Buenos vecinos by Terranova Consultores

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Zona mina y calidad de vida LA CLAVE:¿CÓMO PROVEER A LOS VECINOS RECURSOS, PARA QUE MEJOREN SU CALIDAD DE VIDA?

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Lineamientos de Cerro Matoso S.A que se materializan en Buenos vecinos 1. Contribuir al crecimiento de la economía local, a la reducción de la pobreza y al mejoramiento de la equidad social. 2. Promover una comunidad responsable que lidere su propio desarrollo. 3. Desarrollar planes enfocados a mejorar las competencias y la conciencia ambiental de la comunidad. 4. Contribuir al fortalecimiento de la educación y la salud en las comunidades del área de influencia.

Principios de responsabilidad social empresarial ◗ Transparencia en todas las actuaciones. ◗ Consulta con la comunidad, participación y rigor en los análisis

son la clave para asegurar proyectos apropiados y sostenibles. ◗ Concordancia entre el discurso y la acción. ◗ Comunicación abierta, veraz, permanente. ◗ Definir responsables de los programas. ◗ Neutralidad en las relaciones públicas. ◗ Generar confianza entre las partes.

Zona mina y calidad de vida

Contenido El relato que aquí aparece es una historia real, no es fruto de un solo actor, por el contrario, es el resultado de un proceso: ¡Una historia colectiva! Gracias a todos y cada uno de sus protagonistas. Montelíbano, Córdoba, Colombia 2008

◗ Viera Arriba: el lugar del compromiso y la dedicación 21

Historia

◗

Llegó la tecnología y todo cambió

◗ Viera Abajo: la vereda de la esperanza

◗

Antecedentes de la relación

◗ Puerto Colombia: los nuevos residentes

Modelo Buenos vecinos

◗ Boca de Uré: la vereda del río

◗

Las relaciones con los buenos vecinos

◗ Primera relación: acción-reacción

Dos municipios una misma zona: Veredas del municipio de Puerto Libertador

◗ Segunda relación: adaptación

◗ Centro América: el sentido de pertenencia

◗ Tercera relación: negociación

◗ Torno Rojo: mucho por hacer

◗ Cuarta relación: colaboración

◗ La Odisea: la comunidad espiritual

◗ Buenos Aires Arriba: cada uno en su parcela

Diferentes veredas, diferentes relaciones

◗

◗ Buenos Aires Abajo: la cosecha de

Dos municipios una misma zona: veredas del municipio de Montelíbano

◗ Pueblo Flecha: la comunidad de la caña flecha

la participación comunitaria

Aprendizajes

◗ Puente Uré: la escuela bonita

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Carta de presentación P

ara celebrar nuestros 25 años de producción, en Cerro Matoso

decidimos hacer una colección de estudios, narrando historias de manera alejada de los cánones comunes cuantitativos, acercándonos más bien a lo cualitativo, sin dejar de lado la rigurosidad del proceso. Historias que hablan de programas de apoyo a una región y a sus habitantes, como es el caso de "Buenos vecinos" que tiene un especial interés, en la Zona mina de Montelíbano. Cerro Matoso creó este programa el cual lidera la Dirección de Relaciones Públicas Regionales cuyo soporte técnico y social está a cargo de la Fundación San Isidro. Esta es la historia de cómo las grandes necesidades de un grupo humano logran aliviarse y en alguna medida resolverse, cuando a pedido suyo, se comprometen otras instancias con acompañamiento, seguimiento y apoyos económico, profesional y logístico, al mismo tiempo que se da el mejor hallazgo: las comunidades vecinas, el sentimiento de sus pobladores, sus necesidades, su forma de vivir, celebrar y participar.

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En el programa "Buenos vecinos", las comunidades más cercanas a la planta y Cerro Matoso, en un proceso de reacción, adaptación, negociación y colaboración, logran articular: inversión en infraestructura y participación colectiva. El enfoque de "…Colaborarle a las personas para que tengan una mejor calidad de vida el cual involucra muchos aspectos de su vida comunitaria…," que entonces fue el motor de este proyecto, hoy avizora un promisorio desarrollo sostenible para la zona. Atentamente,

ALAN PANGBOURNE

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Introducción E

ste documento es el quinto de diez estudios de caso que tienen

como misión relatar la historia, proceso y desarrollo de algunos programas puestos en marcha por Cerro Matoso con la colaboración de la Fundación San Isidro de Montelíbano. Han sido sistematizados por la Alianza Terranova - Bosquejo, con la participación activa de miembros de la comunidad y funcionarios de las instituciones anteriormente mencionadas, unidos para narrar de manera legible y sentida, en este caso, el Programa "Buenos vecinos". El estilo narrativo de esta historia tiene como finalidad crear un puente más directo entre el lector y sus protagonistas. Es ponerle rostro humano a la experiencia de construir en la región de Montelíbano, Puerto Libertador y Uré "Desarrollo y futuro". Esta iniciativa se logró mediante un proceso de talleres con las comunidades beneficiarias, mapeo documental y entrevistas en profundidad con las directivas responsables del programa de Cerro Matoso y está narrado de la siguiente manera. La primera parte cuenta la historia y los antecedentes del Programa, posteriormente emerge el modelo con las cuatro clases de relaciones que lo conforman, se hace una descripción de cada una de las veredas con su respectivo impacto en cifras, al igual que los grandes aprendizajes que han surgido, producto de los logros que esta dinámica ha generado.

