Tipos de estrés ambiental en la marihuana

Problemas y soluciones en riego, nutrición, crecimiento, floración, esquejes, semillas un crecimiento vigoroso. La identificación correcta de cada síntoma, tan pronto como ocurra, resulta esencial para ayudar al vigor de las plantas.

¿Cómo afecta el estrés ambiental a las plantas de marihuana? Todos los factores ambientales producen efectos. Algunos como la humedad, la calidad del aire, temperatura y luz juegan un papel importante en qué tan sanas o débiles crecerán las plantas. También existen otros motivos que pueden afectar a la salud del cannabis, incluso encontrándose en perfectas condiciones el resto de factores ambientales. Mira cómo prevenir o solucionar problemas habituales de las plantas de marihuana.

Los cultivos de marihuana de interior, de invernadero y algunos de exterior se cosechan en tan poco tiempo que no da a que se recuperen de un desequilibrio nutricional. Un pequeño desajuste podría costar una semana de desarrollo, lo cual representa hasta más del 10% de la vida de la planta. No hay que confundir las deficiencias o excesos de nutrientes con el daño de insectos y enfermedades o por las prácticas de cultivo inapropiadas.

Los elementos del entorno deben controlarse, debemos comprobar aire, agua, temperatura, humedad, etc., y ajustar el medio de cultivo y la ventilación, antes de tomar una decisión respecto a la falta o no de nutrientes.

Las deficiencias de nutrientes son menos comunes cuando se utiliza tierra fresca reforzada con micronutrientes. Si el sustrato o el agua de riego son ácidos, añade caliza dolomita para regular el pH y mantenerlo en niveles aceptables.

Evita problemas con los nutrientes con sustrato sin usar, agua limpia y una solución completa de nutrientes. Controla la EC y el pH dentro de unos niveles adecuados y lixivia el sistema con una solución suave de nutrientes cada cuatro semanas.

Cambios en la iluminación

Uno de los mayores causantes de estrés medioambiental son los cambios en la intensidad de luz o interrupciones en los ciclos de oscuridad. Las plantas de interior requieren un régimen constante de iluminación. Las plantas en exterior tienen un reloj interno natural, que les hace saber cuándo es tiempo de florecer.

Algunas de estas causas incluyen nutrientes, balance de pH y la duración de la temporada de cultivo. Encontrar el balance correcto entre influencia humana y entorno de cultivo es importante, especialmente cuando se obtiene el producto final. Las plantas que crecen y maduran bajo condiciones ideales producirán mejores flores y normalmente mayor cantidad de materia.

Mal Diagnóstico: enfermedades y pH

Muchos de los problemas de los cultivos, se diagnostican de manera errónea como falta de fertilizante. La mayoría de ocasiones, son los insectos y las enfermedades los causantes de estos problemas. Otras veces, los problemas están provocados por desequilibrios en el pH del medio de cultivo y del agua. Un pH entre 6.5 y 7.0, para tierra, y entre 5.8 y 6.5 para hidroponía permite que los nutrientes sean asimilables. Por encima o por debajo del rango, varios nutrientes se vuelven más difíciles de absorber.

Una diferencia en el pH en un punto entero significa un aumento de diez veces la alcalinidad o la acidez. En tierra, un pH inferior a 6,5 puede ocasionar deficiencia de calcio, que quema las puntas de las raíces y las hojas sufren infecciones fúngicas, además de provocar puntos muertos en el follaje. Un pH por encima de 7,0 podría reducir la absorción de hierro, dando como resultado hojas cloróticas con nervios amarillos. En jardines con sustratos orgánicos, un pH incorrecto contribuye a desórdenes nutricionales serios.

En hidroponía los nutrientes siguen estando disponibles en la solución para ser absorbidos, y el nivel de pH no resulta tan crítico. En hidroponía, la conductividad eléctrica es el indicador más decisivo respecto a la salud de las plantas y absorción de nutrientes.

Cuando la planta muestra síntomas, ya ha padecido un severo estrés nutricional, y necesitará tiempo para recuperar

Toda planta de marihuana requiere cierta cantidad de oscuridad ininterrumpida para florecer y cada cepa tiene un período de tiempo para que eso ocurra. Asegurar el mantenimiento ininterrumpido de oscuridad es de gran importancia si queremos sacar a las plantas del estado de crecimiento vegetativo.

Indoor: cálido o húmedo

El cannabis puede sobrevivir bajo una variedad de condiciones diferentes, pero si la habitación de cultivo es, o bien demasiado caliente, bien demasiado húmeda, existe el riesgo de estresar las plantas.

