva, la publicación de Por qué
la inmensidad de tramas que tiene
hacen tanto ruido es la prueba de que
Por qué hacen tanto ruido haya
Sarah logró reinventarse, dejando de
demostrado por qué es de esos libros
ver a la poesía como la única forma de
indescriptibles. ¿Qué podría decir para
escribir y adaptando un nuevo lenguaje
encomendar a leerlo? Simplemente
personal.
que es puro goce: una delicia de viaje en una historia sin línea, una escritura
Por último, no puedo terminar este
sin reglas, un género narrativo más
intento de reseña sin preguntarme
lírico que mucha disque “poesía” hoy
¿quiénes son los que hacen ruido?
en día. Leer Por qué hacen tanto ruido
El libro es un intento de Sarah
significa aventurarse en algo nuevo,
por encontrar la respuesta y una
que no se encuentra muy seguido en
manifestación del propio ruido en la
la producción literaria peruana; mucho
vida de Carmen Ollé. Aún así, más que
menos en un mundo editorial que
ofrecer una solución a la incógnita, la
invisibiliza a grandes escritoras que
historia termina en algo mucho más
tenemos. Soy feliz recomendando esta
valioso: una nueva identidad de Sarah
historia por la grata experiencia que
bajo sus propios términos, después
representa en mí, y por la que espero
de un largo y difícil camino en el que
que todo lector tenga.
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Carmen Ollé en
NOCHES DE ADRENALINA
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“He vuelto a despertar en Lima a ser una mujer que va midiendo su talle en las vitrinas como muchas preocupada por el vaivén de su culo transparente. Lima es una ciudad como yo una utopía de mujer. Son millas las que me separan de Lima reducidas a sólo 24 horas de avión como una vida se reduce a una sola crema o a una sola visión del paraíso. ¿Por qué describo este placer agrio al amanecer? Tengo 30 años (la edad del stress). Mi vagina se llena de hongos como consecuencia del primer parto. Este verano se repleta de espaldas tostadas en el Mediterráneo. El color del mar es tan verde como mi lírica verde de bella subdesarrollada.” [Fragmento]
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LACRÓNICA
EN UNA REALIDAD ALTERNATIVA, LIMA ES TODAVÍA LA CAPITAL DEL MUNDO ESCRIBE: KATHERINE CASTAÑÓN R.
No hay pandemia y el Perú sigue
detrás de los turistas que caminan
creciendo. Lima es el foco de todo, pero
con confianza hasta la boca del metro
sirve de paso para que muchos otros
ubicada en el exterior del aeropuerto.
sigan su viaje y lleven turismo y riquezas
En el interior compran la tarjeta que les
a otras partes del país. Personas de
servirá por lo que dure su estadía para
todo el mundo se aglutinan en el Jorge
movilizarse por toda la ciudad.
Chávez que es dos veces el estadio
Luego de descansar, toca salir y
nacional. Taxis lujosos se detienen
explorar la ciudad.
para recibir a los turistas adinerados.
Las
cámaras
Mientras que otros salen mirando
cuelgan
de
hacia los lados, maravillados de haber
cuellos, los celulares
llegado a La Ciudad. En el exterior,
en
unas vías amplias evitan un poco el tráfico que comienza a formarse cerca de las horas punta. Las maletas van
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las
los
manos,
los bolsos de marcas reconocidas
hacia la Plaza San Martín. Con su
acompañan los hombros y todo tipo
estatua gigante. Sus pequeñas fuentes
de idiomas son oídos por la ciudad.
en las esquinas. Y las casonas que
Algunos se detienen a hacerse fotos.
hablan de una época colonial. Cafés
Otros, en puestos de comida, prueban
adornan los bordes de las calles, y
las delicias típicas del país.
jóvenes y viejos se sientan a observar.
