T A M A S M A
C U L T U R A L
danza pintura música etnografía fotografía literatura folclore teatro cine
Número 8 15 de noviembre de 2020
Índice Portada: J. Miguel Granados
Tñitulo de la pieza: Fecundación
Editorial: Luisa Chico
Directora de Tamasma Cultural
SECCIONES El nido de la graja: Eva Castillo (nueva) Desde mi punto de escucha: Pancho Delgado (nueva) Juegos y deportes autóctonos: Juan Lasso
INVITADOS ArteSanos:
J. Miguel Granados
Fogata de Relatos:
Miguel Ángel Reyes
Fuente del poetas:
Isabel Vidal Melgar
Arnoldo Rodríguez Cabrera
Canarias escenario literario Cecilio Pérez
Tablón de anuncios
Las retahílas de Candi: Cándida Medina Letras y colores: Juan Francisco Santana Latitud canaria: Rosario López Palabras de aquí: Damián H. Estévez Las cosas que me pasan: José Lantigua Café y canela: Luisa Chico Travesía literaria Albertine Orleans Desde mi alpende: Eusebio Cabrera El taller de los sabores Matale Arozena
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Colaboradores Eva Castillo
Cándida Medina Eusebio Cabrera
Juan Lasso
Luisa Chico
Pancho Delgado Rosario López
Damián H. Estévez
Juan Francisco Santana
Albertine Orleans
Conoce a nuestros
Matale Arozena
colaboradores habituales y su trabajo visitando
José Lantigua
nuestra página web TAMASMA CULTURAL https://luisachico.wixsite.com/tamasmacultura
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- 2Tradición 020 Tamasma - nº 38
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N ú m e r o
Luisa Chico
Editorial
El otoño es tiempo de castañas y vino. La gastronomía y las fiestas van siempre de la mano. Celebraciones de todo tipo se reparten por los pueblos de las islas. Tradiciones o costumbres que pasan de padres a hijos con el orgullo de preservar "lo nuestro". Cultura y tradición al alcance de autóctonos y foráneos que gustan de lo auténtico de un pueblo. A esta Tamasma inquieta le gusta revolotear entre libros, cuadros, esculturas y fotos; entre artesanía y arte de todo tipo, Le gusta ver alzarse un telón y dejarse abrazar por una obra de teatro, sentir como los sonidos musicales llenan sus sentidos,o ver agitarse brazos y piernas en danzas increíbles recordándole que ella un día estuvo allí. Arte de aquí y de allá, pero siempre arte y cultura. Apreciándolo todo, disfrutándolo todo, pero dando un valor especial a lo que hacen los habitantes de estas islas afortunadas por la riqueza de su clima y sus gentes. Esta Tamasma inquieta hoy quiso tener un pensamiento especial por todos esos artistas que ven frenada su actividad debido a la pandemia que nos azota. Volverán tiempos de arte, abrazos, música, aplausos y risas, no lo duden amigos. 15 -
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E L N I D O D E L A
AUTORA: Eva Castillo
NUEVA SECCIÓN
Las ruindades de Celia Tenía el pelo rubio tostado y los ojos claros y fue la niña más
famosa de los años treinta en España. Las inocentes ruindades de
Celia se publicaron primero en el suplemento infantil de Blanco y
Negro (antecedente del diario Abc), para luego convertirse en
libros como Celia, lo que dice (1929), Celia en el colegio (1932),
Celia novelista y Celia en el mundo (1934), Celia y sus amigos (1935) o Celia madrecita (1939), entre otros. La familia también
creció y se incorporaron nuevos miembros a la familia literaria
creada por Encarnación Aragoneses Urquijo, una madrileña que decidió firmar sus obras con el nombre de Elena Fortún.
Celia es una de esas niñas chicas ruines, que alborotan sin maldad, que son buenas de nacimiento y se meten en problemas
para deshacer entuertos y que gritan contra las injusticias,
aunque no sea de buena educación. El humor campa por sus anchas en las páginas de los libros de Celia y nada se aprecia del
G R A J A
dolor tras el que nació esta niña de siete años. Porque Encarnación
había pasado por la mayor tragedia, la muerte por encefalitis de
su hijo Manuel, conocido como Bolín. Con el fin de aliviar su pena,
su marido, Eusebio Gorbea, y ella viajaron a Tenerife, donde residieron dos años, al abrigo de Mercedes, una de sus mejores
amigas, y allí comenzó a tomar notas, a raíz de las travesuras que hacían los niños de su anfitriona. Así que sí, podríamos decir que Celia es un poquito tinerfeña.
Los celos
Encarnación escogió su nombre artístico de un libro de su marido, Los mil
años de Elena Fortún, que no había tenido demasiado éxito. Sin embargo, las andanzas de Celia se hicieron tan conocidas que la escritora empezó a
obtener un dinero por su trabajo que jamás soñó. Pese a que la buena
acogida de sus escritos podría haber sido motivo de felicidad para el matrimonio, los celos se desataron en Eusebio Gorbea, hasta el punto de que su mujer se escondía en el lavabo para poder escribir.
Aún así, la escritora continuó dando vida a la pequeña Celia y su familia, una
literatura infantil que no era incompatible con el activismo de esta mujer,
que se mostró firme defensora de la ilegalización de la prostitución y denunció que, cuando un hombre se contagiaba de una dolencia de
transmisión sexual quedaba en libertad, “repartiendo enfermedades”, mientras la mujer era recluida. Pero si a un sector de la población defendió Encarnación durante toda su vida fue a los niños, ese era el bando al que pertenecía y dedicaba buena parte de sus actividades de carácter solidario.
Ilustración de Verónica García Gómez
Exilio y regreso de Elena Fortún
En los últimos días de la Guerra Civil, la escritora consiguió salir de España y reunirse con su marido en Francia, desde donde partieron a Buenos Aires. Allí,
Celia continuó existiendo en los libros que Elena Fortún siguió publicando desde el exilio. En 1948, Eusebio Gorbea falleció y la escritora decidió volver a España, donde terminó muriendo, en Madrid, en 1952.
