JULIO-AGOSTO 2012
TERCERSECTOR
SUSTENTABILIDAD Acciones de Responsabilidad Social Empresaria
Cada vez son más las empresas que eligen adquirir productos o servicios provistos por emprendedores sociales. Una estrategia que suma beneficios para todos los actores
Compras
con sentido social
BBVA Francés
Fundación Arcor
TGN
Kimberly
Ruta Quetzal 2012
Más niños al jardín
Aporte a familias salteñas
Capacitar para incluir
EMPRESAS Y EMPRENDEDORES
De compras responsables Cada vez más empresas incluyen organizaciones sociales en sus cadenas de proveedores. Para las compañías es una forma de desplegar sus estrategias de sustentabilidad; para los emprendedores solidarios es un gran y necesario incentivo. TEXTO ALEJANDRO GIUFFRIDA
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sualmente, la Responsabilidad Social Empresaria (RSE) está asociada a acciones de grandes firmas para financiar proyectos solidarios o acompañar a personas en condiciones de vulnerabilidad. Sin embargo, en los últimos años se fue consolidando una estrategia paralela que consiste en incluir entre sus cadenas de proveedores a emprendedores sociales u organizaciones que desarrollan un producto o un proyecto y necesitan de un gran actor económico para despegar. De esta manera, mediante su política de RSE la empresa se transforma en una palanca para traccionar iniciativas solidarias. Asume el compromiso de adquirir producción ya sea de cooperativas, talleres protegidos u organizaciones sociales, y brinda el respaldo de su marca para consolidar estos productos. Tercer Sector indagó sobre algunas de estas experiencias, ejemplos de una renovada opción de lazos sociales entre empresas y emprendedores.
El primer eslabón De este lado de la cadena de emprendedoresempresas, figuran cientos de organizaciones, cooperativas y emprendimientos creados para dar inclusión a diferentes actores sociales usualmente relegados de las oportunidades laborales. Por ejemplo, sólo entre el universo de personas con discapacidad se calcula que más del 70 por ciento se encuentra desocupado. Pero el dato se contrasta con una encuesta reciente que refleja que 8 de cada 10 empresas consideran “posible” integrarlos en su firma; lo cual demuestra que lo que hace falta es generar el encuentro entre estos dos polos. Algo similar sucede con las cooperativas o emprendimientos solidarios que se afianzan en una rama de producción, pero no logran terminar de cerrar el círculo con el canal de comercialización. Uno de los casos que merece un capítulo en este rol de articulación es el de RedActivos, una empresa social creada por La Usina, que genera puestos de trabajo genuinos para personas con discapacidad. Beatríz Pellizzari, la directora estratégica del proyecto, destacó que la clave es el funcionamiento en una “red” en la que se “articulan diferentes actores”: personas con discapacidad, universidades que transfieren co2
nocimientos, empresas clientes que compran a la red, inversores que facilitan el acceso al dinero y proveedores de servicios o materias primas. Actualmente, son 13 los talleres protegidos de producción que tienen convenio con la red, lo que engloba a unos 420 trabajadores con discapacidad “aumentando sus destrezas y oportunidades laborales”. Semejante estructura asiste con productos a un total de 33 empresas clientes. Una de las relaciones estratégicas es con la fábrica de juguetes Dimare S.A. En 2011 esta alianza implicó más de 27 mil horas trabajadas y el ensamblado de medio millón de muñecos para la línea de encastre Blocky. Sergio Dimare, director de Logística y Producción de Juguetes Rasti, explicó que en la asociación con RedActivos “encontramos el camino para plasmar una política de RSE en actividades concretas, sencillas y de gran utilidad” y agregó que hallaron así “una herramienta profesional y simplificadora para complementar con nuestros recursos y lograr el objetivo”. En el caso de Dimare, el vínculo se inició en 2010. “Cuando empezamos, probamos tres trabajos distintos, para ver cuál se adaptaba mejor a sus capacidades y posibilidades. Después vimos que el armado de muñecos era la mejor opción”, indicó. “Hoy, prácticamente, nos proveen el 100 por ciento de la tarea. Lo que representó en el último año una facturación de RedActivos de 130 mil pesos”, subrayó Dimare. En esta misma línea figura también el caso de Unilever, una de las compañías que lidera el mercado de alimentos y
de productos para el hogar y que mantiene un lazo con RedActivos desde hace cuatro años. En 2011, por ejemplo, la red de talleres protegidos confeccionó para Unilever unas 6.200 cajas navideñas para sus empleados, ensambló otras 6.800 de Cajas Food y desarrolló más de 22.000 Ecobolsas.
Un masaje solidario Dentro de este universo de asociaciones entre emprendedores sociales y firmas económicas importantes, hay una experiencia que tiene tan sólo un año de vida, pero que crece sostenidamente y ya aportó un costado en verdad novedoso a la cuestión. Se trata de En buenas manos, un proyecto de masajes para empleados que son dados por personas no videntes. Hernán Español, uno de los fundadores, explicó que “transforman una discapacidad en una ventaja competitiva: Las personas ciegas tienen un gran desarrollo del tacto, y entonces se capacitan para volcar ese sentido hacia los masajes”. Aunque son muchos los pedidos ocasionales que tienen, ya manejan un sistema de abono fijo con empresas de gran dimensión, tales como American Express, Baxter, Isadora y Walmart, entre otras. Silvia Ucha está a cargo del área de Salud de Baxter Argentina, laboratorio internacional donde En buenas manos lleva sus servicios una vez al mes. “Se genera un clima de relajación que ayuda mucho al bienestar de la empresa, los masajes son realmente efectivos para el personal”, destacó. En cuanto a las personas que participan del emprendimiento, Ucha subrayó su profesionalismo e independencia: “Las primeras sesiones, la gente se sorprendía y no sabía bien cómo manejarse o cómo hablar con los chicos, pero su actitud y profesionalismo hicieron que sean ellos los que ayudaran a nuestro personal a sentirse cómodos”. En el proyecto trabajan 8 personas, pero desde la organización estiman llegar a diciembre con unas 20. “Para ellos es una redefinición del rol que tienen en la sociedad. Antes eran desempleados; ahora el trabajo los dignifica y eso es una acción de inclusión”, subrayó Español.
Manos que tejen Otro de los sectores donde también se generan sinergias positivas entre empresas y emprendimientos sociales es el
universo de la indumentaria. Uno de los casos más conocidos es el de Tramando, la empresa de diseño de ropa que creó Martín Churba, y que trabaja a la par con la Red Puna, un colectivo conformado por más de 30 organizaciones de comunidades aborígenes, campesinos, artesanos de la zona de la quebrada y la Puna jujeña. A comienzos de junio, en la Casa de Jujuy en Buenos Aires se realizó la 1° edición de la Feria de Red Puna-Tramando, pero el vínculo en realidad tiene ya más de 6 años. La Red es parte del Movimiento Nacional Campesino Indígena y realiza artesanías en fibra de llama y lana de oveja, teñidos con tintes naturales, tejidos en telar a partir de materiales originarios y técnicas ancestrales. “Criamos nuestras llamas y ovejas y esquilamos nuestros animales”, señalan sus miembros.