Esa sensación de seguridad los sigue
Conversan sobre su visita. El teléfono
mientras recorren el centro histórico.
descansa a un lado de la mesa. No
Las calles antiguas, los balcones de
existe peligro. Solo disfrutar.
antaño, las estatuas en los parques. Las
El jirón de la unión sirve de encuentro
Gracias, Neptuno y Manco Capac se
para personas de todas las naciones.
entremezclan con réplicas del Lanzón
Algunos se detienen para tomarse la
monolítico, representaciones del Inti,
fotografía típica. De fondo ya se ve la
la Quilla y un homenaje Wari. Y de las
Plaza de Armas. La gente avanza entre
esquinas de las fachadas coloniales se
estatuas humanas y anuncios de tours.
distinguen modernas bocas de metro
Llegan a la Plaza. Está llena. Pero ya
que servirán de conexión a cada punto
lo esperaban. Toda ciudad como esa
de la ciudad. El recorrido empieza por la Plaza Francia, antaño hogar de galerías y casas destartaladas, hoy sirve de punto de referencia para el inicio de la zona cultural. Las fachadas los hacen sentirse en un museo vivo y bien cuidado. Algunos conversan de libros junto a las tiendas de viejo que se han logrado mantener en el lugar. Otros caminan con paso animado. Avanzan ©KCR
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tiende a acumular gente en sus fechas
sobre el día que está pronto a llegar a
más importantes.
su fin. En unas horas verán la plaza de
El palacio de gobierno se encenderá
armas iluminada, el ritmo del himno
más tarde así que deciden seguir
nacional tocando de fondo, la gran
caminando. La Plaza Chabuca Granda
catedral. Acompañados de turistas de
es el sitio perfecto para probar unos
todas las nacionalidades. Y la sonrisa
dulces picarones mientras disfrutan
los seguirá hasta tomar el metro de
de la música al aire libre. Tomarse una
regreso a su hospedaje.
foto y ver el río.
Mañana tocará la costa verde. Los
El Rímac se muestra caudaloso y en
edificios altos, los parques secretos, el
sus márgenes se distingue un camino
acantilado, el mar y las lanchas que
de carpas y luces que se comienzan
conectan las costas como si se tratarán
a encender poco a poco. Bajan para
de buses marítimos.
caminar por sus márgenes, entre las
Pasado,
tienditas de telas y dulces tradicionales.
aventura hacia el cielo en teleféricos
Se detienen para comprar una pulsera
metálicos, rodeados de casitas de
de cornucopias y laureles, un pequeño
colores, escaleras y calles blancas,
recuerdo de la visita a La Ciudad.
plazas estrechas, árboles que no
Mientras avanzan deciden detenerse.
pierden hojas y jardines con flores de
Llaman para contar de su aventura a
amancaes que florecen para alegrar
aquel familiar que se moría por hacer
los pocos días de los turistas.
el viaje, pero no pudo permitírselo.
Definitivamente no podrían haber
Le muestran el increíble río a sus
elegido una mejor ciudad para viajar.
espaldas y los pequeños botecitos que
Una que lo tiene todo y solo es la punta
lo acompañan. Luego siguen, hacia el
del iceberg del país que toca visitar.
parque de la muralla. Se sientan en una banca frente al río mientras conversan
14 ©Freepik
los
cerros
limeños.
Una
200 AÑOS
¿de incertidumbre? WWW.REVISTALETRACORRIDA.WORDPRESS.COM
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Creación
literaria
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© FREEPIK
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POESÍA
SONETO A LOS GOLPISTAS POR: ANDREA TORRES Esas piedras reclaman ser bandera hoy la bandera se obliga con multa envidia a los ajenos y se oculta Ayers rock jura por la plata, espera Envidia las jornadas y la acera abstraerse cual escolar y adulta, la corte monolítica sepulta con la sentencia árida, terca y huera Resiste al sol y al patriotismo falso, el susurro del himno desganado ella añora la era del descalzo Ahora, madre de jurar con balso en los dedos y fólder agarrado entre dientes fraudulentos, ¿calzó?