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Usted encontrar谩 en este programa la manera de mejorar la calidad de vida de los vecinos, esto se logra cuando se articulan iniciativas comunitarias con disposici贸n empresarial, hecho que genera a su vez una rica participaci贸n colectiva, inversi贸n e infraestructura, en consecuencia dos bienes humanos sin los cuales la vida no es posible: "Desarrollo y futuro".

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Historia D

esde el 2003, Cerro Matoso creó el programa Buenos Vecinos, el cual lidera la Direc-

ción de Relaciones Públicas Regionales con el fin de atender las necesidades de las comunidades más cercanas a la planta, contribuyendo de esta manera con el desarrollo sostenible de la región. El soporte técnico y social de este programa está a cargo de la Fundación San Isidro en donde gracias a la iniciativa de las comunidades y a la disposición de la empresa es que se concretan la participación colectiva y la inversión en infraestructura. Se avizora entonces un claro y promisorio desarrollo sostenible para la zona.

LLEGÓ LA TECNOLOGÍA Y TODO CAMBIÓ Hace 30 años la montaña nunca había sido nada más que montaña. En esta tierra los campesinos eran jornaleros, muchos desterrados de la misma violencia, con los años se han asentado en pequeñas veredas. Por ese entonces buscaban los sembrados naturales del pancoger, recogían la caña flecha que la montaña y sus laderas les daban en cada estación, llegaban de otras partes esperando encontrar allí un lugar acogedor. El sol determinaba los jornales y la lluvia las temporadas. Un día llegaron por la carretera los ingenieros. Venían de una tierra distante a buscar lo que la montaña guardaba en sus entrañas; y la montaña dejó de ser montaña para convertirse en mina, y las veredas dejaron de ser colindantes para ser todas Zona Mina. Los hombres, mujeres, niños y ancianos, sintieron recelo y mucha expectativa; sus ancestros les habían dejado los sembrados, pero no les habían dicho que un nuevo dueño algún día podría venir y escarbar lo que parecía una simple montaña. Algunos de los jornaleros sintieron que por fin podría reclamar lo que el país y el gobierno de turno no les daba, otros

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arengaban la destrucción de su lugar innato; y una gran mayoría temían por la indiferencia con que podrían ser tratados por los ingenieros y su nueva tecnología. La montaña, entonces, se convirtió en Cerro Matoso, un inmenso centro tecnológico, un moderno complejo industrial que acompaña desde lo alto los jornales de los campesinos y las labores de sus mujeres y niños. Todavía no sabrían cómo sería la larga relación que deberían establecer entre pobladores y nuevos dueños de la tierra, aunque desde entonces ya se presentía que su vecindad implicaría mucho trabajo mutuo. Algunos vecinos se preguntaban qué tanto podría corresponderles lo que los ingenieros tomaban de la montaña, otros se preocupaban ante la idea de que sus sembrados naturales se afectaran y no pudieran ir más a cosechar. Y otros tantos comenzaron a llegar, a conocer la mina y a buscar de pronto nuevos empleos…

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A medida que la mina funcionaba, los jornaleros comenzaron a manifestarle a su gran vecina los problemas puntuales y ocasionales que se iban encontrando en cada una de sus comunidades. Es de anotar la escasa presencia estatal en la región y por esta razón algunos de los vecinos pensaron que Cerro Matoso podría suplir dicha ausencia. Desde el 2003 comenzó a consolidarse en forma el programa Buenos Vecinos. En ese momento, algunas personas de Cerro Matoso pudieron vislumbrar con mayor claridad los sentimientos de los pobladores, sus necesidades, su forma de vivir y de celebrar. Entonces los ingenieros decidieron organizar un programa que dependía de la misma presidencia de la compañía para responder a las urgencias y necesidades de sus vecinos más cercanos. Allí aparecieron los rostros amables y comprometidos de ingenieros y personas de la comunidad con ganas de colaborar, de llevar a cabo un trabajo colectivo que beneficiara a todos los Buenos Vecinos, aunque no faltaban también aquellos que, por su parte, sólo deseaban obtener algún provecho sin aportar nada a cambio. Lo que había comenzado como unas donaciones ocasionales a los vecinos ahora se convirtió en un programa institucional de Cerro Matoso, a cargo de la Dirección Regional de Relaciones Públicas de Cerro Matoso, para apoyar las escuelas de la zona, a reconstruir las casas de las veredas, proveer agua y alcantarillado, arreglar carreteras, o más puntualmente resembrar la caña flecha. Todos - tanto vecinos como ingenieros- tuvieron un nuevo reto que asumir, pues eran muchas las cosas que se necesitaban en el campo y mucho el trabajo que tenía que hacer Cerro Matoso por sus vecinos. Así nació el programa institucional "Buenos vecinos".

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Fue entonces que los vecinos, jornaleros y recolectores, fueron convocados por los ingenieros de Cerro Matoso, y comenzaron a recibir un proyecto de desarrollo social, económico, agrícola y cultural. Como dicen los ingenieros: "el enfoque de Buenos Vecinos es colaborarle a las personas para que tengan una mejor calidad de vida y eso involucra muchos aspectos de su vida comunitaria". Y así, no sólo se sigue sembrando, por ejemplo, la caña flecha, la piel del sombrero más colombiano de los sombreros, sino que los campesinos, con sus mujeres, sus niños y sus abuelos, conocen y realizan gran cantidad de actividades de las que pueden vivir, y a la vez, traen a las veredas mejoramientos públicos y nuevas expectativas. Cerro Matoso ya no es sólo una montaña, una mina, es el lugar donde nace y crece el programa Buenos Vecinos, con los hombres y mujeres que se levantan al sol y pronostican la lluvia.