Pero Elena Fortún no sólo regresó a pasar los últimos años de su vida en su país,
sino que, décadas después, cuando ya el dictador Francisco Franco llevaba muerto más de diez años, se editó Celia en la revolución, donde la niña ya es
una adolescente a la que la Guerra Civil cambia la vida. Este borrador durmió
hasta 1987, entre las cosas que la escritora abandonó en América cuando regresó a su país natal. Como ya se imaginan los lectores, nada de infantil hay en esta nueva entrega de Celia.
Pero para los seguidores de Elena Fortún no acabaron ahí las sorpresas porque,
nada menos que en 2016, la editorial Renacimiento publicó Oculto Sendero,
novela inédita de esta escritora, en la que la protagonista, una pintora, inicia el camino hacia la comprensión de su sexualidad.
Encarnación o Elena (nombre que le dio tantas alegrías) fue una mujer luchadora, que vivió siempre preocupada por la conciliación entre su
maternidad y su carrera profesional, que apostó por defender a los más
débiles, los niños, y por reivindicar la igualdad de acceso a la educación de hombres y mujeres o la ilegalización de la prostitución, entre otras causas. La escritora siempre defendió sus ideas de forma pacífica, con un distanciamiento
manifiesto de la intransigencia de partidos políticos y un profundo amor por los más pequeños, a los que intentó distraer de las maldades provocadas por los adultos, como cuando a finales de los años veinte del siglo pasado, convertía, junto a otras narradoras, la guardería de la Casa del Niño, construida para
albergar a quienes eran huérfanos o no podían ser alimentados por sus
familias, en una biblioteca, cada domingo por la tarde. Sin haber tenido la suerte de conocerla, intuyo que Encarnación escondía, tras esas ruindades que
a todos se nos escapan alguna vez en nuestras vidas, un corazón tan bueno y honesto como el de Celia.
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D E S D E MI
P U N T O
NUEVA SECCIÓN
AUTOR: Pancho Delgado ¿De dónde somos? Las músicas de raíz se sostienen sobre la tradición oral del pueblo.
Para ello, es fundamental beber de la fuente para que el legado permanezca lo más intacto posible. De la cubanía de Miguelito
Cuní, Miguel Matamoros, Los Muñequitos de Matanzas, Ignacio Piñeiro o la nonagenaria Omara Portuondo, emana la más noble tradición, donde los nuevos cantores de esas latitudes, acuden con solemnidad religiosa para nutrirse de esa tradición, de ese pulso lejano, de ese cantar que viene de viejo.
El flamenco comprendió desde sus inicios, que el único camino
para su evolución, era escuchar hasta la saciedad, tocando o
DE
cantando “por los maestros”: Paco de Lucía, Pepe Marchena,
E S C U C H A
Camarón... al igual que un literato debe leer “Los Clásicos”, Lorca,
Agujeta
El
Viejo,
Esperanza
Rancapino,
Manolo
Caracol,
Cervantes, Machado, y un matemático o un físico, también deben acudir a la fuente: Newton, Bolzano, Pitágoras, si quieren poseer un
sustrato
intelectual
que
acreditadamente, en su menester.
les
permita
desarrollarse
Lo mismo pasa con el fado, género mayor de la música popular portuguesa, donde los cantores son venerados y colocados en altares, como verdaderos iconos de estudio por su escuela, de
auténtica veneración; Amalia Rodrigues, Carlos Do Carmo, Carlos Paredes...
Qué lejos nos queda toda esta realidad a la tradición musical de Canarias.
Entristecido y con la esperanza perdida, asisto a un atentado contra la tradición musical de mi tierra, a la mayor de las perversiones: Valentina
Hernández, Manuel Ferrera, Manuel Navarro, Dacio Ferrera, Olga Ramos,
su hijo José Manuel Ramos, Totoyo Millares, Luis Morera y su grupo Taburiente, Ico Arrocha y un largo etcétera de cantores y tocadores, que
han sido transmisores y poseedores de ese tesoro inmaterial digno de
veneración, son unos perfectos desconocidos para esa gran masa de “cantadores” que pueblan los grupos de folklore de nuestros municipios y
que llenan las escaletas de los espacios televisivos dedicados al “folklore”, esa denostada palabra.
Hagamos una reflexión sobre lo que realmente queremos ser: una isa
parrandera de rima fácil e improvisada, acompañada de un vaso de vino y dos platos de carne, o en cambio, ese momento único e irrepetible en el
tiempo, por la emoción que se experimenta al verte reconocido en cada uno de los cantores de nuestra tierra, cuando a través de su canto, nos hacen recordar de dónde somos.
Hagamos una reflexión sobre lo que realmente queremos ser.
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J U E G O S Y
D E P O R T E S A U T Ó C T O N O S
AUTOR: Juan Lasso Tablas de San Andrés Las Tablas de San Andrés es característica del municipio de Icod de los Vinos en la isla de Tenerife (Islas Canarias), que se celebra los dos últimos días de noviembre, coincidiendo con el día de San Andrés. En la víspera del día de San Andrés los lugareños se tiran por algunas de las calles más empinadas (San Antonio, El Plano, Calle Hércules...) en unas tablas de madera, confeccionadas también con baquelita, metacrilato o fibra para alcanzar mayores velocidades. No tiene ningún origen religioso. El nombre que tiene, como el de tantas otras celebraciones en este país de gran tradición religiosa, se debe a su fecha en el calendario, básicamente. Según se ha constatado en el municipio de Icod de los Vinos, donde la celebración es más sonada, se trata de una tradición que surgió a partir del traslado de la madera desde los montes del municipio hasta la costa para la confección y mantenimiento de barricas, barcos, entre otros, pasando por San Antonio (lugar de origen de la celebración) y la calle Hércules. En La Guancha la característica principal es que la calle por donde se tiran, además está en curva, lo que añade más dificultad a la bajada. Sin embargo, la tradición más conocida e importante es la de Icod de los Vinos, en la calle "del plano", siendo una fiesta visitada por numerosos curiosos de los municipios cercanos y que atrae al turismo que se encuentra de vacaciones en el norte de la isla. Días de festividad que coincide con el estreno del nuevo vino de la comarca acompañado de castañas asadas.
