Revista vida pastoral

Page 1


Edita:

Créditoss

Año 2 - N° 8 - Octubre / Diciembre 2013

Sociedad de San Pablo-Venezuela Director: P. Ángel Vagnoni, ssp Director Ejecutivo: P. Gustavo Nova Nova, ssp

Colaboradores: +Jorge Urosa Savino, Cardenal Arzobispo de Caracas Mons. Diego Rafael Padrón Sánchez Arzobispo de Cumaná Presidente de la C.E.V. + Baltazar Enrique Porras Cardozo Arzobispo Metropolitano de Mérida Mons. José de la Trinidad Valera Obispo de Guanare P. Gustavo Nova Nova, ssp P. Ángel Vagnoni, ssp P. Andrea Bignotti Hno. Bernardo Favaretto Diseño y Diagramación: Adrián Rodríguez Publicidad: San Pablo Marketing Correo electrónico: vidapastoral@sanpablo.org.ve Imprime: La Bodoniana Depósito Legal: pp201102DC3841

© SAN PABLO

Ferrenquín a La Cruz de Candelaria Edif. Doral Plaza, Local 1 Apartado 14.034, Caracas 1011-A, Venezuela Telfs.: (0212) 576.76.62 - 577.10.24 Fax: (0212) 576.93.34

Nuestra p o r t a d a

2

Editorial

Feliz Navidad, a la luz de la fe

6

4

Magisterio

Anuncia el Evangelio de Jesucristo

Pastoral

10

La Encíclica que ilumina el mundo

16

Pastoral El Beato Alberione

20

Biblia

Dios, Padre de todos

28 Contenido Guías Homiléticas

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

1


Editorial

Feliz Navidad,

a la luz de la fe

E

n el cierre del año de la fe, en el cual los católicos fuimos convocados a su apertura por el papa Benedicto XVI y a cerrarlo por el nuevo papa, Francisco, en ambas convocatorias se conjuga el mismo fin y a la luz de la Palabra:

“Aquel que es la Palabra era la luz verdadera, que ilumina a todo hombre que viene a este mundo. En el mundo estaba; el mundo había sido hecho por él y, sin embargo, el mundo no lo conoció” (Jn 1, 7). Hemos llegado a la Navidad, tiempo de esperanza y de amor; pero también un tiempo para fortalecer la fe. Precisamente, este año de la fe, se nos invita a redescubrir en los signos navideños, los signos de la fe.

2

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

La Navidad tiene que ser, pues, un tiempo, propicio de fe. Porque se necesita la fe de aquellos pastores que se acercaron al pesebre a descubrir en el niño al Mesías esperando, después de ver la luz de la gloria de los ángeles. Se necesita el valor y constancia de aquellos magos de oriente que descubrieron la fe en la estrella que les guiaba, aun cuando en momentos se les desapareció y erraron el camino. La fe de José y María, quienes supieron acatar la voluntad de Dios que se hacía patente en su vida de manera misteriosa. Afrontaron las situaciones con presteza y valentía. Todo este tiempo, desde el inicio del Adviento hasta la Epifanía, engloba la vivencia de las virtudes teologales. Aquellas que vienen de Dios: Fe, esperanza y caridad.


Por eso, la Navidad, debe permitirnos vivir, celebrar y fortalecer la fe, que ayudará a disipar tanta oscuridad. Ahora, nos toca a nosotros, descubrir esos signos de fe, en este tiempo actual. La Navidad es actualizar también el amor de Dios. Por eso, no podrá haber Navidad sin la persona de Jesús. Y Jesús no puede nacer en un corazón que está ocupado por el odio o el rencor.

Es en la presencia del Niño de Belén, que podemos entender esa luz que resplandece y que permite que nos gocemos en el Señor y que seamos engrandecidos. Ese Niño quiere nacer en cada corazón, en cada familia, en cada uno de nosotros creyentes y aun en los no creyentes que se mueven de buena voluntad. Una luz resplandece en esta navidad cuando las familias esperan y celebran con fe. Esa luz resplandece cuando podemos estrechar las manos en reconciliación, cuando buscamos al que se ha alejado y nos dejamos encontrar por Dios. Tendríamos razones para temer y desconfiar, cuando vemos tanta incertidumbre y confusión; desacuerdos e injusticias; violencia y muerte. Sin

embargo, Jesús ha nacido, pero ahora nos pide a nosotros que seamos portadores de su amor y de su presencia. El mundo aún no conoce a Jesús, ese es nuestro compromiso creyente, que todos vayan al pesebre y encuentren a Jesús. La fe que profesamos y vivimos se traduce en amor. Que el amor sea noticia, que podamos abrazar y sonreír porque estamos convencidos. Deseo que esta navidad sea para todos un momento grande de encuentro con Jesús en los hermanos más alejados de nuestra vida, que las familias se reencuentren en el abrazo de reconciliación, que todos veamos a Jesús en los que sufren. Sepamos compartir nuestra vida y nuestra fe. ¡Feliz Navidad para todos ustedes, Hermanos y Hermanas en la fe! 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

3

E d i t o r i a l

El Papa Benedicto XVI en su carta Porta Fidei y el papa Francisco en la encíclica: Lumen Fidei, ambos nos han recordado la importancia de esa fe, y que bien se puede entender en este tiempo de navidad: “La fe crece cuando se vive como experiencia de un amor que se recibe y se comunica como experiencia de gracia y gozo. Nos hace fecundos, porque ensancha el corazón en la esperanza y permite dar un testimonio fecundo: en efecto, abre el corazón y la mente de los que escuchan para acoger la invitación del Señor a aceptar su Palabra, para ser sus discípulos” (Porta Fidei 7). En Lumen Fidei: La fe es un don de Dios ue debe ser alimentado y fortalecido… Quién cree ve (Lumen Fidei 7).

Editorial

Los signos de fe, iluminarán también nuestro momento. Intensifiquemos el encuentro con los demás, brindemos gestos de perdón, respeto y tolerancia. Aprendamos a aceptar y comprometernos.


El Papa Papa Francisco

envía Bendiciones

al 4to Congreso Americano “CAM 4 - Comla 9”

D

urante la Audiencia General en la Asamblea Anual de las Obras Misionales Pontificias en la Ciudad del Vaticano celebrada el pasado 17 de mayo de 2013, Su Santidad Francisco extendió un Bendición muy especial a la preparación y realización del 4to Congreso Americano Misionero “CAM 4 - Comla 9”. El Rvdo. P. Andrea Bignotti, imc, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias en Venezuela explica que: “cuando fue mi momento de saludar al Papa Francisco, le presenté el afiche oficial del Congreso, y le comenté que América y Venezuela se preparan para esta gran fiesta misionera. Una vez presentado el afiche, el Papa sonrió y dio su bendición para todos los que trabajan para el éxito de este momento de reflexión, celebración y compromiso misionero en el continente americano, para todo el mundo”.

Reflexión, celebración y compromiso misionero en el continente americano, para todo el mundo. 4

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


Orar con El Evangelio

A

de

Juan

l proclamar el “año de la fe”, Benedicto XVI proponía unos objetivos: “Adquirir una conciencia exacta de la fe, para reanimarla, para purificarla, para confirmarla y para confesarla” Porta fidei, 4). Ahora, para cerrar el “año de la fe”, el papa Francisco, nos brinda otro documento, escrito a “cuatro manos”, pues es obra suya y de su predecesor. En esta su primera encíclica, el papa escribe: “La fe es la respuesta a una Palabra que interpela personalmente” (Lumen Fidei, 8). Esta Palabra la encontramos en la Biblia, y muy especialmente en los evangelios. Al comenzar el “año de la fe”, nos propusimos ayudar a realizar un acercamiento más profundo a cada uno de los evangelios. Lo hemos querido hacer en una actitud orante. El Espíritu Santo, que guió a los autores para transmitirnos la Palabra de Dios, ha de guiarnos también para leerla, escucharla, gustarla, asimilarla y anunciarla. Hemos publicado: ORAR CON EL EVANGELIO DE MARCOS; ORAR CON EL EVANGELIO DE LUCAS; ORAR CON EL EVANGELIO DE MATEO. Presentamos ahora: ORAR CON EL EVANGELIO DE JUAN. Cada evangelista ofrece su peculiar forma de acercarse a Jesús. A su vida, a la Buena Noticia que anunció, a los “signos” maravillosos que realizó, al misterio de su muerte y resurrección. El evangelio de Juan se abre con un himno, que revela algunas de las claves para entender su contenido. Encontramos tres “signos” reveladores de Jesús: Es Palabra, Vida y Luz. Estaba junto a Dio, se hace presente en la historia humana por la encarnación, y retorna junto a Dios. En torno al término “hora”estructura el evangelista la vida de Jesús. La primera parte suele llamarse “Libro de los signos”. A través de siete hechos maravillosos, que el evangelista llama “signos”, y con una serie de discursos que con frecuencia los acompañan, el evangelista revela la novedad radical de la presencia de la Palabra “hecha carne” en medio de la humanidad. Por medio de estos “signos”, Jesús se revela, como “vino mejor” de la alianza de Dios con la humanidad”; “templo” en el que “habita corporalmente la divinidad”; “surtidor de agua viva”; “pan de vida; “luz del mundo”; “resurrección y vida”. Jesús reivindica constantemente su condición de “enviado” del Padre, de “rey”, de“Mesías” y de “Hijo de Dios”. El amor constituye el núcleo de su mensaje. Se puede resumir

perfectamente en esta frase: “Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único, para que quien crea en él no muera, sino tenga vida eterna” (Jn 3,16). La segunda parte suele titularse: “Libro de la gloria”. Se inicia con la cena pascual, seguida de un largo discurso, y concluye con la pasión, muerte y resurrección de Jesús. En todo momento Jesús manifiesta su “señorío”. Con razón se puede titular el relato de la pasión: “Gloriosa Pasión de nuestro Señor Jesucristo”. El evangelista ha dejado claro al final su propósito: “Jesús hizo en presencia de sus discípulos muchos más signos que los recogidos en este libro. Éstos han sido escritos para que crean que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengan vida eterna” (Jn 20,30-31). Esperamos que ORAR CON EL EVANGELIO DE JUAN, tenga tan buena acogida como los evangelios de Marcos, Lucas y Mateo. Confiamos haber ayudado a profundizar en la fe en Jesús, para que, después de haber orado y degustado en la oración los evangelios, sintamos la urgencia de anunciar la Buena Noticia de Jesús a toda persona, hasta el último rincón del mundo. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

5


Magisterio Anuncia el Evangelio

de

Jesucristo

para multiplicar los Discípulos Misioneros dispuestos a realizar en todo momento y lugar “Ad Gentes” la misión

C

P. Andrea Bignotti i.m.c. - Director de las OMP en Venezuela

uantos acontecimientos eclesiales y pastorales hemos venido celebrando en estos últimos años y todos muy abundantes en orientaciones teológicas (CPV- DA- MC- JMJ-4CAMCOMLA). A veces hemos caído en la trampa de la novedad, hemos pasado de uno a otro y con muchos gastos, tragando discursos, comiendo demasiado, no nos hemos alimentado verdaderamente, porque no hemos tomado el tiempo suficiente para saborear, asimilar y digerir esta abundante comida…

6

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

Yo pienso que, a menudo, gastamos mucho tiempo en auto contemplaciones y alabándonos fácilmente. Corregimos según criterios formativos rígidos, cortando muchas veces la creatividad y el camino pastoral y educativo. Hoy, más que nunca, estamos llamados a prepararnos y capacitarnos a ser Discípulos Misioneros dinámicos y decididos a hacer frente a un mundo cambiante en este tercer milenio. El mismo Juan Pablo II, más allá de muchos textos bíblicos, del Vaticano II, en el documento el


Para ser verdaderamente cristianos hay que ser misioneros y vivir según el estilo de la vida y la

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

7

Magisterio

misión de Jesucristo (2Cor 5,17). Hay que dar razón de nuestra fe, pasar haciendo el bien, sembrando esperanza en los hombres y mujeres de nuestro tiempo y compañeros de camino (Hech 10,38; 1Pe 3,15). Como lo hizo Jesús, Pedro, Pablo y otros, también nosotros somos responsables de la salvación y santificación de nuestros hermanos, confirmándolos en la fe (Lc 22, 30ss). Más que vivir una religión de fachada, de tradición, de conservación y de privilegio, debemos vivir una religión profética, testimonial, y samaritana, siendo hombres y mujeres decididos a hablar y no callarnos la boca, a obedecer a Dios y no a los hombres, dispuestos a proclamar su amor y vida

M a g i s t e r i o

“Tercer Milenio Ineunte” nos animaba y exhortaba a “remar mar adentro” y “desentumecer nuestras piernas, pero sobre todo la mente, el corazón y la conciencia, lanzándonos en una decidida evangelización (Lc 5, 5 Flp. 3,8-14). Frente a tantos desafíos y urgentes necesidades, no podemos seguir estando cómodos e indiferentes, sino hacer la experiencia vital y única de anunciar el evangelio y del gozo de creer. El Papa Pablo VIº nos recordaba que la verdadera alegría viene del testimonio profético (E.N. 80 RM.42).


Magisterio

en la gran asamblea del pueblo de Dios (Hech 5, 30-32; Sal 40 (39) 7-11 y Hech 1,8). Hay que ir más allá de los piadosos deseos, las emociones y la elocuencia, siendo significativos con el anuncio y el testimonió. Estemos siempre dispuestos como Cristo, los Apóstoles, los grandes misioneros y los Discípulos de todos los tiempos a anunciar con valentía y prosecuciones la Palabra de Dios y de vida (2Tim 4,2-4). Desde hace mucho tiempo hemos separado la Pastoral, tarea de los diocesanos, de la Misión, tarea de los Religiosos. Además, seguimos privilegiando una pastoral conservadora, de “servicios” y “devociones” sobre la pastoral de compromiso misionero y la construcción del reino de Dios; se sigue delegando a los Institutos Misioneros la responsabilidad de la evangelización, estando demasiado preocupados por la Misión intergentes, marginando y aplazado la “ad Gentes”. Se haría necesario un Proceso de Conversión, como nos ha dicho Aparecida; se trata de “nacer de nuevo”, estando dispuestos a las escucha de las llamadas del Espíritu con una atención nueva a los “signos de los tiempos”; se trata de una “conversión del corazón y de la vida para la misión del Reino”. Esta conversión debe llevar la iglesia a ser nueva en los objetivos, en los métodos, en las opciones, en la espiritualidad, es decir, una verdadera conversión pastoral y renovación misionera. El Papa Juan Pablo II nos recuerda en la R.M. que la Misión ya no es sólo dar o recibir sino compartir a todos los niveles, educar las conciencias a la solidaridad, pastoral, eclesial y universal (Hech 20,35 RM 81 y 85 RM 58). La obediencia fiel y dinámica al Espíritu que la conduce, debe llevar la iglesia a una renovación eclesial que implica reformas espirituales, pastorales y también institucionales (DA 387) Ya en otros tiempos el Papa Pablo VI, al cerrar la exhortación apostólica “Evangelii Nuntiandi” nos decía: “Sean testigos auténticos, servidores de la verdad y animados por el amor, sean discípulos misioneros con el fervor de los santos” y añadía algo mejor”. Conservemos, pues, el fervor espiritual. Conservemos la dulce y confortadora alegría de evangelizar, incluso cuando hay que sembrar entre lágrimas. Hagámoslo, como Juan el Bautis-

8

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

ta, como Pedro y Pablo, como los otros apóstoles, como esa multitud de admirables evangelizadores que se han sucedido a lo largo de la historia de la Iglesia, con un ímpetu interior que nadie ni nada sea capaz de extinguir. Sea esta la mayor alegría de nuestras vidas entregadas. Y ojalá que el mundo actual, que busca a veces con angustia, a veces con esperanza, pueda así recibir la Buena Nueva, no a través de desalentados y tristes evangelizadores, impacientes o ansiosos, sino a través de ministros del evangelio cuya vida irradia el fervor de quienes han recibido, ante todo en si mismos, la alegría de Cristo, y aceptan consagrar su vida a la tarea de anunciar el evangelio y de construir el reino de Dios (E.N. 80). Dejémonos iluminar, empapar e interpelar por su Palabra, Jesucristo, asumiendo una actitud dinámica y evangelizadora, pasando del recibir bonitas y emotivas palabras a ser palabras vivas, iluminadoras y transformadoras. Hay que estar en misión permanente y evangelizadora, proporcionando a todos un camino de fe, conversión, liberación y santificación. El mundo no necesita tanto de maestros sino de testigos y santos. Un amigo mío que hace años organizó y realizó el COMLA 3 en Bogotá , Colombia, me escribía esta hermosa y acertada reflexión.: “que el Cuarto CAM sea un Kairos Misionero para Venezuela y el Continente, pero añadió que siempre había deseado que después de tanta teología y la posible animación misionera, estimulada por los CAM-COMLAS, que han venido removiendo el piso eclesial, se llegara a una autentica evaluación de los aportes misioneros, incluso ad Gentes, con sus logros, dificultades y correctivos. Si no es así es que tal vez aun no nos hemos decidido a remar mar adentro, pasar a la otra orilla, a caminar barrio, ciudad, selva y llano adentro (Lc 5, 5; Mc 4,35). La Iglesia no ha respondido aún a cabalidad a lo fundamental de su existencia que es la misión de evangelizar y construir el reino de Dios (E.N. 14), más bien se ha limitado mucho en conservar la fe. No será que le falta un algo más y más chispa… En este sentido nos recuerda el Papa Pablo VI: “La asfixia espiritual en la que hoy se debaten tristemente dentro de la Iglesia Católica tantos individuos e instituciones, no tendrá quizás su origen en la ausencia prolongada de un auténtico espíritu misionero”.


Toda esta misión permanente y evangelizadora y la celebración del Cuarto Congreso Americano Misionero deben llevarnos a “reavivar la conciencia misionera de la Iglesia que peregrina en Venezuela y el Continente, para que puedan responder como Iglesias particulares con mayor generosidad y eficacia a los desafíos que el mundo de hoy nos plantea, siendo Discípulos Misioneros que anuncian la Buena Noticia en un mundo secularizado y pluricultural. Además, una vez bien estrenados y animados, sepan pasar a la otra orilla e ir más allá de las fronteras y ad gentes, haciendo realidad lo que dijo el profeta Isaías: “Anunciaran mi Gloria, Vida, Santidad, Palabra, a todas las naciones y Pueblos” (Is 66,19). ¡América Misionera ha llegado tu hora, comparte tu fe! ¡Venezuela, ha llegado tu hora, sé Discípula Misionera!

Magisterio

Aún no hemos tomado en serio el compromiso evangelizador, tarea de todo el Pueblo de Dios porque toda misión tiene origen trinitario y produzca luego en todas las personas, movimientos, parroquias, diócesis e iglesias un renovado espíri-

tu misionero y un efecto multiplicador y pastoral dentro de las comunidades cristianas.

