Living off the grid Viviendo fuera de la red Renovating with a light touch Renovaciones con un toque ligero
PLUS Properties & Professionals
¡A todo
color! In Hocabá, an artist reaches new heights En Hocabá, una artista alcanza nuevas alturas
MEXICO $69 MN
“
We wouldn’t have survived this long in Mérida without them!” —Janelle Forsythe, homeowner
Relax.
Let us handle the details.
19 Director Lee Steele lee@roofcatmedia.com
Director Comercial Eduardo Vázquez evazquez@roofcatmedia.com Coordinadora Comercial Ayerim Vallejo avallejo@roofcatmedia.com Representante Cancún Jenny De Llano jdellano@roofcatmedia.com Gerente de Circulación Alejandro Pinto Tolosa circulacion@roofcatmedia.com
CONTACTOS Suscripciones suscripciones@roofcatmedia.com
Editor Carlos Rosado van der Gracht carlosrosado@roofcatmedia.com Consultor Editorial Pablo Arroyo Díaz pabloarroyo@roofcatmedia.com Editor Web Verónica Garibay Saldaña veronica@roofcatmedia.com Editor de Proyectos Especiales Abraham Boroquez proyectos@roofcatmedia.com COLABORADORES EN ESTE NÚMERO Melissa Adler Maggie Cale Juanita Stein Chris Strickling
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DIGITAL yucatanathome.com
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Yucatán at Home AÑO 1, NÚMERO 1 Todos los derechos reservados por Roof Cat Media S de RL de CV, Paseo de Montejo 475C, Piso 3 x 37 y 39 Col. Centro Mérida, Yucatán, México. Prohibida la reproducción total o parcial del contenido sin autorización previa y por escrito de los editores. La revista asume que el material aquí presentado es original y no infringe derechos reservados de ley. Reserva de derechos de uso exclusivo del título. Yucatán at Home no se hace responsable por el contenido de sus anunciantes.
índice SOURCEBOOK 6
8
10
The stories furniture tells / Historias que nos cuentan los muebles
BUILDING / CONSTRUCCIÓN Just Asking / Sólo preguntaba
EN LAS CALLES Roof cats and perros callejeros
GENTE
14
Jim Smiley and his orchid sanctuary
16
Alejandra Rodriguez: Hago Colgantes
COVER STORY 19 Hello, Hocabá y hola Monica Petrus
29
YUCATÁN HOMES & LAND
EN CASA
39
Renovando con un toque ligero en Progreso
46
Crea espacio: 1 home with 2 studios
54
An Alaskan in Yucatán goes off the grid
Properties and Professionals
46
FRAMED 64 Manuel Taure y su Graphic Bakery
54
10
Welcome ucatán is growing like no other place I’ve ever seen. If you’re reading this, you’re probably part of that incredible growth. You have decided to make a home here. Maybe it’s your new forever home, or maybe just a place to escape from the world’s madness. We get you, and we have put together a magazine to help you make good choices.
Bienvenidos ucatán está creciendo más que cualquier lugar que he conocido. Si estás leyendo esto, lo más probable es que seas parte de este increíble crecimiento. Has decidido construir un nuevo hogar aquí. Tal vez sea un refugio para escapar del caos del mundo, o tu nuevo
Yucatán at Home exists to inform as well as inspire.
hogar permanente. Te entendemos y por eso hemos creado
We’ll also get to know the people who are moving
esta revista para ayudarte a tomar las mejores decisiones.
here, shaping a new community of nationals and foreigners who are equal parts bewildered and beguiled by Yucatán. We don’t let obstacles keep us from enjoying the magic Yucatán has to offer. Heat, dark spaces, humidity, salt air — all these things are worth learning to grapple
La misión de Yucatán at Home es informar, pero también inspirar. Conoceremos a personas nuevas de otras regiones del país, así como del extranjero quienes, como nosotros, se han enamorado de esta tierra. No permitas que los obstáculos te eviten disfrutar la
with. Also, don’t forget how relatively isolated Yucatán is,
magia que Yucatán ofrece. El calor, la humedad, el aire
which perhaps was its appeal to begin with. It also means
salado — todos son manejables. No olvidemos también lo
getting auto or appliance parts, and people trained to
relativamente aislado que Yucatán está, lo cual es parte de
work with them, is an ongoing challenge. We have advice
su encanto. Pero esto también trae dificultades a la hora de
for that, too.
encontrar refacciones y especialistas para instalarlos. Para
We do like it when a home’s architecture and décor
esto también tenemos consejos.
references the local culture, tipping its hat to tradition.
Nos encantan las tradiciones de Yucatán y la arquitectura
Or a renovation that honors the antiquity of a home by
que refleja su distintiva cultura. A la hora de renovar, siempre
repurposing some of its tiles or keeping a niche in the
hay oportunidades para honrar al pasado, incorporando de
wall just because it’s always been there.
maneras novedosas antiguos nichos o viejas pastas de loza
But we won’t judge if you go ahead and build something totally your own. Assembling your “mood board”
— simplemente porque siempre han estado ahí. Pero tampoco te juzgaremos si decides construir algo
and imagining floor plans is the fun part. Just be sure to
completamente nuevo. El imaginar y armar el proyecto,
also be smart about the boring things like drainage and
es parte de la diversión. Solo procura prestar atención a
building materials.
aquellos detalles aburridos como drenajes y materiales de
We strive to be your resource for all of these things. Buying a property in Yucatán, building a home, and
construcción. Buscamos ser tu mejor recurso para todo esto y más. El
making it your own, will be one of the most rewarding
comprar y construir un hogar en Yucatán, el cual se sienta
projects of your life. If you do it right.
verdaderamente tuyo, es uno de los proyectos más gratificantes que experimentarás en tu vida. Claro, si lo haces correctamente.
Lee Steele Director, Yucatán at Home lee@roofcatmedia.com
4 | YUCATÁN AT HOME
YUCATÁN AT HOME | 5
Sourcebook The stories furniture tells
J
uan Pablo Tintore has long loved bringing life back to vintage furniture through the art of restoration. Long before Juan Pablo began Tintore Muebles Vintage as a business in 2015, he had already been collecting furniture for well over a decade. Prior to opening his showroom, he mostly restored furniture for fun or to add style to the apartments he was renting. As his expertise grew and he started to run out of room, he decided it was time to turn his passion into a business. “This is something I really love. It gives me such joy to turn a piece someone else saw as disposable into a work of art!” Juan Pablo exclaims with a grin. Juan Pablo utilizes a variety of techniques in his work, but is most fond of restoring furniture in a way that features, rather than erases, evidence of wear and tear; while at the same time ensuring functionality and sturdiness. While some people may prefer furniture that looks like new, Juan Pablo feels that stripping furniture of the features which make it unique is to erase its history and rob it of character. Juan Pablo says that his customers are very diverse. They include international residents living in large homes downtown, but also local families wishing to restore pieces of furniture which they may have inherited from a parent or grandparent. Antique furniture in Yucatán can be found at any price range in garage sales, shops and occasionally for free on discarded heaps on sidewalks. The most coveted styles include pastel-colored art deco and French-style provincial furniture. However, Juan Pablo tells us that his favorite pieces tend to be the less ornate — but more functional — traditional Yucatecan furniture of the early- to mid-20th century. Unfortunately, this kind of furniture is somewhat hard to find, as after a generation or two and a broken leg or hinge, they often would end up being used as firewood. When asked about his greatest finds, Juan Pablo recalls an occasion in which he stumbled upon a treasure trove of antique furniture inside an old hacienda in Mérida’s south. “The new owner wanted everything out as he wanted to redecorate from scratch, so I was more than happy to buy up the entire lot. There is nothing I love more than when treasure hunting pays off like that!” he says. — Carlos Rosado van der Gracht 6 | YUCATÁN AT HOME
Libro fuente
Las historias que los muebles cuentan
D
esde hace ya muchos años, Juan Pablo Tintore ha disfrutado el revivir viejos muebles a través del arte de la restauración. Antes de lanzar Tintore Muebles Vintage como negocio en el 2015, Juan Pablo ya había estado coleccionando estos artículos por más de una década. Antes de inaugurar su showroom, Juan Pablo ya restauraba muebles para amueblar algunos departamentos que daba en renta. Con el paso del tiempo fue perfeccionando sus técnicas y pronto se dio cuenta de que ya no tenía espacio. En ese momento decidió convertir su pasión en un negocio. “Esto es algo que realmente amo, ¡me da tanta alegria el convertir un objeto que para alguien era basura en una obra de arte!” exclama Juan Pablo con una sonrisa. Juan Pablo utiliza una gran variedad de técnicas en su labor, sin embargo prefiere restaurar muebles de tal manera que mantengan su historia a través de lo que otros pudieran considerar imperfecciones. Mientras que algunos prefieren que una pieza restaurada se vea como nueva, para Juan Pablo el borrar evidencias de su uso es borrar la personalidad e historia de la pieza. Juan Pablo nos cuenta que tiene todo tipo de clientes. Entre ellos están los extranjeros que viven en grandes casas en el centro histórico, pero también familias locales que desean restaurar algún mueble antiguo, haciendo así remembranza de sus dueños anteriores, a menudo una madre o abuelo. En Yucatán es posible encontrar muebles antiguos en un gran rango de precios, ya sea en ventas de garage, tiendas o incluso de forma gratuita en las calles de la ciudad. Los estilos más solicitados incluyen los muebles art decó y los de estilo francés conocidos como provenzales. Sin embargo, Juan Pablo nos cuenta que él siempre ha preferido los muebles tradicionales yucatecos de mediados del siglo 20. Desafortunadamente, este estilo de muebles — sencillos pero muy funcionales — se han vuelto algo escasos, debido a que sus dueños comúnmente los usaban como leña después de una o dos generaciones de uso. Cuando le preguntamos acerca de sus recuerdos favoritos, Juan Pablo nos contó de una ocasión en la que encontró un lote de hermosos muebles en una vieja hacienda localizada en el sur de Mérida. “El nuevo dueño solo quería deshacerse de todo porque quería empezar a decorar desde cero, así que yo con mucho gusto compré todo el lote. ¡No hay nada que disfrute más que salir a cazar tesoros y encontrar algo así!" — Carlos Rosado van der Gracht
Tintore Muebles Vintage Fracc. Las Américas. 999-242-0764; Instagram: @tintoremueblesvintage
YUCATÁN AT HOME | 7
Building “Keep a closer eye on where the rainwater drainage runs to!”
“I would have better and more kitchen cabinets, I would go to mostly drawers. And I would double the amount of electrical outlets!”
Just asking
“I remodeled. I would do the whole project at once and not in stages. So disruptive. I still need a new kitchen.”
