Eternidadspa

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Eternidad S/O EQUILIBRIO

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Posadas 1101 - Buenos Aires, Argentina +54 11 4811-1409 / 1353- www.simonettaorsini.com



S/O ARMONÍA

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S/O ARMONÍA

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S/O ARMONÍA

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Staff

Sumario

FUNDADORA Mimi Kohen DIRECTORA Mercedes Quintana COORDINADORA GENERAL Lucía Barro Quintana DIRECCIÓN EDITORIAL Mariana Riveiro DIRECCIÓN DE ARTE Enrique de Azcuénaga CORRECCIÓN Adriana Kogan TRADUCCIÓN Laura Doctorovich y Linda Neilson RETOQUE FOTOGRÁFICO Sebastián Cúneo IMPRENTA Latingráfica

20. Íconos de estilo masculino. Accesorios y relojes para completar un conjunto. 24. Martín Fierro 2017. En la alfombra roja más importante, repaso por las celebrities que lucieron creaciones de Simonetta Orsini. 30. Japón. El país del sol naciente muestra su costado milenario. 36. Liliana Porter. Entrevista con la artista argentina radicada en New York. 42. Tatuajes digitales. ¿Cuáles son los rastros imborrables que dejamos en la Red? Por Joan Cwaik, experto en nuevas tecnologías. 48. Entre Borges y Nietzsche. Apuntes acerca de la eternidad, por Carlos Álvarez Insúa. 52. Juan Martín Hernández. Embajador de Volvo en Argentina, el jugador de rugby habla de la paternidad, de su lesión y del retiro. 58. Viajeros urbanos. Una pareja recorre Buenos Aires y el resultado se plasma en una editorial de moda con los mejores relojes, joyas y accesorios.

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72. Nicolás Márquez. El creador de la exclusiva tienda La Restinga explica el secreto de su éxito: la experiencia de compra. 76. Viaje universal. Eternidad y estilo en una selección de relojes con Fase Lunar. 84. Six O´Clock Tea. En el Museo de Arte Decorativo, Simonetta Orsini fue parte de un encuentro muy especial con la elegancia. 92. Entrevista a Darío Sztajnszrajber. Reflexiones acerca de las grandes preguntas existenciales. 96. Muralismo contemporáneo. Quiénes son los más reconocidos artistas de lo eterno. 102. Sabores de guarda. Desde cavas de carne hasta queso, café y vino, aromas que mejoran con el tiempo. 108. Flota vintage. El mercado de coleccionistas, un negocio en expansión.

COLABORADORES DE REDACCIÓN Carlos Álvarez Insúa, Andrea Cukier, Florencia Zielinski, Gabriel Silveira, Daniela Rossi, María Paula Bandera FOTOGRAFÍAS Eugenio Mazzinghi, Hernán Cristiano, Javier Picerno ILUSTRACIÓN Carlus Rodríguez, Ariel Escalante ESTILISMO Mariana Schurink ASISTENTE DE ESTILISMO Laura Pace ASISTENTE DE FOTOGRAFÍA Lucas Vázquez MAKE UP Marianela Fidalgo para JC Agency con productos Maybelline NY HAIRSTYLING Leandro Moreno con productos Alfaparf Milano MANICURÍA Laqueada para JC Agency con productos Maybelline NY MODELOS Luciana Marolla y Andrés Risso para Civiles Management S/O es una publicación de Simonetta Orsini S.R.L. Queda prohibida la reprodución total o parcial del contenido aún mencionando la fuente. Los editores no son responsables por las opiniones vertidas por los colaboradores, los entrevistados ni los mensajes publicitarios. Registro de Propiedad Intelectual en trámite.



RELOJ DE PORTADA Montblanc TimeWalker Date Atomatic Tiene el impacto de un auto de colección: se trata una pieza inspirada en la simplicidad de los velocímetros de los coches vintage. La esfera está centrada en la indicación de la hora mediante el contraste entre el plateado-blanco y el negro, con grandes números árabes, agujas y minutería con revestimiento Super-LumiNova®. El movimiento es automático calibre MB 24.17. El bisel, de cerámica negra brillante, puede girarse unidireccionalmente para indicar una segunda zona horaria. Ofrece un acabado moleteado en el lateral inspirado en las tapas del depósito de combustible de los autos de carrera. Su caja de 41 mm de acero satinado es resistente al agua hasta 100 metros y fue sometida a las pruebas del Montblanc Laboratory Test 500. Se presenta con correa de caucho o de piel negra, o con un nuevo brazalete de tres eslabones acero.

Editorial lo eterno y lo efímero. esa dupla se pone en jaque cada vez que pensamos en un reloj. Una pieza de diseño creada para perdurar, que busca medir aquello que se escapa: el tiempo. En esa dicotomía se mueve esta edición de S/O. Mientras recorremos Japón y su tradición milenaria, repasamos una de las grandes formas del arte contemporáneo: el muralismo. El experto Joan Cwaik nos cuenta cómo cada interacción que generamos en la web es un tatuaje digital imborrable, que se instala para siempre. Nuestro columnista Carlos Álvarez Insúa plantea un diálogo imaginario entre Borges y Nietzsche en sus apuntes acerca de la eternidad. Y porque nada es para siempre, el jugador de los Jaguares, Juan Martín Hernández, habla de su retiro. La nota de relojes se basa en una de las complicaciones más fascinantes: las piezas con el misterio de la Fase Lunar. Desde el Six O’Clock Tea, recuperamos la elegancia clásica para retratar la colección de joyas de Simonetta Orsini. Mientras, en la casona antigua que hospeda la tienda de La Restinga, hacemos un viaje por el estilo urbano moderno de la mano de Montblanc. La muerte, Dios, de esos temas eternos hablamos con el filósofo Darío Sztajnszrajber. Hacemos foco en los sabores que se modifican y mejoran con el tiempo: no solo los vinos sino también la carne, el queso y el café, y repasamos el mercado de coleccionistas de autos, el negocio con mayor rentabilidad. ¶ MARTÍN DE LEEUW Presidente de Simonetta Orsini

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LOS ELEGIDOS Andy Clar, la responsable de Chicas en New York, uno de los emprendimientos de turismo más exitosos, y los directivos de Volvo y Assist-Card responden acerca de un tema cautivante: la eternidad.

1.

¿Cuáles son esos objetos que pasan de generación en generación en tu familia?

2.

¿Qué momento de tu historia personal o profesional guardarías para siempre?

3.

¿Cuál de tus discos, películas o libros volverías a escuchar, ver o leer una y otra vez?

4.

¿Qué cualidad que valorás heredaste de tus padres y qué querés que hereden tus hijos de vos?

5.

Si pudieras ser inmortal, ¿lo eligirías? En ese caso, ¿por qué?

6.

¿Una ciudad para vivir toda la vida?

7.

Una pequeña acción que pensás que aporta a que el mundo sea mejor y por qué.

8.

¿Qué objeto o device te soluciona la vida cotidiana?

9.

¿Cómo te llevás con la fugacidad de las redes sociales?

10. 14 S/O ETERNIDAD

¿Qué es el tiempo para vos?


LOS ELEGIDOS | Andy Clar, CEO de Chicas en New York

1. Una caja de música que tiene forma de violín, casi a escala real. 2. El día que, después de tener un accidente que me dejó un año sin caminar y los médicos me decían que no volvería a hacerlo, dije: “Sí, voy a volver a caminar y lo voy a hacer por diferentes rincones del mundo”. Fue una decisión natural que tomé veinte años antes de crear Chicas en NY y vivir de los viajes. 3. Puedo escuchar los discos de Cerati mil veces en un día -siempre encuentro una letra acorde al momento que estoy viviendo-. 4. Heredé la creatividad aplicada a todas las cosas de la vida. Quiero que mi hijo herede lo mismo. Sumado a que, con paciencia, trabajo, perseverancia y amor, podés lograr lo que te propongas. 5. No sé si lo eligiría, no sé si soportaría que la gente que amo no lo sea, y se vayan yendo. Prefiero dedicarme a vivir plenamente los años que esté viva. 6. Buenos Aires, sin duda. Vivo en la ciudad que amo. 7. Ponerse en el lugar del otro. Si pudiéramos hacerlo con honestidad y sin especular, sería todo muy diferente. 8. Mi celular. Es parte de mi cuerpo a esta altura. ¡Jajaja! 9. Las adapto, pero eso no es mi vida. Mi vida es real. Las redes están cargadas de mucha ficción y fantasía, y yo intento comunicarme desde mi realidad y no seguir las reglas habituales ni los tiempos estipulados. A veces subo a mi comunidad un posteo cada dos días o más y por lo general los tips no son temporarios. Si buscás un restaurante en NY ponés #ChicasEnNYfoodies y te armás una guía completa de restaurantes en la cuenta de Instagram de @chicasEnNewyork y esos datos perduran en el tiempo. 10. ¡Uff! ¿En este momento de mi vida? Lo que más me falta. El tiempo es relativo, todos tenemos una percepción diferente, para mí un día puede pasar en diez minutos o en treinta horas.


LOS ELEGIDOS | Alexia Keglevich, CEO Global de Assist Card.

1. Las fotos de mis padres, de su historia ¡tan interesante! Las imágenes de mis abuelos, de su experiencia de vida. A través de ellas mis hijas viajan en el tiempo, y mantenemos viva la esencia de la familia. 2. El nacimiento de mis hijas, el tenerlas conmigo, el poder abrazarlas ¡es único! Y en lo profesional, por un lado la venta a un holding internacional en el año 2011 y la seguridad de que era el cambio que la compañía necesitaba luego de varios años de trayectoria. También cuando construimos, junto con los colaboradores de Assist Card, viviendas para sectores de la región en estado precario. 3. Cualquier libro de Richard Branson. Volvería a leerlos una y otra vez. Todo lo que leí de él me dejó una enseñanza. Recomiendo: Screw It, Let’s Do It: Lessons in Life. 4. La pasión, esa fuerza que surge de lo más interno de uno para alcanzar las metas es una cualidad que heredé de mis padres. Eso, además de la tenacidad y el compromiso, es lo que trato de inculcar día a día a mis hijas. 5. No, la vida es única y saber que “estamos de paso” me hace levantar cada mañana con esas ganas de dejar huella, de enseñar, de aportar un granito de arena para las buenas causas. 6. Tuve la suerte de conocer muchas ciudades, pero la respuesta es Buenos Aires. Vivo en esta ciudad y elijo seguir aquí. También me encanta el Sur y si tuviera que elegir… sería San Carlos de Bariloche, es mi lugar en el mundo. 7. Ayudar sin mirar a quién. Si todos tomásemos esto como lema de vida el mundo entero sería un mejor lugar para vivir. Lo más valioso es el tiempo, y justamente ofrecerlo para las buenas causas es un aporte contundente. 8. El celular. Tengo todo en la palma de mi mano, y cada día se suman más apps para solucionar temas del día a día. 9. Las redes sociales nacieron con ese ritmo de permanencia y, si no te adaptás, no estás en ellas. 10. Lo más valioso que tiene cada persona, aquello que nunca vuelve y que por eso es tan importante cuidar.


QP à Équation White gold case - Millésimé


LOS ELEGIDOS | Ignacio Pierrez Llambi, Manager Volvo Cars Argentina.

1. Un sobretodo que usaba mi abuelo y que se lo había pasado mi tatarabuelo. Yo lo llevo a todas las reuniones y, cada vez que lo uso, sé que sale una gran parte de la historia de mi familia, lo cual me pone contento y por supuesto que también se lo haré llegar a mi hijo. 2. El nacimiento de mis hijos Azul y Nicolás. Es un punto de inflexión en mi vida que jamás olvidaré. Respecto a lo profesional, cuando cobré mi primer salario. Recibir la retribución por el esfuerzo del trabajo es una sensación que dignifica. 3. La música es uno de los pilares más importantes de mi vida. Elijo The White Album de los Beatles, porque es uno de esos discos eternos. En el rubro películas, me quedo con Una mente brillante. Mi libro favorito sin dudas en A Brave New World, de Aldous Huxley. Escrito en 1932, un relato completo de un futuro que no es muy distinto al que vemos hoy, con el detalle de que lo hizo casi cien años antes. 4. El esfuerzo continuo para mejorar día a día. Si intentamos ser todos los días un poco mejores, los resultados llegan. 5. No elegiría ser inmortal, creo que Dios nos dio la vida para que dure lo que corresponda y, durante ese ínfimo lapso de tiempo, dejar el mejor legado y una huella inolvidable. 6. Buenos Aires. Muchas veces no tenemos tiempo de disfrutarla, pero les aseguro que un fin de semana en el Microcentro prestando atención a la arquitectura, a los diseños, etc. le cambiaría la perspectiva a más de uno. 7. Todos, con muy poco, podemos ser solidarios con el que menos tiene, con nuestros ancianos. A veces el ritmo del día a día nos hace olvidar que no nos lleva más de cinco minutos ayudar a alguien que lo necesita. 8. El celular se ha convertido en el objeto necesario del día a día. 9. Me llevo bien con las redes sociales en general, aunque no soy de estar todo el tiempo descargando lo último. 10. El tiempo es un regalo que Dios nos dio; no parece, pero pasa muy rápido. Ahora que soy padre me doy cuenta de lo mucho que debemos valorarlo y no preocuparnos por cosas que el tiempo no cambia. La educación de nuestros hijos, alimentar el amor del matrimonio y la construcción de la familia son cosas que si no hacemos, el tiempo no nos devuelve.


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STYLE ICONS Tres estilos, tres hombres que pueden ser el mismo: una jornada laboral o un fin de semana urbano son un gran programa con la mejor compañía: accesorios que aportan personalidad y estilo.

Lentes de acetato inyectado. Prada.

Pinza de corbata Montblanc Reloj Da Vinci Automático. IWC

Zapatos acordonados de becerro. Salvatore Ferragamo

Traje y corbata slim, ejemplo del estilo italiano. Dolce&Gabbana

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Cinturón Montblanc


Bolso Meisterstück Soft Grain Montblanc

Gafas de sol Clubmaster, con alzada símil carey. Ray-Ban.

Tourbillon 24 SecVision. Greubel Forsey

Loafers clásicos de piel de becerro. Gucci.

Cinturón Montblanc

Un básico, el abrigo camel, en un conjunto informal. Ermenegildo Zegna.

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Guantes de becerro con interior motivo damero, ícono de la marca. Louis Vuitton. Gafas con armazón de grilamid. Ray-Ban.

Luminor Submersible 1950 3 days Automatic Titanio -47mm-. Panerai.

Bufanda de cashmere en tonos neutros. Louis Vuitton.

Un saco cruzado estilo militar, ideal para el viajero urbano. Bottega Veneta.

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Bolso Meisterstück Soft Grain “Duffle” pequeño. Montblanc.


Hugh Jackman and the new TimeWalker Chronograph El nuevo cronógrafo TimeWalker está inspirado en el rendimiento y en el espíritu del automovilismo. montblanc.com/timewalker Crafted for New Heights.

Av. Alvear 1920 · (C1115AAJ) Buenos Aires · Argentina Tel.: (5411) 4804-7924/6781

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Un recorrido por la alfombra roja En compañía de sofisticados vestidos de alta costura, los relojes y las piezas de joyería más impactantes salen, cada año, a recorrer la red carpet de los premios Martín Fierro, la gran gala de la televisión argentina. En esta edición, Simonetta Orsini acompañó algunos de los looks destacados.

Aros solitarios de oro blanco y brillantes.

Anillo de oro blanco con brillantes baguette y pavée de brillantes.

FOTOS: ADHRIAN SCHMIDT.