Las plantas no pueden prosperar si no están provistas de la temperatura adecuada y el nivel de humedad correcto. Para reducir la humedad, se puede usar un deshumificador. Esto reemplaza de manera efectiva la humedad en el aire con aire más seco.

Muchas variedades de marihuana pueden soportar un poco de calor, pero existe un punto donde puede ser demasiado. Cualquier temperatura superior a los 30º C es demasiada para cualquier variedad de interior. Se puede utilizar aire acondicionado para mantener la temperatura en la habitación.

La temperatura en el interior de la hoja puede sobrepasar los 43ºC. Esto ocurre con facilidad porque las hojas almacenan el calor que irradia la lámpara. A esta temperatura, la química interna de las hojas de la marihuana se interrumpe. Las proteínas manufacturadas se descomponen y se vuelven inaccesibles para la planta. Al subir la temperatura interna de la hoja, ésta se ve forzada a usar y evaporar más agua. Alrededor del 70% de la energía de la planta se utiliza en este proceso.

¿Cuándo y cómo podar?

Podar tiene efectos beneficiosos en el rendimiento final. Podar es una herramienta, pero no se trata de realizarla con demasiada intensidad. Podar en exceso puede dañar la planta a largo plazo, por lo tanto, es importante podar con mode- ración. Se pueden podar las hojas o incluso los cogollos para sacar más provecho a cada planta de marihuana.

Podar la yema central producirá una mayor cantidad de pequeñas ramas laterales compuestas por un abundante número de cogollos pequeños.

Podar las hojas permite a las plantas concentrar su energía en las zonas más importantes de crecimiento como los cogollos. También se pueden podar las plantas para propósitos cosméticos o por seguridad si fuera necesario.

Cogollos aireados y sueltos

Los cogollos sueltos y aireados carecen de la calidad de los cogollos apretados y firmes, tanto en textura como a la hora de fumar. Estos problemas suelen ser causados por una confluencia de factores ambientales que incluyen falta de luz, carencia de valores nutricionales y/o temperaturas demasiado altas.

En la mayoría de casos, las altas temperaturas van a ser el principal culpable. Si el cultivo es de exterior, se pueden realizar aplicaciones foliares por aspersión o spray para evitar los cogollos aireados y sueltos. La carencia de potasio durante el periodo final de floración también puede ser un problema, tendremos que asegurarnos cambiar el fertilizante o la solución de nutrientes a una con mayor concentración de potasio.

Esquejes no enraízan

Los esquejes son relativamente fáciles de enraizar. El índice de éxito depende de una combinación apropiada de calor, humedad, luz, hormonas de enraizamiento y aireación del medio de cultivo. Cuanto más precisa la combinación, más rápido y fuerte crecerán las raíces.

Algunas veces los esquejes no quieren enraizar en el suelo, pero solo se necesita un poco de gel estimulador de raíces y unas condiciones ambientales óptimas para que enraícen.

Es posible cortar esquejes de las plantas de marihuana cuando están maduras o en floración. Siempre y cuando se coloquen en un medio que soporte su existencia. El balance de humedad, temperatura y luz es lo más importante al sacar raíces de los esquejes.

Estiramiento en la marihuana

Las plantas de marihuana se estiran debido a varios factores ambientales y no podrán producir tallos resistentes para soportar el peso de ramas, hojas y cogollos. Una solución simple es doblar el tallo hacia adelante y hacia atrás. Si bien esto podría estresa la planta, obliga al tallo a rasgarse y luego reconstruirse en ese mismo espacio. Como resultado, los tallos se vuelven mucho más resistentes.

Otras soluciones incluyen un exceso de luz azul, manteniendo la temperatura alrededor de 26º C, o asegurando que las plantas tengan toda la luz que necesitan disponible. Si la luz es escasa, las plantas comenzarán a estirarse en busca de la fuente de luz.

Altas y bajas temperaturas

Las temperaturas extremas, ya sean altas o bajas, pueden afectar a las plantas de marihuana de maneras diferentes. La temperatura ideal en interior es alrededor de 26ºC, pero hay cierto margen de maniobra. De hecho, la temperatura nocturna se puede bajar unos 15ºC si es necesario. Aun así, las temperaturas demasiado bajas tienden a producir crecimiento muy lento y no tienen mucha producción. Es posible que no se note el cambio, pero su rendimiento habrá sido mucho menor de lo que podría haber sido. Arreglar esto solo es cuestión de calentar el cuarto de cultivo si está demasiado frío.