For anyone who’s built a house in Yucatán, what is the one thing you’d do differently if you could start all over? Question posed on Facebook. Here’s what people said.
“Include solar panels from day 1. Also better quality windows.” 8 | YUCATÁN AT HOME
“If working with an architect, use only vendors that the architect chooses.”
“Tendría más y mejores gabinetes en la cocina, sobre todo cajones. ¡También duplicaría el número de contactos eléctricos!”
Construcción
“¡Prestaría más atención a donde se drena el agua cuando llueve!”
“Al remodelar hubiera completado el proyecto en una sola fase, en vez de dividirlo en etapas. Fue muy problemático y todavía necesito una cocina nueva.”
Sólo preguntaba
Para cualquiera que haya construido una casa en Yucatán, ¿qué harías diferente si pudieras volver a empezar desde cero? Pregunta planteada en Facebook. Esto es lo que respondieron.
“Si trabajas con un arquitecto, utiliza solamente los proveedores que elija el arquitecto.”
YUCATÁN AT HOME | ISSUE 1
“Incluir paneles solares desde el primer día. También instalar ventanas de mejor calidad.” 9
En las Calles
Roof cats and street dogs Gatos de azotea y perros callejeros BY / POR LEE STEELE ILLUSTRATION / ILUSTRACIÓN JUAN PABLO QUINTAL GARCÍA
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What to do when your four-legged neighbors come around
C
ats replaced people as my friends soon after quarantine 2020 began. Watching the street took on new fascination after lockdown. The utility roof was meant for ventilator and air conditioning equipment, not for cocktails, but it afforded us a view of the street. So we got into the habit of dragging out a couple of Acapulco chairs each evening at sunset. Eventually, a white kitten peered around a planter and stared us down with big saucer eyes. I’ve never had a cat, but some instinct kicked in. “Awwww. Do we have anything to feed her?” I asked, not quite recognizing my own voice. We found some leftover ham and hastily chopped it up for her. In my mind, she was grateful as she gobbled it down and crept away humbly with her tail between her legs. Flash forward a week later, and I was a slave to eight cats, probably her relatives, demanding in no uncertain terms that I feed them Cat Chow twice a day, and on time. I was pulled into service.
Que hacer cuando tus vecinos de cuatro patas vienen
L
os gatos reemplazaron a mis amigos humanos poco después del inicio de la cuarentena en el 2020. Observar la calle se tornó en algo fascinante durante el encierro. El propósito de mi azotea siempre había sido albergar un minisplit, no precisamente para beber cócteles; sin embargo, el techo brinda una gran vista de la calle. Así que nos hicimos la costumbre de sacar un par de sillas tipo Acapulco para ver el atardecer. De repente un gatito blanco se asomó por detrás de una macetero y nos miró detenidamente con sus grandes ojos. Nunca había tenido un gato, pero algo en mí se estremeció. ““Awwww, ¿tenemos algo para darle de comer?”, pregunté con una voz que ni siquiera parecía mía. Encontramos un poco de jamón que nos había sobrado y lo cortamos en trocitos. En mi mente, la gatita estaba agradecida, y al terminar de comer se fue humildemente con la cola entre las patas. Una semana después me había vuelto YUCATÁN AT HOME | 11
More than a year later, they’re still part of my daily routine. I’ve gone from feeding one little beggar to accommodating 10 or 11 nervous, neurotic cats: breakfast at 6 in the morning and dinner at 6 that evening. They cry if I don’t come, and the one affectionate cat of the colony is too upset to be petted if I’m late. Even though there are many more cats in the neighborhood, this group has managed to maintain a limited membership. I open the door to my azotea, and the same brown cat — the only affectionate one — rubs against my leg and lets me scratch his head. The same skinny caramel-colored kitty looks me straight in the eyes and meows at me to hurry up (or maybe it’s an ode of thanks), and the same white Tomcat rubs against the doorway, claiming it as his, I suppose. Occasionally, a pack of huge dogs passes the house. But they come and go, and apparently roam a larger territory — all on the sidewalks of the Centro. We have neighbors who feed them, as well. Some people prefer a dog from a breeder, but most every dog owner I know here has a “rescue.” Shelters are overflowing with stray dogs, and opportunities for making furry new friends are endless. But stray cats outnumber canines by far. Dog are occasionally rounded up by the city, but not the cats, which are more wily and find relative safety on Yucatán’s mainly flat, interconnected rooftops. Caring for these animals can get you emotionally involved. It also carries responsibilities. After all, these creatures are living on the edge. They go hungry, they fight among themselves, they get diseases. And they are part of an exploding population, so the cycle continues. The humane thing is to capture them, find a vet to treat them for worms, get them vaccinated, spayed or neutered, and then adopted. It’s easy to find veterinarians online, but if you want house calls, some are booked out for months, not helpful for urgent situations. Some residents buy or borrow their own wire traps, using sardines or pieces of stinky meat as bait. I still ask myself if I should have even gotten involved, to begin with. Aren’t cats supposed to be finding their own prey? Did I do the right thing by feeding them to begin with? Lourdes García, vet owner of Dog Prime near Kanasín, said what I did was absolutely fine, even laudable. But she highlighted the importance of having them spayed and neutered as soon as possible. If you feed them, bringing them to health, and fail to have them sterilized, they are likely to reproduce even faster than they would have otherwise. 12 | YUCATÁN AT HOME
esclavo de ocho gatos, probables parientes de la gatita original. Estos exigían que les alimentara con su Cat Chow puntualmente, dos veces al día. Claramente, tenía un nuevo deber. Más de un año después, son aún parte de mi rutina diaria. Pasé de alimentar a una sola gatita, a darle de comer a 10 u 11 gatos nerviosos y neuróticos. Les sirvo su desayuno a las 6 de la mañana y la cena a las 6 de la tarde. Lloran si no llego puntualmente, y ni siquiera el más cariñoso del grupo se deja acariciar si llego tarde. Aunque hay muchos gatos en el barrio, este selecto grupo se ha logrado mantener del mismo tamaño. Cuando abro mi puerta a la azotea, el gatito más querendón se soba en mis piernas y me permite rascarle la cabeza. El gato de ojos color caramelo, me mira directamente y maulla, como diciéndome que me apure o, tal vez, dándome las gracias. El gato blanco se soba en la puerta, marcando su territorio, supongo. De vez en cuando, una jauría de perros pasa por la casa. Van y vienen, patrullando su territorio por las banquetas del centro. También tenemos vecinos que se ocupan de alimentarlos. Algunas personas prefieren comprar perros de raza, pero casi todos los dueños que conozco adoptaron sus animalitos en algún albergue. Estos sitios están llenos de perros sin hogar y oportunidades para encontrar un nuevo amigo peludo. Pero los gatos son aún más abundantes que los perros, y por mucho. De vez en cuando el municipio se encarga de capturar algunos perros callejeros, pero esto no pasa con los gatos. Esto es porque son más difíciles de atrapar y encuentran relativa seguridad brincando de techo en techo. El cuidar a estos animales se puede volver algo muy emocional. También lleva consigo responsabilidades. Después de todo, estas criaturas están viviendo al margen. Pasan hambre, se pelean entre sí, se enferman, y son parte de una población siempre creciente. Y así, el ciclo continúa. La opción más humana es atraparlos, llevarlos a un veterinario para que los traten, vacunen y esterilicen; para después ser adoptados. Es fácil encontrar veterinarios en internet, pero si quieres encontrar uno que haga visitas a domicilio, algunos tienen listas de espera de varios meses, lo cual no es de mucha ayuda en situaciones urgentes. Algunos vecinos improvisan trampas para atrapar a los gatos usando sardinas u olorosos pedazos de carne como carnada. Aún me pregunto si debí haberme involucrado. ¿No se supone que los gatos pueden encontrar sus propias presas? ¿Hice lo correcto al alimentarlos? Lourdes García, la veterinaria y dueña de Dog Prime cerca de Kanasín dice que lo que hice estuvo bien, e incluso admirable. Pero recalcó la importancia de esterilizarlos lo más pronto posible. Si les das de comer y contribuyes a su salud sin esterilizarlos, lo más probable es que se reproduzcan aún más rápido.
En las calles What my rescue dogs taught me
Lo que aprendi rescantando perros
BY MELISSA ADLER
POR MELISSA ADLER
thought I knew a lot about dogs until I took in two rescues. I was wrong. Rescuing a dog off the street, one that’s never been in a home or felt a tender hand, is a completely different story. Four years ago, I found a terrified puppy on the sidewalk, cringing every time a car drove by. I scooped her up and brought her home. Within two days, she had taken over my life. She also had fallen in love with her two very large siblings (my monsters that moved here with me from the States). She had been someone’s pet I’m sure, but obviously no longer wanted or cared for. A year later, a malix came into our lives. There are thousands of them here in Yucatán. Malix is the Mayan word for “ordinary” but they are anything but. He had been injured and needed his leg amputated. The woman who found him on the street got him the medical attention he needed and the community chipped in to cover the bills. This is when I realized I didn’t know as much as I thought about dogs. I took in a dog that had never been behind a closed door. Who spent every day of his life in search of food. Who was wary of humans. He’s taught me patience, how to observe and to accept that what he chooses to offer is the best I can hope for and more than enough. Fast forward three years. My first rescue struts through the house like a cross between Bugs Bunny and Jessica Rabbit. My malix has learned that with a good running leap, my bed is the best place on earth. And I’ve learned that there will always room in my home and heart for another dog. If you find you have room in your heart and home, contact Evolución Animal AC (evolucionanimal.org), a no-kill shelter in Mérida that has hundreds of dogs and cats, young and old, looking for someone like you.
o pensaba que sabía mucho acerca de perros hasta que rescaté a dos callejeros. Estaba muy equivocada. Los perros de la calle, que nunca han estado en un hogar y desconocen el cariño humano son completamente distintos. Hace cuatro años, me encontré a una cachorrita en la banqueta. Se asustaba cada vez que pasaba un auto, así que la recogí y llevé a casa. Después de dos días había consumido mi vida por completo. La perrita se enamoró rápidamente de sus nuevos hermanos mayores, mis dos monstruos que me traje de Estados Unidos. Estoy segura de que había sido mascota de alguien, pero obviamente ya no la estaban cuidando. Después de un año, un perro malix entró en nuestras vidas. Hay miles de ellos aquí en Yucatán. En maya, por malix se entiende “sin raza”, sin embargo tenía muchísima personalidad. Había sufrido un accidente por lo que una de sus piernas fue amputada. La mujer que lo encontró le consiguió ayuda médica, la cual fue pagada por varios miembros de la comunidad. Ahí fue cuando me di cuenta que no sabía tanto como yo pensaba acerca de los perros. Metí a mi casa a un perro que nunca había estado tras una puerta. Un perro que había pasado todos los días de su vida en busca de comida y quien le temía a los humanos. Me enseñó paciencia y como aprender a aceptar sus limitaciones. Tres años después, mi primera perrita adoptada ya está corriendo por la casa como si fuera una cruza entre Bugs Bunny y Jessica Rabbit. Mi malix ya aprendió que con un buen salto puede alcanzar mi cama, el cual ya es su lugar favorito en todo el mundo. Lo que yo aprendí es que siempre habrá espacio en mi casa y mi corazón para otro perrito. Ponte en contacto con Evolución Animal (evolucionanimal.org). Este refugio nunca sacrifica a sus animales, y está lleno de cientos de perros y gatos en busca de alguien como tú.