Anillo de oro blanco con pavée de brillantes en el cuerpo y engarce illussion.

Mariana Fabbiani

La conductora del Martín Fierro lució dos modelos creados por el diseñador argentino Gabriel Lage, que completó con joyas de Simonetta Orsini. En el inicio de la noche, llevó un modelo con reminiscencias art déco, creado sobre un furreau asirenado, con escote bote y manga japonesa elaborado sobre capas de transparencia en tonalidad visón, íntegramente bordado a mano creando figuras geométricas y filigranas florales en tonos uva, acero y platino. Una pieza desarrollada especialmente para la conductora de la Gala.


Aros colgantes de oro blanco y engarce de pavée de brillantes.

Anillo de oro blanco y engarce pavée de brillantes.

Anillo de oro blanco con brillantes baguette y pavée de brillantes.

El segundo cambio que eligió la conductora es un traje de línea romántica en tono rosa cuarzo, de escote asimétrico, realizado sobre una falda en capas de tul con corte plato, y apliques realizados íntegramente a mano en hilo de seda, iluminados con lúrex. Bordado con cristal checo, Swarovski, mostacillas y paillettes de cristal. Este delicado modelo terminó de lucir impactante con las joyas de la marca.

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Aros de oro blanco, brillantes y zafiro azul.

Anillo strech sin fin de oro blanco y brillantes.

Anillo de oro blanco, brillantes y zafiro azul.

Anillo de oro blanco sin fin engarzado con pavée de brillantes.

Pamela David

La conductora de Pamela a la tarde eligió un modelo azul noche con un importante bordado, creación de Claudio Cosano, que combinó con piezas de brillantes, zafiro y oro 18 quilates.

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Gemelos Montblanc Heritage.

Reloj Montblanc Heritage Spirit Moonphase

Luis Novaresio

El prestigioso periodista, quien ganó el Martín Fierro en la categoría Labor Periodística Masculina por su trabajo en Desayuno Americano, completó su smoking con piezas de Montblanc.

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Aros colgantes de oro rosa, brillantes y esmeraldas.

Anillo de oro rosa, esmeralda en el centro, brillantes y topacios verdes en el cuerpo.

Anillo de oro blanco sin fin engarzado con pavée de brillantes.

Lucía Pedraza

La modelo argentina, protagonista de una de las tapas de S/O y novia de Nacho Viale, también eligió las joyas de Simonetta Orsini para completar su slip dress morado con gran tajo, diseñado por Evangelina Bomparola. La modelo combinó diamantes, esmeraldas y oro blanco y rosa, siempre de 18 quilates.

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UNICEF no respalda a ninguna marca o producto. Parte de los beneficios de la Colección Montblanc para UNICEF se donarán a UNICEF y a sus proyectos de alfabetización. Montblanc garantiza un importe mínimo de 1,5 millones de dólares.

Hugh Jackman and the Montblanc for UNICEF Collection Montblanc apoya a

Con la colección Montblanc para UNICEF, celebramos el don de la escritura y, en colaboración con UNICEF, esperamos mejorar las condiciones de aprendizaje de más de 5 millones de niños aportándoles material escolar de calidad y una mejor enseñanza. Más información en montblanc.com/unicef Crafted for New Heights.

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J A P Ó N Generoso, apabullante y diferente, es un símbolo de tradición milenaria pero también de modernidad. Un recorrido sugerido por las principales ciudades del país del sol naciente.

M Í S T I C O

TXT Lola del Valle

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erderse en japón, como bill murray y scarlett johansson lo hicieron en tokio, es como perderse en otro planeta. Es recorrer una dimensión donde conviven diferentes planos de lo real. Es acercarse y alejarse de la belleza, de lo extraño y de lo insólito, a la velocidad de un tren bala. Entrenar el ojo en apreciar los detalles más pequeños, aceptar diferencias culturales y no hacer el intento vano por cruzarlas. Japón es generoso y se ofrece al visitante con la apabullante belleza de sus paisajes de cuento, su historia milenaria y, por supuesto, todo el neón y el brillo de lo más nuevo de lo nuevo, la excentricidad de lo diferente y un enorme universo de sentido en común que nos llega a través de su cultura popular, incluidos los dibujos animados que consumimos en la infancia, sus escritores y sus artistas, y su tecnología. Para un occidental resulta inevitable sentirse dentro de una película y experimentar el país del sol naciente con la fascinación y distancia de un espectador. A cambio de sus miles y miles de fotogramas por minuto que nos regala, Japón solo nos pide respeto y apertura mental para recibir sus costumbres y tradiciones, y vivenciar su sintonía tan particular.

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EL VERTIGINOSO PAISAJE TOKIOTA.

TOKIO

más futurista de la ciudad, la Yurikamome, cuyos trenes El frenesí de la capital nipona repleta de rascacielos, vi- no tienen conductor. El Fuji TV Building, una réplica drio y colores está salpicada de templos y santuarios sin- de la Estatua de la Libertad y otras tantas atracciones toístas y budistas. De los primeros, el más célebre pro- se suman a una de las dos playas que tiene el país, desde bablemente sea el Meiji-jingu, donde el visitante puede donde se puede apreciar el iluminado Rainbow Bridge, toparse con la celebración de un boda tradicional y ju- que une Odaiba con Tokio. En el corazón del Tokio financiero está Shinjuku, toda gar por un rato a ser fotógrafo de National Geographic. El santuario, ubicado en un inmenso pulmón verde al una colección de emblemas tokiotas, como el famoso que se llega en tren, merece un recorrido reposado, con edificio del Gobierno Metropolitano de Tokio, diseñado tiempo para disfrutar de sus detalles y de las curiosida- por el arquitecto Tange Kenzo, y el hermoso parque nades que ofrecen las tiendas que pueblan la calle peatonal cional Shinjuku-Gyoen, uno de los sitios indicados para Takeshita Dori. Para templos budistas de postal está el entregarse al “hanami”, la tradición japonesa de conSensō-ji, dedicado a Kannon, deidad de la misericordia, templar la belleza de las flores de los cerezos. Pero para situado en Asakusa, el barrio que Yasunari Kawabata re- encontrar extravagancia, lujo y moda hay que visitar Hatrató en su novela La pandilla de Asakusa. Se recomien- raku, centro neurálgico fashion de la ciudad, habitado da llegar al atardecer, cuando el paso se hace más tran- por las más excéntricas y pintorescas tribus urbanas. quilo y el cruce de la imponente puerta de los truenos (Kaminarimon) se puede disfrutar sin NIKKŌ, EL BALANCE JUSTO DE ARQUITECTURA Y NATURALEZA. tanto selfie stick de por medio. Muy cerca, al otro lado del río Sumida, está la Tokyo Skytree, la torre más alta de Japón, que con sus 634 metros ofrece una vista espectacular. Otro imán para los cazadores de panorámicas es la isla artificial Odaiba, en la bahía de Tokio, ideal para ver la puesta del sol y apreciar una de las facetas sci-fi de Japón, empezando porque se llega con la línea de trenes

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HAKONE, LA CUIDAD QUE MIRA AL MONTE FUJI.

Si una de las diversiones típicas de Tokio es el karaoke, Shibuya es el lugar perfecto para ir de bares y de ronda musical. Además, el barrio es célebre por el Shibuya Crossing, el cruce por el que, dicen, más gente pasa cada día: toda una experiencia.

NIKKŌ A dos horas en tren desde Tokio, Nikkō combina belleza natural y obras maestras de la arquitectura japonesa, comenzando por el ShinKyo o puente sagrado, que da la bienvenida a sus visitantes con su rojo imponente. Lleno de templos y santuarios bien conservados y bosquecitos de cuento, Nikkō ofrece postales típicas paso a paso. Está el templo de Rinnō-ji, célebre por sus tres budas gigantes, y el espectacular santuario de Tōshō-gū, uno de los más solemnes y cargados de historia. Lugar elegido para albergar al mausoleo del gran shogun Tokugawa en 1616, cada palmo de la construcción está cubierto por guardianes, aves y criaturas mitológicas que custodian las puertas y columnas esculpidas. Aquí se ven la famosa escultura de los tres monos de la sabiduría (“no oigo lo que no debe ser oído”, “no digo lo que no debe ser dicho”, “no veo lo que no debe ser visto”), que antes de convertirse en emoji ya eran un símbolo de Nikkō. Todo en el marco de un paisaje de montaña, con lagos, cascadas, jardines y aguas termales.

HAKONE Suele ofrecerse como excursión de un día desde Tokio, pero este destino merece al menos pasar una noche. Su fama de lugar de descanso se debe a su enorme com-

LA SERENIDAD QUE IDENTIFICA A KIOTO.

plejo de onsens o aguas termales de origen volcánico, emplazado en un paisaje lleno de verde, donde la estrella distante y esquiva es el Monte Fuji, el volcán que solo se deja ver en días despejados. Las vistas del Lago Ashi, rodeado de montañas, se disfrutan en paseos en bote, en funicular o desde tierra firme, emprendiendo alguna de las rutas de senderismo que se pueden tomar, como la que conecta el funicular con la cima del monte Kamiya y desde ahí hasta el monte Komagatake, donde está la estación de regreso del funicular. En Hakone la tradición llama a comerse un huevo negro hervido en las aguas llenas de azufre de la zona geotermal de Owakudani, donde el suelo constantemente burbujea por la actividad volcánica. Según dicen los japoneses, alarga la vida siete años.

KIOTO Durante más de mil años fue la capital de Japón, y su legado de tradiciones, arte, cultura, religión e ideas persiste a cada paso. En poco menos de tres horas se conecta Tokio con Kioto con el Shinkansen, el tren de alta velocidad. Pero llegar a esta bella ciudad invita a bajar las revoluciones para contactar con sus serenos paisajes repletos de color, templos de ensueño y callecitas cimbreantes. Todo en Kioto recuerda a su pasado de nobleza. Uno de sus barrios más lindos es Higashiyama, nombre de la montaña sobre el que descansa. Desde el siglo XIV se levantaron aquí numerosos templos, santuarios y villas, como Villa Shishendo, con un jardín con cascada, arena blanca y azaleas. Vale la pena caminar las cues-


NARA, SERENA Y RODEADA DE BOSQUES.

tas Sannenzaka y Ninenzaka para vivenciar un viaje al tiempo del Japón medieval, y curiosear en sus tiendas llenas de artesanías y tradición. La lista de templos y santuarios es eterna, pero hay dos imperdibles. El primero, Kinkaku-ji o Pabellón Dorado de Kioto, cuya belleza simétrica inspiró a Yukio Mishima para su novela El pabellón de oro, que trata sobre la vida de un monje budista obsesionado con este monumento magnífico. El segundo es el santuario sintoísta Fushimi Inari, cuyas famosas “torii” o puertas rojas fueron llevados al cine por la adaptación de la novela Memorias de una geisha. Este santuario dedicado a Inari, deidad de la fertilidad venerada por quienes buscan el éxito en los negocios, está repleto de estatuas y figuras de zorros, los mensajeros de los deseos y pedidos de los fieles.

NARA Bosques serenos, espiritualidad y ciervos por doquier son las notas principales de la ciudad que fue la primera capital de Japón y que aún mantiene su patrimonio tradicional en los callejones de Naramachi, un antiguo barrio comercial que hace sentir al visitante como en un film de ninjas. Resulta imperdible acercarse al Parque de Nara, donde se destacan el templo Todaiji, cuyo tesoro es un inmenso Buda de 16 metros de alto, fundido con 437 toneladas de bronce y 130 kilos de oro, y el santuario Kasuga-taisha. En este último, situado al pie de las montañas sagradas Kasugayama y Mikasayama, llaman la atención los casi 2000 faroles que guían la subida al santuario en sí, el cual posee mil lámparas de bronce

ENTRE GEISHAS Y SAMURÁIS: KANAZAWA.

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que se encienden durante el festival Mantōrō, un día en febrero y dos en agosto. Hay que saber que en ambos lugares los ciervos van y vienen pidiendo comida, por lo que se recomienda comprarles sembei (un tipo de galleta de arroz) en los puestos del parque. Considerados mensajeros de los dioses, los ciervos son los mimados de la ciudad. Horyuji, el templo de madera más antiguo del mundo, es otro de los emblemas inolvidables de Nara.

KANAZAWA De pasado glorioso, conserva muchas huellas y vestigios que la convierten en una ciudad magnética para quienes gustan de las historias de geishas y samuráis. Uno de los atractivos es, justamente, Higashi Chaya-Gai, o distrito de las geishas, un conjunto de calles peatonales con casas de madera y aires tradicionales del período Edo, donde se pueden visitar antiguas casas de té, como Shima. Nagamachi, en tanto, propone un paseo de callecitas estrechas y antiguas casas de samuráis, con sus grandes puertas de entrada y tejados típicos. Pero la sola visita al jardín Kenroku-en es razón suficiente para incluir a Kanazawa en el itinerario. Este formaba parte del Castillo de Kanazawa, aunque desde 1871 está abierto al público, y entre sus atracciones está la linterna Kotojitoro, de la que dicen que es la primera fuente de todo Japón. Este paseo incluye algunos edificios antiguos convertidos en museos, como la Casa de té Yugao-tei o la Casa de descanso Shigure-tei. ¶


BIG BANG UNICO MAGIC SAPPHIRE


“El tiempo es una convención cambiante y frágil” Desde 1964, Liliana Porter vive en Nueva York, donde trabaja en diferentes soportes como la instalación, la fotografía, el dibujo, el video y el teatro para generar una disrupción en el tiempo y jugar con lo real. Charla con una artista inquieta que expone en el museo Reina Sofía, en el MET y en la Tate Modern de Londres.

TXT Florencia Zielinski

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FOTOS cortesía Liliana Porter


“THE INTRUDER”. FOTOGRAFÍA DURAFLEX. 2011.

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urante una semana, nuestra conversación se desdobla en dos líneas espacio-temporales: una en Argentina y otra en España, donde Liliana Porter acaba de presentar su primera retrospectiva en el Artium, Centro Museo Vasco de Arte Contemporáneo. Pero el espacio subjetivo (tan real como mi escritorio y donde quiera que ella esté) es uno solo: estamos sentadas en un sillón de cuero blanco en el medio de una sala enorme, tomando té en tazas diminutas de porcelana que luego Liliana usará en una de sus instalaciones. A través del ventanal entra la luz del jardín lleno de verde. O así lo imagino. En un presente perpetuo que se instala cada vez que leo “Liliana Porter” en mi casilla de correo, escucho su voz tersa y pasan ante mí sus obras, esas escenas breves e intimistas que conversan con el espectador en su idioma propio, reconocible, directo. Tal vez porque sus creaciones conectan con el eco de una intención que todos perseguimos en la infancia: la de subvertir el orden de la realidad a través del juego. Un juego solitario, con gusto a hora de la siesta, a hurtadillas; a práctica de escamoteo de lo establecido. El relato que hace de su vida también despierta la imaginación. Desde 1964, Liliana Porter vive en Nueva York, donde llegó a los 22 años con el plan de quedarse una semana. Le bastó recorrer el Museo Metropolitano de Arte para darse cuenta de que conocer y aprender todo lo que quería le iba a llevar mucho más. Quedó impactada, no solo con los originales de Rembrandt y Picasso, sino también con el aura de la ciudad. Aterrizó a tiempo para vivir la bohemia hippie, los conciertos de Bob Dylan, la llegada de los Beatles, las primeras exposiciones del pop art y la transformación de Nueva York en el centro vivo de las artes plásticas del mundo, con el Greenwich Village como corazón. Allí, junto al uruguayo Luis Camnitzer, su esposo, y el artista venezolano José Guillermo Castillo, creó el New York Graphic Workshop, un taller-escuela muy influyente de la época. “Desde allí trabajábamos y analizábamos con rigurosa autocrítica nuestras prácticas artísticas y nuestras posiciones frente al arte y la vida”, cuenta. Cuando decidió instalarse no dudó en inscribirse en el Pratt Graphic Art Center, un taller de grabado en Manhattan. De inmediato su nombre se destacó y se le abrieron muchas oportunidades. Al poco tiempo, ya era referente de arte contemporáneo. Ganadora de la Beca Guggenheim y de muchas otras distinciones, su obra fue expuesta en los museos más importantes del mundo. Grabado, pintura, dibujo, fotografía, video, instalaciones y, desde hace un tiempo, puestas teatrales, conforman parte del universo expresivo de Liliana Porter, que hasta noviembre estará presente en la Bienal de Venecia con una instalación relacionada al tema del tiempo. Se

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ESCENA DE LA OBRA ENTREACTOS: SITUACIONES BREVES, PRESENTADA EN EL TEATRO SARMIENTO (BUENOS AIRES). FOTO DE CARLOS FURMAN.