M a g i s t e r i o

El Papa Benedicto XVI de visita pastoral en Asamblea de Aparecida afirmaba: “Ha llegado la hora para que las Iglesias de América se pongan decididamente en marcha hacia la Evangelización “ad Gentes”, porque es una exigencia que brota de su identidad, de su vocación universal y de la vida de su fe”. Una Iglesia debe ser misionera o no es Iglesia y así se dice de cada cristiano. No quiero aquí olvidar el mandato de Jesús en Mateo y Marcos que suena así: “vayan por todo el mundo, prediquen… no tema porque yo estoy con ustedes…y ellos salieron “(Mc 16, 20). Esta es una Hora Histórica, y la mies es mucha ( Lc 10, 1-3; Jn 4, 35 ). ¡América representa más del 70% de los Católicos en el mundo; es un Continente que ha recibido mucho, pero ha llegado la hora y es esta de “dar aunque desde su pobreza” (P 368)

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

9


Pastoral

Lumen Fidei

La Encíclica que Ilumina El Mundo

L

a primera encíclica de su santidad Francisco “Lumen Fídei” fechada el 29 de junio del mismo año. Lumen, Fidei - La luz de la fe, está dividida en cuatro capítulos, una introducción y una conclusión y será la iluminación ideal para concluir este año de la fe que estamos celebrando. La introducción ilustra los motivos en que se basa el documento: En primer lugar, recuperar el carácter de luz propia de la fe, capaz de iluminar la vida de la humanidad y, ayuda a distinguir el bien del mal, sobre todo en un momento histórico, en el que el creer se opone al buscar y la fe es vista como una ilusión, un salto al vacío que impide la libertad del hombre. En segundo lugar, quiere reavivar la percepción de la amplitud de los horizontes que la fe abre para confesarla en la unidad y la integridad. La fe, de hecho, es un

10

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

don de Dios que debe ser alimentado y fortalecido. “Quien cree ve”, escribe el Papa, porque la luz de la fe viene de Dios y es capaz de iluminar toda la vida del hombre que: procede del pasado, de la memoria de la vida de Jesús, pero también viene del futuro porque nos abre vastos horizontes, potenciados en el corazón de cada creyente, de cada comunidad familiar y de cada parroquia. El primer capítulo (8-22): Hemos creído en el amor (1Jn 4, 16). En referencia a la figura bíblica de Abraham la fe se explica como “escucha” de la Palabra de Dios, “llamada” a salir del aislamiento de su propio yo, para abrirse a una nueva vida y “promesa” del futuro, que hace posible la continuidad de nuestro camino en el tiempo, uniéndose así fuertemente a la esperanza. La fe también se caracteriza por la “paternidad”, porque el Dios que nos llama no es un Dios extraño, sino que es Dios Padre, la fuente de bondad que es el ori-


table amor por el hombre. También en cuanto resucitado Cristo es “testigo fiable”, “digno de fe”, a través del cual Dios actúa realmente en la historia y determina el destino final. Pero hay “otro aspecto decisivo” de la fe en Jesús: “La participación en su modo de ver”. La fe, en efecto, no sólo mira a Jesús, sino que también ve desde el punto de vista de Jesús, con sus ojos. Usando una analogía, el Papa explica, como en la vida diaria, confiamos en “la gente que sabe las cosas mejor que nosotros” - el arquitecto, el farmacéutico, el abogado -también en la fe necesitamos a alguien que sea fiable y experto en “las cosas de Dios” y Jesús

mente al Señor hace que al hombre estable, y lo aleja de los ídolos.

es “aquel que nos explica a Dios.” Por esta razón, creemos en Jesús cuando aceptamos su Palabra, y creemos en Jesús cuando lo acogemos en nuestras vidas y nos confiamos a él. Su encarnación, de hecho, hace que la fe no nos separe de la realidad, sino que nos permite captar su significado más profundo. Gracias a la fe, el hombre se salva, porque se abre a un Amor que lo precede y lo transforma desde su interior. Y esta es la acción

La encíclica se detiene, después, en la figura de Jesús, el mediador que nos abre a una verdad más grande que nosotros, una manifestación del amor de Dios que es el fundamento de la fe “precisamente en la contemplación de la muerte de Jesús la fe se refuerza”, porque Él revela su inquebran-

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

11

P a s t o r a l

Pastoral

gen de todo y sostiene todo. La fe es confiarse al amor misericordioso de Dios, que siempre acoge y perdona, que endereza “lo torcido de nuestra historia”, es disponibilidad a dejarse transformar una y otra vez por la llamada de Dios “es un don gratuito de Dios que exige la humildad y el valor de fiarse y confiarse, para poder ver el camino luminoso del encuentro entre Dios y los hombres, la historia de la salvación” (n. 14), como lo hiciera con el pueblo de Israel que confió en Dios, a pesar de todas las dificultades y contradicciones y superando las tentaciones de la idolatría. Y aquí está la “paradoja” de la fe: el volverse constante-


Pastoral propia del Espíritu Santo: “El cristiano puede tener los ojos de Jesús, sus sentimientos, su condición filial, porque se le hace partícipe de su Amor, que es el Espíritu” (21). Fuera de la presencia del Espíritu, es imposible confesar al Señor. Por lo tanto, “la existencia creyente se convierte en existencia eclesíal”, porque la fe se confiesa dentro del cuerpo de la Iglesia, como “comunión real de los creyentes “Los cristianos son “uno” sin perder su individualidad y en el servicio a los demás cada uno gana su propio ser. Por eso, “la fe no es algo privado, una concepción individualista”, sino que nace de la escucha y está destinada a pronunciarse y a convertirse en anuncio. En el segundo capítulo (23-36) su santidad Francisco demuestra la estrecha relación entre fe y verdad, la verdad fiable de Dios, su presencia fiel en la historia. “La fe, sin verdad, no salva, se queda en una bella fábula, la proyección de nuestros deseos de felicidad “ Y hoy, debido a la “crisis de verdad en que nos encontramos”, es más necesario que nunca subrayar esta conexión, porque la cultura contemporánea tiende a aceptar solo la verdad tecnológica, lo que el hombre puede construir y medir con la ciencia y lo que es “verdad porque funciona”, o las verdades del individuo, válidas solo para uno mismo y no al servicio del bien común. Hoy se mira con recelo la “verdad grande, la verdad que explica la vida personal y social en su conjunto”, porque se la asocia erróneamente a las verdades exigidas por los regímenes totalitarios del siglo XX Esto, sin embargo, implica el “gran olvido en nuestro mundo contemporáneo”, que - en beneficio del relativismo y temiendo el fanatismo - olvida la pregunta sobre la verdad, sobre el origen de todo, la pregunta sobre Dios. La encíclica subraya el vínculo entre fe y amor, entendido no como “un sentimiento que va y viene”, sino como el gran amor de Dios que nos transforma interiormente y nos da nuevos ojos para ver la realidad. Si, pues, la fe está ligada a la verdad y al amor, entonces “amor y verdad no se pueden separar”, porque sólo el verdadero amor resiste la prueba del tiempo y se convierte en fuente de conocimiento. Y puesto que el conocimiento de la fe nace del amor fiel de Dios, “verdad y fidelidad van juntos”. La verdad que nos abre la fe es

12

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

una verdad centrada en el encuentro con el buen Jesús, hecho realidad en el testimonio entregado por cada uno de nosotros sus seguidores. Aquí el Papa abre una amplia reflexión sobre el “diálogo entre fe y razón”, sobre la verdad en el mundo de hoy, donde a menudo viene reducida a la “autenticidad subjetiva”, porque la verdad común da miedo, se identifica con la imposición intransigente de los totalitarismos. En cambio, si la verdad es la del amor de Dios, entonces no se impone con la violencia, no aplasta al individuo. Por esta razón, la fe no es intransigente, el creyente no es arrogante, sino fraterno y convincente. Por el contrario, la verdad vuelve humildes y conduce a la convivencia y el respeto del otro. De ello se desprende que la fe lleva al diálogo en todos los ámbitos: en el campo de la ciencia, ya que despierta el sentido crítico y amplía los horizontes de la razón, invitándonos a mirar con asombro la Creación; en el encuentro interreligioso, en el que el cristianismo ofrece su contribución; en el diálogo con los no creyentes que no dejan de buscar, que “intentan vivir como si Dios existiese”, porque “Dios es luminoso, y se deja encontrar por aquellos que lo buscan con sincero corazón”. “Quién se pone en camino para practicar el bien - afirma el Papa - se acerca a Dios”. Por último, la encíclica habla de la teología y afirma que es imposible sin la fe, porque Dios no es un mero “objeto”, sino que es Sujeto que se hace conocer. La teología es participación del conocimiento que Dios tiene de sí mismo; se desprende que debe ponerse al servicio de la fe de los cristianos y que el Magisterio de la Iglesia no es un límite a la libertad teológica, sino un elemento constitutivo porque garantiza el contacto con la fuente original, con la Palabra del Maestro Jesús. El tercer capítulo (37-49): Transmito lo que he recibido (1 Co 15, 03). Todo el capítulo se centra en la importancia de la evangelización: quien se ha abierto al amor de Dios, no puede retener este regalo para sí mismo, escribe el Papa: La luz de Jesús resplandece sobre el rostro de los cristianos y así se difunde, se transmite bajo la forma del contacto, como una llama que se enciende de la otra, y pasa de generación en generación, a través de la cadena ininterrumpida de testigos de la fe. Esto comporta el vínculo entre fe y memoria, por-


2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

13

Pastoral

Hay, sin embargo, un “medio particular” por el que la fe se puede transmitir: son los Sacramentos, en los que se comunica “una memoria encarnada.” El Papa cita en primer lugar el Bautismo, que nos recuerda que la fe no es obra del individuo aislado, un acto que se puede cumplir solo, sino que debe ser recibida, en comunión eclesial. “Nadie se bautiza a sí mismo”, dice la carta encíclica. Además, como el niño que tiene que ser bautizado no puede profesar la fe él solo, sino que debe ser apoyado por los padres y por los padrinos, se sigue “la importancia de la sinergia entre la Iglesia y la familia en la transmisión de la fe.”

En segundo lugar, la Encíclica cita la Eucaristía, “precioso alimento para la fe”, “acto de memoria, actualización del misterio” y que “conduce del mundo visible al invisible,” enseñándonos a ver la profundidad de lo real. El Papa recuerda después la confesión de la fe, el Credo, en el que el creyente no sólo confiesa la fe, sino que se ve implicado en la verdad que confiesa: la oración, el Padre Nuestro, con el que el cristiano comienza a ver con los ojos de Jesús Maestro: el Decálogo, no conjunto de preceptos negativos, sino más bien un conjunto de indicaciones concretas para entrar en diálogo con Dios, “dejándose abrazar por su misericordia”, camino hacia la plenitud de la comunión con Dios. Por último, el Papa subraya que la fe es una porque uno es “el Dios conocido y confesado”, porque se dirige al único Señor, que nos da la “unidad de visión” y “es compartida por toda la Iglesia, que forma un solo cuerpo y un solo Espíritu”. Dado, pues, que la fe es una sola, entonces tiene que ser confesada en toda su pureza e integridad, “la unidad de la fe es la unidad de la Iglesia”; quitar algo a la fe es quitar algo a la

P a s t o r a l

que el amor de Dios mantiene unidos a todos los tiempos y nos hace contemporáneos a Jesús. Por otra parte, se hace “imposible creer cada uno por su cuenta”, porque la fe no es “una opción individual”, sino que abre el yo al “nosotros” y se da siempre “dentro de la comunión de la Iglesia”. Por esta razón, “quien cree nunca está solo”: porque descubre que los espacios de su “yo” se amplían en el otro y generan nuevas relaciones vitales.


Pastoral verdad de la comunión. Además, ya que la unidad de la fe es la de un organismo vivo, puede asimilar en sí todo lo que encuentra, demostrando ser universal, católica, capaz de iluminar y llevar a su mejor expresión todo el cosmos y toda la historia, unidad garantizada por la sucesión apostólica. El capítulo cuarto (n. 50-60): Dios prepara una ciudad para ellos (Hb 11, 16) Este capítulo explica la relación entre la fe y el bien común, lo que conduce a la formación de un lugar donde el hombre puede vivir junto con los demás. La fe, que nace del amor de Dios, hace fuertes los lazos entre los hombres y se pone al servicio concreto de la justicia, el derecho y la paz. Es por esto que no nos aleja del mundo y no es ajena al compromiso concreto del hombre contemporáneo. Por el contrario, sin el amor fiable de Dios, la unidad entre todos los hombres estaría basada únicamente en la utilidad, el interés o el miedo. La fe, en cambio, capta el fundamento último de las relaciones humanas, su destino definitivo en Dios, y las pone al servicio del bien común. La fe “es un bien para todos, un bien común”, no sirve únicamente para construir el más allá, sino que ayuda a edificar nuestras sociedades, para que avancen hacia el futuro con esperanza. La encíclica se centra, en los ámbitos iluminados por la fe: en primer lugar, la familia fundada en el matrimonio, entendido como unión estable de un hombre y una mujer, y, fundada sobre el amor en Cristo, promete “un amor para siempre” y reconoce el amor creador que lleva a generar hijos. Después los jóvenes: aquí el Papa cita las Jornadas Mundiales de la Juventud, en las que los jóvenes muestran “la alegría de la fe” y el compromiso de vivirla de un modo firme y generoso. “Los jóvenes aspiran a una vida grande - escribe el Papa -. El encuentro con Cristo da una esperanza sólida que no defrauda. La fe no es un refugio para personas miedosas, sino que ensancha la vida”. Y en todas las relaciones sociales: haciéndonos hijos de Dios, de hecho, la fe da un nuevo significado a la fraternidad universal entre los hombres, sino la experiencia de la paternidad de Dios, comprensión de la dignidad única de la persona singular. Otra área es la deja naturaleza: la fe nos ayuda a respetarla, a “buscar modelos de

14

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

desarrollo que no se basen únicamente en la utilidad y el provecho, sino que consideren la creación como un don”; nos enseña a encontrar las formas justas de gobierno, en las que la autoridad viene de Dios y está al servicio del bien común; nos ofrece la posibilidad del perdón que lleva a superar los conflictos. “Cuando la fe se apaga, se corre el riesgo de que los fundamentos de la vida se debiliten con ella”, escribe el Papa, y si hiciéramos desaparecer la fe en Dios de nuestras ciudades, se debilitaría la confianza entre nosotros y quedaríamos unidos sólo por el miedo. Por esta razón no debemos avergonzarnos de confesar públicamente a Dios, porque la fe ilumina la vida social. Otro ámbito iluminado por la fe es el del sufrimiento y la muerte: el cristiano sabe que el sufrimiento no puede ser eliminado, pero que le puede dar sentido, puede convertirlo en acto de amor, de entrega confiada en las manos de Dios, que no nos abandona, en este sentido, la fe está unida a la esperanza. Y aquí el Papa hace un llamamiento: “No nos dejemos robar la esperanza, no permitamos que la banalicen con soluciones y propuestas inmediatas que obstruyen el camino.”

Conclusión (N0 58-60): Bienaventurada la que ha creído (Lc 1, 45) Al final de la LF, el Papa nos invita a mirar a María, “icono perfecto” de la fe, porque, como Madre de Jesús, ha concebido “fe y alegría,” A Ella se alza la oración del Papa para que ayude la fe del hombre, nos recuerde que aquellos que creen nunca están solos, y que nos enseñe a mirar con los ojos de Jesús. Departamento Editorial San Pablo de Venezuela


2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

15


Pastoral P. Ángel Vagnoni, ssp.

El Beato

Alberione y la liberación de la mujer

E

“Te doy gracias mujer, por el hecho de ser mujer. Con la intuición de tu feminidad enriquece la comprensión del mundo y y contribuye a la plena verdad de las relaciones humanas”. (Juan Pablo II, Carta a las mujeres)

l Beato Santiago Alberione fue uno de los líderes religiosos más creativos e inconformistas del siglo XX. Nació en San Lorenzo di Fossano (Italia) el 4 de abril 1884 y falleció en Roma el 26 de noviembre de 1971, fue beatificado por Juan Pablo II, el 27 de abril de 2003 y el papa Paulo VI, por su parte, lo definió: “Una de las maravillas de nuestro siglo”. En uno de sus primeros libros “La mujer asociada al celo sacerdotal” que el joven cura Alberione escribió en el 1912, hay algunas afirmaciones sobre el rol de la mujer en la pastoral parroquial que aún tienen vigencia hoy, después de cien años. “Con este libro sobre la mujer, el inquieto cura Alberione, pretendió renovar medio y forma del ministerio pastoral para responder a las necesidades de los nuevos tiempos, pues él sabía bien que lo nuevo de ayer es lo viejo de hoy. Renovarse fue

16

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


El cura Alberione sí fue un convencido “Feminista” Sin lugar a duda, podemos afirmar que el Padre Alberione sí fue un feminista y muy convencido, en línea con el Gran Movimiento Femenino Católico al inicio del siglo XX, pero con algunas ideas propias muy claras referente a la participación de la mujer en la pastoral parroquial.

Vivir en continua renovación El inconformista cura Alberione, se declara abierto a la renovación asumiendo la “modernidad” (4) entendida como conjunto de instrumentos nuevos, “verbi gratia” la prensa que él asumiría como instrumento de evangelización. De hecho, y lo repetimos, el líder piamontés, desde los primeros años de sus experiencias parroquiales del 1908, que buscaba nuevos horizontes, nuevas oportunidades para avanzar en la conquista de nuevas metas: concientizar para una mayor cooperación entre hombre y mujer, sobre todo, en el ámbito de la pastoral parroquial. Esa era, según él, la nueva fórmula natural que el ministerio sacerdotal debería asumir para responder, con eficacia, a la exigencia de los nuevos tiempos. Más adelante el mismo Don Alberione, tuvo una visión del Maestro Divino que lo invitaba, entre otras cosas, a “vivir en continua conversión” (renovación) y él hizo de esa orientación todo un programa para su vida y para la de sus seguidores.

(1) Comentario de Ángel Colacrai es un estudioso del libro MA. (2) Cuando salió publicado el libro MA, en 1915, recibió muchas aprobaciones pero a la vez, también muchas críticas. Afortunadamente no llegó al conocimiento de la gente del “Santo Oficio”. (3). La sigla del libro: “La mujer asociada al celo sacerdotal” es: “MA” (4) En cambio el “modernismo”, era una corriente religiosa filosófica del inicio del siglo XX, condenada por el Papa Pío X, en 1907. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

17

Pastoral

Contenido básico de la obra “La mujer asociada al celo sacerdotal” Siguiendo los comentarios del Padre A. Colacrai se podría resumir el contenido de la obra MA (3) en la siguiente síntesis: *la relación entre hombre y mujer no se realiza sólo en el matrimonio, sino que también debe realizarse en una asociación apostólica entre la mujer y el sacerdote; *el trabajo pastoral tiene que renovarse adoptando la colaboración de la mujer, como el primer y más importante medio para llegar a la salvación del hombre; *la cura de las almas tiene que renovarse asumiendo la modernidad, entendida como un conjunto de instrumentos nuevos y eficaces en la actividad pastoral, como por ejemplo la prensa, para llegar a toda la sociedad de hoy que cada vez más y de manera hostil va separándose de la Iglesia.

El mismo autor de la “MA” nos lo aclara en su obra: “Desde hace varios años nos encontramos con un Movimiento Femenino, que apunta a extender e intensificar cada vez más su agitación… este movimiento feminista, ridículo y vanidoso, no permitió a la generalidad de la gente percibir otro que, bendecido por el Papa, inspirado por la religión y alimentado por la caridad se difundía cada vez más, haciendo bien en todas partes” (Cf MA, 28-29). Así que, de acuerdo a lo dicho por el mismo cura Alberione, en su época había dos Movimientos Feministas: uno extremista, socialista y masónico; y otro y moderado y cristiano. Al respecto, en el inicio del siglo pasado, estaba en boga entre los “Feministas” el siguiente dicho muy significativo: “Los hombres hacen las leyes y las mujeres las costumbres”. De acuerdo al pensamiento de Don Alberione, nadie duda de la enorme influencia que la mujer ejerce en la moralidad y como consecuencia la importancia de su misión moral con el hombre, con la familia y con la sociedad. De allí que el fin principal de un sano feminismo debería ser aquel de promover la moralidad de la mujer para facilitarle su importante misión en la sociedad.

P a s t o r a l

su reto y sigue siendo para los herederos de este texto: captando lo que en él hay de perenne, es preciso encontrar el medio y la forma para traducirlo en hechos hoy” (MA, pág 16) (1) Por su parte, Santiago Alberione, al inicio de su mencionado libro, así se expresa: “Al escribir, miré a lo útil, por tanto no me entretuve en lo que ya era conocido y practicado, en cambio me detuve más ampliamente en lo que convenía dar a conocer en aquel tiempo…” Y el mismo Padre Alberione, muchos años después de haber publicado el MA, (2) precisamente el primer de agosto de 1966, escribía textualmente: “El libro de ‘la mujer unida al celo sacerdotal’, lo escribí en el año l912 y reflejaba su tiempo; pero, en el conjunto, daba un poco de luz también para el futuro”.


Pastoral Una breve mirada a la historia Con el fin de confirmar la intuición alberioniana, intentamos ampliar el panorama del proceso de liberación de la mujer con una breve mirada a la historia, desde el final del siglo diecinueve hasta el inicio del veinte. La transición de la economía agrícola en la industrial al final del siglo XIX, modificó totalmente la situación social de la mujer, pues el fenómeno de la industrialización provocó novedosas transformaciones que abarcó también la institución familiar, modificando la tradicional distribución de roles de la mujer en el seno de la familia. A causa de la necesidad de mano de obra de la industria naciente, se comenzó a reclutar también a la mujer. Y ella trabajando extra-hogar y en la fábrica, donde vino a constatar, en carne propia, el trato de inferioridad social que daban a la mujer, sufriendo toda clase de explotación, con un trabajo inhumano, en deficientes condiciones higiénicas y con salario de hambre. Sin nombrar sus derechos políticos del voto, que en muchos países, le fue reconocido a la mujer sólo en la década de los cuarenta, es decir después de la Segunda Guerra Mundial. El primer movimiento feminista, como ya hemos indicado, se inició al inicio del siglo XX y tenía como gran ilusión: el principio de la igualdad de la mujer con el hombre, sobre todo en el puesto de trabajo y en la educación. Aquí entra en escena directamente el inconformista Don Alberione Precisamente en este contexto de injusticia, entra en acción el inquieto Santiago Alberione a favor de la mujer, sobre todo, en su participación en la pastoral parroquial. Pues él no estaba conforme con la marginación a que estaba sometida la mujer y lo denunció en su libro la “MA”, la manera como se les cerraba la participación en varios sectores de la vida social y eclesial. Por es la estimuló a asumir sus responsabilidades, sobre todo, en el ámbito eclesial, asociándola a la misión sacerdotal. De hecho el liderazgo alberioniano fue el mayor impulsor del Movimiento Feminista en el ámbito eclesial. Ya que el inquieto Don Alberione estaba convencido de que la mujer puede y debe por derecho, tener mayor participación en

la pastoral parroquial, desde el momento que ella es “una palanca potentísima para levantar el nivel religioso-moral”; pues le reconocía sus talentos especiales y valorizaba toda su gran potencialidad. En efecto en su breve experiencia de ministerio sacerdotal en 1908, en el pueblo rural de Narzole, constató la falta de la mujer en su actividad pastoral y, tan pronto le fue posible, en el año 1938 fundó una congregación femenina que se dedicara, a “full time”, a colaborar con la pastoral parroquial, llamada precisamente hermanas “Pastorcitas”. “Nuestra parroquia es el mundo” Las mujeres son mayoría absoluta entre los integrantes de las diez instituciones de la Familia Paulina, fundada por el Beato Alberione (5). Efectivamente seis de esas diez instituciones son integradas por sólo mujeres, tres por sólo hombres y dos por matrimonios. En su “Obra monumental”, el Padre Alberione trató de aplicar, en la medida de lo posible, el principio de colaboración entre hombre y mujer expuesta en su obra “MA”. Cabe señalar que las dos primeras congregaciones que él fundó: la Sociedad San Pablo y las Hijas de San Pablo en l914 y 1915 respectivamente, eran dos instituciones donde había mucha mística y colaboración entre ellos y ellas; usaban los medios más rápidos y eficaces para imprimir y repartir la Buena Prensa. Y ambas instituciones vestían un uniforme religioso muy sencillo y salían a la calle, sobre todo las monjitas, a distribuir la Palabra de Dios, utilizando los medios más rápidos de trasporte de la época: bicicleta motoneta, camioneta y hasta en lomo de mulas de acuerdo del mismo Padre Alberione, el cual puso en las mismas reglas de cada una de las dos mencionadas instituciones, la de asumir aquellos nuevo medios de comunicación para evangelizar, a medida que se inventaran (6). Además de las congregaciones nombradas, el Padre Alberione fundó otras, entre ellas, las Hermanas Pías Discípulas del Divino Maestro con las mismas características y entre otras finalidades, ofrecen la colaboración liturgia, las cuales, dicho sea de paso, este año están cumpliendo medio siglo de presencia en Venezuela. De manera que, todas las instituciones que integran la Familia Paulina, cada cual con su carisma

(5) Aquí en Venezuela están presentes sólo ocho de ellas. (6) Como es sabido, el Padre Alberione fue elegido en año 2003, desde la base, por “vox populi” Patrono del internet.