I
Y
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Gente
Jim Smiley Jim Smiley grows more than orchids cultiva más que orquídeas BY CHRIS STRICKLING
S
tep into Jim Smiley’s orchid sanctuary in Tepakán, Yucatán and you can feel his connection to the land. The way he talks about his plants as if they were family puts most people at ease. It’s hard to imagine that eight years ago this colorful, lush property had “…no ornamental plants at all. There was no grass, there were a few mature fruit trees, which was a draw…but the place was just raw.” The beautiful gardens that visitors see now are the payoff for eight years of smart, concentrated attention to an abandoned plot in a small pueblo. But, what brought him to Tepakán? From the early 1980s, Smiley’s thriving vintage clothing shops in New Orleans and New York City kept him busy and engaged in both communities. But 2006 found him re-evaluating the trajectory of his life. “I suffered a lot of anger and depression about what happened after Hurricane Katrina,” he admits. “I loved my work in New Orleans and New York, I never dreamt that I would have walked away from it, but after Katrina I needed to make a change because the city would never be the same.” Smiley had traveled to Mexico for several years, visiting Mexico City, Oaxaca, and Acapulco. After several short stays in Mérida, he caught the fever. “There were so many things that seemed normal to me: the historic buildings, the heat and the humidity, the colonial houses. And I have always lived near the Gulf Coast.” Entranced by Mérida’s older homes, he bought “a big beautiful colonial house with a small garden.” Seven years later, he flipped the paradigm and went looking for Jim Smiley a small house on a large property where he could create the “big beautiful garden” of his dreams. A search for hundred-acre properties brought him into the pueblos. His friends discouraged the move. “They seemed worried that I would not have proper health care outside of the city, or access to fresh foods or minor emergency care.” After striking out on larger properties, Smiley met the owner of the mid-sized Tepakán property. When he saw that the modest house already had water and electricity, and a clinic and grocery store were nearby, he knew he was home. Smiley soon discovered Melipona bees living on the property. Indigenous to Central America, the stingless bees are endangered due to the destruction of their habitat. The “Mayan honey” made in Yucatán for generations offers proven health benefits including antimicrobial, anti-inflammatory, anti-diabetic aspects, wound healing properties and many more. Smiley is working with his bee-keeping neighbors to explore ways to support the hives and develop products from the plentiful beeswax. “The bees,” he says, thoughtfully, “are an important part of pollination of many of our plants, including orchids.” a new life in a new environment took time. 14 Building | YUCATÁN AT HOME
POR CHRIS STRICKLING
A
l entrar en el santuario de orquídeas de Jim Smiley en Tepakán, Yucatán, se puede sentir su conexión con la tierra. La forma en que habla de sus plantas como si fueran de la familia hace que la mayoría de la gente se sienta tranquila.
Es difícil imaginar que hace ocho años esta colorida y exuberante propiedad no tenía “…ninguna planta ornamental. No había pasto, había algunos árboles frutales maduros, lo que era un atractivo… pero el lugar estaba virgen”. Los hermosos jardines que los visitantes ven ahora son el resultado de ocho años de atención inteligente y concentrada en una parcela abandonada en un pequeño pueblo. Pero, ¿qué le llevó a Tepakán? Desde principios de la década de 1980, las prósperas tiendas de ropa vintage de Smiley en Nueva Orleans y Nueva York le mantuvieron ocupado y comprometido con ambas comunidades. Pero en 2006 se replanteó la trayectoria de su vida. “Sufrí mucha rabia y depresión tras el huracán Katrina”, admite. “Me encantaba mi trabajo en Nueva Orleans y Nueva York, nunca soñé que me alejaría de él, pero después del Katrina necesitaba un cambio porque la ciudad nunca sería la misma”. Smiley había viajado a México durante varios años, visitando Ciudad de México, Oaxaca y Acapulco. Tras varias estancias breves en Mérida, se convenció. “Había tantas cosas que me parecían normales: los edificios históricos, el calor y la humedad, las casas coloniales. Y siempre he vivido cerca de la costa del Golfo”. Encantado por las casas antiguas de Mérida, compró “una gran y hermosa casa colonial con un pequeño jardín”. Siete años después decidió cambiar el paradigma y se puso a buscar una casa pequeña en una propiedad grande, donde pudiera crear el “gran y hermoso jardín” de sus sueños. La búsqueda de propiedades de cien acres le llevó a los pueblos. Sus amigos desaconsejaron el cambio. “Les preocupaba que no tuviera atención médica adecuada fuera de la ciudad, ni acceso a alimentos frescos o atención de urgencia menor”. Tras tantear propiedades más grandes, Smiley conoció al dueño de la mediana propiedad de Tepakán. Cuando vio que la modesta casa ya tenía agua y electricidad, y que había una clínica y una tienda de comestibles cerca, supo que estaba en casa. Smiley no tardó en descubrir que en la propiedad vivían abejas meliponas. Estas abejas sin aguijón, originarias de Centroamérica, están en peligro de extinción debido a la destrucción de su hábitat. La “miel maya” elaborada en Yucatán durante generaciones ofrece beneficios probados para la salud, como aspectos antimicrobianos, antiinflamatorios,
“When I came out to Tepakán there was space to learn. For the first two years, my plan was to have two casitas for guests. I wanted a place where people could come and relax and experience the gardens. The orchids would become the focal point of the gardens.” Completing the two casitas of “Palapas Tepakan and Gardens” met that goal, drawing travelers and interested others to his eco-getaway. When Smiley turned his energy toward meeting neighbors, it meant talking with “…the lady selling vaporcitos that I loved to eat. Or the one who made delicious tamales. I got to know them through these interactions.” Riding his bike through the town, he was “struck by the pretty little gardens in the yards.” When he stopped to talk with them, they began visiting, bringing plants for him to buy. “I saw how happy they were to relate to me this way and it made me think that we should have an ongoing plan to help sell their plants.” For six years, Smiley hosted annual open-air markets in November at his home. “People brought plants to sell, or hammocks, all kinds of things they’d made. Sometimes the market went from house to house. It got so big that we couldn’t do it anymore.” In 2020, Smiley was a key founder of the Yucatán Orchid Society, open to all antidiabéticos, propiedades de curación de heridas y muchos más. Smiley who are interested in orchids of the está trabajando con sus vecinos apicultores para explorar formas de Yucatán Peninsula and southern Mexmantener las colmenas y desarrollar productos a partir de la abundante ico. The primary goal is to create cera de abeja. “Las abejas son una parte importante de la polinización de awareness of native orchids and muchas de nuestras plantas, incluidas las orquídeas”. promote conservation. Construir una nueva vida en el nuevo entorno llevó tiempo. Smiley isn’t shy about his “Cuando llegué a Tepakán había espacio para aprender. Durante los dos plant passions: “Orchids caught primeros años, mi plan era tener dos casitas para los huéspedes. Quería un me by surprise when I first lugar donde la gente pudiera venir a relajarse y experimentar los jardines. came here, and I’m absolutely Las orquídeas se convertirían en el punto central de los jardines”. La finalin love with them now.” ización de las dos casitas de “Palapas Tepakán and Gardens” cumplió ese objetivo, atrayendo a viajeros y otros interesados a su escapada ecológica. Cuando Smiley volcó su energía en conocer a los vecinos, significó hablar con “…la señora que vendía vaporcitos que me encantaba comer. O con la que hacía unos tamales deliciosos. Llegué a conocerlos a través de estas interacciones”. Al ir en bicicleta por el pueblo, le “llamaban la atención los bonitos jardines en los patios”. Cuando se detenía a hablar con ellos, empezaban a visitarlo, trayendo plantas para que él las comprara. “Vi lo contentos que estaban de relacionarse conmigo de esta manera y me hizo pensar que deberíamos tener un plan continuo para ayudar a vender sus plantas”. Durante seis años, Smiley organizó mercados anuales al aire libre en su casa, en el mes de noviembre. “La gente traía plantas para vender, o hamacas, todo tipo de cosas que habían hecho. A veces el mercado iba de casa en casa. Se hizo tan grande que no pudimos seguir haciéndolo”. En 2020, Smiley fue uno de los principales fundadores de la Sociedad de Orquídeas de Yucatán, abierta a todos los interesados en las orquídeas de la península y el sur de México. El objetivo principal es crear conciencia sobre las orquídeas nativas y promover su conservación. Smiley no es tímido sobre sus pasiones botánicas: “Las orquídeas me tomaron por sorpresa cuando llegué aquí, y ahora estoy absolutamente enamorado de ellas” YUCATÁN AT HOME | 15
Gente
A creative business takes root “Macrame pendants in cotton, henequen rope, colored yarn … Made by a quarantined millennial.” That’s how Alejandra Rodríguez aptly describes her enterprise on Instagram. Alejandra found herself making a living by helping people live with house plants after riding out the lockdown in her small Mérida apartment, a stone’s throw from the Paseo de Montejo. That’s when she focused on propagating plants and then dressing up her sprouts in elaborate knots, a craft that’s been coming back into vogue. She makes house calls, also taking her adept green thumb to restaurants and offices where potted plants tend to be ignored, get sick and die. But it was her macrame that got her noticed on social media and Hago Colgantes (I Make Pendants) was propagated as well. Alejandra studied architecture at UADY and started out professionally producing technical drawings of archaeology digs. That instagram.com/hagocolgantes 16 | YUCATÁN AT HOME
lasted six years until her passion for plants and working with ropes and fabrics took root. “What I really like is to do stuff with my hands,” Alejandra says. For a client’s outdoor hanging garden, Alejandra took some coarse rope and experimented with a variety of knots and weaves. A tradescantia zebrina, a spider plant and a philodendron were each contained in painted wooden containers and suspended from tree branches. The resulting macrame creations blend easily with the shady courtyard. Back in her studio are more hanging plants, many taking root in small containers of water. She took the second-floor walkup apartment, which has one large window facing in the general direction of the boulevard, 10 years ago when she wanted something convenient to school. The unit has no outdoor area, which could be considered inconvenient given her vocation, but the plants seem happy being her roommates. “I don’t need too much space. Actually I like smaller spaces,” says Alejandra. At first, “it was more for gifts for my friends.” But when the pandemic forced her to spend more time indoors, communing with her plants led her to an inevitable conclusion. “It was a hobby becoming something more regular, and I’m realizing I can make a living with it,” she recalls. — Lee Steele
