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Colin Gray

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12) El ataque aéreo no es más que "bombardeo recreacional"; los pilotos vuelan tan alto que, posiblemente, ellos no pueden golpear sus blancos con total seguridad.

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13) A pesar de todo lo dicho por los aviadores, el empleo del poder aéreo subsiste como el uso indiscriminado de la fuerza militar que, deliberadamente, convierte en blanco a los civiles.

Colin S. Gray

La estrategia es el empleo de la fuerza y la amenaza de su empleo para los fines de la política según lo disponga la propia política. Es el puente que conecta la política con el poder militar.

El profesor británico americano Colin S. Gray (1943) ha publicado números textos de historia militar y estrategia, entre los que se destacan: El apalancamiento del poder marítimo: la ventaja estratégica de las armadas en la guerra (1992); Las armas no hacen guerra: política, estrategia y tecnología (1993); Exploraciones en la estrategia (1996); La Segunda Era Nuclear (1999); Estrategia moderna (1999); Estrategia para el Caos: Revoluciones en asuntos militares y otras pruebas de la historia (2002); Estrategia e historia: Ensayos sobre teoría y práctica (2006); Guerra, paz y relaciones internacionales. Una introducción a la historia estratégica (2007). The Strategy Bridge: Theory for Practice (2010); Fuerza aérea para el efecto estratégico (2012).

En 2002, junto a Jeannie L. Johnson, publicó La Práctica de la Estrategia,

106 que inicia señalando, que los “genios estratégicos nacen más que se hacen” y que los estudios estratégicos modernos no han tenido un buen desempeño como educadores de mentes estratégicas potenciales. La evidencia está en la literatura y, a continuación, pasan a describir las cualidades que un buen estratega necesita para ser efectivo, los obstáculos al desempeño estratégico competente presentados por las tendencias actuales en estudios estratégicos y por las circunstancias del mundo real: los estrategas deben ser una mezcla de teórico, planificador, líder y comandante, pero el equilibrio más efectivo entre estas cualidades es particular al tiempo y al lugar.

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106 COLIN S. GRAY; JEANNIE L. JOHNSON. “La Práctica de la Estrategia”, en Strategy in the contemporary world, de John Baylis; James J. Wirtz; Colin S. Gray. Oxford University Press, 3era edición, 2010, pp. 372-390. 107 Ibídem, p. 373.

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Luego señala que los clásicos de la teoría estratégica general se dividen en tres grupos:

Un primer grupo formado por 1) Carl von Clausewitz, On War, con el libro más profundo sobre la teoría de guerra y estrategia jamás escrito y su argumento refleja cambios importantes en la comprensión del autor. Pese a algunos problemas de traducción, sería según él la obra más valiosa sobre estrategia disponible. 2) Se agrega Sun Tzu, con el El arte de la guerra, Sun Tzu es un brillante tratado conciso. A diferencia de Clausewitz, Sun Tzu ofrece consejos directos para ayudar a salir victorioso en la guerra. También, a diferencia de Clausewitz, Sun Tzu escribe no solo sobre la guerra, sino sobre las relaciones entre la guerra, la estrategia y el arte de gobernar. 3) En este grupo también adscribe a Tucídides con La guerra del Peloponeso. Tucídides no se propuso escribir una teoría general de la estrategia. La guerra del Peloponeso, sin embargo, contiene algunos de los mejores ejemplos sobre estrategia.108

La segunda división de estrategas clásicos tiene cuatro miembros: 1) El Barón Antoine Henri de Jomini, con Arte de la Guerra que, aunque hoy esté subvalorado fue el mejor intérprete de Napoleón. Aunque su arte de la guerra está viciado y, ciertamente, fechada en mucho de su asesoramiento detallado, es, no obstante, poblada con importantes ideas sobre la guerra como un todo, la guerra, la estrategia, arte operacional, las tácticas, la tecnología y la logística. Merece ser leído, aunque con cuidado, por parte de los estrategas de hoy. 109 2) Basil H. Liddell Hart, con su libro Estrategia, donde el enfoque indirecto es una obra de gran amplitud y profundidad, empañada, principalmente, por la determinación del autor para vender el "enfoque indirecto" como el mágico elixir que garantiza el éxito. El enfoque indirecto es una idea válida e importante. Sin embargo, no es la clave de la victoria como su autor asevera. 3) Edward N. Luttwak, con su obra Estrategia: la lógica de la guerra y la paz es muy reciente, pero se ha podido incluir como un clásico. El autor trata los diversos niveles de la guerra, sistemáticamente, empleando la paradoja y la ironía como elementos inherentes de la estrategia. Por otra parte, Luttwak indica que no hay armonía natural entre política, estrategia, operaciones y tácticas, aunque poco original, sin embargo, es profundo y de gran importancia práctica. 4) J. C. Wylie, Estrategia militar: una teoría general del control del poder es uno de los trabajos más profundos escritos en

108 Ibídem. 109 Ibídem, p. 374

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el siglo XX. Después de Clausewitz, Wylie, sabiamente, insiste en que el objetivo de la guerra es ganar un cierto control sobre el enemigo.110

En la tercera división de estrategistas clásicos incluidos por Colin S. Gray y Jeannie L. Johnson destaca solo al estadounidense Bernard Brodie (19101978), autor de Estrategia en la edad de misiles, y La guerra y Política, textos que por su valioso contenido ameritan ser incluido dentro de los grandes teóricos de la estrategia. Brodie se centró en la defensa de EE. UU. De acuerdo con los problemas emergentes en la edad nuclear y de misiles estratégicos, su alcance teórico era extenso y sus juicios son profundos.

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En el contexto de los tres grupos de estrategas, Gray y Johnson señalan que los modernos estudios estratégicos todavía no han presentado argumentos convincentes para reemplazar a los estrategas clásicos. Finalmente, los autores concluyen:

Incluso es probable que el estratega más consumado actúe de forma tal que esté condicionado por el contexto, que el prejuicio y la ignorancia lo vuelva imperfecto. Sin embargo, no se sigue que los estudios estratégicos sean dañinos o innecesarios. Por el contrario, son esenciales, a pesar de que solo pueden ser realizados por personas defectuosas que trabajan en instituciones disfuncionales. Esto es lo que somos y cómo tenemos que trabajar: punto. El único camino que seguir es continuar practicando las virtudes de buenos estudios estratégicos, tomar en serio la construcción de la teoría universal y exigir más rigor y amplitud en los estudios que producimos. Nuestro oficio tiene una relevancia intemporal, pero los estadistas pueden, y de vez en cuando y de un lugar a otro, elegir ignorarlo. Si alguna vez el puesto de estratega profesional emergiera dentro de las políticas del poder, ese rango se habrá ganado gracias a una sólida comprensión del pasado beligerante y la capacidad de hacer que sus lecciones sean relevantes en la actualidad.112

En su texto, Guerra, paz y relaciones internacionales. Una introducción a la historia estratégica, 113 Colin Gray incluye una completa interrelación de temas de estrategia y cuya tesis central es que la guerra y el temor sobre ella ha sido lo más potente entre las influencias que han conformado el curso de las relaciones internacionales durante los últimos dos siglos. El texto se adhiere a

110 Ibídem. 111 Ibídem. 112 Ibídem, p. 389. 113 GRAY, COLIN, S. War, Peace and international Relations. An Introduction to Stategic History.

Milton Park, Abingdon, Oxon, 2012.

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