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ANTECEDENTES DE LA RELACIÓN Como empresa Cerro Matoso ha considerado desde sus inicios tener buenas relaciones con todo su público de interés: sus trabajadores, sus aliados, sus contratistas, y los vecinos de la zona. Así que tener buenas relaciones ha sido una política permanente y con frutos durante sus más de 30 años de existencia. En este caso y refiriéndonos a las comunidades circunvecinas, Cerro Matoso le ha apostado a tener buenas relaciones, a darle valor a cada comunidad y a montar un programa que sienta tan cercana a las comunidades como a la misma explotación minera. Expliquemos brevemente cada uno:

Buenas relaciones Lo básico que se ha realizado con las comunidades es escucharlas en sus necesidades, para este fin se ha manejado un protocolo de comunicación muy sencillo pero eficaz. Primero las comunidades se comunican con una sola persona de Cerro Matoso la cual oye y evalúa la prioridad con la que se abordará la problemática, esta información se corrobora al interior del equipo del programa Buenos Vecinos. Luego rápidamente, la organización propone una solución a la problemática que aparece. Una constante en este ir y venir es el buen trato y la manera como se atiende a las comunidades y sus delegados es un sello que aporta Cerro Matoso en dignidad, cercanía e interrelación.

Valorar cada comunidad El segundo aspecto que aparece permanentemente es el del trabajo uno a uno con las comunidades. A pesar de ser alrededor de 11 veredas que colindan con la mina, a cada una se le da la importancia debida y se le tiene el recorrido histórico de intervención, con un orden y detalle preciso. Lo cual asegura no solo una valoración individual sino también

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un derrotero específico para cada una de las veredas. A cada vereda se le tiene su respectivo: qué se ha hecho, cuándo, cómo y con cuánto dinero se dispuso. En este sentido, es preciso sacar el valor de cada comunidad y proyectarlo hacia su sostenibilidad futura.

Programa asociado a Producción El tercer aspecto es que este programa es paralelo a las funciones que realiza la Fundación San Isidro, organismo encargado de trasladar los aportes sociales de Cerro Matoso a la región. Esta autonomía le permite al programa estar cercano al proceso productivo de la Mina, y ser muy proactivo y rápido en abordar las problemáticas que irrumpen en cualquier momento con las comunidades. En este sentido el programa Buenos Vecinos tiene un doble propósito en su liderazgo e impacto. Por un lado escuchar a la comunidad y por otro darle margen operativo al negocio como tal, pues hay procesos propios de la minería que exigen prontitud en su abordaje y relaciones cercanas y estrechas con las comunidades vecinas para lograrlo.

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Modelo de Buenos vecinos

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esde el 2003, Cerro Matoso he decidido conformar un programa que reúna y articule

todas las relaciones de la mina con sus vecinos, sobre todo al entender las necesidades específicas de las veredas colindantes; ya que ser vecino de una empresa minera es realmente algo complejo, lleno de experiencias y situaciones que mejor haríamos en revisar con una perspectiva más general, intencionada y estratégica, pues lo que puede ser un pequeño inconveniente se puede volver una gran dificultad. Podemos afirmar que nada es trivial en la relación con las comunidades circundantes. En muchas ocasiones por la "aparición intempestiva" de problemáticas con la comunidad y para poder solucionarlas oportunamente, nos encontramos frente a la necesidad de hallar una forma de acercarse a las causas, entenderlas, recogerlas y mediarlas para prevenir los efectos que se puedan derivar, tratando de que nadie sienta afectados sus intereses. Claro, con cada persona, en cada comunidad, las dificultades se presentan de manera distinta, los problemas, entonces, hay que sortearlos de diferentes formas. Cuando nos relacionamos con otras personas siempre es posible que nos encontremos en situaciones conflictivas, sobre todo cuando percibimos que los intereses, necesidades o valores de cada uno están en peligro o entran en contradicción con los de los demás. El modo como resolvemos esa confrontación depende de los mecanismos que usemos; si es por la fuerza, seguramente terminaremos en actos violentos, pero si recurrimos al diálogo y la negociación seguramente podremos llegar a acuerdos. Por eso, cuando aparece un problema es necesario reconocer a cada uno de los actores, cuáles son los intereses, y entender cómo la situación puede cambiar mientras posibilitemos las condiciones para solucionarla. Eso es muy importante. Siempre hemos sabido que los problemas hacen parte de la vida y necesitamos entenderlos para poderlos resolver de forma positiva; si es así, los problemas nos permiten reinventar el mundo y ser creativos

