A MODO DE EDITORIAL En la cena de fin de año en la que se despidió el 2018 y se dio la bienvenida a los nuevos socios hicimos algunas reflexiones sobre lo más destacado de la actividad de la Sociedad de Fomento en los últimos meses, que hoy quisiéramos compartir con el resto de los vecinos del barrio a través de nuestra revista. Destacamos la consolidación de una actividad dirigida a los niños que dio comienzo en 2017, inspirada por un socio que por razones laborales debió radicarse a principios de 2018 en otro país. Su iniciativa fue recogida y enriquecida por un grupo de vecinos - mayoritariamente vecinas - que se tradujo en varios encuentros con actividades en donde se mezclaba lo lúdico con lo artístico (pintura, teatro y, muy especialmente, lectura). De esta forma el juego permitió introducir a los niños - y también a los adultos que los acompañaron - a las distintas manifestaciones artísticas poco frecuentadas por la gran mayoría. En lo que se dio en llamar "picnic de lectura" se prestó especial protagonismo a padres y abuelos, quienes tuvieron como tarea leer cuentos y textos previamente seleccionados por el equipo organizador y nuestra bibliotecaria. En algunos casos la experiencia fue no solo exitosa sino nove-
dosa, como lo certifican comentarios posteriores y testimonios gráficos, algunos de ellos reproducidos en nuestra página de Facebook. Todas estas actividades que esperamos continúen manteniéndose en el futuro se inscriben en el marco de la celebración del 25° aniversario de nuestra biblioteca popular, reconocida por la Comisión Nacional de Bibliotecas Públicas (CONABIP) y por el Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires. Muy distinta es hoy nuestra biblioteca de lo que fue hasta hace unos pocos años: la incorporación del sistema DIGIBEPE de clasificación de libros permite utilizar distintos criterios de búsqueda, visualizar la tapa de los libros en la pantalla de la computadora, leer el resumen de su contenido y otras características que nos permiten estar a la altura de las bibliotecas más tecnificadas. Hoy solo dos bibliotecas del distrito están reconocidas por CONABIP, y una de ellas es la nuestra. En otro orden de cosas, la construcción de viviendas multifamiliares que violan todas la servidumbres tanto de uso como de vista en el barrio, fue denunciada reiteradamente por la SocFom y finalmente judicializada por un vecino
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