18

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


especifico, colaboran directa o indirectamente en alguna forma con nuestras parroquias aquí en “Venezuela”. De allí la expresión del Beato Alberione: “Nuestra parroquia es el mundo” y en la cabeza está el Papa. Hay que subrayar que Don Alberione, desde los inicios de su Obra, además de escribir su primer libro: “Apunte de teología pastoral” realizaba varias publicaciones periódicas dirigidas a los Sres. Párrocos y Agentes de Pastoral donde les presentaba con “prudencia” su nueva propuesta sobre el rol de la mujer en la pastoral parroquial y a la vez le solicitaba jóvenes para la vida consagrada para la Familia Paulina.

Conclusión

En la celebración del próximo Primer Centenario del inicio de la Familia Paulina, en el 2014, todos los seguidores de nuestro inconformista Fundador queremos reavivar nuestro carisma con fidelidad dinámica para seguir trabajando con siempre más fuerza por la noble desafiante causa de la igualdad de derechos entre los dos sexos, de acuerdo al legado que nos ha dejado el profeta Santiago Alberione. Precisamente uno de los objetivos de desarrollo de la ONU por este milenio es promover la igualdad entre sexos. Y muchas entidades colaboran con ese noble objetivo de la ONU. Hay también varias asociaciones católicas, verbi gratia, la “ONG Manos Unidas” que ha programado la campaña de este año 2013, en promover la igualdad de oportunidades entre hombre y mujer con el lema “No hay justicia sin igualdad”. No obstante la complejidad del problema, queremos concluir con un mensaje optimista del Beato Juan Pablo II, en su carta apostólica “Mulieris Dignitatem”, donde el Papa Wojtyla pone en evidencia un signo de los tiempos muy esperanzador: “Llega la hora, ha llegado la hora en que la vocación de la mujer se cumple en plenitud, la hora en que la mujer adquiere en el mundo una influencia, un peso, un poder, jamás alcanzado hasta ahora”. Pues “La Mujer podría tener el mundo en su mano” (MA, 107). Que la Virgen de Coromoto, nuestra Patrona y primera Mujer liberada, nos asista en la misión, de promover los sagrados derechos de la mujer según los planes del Creador. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

19

Pastoral

P a s t o r a l

La igualdad de sexos sigue siendo hoy aún un gran desafío Lamentablemente aún estamos lejos de conseguir la meta que se propuso el Padre Alberione, es decir un trabajo en sintonía entre hombre y mujer en la pastoral parroquial y aún más lejos está la paridad de derechos entre mujer y hombre, y el objetivo aún sigue siendo un desafío para la entera humanidad, no obstante los avances realizados en los últimos tiempos. Los abusos contra la mujer están diariamente en conocimiento de todos, a través de las redes sociales y otros medios de comunicación tradicionales. Todos nos enteramos con indignación de las injusticias, maltratos y discriminaciones, provenientes de donde aún impera el machismo impunemente. El problema de la liberación de la mujer se ha vuelto hoy también un problema social. Ya que el proceso de la verdadera liberación integral de la mujer ha sido o mejor dicho procede aún a pasos muy lentos, sobre todo en algunos continentes como el nuestro. De hecho en todos los documentos del CELAM, comenzando con Medellín, hasta Aparecida, pasando por Puebla y Santo Domingo, nuestros Pastores hablan de ellas como un aspecto del movimiento de liberación de los oprimidos, aún víctima de muchas discriminaciones y atropellos. “Es necesario, afirmaban nuestros obispos en Aparecida en mayo de 2007, que en América Latina y el Caribe, se superar una mentalidad machista que ignora la novedad del cristianismo, donde se reconoce y proclama la Igualdad de la mujer respecto al hombre” (AP, 453).


Biblia

E

A manera de introducción l papa Juan Pablo I al asumir su corto pontificado presentó a Dios como Padre y madre. Esa inspiración ha estado tomando fuerza y cada vez más está presente en la Iglesia cristiana la idea de un Dios Padre-Madre (πατέρα-mητέρα). Es el Dios que engendra vida1, el Señor Dios que modela y forma al ser humano y completa su acción insuflando su Espíritu para una vida en plenitud2.

Es el mismo Padre creador del universo, del ser humano, hombre-mujer, y que ha dado vida terrenal a su Hijo Jesús, el Señor3. Es la Paternidad universal que es el inicio de la unidad cósmica que se ha constituido la tierra madre de toda la humanidad, con la extraordinaria unidad en la diversidad que distingue cada pueblo y cada cultura. El evangelista Mateo, de formación rabínica e integrante de comunidades judío-cristianas, hace de la oración del Padre Nuestro una síntesis de la fe hebrea representada en la oración diaria del Sěmá Israel, (escucha Israel y no te olvide que fuiste esclavo en Egipto y el Señor te rescató). Es el escuchar, oír y proclamar la maravilla de la acción del Señor de la vida y rescatador del oprimido, que se expresa en el credo judío proclamado como oración diaria de la mañana, mediodía y tarde. La oración del Padre Nuestro es entonces una síntesis de las Sagradas Escrituras releídas por Jesús y realizada en su vida, muerte y resurrección. Vamos a reflexionar el texto evangélico del “Padre Nuestro” en Mt 6,9-13, la oración más presente en la vida cristiana de todos los días y explicada de múltiple maneras a lo largo de la historia del cristianismo pero, casi siempre, presentada en forma piadosa y literal y además con comentarios espiritual-teológicos y no propiamente bíblicos. Gn 1,1ss. Gn 2,7. 3 Jn 1,1ss. 1 2

20

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

Esta oración, a menudo, es una bandera para probar distintas posiciones eclesiales pero muy poco se ha desplegado sus contenidos auténticos que nacen desde el contexto de las Escrituras Sagradas. Parece ser que hay temor de romper los paradigmas tradicionales de la historia cristiana adoptando una traducción más cercana al sentido del texto original, él que quiso dar el redactor con su profundo arraigo a las enseñanzas bíblicas.

El Padre Nuestro (Wnybia’ - Pa,ter h`mw/n) Breve introducción a la lectura Bíblica Nos acercaremos al texto evangélico poniéndonos en sintonía de muchos hermanos/as latinoamericanos/as que encontraron y siguen encontrando, en el


Dios, Padre

de todos Hno. Bernardo Favaretto

El ver, juzgar y actuar tiene sus orígenes en el mismo ser del hombre al momento de reconoce un ser superior. Es una metodología que se expresa en un amor mezclado al temor que necesitamos para dar buen uso a la libertad que el Señor nos ha dado. La libertad que permite al hombre caminar hacia Él a través de errores y aciertos y a pesar de las injusticias y el dolor.

Podemos recordar la figura de Job, siervo fiel de Dios, que con el cumplimiento de la alianza “logró” los frutos de la ley: heredad y riquezas. Pero, solamente la pobreza total en la cual el Señor permitió que fuera sumergido, le facilitó un camino de fe total hacia el Señor. Dios es un Dios celoso y solo el desprendimiento de los bienes terrenales nos llevará a un camino de totalidad evangélica. La realidad de profundas injusticias a lo largo de generaciones sigue golpeando duramente nuestros pueblos. La marginación de muchos latinoamericanos, con particular gravedad para los indígenas y afro-descendientes, deja mal parado al cristianismo que prometió salvación y a cambio trajo sumisión y abandono. La única alternativa 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

21

B i b l i a

método del ver, juzgar y actuar, un camino de dignidad y compromiso cristiano. Y bien sabemos que es una práctica comunitaria que nace de la vida del que cree en la Palabra de Dios y respeta el entorno de la presencia creacional del Creador que nos puede facilitar un proceso de transformación en Jesús y junto a un auténtico acercamiento al Dios vivientes.

Biblia

Presidente de Sobicain (Sociedad Bíblica Internacional)


Biblia creíble para los cristianos de este continente pasa a través del respeto del ser humano con leyes justas para su desarrollo integral y una dignificación de sus orígenes a través de un caminar codo a codo con los excluidos. El método ver, juzgar y actuar adoptado primeramente por la JOC de Bélgica, se proyectó con fuerza en toda América Latina después de la Conferencia Episcopal de Medellín del 1968 con una característica propia: el uso de la Biblia como elemento de iluminación y liberación.

A. La realidad que nos envuelve (El ver) El enfrentamiento político y la insuficiente formación a los valores unidos a desequilibrios familiares y sociales han llevado a América Latina a sumirse en crisis cíclicas y divisiones marcadas en lo político como en lo social. Solo una acción mancomunada de todos los ciudadanos puede ofrecer esperanzas de una vida más humana y fraterna. Con frecuencia la vida cristiana se ejerce desde una vivencia superficial donde la devoción convive con las injusticias y la vida sacramentaria como tradición familiar sin consecuencias sociales significativas. Los momentos fuertes del año litúrgico son con frecuencias costumbres folclóricas con poca incidencia para un convivir fraternos. Parece ser que la práctica religiosa convive con la violencia sin un auténtico seguimiento de Jesús y el ejerció de la paz social. La Buena Noticia o Evangelio de liberación se traduce por la ley del que más puede. Percibimos que la vivencia de los cristianos latinoamericanos, la gran mayoría de la población, no es capaz de revertir la balanza hacia un mundo de justicia y convivencia solidaria. Dentro de la gran mayoría de los llamados fieles, milagreros y piadosos, existen grupos que actúan un cristianismo con entereza y profundidad aportando esperanzas pero todavía insuficientes para consolidar un piso duro de honestidad y justicia. A menudo los mismos pastores son parte de los poderes establecidos reduciendo así su credibilidad y mermando la capacidad de mover a una iglesia más comprometida y transformadora con

22

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

compromisos sociales en la actual situación crisis en que estamos sumergidos. Los buenos cristianos han multiplicados sus oraciones pensando que solo Dios será capaz de aportar soluciones a esta calamidad sin fin, pero sin una renovación cabal de la fe y una acción solidaria certera de gran utilidad para acompañar la providencia divina hacia los más desdichados y manifestar así el Dios de Jesús y su paternidad universal, el “Padre Nuestro”, el Padre de todo y no solamente un egoísta Padre mío. Creemos que la Palabra de Dios es la fuente de luz y puede llegar a ser espejo de nuestro hacer, ser la Palabra que nos lee y destraba la fuerza de liberación, la sola que puede acelerar una nueva creación, producir esperanza, ser otros Cristo vivo entre hermanos hijos de un mismo Padre Dios, capaces de enaltecer y dignificar el ser humano para así lograr un renovado camino de la liberación en su plenitud.

B. La Palabra de Dios que nos juzga 1. El “Padre Nuestro” en el Evangelio de Mateo 6.9-13 La oración del “Padre Nuestro”, según el evangelista Mateo, fue escrita a similitud y síntesis del


2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

23


Biblia semá Israel (Dt 6,4ss) una forma para recordar la obra creadora de Dios y redentora de Jesús. Es, por excelencia, la oración contemplativa del pueblo de Israel y Mateo se reconecta a ella a través de la fuente de piedad y sabiduría que contiene el libro de los salmos. El marco de la oración son las comunidades judeo-cristianas que trataban de vivir la vida de Jesús a través de la fe hebrea. Toda la historia de Israel estaba presente en los cristianos de origen judío. Ellos, en los años anteriores a la destrucción de Jerusalén y el Templo, solían unirse a los judíos piadosos para rezar, estudiar las Escrituras y cumplir con la ley. Eso sucedía en el mismo lugar de culto, que era el gran Templo de Herodes como en las sinagogas esparcidas en todo el territorio de Israel y de la diáspora. Después que los romanos arrasaron el Templo en el 70 d.C. los cristianos se dispersaron y formaron sus propias comunidades donde unían su fe judía con el seguimiento de Jesús. La lectura de la Torah y la vivencia de 613 preceptos de la fe hebrea se completaban con los recuerdos de la vida de Jesús, con especial énfasis a su muerte y resurrección: el kerigma fundacional. La gran preocupación, de las comunidades judíocristianas, consistía en facilitar la continuidad de su herencia hebrea, aun considerándose miembros auténticos del nuevo pueblo de Israel ahora representado en los seguidores de Cristo. Fueron comunidades que celebraron la muerte y resurrección de Jesús, acompañando sus reuniones con el canto de los salmos y haciendo memoria de los grandes acontecimientos de la historia de su pueblo, con particular atención a los profetas y a los sabios. La memoria, de las enseñanzas de Cristo, era recordada con la visión de la cultura religiosa judía y completada por la tradición oral y escrita de la Torah y de sus tradiciones. Las comunidades judío-cristianas se esmeraban en reinterpretar la Torah considerando las enseñanzas y la vida de Cristo, como era costumbre hacer en el pueblo hebreo. Así tenemos un Jesús que reencarna la historia de Israel, descendiente

24

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

de David, nacido en Belén, adorado por reyes por ser rey, perseguido y huésped en Egipto como lo fueron los patriarcas. Jesús es el nuevo rey para un reino de justicia y de paz. Podemos entonces afirmar que la oración del “Padre Nuestro”, atribuida a Jesús, no podía ser que la síntesis mas extraordinaria de la fe judía. Al menos así se fueron formando las tradiciones orales de las comunidades de Galilea y Siria recogidas por el evangelista Mateo. Veámoslas representadas en el texto de Mateo del capítulo 6 en los versos 9 al 13 y los versos 14 y 15 como un texto inclusivo. Siendo el “Padre Nuestro” un texto muy conocido por ustedes pueden percatarse de las diferencias entre la traducción que les propongo y el texto que rezamos todos los días. Más adelante explicaremos las distintas traducciones. El texto de Mateo de la oración del “Padre Nuestro” está enmarcado con un antes y un después: un antes que presenta escritos que sirven de introducción y un después unos textos que corroboran y consolida la oración. En el antes: Jesús después de escoger a sus seguidores demostró su poder y, a continuación los llevó en una montaña para entregar la nueva ley de las bienaventuranzas, de la misma manera que Yahveh hizo con Moisés (cfr. capítulo 5, 1-12). A continuación de las bienaventuranzas Mateo presenta tres temas: ser sal de la tierra,


Entonces la oración del “Padre Nuestro” está enclavada dentro de las enseñanzas de la Torah o Ley judía, por ser una oración de raíces de la fe judía.

El Padre Nuestro que rezamos en la Misa 6,9 Por eso oren así: “Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal”.

Traducción propia del Padre Nuestro 6,9 Por eso oren así: “Padre nuestro de los cielos, tu nombre siempre ha sido bendecido, 10 tu reino se ha revelado, tu voluntad se ha manifestado en el cielo y en la tierra, 11 nos da el pan nuestro necesario para el día de hoy 12 y nuestras deudas has perdonado como nosotros hemos perdonados a nuestros deudores, 13 y no permite que caigamos en la provocación y nos rescata del mal, AMEN”.

Biblia

El después: Después del texto del “Padre Nuestro” Mateo presenta el tercer elemento del judío piadoso: el ayuno (cfr. 6,16-18). Y Jesús subraya que el verdadero ayuno se hace en secreto como aconsejó hacer de la oración y la limosna. A la propuesta de un ayuno en secreto le sigue una serie de enseñanzas sacadas de las tradiciones hebreas hasta el final del capítulo seis y por todo el capítulo siete.

Ahora observen las dos traducciones; la primera versión es la que rezamos en la Eucaristía la segunda una traducción propia.

B i b l i a

ser Dios vivo, recuperar la justicia primordial (cfr. 5,13-48). Completa la preparación al “Padre Nuestro” las lecturas de la limosna y la oración en secreto (cfr. 6,1-5). Finalmente tenemos unas palabras que introduce la oración donde Jesús afirma que no son necesarias muchas palabrerías porque su Padre ya conoce cada una de sus necesidades.

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

25


Biblia Los versos 14 y 15 que están a continuación es un texto inclusivo, o sea, que no podemos excluir. Es la conclusión lógica de la oración del Padre Nuestro que tiene que llevar al perdón total y universal que reclama el amor a Dios y que es la demostración más genuina de la fe cristiana. Así lo traducimos: Ciertamente, si perdonan a los hombres sus obras malas les perdonará el Padre vuestro del cielo, 15 pero si no perdonan a los hombres tampoco el Padre vuestro les perdonará vuestras malas obras. 14

Comentario a la “novedosa” traducción La nueva versión es distinta pero está entre las posibles traducciones del texto griego, más cercana al original griego, sobre todo, dentro del paradigma de la cultura y creencias del pueblo hebreo. Según el evangelista Mateo Jesús nos estimula a orar de la manera tradicional judía, o sea, reconocer las maravillas que el Señor hizo con su pueblo durante toda su historia, que renovó en Cristo Jesús y, lógicamente, seguirá actuando en la historia de los hombres porque Dios es fiel, a pesar de nuestras infidelidades como lo afirma la Escritura en Ex 34,6-7ª: “Entonces pasó Yahveh delante de él y exclamó: “¡Yahveh, Yahveh! Dios compasivo y misericordioso, tardo a la ira y rico en amor y fidelidad; que guarda su benevolencia por mil generaciones”. Y la oración concluye con una declaración solemne, el amén que significa creo, un creo que corresponde a una actitud de vida, de vivencia. Es el mismo creo (amén) que dijo Abraham a las promesas del Señor en Gn 15,6: “Creyó Abrán a Yahveh, y Yahveh se lo tomó en cuenta como justicia”. Se inicia la oración alabando al Dios de los cielos, que viene de los cielos, que baja hasta no9-10

26

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

sotros y no, que está en los cielos como rezamos nosotros. Los verbos, bendecir, revelar, suceder, están en pasado (en aoristo) y no al presente como se traduce normalmente. No hay que orar porque esto suceda porque ya ha sucedido, sigue sucediendo y seguirá sucediendo. Lo que tenemos que hacer es creer en la acción continua de Dios para hacer parte, para movernos hacia esa realidad de la providencia divina. Dios no necesita nuestras peticiones. Si aconteció su voluntad en el cielo no puede dejar de suceder en la tierra. No es adecuado expresarnos en la manera como lo hacemos a la manera que siempre rezamos: hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo. Así mismo si siempre has entregado el pan de cada día (verbo al pasado aoristo) no puede no hacerlo ahora. En todos los textos bíblicos se destaca la acción paternal de Dios, una acción de exigencia por ser Dios Padre de todos.

11

El Señor nos perdonó y así seguirá perdonando, pero esto no lo hace en contra de nuestro querer. El deseo es expresado a través de nuestra determinación de conceder el perdón a los que nos causaron males y sufrimientos. Un perdón que es la expresión de nuestra fe en el amor de Dios Padre. 12

El Señor nos da la libertad de escoger pero, si nuestra voluntad está unida a la de Él no permitirá que el mal nos envuelva y nos esclavice. La sabiduría hebrea nos dice que Dios no puede impedir el mal con el propósito de rescatar a los seres humanos en situaciones de injusticia y dolores, sino nos fortalece para que consigamos evitar y vencer al mal. Lo cierto es que Dios nunca puede limitar la libertad del humano pero siempre está presente para salvar a quienes se ponen en camino hacia Él, de manera que la voluntad del hombre no sea rebasada por la voluntad del mal. 13


Aquí se expresan las exigencias y consecuencias de la proclamación del “Padre Nuestro” y se invierte la oración. Y nos recuerda que el perdón de Dios se da desde siempre y que ahora está en la espera de nuestra acción de misericordia para

En el Padre Nuestro testificamos que la condición indispensable para ser hijos de Dios es el perdón a los demás. Todo perdón de Dios es una nueva creación, y quién es perdonado por Dios es hombre nuevo, nuevo ser. Así el actuar como hijos de Dios es asumir la misma tarea original del Señor, ser creadores con Él y restablecer el orden primordial. Podemos decir que el perdón nos hace omnipotente por estar en sintonía con el Señor. Es una acción del amor y del poder de Dios que demanda volvernos misericordioso con el Señor. Si no se concede el perdón caemos en la desintegración y regresamos como sujetos de destrucción de lo creado. El Padre Nuestro es semejante a la confesión de fe de los israelitas, es el reconocimiento de la acción de Dios entre nosotros. Es el entrar en el plan de Dios y ser parte de su proyecto. Dios no necesita nuestras peticiones sino la entrega de nuestro ser.

Biblia

Los versículos 14 y 15 que están a continuación rezan: 14 Ciertamente, si perdonan a los hombres sus obras malas les perdonará el Padre nuestro del cielo, 15 pero si no perdonan a los hombres tampoco el Padre Nuestro les perdonará sus malas obras.

que sea efectiva la acción de Dios. Somos nosotros mismos que condicionamos o permitimos la acción sanadora de Dios.

B i b l i a

El amén final, que está en el Código Sinaítico del IV siglo de influencia hebrea, sella la oración con la fórmula de juramento sagrada, el AMEN. El amén es la aceptación total de la acción creadora y salvadora del Dios de la vida. Es la adhesión a la verdad más sagrada que es la presencia amorosa de Dios entre nosotros. Es la aceptación de la voluntad original de Dios que nos llamó a ser co-creadores con Él y, a su semejanza, imitadores del amor trinitario de Dios. El amén supremo se ha dado en Cristo alzado en la cruz para unir el cielo y la tierra y rescatarnos de la muerte.

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

27


Guías

Coordinación general: Monseñor Trino Valera, (Obispo de Guanare) Redacción: Equipo Paulino de Venezuela.

Homiléticas Octubre

Domingo XXVII del Tiempo Ordinario / C 6

de octubre de 2013

I. Introducción general Las lecturas de hoy nos llaman la atención sobre la fe, solicitada de parte de los discípulos por ejemplo, aumento de fe y la respuesta de Jesús es inmediata como de costumbre con dos parábolas: el grano de mostaza y el siervo fiel. Fe firme y fuerte fundamento de cuanto se espera como demostración de cuanto no vemos, pero que es evidente y produce resultados. Desde luego podemos correr el peligro de banalizar la fe cuando la reducimos o nos posesionamos en actitud de incredulidad. Los discípulos de aquel tiempo acre-

28

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

Aumenta nuestra fe ditaban las palabras y promesas del Reino que Jesús anunciaba, pero igualmente se declararon necesitados y humildemente solicitaron al dueño de la fe un crecimiento paulatino. Los seguidores de Jesús de ayer y de hoy recibimos por el bautismo la tarea de llevar adelante el proyecto de Jesús, aunque esto implique crisis y dificultades. Y de este coraje nos habla muy bien San Pablo en su exhortación a Timoteo a fin de que no eche en saco roto los talentos recibidos del buen Dios.