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para adaptarnos a los cambios, para tomar decisiones, para reconocer la diferencia y poder mirarnos a nosotros mismos. El problema, pensado de manera positiva, puede ser la puerta para la transformación, incluso para el mejoramiento de la vida de las personas y para la convivencia misma. Volvamos entonces a Cerro Matoso. La mina genera un impacto ambiental importante porque siempre está trabajando la tierra y extrayendo el ferroníquel; por eso, allí han surgido, surgen y surgirán situaciones que pueden llegar a ser problemáticas, por lo que hay que colaborar, negociar y responder oportunamente a las comunidades vecinas. Desde hace 30 años de exploración y 25 de producción, una larga relación se ha gestado con los vecinos de la mina y toda una generación se ha venido levantando al lado de la explotación minera. Pero al principio, cuando llegaron los primeros ingenieros a lo que sería Cerro Matoso, cada vereda se ocupaba de sus propias necesidades y la mina no era más que la montaña con la que colindaban. Con el ingreso del complejo minero metalúrgico a la región y sus distintas acciones tecnológicas surgieron las diferentes formas de relacionarse que existen hoy entre las personas de Cerro Matoso, las veredas y las mismas familias que las habitan.

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LAS RELACIONES CON LOS BUENOS VECINOS Ahora, mientras transcurre el tiempo en la montaña y siguen surgiendo proyectos y sueños, tal vez es el momento apropiado para describir la forma en que las situaciones problemáticas se pueden sortear entre los vecinos. Veamos cuatro relaciones posibles:

Primera relación: acción-reacción Se trata, inicialmente, de una relación entre Cerro Matoso y los pobladores, en la que, por un lado, está uno de los dos que realiza una acción y por otra el que reacciona, lo que se podría entender como acción tecnológica-reacción comunitaria o acción comunitaria-reacción tecnológica. En la mitad de las dos acciones se encuentra el problema. Cuando los pobladores manifiestan sus necesidades particulares, o sus protestas por una acción de la mina, se van generando soluciones concretas propuestas por Cerro Matoso o por los mismos jornaleros. Pero, por tratarse de situaciones esporádicas siempre vuelven a surgir nuevos inconvenientes y peticiones comunitarias de lado y lado, por lo que en este primer escenario el problema no se ve resuelto más que en lo inmediato. Ocurre también que el problema colectivo puede servir de pretexto para conseguir objetivos personales.

Segunda relación: adaptación Este segundo escenario sucede cuando Cerro Matoso comienza a adaptar su ingerencia en la comunidad (aún de manera concreta y esporádica) a las necesidades de las comunidades, evitando que el problema, tal como había aparecido inicialmente, se vuelva a presentar. Aunque la intención es actuar más estratégicamente y de manera planeada en la solución de las necesidades de las comunidades (cuando se interviene en aspectos educativos, de salud y de vivienda de la región), se sigue

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percibiendo una relación en donde las comunidades se adaptan a lo que Cerro Matoso les ofrezca y esta situación no lleva a solucionar satisfactoriamente los problemas, tan solo los mitiga parcialmente.

Tercera relación: negociación Ya transcurridos más de veinte años desde la llegada del complejo minero metalúrgico a la montaña, la proyección del Programa "Buenos Vecinos", busca hoy alcanzar el común acuerdo entre comunidad y empresa para gestionar soluciones a los problemas que se generan en la Zona Mina, de modo que sean satisfechas las necesidades comunitarias y también Cerro Matoso se vea beneficiado por su gestión. Por esta razón, en este tercer escenario se plantea que Buenos Vecinos necesita de unas condiciones de organización social de las comunidades vecinas y de corresponsabilidad para poder realizar acciones que resuelvan los diferentes problemas. Por supuesto, no se quiere alimentar una actitud paternalista, asistencial, en la que las comunidades dependan de la gestión de Cerro Matoso para resolver sus necesidades y dificultades, lo que significaría un daño para el desarrollo sostenible de la comunidad. Tampoco se busca alimentar la idea de que la mina socorre cada una de las urgencias de los vecinos, suplantando el mismo estado.

Cuarta relación: colaboración Este último escenario se vuelve una meta en las relaciones con los vecinos. Esto implica que luego de explorar diferentes alternativas para prevenir y solucionar problemas probables, se pueda determinar cuál será el modo de continuar creciendo como comunidad una vez que la gente de Cerro Matoso haya culminado satisfactoriamente la explotación de la mina.

Zona mina y calidad de vida

El Programa "Buenos Vecinos" quedaría incompleto si no fuera consciente de la necesidad de que los proyectos en la Zona Mina sean sostenibles por y para la comunidad, y más profundos en cuanto al impacto social. Para poder llevar a cabo este objetivo es necesario que tanto la mina como los pobladores fortalezcan su trabajo productivo, social y ambiental, hasta lograr la independencia física frente a Cerro Matoso, en un ambiente de colaboración para hallar soluciones a los problemas de modo que todos resulten beneficiados. Este escenario requerirá más tiempo que los otros, y es el modo más adecuado de resolver los problemas cuando la relación entre vecinos es muy importante. 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789 1234567890123456789012345678901212345678901234567890123456789012123456789012345678901234567890121234567890123456789

Fórmula de Buenos Vecinos:

Iniciativa comunitaria +

Disposición empresarial de Cerro Matoso

Participación colectiva + Inversión e infraestructura Desarrollo sostenible de las veredas vecinas

Buenos vecinos

Diferentes veredas, diferentes relaciones Cuando la montaña dejó de ser montaña para convertirse en mina, y las veredas dejaron de ser colindantes para ser todas Zona Mina, cada comunidad tuvo su propia pequeña historia, con sorpresas y alegrías, nuevos vecinos y nuevos problemas. Cada vereda entonces fue encontrando su vocación y su manera propia de relacionarse con Cerro Matoso. El modelo de trabajo se ha basado en la Planeación Zonal, el cual ha buscado priorizar la inversión en el sector educativo, específicamente en la construcción de las escuelas.