Doble eslabón También con RedActivos funciona un proyecto que ideó la firma de cosméticos Natura. Con una ingeniería que resulta novedosa en esta materia, sumó el apoyo a productores sociales a una cadena de valor y responsabilidad social que ya tenía en funcionamiento. La historia es así: hace cuatro años, Natura presentó el programa Creer para Ver, mediante el cual apoya al sistema educativo de manera directa trabajando con escuelas, docentes y estudiantes. Para ello, lanzó una serie de productos cuya ganancia se destina directamente a financiar el proyecto y que en 2011 recaudó más de un millón de pesos. Pero este año, Natura dio una vuelta de tuerca al proyecto mediante la incorporación de productos realizados por emprendedores sociales, que en este caso fueron fundas para celulares. De esta manera, los consultores comercializan un producto hecho por personas con discapacidad y ese dinero es, a su vez, destinado a respaldar el sistema educativo donde tiene más debilidades. “De esta forma, Natura fortalece su cadena de valor ampliando la red de beneficiarios al inicio de la cadena, promoviendo estrategias que generan oportunidades para más personas”, subrayaron desde la empresa. 3
BBVA FRANCÉS RUTA QUETZAL BBVA 2012
La vida color de ruta Más de 200 jóvenes de 51 países –entre ellos, siete argentinos– participaron del programa cultural que unió Colombia y España. A lo largo de sus 27 ediciones, más de 9.000 chicos ya visitaron distintos puntos de América latina. TERCER SECTOR EN COLOMBIA TEXTO SILVIA FIORE
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esfilaron por los frondosos recovecos del Parque Nacional Tayrona. Mochilas al hombro, borceguíes embarrados, repletos de expectativas, 225 jóvenes de 51 países recorrieron sus senderos. Y tras una ardua caminata hasta Pueblito –en la Sierra Nevada de Santa Marta, tierras de la etnia kogui– llegó la recompensa: el chapuzón en la playa de San Juan de Guía. Para la mayoría de los chicos que allí estuvieron, el bautismo en las colombianas aguas del Mar Caribe será un recuerdo imborrable. En realidad, apenas uno de los muchos que recolectaron a lo largo de los 45 días que vivieron como ruteros de la 27° expedición de la Ruta Quetzal BBVA. El programa impulsado por la entidad crediticia se desplegó en un periplo que comenzó en Madrid, incluyó varias ciudades colombianas y otras tantas españolas. La consigna fue desandar los pasos del médico, matemático y físico José Celestino Mutis, quien entre 1783 y 1816 comandó la Real
OPINIÓN
Expedición Botánica al Nuevo Reyno de Granada, en la que hizo importantes hallazgos en materia de minería e identificación de la flora y fauna autóctonas. En esta edición, la Ruta Quetzal BBVA renovó su cometido: que los jóvenes vivieran un intercambio cultural y educativo entre Europa y América. Así, a lo largo de más de 2 mil kilómetros recorridos en territorio colombiano, los expedicionarios palparon colores y sabores locales, interactuando con los habitantes de cada pueblo que pisaron. Distribuidos en 12 grupos, cada uno de ellos a cargo de un monitor y con la supervisión del Jefe de Campamento, los jóvenes arribaron a Cali el 19 de junio, y a partir de entonces fueron protagonistas de una travesía que supo combinar dosis parejas de aventura y aprendizaje. Así, visitaron el Eje Cafetero en las localidades de Armenia, Salento y el Valle de Cocora; prosiguieron el recorrido por Ibagué, San Sebastián de Mariquita, el bosque de canelos de Andaquíes, la Villa de Guaduas, Falán, Ambalema, Beltrán, Honda y Aracataca, la ciudad natal del Nobel Gabriel García Márquez. Precisamente del escritor supieron más en las visitas a los muse-
Invertimos en educación para la inclusión
POR GONZALO VERDOMAR WEISS ✱
a política de Responsabilidad Corporativa de nuestro Grupo BBVA tiene como focos principales la cultura, el medio ambiente, la ciencia, la acción social y, sobre todo, la educación. Invertimos de manera decida por la educación como palanca de inclusión social. Es por ello, que desde 1993 organizamos y patrocinamos Ruta Quetzal BBVA, un programa educativo y cultural, a través del cual fomentamos valores como la cooperación,
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el respeto y la superación. Este año, nuestro BBVA Francés destinó un presupuesto de 10 millones de pesos a lo que denominamos Compromiso Social BBVA Francés, que consiste en tres líneas de trabajo a favor de la sociedad: el Programa Becas de Integración BBVA Francés, con dos programas derivados: Artistas por la Educación e Investigación y Análisis; preservación del medio ambiente y estímulo a los emprendedores del sector
agropecuario. Orgullosos, hoy podemos contar que nuestro Programa Becas de Integración ya transita su 6° año y ha contribuido de manera directa con la integración y permanencia en el sistema educativo a nivel secundario de 4.247 alumnos, y de manera indirecta con alrededor de 17.000 personas. ✱ Director de Relaciones Institucionales de BBVA Francés.
os y a través de su hermano Jaime, durante una conferencia que éste ofreció en Cartagena de Indias. “El objetivo de la Ruta es contribuir a que cada chico se convierta en un ciudadano que entienda mejor el mundo y supere las barreras que las culturas han levantado a través de milenios”, señaló Andrés Ciudad Ruiz, subdirector del Programa, para quien la propuesta es “iniciática, porque imparte valores no sólo educativos, sino también de superación personal; les aporta relativismo para juzgar otras maneras de pensar y es integradora, porque incluye a todos los chicos, más allá de la calidad educativa que recibieron”. Que la experiencia de ser rutero supera los aprendizajes curriculares, dio cuenta Lucía Morey Manassero, estudiante de la provincia de Córdoba: “Acá aprendés que no importa tanto la imagen, sino el respeto por la naturaleza y por los otros. Y la solidaridad, porque hay que pensar en grupo y no individualmente. A medida que descubro lugares nuevos, también me descubro a mí”, confió la chica que ganó su lugar en la expe-
colombiano en la capital, Bogotá, donde pudieron ver el Museo del Oro, recorrer el casco antiguo de la ciudad y fueron recibidos oficialmente por el Presidente Juan Manuel Santos. El resto de la travesía fue más allá del Atlántico. Los ruteros se embarcaron rumbo a Madrid, donde se entrevistaron con los Reyes de España y conocieron más ciudades: Rota, Málaga, Cartagena, San Fernando y Cádiz, donde fueron parte de las celebraciones por el Bicentenario de la Constitución de 1812. Más tarde llegaron a Sanlúcar y a Sevilla, desde donde retornaron a Madrid para recibir un diploma en el acto de clausura del programa académico. Al promediar la expedición, y durante una recorrida por el Jardín Botánico de Bogotá, María Sol Kindt, del Instituto José Manuel de Estrada, de City Bell, sostuvo que “la recepción de los pobladores, su generosidad” fue lo que más le impactó de la Ruta y relató el arribo a Ambalena, cuando los expedicionarios fueron “a la plaza principal a bailar con los
dición gracias a un trabajo literario. A su lado, Tomás Cabrera Di Bartolo, del Colegio San Martín de Avellaneda (15) aportó que su mayor sorpresa en la Ruta fue “ver tantas culturas juntas. Si hasta estamos aprendiendo muchas palabras nuevas”. Lucía y Tomás son dos de los siete argentinos que participaron de la Ruta Quetzal BBVA 2012. Ellos, como el resto de sus compañeros, fueron seleccionados en un certamen de ensayos artísticos con eje en la vida de Mutis. A nivel local, un jurado integrado por figuras de la cultura y del Ministerio de Educación eligió las propuestas ganadoras.
chicos del pueblo. Eso es conocer el país y su cultura a través de la gente y no como un turista”, aportó. La interacción entre los estudiantes y las comunidades locales, sumada a la convivencia que impone la expedición son, a criterio de Jesús Luna, Jefe del Campamento de la Ruta desde hace 12 años, los factores que contribuyen al crecimiento y el aprendizaje de los adolescentes. “Veo un cambio radical en los jóvenes cuando termina el viaje, se dan cuenta de que aprendieron mucho de los demás. La cooperación, la reciprocidad y la ayuda mutua son los principales valores que incorporan acá los chicos”, señaló en diálogo con Tercer Sector. Declarada de Interés Cultural por Unesco, la Ruta Quetzal nació en 1992, a instancias del Rey de España, para promover el encuentro entre las juventudes de Iberoamérica. Desde entonces, alrededor de 9.000 jóvenes de más de 60 países ya participaron del Programa que en la actualidad cuenta con el apoyo mayoritario del Banco BBVA y el aporte de otras empresas para costear un monto que supera el millón de euros anuales, según estimaron los organizadores. A la hora del balance, los participantes coinciden en que la vivencia de rutero conlleva un aprendizaje superador para cada chico. Y, a través de ellos, también impacta en sus comunidades. “Cuando cada uno de ellos retorna a su aldea, vuelve transformado. Pero cuando cuenta todo lo que vivió, contribuye a transformar a sus familias”, reflexionó Andrés Ciudad Ruiz.