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¿CÓMO DAR VALOR A QUIENES NOS DISPARAN? POR: ANDREA TORRES Sin raíz transtornadas, miles de sombras simiescas e infaustas, portadoras de una verdad inhumana, desafinan un endémico himno paramilitar ¡Fuego! se reparten jirones de bandera ¡Han partido toda valor! Las torturas jadeantes cazan para su gozo rehúsan que hierva nuestro discurso Han mancillado la lucha que nos alimenta derriben su casco y solo quedará la penuria desnuda de quien hiere a quien no ataca
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EL TORONJIL POR: DORIS CAQUI CALIXTO Y LUIS ALBERTO LEÓN BACIGALUPO Color verde intenso, aroma a limón, pierde el ramaje En invierno, volviendo a brotar en primavera. Lo llamo toronjil, tranquilizante natural. Calienta el ánimo, el sentimiento, venciendo la tristeza. Cuanto quiero verte sonreír, sacar el dolor del pecho, el miedo del vientre, la obsesión del pensamiento. Para no ahogarnos en el llanto.
Una tacita de toronjil te ofrezco. Para amar la vida en tu compañía, abrazar a quien llega y a quien se va. El toronjil calentando mis manos vence a la derrota, estrecha tu mano en esperanza. Abrazos que no podemos darnos. Pero que regresarán.
Este poema sirvió de base para la campaña “Toronjil para no ahogarnos en el llanto” co creada por asociaciones de familiares de personas desaparecidas durante el periodo de violencia armada en el Perú, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y con el apoyo de Teatro La Plaza. Esta sirvió de solidarización con parientes de los fallecidos por el COVID-19.
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Enrique Verástegui en
SI TE QUEDAS EN MI PAÍS
“Y esto te urge más que una palabra perfecta. En mi país la poesía te habla como un labio inquietante al oído te aleja de tu cuna culeca te filma tu paisaje de Herodes y la brisa remece tus sueños —la brisa helada de un ventilador. Porque una lengua hablará por tu lengua. Y otra mano guiará a tu mano si te quedas en mi país.” [Fragmento] 21
NARRATIVA
MADRE BICENTENARIA POR: OSCAR SANDOVAL A las 10 de la mañana del 28 de julio de 2021, la Madre despertó y su espíritu emergió desde las profundidades del Panteón de los Próceres para pasar un día entre sus hijos, como acostumbraba hacerlo desde hace dos siglos en esa misma fecha. Algunos de sus hijos creían erróneamente que ella había nacido el 28 de julio de 1821, en el momento en que la declararon “libre e independiente por la voluntad general de los pueblos”, pero esa fue solo la firma de su partida de nacimiento: antes de ese día, ella llevaba casi cinco mil años de noble e indocumentada existencia. De todos modos, la Madre consideraba el 28 de julio como un día muy especial y disfrutaba visitar todas las regiones de su territorio cada año en la misma fecha para presenciar los emotivos y solemnes homenajes que le rendían sus hijos.
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Este año, sin embargo, la Madre sentía muy pocas ganas de celebrar. Aún se sentía terriblemente enferma y debilitada por el virus que contrajo el año pasado y que le trajo mucho dolor y sufrimiento, al igual que a muchos de sus hijos. Además, sentía dolores y punzadas en múltiples partes del cuerpo, como si alguien tratase de cortarla en pedazos. Por un momento quiso sumergirse bajo la tierra y volver a dormir hasta el año siguiente, pero luego recordó que se trataba de su aniversario número doscientos y que se había prometido a sí misma hacer algo distinto en esta ocasión: en lugar de festejar, quería transmitir un mensaje.
La Madre atravesó el pesado portón del Panteón de los Próceres y salió hacia el Parque Universitario, no sin antes colocarse su mascarilla sobre el rostro para evitar problemas con la Policía por incumplir las normas de protección contra el contagio del coronavirus. Llevaba un sencillo vestido blanco largo y un elegante mantón rojo que cubría sus hombros y espalda. La corona de laureles que solía llevar sobre su cabeza se había echado a perder desde hace varias décadas: solo quedaban algunas hojas sueltas sobre sus sienes. A cada paso iba apoyándose en su báculo de madera, por lo mucho que le costaba caminar.
En su lenta marcha, miró la Torre del Reloj del Parque Universitario: eran las once de la mañana. Normalmente ella se despertaba al amanecer, fresca y jovial, dispuesta a aprovechar al máximo su día especial, para luego volver a dormir segundos antes de la medianoche del 29 de julio.
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Extrañaba tener esa vitalidad en estos momentos: debido a lo débil y descompuesta que se encontraba, calculaba que solo podría permanecer sobre la tierra un par de horas como máximo antes de desvanecerse y volver a su sueño subterráneo.