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R E T A I L A S DE
C A N D I
AUTORA: Cándida Medina La ralera -A los guenos días seña Cándida. ¿Se puede...? -Seapordios... jale por jilo yentre padrento, no tengo trancado el fechillo. -¡Endeluego! Cualquier día le van a dar un jaquimaso, con la cosa como anda no debería tener el chozo sin fechar la puerta. Jágame caso, que le entran y le van a lagial todo lo que jallen. -¡Oh...! Poj’ abiados vanastar... ja, ja, ja, lo único de valor que pueden jallar ej la entaura postiza mijo, perras nengunas. -Ja, ja, ja Jisus seña. -Maestro Pancho, ¿no se jilaría usté una ralera gofio con vino mijo? A ver si jancina nos guelve la sangre al cuerpo… Yo no sé ujté, pero yo, ando entumía, o se quita este pelete o desta la entrego. -¿Qué coño ralera, cristiana? Será una rebatera gofio… Gueno jancina la llamamos nojotros. -¡Chás vería! Miaparay, fitetu…, ej que ca’ uno ej ca’ uno. Jancina le dijiamos en los Baldíos. Pero gueno, arrejale el banco pacá y asiéntese, que nos vamos a jilar un guen rabiche gofio y vino, y maj luego vaigan poniéndole el nombre, ca’ uno asegún le digan en ca’ isla o pueblo. -¡Aaaajjjj me supo! Gueno seña Cándida, ya se me calentó hasta el cogote... ja, ja, ja, hasta más ver cristiana, muchas gracias, aquí le dejo un fisco carne cabra que le mandó mi mujé. -Las gracias se las jecha a la baifa maestro Pancho, yasu mujé que nunca las mañas pierda. Y arranque la caña cristiano, que tengo fuerte tonga ropa pa’ lavar yando aquí alegando. Chacho, pa’ lavar tengo el cuerpo yo ahorita. Chiquito pelete, no sé cómo se jace un guiso desos que te calientan de adentro pafuera. Onque burra cargada jalla camino. Voy a ver si me las ajeito pa’ meterme entre los fogones. 15 -
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L E T R A S Y
C O L O R E S
AUTOR: Juan Fco. Santana Mujeres y Galdós ( Parte I ) Pensé que debía escribir algo sobre GALDÓS en el año en el que se han cumplido los cien años de su partida, pero a la misma vez me
pregunté qué podía aportar de nuevo sobre el insigne escritor canario, por lo que pensé que iba a ser muy complicado poder contribuir con algo novedoso. De repente, sin esperarlo, me vino a la memoria, como si alguien le hubiera dado a un interruptor de la
luz, algo que había leído, hace muchísimos años, de Galdós y me
puse a indagar, en primer lugar, buscando unos libros que hacía
muchísimo tiempo que no abría y que me podrían dar la solución a lo que deseaba llevar a cabo.
¿De qué se trata? -se preguntarán ustedes, aunque sí que les he de adelantar que no se trata de nada esencial y sí, eso creo, una
simple curiosidad. Después de localizarlos los abrí con muchísimo
cuidado pues se trataba de ejemplares de la primera edición, editados en los años 1884 y 1885 por la imprenta y litografía La Guirnalda, que era la editorial que le publicaba la obra a Galdós.
Además, con el mismo nombre, “La Guirnalda”, y en dicha editorial, se
difundía un periódico quincenal dedicado al Bello Sexo, así se anunciaba, en
Madrid, en la calle de Las Pozas número 12, pero no quedaba ahí la cosa pues también se publicaba en “La Guirnalda”, un apartado titulado “La costurera”, o también llamado “Manual de costurera en familia”, en el que se
podían encontrar patrones y figuras a tamaño natural para el corte de los vestidos. Siguiendo con la imprenta y litografía mencionada decir que “La
Guirnalda” se trataba de un periódico que contenía, cito textualmente: "...
ocho páginas, de amena e instructiva lectura, ilustrada con excelentes grabados y que contiene advertencias útiles y cuantas explicaciones y anuncios sean de interés para las familias, escuelas y colegios de señoritas."
No me digan que no es curioso que algunas obras de Galdós fueran
publicadas, por primera vez, en esta editorial tan femenina. También me he percatado que al preguntar sobre las obras de Benito Pérez Galdós, tanto a
alumnos como a amantes de la cultura, y aprovecho la ocasión para preguntarles, a ustedes los lectores, al que desee responder, aunque sólo lo piense o lo quiera escribir, a la pregunta ¿me podría citar algunas obras de
Galdós? ¿quién se presta a colaborar sólo citando las obras que recuerde? Después de unos instantes en los que a la memoria, seguramente, les han venido algunos títulos, seguimos leyendo.
Nadie, hasta ahora, en otras ocasiones y en mis clases, ha incluido en sus
respuestas la novela "Lo prohibido". Editada en dos tomos en los ya mencionados años 1884 y 1885, por la citada editorial. Es lógico que no se cite pues es una de las obras menos conocidas del célebre autor canario. En
el primero de los tomos, ya en el capítulo 1, Galdós aborda el tema de la figura femenina, presentándonos, cuando el personaje principal de la novela, José María Bueno de Guzmán, se afincó en Madrid hacia 1880, en los
últimos momentos del reinado de Alfonso XII, a sus primas madrileñas:
María Juana, Eloísa y Camila, haciendo de ellas las grandes protagonistas, las que ocupan el centro de toda la novela, haciendo, como era habitual en Galdós, un estudio psicológico detallado de cada una de ellas.
No es de extrañar que el autor de Doña Perfecta, Marianela, Fortunata y Jacinta, Electra, Tristana, Santa Juana de Castilla, Gloria, La de Bringas, La desheredada, Sor Simona, Casandra, entre otras, nos presente, en su obra
“Lo prohibido”, ese minucioso estudio de la psicología femenina, de su particular universo femenino, de aquel momento, aunque lo comience diciendo, lógicamente atendiendo al pensamiento machista generalizado de
la época que infravaloraba a la mujer, cito textualmente: "Y eso que son
mujeres, y en opinión mía (que será un disparate fisiológico, pero es una opinión) las mujeres tienen más nervios que los hombres. Ninguna de las tres
ha presentado hasta ahora desconciertos nerviosos que me pongan en cuidado, a excepción de aquellas que vienen a ser como de rúbrica en el bello sexo y sin los cuales hasta parece que perdería parte de sus encantos."