“DIBUJAR UN TRIÁNGULO”. ACRÍLICO Y FIGURÍN SOBRE PAPEL. 2015.


RETRATO. FOTO DE ANA TISCORNIA.

trata de una nueva versión del Hombre con el hacha, instalación que tuvo su primera aparición en 2011 en el Museum of Arts and Design de Nueva York en una exposición colectiva que se llamó Otherworldly. Y que en 2013 expuso en su primera exposición individual en el Malba. ¿Por qué pensás que el tiempo es un tema recurrente en tu obra? Es difícil saber la respuesta. Pero puede ser consecuencia de haber vivido en diferentes contextos, en México del ´58 al ´61; y en Nueva York desde 1964. Esas vivencias me demostraron que la realidad puede ser leída de diversas maneras, que los idiomas y el contexto modifican la percepción de las cosas, que el tiempo es una convención cambiante y frágil. El tema está presente, por ejemplo, en la serie de Diálogos, donde enfrento personajes de diferentes tiempos y realidades que momentáneamente habitan un espacio en donde esa simultaneidad es posible. Otro ejemplo es la serie que titulé 40 años, donde aparece re-fotografiada una foto de 1973 que incluye mi mano actual junto a la de 1973 de la imagen original. Una línea dibujada atraviesa las dos manos entrando y saliendo del espacio virtual, y continúa sobre la pared donde la obra enmarcada está expuesta. Esa línea pasa por superficies y tiempos disímiles pero, visualmente, es una sola y es coherente, como si no existiera esa dislo-

cación de tiempos y superficies, ese lapso de 40 años o más entre una mano y la otra, y el trazo sobre la pared. ¿Qué otros temas aún te obsesionan a la hora de trabajar? Tratar de entender cuál es el sentido de todas las cosas. O más bien, podría decir, aceptar que no entiendo y entonces intentar de alguna manera crear sentido. Pienso que, de cierta forma, todos somos buscadores de sentido. Me aliviaría si como artista pudiera sentir que estoy contribuyendo en algo a que el panorama sea un poquito más esperanzador. ¿En qué consiste tu búsqueda o tu intento de reestructurar el orden de las cosas a través de tu trabajo? Al tratar de estructurar un orden a las cosas, me siento de alguna manera responsable. Quisiera entonces que ese tentativo ejercicio pudiera contener alguna verdad que sirva para “negociar con la realidad”. Pienso en la serie del jardinero, The Gardener. Se trata de un pequeño figurín de metal, un jardinero, que está sosteniendo una regadera y que riega flores. Solo que esas flores están impresas en fragmentos de platos rotos. Hace pocos años te animaste al mundo del teatro… La palabra “teatro” le queda un poquito grande a mis propuestas, pero la experiencia me hace tremendamente feliz. Trabajar con personas y usar algunas

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LILIANA PORTER EN EL SET DE LA OBRA “FORTY YEARS”, EN LA QUE UTILIZA UNA FOTO DE 1973 PARA SEGUIR LA MISMA IDEA EN 2013.

de las convenciones de la disciplina teatral abre otra gama de posibilidades para encarar mis temas. La relación con el espectador es una experiencia vital y muy directa, bastante emocionante. Actualmente tenés una puesta en cartel. Sí, trabajé con enorme entusiasmo para mi tercera puesta en escena que se está realizando dentro del contexto de la Segunda Bienal de Performance en Buenos Aires y se estrenó el 1°de junio en el Parque de la Memoria. Se hace en la entrada del Parque, un espacio construido especialmente para este evento. La obra se llama Domar al león y otras dudas y trabajo con el mismo equipo de mis dos experiencias anteriores: Ana Tiscornia como co-directora, música de Sylvia Meyer, iluminación de Eli Sirlin, coreografía de Ana Stekelman y vestuario de Mini Zucheri.

“SIN TÍTULO-TRIÁNGULO”. FOTOGRAFÍA Y GRAFITO EN LA PARED.1973-2014. FOTO DE 2014 DE UNA INSTALACIÓN REALIZADA EN 1973.

FRAGMENTO DE LA INSTALACIÓN “EL HOMBRE CON EL HACHA”. 2013.

Esta es tu tercera experiencia teatral, ¿qué sentís que ganaste en este nuevo terreno? Gané otra forma de pensar mis temas. Creo que mis reflexiones y planteos se vuelven más claros en este medio. Después de trabajar en video y teatro, me resulta asombroso y casi mágico cuando veo un cuadro, un dibujo o una foto. ¡Pienso que uno puede decir tantas cosas con solo una imagen estática!

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Hace más de 50 años que vivís en Nueva York. Como artista latinoamericana, ¿cómo se percibe el contexto político en Estados Unidos? Obviamente que se está viviendo como una especie de catástrofe, de regresión total en el sentido social, ético, ecológico, artístico, moral y humano. Lo bueno es que la gente reacciona a diferentes niveles y muchas instituciones también lo hacen. Esos son signos esperanzadores. Pero en lo personal, siento que es deprimente vivir en ese contexto tan tóxico. Pienso que los artistas podemos combatir esa toxicidad si tenemos los valores claros, si luchamos en la medida que uno pueda contra lo injusto y lo siniestro. ¿Qué es lo que más disfrutás del lugar en donde vivís? Vivo en un pequeño pueblo que se llama Rhinebeck, dentro del estado de Nueva York, a dos horas de Manhattan. Allí disfruto de la naturaleza, de la casa y del taller. Todavía me asombro cuando aparece un “Bambi” en el jardín. Es un lugar donde el tiempo parece durar más y la calidad de vida es mejor. Se vive más sano. Adoro levantarme, cruzar el jardín para llegar al estudio y compartir ideas con la gente que quiero, lo que más me gusta hacer por fuera de mi actividad. ¿En qué lugar estás hoy a nivel personal y laboral? En un lugar feliz. ¶


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TATUAJES DIGITALES Las interacciones en la Red generan marcas permanentes e indelebles que -desde la tecnología- vuelven inmortales a las personas. El innovador tecnológico Joan Cwaik analiza su impacto en la vida cotidiana y cuenta de qué forma nos afectarán en las próximas décadas.

TXT Andrea Cukier

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“Q

uieran o no, el 99 por ciento de la gente está expuesta en internet; y esto se debe a muchos factores internos y externos”: así empieza la charla con Joan Cwaik. Licenciado en Gestión de Medios y Entretenimiento en la UADE, realizó un posgrado en Convergencia Multimedial en la UBA. Es conferencista, docente y responsable del Centro de Divulgación Tecnológica de la UADE; y trabaja acerca de temas relacionados a paradigmas digitales, innovación, nuevos medios y tecnologías disruptivas como la realidad virtual, la inteligencia artificial y la impresión 3D, entre otras. En 2016 fue maestro de ceremonias de eventos como Campus Party y Red Innova. “Cada vez que ponemos un like en cualquiera de las redes sociales, escribimos un estado en Facebook, agregamos o bloqueamos a alguien, nos etiquetan en una foto o aparecemos en cualquier mención en un motor de búsqueda, eso se convierte en un nuevo tatuaje digital que queda grabado para siempre. Tecnológicamente hablando, eso nos vuelve eternos”, asegura. De esa inmortalidad on-line trata esta nota.

amiga, etc. O si el café está geolocalizado ya tenemos las coordenadas exactas para ubicar el día y la hora en que esa persona estuvo ahí… Incluso si una persona vive en la calle y no tiene acceso a la tecnología, podría figurar on-line porque quedó su registro cuando el satélite de Google pasaba por la zona. No tenemos manera de escaparnos de esta situación, pero sí podemos ser conscientes de los check-ins que hacemos, los me gusta que ponemos, lo que escribimos en la Red, porque todo lo que subimos, perdura. El máximo nivel de seguridad para que algo no se filtre es no subirlo. Por ejemplo, si escribimos algo en Facebook y lo borramos sin publicarlo, ese registro queda. Si tenemos que ser tan cuidadosos. ¿No atenta contra la expresión de la personalidad? Sin dudas nos encierra mucho, es muy difícil borrar ese registro porque perdura en distintos soportes. No creo que atente contra la libertad de expresión, pero el problema son las grandes compañías. Facebook hoy es un imperio y sabe todo sobre nosotros. Tiene 3.5 mil millones de usuarios activos, ¡más de la mitad de la humanidad! Nosotros alimentamos enormes redes sociales sin

La revolución sería que la humanidad comenzara a recibir algo a cambio por lo que genera en la Red”. ¿Cuál es el impacto concreto de acumular estas interacciones? Estamos plagados de cientos de miles de estos tatuajes, dependiendo de nuestro nivel de exposición a internet, y esto repercute, principalmente, en nuestra vida social y laboral. De acuerdo al contenido que circule, puede dañar la reputación personal o profesional de alguien. Desde quejas sobre un servicio si se trata de una empresa o, en casos más extremos, si se filtran fotos o audios comprometedores. Por otra parte, lo primero que hace una empresa cuando contrata personal es revisar sus redes sociales para determinar el nivel de integridad, imagen y comportamiento on-line de un posible futuro empleado. ¿Existe alguna manera de evitar o controlar nuestra presencia on-line, entonces? Todo el mundo está tatuado (risas). ¡Incluso si no tuvieran cuentas en redes sociales! Yo ahora estoy en un café, ¿qué pasa si saco una foto, la comparto en internet y aparece gente de fondo? Alguien podría reconocer a esa persona, ver si está con una

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ser retribuidos. La próxima revolución sería que la humanidad comenzara a recibir algo a cambio por todo lo que genera en la Red. Facebook, Instagram, Twitter, Google o Youtube no son nada sin el contenido, dependen de nosotros. Algunas compañías ya están comenzando a recompensar económicamente y a nivel de reputación y posicionamiento a usuarios que generen contenido de calidad en sus redes. Hay una proyección que indica que dentro de diez años vamos a pasar el 80 por ciento de nuestras vidas en realidad virtual. Suena como un avance de una película de ciencia ficción. ¿Vamos a estar cada uno metido en su casco? Si nos ponemos a pensar, ya lo estamos haciendo. La diferencia es que la realidad virtual es una pantalla más grande, pegada a los ojos. Hoy pasamos la mayor parte del día metidos en nuestro smartphone, eso es una forma de virtualidad. Por eso el pronóstico no suena tan descabellado, se trata simplemente de cambiar de soporte.



Facebook hoy es un imperio y sabe todo sobre nosotros. Tiene 3.5 mil millones de usuarios activos, ¡más de la mitad de la humanidad! ”. A principios de año mencionaste que Argentina es uno de los mercados más avanzados en cuanto a la compra de la moneda virtual Bitcoin. ¿Sigue esa tendencia? Somos el país con más poseedores de Bitcoin en Latinoamérica. No a nivel transaccional en los comercios, pero sí como atesoramiento de moneda extranjera.

¿Pensás que puede ser la divisa del futuro? La desaparición del soporte papel ya es una realidad. En otros países es poco habitual que la gente use efectivo y en dos años va a desaparecer por completo el papel moneda en Dinamarca. Así que estoy seguro de que blockchain, la tecnología que está por detrás del Bitcoin, orienta la forma en que va a funcionar la economía en los próximos años.

¿Qué hace falta para que se empiece a utilizar de manera comercial con mayor frecuencia? Un validador muy grande para que una tecnología sea aceptada es la legislación y aún no hay leyes que apliquen sobre el Bitcoin. La tecnología exponencial necesita estar apoyada por política y, cuando eso suceda, va a permitir un salto evolutivo. Es verdad que esta tecnología atenta sobre modelos económicos y de negocios que son muy conservadores, más en el caso de Argentina.

¿En qué consiste la blockchain y qué otras aplicaciones tiene? Es una tecnología que funciona como cadenas de bloques. Cualquier transacción que parte de un punto A a un punto B queda registrada de un bloque a otro. Funciona como un gran libro de contabilidad abierto al público. Por ejemplo, todas las operaciones que se hacen en Bitcoin están ahí, registradas. Es inalterable. Si una computadora cae, siguen estando las demás. Sus aplicaciones más interesantes aparecen a la hora de registrar una identidad, tus bienes, dinero, un documento, registrar un voto, etc. Por ejemplo, nace un bebé y ahora se carga el registro en un sistema único. Si ese sistema falla, ese registro se pierde. Con blockchain, el sistema está descentralizado, por lo tanto eso no sucedería. En líneas teóricas, no hay forma de poder acceder a millones de computadoras. ¿Cuáles de estas tecnologías pensás que van a sobrevivir mejor al paso del tiempo? Lo que hablamos recién va a marcar muchas de las bases tecnológicas del futuro, también las técnicas de manufactura aditiva (todo lo que rodea a la impresión 3D). Cuando sea comercialmente accesible, la informática cuántica y su forma de maximizar el rendimiento de las computadoras también va a marcar un antes y un después. La principal barrera que tenemos que atravesar es que internet empiece a ser considerada tan fundamental como la electricidad y se garanticen suficientes puntos de wifi y conectividad que la alimente. Ahí vamos a vivir una transición importante a nivel social y tecnológico. ¶

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La eternidad y el tiempo, su enemigo Así como el reloj es un mecanismo que documenta el programa de un tiempo pactado, Platón afirmó: “El tiempo es una imagen móvil de la eternidad”.

TXT Carlos Álvarez Insúa ILUSTRACIONES Carlus Rodríguez

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la palabra eternidad inventa –desde la desmesura– un territorio congelado donde no sucede el tiempo ni tienen sentido los relojes. Antes de visitar nociones filosóficas, inscribo que hay apreciaciones de la eternidad que inventan el corazón del enamorado o la tristeza del migrante, fundando seres o países permanentes. Sí fue la emoción la que permitió a Borges sugerir una frase bella y memorable: “A mí se me hace cuento que empezó Buenos Aires, la juzgo tan eterna como el agua y como el aire”. La eternidad es un espacio quieto e inmedible al que describe casi con paso de comedia una cita de Michel Foucault: “El reino ilimitado del límite”. El pensador francés, evadiendo las celdas del discurso, también afirmó: “No me pregunten quién soy, ni me pidan que siga siendo el mismo (…) Todo el pensamiento moderno es permeado por la idea de pensar lo imposible. Creo que no existe la necesidad de saber exactamente lo que soy (…) El hombre es una invención reciente, y su fecha de desaparición quizás esté cerca”.