Con mucha dificultad, la Madre llegó al otro extremo del parque. Allí observó que la Policía había colocado unas rejas metálicas en el cruce entre las avenidas Nicolás de Piérola y Abancay, bloqueando el acceso a la Corte Superior de Justicia de Lima, el Ministerio Público y el Congreso de la República, entre otros edificios de gobierno. Afuera de la zona enrejada, dos grupos de manifestantes pugnaban violentamente por ingresar a la avenida Abancay y dirigirse al palacio legislativo. El primero de ellos estaba conformado por simpatizantes del presidente electo, mientras que el segundo lo integraban los militantes del partido opositor. Ambos grupos se insultaban el uno al otro lanzándose todo tipo de groserías, epítetos humillantes e insultos racistas.
La Madre se acercó cautelosamente hasta el centro del conflicto, hasta quedar en medio de las dos facciones en disputa. Luego de varios minutos de gritos, protestas y amenazas mutuas, una piedra voló muy cerca de su cabeza e impactó en la frente de un joven, derribándolo. Inmediatamente se desató la violencia: los manifestantes comenzaron a enfrentarse utilizando piedras, palos y otros objetos contundentes. Varias personas más cayeron al suelo heridas y ensangrentadas. Los policías se aprestaron a contener a los revoltosos, pero el caos aumentaba y era más difícil controlarlo a medida que más personas se sumaban a la trifulca.
La Madre sintió un dolor fortísimo en la cabeza, como si se la estuvieran partiendo en dos. Profundamente indignada, lanzó un fuerte grito:
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— ¡BASTA! Su voz era tan potente que se escuchó como un trueno. Inmediatamente, la tierra se sacudió por unos segundos y los manifestantes huyeron despavoridos en todas direcciones, pensando que se trataba de un terremoto. A pesar de esa manifestación de poder, la Madre se encontraba aún más débil que antes: esa expresión de enfado había consumido gran parte de sus fuerzas. Sintiéndose desfallecer, miró nuevamente la Torre del Reloj: eran las once y treinta. Debía darse prisa si quería llegar a tiempo. Se aproximó con dificultad hasta el tramo bloqueado de la avenida Abancay e inmediatamente los policías le impidieron continuar la marcha. — Retírese, señora. No hay pase. La avenida Abancay está cerrada.
La Madre los miró fijamente y con firme serenidad les dijo: — Déjenme pasar.
Compelidos por una fuerza más allá de su comprensión, los policías retiraron una de las rejas y se hicieron a un lado. Apoyándose en su báculo, la Madre ingresó por el tramo desbloqueado y se dirigió trabajosamente por la avenida Abancay hacia el Congreso de la República.
***
A mediodía, la toma de mando del nuevo presidente de la República en el palacio legislativo transcurría de forma muy accidentada. Los congresistas lanzaban gritos, pifias, insultos y amenazas de todo calibre mientras el primer mandatario electo hacía el juramento de ley al lado del presidente del Congreso:
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— Juro por la Patria que ejerceré fielmente el cargo de Presidente de la República que me ha confiado la Nación para el período presidencial 2021-2026. Que defenderé la soberanía nacional y la integridad física y moral de la República. Que cumpliré y haré cumplir la Constitución Política y las leyes del Perú y que reconoceré, respetando la libertad de cultos, la importancia de la Iglesia Católica en la formación cultural y moral de los peruanos.
En ese mismo instante, la Madre ingresó al hemiciclo. Un intenso brillo dorado se desprendía de todo su cuerpo, lo cual atrajo las miradas de todos los presentes. En sus memorias quedarían grabadas para siempre las palabras que pronunció aquella mujer con las últimas fuerzas que le quedaban, mientras levantaba amenazadoramente su báculo apuntando hacia el nuevo inquilino de Palacio de Gobierno y a los legisladores:
— ¡Acabas de jurar en mi nombre! ¡Si no cumples, te lo haré pagar! ¡Y a todos ustedes también!