Región del Alto San Jorge con sus veredas Torno Rojo

Puente Uré

La Apartada Montelíbano Puerto Libertador

Bocas de Uré Puerto Colombia Pueblo Flecha

Centro América

Buenos Aires Arriba

La Odisea Buenos Aires Abajo

Zona mina y calidad de vida

DOS MUNICIPIOS, UNA MISMA ZONA: VEREDAS DEL MUNICIPIO DE MONTELÍBANO Pueblo Flecha: La comunidad de la caña flecha Pueblo Flecha tiene su propia historia en la Zona Mina. Gracias a un comodato con Cerro Matoso, los campesinos recolectaban en tierras de la Mina sembrados naturales de la caña flecha, materia prima con que se realiza el reconocido Sombrero Vueltiao y otras artesanías. Pero cuando la tierra donde se daba la caña necesitó ser usada por Cerro Matoso, se dejó a los recolectores sin qué recoger y a la comunidad de Pueblo Flecha con un largo trabajo por delante que realizar, pues debían conseguir otra tierra donde cosechar o incluso aprender a sembrar y cultivar, labor que nunca antes habían realizado. Fue entonces que la mina se comprometió con los campesinos a prestarles en comodato una nueva tierra para cultivar la caña flecha y que los pobladores pudieran así reestablecer su actividad. Entonces, los campesinos, que antes eran sólo recolectores, se convirtieron en agricultores y con la inversión de Cerro Matoso y el trabajo de sus pobladores hoy la vereda de Pueblo Flecha se ha beneficiado del cultivo y ha continuado su actividad económica, pues siguen siendo uno de los principales proveedores nacionales de la famosa caña flecha. Hoy no sólo recogen la caña flecha, la cultivan y tienen un saber mayor sobre cómo hacerlo. Desde entonces, gracias a la organización y compromiso que los pobladores y Cerro Matoso asumió, han venido mejorando las condiciones de la vereda, construyendo vías de acceso, aulas escolares, dos pozos de agua, el acueducto comunitario y la vivienda de los campesinos. Tal vez en el futuro, con un mayor apoyo y acompañamiento estatal para el desarrollo del pueblo y la región, Pueblo Flecha pueda volcar su desarrollo en torno a la caña flecha, su principal actividad económica, llegando incluso a realizar ellos mismos todo el proceso artesanal y su respectiva comercialización, organizándose social y productivamente.

Buenos vecinos

IMPACTO EN CIFRAS Pueblo Flecha - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 355 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión - millones de pesos

No. de familias

Siembra de caña flecha

130

Acueducto comunitario

141

Construcción aula escolar

Vías de acceso

Muros de contención de la quebrada Uré, cultivos de caña flecha 1,5 km

125

Reconstrucción restaurante y kiosco escolar

6.5

Recuperación de la quebrada Uré Antes

Zona mina y calidad de vida

Después

Puente Uré: La escuela bonita Cuando se vive en una familia grande existen ventajas y desventajas. Eso ocurre en la vereda de Puerto Uré, donde una buena parte de la población corresponde a una sola familia y el liderazgo se ve dividido. Las desventajas se ven en los problemas personales que surgen a la hora de ejecutar cualquier proyecto, o cuando alguno de los miembros de la familia acapara la dirección y la organización de las actividades colectivas. Sin embargo las ventajas son mayores. Tienen una fuerte raíz cultural y muchas ganas de trabajar, que se ven reflejadas en su compromiso con el desarrollo de la vereda, su participación como comunidad es masiva y han ido aprendiendo a repartir las responsabilidades y compartir los logros y las expectativas. Por supuesto, no dejan de asistir a los almuerzos comunitarios que desde Cerro Matoso se proponen, a los talleres de liderazgo y de formación, a partir de los cuales comenzaron a construir la Escuela. Y la Escuela… es un espacio amplio grande que se destaca por ser acogedor, un lugar que invita a ser ocupado en cada una de sus aulas y corredores, porque hasta los niños participan en su construcción y cuidado, al sembrar y mantener cada día las plantas florecidas que alegran el entorno. El compromiso en Puente Uré es de todos, desde el maestro, hasta los abuelos, que no cesan en su empeño de mejorar la vereda, aun cuando no tienen mucha tierra donde trabajar. Pero eso no es impedimento para seguir adelante.

Buenos vecinos

IMPACTO EN CIFRAS Puente Uré - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 128 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión millones de pesos

No. de familias

Equipamiento primeros auxilios

Salón comunitario

Construcción centro educativo

140

Acueducto comunitario

Patios productivos Construcción y dotación Aula de sistemas Programa reconstrucción de vivienda

Zona mina y calidad de vida

3 80 12

Viera Arriba: El lugar del compromiso y la dedicación La comunidad de Viera Arriba está orgullosa de lo que es. Trabajando humildemente han ido construyendo, de la mano de sus líderes, palma a palma su calle, su escuela con buenos computadores, el proyecto de caucho, y otros tantos proyectos, siempre buscando ser los mejores. Pero de las cosas más bonitas de la comunidad es su gran amor por la tierra que poseen, que consideran su propia vida. Con madurez han logrado ser consecuentes y leales con su palabra. De ahí que sean una comunidad comprometida, en la que tanto niños como adultos participan en los proyectos, las brigadas de salud, el orden de la escuela, las reuniones de formación, las celebraciones festivas y, en general, el crecimiento de la vereda. Por todo eso es que los pobladores han visto en Cerro Matoso una oportunidad de desarrollo, y reciben con gran agradecimiento los programas de colaboración conjunta de Buenos Vecinos.