Un negocio creativo echa raíces “Colgantes de macramé en algodón, cuerda de henequén, hilo de colores… Hechos por una millennial en cuarentena”. Así es como Alejandra Rodríguez describe su empresa en Instagram. Alejandra se ha ganado la vida ayudando a la gente a vivir con plantas de interior después de pasar el encierro en su pequeño apartamento de Mérida, a un paso del Paseo de Montejo. Fue entonces cuando se centró en la propagación de plantas y en vestir sus brotes con elaborados nudos, un oficio que ha vuelto a ponerse de moda. Hace visitas a domicilio, y también lleva su hábil pulgar verde a restaurantes y oficinas donde las plantas en maceta tienden a ser ignoradas, enfermar y morir. Pero fue su macramé el que la hizo notar en las redes sociales y Hago Colgantes se propagó también. Alejandra estudió arquitectura en la UADY y se inició profesionalmente realizando dibujos técnicos de excavaciones arqueológicas. Eso duró seis años hasta que su pasión por las plantas y el trabajo con cuerdas y telas echó raíces. “Lo que realmente me gusta es hacer cosas con las manos”, dice Alejandra. Para el jardín colgante exterior de un cliente, Alejandra tomó una cuerda gruesa
y experimentó con una variedad de nudos y tejidos. Una tradescantia zebrina, una planta araña y un filodendro fueron colocados en recipientes de madera pintados y suspendidos de las ramas de los árboles. Las creaciones de macramé resultantes se integran fácilmente en el patio sombreado. En su estudio hay más plantas colgantes, muchas de las cuales echan raíces en pequeños recipientes con agua, pero su creatividad también se extiende a otra disciplina. En su espacio también hay una pequeña estación de costura y un perchero con pantalones y blusas sencillas, de su propia creación. “No es diseño de moda”, dice Alejandra. “Sólo quería hacer ropa que yo quisiera usar, que sea muy sencilla, con telas que sean súper súper cómodas”. Hace 10 años, cuando quería algo que le resultara cómodo para ir a la escuela, se instaló en el segundo piso sin ascensor, que tiene una gran ventana orientada hacia el bulevar. El apartamento no tiene zona exterior, lo que podría considerarse un inconveniente dada su vocación, pero las plantas parecen felices siendo sus compañeras de piso. “No necesito demasiado espacio. De hecho, me gustan los espacios pequeños”, dice Alejandra. Al principio, no consideraba que sus creaciones fueran la base de un negocio: “Eran más bien para regalar a mis amigos”. Pero cuando la pandemia la obligó a pasar más tiempo en casa, la convivencia con sus plantas la llevó a una conclusión inevitable. “Era un hobby que se está convirtiendo en algo más regular, y me estoy dando cuenta de que puedo ganarme la vida con ello”, recuerda. — Lee Steele
instagram.com/hagocolgantes
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For the bookshelf » The Persistence of Yellow
by Monique Duval
Monique Duval, the owner of Monique’s Bakery in Mérida, is an author as well. The Persistence of Yellow: Inspiration for Living Brightly is a combination of bright, colorful illustrations by Roeqiya Fris, and thought-provoking, simple truths about living life to the fullest. Monique’s special brand of poetry and prose will hit you right where you can feel it: your soul. For a bit of inspiration about what is possible at any given moment, this is the encouragement that will set you on the path to brightness and truth. Hardcover, 64 pages; $358 pesos
Monique Duval, la dueña de Monique’s Bakery en Mérida, es también autora. The Persistence of Yellow: Inspiration for Living Brightly combina las brillantes ilustraciones de Roeqiya Fris con estimulantes e inspiradores versos acerca de cómo vivir la vida al máximo. El estilo particular de prosa y poesía de Monique te tocará justo donde más
se siente, en el alma. Si buscas un poco de inspiración hacia lo que es posible en cada momento de la vida, esta es el aliento que te pondrá en el camino de la luz y la verdad. Pasta dura, 64 páginas, $358 pesos.
» Go Lightly
by Nina Karnikowski
One of the greatest benefits to our unique little corner of the world is the enormous array of places to see on day trips or longer. Like most of us who have made Yucatán our home, we get all excited when friends or family come to visit and we can show them our favorite places. But like everywhere on the planet today, it’s becoming more and more important to “go lightly.” The book by the same title inspires readers to explore our planet without causing harm. Learn how to bring mindful practices into each travel day. With illustrations by Xuan Loc Xuan, Go Lightly: How to Travel Without Hurting the Planet promotes sustainable ways of getting to know the beautiful places all around your
new home. Hardcover, 144 pages; $479 pesos
Una de las más grandes ventajas de nuestro pequeño pedazo del mundo es la gran cantidad de destinos para viajes de un solo día o más. Como la mayoría de los que hemos hecho de Yucatán nuestro hogar, nos emocionamos cuando recibimos visitas, ya que esto nos permite compartir con ellos nuestros lugares favoritos. Pero como en todo el mundo, cada día es más importante “viajar ligero”. Este libro inspira a sus lectores a explorar nuestro bello planeta, sin hacerle daño. Aprende a incorporar prácticas de mindfulness en cada uno de tus viajes. Con ilustraciones de Xuan Loc Xuan, Go Lightly: How to Travel Without Hurting the Planet promueve formas sustentables para disfrutar de nuestro mundo. Pasta dura, 144 páginas, $479 pesos. Juanita Stein owns the Mérida bookstore Between the Lines, on the corner of Calle 62 and 53 in the Centro, where these titles are available. Visit facebook.com/ BetweenTheLinesMerida
Cover story A California artist finds a new life, and new fans, in a remote part of Yucatán Una artista de California encuentra una nueva vida y nuevos admiradores en una parte remota de Yucatán
Hello, Hocabá
BY / POR LEE STEELE PHOTOS / FOTOS CARLOS ROSADO VAN DER GRACHT
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Cover story
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T
rading Los Angeles for a new life in Yucatán would never be easy. But the payoff has been huge for Monica Petrus, an artist who has become “Monica de Hocabá,” and a bit of a celebrity. Her house in Hocabá is her co-star. On the massive walls of its front rooms, Petrus daringly restored its formal and intricate borders, which were gradually disappearing. Petrus restored and even extended the patterns, all by hand. This could have been a catastrophe in most hands, but Petrus is more than a clever lady with a paintbrush. She has an art degree from UCLA, where she also studied art history. She is well versed in Mexico’s cultural heritage and was clearly well suited to the task at hand. Life in Los Angeles had her working in an office, but Yucatán allowed Petrus to live inside her own art project. Her new life phase did not go unnoticed on social media. The exposure on Facebook and Instagram quickly made Petrus known as an artist not to be pigeonholed. More simply put, she can paint anything to order. Her figurative paintings are abundant. Her canvases include pets, animals in nature and portraits of homes or cantinas. She will embellish barstools with colorful images from Loteria cards. Her large-scale murals contain deeper themes, drawing on Maya or more abstract imagery. Many of her friends here first saw Petrus on television. Her 2019 episode of “House Hunters International,” which the producers called “Off She Goes to Mexico,” was received warmly by viewers. Monica was funny, approachable, affable. The cable show even followed up her story in early 2021 with “The Adventure Continues.” And so it does. The storyline was essentially true: Petrus as a single mom, mourning the loss of her beloved father and searching for a new life
N
adie dijo que empezar una nueva vida en Yucatán sería fácil. Pero los beneficios han sido enormes para Monica Petrus, una artista de Los Ángeles conocida como “Monica de Hocabá”, quien se ha hecho de gran renombre con la comunidad extranjera de la región. Su casa es su coestrella. Petrus restauró los grandes muros de su hogar, incluyendo sus delicados bordes, los cuales estaban a punto de desaparecer. Incluso extendió los diseños, pintando cada detalle a mano. Para la mayoría de nosotros, esto hubiera resultado en una catástrofe, pero Petrus es muy hábil con el pincel. Realizó sus estudios de arte en UCLA, donde también estudió historia del arte. Es conocedora de la cultura mexicana y ha viajado extensamente por el país. En Los Ángeles trabajaba en una oficina, pero Yucatán le permitió vivir dentro de su propia obra de arte. Su nueva vida se ha hecho notar en redes sociales. Su versatilidad como artista se ha vuelto muy conocida en Instagram y Facebook. Es capaz de plasmar cualquier cosa en un lienzo. Las pinturas figurativas abundan en la casa. Estas piezas incluyen imágenes de mascotas, animales silvestres, así como casas y cantinas. Pinta también diversos temas populares como son las coloridas imágenes de la lotería en taburetes de bar. Mientras sus murales abordan temas más profundos y abstractos, inspirados por la cultura maya. Petrus apareció por primera vez en la serie de televisión House Hunters International en un episodio del 2019 llamado “Off She Goes to Mexico”, el cual obtuvo una reacción muy positiva por parte de los televidentes. Monica se presentó de una forma muy divertida y afable, por lo que la serie regresó con ella en el 2021 para filmar una segunYUCATÁN AT HOME | 21
in Yucatán. And the tight budget. The numbers may have been fudged for broadcast, but she was watching every nickel. Petrus took a hard pass on the “restricted zone,” where most foreigners reside. It’s a difficult zone to escape — it would have to be at least 50 kilometers or 31 miles from the coast, leaving just the very landlocked center of the Yucatán Peninsula. “My budget was absolutely nothing,” Petrus says. “So I went on Google maps, and I drew my line of where I could look.” That gave Petrus a handful of towns to explore — from her desk in Los Angeles. “I would go on Google Street View and go from town to town and 22 | YUCATÁN AT HOME
da parte llamada “The Adventure Continues.” Después de la muerte de su querido padre, Petrus, una madre soltera decidió buscar una nueva vida en Yucatán, armada solo con un pequeño presupuesto. Los números tal vez hayan sido exagerados durante la transmisión del programa de televisión, pero es verdad que tenía que cuidar cada centavo. No queriendo lidiar con los costos asociados con un fideicomiso, Petrus se vio limitada a buscar un hogar 50 kilómetros tierra adentro. “Mi presupuesto era extremadamente pequeño’’, cuenta Petrus, “Pero me metí a Google Maps para ver el área en la cual podría comprar sin tener un fideicomiso”.