Extensión y esencia del afecto Así, estas líneas -que sugiere anotar S/O- acerca de la eternidad son, en cierto modo, un viaje por ideas contradictorias que se encuentran en la imposibilidad de definir lo que no somos. Sin embargo -seres finitoshemos concebido la noción de algo fuera del tiempo, infinito. Otro francés, Gilles Deleuze, conjetura al pensar a Baruch de Spinoza una curiosa descripción de la eternidad: “Cuando no sé nadar (…) estoy a merced de los encuentros con la ola (…) cuando sé nadar tengo un sentido del ritmo, significa que sé componer directamente mis relaciones singulares con las relaciones de la ola (…) me hundo en el momento justo, y salgo en el momento justo (…) un arte de la composición de relaciones (…). Experimento aquí y ahora que soy eterno, es decir, que soy una parte intensiva, un grado de potencia irreductible a las partes extensivas que poseo” . Y enseguida aclara: “Pero, una vez más, bajo una condición: la de ser elevado a ideas y afectos que den a esta parte intensiva una actualidad”. Entonces inferimos que Deleuze sospecha eterno, el instante cuando lo intenso de la idea y el afecto, se conjugan con un plano del afuera -mundo- y sucede el devenir eterno, contemporáneo de toda actualidad.

De Grecia y la eternidad Si en el viaje nos dirigimos a la invención de Occidente, tantos siglos antes, el Platón de las esencias declara al tiempo -y a nuestro queridos calendarios perpetuoscomo degradación de la eternidad, que es un modelo quieto: realidad perfecta y completa. Entonces manifiestan -existencia y esencia- chronos (el tiempo) y aion (la eternidad). La inmovilidad de la eternidad está ligada al estado de reposo de la Esencia Inteligible, que para el filósofo griego Plotino es la definición misma de eternidad. De manera que la imposibilidad del movimiento de suceder en estado de reposo exige a la eternidad permanecer inmóvil. “La eternidad debe ser concebida no solamente en el reposo, sino todavía en la unidad (…), ella habita en la unidad y participa por lo tanto en el reposo sin identificarse con él”.

El eterno retorno Otra eternidad fue imaginada: la del retorno, del ciclo que vuelve a repetirse una y otra vez. En su La gaya ciencia, Nietzsche plantea que no solo los acontecimientos se repiten, también los pensamientos, los sentimientos e ideas acontecen en una repetición infinita e incansable. Retoma el filósofo alemán, con fiereza, esta noción en Así habló Zaratustra, donde el mutante descubre esta visión del tiempo circular y enseguida se desmaya, por la alteración que le provoca. Permanece inconsciente durante siete días y al fin despierta. El águila y la serpiente que van juntos es su nuevo ser revelado. Lo halagan, declarándolo maestro del eterno retorno de lo mismo. Finalmente Zaratustra ha concebido una nueva moral, pues advierte que el eterno retorno incluye tanto los fracasos como los éxitos. Señala que aunque el hombre vuelva a ser mono, una y otra vez, nuevamente regresará Zaratustra para manifestar el Übermensch (suprahombre), quien volverá a desmayarse por siete días al vislumbrar el eterno retorno y despertará. Aquí Nietzsche observa el eterno retorno como verdad cosmológica, una forma nueva de afirmación de la vida: la moral que requiere amor fati –amor al destino– para sobrellevar y desear la repetición eterna de nuestros actos: volver a vivir todo el dolor y la ale-

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gría, lo incómodo y la gloria: aceptar lo que hacemos, ser responsables. “Este mundo es voluntad de poder y nada más. Y también vosotros mismos sois esa voluntad de poder, y nada más”. El eterno retorno de Nietzsche, sospecho, es un artefacto que opone multiplicidad a unidad, heterogeneidad y dispersión a homogeneización y definición. Entonces, el continuo regresar es activo y afirmativo: la unión de Dionisos y Ariadna. El laberinto es el eterno retorno, lo dinámico y afirmativo, no es ya el laberinto del conocimiento y la moral sino el de la vida y el del ser como sujeto actual. A Borges no le gustaba demasiado la idea de Eterno Retorno y es paradojal, pues su biblioteca es vecina del laberinto de la repetición y su moral siempre parece sujeta al amor fati (amar la fatalidad).

La refutación de Borges El artículo al que refiero es “La doctrina de los ciclos”, que aparece en Historia de la eternidad, donde cita a Nietzsche en “El eterno retorno de lo mismo” para discutir los ciclos sucesivos. Borges concibe un “frugal universo” de diez átomos: estos darían lugar a una serie de combinaciones. Dado que el número es limitado, las combinaciones también serán limitadas. Si esas partículas arrojan como resultado la cifra de 3.628.800, tenemos un supuesto retorno del universo. Imagina Borges en el texto que Nietzsche le podría contestar que jamás desmintió que las “vicisitudes de la materia fueran cuantiosas”, lo único que ha declarado es que no eran infinitas. Para refutar esta idea se apropia de la teoría de los conjuntos de Cantor. Que, para él, destruye la tesis de Nietzsche pues esta afirma la infinitud de los puntos del universo, hasta de un metro de universo o una fracción de metro. “Si el universo consta de un número infinito de términos, es rigurosamente capaz de un número infinito de combinaciones -y la necesidad de un Regreso queda vencida. Queda su mera posibilidad, computable a cero”. Si bien Borges discute con agudeza desde la teoría de los conjuntos la posibilidad del eterno retorno, no parece que su núcleo, para Nietzsche, sea esta cuestión de la ciencia matemática, sino la interrogación moral en relación a la filosofía nihilista que Borges no toma en cuenta. La idea de que un acto se repita una y otra vez, a Borges le parece la idea más horrible de todas. Pero

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Nietzsche también advirtió el espanto que los ciclos contienen desde el nihilismo pasivo, el de aquel que simplemente tiene una vida reactiva, disminuida, uno que padece la vida. Solo quien se atreve a amar la fatalidad puede aceptar la eterna repetición de las cosas. Solo una relación activa, creadora desde la voluntad de poder en un sujeto libre puede soportar el retorno de las cosas y los actos. Es a un superhombre a quien convoca el eterno retorno. Creo que a Nietzsche le interesa construir este artefacto de doctrina porque permite seleccionar tipos humanos, la idea más horrible puede ser la más transformadora y prometedora en el devenir de los ciclos, mientras la fina agudeza de la serpiente y la mirada y coraje del águila se juntan en un humano sin Dios, devenido más que humano. Aunque anotemos estas intenciones del alemán, a Borges solo le interesa refutar la hipótesis física del eterno retorno, por ejemplo mostrando que la segunda ley de la termodinámica dice que hay procesos energéticos que son irreversibles (una luz que, proyectada sobre una superficie negra, se convierte en calor y ese calor no puede volver a ser luz). No hay caso, cuando Borges decide refutar, lo hace. Tal vez, porque cualquier idea de eternidad le repugna: Borges no admite volver a ser Borges. En el ensayo Nueva refutación del tiempo, escribió: “El tiempo es la sustancia de la que estoy hecho” y en Fragmentos de un Evangelio apócrifo, agrega: “Los actos de los hombres no merecen ni el fuego ni los cielos”.

Final del juego Hasta aquí he revisado autores que marcaron mi experiencia y tramaron mi corazón tanto como alegrías, pérdidas y amores. Ellos habitan un planeta que parece excéntrico y universal: aun quienes nunca los leyeron conocen sus nombres, sospechan su importancia. Unos con otros difieren al describir la eternidad, negándola o aceptándola como conjetura, encuentro o repetición. Lo cierto es que, desde que un hombre clavó un junco en la arena e inventó un reloj de sol, los hombres miden el tiempo con relojes de cualquier tipo, necesitan hacerlo. También parece irrefutable que algo transcurre y es múltiple, se mueve, uno envejece mientras otro nace… La eternidad, en cambio, exista o no, observa, unánime, inmóvil. ¶


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RUGIDOS DE TALENTO Juega en los Jaguares, la franquicia argentina del Super Rugby, y es el padre de Beltrán, Joaquín y Tomás. Luego de una compleja operación y de una recuperación lenta, Juan Martín Hernández se prepara para el mundial 2019 mientras imagina su retiro. Porque nada es eterno excepto la gloria. TXT María Paula Bandera FOTOS Javier Picerno

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onversar unos minutos con juan martín Hernández es suficiente para cambiar la imagen popular del rugbier rudo. Juani, como se lo conoce, habla pausado, reflexiona antes de dar cada respuesta y transmite calma a quien lo escucha. Quizá por eso siempre se lo considera el “cerebro” en los equipos que integra, un jugador inteligente, de esos que disputan los partidos en la cabeza y en la cancha al mismo tiempo. Hoy, junto a María Emilia Brochard, es padre de tres hijos: Beltrán (8), Joaquín (3) y Tomás (1) y una novedad muy reciente: a partir de junio de 2017, es embajador de la firma sueca de automóviles de lujo Volvo. Tu carrera te convirtió en un hombre de mundo, ¿cómo fue irte a vivir a Francia a los 21 años? Al principio me costó un poco, porque nunca había vivido solo. Me olvidaba de pagar las cuentas, entonces me cortaban la luz y cosas así; encima no manejaba bien el francés, había aprendido la fonética en la escuela, ya que lo tenía como materia, pero no entendía ni sabía expresarme. Por suerte, en el equipo (N. de R.

Obviamente siempre le hace bien al ego, pero yo sé que mi principal actividad es el rugby, entonces nunca me la creo. La primera vez que tuve que posar desnudo para ese calendario tenía 21 años y fue muy difícil, pero si lo hacían las estrellas del equipo, yo no me podía negar. La segunda vez lo hice con un bóxer y ya la última decidí no participar, pero no por vergüenza, es que ya era 2008, mi mujer estaba embarazada y no me parecía correcto. ¿Y cómo te llevas con el rol de modelo en campañas publicitarias? Ahora estoy mucho más suelto, más relajado. Con Nike, por ejemplo, trabajo desde hace 19 años y al principio me costaba un montón hacer las fotos, era muy tímido para posar y también para hablar en entrevistas. Me imagino lo que hice sufrir a los primeros fotógrafos y periodistas que se me acercaban. ¿Sos de cuidar tu imagen? Me cuido desde lo deportivo y me gusta la elegan-

Es lindo estar bien producido, usar un buen reloj, unos lindos zapatos, un traje, pero por mi actividad solo me visto así en ocasiones especiales.” el Stade Français) había varios argentinos como Agustín Pichot, Rodrigo Roncero, Lucas Borges y Pedro Ledesma, y también tenía compañeros uruguayos, entonces no nos sentíamos tan solos. Ellos, además, eran más grandes que yo, así que me ayudaban si tenía dudas. Y coincidió con un excelente momento a nivel profesional, eso seguro ayudó... Claro, ganamos dos títulos con el equipo y también obtuvimos la medalla de bronce con los Pumas en el Mundial 2007. Además, en esa época, el presidente del Stade Français introdujo algunos cambios que nos volvieron muy populares: usábamos una remera rosa bien pegada al cuerpo, hacíamos un calendario anual donde teníamos que posar desnudos o con muy poca ropa… Eso nos lleva a otro terreno, el de sex symbol. ¿Cómo te sentís cuando te catalogan de esa manera?

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cia, es lindo estar bien producido, usar un buen reloj, unos lindos zapatos, un traje, pero por mi actividad solo me visto así en ocasiones especiales. Igual busco estar bien durante el día a día también, aunque con otro tipo de prendas, claro. Pero no todas fueron rosas en el camino de Hernández; el Mago, como lo apodan en el ambiente, tuvo que superar varios desafíos que hicieron de su historia una auténtica epopeya del héroe deportivo. Un día, su cuerpo, todopoderoso en la cancha, dijo basta. Tenía dolores muy intensos y ni siquiera podía alzar en brazos a su bebé de dos meses. Hernández había nacido con espondilolistesis, una lesión congénita en la columna que produce el desplazamiento de una vértebra hacia adelante. Él no lo supo hasta 2006, cuando sufrió una lesión en las costillas y tuvieron que hacerle una resonancia magnética. Al ver las imágenes el médico dio con el hallazgo. Pensó que quizás no iba a afectarlo nunca, pero tres


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años después su cuerpo manifestó lo que hasta entonces era visible solo con un resonador. Algunos médicos recomendaban operar, otros no; y entre los que sugerían el paso por el quirófano también había divergencias con respecto a la técnica a seguir. ¿Cómo fue que decidiste operarte? Fue toda una apuesta. En ese entonces estaba jugando en Durban, Sudáfrica, y los médicos de allá querían hacer un tipo de intervención que me permitía volver a jugar en dos meses, pero después, averiguando, supe que esa era una operación que me sacaba el dolor, pero no corregía el origen de la lesión. O sea que a los tres, cuatro o cinco años podía volver a afectarme. Al final, en enero de 2010 me operé en Argentina con otro método que requería de mucha más recuperación, pero era definitivo. Estuve siete días internado. Dejé la clínica con un cor-

Con los médicos y entrenadores estamos llevando a cabo un plan de entrenamiento que tiene un poco menos de carga o menos tiempo de juego. Eso me afecta porque uno siempre quiere hacer lo mismo que hace el resto del equipo, pero sin esas adaptaciones no podría jugar, o me quedaría mucho menos tiempo del que imagino que me queda. Quiere decir que imaginás cuánto tiempo falta hasta el retiro... (Piensa varios minutos) Me gustaría llegar al Mundial 2019, es un deseo muy fuerte que tengo, pero si no sucede sé que no lo tomaría como una frustración. Creo que ya tuve un recorrido bastante largo en mi carrera y sé que solo lo haría si considero que estoy al mismo nivel que mis compañeros, porque si no fuera así estaría abusando de mi nombre y no corresponde que por un sueño individual sacrifiques a un equipo. No haría

Me gustaría llegar al Mundial 2019, es un deseo muy fuerte que tengo (...), sé que solo lo haría si considero que estoy al mismo nivel que mis compañeros.” sé rígido que no podía sacarme nunca y pasé el primer mes sin salir de mi cuarto y el segundo sin salir de mi casa, recién al tercer mes pude caminar una hora por día. Luego de cuatro meses, regresó a Francia para jugar en el Racing Metro, un club con el que había firmado contrato antes de la intervención. Pero al poco tiempo, otra lesión lo dejó fuera del mapa: se rompió los ligamentos de la rodilla. Y la recuperación no le dio tiempo para incorporarse al equipo de los Pumas y disputar el Mundial 2011. En septiembre de 2015, regresó al país y firmó contrato con la Unión Argentina de Rugby para integrar, por dos años, la franquicia nacional en el Súper Rugby. ¿Cómo ves tu futuro deportivo? ¿Pensás en el retiro? Sí… pero pienso que eso lo va a decidir mi cuerpo, en agosto cumplo 35 años, tuve varias operaciones, así que no sé hasta dónde voy a seguir.

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falta ni que me lo dijeran, yo sería el primero en bajarme si las condiciones no estuvieran dadas. ¿Tenés planes para ese momento en el que decidas retirarte? Sí, actualmente tengo junto con un socio una agencia de marketing que trabaja con BTL, gestión de redes sociales y desarrollo de material audiovisual, entre otras tareas. Se llama Be My Guest, BMG, por sus siglas. Mi socio ya venía con esto hace varios años y me ofreció asociarme para llevar el manejo de las relaciones públicas, todo lo que es el PR. Y hoy, con tres hijos, ¿ves que en el futuro podés seguir ligado al rubgy a través de ellos? El mayor ya juega al fútbol y al rugby, los otros dos todavía son chicos. Me encantaría que les guste el deporte, más allá de si es rugby o algún otro pero, como todo padre, lo único que quiero es que sean felices. ¶ Agradecimientos: Volvo, Etiqueta Negra, Montblanc.