(Hab 1,2-3;2,2-4) Habacuc es la impunidad de los malvados y opresores dentro del pueblo elegido. El profeta reclama a Yavé el estar cerrando los ojos a la injusticia y de olvidar los gritos de socorro contra la violencia; su osadía está en discutir con Yavé lamentándose de que Dios no intervenga a favor del orden. Pero de esa manera Dios se convierte en íntimo con Dios y nada hace sin comunicarlo primero a los profetas. Dios asegura al profeta Habacuc la disposición de tomar carta y castigar las injusticias mediante la invasión de los caldeos. Pero Habacuc se pregunta si se resuelve la opresión con otra clase de opresión. La preocupación primordial es la acción de Dios en la historia, pues no se trata de desviar la opresión sino de eliminarla definitivamente. La violencia engendra violencia, decía el Papa Paulo VI. El curso de la acción de Dios en la historia parece ir hacia un callejón sin salida, por eso el profeta contesta y pide explicaciones, pero a la vez entiende y espera en la bondad. Asume la actitud de un centinela en la muralla, pronto a comunicar al pueblo las decisiones de Dios, reconoce que todo se puede y que ninguno de los proyectos queda sin realizarse cuando van con Dios y en el camino de Dios. El proyecto de Dios se realizará siempre, solo que el profeta debe ser audaz y explicito, pues verá con certeza y sin demora los resultados. El malvado y arrogante no tendrá la palabra final, porque no es recto, mientras las persona íntegra vivirá por su fidelidad, porque Dios es conductor de la justicia y de sus proyectos.

2ª Lectura (1Tim 1,6-8.13-14) San Pablo dirige a Timoteo, uno de sus grandes colaboradores, una exhortación a luchar por el Evangelio, tanto hasta sufrir en el ejercicio del ministerio al que ha sido llamado por el mismo Dios gratuitamente y al que debe ser fiel hasta el final, pero con la seguridad del Espíritu Santo. Esto es posible si Timoteo reaviva el don de Dios,

Fe, que desde luego recae primero en los ministros ordenados quienes han recibido la imposición de las manos, pero también es responsabilidad de cada creyente en la media en que asume la defensa de la religión como el mejor tesoro que tiene en la vida…

Evangelio (Lc 17,5-10) “Auméntanos la fe” Los apóstoles han comprendido que su fe no es suficiente y que esta fe es un don. Se trata de acoger con disponibilidad el regalo que el Padre celestial ha sembrado en nosotros para que lleguemos a dar el fruto que debemos. Es aceptar con nuestra vida el misterio del Dios que se revela en Jesús, valorar lo que él valora y como él lo valora, traduciéndolo en una conducta consecuente. Esta petición de los apóstoles nos sitúa en el centro de toda la oración cristiana. Pedirle a Jesús que nos aumente la fe es pedirle algo muy serio y arriesgado. No es pedirle capacidad para aceptar intelectualmente algo que no alcanzamos a entender y que afirmamos como revelado por Dios. Es pedirle capacidad de acción revolucionaria y liberadora que no deje las cosas como están; una acción que tenía entonces como riesgo la cruz, en la que se ajusticiaba a los zelotes. Todos los cristianos deberíamos hacer nuestra esta petición de los apóstoles, porque aguardamos de Jesús la fuerza necesaria para cumplir lo que nos pide, porque es el don fundamental de Dios sobre el que descansan los demás dones. “Si tuviera fe como un granito de mostaza, dirían a esa morera: ‘Arráncate de raíz y plántate en el mar’, y les obedecería”. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

29

Guías Homiléticas

1ª Lectura

porque no es posible vivir auténticamente y trasmitir el mensaje de Jesús, muerto y resucitado, si no se está dispuesto a morir como lo hiciera San Pablo, entregándose hasta derramar la sangre. Con esto nos propone el buen Dios el cuestionamiento de cuanto estamos dispuestos por defender la fe. El ministerio de todo bautizado exige abnegación, renuncia, fortaleza, sufrimiento y fidelidad al depósito de la

Guías Homiléticas

II. Comentarios de los textos bíblicos


Guías Homiléticas Parece que Jesús no responde exactamente a la petición de sus discípulos. Aprovecha, más bien, la ocasión para expresar la eficacia de la fe, de la verdadera fe, capaz de obtenerlo todo de Dios. ¿Obtenerlo todo? Es lo que, sin duda, expresa la comparación. Marcos (Mc 11,23) y Mateo (Mt 17,20; 21,21) hablan de desplazamiento de una montaña; Lucas ha preferido pensar en una morera.

La fe es una manera nueva de vivir en el mundo y por el mundo. Es realista: sabe lo que ocurre en el mundo y el porqué; empuja a solucionar las situaciones de injusticia. Nos lleva a liberarnos de la reflexión y el pensamiento para trascender a Dios. Nos mantiene en la vertiente verdadera de las cosas y de las personas: en la vertiente de Dios. Es una fuerza interior que nos empuja y nos hace capaces de afrontar las dificultades de la vida.

La fe es más poderosa, tiene más valor y consistencia que todas las realidades físicas —el árbol, la montaña, el río...—. La fe llega hasta el fondo de Dios y de los hombres, a ese fondo de Jesús en el que todo se sustenta. La fe hace partícipes de la vida del Dios que todo lo puede, del Dios que no tiene límites en su amor.

La fe no es sólo creer que Dios existe: también lo creen los demonios (Stgo 2,19). Es mucho más: es fiarse, esperar, caminar por donde Jesús caminó guiados por su palabra. Fiarse, esperar, caminar... sabiendo desde lo más profundo de nosotros mismos que, si creemos, no es porque nosotros lo hayamos logrado con nuestro trabajo, sino porque el Padre nos ha llamado y nos ha dado su mano, nos ha hecho descubrir que todo esto merecía la pena.

La fe es una inmensa fuerza que permite vencerlo todo, superar lo que parece imposible. Es una convicción que nos hace decir: “A pesar de todo seguimos adelante”. Nos hace preguntarnos por un porqué último, final, absoluto. La fe nos da el convencimiento de que en la lucha por la transformación del mundo el mal puede ser arrancado de raíz. Es el poder que vence al mundo (Jn 16,33; 1Jn 5,4). Es esa tozuda confianza en la promesa de un Dios que está empeñado en hacer nuevas y de nuevo todas las cosas (Ap 21,1-7).

Esta fe crece en la noche, en las tinieblas, en las dificultades Estas palabras de Jesús han sido interpretadas con frecuencia desde una perspectiva milagrera, cercana a la magia, como si los problemas se resolvieran con sólo pedírselo a Dios. ¿No es ésta la mentalidad en que se mueven la mayoría de los cristianos? ¿Qué objeto tienen esos novenarios infalibles, los santuarios famosos, las devociones mágicas...?

III. Puntos para la reflexión • La fe nos obliga a una opción. Una opción que tiene algunas características: se da en el corazón y arrebata a toda la persona, que tiene la sensación de haber nacido de nuevo (Jn 3,3-8); es una orientación interior, permanente y global de la vida: todo lo que somos y tenemos se coloca en una sola dirección; se da cuando somos capaces de arriesgarlo todo..., cuando nos decidimos por la vida, a pesar de experimentar que la estamos perdiendo (Mt 16,25); cuando nos situamos a favor de la luz, a pesar de seguir en tinieblas; cuando confiamos en la acogida de Dios, sin saber si nos acoge o no; cuando arriesgamos lo que tenemos seguro por lo que esperamos... ¿No conocemos personas que tienen una nueva sensibilidad, una visión distinta de los acontecimientos y de las cosas, otra mentalidad, otros valores? • La fe nos concede la sabiduría de la vida, nos permite mirar la realidad desde su verdadera vertiente: la de Dios.

¿Es ésta nuestra opción? ¿Son nuestros esquemas de valores los del mundo? ¿Cuál es la dirección fundamental de nuestras vidas? ¿Cuáles son nuestras preocupaciones? ¿Qué esperamos?...

• La fe nos libera de ataduras sociales, de preceptos, de clases... El que opta por ella descubre que el cristianismo es fácil (Mt 11,28-30). Este es uno de los prodigios del evangelio. Los que buscan la facilidad sienten su peso.

30

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

31


Guías Homiléticas

Domingo XXVIII del Tiempo Ordinario / C 13

de octubre de 2013

I. Introducción general Las lecturas de hoy nos llaman la atención para ver el dolor del ser humano, que nos lleva a canalizar la ayuda en Dios. Cuando todo parece perdido surge un hombre de Dios-profeta, que sana al extranjero enfermo de lepra. Igualmente Jesús cura a un leproso y se convierte en el médico de las almas y de los cuerpos, enviado por Dios para salvar a todos, solo se necesitan hombres de fe en el buen Dios de Israel y en el buen Jesús. La lepra era considerada una enfermedad contagiosa y causa de marginación de la sociedad, porque quien la tenía se consideraba impuro. Pero, al mismo tiempo, era considerada un castigo de Dios, unida al pecado. Todo plantea los conceptos que tienen y las motivaciones poco fundadas para apartar a la persona, mientras el profeta y Jesús afrontan la enfermedad porque les interesa la salvación integral de la persona.

Sé agradecido con Dios El profeta Eliseo por su parte, conociendo el caso, pide que Naaman venga. Eliseo no lo recibe, sino que manda mensajeros hacia Naaman para que se bañe siete veces en el río, es decir la perfección de los hechos con el objetivo de limpiarse de la lepra en el río Jordán, el más significativo del lugar. Naaman resiste y se empeña en no cumplir las órdenes enviadas por el profeta Eliseo, pero al fin accede y es curado, reconociendo los poderes divinos… reconociendo la mano de Dios… expresando su confianza y seguridad en Dios a través del Profeta. Naaman curado, lleno de gratitud, desea ofrendar al profeta Eliseo, porque Dios no quiere retribuciones por los favores. Dios quiere ofrendas del corazón, hechos de vida y no ofrendas externas. La declaración de fe de Naaman es el objetivo principal, es decir mostrar y enseñar que el Dios de Israel, es el único verdadero como reclamo de expresión del mandamiento fundamental: “amarás al Señor tu Dios”.

II. Comentarios de los textos bíblicos

2ª Lectura

1ªLectura

(2Tim 2,8-13)

(2Re 5, 14-17)

Tener fe es vivir en Cristo

Naaman es curado de lepra por la fe que profesa Naaman era un general del reino de Siria, que por haber dado la victoria a su pueblo, tiene una sierva israelita quien lo motiva o lo aconseja de solicitar ayuda al profeta Eliseo para ser curado de su lepra. Este hombre habló con su jefe, quien le resuelve ofreciendo dinero y joyas… Pero esto sería una afrenta porque sería considerar como divinidad y no tiene poder de dar vida y muerte.

32

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

San Pablo, en esta ocasión, exhorta a Timoteo a vivir y guardar la fe. San Pablo acrecienta otros datos importantes como la memoria de la resurrección, asumir los sufrimientos de lucha y la convicción de Jesús esperado de los tiempos a quienes debemos fidelidad por eso debemos orar la Palabra de Dios, expresión del mismo Dios – Jesús. San Pablo sufriendo en la cárcel, sabe que es necesario resistir y mantener la fe en Cristo resucitado


(Lc 17, 11-19) Jesús cura a un Samaritano Extranjero Jesús cura a diez leprosos, entre ellos a un samaritano, que vienen a él. Vinieron a su encuentro… nueve judíos y el samaritano. Las limitaciones de salud les hace olvidar los odios y diferencias nacionales. Los leprosos no podían habitar dentro de las ciudades, estaban obligados a vivir solos en los descampados (Lev. 13,45).

Los nueve judíos siguen su camino como si nada hubiese sucedido, aceptar el milagro con naturalidad, sin más. La curación no les aporta nada nuevo. Se acercan a Jesús solamente para la curación física y, una vez conseguida, se olvidan. Es una anécdota más en la vida, el encuentro con Jesús no ha sido más que un episodio pasajero.

Es la salud limitada la que hace a estos hombres ponerse en la búsqueda del Maestro Jesús. Como muchas veces los quebrantos de salud, se convierten en un profundo reconocimiento del buen Dios en nuestro camino.

El décimo leproso samaritano, extranjero, volvió a Jesús para expresar su gratitud y lo hace alabando a Dios con gritos y en actitud de máxima humildad. Sólo este hombre acierta en dar gracias porque ha encontrado en Jesús algo decisivo.

Gritan a Jesús: “Ten compasión de nosotros”, propio de las enfermedades terminales que no les queda otra alternativa que llamar a Dios posible de los imposibles. Justamente porque estos leprosos han escuchado quien era Jesús, tienen

Sólo un leproso se dio cuenta del amor de Dios que lo llamaba a la plenitud de vida, a no quedarse en ritos externos solamente, sino dejarse maravillar, asombrarse, reconocer y vivir en comunión con el Dios que nos ha manifestado Jesús.

III. Puntos para la reflexión • En el encuentro de Naaman y el profeta Eliseo, descubrimos que lo que Dios quiere, no es oro ni plata, sino compromiso de corazón y vida. • San Pablo nos recuerda con la exhortación a Timoteo que la causa del evangelio es de todos y expresa la conversión, el apóstol está encadenado pero la Palabra de Dios no. • Jesús a través de la curación de los leprosos por intermedio de la fe, nos solicita no sólo confianza sino gratitud es decir, dejarse maravillar por el encuentro con Jesús y mantenerse en comunión cueste lo que cueste. • Aprende a ser agradecido con Dios. Él te regala el don de la vida y es capaz de sacar tu corazón cuando sufre. • ¿Cómo vives el agradecimiento al Señor? ¿Qué detalles de bendición y sanación reconoces en tu vida?

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

33

Guías Homiléticas

Evangelio

seguridad y confianza en él y salen al encuentro… y, a los clamores, el buen Jesús responde inmediatamente con la sanación total, solo que deben cumplir con la ley y les envía a presentarse a los sacerdotes del templo como está mandado, justamente para que puedan ser aceptados en la comunidad.

Guías Homiléticas

que venció la muerte a su paso por la vida. El apóstol está encadenado, pero todos tenemos la responsabilidad, como bautizados de anunciar la Palabra, predican la Palabra y Testimoniar la Palabra.


Guías Homiléticas Domingo XXIX del Tiempo Ordinario / C 20

de octubre de 2013

I. Introducción general Un juez poderoso e incrédulo y una mujer pobre y vencedora. Dos actitudes que unidas a las de Josué; Moisés y Pablo iluminan nuestro camino de evangelización y de instauración de la espiritualidad en un mundo tan necesitado. Es una propuesta en el marco de la reflexión de nuestra responsabilidad misionera.

II. Comentarios de los textos bíblicos 1ªLectura (Éx 17, 8-13) Una lucha espiritual Josué enviado por Moisés con la misión de ir a los países enemigos a destruirlos en nombre del Dios de Israel (1Sam 15,7), porque resonaba una rivalidad entre ellos, hermanos descendientes de Jacob (amalecitas e israelitas) ambos querían destruirse por acción divina. Moisés sube con una vara a una montaña, lugar del encuentro con Dios. Las manos levantadas de Moisés era victoria de Josué y las manos abajo derrota para él. Entonces como no era fácil mantener las manos arriba sus acompañantes: auxiliares y Aarón resuelven mantenerle las manos levantadas a Moisés para conseguir la victoria final. El objetivo del acto sagrado es demostrar que el pueblo podrá lograr resultados con Dios. Es Dios quien combate en el lugar del pueblo, es en este

34

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

Dios hace justicia caso un guerrero valioso. Aarón y Hur colaboran, es decir, cada personaje tiene un papel en la historia. Todos cumplen el papel de llevar el poder de Dios de Israel a los otros pueblos. Es decir, cada uno tenemos una responsabilidad en la acción misionera y sirve preguntar si estamos cumpliendo con esa noble tarea. Podemos destacar dos aspectos representados en Josué con su acción política y Moisés su acción espiritual – manos levantadas a Dios. Son dos maneras de mantener la acción misionera operante. La oportunidad en la misión y la lucha o el trabajo práctico en las repercusiones sociales, son caminos de una misma historia. Para el pueblo judío la misión en el mundo, es llevar a todos los pueblos a la santificación que incluye lucha social y espiritualidad, como nos sugiere el Papa Francisco. Pero la lucha debe transformarse en acciones concretas con el pueblo, con los hermanos, con los compañeros de la parroquia.

2ª Lectura (2Tim 3, 14-4) Pablo exhorta a Timoteo: la misión del cristiano es llevar la palabra Pablo recomienda a Timoteo el valor de fe que tiene él, predicar la palabra de Dios, y le recuerda que las enseñanzas que recibió desde niño él las debe transmitir. Pablo el gran misionero, insiste en resaltar los valores que el cristiano no puede perder en el camino de su misión: anunciar la palabra de Dios con coraje; llevarla a quien no la


conoce; cuestionar a quien no la práctica; animar a aquellos que perdieron la esperanza. En definitiva, el misionero debe ser fiel a la palabra y perseverar en la fe que comunica.

Evangelio (Lc 18,1-8) Parábola del juez y la viuda Los protagonistas del texto son la viuda perseverante y el juez indiferente. Era la mujer pobre y viuda, una de las imágenes vivas del desamparo y la marginación en la Biblia y no tiene otro modo de obtener justicia que la constancia y la tenacidad. Así lo hace, va una y otra vez, convencida de lograr resultados. Mientras tanto, al juez caprichoso y poderoso no le importa ni Dios ni los hombres, pero termina doblegándose ante la perseverante mujer. El monólogo del juez consigo mismo manifiesta que la mujer no cede y, por tanto, para acabar con tanta importunidad y molestia, para que lo deje en paz, le hace justicia.

Jesús nos invita a tener una perseverancia semejante a la de la viuda en mención, pero a favor de la misión, en pro del evangelio, en defensa y propagación de la fe, porque si un juez indiferente fue capaz de dictar justicia, cuanto más el buen Dios hará justicia a sus elegidos que le gritan día y noche. Sin embargo, no es la actitud perseverante de la viuda lo más importante, si no la certeza de ser escuchada. La conclusión no puede ser otra que la seguridad y certeza en Dios que escuchará las plegarias nuestras y verá la audacia en la perseverancia por la difusión de la Palabra Dios no nos faltará aunque el proceso sea largo y desesperadamente lento. Solo una condición nos pone Jesús para que la acción del Padre Celestial no quede bloqueada: orar y trabajar por su causa sin descanso. Esta parábola nos motiva a realizar una oración y una acción misionera llena de esperanza, a no desanimarnos nunca, aunque hayan dificultades porque no nos apoyamos en nosotros mismos sino en Dios que es ilimitadamente bueno y justo en comparación con el desalmado juez del relato del evangelio.

• El misionero está llamado a exhortar mutuamente a los demás bautizados misioneros, como Pablo hiciera con Timoteo anunciando la Palabra de Dios con tenacidad y audacia. • Jesús nos invita a tener perseverancia en la misión y en la oración como la viuda, seguros de que Dios nunca dejaría de escucharnos. Dios tiene en sus manos el poder de la justicia. La insistencia en la oración debe estar cargada de confianza. • ¿En tu oración personal con dios, depositas en él tu fe y tu confianza?

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

35

Guías Homiléticas

• El pueblo consigue resultados con Dios de su parte, como lo consiguió Josué con los brazos levantados de Moisés, así nosotros podremos redoblar nuestra confianza en él.

Guías Homiléticas

III. Puntos para la reflexión


Guías Homiléticas Domingo XXX del Tiempo Ordinario / C 27

de octubre de 2013 Dios nos acepta como somos

I. Introducción general Los ritos y funciones o acciones religiosas externas no convencen a Dios de ninguna manera, el termómetro religioso no puede encubrir ambigüedades o contradicciones, sencillamente es o no es. La liturgia de la Palabra de Dios de este domingo insiste en afirmar que Dios detesta: ofrendas, ritos, oraciones y hasta celebraciones vacías que buscan sencillamente comprar a Dios y por tanto está lejos de quienes quieren justificarse o darle a Dios lo sobrante, el nos necesita, necesita nuestra nuestros corazones. El buen Dios se contenta con el reconocimiento de nuestra miseria y limitación y no nos quiere por lo que somos, sino por lo que podemos llegar a ser. Ve la sinceridad del corazón de cada uno de nosotros.

II. Comentarios de los textos bíblicos 1ª Lectura (Eco 35,15-17.20-22) El texto nos habla de la presentación de dos personas para agradar a Dios a través de las ofrendas deshonestas, adquiridas de la extorsión de los pobres, es decir ofreciendo a Dios lo que fue tomado injustamente. Esto pone en crisis la doctrina de la ley sobre las ofrendas ofrecidas a Dios. Por un lado encontramos al fervoroso ritualista, apegado a las normas del culto y por otro se preocupa de la moralidad de los ritos y de lo que se ofrece a Dios. Para él no se puede ofrecer a Dios lo que es producto de

36

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

la injusticia, es como ofrendar al hijo pobre en presencia del Padre Celestial. El valor de cuanto se ofrece a Dios, o mejor de quien ofrece a Dios depende de las disposiciones del corazón, por eso aunque sea poco si es el corazón es más que suficiente, porque Dios mira el corazón y no lo externo. El buen Dios no hace distinción alguna entre las personas, no tiene en cuenta la posición social, la fama o los bienes económicos; no se deja corromper de los ricos en perjuicio de los pobres y explotados, es por excelencia justo e imparcial y espera las ofrendas y oraciones de esa manera. La segunda parte del texto leído, nos muestra que Dios se contenta de aquél que le sirve, sirviendo al prójimo, respetando cuanto le pertenece, a él Dios oye no por las ofrendas presentadas, sino porque sabe que confía plenamente en Dios, sus ruegos y súplicas llegarán hasta el cielo donde Dios vive (Sal 104,3), así es la oración que agrada a Dios, quien así obra no se quedará sin respuesta de parte de Dios. El pedido del pobre será satisfactorio porque no intenta comprar al Señor, sino reconocerle su lugar, su oración no es comercio, sino inmersión en el ser de Dios que es amor. Habiendo gratitud, confianza y entrega en las manos de Dios, la oración será sincera y desde luego será muy eficaz.

