Entrevista: Exploraciones en el Exlago de Texcoco. Jeffrey R. Parsons. Desde 1961 Jeffrey R. Parsons trabaja en la cuenca de México, primero en el Valle de Teotihuacan en el proyecto de William Sanders, con quien realizara en la década de los 60 un recorrido, en la década de los 70 inició el estudio regional, pero siempre se olvidaba de la zona del lago, por fin en los últimos años Parsons ha pensado que deben tomar en cuenta el lago. Ahora es una realidad y junto con su equipo labora desde el miércoles 20 de mayo en la investigación paleontológica en el antiguo vaso del ex lago de Texcoco. . El proyecto, es financiado por National Geographic con 18 mil dólares, es una conjunción entre la Univesidad Autónoma Chapingo y la Universidad de Michigan, en el participan Mari Parsons, Hemanth Kadampi (de origen indú) estudiante de la Universidad de Michigan, Luis Morett Alatorre Director del Museo Nacional de Agricultura (MNA), y el Antropólogo Físico David López egresado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) y el asistente Ventura Cervantes. Parsons, quien por décadas se ha dedicado a estudiar la cuenca de México, es investigador de la Universidad de Michigan, y posee amplios conocimientos de etnografía de la cuenca lacustre del valle de México. En una amena entrevista explica en que consiste el proyecto. “Es un trabajo arqueológico, nos estamos enfocando en restos muy sutiles, a veces son tepalcates aislados o pequeñas concentraciones, generalmente no son sitios en términos tradicionales, entonces para encontrar estos restos es necesario utilizar una metodología de campo muy diferente y el propósito básico del trabajo es entender el papel de los recursos lacustre en la economía prehispánica, es un poco olvidado especialmente en los siglos posformativos, en los periodos clásico y posclásico, siempre han pensado los arqueólogos que la economía se basa en la producción agrícola y claro, fue así, pero también en los recursos lacustres, aquí en la cuenca de México fue muy importante y quizá más importante que hemos realizado, es por eso que estamos en este trabajo para evaluar los recursos lacustres especialmente clásico y posclásico de la época prehispánica”. El propósito de los investigadores en esta primera etapa es realizar el reconocimiento de 70 kilómetros cuadrados en el lado noreste de la superficie del ex lago de Texcoco. Parsons quien también tiene proyectos en Perú y actualmente trabaja en este proyecto con su esposa Mary Parsons, habla fluidamente el español y asegura que los estudios de los materiales se realizan en el museo de Agrícultura de Chapingo, donde instalaron un laboratorio provisional, y se guardan como un banco de datos. La emoción invade al entrevistado al contar el mayor descubrimiento de este estudio “Justo alrededor de una laguneta, ubicada en pleno vaso del lago de Texcoco, se localizó un pequeño