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Viajeros urbanos En una casona icónica del barrio porteño de Palermo, la colección de relojes, accesorios y artículos de cuero de Montblanc protagoniza un recorrido mágico por la ciudad. Postales de un paseo de a dos. FOTOS Eugenio Mazzinghi ESTILISMO Mariana Schurink

Devoré dress in natural silk. Todas las joyas son de Simonetta Orsini. Los relojes, piezas de cuero y accesorios son de Montblanc. Watch: A. Lange & Söhne, Lange 1. Toda la indumentaria masculina es de La Restinga. Yellow gold earrings with South Sea golden pearls and yellow gold ring, golden South Sea pearls and S/O ETERNIDAD diamonds by Jewelmer.

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Ella: Mono blanco, Sette. Gargantilla de oro blanco y brillantes. Aros de oro blanco, brillantes y esmeralda. Anillos de oro blanco y brillantes. Reloj: Montblanc Timewalker Automatic. Él: Ambo italiano azul. Sweater de cashmere y pelo de angora. Reloj: Montblanc Timewalker Twinfly Titanio.

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Saco y chaleco de seda y lana. Camisa italiana de algodón Sea Island con botones de nácar. Pantalón de gabardina. Reloj: Montblanc S/O ETERNIDAD Timewalker Twinfly Acero.

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Cinturón, Montblanc. Reloj: Montblanc Timewalker Twinfly Titanio.

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Ella: Blusa print art, Clara Ibarguren. Falda de cuero, Sette. Aros largos de oro rosa y brillantes. Anillo de oro rosa y brillantes. Anillo de oro rosa y brillantes con diseño de espiral. Reloj: Montblanc Heritage Spirit Moonphase. Él: Saco de lana con pitucones de cuero de oveja. Sweater de cashmere y pelo de angora. Camisa de algodón Sea Island con botones de nácar. Pantalón de gabardina. Pulsera de acero, Montblanc. S/O Automatic. ETERNIDAD Reloj: Montblanc 1858

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Ambo italiano de lana y cashmere Barrington. Sweater de cashmere y merino. Bolígrafo Solitaire Platinum Unicef. Portadocumentos Meisterstück Soft Grain. Cover Meisterstück Soft Grain. Reloj: Montblanc Heritage S/O ETERNIDAD Spirit Orbis Terrarum.

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Él: Traje italiano. Camisa de algodón Sea Island y pechera plisada. Gemelos Heritage, Montblanc. Reloj: Montblanc Timewalker Date Automatic. Ella: Vestido Velvet, Sette. Aros gota de oro blanco, brillantes y esmeraldas. Anillos de oro blanco y brillantes. Pulseras flexibles de oro blanco y brillantes. S/O ETERNIDAD Reloj: Montblanc Tradition.

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Vestido largo de seda natural magenta, con amplia falda y tajos. Reloj: IWC, Portugieser CronĂłgrafo. Anillo estilo Lady Di de oro blanco, esmeralda y brillantes. Aros de oro blanco y brillantes con diseĂąo de cascada.

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Sobretodo de corte inglés. Saco cien por ciento lana. Camisa de algodón Sea Island con cuello sartorial. Zapatos, Terán. Trolley Sartorial y document Case Soft Leather, Montblanc. S/O ETERNIDAD Reloj: Montblanc Timewalker Chronograph Automatic.

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Vestido largo de seda natural magenta, con amplia falda y tajos. Reloj: IWC, Portugieser CronĂłgrafo. Anillo estilo Lady Di de oro blanco, esmeralda y brillantes. Aros de oro blanco y brillantes con diseĂąo de cascada.

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Ella: Traje de crepe amarillo, Sette. Tapado de lana, Zito. Anillos trinity de oro blanco, brillantes, esmeraldas, zafiros y rubíes. Portafolio Meisterstück Soft Grain. Reloj: Montblanc Tradition. Él: Camisa de algodón Sea Island. Mochila Montblanc Extreme. Reloj: Montblanc Timewalker S/O ETERNIDAD Chronograph Automatic.

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A PUERTAS CERRADAS Dice que no vende ropa sino felicidad, que comprar en su marca es una experiencia 360º y que admira a la gente que sabe disfrutar de la vida. Entrevista con Nicolás Márquez, el creador del concepto detrás de la etiqueta de indumentaria La Restinga. TXT Mariana Riveiro FOTO Eugenio Mazzinghi

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etrás de una puerta antigua, en palermo, se esconde un mundo. Un espacio privado basado en la experiencia de compra, una etiqueta de indumentaria, casi un club de caballeros. Eso fue lo que pensó Nicolás cuando creó La Restinga, un negocio que empezó con el espíritu de venderle ropa a algunos amigos y terminó en un proyecto que hoy sueña con la expansión internacional. Nicolás Márquez nació en Necochea. Es Licenciado en Relaciones del Trabajo, tiene un Posgrado en Negocios y una Maestría en Agronegocios. Siempre trabajó en la industria del agro, tradeaba granos para empresas exportadoras muy importantes. Y durante un viaje a Europa conoció un modelo de negocio a puertas cerradas que le gustó. “Lo quise replicar en Argentina: tener la mejor ropa que podía encontrar, confeccionada con los mejores géneros a nivel mundial y vendérsela a mis amigos”. Con esa premisa simple pero ambiciosa comenzó La Restinga, la casona en la que se llevó adelante la producción de moda. Contame cómo fueron esos primeros momentos. Yo salía de mi oficina en Puerto Madero, y había armado un departamento al que llamaba showroom -era un monoambiente- y empecé a confeccionar prendas. La idea era que, después del trabajo, me iba a tomar un whisky o a fumar un habano y disfrutaba un momento con mis amigos y de paso les vendía ropa. El objetivo era venderle a un hombre conocedor, a un bon vivant que entiende acerca de calidad y de los detalles de la prenda. ¿Y cómo lograbas que tu producto tuviera un estándar internacional? Quería importar las mejores telas del mundo y confeccionar el ciento por ciento de mi producción en Argentina. Entonces armé una marca de lujo argentina, fui buscando los proveedores.

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¿Te manejás con proveedores externos? Sí, son 12 façons, 12 fábricas que nos confeccionan, dos de zapatos, dos de sweaters, generalmente son dos proveedores por producto. El resto de las marcas que tienen tiendas en el shopping están obligadas a remarcar la ropa por cuestiones de marketing, y nosotros, al tener costos fijos bajos y una estructura chica, no tenemos que remarcar tanto. Eso nos permite hacer un producto de altísima calidad, muy por arriba del mercado, y a un precio competitivo. ¿Cuándo diste el salto? Vi esta casona y me enamoré. Hice una inversión enorme y aposté todo. Yo venía de proponerle casamiento a mi mujer. Y de repente le dije: “Amor, no solo quiero dejar mi trabajo (que nos daba mucha seguridad económica), sino que voy a poner el ciento por ciento de mis ahorros y voy a ir all in en este proyecto. ¿Te sorprendió el éxito repentino? Cuando estábamos en el departamento, apenas dos meses después empezaron a llegar políticos, personalidades importantes, y la marca estalló. Era algo impensado. Hemos tenido que cortar la calle con guardias de seguridad. Yo quería venderle ropa a mis amigos y traspasé todas las fronteras. En ese momento, pensaba: de qué voy a hablar con esta gente. Con mis amigos hablaba de fútbol, de la familia, de mujeres, y me di cuenta de que era lo mismo. Son todos hombres. Se sacaban las investiduras y se convertían en uno más. Nos tomábamos unos whiskies, nos fumábamos un habano, y éramos todos iguales. A los ocho o nueve meses decidí dejar mi trabajo y jugármela. ¿Cómo fuiste sumando clientes? Cuando cerré los dos showrooms, el de Recoleta y el de Puerto Madero, teníamos 116 clientes. A fin del año pasado, terminamos con excelente factu-


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Te miman… Claro, tenemos un mayordomo que te recibe, y recuerda los gustos de cada persona. Lo esperamos con jamón serrano, o con un buen vino. Hice alianzas con Rutini, Nespresso, con todas las firmas de lujo. Para que el cliente encuentre acá lo mismo que consume en su casa. También tenemos un convenio y siempre tienen valet parking en la cochera de enfrente. Eso logra que se olviden del auto, del tiempo y se relajen. Contame del servicio de conserjería. Fue un paso importante. El hombre, que generalmente es rústico, y cuyo recurso más escaso es el tiempo, encontró una solución. Los clientes me decían cosas como: “Tengo un saco al que le falta un botón y hace como un año que no lo uso. No tengo tiempo, no sé quién lo puede coser, hay que conseguir un botón igual…”. Y hasta hemos arreglado ropa de otras marcas. Eso era como decirles: “Yo te acompaño en serio, con lo mío, con lo del otro”. Nosotros tenemos un lema que es que no vendemos ropa, vendemos felicidad. Es una experiencia 360º. Lo que queremos es un cliente feliz que vuelva. ración y con alrededor de mil. Fue un crecimiento exponencial. El boca en boca fue muy bueno. Hicimos muchos eventos privados y también tuvimos cobertura en medios. Eso nos posicionó. Hoy el 25 por ciento de nuestros clientes son extranjeros, porque nos recomiendan de los mejores hoteles. Creo que podemos seguir sumando, mi objetivo es tener 10.000 clientes. ¿Hoy seguís tan involucrado en la empresa? Sí. Además, estoy mucho tiempo en las fábricas, voy y me tomo ciento quince mil litros de mate con el zapatero, el camisero, con todos. Mucho del éxito tiene que ver con la experiencia de compra. Contame cómo es eso. Diferente. Ya teníamos un producto superlativo, lo que faltaba era acompañarlo de una experiencia de compra de nivel europeo. Lo primero era ofrecer un servicio de concierge, para reservar una cita o pedir lo que necesites y que te lo llevemos a tu casa. Alguien que esté disponible las 24 horas, los 365 días del año. Para que el cliente se sienta contenido. Además, hay dos asesores de moda que no son vendedores. Te cuentan la historia del producto, cómo se confeccionó y te ayudan a elegir y a combinar colores o a saber qué ponerte en determinado evento.

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¿Hacia dónde se dirige tu crecimiento? La expansión internacional es el objetivo. Estamos trabajando para replicar la experiencia y el concepto hacia fin de año en Madrid, y el proyecto inmediato es abrir en marzo en DF. ¿De qué producto estás más orgulloso? De toda la sastrería. El 70 por ciento de nuestras ventas son trajes. Es el caballito de batalla. No hay cliente que no tenga un traje de La Restinga. ¿Qué es el lujo para vos? Para mí el lujo no tiene que ser aspiracional, y tampoco pasa por lo económico sino por ser un bon vivant. Tiene que ver con los gustos y placeres que uno puede cumplir en vida. Hay tipos que son millonarios y no viven bien, solo piensan en cómo tener más plata y más poder. Son monotemáticos, y su vida pasa por trabajar. Y por ahí hay otro que tiene menos, pero vive mucho mejor porque se sabe dividir. Creo que si tu vida pasa por un solo lugar, estás equivocado. Lo mejor es saberte repartir. Este cliente, que siempre le digo que es mi ejemplo, viaja con su familia, con sus amigos, disfruta de conocer, de comer, tomar. Lo admiro por cómo vive. Es un conocedor de todo. Eso es lujo para mí. ¶


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7 viajes a la luna Aquí siete nuevos relojes astronómicos -o simplemente lunares- que conocí durante las ferias de este año y que, sospecho, permanecerán en el mundo de las emociones y el deseo. TXT Carlos Álvarez Insúa

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urante la reunión de sumario de abril, S/O me propuso escribir acerca de nuevos relojes con fase lunar, y advertí que era un buen momento: las ferias de 2017 habían mostrado algunos relojes astronómicos memorables. Antes de recorrer las referencias que elige mi memoria, intentaré revisar algo de la historia de la relación entre la luna y el reloj.

El sol y la luna El horologium lunare o reloj selenítico es una variante de los relojes solares. Funciona con los principios de un cuadrante solar, pero en este caso la luz indirecta procedente de la luna es la que ilumina el cuadrante de estos relojes, su gnomon proporciona la sombra de la luz lunar sobre ellos. El más básico es idéntico a un reloj solar que solo coincide con las horas solares el día de luna llena. Debido a la duración de cada noche la posición lunar disminuye (circa) 48, así luego de una semana de la luna llena, la luz lunar posee un retraso de 5 horas y 36’ antes o después del tiempo solar. Es por esto que este tipo de relojes van acompañados de tablas correctoras. Un reloj astronómico -en cambio- nos informa de las posiciones relativas del sol, la luna, las constelaciones del zodíaco, los planetas mayores, la duración del

día y de la noche, la representación animada del sistema solar, la salida y la puesta del sol y luna. Los astronómicos son emblemas de la relojería monumental y suelen estar inscriptos con símbolos religiosos, culturales, artísticos o científicos: su existencia reafirma la grandeza de las ciudades donde fueron levantados. Acaso –de todos– el más icónico es el Praga, de 1410. Ya dejo el pasado para viajar a Genève y a Basel 2017, pero antes agregaré que los relojes monumentales de los siglos XV y XVl eran muy imprecisos; y que a partir del siglo XVlll -con la incorporación del péndulo- ganaron exactitud en la información horaria y sideral. Bueno, llegamos a Suiza en una Europa conmovida por contingencias políticas, actos de terrorismo y la sorpresa del triunfo de Donald Trump, con sus políticas de fronteras cerradas al comercio en Estados Unidos. Una actualidad inquietante e imprevisible que se percibió en los pasillos de las ferias… Pero nuestro asunto aquí es revisar algunos relojes que, además de medir el tiempo, capturan el lento movimiento del universo, indiferente a los asuntos de hoy. El inventario elegido por la memoria emocional, los relojes que aparecen tras los párpados de mis ojos, cuando los cierro y recuerdo, son: Lange 1 Fases de la luna, el Royal Oak Calendario Perpetuo, el Jaeger-LeCoultre Rendez- Vous Night and Day, el Big Bang Monphase, el Da Vinci Perpetual Calendar Crhonogaph y el Zenith Elite Lady Moonphase.

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A. Lange & Söhne

una gran declinación del lange 1 moon Phase con un nuevo calibre base y una complicación moonphase que ahora posee indicador día/ noche. Cuando supe, en diciembre de 2016, que el lanzamiento de Lange sería una actualización de la Lange 1 Moon Phase no me impresionó mucho: una fase lunar es una gran complicación, pero renovarla no parece demasiado. Debo reconocer que fue una hipótesis equivocada, apresurada, pues luego de tener el reloj entre mis manos advertí que Lange 1 Moon Phase me enamoré: era interesante, poderoso y de una elegancia imbatible. La nueva ejecución del disco día/noche combinada con un indicador de fase lunar es también divertida a pesar de su alemana sobriedad, que te conmueve cuando te acercás al disco. Bueno, en verdad hay dos discos: uno lleva la luna -con un error de un día cada 122,6 años-; el otro, por detrás, gira una vez cada 24 horas Cuando me puse el reloj en el pulso fue, sin embargo, cuando empezó la verdadera emoción. Los de 38.5mm son increíblemente cómodos, un gran tamaño para cualquier muñeca. ¿Por qué otros fabricantes no están utilizando más la fórmula 38-39 mm? Es de una armonía admirable. Si el Lange 1es un poco chico para su gusto, este reloj podría añadir lo suficiente más a la ecuación para convencerlo. La versión de dial negro en oro blanco es mi preferida, la edición de platino también me encantó. La forma de luna es curvada y termina en un borde filoso de mucho carácter. Hay dos lunas, aunque nunca son visibles al mismo tiempo. El disco del cielo para dibujar azules vibrantes que varían y las estrellas de oro brillan sin desplazar a la luna, verdadera étoile de la mise-en-scène. Son setenta las piezas que componen la indicación de las fases de la luna, que fueron hábilmente integradas en el calibre de la L121.3, apenas un poco más grande que el calibre L121.1 del modelo LANGE 1.