IMPACTO EN CIFRAS Viera Arriba - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 230 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión - millones de pesos

No. de familias 10

Actividad agrícola y acuícola

Reconstrucción Centro Educativo

Brigada de salud

No. de adultos

No. de niños

Buenos vecinos

Viera Abajo: La vereda de la esperanza Los pobladores de Viera Abajo, son muy humildes pero no pierden su carácter de entusiastas, trabajadores, alegres, responsables y soñadores. A pesar de que tienen pequeñas parcelas, cuando han podido han sacado adelante el proyecto del Ají y siguen comprometidos con los programas que Cerro Matoso y la Fundación san Isidro les proponen y con esto mejorar su situación y calidad de vida. Tal vez por eso lo único que no les gusta es la gente perezosa. Y siempre preocupados por su formación, acuden sin falta a las reuniones comunitarias, no importa que el sol queme o la lluvia inunde los caminos, con la esperanza de un futuro mejor.

IMPACTO EN CIFRAS Viera Abajo - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 286 habitantes Inversión - millones de pesos

No. de familias

Actividad pecuaria y piscícola

Reconstrucción Centro Educativo

Iniciativas y realizaciones

Puerto Colombia: los nuevos residentes Puerto Colombia es una comunidad especial, en el 2006 fueron trasladados a nuevas tierras pues el área donde residían fue adquirida por Cerro Matoso a una familia de Antioquia, este proceso ha generado un sinnúmero de situaciones novedosas para la comunidad. Además, no todos en Puerto Colombia son propios de la vereda, resultado de una situación en la que fue necesario resolver una dificultad nombrando como líder a una persona de otra vereda. Esto, lejos de ser un inconveniente, ha demostrado que los pobladores

Zona mina y calidad de vida

saben organizarse cuando se trata de hallar soluciones. No necesariamente son ellos quienes proponen proyectos para desarrollar con Cerro Matoso, pero cuando la mina les plantea una nueva idea, participan masivamente. Claro, los obstáculos no faltan. Cuando se les han propuesto diferentes programas de desarrollo, con ánimo emprendedor se comprometen a trabajar, Sin embargo, la mayoría de los hombres son jornaleros es decir que tienen trabajo en otras partes y son las mujeres las que, con pala en mano, ayudan a realizar las mejoras y los sueños. Después de todo en Puerto Colombia, una comunidad con visión de futuro, ha logrado que sus pobladores sean propietarios de sus casas y sus terrenos, y han desarrollado diferentes espacios culturales y de actividad económica interna, como la cancha de fútbol hoy en día es el lugar de eventos deportivos entre las veredas.

Buenos vecinos

IMPACTO EN CIFRAS Puerto Colombia - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 165 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión millones de pesos

Construcción y dotación centro educativo

160

Electrificación

Construcción de vías

133

No. de familias

Programa de capacitación

Construcción de mi sueño Relaciones humanas

Vivienda saludable

3 4

Programa de embellecimiento y arborización de la comunidad Patios productivos

Boca de Uré: La vereda del río Sus pobladores se caracterizan por la diversidad de sus actividades y de sus expectativas. Son afrodescendientes, pescadores y ahora agricultores, mineros y "balastreros» 1 (recogen material del río Uré llamado balasto o piedra pequeña). Y por eso mismo son muchos los proyectos que han desarrollado en la vereda. Al ser una vereda sin tierras planas para producción, han alimentado importantes sueños, con gran entusiasmo y compromiso. De una parte está el plan de mejoramiento de vivienda con madera reciclada de Cerro Matoso, y los acuerdos de formación tanto en ebanistería y carpintería, como en técnica mecánica y eléctrica, dictados por el SENA.

Balasteros, más comunmente llamados en la región balastreros.

Zona mina y calidad de vida

Pero tal vez el proyecto más ambicioso y esperado por los pobladores es el de la construcción de la escuela secundaria en la zona en la que desde ya están desarrollando un proceso de etnoeducación, con mucho énfasis en la cultura, la historia y sus costumbres, al grupo de tamboras de los estudiantes y a los múltiples campeonatos deportivos que organizan, siendo consecuente con sus orígenes y con su futuro. Con ese mismo ánimo de pertenencia y de conservar su esencia cultural, desean poder construir, con apoyo de la mina, su propio cementerio, donde puedan descansar sus muertos y recoger sus tradiciones ancestrales para compartirlas a su descendencia y mostrarlas al resto de la Zona Mina.