El autor nos dice, en boca de su personaje, que entre los géneros hay
diferencias de temperamento, ahondando en esas diferencias cuando, y
permítanme que me exprese como antropólogo, en realidad las personas son diferentes no precisamente por el género sino por su propia condición de ser
humano y así el temperamento, la fuerza, la sensibilidad, la arrogancia la
inteligencia no son cualidades que se puedan asignar, de forma generalizada, a un sexo o a otro, pues eso es como decir que un blanco es superior a un negro en inteligencia cuando lo correcto sería decir que hay
negros y blancos inteligentes y blancos y negros menos inteligentes, no es cuestión de color ni tampoco de género y sí de capacidad individual.
Me van a disculpar que me haya saltado el guion y que por un momento no
mencionara a Galdós, pero creo que hoy, más que nunca, hay que aclarar determinadas cuestiones que pueden contaminar la buena convivencia y el respeto al que deben ser merecedores los OTROS, pero eso es otro tema.
continuará...
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L A T I T U D C A N A I A
AUTORA: Rosario López
Cosas del ayer Cosas que están en desuso y de antaño inconfundibles, que se usaban casi a diario, se hacían imprescindibles.
Y los polvos de aluminio para fregar los cacharros, parece que aún lo veo y recuerdo su contacto.
Ya las técnicas modernas las fueron sustituyendo, más yo las recuerdo a todas con nostalgia de otros tiempos.
El destupidor al lado de las viejas cocinillas, dando fuelle por un lado y por otras destupía.
En el baño siempre estaba la dichosa palangana, el irrigador colgado muy cerca de la ventana
El añil y el almidón se usaban para la ropa, confieso que siempre estábamos bien guapas y vaporosas.
En la cocina el pesaleche cumpliendo con su obligación, de medir siempre la leche que traía el aguador. El molinillo constante para moler el café, que con olor agradable molimos más de una vez.
Se me olvidaba señores de la linda lavativa, que cumplía su misión al dolernos la barriga.
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P A L A B R A S D E
A Q U Í
AUTOR: Damián H. Estévez Tamasma y otras aves En este artículo usamos como pretexto el propio nombre de esta revista para acercarnos a varias aves con denominaciones exclusivas de nuestro archipiélago.
Tamasma
Esta voz se recoge en varios trabajos dialectales como la que, en La Gomera, designa a la alpizpa o alpispa o a la banderita, que también son voces canarias. Tiene dos significados: un pequeño pájaro que vive en parajes húmedos, camina a saltitos y mueve la cola sin cesar; también, de forma metafórica, se refiere a una mujer avispada y vivaracha, según el Diccionario de Canarismos. En otro sentido figurado, en el trabajo de Millares Cubas, encontramos el siguiente comentario: “Nada tiene de particular que al que anda por esas calles dando saltitos, le compare la gente con una alpispa y con tal nombre le bautice (conocimos algunos ejemplares en nuestra mocedad)”. Habría que preguntar a Luisa Chico, si pensó en uno u otro significado para denominar esta revista. Algunos autores han encontrado esta voz también en el Hierro. En el Tesoro que usamos como bibliografía de consulta, se recoge que Rohlfs y Wölfel postulan el carácter prehispánico de este término, aunque no hay en los dialectos bereberes y camíticos norteafricanos formas paralelas convincentes. En el Diccionario Histórico se anota que Viera y Clavijo, en el siglo XVIII, habla de la presencia de esta voz en La Gomera, aunque reconoce que no puede describir al pájaro que designa. Los autores de este Diccionario Histórico se inclinan también por el carácter prehispánico de esta palabra, pues no existen ni en castellano ni en portugués vocablos de los que podría provenir.
Tabobo
En el Diccionario de Canarismos se recoge la siguiente definición de esta ave: “Pájaro insectívoro del tamaño de la tórtola, que se caracteriza por tener una cresa de plumas parecida a un abanico y pico muy largo. Tiene olor fétido y canto monótono”. Lo cierto es que se trata de un ave beneficiosa para los campos, pero que ya apenas se ve por ellos. No hace muchos días me topé, sin embargo, con uno de ellos en un jardín público de Las Galletas. En el Diccionario Histórico recoge esta voz como variante de otras muchas: abobito, abobo, abubete, altabobo, jabobo, entre otras. Las explica todas ellos como derivación del término peninsular “abubilla”. Aporta un texto de 1521, de la Inquisición en Canarias como el primero donde aparece, con la forma “habubyto”, y otros muchos a partir de esta fecha. También en este Diccionario se aporta la propuesta de Wölfel de considerar esta voz como un guanchismo, pero se añade de Manuel Alvar explicó la etimología de esta palabra y sus muchas variantes como derivada del castellano. En esta abundancia de variantes coinciden los autores del Tesoro Lexicográfico, así como en las diferentes propuestas de su origen, tanto como voz indígena como castellana, ampliamente discutida por los expertos en la lexicografía canaria.
Guirre
El guirre es un ave rapaz de bastante envergadura que nidifica en los riscos del interior y acantilados marinos y se alimenta de carroña. Como tal se considera una especie de gran ayuda para el medio ambiente, pues se encarga de eliminar animales muertos del campo, lo que sirve para controlar la transmisión de enfermedades y la contaminación de las aguas. Ha sido un ave muy frecuente en todas nuestras islas, a pesar de los intentos de recuperación, actualmente quedan pocos ejemplares sobre todo en Lanzarote y Fuerteventura. Está considerada en peligro de extinción. Según el Diccionario de Canarismos, de forma figurada, se emplea esta voz también para designar a una persona desmirriada y enfermiza, y también al órgano sexual femenino, aunque limita esta acepción a la isla de Fuerteventura. En el Diccionario Histórico y en el Tesoro Lexicográfico se recogen, también para esta voz, discrepancias sobre su etimología. Desde la explicación de
Wölfel como procedente del bereber, pasando por explicarla como corrupción del término “buitre” según Viera y Clavijo, hasta la de Alvar, que la considera una voz onomatopéyica, siendo esto lo más aceptado en la actualidad. También en esta obra se recoge la explicación de Millares de la acepción figurada de este término: “Como esta ave de rapiña cuando está posada en lo alto de una peña tiene una silueta de viejo triste y flaco, es muy frecuente comparar con ella a la persona delgada y macilenta.”
