2013-38377 ESCAPANDO DE LA ADICCIÓN AL ALCOHOL

Page 1

De una diversión, paso a depender de esta droga.

ESCAPANDO DE LA ADICCION AL ALCOHOL La adolescencia es la etapa que atraviesa Juan Martínez y no sabe cómo enfrentar este grave problema. Juan Martínez es un jovencito de 13 años aparentemente normal, sin problema alguno pero como es común en la etapa en la que se encontraba su vida fue cambiando drásticamente, sin darse cuenta fue cayendo en un hoyo que cada vez fue más hondo y más difícil de salir, el alcoholismo. Esta es la historia de un jovencito que sin planearlo ni predecirlo ahora tiene un grave problema de alcoholismo, es la razón por la que se escribirá sobre la vida de juan Osorio, con la única y sencilla razón de que quien lea estas líneas reflexione y ayude para una sociedad mejor. El alcoholismo es una enfermedad crónica y progresiva que deriva de la ingestión excesiva y no controlada de alcohol, el cual se encuentra en todas las bebidas alcohólicas en mayor o menor grado. “CUATRO DE LA MAÑANA. Fue la hora que llegue a mi casa la primera vez que salí con mis amigos y me sorprendió encontrar junta la puerta de madera de mi casa, sostenida con un papel de revista doblado en muchas partes, entre con mucho cuidado de no hacer ruido, camine por el pasillo largo que me llevaría a mi dormitorio, solo entre, prendí la luz y me cambie de ropa para dormir, mi madre no se levantó hasta la hora en que amaneció y al entrar a mi cuarto me despertó para preguntarme la hora en que había llegado, le dije un hora prudente de llegada y no me reprendió, fue en ese momento en el que me di cuenta que podía hacer lo que quisiera” . Este jovencito desde ese instante empezó a equivocarse en cada situación no tomaba buenas decisiones y cada vez que podía le mentía a su mamá; pero ¿qué puede hacer una madre con tres hijos más y sola? Las cosas se salieron del control para Martha que a sus 35 años había fracasado en su matrimonio y tenía un niño que estaba en la etapa quizás más difícil, su otra hija de ocho años y la menor de cinco años. La realidad no es fácil pero aun quiere luchar por sacar a su hijo del mundo en el que se encuentra.

El Centro de Psicología Bilbao dice textualmente “Los adolescentes no hablan de alcoholismo puesto que en general no beben entre semana y no le dan importancia; es algo que se hace normalmente para pasarlo bien... Sin embargo, sobrepasarse todos los fines de semana y comenzar a depender de ese hábito conlleva también un

tipo de alcoholismo, que crea dependencia y adicción. Hay jóvenes que si no beben ya no lo pasan bien o no se relacionan adecuadamente, que necesitan el alcohol para sentirse más seguros. Generalmente, los jóvenes que


acaban dependiendo poco a poco del alcohol, empiezan a beber también entre semana y a distorsionar sus horarios habituales.” Es una triste realidad que se necesite del alcohol para divertirse y esto es lo que piensan los jóvenes de ahora pero este problema no es de la actualidad, se remonta muchos años atrás.

EL ALCOHOLISMO EN LA HISTORIA Los estudios antropológicos evidencian que ciertas bebidas alcohólicas fermentadas, como el vino y la cerveza, eran ya consumidas hace al menos cinco mil años. Las bebidas con alcohol, por su naturaleza y sus efectos, se vincularon pronto con lo divino y se asociaron a los rituales religiosos. Los egipcios dieron crédito a Osiris por haberles permitido conocer el vino y la adopción de normas de convivencia benévola y tolerante. Los hebreos atribuyeron a Noé el haberse dedicado a la labranza y a plantar la vid; en la Biblia se menciona que bebió vino para celebrar el final del diluvio universal y que se embriagó. Los griegos veneraban a Dionisio -cuyo equivalente romano es Baco- como un dios liberador, del frenesí, de la danza y de la embriaguez, características de las fiestas bacanales. Se le creía el inventor del vino, que proporcionaba alegría y delicias a los mortales disipando las penas. En la mitología griega también se alude a la tragedia del exceso en el consumo, al ser asesinado Dionisio por los embriagados Titanes; Zeus, padre del dios, los fulminó con su rayo justiciero. De las cenizas de los fieros Titanes nacieron los hombres, con un fondo bestial, desenfrenado y violento, pero también con una naturaleza dionisíaca que impulsa su alma hacia lo divino. Para los cristianos, el vino es una de las materias de la eucaristía, que simboliza la sangre de Cristo, el hijo de Dios. Las bebidas fermentadas son las más antiguas, pero no las únicas. El origen de las bebidas destiladas o espirituosas