Viaje transformador Desde el Parque Nacional Tayrona, los expedicionarios partieron rumbo a Barranquilla. Allí los aguardaban exponentes del tradicional carnaval local, los ritmos del vallenato y una navegación por el Río Magdalena. Las visitas a la última residencia de Simón Bolívar y a distintos poblados se complementaron con conferencias a cargo de académicos y talleres de artesanías y de plantas medicinales para los chicos. Cuando Barranquilla quedó atrás, la caravana de ómnibus que los transportaba enfiló rumbo a Cartagena de Indias, previa escala en San Basilio del Palenque, un poblado de afrodescendientes que bregan por preservar sus costumbres y lengua originaria. Después de visitar puntos históricos de la fortificada Cartagena, los jóvenes completaron su recorrido
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FUNDACIÓN ARCOR
Más niños al jardín El aumento de la oferta educativa y las políticas públicas que promueven la inclusión, contribuyeron a que más chicos accedan a la educación inicial. Así lo revela un informe de la Fundación Arcor y Unesco. TEXTOS SOLEDAD CÁCERES
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n la última década, el jardín de infantes se ha convertido en la primera puerta de ingreso al sistema educativo para la mayoría de los niños y niñas del país. Así lo revela una investigación elaborada por la Fundación Arcor y el Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (Iipe) de la Unesco. El crecimiento de la matrícula se debe a dos razones: el aumento de la oferta educativa y la decisión del Estado de impulsar políticas públicas para promover la inclusión de los infantes. Los resultados completos serán presentados en septiembre en Córdoba, como parte de los festejos por los 20 años del nacimiento de la Fundación Arcor. “Situación de la primera infancia en la Argentina a dos décadas de ratificar la Convención por los Derechos del Niño” es el nombre del estudio hecho en base a estadísticas oficiales y que, entre otros puntos de análisis, incluye un apartado especial sobre la inserción de la infancia en la educación formal.
Según algunos datos adelantados por la Fundación Arcor en exclusivo a la revista Tercer Sector, en los últimos ocho años creció el ingreso de los niños y niñas al jardín de infantes, pero a su vez aumentó la disponibilidad de centros educativos estatales. “La oferta de la sala de 4 creció más del 126 por ciento, seguida por la sala de 3 que llegó a un 80 por ciento y la de 5, que aumentó un 4 por ciento”, adelantó Santos Lío, gerente de la institución. A la hora de analizar las razones del crecimiento, Lío focaliza su atención en dos puntos: la decisión de incluir en la Ley Nacional de Educación la obligatoriedad de asistencia a la sala de 5 y la universalización de la sala para chicos y chicas de 4 años. “Esto ha generado que la matrícula haya aumentado considerablemente”, reveló. “La sala de 5 tiene cobertura casi del 100 por ciento; también hubo un aumento muy importante de la sala de 4”, agregó. “Todos sabemos lo importante que es que los chicos lleguen
Un camino que se inició hace 20 años Desde su nacimiento tuvieron claro qué querían y cómo lo harían: colaborar con el crecimiento y la inclusión de cientos de chicos y chicas del país a través de la educación. “Han habido cambios en cuestiones metodológicas; se pasó de una diversidad de programas a otros proyectos con una mirada integral y con un fuerte componente territorial, pero también se ha mantenido intacta la causa y la herramienta de cambio, que es la educación. La educación entendida en un sentido amplio, no sólo vinculada a la escolaridad, sino con todo lo que tiene que ver con el desarrollo de los niños”, evaluó el gerente de la Fundación Arcor, Santos Lío, a poco de cumplir dos décadas de trabajo. En el camino se encontraron con cientos de organizaciones sociales, actores locales, organismos gubernamentales e internacionales dispuestos a acompañarlos, convencidos de que invertir en infancia es apostar al crecimiento del país. “Tomamos la infancia como una medida de desarrollo, de crecimiento social; más y mejor están los niños, más y mejor
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vamos a estar todos”, resumió Lío. La Fundación trabajó en la mejora de las posibilidades de enseñanza-aprendizaje en las aulas de todo el país, reforzando el espacio escolar con equipamiento como libros, materiales didácticos y útiles. También desarrolló propuestas socio-educativas mediante las cuales se potenció el protagonismo docente y el apoyo pedagógico e institucional. A su vez, fue un eslabón importante en el acompañamiento a las escuelas en la gestión de sus propios proyectos sociales, abriendo las puertas a los padres. En estos 20 años, apoyó más de 1.960 proyectos, tuvo como protagonistas de sus iniciativas a 2,5 millones de niños, niñas y adolescentes de todo el país, articuló su trabajo con más de 36 mil organizaciones, fue distinguida con 18 premios y reconocimientos por su labor y apoyó 145 publicaciones sobre la temática de la infancia. “El desafío es seguir trabajando para que todos los chicos de la Argentina accedan a la educación en igualdad de oportunidades”, remarcó Lío.
al inicio escolar con las mismas posibilidades, que en el tiempo previo puedan acceder al disfrute, a espacios de estimulación creativa. Por ello, es fundamental que todos los niños pasen por la experiencia del jardín de infantes”, resaltó. Sin embargo, todavía queda mucho por trabajar para incluir a miles de chicos de menor edad que se saltean una parte del jardín. De acuerdo a la investigación, en el rango de 0 a 2 años sólo asiste el 10 por ciento y de 0 a 3, sólo acude el 40 por ciento. La clave, según Lío, “radica en aumentar la oferta de calidad y acompañarla por un marco legal que la promueva”. “Si se trabajara en la misma perspectiva con la sala de 2 y 3 años se ampliaría la concurrencia de los niños”, remarcó. “Las familias tienen que tener la posibilidad de elegir si quieren o no enviar a los chicos al jardín; que no lo hagan porque no hay oferta, no es una real posibilidad de elección”, señaló.