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Vacheron Constantin

el nuevo patrimony con fase lunar y fecha retrógrada es un reloj magnífico. Otras veces en su historia interminable, Vacheron Constantin combinó la fecha retrógrada con la fase lunar en un reloj. El Patrimony es el más limpio y bello que jamas vi. Solo se muestra la pantalla y la fecha de la fase lunar junto con la hora (no hay ninguna visualización de centro o sub-segundos). A este Partimony Moonphase lo anima el 2460 R31L, que es una declinación del calibre 2460 R31R7 que habita el Fecha Retrógrado. Los dos movimientos tienen las mismas dimensiones -27.2mm x 5.40mm- y ambos ofrecen una reserva de marcha de 40 horas, así que la diferencia de 32 centésimos de milímetro de altura de los dos relojes no nace de modificaciones en las dimensiones del movimiento. El diámetro es de 42.5mm, idéntico al fecha retrógrada, solo un poco más delgado, la altura del fase de la luna es de e 9.7mm, mientras que el de la fecha retrógrada era de 10.02mm. La fase de luna pierde un día cada 122 años, algo así como una pérdida estandarizada en los nuevos moonphase de la alta relojería.

Cartier

en 2017, luego de la sorpresa que nos provocara Cartier desde la singularidad extrema del Drive en 2016, vuelve a conmovernos con una nueva presentación de este reloj que parece clásico y permanente desde su primer minuto de vida. El nuevo Drive de Cartier, con un diseño refinado y masculino, se presenta con un movimiento ultraplano de 7 mm de grosor y en este versión con una complicación de Fases Lunares. Equipado con el nuevo movimiento Manufactura 1904-LU MC, se distingue por su presentación de las fases lunares a las 6 horas. Esta complicación reproduce el ciclo del astro de la noche al ritmo de la luna nueva, del cuarto creciente, de la luna llena y del cuarto menguante. Un reloj preciso, que recibe el apelativo de “astronómico”, ya que solo necesita una corrección de un día cada 125 años. Fiel a la estética de la colección y a sus signos de identidad: el confort de uso, el perfil de la caja, el cristal abombado y la pureza de la esfera con guilloché blanco, el nuevo Drive Fases Lunares presenta dos versiones: una de oro rosa y otra de acero.

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IWC

el da vinci calendario perpetuo cronógrafo revela un nuevo calibre de manufactura: el 89630. Allí un disco plateado -o dorado- contiene la representación completa de la luna llena, de modo tal que al girar la parte redondeada azul oscura del disco –es decir, la sombra de la Tierra– crea el efecto óptico de la luna creciente o menguante. Las partículas de oro blanco sobre el fondo azul oscuro hacen que la esfera interior tenga el aspecto de un cielo salpicado de estrellas. En los últimos salones, IWC ha propuesto refrescar sus colecciones centrales y hacer de cierta pieza de una familia clásica, la expresión de sus esfuerzos de diseño para cada SIHH. El año pasado fueron -lo recuerdan- los antológicos relojes de piloto. Este año observé un encantador renacer de Da Vinci. Antes de mirar las nuevas piezas, sin embargo, echemos un rápido vistazo a la serie original de Da Vinci relojes, que vienen desde 1985. La primera generación IWC Da Vinci Calendario Perpetuo Cronógrafo llegó a los 39 mm. Los primeros Da Vinci eran un cambio bastante radical en IWC. Las asas singulares, y la caja redonda y escalonada, fundaron su poderosa y atrevida elegancia, acompañada por un alto el nivel de complicación- algo también nuevo para IWC: el calendario perpetuo y, además, el primer calendario perpetuo en el que cada indicación podría ser fijado por la corona, con el día, la fecha, el mes y el año; también el moonphase, y novedades perfectas cambios en sincronía entre sí, haciendo del Da Vinci el glorioso antepasado de todos los modernos calendarios perpetuos de mecanismo sincronizado. También Da Vinci es el verdadero planeta que extendió un territorio fértil para el trabajo del maestro relojero e inventor Kurt Klaus. Para el calibre 89630, los relojeros de IWC prosiguieron revisando los papeles de antiguas construcciones. Sin embargo, había un desafío: el calibre de la manufactura 52610, empleado normalmente para el calendario perpetuo, accionaba la fase de la luna a la altura de las 12 horas. Si se colocaban allí las agujas del cronógrafo, estas pasarían por el medio, a través del disco de la luna. Pues no preveía ningún espacio para una fase de la luna. Por ello, los ingenieros diseñaron un nuevo movimiento, el calibre de la manufactura 89630, que combina la aguja doble del cronógrafo, con el sistema de fases de la luna y representa ambos en una esfera interior. El diámetro del Da Vinci 2017 es de 43 milímetros, la altura de caja de 15,5 milímetros. La forma de la corona y de los dos pulsadores es cilíndrica, ya no tan redonda como la del Calendario Perpetuo de 1985. Junto con las voluminosas asas móviles de la correa ofrece una impresión más contemporánea sin perder el DNA del ícono.

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Audemars Piguet

negro, completamente negro, bello y misterioso, era la frase que fatigaba los pasillos del salón. Lo colegas se encontraban unos con otros luego de sostenerlo entre sus manos y hablaban de él: “¿Lo viste?”, decían. “Recién, ¡es impresionante!”, contestaban. El Calendario Perpetuo y el Royal Oak son una simetría arraigada en el corazón de Audemars Piguet. Les encanta a los relojeros de Le Brassus que todas las mediciones del tiempo que se derivan de la astronomía y de los ciclos de la naturaleza puedan ser bellamente documentadas en misteriosos relojes de pulso. En 1955, Audemars Piguet concibió un reloj de pulsera con calendario perpetuo que ofrecía la indicación de los años bisiestos, fueron 9 ejemplares, todos en oro amarillo de 18 quilates. Desde aquellos días Audemars Piguet ha producido muchos relojes de pulsera con calendario perpetuo, entre ellos el reciente Royal Oak Calendario Perpetuo 2016, que combina oro amarillo, el icónico diseño de Gérald Genta y esta complicación clásica de todo el mundo de la relojería. Ahora, Audemars Piguet nos mostró Royal Oak Calendario Perpetuo en una versión completamente negra, fabricada en cerámica negra y acabada a mano. Las indicaciones de día, fecha, mes y luna astronómica, así como la imprescindible indicación del año bisiesto, con la semana del año situada en el realce exterior de la esfera, habitan la esfera Gran Tapicería. El calibre de mayor tamaño de este reloj de cuerda mecánica, alojado en una sólida caja de 41 mm, es visible –única transparencia de este mago negro– a través del fondo de cristal de zafiro. La cerámica negra, difícil de dominar pero prácticamente imposible de rayar, resiste altas temperaturas y choques térmicos, y es extremadamente resistente al paso del tiempo. Solo la paciencia y la competencia extrema permiten lograr un material uniforme, compacto y ultrarrígido que después pueda trabajarse de forma mecánica y acabarse a mano. “¡Wow, cuánto dinero!” dice alguien al referir el valor del nuevo AP negro. Sin embargo, anotaré que en pocas ocasiones un alto precio en la industria está tan justificado por el esfuerzo que supone producir la pieza como en el del Nuevo Royal Oak. Los especialistas de Audemars Piguet necesitaron más de 600 horas de investigación para desarrollar este nuevo reloj de pulsera. Se necesitan seis horas para fabricar de forma mecanizada, pulir, acabar a mano, ensamblar y revisar una pulsera de acero inoxidable Royal Oak; pero se necesitan treinta horas para efectuar exactamente los mismos procedimientos con una pulsera de cerámica negra. “¡Cinco veces más tiempo!”, pienso. La esfera, con motivo Gran Tapicería, es gris pizarra con contadores negros y muestra la imagen de una luna astronómica con realismo fotográfico, que contrasta con todos los componentes negros de la pieza. Sí, ¡Gerald Genta habría brindado por el nuevo Royal Oak!

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Hublot

hublot ha combinado colores claros, de verano, capturando la intensidad de la luna en curiosa empatía con reflejados colores brillantes pero ambiguos, raro y eléctricos… Lunares: el azul índigo, que adoran los amantes del dril de algodón, el púrpura para un look ultravioleta, naranja vibrante y pink muy pop 70’s. El Big Bang Moonphase es una una pieza radical donde todo es pensado a partir del diseño. Una diferencia de su análogo Spirit of Big Bang es que la versión del 2017 se presenta en cuatro colores diferentes: azul índigo, púrpura naranja y rosa. Su caja de de 42 milímetros está enmarcada por un bisel decorado con 48 zafiros. Con una reserva de marcha de 50 horas, el mecanismo de este raro objeto funciona con un esqueleto automático –concepto que cita al HUB1770- e intervenido con una superficie de dióxido de silicio y óxido de aluminio fundidos a alta temperatura. El dial es un disco arenado de la fase lunar que muestra un ciclo de la luna reproducido en una amplia ventanilla redonda que completa una vuelta en dos ciclos lunares. El cuarzo abandona su color histórico en un delirio pancromático, pero preserva una dureza de 7 en la escala de Mohs, y el dial requiere una tecnología extrema. El disco semitransparente revela dos lunas alternas, también en tonos a juego. Un juego de contrastes y colores que enfoca el ojo en la complicación a las 6 en punto. Un ciclo lunar se reproduce en una gran ventana redonda que completa una revolución cada dos meses lunares. La obsesión por el color de Hublot invade los Spirit of Big Bang Moonphase con cuatro nuevos modelos de tonalidades azul, violeta, naranja y rosa. Correa, esfera de cuarzo, disco arenado de la fase lunar, agujas, índices y bisel engastado dan el tono a una alegre colección monocroma.

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Zenith

en 2017, la colección elite da la bienvenida a un nuevo modelo con una caja de tamaño más reducido: el Elite Lady Moonphase 33 mm, una combinación de excelencia técnica y distinción atemporal. Disponible en versiones de oro rosa o acero, este reloj delgado y muy femenino cautivará a las mujeres que adoran los mecanismos más refinados pero no desean sacrificar la elegancia delicada y sobria. El Elite Lady Moonphase se pasea con fineza a través de cinco variantes fabricadas en oro rosa de 18 quilates o acero inoxidable. La caja ultradelgada de 33 mm de diámetro aloja el calibre automático Elite 692, con una reserva de marcha de más de 50 horas. Este movimiento extremadamente delgado, su altura es solo 3,97 mm, pone en juego las indicaciones de la hora, los minutos, el segundero pequeño y las fases lunares.

Jaeger-LeCoultre

sutil y novedoso, atento a la delicadeza del detalle, Rendez-Vouz night & Day Jaeger-LeCoultre dialoga con la moda, ahora también en oro amarillo. Este material se ofrece por primera vez en el Rendez-Vous Night & Day Medium de 34 mm. Esta pieza femenina está disponible ahora en tres tamaños, en varios materiales y con una nueva función. Hay una indicación día/noche en la abertura colocada a las seis en punto, con un disco giratorio que lleva el sol y la luna. El reloj es accionado por el calibre JLC 898D/1, que es automático y tiene una reserva de energía de 40 horas. La versión más grande es de 38.3mm, disponible en acero y oro amarillo con diamantes -este es el primer oro amarillo Rendez-Vous y es bueno ver más propuestas que agregan el oro amarillo al rosa tan hegemónico en la última década. Sin embargo, es el acero lo que realmente me llama la atención. Si bien este reloj no es revolucionario, es un ejemplo de cómo las marcas están empezando a ofrecer relojes de dama de acero con complicación y en tamaños más grandes.

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DevorĂŠ dress in natural silk. Watch: A. Lange & SĂśhne, Lange 1. Yellow gold earrings with South Sea golden pearls and yellow gold ring, golden South SeaETERNIDAD pearls and S/O diamonds by Jewelmer.

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Una tarde en el museo La impactante colección de piezas de joyería de Simonetta Orsini fue exhibida en el Museo de Arte Decorativo como parte del Six O´clock Tea, la ya clásica jornada de desfiles de prêt-à-porter. Entre los salones y el jardín del antiguo Palacio Errázuriz Alvear, escenas de una tarde cargada de sofisticación. FOTOS Hernán Cristiano Los vestidos son de Claudia Arce. Agradecimiento: Josefina Laurent.

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EUGENIA: Reloj: Saxonia, A. Lange & Söhne. Pulsera de oro blanco y brillantes. Aros argolla con brillantes baguette y pavée de brillantes. Anillos colección de oro blanco y brillantes.

Devoré dress in natural silk. Watch: A. Lange & Söhne, Lange 1. Yellow gold earrings with South Sea golden pearls and yellow gold ring, golden South Sea pearls and S/O ETERNIDAD diamonds by Jewelmer.

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PIA Reloj: ClĂŠ 40mm, Cartier. Aros largos de oro rosa y brillantes en forma de rombo. Anillos Trinity en tres oros: blanco, amarillo y rosa con brillantes. Anillo de flor con pavĂŠe de brillantes.

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JULIANA: Reloj: Rendez Vous, Jaeger-LeCoultre. Aros colgantes de oro blanco y engarce de pavée de brillantes. Anillo strech sin fin de oro blanco y brillantes. Pulsera espiral de oro rosa y pavée de brillantes. Anillo vintage de oro rosa y brillantes.

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Marbled jacket, shirt and gabardine pants, Giesso. Sartorial backpack, Montblanc. Watch: Montblanc, Heritage Spirit Moonphase.

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SOFĂ­A: Reloj: Radiomir 1940 3 Days Automatic Acciaio, Panerai. Â Collar de perlas cultivadas con cierre de oro blanco y brillantes. Anillo de oro blanco, con perla cultivada y brillantes.

