Decoración exterior de la Catedral de San Basilio La decoración exterior de la Catedral de velo de protección nunca falla incitar a nuestra imaginación con su riqueza de formas y su armonía. Numerosos esfuerzos de reparación, reconstrucción y restauración llevado a cabo en la Catedral a lo largo de los siglos introdujeron ciertos cambios e incorporaciones a su decoración original. Era al mediados del siglo XVI que este " la iglesia maravillosa de piedra " fue construido de piedra roja de ladrillo y blanca. Sus fachadas fueron pintadas para imitar el enladrillado; esta pintura que cubre protegido la superficie de las paredes de exposición atmosférica. La decoración de la catedral es de ladrillos y de piedra combinada con la cerámica policromo. Al principio, su modelo ornamental era principalmente geométrico, destacando formas talladas, cornisas, ménsulas, shirinkas (rectángulos hundidos con la frontera formada), semicolumnas en miniatura, y también formó pedazos en forma de estrellas, cruces, rombos, y triángulos.
Las hileras superiores de las iglesias de la catedral son decoradas con los cinturones de kokoshniki semicircular (arcos de ménsula) de proyección de tamaños diferente de las paredes. Por lo general, los arreglan la manera de tablero de damas. El kokoshniki, aproximadamente trescientos en el número, crea un juego especial de luz y sombra, proporcionando una mirada ligera y festiva a la estructura entera. Hábilmente combinando los elementos decorativos de una forma similar, los maestros de obras antiguos dieron cada una de las iglesias de la catedral un aspecto único todo su propio. El empleo de tales elementos decorativos en varias combinaciones presta el edificio una unidad que es realmente integral y entera. Las fachadas de la Iglesia del Velo de Protección de la Madre de Dios fueron decoradas con azulejos policromo de cerámica. Bastantes detalles de la decoración de azulejo antigua de la catedral han llegado hasta nosotros en réplicas posteriores. Las formas de azulejos individuales son bastante únicas - "discos", "estrellas", "lenguas", y también azulejos en la forma de puntas de flecha y pelotas. La decoración embaldosada se destaca vistosamente en el contexto de las gracias de enladrillado a sus cristales azules, amarillos, marrones y verdes.
En el siglo XVII, el carácter de la decoración pintada de la catedral cambió. El modelo austero geométrico ornamental fue
decorado con colores: la galería externa y los pórticos fueron adornados por el modelo multicoloreado foliate. La combinación de colores de la nueva decoración pintada tenía mucho en común con él de la decoración embaldosada. En el siglo XVII, las azoteas de la galería de tiovivo externa y la Iglesia de San Vasily el Bendito fueron cubiertas del policromo azulejos de mirada ausente y las azoteas de cadera decorativas de los pórticos y la azotea tented del campanario, con el embaldosado verde. Uno de los elementos más vivos de la decoración de la catedral es sus domos formados. La forma de cada domo y el color de su capa es absolutamente única, haciendo la catedral más famosa de Rusia inequívocamente reconocible. El trabajo para restaurar la decoración original de la Catedral del Velo de Protección comenzó en el tardío siglo XIX y siguió durante cien años. Varias generaciones de arquitectos y restauradores exploraron la historia del monumento y lo restauraron a su antiguo esplendor.
Decoración interior de la Catedral de San Basilio Las pinturas que datan a partir de los períodos diferentes que han sido conservados en el interior de la catedral le dicen sobre varios períodos de su existencia sobre su historia de más de cuatro siglos de largo. Las pinturas más tempranas de la pared, remontando al siglo XVI, fueron ejecutadas usando la técnica de fresco que produce un efecto de enladrillado de imitación. Posteriormente ellos fueron ocultados bajo pintado acoda el datar a partir de períodos posteriores. En el proceso de restauración, pinturas de la pared hechas imitar el enladrillado fueron destapadas y restauradas en la Iglesia de San Alexander de Svir y, en parte, en la Iglesia del Velo de Protección de la Madre de Dios.
Las pinturas que datan del siglo XVII han sobrevivido sobre las paredes y las bóvedas de las galerías interiores y externas de la catedral.