Encuentro internacional Los resultados de esta investigación serán presentados el 6 y 7 de septiembre próximos en Córdoba, donde se realizará el seminario internacional Infancias; desafíos y oportunidades - Cruzando saberes y prácticas. La actividad es organizada por la Fundación Arcor a modo de festejo por los 20 años de su nacimiento. Durante esos dos días se analizarán y debatirán diversas temáticas vinculadas a la niñez: la situación de la primera infancia en la Argentina y las desigualdades que la atraviesan; las oportunidades educativas dirigidas a los niños y
niñas tanto en el ámbito formal como informal; la importancia estratégica de invertir en infancia y el análisis del estado presupuestario y los espacios y políticas socioculturales dirigidos a los más pequeños. El debate tendrá como participantes a diferentes especialistas nacionales e internacionales. Una de las personalidades convocantes será Francesco Tonucci, psicopedagogo y dibujante italiano, autor de numerosos libros sobre infancia. La actividad contará con la presencia de Daniela Eroles, asistente técnico del área de Educación Inclusiva e Innovaciones Educativas de Unesco Chile; Jorge Oroza, de Save the Children en Perú; Inés Rizzini, de la Red Nacional para la Primera Infancia de Brasil; Alberto Minujín, de Equity For Children y especialista en temas de políticas sociales y de reducción de pobreza infantil y Néstor López, investigador del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (Iipe) de la Unesco. El seminario también será el escenario de presentación de EduCómetro, un instrumento elaborado por Arcor para mensurar las oportunidades educativas locales. “Se trata de una herramienta metodológica para medir la educación en un sentido amplio y en una comunidad determinada”, detalló Lío. “Incluye datos estadísticos, infraestructura, la calidad educativa, la matrícula, los niveles de repitencia, el acceso a educación no formal, políticas de infancia a nivel municipal, provincial y nacional”, enumeró. 7
ENTREVISTA
CHRISTIAN TISCORNIA
“Hay que preguntarse si educamos para competir o para cooperar” Como fundador y director de Amartya, busca modificar el paradigma actual de desarrollo económico y consumismo por uno más equitativo, que defienda la producción sustentable y cuide el medio ambiente. Su mirada sobre el rol de las empresas, el Estado y la sociedad. TEXTO SEBASTIÁN OLIEL
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hristian Tiscornia creó en 2005 Amartya, una OSC que se propuso pegar las partes de una sociedad fragmentada a través de la educación en sustentabilidad y consumo responsable. En ese camino, capacita a empresarios y a jóvenes sobre el rol que cada uno puede ejercer para contrarrestar los efectos de un mundo que entiende el desarrollo como crecimiento económico y al consumismo como su motor principal. Christian (40, abogado, licenciado en políticas sociales y planeamiento, y padre de tres chicos), aboga por cambiar el paradigma de progreso actual por otro que incluya la equidad y los límites planetarios. Sostiene que para alcanzarlo, se necesitan educación ambiental en todas las escuelas, industrias verdes y políticas públicas que defiendan e incentiven la producción sustentable. –¿Estamos en deuda con la Tierra?
–Sí, tenemos una deuda ecológica, estamos con un sobregiro ecológico. Es decir, estamos consumiendo recursos naturales mucho más rápido que la capacidad regenerativa de la Tierra. Es como si tuvieras 10 mil pesos en el banco y te genera un interés. Si gastás más del interés, te empezás a comer el capital. Y va a llegar un momento en que esa plata no va a estar más. Con el planeta pasa lo mismo. La forma de consumir hoy en día es insustentable. En Argentina, si seguimos consumiendo merluza como lo estamos haciendo no va a haber más merluza. –Sin embargo, la forma de producir y consumir actuales parecen continuar por ese camino…
–Hoy la humanidad vive bajo un paradigma que cree que el crecimiento económico es el fin. Existe una cosmovisión 8
del desarrollo como crecimiento económico, sea como sea y cueste lo que cueste. Esta visión no sirve. Vivimos en un mundo con límites. El paradigma de la prosperidad que promovemos desde Amartya tiene que ver con lo económico, pero también con la equidad y el medio ambiente. Entendemos el desarrollo sustentable como la satisfacción de las actuales necesidades de la población sin comprometer las de las futuras generaciones. –¿Es posible poner un freno a la manera de producir actual?
–Cuando se habla de frenar la producción enseguida se piensa en que muchas personas se van a quedar sin trabajo, pero no se trata de pasar de blanco a negro. El problema es profundo y multidimensional y requiere soluciones multidimensionales. El crecimiento económico está arrasando con el planeta y sin embargo, la mitad de la población mundial está en la pobreza. Pero como no se puede pasar de un paradigma a otro de manera inmediata, trabajamos primero la educación en sustentabilidad, generando conciencia, a través de cursos universitarios y a futuros líderes, talleres en escuelas secundarias, porque la educación es el corazón de nuestra labor. –¿Cuál es la propuesta de Amartya?
–Lo importante es redefinir qué es prosperidad, qué es desarrollo, y este tiene que ver con ingresos, bienestar y límites ecológicos. Ahí entran empresas que produzcan de forma limpia y responsable, educación en todas las escuelas sobre sustentabilidad, participación ciudadana en organizaciones que defiendan el medio ambiente y los derechos de los trabajadores, comprar sólo lo que necesitamos dando prioridad a los productos locales, rechazar la obsolescencia programada y demandar productos du-
centive una macroeconomía para la sustentabilidad, una regulación que ayude a las pymes, que son la enorme parte del sector productivo argentino, que se invierta en energías renovables. –La RSE, sin embargo, es una cuestión voluntaria y el empresariado suele preferir que siga siendo así...
–Estamos terminando una investigación sobre el rol del Estado en la promoción de la sustentabilidad corporativa desde la mirada de los empresarios. Preguntamos a un centenar de empresas líderes en temáticas de RSE y en forma preliminar puedo decir que la mayoría dice querer un rol más activo del Estado argentino, considera positiva la regulación y el fomento de la RSE. –¿Es posible ser un consumidor responsable cuando impera una lógica de recambio permanente de bienes?
–Hoy en día es imposible ser un consumidor 100 por ciento responsable porque tampoco hay estímulos para serlo. Tenemos bananas de comercio justo, remeras, artesanías, pero no hay autos o computadoras. Nuestra idea es que los jóvenes se conviertan en agentes de cambio, que todos nos comprometamos y que cada uno haga su parte. –¿Qué formas de ejercer la ciudadanía proponen?
raderos y sustentables, también información de las empresas sobre la huella ecológica de todos los productos que venden y políticas públicas que defiendan e incentiven la producción sustentable, además de un modelo de energías alternativas. –¿Cuál es el rol de las empresas en este escenario?
–Simón Sade, ex CEO de Accountability, dijo que “el desafío ya no es crear oportunidades de rentabilidad en el mercado actual, sino crear mercados que sistemáticamente reconozcan y premien prácticas de negocios social y ambientalmente responsables”. A veces, la RSE es muy criticada porque dicen que es un océano de dos centímetros de profundidad,
“Con una RSE solamente voluntaria no va a avanzar la temática, pensamos que es muy importante un rol más activo del Estado.” un paliativo como para solucionar la superficie; sin embargo, vemos que hay un encarrilamiento en el discurso de la sustentabilidad y en la cosmovisión correcta, lo que no deja de ser un avance. –El Estado, ¿debería regular la RSE?
–Para nosotros es fundamental entender que con una RSE solamente voluntaria no va a avanzar la temática, y pensamos que es muy importante un rol más activo del Estado, mayor promoción de estas temáticas, que haya una regulación que fomente la sustentabilidad, que in-
–Por ejemplo, reclamando más información y visibilidad en los procesos corporativos. Vivimos en el mundo de la fórmula secreta de Coca-Cola. Y hay que cambiar eso. En este nuevo paradigma necesitamos información. Preciso saber cómo se hizo la computadora, el teléfono. Imaginemos qué pasaría si uno cuando va al supermercado puede conocer la huella ecológica de los productos, su impacto social y laboral. Y a partir de ahí, decidir su compra. –¿Cómo imagina a la empresa del nuevo paradigma?