Guincho
Es un ave marina que tiene el pico y las patas de color verde oscuro y plumaje predominantemente pardusco o grisáceo. Nidifica en acantilados Se reconoce también por sus característicos chillidos. Vuela a media altura sobre el agua, a veces cerniéndose; para atrapar un pez se lanza sobre él con las patas extendidas, sumergiéndose en ocasiones totalmente. Esta voz, que no aparece recogida como guanchismo en el Diccionario de Toponimia de Trapero, tiene varios referentes toponímicos: Punta del Guincho, Barranco del Guincho, Lomo del Guincho, Playa del Guincho, y, sobre todo, el barrio de El Guincho, perteneciente al municipio de Garachico, y en su costa, se encuentra una playa con el mismo nombre, cuya caleta, formada por negra lavas a manera de acantilados, es un rincón para disfrutar del clima norteño. La cala se encuentra rodeada de plataneras y presenta buenas condiciones para el baño. Bibliografía: • Lorenzo, Antonio; Morera, Marcial; Ortega, Gonzalo. Diccionario de canarismos. Francisco Lemus Editor, 1996. • Millares, Luis y Agustín. Cómo hablan los canarios. Diario de Las Palmas. Digitalización de ULPGC, 2006. • Trapero, Maximiano. Diccionario de toponimia de Canarias: los guanchismos. Ediciones Idea, 2018. • Corrales, Cristóbal; Corbella, Dolores. Diccionario histórico del español de Canarias. Instituto de Estudios Canarios, 2001. • Corrales, Cristóbal; Corbella, Mª Dolores; Álvarez, Mª Ángeles. Tesoro lexicográfico del español de Canarias. Real Academia Española de la Lengua/Gobierno de Canarias, 1992. 15 -
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P A S A N
AUTOR: José Lantigua Leche de burra Me cuentan mis padres que cuando vivíamos en Aguimes, siendo yo bebé, me entró una infección en la boca. Fue un drama, no podía mamar, la boca toda una llaga, mi padre, a indicaciones del practicante (no había médico en el pueblo) me limpiaba la boca con yodo. Mi madre se tenía que ir porque se le partía el alma oír mis llantos y gritos. No hacía mas que llorar, de dolor y de hambre pues dejé de mamar. Y claro, ¡tenían que alimentarme!... La solución nos la dio el practicante. Cerca de casa vivía un señor que tenía una burra que estaba dando leche, y la leche de burra es la mas parecida a la humana. Total, que durante 10 días fui alimentado con leche de burra hasta que me curé. Ahora entiendo por qué siempre me han gustado los burros, y cuando veo uno lo miro con cariño, como de la familia
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C A F É Y C A N E L A
AUTORA: Luisa Chico Bailes tradicionales canarios (siglo XVII) Con una antigüedad que se remonta al siglo XVII podemos citar también otras danzas que han pervivido en el tiempo, como es el caso del santo Domingo, la danza del trigo, los aires de Lima o el gorgojo. El SANTO DOMINGO, en un principio, sólo fue un conjunto de coplas alusivas a los milagros de Abraham de la Rioja (Santo Domingo de la Calzada), llegadas a Canarias por el siglo XVII, a las que con el tiempo se le añadirían diferentes músicas y coreografías, pasando de ser un canto religioso que acompañaba a las procesiones, a ser un baile popular y de carácter festivo. Es una danza originaria de Andalucía que arraigó principalmente en las islas de Tenerife, Gran Canaria, La Gomera y Lanzarote. En Tenerife se interpreta enlazada con el tanganillo y el tajaraste desde mediados del siglo XX. En Gran Canaria se baila en cuadros; mientras que en La Gomera es uno de los bailes de chácara y tambor y no está muy arraigado, considerándosele una danza de salón; en Lanzarote llegó a perderse, siendo rescatado recientemente. La DANZA DEL TRIGO, conocida también como “Cho Juan Periñal, Perejal o Pereñal”, es una bella danza agrícola que consiste en representar mediante gestos, toda la manipulación que es necesario realizar con este cereal, desde sembrarlo hasta ingerirlo convertido en gofio. Su procedencia se asocia a los judíos sefarditas de Tetuán; aunque también se considera emparentada con una canción infantil extremeña titulada “El gavilán” de coreografía e intencionalidad similar. Es un baile practicado en las islas de Fuerteventura y La Palma; la versión más conocida es la de esta última.
Los AIRES DE LIMA es una danza colectiva de cortejo que se baila en filas enfrentadas. Su procedencia real es muy difícil de concretar. Algunos historiadores afirman que llegó a las islas de la mano de los portugueses de la región de los ríos Minho y Limia, quienes expandieron el cultivo del millo, hacia el siglo XVII, otros opinan que procede de América, por lo cual su origen auténtico está aún por determinar. Lo cierto es que arraigó fuertemente en las islas y principalmente en las de Tenerife, Gran Canaria, La Gomera, Fuerteventura y La Palma. Existen diferentes versiones de aires de Lima: las de Fuerteventura son tan sencillas que casi no pueden calificarse como baile, ya que los ejecutantes se colocan en filas enfrentadas o en rueda y cruzando las manos sobre el pecho como si estuviesen arrullando un bebé, proceden a cantar las coplas. En Gran Canaria, es donde más estilos diferentes existen, se calcula que pueden pasar de los treinta, aunque, según Lothar Siemens, obedecen a una tipología melódica común. Se pueden encontrar diferentes versiones de aires de Lima en: Teror, Tirajana, Valsequillo, Artenara, Ingenio, etc. Los aires de Lima de La Gomera fueron rescatados gracias a la información cedida a la Agrupación Folclórica Hautacuperche, en la segunda mitad del siglo XX, por doña Isabel Hernández, quien contaba entonces más de 80 años. En la actualidad se siguen interpretando las coplas que ella recordaba. Con todo, los aires de Lima de La Palma son quizá los más conocidos y populares en todas las islas. Antiguamente se bailaban en las reuniones de los campesinos, principalmente durante las “descamisadas” del millo o en las “velas de paridas”. En la actualidad es, sobre todo en la versión palmera, pieza obligada en el repertorio de la mayoría de los grupos folclóricos, y baile emblemático en la isla de La Palma. En el siglo XVIII esta danza se conocía y practicaba en las islas ya citadas. NOTA:
Fragmento del libro "Nuestros bailes paso a paso" de Luisa Chico y Diego Felipe.