Cover story
I would ‘drive’ down every street, turn left, turn right, scoot forward, turn left, turn right,” Petrus recalls. “I would take screenshots every time I found a house that I liked. I found five or six houses that way, of course, though when I went to look up the Google Street View image, it was three years old. I mean they don’t come here very often.” So she found a local real estate agent to be her feet on the ground in Yucatán. “Our heads exploded,” Petrus says, when she and the agent first walked into the Hocabá house. “I mean, I didn’t know what was inside, I just saw the facade from the street.” The house she bought had been a sala de fiesta — a party rental that
Esto le presentó varias opciones para explorar desde su escritorio en Los Ángeles. “Entraba a Google Street View y me ponía a ver diferentes pueblos, “manejando” por sus calles, doblando por doquier y tomando notas”, cuenta Petrus. “Tomaba capturas de pantalla cada vez que encontraba una casa que me gustaba. Encontré cinco o seis de esta manera, pero la mayoría de estas imágenes ya tenían varios años. Los de Google no vienen por estos pueblos seguido.” Así que contactó una agente de bienes raíces para ayudarla en su búsqueda. “Mi agente y yo nos quedamos sorprendidas cuando entramos a YUCATÁN AT HOME | 23
Monica Petrus recreated her Yucatán adventure for the TV series “House Hunters International,” which has popularized the idea of moving to other countries. The shoot began in her former Los Angeles home, below, and continued in Yucatán with a real estate agent and crew walking her through three potential properties. Monica Petrus recreó su aventura en Yucatán para la serie de televisión “House Hunters International”, la cual popularizó la idea idea de vivir en el extranjero. La filmación inicia en su anterior hogar en Los Ángeles, abajo, y continúa en Yucatán donde el equipo de filmación la siguió en compañía de su agente de bienes raíces a visitar tres propiedades potenciales.
was languishing on the market — but before appeared to have been the private home of an affluent family. One of the first improvements Petrus did was dig a pool out back. “This is my favorite splurge,” Petrus said. “Like if I had to have just one thing…” The existing well was too sludgy so she had to dig a new one. Already on the property was a wide variety of native trees, many bearing fruit: mamay, caimito, sapote, bitter orange and limón among them. Petrus soon realized that the house was large enough to accommodate paying guests in an out-of-the-way bedroom. The town is adjacent to Homún, where cenotes are popular with eco-tourists. The guesthouse venture was short-lived. “Just as I was ready, that’s when COVID hit,” Petrus says. There was one guest before the pandemic, a woman from Canada who was a photographer. “I took her to all the little villages around, and we had a blast,” Petrus says. But she really came here to be creative, although she had envi24 | YUCATÁN AT HOME
la casa en Hocabá. No sabíamos cómo era por dentro, solo habíamos visto la fachada en Street View. La casa que compró había pertenecido a una familia de renombre en el pueblo, pero después fue convertida en una sala de fiestas. Una de las primeras mejoras que Petrus le hizo a la casa fue construir una piscina en el patio. “La piscina es mi inversión favorita, no podría vivir sin ella” El pozo existente estaba demasiado enlodado, así que tuvo que construir uno nuevo. La propiedad ya tenía muchos árboles frutales, entre ellos varios de mamey, caimito, zapote, naranja agria y limón. Petrus se dio cuenta de que su nueva casa era lo suficientemente grande para hospedar turistas buscando un lugar para dormir en esta área tan rica en cenotes y otros atractivos eco-turísticos. La iniciativa de tener una casa de huéspedes no duró mucho. “Justo cuando estaba lista para empezar a rentar el cuarto extra de forma regular, llegó la pandemia del COVID”, nos dice Petrus. Tuvo un solo huésped antes de la pandemia, una fotógrafa de Canadá. “La lleve a todos los pueblitos de la región y nos divertimos mucho”.
“Of course I’ve always painted but who makes
a living off that? This is a total
surprise.”
“Siempre he pintado, pero nunca pensé que me podría dedicar a esto, ha sido una
sopresa total.” YUCATÁN AT HOME | 25
Cover story
Monica Petrus specializes in large-scale murals of all kinds. Monica Petrus se especializa en murales de gran formato de todo tipo.
sioned painting mainly those decorative borders. “So many people have colonial homes and people are restoring them and maybe they would want some authentic touches here and there,” Petrus says. Fans wanted more. When someone requested something more naturalistic — a sea turtle for their wall — “people really liked it.” “So I made one little 8x10 sea turtle painting,” Petrus says. “And I put it on my sites and I could have sold that painting 20 times over. I couldn’t believe it.” One day, Petrus delivered seven of them by the beach. A customer in Tulum ordered a big one. She also packs custom orders when she flies home to the States. “Of course I’ve always painted but who makes a living off that? This is a total surprise.” Note: Monica Petrus is ready for her next adventure in Yucatán, and she is accepting offers for her house in Hocabá. Petrus is still taking commissions for artwork, as well. Contact her at facebook.com/MonicadeHocaba. 26 | YUCATÁN AT HOME
Pero en realidad, Petrus llegó a Yucatán para explorar su creatividad, aunque inicialmente no pensó pintar mucho más que los bordes decorativos de su nuevo hogar. “Muchas personas compran y restauran casas coloniales, y buscan agregarles algunos toques auténticos”, dice Petrus. Sus fans querían más. Un cliente la contactó para pintar una tortuga de mar en su muro, y todos quienes lo vieron en redes, quedaron encantados. “Hice una pintura de 8 x 10 pulgadas de una tortuga marina”, la puse en mis redes sociales y pude haberla vendido unas 20 veces. No lo podía creer”. En un solo día, Petrus entregó siete reproducciones de su tortuga. Un cliente en Tulum incluso encargó una en gran formato. Petrus también hace encargos especiales cuando viaja de vuelta a Estados Unidos. “Siempre he pintado, pero nunca pensé que me podría dedicar a esto, ha sido una sorpresa total”. Nota: Monica Petrus está lista para su próxima aventura en Yucatán y actualmente está en el proceso de vender su casa en Hocabá. Petrus sigue tomando pedidos para sus cuadros. Ponte en contacto con ella en facebook.com/MonicadeHocaba.
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PROPERTIES & PROFESSIONALS
Yucatán Homes & Land
AGENT PROFILE
Keith Heitke: As seen on TV
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efore moving to Yucatán, Keith Heitke spent much of his life in New York and Los Angeles. Keith admits that before his first trip to Mérida, he had to be coerced into coming by his partner as he was turned off by the heat and humidity of the region. However, once in Mérida he quickly fell in love with the beauty of the city. “It’s funny to think how hesitant I was to even visit Yucatán, but as soon as I arrived I was blown away by the vibrance of Mérida. Life seemed so different, it had turned from the grey of Manhattan in winter to Yucatán Technicolor,” says Heitke. After deciding to move to Mérida, Heitke and his partner Chef David Sterling founded a Yucatecan cooking school called Los Dos located in a magnificent colonial home in downtown Mérida. He has since started Hacienda Mexico Real Estate, where he lists and sells select properties in different parts of the city. After the experience of renovating and adapting the building which would house Los Dos, Heitke developed an interest in real estate and remodeling homes downtown. Heitke began to take on projects and before long he
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became very well known amongst expatriates in the city for his excellent work and attention to detail. Heitke notes that he never takes on more than one renovation project at a time. He places great importance on having the time to help his clients every step of the way, not just during the structural renovation process but also in choosing details such as
light fixtures or appliances. Obtaining building permits is also an important part of the process, as it is the guarantee that all renovations and construction are done according to regulations. If Heitke looks familiar, you must be an HGTV fan. He has become somewhat of a local celebrity after his multiple appearances on “House Hunters International.”
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Yucatán Homes & Land CASA RIO LUNA: US$450,000
CASA DD: US$425,000
Stunning luxury home in Itzimná
Upscale modern colonial by Paseo de Montejo
Casa Rio Luna stands out as the perfect combination of beauty and comfort, as well as an outstanding location. It is situated on what many consider one of the most beautiful streets in Mérida, very wide and quiet with many stunning mansions. And it’s just 2 blocks away from the emblematic Paseo de Montejo. Every room in this property features high ceilings and large open spaces with nice views to the patio area. The master bedroom is huge. It has impressive high ceilings and a super view to the pool and gardens. Overall, there are 2 bedrooms, 2½ baths and one of the best-designed gardens we’ve seen in a long time. See more at meridalivingrealestate.com, Property code 1500.
Casa DD is an architectural jewel equally close to Santa Ana and Santa Lucia parks. With 2 beds, 2½ baths, this home is within walking distance to your favorite restaurants, galleries, parks, etc. Designed by multi-award-winning Reyes Rios + Larrain, Casa DD boasts high-beam ceilings as well as pasta tiles in warm, neutral colors, make decorating easy. A large casita at the end of the property has its own kitchen, living space and central air. The glass-enclosed shower opens into a small beautiful private garden. Casa DD comes with 22 solar panels, exotic tornillo wood, upscale lighting and fans, and Hansgrohe bath fittings. See more at meridalivingrealestate.com, Property code 1510.
Contact Carlos Betancourt cbm893@hotmail.com / 999-200-5794 meridalivingrealestate.com
From
Yucatán Retirement Planner Coming December 2021
Advertising: evazquez@yucatanathome.com
Yucatán Homes & Land HOT PROPERTY
Casa Alta Blanca: Easy, peaceful beach living
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hen John Bradshaw and Alan DeCamillo, two Centro residents from the U.S., built their Telchac house, they chose a lot three rows in from the village’s beautiful beach. “Not being beachfront means our maintenance issues are much less,” Bradshaw explains. “We don’t get all the salt spray on windows! Also, because the house was built with foam block material, the house is well insulated and much stronger than traditional block construction. There is an eight-foot wall around the property, which makes it very private, and a great size garage means our car is protected from the damaging salt air.” While not touching the sand, their home, named Casa Alta Blanca, is very much a beach house. They are steps away from the footpath, or entrada, that gets them to the water in about a minute. They are very satisfied with their decision to choose this particular village. “Telchac Puerto is quiet, the beaches are
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wider than other beach towns,” says Bradshaw. There are pleasures on land as well: “Our favorite seafood restaurant, El Angelito, is just around the corner from the house.” Telchac is extremely quiet, with local cottage owners visiting mainly during the summer months. “In the winter we have a few snowbirds, but the beaches are mostly deserted. That’s our favorite time to be there,” he says. They built the house themselves, supervising every detail. “We were fascinated with the building material, known as Novidesa (novidesa.com.mx), due to its strength and insulating properties. Basically, it’s poured concrete sandwiched between two foam blocks. It’s one of only a handful in Yucatán, all built by local builder Grant Beare (facebook.com/yucatancustomhomebuilders). Visitors enter the front garden through a wooden door at the street, or from a door leading out of the garage. The door opens to
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Melissa Adler Buyer’s Agent
a hallway that leads to the living-dining area and to two sliding glass doors to the back deck, garden, and pool. Stairs at the beginning of the hallway lead to two bedrooms, a master and guest, both en suite. The third bedroom, located on the first floor, is presently used by the owners as a TV room. It has a large sofa that converts to a queen-size bed. The sofa in the sala also converts to a double bed. The house can sleep eight. Stairs from the second floor lead to a large third-floor terrace with a pergola overlooking the Gulf of Mexico. The second-floor guest room also features a large terrace and the master bedroom features a smaller palapa-roofed terrace overlooking the back garden and pool.
