Park Kyungwon: pionera de la aviación

PARK KYUNGWON

PIONERA DE LA AVIACIÓN

Imagen de: Wikimedia Commons

Por Sheila Canelón Siglo XX, Corea del Sur. Una mujer ve la noticia del aterrizaje de An Changnam, primer piloto coreano en la historia. La inspiración se apodera de ella y lo decide: surcar los cielos como la primera mujer piloto de su nación, será su destino. Así comenzó la travesía de Park Kyungwon para convertirse en una pionera de la aviación. Sin embargo, mucho antes de trazarse esta meta, Park Kyungwon era solo una ciudadana más .

Nació en Daegu en 1901, hija de un granjero rico e ilustrado. Para sus padres la educación lo era todo, así que, después de terminar la secundaria enviaron a Kyungwon a Japón para estudiar en la Escuela de Capacitación Industrial. Pero tras estudiar en el país

nipón y ver la noticia del regreso a Corea de An Changnam, primer piloto del país, tuvo un nuevo objetivo: pilotear un avión.

Imagen de: hmong.es

Park Kyung-won en el aeropuerto de Tokio en Agosto 7, 1933 (by the Folk Museum of Ota City)

Determinada a cumplirlo, Kyungwon estudió enfermería en Corea para ganar dinero y pagar sus clases de pilotaje, pues sus padres no aprobaban su sueño. En 1924 regresó a Japón y entró a una escuela de conducir como preparación previa a las clases de pilotaje, lo que la convirtió en la primera mujer coreana con licencia para conducir. Por fin, un año después, dio el primer paso en el camino de su carrera como aviadora al matricularse en la escuela de aviación de Kimata.

Era la única coreana en su clase y una de las 6 mujeres del curso. A pesar de la discriminación que vivían los coreanos de parte de los japoneses en la época, su carácter aventurero y extrovertido hizo que se llevara bien con la mayoría de sus compañeros e incluso acostumbraba a difundirles la cultura de su país, preparándoles comida coreana y llevándolos de vacaciones a Seúl.

Fue ganadora de diversas carreras de vuelo y se graduó como una de las mejores estudiantes de su escuela.

Finalmente en 1928, Park Kyungwon llegó a la meta de su sueño al obtener la licencia que le permitiría ser piloto privado, de planeador y de globo libre. Pero ese no fue el final de su travesía; continuó practicando sus vuelos y planeando nuevas rutas hacia su país de nacimiento, Manchuria (actualmente parte de China y Mongolia Interior), América y Europa. No obstante, el final sí estaba más cerca de lo esperado.

El 7 de agosto de 1933, Park Kyungwon subió a su biplano, al cual llamaba cariñosamente “Golondrina Azul” para regresar a Corea desde el Aeropuerto Internacional de Haneda, Japón. Despegó un poco después de las 10:30 am, pero 50 minutos después del despegue, la neblina hizo que perdiera de vista la ruta y se estrelló contra el monte Gengaku, ocasionando su muerte a los 32 años.

Su deceso fue cubierto por muchos periódicos y en 1934, en nombre del ministro japonés de transporte, colocaron una estela conmemorativa en el lugar de los hechos.

En una ocasión, tras matricularse en la escuela de aviación, la prensa le preguntó por qué quería convertirse en piloto, a lo que ella con orgullo respondió: “La mayoría de personas que ven un avión piensan que es una máquina de metal que vuela y que en cualquier momento caerá y los matará. Yo, con total seguridad, me convertiré en una exitosa piloto ” .

Lugar del accidente, Imagen de hmong.es

PARK KYUNGWON FUE UNA MUJER DETERMINADA, VALIENTE Y DEDICADA A SU TRABAJO, CUYA HISTORIA HA SIDO OLVIDADA CON EL PASO DEL TIEMPO. MURIÓ EN EL AIRE HACIENDO LO QUE AMABA Y HABIENDO CUMPLIDO SU PROMESA DE SER LA PRIMERA MUJER PILOTO DE COREA.

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