2ª Lectura (2Tim 4,6-8.16-18) Estamos ante un texto que se considera un testamento de San Pablo, quien aprovecha para hacer


Evangelio (Lc 18, 9-14) Entran en escena dos personajes ante el personaje por excelencia, el buen Dios. Para el publicando es la salvación; para el fariseo, conocedor de los rituales, no pronuncia ni siquiera una palabra de condena, ni de reconocimiento. Si la oración del fariseo hubiera merecido una respuesta, está seguro habría tenido un tono irónico… ayuna dos veces por semana, mientras otros ayunan para adelgazar o porque no tienen que comer… da el diezmo, otros no lo ofrecen porque no ganan lo suficiente para vivir… La oración del fariseo es rechazada no porque los actos que menciona sean falsos, sino porque se ha olvidado que es un pecador como los demás que necesita de perdón de Dios y de sus hermanos, es decir sus respuestas son insuficientes. Y eso es justamente lo que sabe hacer el publicano, quien desconocía el modo de proceder, pues es evidente que el buen Jesús no aprueba en el texto la conducta del publicano, pero si aprueba su sinceridad, consciente de las dificultades que va a encontrar para rehacer la vida: deberá abandonar su profesión y restituir

A Dios no le asusta la verdad del ser humano; la desea como punto de partida para iniciar con él un diálogo, pues para que sirve una oración que no surge de la verdadera realidad del que ora, pero al mismo tiempo que difícil es hacerlo. Es posible vivir inmersos en un cristianismo institucional sin haber sido nunca seriamente evangelizados, dedicados al cumplimiento de ritualista, pero sin comprometer el corazón, es decir las acciones concretas de convivencia con quienes compartimos el mundo en la aldea donde Dios nos llama para hacer nuestro propio camino de salvación. La evangelización nos invita hoy a caminar detrás de Jesús como dice el Papa Francisco, sin miedo, conocernos tal como somos, a tomar nota de nuestras inclinaciones, necesidades e ilusiones; a asumir responsablemente los riesgos de la propia vida, en una palabra a ser cristianos no porque nos hablaron, sino porque nos convencemos y experimentamos que es el camino más válido sobre la tierra. Jesús no invita en este domingo a recomenzar el seguimiento desde lo que consideremos más indigno en nosotros mismos y hasta nos de vergüenza, desde aquellos vicios que a lo mejor no queramos dejar y que justifiquemos con tanto empeño, causa a lo mejor de nuestra incapacidad de seguir caminando. Aceptemos de una vez por otra la lección del publicano. Convenzámonos de que no tenemos una propuesta perfecta de presentación para ofrecer a Dios y que nos podemos abrigar en la gran misericordia que el nos ofrece, pero en la gran seguridad de que podemos con nuestros esfuerzo caminar en continua conversión. La parábola nos ofrece una sentencia importante y decisiva: “el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido” y busquemos por tanto en la oración el descubrimiento de Dios y de nosotros mismos. Esto nos llevará a reconocernos pecadores y a pedir perdón, para llegar a la santidad. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

37

Guías Homiléticas

Pablo habla de la partida del apóstol, descrita como soltar las velas en la aventura de un nuevo viaje misionero, como entrega definitiva a la meta definitiva. Mirando hacia atrás, Pablo tiene conciencia de haber cumplido la misión de modo ejemplar con tenacidad y constancia ejemplar como el soldado que lucha con riesgo y seriedad; combatiendo el buen combate y como atleta que corre en el estadio hasta terminar la carrera, pero lo fundamental para él es haber recorrido en vista de la evangelización y conservando la fe.

lo estafado en la medida de las posibilidades, en fin replantear la vida.

Guías Homiléticas

una revisión de su vida, mirando hacia el pasado y para el futuro, pero considerando que todo es gracia de Dios. Así llega a dar el gran testimonio, su sangre lista para ser derramada, como el sacrificio de valor expiatorio dice: “yo estoy para ser ofrecido en sacrificio” (2Tim 4,6). La sangre que Pablo irá a derramar más tarde se convertirá en semilla y fortalecimiento de evangelización.


Guías Homiléticas III. Puntos para la reflexión • La palabra de Dios de este domingo una es oportunidad para ver nuestra relación con aquél que nos crío. Dios rechaza ofrendas sacadas de lo injusto, pero no rechaza las ofrendas propias de nuestra vida, aunque sean poco significativas para los humanos, para él son lo suficiente. • Dios nos recuerda la necesidad de cuestionarnos acerca de los dones que nos dio y a dar razón de nuestro bautismo como ofrenda antes de llegar al encuentro con él el paraíso celestial. • Dios nos recuerda con la imagen del fariseo y el publicano que nos quiere como somos y tiene confianza en quienes reconocen que pueden hacer un camino de superación del pecado, sólo tenemos que tomar conciencia de nuestras debilidades y hacer oración.

Noviembre

Domingo XXXI del Tiempo Ordinario / C 3

de noviembre de 2013 En Dios todo lo podemos

I. Introducción general

II. Comentarios de los textos bíblicos

Hoy veremos la importancia de la fe y la conversión en el camino de evangelización, elementos necesarios y esenciales para vivir el llamado de Dios, tanto como Judío como cristiano. Dios actúa con infinita misericordia ante todo aquél que se arrepiente. El todo lo puede por eso puede cambiar el mundo y hasta cambiarnos a nosotros mismos y hacer de un gran pecador un gran santo. La salvación para el buen Dios es universal y entra en la casa de cada uno, rico o pobre, judío o rico, fariseo o publicano, negro o blanco, así lo expresa hoy al visitar la casa de Zaqueo: “hoy ha llegado la salvación a esta casa”.

1ª Lectura

38

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

(Sab 11,22-12.) Dios todo puede y todo perdona. Esta primera lectura es una reflexión de Dios y su infinita misericordia, Dios todo lo puede, por eso tiene compasión de justos e injustos, él tiene el poder de perdonarlo todo. Amor y perdón caminan juntos de la mano para el israelita. Dios es como una pareja que genera a todos sus hijos amor y por amor los educa, los forma y los perdona siempre y lo hace porque los sientes suyos. Dios corrige a los pecadores recordando las


2ª Lectura (2Tes 1,11-2,2) Los cristianos debemos vivir la que glorifica el nombre del Señor A la comunidad de Tesalónica, Pablo demuestra un cariño especial, y justamente pide a Dios con todo su corazón que ayude a la comunidad a permanecer en la fe en la realización de la vocación a la que ha sido llamada. En esta carta San Pablo trata dos temas: la vivencia de fe y confianza de la comunidad que glorificará el nombre del Señor Jesús y la serenidad que la comunidad debe tener delante de las falsas profecías acerca de la venida inminente de nuestro Señor Jesucristo, porque algunos esperando la parusía dejaron de trabajar (3,10) y eso no puede ser. La convicción de Pablo es trabajar hasta el último momento.

Evangelio (Lc 19, 1-10) Zaqueo, hoy tengo que alojarme en su casa Zaqueo es presentado por Lucas como jefe de publicanos y rico, doble inconveniente para entrar en el reino. Tenía poder, dinero y mala fama. Es un hombre odiado por todos. Pero el buen Jesús se fija en él montado en un árbol y se invitará a quedarse en su casa. Ha descubierto en él algo que no veía en los demás. Es el encuentro de dos personas que se estaban buscando desde hacía tiempo. Es el buen Dios tras el pecador y el pecador tras el buen Dios. Zaque buscaba a Jesús desde su mirada interna cargada de sentimientos, de preguntas y de búsquedas. Una mirada en la que estaba reflejada su vida, su aislamiento el callejón sin salida en el que se había metido. Quería ver a Jesús. Jesús ha mirado a Zaqueo con plena conciencia porque la conversión es un encuentro personal en el que cada uno expresa todo lo que tiene por dentro: miseria o misericordia, pecado o perdón, orgullo o docilidad. Es que Zaqueo le pasaba lo que a muchos cristianos de hoy, vivía así porque nadie lo había tomado en serio, porque nadie le había dicho nada al respecto, porque nadie lo había amado. El amor purifica la mirada, hace a la persona limpia, el amor penetra en lo más honde del ser humano. Descubre cosas que se escapan a una mirada indiferente y superficial, y logra ver valores donde el que no ama solo percibe defectos y fango, como sucede con los enamorados por ejem2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

39

Guías Homiléticas

La visión de Dios es de amistad, como acompañante de la historia de salvación, perdonando todo. Dios confía en sus armas y en sus actos de audacia, en cuanto depositamos nuestra confianza en Dios que todo lo puede, que bien puede, con un solo movimiento de cabeza, nos libera y proteja de aquellos que van contra nosotros en el mundo entero (2Mc 8,18). Una de las diferencias de la sabiduría bíblica consiste en presentar el hecho de Dios de Israel único, misericordioso y poseer una propuesta de salvación universal. El poder de Dios es compasivo como subrayaremos en el evangelio también. Precisamente a causa de este poder y amor, Dios puede reprender al inmoral con paciencia; Dios puede salvar el abismo entre los justos y los pecadores; Dios puede cambiar al pecador arrepentido a un lugar de honor a un campo de santidad, si así lo quiere, solo necesita disposición y esfuerzo de parte del creyente.

La comunidad de los Tesalonicenses están llamados a vivir la fe, ahora, por medio de obras y palabras que glorifiquen a nuestro Señor Jesús y lo deben hacer por la gracia de Dios. No se puede esperar la venida del Señor y no hacer nada. La serenidad espiritual del decida, es necesario esperar con fe y no dejarse engañar. Es una clara motivación contra la ociosidad y el desgano y esto para Pablo es tema enérgico, no puede ser, no nos podemos desanimar, ni dejarnos desanimar por ningún motivo.

Guías Homiléticas

faltas y acompañando de tal modo que no sigan en el mal y crean en él. La fe es la condición esencial para encontrar la salvación, desde luego con un cambio de vida que los coloca en el camino que lleva a Dios.


Guías Homiléticas plo. El amor de Jesús va más allá de los pecados, se sumerge en la profundidad humana y busca, descubre, despierta, urge todo lo que hay de intacto y de puro, incluso en los seres humanos más perversos de la tierra y es que hay inocencia y ternura hasta en los seres más abominables.

El amor de Jesús es creativo, llega hasta el fondo, no ama a los demás porque son buenos, sino que los hace buenos porque los ama. Descubre la armadura de Dios en cada corazón humano, por más roto que este se encuentre. Siempre reconstruye el camino divino en lo limitadamente humano. Es necesario que los cristianos seamos espejos, creaturas transparentes que poseamos a Dios, si queremos ser puentes mediadores del encuentro de Dios con los hermanos y hermanas de la vida. Solo Dios es capaz de despertar al Dios que duerme en el rincón más profundo de cada uno, como lo hiciera con Zaqueo. Un Dios que sólo responderá a la voz del mismo Dios. Zaqueo bajó pronto y lo recibió muy contento en su casa. Es el contraste de la frialdad con que lo habían invitado algunos fariseos…los dos se van juntos, en medio del escándalo general… ¿Qué pasó después? ¿De qué hablaron? ¿Qué más le dijo Jesús? Son preguntas que nos podemos hacer. Es posi-

ble que dialogaran largamente como lo había hecho con Nicodemo o con la Samaritana y como hacía con sus discípulos. Desde luego que Zaqueo descubrió que las riquezas no lo harían feliz y fue consecuente. La murmuración de parte de los judíos no se hizo esperar, al ver que el Maestro Jesús se hospedaba en la casa de un reconocido pecador. La multitud hubiera visto mejor lógica que primero se hubiese dirigido a la sinagoga y después a la casa de uno de los principales jefes religiosos o maestros de la ley. Jesús no teme provocar el escándalo y la fuerte crítica de los presentes cuando está de por medio salvar a alguien, de ayudarle a que sea el mismo. En esto Jesús nos da ejemplo, sabe lo que quiere y dice humildemente la verdad y tiene una clara personalidad, no teme perderla en el trato con unos y con otros, por eso sabe encontrarse con el adversario, con las personas preocupadas de los demás y con las de mal vivir, pero sin dejar de ser él, sin perder su personalidad y sin ofender la dignidad delos demás. Jesús afronta la crítica de los que se creen buenos y la risa de los que no aceptan su acción, pero no cede, no venden su verdad, ni da culto a las apariencias, ni busca el camino fácil para salvar la vida.

III. Puntos para reflexionar • Ser cristiano es estar convencido de que en Dios todo lo podemos y por más fuerte que sea la caída, hay espacio para el perdón y la misericordia, solo debemos estar dispuestos a dejar entrar a Jesús en nuestro corazón y en nuestra casa, así como lo hizo Zaqueo. • ¿Podremos descubrir a Dios amigo que desea caminar con nosotros y ayudarnos a centrar nuestro camino de vida? • Dios quiere que nos mantengamos fieles, seguros en una serenidad espiritual, trabajando por su causa hasta el último momento de la vida, antes de llegar al paraíso celestial.

40

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


Domingo XXXII del Tiempo Ordinario / C de noviembre de 2013

Recordamos en la eucaristía al concluir la consagración: “anunciamos tu muerte proclamamos tu resurrección” y con ello decimos que Jesús triunfó sobre la muerte, ofreciéndonos un camino de vida plena. En la lucha por la vida, Dios tiene la última Palabra. Por esto es que celebramos con mucha fe y alegría el triunfo de Jesús y de los mártires hasta hoy, porque proyectaron la vida en el premio eterno y no en el premio temporal. En el evangelio recordamos que nuestro Dios es Dios de vivos y no de muertos que se dio a conocer a los antepasados de Israel y a las personas comprometidas con su Hijo Jesús. Las desgracias o desventuras del mundo no parten de Dios, son sencillamente consecuencias de la falsa imagen de la divinidad que tenemos de acuerdo a nuestros intereses, es decir con los conceptos humanos, adecuados a nuestras medidas. En la liturgia de la palabra de hoy descubrimos con firmeza que Jesús es vencedor de la muerte. Por eso celebramos los triunfos de nuestras comunidades y pedimos luz para hacer mejor el camino de compromiso en la transformación del mundo que Dios nos pone a compartir aquí y ahora.

decidir sobre la vida o la muerte de las personas. La perspectiva del texto camina en otro sentido: Dios es el aliado de su pueblo y en la lucha por la vida es dueño de la última palabra. Los poderosos del mundo son extremadamente frágiles y más bien para esconder su fragilidad torturan y matan. El texto se remonta a los tiempos de la revuelta de los Macabeos, tiempo de dominación griega en Judea. Quien no se adhería al dominador era castigado, torturado y muerto. Así se entiende la intransigencia de los hermanos Macabeos. La transgresión de las normas era el inicio de entrega a los griegos, con la consecuencia pérdida de identidad y de las tradiciones que mantenían unido el pueblo de Dios, Las continuas intervenciones de los hermanos, en la medida en que van siendo torturados y muertos, van convenciendo de que Dios es el aliado del pueblo capaz de hacer girar la vida. Es el texto que por primera vez en el Antiguo Testamento, es presentada la fe en la resurrección: “es preferible ser muerto por los hombres, teniendo en vista la esperanza, dada por Dios, de que él un día nos resucitará” (14). La resurrección es vista como recompensa por la lucha en favor de la justicia y por tanto los opresores no resucitarán, porque el castigo de Dios pesa sobre ellos.

II. Comentarios de los textos bíblicos

2ª Lectura

1ª Lecturas

(2Tes 2,16-3,5)

(2 Mc 7,1-2.9-1)

Resistir en la tribulación

En la lucha por la vida Dios tiene la última Palabra

La propuesta del texto de hoy expresada en esta carta no es acerca del fin del mundo, sino cómo debemos comportarnos en la espera de todo lo que acontezca. Algunos tesalonicenses estaban escuchando que la venida de Cristo era inminente y perdían las

A primera vista tenemos la impresión de que la última palabra está en los que tienen el poder de

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

41

Guías Homiléticas

I. Introducción general

Hijos del Dios de la vida

Guías Homiléticas

10


Guías Homiléticas ganas de luchar por la construcción del reino. La fe cristiana se expresa de manera concreta frente al mundo y por tanto la actitud de quien espera la venida gloriosa de Cristo no es acomodarse, cruzarse de brazos, como si no hubiese nada que hacer o mirando a lo alto como si todo cayese del cielo. Pablo expresa de forma particular esas ideas por medio de oraciones: en primer lugar agradece a Dios por haber sido llamados a la salvación mediante el anuncio del evangelio y concluye el agradecimiento con el deseo: “Que los anime el propio Cristo Jesús. Nuestro Señor y Dios, nuestro Padre, que nos ha amado dándonos en su misericordia un consuelo eterno y una esperanza feliz. Él les dará el consuelo interior y los hará progresar en todo bien de palabra o de obra” Con estas palabras da una lección a los que esperaban pasivamente la venida del Señor. La venida del Señor no se espera sino con acciones concretas en el discernimiento sobre las funciones de las comunidades cristianas de acuerdo al mundo en el que viven. Y esto porque se pensaba que cuanto más intensa fuese la persecución más cerca estaría la venida del Señor, mientras que Pablo insiste que cuanto más intensas las tribulaciones, mayor debería ser la resistencia activa de las comunidades. Por otra parte Pablo pide que la comunidad rece por él y expresa el contenido de esa finalidad: “para que la Palabra del Señor sea difundida y glorificada” y para que nos liberemos de los hombres perversos y malvados, porque no todos tenemos fe. La oración es entonces parte del proyecto de Dios que da vida a todos y solidaridad con los misioneros evangelizadores perseguidos por los que se oponen al proyecto de Dios, Por tanto el camino del cristiano es fuerte y debe ser así a ejemplo de nuestro Señor Jesucristo que resistió hasta el final.

Evangelio (Lc 20,27-38) Dios de vivos y no de muertos El Maestro Jesús responde al cuestionamiento cortando de raíz toda base de argumentación, afirmando la vida futura, que no es continuación de la actual y citándoles un texto de la ley, que sí admitían los saduceos y les hace ver que

42

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

después de la resurrección los cuerpos no tienen la finalidad transitoria que tienen aquí. La vida de los resucitados será tan distinta que es mejor evitar comparaciones con el presente, por eso la respuesta de Jesús: serán como ángeles. El Dios nuestro es de vivos y no de muertos porque para él todos están vivos. La resurrección no es la reanimación de un cadáver, es un salto cualitativo, una nueva existencia en la que entra toda persona. Jesús nos está hablando de resurrección, no de inmortalidad; de vida nueva, de realidad transformada (Ap 12,1-5). Volver a esta vida y prolongarla no tendría mucho sentido. Jesús nos ha abierto las puertas a la mayor esperanza humana. Dios es fiel y ama la vida. No es posible que haya creado al hombre sediento de vida ilimitada para abandonarle luego a la muerte, trabajemos por el amor sin límites, no construyamos sueños en torno al cómo y cuándo será la resurrección, dejemos eso en las manos de Dios. Los cristianos esperamos la resurrección porque creemos que Jesús ha resucitado y tenemos que participar de su mismo destino. La resurrección de Jesús es la prueba más evidente para nuestra fe. “Maestro, has hablado bien”, es la respuesta de los letrados, fariseos, al verse apoyados en sus creencias. Aplauden la decisión de Jesús. La gente se maravilla de su doctrina (Mt 22,33) y no se atrevieron a hacerle más preguntas. La respuesta de Jesús al parecer dejó sin ganas a los saduceos (quienes no creían en la resurrección) de continuar su ataque. El texto nos invita a recordar la gran esperanza que los creyentes llevamos en el corazón. La gran esperanza que nos dice que nuestra vida no está ordenada a desaparecer con la muerte. Seguiremos amando a nuestros hermanos y hermanas sobre la tierra y así veremos desaparecer todo dolor y toda muerte, porque nuestro Dios quiere acogernos en su regazo y darnos su vida para siempre. Todo esfuerzo por amar, por buscar la paz y la armonía no se pierde, al contrario se está eternizando desde el mismo momento en que lo hacemos. Todo tiene sentido en un camino en que lleva a la vida total. Porque creemos en la vida, amamos, luchamos, buscamos la alegría y rehuimos de la mediocridad entonces apreciamos todo lo que es humano.


III. Puntos para la reflexión • El núcleo de nuestra fe es una esperanza en que toda prueba se transforma en gracia, toda tristeza en alegría y toda muerte en resurrección. Dios puede hacer de nosotros eso que parece imposible: hacernos felices, darnos a conocer una vida que se prolongue hasta la eternidad.’ • ¿Existe en nuestra vida tanto amor que sintamos la necesidad de resucitar para vivir eternamente con todos los que amamos?

de noviembre de 2013

I. Introducción general

II. Comentarios de los textos bíblicos

El sol de justicia ya amaneció en el corazón de las comunidades cristianas que se reúnen continuamente para celebrar la fe. La eucaristía tiene sentido para nosotros los cristianos porque es esperanza y victoria de la vida sobre la muerte. Celebrar este acontecimiento es dar razón de esperanza que anima la lucha de todas las comunidades que trabajan con ahínco por la instauración de su Palabra.

1ª Lectura

A la luz de la Palabra de Dios, aprendemos que nuestros esfuerzos no son inútiles. Es justamente permaneciendo firmes en la fe y en la esperanza como iremos ganando la vida. En la medida en que nos comprometamos con el proyecto de Dios. Y llegando al fin del año litúrgico es conveniente reflexionar y decirnos que las grandes crisis y hasta catástrofes nos han servido más bien para confiar más en Dios y replantear nuestro seguimiento de Jesús.

