I Género

Habilidades para la vida

Más de un millar de niñas y jóvenes de Capital Federal fueron beneficiarias de una iniciativa de ONU Mujeres, financiada por el Comité Olímpico Internacional (COI), que les permitió adquirir destrezas para alcanzar objetivos personales y comunitarios.

TEXTO CRISTINA MAHNE

Más rápido, más alto, más fuerte. El lema olímpico, que desde los Juegos de París –disputados en 1900– empuja a cada atleta para que ofrezca la mejor versión de sí mismo, 122 años después y en el otro extremo del planeta se potenció con nuevos triunfos: más de 1.200 adolescentes que viven en barrios populares de Caba son más independientes, más decididas y más seguras, a través del deporte y en el marco del programa Una victoria lleva a la otra (Uvlo).

Favorecer la autoestima, cuidar la salud, prevenir la violencia de género y ofrecer orientación laboral fueron algunos de los resultados directos de esta iniciativa de ONU Mujeres, que contó con el financiamiento del Comité Olímpico Internacional (COI) y que se desarrolló durante el año pasado.

Además, las niñas y jóvenes de entre 12 y 18 años involucradas en el programa tuvieron la oportunidad de practicar fútbol, básquet, hockey, boxeo y handball en espacios física y emocionalmente seguros.

“Con el deporte aprendí a sonreír”, celebró una de las participantes. “Yo, a trabajar en equipo”, amplió otra. A su lado, sus compañeras acumulaban más experiencias. “Me sirvió para expresar mis sentimientos” y “resultó bueno para que me escuchen” fueron más logros cosechados en este camino de acceso a sus derechos. La propuesta se inspiró en Brasil, donde se aplicó como legado de los Juegos Olímpicos de Río 2016, en la certeza de que las chicas de ambos países comparten una realidad: en la transición a la adolescencia, ellas reciben menos incentivos que sus compañeros para desarrollar habilidades deportivas y enfrentan muchas veces en soledad la responsabilidad de proteger su salud sexual y reproductiva.

Poder femenino

“El propósito del programa no fue identificar talentos deportivos, sino empoderar a niñas y jóvenes a través del deporte”, aclaró Lisa Solmirano, coordinadora de Uvlo en Argentina. El foco estuvo puesto en las adolescentes, ya que “es una etapa de la vida donde dejan de practicar deportes por dificultades de acceso que afectan su inclusión”, dice.

Para que no se sintieran presionadas, dispusieron canchas sin espectadores, que no se tuvieran que compartir con varones, habilitadas en horarios que no implicaran riesgos y con vestuarios femeninos, iluminación adecuada y acceso a medios de transporte.

“Los espacios públicos donde se practican deportes es-

Las cifras de las niñas y la práctica deportiva

1.236 participantes tuvo Uvlo en Argentina. 128entrenadoras y facilitadoras capacitadas en el programa. 46organizaciones deportivas comunitarias implementaron actividades. 71,7% de los adolescentes que no realizan ninguna actividad física extraescolar vive en villas o asentamientos en el país (Observatorio Social del Deporte, 2021). 40 a 50% más de tiempo en las tareas de cuidado familiar es el que dedican las niñas en relación con los niños.A más quehaceres, menos horas para practicar deportes (Unicef, 2016).

Gentileza UVLO

tán generalmente en disputa y las mujeres quedan expuestas a situaciones de acoso y violencia, dentro y fuera del campo de juego”, dijo Solmirano. También se trabajó para garantizar la “emocionalidad segura”, mediante la creación de vínculos de confianza y sentido de pertenencia, que les permitieron expresarse sin ser cuestionadas o ridiculizadas.

El trabajo partió de la premisa de que cualquier deporte puede ser practicado por mujeres y que todas, sin importar su habilidad o condición física, tienen derecho a disfrutar de los beneficios de las prácticas. También hubo talleres de radio, tutoriales para generar contenidos audiovisuales y charlas de orientación laboral.

Estereotipos en off side

La iniciativa contó con el apoyo de WomenWin, la Fundación para el Estudio e Investigación de la Mujer (Feim), la Fundación Sostenibilidad, Educación, Solidaridad (SES) y el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat del Gobierno porteño.

Daniela Devoto, Coordinadora de la implementación de Uvlo por parte de la Fundación SES, destacó que las sedes fueron no sólo clubes, sino también comedores y centros culturales. “En algunos casos se establecieron horarios para que los grupos que usan los espacios pudieran alternarse, y en otros se pusieron en práctica rutas y procedi-

mientos para llegar y retirarse de forma segura”, detalló. Las participantes reflexionaron sobre la división de las tareas domésticas que sobrecarga a las niñas y adolescentes, los juegos que se les proponen a unas y otros, la ropa que permite más o menos movilidad. Son costumbres que impactan en qué habilidades vamos desarrollando a medida que crecemos: en la niñez, mientras los varones corren detrás de una pelota con “El propósito del programa permiso para ensuciarse, las mujeres suelen ser inducidas a elegir actividades másno fue identificartalentos tranquilas. deportivos, sino empoderar “Y, si bien esto está en un proceso de proa niñas y jóvenes a través fundo cambio, el fútbol profesional reledel deporte”, aclaró Lisa ga aún a las mujeres como atletas. Hoy esSolmirano, coordinadora cuchaba a un periodista deportivo contar de Uvlo en Argentina. que el equipo de fútbol femenino de River, aún, nunca jugó en el Monumental. Hay mucho por transformar”, sostuvo. Devoto anticipó que si hubiera una reedición del programa en Argentina, las participantes de la primera fase podrían sumarse como referentes y hasta educadoras. “Nos encantaría –confió– que esas jóvenes ocupen lugares protagónicos”. Imagina que sean cada vez más, las que salgan a la cancha y sean titulares de sus vidas.

CÓMO CONECTARSE

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