–En Estados Unidos existen las B corporations (B, por benefits). Se trata de empresas comerciales pero que tienen como misión un fin social o ambiental. Un ejemplo es Patagonia, cuyos principios básicos plasmados en su misión se fundan en reciclar, reusar, reparar y reducir la compra lo máximo posible. En este sentido, las empresas tienen que preguntarse cuál es su fin último. Hace 50 años eran ganar plata, producir, vender y generar la mayor riqueza posible para sus accionistas. Hoy, hay que comprender que tiene mucho que ver con la calidad de vida de los trabajadores y la preservación del medio ambiente, porque su descuido va a impactar sobre el propio negocio. –Los valores actuales tampoco favorecen esta cosmovisión de la sustentabilidad...
–Hay que preguntarse si educamos para competir o para cooperar. Estamos construyendo un Eco campus en Coronel Vidal, en base a principios de bioarquitectura, movido por energías renovables, donde 50 ó 60 personas podrán vivir y aprender de sustentabilidad, negocios inclusivos y verdes o cursar un Green MBA. También desarrollaremos un nuevo programa destinado a niños, porque las nuevas generaciones ya están ahí, y ahí hay que dejar la semilla. 9
TRANSPORTADORA DE GAS DEL NORTE
Respuestas para La Loma Gracias al trabajo conjunto de la empresa y el municipio, decenas de familias de las etnias toba, wichi y guaraní, en la salteña Embarcación, lograron mudarse de una zona con riesgo de derrumbe. En la nueva comunidad instalaron agua corriente. TEXTO OMAR LACAVA
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n febrero de 2009 se produjo en Tartagal un aluvión de barro: el río del mismo nombre se salió de su cauce, derribó un antiguo puente ferroviario e inundó varias cuadras a la redonda, lo que generó una verdadera tragedia. Suele decirse que en estas ocasiones lo urgente tapa a lo importante y la necesidad de resolver un problema inmediato obliga a poner parches nuevos sobre parches viejos. Pero esta vez, lo urgente fue una buena excusa para resolver lo importante y ejecutar un anhelo varias veces programado y nunca puesto en práctica. En el barrio La Loma, de la localidad salteña de Embarcación, había un doble problema para resolver. Por un lado, los habitantes de la zona de la costa, unas 50 familias, corrían riesgo de derrumbe a raíz de la intensa acción de la erosión, que se agravó tras el aluvión. Y, por otro lado, las aproximadamente 600 personas que viven en la zona alta no tenían agua corriente. Embarcación es una ciudad perteneciente al departamento General José de San Martín, en el norte de la provincia de Salta. Se encuentra a 90 kilómetros de Tartagal sobre la Ruta Nacional 34 y tiene unos 24 mil habitantes. En su periferia, el barrio La Loma
OPINIÓN
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El traslado “Desde 2007 a 2011 llevamos adelante un continuo diálogo con los habitantes de la zona y se generó una conciencia en las comunidades que viven cerca de las cárcavas de que, más tarde o más temprano, había que hacer una migración no traumática”, explica Moreno. Esa observación coincidía con el diagnóstico que había hecho el municipio de
La asociatividad en el territorio
esde la empresa se busca que la inversión social sume valor para la comunidad y contribuya con un mejor desempeño de la organización. Este propósito requiere de la creación de estrategias y de espacios que fomenten el diálogo. Trabajo que no puede omitir la presencia de conflictos de intereses ni de identidades culturales. A veces, las conductas en juego responden más a patrones culturales arraigados en cada grupo que a la lógica del proyecto que las partes acordaron. El desafío pasa
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alberga tres comunidades que pertenecen a las etnias toba, wichi y guaraní. Precisamente por la zona baja pasan unos gasoductos de la empresa Transportadora de Gas del Norte (TGN). Se trata del Gasoducto Norte, que recorre 1.454 km entre Campo Durán (provincia de Salta) y la planta compresora San Jerónimo (provincia de Santa Fe). “Después del aluvión hicimos un proyecto de talleres para desarrollar capacidades de atención de desastres en los distintos municipios”, dice Claudio Moreno, jefe de Responsabilidad Social Empresaria de TGN, y agrega: “En La Loma se detectó que las erosiones del terreno se habían agudizado en la zona cercana a los ductos, y que había riesgos para la población cercana a raíz de la formación de cárcavas”. Se conocen con el nombre de cárcavas, los socavones que produce el agua al descender por rocas y suelos de lugares con pendiente.
por no desalentarse con estas situaciones e indagar las formas de relación capaces de producir transformaciones positivas impulsadas por la propia dinámica de los conflictos. Cada proyecto requiere de la elaboración de estrategias claras que orienten la acción y capacidades que ayuden a comprender para reconocer al otro. En estos escenarios es apreciado el rol de la comunicación y generar confianza. Con una cuota de creatividad y con una actitud abierta es factible dar con
POR CLAUDIO MORENO ✱
nuevas ideas para acercarse a las posibilidades del conjunto. Las propuestas tienen que ser abordables por actores de distintas identidades culturales y con los recursos disponibles. Con menos prejuicios se pueden pensar nuevas categorías y métodos que ayuden a comprender los problemas y encontrar los modos de resolverlos. ✱ Jefe de Responsabilidad Social Empresaria, Gerencia de Asuntos Institucionales y Regulatorios de TGN.
Embarcación. El ingeniero René Castellón, asesor en materia de obras del intendente Alfredo Miguel Llaya, opinaba entonces que lo óptimo “era trasladar la comunidad a la zona alta, porque además de que el lugar es más lindo, no corrían riesgos con otras posibles inundaciones, pero no podíamos pedirles que se trasladen a una zona sin agua”. El anhelo de dotar de agua a esa comunidad había funcionado como esperanza y promesa muchos años, porque los habitantes de la zona alta se proveían de ella mediante el acarreo de baldes. “Era un reto que no había sido resuelto en cincuenta años porque es complicado, hay que subir el agua hasta el nivel del pueblo”, explica Castellón. Ahí entró en juego la acción conjunta de la empresa y el gobierno local. TGN financió el proyecto de provisión y distribución de agua potable en la zona alta y el Municipio proveyó de viviendas y de los servicios de energía eléctrica necesarios para la creación de un nuevo asentamiento barrial. “Se trata de invertir en mejorar la calidad de vida de los vecinos de la compañía, las comunidades que están en la zona de influencia de TGN son parte de la responsabilidad empresaria”, apunta Moreno. El proyecto, que se hizo en parte con mano de obra local y en parte con técnicos de la empresa, tuvo un primer capítulo en el armado de las viviendas nuevas y desarmado de las casillas de la zona baja. Y luego llegó la obra de la red de agua propiamente dicha, que está actualmente en la etapa final de su ejecución. El proyecto supone una inversión de cerca de 500 mil pesos y consiste básicamente en un sistema de bombas y cisternas que permite trasla-
dar el líquido a través de dos kilómetros de caño de 75 milímetros desde Embarcación hasta La Loma.