(Ml 3,19-20) Brillará el sol de justicia Malaquías es el profeta del pos-exilio, volviendo del cautiverio en Babilonia, anuncia el día del Señor, día de condenación de los perversos y de alivio para los justos, respondiendo a los que pensaban: “no vale la pena servir a Dios, guardando los mandamientos y caminando en la amargura en la presencia del Señor” Malaquías cree que la tolerancia ha llegado al fin. Y por eso enuncia una línea del profeta Amós, el día de Dios llega, día en que la impunidad va acabar y la justicia triunfará. Compara el día de Dios como el fuego devorador antes de que los arrogantes y malvados serán como paja. El anuncio del profeta tiene el respaldo divino, por eso habla en 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

43

Guías Homiléticas

17

Dios es nuestra salvación

Guías Homiléticas

Domingo XXXIII del Tiempo Ordinario / C


Guías Homiléticas nombre de Yavé de los ejércitos que no dejará a los corruptos ninguna raíz ni ramas, la impunidad acabará para siempre Por eso nace el sol de la justicia trayendo salud en sus rayos y así es la esperanza de una sociedad nueva nacida de Dios en alianza con los que luchan por la justicia y la libertad.

2ª Lectura (2 Tes 3,7-12) El que no quiera trabajar que no coma Entre las comunidades que San Pablo había fundado, muchas personas esperaban la segunda venida de Jesús inminente, de ahí surge esta manera de pensar particular, según la cual como Jesús vuelve luego y resuelve todos los problemas, no es necesario tener un trabajo, ni preocuparse por los destinos que el mundo está tomando, se trata solo de esperar y el problema estará resuelto, falta poco tiempo para la venida gloriosa de Jesús. Por eso es que San Pablo en la segunda carta a los Tesalonicenses vino a esclarecer esta situación con autoridad y firmeza y el texto leído hoy va directamente al asunto, recordando que cuando él los acompañó la primera vez evangelizando trabajaba de día y de noche para no ser gravoso a la comunidad, aunque tuviese derecho a ser sostenido por la comunidad, pero él no lo hizo. Con este discurso se presenta como ejemplo a ser imitado. Por tanto no hay espacio para la ociosidad, pues de ninguno recibimos el pan con el que sobrevivimos. Es enfático San Pablo al afirmar rotundamente que el que no quiera trabajar también no debe comer. Y con eso les ordena a los ociosos la necesidad de una ocupación para no vivir dependiendo de los otros, el trabajo se reviste de gran importancia para la paz social, para la paz de la comunidad, para el caminar del pueblo de Dios. Es hora de insistir como Pablo en la necesidad de trabajar para tener una justa medida de la vida. El trabajo no es cuestión de ocupar a las personas, sino el modo de lograr la sociedad en la que todos tenemos acceso a los bienes de la vida: “ El que robaba, que ya no robe, sino que se fatigue trabajando con sus manos en algo útil y así tendrá algo que compartir con los necesitados” Ef 4,28

44

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

Evangelio (Lc 21, 5-19) Si persevera con paciencia salvará su alma Todo el discurso, expuesto en el evangelio de hoy, gira sobre la venida del Hijo del hombre, eje principal de toda su enseñanza. Los hechos, demuestran que Jesús había visto con claridad lo que iba a suceder; lo que garantiza que también sucederán los acontecimientos aquí narrados y que están por llegar: los referidos al final de los tiempos. La destrucción de Jerusalén y del templo, que aquellos hombres considerarían como un terrible juicio divino, suscitó en la comunidad cristiana la pregunta de si no sería el comienzo del final. Es un discurso escatológico de género literario apocalíptico, que no debe interpretarse al pie de la letra. La escatología trata de las realidades últimas, definitivas. La escatología bíblica es un modo de leer y de asumir la historia; tiene una visión grandiosa de la realidad y se despreocupa de la curiosidad del cuándo y del cómo sucederán los acontecimientos que refiere. Hace hincapié en la venida del Hijo del hombre y en la insistente exhortación a la vigilancia, que es llamada al compromiso en la historia. Más que un anuncio de catástrofes es un anuncio de salvación, que se podría resumir así: a pesar de todo lo que suceda, no perdamos la fe, porque Dios nos salvará. Los primeros tiempos del cristianismo fueron vividos con una fuerte tensión escatológica, con la idea de la vuelta inmediata de Jesús, que destruiría este mundo de pecado para comenzar su reino. Aunque Jesús había sido asesinado y todo parecía seguir como antes, los primeros cristianos caen en la cuenta de dos cosas que caracterizan justamente su modo de concebir la historia. La primera es que Cristo volverá, la historia tendrá un final en el que se manifestará en toda su plenitud la victoria de Jesús. La segunda es que esa victoria está ya presente, pero a nivel de fe. De ahí la vigilancia, integrada de espera y de compromiso, el futuro se va construyendo aquí y ahora. Esta tensión fue disminuyendo, y los cristianos se fueron resignando a la idea de una historia humana


Jesús, que una y otra vez nos ha dicho que su reino se comienza a vivir y a construir ahora, al fi-

Cuando Israel se encierra en sus fronteras, en sus seguridades leyes y no admite la renovación interior que Jesús le ha transmitido, su templo es símbolo de su presente religioso y se ha convertido en una pura realidad humana. Con toda su belleza y con su antigua hondura de señal de Dios sobre la tierra, el templo de Jerusalén lleva dentro de sí los rasgos de la muerte. Su destrucción fue una llamada de atención sobre algo que Jesús ya había anunciado: el final de la antigua alianza y el comienzo de una nueva era de adoración al Padre “en espíritu y verdad” (Jn 4,23). “Todo será destruido”. La respuesta de Jesús es una predicción de ruina total. Dios busca un pueblo en el que se palpe su presencia. Al haberse apartado de él, se han incapacitado para tener un templo y celebrar en él los actos de culto. La destrucción del santuario es para Jesús la consecuencia externa de la obstinación interior del pueblo.

III. Puntos para la reflexión • Este texto de la destrucción del templo es muy significativo para nosotros. El pueblo judío vivía seguro y satisfecho a la sombra de su templo, orgullo de aquel pueblo pobre y humillado. Será destruida la maravillosa arquitectura del templo de Jerusalén y, con ella, el orden teocrático de Israel, su liturgia sacrificial, su sacerdocio, sus élites directoras y los que vivían a costa de los demás amparados en el desorden que habían establecido en nombre de Dios. De la misma manera debe ser destruido todo lo que no tenga su fundamento en el evangelio de Jesús y no comprometa el corazón de los hermanos y hermanas de la iglesia. • La respuesta de Jesús no provoca ninguna reacción de asombro ni de protesta o dolor por parte de los discípulos, sino una pregunta. No inquieren sobre el porqué o el cómo ni pretenden averiguar quién va a ser el que lleve a cabo la destrucción; sólo les interesa la 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

45

Guías Homiléticas

Jesús prevé tiempos difíciles. Nos presenta la historia humana inmersa en el dolor, la lucha, la guerra y la persecución. Nos anuncia que, a través de toda esta tremenda confusión, se está gestando el futuro: un mundo en continuos “dolores de parto” (Rom 8,22) y en continuo nacimiento del hombre nuevo (Ap 12,2.4-5). Quiere infundirnos confianza, para que no decaigamos en la fe en la hora de la prueba y sepamos reconocer en todos los acontecimientos de la historia la mano de Dios, que nos lleva a la plenitud. Nos explica el significado último de su intervención mesiánica. Porque ¿para qué vivir, esperar, creer, amar... si la muerte fuera el final de todo?

nal de su camino nos recuerda que la plenitud de todo sólo vendrá después. Nos dice a los cristianos que debemos disponernos a un largo tiempo de espera y de lucha; que las persecuciones serán la principal característica de la vida del cristiano que lo sea de verdad, mientras dure la historia del mundo. Lo mismo que él llegó a la gloria a través de luchas y de tribulaciones, le sucederá a los que sigamos su camino.

Guías Homiléticas

lánguida que tenía aún mucho camino que recorrer. La misma Iglesia se fue aceptando como una realidad de este mundo, atada a las limitaciones históricas y sociales y cada vez más lejana y ajena al tiempo final. Así llegamos a nuestros días, en los que las expectativas de la segunda venida de Cristo y de la renovación final del mundo son casi nulas. Nuestro cristianismo no se plantea este problema, tanto que el Papa Benedicto XVI nos cuestionó acerca de la vida fundamentada más en el más acá que en el más allá. En contraste con el mensaje de Jesús, el hombre moderno aprendió a autodestruirse sin ninguna esperanza de regeneración, lo que es trágico.


Guías Homiléticas

fecha del acontecimiento y la señal que lo anunciará. Pero el evangelio no satisface nuestra curiosidad acerca del supuesto fin del mundo y otras cuestiones similares, sino que es una llamada a una vida nueva en Cristo. Una renovación espiritual en continua acción. Es decir la urgencia del ser humano en continua conversión como diría el beato Santiago Alberione.

• ¿Cómo te preparas para el encuentro con Dios en una vida nueva?

Domingo XXXIV del Tiempo Ordinario / Solemnidad 24

de noviembre de 2013

Cristo, Rey del Universo

I. Introducción general

II. Comentarios de los textos bíblicos

Hemos llegado al final del año litúrgico y llenos de fe podemos afirmar con San Pablo: “Dios nos transformó del Reino del poder para hacernos llegar al reino de su Hijo amado, en él tenemos redención, el perdón de los pecados” En el somos miembros del cuerpo y sangre de Cristo que conmemoramos en cada una de las eucaristías que celebramos, es decir actualizamos toda su vida y entrega por la humanidad, igualmente que su presencia.

1ª Lectura

El reino de Jesús nos ilumina continuamente porque tenemos la certeza de que con su victoria sobre la muerte comienza a reinar como acción conciliadora del mundo, pero también como ofrecimiento por los que sufren en el cuerpo y en el alma. En una palabra se construye la paz, fruto de la justicia. Jesús sigue gobernando el mundo, en la media en que su palabra reina y tiene el objetivo de hacer brillar la bondad, la mansedumbre, la armonía, la alegría, la reconciliación y la paz, producto del camino del ejercicio de su palabra.

46

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

(2Sam 5, 1-3) David es ungido como rey de Israel El texto nos muestra cómo Dios de lo que no cuenta según los humanos, cuenta para él y hace su gran obra y nos relata la historia de David, dedicado a cuidar ovejas, pero igualmente cómo de los guerreros filisteos con un seguidor de Israel hace su obra. No es la fuerza humana la que se impone, sino la seguridad en Dios la que cuenta según la vida de fe. Después de la muerte de Saúl, es ungido rey de Judá, residiendo en Hebrón donde gobierna siete años y medio (2Sam 2,1-4). Después de haber sido proclamado rey de Israel entero, David gobernó por 33 años y lo hizo siempre manteniendo la paz entre las tribus, convirtiéndose así en símbolo de autoridad justa que defiende a su pueblo de los enemigos externos logra implantar la justicia en medio de su gente.


Así el texto de hoy nos ayuda a elaborar el ejemplo de manejo de autoridad, liderando al pueblo en la lucha por la libertad y la justicia, sin utilizar la imposición y la arrogancia. Y finalmente es alguien que sabe convivir con los líderes populares, respetándolos y compartiendo con ellos el poder en el temor del Señor, de hecho el rey David hace una alianza con los ancianos de Israel, en Hebrón en la presencia del Señor (2Sam 5,3).

todo está supeditado a él, depende de él. Dios en la persona de Jesús creó y recreó la humanidad entera, convirtiéndose en cabeza del cuerpo que es la Iglesia. Por medio de su muerte nace una nueva creación. Resucitando, es el primogénito de entre los muertos y con la resurrección continua moviendo alrededor suyo el cielo nuevo y la tierra nueva de la que participamos todos los cristianos por el bautismo.

2ª Lectura

Evangelio

(Col 1,12-20)

(Lc 23,35-43)

Colosas era una pequeña ciudad de Asia Menor. Los cristianos de Colosas eran provenientes del paganismo y acostumbraban a reunirse en las casas de familia por las circunstancias particulares de la naciente organización religiosa y por la persecución que ya se sentía por parte de las religiones vigentes. Los cristianos estaban amenazados por una corriente de paganos y judaicos. Los seguidores de estas religiones daban mucha importancia a los poderes angélico y las concepciones cósmicas, además de otros seres intermediarios entre Dios y los hombres porque para los habitantes del sector tenían importantes en el destino de cada persona.

Señor, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino

Cristo es raíz, centro y fuente de unidad de toda la creación; tronos, dominaciones y potestades

Ya en la transfiguración Jesús fue presentado como el Elegido de Dios, no en sentido triunfalista o emperador que exige vida a los súbditos, sino como a quien el Padre celestial eligió para salvar a quienes habían sido marginados. Es decir el título es asociado al buen Jesús como el siervo de Yavé que nos cuenta Isaías (42,1) mediante el sufrimiento y la entrega de la vida para salvar a la humanidad, tal como lo hizo Jesús. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

47

Guías Homiléticas

El tema que nos propone es justamente un himno en el que Pablo quiere mostrar que Cristo Jesús es plenitud humana y plenitud divina y domina el cielo y la tierra. Por tanto los cristianos no tienen mediaciones cósmicas sino que se encuentran directamente con Jesús; no se sirven de poderes angélicos para conseguir la salvación, sino que todo es dado en la persona de Jesucristo; su sangre derramada en la cruz nos reconcilió con Dios y sus creaturas.

Según Lucas, junto a la cruz de Jesús hay espectadores curiosos: líderes políticos, religiosos judíos y soldados. Junto con el reo estas personas representan a los que se sentían atraídos por la expectativa acerca de el mesianismo y realeza de Jesús frente a los pobres y marginados, de hecho la burla se hace refiriéndose a los títulos Mesías y Rey de los Judios. La burla de los jefes y soldados evidencia el modo como esas personas imaginaban el mesianismo… “Si tú eres rey sálvate a ti mismo”.

Guías Homiléticas

Esas concepciones religiosas producían consecuencias en la búsqueda de conocimientos del mundo y fascinaban porque estos temas dominaban el misterio que dominaba a los hombres. Además depositaban confianza en esas fuerzas superiores. Y todo esto desde luego comprometía la fe cristiana de la comunidad de Colosas.

La pregunta fundamental resuelta hoy es: ¿Quién entra con él en el paraíso? ¿Quién cuenta al final para el buen Jesús, rey del universo? Y el episodio escuchado en el evangelio es con la propuesta de una nueva sociedad en la que tienen cabida todos, empezando por los marginados y rechazados por la sociedad de hoy: los bandidos, los criminales, los pecadores, personas que la sociedad rechaza, los crucificados con Jesús y como Jesús. Y lo hace por que la misericordia de Dios es grande


Guías Homiléticas Había un letrero exhibido en la cruz que decía: “Este es el rey de los judíos” por lo que ahora después de haberse presentado la burla, se llama la atención por el hecho de que el letrero a pesar de la risas y carcajadas, se afirma la presencia de la realiza del buen Jesús capaz de dar la vida . Con el episodio del buen ladrón, Lucas quiere darle realce a las características propias del evangelio, mostrando que la misericordia de Dios jamás se agota, siempre y cuando las personas es-

tén dispuestas a aceptarla. Por otra parte afirma que en la cruz se inicia la auténtica realeza. La súplica o grito del buen ladrón representa el clamor de todos los pecadores de nuestra sociedad de los cuales Jesús recuerda y comienza a reinar con ellos a partir de las palabras expresadas en el patíbulo: “Hoy estarás conmigo en el paraíso”, recuerdo del Edén donde el ser humano experimentará el placer de una sociedad fraterna e igual para todos y así hace la expresión más elocuente de la misericordia divina.

III. Puntos para la reflexión • El rey Jesús que escucha el clamor de los pecadores nos interroga acerca de la actitud misericordiosa que tenemos para con nuestros hermanos de la comunidad en la que vivimos. • ¿Cómo podemos descubrir el rostro de Dios en nuestros hermanos, sobre todo los más necesitados, no tanto de pan cuanto de confianza y paz con nuestro tiempo dedicado a ellos? • El reinado de Jesús en la cruz nos debe cuestionar acerca del prestigio y el poder. El Reinado de Jesús nos invita a llegar a nuestro mundo por medio de los pequeños detalles escondidos en la historia no como medios para aparecer, sino para ayudar dando vida a nuestros hermanos con los cuales compartimos la historia.

Domingo I de Adviento / A 1

de diciembre de 2013

I. Introducción general Empezamos el año litúrgico, tiempo de preparación para el nacimiento de Jesús. El comercio lo ha hecho desde hace un buen tiempo. Adviento significa venida, llegada, esperanza, alegría del Señor, del Hijo de Dios y hermano de la humanidad. El nacimiento es entonces apenas el momento inicial y la ocasión oportuna para celebrar

48

Diciembre

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

La salvación está cerca

en estos cuatro domingos la tan significativa navidad para nosotros. En este tiempo encontramos un ritmo más intenso de espera y esperanza, de alegre vigilancia como una novia esperando a su amado, como un incansable vigilante deseando el amanecer, como la tierra seca espera la lluvia para hacer germinar las plantas. Aguardamos la llegada del Señor afi-


La mística del adviento nos mueve también a cultivar una nueva actitud delante de las realidades humanas con relaciones fraternas verdaderas y duraderas que deben fortalecer nuestra vocación de testimonio de esperanza, superando todo el pesimismo y desencanto que nos pueda sobrevenir.

II. Comentarios de los textos bíblicos 1ª Lectura (Is 2,1-5) Isaías vive tiempos difíciles en que el pueblo abatido por los pesos de los tributos era engañado por los líderes políticos. Ellos buscaban apoyo en las alianzas que los profetas portavoces de Dios tenían que atacar fuertemente, porque se fundamentaban en el miedo, en la inseguridad y en la sumisión. El profeta tiene una visión particular de Judá y Jerusalén, se trata de una intuición acerca del hombre de Dios que procura estar atento al clamor de su pueblo. El profeta pretende vislumbrar delante de la historia que surgirá a partir de la toma de conciencia de los menos favorecidos que no perderán la esperanza, ni la disposición a luchar por el bien de la humanidad. La visión se refiere al Monte Sión, sobre el cual se construirá un templo, es decir una casa de Dios en el lugar

Isaías imagina el monte de la casa de Dios como el centro que irradia enseñanza a través de la Palabra del Señor como vértice de convergencia de todos los pueblos, medio para lograr construir una sociedad nueva basada en la voluntad de Dios, expresada en su Palabra. El buen Dios nos enseñará sus caminos para que andemos en el camino verdadero que conduce a la salvación. Justicia, paz, desarme y bienestar para todos, esto es lo que el profeta intuye a partir del reconocimiento del único verdadero Dios que camina en medio de su pueblo, como un Pentecostés en el Antiguo Testamento, factible solo cuando el ‘pueblo se deje guiar por la senda de la luz divina como nos dice el Papa Francisco en su encíclica Lumen Fidei.

2ª Lectura (Rom 13,11-14) Ya está cerca nuestra salvación El texto nos invita a recordar las responsabilidades asumidas con el bautismo, uniéndonos a Cristo como propuesta de iluminación espiritual del mundo nuevo, descubriendo en el presente semillas de eternidad. Por eso seremos capaces de transformar la vida en tiempo de gracia y de salvación, solo depende de nuestra actitud ante la fe y ante la historia. El texto de hoy inicia con unas afirmaciones “Ya es hora de despertar. Nuestra salvación está más cerca cuando llegamos a la fe” Los cristianos debemos leer el presente a la luz de Jesús que hizo, hace y está haciendo acciones para que Dios se haga presente en cada corazón humano, pero a la vez somos la prolongación de su Palabra. Pablo nos habla del futuro como oportunidad ofrecida a todos los que sueñan con aquél tipo de sociedad por la cual Jesús dio la vida y quiere luchar por ella. Así los cristianos vivimos el presente abiertos al futuro sembrando semillas de fe y esperanza.

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

49

Guías Homiléticas

El texto de Isaías y Mateo alimentan nuestro sueño de paz y reconciliación. Como María, el Espíritu nos llena de Palabra haciendo crecer en nosotros una actitud de humilde espera, de fe comprometida con la vida para renacer en la seguridad del nuevo parto de salvación de Dios en nuestro tiempo tan marcado por decepciones e incertidumbres producidas por nuestros hermanos de la misma historia.

más alto, donde el pueblo va a dar culto a Dios, al único Dios, al Dios verdadero juez de los pueblos y arbitro de muchas naciones.

Guías Homiléticas

lando nuestra sensibilidad para descubrir los numerosos signos que revelan la presencia de Dios en nuestro tiempo, tan destruido y deshumanizado que no son sino signos evidentes del distanciamiento del proyecto de Dios para el cual él nos ha puesto aquí sobre la tierra.


Guías Homiléticas Es verdad que cada día avanzamos hacia nuestro final, pero Pablo subraya en esta ocasión que ya está rayando la madrugada de la vida nueva para todos, madrugada que tienen los corazones puestos en la resurrección de Cristo (1Cor 15,47).Confiamos en la militancia del evangelio y por el evangelio de cada cristiano, como acción de su responsabilidad bautismal.

Evangelio (Mt 24,37-44) Estemos en vela La posición de Noé traduce bien la postura del hombre de fe, quien no contaba con datos de ningún tipo para prever el diluvio destructivo que se venía sobre ellos, sino que solo se fía de la Palabra de Dios y sus lineamientos. Noé sigue las claves de Abraham, modelo de creyente, es decir caminar incondicionalmente con Dios y para Dios. Ellos vivían antes del diluvio normalmente: comían, bebían y se casaban, no esperaban hacer cosas importantes, pasaban la vida sin hacer mucho y cuando menos lo esperaban, llegó el diluvio y se lo llevó todo. Todo los tomó por sorpresa. Se da un cambio brusco de la seguridad a la destrucción, como nos puede suceder a nosotros, repentinamente todo puede cambiar por completo, recordando que la vida es tan frágil y tan relativa que aún el más lleno puede convertirse en el

más vacío. Con todo esto nos presenta una voz de alerta y un llamado a la vigilancia porque lo desconocido o lo imprevisto puede venir, y las seguridades humanas fallan, por tanto debemos saber realmente en donde fundamentamos nuestra espera, sino en Dios fuente de vida por excelencia. Debemos vivir vigilantes porque no sabemos qué día vendrá el buen Dios a nuestro encuentro, cuando será nuestro encuentro con él o la partida al paraíso. Debemos estar dispuestos a atenderlo, a acogerlo en cualquier momento y lugar, con una vida digna. Vigilar significa estar constantemente en vela, vivir en actitud de servicio al prójimo; significa lucha, fatiga, renuncia y opción por Dios y por los hermanos con los cuales se comparte. La vigilancia cristiana depende de algo que está dentro de nosotros, del paso por nuestra vida de Dios que nos mantiene despiertos y a la escucha en medio del silencio interior; de Dios que nos empuja a hacer realidad su reino a nuestro alrededor. La vigilancia nos previene de los que viven preocupados por saber el día y la hora de las desviaciones de los falsos mesías y falsos profetas o de la relajación que nos ofrece el mundo. Hemos de vivir con sobriedad, convencidos de que lo verdaderamente necesario para una vida humana digna es mucho menos de lo que nos invita la sociedad de consumo. Fundamentemos la vida en Dios y su palabra que nos mantendrá vivos hasta la eternidad.