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27
Varias autoras en
HABÍA UNA VEZ UNA PERUANA
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“Ser mujer en el Perú es difícil, pero también es hermoso, porque hermosa es la historia de cómo todas estas barreras nunca nos detuvieron y cómo siempre nos rebelamos ante un “tú no puedes”, un “para ti no”, o cualquier “hasta aquí nomás”.”
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EN PANTALLA
CANCIÓN SIN NOMBRE ESCRIBE: MIGUEL G. VICTORIA He revisado mis notas tres años después, todas esas palabras han perdido fuerza ahora que me encuentro tan lejos de la película. No me gustaba la idea de volver a hablar de la película desde la lejanía del recuerdo, un recuerdo único y muy fugaz. Mis intentos por recuperar la película en Europa han sido en vano, así que ahora me presento delante de una sombra de mi memoria que sin embargo está menos enturbiada por el tiempo de lo que pensaba.
En 2019 la película que más me
manera así me sentía delante de las
impresionó en el Festival de Cannes
imágenes que se me iban presentando.
fue “Canción sin nombre”. No me
Tenía las herramientas, como el idioma
esperaba que una producción a priori
en común, para entender lo que
menor proyectada en el cine más
estaba ocurriendo en la pantalla y sin
pequeño de la ciudad pudiese tener
embargo todo aquello me producía una
esa fuerza expresiva. Solo puedo
sensación continua de extrañeza: eran
hablar en términos vagos, en esbozos
las contradicciones de una sociedad
de lo que realmente será la película
que se alejaba más de mí de lo que
para quien la vea de nuevo. En cierta
podía imaginar. También era negro de
30
—¡YA SALIÓ!—
la sala que me envolvía y me fusionaba
la ignorancia que vi el film, o como
con los grises sobre la tela que me
mucho, desde las reverberaciones de
transportaban tan lejos. Recuerdo la
nombres que sonaban a algo en mi
secuencia en la que el mundo abandona
cabeza como Sendero Luminoso. Mi
su forma definida y se vuelve una serie
extrañeza era total y sin embargo no la
de manchas, de borrones blancos y
encuentro errada, creo que no era solo
negros que pululan por la pantalla.
por mi ignorancia sino que era algo que
Ahora con el tiempo, cuando vuelvo al
se buscaba desde el terreno estético
recuerdo, esa secuencia cobra mucho
(el blanco y negro, la secuencia de los
más significado, ahora con el tiempo
borrones, los planos perfectamente
y la reflexión entiendo ese desdibuje
simétricos de las galerías donde está
de lo conocido, esa inmersión en un
la clínica) y en terreno narrativo (las
submundo cercano pero a la vez
historias que se cruzan, la mujer, el
escondido.
periodista, el terrorista). La película busca una maraña de contradicciones,
Escribo ahora, y entonces miraba,
una nebulosa indefinida. Lo logra a la
desde la lejanía de un océano y un
perfección. La extrañeza te revuelve
continente de distancia. Mi visión desde
en nuestro intento siempre humano de
aquí es limitada. Si sé algo de Perú es
querer entenderlo todo. En ese intento
muy poco y eso estará filtrado por
de querer entender, mientras no era
quién me lo haya contado. Fue desde
capaz de hacerlo disfruté de cada uno
31
EN PANTALLA —¡YA SALIÓ!
tal como los de la secuencia en la que
de los fotogramas.
los cuerpos pierden su nexo con la Quizás me reencontré con la lógica
realidad y se sumen en la abstracción
de mi mundo conocido en la historia
de la nada.
del periodista. Fue una vuelta a la comprensión, a unas reglas que sí
El filme de Melina León fue tan solo un
tenía controladas. En el momento en
reflejo, un susurro que me causó una
el que la película se vuelve hacia él y
cascada de preguntas, pero a la vez
abandona la incertidumbre del mundo
fue también una serie de respuestas.
de la madre, todo adquiere una forma
Las preguntas siguen ahí, esperando
demasiado concreta. Es tan solo un
a ser resueltas. La respuesta principal
poso de algo que pasó a través de mis
es la propia película. Como dijo Andrei
ojos hace demasiado tiempo, pero si
Tarkovsky el cine se trata de atrapar la
bien la forma de la primera parte de la
vida, pocas películas lo hacen como lo
película está muy clara en mi cabeza,
logra hacer “Canción sin nombre”.