Dar agua es dar vida Castellón dice que el proyecto demandó en algunos casos un esfuerzo extra de comunicación de las ventajas, porque las migraciones son percibidas a veces de manera negativa por algunas comunidades. “En un principio, la gente vivió el cambio con un poco de resistencia. Por ejemplo, no les gustaba el baño adentro, le gusta afuera y lejos de la casa”, dice, aunque apunta que “está claro que ahora hay aceptación, porque armamos cuarenta casas y nos pidieron ahora cuarenta más”. Y para más adelante, cuando los nuevos barrios estén asentados, habrá que buscar financiamiento para una obra tan costosa como necesaria: proteger las cárcavas con obras de hidráulica, a base de gaviones, esa especie de contenedores que consisten en bloques enormes de piedras estancadas con malla de alambre para proteger el terreno del socavamiento al que está expuesto. El trabajo de TGN, sin embargo, no consistió simplemente en financiar la obra, sino que se hizo una supervisión permanente. “Fueron muy exigentes con que los trabajos de los tendidos de caños no se tocaran con los gasoductos, porque son muy peligrosos”, dice Castellón. Lo que queda, de aquí en más, es terminar el trabajo –los caños están tendidos y hay que hacer ahora la certificación previa a la puesta en marcha del agua potable para la zona alta de La Loma–. Una obra tan urgente como importante. 11
KIMBERLY-CLARK
Capacitar para incluir A través del programa Aprendiendo juntos, la empresa apuesta a la inclusión laboral de jóvenes que están terminando el secundario. La iniciativa brinda capacitación técnica en química, tecnología y electrónica. TEXTO ESTEBAN VERA
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or debajo del asfalto gris de la avenida Espora 50 de Bernal, un túnel clausurado conecta una planta industrial con una escuela, con pasado de papelera y celulosa. Los pasadizos secretos albergan hechos e historias urbanas quiméricas. Pero también metáforas de cooperación. Entre ellas se encuentra un programa Responsabilidad Social Empresaria de Kimberly-Clark (KC) que apuesta a la educación. Se trata de capacitaciones para que estudiantes secundarios y jóvenes estén mejor preparados a la hora de enfrentar el mundo laboral, cuando los años de secundaria se
OPINIÓN
Por el bien común
demás del compromiso consciente de cumplir con los objetivos de nuestro negocio, tenemos siempre en cuenta las expectativas económicas, sociales y ambientales de todos nuestros grupos de interés. Desde Kimberly-Clark consideramos a la RSE como un modelo de gestión que combina el respeto por la gente y los valores éticos, la responsabilidad para con la comunidad y el cuidado del medio ambiente para la construcción del bien común. Nuestro compromiso con la responsabilidad social se ha ido profundizando y fortaleciendo año tras año. Actualmente, contamos con diferentes programas que
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vuelven un recuerdo de la adolescencia. La iniciativa se lleva adelante desde hace cuatro años en la Escuela de Educación Técnica N° 2 Paula Albarracín de Sarmiento, frente a una de las plantas de la multinacional. Y surgió tras una alianza de la Asociación Conciencia y la firma, que a través de su brazo social impulsó y financia la propuesta. Se trata de Aprendiendo Juntos, cuyo objetivo principal es “favorecer la inclusión social y laboral de los jóvenes con menos oportunidades a través de talleres técnicos, pero también tiene el fin de promover la participación activa y un compromiso con la comunidad en donde viven”, explicó María Laura Salina,
POR FERNANDO HOFMANN ✱
buscan preservar el capital natural y desarrollar el capital humano, y que hacen posible que nuestra compañía avance hacia la construcción de un futuro más sustentable para todos. Entre ellos se encuentran: Sumando Valores, que busca fomentar en referentes sociales valores a través de pequeñas acciones cotidianas. Para generar un impacto positivo en la comunidad creamos +comUnidad, un programa basado en 3 pilares: salud, educación y calidad de vida. Por otra parte, a través de Visión 2015, apuntamos a mejorar la gestión del ambiente fomentando la sustentabilidad en los productos y procesos. Para lograr el bienestar de
todos nuestros empleados desarrollamos el programa Vivir Bien bajo cuatro ejes principales: Trabajo, Esparcimiento, Salud Física y Salud Emocional. Por último, contamos con el programa a Integrity Project dirigido a nuestra cadena de valor, especialmente a los proveedores (pequeñas, medianas y grandes empresas). A través de este programa buscamos contribuir positivamente en los términos económicos, sociales y ambientales de nuestro país. ✱ Director de Asuntos Legales y Corporativos de la Región Austral y del Negocio Fem Care LAO.
coordinadora de RSE de la compañía. En el inmenso establecimiento de paredes amarillas –más conocido como El Chaparral, por sus días pretéritos de techos de chapas– se llevan adelante talleres de formación técnica y uno artístico, todos destinados a jóvenes de 16 a 24 años, aunque algunos tienen más, tal como lo revelan sus barbas y ausencia de cabellos. Durante 2011 se llevaron a cabo seis cursos, relacionados con química, electromecánica y electrónica, y participaron 196 alumnos, 26 más que en 2010. En total, son trece talleres, que van rotando de un año a otro, como el curso de montaje de dispositivos y componentes en electrónica analógica y digital y reparación de un equipo electrónico, o el curso de análisis y diseño de sistemas tecnológicos. “Son cursos que tienen una perspectiva laboral, que los capacitan para tener más oportunidades de conseguir un empleo”, comentó María Victoria Hernández, de
la Asociación Conciencia. Y agregó: “Otro de los objetivos es que los pibes no abandonen el colegio”. Aunque todavía no hay cifras de seguimiento, Noemí Lazaruz, directora de El Chaparral, destacó que “hoy muchos egresados de la escuela consiguen trabajo de manera casi inmediata, e incluso antes de terminar realizan pasantías”. Pero para no perder su fin pedagógico, el establecimiento les exige a los alumnos mantener “sus notas altas y no faltar a clases”, agregó la docente. A su turno, Salina destacó: “La mayoría de los trabajadores de la planta de Bernal estudiaron en esta escuela”. De esta manera, el programa no sólo apunta a reforzar los contenidos ofrecidos en la currícula educativa oficial, sino también a darles recursos que son clave a la hora de
dar los primeros pasos en la búsqueda de trabajo. Con 16 años, Franco T. sueña con estudiar bioquímica o medicina en la Universidad Nacional de La Plata, cuando termine la escuela media. Mientras tanto, va a paso firme, está en quinto año y le restan dos para graduarse, pero en paralelo asiste al curso de química del programa. “Me vino genial para ponerme al día, porque venía de una escuela básica”, contó. Para él, Aprendiendo Juntos es una experiencia que lo prepara para afrontar “mejor el ingreso a la universidad y al mundo del trabajo”. Pero la propuesta también tiene un eje artístico-recreativo. El año pasado Franco se acercó al taller de coro. “Fue un espacio que nos permitió relacionarnos de una manera más creativa para expresarnos, tanto que un grupo de chicos armaron una banda”, recordó el chico de guardapolvo azul oscuro. En las clases, perfeccionaron un repertorio tradicional para los actos del colegio. A lo largo de las capacitaciones, que comenzaron a principios de mayo y finalizarán en diciembre, los estudiantes concurren a clases teóricas y prácticas, a contraturno de la escuela, dictadas por los propios docentes del establecimiento. “Son profesores muy comprometidos con la escuela”, sacó pecho la directora Lazaruz. Al final del curso, que tiene 40 horas, los alumnos son evaluados. En tanto, el Ministerio de Educación bonaerense avala las capacitaciones con certificados. La propuesta de la empresa –dueña de marcas de consumo masivo de higiene y cuidado personal– se enmarca en las acciones de RSE de +comUnidad, cuyos ejes son educación, salud y calidad de vida. En el marco de la iniciativa, la firma donó equipamiento tecnológico para uno de los laboratorios del establecimiento educativo, al que asisten 1.400 chicos. Además, incluye una tutoría de orientación vocacional para los alumnos de último año de las especializaciones de Técnicos Químicos y Técnicos Electromecánicos. La firma y la asociación Conciencia tienen previsto replicar el proyecto en una escuela técnica de la provincia de San Luis y en otra de la localidad bonaerense de Pilar, ambas próximas a plantas de Kimberly-Clark. “En la compañía hay un compromiso para trabajar en la comunidad en la que está”, sostuvo la coordinadora del brazo social de la empresa. Entretanto, la actividad no cesa en El Chaparral. Mientras una joven profesora de química ofrece un recorrido por las amplias instalaciones de la antigua papelera, un grupo de alumnos comienza a llegar con entusiasmo para cursar. 13
EMPRESAS Y COMUNIDAD
Aprender a comprender Con la premisa de promover nuevas estrategias pedagógicas, la Fundación Leer y Toyota Argentina llevaron adelante tres clínicas de compresión y reflexión de textos. Los talleres, destinados a docentes de Ciencias Naturales, tuvieron lugar en la planta que la automotriz tiene en Zárate. La actividad se enmarcó en la celebración por los 15 años de la Fundación Leer en la tarea de promover la lectura en niños y jóvenes. Desde su creación, en 1997, la organización ha implementado programas en todo el país, que beneficiaron a 1.327.286 de chicos, 15.780 docentes y líderes comunitarios. Y donó más de un millón y medio de libros.