III. Puntos para la reflexión • Dios quiere un pueblo unido La visión de Isaías asegura un nuevo reinado del Señor. Él reunirá a todos los pueblos en su casa: creyentes, gentiles, hombres de toda raza, pueblo y nación. Ahí nos entregará su norma y las naciones marcharán por los caminos de su voluntad. Él será juez y árbitro de todos los pueblos. Las armas de guerra se convertirán en instrumentos de trabajo y de paz. El Adviento es tiempo de esperanza. La venida del Señor abre horizontes de vida. • La salvación está cerca Para que Dios realice su obra necesita que el hombre tenga conciencia del momento que vive. La oportunidad que Dios le otorga es apremiante y no se puede despreciar. La venida del Señor exige comportarnos con dignidad y con vigilancia. La espera del Señor requiere

50

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


una conversión sincera y llena de amor. Su pronta venida exige cambiar de ropa, purificarse interiormente y recrear la fe. Su cercanía exige estar abiertos a su luz, para vestirse de claridad. “Estén en vela porque no saben qué día vendrá el Señor”. El tiempo de espera se traduce en vigilia de oración. • El hoy del Adviento La Iglesia conoce el sentido del Adviento. No duerme en sueño de indiferencia. Celebra con fe y vigilancia la segunda venida del Señor o el recuerdo del nacimiento del niño Jesús. Los dos acontecimientos le invitan a vivir el hoy de la salvación del pueblo. Más aún. La Iglesia conmemora su venida trabajando por el reino de Dios. La mirada al porvenir no es una huida del presente, sino reorientación de su comportamiento. La proyección hacia el futuro compromete el ahora de su historia. ¿Qué sentido tiene para ti el Adviento? ¿Cómo piensas vivirlo? ¿Qué tiempo de oración decides hacer? Señor, abre mi corazón a la venida de tu Hijo. Que el Adviento de su espera sea gracia de conversión y compromiso de trabajo por su reino.

Domingo II de Adviento / A

I. Introducción general

II. Comentarios de los textos bíblicos

Los medios de comunicación han puesto la noticia de la navidad a volar, pero desde luego siempre en torno al comercio con las previsiones acostumbradas y hasta con símbolos propios que le acompañan y hasta las comidas típicas afloran en el mercado del país. El nacimiento de Jesús es un motor económico que se desenvuelve alrededor de la gran presión de consumo.

1ª Lectura

Nuestra preparación es otra, preparamos para la venida del Señor. Y en este domingo aparece la figura de Juan Bautista quien abre el paso y nos invita a caminar en continua conversión porque él está preparando el camino del Señor.

(Is 11,1-10) El texto muestra con imágenes fuertes, la identidad de ese personaje quien va a trabajar en favor del pueblo. La identidad está descrita en “Reposará sobre él el espíritu de Yavé, espíritu de sabiduría e inteligencia, espíritu de consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor de Yavé”. Bajo su liderazgo el pueblo respirará aires nuevos, porque al brotar del tronco de Jesse se dejará guiar por vientos nuevos. El nuevo líder será capaz de captar y catalizar la esperanza de vida que surge por toda parte, dándole un significado y consistencia particular. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

51

Guías Homiléticas

de diciembre de 2013

Guías Homiléticas

8

Preparen el camino del Señor


Guías Homiléticas Ese líder será perspicaz, sometiéndose al propio Dios y gobernará al pueblo defendiendo los intereses y derechos del pueblo que lo escogió como Señor y le ofrece respeto, veneración y devoción como a su único Dios.

El líder estará comprometido con la causa de la justicia. Hará justicia y además desenmascarará que distorsiona los acuerdos, porque los poderosos son capaces de arroyar a favor de los testimonios falsos. Por eso tendrá muy en cuenta a los humildes. Finalmente tenemos una imagen de paraíso al describir la mejor página de reconciliación al describirnos la convivencia de los animales considerados antagónicos y descompensación de fuerzas: el lobo con el cordero; el leopardo con el cabrito; la vaca y el oso; el león y los bueyes; porque nadie hará daño a nadie; nadie atacará a nadie, la convergencia de la paz es un hecho, además que un indefenso niño los podrá conducir. Hecho que alumbra a un pueblo nacido con dotes para compartir y lleno de diferencias, osadas hasta el ataque hermano contra hermano. No habrá ningún de mal que perjudique en toda la tierra montañosa de ese pueblo, porque el país reconocerá plenamente al Señor. Como las aguas caminan hacia el mar. Este es un pueblo cuyos líderes están comprometidos con la justicia, primer peldaño de la paz y levantarán la bandera que atrae a todos. Esto nos permite soñar con el anhelado día en que el mundo todo estará unido en torno de una misma causa, independientemente de la raza, lengua o credo. Las comunidades que caminen en esa dirección desde ahora serán santas porque construyen la visibilidad de Dios sobre la tierra.

saber lidiar con las diferencias, conservando al mismo tiempo la unidad y la fraternidad. La solidaridad entre los miembros de las comunidades, tienen sus raíces en la pasión, muerte y resurrección de Cristo, quien se ofreció por la reconciliación del mundo, de ahí el camino recorrido para enseñar la práctica de los cristianos en la acogida y el servicio. La propuesta paulina nos exhorta a la perseverancia y consolación en la superación de los conflictos internos y externos de las comunidades. En el tiempo de los profetas la palabra consolación significaba liberación de Israel y su constitución como pueblo de Dios. La biblia, es por tanto herramienta que ayuda al pueblo a caminar hacia la justicia-liberación-paz, y es el proyecto que Dios planteó para sus criaturas. De ahí Pablo concluye que la mejor manera de obtener el proyecto de Dios es la unión de sentimientos de cada uno cediendo por el otro para construir la comunidad, la familia y la parroquia. De hecho se acostumbraba a decir que Dios en el Antiguo Testamento, manifestaba su fidelidad y misericordia con el pueblo de Israel solamente. Y Pablo, asegura que en Jesucristo, Dios revela su fidelidad a los judíos, manteniendo así las promesas hechas a los antepasados; sin embargo su misericordia es manifestada ahora a los no judíos, convocando a todas las naciones a la alabanza del único Dios. Convertir las comunidades, en variedad de razas, culturas, funciones, ministerios es descubrir hoy la fidelidad y misericordia del buen Dios que camina con nosotros en la familia, en la escuela y la parroquia, en una palabra en cada unidad de hermanos.

2ª Lectura

Evangelio

(Rm 15,4-9)

(Mt 3,1-12)

Conversión de las comunidades

Arrepiéntase porque el Reino de los cielos está cerca

El capítulo 15 de esta carta es una invitación para que los hermanos superen los conflictos dentro de la comunidad en la que las diferencias deben ceder ante la unidad, buscando lo que nos une y dejando lo que nos separa. Por tanto es necesario

52

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

La palabra de Dios nace de dentro y para descubrirla es necesario la oración, allí habita Dios, vida de paz, de alegría, de amor, de lucha, sean las que sean las circunstancias, razas o culturas


Juan Bautista predica en el desierto. Motiva a la gente para mirar su propia vida y su propia historia, sin prejuicios, sin defensas, sin intereses, porque allí hasta el aire es puro, transparente, sin los humos del egoísmo y de la violencia, con su propuesta auténtica: “Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos”. Solamente en medio de las preocupaciones, de las luchas y las alegrías de cada día podemos seguir el camino de Jesús. Es únicamente valorando las cosas de la tierra como Jesús valoraba y nunca

El tema de la conversión es central en la predicación de Juan el Bautista, igual que en Jesús. La opción por el Reino de Dios invita al despojo total de sí, a la renuncia a toda forma de orgullo, a seguir dócilmente los impulsos del Espíritu. La persona que quiera seguir a Jesús está llamada a ser un vacío a favor de Dios, solo así podremos poner en práctica los mandamientos de amor a Dios y amor al prójimo. La austeridad y el contenido de la predicación de Juan nos hacen descubrir, que no es suficiente el cumplimiento formalista, sino que debe comprometer al ser humano tanto que su conversión debe notar y producir una transformación del corazón, evidenciable en obras. El que no tenga un compromiso concreto y serio en la vida no puede ir entendiendo el evangelio, porque a Jesús lo va encontrando el que busca trabajando por la transformación de la humanidad. Juan el Bautista se convence de que es el precursor del buen Jesús, y su tarea es allanar el sendero, preparar el camino, sabe que quien viene atrás es más que él, como podríamos hacer nosotros al reconocer a Jesús en cada uno de nuestros hermanos de la Iglesia y mucho más con los compañeros de labor eclesial.

III. Puntos para la reflexión • Dios nos sugiere cómo debemos construir nuestra comunidad de paz, donde se busque lo que une y no lo que separa, donde compartan todas las diferencias en una convergencia cristica. • La armonía de la comunidad se construye ofreciendo cada uno algo para ello. • Caminen en continua conversión, afianzando el camino de Dios sobre la tierra, porque el reino de Dios que habita en cada uno de nosotros es paz, pero exige compromiso serio de cada uno.

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

53

Guías Homiléticas

A Juan el Bautista, hombre de Dios, que vivía lejos de los centros de poder y de las cátedras de ciencia, le llega el mensaje de Dios, mensaje que fue escuchando y creciendo hasta convertirse en el objetivo de su vida. Se pone en la tarea de hablar de Dios, es un profeta, por eso no murió en su cama, el precio de su predicación le cortó la cabeza.

con otros criterios, por eso debemos tener el corazón puesto en las cosas de Dios.

Guías Homiléticas

y en ese ejemplo está Juan el Bautista, un hombre de Dios, un hombre de búsqueda, un profeta austero, inquieto, que gritó a todos sus simples y fuertes verdades. Un hombre al que le preocupaba la vida de su pueblo oprimido religiosa y políticamente. Juan el Bautista un hombre del desierto, espacio de meditación y reflexión, de quien el pueblo esperaba el Mesías.


Guías Homiléticas Domingo III de Adviento / A 15

de diciembre de 2013

I. Introducción general Cuando vamos por los caminos del país o por las ciudades encontramos muchas señales viales que no ayudan en el camino. Estas señales nos van indicando como el buen Jesús y como todos sus representantes lineamientos que ayudan, pero no son el objetivo, son medios, hasta el líder espiritual más ejemplar es siempre medio para ir a Dios. Pero igualmente cada uno de nosotros es señal y motivación y esto es lo que nos sugiere la palabra de Dios de este domingo: debemos gritar a los desanimados y dar coraje a los fuertes. No tengas miedo Dios está a tu lado. ¿Dónde, de hecho está Dios? Miremos la propuesta de Juan que está oyendo y viendo: los ciegos recuperan la vista; los paralíticos andan; los leprosos son curados; los sordos oyen; los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia la buena noticia como dice el evangelio de hoy. Los cristianos estamos llamados a ser pacientes y perseverantes, firmes en la fe, convencidos de que de esta manera vamos construyendo juntos el reino que el buen Jesús nos confió.

Jesús es la plenitud del amor

profeta canta de manera espectacular la esperanza de salida del cautiverio y el regreso a su propia tierra, es sencillamente el símbolo de una mayor esperanza. El camino de volver al desierto, igual que el camino de esclavitud de Egipto en la espera de la tierra prometida es como un nuevo éxodo, el camino es el desierto pero hay la certeza de la esperanza en la tierra prometida, que es paradisiaca. Y, a su vez, la esperanza es la fuerza para caminar, nada de brazos cansados o pisadas tambaleantes, nada de miedo, nada de duda, es Dios mismo quien viene para salvarnos. La certeza de que Dios es salvación nos da la fuerza y el coraje transformante.

1ª Lectura

Ahí ya no habrá ciego, sordo, mudo o personas limitadas físicamente, Estos no solo caminarán por si mismos, sino que brincarán como cabritos, los mudos cantarán himnos como las voces angelicales. Los ciegos verán como las águilas. En fin, todo se transformará en vida y vida abundante. Además el cautiverio terminará, serán libres como las palomas, todo porque Dios está con su pueblo y lo conducirá con la máxima perfección. Y para él iremos siendo acogidos como en el monte santo con júbilo y alegría haciendo desaparecer la tristeza y la depresión.

(Is 35, 1-6.10)

2ª Lectura

Dios mismo vendrá y nos salvará

(Stgo 5,7-10)

El pueblo estaba en cautiverio. Los enemigos tenían algunos los ojos unidos, otros estaban mutilados, y todos desilusionados y desanimados. El

La carta de Santiago es el texto del nuevo testamento que más habla del conflicto entre ricos y pobres y mucho más este capítulo cuestionan-

II. Comentarios de los textos bíblicos

54

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


La segunda actitud es la perseverancia: “ fortalezcan sus corazones porque la venida del Señor está cerca”, para el pueblo de la biblia, del corazón es que nacen las opciones que marcan la vida de las personas y de cada una de las comunidades o parroquias. Por tanto fortalezcamos el corazón para perseverar en el camino realizado dando consistencia a las prioridades que la comunidad se ha propuesto. La tercera actitud es la unidad, que se hace más necesaria cuando los conflictos internos de la comunidad son agudos, recordando que quien juzga es Dios. Los profetas han sido ejemplo en el sufrimiento para lograr instaurar la Palabra de Dios y las propuestas éticas que han confluido en una sociedad justa y fraterna. Evangelio (Mt 11,2-11) ¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro? Los poderosos cuando ven en peligros sus intereses, ponen en marcha represión y era justamente lo que le sucede a Juan el Bautista asediado por Herodes que predicaba fuerte y

Juan el Bautista representa a todos los hombres honestos y justos del Antiguo Testamento y de todas las épocas que tienen la valentía de expresar sus dudas y cuestionar con seriedad, pero a la vez se identifica con la propuesta de Jesús y a través de sus discípulos manda preguntar: “¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro? Lo que Juan Bautista oye hablar de Jesús parece no coincidir con lo que él pensaba, Juan Bautista oye hablar de la compasión de Jesús por las personas en general y también de la opción de él por los pecadores. Juan ha visto señales de salvación. Las curaciones que hace Jesús son señales de solidaridad con los sufrientes es la mayor importancia de su misión: abrir los ojos a los ciegos, aún a los que los tengan bien; abrir los oídos a todos los sordos, aunque los tengan abiertos; hacer andar a los inválidos aunque tengan manos y pies buenos, en fin dar más vida a todos, es decir, hacer mover a todo el mundo no solo físicamente, sino espiritualmente, convencidos de que una iglesia dinámica es el verdadero testimonio de Cristo resucitado. Todo esto se resume en una sola palabra: anunciar la buena nueva a todos los necesitados de luz, como nos lo sugiere el Papa Francisco en su encíclica Lumen Fidei. Es que evangelizar significa llevar la buena noticia a quien la necesita sin miedo y sin acomodaciones, como lo han hecho los profetas y esto es justamente lo que los discípulos de Juan el Bautista observan. Después que los discípulos de Juan se alejan, Jesús se dirige al pueblo para hablar de Juan y les aclara que en el desierto estaba este profeta, que es más que eso y lo define como aquél que abre el camino, aquél que allana el sendero, aquél que bautiza con agua, aquél que ha dado testimonio de austeridad y que ha invitado a la conversión, es un hombre de Dios en otras palabras.

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

55

Guías Homiléticas

Dios no abandona a su pueblo sobre todo en las horas más difíciles, tarda cuando es necesario, pero llega y tiene señales de recompensa repletas de justicia para su pueblo. Por eso es necesario tener paciencia en la espera que significa confianza en el buen Dios, y en efecto el agricultor espera la lluvia, convencido de que nada vamos a cosechamos sino sembramos en la esperanza.

cuestionaba con sencillez, pero con fundamento la situación de pecado.

Guías Homiléticas

do el enriquecimiento a costa del trabajo de los trabajadores. Pero en medio de esto se invita a manejar la actitud de la paciencia que no se puede confundir con la resignación. El Señor quiere ofrecer a cada uno de acuerdo a su propia conducta. Para los cristianos el escritor Santiago recomienda paciencia y para hacerlo toma un ejemplo de vida del campo; esperar con paciencia, mirando al labrador que espera los frutos de la cosecha, aguardándolos con paciencia hasta recibir las lluvias tempranas y tardías.


Guías Homiléticas III. Puntos para la reflexión • Jesús es la plenitud del amor En Jesús la profecía se convierte en realidad. Su respuesta a Juan no es discurso sobre su mesianismo, sino recuento de hechos de vida. “Los ciegos ven y los inválidos andan; los leprosos quedan limpios y los sordos oyen; los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia la Buena Noticia”. En Jesús no hay falsa promesa, ni estafa electoral… Su paso no es campaña, sino liberación real. Su programa es oferta de vida; es respuesta de salud para los enfermos y de acercamiento a los excluidos de la sociedad. • El apóstol Santiago nos invita a la paciencia y a la fe hasta la venida del Señor. En el espíritu del Adviento no cabe la ociosidad, ni el vicio, ni la mentira, ni el soborno, ni la injusticia. El Adviento es camino de esperanza, de rectitud interior, de verdad y de justicia. • La Iglesia sabe que esta fiesta de la vida exige cambio de corazón. Por eso celebra su venida en camino para llenarse de la gloria del reino de Dios. • ¿Qué obras de promoción haces en tu barrio o condominio para que la Navidad sea un signo de vida para todos? ¿Qué signos de amor puedes hacer en favor de los enfermos de tu comunidad? Señor Jesús, cambia mi corazón y hazme un testigo de tu poder sanador.

Domingo IV de Adviento / A 22

de diciembre de 2013

I. Introducción general En este cuarto domingo de Adviento se presenta la figura de María, la madre del Señor, rea-

56

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

La Virgen María espera un Hijo

lizando la plenitud de las palabras de Isaías. La joven virgen se convierte en madre y el nombre de Emanuel de un simple grito de guerra pasa a ser la verdadera presencia de Dios en medio de la


Todo hijo es recuerdo de su padre y su madre y el nacimiento virginal de Jesús es obra más de Dios como manifestación del Emanuel, es decir Dios con nosotros con un objetivo claro y preciso de salvación para la humanidad.

II. Comentarios de los textos bíblicos 1ª Lectura (Is 7, 10-14) He aquí que la virgen concebirá y dará a luz un hijo El texto nos narra como el rey Acaz tiene miedo de los reyes de Israel y de Siria porque planean darle golpe de estado y poner otro en su lugar, mientras tanto Isaías lo motiva y le dice que el plan de ellos fracasará porque la voluntad de Dios no es esa, los reinos tienen su procedencia divina y les dice: “ Si ustedes no creen, no subsistirán” (Is 7,9). El pueblo de Judá está amenazado, por una parte, por Asiria, y, por otra, los pueblos vecinos, Siria, edomitas y filisteos. La disyuntiva era clara; aliarse con Asiria, o con sus vecinos. Y Acaz, el rey de Judá, había escogido al más poderoso, Asiria, como amigo. Isaías se presenta y aconseja al Rey el tercero y único camino salvador para Judá, una postura no de alianzas políticas ni diplomáticas, sino de fe. Precisamente de lo que carecía el rey Acaz y sus asesores; que tenga fe, que confíe única y exclusivamente en el Dios de la Alianza y las Promesas.

No podía Acaz prescindir de Dios en sus decisiones y convertirse en un rey como los demás reyes de la tierra. Si obraba así era como una usurpación divina. Isaías, consciente de la infidelidad del rey y de no haber sido escuchado, se presenta ante la corte demostrando cómo Dios puede hacer lo que desea y cómo deben fiarse de él, que le pidan un “signo” a cualquier nivel, en lo hondo del abismo o en lo alto del cielo. Pero Acaz no está dispuesto a cambiar su política de pacto con Asiria y lleno de hipocresía rechaza el signo. Isaías no aguanta más. Y reprochando su conducta hace este maravilloso anuncio de que la fidelidad y garantía de Dios estará siempre con el pueblo que se fía de él. Cuando, el comenzar nuestra era, una joven doncella llamada María quede embarazada sin concurso de varón y dé a luz un hijo, síntesis de lo humano y lo divino y en cuya vida, muerte y resurrección se den cita cumplidamente todos los anuncios de Isaías en estos capítulos conocidos como al “Libro del Emmanuel” ya nadie podrá negar la proyección mesiánica y salvífica de aquel Emmanuel en pañales de Isaías, cuya madurez nos ha sido revelada en Cristo Jesús.

2ª Lectura (Rm 1,1-7) Jesucristo nuestro Señor, Hijo de Dios, nacido del linaje de David Pablo escribe a las comunidades en las cuales convivían cristianos judíos y gentiles. Los judíos habían sido expulsados de Roma y ahora. Pablo Deja claro que el Evangelio que él enseña no es de su invención, sino que fue prometido por las escrituras del Antiguo Testamento. “Las palabras de los profetas, mucho tiempo encerradas con llave, ahora son liberadas, Pablo no habla de una 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

57

Guías Homiléticas

El origen con Israel está asegurado con David y con José, hombre justo. El origen davídico es recordado por San Pablo, que anuncia en Jesús la realización de todas las esperanzas del pueblo judío. José hombre justo, es el tema central del evangelio de Mateo, que más que observaciones rigurosas de ley, está fundada en el respeto al otro y en la misericordia.

