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HIGH MOMMAS: ALEXANDRA SUÁREZ
WOMEN CULTURE
HIGH MOMMAS: ¡NO ESTAMOS HACIENDO NADA MALO!
Un viernes de verano como alrededor de las 6:30 p.m., nos encontramos en un mini “get” totalmente improvisado (pero very very much needed) en casa de una de mis buenas amigas. Éramos 4, todas sentadas en la mesa del comedor poniéndonos al día. Para cualquiera observando de afuera, somos un grupo de madres que estamos “chismeando” sobre los campamentos de verano, el precio astronómicamente absurdo de la gasolina, el back to school shopping, etc., básicamente hablando de “mom stuff”.
Pero no. Ese no era el tipo de “get” que se estaba llevando a cabo. Al observar detenidamente el escenario donde nos encontramos, te das cuenta de las hermosas pantallas de hoja de cannabis que una de las mamás lleva puestas, la tshirt que lee “Moms who smoke weed aren’t bad moms” que otra de nosotras lucía y el paquetito de gummies de cannabis medicinal que estaba en circulación. Nosotras nos reunimos esta vez para compartir nuestras anécdotas recientes del cannabis y la maternidad.
Si en algo todas estamos de acuerdo es que EL CONSUMIR CANNABIS NOS HACE MEJORES MADRES. Una de nosotras explica que, al consumir cannabis, las conversaciones con sus hijos son más profundas y reales, el tiempo para jugar se disfruta mucho más, ya que no estás pensando en todos los “bills” que aún no se han pagado, todo lo que queda por hacer antes de que termine el día de hoy, etc. Uno puede realmente sentarse con los hijos y disfrutárselos.
Otra habla de lo chévere que es el que las mamás de hoy día somos mucho más open que las generaciones pasadas en defender y promover el self-care para lidiar mucho mejor con los retos y el estrés brutal de ser madre. El consumo de un poco de cannabis viene siendo el equivalente a tomarte de 1 a 2 copas de vino para poder bajarle dos, luego de un largo día de criar a nuestras bendiciones, jeje. Una de nosotras (la más OCD del corillo) cuenta que el cannabis le viene como anillo al dedo, antes de cualquier actividad con sus chicos, porque pone en mute sus pensamientos sobre el reguero brutal que van a hacer, todo lo que se va a virar al piso, la ropa que se va a ensuciar, etc., y la deja disfrutar y enfocarse en el momento en vez de pensar en los regueros.

Ya no estamos en la edad de arrebatarnos y vegetar, decía otra; Es un “active high” donde hacemos todas nuestras diligencias diarias, las cosas de nuestros hijos y estamos súper presente y enfocadas en cada cosa que hacemos.
En cuanto a la información que le compartimos a nuestros hijos sobre el cannabis, todas estamos de acuerdo en ser open con ellos. Estamos de acuerdo en llevar el mensaje desde una temprana edad, preferiblemente antes de que las escuelas les hablen sobre esto. Es bien importante darles la información antes que las escuelas para que ellos reconozcan que nosotras somos la autoridad en cuanto a esto, para así evitar el “pero mi maestra dice”, “pero la consejera de la escuela dice”, “pero mis amigos dicen”, etc.
Cada madre lleva su mensaje a su manera, claro, pero al fin del día, todas les dejamos saber a nuestros hijos que el cannabis es una medicina para adultos solamente y que, al medicarnos; ¡NO ESTAMOS HACIENDO NADA MALO!

Alexandra Suárez @highmommas
