B.8__Viernes 8 de agosto 2014, Trujillo, La Libertad
TURISMO
La Industria
> LAS MUJERES DE NARIHUALÁ, EN LA REGIÓN PIURA, CONSERVAN ESTA ANTIQUÍSIMA PRÁCTICA
GuíaÚtil ANTECEDNTES
Artesanas del sombrero UNA ESPLÉNDIDA Y TRADICIONAL JOYA QUE HA SIDO DECLARADA PATRIMONIO CULTURAL DE LA NACIÓN.
Reseña histórica El sombrero proviene de la vestimenta europea del siglo XV, pero la gradual imposición de la moda española a las poblaciones nativas lo introdujo en los pueblos andinos. Desde el silgo XVIII, el sombrero fue parte del vestir diario de los piuranos. Es más, en Piura se gestó una de las más importantes industrias sombrereras del Perú que tuvo su apogeo a finales del siglo XIX con el famoso ‘boom del sombrero’. En ese tiempo, niños, jóvenes, adultos, ricos o pobres lo usaron. Era un signo de distinción y atuendo diario.
UN RÉCORD
El más grande
USANZA. María Mendoza se siente orgullosa de ser una de las herederas que garantiza la preservación de un arte de varios siglos.
FOTOS: GUIDO SÁNCHEZ.
Guido Sánchez Santur guidosanchez@laindustria.pe
El intenso calor del clima es parte de la identidad de los piuranos. Esta característica motivó a los antiguos pobladores a ingeniárselas para protegerse del sol. Es así como dan paso al sombrero de paja, que se integró a la vestimenta cotidiana de la gente sin distinción social ni económica, hasta mediados del 50 del siglo XX que empezó a dejarse de usar. Esta prenda, que inició su elaboración en Catacaos, tuvo tanta acogida que su fama rebasó los límites de Piura y se convirtió en un sustancioso negocio para muchos emprendedores que encontraron una forma rápida de hacer empresa. Lo más importante es que las personas dedicadas a confeccionarlos, con el correr de los años, perfeccionaban más sus habilidades en el tejido hasta convertido en un arte, cuya trascendencia motivó que el Ministerio de Cultura lo declare Patrimonio Cultural de la Nación, en 2013. De esta manera se reconoció el valor de la técnica y la destreza manual de las mujeres del Bajo Piura, especialmente de Narihualá, La Campiña, Pedregal Chico, Pedregal Grande, Molino Azul, herederas de la cultura Tallan. María Eufemia Villegas de Mendoza es una experimentada artesana de Narihualá que con orgullo conserva este arte que heredó de sus padres y abuelos. Su habilidad en el tejido de la paja toquilla le dado prestigio en la confección de sombreros, individuales, carteras, canastas, forros de botellas y otros objetos ornamentales que oferta conjuntamente con sus hijos y nietos. Dependiendo de la calidad de un sombrero, la confección del mismo se demora entre 8, 15 y 30 días, por eso el elevado precio de estas prendas que suelen ser de alta fineza. Estas mujeres artesanas están agrupadas en la Asociación Narihualá, que preside María Mendoza Silva, residente en Pedregal Chico, donde desde niña aprendió a tejer sombreros, práctica en la que lleva 40 años. “Es un oficio que aprendí por herencia y ahora contribuye al sustento de nuestro hogar porque vedemos lo que tejemos, con cuyos ingresos hemos dado estudio a nuestros hijos. Lo interesante es que cuando te-
El año pasado, 25 tejedoras de Catacaos elaboraron el sombrero de paja toquilla más grande del mundo. Esta prenda —que medía 3,5 metros de diámetro en la falda, 92 centímetros de altura en la copa y 91 de platillo— fue tejido por artesanas del centro poblado de Pedregal Grande, quienes demoraron tres meses en su elaboración. El propósito fue inscribirlo en el Libro de Records Guinness. Es un símbolo de identidad de Catacaos, donde actualmente la mayor parte de sus productores son mujeres. En términos de economía familiar, constituye un importante complemento de la actividad agrícola.
ESTÁ PERENNIZADO
PULCRA. María Villegas cruza cada hebra con precisión.
DE EXPORTACIÓN. La calidad con que tejen es elevada.