Como consecuencia de la restauración hecha en los años 1920 y años 1930, los interiores de cuatro iglesias - la Iglesia de la Trinidad Santa, la Iglesia de la Entrada del Lord en Jerusalén, la Iglesia de San Varlaam de Khutyn, y la Iglesia de San Gregorio el armenio fue restaurado como una muestra de siglo XVI el tratamiento arquitectónico. Ningunos restos de pintar el datar a partir de aquel período han sido encontrados en ellos. Las paredes de las iglesias son cubiertas de la cal, haciendo la riqueza de las formas arquitectónicas de las iglesias y la decoración claramente vista.
Evolución de la Catedral de San Basilio
Por qué es considerada como una maravilla del mundo El año 1990 marcó un hito en la historia del museo: la Catedral de San Basilio fue incluida en la lista de los monumentos considerados Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y situados en el territorio de Rusia.
En la Catedral del Manto de la Virgen se celebran oficios religiosos y se honran especialmente
las
festividades
del Manto
de
la Virgen
y de
San Basilio.
Entre 2001 y 2011 se llevó a cabo una completa restauración de 7 capillas de la Catedral, fueron renovadas las pinturas de la fachada y parcialmente la pintura a témpera de la galería interior. En 2007, la Catedral del manto de la Virgen ganó el concurso de las “7 maravillas de Rusia”. Por su gran Historia es considerada como una Maravilla del mundo. La simbología del primer edificio: la Nueva Roma y la Jerusalén celestial
El edificio que hoy admiran los turistas adquirió su aspecto actual en el s. XVIII, cuando, tras un gran incendio, fue restaurado y acogió los altares de otras 15 pequeñas iglesias que se quemaron en la Plaza Roja. En el incendio perdió sus16 cúpulas menores. Fue durante esta restauración que el templo adquirió su característico policromado. Pero durante el siglo XVI y XVII el edificio era más grande. En realidad, primero, Iván el Temible edificó varios templos de madera dedicados a los santos en cuyos días él había obtenido victorias considerables sobre los tártaros. Más tarde, el metropolita Macario propuso construir un único templo con ocho capillas coronadas por el chapitel del Manto de la Virgen, que es lo que se realizó.
En la composición de la catedral del Manto de la Virgen se recoge toda la trama profunda de la Salvación: desde la Entrada del Señor a Jerusalén, donde Él redimirá a la humanidad , la reunirá en una Iglesia Santa fundada por Él, bajo la protección de la Santísima Virgen que intercede ante el trono de la Santísima Trinidad, y a través de la Iglesia se abrirá el camino al Reino de la Santa Trinidad, la Jerusalén Celestial. Se buscaba plasmar la idea nacional de Moscú como una Tercera Roma (después de la italiana y de Constantinopla), representada en la imagen arquitectónica de la nueva Jerusalén, el Reino de Dios descrito en el Apocalipsis de San Juan. No sólo era un lugar para culto, era un icono en sí hecho en piedra. El ocho y el cuadrado: simbología
Sus ocho cúpulas rodeando al chapitel central formaban en el plano dos cuadrados superpuestos recordando una estrella de ocho puntas. El ocho es el número que simboliza “el octavo día”, el día de la Resurrección de Cristo, y el Reino de los Cielos ( “el reino del siglo octavo”, o “el reino octavo”) que llegará tras la segunda venida de Cristo, después de que termine la historia terrenal, unida al número apocalíptico 7. El cuadrado representa la firmeza y constancia de la fe y simboliza el Cosmos, sus cuatro lados iguales representan cuatro partes del mundo, cuatro vientos del universo, cuatro puntas de la cruz, cuatro evangelios canónicos, cuatro evangelistas, cuatro muros equiláteros de la Jerusalén Celestial. Los cuadrados sobrepuestos significan la proclamación de los Evangelios a los cuatro vientos, o sea, a todo el mundo. La estrella de ocho puntas nos recuerda también la Estrella de Belén que indicó a los Reyes magos el camino hacia el Niño Dios, Salvador del mundo, y simboliza a toda la Iglesia cristiana como una estrella guía en la vida humana hacia la Jerusalén Celestial. La estrella de ocho puntos además es el símbolo de la madre de Dios, la reina de la Iglesia y de los Cielos. En la iconografía ortodoxa la Virgen está representada cubierta por un maforio (como se llama el manto que cubre la cabeza y los hombros) con tres estrellas de ocho puntas, en los hombros y en la frente, como recuerdo de su virginidad antes, durante y después de dar a luz a Cristo.