By the numbers
» Casa Alta Blanca has three bedrooms and
three and-a-half baths. The lot is 10 meters, or 32.8 feet wide and 20 meters, or 655 feet deep. The living area is 211 square meters, or 2,271 square feet, and the lot is 200 square meters, or 2,152 square feet.
» The home is available for US$199,000
from Carlos Betancourt at Merida Living Real Estate (meridalivingrealestate.com, Property Code 1499) and Nicholas Sanders at Yucatán Beach & City Properties (yucatanbeachandcityproperty.com, Property Code 002654).
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Merida L i v i ng Beyond Real Est ate Cell: 999 118 9351 melissa.meridaliving@gmail.com meridalivingrealestate.com
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Robert Abuda: Trust is key
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obert Abuda has been a Mérida businessman for as long as he’s lived here. Within six months of arriving, the garage in his house was operating as his hair salon. Then he set up new space in Santa Ana, and quickly outgrew that. Today the Robert Abuda Salon is a beehive of activity on the Paseo de Montejo. So how did he find time to sell real estate as well? “Time management,” Abuda says, while also crediting the staff he’s assembled over the years at the salon. “I’m lucky enough to have a good team. We’ve built up a little family in the salon.” The idea to go into real estate sales came from the conversations he would inevitably find himself having with his customers. “After referring so many people to a real estate agent, I thought I should be doing this myself,” Abuda says. Once his new career got off the ground, “it felt like a natural fit.” Abuda has built four houses since arriving here 12 years ago when he was still in his 20s. Three of them were completed in the space of a year. “So I basically understand the process of what it takes to turn an old colonial into a paradise.”
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That helps him guide potential buyers through a fixer-upper property because not everyone can appreciate the potential of a “ruin.” That’s what’s so special about Yucatán’s quintessential colonial houses. They have high ceilings and a quality of beauty that’s hard to replicate anywhere else. And the style of construction — no wood beams or load-bearing interior walls — allows many more options than people in the United States or Canada can enjoy, he says. “With cement and concrete, anything is possible,” Abuda says. Some foreign residents will tell him that he, in a way, was influential in their decision to move to Yucatán. They saw him on one of three “House Hunters International” episodes, including a “where are they now” follow-up that let viewers know he had opened a successful salon. Abuda is proud of the solid reputation he has built over time in Yucatán, first in the salon and now in real estate. “I’m not going anywhere,” Abuda says firmly. Contact Robert Abuda at robabuda@gmail.com or 999-261-6001.
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SAN CRISANTO BEACHFRONT: US$399,000
Life-long memories made here At the serene San Crisanto beach, this large 3-bedroom home with 4.5 bathrooms is on 20 meters of prime beachfront property with a large retaining wall to withstand the elements. A mosaic tiled pool overlooks the water in the large backyard where hammocks can be placed under the shaded palapa; a perfect spot to also store your paddleboards and other sporting equipment.
The incredible beach views from every bedroom are unsurpassed. A guest bedroom with ensuite is also located on the first floor. The outside terrace is perfect for an outdoor kitchen to entertain your guests. This incredible beach house will provide you and your family with life-long memories. Perfectly-located on a quiet beach, this home is one of a kind.
Contact Robert Abuda at Merida Living robabuda@gmail.com / 999-261-6001 meridalivingrealestate.com
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Yucatán Homes & Land ARCHITECT PROFILE
Danh Nguyen: A fresh aesthetic
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For more homes built by Danh Nguyen, visit facebook.com/meridaarchitecture
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orn in Vietnam and raised in California, Danh Nguyen studied graphic design at the San Francisco College of the Arts and then pursued a Master’s degree in Architecture at the University of California Los Angeles (UCLA) just outside of Sacramento. After a few years of juggling teaching at UC Davis and his practice as an architect, Danh stepped away from academia to pursue architecture and design full time. Danh tells us that after a few more years, he began to think about moving to another country.
“Though I was initially drawn to Vietnam, it being so far away made things very difficult. I then kept hearing such good things about Mérida. I ended up visiting the city and right away I could tell that this was a place I would like to spend more time in.” For a few years, Danh would travel back and forth between Yucatan and California, but spurred on by his success working on projects in Mérida, he decided to become a full-time resident. Since settling in Merida, Danh has worked mostly with expats looking to build or
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renovate homes in the downtown, but notes that he has seen an increase in interest for building new homes from the ground up in the north of the city. Danh draws inspiration from the Californian aesthetic, especially with regard to its emphasis on indoor-outdoor living spaces and quality of light quality. “There are so many beautiful homes in Mérida, but sometimes some of them feel a little boxed in for my liking. I always emphasize aspects such as air-circulation and the use of open spaces.”
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En Casa A light touch In Progreso, a 19-month renovation respects the classic lines of a forgotten mid-century home
Un toque ligero En Progreso, una renovación de 19 meses respeta las líneas clásicas de una casa olvidada de mediados de siglo BY / POR LEE STEELE PHOTOGRAPHY / FOTOGRAFÍA TAMARA URIBE AT HOME | 39 VIA WORKSHOP YUCATÁN DISEÑO Y CONSTRUCCIÓN
En Casa
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ts colors are inspired by the sunset, and the interiors recall the Americas in the mid20th century, which is exactly when Casa Mareto was built. One block off the Gulf, but still close enough to catch the breezes — and the sand — Casa Mareto was built in 1950 and was owned by the same family until now. But the house had been allowed to fall into disrepair when family members who inherited it decided to take their lives elsewhere. After rejecting an early proposal to completely overhaul the one-story gem, its new owners opted to preserve its classic lines. “Look at how it was designed for the airflow,” says Joe Stines, who with his partner Cliff Waters, and the Mérida firm Workshop Diseño y Construcción, took 19 months to renovate and restore.
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us colores están inspirados en un atardecer y sus interiores hacen remembranza de las Américas a mediados del siglo XX, periodo en el cual se construyó Casa Mareto. A una cuadra del Golfo, pero aún lo suficientemente cerca para apreciar la brisa y arena, Casa Mareto se erigió en 1950 por la misma familia que hasta hace poco la habitó. Sin embargo, la casa cayó en el abandono cuando los familiares que la heredaron decidieron hacer sus vidas en otro lugar. Después de rechazar una propuesta de rediseño, los nuevos dueños decidieron renovar la casa respetando su línea original. “Observa como su diseño permite el flujo de la brisa” dice Joe Stines, quien junto a su pareja Cliff Waters y la empresa meridana Workshop Diseño y Construcción, renovaron y restauraron la casa a lo largo de 19 meses. A pesar de la duración del proyecto, la renovación fue completada con un ligero toque. Algunas de las puertas y muebles originales fueron rescatados con una buena lijada. Los 40
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Ornate ironwork was added to the facade along with a new color palette, but the integrity of this Progreso home was left intact. Se agregó herrería a la fachada así como una nueva paleta de colores, pero la integridad de esta casa en Progreso permanece intacta.
En Casa The kitchen was completely renovated, but original 1940s furniture kept the home grounded in its original aesthetic. La cocina fue completamente renovada, pero los muebles originales de los años 40 mantienen la estética original de la casa.
Despite the duration of the project, the renovation was completed with a light touch. Some original doors and furniture remain, sanded and repainted. The new owners also brought down some 1940s and '50s objects they had in storage back in Florida. Although it’s not strictly a beach house, Casa Mareto carries with it all the pros and cons of beach living. “We have sand, which comes through the screens, we don’t have mosquitos. says Stines. “We have rust,” adds his partner. “Ironwork’s been repainted already.” And despite the center hallway and side access trail, they still use an air conditioner in the summer. “There’s more breeze in the winter,” says Stines. For all the details inside, the lure of the outdoors still holds sway. An adult swimming area and a smaller one for children were combined into one large pool. Cast-iron Smurfs, found in a local antique shop, bring a touch of whimsy on the wall behind it. 42 | YUCATÁN AT HOME
“We live here,” says Stines, taking a break on the back patio, “and we live on the front porch.” “That’s what I like, it’s very comfortable and breezy. And plus, you sit on the porch and you talk to people as they walk their dogs,” says Stines, contrasting it with their more confining city home. “You can’t do that in Mérida, not where we live.” The couple has found the area very neighborly, and some have thanked them for bringing the house back to — and perhaps even beyond — its former glory. Before buying this one, they had looked at more conventional beach houses but never felt quite comfortable. “Then, someone showed us this house, which was over budget,” says Stines. “But I love old houses.” For exercise, it’s a mile and-a-half to walk to the downtown. On their way, they see evidence of a further renaissance in Progreso — new restaurants and a colonial home that’s being turned into a hotel. “There’s a lot of history here, there really is,” says Waters.
Decorative Smurfs are unexpected guests at the pool. Los Pitufos son invitados inesperados en la piscina.
nuevos dueños también trajeron algunos artículos de los años cuarenta y cincuenta que tenían guardados en la Florida. Aunque no está ubicada frente al mar, Casa Mareto trae consigo todos los pros y contras de la vida playera. “Nos entra arena a la casa por los miriñaques, pero no tenemos mosquitos” dice Stines. “Pero las cosas se oxidan mucho” dice su pareja, “ya volvimos a pintar la herrería”. Y a pesar del pasillo central y acceso lateral, aún usan el aire acondicionado durante el verano. “En el invierno hay más brisa”, dice Stines. A pesar de todos los detalles interiores, los espacios exteriores de la casa también inspiran. Dos albercas, una de tamaño completo y una más pequeña para los niños, fueron combinadas para crear un gran espacio para nadar. Unos Pitufos de herreria comprados en una tienda de antigüedades agregan un toque divertido. “Aquí vivimos” dice Stines, mientras se reclina en su patio y toma un descanso del recorrido de la casa, “también nos la vivimos en el porche delantero”.