en la segunda parte el recuerdo se desdibuja. El fragmento que más próximo está de mí es, sin embargo, el que más se pierde en el tiempo. Ahora se transforma en una serie de borrones,
CANCIÓN SIN NOMBRE Año: 2019 Dirección: Melina León Guion: Melina León, Michael J. White Sinopsis: Es la historia de Georgina Condori, una mujer andina cuya bebé recién nacida desaparece misteriosamente. En medio del caos político de la época, Pedro Campos, un joven periodista limeño toma a su cargo la investigación y emprende junto a ella la desesperada búsqueda. (FILMAFFINITY)
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EN PANTALLA
PELONA,
NO HEMOS CAMBIADO NADA ESCRIBE: KATHERINE CASTAÑÓN RIVAS
Hace 200 años La Patria, la libertad, se aproximaba, como si se tratara de una tormenta inevitable. Un cambio que se olía en el viento. Pero que era imposible de ver. Era imposible definir lo que pasaría, pero pasaría. Y no para todos sería igual. Hoy pasa exactamente lo mismo.
Hace ya un tiempo vi una serie
últimos años de conflicto, la serie me
novelesca de TV Perú llamada Nuestra
mostraba un aspecto de la historia que
historia. En esta, a través de la historia
vivieron mis padres. Una historia que,
de un grupo de familias de clase media
al menos, para mí no se mantenía tan
limeña contaban a grandes rasgos
presente dentro de mi vida. Que yo
cómo se dieron aquellos 30 años de
recuerdo solo por memorias relatadas.
nuestra historia peruana marcada
Quizás fue el ver esta serie la que me
por el terrorismo y la corrupción. Fue
llevó luego a El último bastión. Después
interesante. Como limeña de clase
de todo, ambas se presentaron por el
media y muy pequeña durante aquellos
mismo canal televisivo, con el mismo
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—¡YA SALIÓ!—
actor protagonista y el mismo objetivo:
La independencia… Para unos era
relatar un pedazo de la historia
autogobernarnos como nación. Para
peruana.
otros era una amenaza contra el orden establecido. Para otros, la libertad.
Pero El último bastión me mostró
Otros solo querían de vuelta sus tierras;
una época mucho más crucial de
aquellas que mucho antes habían sido
nuestra historia: aquellos años en
suyas. Y para ellas… Todo eso y al
donde Perú se volvió Perú. Los años
mismo tiempo sabían que no habría
de la independencia. Además, logró
mucha diferencia en sus vidas.
presentarla como un periodo que no se enfrascó en un solo día. La
Y conforme veía la serie no podía evitar
independencia no es algo que se dio
pensar lo poco que hemos cambiado
el 28 de julio de 1821; sino un conjunto
como país. Es increíble. Y también un
de acciones de años, antes y después
poco triste… Sentir que hemos avanzado
de ese 28 de julio. Algo que se fue
muy poco: Seguimos disputando unos
construyendo, aunque para todos
con otros, la discriminación continúa
significaba algo distinto.
campante, las diferencias de unos
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a otros se mantienen, así como los oportunistas en los altos cargos, y los soñadores que se ven superados por la realidad. La pandemia en medio de todo. Lo mismo pasaba hace 200 años. Y, probablemente, lo mismo pase en otros 200. Porque ya lo hemos visto
EL ÚLTIMO BASTIÓN
una y otra vez: la historia del Perú es
Dirección: Marco Moscoso Guion: Eduardo Adrianzen, Adrianzén
una historia cíclica. En donde los males no se erradican, sino que duermen y
María
Luisa
Sinopsis: Serie que nos muestra a los personajes que viven en el pueblo de la Magdalena durante los años previos al arribo de José de San Martín a las costas del Perú y cómo afrontan los cambios que surgirán con su llegada hasta alcanzar la independencia. La historia se cuenta a través de Paco Robles, un joven abogado de clase media que de alguna forma se relaciona con todos los personajes de la historia. Él y su novia nos cuentan del gran cambio que se vive en esa época.
vuelven a aparecer.
Ahora, quizás esté equivocada. Pues, cambiar las cosas todavía depende de todas y todos.
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