Opina DIANA AGUIRRE DOCENTE DE LA UDEP
Puesta en valor.
PEDIDOS. Los productos de paja toquilla son ofertados en distintas ferias turísticas.
Precio y calidad La calidad y el precio del sombrero está en función del tiempo que demanda su confección. El que se teje en solo una semana cuesta 60 soles, el de 15 días oscila entre 150 y 200 soles, y el que demora un mes su valor se eleva a 250 o 300 soles. La confección demora 30 días cuando la hebra
nemos mucho trabajo por los pedidos nuestros esposos nos ayudan, a veces a tejer, pero mayormente en los quehaceres de la casa (cocina, limpieza, etc.). Las ventas las suelen concretar directamente o con intermediarios que compran en lotes. El promedio de ventas que tiene la asociación es de 200 sombreros finos cada mes y los de menor calidad entre 150 y 200 unidades.
es la más fina, es decir que la paja se divide en cuatro; se demora dos semanas al dividirla solo en dos y si se la usa entera hacer un sombrero no pasa de una semana, en consecuencia la prenda que es más gruesa y pesada es la más barata. Lo interesante es que esta actividad tradicional cuenta con el respaldo del Gobierno.
El mayor mercado nacional de sombreros es Lima, pero también se lo llevan los turistas nacionales y extranjeros que llegan a visitar al sitio arqueológico y el museo de Narihualá. Sin embargo, las ventas se diversifican con paneras, flores y variados souvenirs, como sombreros en miniatura, abanicos, botas, cofres, billeteras, fruteras, aretes, ganchos de
flores y otros. Esta actividad está prosperando gracias a la organización que han fortalecido, puesto que eso les facilitó la capacitación en capacitación y modelos que cada integrante ha ido cultivando, como las lentejas, garbanzos, el zigzag, la estrella en sombreros, carteras y paneras. Sin duda los piuranos llevan siglos trabajando la materia
“Al declarar como Patrimonio Cultural de la Nación al sombrero se ha puesto en valor nuestra cultura; se reconoce la maestría de nuestra gente en la elaboración de un artículo de vestir con historia y tradición de gran valor patrimonial. Este reconocimiento tiene una representación especial para los poseedores de esta técnica artesanal, ya que les hace importantes, eleva la autoestima de esta gente sencilla del Bajo Piura; pero sobre todo nos compromete a tomar medidas para que esta tradición no se pierda y que las futuras generaciones del distrito de Catacaos sigan tejiendo. Si no se actúa de inmediato, estaremos próximos a presenciar la desaparición del sombrero de paja y más en tejido fino”.
prima que la convierten en arte autóctono y popular presentándola en mil formas y colores, lo que representa la vitalidad de la costa y la sierra. En cada pieza se plasman las tradiciones y costumbres de sus pueblos, sus alegrías, sus penas, sus rasgos más palpitantes. Así, el artesano, sintetiza al hombre y su naturale za en cada trazo de su creación.
Publican libro La docente de la Udep Diana Aguirre Manrique publicó el libro El sombrero de paja de Catacaos: tejiendo su historia financiado por la Dirección Nacional de Artesanía del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur). Esta obra ofrece una detallada investigación acerca de la técnica del tejido que se hace en este pueblo y las características que lo diferencia del de otras localidades. Incluye una propuesta de salvaguarda para este elemento propio de la cultura piurana. Ahí se mencionan las principales características del estilo de otros sombrereros del norte del Perú.
TIENDA ESPECIALIZADA
Casa del sombrero Es una empresa dedicada a la comercialización de sombreros y carteras elaborados en paja toquilla y paja junco. Se fundó el 3 de noviembre del año 2005 en Catacaos. Sus clientes principales son los turistas nacionales y extranjeros, además de conocidas empresas como Maestro home Center, Telefónica del Perú, G4S Perú, Seal, Ucisa, etc., quienes prefieren los diseños innovadores que posee. Se trata de una empresa dedicada a la producción y comercialización de sombreros y accesorios artesanales elaborados en paja natural toquilla, palma y junco, que a través de los mismos queremos mostrar y trasmitir la cultura de una región al mundo. Existen centros artesanales importantes por la calidad de sus trabajos y tradición de sus pueblos.