proviene de la tradición árabe de la alquimia. Suya es la herramienta destiladora, el alambique, utilizada por los sabios alquimistas para separar compuestos. Suyo también es el origen de la palabra "alcohol". Las primeras referencias a la destilación del alcohol datan del siglo XII y nos hablan de la fabricación del aqua vitae (agua de la vida) en referencia a los licores destilados y a la destilación del aguardiente. Este término pervive todavía en el aquavit sueco y noruego, o en el akvavit danés. Fue el español Arnau de Villanova el primero que describiría con detalle la elaboración del llamado "elixir de la vida eterna" o aqua vitae, que se extrae por la "destilación del vino o de sus heces". Durante la Edad Media se dio un impulso a la producción de este tipo de bebidas, gracias a la labor de los monjes cristianos. Estos monjes trataban de encontrar esencias mágicas con aplicaciones medicinales. Estos experimentos son el origen de los elixires. Ocurría sin embargo que la técnica era un poco rudimentaria, y el resultado no constituía algo particularmente grato de ser degustado. Entonces, para mejorar el sabor comenzaron a aromatizar sus brebajes con flores y frutas maceradas. A partir del siglo XV se fundan los gremios de la destilación y será a partir de entonces cuando nazcan algunos de los licores más conocidos y consumidos, como el coñac, el brandy, el whisky o el ron. Desde el momento en que se descubren los destilados y su capacidad de ser trasladados de un lugar a otro, a diferentes temperaturas, con abundantes trasiegos, las bebidas alcohólicas se encuentran en cualquier sitio y son asequibles para toda la sociedad. Es entonces cuando comienza su comercialización. A partir del siglo XVIII, prácticamente en todo el mundo se bebe alcohol, desde los corsarios y piratas que gustaban del ron, hasta los monjes que siguen apegados a sus aromáticos licores de compleja elaboración y fórmula secreta.

Las bebidas fermentadas son las más antiguas, pero no las únicas. El origen de las bebidas destiladas o espirituosas proviene de la tradición árabe de la alquimia. Como hemos visto, el hábito de consumir bebidas alcohólicas es un acto social que refleja en gran medida la


cultura y las costumbres del pueblo en que se presenta. A pesar de que existen tipos de bebidas que son conocidas casi a escala mundial, también es cierto que hay muchas de ellas que son excepcionales de cada región, país o cultura. En nuestro país el consumo de bebidas alcohólicas y de tabaco se han convertido en graves problemas sociales; no solamente por el incremento progresivo de consumidores, sino por la edad de inicio en el consumo y los efectos nocivos a corto, mediano y largo plazo. Por otro lado, las principales consecuencias del inicio de relaciones sexuales en los adolescentes son los embarazos no deseados y el padecimiento de enfermedades de transmisión sexual. Un estudio del Centro de Información y Educación para la Prevención del Abuso de Drogas (Cedro) reporta que las famosas “peras” o escapadas escolares han devenido ahora en una forma más peligrosa que una simple ausencia a clases. Se han convertido en las “peras malogradas”, fiestas escolares organizadas específicamente como preámbulo a todo tipo de prácticas riesgosas, desde beber alcohol hasta mantener relaciones sexuales sin protección o consumir marihuana, pasta básica o cocaína. La Organización Mundial de la Salud estima que el alcohol causa en todo el mundo 1,8 millones de muertes por año. La mayoría de estas muertes se deben a accidentes y lesiones relacionados con el alcohol. En América Latina, según los datos SIDUC 2010 indican que las tasas más altas de

En todo el mundo la marihuana es la sustancia ilegal más consumida, mientras que el tabaco es la sustancia lícita de más rápido crecimiento en los países en vías de desarrollo como es, el Perú. Las tasas más altas de uso de marihuana el último año entre estudiantes secundarios se observan en Canadá (24%) y los Estados Unidos (23%) a comparación de Perú (1,9%). En los Estado Unidos las tasas más altas de consumo de inhalables se encuentran en adolescentes de 13 a 14 años de edad. Un patrón similar se refleja en Chile, Guyana y Panamá. En Argentina, Costa Rica, Guatemala, Haití, Jamaica, Nicaragua, Perú, Trinidad y Tobago las mayores tasas de uso se encuentran en torno a la edad de 15 o 16 años. En Brasil, Colombia, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Santa Lucía, Uruguay, la prevalencia de uso de inhalables continúa aumentando hasta los 17 años. Por otro lado, según la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adolescentes realizada por la OPS en el 2005,en nuestra región, más de la mitad de adolescentes de 13 a 15 años han fumado alguna vez en su vida, comparado con el 26% que lo hace en todo el mundo. Tanto para el tabaco como para el consumo de alcohol, la edad promedio de inicio es 13 años. El consumo de drogas legales entre adolescentes es mayor entre los hombres (32,7%), en comparación con las mujeres (25,2%). Al mismo tiempo, se observa que el consumo de tabaco o alcohol es mayor entre adolescentes que asisten a instituciones educativas privadas (38,2%), en comparación con los que asisten a escuelas públicas (25,6%); asimismo, tiene mayor prevalencia entre estudiantes de secundaria considerados no pobres: 32,4% frente a 26,8% y 20,8% entre pobres y pobres extremos respectivamente.