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T R A V E S Í A L I T E R A R I A
AUTORA: Albertine Orleans Versos negros VERSOS NEGROS es un desafío moral que en parte revela la ambigüedad de algunos conceptos inamovibles, a la vez que expresa una apasionada confesión de lo inconfesable en una tormentosa autorelación interna. Estos versos se pueblan de desafío o desesperación, entre la fascinación y el peligro que encierra su búsqueda y su denuncia. Contienen una verdad interior que evidentemente puede ser censurada y discutida. Contienen sobre todo el derecho de la libre expresión sin pretender faltar el respeto a nada ni a nadie.
Misterioso Lucifer, nombre que significa “Estrella de Luz”. Misterioso Dios: Jehová, Yavé, Yo Soy, Adonai… El creador del Universo, de un universo del que apenas sabemos… ¿No podrían ambos darse una vuelta por el olvido? Olvidando a Dios y al Diablo, ¿qué realidad experimentaríamos? ¿Quién se atreve a lanzarse a lo desconocido? Una oquedad en las rocas volcánicas nos protegió. Cogidas de la mano, mi alma y yo, veíamos y sentiamos la heladora nieve espesa formando remolinos que nos impedían cruzar el horizonte. ¡Qué dolor difuso e indescriptible nos agitaba! Sin embargo, la blancura dominaba, lo puro en la distancia comenzaba a hacer justicia… 15 -
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D E S D E M I
A L P E N D E
AUTOR: Eusebio Cabrera Coplas Fuertes parientes buscaste que te hicieron traje fino. sin telas y sin volante, sin tijeras y sin hilo.
Tienes los ojos profundos como el fondo de la mar. A veces son de bonanza, cuando no de temporal.
Al borde del camino sembré unas papas y saltaron conejos con alpargatas.
Mi corazón es guitarra el tuyo timple sonoro que suena si se desgarra cada vez que yo te añoro.
Iba soñando de día que tu amor me abandonaba como una cruel puñalada creyendo que aún eras mía.
La escala de mis amores tiene más de siete notas que armonizan ilusiones cada vez que tú las tocas.
Mi dicha partió muy lejos tal vez a la eternidad al convertirse en maldad tus continuados recelos.
Maldita la vez que dije "Mira cómo va ese cojo". Tu padre me tiene enojo, mira que aún me maldice.
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EL
T A L L E R DE LOS
S A B O R E S
AUTORA: Matale Arozena He destapado la caja de las sorpresas que tengo en mi taller y me sorprendo cuando percibo que se han atrevido a salir a acompañarme sin permiso olores, sabores y, por qué no, colores que van a componer esta estampa culinaria. La idea que tenia era poner algo de carne pero en mi taller no mando nada, las sensaciones deciden. Vamos a ponernos con todo el entusiasmo del mundo, y de la manera que nos enseñaron nuestras madres y abuelas. Va por ellas.
Pulpo frito INGREDIENTES • • • • • •
1 pulpo de aproximadamente 2 kilos 1 pimiento verde pequeño 1 pimiento rojo pequeño 1 cebolla pequeña 4 cucharadas soperas de aceite de oliva 1 vasito de vino blanco seco
Modo de hacerlo En un caldero grandecito ponemos el pulpo sin agua, untando previamente el fondo del mismo con una cucharada de aceite para que no se pegue. Lo tapamos y lo ponemos a fuego lento a guisarse en su propia agua. Veremos que suelta bastante, razón por la cual no le añadimos agua. El motivo es que necesitamos que suelte toda su agua para que después se pueda freír. Una vez guisado se deja enfriar y escurrir bien. Mi madre solía guardar el caldo que suelta para aprovecharlo y hacer paella de pescado o fideos con pescado, rebajando un poco el caldo para que no resulte muy fuerte. Una vez frio, se parte en trozos tanto los rejos como la cabeza, limpiándola bien y cortándola en taquitos. Añadir a un caldero, de esos planitos como para hacer arroz, las tres cucharadas de aceite y poner el pulpo a freír a fuego bajo, tapando el caldero para que no salte. Mientras se va dorando el pulpo, cortaremos los pimientos y la cebolla en cuadraditos. Cuando el pulpo casi esté (la piel quedará un poco tostada) será el momento de que la cebolla y los pimientos vayan a hacerle compañía, revolviendo con suavidad y añadiéndole poco a poco el vino blanco. Dejar reducir un poco el liquido. Al pulpo le encanta que lo acompañen con unas pepitas arrugadas y si se guisan unas batatas, el pulpo estará delicioso. Les extrañará que no ponga nada de sal pero este animalito la ha cogido prestada del medio donde vive, nuestro mar, así que nuestro agradecimiento a la madre naturaleza que a diario nos regala tantas cosas buenas. Es una comida muy propia de esta época de otoño- invierno y muy nutritiva pues es rica en proteínas, minerales, zinc principalmente
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ArteSanos Lo
Invitado: J. Miguel Granados
Pinceladas de su historia Conozcamos a J. Miguel Granados en su propia voz. Nací en la provincia de Almería, en Agosto de 1953, con un año, mis padres se trasladaron a Buenos Aires, Argentina, allí pasé mi infancia y adolescencia, el oficio lo aprendí de mi padre y además, de la herencia que tengo, ya que soy la 4ª generación en mi familia que ha vivido de este ancestral oficio. Con 15 años, dejo los estudios para volcarme plenamente a lo que con el tiempo, se consolidaría como una pasión, además de un medio de vida. Tuve la suerte de aprender junto a maestros españoles, italianos y portugueses, los cuales me dejaron profundas huellas sobre los secretos de este infinito y maravilloso oficio. Me especialicé en diseño de mobiliario y ejecución de fabricación de mueble en serie. Ya con 34 años, casado y con una niña de 4 años, dada la mala situación económica reinante en el país, decido buscar nuevos horizontes, tal vez recorriendo el camino inverso al que mis padres ya habían hecho. El caso es que mi idea era instalarme en Australia, pero vueltas de la vida, acabé en Canarias, viajaba solo, sin mi familia, dado que a donde iba, no conocía el sitio ni a nadie que me guiara. Luego de recorrer Las Palmas, decidí conocer también Tenerife, sitio este último que me acogería como uno mas, a los pocos meses y luego de encontrar trabajo como carpintero, traigo a mi mujer y mi hija. Como todo comienzo, muy duro, pero que al final, lograría encontrar mi sitio en el municipio norteño de La Victoria de Acentejo donde llevo viviendo desde hace mas de 30 años. En 1990, logro instalarme por mi cuenta, pero el tipo de trabajo que realizo, ya no es en serie, sino a pedido, lo que me permite desarrollar mi creatividad y volcarla en mobiliario personalizado. En Diciembre de 2018, cierro definitivamente mi actividad comercial para acogerme a los beneficios y creo que... merecidos, de la jubilación. Actualmente, estoy dedicado a disfrutar de toda la experiencia que he adquirido en mas de 45 años en el oficio, volcandola en diferentes tipo de piezas artísticas.
