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Incorpora cambios que se adaptan al lenguaje estético y mecánico predominante de los últimos productos de la marca
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Texto: Nicola Varsi L. Editor/Stephanie Solano y Rodolfo Hernández
Elegante fusión de estilo y funcionabilidad
U
na vez de cara con la cuarta generación del RAV4 en Ciudad Toyota, fue fácil para el equipo de pruebas de MOTORats, darnos cuenta que es una versión con interesantes cambios de aspecto, con un interior y equipamiento más generoso; y la opción de dos eficientes motores que lo posicionan mejor dentro del segmento al que pertenece. Viéndolo más de cerca fue simple determinar que incorpora cambios que se adaptan al lenguaje estético predominante de los últimos productos de la marca. Este es el caso de la parrilla frontal y de las ópticas que ahora son más estilizadas e incorporan tecnología LED. Otros elementos que también ganaronen estilo es la compuerta trasera, la cual fue rediseñada, los paneles laterales y los parachoques, mismos que imprimen un look más dinámico y contemporáneo al nuevo modelo. Conjuntamente con lo anterior, unos aros de nuevo diseño en 17 pulgadas de diámetro, rieles de techo spoiler trasero, sunroof y halógenos, son algunos de los elementos externos que dinamizan aún más al nuevo RAV4, obviamente estos elementos se relacionan según versión. Ya dentro de su cabina, logramos percibir cambios a nivel interno como el atractivo salpicadero renovado, el cual cuenta con un panel de instrumentos y una pantalla multi-información, ubicada en medio de los relojes del panel frontal del volante para mayor visivilidad del conductor, ubicados para un dominio instintivo tanto visual como de manipulación, sin pérdida para el conductor; allí se pueden verificar detalles como la distancia y el rendimiento del vehículo para llegar a su destino. Una vez acomodado en el puesto de mando, la postura del cuerpo es alta y envolvente, con una buena sujeción lateral y visión panorámica del entorno. La manivela tiene ajuste en altura y profundidad para mejorar aún más la posición del cuerpo frente al volante. Del espacio, podemos decir que goza de las medidas necesarias para que cuatro adultos de considerable tamaño viajen cómodamente, sin embargo, las butacas traseras (abatibles) según nuestra per-
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cepción carecen de espacio suficiente para albergar tres personas a gusto. El equipamiento de serie (según versión) lo conforman elementos como; aire acondicionado climatizado, asiento del conductor eléctrico con calefacción, cierre central con control remoto, cobertor equipaje, controles en volante, tapicería en cuero, cámara trasera, limpia parabrisas trasero interactivo y cuatro bolsas de aire frontales, entre otros, que optimizan la estadía a bordo de los ocupantes. El Toyota RAV4 es un SUV mediano cuyas medidas son: largo 4605 mm, ancho 1845 mm y alto 1715 mm. La tracción puede ser al eje delantero o full time con control activo, la distancia entre sus ejes es 2600 mm y su peso bruto es 2130 Kg (este varía según versión). Sus ángulos respectivos son de ataque 20 grados y de salida 23 grados, la distancia al suelo es 161 mm, esto favoreció a las versiones a prueba, que sin ser 4x4, sortearan obstáculos de gran tamaño sin poner en riesgo los bajos del auto. En el apartado de la caja de cambios esta puede ser manual o secuencial de seis velocidades o CVT según versión. Además, el modelo más equipado (4x4) apela a un bloqueo de diferencial central, lo que aísla la repartición del torque entre el eje delantero y el trasero. La gama de motores está compuesta por un motor de 2.0 litros de 143 hp a 6200 rpm y 187 Nm a 3600 rpm y otro de 2.5 litros de 177 hp a 6000 rpm y 233 Nm a 4100 rpm. En este sentido las versiones a prueba, a pesar del arrastre de peso consecuencia de cuatro adultos y un full aire acondicionado funcionando al máximo, el desempeño fue contundente, sin picos ni baches en su curva de
entrega de potencia. Esto se tradujo en un continuo empuje en dicha banda, sin tener que llevarlo hasta la línea roja del cuentarrevoluciones cuando tuvimos que hacer los rebases o las recuperaciones. Hay que añadir que los ritmos más alegres se localizaron sobre las 3,500 rpm. Por otra parte, las relaciones del cambio manual (versión que conduje la mayor parte de la prueba) están afines respecto al motor. La potencia y el par generado fue el correcto para lograr adaptar la desmultiplicación correcta a las necesidades requeridas en diferentes escenarios durante la prueba. Estructuralmente hubieron modificaciones a nivel del chasis, suspensión y aislamiento acústico. Se utilizó un 55% más de material aislante en el suelo, así como en las puertas, en el cuadro de mandos y en varios puntos alrededor de la bandeja del maletero. Además, la carrocería tiene nuevos puntos de soldadura, y hay nuevos refuerzos en la suspensión trasera, en el piso y en la sujeción del cárter de la dirección. En este apartado la rigidez torsional que hace gala el nuevo RAV4 al transitar en suelo irregular como lastre, piedras y zanjas, fue muy satisfactoria respecto a la versión anterior. De igual forma,los resortes y los amortiguadores tuvieron un reajuste por lo que la suavidad dinámica que trasfiere el conjunto es decisiva, así como que se redujo sustancialmente las filtraciones de vibraciones al habitáculo. Cuando se le exigió al RAV4 en caminos revirados, el vehículo siempre siguió la trayectoria trazada con el volante trasfiriendo seguridad, aplomo, estabilidad y agarre, con un mínimo balanceo de la carrocería al jugar con las masas y tendencia al subviraje. Lo
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anterior se debe a una dirección con asistencia eléctrica sensible a la velocidad, a una mínima flexión del conjunto y a un sistema de estabilidad (VSC) desconectable, que actúa solo cuando se detecta derrape lateral. Entre los elementos asignados a la seguridad el RAV4 cuenta de serie, además, del control de estabilidad vehicular (VSC), con sistemas de asistencia en pendientes Hillstart Assist Control (HAC) y Down hill Assist Control (DAC) que ayudan a salir en rampa y hacer descensos suaves en condiciones de bajada. También, monta un sistema de frenos de discos con ABS, EBD y BA. En este apartado el conjunto de frenos nunca mostro fatiga pese al uso excesivo recibido, mientras que las asistencias minimizaron el riesgo de accidentes ante alguna frenada de pánico o error de conducción. A manera de cierre, debemos decir que el nuevo RAV4 se siente mejor plantado respecto a la anterior versión, la respuesta del motor y de caja hacen bien su trabajo en base al requerimiento. Además una mejor puesta a punto de las suspensiones y del chasis da como resultado un mejor desempeño dinámico. A pesar de su altura que se supone afecta el centro de gravedad cuando entrabamos a una curva pasados,de inmediato ingresaban las asistencias para corregir el trayecto del vehículo. Con certeza podemos afirmar que el nuevo RAV4 cumple con los estándares necesarios para enaltecer su Espíritu Aventurero. “A mejorar a nuestro parecer” están algunos elementos como botones y reloj que se pudieran modernizar, ciertos materiales menos ásperos, la dirección que trasmitiera un tanto más y que las suspensiones filtraran un poco más las irregularidades del terreno.
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