Vía Twitter @am_queretaro
amqueretaro.com
Domingo 17 de agosto de 2014 / Querétaro, Querétaro
Sección E
Editor Eliseo Ledezma Contacto eledezma@amqueretaro.com tel 291-9900 ext 8925 diseño editorial Natasha Pozo Osorio
Yunuen Calixto
Vía Facebook PeriodicoAmQueretaro
SOCIALES
Feliz enlace
›PÁG. 3
Guachimontones, única en el mundo ›› Entre otros asentamientos, se encuentran dos canchas de juego de pelota, cinco plazas y una extensa zona habitacional distribuidas a lo largo de 20 hectáreas
Gina Trejo
PASEO
Guachimontones es una zona arqueológica ubicada en Teuchitlán, Jalisco, cuya peculiar característica de círculos concéntricos la hace única en el mundo. Si bien existen algunos otros territorios en que las estructuras son circulares como la de Cuicuilco, Zinzunzan, La Quema, éstos no son concéntricos; dándole así un aire místico y de incógnita a este sitio. “Podemos hablar de una característica única en el mundo porque es circular concéntrica, entonces esa arquitectura rompe con esquemas”, señaló la guía del lugar, Bertha Pérez. El hecho de que sea concéntrica quiere decir que comparte ver ios círculos un mismo eje, como alguna vez lo ejemplificó el arqueólogo que la descubrió, Phil Weigand, se puede comparar con “los rellenos de las cazuelas de barro, una grande, luego dentro otra más pequeña, luego otra pequeña, hasta llegar a la más chiquita”. El sitio que fungía como un centro ceremonial, tiene una antigüedad confirmada de entre 2 mil 100 y 2 mil 350 años, y se conforma por diez altares; en los que se encontraron piezas de cerámica y algunos restos humanos a manera de entierros secundarios, es decir, cuando la
gente pobló Guachimontones se trajo los restos de sus seres queridos y los sepultaron. Se dice que aquí se practicaba el ritual del volador, algo semejante a los voladores de Papantla, pero según la figurilla de barro que se encontró, lo realizaba un solo personaje: un sacerdote en el poste, quien simulaba el vuelo del pájaro, un ritual que se hacían para llamar al dios del viento. Así, los basamentos que están a simple vista fungieron como palcos de honor, en los cuales sólo los jerarcas podían tener acceso. Según la guía de del lugar, hay 52 zonas arqueológicas como Guachimontones, siendo ésta la más grande, y todas ellas están distribuidas alrededor del Volcán Tequila. “Se desconoce el nombre de la cultura, porque si estamos diciendo que es única en el mundo, no hay punto de comparación; entonces con qué otro lo anexamos, entonces el arqueólogo le dio provisionalmente el nombre de la cultura Teuchitlán. Habla de Teuchitlán porque es el pueblo más cercano y habla de una tradición porque fue ocupada por tres asentamientos distintos y siguieron un patrón de conductas y se hizo una tradición”. Prácticamente desde el 2004 el público tiene acceso a la zona, sin embargo, se considera formalmente desde hace dos años, ya que fue en esta fecha cuando se abren las puertas del Museo del Sitio para darle mayor interés. Sin embargo, el primer contacto que se tiene del sitio fue en 1962 gracias a Celia García y su es-
poso Phil Weigand, quien se interes a en la zona y durante 30 años se dedicó a explorar la región. “Como era extranjero, no le daban facilidades… él no podía excavar poquito, porque eso podría ser motivo de una deportación, entonces él estuvo trabajando durante 30 años de peón con otros arqueólogos, aunque él tuviera doctorado en arqueología. “El Colegio de Michoacán lo apoyó para explorar toda la región… y gracias a eso encuentra las 52 zonas arqueológicas, Guachimontones, en Nayarit, Colima, Michoacán, Zacatecas, Querétaro y sur de Sinaloa; pero no alcanza a estudiarlas, no se sabe si son de la época de Guachimontones o si son posteriores, eso nos habla de que si en una momento dado son de la época de Guachimontones, fue un imperio muy grande en occidente; pero si no es así, nos habla de la influencia tan grande que este grupo pudo haber tenido con esos lugares de occidente”. Guachimontones toma su nombre gracias a la abundancia del árbol del guaje, una planta endémica que aún hay por montones y que se puede apreciar a lo largo del recorrido. Por si fuera poco, la vista desde el basamento más alto es espectacular. Teniendo como fondo el agua cristalina de la presa de la Vega y el colorido pueblo de Teuchitlán y la vista del basamento concéntrico, Guachimontones es un lugar único, enigmático y de respiro a unos pocos minutos de la ciudad de Guadalajara.
INFORMES
Horarios: 9:00 a 17:00 horas Museo interactivo (lunes cerrado) Costo: $30 pesos general, $15 pesos estudiantes y maestros Personas de la tercera edad y menores de 12 años gratuitos Entrada Gratuita lunes y martes http://guachimontones.org/
¿CÓMO LLEGAR?
Auto: Hay que tomar la carretera Nogales, desviación Ameca y al llegar a la desviación tomar Ahualulco de Mercado. Autobus: De la central camionera vieja de Guadalajara o en la de Zapopan, tomar rumbo hacia Teuchitlán. El costo es de $60 pesos. Otros sitios de interés Presa de la Vega, una zona arbolada ideal para hacer un ‘picnic’ o bien deleitarse con algunos de los productos que ofrecen los restaurantes que se encuentran en la zona. Ruta del Tequila. A unos minutos puedes visitar Tequila y descubrir el proceso de elaboración de la bebida nacional por excelencia y adentrarte al folclor de este municipio.
¿DÓNDE DORMIR?
1
Hacienda Labor de Rivera Carretera Guadalajara Tala Etzatlán km 55. Tel: 01 33 36 16 9198 http://www.haciendalalabor.com/en/hacienda Hotel Boutique ubicado a escasos 5 minutos de Guachimontones, esta hacienda que data de 1560, guarda entre sus paredes la historia como una región azucarera y tequilera, sobreviviendo a la Revolución Mexicana y al paso de los años que la fueron transformando en un lugar de reposo absoluto y convivencia con la naturaleza. Cuenta con servicios de masaje, terraza, restaurante gourmet, capilla, paseo a caballo por las zonas aledañas y hasta con un lienzo charro que lo hacen único. Sus amplias habitaciones de diseño campestre y sin televisión te envuelven, desde el momento en que das el primer paso, en un ambiente de tranquilidad y desenchufe.
3
2
1 Desde lo alto de la zona arqueológica se puede divisar el panorama del pueblo y de la presa de la Vega. 2 Una probadita del bello paisaje que los turistas disfrutan durante su estancia 3 Hacienda Labor de Rivera ha sido testigo de decenas de años de historia que se ven reflejados en sus paredes./fotos: Gina Trejo