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LA PREGUNTA EXISTENCIAL Es filósofo, pero su vida dista mucho de aquella imagen del pensador silencioso alejado del mundo. Conductor y columnista en radio, tevé y gráfica, docente y speaker, Darío Sztajnszrajber reflexiona acerca de los grandes temas que, aún hoy, mueven al hombre. TXT Florencia Zielinski FOTOS Javier Picerno

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a cita es a las 9 de la mañana, en un bar de Colegiales. Llega puntualísimo, remera roja, impermeable oscuro, sonrisa amplia. Este cafetín es una de sus tantas postas cotidianas que salpican el mapa de Buenos Aires, un lugar más en donde hace un alto entre sus actividades. Porque la agenda de Darío Sztajnszrajber es totalmente opuesta al cliché del filósofo retirado del mundanal ruido. Y, al igual que su apellido lleno de consonantes, da vértigo. Al momento del encuentro está recién llegado de una gira con Desencajados, la propuesta teatral que desde hace cinco años hace convivir a la filosofía con la música en el escenario. También está presente en la radio: con un programa propio, Demasiado humano (Futuröck), y como columnista en Metro y medio (Radio Metro). Da clases en la universidad, y siempre hay una conferencia o charla que lo convoca. Además, están los diarios, programas y revistas que frecuentemente requieren su opinión. Pero el motivo estratégico de la elección de hoy es que este bar en particular está cerca del colegio de sus hijos. Acá tiene su mesa al fondo, un mozo que sabe lo que le tiene que traer (un café con leche sin medialunas), y rige el ritual cómplice de la lectura del diario, del cafecito. “Creo que el canal Encuentro (donde su ciclo Mentira la verdad estuvo tres temporadas en pantalla) abrió una puerta. Mostró que hacer un programa de filosofía no era

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sentar a dos tipos con un potus en el medio charlando sobre Heidegger y el nazismo”, dice a modo de explicación del enganche que actualmente generan sus propuestas, que muchas veces agotan entradas como si fueran conciertos de rock. ¿Cuáles son los temas existenciales que nos desvelan? Los de siempre, no hay mucho misterio. En un ranking, el número uno es la muerte, le siguen Dios y el amor. ¿Dios sigue siendo un tema? Sí, lo es en la medida que te corrés de la idea del dios de las religiones institucionales tradicionales. Es la pregunta por el origen. La pregunta acompaña el desarrollo cada vez más firme de la ciencia. Porque cuanto más descubre la ciencia sobre el origen, más vuelve a plantearse la pregunta desde la filosofía. Esta idea incomprensible para nuestra razón de que de la nada surgió algo. No hay ciencia que te lo pueda explicar. A mí me sigue rompiendo la cabeza en la medida que lo busco. ¿La tecnología nos aleja del impulso de buscar sentido? No creo que la tecnología contemporánea haya generado una diferencia en relación a otros momentos de la historia. Siguiendo a Heidegger, el ser humano siempre huyó a la cotidianidad, porque encontró ahí esa obturación a las preguntas existenciales que son existenciales porque


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no tienen respuesta y angustian. Uno huye de la angustia hacia la cotidianidad. Y lo que hace ese celular, esas imágenes que pasan veloces (pero también el matrimonio, el trabajo, ver la televisión o estar con amigos) es que por un tiempo logran anestesiar la conciencia de que somos finitos. Pero en realidad es al revés: es tal la magnitud del control que se ejerce en la cotidianidad, la cosificación del ser humano puesto a convivir entre cosas, que el angustiarse libera un poco. Recordar una vez por semana que vas a morir genera una relación con lo cotidiano más distante. La tecnología de cada época tiene su particularidad. La nuestra está plagada de imágenes, de velocidad. Pero eso no destituye a la filosofía. ¿Qué nuevas preguntas aparecen? Hoy se está haciendo mucha filosofía a partir de las transformaciones materiales que genera la tecnología, donde viejas categorías binarias, como verdad/apariencia, forma/contenido empiezan a sucumbir porque en el mundo de la imagen se vuelve cada vez más difícil distinguir lo que en otra época parecía más fácil. ¿O una imagen no es algo real, también? Hay una tendencia en cierta filoso-

caverna. Entonces, ¿qué se hace con eso? Creo que a veces la hipótesis de la Matrix hay que ponerla entre paréntesis. No es que se pueda resolver, pero lo que sí se puede hacer es deconstruir algunos conceptos que aceptamos como seguros. Desnaturalizar los supuestos. Sí. La pregunta filosófica permite volver extraño lo “obvio”. Obviedad, etimológicamente, significa “el camino que tenés en frente tuyo”. Acá lo obvio es algo que tenés tan en frente tuyo que no ves que para cualquier cosa siempre hay otros caminos posibles. Esa para mí es la máxima de la filosofía: todo, incluso lo que funciona bien (sobre todo eso) puede ser de otro modo. Pero uno compra la perspectiva que funciona y obtura el resto. Hacer filosofía cuando todo se derrumba es fácil. Lo difícil, lo provocativo, es hacer filosofía cuando todo funciona bien. Porque ahí es cuando se aletarga ese instinto de cuestionamiento. Uno puede decir, ¿para qué, si estoy tranquilo? Esto es lo que propone: la filosofía no resuelve problemas, los crea. Hay una metáfora de Rorty que dice que “hacer filosofía es rascarse donde no pica”. Sócrates decía de sí mismo que era una mosca molesta con sus

Lo que hace ese celular, esas imágenes que pasan veloces es que por un tiempo logran anestesiar la conciencia de que somos finitos.” fía a volverse anti-tecnológica, y me parece que es un error: la tecnología nos transforma y entonces nos habilita nuevas preguntas. Las instituciones en general lo que hacen es normalizarnos, cuando en realidad, al mismo tiempo que necesitamos un poco de sosiego, somos animalitos desesperados por encontrarle el sentido a lo que no lo tiene. Por eso, yo defiendo a muerte esa ambigüedad del ser humano que entra y sale todo el tiempo. ¿Y hacer filosofía no es salirse de la Matrix para volver a entrar, una y otra vez, necesariamente? Sí. Yo te subiría la apuesta: ¿no está también la pregunta filosófica disciplinada desde la Matrix? Porque a veces tenés la sensación de que incluso lo que considerás una pregunta espontánea está guionada. La hipótesis de la Matrix genera que no hay salida, que cualquier decisión de poder estar afuera se vuelve imposible, porque no hay un afuera. Y que siempre alguien podría estar maquinando lo que uno cree que genera de modo autónomo. Esta hipótesis la encontramos por primera vez hace 2500 años en Platón, con la alegoría de la

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preguntas que la sociedad consideraba sin sentido. Rascarse donde no pica no tiene sentido, hasta que te das cuenta de que en realidad todo pica, y de que tenías partes del cuerpo anestesiadas. ¿Cómo no va a picar este cuerpo, si nace para morir? ¿Cómo relacionar este cuestionamiento con la vida cotidiana? No es conveniente llevar la filosofía a la vida cotidiana de manera permanente porque entonces no das un paso. Este tipo de reflexión en la práctica lo que ayuda es a correrse de ciertos lugares dogmáticos, discriminatorios. La desnaturalización rompe toda jerarquía de poder. En filosofía de género, por ejemplo, la desnaturalización es fundamental para intentar revertir siglos de patriarcado. Ahí el poder de la filosofía tiene una incidencia política concreta en la vida cotidiana. ¿Qué pasa cuando se desnaturaliza el amor, por ejemplo? Si podés trabajar filosóficamente los supuestos que anidan en todo vínculo, entendido el vínculo


como una relación de poder soterrada. Tenemos una relación de mucha apropiación con el otro, en términos de mercantilización amorosa. “Mi mujer”, “mi esposo”, ese posesivo con el otro se puede desposeer. La filosofía ahí tiene incidencia. Después en la vida cotidiana tenés esas dos patas, porque por un lado vivís en un mundo monogámico, donde está instalada la idea del vínculo como una posesión. Pero al mismo tiempo, podés estar corriéndote todo el tiempo. La filosofía no propone otro mundo: propone deconstruir, debilitar. Hay un pensador, Vattimo, que crea el concepto de “pensamiento débil” y propone debilitar todo lo que se presenta como sólido, absoluto. Lo que hace la filosofía es soltar, mostrar que siempre queda algo que no cierra. ¿La monogamia es uno de los supuestos que más incomoda desnaturalizar? Sí, porque la monogamia excede lo afectivo; es una estructura política, una construcción de orden social. Uno puede salirse con su pareja de la estructura monogámica, pero la sociedad va a seguir siendo monogámica. Y eso tiene que ver con una idea de apropiación del otro. Si vivimos en una sociedad en la que la propiedad es el eje de nuestro vínculo con las cosas, eso naturalmente genera la cosificación del otro como propiedad de uno. Hace cinco años que te presentás con Desencajados. ¿Qué le suma la puesta en escena? Creo que es una manera muy efectiva de generar una transferencia del lenguaje filosófico. Sobre todo para aquel que no estudia filosofía, pero que hay algo de su lenguaje que lo erotiza, le llega. La música y el teatro son canales claves para que esto llegue, sin renunciar al rigor, al estilo y la irreverencia de la filosofía. Una clase en un aula es también una puesta en escena, porque del mismo modo uno tiene el objetivo de alcanzar al otro en su racionalidad y emoción, en su sensibilidad. ¿Por qué pensás que en este momento engancha lo que hacés? Creo que, al revés de lo que muchos dicen, vivimos

en una época plagada de sentido. Lo que hace la tecnología es procesarlo y brindártelo al consumo directo. En tiempos así es cuando más surge la pregunta existencial. En el mundo de la empresa, por ejemplo, hay un tipo de management que busca un pensamiento lateral, o creativo. También ha sido un cimbronazo importante el proyecto TED que, desde su nacimiento en Estados Unidos, hizo que lo que históricamente se veía como una pérdida de tiempo, ahora sea algo correcto. Creo que es una mezcla de todo, no me animaría a generar una hipótesis de época, ni a decir “hoy a la gente le gusta más pensar filosóficamente”. ¿Lugares de Buenos Aires ideales para hacerse preguntas existenciales? Todo el transporte público en su hora pico. Aquellos lugares que uno no elegiría son los que más provocan la pregunta. Después, me gusta mucho la figura filosófica del flaneur, que es esta idea de perderse en la ciudad. Buenos Aires tiene una estratificación social y urbana muy importante en zonas que uno todavía puede recorrer y sentir esta sensación de extrañamiento, barrios que uno desconoce, desde Villa Devoto hasta Barracas, zonas limítrofes a las que uno no accede, salvo si vive ahí. También las autopistas son para mí lugares que te colocan con una mirada distinta. Otro lugar que históricamente siempre me llamó la atención es el cementerio de la Chacarita. Nací cerca y de adolescente era mi lugar de relax. Cuando estaba muy sacado, iba a caminar alrededor de los muros, de nochecita. ¶

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ENTRE LO EFÍMERO Y LO ETERNO Dejan su huella indeleble en distintas ciudades alrededor del mundo e impactan con obras de arte a cielo abierto. Seis referentes del muralismo que transforman el paisaje urbano. TXT Andrea Cukier

el street art comenzó como sinónimo de rebeldía, protesta y contracultura. Sin embargo, en las últimas décadas eso cambió radicalmente. Pasó de ser un acto vandálico a convertirse en un arte legitimado que hoy se utiliza para embellecer las ciudades, poner en valor propiedades abandonadas e incluso como soporte para acciones publicitarias. Así, los murales persisten como tradición de arte social que, además de cumplir una función estética, también se cargan de un discurso propio. Convierten las calles en un canvas infinito que refleja lo que está pasando en una ciudad durante un momento específico. Muchas zonas renacen con este tipo de iniciativas y

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ese fue el caso de Wynwood (Miami), un barrio que se revitalizó y se convirtió en la meca del arte callejero de los últimos tiempos gracias al proyecto Wynwood Walls, que agrupa cada año a docenas de muralistas para la feria de arte contemporáneo Art Basel. Otro centro urbano que se transformó en un gran exponente del street art es Lisboa. La capital de Portugal logró convertir una lucha histórica contra el vandalismo grafitero en un circuito de reconocidos muralistas internacionales gracias a la intervención de la municipalidad, que ofreció pintura y materiales gratis a todos los artistas que presentaran proyectos para embellecer la ciudad.


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MISTER MISTERIO

Banksy es el seudónimo del mítico artista callejero inglés. Se sabe muy poco acerca de su identidad ya que no se conoce ni su nombre, ni su aspecto físico y la mayoría de los detalles de su biografía son inciertos. Su trabajo consiste, en su gran mayoría, en murales con sátiras humorísticas sobre política, conflictos bélicos, injusticia social y cultura pop. Combina graffiti con stencil y suele acompañar sus imágenes con frases provocadoras para interpelar a los espectadores. Su obra es un ícono británico y sus murales fueron plasmados en decenas de ciudades en el Reino Unido, Australia, Estados Unidos, Francia y Canadá. Con el auténtico espíritu punk que caracteriza su carrera desde el inicio, más de una vez entró disfrazado a museos de renombre para colgar sus obras de manera clandestina. Así expuso en el Museo Nacional Británico de Arte Moderno, el Museo de Brooklyn, el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, y el Louvre, entre otros. Años después, varios museos adquirieron sus obras para que formen parte de su colección de manera oficial y, en el año 2010, la revista Time lo incluyó en la lista de las cien personas más influyentes del mundo. Siempre atento a los últimos eventos que sacuden al mundo, una de sus últimas piezas fue un trabajo realizado en el campamento de refugiados en la ciudad francesa de Calais. Con Steve Jobs como protagonista, la pared muestra al fundador de Apple – hijo de un migrante sirio a Estados Unidos- cargando una Macintosh y una bolsa de basura con algunas de sus pertenencias, con la intención explícita de mostrar la hipocresía que hay detrás de las políticas hacia los inmigrantes y de cómo los países pueden beneficiarse al abrirle sus puertas a otras culturas. La popularidad de Banksy y la incógnita que genera su vida hacen que, cada vez que aparece una pieza suya, el propietario de esa pared venda ese pedazo a algún coleccionista o a una galería por cientos de miles de dólares.

MADE IN ARGENTINA

Autor de centenares de piezas callejeras, Martín Ron es conocido como uno de los diez mejores muralistas del mundo. Oriundo de la localidad de Caseros, realizó su primer obra a los 13 años a pedido de un amigo. Hoy es docente de la UNTREF y, desde 2010, se desempeña como director artístico del programa “Embellecimiento Urbano” en el Partido de Tres de Febrero, en donde realizó una gran cantidad de murales junto a diferentes colaboradores.

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La Ciudad de Buenos Aires lo convocó para plasmar su obra en el marco de la celebración de los cien años del subterráneo. Allí, no solo pintó una formación completa del Subte Línea A, sino que también firmó las paredes de distintas estaciones del resto de las líneas. La obra reunió a distintos referentes de la historia local, y así, Ron retrató a Julio Cortázar, Mercedes Sosa, Carlos Tévez y Juan Manuel Fangio, entre otros. Con gran proyección internacional, pintó murales en Inglaterra, Estados Unidos, Alemania, Bélgica, Malasia, Estonia, Guyana y las Islas Canarias.


LOS HERMANOS SEAN UNIDOS

Gustavo y Otavio Pandolfo, gemelos idénticos, recorrieron las calles de su São Paulo natal y comenzaron a introducirse en el muralismo cuando la cultura del Hip Hop impactó con fuerza, durante los años ochenta. Así, a partir de 1987, los hermanos se apropiaron de su condición para aliarse en una dupla artística mundialmente conocida como Os Gemeos. Comenzaron con graffitis y crearon una estética muy particular que se trasladó a la pintura, la escultura y, finalmente, quedó plasmada en las paredes. Si bien sus pintadas comenzaron como algo, en el año 2000 la dupla recibió legitimación pública cuando fue invitada –junto a otros artistas callejeros- a pintar varios vagones de trenes y subtes, que luego se convirtieron en patrimonio cultural brasileño. Gustavo y Otavio son

miembros del proyecto Wynwood Walls y expusieron sus obras en museos y galerías de renombre tanto en Brasil como en Cuba, Chile, Italia, España, Alemania, Japón y Estados Unidos, entre otros. Entre sus trabajos más reconocidos, se destaca la colaboración que realizaron para Louis Vuitton: desarrollaron un foulard de seda con una estampa exclusiva para la firma de lujo. La dupla también intervino una obra de Banksy, que el artista británico instaló en plena calle, a cielo abierto. Otro trabajo imponente de la dupla se pudo ver en el marco de la Copa del Mundo de Brasil 2014 ya que fueron contratados para pintar el Boeing 737 que transportó a la selección brasileña durante el mundial. Recientemente expusieron en Nueva York y en París e intervinieron una antigua fábrica de trenes en Milán.