La entrevista... Que tipo de artesanía trabajas?
Tanto decorativa como utilitaria, es decir, en aquella que es netamente ornamental y muy visual o piezas con utilidad práctica, como lo han sido los bolsos de madera o los joyeros.
¿Que es para ti la artesanía?
Es una forma de entender el contacto con la madera, en mi caso particular, es poder proyectar en cada pieza, conocimiento, disfrute y sobre todo, pasión. Una manera también de transmitir emociones, cosa que compruebo cuando una persona ve uno de mis trabajos, en definitiva, es un modo de entender la vida, saber que nada es infinito en este mundo y que debemos optimizar los recursos naturales, motivo por el cual, intento siempre lograr el máximo aprovechamiento de los materiales que uso, la artesanía no puedo entenderla sin el total respeto a la Naturaleza.
¿Cu´á́ndo sentiste la llamada de lo artesano?
Creo que es algo, que siempre estuvo latente en mi interior, pero que no llegué a liberarlo hasta que llegué a Tenerife, como comenté anteriormente, la fabricación en serie, aunque era yo quien hacía los diseños, no permitía una expresión total donde diseñar lo que realmente deseaba, sino que tenía que ceñirme a exigencias de mercado, el poder desprenderme de ese “corsé”, supuso una liberación para dar rienda suelta a toda mi creatividad.
¿Te vinculó a ella alguien especial para ti?
En realidad no, dado que al llegar aquí no contaba con gente conocida como para haber encontrado una guía para conectarme con la actividad artesana.
¿Donde tienes ubicado tu taller?
En el municipio de La Victoria de Acentejo, un pueblo que me acogió como si hubiera sido un hijo natural de esta tierra, su gente humilde, sencilla y dispuesta a recibir a todo aquel que viene a formar parte y colaborar con este pueblo.
¿Qué sientes cuando tus manos se convierten en creadoras de un objeto bello?
En realidad, es un cúmulo de emociones, en cierto modo, salvando las abismales distancias por supuesto, es como tener “un hijo”, porque lo concibes como una idea, un deseo, luego buscas el material más adecuado para darle forma física y por último, lo vas moldeando a medida que se establece una especie de “comunión” con la madera, en la que ella aporta su natural belleza y uno los cortes precisos para que terminada, logre transmitir sensaciones, emociones e incluso opiniones sobre semejanzas con otras formas que existen en el universo y que muchas veces al hacer una pieza, uno no contempla las mismas.
¿Donde se pueden ver tus piezas?
En mi taller, el lugar mas apropiado, ya que se entra en contacto con mi “cocina”, donde realizo cada una de ellas.
¿Que opinas de mercadillos y rastros?
Me parecen una buena opción para aquellos artesanos que no teniendo un punto de venta propio, puedan canalizar ventas y dar salida de lo que hacen.
¿Participas o has participado en algunos?
No, antes de jubilarme, participaba en las ferias de artesanía que realiza el Cabildo de Tenerife, en los distintos municipios de la isla y en los que se llevaban a cabo en el Recinto Ferial, lo hice durante 17 años.
¿Has hecho alguna exposición?
Así es, recuerdo que la primera fué en el Ayuntamiento de La Victoria de Acentejo en 2014, luego en La Ranilla Espacio Artesano en el Puerto de la Cruz en 2017, en el IEHC también en el mismo año, en 2018 participé en Tenerife Moda, en 2019 nuevamente en el Ayuntamiento de La Victoria, ese mismo año expuse en la Sala de Exposiciones de El Sauzal, volviendo a hacerlo en Septiembre de este año en esta última sala. Agregar que en el Museo de Artesanía Iberoamericana de La Orotava, se encuentran expuestos 2 de mis trabajos, siendo uno de ellos, la única reproducción que hay en España, de un torno para madera diseñado por Leonardo DaVinci hace 500 años y la otra, una silla que realicé para presentarla en un concurso de diseño.
Fogata de relatos Invitado: Miguel Ángel Reyes
Minutos y más minutos atravesando grandes extensiones
planas sembradas de trigo y girasoles. Algún pequeño pueblo a lo lejos y en él sobresale una torre campanario
de una ruinosa iglesia. Está amaneciendo. La carretera apenas tiene curvas. No hay nada de tráfico. El viaje es cómodo, tranquilo. Dentro de mi mente, la palabra inmensidad, el horizonte que acaba en el mar pero no se
ve, el campo infinito. De pronto el conductor reduce la marcha. Se aproxima un peaje.
Peaje es paréntesis, es frenar en medio de la nada y el todo. Peaje es pagar por seguir en esa rápida vía.
El coche frena detrás de una pequeña cola de vehículos para realizar el pertinente pago. Miro a mi derecha por la ventana. Un coche fúnebre. Y dentro de él, un ataúd decorado con coloridas coronas de flores. El enchaquetado chófer va a pagar también el peaje.
Highway to hell, tarareo mentalmente. El precio de vivir en este insensible mundo, pienso.
El muerto pasa el peaje rumbo al cementerio. Nosotros también lo pagamos y seguimos cruzando esa inmensidad que nos rodea. NOTA
Este texto Formará parte del primer libro del autor, “El contrario tiene algo en común”, que se publicará próximamente.