EFECTOS DEL ADOLESCENTE

consumo de alcohol entre estudiantes secundarios durante el último mes exceden 50% en Colombia, República Dominicana, Uruguay y Santa Lucía.

ALCOHOL

EN

EL

La mayoría de los adolescentes han consumido alcohol por lo menos una vez en su vida y, quizá, haya tomado de más en alguna ocasión. Esto puede ser normal, pues el que un adolescente tome bebidas alcohólicas son caracteres típicos de su edad, al igual que lo son los conflictos generacionales, la confrontación de ideas y actitudes, y todo lo típico de esa edad. Pero cuando el joven lo hace con frecuencia y sin medida, y su vida se ve afectada en términos de su desempeño y calidad, entonces el muchacho ya es un alcohólico. Las características de un alcohólico adolescente, además de todas las comunes a todas las personas, son:  Rápida baja en las calificaciones.  Altibajos emocionales.  Separación notoria de las actividades familiares o de sus quehaceres.  Cambio negativo en su higiene y aspecto personal.  Deseo de aislamiento.  Actividad defensiva y una tendencia a responder agresivamente a la menor provocación.


Para los adolescentes el alcohol es como un "quitapenas" que permitirían esquivar los límites que la realidad impone y acceder a un mundo que ofrecería mejores condiciones de sensación.

Es posible que en nuestra cultura actual, el alcohol juegue algún papel en este sentido para los adolescentes en tanto "se es grande" por estar "tomando alcohol" o por estar borracho. Por otra parte, el alcohol "suelta la lengua" y "da ánimos" para "encarar" el juego de la seducción inicial. El alcohol es una droga socialmente aceptada, como ya hemos dicho en otros puntos, y esta droga daría, desde la consideración de los jóvenes, la fuerza y el valor necesarios para los primeros encuentros sexuales tan deseados y tan temidos. Entonces, se arman de un escenario: la discoteca, el monte o en cualquier parque o lugar donde hacer el denominado “botellón”, en el cual beber para así poder, a través de este acto, estar en un estado de embriaguez o borrachera, sentirse grandes y pensar que están haciendo cosas de personas adultas.

La adolescencia es un momento particularmente vulnerable en la vida de una persona, por ser un momento de "transición" entre la pérdida de los padres como educadores principales y la búsqueda o el encuentro de otras nuevas figuras, deseos y sensaciones. A todo esto también se suma el enfrentamiento con un mundo que cada vez se les va haciendo más complejo. Existe además un verdadero "bombardeo" de la publicidad dirigida hacia los adolescentes, apetecible para el mercado; basta ver como ejemplo al respecto, las publicidades de cerveza destinadas a jóvenes y el "encuentro" entre ellos si se la consume juntos. Los adolescentes también afrontan en esta etapa el erotismo, los encuentros sexuales... que los atemoriza, pero en silencio. En diferentes pueblos y culturas, encontramos ceremonias y rituales de iniciación como forma de marcar en lo simbólico este pasaje de la niñez al "mundo adulto", en muchos casos como marcas en lo real y en todos poniendo en juego cuerpo expuesto al sufrimiento y a la muerte. Ahora bien, ¿qué sucede en una sociedad en la que se ha perdido el rito de iniciación de los actos simbólicos que marcan esta salida de la niñez y la entrada a la adultez como son todas las sociedades modernas del primer mundo?

Juan Martínez comprendió que este tipo de “diversión” como él lo llamaba no le dejaría nada bueno y ahora sigue un tratamiento en el área de Protección del adolescente del centro médico San Francisco; con la ayuda de su madre y su propia voluntad lograra escapar de este monstruo vestido de felicidad y que funciona como éxtasis, un líquido falso que te envuelve y no te da otra opción más que caer en la tentación; pero siempre hay una salida al final del túnel y es por esa luz que juan alcanzara sus sueños y seguirá viviendo la hermosa etapa de la adolescencia.



Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.