Altas temperaturas pueden causar tallos y ramas alargadas, muy ligeras, plantas marchitas y con poca resistencia para mantenerse firmes. Es necesario tener chequear la ventilación y cómo afecta la temperatura. Se necesitará instalar aparatos de aire acondicionado o un sistema de iluminación refrigerado por agua para darle un descanso a la habitación.

Estrés y hermafroditismo

El estrés puede causar hermafroditismo, pero las plantas también podrían estar predestinadas genéticamente a ser hermafroditas. Es importante evitar cualquier cambio ambiental que pueda inducir al hermafroditismo. Por ejemplo, es posible que las plantas en exterior crezcan bien, pero al pasarlas a interior, pueden estar bajo mucho estrés que puede producir hermafroditismo.

La única manera de tratar el hermafroditismo es cortar y quitar las flores masculinas, para que la planta no consiga autopolinizarse o polinizar las de alrededor.

Semillas no germinan

Algunas veces para germinar no es suficiente darle luz, agua y suelo a la semilla. Para acelerar la germinación, se puede intentar remojarlas en una mezcla de perióxido de hidrógeno y agua. Las semillas pueden tardar de 2 a 10 días para germinar.

Planta caída

Si alguna planta es derribada durante una tormenta o viento, no está todo perdido. Solamente hay que devolver la planta a su posición y reparar cualquier rotura. También hay que asegurarse que la planta quede sujeta firmemente al suelo y que no vuelva a caerse si vuelven los fuertes vientos o una tormenta. Unos tutores o guías ayudan a evitar posibles caídas sobre la planta y

Detección y solución de problemas

Muchos de los problemas aparecen durante la fase de crecimiento vegetativo y a menudo continúan en la floración. Debemos solucionarlos antes que progresen.

La última etapa del ciclo vital de la planta es la floración, solo dura entre seis y diez semanas. Los problemas deben resolverse durante las dos primeras semanas, o la producción se reducirá en relación a la gravedad de los problemas.

EFECTO CAUSA SOLUCIÓN Semillas y plántulas

Semillas no germinan

Mal de vivero Semillas malas Gusanos de las raíces

La semilla germina, la plántula muestra signos de plagas que se comen el follaje

Tallo de la plántula oscuro por la base o crecimiento enfermizo, se cae de repente o se marchita

Hojas del plantón con manchas de color amarillo, gris, negro y/o verde oscuro

Esquejes o clones

Crecimiento vegetativo

Comprar semillas nuevas Pedir devolución de dinero Baña el sustrato con aceite de neem o con aceite para horticultura

Ácaros (hojas con punteado) Pulgones (exudan melaza) Aceite de neem o pelitre Pelitre, jabón insecticida o sulfato de nicotina

Mal del vivero Marchitamiento Falta o exceso de humedad

Bañar sustrato con metalaxil o comprar semillas nuevas

Tizón o antracnosis Retirar las plantas y el medio de cultivo

Se marchitan y mueren Falta de Humedad Coloca un mini-invernadero, rocía 4-6 veces al día Medio demasiado húmedo Drena el medio, no riegues ni dejes que el agua se estanque en la bandeja

No enraízan Medio demasiado seco o demasiado húmedo Ver “Se marchitan y mueren” Hormona de enraizamiento inconsistente Cambia a una hormona de enraizamiento en formato líquido

Plantas espigadas y débiles Falta de luz Añade una lámpara, cambia el reflector, acerca la lámpara a las plantas.

Ventilación insuficiente Sustrato demasiado mojado Sustrato demasiado seco Acumulación tóxica de nutrientes

Pulveriza con pelitre Riega menos Lixiviar el medio de cultivo

Añade un extractor Riega menos Riega más Lixivia el medio de cultivo y cambia la solución nutriente Plantas estancadas y achaparradas Daño por insectos Raíces podridas Acumulación tóxica de nutrientes

Puntas quemadas en las hojas Tallos morados y puntos quemados en las hojas

Acumulación tóxica de nutrientes Podría tratarse de uno o más nutrientes

Lava el sustrato cada semana Reduce la dosis de nutrientes y lixivia el medio de cada semana

Manchas en las hojas, bordes quemados, hojas descoloridas, hojas pálidas

Daños por insectos –hojas mascadas, huevos e insectos visibles en las plantas- revisa el envés de las hojas con una lupa de 20x

Toxicidad de nutrientes

Daños por araña roja

Lavar el sustrato, cambiar solución nutriente, cambiar fertilizante, consultar los problemas de nutrientes específicos Puntos pequeños y blancuzcos en las hojas

Mosca blanca, pulgones, lapas, orugas, larvas, etc.