IMPACTO EN CIFRAS Boca de Uré - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 375 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión millones de pesos

No. de familias

Adecuación de la vía

Programa de autoconstrucción de vivienda con estibas recicladas

Dotación puesto de salud

Programa etnoeducativo y dotación biblioteca

Creación semillero cultural

Taller de telares y macramé

Creación de 2 puertos - Quebrada Uré

2.2

Arborización

Estanque piscícola

6.4

Adecuación cementerio

1.5

Reconstrucción de 12 viviendas

Buenos vecinos

DOS MUNICIPIOS, UNA MISMA ZONA: VEREDAS DEL MUNICIPIO DE PUERTO LIBERTADOR Centro América: El sentido de pertenencia Centro América es una comunidad muy activa y muy interesante en su proceso de concertación. Sus campesinos se han hecho dueños de la vereda y de sus sueños. En un ambiente comunitario, se encuentra la gran participación de los pobladores en los diferentes proyectos y procesos que se han planteado en el programa Buenos Vecinos. Con un ánimo emprendedor se ha construido el Centro educativo, el acueducto, un salón comunal multiuso y siempre están manteniendo en buen estado los bienes comunitarios que han ido adquiriendo. Son una comunidad que ha sabido establecer una organización bien definida que le permite proponer y construir cada día una mejor vereda. El Centro educativo es producto de la cooperación entre la Gobernación, la Alcaldía de Puerto Libertador, Carbones del Caribe, la hacienda El Botón, Cerro Matoso, Fundación San Isidro y la comunidad.

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IMPACTO EN CIFRAS Centro América - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 391 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión millones No. de de pesos familias

Red de distribución de agua

125

Construcción centro educativo

110

Construcción restaurante escolar

25 + 20 gobernación

Actividad piscícola

29.9

Reconstrucción 2 Aulas Escolares Construcción 2 Aulas Escolares y Batería Sanitaria

Parque infantil

Salón Comunitario

Cableado red de computadores

4.5

Torno Rojo: Mucho por hacer En cooperación con la Alcaldía se construyeron dos aulas y la batería sanitaria. Así mismo Cerro Matoso construyó el aula de sistemas. No en todas partes es fácil encontrar comunidades unidas y participativas. Al fin y al cabo los seres humanos somos diversos, y nos conmueven diferentes cosas. Es el caso de Torno Rojo. Muchas miradas, tan mezcladas que hay muy poca actividad social, está en proceso de encontrarse el líder comunitario que convoque todas estas perspectivas en una mayoría, sin esto es muy difícil cualquier relación colaborativa. Aún así, en la vereda se construyó la escuela, que todos sabían que era necesaria y aún falta por construir la motivación de sus maestros, terminar de fortalecer el compromiso comunitario y la participación de cada poblador. Por eso se ha ampliado la infraestructura escolar y ya cuentan también con un aula de dos pisos con batería sanitaria, donde los niños pueden seguir aprendiendo las cosas de los niños, pero sobre todo, que todavía queda mucho por hacer.

Buenos vecinos

IMPACTO EN CIFRAS Torno Rojo - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 910 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión millones de pesos

Construcción sala de informática y dotación biblioteca

Capacitación en telares macramé

9.7

Construcción de paradero

198

Construcción de dos aulas escolares y batería sanitaria

Cultivos de pancoger

17.5

Zona mina y calidad de vida

Actualización en Escuela nueva

Semillero cultural

No. de familias

La Odisea: La comunidad espiritual Los pobladores de La Odisea son agricultores y van al ritmo acorde de la naturaleza. En este lugar tranquilo parece que encontraron en el Evangelio su modo de vida, y en el pastor su líder. La comunidad se desarrolla en torno a la religión y por eso no tienen prisa, pues su mirada se enfoca en un lugar más interior, menos en la estructura física de su entorno. Sin embargo, por iniciativa propia pidieron y consiguieron el lote para poder cosechar su pancoger; y cuando se iba a construir la escuela se dieron cuenta que era necesario encontrar un lugar para hacerla, fue entonces que un vecino de la vereda, quien siempre ha apoyado los proyectos de desarrollo de la comunidad, donó el terreno donde, y en convenio con Cerro Matoso quien contribuyó con el material y la Alcaldía quien aportó la mano de obra, pudieron terminar las aulas para que los niños aprendan y encuentren un futuro prometedor.

IMPACTO EN CIFRAS La Odisea - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 213 habitantes Iniciativas y realizaciones

Inversión - millones No. de de pesos familias

Construcción centro educativo

Construcción cercado escuela

Metodología Escuela Nueva

Construcción centro religioso

Cultivos caña flecha y pancoger

Buenos vecinos

Buenos Aires - Arriba: Cada uno en su parcela En esta vereda los jornaleros tienen cada uno su pedacito de tierra, que vienen trabajando desde hace tiempo, de modo que la vereda ha mantenido su propia dinámica interna, sin mucha variación desde la llegada de la mina, salvo porque a veces han conseguido apoyo económico de Cerro Matoso para algunos proyectos productivos. Una vereda detenida en el tiempo, recuerda la neutralidad con que los pueblos van quedando en el recuerdo de quienes pasan de visita.

IMPACTO EN CIFRAS Buenos Aires Arriba - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 123 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Zona mina y calidad de vida

Inversión - millones No. de de pesos familias

Adecuación centro educativo

Cultivos pancoger

Buenos Aires Abajo: La cosecha de la participación comunitaria Como buenos recolectores en Buenos Aires -Abajo asumen la vida al ritmo de las cosechas. Su participación comunitaria, aunque se da por temporadas, es masiva, y ante la convocatoria de unos cuantos a reuniones de liderazgo y desarrollo comunitario, es una alegría ver llegar a toda la comunidad. Es que en Buenos Aires - Abajo los pobladores desde siempre han recogido las frutas y ahora han desarrollado nuevos proyectos productivos. Y si bien no poseen tierras, ya tienen pavimentada y bien presentada la vía de acceso a la vereda.