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SEGUNDA GENERACIÓN

Bordalo II –Artur Bordalo- eligió su nombre artístico para honrar a su abuelo, el pintor paisajista Real Bordalo, y dejar en claro que él es el segundo artista de la familia. Si bien su antecesor se encargaba de plasmar la belleza de las vistas de su Lisboa natal, Bordalo II reinterpreta el paisaje urbano con un estilo figurativo que fusiona el reciclaje artístico con técnicas del collage, la escultura, la pintura y el graffiti. Nacido en 1987, Artur creció con mensajes que fomentaban el consumismo y la producción masiva de objetos. Este bombardeo de publicidad tuvo un gran impacto en su juventud y, desde sus comienzos, siempre tuvo interés en trabajar con objetos residuales que otros considerarían basura. Así, varias calles

DE SÃO PAULO CON AMOR

de Lisboa se vieron intervenidas por sus obras, que buscan representar a la naturaleza con los materiales responsables de su destrucción. “Formo parte de una generación extremadamente consumista, materialista e interesada. Por la producción excesiva de cosas, existe un aumento proporcional del consumo, y esto genera mucha cantidad de basura. Y digo basura, entre comillas, porque es una definición muy abstracta. La basura de un hombre es el tesoro de otro”, afirma el artista. Además de plasmar su arte tridimensional en pisos y paredes, también ha utilizado varias líneas de ferrocarril de Portugal y creó obras con mensajes subliminales alrededor de los rieles para crear conciencia sobre el mundo en el que vivimos.

Otro paulista que se destaca en el circuito es Eduardo Kobra, quien comenzó a pintar a los 11 años y hoy es mundialmente reconocido por su manejo del color, la implementación de las figuras geométricas y el espectacular realismo de sus obras. Su trabajo tiene un sello distintivo que lo hace fácilmente reconocible, ya que se trata de una serie de murales tridimensionales que permiten la interacción entre el público y la obra. En los años noventa desarrolló el proyecto Muros de la Memoria, que sigue vigente en la actualidad, con el objetivo de transformar el paisaje urbano, resignificar su conexión con el pasado y mostrar cómo eran esas calles con su gente y con su historia. Por eso reproduce fotografías antiguas y les imprime su toque personal con colores intensos y vibrantes. Además de participar del proyecto Wynwood Walls, sus murales están presentes en ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Londres, Roma Atenas y Lyon, entre otras. Durante los Juegos Olímpicos de Río en 2016, se consagró por crear el mural más grande del mundo pintado por una sola persona. Titulado “Etnias”, mide 3000 m2, y está inspirado en los anillos que representan a los cinco continentes.

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SABOR TROPICAL

Sin educación formal en arte o diseño, Elliot Tupac es un reconocido artista de serigrafía y caligrafía que traspasó las fronteras de su Perú natal y llevó su arte por Latinoamérica y Europa. De origen huancaíno, se crió al ritmo de la chicha, un género musical que nace de la fusión de ritmos tropicales con la música andina. Aunque este ritmo se originó en Lima, se dio a conocer a comienzos de la década del 70 en la región central de la sierra peruana, específicamente en la ciudad de Huancayo. Su padre es diseñador y le inculcó el arte de la serigrafía y lo artesanal desde pequeño. A los 12 años, Elliot

comenzó a crear y diseñar letterings y tipografías en afiches de chicha para promover los bailes y las bandas tropicales. Esta influencia lo acompañó durante toda su carrera y por eso hoy, su caligrafía colorida y alegre, se destaca en cualquiera de sus grandes murales o carteles. Desde 2004 el artista reivindica este arte dentro y fuera del continente y, a través de su obra, Tupac hace foco en las tradiciones indígenas y reivindica la cultura popular. Luego de varios años, llegó con su arte al continente europeo y sus obras llegaron a barrios como Notting Hill, en Londres. También pintó un mural en Túnez y otro en la estación del Metro de Part Dieu en la ciudad francesa de Lyon.

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Sabores de guarda Queso, café, carne, whisky, vino y también cerveza. El mundo gourmet experimenta con el paso del tiempo para lograr aromas más complejos. Cómo son los procesos de guarda que mejoran y potencian alimentos y bebidas para generar experiencias foodies sorprendentes. TXT Daniela Rossi

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El

tiempo es uno de los ingredientes fundamentales en muchos alimentos: un queso sardo, Lincoln o cheddar logran el sabor y la consistencia ideales después de meses de maduración. Un vino que reposa en barrica toma otra potencia y cuerpo tras cumplirse el ciclo que el enólogo cree que le hará mejor. Esos espacios en los que se almacenan y las temperaturas y cuidados determinados que reciben terminan de definir las características que percibirán los sentidos al probarlos. Más allá de los procesos tradicionales de guarda, el mundo gourmet comenzó a experimentar con el paso del tiempo en diferentes productos para lograr experiencias diferentes. Las bebidas pueden consumirse jóvenes -en general frescas, livianas, fragantes- o con una etapa de crianza en diferentes contenedores. En ese lapso de tiempo en que aparentan descansar, en realidad sus notas, color, textura y aromas se reinventan. El whisky es quizás una de los procesos de guarda más conocidos: sus etiquetas exhiben la cantidad de años que atravesaron antes de llegar al mercado. The Macallan, para muchos el mejor whisky escocés, elige toneles de roble español -que antes contuvieron jerezpara madurar sus bebidas. En 2014, en una sala de subastas de Sotheby’s, un hombre de Taiwán pujó para llevarse una botella de seis litros de “M”, un blend elaborado con barricas que databan de 1940 a 1990; pagó 628.205 dólares, lo que lo convirtió en el whisky más caro del mundo. El anterior récord había sido para The Macallan “Cire Perdeu”, con 64 años de guarda. Es decir, los años valen. Y mucho. Una excavación en la ciudad de Espira, Alemania, conmovió a historiadores y amantes del vino por igual: enterrada junto a un noble romano hallaron una botella de vino producida entre los años 325 y 359. El recipiente, de vidrio, fue encontrado en 1867 en perfectas con-

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diciones; pero el misterio por las condiciones de la bebida continúa, ya que por temor a dañarlo, continúa cerrado. En las Bodegas Históricas de los Hospices Civils de Strasbourg, Francia, almacenan uno de los vinos más antiguos del mundo: el blanco de Alsacia pasó, en sus 545 años de vida, por tres barricas, y fue probado solo tres veces. Un Chateau d’Yquem, elaborado en 1811 en la región de Sauternes, Burdeos, fue el vino blanco más costoso del mundo; el sommelier y coleccionista Christian Vannequé valoró esa botella de casi 300 años de historia y la adquirió por 110.000 dólares para exhibirla en su restaurante de Indonesia. Si alguien lo desea, lo puede pedir a la mesa. Más allá de récords y subastas, restaurantes y bodegas reservan en sus cavas botellas de cosechas pasadas que descorchan en ocasiones especiales. Por ejemplo, para celebrar su 120º aniversario, la Bodega Norton abrió etiquetas de más de 60 años de historia que sorprendieron por su vitalidad y potencia. La cerveza tampoco quedó ajena al añejamiento: los brewers de Estados Unidos comenzaron a experimentar con sus creaciones dentro de barricas de roble, a la manera del vino, y consiguieron resultados auspiciosos. De hecho, la exclusividad que le otorga ese añejamiento -antes impensado para la cerveza- convirtió a esas partidas limitadas en objetos de deseo para los conocedores: Hair of the Dog, una cervecería de Portland, vendió sus botellas por 2000 dólares la unidad. En el mercado local las marcas artesanales también prueban: Antares lanzó su Proyecto Barricas para hacer la El Centinela, que pasó por toneles de destilados (principalmente de whisky). En su microcervecería de Bariloche, Cerveza Patagonia cuida los toneles que antes tuvieron Malbec y que guardan una Barley Wine durante un año. El añejamiento tradicional del café se inició a


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comienzos de 1700, cuando los granos cosechados en Indonesia viajaban hacia Europa. Allí se almacenaban en los cascos de los barcos, lo que modificaba sus condiciones. Siguiendo ese proceso, luego algunos estilaron realizar guarda en madera. Pero el material también cambia y con ello evoluciona. “Llevamos el café a otro límite”, asegura Consuelo León, Coffee Ambassador de Nespresso acerca del lanzamiento mundial de Limited Edition Selection Vintage 2014: los granos de arábica de Colombia fueron conservados en sacos de arpillera a 3700 metros de altura. “El tiempo afinó los atributos de amargor y acidez, se resalta el tueste para la madera y se encuentra la fruta roja más reposada. El sabor se perfeccionó”, dice.

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En la carne, la maduración logra, además de una elevación del sabor, una terneza sin igual. En este caso también puede ubicarse el nacimiento de la práctica con el transporte interoceánico, pero a la cocina moderna se reincorporó hace no tanto, hacia 1970. El chuletón español -una costilla de carne vacuna- fue uno de los cortes que tomó ese método. En el resto de Europa y en Estados Unidos también se desperdigó el beef aging. Poco a poco avanzaron las investigaciones, las pruebas y las nuevas cocinas que lo adoptaron. En Buenos Aires, Elena -el restaurante del Four Seasons Hotel, puesto 31 de los 50 Best Latin American Restaurants- fue uno de los que apostó fuerte por la técnica: Juan Gaffuri, su chef ejecutivo, la había conocido en Estados Unidos y Egipto y decidió incorporarla en su carta. “El dry aged es un valor agregado al producto. En un país productor y consumidor de carnes, sentía que había que evolucionar”, cuenta. Hoy, sirven 250 kilos de carne madurada por semana a sus comensales. En la cámara tienen más de una tonelada en proceso (hay, por ejemplo, bife Wagyu que lleva 180 días) y planean para los próximos meses lanzar cavas personales de carne: que un cliente elija el corte que recibirá todos los cuidados y luego comerá, llegado el momento perfecto, en su plato. Por tradición o en búsqueda de la innovación, el universo foodie aprecia el paso del tiempo. Y aprovecha su valor agregado. ¶


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EL PRECIO DE LA MEMORIA Marcas que vuelven a fabricar modelos del pasado, coleccionistas que apuestan a mรกs y un negocio que mueve millones en subastas de autos antiguos. Cuando el patrimonio anda en cuatro ruedas. TXT Gabriel Silveira

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“T

odo tiempo pasado fue mejor…”. Una frase a la que, con el correr de los años, le fuimos encontrando sentido. Sin hacer un análisis profundo, esta expresión encuentra su motor en la memoria emotiva. Pero también funciona como moda: hoy lo vintage es chic. El diseño y la originalidad de las formas, algo difícil de encontrar en la actualidad, se manifiesta en los autos clásicos y, por supuesto, esa moda se volvió un gran negocio. Según un estudio realizado a finales de 2015 por la consultora británica Knight Frank, los vehículos de colección se revalorizan un 25 por ciento en el primer año y llegan hasta el 111 por ciento después del primer lustro. Pero si se tiene paciencia, es posible lograr una revalorización de hasta el 469 por ciento luego de diez años. Comparado con otros objetos de valor, los autos clásicos se convirtieron en una opción segura de negocio, que deja atrás a otros negocios de coleccionistas e inversores. En una década, el oro se ha revalorizado en un 254 por ciento, seguido por las obras de arte (226 por ciento), las monedas (221 por ciento) y las estampillas (195 por ciento). Para la misma consultora, los autos más buscados por su revalorización son modelos de Ferrari y Porsche de los años 50 y 60, ya que entregan mayor rentabilidad en menor tiempo. Hoy adquieren mayor relevancia los concursos de elegancia, reuniones de autos clásicos en donde se premia el estado de originalidad de los vehículos y su exclusividad. Los más famosos son los de Villa D’Este, en el norte de Italia, y el de Pebble Beach, en la Costa Oeste de los Estados Unidos. Miles de personas asisten cada año a estos eventos en donde la aristocracia se mezcla con los amantes de los automóviles y los hombres de negocios. En los últimos años, las principales casas de subastas del mundo se asociaron con estas reuniones y en forma paralela realizan remates con recaudaciones millonarias. En uno de estos encuentros se vendió, por

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ejemplo, en 2015, una Ferrari 290 MM, una unidad que perteneció a Juan Manuel Fangio y que fue fabricada en su honor después de lograr el campeonato de Fórmula 1, en 1965. Un comprador anónimo pagó 28 millones de dólares. Un año más tarde se pagaron 38,1 millones de dólares por una Ferrari 250 GTO Berlineta, de 1962, promocionada en su momento por la casa encargada de la subasta como “el Santo Grial para los coleccionistas del mundo entero”. Series especiales, ediciones limitadas y pocas unidades fabricadas son características que deben tener estos incunables del mundo del automóvil, descartando su originalidad y su impecable estado de conservación. Pero la “moda” de los clásicos hoy excede a los autos antiguos. Los fabricantes entendieron que atacar esa memoria emotiva les podía traer buenos réditos y no se equivocaron. Las versiones actuales de modelos como el Mini Cooper, el Volkswagen Beetle o el Fiat 500, entre otros, son un éxito en todo el mundo. Y comparten una característica del pasado que hoy cambió de sentido: las versiones originales de estos modelos aparecieron como vehículos económicos y populares; hoy los venden como exclusivos gracias a esa nostalgia.

CARICIAS A LA NOSTALGIA Por supuesto, hay marcas que intentan profundizar el vínculo con sus clientes directamente con sus historias. Mercedes-Benz, Porsche o BMW cuentan con una división de clásicos. Por un lado, se dedican a conservar el patrimonio rodante de la empresa, que es utilizado en distintos tipos de exhibiciones, y, por el otro, a


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restaurar y a reparar los ejemplares de los clientes. Cuentan con talleres especiales y un stock increíble de repuestos de prácticamente todos sus modelos. Es más, BMW inauguró el año pasado un edificio restaurado de 13.000 m2, dedicado exclusivamente a su división de clásicos. Además de sostener sus talleres de mantenimiento y reparación, Porsche ha comenzado a integrar nueva tecnología a modelos del pasado. Por ejemplo, a los modelos 911 de la primera generación, incluso a unidades de mediados de los 90, se los puede equipar con un sistema de navegación con pantalla táctil de 3,5 pulgadas, pero con las clásicas dos perillas y seis botones que lo caracterizaban; bien retro. Land Rover y Jaguar, actualmente bajo un mismo paraguas empresarial, en cambio, abrieron dos nuevas variantes. Land Rover, bajo su programa Reborn (Renacido) restaurará diez ejemplares de la primera serie del Range Rover y así se podrá estrenar un clásico como si fuese un vehículo nuevo. Un Reborn costará desde 135.000 libras esterlinas, prácticamente lo mismo que lo

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que cuesta una de las versiones más caras y potentes del Range Rover actual en Inglaterra. La variante Jaguar es más osada. Se trata de fabricar hoy modelos del pasado, respetando los materiales y los procesos de producción de épocas pasadas. En 2014 se fabricaron las seis unidades restante del E-Type Lightweight, un proyecto de principios de los años 60 que contemplaba 18 ejemplares pero que quedó trunco. Debido a su éxito, la marca británica redobló la apuesta con el XKSS de los años 50. La historia cuenta que 16 unidades de las 25 previstas se vendieron a clientes europeos. Las otras nueve, que estaban listas para exportarse a los EE.UU., se perdieron en el incendio de la planta de Browns Lane. El año pasado Jaguar tomó la decisión de fabricar esas que se perdieron en el siniestro, un poco para honrar a su historia y otro mucho para hacer negocios: cada ejemplar costará un millón de libras esterlinas. ¶



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ILUSTRACIĂ“N Ariel Escalante

Aros de oro amarillo y perlas doradas del mar del Sur, Jewelmer. Collar de oro amarillo y perlas doradas del mar del Sur, Jewelmer.


S/O ARMONÍA

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