Pulveriza con pelitre, aceite de neem

Pulveriza con pelitre o aceite de neem

Hongos o moho en el follaje o en el sustrato

Humedad elevada (por encima del 60%)

Temperatura elevada (por encima de 27ºC)

Añade un extractor Rocía el sustrato con una solución de lejía al 5% y lávala al día siguiente. Pulveriza sobre el follaje con una solución de bicarbonato al 10% Marchitamiento súbito y grave de la planta

Marchitamiento por fusariosis o verticilosis Falta de agua

Retira y destruye la planta y el medio de cultivo Irriga la planta, sumerge las raíces en agua

Floración

Crecimiento lento y cogollos pequeños Raíces cocidas o putrefactas

Exceso de fertilización Estrés por falta de agua, luz o aire

Frio, lluvia y húmedad

Lixiviar el medio de cultivo Añade más extractores o aumenta su tamaño. Mantén uniformemente húmedo el medio de cultivo. Cuanto más cerca esté la cosecha, menos puede hacerse. Debe aplicarse el remedio de 3 a 6 semanas antes de la cosecha

Decoloración y muerte de las hojas viejas

Decoloración y muerte de las hojas nuevas

Manchas grisáceas y necróticas en los cogollos

Olores fuertes procedentes del cuarto de cultivo

Deficiencia de nitrógeno, potasio, fósforo o zinc Buscar solución para nutriente específico

Uno de los elementos secundarios o de los oligoelementos Buscar solución para nutriente específico

Moho gris (botritis)

Los cogollos maduros huelen mucho más que los cogollos tempranos

Elimina el cogollo entero tres centímetros por debajo del daño. Reduce la humedad

Instalar un generador de ozono en las salas grandes. Para habitaciones pequeñas, usa soluciones antiolor.

Si estás pensando en cultivar marihuana en exterior, tratarás con efectos medioambientales impredecibles. Un clima demasiado frío puede arruinar una cosecha entera, cuando las temperaturas caen por debajo de 7ºC, las plantas paran de crecer. Si una ola de frío dura más de lo esperado, hay que calentar las plantas de marihuana artificialmente o trasladarlas al interior.

La humedad y la lluvia causan problemas similares. Ambas dejan la planta susceptible al moho, así que debemos conseguir que las plantas puedan secarse y calentarse lo antes posible después que haya caído la lluvia o pasado el tiempo húmedo. La lluvia también suele traer tormentas que pueden ocasionar daños físicos.

Riego excesivo o falta

No debemos dejar nuestras plantas demasiado tiempo sin agua, pero tampoco debemos regarlas de manera excesiva. Privar de agua a las plantas produce marchitamiento y falta de vigor. Nunca debemos esperar que las plantas empiecen a caer para volver a regar. Hay que comprobar la humedad del suelo, incluso si las plantas parecen estar bien. Si el suelo está seco, entonces deberíamos regar las plantas.

Por otro lado, no queremos nunca que la planta se ahogue. Demasiada agua puede producir que las raíces no tomen suficiente oxígeno. Tenemos que asegurarnos que el drenaje del suelo es apropiado para que no se acumule agua alrededor de las raíces y acabe ahogando a la planta.

Problemas del suelo

Al cultivar en exterior, existen varios tipos de suelo. No todos los suelos son iguales. Los suelos arcillosos, secos y arenosos implican grandes detrimentos para el cultivo de marihuana. De hecho, los suelos arcillosos no suelen drenar bien, lo cual deja a las plantas de marihuana susceptibles de morir por ahogamiento.

un poco de cinta o cuerda servirá para reparar las roturas.

En ocasiones las raíces son arrancadas del suelo y es necesario volver a cubrirlas con una buena capa de sustrato. No es bueno que estén expuestas al aire demasiado tiempo.

¿Agua dura o blanda?

El agua es fundamental para mantener a las plantas saludables, pero puede estar compuesta por algunos minerales no deseados.

El agua corriente o del grifo no es H2O pura y puede contener cloro, azufre, sodio, y otros minerales que afecten el crecimiento. El agua dura suele contener sólidos disueltos. No es recomendable utilizar ablandadores porque pueden acabar añadiendo demasiado sodio al agua. El azufre es altamente ácido y

Por el contrario, los suelos arenosos permiten al agua pasar a través de ellos directamente con lo que la planta no puede tomar ningún nutriente. Los suelos secos son difíciles de trabajar, pero, si usas un agente humectante, puedes hacerlo más maleable. Existen una serie de soluciones para conseguir que un suelo arcilloso y arenoso sean más aceptables para el crecimiento de marihuana.

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