Un “ángel verde” de Sectur permanentemente en el AIFA

Por Juan Antonio José

Desde hace semanas noto estacionada una unidad en el camellón del acceso que conduce del Circuito Exterior Mexiquense al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en Santa Lucía, todo indica que está presta a servir al público, de los famosos “ángeles verdes” de la Secretaría de Turismo federal (Sectur), corporación nacida en el año 1960, que en realidad es un Órgano Administrativo Desconcentrado de la misma y que para muchos compatriotas de mi generación constituye una imagen positiva de esos primeros viajes en carretera, en mi caso a los que nos llevaba mi padre, que por cierto nos los presumía toda vez que sin duda su labor resultaba sumamente valiosa y algo muy importante: generaba tranquilidad a los usuarios de las autopistas y las carreteras federales de México, en especial aquellas relacionadas con el turismo como la México-Cuernavaca, la primera con la que se relaciona el servicio.

Creo que tengo la respuesta: la preciada unidad solamente hace presencia en una de las obras insignes de la actual administración. Es decir, tal y como lo hacen otros funcionarios federales con sus recursos materiales, técnicos, humanos o administrativos, muy al estilo de la dictadura Kim en Corea del Norte, genera buena imagen política ante el alto mando oficial del país y su cercanos para el titular de su dependencia, en este caso, insisto, Sectur, algo que, a menos que se trate de un equipo que ya no está en condiciones de hacer su función -¡seré ingenuo!-, me parece un lamentable desperdicio de fondos públicos y lo más importante: de oportunidades de solucionarle un problema a un vehículo automotor en alguna parte de nuestra geografía.

Ese “ángel verde” le cuesta y lo que es peor, no le sirve de nada haciendo lo que por lo menos yo he constatado ejecuta en las cercanías del AIFA.

¿Y qué hace un “ángel verde” permanentemente estacionado en una vialidad con tan poco tráfic o, como el que por lo menos quien firma esta nota ha constatado tiene este acceso al AIFA en lugar de recorrer, digamos el Circuito Mexiquense, en el que en los meses que llevo empleándolo con frecuencia no he visto unidad alguna de este cuerpo de auxilio de la Sectur también presta a auxiliar a algún vehículo en problemas?

“El horno no está como para bollos”; para nadie es un secreto que al gobierno mexicano no le sobra el dinero; ese “ángel verde” le cuesta y lo que es peor, no le sirve de nada haciendo lo que por lo menos yo he constatado ejecuta en las cercanías del AIFA, aeropuerto cuya seguridad y la de sus usuarios está siendo atendida por elementos de la Guardia Nacional, que estoy seguro también puede auxiliar vehículos en su perímetro. Hablando de esta última, no lo sé usted estimado lector, pero en las pasadas fiestas decembrinas me costó mucho trabajo toparme con una unidad de ella en los caminos mexicanos que recorrí, tiempos en los que recuerdo era notoria en ellos la presencia de la Policía Federal.

Bien dijo Otto Von Bismarck: “El político piensa en la próxima elección; el estadista, en la próxima generación”.

Transportar todo tipo de productos, llegar a tiempo, con la mercancía completa y en las condiciones que la entregó el usuario tiene su reto para cualquier transportista, implica circular por carreteras con toda clase de conductores, algunos con vehículos que no cumplen con las reglas mínimas de seguridad, caminos con diferentes condiciones físicas, a lo que se agrega la inseguridad, los retenes, las manifestaciones de personas que protestan por diversas razones y la toma de casetas.

No obstante, transportar tractocamiones y camiones nuevos, llevarlos a todo el territorio nacional y más allá de nuestras fronteras, a tiempo y en las condiciones que nos los entregaron los ensambladores de vehículos nuevos implica un doble reto, “somos una empresa de logística, un eslabón de la cadena del transporte, ensambladores-distribuidores-transportistas y nos sentimos muy orgullosos de contribuir de esta manera a que se materialicen las ventas de la industria fabricante de vehículos pesados en el país y desde luego las exportaciones de vehículos pesados Clase 8”, nos comenta Gustavo Vildósola Ramos, toda una institución en el mundo de los camiones y del transporte, actualmente presidente de Águilas del Desierto de Baja California (ADD), de Mexicana Logistics (Mexlog) y del Consejo del Instituto Educativo del Noroeste, que auspicia al Centro de Enseñanza Técnica y Superior (CETYS) de Baja California.