“Es lo que me gusta, es muy cómodo y la brisa es agradable. Además, te puedes sentar en el porche a platicar con la gente que pasea a sus perros”, dice Stines, contrastando la vida en Casa Mareto con su residencia en la ciudad. “No puedes hacer eso en Mérida, no donde vivimos”. La pareja cuenta que los vecinos de la zona han sido muy amables y que les han agradecido por devolverle a la casa su antigua gloria. Antes de comprar esta propiedad, habían explorado la posibilidad de adquirir una casa de playa más tradicional, pero esto nunca les acomodó del todo. “Y pues alguien nos mostró esta casa, la cual estaba por encima de nuestro presupuesto” dice Stines. “Pero me encantan las casas antiguas”. El centro está a dos kilómetros, lo cual es un muy buen ejercicio. En el camino observan más evidencia del renacimiento de Progreso: nuevos restaurantes y una casona colonial la cual está siendo transformada en hotel. “De verdad que hay mucha historia aquí” dice Waters. YUCATÁN AT HOME | 43
En Casa
By design
Por diseño
the soft colors of the Yucatecan sunsets, says Workshop’s Architect Fabián Gutiérrez Cetina. The house is a retreat for the owners, who live mainly in Mérida’s Centro Histórico. The original structure was preserved, along with its traditional pasta tile floors and carpentry, with the exception of some rooms such as the kitchen and bathrooms, which were modernized—in keeping with the spirit of the era.
los suaves colores de los atardeceres, dice el arquitecto Fabián Gutiérrez Cetina. La casa es un retiro para los dueños quienes viven la mayoría del tiempo en el Centro Histórico de Mérida. La estructura original fue rescatada junto con sus clásicos pisos de pasta y piezas de madera, con la excepción de algunas áreas como la cocina y baños, los cuales fueron modernizados manteniendo el espíritu de la era.
» Casa Mareto is inspired by
» The main house has three
bedrooms, two living rooms, a breakfast room, kitchen, two bathrooms and a center hall surrounded by seven arches with an iron lattice design that emulates the curves of the waves of the sea.
» At the back, a terrace area
was added, repeating the arches of the facade, The pool was finished with chukum and surrounded by walls in pastel shades that evoke the hues of a warm summer afternoon.
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» Casa Mareto está inspirada por
» La casa principal tiene tres
habitaciones, dos salas, un cuarto de desayuno, cocina, dos baños y un pasillo central rodeado de siete arcos con diseño de celosía de hierro que emulan las curvas de las olas en el mar.
» En el fondo se agregó una
terraza la cual repite el diseño de los arcos de la fachada. La alberca tiene un acabado de chukum y está rodeada por muros en colores pastel los cuales evocan los matices de una cálida tarde veraniega.
“That’s what I like, it’s very
comfortable and breezy.”
“Es lo que me gusta, es
muy cómodo y la brisa es agradable.”
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En Casa Create space A photographer and a writer carve out plenty of room to maintain an active art studio and rooms for work
BY / POR LEE STEELE PHOTOGRAPHY / FOTOGRAFÍA CARLOS ROSADO VAN DER GRACHT
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Crea espacio Un fotógrafo y una escritora abren amplios espacios para habilitar un estudio de arte y áreas de trabajo YUCATÁN AT HOME | 47
Ric Kokotovich’s art studio is filled with light, as well as with works in progress. Right, an early photo project took him to New Orleans Mardi Gras between 1981 and 1985 where the LGBTQ and drag communities caught his attention. Opposite: A separate production room, which has a work space for an assistant, is focused more on Kokotovich’s photography. El estudio de arte de Ric Kokotovich está lleno de luz y obras aún no completadas. Derecha: una fotografía de una colección temprana la cual lo llevó al Mardi Gras de Nuevo Orleans entre los años 1981 y 1985, en donde las comunidades LGBTQ y drag cautivaron su atención. Derecha superior: Un espacio de trabajo independiente para fotografía con lugar para un asistente.
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W
hen Ric Kokotovich and Alison Wattie expanded their Mérida home by buying the lot next door, they took an opportunity to upgrade their workspaces. And upgrade they did. Their original home is now a guest house. Casa El Tamarindo, the home they built, is all new, It’s dramatic, airy and bold — and immediately suggests that an artist and a writer live there. Which is, indeed, the case. Kokotovich’s casita, which only barely touches the main house, greets visitors who approach the structure from the front gate. Inside is an obviously busy, large workroom with tables covered with art supplies and works in progress. Floor-to-ceiling windows face east and the morning light floods in. The pandemic inspired a series of masks on the far wall. On a table is a series of paintings based on Haiku. Elsewhere are street photos he took in the early- and mid-80s, in the early days of the AIDS epidemic, a years-long project capturing a community of saucy drag queens at Mardi Gras. Past a kitchenette and bath is yet another workroom, this one with a large photo printer and two workstations for digital work. The task chairs face the twisted trunk of a sheltered, old tree. This room focuses more on Kokotovich’s work as a photographer, The house appears to peer out from behind an angled wall that runs along the garden path. Its dramatic flourishes and wide-open artfilled interiors suggest a creative couple craving room to think.
C
uando Ric Kokotovich y Alison Wattie decidieron comprar la casa de al lado para expandir su hogar en Mérida, aprovecharon la oportunidad para crecer sus espacios de trabajo. Y vaya que lo hicieron. Convirtieron su casa original en una casa para huéspedes. Casa El Tamarindo, la nueva casa de diseño dinámico y atrevido, fue construida de abajo para arriba y queda claro que es una casa habitada por artistas. La casita de Kokotovich apenas colinda con la casa principal. Al pasar por el portón, los visitantes pueden observar una estructura la cual funciona como un gran espacio de trabajo, con mesas cubiertas de pinceles, pinturas y obras de arte aún por terminar. Grandes ventanas que van del piso al techo dan al oriente y llenan el espacio de luz por las mañanas. La pandemia inspiró una serie de máscaras exhibidas en uno de los muros. En una mesa se encuentra una serie de pinturas basadas en Haiku. Se puede observar también una serie de fotografías de atrevidas drag queens tomadas a mediados de los años 80 y que retratan los primeros años de la epidemia del SIDA. Al pasar la cocineta y un baño, se aprecia otra área de trabajo, esta vez con una enorme impresora digital. Las sillas de trabajo se orientan hacia el gran tronco de un viejo pero hermoso árbol. Este cuarto se enfoca en el trabajo fotográfico de Kokotovich. La casa aparece detrás del muro que conduce a un amplio jardín. Sus detalles dramáticos y grandes interiores llenos de arte sugieren que este es el hogar de una pareja creativa en busca de espacios
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En Casa para pensar. “We have a lot of art in Canada, we know a lot of artists here, we “Tenemos mucho arte en Canadá y conocemos a muchos artistas trade a lot of art,” says the Alberta native. The pieces from back home ahí, así que intercambiamos arte” dice el originario de Alberta. quien he drove all the way down in a pickup truck. transportó las piezas que trajeron de Canadá en una camioneta. Wattie, who ran a marketing firm in Canada and still works as a Wattie, quien trabajó para una empresa de marketing en Canadá, writer, poet and graphic designer, works on the other side of the propahora se dedica al diseño gráfico, escritura y poesía en un cuarto erty, closer to the master bedroom. She requires less physical space, aledaño a la alcoba principal. Requiere de menos espacio, pero su but her office is similar to the studio in that it’s filled with light and oficina es similar al estudio en el sentido de que está llena de luz y artwork, and is obviously a comfortable space to think and create. obras de arte. Claramente, es un espacio muy cómodo para trabajar y “She’ll come in here if she needs to talk to me, and I’ll come into crear. “Ella viene a hablar conmigo si necesita algo” dice Kokotovich. her studio if I need to talk to her,” Kokotovich says, “We have tried to “intentamos tener un respeto mutuo respecto a nuestros espacios de create a mutual respect around our working environments.” That would be difficult if they shared a small trabajo”. space, “but we’re quite lucky. It’s like we live in a Esto sería difícil si compartieran un espacio park.” A cutout in the wall reminiscent pequeño, pero “somos afortunados, es como si Their compound is shared with two contentof Luis Barragán’s mid-century viviéramos en un parque”. ed rescue dogs named Iggy and Chucho and with architecture. Opposite: Alison Comparten su hogar con dos perros llamados `Karma, an apparently shy house cat — all of whom Wattie writes from a studio in Iggy y Chucho, los cuales rescataron de la calle. appear to have run of the house. the main house. Artwork was También tienen un tímido gato, Karma. Todos los animales constantemente pasean por la casa. The home, built in the San Sebastián neighboradded later. La casa se ubica en el barrio de San Sebastián, hood by Mérida architect Victor Cruz, is anchored y fue construida por el arquitecto meridano, Víctor by a well-proportioned living, dining and kitchen Un muro con un gran vano Cruz. La casa se caracteriza por sus espacios bien space, adjacent to a patio that leads to a long swimrecuerda a la arquitectura de proporcionados y una larga alberca ideal para nadar, ming pool protected by a black Luis Barragán-inmediados de siglo de Luis la cual está protegida por un muro oscuro inspirado spired wall. Barragán. Derecha: Alison Wattie por Luis Barragán. The rooms inside the home and studio are all escribe desde su oficina en en la Los cuartos en el interior de la casa y los estuwarm and earthy chukum, a smooth stucco infused casa principal.
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“Miramos propiedades y compramos una.
Una compra emocional que funcionó.”
“We looked at properties and bought one. 52 | YUCATÁN AT HOME
An emotional purchase that worked out.”