IMPACTO EN CIFRAS Buenos Aires Abajo - Año fiscal 2006 - 2007 Población general: 331 habitantes

Iniciativas y realizaciones

Inversión - millones No. de familias de pesos

No. de adultos

No. de niños

Adecuación centro educativo

104

Adecuación acueducto comunitario

3.5

204

Patios productivos

11.5

Buenos vecinos

Aprendizajes CON LOS VECINOS Z

Los problemas con vecinos por simples que sean deben ser atendidos inmediatamente.

Escuchar a la comunidad en el momento oportuno y no después.

La comunidad debe plantear las soluciones a las problemáticas.

Debe ser la comunidad la que proponga qué proyectos necesita y desea ejecutar.

Sin participación de las mismas comunidades no se da progreso alguno.

EN LA INTERACCIÓN CON LAS COMUNIDADES Z

Las relaciones con la comunidad deben ser transparentes

Lo que se ofrece a una comunidad se debe cumplir, las comunidades siempre tienen presente lo ofrecido.

En un ejercicio comunitario deben ser escuchadas todas las voces, sin preferencias ni aislamientos.

El mejor trabajo comunitario es ayudar a los líderes a gestionar para el desarrollo de los habitantes en general.

EN EL EQUIPO DE FUNCIONARIOS DE LA FUNDACIÓN SAN ISIDRO

El trabajo comunitario debe ser dinámico e ingenioso.

Una actitud asistencial no lleva sino a la apatía, y así las comunidades no pueden crecer.

Zona mina y calidad de vida

Fortalecer el trabajo d铆a a d铆a de los funcionarios.

Cada persona dentro del programa es una pieza importante en el desarrollo de los proyectos, por eso es necesario que todo se mantenga bien articulado y se respete la funci贸n de cada cual.

Respetar el espacio de las diferentes profesiones y actividades, y articular el programa a su interior para evitar desautorizar un asesor

No crear falsas expectativas con las comunidades y afianzar la conexi贸n directa entre jefes y asesores comunitarios.

Buenos vecinos

Voces y testimonios Z

Gracias al apoyo permanente de Cerro Matoso y la Fundación San Isidro tenemos nuestro acueducto construido con trabajo comunitario, el parque infantil, el centro comunal y muy cerca una de las lagunas donde "cultivamos y comercializamos" la cachama, estamos muy orgullosos y aspiramos a convertirnos en resguardo indígena. Joaquín, Líder de la comunidad de Centroamérica.

Esta escuela es nuestra vida, por eso los niños no quisieran irse de ella y por eso la tenemos llena de flores como un jardín, por aquí pasan muchas personas de la comunidad y recibimos diferentes capacitaciones. Catalina, cuidadora permanente de la escuela de Puente de Uré.

Llevamos como año y piquito sembrando la caña flecha. Y estamos contentos que esta labor, en el trabajo de recolector hacemos 15 puños de 120 hojas cada puño, y cobramos $2500 pesos por puño. Por la tarde hacemos el desbarite y el raspado. Por ultimo secamos la caña flecha durante unos dos días. Y le enviamos para la venta en Tuchín. Manuel - Habitante de Pueblo Flecha

He crecido cultivando maíz y arroz. Pero vivir aquí es mejor por que tenemos casa y cercanía con la carretera. Tenemos un temor de que nos vayan a trasladar otra vez, apenas nos den los documentos de la tierra, tendremos una mayor tranquilidad. Omar - Habitante Puerto Colombia

Esto de donarnos la madera para que construyamos las casas ha sido una bendición para nosotros. Ya tengo dos habitaciones bien firmes. Habitante de Boca de Uré

Zona mina y calidad de vida

«Hemos buscado que los habitantes de la zona mina tengan su pangocer y para esto se les da asistencia técnica en los cultivos. Hemos buscado que se puedan alimentar y que puedan sacar un excedente en la producción para que lo vendan luego». Richard - Funcionario Fundación San Isidro

«Cuando llegué a Pueblo Flecha me encontré con una comunidad de toda una misma familia provenientes de Tuchin y San Alberto de Sotavento. Ahora están organizados, y toda la vida han vivido de la caña flecha, en pleno siglo XXI viven del trueque. De tantas anécdotas que he vivido, yo me sueño con escribir un libro de esta comunidad». Lina Sanchez - Funcionaria Fundación San Isidro

«Del enfoque de ayuda puntual hemos pasado con la Fundación San Isidro a trabajar procesos…Cada población es diferente y lo importante es respetar sus propias culturas…Sueño que dentro de pocos años los hijos de estos pobladores sean bachilleres a través de la educación de calidad que recibirán en el gran centro educativo de Boca de Uré el cual será de seis aulas, laboratorio y biblioteca sitio de sueños para la población infantil». Fanny Pérez, directora de Relaciones Públicas Regionales - Cerro Matoso

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DE COLOMBIA PARA EL MUNDO

«BUENOS

Zona mina y calidad de vida

VECINOS»

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ALIADOS

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MONTELÍBANO

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