El escéptico Acaz debió sonreir ante una respuesta divina para solucionar los problemas humanos. El profeta, indignado, se torna amenazador. “Si no tenéis fe, no subsistiréis”. Israel era un pueblo teocrático. El rey era simplemente el representante de Dios. Debía actuar siempre en depedencia de él, debía creer.

Guías Homiléticas

humanidad. El nacimiento producido se convierte en imprevisto explicable solo por intervención divina.


Guías Homiléticas predicción precipitada por parte de los profetas, sino de una promesa adelantada”. La promesa empezó con la llamada de Abrahán, en la que Dios prometió crear una gran nación de Abrahán y también prometió, “y serán benditas en ti todas las familias de la tierra” (Génesis 12:1-3).. Jesús es “de la simiente de David” (v. 3) – es el Hijo de David. Esta declaración “ubica a Jesús firmemente en el pueblo de Israel y, además, en el mismo linaje real” Aquí, Pablo podría haber vuelto a mencionar la promesa de las santas escrituras (v. 2), porque las escrituras prometen que el Mesías descendería de David (Isaías, 11:1, 10; Jeremías 23:5-6).

Evangelio (Mt 1,18-24) Jesús nació de María, desposada con José, hijo de David Tú le pondrás por nombre Jesús” porque salvará a su pueblo de los pecados.La palabra “pecado” designa todo aquello de lo que debe ser liberado el hombre y la humanidad: opresión, egoísmo, odio, explotación, guerra... Esta palabra expresa la total oposición a lo que es y quiere Dios para el hombre. Significa toda forma de mal que esclaviza al género humano de todas las épocas y lugares. Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, la expresión “perdón de los pecados” significa el resumen de toda la acción salvadora de Dios. Quiere decir que, con la aparición de Jesús, ha sido superada la separación entre Dios y el hombre. Jesús es el “Dios-con-nosotros” para nuestra salvación. Por tanto decir Jesús o Salvador es exactamente lo mismo. “Salvar” significa hacer pasar de un estado de mal a otro de bien. El mal

del pueblo está principalmente en “sus pecados”, en la injusticia radical de la sociedad, a la que todos contribuimos. Salvar del pecado incluye salvar de todo lo que nos oprime e impide llegar a ser en plenitud la imagen y semejanza de Dios, que es nuestra principal vocación. Con Jesús, Dios se acerca al hombre, le visita, le habla, le escucha. No es un Dios lejano, aislado en su poder, como lo representan la mayoría de las religiones, sino un Dios familiar, sencillo, pobre, hermano. Es “nuestro” Dios. El Dios cristiano no está lejos ni ausente: es un Dios humano, el “Dios-con-nosotros”, que se ha dado a conocer en un Niño, en un Hombre crucificado y resucitado. Un Dios para toda la humanidad, que nos invita a vivir como hermanos. No es el Dios de una religión, o de una raza, o de una cultura, o de una Iglesia, sino el Dios de los hombres, de todos sin limitación. El evangelista comenta el hecho y lo considera cumplimiento de una profecía (Is 7,14). Mientras por un lado el nacimiento de Jesús es un nuevo punto de partida en la historia, por otro es el punto de llegada de un largo y atormentado proceso. Con el término “Emmanuel” da la clave para interpretar la obra de Jesús, como salvador del mundo. No es éste un mero enviado divino en paralelo con los del Antiguo Testamento. Representa una novedad radical, Jesús ha nacido del Espíritu, de lo alto (Jn 3,13). Viene de David, pero a través de una línea de elección que supera la sangre. Cuando decimos que Jesús es el Emmanuel, estamos afirmando algo muy importante: que no estamos solos, que la fuerza del Espíritu de Dios está dentro de cada persona cristiana y católica de la historia, empujándola hacia adelante.

III: Puntos para la reflexión • La doncella está encinta La señal del amor de Dios a su pueblo es clara. La doncella espera un hijo, cuyo nombre revela su decisión insondable: ser uno con nosotros. Si el niño históricamente pudo ser el hijo del

58

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


rey, para nosotros es Jesús. Y la doncella, María. Sobre Jesús recae en plenitud el nombre de Emmanuel. Dios con nosotros es el Salvador. La Iglesia celebra el texto de Isaías y contempla el anuncio como un evangelio profético de la encarnación. Una mujer sencilla y pobre lleva en su entraña al Verbo de Dios. Así lo afirma la fe. Así lo celebra el pueblo.

• ¿Con qué actitudes personales esperas al Señor? Si tuvieras que hacer un nacimiento con las personas de tu comunidad o de tu barrio, ¿a quienes pondrías ¿Tú dónde te pondrías? • Señor, que tu venida sea realmente para Navidad de salvación.

La Natividad Del Señor / Solemnidad

I. Introducción general

II. Comentarios de los textos bíblicos

Dios entra en la historia de la humanidad por medio de una mujer marginada. Celebrar el nacimiento de Jesús, es hacer memoria de los eventos libertadores, compartiendo los límites de la vida de los pobres y sencillos.

1ª Lectura

Nace para nosotros el Salvador del mundo, como la comunicación de la noticia más importante, porque la historia toma desde entonces otro rumbo, una nueva visión, manifestándose la solidaridad del Dios fiel con la expresión del evangelio: “Gloria a Dios en lo más alto del cielo” Su gloria es acción concreta repercutiendo en la tierra, trazando para todos un proyecto de paz, fundamentado en el mandamiento principal del amor.

(Is 9, 1-3.5-) Un hijo nos ha nacido El texto de hoy describe la liberación de ese territorio dominado: La luz que brilla, expresado como la aurora que está por nacer (Is 9,1); La liberación del pueblo es semejante a la alegría de una cosecha abundante; como repartir los despojos de la guerra ganada, ya que ha derrotado al enemigo y porque ha conquistado lo perdido. Dios ayuda al pueblo y ayuda a quitar la carga que hasta el momento tenía. Isaías continúa describiendo la victoria exaltando el ejercicio del pueblo ayudado por el buen Dios superando los momentos difíciles de la vida y ofrece el nacimiento de un pequeño que va a ofrecer 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

59

Guías Homiléticas

de diciembre de 2013

Guías Homiléticas

25

Hoy nos ha nacido el Salvador


Guías Homiléticas libertad y salvación para la humanidad. Describe en primer lugar la característica del niño-esperanza para el pueblo sufrido que lleva sobre sus hombros el manto de rey. En segundo lugar muestra que su nombre da a conocer sus acciones en favor del pueblo: consejero maravilloso; Dios fuerte; Padre para siempre. Ese nombre extraño de un gran significado profundo será más sabio que Salomón capaz de hacer justicia al pueblo, será más fuerte que David, será líder que supera el liderazgo de Moisés conduciendo al pueblo a la vida definitiva. Ese es el proyecto Mesiánico que Dios pretende ver realizado en el mundo. El Nuevo Testamento lee este texto a la luz del nacimiento, muerte y resurrección de Jesús, porque tal especie no encontró resonancia en los reyes que hasta el momento hubo en Judá e Israel. Los cristianos pueden celebrar ya la promesa realizada en Cristo. 2ª.Lectura

(Tt 2, 11-14) La gracia de Dios se ha manifestado a todos los hombres Para San Pablo el punto de partida es la manifestación de gracia de Dios, que en Jesucristo traduce la salvación para todos y todas (Tt 2,11). La acción central de nuestra fe repercute en la práctica de los cristianos, cambiando catequesis por vida cristiana. Viviendo en medio de la sociedad establecida, que contrasta con el proyecto de Dios, sin escapar de los desafíos que el presenta, los cristianos somos convocados a vivir la novedad del evangelio. La novedad del evangelio tiene un aspecto de ruptura, pues debemos abandonar la impiedad y las pasiones mundanas, es decir romper con los esquemas y propuestas de la vida que son paganizados, fundamentados en objetivos materiales prioritariamente, cuando la prioridad es Dios. Pero igualmente el evangelio tiene un carácter constructivo viviendo en el mundo con equilibrio, justicia y piedad que sintonizan el modo de vivir en concordancia con el proyecto de Dios. Por tanto, la comunidad cristiana no sólo rompe los esquemas inicuos, sino que vive la justicia

60

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

fundamentada en el amor ofrecida por el Dios vivo traducida en fraternidad y prolongando de esa forma la práctica de Jesús.

Evangelio (Lc 2, 1-14) Hoy nos ha nacido el Salvador El Niño de Belén expresa la ternura de Dios, su proximidad al hombre, su sencillez. Nos dice que podemos encontrar de nuevo nuestra infancia, que el pecado no nos ha lastimado del todo, que podemos cambiar, que lo mejor de nosotros mismos es un reflejo de Dios. Jesús ha nacido en un pesebre, y esto expresa la “debilidad” de Dios, su solidaridad con los desheredados de la tierra, su proximidad con los que sufren marginación. La vida de este Niño quedará marcada profundamente por la pobreza, por el trabajo, por la incomprensión, por la liberación de los enfermos y pecadores, por la denuncia del afán de dominio y de dinero, por el amor. Jesús quiere nacer en la historia de los hombres, en nuestra vida personal, en la vida de cada comunidad y de cada familia. Y nace de nuevo en cada niño, en cada delicadeza, en nuestros gestos de ternura y de amor, en la solidaridad con el mundo del trabajo, en cada gesto de perdón, en cada verdad proclamada, en cada injusticia reprimida, en cada libertad conquistada... Jesús vuelve a nacer cada vez que reencontramos la firme ingenuidad de los pastores, su saber vivir al día..., porque significa que estamos preparados para hallar a Jesús en cada persona que espera de nosotros ayuda, consuelo, esperanza... Ya no estamos solos con nuestro sufrimiento, con nuestras ilusiones y anhelos, porque Dios está con nosotros. Dios se ha convertido en un Niño que está entre nosotros, y su presencia es la respuesta que estábamos esperando en lo más profundo de nuestro corazón. Hemos de prepararle sitio porque quiere vivir en


Una invitación delicada. No se les obliga a ir. Pero si se deciden a emprender el camino, tendrán una señal: un niño en un pesebre. Muy distinto a lo que podría esperar una persona razonable. Todo esto fue posible por ser hombres que vivían a la intemperie. Los pastores escuchan y responden a lo escuchado. Por eso verán y contarán lo visto. Finalmente, festejarán las maravillas de las que han sido espectadores y protagonistas.

“Les traigo la buena noticia, la gran alegría para todo el pueblo...: ha nacido el Salvador”. ¡Siempre la palabra pueblo! Cristo viene para llenar de alegría y de sentido nuestras vidas. Alegría, porque sabemos que nuestro Dios piensa en los hombres con amor, que baja hasta el hombre, ¡que se hace hombre! Un Dios que se hace caminante para recorrer junto a nosotros nuestro mismo camino, compartiendo nuestras penas y miserias, nuestras lágrimas, angustias y esperanzas. El buen Dios que viene a traernos a todos la vida para siempre. El Dios que viene a traer luz a la noche de nuestra vida. Alegría, porque los hombres podemos ser hombres a imagen del Padre. Buena noticia que anuncia el vuelco de las realidades terrestres que detallarán las bienaventuranzas (Mt 5,1-12).

III. Puntos para la reflexión • La luz de la salvación viene de Dios. “Un pueblo que andaba en tinieblas vio una gran luz”. Él es luz verdadera. Y su luz es vida del pueblo, esperanza del mundo. La victoria de la vida sobre la muerte, de la guerra y del hambre es obra de un Niño, príncipe de la justicia y de la paz. Navidad abre el horizonte de la ternura de Dios. La Navidad nos ofrece la sonrisa más cálida de Dios. Un Niño frágil es la fuerza de Dios. Un Niño sin habla es la palabra de Dios. Un Niño débil es signo de la nueva creación. Un Niño que llora, es gracia de liberación. Ha nacido el Salvador. • Toda la expectación del Mesías cabe en un verso pequeño del evangelio de Lucas: “Y le llegó el tiempo del parto y dio a luz a su hijo primogénito y lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre”. Navidad es una mujer joven y humilde, que limpia y viste a un niño recién nacido al amparo de la pobreza y entre paredes de marginación, lo envuelve en pañales y lo recuesta en un pesebre. Juan nos sintetiza y revela la Navidad con otro verso igualmente hermoso y breve: “Y la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros”. Aquí puso su tienda de campaña y con nosotros vive. 2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

61

Guías Homiléticas

Los pastores, que se encontraban en “la noche” al recibir la “buena noticia”, quedaron envueltos “de claridad”. Cambio total de la situación, indicio de la llegada de un mundo verdaderamente nuevo, en el que las realidades puedan aparecer al fin como son. Creen y son modelo de cristianos que depositan su inseguridad en la pobreza del evangelio por tener un corazón limpio de miras egoístas.

El anuncio gozoso del ángel a los pastores hace referencia a Isaías 9,1-6: se habla de luz, de un pueblo necesitado que camina en tinieblas, de alegría, de un recién nacido que trae una paz sin límites. El Emmanuel esperado está ya presente en medio del mundo. El ángel lo llama Salvador, Mesías, Señor.

Guías Homiléticas

nosotros. Viene para hacer posible la ternura y la esperanza, la alegría y la paz entre los hombres. Pero viene también con una gran exigencia: la historia con Él empezará de nuevo y todos quedaremos divididos a un lado o a otro: o con Él o contra Él, pero a través de las obras.


Guías Homiléticas

• Desde ahora la tierra es casa privilegiada del Creador. La carne del hombre es su carne. Es uno de nosotros. Y cada persona, en él y por él, es hija de Dios. Está en gracia y en comunión con la divinidad. Desde la Navidad de Jesús no caben guerras, ni hambres, ni muerte. La gloria de Dios en el cielo es la justicia y la paz entre los hombres que él ama. Así debiera ser. ¿Cómo vives personalmente la Navidad? ¿Cómo puedes hacer de tu familia y de tu comunidad una Navidad permanente? Que tu santo nacimiento, oh Jesús, traiga paz y amor a todos los hombres de la tierra.

Domingo Sagrada Familia / Fiesta 29

de diciembre de 2013

La Familia es el porvenir

I. Introducción general

II. Comentarios de los textos bíblicos

El mundo es la familia de Dios, pues Jesús vino al mundo y se encarnó en nuestra realidad, se hizo hermano nuestro, experimentando el drama de toda familia humana, conduciendo a su pueblo para la vida en plenitud. Con la fiesta de la Sagrada Familia, celebramos no solo el sufrimiento y lucha de la familia de Nazareth, sino el sufrimiento de América Latina, pero con la certeza de que estamos siempre guiados por el buen Dios en el camino de él.

1ª Lectura

Nos concentramos al finalizar este año de la fe, en el agradecemos a Dios por las alegrías y esperanzas realizadas en la medida que ahondamos en la responsabilidad de ser verdaderos hijos de familia, independientemente de los compromisos sociales que tengamos. Honrar a padre y madre, gestores de nuestra.

62

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013

(Eco 3.3-7.14-17) El que teme al Señor, honra a sus padres 3,1-16 Honrar padre y madre. Ben Sirá tiene en mente Éx 20,12 y Dt 5,16 donde se manda expresamente honrar al padre y a la madre. En una sociedad que daba tanta importancia a la estructura de la familia, era apenas obvio que reclamara respeto y veneración por quienes en cierto modo representan y sustentan en el mundo el orden y la autoridad divina, los padres. Es un texto que nos ayuda a recuperar las raíces e identidad de un pueblo amenazado de perder el sentido de la vida que está justamente en la familia. Viviendo en tierra extraña, los judíos iban


San Pablo muestra algunas herramientas para que la comunidad tenga en cuenta y la primera es la celebración eucarística como medio de ser agradecidos (Col 3,15) recuperando el sentido que tenía para los primeros cristianos, es decir: escucha de la Palabra de Jesucristo; compartir la palabra y la alabanza, hecha de salmos, himnos y cánticos inspirados. Además el apóstol busca que la palabra sea acción en nombre de nuestro Señor Jesucristo, de tal forma que la vida entera se transforme en acción de gracias a Dios Padre.

2ª Lectura

En seguida vienen las instrucciones para las familias con recomendaciones prácticas para las esposas, a fin de que sean dóciles con sus maridos y a los maridos para que amen a sus esposas, los hijos obedezcan a sus padres y a los padres de familia les sugiere una manera bien adecuada de entusiasmar, motivar y ayudar a los hijos y no desanimarlos, en una sociedad que privilegia al padre de familia como el único responsable de la buena marcha de las cosas y presenta a todos los deberes recíprocos fundamentados en el amor en el que todos ponen su aporte como medio de cooperación y construcción de la primera comunidad de la sociedad: la familia (Papa Francisco Lumen Fidei).

(Col 3,12-21)

Evangelio

La vida en familia de acuerdo con el Señor

(Mt 2, 13-15.19-23)

El texto de hoy inicia mostrando la identidad cristiana: “ustedes son el pueblo santo de Dios, escogido y amado” (Col 3,12), y seguirlo tiene sus implicaciones particulares: “por eso procuren revestirse de misericordia” (Col 3,12b). Las virtudes que siguen clarifican el sentido de la misericordia y se traducen, en bondad, humildad, mansedumbre, tolerancia y perdón entre otros términos específicos. San Pablo emplea esta imagen para caracterizar las nuevas relaciones y valores que ayudan a construir la sociedad nueva, desde luego a partir de la familia renovada en este espíritu.

Toma el niño y a su madre y huye a Egipto

Lo que hace una comunidad perfecta no es la ausencia de fallas o límites en sus miembros, sino

José está plenamente orientado hacia Dios. Por eso el Padre puede actuar fácilmente y ser escu-

Amar, obedecer y respetar la fuente de la vida que son los padres y amar, respetar y obedecer a Dios origen de la vida es poner en una misma balanza- Los padres reproducen en cierta forma el ser de Dios que es donación ilimitada. Ellos no producirán para sí mismos sino para los hijos prioritariamente. Los hijos por su parte llegarán a la etapa adulta e igualmente están llamados a producir no solo para sí mismo sino para su propios hijos, pero todo será una cadena interminable en la que cabe citar: todo lo que hagas por los suyos, mañana lo harán por ustedes.

La figura del esposo de María se asocia aquí a la del patriarca José. Ambos salvan a sus familias llevándoselas a Egipto (Gén 45-46), para volver luego a la tierra prometida. José lo hace y aparece el ángel en sueños dándole mensaje divino y él no hace más que obedecer, se levanta y obra sin pérdida de tiempo. Solamente una persona muy ejercitada en la búsqueda de la voluntad de Dios en su vida puede llevar a la práctica una orden como la que aquí recibe José.

2013 / Octubre - Diciembre / Vida Pastoral

63

Guías Homiléticas

Honrar a padre y madre es la manera de prolongar la vida y las convicciones más sagradas, entre ellas la religión, incluido el respeto entre ellos y desde luego se relaciona con larga vida, con el perdón de los pecados, con los ritos, con la bendición profunda del corazón de los padres, con la vivencia de la fe, con el amor por los padres, sobre todo cuando estos se encontraban en carencias, en todo sentido.

la capacidad de amar sin límites, a pesar de las imperfecciones que pueda tener cada integrante de la comunidad o familia.

Guías Homiléticas

perdiendo su cultura perdiendo de vista la herencia basada en la experiencia de Dios en la familia. De hecho, el Dios de Israel fue revelándose en las personas y esa revelación pasó de boca en boca, de padres a hijos.


Guías Homiléticas chado. Es lo que sucede siempre que una persona está llena de Dios. ¿Cómo expresar una relación tan íntima con nuestro pobre lenguaje? Es la razón de tanto simbolismo en la Biblia. Pocos pasajes tan fuertes como esta huida de la Sagrada Familia. Un rey tirano y loco hacen huir a la familia que Dios ha elegido para cumplir sus promesas a los hombres. De Belén a Egipto tenían dos caminos. Uno seguía la costa y era el más fácil y el más ordinario. El otro se internaba por el desierto, tomando después caminos secundarios que se adentraban en Egipto. ¿Qué ruta tomaron? Se cree que la segunda, ya que la primera era la más peligrosa para una huida por estar más vigilada. El ángel no le indica la duración de la estancia en Egipto. Lo deja en la incertidumbre. Tiene que limitarse a hacer lo que se le indique en cada momento. Es así como actúa Dios. ¿Dónde se establecieron? No se sabe con certeza. Todas las tradiciones que se invocan están desprovistas de verdadero fundamento histórico.

Egipto era el lugar idóneo de refugio político. Era provincia romana, gobernada por un prefecto y fuera de la jurisdicción de Herodes. Eran muy abundantes en él las colonias judías, siempre prestas a socorrer a sus conciudadanos. En los primeros años de la era cristiana calculaba Filón en un millón los judíos que vivían en Egipto. Allí pudieron ser atendidos, hablar su lengua y vivir hasta su regreso. Otra gran lección para los cristianos, tentados siempre a la interpretación de Dios y de Jesús según los propios intereses, sin ahondar en los planteamientos evangélicos. Para conocer los planes de Dios sobre el mundo son necesarios la plena disponibilidad, la oración, el estudio de las Escrituras y el silencio. De todo ello brota la verdadera acción cristiana. Acción que nos llevará constantemente al estudio y a la oración en el silencio interior, y viceversa. Me parece que a muchos cristianos les falta oración, estudio y silencio. Tienen, quizá, buena disponibilidad y acción, pero ¿esa acción es la que hace falta en cada momento para que avance el reino de Dios?

III. Puntos para la reflexión • Ante la Sagrada Familia Ante José, María y el Niño Jesús, la familia de nuestro pueblo aprende a amar, a respetarse, a defender la vida, a educarse en común, a vivir con esperanza, a sufrir con amor. La oración se hace vida y la vida se hace testimonio del reino de Dios. • La Sagrada Familia es un camino de luz a seguir. Después de cientos de años la Iglesia la celebra y la ofrece como modelo de familia cristiana. Por eso la Iglesia nos invita hoy a tener los ojos fijos en Nazaret. • ¿Cómo se viven en tu “casa” los valores humanos? ¿La Sagrada Familia traza algún camino espiritual para tu familia? ¿Qué puedes hacer por el bienestar de otras familias? Oh Padre, que el modelo de la Sagrada Familia ilumine el corazón de todas las familias.

64

Vida Pastoral / Octubre - Diciembre / 2013


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.