Incentivos a proyectos culturales La Fundación Banco Macro, junto con la Secretaría de Cultura de la Nación, lanzó una convocatoria para participar del Programa de Apoyo a Emprendimientos Culturales (Paec). La iniciativa tiene por objeto impulsar la generación y el crecimiento de empresas culturales locales brindando apoyos económicos, asistencia técnica y capacitación. La convocatoria está dirigida a firmas o emprendedores radicados en las seis regiones culturales del país (NOA, NEA, Centro, Cuyo, Patagonia y Buenos Aires), cuya actividad principal se oriente al desarrollo de las industrias culturales (artes escénicas, audiovisual, diseño, música, videojuegos y editorial). Hay tiempo hasta el 30 de octubre para presentar propuestas. Las bases y condiciones de la convocatoria pueden descargarse en www.cultura.gov.ar, o en www.macro.com.ar.
Formación para pymes En el marco del programa 1.000 Pymes en TransFormación, organizado por Banco Santander, la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA y universidades regionales, se graduaron los primeros 120 empresarios. La iniciativa, apoyada por el Ministerio de Industria, tiene el objetivo de colaborar con el desarrollo de más de mil pequeñas y medianas empresas mediante formación académica. La propuesta aspira a sumar, durante 2012, a mil pymes en la capacitación que tendrá lugar en nueve sedes: Córdoba, Rosario, Tucumán, Mar del Plata, Salta, Neuquén, Pilar y la Ciudad de Buenos Aires. En sus dos ediciones anteriores ya participaron 280 pymes.
Sobre héroes y reconocimientos Docentes, padres y médicos son los principales “héroes” para siete de cada diez argentinos, según un sondeo de la consultora TNS, solicitada por Coca Cola Argentina. Entre las personalidades, Juan Carr, titular de Red Solidaria, recibió el mayor reconocimiento de la opinión pública. Le siguieron 14
Agustina Cavanagh (Fundación Cimientos), Abel Albino (Conin), Silvina Gvirtz (Iipe Unesco), María Ana Angeleri (Fundación Educacional) y Pablo Vagliente (Avina). En el marco de la propuesta, la compañía premió, junto con Ashoka, a un emprendedor social seleccionado a través de las redes sociales. La campaña incluye spots de televisión musicalizados con el tema Héroes, de David Bowie.
Tecnologías inclusivas La Cámara de Empresas de Software y Servicios Informáticos de Argentina (Cessi) junto con Usuaria impulsan el desarrollo de aplicaciones para tablets destinadas a alumnos con síndrome de down. La iniciativa, apoyada por Asdra, Asociación Síndrome de Down de la República Argentina, busca integrar las tecnologías de la información en el proceso de enseñanza y aprendizaje de los chicos. Las aplicaciones, disponibles en tres meses, contarán con herramientas y contenidos que integrarán los modelos mentales con modelos conceptuales.
Alimentos sanos Por tercer año consecutivo, la Cervecería y Maltería Quilmes lleva adelante los programas Huertas comunitarias y Becas escolares, con el propósito de promover el trabajo en equipo y la producción de alimentos sanos y naturales en comunidades vulnerables. Este año, la firma financió la construcción y el mantenimiento de seis huertas y brindó capacitación a los docentes. Desde 2010, fueron creadas 17 huertas que benefician a más de 2.000 alumnos y 530 familias. La iniciativa, impulsada junto con la Fundación Huerta Niño y la Asociación Conciencia, se implementa en el marco del programa de RSE Futuro Posible. Por otra parte, 46 jóvenes en situación de riesgo de deserción escolar, becados por Quilmes, lograron graduarse.
Balance en el trabajo American Express Argentina recibió una certificación Work Life Balance, otorgada por el Instituto Europeo para el Capital Social, por intentar mejorar la calidad de vida de los empleados de la empresa. Así se convirtió en la primera compañía de servicios financieros en el país en obtener esta certificación para la que se requiere cumplir con la implementación de 19 iniciativas, 3 en cada una de las 6 categorías auditadas por el instituto: horario y organización laboral, políticas de comunicación interna, desarrollo del personal, beneficios económicos, servicios para las familias e iniciativa propia de la empresa.
Árboles contra el cambio climático Con el propósito de conservar las fuentes de agua en la Cuenca del Plata a través de la recuperación de bosques nativos, el Grupo Hsbc y la Fundación Vida Silvestre plantarán 36 mil árboles en los próximos dos años. La Cuenca del Plata es una de las más grandes del mundo. La plantación de árboles en los márgenes de los arroyos contribuirá, además, a mitigar el cambio climático. La iniciativa incluirá charlas en torno del consumo de agua y la importancia de los bosques como protectores de cuencas hídricas, destinadas a las comunidades locales.
Intercambio cultural La Fundación Telefónica llevó a cabo la tercera edición de Escuelas amigas, programa de intercambio cultural entre alumnos de América latina y España, cuyo objetivo es promover la colaboración entre los estudiantes y docentes de distintos países a través de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Por Argentina participaron 250 chicos de entre 10 y 12 años, de seis escuelas del país (tres de Mar del Plata, dos de Bariloche y otra de Virreyes) que estuvieron conectadas con establecimientos de España o Ecuador. La iniciativa se sustenta en cuatro pilares fundamentales: el respeto y el conocimiento de otras culturas; el trabajo en conjunto para descubrir realidades diferentes y afrontar retos comunes; el uso de internet y TIC como herramientas de aprendizaje, y la ayuda de voluntarios.
Becas universitarias El Grupo Techint entregó 68 becas de grado y renovó otras 193 otorgadas en los últimos cinco años, destinadas a estudiantes de Ingeniería y Geociencias de universidades públicas nacionales. La organización, además, adjudicó 13 becas de posgrado a graduados argentinos para doctorarse en la Massachusetts Institute of Technology (MIT) o la University of Cambridge. Se trata de una iniciativa enmarcada en el Programa Educativo Roberto Rocca, que apunta a formar estudiantes en Ingeniería y en Ciencias aplicadas. La ayuda económica es de 1.150 pesos por mes durante cinco años, con el requisito de mantener un buen desempeño académico.
Mejoras en espacios verdes LAN Argentina junto con la Secretaría de Turismo, el Ministerio de Educación de la provincia de San Juan y la Intendencia de la ciudad de San Juan lleva adelante el programa Cuido mi ambiente, cuyo fin es concientizar a la comunidad y lograr un impacto en la formación turística y ambiental de estudiantes secundarios. Los alumnos ayudaron a parquizar y a restaurar espacios verdes e instalaron
cestos de residuos y bancos. La empresa aporta los materiales mientras que los chicos hacen las mejoras de forma voluntaria. A su vez, la Municipalidad de la ciudad de San Juan realizará el aporte de mano de obra para tareas complementarias.