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Fuente de poetas Invitada: Isabel Vidal
Me contó el río
Me contó una vez el río. que una tarde de verano dos jóvenes se paseaban tomados de la mano. La brisa revoloteaba y jugando con su pelo a la niña despeinaba y tapaba con un velo. De sus bocas dulcemente los juramentos brotaban y el susurro de esos labios a la niña sonrojaba. Abrazados fuertemente como sellando ese pacto se alejaron lentamente por el camino soñado. Y el río como testigo de ese amor adolescente también siguió su camino quizá algún día se encuentren. 15 -
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Fuente de poetas Invitado: Arnoldo Rodríguez Cabrera Canta el canario en la Jaula, y el ruiseñor, en la rama, el mirlo en el duro suelo, y la paloma en el aire.
Canta la joven en la ventana, y con el peine de oro, se atusa la larga mata de pelo.
Canta el minero en el túnel, para sus miedos callados, y salta la barrena, entonando un canto de muerte.
Cantos Canta el trovador en las plazas, y la comparsa, en la fiesta, en la tuna el estudiante, y en los sepelios el poeta..
Canta el grillo, en la espesura, en las noches de verano, y el saltamonte violinista, ejecuta de monótona manera, el sonsonete discurso.
Canta el labrador en el campo, y no lo calla ni el viento, ni las madrugadas, frías, ni la nieve del invierno.
Canta el marinero en el barco mientras, recoge las redes, la faena es dura y larga, con la sal del agua clara, tiene Todos cantan, alegrías, penas, y perdidas, escamas, y agallas como simbiosis, en diferentes situaciones, aunque la voz ajena. tengan rota, cantan al desahogo, cuando comienza la guerra.
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Canarias, escenario literario Cecilio Pérez Cecilio es natural San Juan de la Rambla, en la isla de Tenerife. Aficionado y “consumidor” de las bellas artes, comenzó desde su juventud a hacer las primeras incursiones en la poesía, componiendo letras para canciones de las que también es autor. En la madurez decide escribir historias ambientadas y con vivencias en las Islas Canarias. Decide inmiscuirse en los secretos amorosos de un cura y nace la novela: LAS MUJERES DEL CURA (que ya hemos reseñado en números anteriores de esta revista). Hoy les traemos un fragmento de su novela FASNIA, HISTORIA DE UN EMIGRANTE.
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Fasnia, historia de un emigrante Fragmento perteneciente a la novela
Capítulo 9 - La travesía Paladín era el nombre del barco. Resultaba ser un carguero combinado con motor y vela que no estaba preparado para el transporte de pasajeros, por lo que no disponía de las mínimas comodidades para la larga travesía que les esperaba. La bodega era el dormitorio común para los cincuenta hombres y la cubierta el lugar para pasar el mayor tiempo posible. Emeterio Castro formaba parte de la tripulación, se presentó como el encargado del orden entre los pasajeros. Era en realidad el representante del que organizó el viaje, un comerciante de Telde con negocios de dudosa legalidad. A él se le debía todo el respeto y consideración, pues también iba a ser el que organizara el reparto de los víveres. El resto de la tripulación lo componía un tal Wenceslao que era el capitán y tres marineros de origen marroquí, así como un tal Amundsen, de origen noruego, que desempeñaba las labores de encargado de la máquina. Todos los días se nombraría a una cuadrilla que se encargaría de las labores típicas de mantenimiento y limpieza. El carguero tenía los días de navegación contados, pues se notaba que ya tenía muchas millas recorridas. Era evidente que esta iba a ser la última travesía, ya que así sucedía casi siempre en este tipo de viajes. Se corría demasiado riesgo para poner en juego un buen barco. Disponía de dos lanchas salvavidas a las que todos miraban pensando con angustia cómo sería verse en medio del mar dentro de ellas. Era mejor creer que todo saldría bien. El barco puso rumbo a la costa africana. El capitán, un hombre rudo con la piel arrugada curtida por el sol y el salitre, de unos sesenta años de edad, nos informó de que el primer destino sería Dakar, en Senegal. Desde allí los vientos alisios y las corrientes son favorables para llegar rápido al destino.
Entre los pasajeros se comenzó a formar grupos de entre cinco y diez miembros que por empatía o simplemente por estar con alguien, marcaron el día a día del viaje. Eliseo se unió a un grupo de seis, dos procedentes de Agaete, uno de Valsequillo, otro natural de La Aldea, uno de Betancuria y otro de Pájara, en Fuerteventura. Antonio Rodríguez el de Icod se unió a otro grupo. El primer día de travesía lo pasaron en la bodega. Salían a cubierta en grupos de cinco por un tiempo de una hora. La guardia costera siempre sospechaba de cualquier barco en el que se viera mucha gente y lo interceptaba para registrarlo. Afortunadamente esto no sucedió. Casi todos los compañeros de viaje estaban tristes y con una angustia que les quitaba el apetito. Un tal Clodomiro García parecía ser el único feliz y contento. Este hombre procedía de San Mateo, en Gran Canaria, era soltero y según contaba no tenía a nadie que le esperara en ningún lugar, allá donde vaya estaré conmigo, decía riendo. Los oficios de los pasajeros eran diversos. Carpinteros, cesteros, albañiles, talladores de la piedra, cabreros, y la mayoría agricultores. Uno de los del grupo de Eliseo dijo que era maestro de escuela, aunque en realidad era un cura rojo que estuvo escondido en un aljibe vacío durante cuatro meses, porque había orden de encarcelamiento por alentar desde el púlpito a los feligreses a rebelarse contra el poder establecido. Este hombre se llamaba Eladio Frías y procedía de Albacete, aunque su parroquia la tenía en la Aldea, en la isla de Gran Canaria. Cada día, a medida que se sucedían las conversaciones con uno o con otro, Eliseo fue descubriendo el motivo por el que cada uno viajaba de manera clandestina. Comprobó que no era el único que lo hacía por una falsa acusación de un vecino al implicarlo en comentarios o situaciones que demostrasen cualquier contrariedad con el régimen y que por supuesto no era cierta. Conoció el caso de un tal Calixto Yanes, que fue denunciado por un vecino, porque era el favorito de una mujer del pueblo que se trajinaba a unos cuantos y eran tales los celos, que lo acusó de repartir papeletas del partido comunista en la venta que regentaba. Los guardias le amargaron tanto la vida que no tuvo otro remedio que abandonarlo todo. Dejaba mujer y dos hijos pequeños. Todo habían sido invenciones del denunciante... 15 -
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