Artwork bought and traded through the years fills the living space. Arte comprado y adquirido por trueque llena los espacios de la casa.
with the translucent resin from the bark of a native tree. Its use dates to the period of the Maya and was revived in the late 20th century by builders seeking a natural material that references the region’s heritage. A rainly 2020 and the pandemic slowed progress on the house, and like many of the art pieces in Kokotovich’s studio, remains a work in progress. The couple is agonizing over the kitchen backsplash, some barn doors are waiting to be installed on rails, and a huge center courtyard, shaded by what appears to be an ancient tamarind, is still rocky and ungroomed. The neighborhood, south of the main plaza and away from areas more clustered with foreigners, suits them. “Because we’ve been here for eight years,” he says, “the barrio is very safe. Our neighbors look out for us.” Although Kokotovich had first visited Mérida in 1993, the couple initially moved to the Pacific coast town of Manzanillo, “but we’re not beach people. So right away we started looking for a property to switch up our lives.” They set aside the conventional advice to rent first, buy later. “We looked at properties and bought one. An emotional purchase that worked out.” When they first moved to San Sebastián, there were far fewer expats. But today, a well-known Swiss jazz drummmer is down the block and two fellow Canadians across the street have settled in fulltime. An exhibition at Fundación Centro Cultural La Cúpula immersed Kokotovich into Mérida’s community of international creatives. And it was the city’s broader commmunity of artists that makes life here work for them.
dios son cálidos con acabados de estuco y resina de chukum. El uso de este material data a la época de los mayas y volvió al uso común en el siglo XX como una alternativa natural la cual rinde homenaje a la cultura de la región. La pandemia y las lluvias del 2020 retrasaron la construcción de la casa y varios espacios, incluyendo el estudio de Kokotovich, no están completamente terminados. La pareja aún está decidiendo el diseño para el muro de salpicaduras en la cocina, algunas puertas esperan ser instaladas y el área alrededor de un ancestral árbol de tamarindo sigue un tanto empedrado. El barrio, ubicado al sur de la plaza principal, se encuentra lejos de las zonas del centro con muchos extranjeros, lo cual les sienta bien. “Ya llevamos ocho años aquí, así que nos sentimos muy seguros y nuestros vecinos nos cuidan”. Aunque Kokotovich visitó Mérida por primera vez en 1993, la pareja se mudó inicialmente a Manzanillo en la costa del Pacifico, pero decubrieron que “no somos gente de playa, así que decidimos buscar otro sitio para mudarnos”. Hicieron a un lado las sugerencias de rentar antes de comprar. “Buscamos propiedades y compramos una. Fue una compra emocional la cual rindió buenos resultados”. Cuando se mudaron a San Sebastián habían menos extranjeros. Pero al día de hoy, un conocido baterista de jazz suizo vive a unas casas y una pareja de sus connacionales canadienses se han mudado enfrente. Una exposición en la Fundación Centro Cultural La Cúpula fue el punto de entrada de Kokotovich a la comunidad creativa internacional de Mérida. Pero es la comunidad artística en general la que hace de su vida en la ciudad una experiencia tan grata.
Follow Ric Kokotovich and Alison Wattie on Instagram: @rickokotovich, @alisonwattie
Puedes seguir a Ric Kokotovich y Alison Wattie en Instagram: @rickokotovich, @alisonwattie YUCATÁN AT HOME | 53
En Casa
Off the grid An Alaskan in Yucatán ventures from the city and finds his bliss
Lejos de la red 54 | YUCATÁN AT HOME
Cómo un hombre de Alaska abandonó la ciudad y encontró la dicha
BY / POR LEE STEELE PHOTOGRAPHY / FOTOGRAFÍA CARLOS ROSADO VAN DER GRACHT
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En Casa
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L
ong before social distancing became a thing, Marc Olson took the concept to a new level. He began building a home deep in the middle of nowhere. It is a beautiful nowhere, in an undisclosed location somewhere on the Yucatán Peninsula, far from neighbors, roads, and all the comforts provided by the electric and water utilities. The Alaska native, a former photojournalist, is obviously pleased with his new home, which he’s dubbed Rancho San Benito, as he gives a brief tour. “Early in the morning, with those open,” Olson says, pointing to the shutters on the window, “the soft light is super bright. I love light. I was a photographer, and I thought a lot about light and air when I decided on doing this.” Olson had to consider much more than light. He had to provide his own electricity, for which he built solar panels. The water flows from a windmill-powered pump, the kind you see in grainy old photos from the region. The L-shaped home itself is very simple. It has a large, multi-purpose living room-bedroom and a kitchen. It was built with rocks found on the land, a former ranch. Sometimes, the traditional ways are best. For sleeping, Marc employs hammocks hung from old-fashioned knobs which a friend helped him turn from a salvaged piece of old hardwood. A row of celocías — breeze blocks decorated with the Mayan cross — runs across the top of some walls for airflow. The walls are white, a practical decision. “I can retouch anytime and the paint is always going to match,” Olson says. Off the rear is a simple terrace with a pergola and a swimming pool, naturally fed by the adjacent, sky-high windmill. The angle of the sun and the direction of the wind were all considered to shield the
M
ucho antes de que el distanciamiento social se volviera lo común, Marc Olson ya había empezado a distanciarse construyendo una nueva casa en medio de la nada. La casa se encuentra en un punto recóndito y privado de la Península de Yucatán, lejos de vecinos ruidosos y calles llenas de tráfico, pero también de los postes de electricidad y la red de agua potable. Originario de Alaska, Marc Olson es un fotoperiodista jubilado. Con una gran sonrisa, nos guía en un breve recorrido por su casa la cual ha apodado Rancho San Benito. “Temprano en la mañana cuando abro las ventanas”, dice Olson señalando a sus persianas. “La luz se vuelve muy brillante, pero también suave”. Adoro la luz. Fui fotógrafo por muchos años y pasé mucho tiempo pensando en la iluminación y el flujo del aire a la hora de diseñar esta casa”. Pero Olson tuvo mucho más que considerar aparte de la iluminación natural. Tenía que proveerse de su propia energía eléctrica y agua. Por lo tanto instaló paneles solares y un gran molino para abastecerse de agua. La casa en forma de L es bastante sencilla. Tiene un gran cuarto de usos múltiples y una cocina. Fue construida utilizando piedras encontradas en el mismo terreno, el cual había sido un rancho. A veces, las soluciones tradicionales son las mejores. Marc duerme en una hamaca la cual cuelga sobre piezas de madera tallada hechas de un viejo tronco. Una fila de celosías decoradas con una cruz Maya permiten el flujo de la brisa. Los muros están resanados de blanco para facilitar retoques y mantenimiento. En el patio trasero construyó una terraza con una pérgola y una alberca alimentada directamente con agua fresca del molino. La casa está orienYUCATÁN AT HOME | 57
house from the elements. It’s everything he wants and needs. “The house is a mestiza,” Olson observes, referring to the blend of cultures represented by its construction and design. “It looks kind of colonial from the front. Inside is modern.” The home is an ongoing project. The home is one story but designed to expand upward if the time should come. Fruit trees, a cactus garden and a pen for some livestock are planned for a future phase. His friend Victor Yam, whose father was a local cattle rancher, “is the agricultural guy. He knows the planting. We’re going to actually revive the pastures and we’re going to have some cattle, and it’s going to turn back into a real kind of a ranch.” The home stands in contrast with what he inhabited in Mérida for years. He vowed not to repeat what he sees as newbie mistakes. “At first I did the typical foreigner deal,” Olson recalls, having bought a big house but finding himself living in a small part of it. And the house required constant maintenance. Moving from the Centro to a ranch property, and building from scratch, he admits to some bumps in the road. The power supply was cut off, a mystery until they figured out that a worker had brushed against some cables, disconnecting one. Finding competent painters and other tradespeople in the middle of nowhere is a constant challenge. But none of the challenges he’s had wouldn’t have happened in the Centro, Olson says. Whatever the obstacles, it’s been worth it. “It’s beginning to feel like what I had in mind,” Olson says. “My parents had a couple of cabins in Alaska when I was growing up, and this is my cabaña, my cabin in Yucatán. It’s a little house out in the monte.” 58 | YUCATÁN AT HOME
tada para ofrecer protección del sol, tiene todo lo que quiere y necesita. “Esta casa es mestiza”, dice Olson haciendo referencia a la mezcla de culturas presente en su diseño y construcción. “Por fuera parece colonial, pero por dentro es moderna”. La casa es de un solo piso, pero está diseñada para dos, por si se requiere más espacio. Pero antes, Marc Olson planea plantar un jardín de cactus, así como árboles frutales y la construcción de un corral para animales. Su amigo, Victor Yam, quien es un ganadero de la región lo ayuda con su jardín. Él sabe todo acerca de las plantas de la región. Queremos revivir los pastizales y comprar algunas cabezas de ganado para revivir el rancho. La nueva casa representa un gran cambio para Olson, quien vivió en Mérida por varios años, y jura no cometer los mismos errores. “Hice lo que hacen muchos extranjeros cuando llegan”, dice Olson haciendo referencia a su compra de una gran casona difícil de mantener y de la cual solo aprovechaba una pequeña parte. El construir una casa desde cero en un viejo rancho no fue del todo fácil, admite Olson. “Tuve varios contratiempos”. Por bastante tiempo Olson no tuvo electricidad ya que un trabajador accidentalmente había desconectado algunos cables en un área obscura y difícil de ver. Encontrar buenos trabajadores como pintores y plomeros en una área tan remota es un reto constante. “No hubiera tenido este tipo de problema en el centro de Mérida”, dice Olson. Pero a pesar de los obstáculos, ha valido la pena. “Está empezando a tomar forma, tal como lo imagine” dice Olson. “Mis papás tuvieron un par de cabañas en Alaska cuando era niño, y ahora esta es mi cabaña, mi cabaña en Yucatán. Es una hermosa casita de monte.
“The house is a mestiza. It looks kind of colonial from the front. Inside is modern.”
“Esta casa es mestiza. Por fuera parece colonial, pero por dentro es moderna”.YUCATÁN AT HOME | 59
Framed | The Graphic Bakery
Resurgiendo una vez más
The bread rises again The Spanish-born printmaker Manuel Taure kept us amused during the lockdown, leaving “pandemic postcards” — handpulled prints on toilet paper — in our mailboxes each Friday. Even after the summer’s rainstorms destroyed his Santiago studio, somehow Taure kept creating and even held an exhibit at El Zapote art gallery. The one thing he couldn’t do, in all the mess and destruction, was bake bread for his visitors. That was sad because nourishing, fresh loaves of bread were an important component of his project’s concept. Now, his Graphic Bakery is back in business. Fridays are again a day for workshops, art exhibits and the smell of fresh bread, as it’s been since 2012. The Graphic Bakery is now in García Ginerés. Find @thegraphicbakery on Facebook or email printandbake@gmail.com for an appointment. —Lee Steele
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El grabador Manuel Taure nos mantuvo entretenidos durante la cuarentena. El artista español depositó “postales de pandemia” — impresas en papel higiénico — en las casillas de correo de varios vecinos del centro de Mérida. Esto a pesar de que las fuertes lluvias destruyeron su estudio en el barrio de Santiago. Sin embargo, de alguna forma, Taure continuó creando e incluso realizó una exhibición en El Zapote art gallery. Lo que de plano no pudo hacer entre todo el caos era compartir pan casero con sus visitantes. Esto resultó triste para él, ya que el pan fresco tiene un papel importante en su proyecto artístico. Pero ahora de Graphic Bakery, ya abrió sus puertas una vez más. Los viernes son de talleres, exhibiciones y pan fresco, tal como han sido desde el 2012. Puedes encontrar The Graphic Bakery en García Ginerés. Visita @thegraphicbakery en Facebook o haz una reservación en printandbake@gmail.com. —Lee Steele
EVERY CITY NEEDS A GOOD BURGER JOINT
/ flamanteburgers
Calle 64 x 47 Centro, Merida