Kit inclusivo Telecom lazó el programa Sentidos conectados con Sueñaletras destinado a favorecer el aprendizaje de niños de entre 4 y 12 años con disminución auditiva. Se trata de un kit didáctico, destinado a docentes y alumnos, desarrollado por el Centro de Tecnologías de Inclusión de la Universidad Católica de Chile. El módulo, que incluyó capacitaciones para los profesores, favorece el proceso de enseñanza de lectoescritura y fue distribuido en 40 escuelas especiales de Córdoba, Corrientes y Santa Fe. La iniciativa se enmarca en las acciones de diversidad impulsadas por la compañía, certificada por la Daia que la distinguió como empresa pro diversidad.
Salud y nutrición El Grupo Bimbo anunció la apertura de la convocatoria 2012 para participar por el Premio Bimbo Panamericano en Nutrición, Ciencia y Tecnología, que otorga un premio de 56 mil dólares. El objetivo es fomentar y apoyar la innovación e investigación en América latina. Creado en 2003 para mejorar la salud y nutrición de sus consumidores, se basa en cinco iniciativas alineadas a la Estrategia sobre Régimen Alimentario, Actividad Física y Salud, de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los detalles de la convocatoria pueden ser consultados a través de la página www.premiobimbo.com
Un modelo para armar Deloitte y el Pacto Mundial (PM) de Argentina llevaron a cabo una capacitación sobre el Modelo de Gestión del PM. El principal propósito es apoyar iniciativas de sostenibilidad en las estrategias corporativas a través de la aplicación de los 10 principios del PM, entre otros: apoyar y respetar la protección de los derechos humanos, eliminar el trabajo forzoso y obligatorio, abolir cualquier forma de trabajo infantil y alentar el desarrollo y la difusión de tecnologías respetuosas del medio ambiente. Del encuentro participaron más de 50 empresarios y referentes del sector público.
Créditos para el agro Banco Credicoop presentó en Agroactiva 2012 sus servicios y productos para el sector agropecuario: Financiación para expositores (comercio); Financiación de las ventas de expositores (Tarjeta Agrocabal); Leasing Credicoop, Créditos para adquisición de bienes de capital, créditos para el agro (infraestructura y adquisición de bienes a tasa fija) y Oferta Promocional Agroactiva 2012 (Cuenta Corriente Bonificada). 15
EL ESPECIALISTA
POR PEDRO TARAK *
El “para qué” de las empresas en la era de la sustentabilidad
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a historia de las organizaciones y de las empresas como tales puede relacionarse con el para qué existimos… ¿para crear algo para mí exclusivamente (mi patrimonio, mi ego, mi poder, mis accionistas, etc.) o para el Mundo y la Tierra? Hasta no hace mucho tiempo, de hecho durante el siglo XX, observábamos la filantropía corporativa como modo de caridad y ganarse “pasaportes de bondad”. Después, gradualmente vimos un tránsito casi simultáneo hacia la Responsabilidad Social Empresaria (RSE) y la Eco eficiencia. Y hoy nos vamos acercando más a la sustentabilidad integral. En particular, es en la Cumbre de Río 92 que comienza a explicitarse el papel proactivo de las empresas en la sustentabilidad, sea por interés propio o como necesidad y respuesta social. Y a partir de ese momento se observa la evolución de dos para qué. Por un lado, uno centrado en la eficiencia empresarial y la optimización de los recursos. De hecho se adopta la triple línea de resultados –ambiental, social y económica– como modo para evaluar el éxito de las empresas. Y, por el otro, centrado en la responsabilidad ante la sociedad aunque vinculado con las dimensiones de la sustentabilidad. Vemos la evolución de la RSE. Hoy en día, cuando uno analiza en dónde vemos el mayor número de innovaciones empresariales (más allá de sectores instrumentales como las TIC), se observa que responden a las necesidades comunes globales coincidentes con el surgimiento de las nuevas economías: la inclusión social, el bajo carbono, la reducción, reciclaje y la recuperación de residuos, los servicios ecosistémicos y de la biodiversidad y la regeneración de sistemas degradados. El para qué empresarial coincide en gran parte con el para qué social y ambiental. Coincidentemente, nacen nuevos modos de hacer negocios y empresas. Así va surgiendo la idea de valor compartido propuesto por Mark Kramer y Michel Porter, que combinan la creación de riqueza económica con valor ambiental y social introduciendo la competitividad en la ecuación. Pero, además, surgen nuevas estructuras empresariales que introducen en su propio ADN la razón de ser principal de la empresa las soluciones sociales y ambientales que necesita la sociedad. Se trata de las Empresas B, un nuevo tipo de organización empresarial distinta a las S.A. o las S.R.L, que se preguntan cómo pueden aprovechar la fuerza económica del mercado para aportar soluciones concretas a problemas comunes del Mundo o de la Tierra. Estas empresas incorporan soluciones concretas a la misión estatutaria y se obligan legalmente a sí mismas a orientar la producción de bienes y servicios en ese sentido. Al mismo tiempo, amplían la responsabilidad fiduciaria de los direc-
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tores, limitada hasta ahora a los accionistas, a los demás públicos de interés – la comunidad, los colaboradores, la cadena de valor, el medio ambiente–. Así, los intereses y resultados financieros deben armonizarse con los ambientales, sociales y de gobierno interno de la empresa. Un ejemplo concreto es el de Guayaki, que nace para regenerar 60.000 hectáreas degradadas de Selva Misionera en Argentina, Brasil y Paraguay y la inclusión social de 1.000 familias campesinas e indígenas para el 2020. Lo hacen comprando y comercializando yerba mate orgánica y de precio justo producida bajo sombra y cosechada manualmente. Esa yerba se exporta a Estados Unidos a granel y se convierte en distintos tipos de productos: saquitos de té, jugos naturales, energizantes naturales y yerba mate como hierba. Cuando uno compra los productos de Guayaki, al mismo tiempo está “ampliando sombra”, regenerando ecosistemas degradados e incluyendo familias hasta ahora excluidas de la sociedad. Por eso, las llamamos Empresas Regeneradoras de Vida. Este concepto es un pasito más de la sustentabilidad…. no sólo se trata de cómo reducir nuestro impacto ambiental. Ahora, se asume el desafío de innovar desde la empresa la regeneración de sistemas que sostienen la vida para el Mundo. De hecho, hay distintas investigaciones que nos indican que en 1985 el Mundo comenzó a consumir más allá de la capacidad que tenía la Tierra para regenerarse por sí sola. Hoy se calcula que estamos consumiendo un 50 por ciento más de esa capacidad. Guayaki combina su para qué de la regeneración de vida con otra manera de organizarse como empresa. Es una de las primeras 25 empresas certificadas B en 2007. Hoy hay más de 500 empresas de este tipo en el mundo. En América del Sur se creó Sistema B desde Santiago de Chile para promoverlas. Al día de la fecha hay unas 15, incluyendo dos argentinas (Greca y Emprendia). Las Empresas B redefinen la centralidad del lucro y aspiran a complementar los esfuerzos de los gobiernos, las ONG, la filantropía y las acciones de RSE con su accionar en el mercado y en la sociedad. Con esto promovemos un nuevo sector empresarial creado y desarrollado para resolver problemas comunes. Un sector que se pregunta qué significa una empresa y una sociedad exitosa. En gran parte, la respuesta se vincula al modo de organizarse, de tratarse y cuidarse entre unos y otros y el sentido del para qué de las empresas... casi, casi como regresar a las características de las ferias donde el consumidor puede empatizar con el productor en un sentido común a ambos. ✱ Cofundador de Emprendia (Argentina) y de Sistema B (Chile).