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Rescatando el arte Novohispano

Su afición se remonta en el tiempo. Desde sus tempranos 10 años, Agustín se apegó de manera apasionada al arte religioso realizando sus primeros dibujos que 49 años después lo llevaron a tener un exitoso taller de artesanos en la ciudad de Tlaquepaque, Estado de Jalisco en México. Aquí agrupa todos los gremios del arte y con mucho esfuerzo, pero al fin con éxito, ha logrado rescatar la tradición y técnicas del arte Novohispano o barroco de México.

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Elabora pinturas, esculturas, retablos y mobiliario en general que correspondan a la época, para un mercado tan complejo como selecto. Grandes haciendas, casas, departamentos y hoteles de toda la República, además de iglesias e incluso algunos edificios corporativos son sus clientes, quienes como denominador común tienen el apego al arte y la historia.

Uno de sus logros artísticos más grandes es haber logrado ser proveedor oficial del Vaticano. Además, es el único artesano en el mundo que a lo largo de su historia ha recibido pedidos personales de tres Papas: su Santidad Juan Pablo II, Benedicto XVI y el actual Papa Francisco.

Sus obras se exponen de manera permanente en el Vaticano, la Basílica de San Juan de Letrán en Roma, la Catedral de San Antonio Texas, el Museo de México en Seúl y en la fundación Banamex, entre otros prestigiosos lugares.

Este es uno de esos ejemplos de esas experiencias difíciles de contar con una cámara fotográfica. La maestría de las obras asombran y cautivan, razón por la cual decidí hacer este espacio especial no programado para Agustín y su arte, quien nos atendió gentilmente como buen mexicano en su galería, abriendo las puertas a STA- TUSuio para admirar su obra y exponerla al mundo como bien se lo merece.

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